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CARACTERIZACION DE PRÁCTICAS DE CONSUMO HABITUAL EN JÓVENES INFRACTORES DE LA LEY
PENAL DEL MUNICIPIO DE MANIZALES
LORENA ZAPATA PIEDRAHITA
Director de Tesis:
CÉSAR MORENO BAPTISTA
Ph ANTROPOLOGÍA
UNIVERSIDAD DE CALDAS
FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS
PROGRAMA MAESTRIA CULTURA Y DROGAS
MANIZALES, SEPTIEMBRE 14 DE 2010
2
TABLA DE CONTENIDO
Pág.
INTRODUCCIÓN
REFERENTES CONCEPTUALES Y ESTRATEGIA METODOLOGICA
1 la cultura y los agentes de socialización 6
11.1 estatus y rol 6
1.2 personalidad 9
1 .3 valores 10
1.41 subculturas y construcción de identidad 14
1.5 perfil joven infractor 19
1.6 experiencia del trabajo de campo 20
INICIACIÓN DEL ADOLESCENTE EN EL USO DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS
Y PRACTICAS DELICTIVAS EN EL CONTEXTO FAMILIAR
2 perfil socioeconómico de las familias 24
2.1 estructura familiar y construcción de vínculos 27
2.1.1 tipos de familia 30
2.2 tipología de estilos de sociabilidad parental 35
2.2.1 estilo autoritario 36
2.2.2 estilo negligente 36
2.2.3 estilo permisivo 37
2.3Iimpacto del maltrato físico y psicoafectivo 40
2.4diferentes expresiones del modelo conflictivo 56
2.5influencia de familiares ene l consumo de SPA 57
2.5.1Antecedentes delictivos y consumo de SPA en familia 62
3
CONTEXTO SOCIAL DEL HURTO Y EL CONSUMO DE PSICOACTIVAS
EN ADOLESCENTES INFRACTORES DE LA LEY PENAL
3. hurto y consumo 80
a) hurto simple 80
b) hurto compuesto o estructurado 80
3.2 hurto simple 81
3.2.1 modalidades de hurto simple 87
3.2.2 hurto estructurado 89
3.2.2.1modalidades de hurto estructurado 89
a) Los apartamenteros 89
b) robos a proveedores y tiendas 92
c) robo a transporte urbano 94
d) robo a pasajeros 95
e) robo a carros, motos 96
f) robo a través de soborno 97
g) robo a funcionarios de empresas 98
h) robo en supermercados 103
i) robo por venganza 106
j) robo en taxi 107
k) abigeato 108
L) paseo millonario 109
m) robo cableado 110
3.3 Pareceros de y en la calle 110
3.4 estilos y preferencias urbanas 117
3.4.1 la moda 117
3.5descripcion de usos de SPA y su implicación en el hurto 121
3.5.1la olla y su contexto en la cotidianidad del adolescente 125
3.6 infracción criterios a partir de código de infancia 133
4
3.6.1 antecedentes jurídicos 133
3.6.2 proyecto ley sobre responsabilidad penal 134
3.6.3 modalidad de atención 135
LA RELACION DEL USO INDEBIDO DE LAS DROGAS Y EL DELITO
4. explicaciones socioculturales 140
4.1 influencia de la familia en el consumo de SPA 143
4.1.1 el modelo adictivo familiar
4.1.2 e modelo de involucramiento en el microtrafico 145
4.2el habitus del consumo 146
4.3 identidad y realidad social del joven infractor 148
4.4 el joven infractor y percepción de si mismo 151
4.5 la experiencia de la reeducación 153
4.6el joven rehabilitado pero excluido socialmente 156
4.7algunas expliciones de la exclusión social 157
Conclusiones 161
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS 163
5
INTRODUCCIÓN
El consumo de drogas en los jóvenes representa hoy un tema de relevancia en nuestra
sociedad, debido a su incidencia en la salud, la educación, y en la seguridad pública. El
problema de la droga es preocupante, y en especial cuando se percibe que éste tiene
relación con la conducta delictiva. Aunque el consumo de alcohol y otras sustancias
psicoactivas (SPA)1 ha sido un fenómeno permanente y universal en la historia del ser
humano, en la actualidad se plantean nuevos retos como resultado de factores como
el procesos de globalización y mundialización, el desarrollo de las tecnologías y la
comunicación que han desplazado el uso tradicional de sustancias (reguladas
normativamente y con clara significación cultural), han impuesto nuevos patrones de
consumo caracterizados por sustancias y métodos cada vez más accesibles y
potentes. Así lo señala el Ministerio de la Protección Social en su documento de
“Política nacional para la reducción del consumo de sustancias psicoactivas y su
impacto” (2007).
El mismo documento reconoce la falta de claridad en torno a la actual situación y a los
factores que la sustentan, lo cual dificulta la planeación ajustada y la focalización en
aquellos factores que quizás podrían asegurar más y mejores resultados. Se considera
que el impacto del consumo de SPA en el desarrollo social, tiene efectos grandes y
diversos en costos y daños asociados a la persona, su familia, su comunidad y a la
sociedad como un todo.
Particular preocupación se expresa con relación a la población joven que presenta
indicadores altos en el consumo de drogas con tendencia al abuso o a la dependencia.
1 Por SPA o “droga” se entiende “toda sustancia de origen natural o sintético, lícita o ilícita, que se
introduce al organismo (sin prescripción médica) con la intención de alterar la percepción, la conciencia o cualquier otro estado psicológico” (revista neurología. Universidad Católica. Santiago de Chile. 2008). En esta definición se encierran las sustancias lícitas o ilícitas que cumplen con los criterios de abuso y/o dependencia.
6
De otro lado, las autoridades señalan su inquietud, a la existencia de hechos delictivos
en los que se ven involucrados adolescentes. Los delitos que se cometen con mayor
frecuencia en el país y en los cuales tiene participación los adolescentes son: hurto
(diversas modalidades), porte tráfico y fabricación de estupefacientes, fabricación y
tráfico de municiones, lesiones personales, daño en bien ajeno, homicidios, violencia
intrafamiliar, y violencia contra la autoridad. Los jóvenes que más delinquen tienen
entre 16 y 17 años, según la policía en el año 2008 alrededor de 19.533 menores de
edad fueron capturados por la comisión de delitos2.
.
En el marco de esta problemática nacional, nos hemos ubicado en la ciudad de
Manizales, para aproximarnos al estudio del fenómeno con el interés de hacer un
aporte que contribuya al conocimiento del mismo. Dos motivos primordiales nos han
impulsado a abordar este hecho de gran repercusión en la ciudad: en primer lugar,
luego de haber realizado un barrido de revisión bibliográfico previo para establecer el
estado el arte, llegamos a la conclusión de que existe un vacío en el tratamiento del
tema. En segundo lugar, mi larga experiencia de más de diez años trabajando con
instituciones reeducativas con jóvenes infractores, me llevaron a formular la propuesta
de investigación con el fin de plasmar en el análisis académico los conocimientos
aprendidos en la práctica. Así presento los resultados de la investigación, cuyo
abordaje considero es de carácter exploratorio.
El objetivo que nos hemos planteado en el presente estudio es caracterizar las
prácticas del consumo habitual de sustancias psicoactivos y prácticas del delito como
formas de sociabilidad en jóvenes con responsabilidad penal, (internos en el centro de
reeducación Ciudadela los Zagales3). Para lo cual hemos considerado importante:
2 Ver: El Tiempo, Domingo 14 de febrero de 2010, pp. 1-22.
3 La Ciudadela los Zagales es una institución reeducativa mixta que atiende adolescentes y jóvenes en situación de
vulnerabilidad de derechos y en conflicto con la ley penal. En adelante ésta institución será identificada en dicho trabajo como “Ciudadela”.
7
determinar si el ambiente familiar es dispositivo en las conductas de mayor
manifestación adictiva y delincuencial de los jóvenes sujeto de estudio, y finalmente
describir el perfil del joven institucionalizado y las problemáticas asociadas al consumo
de psicoactivas.
El trabajo recurre a las técnicas del método etnográfico para recopilación de los datos
empíricos, y tiene como objeto hacer un análisis descriptivo con 50 jóvenes sobre las
prácticas de consumo de sustancias psicoactivas (particularmente de marihuana y
bazuco), y prácticas delictivas entre jóvenes infractores de la Ley (con edades entre los
15 y 25 años).
Específicamente la investigación pretende hacer una tipificación de las prácticas de
consumo y delito mediante la perspectiva cualitativa, a partir de relatos de historia de
vida y observación directa sobre los comportamiento en los contextos sociales (familiar
y grupos de pares) en los que se desarrolla el que-hacer cotidiano de los jóvenes
infractores.
La perspectiva analítica que hemos adoptado se sitúa en el plano teórico en el campo
de la antropología urbana. La premisa de la que se parte siguiendo la lógica del método
etnográfico, es la descripción de prácticas socioculturales en el ámbito de la ciudad. En
esta perspectiva nos referimos a una subcultura4, dado que es en el contexto de un
subgrupo urbano, en el cual se develaron particulares formas de consumo de drogas y
delito. En esta perspectiva consideramos que los modos de vida descritos, tipifican
características propias de prácticas sociales presentes en un sector específico de la
población joven de la ciudad.
4 Definida como un juego de entendimientos, conductas, objetos prácticos y simbólicos, y vocabulario que distingue
a un grupo particular de los demás miembros de su sociedad (sociedad mayor). Para que una subcultura exista, los individuos deben identificarse con el grupo (aunque pueden tener también otras identificaciones sociales) y deben interactuar y compartir la información con otros que se identifican con el grupo ya directa o indirectamente (Canclini, 1990)
8
El componente empírico también se fundamenta en observaciones realizadas mediante
visitas externas a la Ciudadela en diversos lugares de preferencia para el consumo de
SPA como las “ollas” o sitios de expendio, los lugares de encuentro en el barrio.
Igualmente, el acercamiento a familiares, vecinos y amigos fue de vital importancia
para el insumo general en el análisis y desarrollo de la investigación. De otro lado se
obtuvo material fotográfico que busca ilustrar momentos de consumo y otros que
complementan los relatos realizados por los informantes. Con estos elementos se hace
finalmente un examen de la vida social de los jóvenes y de sus prácticas de consumo y
delito en la cotidianidad de la ciudad.
Para el desarrollo de lo expuesto anteriormente hemos estructurado el trabajo en
cuatro capítulos de la siguiente forma: El primer capítulo está organizado en dos partes:
en la primera, hacemos una presentación de las nociones teóricas sobre las cuales se
soporta el trabajo etnográfico, lo cual permite dar una perspectiva interpretativa de las
prácticas sociales analizadas. En la segunda parte, se presenta un perfil del sujeto de
estudio y se hace referencia a la estrategia metodológica adoptada para su estudio.
En el segundo capítulo se hace una descripción sobre los procesos de socialización
primaria en las familias de los jóvenes sujetos de estudio, se trata de ver el tipo de
relaciones interpersonales al interior del núcleo familiar, para comprender los valores
de formación de la personalidad en el joven infractor.
El tercer capítulo, presenta las tendencias delictivas del joven infractor a partir de su
relación con el grupo de pares en la calle. Se trata de mostrar la forma en cómo el
joven se inicia en prácticas del crimen con su red de amigos fuera del hogar.
El cuarto capítulo, está dedicado a hacer una recapitulación de las descripciones
hechas, con el interés de sintetizar ideas que nos permitan tipificar los procesos de
9
socialización y el desarrollo de las prácticas sociales analizadas. Se trata de mirar la
relación de correspondencia que hay entre el delito y el consumo de drogas, inducidas
en gran medida por los procesos de socialización y las condiciones socioeconómicas
de las familias estudiadas.
Como parte del material recogido en el trabajo de campo, hemos introducido imágenes
ilustrativas de diferentes momentos en el que se realizaron las entrevistas y a
diferentes personajes que contribuyeron con su información para que el trabajo fuera
posible. Con el fin de proteger su personalidad o a petición de los mismos informantes
hemos utilizado nombres ficticios o seudónimos.
10
CAPITULO I
REFERENTES CONCEPTUALES Y ESTRATEGIA METODOLOGICA
Dentro del objetivo de esta investigación de hacer un análisis descriptivo de corte
etnográfico sobre las prácticas de consumo y delito entre jóvenes infractores de la Ley
de la Ciudadela los Zagales en la ciudad de Manizales, el presente capitulo tiene como
objeto, referenciar, aquellos elementos teorico-metodologicos que desde el campo de
la antropología especialmente desde los enfoques de la teoría de cultura y
personalidad y del interaccionismo simbólico nos permitan construir de manera lógica
los argumentos descriptivos de los fenómenos analizados.
Presentaremos entonces nociones como: cultura, socialización, status, rol,
personalidad, valores, subculturas e identidad, que dentro de la perspectiva teórica nos
permita entender el fenómeno social estudiado como haciendo parte de una forma de
desarrollo “sociocultural” en el mundo urbano. Bajo este entendimiento en el cual
pretendemos que las ideas se vayan presentando de manera individual pero
secuencialmente, hacia el final del capítulo pretendemos concretar los elementos
centrales de la forma en que se desarrollo el trabajo de campo.
1. La cultura y los agentes de socialización5
5 Se entiende por agente de socialización a “un individuo, grupo u organización que influye en el comportamiento de
una persona y en su sentido del yo interior que premia o castiga su conducta, proveyéndolo de instrucciones sobre las reglas y los roles sociales o simplemente sirviéndole como modelo” (Gelles,1996:130)
11
Si asumimos desde la perspectiva del interaccionismo simbólico que la cultura es un
conjunto de significados que permiten explicar las realidades de los individuos y las
colectividades, debemos admitir que la cultura es todo el “conocimiento que las
personas usan para generar e interpretar la conducta en la vida social” y que todo
aquello ha sido producido, aprendido y gradualmente compartido Maffesoli (1993:69).
De la misma manera podemos decir, que la transmisión de los conocimientos de la
cultura se produce a través de procesos de aprendizaje denominados “socialización”,
que es fundamental porque a lo largo de este proceso se moldean los sentimientos, las
conductas y las identidades de los individuos y las colectividades.
En sentido amplio, todos somos agentes de socialización, medios informales difusos,
en sociedades estables y sencillas, pueden resultar lo suficientemente eficaces para
lograr la socialización de los nuevos miembros de la sociedad, pero en sociedades
complejas, heterogéneas y con grandes ritmos de cambio social, no basta con la
socialización informal. La herencia cultural de un grupo implica diferentes agentes para
que pueda lograrse la transmisión de generación en generación con procedimientos
espontáneos.
La noción de agencias de socialización se emplean para referirse a las instancias o
vías, mediante las cuales se efectúa la transmisión de conocimientos, valores y otros,
agencias que son múltiples y pueden, en teoría, reforzar sus efectos, pero también
provocar discontinuidades y problemas generacionales en el proceso de socialización,
en concreto la familia, el grupo de iguales, la inclusión erótica, la escuela, el mercado,
las asociaciones de todo tipo y los medios de comunicación de masas, constituyen las
principales agentes de socialización.
La socialización se entiende además, como el proceso mediante el cual el individuo es
absorbido por la cultura de su sociedad. En el transcurso de la vida, el individuo
adquiere una serie de elementos de la sociedad a través de cuales es orientado a
desarrollar una serie comportamientos consistentes en lo que es habitual y aceptable
12
con arreglo a normas de su grupo. Fundamentalmente, la socialización es un
aprendizaje. En su virtud a ello el individuo aprende permanentemente a adaptarse a
los grupos, a sus normas, imágenes y valores para la vida en sociedad.
Para el individuo que no nace integrante de una sociedad, sino que nace con una
predisposición hacia la sociedad, y luego llega a ser integrante de ésta, la socialización
es particularmente intensa durante sus primeros años de vida, por ello es importante
establecer una distinción entre socialización primaria y secundaria6. La socialización
primaria, es la primera por la que el individuo atraviesa en la niñez, por medio de la cual
se convierte en miembro de la sociedad; la socialización secundaria se refiere al
proceso posterior que induce al individuo ya socializado, a nuevos sectores del mundo
objetivo de la sociedad.
La socialización primaria es decisiva y no sólo por la plasticidad, sino por la sensibilidad
y dependencia en que se encuentra el niño dado que, el niño no internaliza como el
mundo posible, sino que lo internaliza como “el mundo”, el único que existe y se puede
concebir. Por ello el mundo internalizado en la socialización primaria se implanta en la
conciencia con mucha más firmeza que los mundos internalizados durante la
socialización secundaria. Esto significa que la socialización primaria comporta algo más
que un aprendizaje puramente cognoscitivo, requiere la adhesión emocional a los otros
significantes; es así, como el niño acepta los roles y actitudes de los otros significantes,
los internaliza y se apropia de ellos, siendo entonces capaz de identificarse a sí mismo.
La socialización primaria, finaliza cuando el concepto del otro generalizado, y todo lo
que comporta se ha establecido en la conciencia del individuo, ya es miembro efectivo
de la sociedad y está en posesión subjetiva de un yo y un mundo, aquí, cuenta la carga
emocional (Berger y Lukman 1986:217). Mientras tanto la socialización secundaria
6 BERGER, Peter y LUCKMAN Thomas. La Construcción Social de la Realidad. Amorrortu editores. Buenos
Aires.1986, Pág. 216.
13
consiste en el conjunto de procesos mediante los cuales el individuo internaliza
submundos específicos, éstos submundos son generalmente realidades parciales, que
contrastan con el mundo base adquirido en la socialización primaria, presupone un
proceso previo de socialización primaria, pues debe tratar con un yo formado con
anterioridad y con un mundo ya internalizado.
Por otro lado mientras que la socialización primaria no puede efectuarse sin una
identificación con carga emocional, la mayor parte de la socialización secundaria puede
prescindir de esta clase de identificación, en definitiva, lo que aprende en el proceso de
socialización es la cultura, es decir, un complejo conjunto de pautas de comportamiento
recurrentes, que le permiten saber a qué atenerse en cada situación, qué debe esperar
de los demás, cómo debe reaccionar en cada caso concreto y qué pueden esperar los
demás de él.
1.1 Status y rol
Los nuevos miembros de la sociedad aprenden cómo deben actuar, o qué
consecuencias pueden razonablemente derivarse si deciden desviarse de las pautas
establecidas por el grupo. Este aprendizaje es esencial para la supervivencia de la
sociedad, pero éstas normas y pautas de comportamiento que el individuo aprende en
el proceso de socialización, no están aisladas y sin conexión entre sí, sino que forman
complejos a los que llamaremos papeles sociales (roles) y que corresponden a las
distintas posiciones (status) que los individuos pueden ocupar en sus relaciones
sociales.
La sociedad no es simplemente un conglomerado accidental y desordenado de seres
humanos, es un sistema estructurado en el que cada individuo ocupa una posición de
status definido. Se entiende por status social: el puesto que cada individuo ocupa en la
estructura social, tal como lo evalúa la propia sociedad. Así una misma persona ocupa
diferentes status en función del contexto en que se relacione o del grupo desde el que
14
se defina. A cada status le corresponde un repertorio de pautas y normas de
comportamiento que prescriben, a la persona que lo ocupa, cómo deberá actuar en
cada situación y lo que los demás pueden razonablemente esperar que haga en virtud
del lugar que ocupa.
La importancia de ello, radica en que a partir de un status que se ocupe en la familia o
en el grupo de pares, el joven podrá tomar decisiones y liderar situaciones, es decir,
toma valor su palabra por los actos que demuestre autónomamente desde su rol y
cumplimiento de sus metas. En todo caso, los conceptos de status y rol, son dos
herramientas fundamentales en el análisis del comportamiento social de los jóvenes
que, como vemos, están íntimamente relacionados entre sí, se trata de dos caras de
una misma moneda. En pocas palabras, el status se ocupa, los roles se desempeñan.
Lo anterior, es la razón por la cual la familia como primer agente de socialización,
socializa al niño, pero no crea los valores que le inculca, es decir, éstos valores pueden
tener y de hecho tienen las más diversas procedencias: la religión, la clase social, la
nación, u otras, por esto, la familia transmite valores creados fuera de ella, y en este
sentido es un simple agente transmisor (Kardiner, 1939:16).
Sin embargo, la influencia de la familia es profunda porque es un agente persistente
dentro de la socialización. La familia también se caracteriza por ser el grupo más íntimo
que actúa en la socialización del ciclo vital del joven; está vinculada a la satisfacción de
necesidades materiales y espirituales; proporciona relaciones autoritarias e igualitarias;
la comunidad en general identifica a los miembros de la familia entre sí, no obstante, la
familia suele asociarse para el joven infractor desde un modelo autoritario, en otros
casos permisivos o sin ningún tipo de modelo a seguir.
15
1.2 Personalidad
Abram Kardiner (1939) desarrolló su teoría de la estructura de la personalidad básica
en la que se subraya que: las instituciones de las sociedades pueden ser primarias o
secundarias, y entre las instituciones primarias, la más importante es la familia, con
sus pautas y técnicas asociadas a la crianza de los niños.
La crianza infantil impone una configuración de rasgos de personalidad que son
compartidos en la mayoría de casos por todos los miembros de una misma sociedad:
ésta estructura, a su vez, determina la forma y el contenido de las instituciones
secundarias o “sistemas proyectivos, entre los que se cuentan la escuela, el arte, la
religión, la mitología, el folclor, las ideologías” (Kardiner, 1939:12).
Por otro lado, Kardiner en su libro El individuo y su sociedad, escribió que la
experiencia social en la familia (especialmente durante la crianza de los niños) y las
técnicas de subsistencia (es decir, las instituciones primarias), dan lugar a estructuras
de personalidad básica comunes para la mayoría de los miembros de la sociedad. Así,
tal como fue definido por Kardiner (1939) el término personalidad básica se refiere a las
habilidades psicológicas adaptativas compartidas por todos o la mayoría de los
miembros de la sociedad, puesto que la estructura básica de la personalidad es un
producto inducido en los miembros de una sociedad por las formas específicas que
lleva consigo. Estos son los habitus que le han sido asignados por información cultural
que varían en el tiempo, en las culturas en la medida que cambian las instituciones
primarias.
16
Kardiner, enfatiza tanto en las influencias formativas de la niñez como en la importancia
de los determinantes culturales, sosteniendo que las instituciones primarias son una
influencia clave en la personalidad básica, esto, porque a través de la interacción, las
características de las instituciones primarias son proyectadas, y muy influyentes para
moldear- las instituciones secundarias tales como la religión, mitología, sistemas de
creencias, la ideología y la política, en si las interrelaciones que se realizaban
posteriores a la socialización primaria.
Insistiendo un poco más sobre las instituciones primarias, éstas se refieren a aquellas
estructuras sociales que son más influyentes en determinar la personalidad básica de
una sociedad, el énfasis es en instituciones que impactan directamente en las prácticas
de socialización y de las experiencias de la niñez. En una sociedad, las pautas de
subsistencia como lo señala Cora Dubois, (1860) en su texto La gente de Alor, pueden
causar deprivación maternal o pueden animar a un comportamiento intensivo de
cuidado del niño; en otras sociedades, sin embargo, los patrones de subsistencia
pueden tener poca influencia en la socialización, de manera que no serían
consideradas instituciones primarias. (citada por kardiner 1939)
Las instituciones proyectivas o secundarias, incluyen los sistemas de creencias,
religión, mitología, vistas como productos de fantasías colectivas, o proyecciones
grupales de deseos, necesidades y conflictos subjetivamente compartidos. Kardiner
(1939) refiere que, una vez formadas, la estructura básica de personalidad de una
sociedad, moldearía el contenido y significado de las fantasías proyectadas, tales como
las creencias acerca de lo sobrenatural.
Así mismo, planteado por Berger y Luckman (1986:218) las socializaciones primarias
guiadas por la familia, son el pilar para la construcción de la identidad, que no es otra
cosa, que una larga proyección en las socializaciones secundarias como la escuela, el
grupo de pares y demás instituciones que fundamentan la cultura, tema que
ahondaremos en el transcurso de lo escrito.
17
1.3 Valores
Por su parte los valores con que nos acercamos a la realidad y las normas de conducta
que los enmarcan determinan nuestras actitudes, puede decirse que los valores son
juicios de deseabilidad o aceptabilidad, o de rechazo, que se atribuyen a toda clase de
objetos y hechos; los valores conllevan actitudes que superponemos a fenómenos
dados, y que deben ser distinguidos cuidadosamente de los fenómenos mismos.
Pronto se comprende que los valores no pueden manifestarse sin normas de conducta
que los enmarquen y que tienen que ser aceptados por un número mínimo de
miembros de la colectividad, y en muchos casos por todos; la desviación del valor y de
la norma establecida suele implicar una reacción punitiva por parte de la colectividad en
cuestión, aunque muchas sociedades complejas hayan institucionalizado un buen
número de divergencias en un sistema de tolerancias aceptables.
Todas estas variadas formas de comprender la relación entre la cultura y la
personalidad enuncian la realidad, lo que nos permite pensar que la noción de
identidad y cultura son dimensiones interdependientes. Debido a que las identidades
sólo pueden formarse a partir de las diferentes culturas y subculturas a las que se
pertenece o en las que se participa, se observan individuos que piensan, sienten y
actúan en cierta forma (estructura de la personalidad) bajo la influencia de valores y
costumbres prevalentes en una sociedad dada (cultura).
Así actualmente puede plantearse que la gente aprende ciertas pautas de
comportamiento, sí adquiere ciertas formas de personalidad, se aceptaría igualmente
18
entonces la idea de que “las estructuras” de la personalidad están estandarizadas en
identidades individuales que son condicionadas culturalmente.
1.4 Subculturas y Construcción de Identidad
Conocer aquellos rasgos identitarios del joven infractor es nuestro interés principal en
esta investigación y para ello es importante saber sobre su cotidianidad, y acercarnos
al mundo de las intersubjetividades, experiencias y contextos sociales en los cuales se
construye su identidad personal.
Para José Valenzuela (1993), los ámbitos cotidianos, están configurados por las
relaciones que se forman a partir de interacciones entre sujetos, en las que hay una
confrontación intersubjetiva y en las que se posibilitan inter-reconocimientos. Sin
embargo la formación de dichos ámbitos no son procesos lineales, pues están influidos
por condiciones de tipo étnico, de clase, género o de adscripciones alternativas como
las redes barriales o prescritas a las redes familiares. De esta manera debemos
señalar que acercarse a la cotidianidad del joven infractor implica buscar en las redes
de pares en la calle, en la esquina del barrio, en los lugar de expendio de las drogas o
en los lugares de hurto de la ciudad, donde se configura la subcultura urbana y el joven
construye su identidad con el conjunto de pares.
Las relaciones entre las personas que viven en las ciudades, tienden a ser
impersonales, anónimas y temporales. Un comportamiento individual puede ser
fomentado y reforzado por la influencia de ciertos grupos, pues el gran tamaño de la
heterogenea población urbana y la relativa anonimidad que esta ofrece a sus
miembros, significa que la oportunidad para cometer actos criminales es mucho más
grande en las ciudades que en el campo Cohen, (1999).
19
Ahora bien, lo primero que habría que subrayar, es que el joven infractor para llegar a
serlo verdaderamente, tiene que situarse en relación con otros jóvenes, y así
entenderse que es un individuo que se encuentra en búsqueda de su propia identidad
dentro del grupo de su generación.
Especialmente tiene que situarse respecto a los jóvenes más cercanos a él o a ella, su
grupo de interacción, los amigos y los conocidos, pero también respecto a las
imágenes juveniles que recibe de los medios de comunicación social. La identidad de
joven no será algo estático e inamovible, como tampoco caótico y sin sentido. La
persona irá añadiendo nuevos significados, abandonando otros, adscribiéndose a
ciertos significantes, etc. Las subculturas juveniles dan a los jóvenes gran cantidad de
materiales con los que identificarse y construir su identidad7.
Un segundo elemento que vale la pena resaltar, es que La construcción de la identidad
juvenil se emprende en la cotidianidad, a partir de nuevas y variadas simbolizaciones
que están en constante movimiento, donde los espacios no tienen fronteras, como lo
plantea Maffesoli (1990: 78).
La construcción de la identidad del joven delincuente se produce en la cotidianidad de
las calles de la ciudad, donde se configuran las subculturas contestatarias y disidentes,
por ejemplo, a partir de la invención de léxicos nuevos que pueden ser entendidos por
sus propios pares que lo comparten y que surgen como nuevas expresiones dialectales
en la ciudad. También, en los diferentes roles que la sociedad y la realidad le imponen
como hijo, estudiante, trabajador, padre adolescente, jefe de pandillas y líder o
miembro de redes en el tráfico de drogas. Con todos estos elementos en la calle se
crean normas que son propias de grupos subculturales de jóvenes8. “La particularidad
de la subcultura juvenil es su extrema variedad de significados, derivada de la muy
7 http://www.slideboom.com/presentations/28905/Subculturas
8 “Por subculturas juveniles entendemos una serie de significados y modos de expresión comunes a una parte de la
juventud que cristalizan en los diferentes estilos juveniles que comprenden un estilo musical concreto, una imagen y un atuendo reconocible y una serie de actitudes sociopolíticas” .http://www.slideboom.com/presentations/28905/Subculturas.
20
diferente posición de unos y otros jóvenes, pero que, a pesar de ello, han de enfrentar
parecida construcción social acerca de lo que significa ser joven”9.
La identidad, es definida por García Canclini. (1990): como la hibridación, antes que por
la diferencia de la homogeneidad. Es decir, que la identidad responde a la diversidad
de repertorios artísticos y medios de comunicación que contribuyen a su reelaboración
permanente. Así mismo, se reconstruye con los otros. La identidad es una
coproducción de diferentes actores y poderes que actúan en diferentes instituciones:
familia, escuela y demás comunidades desde la etnia, minoría social o género.
Comprender su construcción, implica adentrarnos en los discurso, los relatos y las
narraciones que explican el uso de un determinado lenguaje, vestuario, música ,
itinerarios, preferencias del uso de drogas, determinadas prácticas de hurto, logrando
un inter-juego, una creación y recreación de las identidades de unos y de otros.
Un denominador común en los adolescentes es la búsqueda de identidad y la imagen
exterior forma parte de ella. El joven infractor inmerso en una realidad social, atiende al
intercambio que se va forjando a través de la participación, actitudes y
comportamientos de los grupos a los que pertenece. Esa realidad colectiva, se expresa
como sentimiento que permite comprender y actuar en las diferentes formas de vida,
representadas en instituciones, grupo de iguales y parámetros culturales. Berger y
Luckman (1986). Aquí convergen los valores, circunstancias económicas, sociales,
particularidades culturales etc. Muchos jóvenes, se orientan por el consumo de drogas
según modelos culturales (aprendidos en la familia), o prescripciones del grupo de
pares.
9 http://www.slideboom.com/presentations/28905/Subculturas
21
Las formas de sociabilidad entre jóvenes contemporáneos se visualizan a partir de
gustos, aficiones, formas de vida, prácticas delictivas y de uso de psicoactivas, es allí
donde el placer y la creación de vínculos afectivos con los otros, se hace cotidiano e
intencional, escapando a su misma realidad “de ocupar un lugar, de ser alguien”. En
otras palabras es lo que para Maffesioli se denomina “comunidades emocionales”,
dándole importancia al afecto/ emotivo que se fragua al interior de dichas
sociabilidades contemporáneas, también por tanto en palabras de Costa, Pérez y
Tropea (1997), es un esquema referido precisamente a los elementos que caracterizan
y definen el “fenómeno” de las “subculturas”.
La construcción de la identidad juvenil se emprende en la cotidianidad, a partir de
nuevas y variadas simbolizaciones que están en constante movimiento, donde los
espacios no tienen fronteras (Maffesoli 1993: 78). El joven se orienta como todo
individuo en su cotidianidad por un sentido práctico --a la manera de Bourdieu--, de
manera espontanea o inconsciente presente en la lógica del funcionamiento del
habitus10, antes que por la apariencia de objetivos racionales, planes, normas o códigos
explícitos (Téllez, 2002:213).
En esta perspectiva, las prácticas de consumo de SPA y delito en jóvenes infractores,
se pueden entender propiamente como habitus, es decir ,como disposiciones
adquiridas por el sujeto que permiten actuar, sentir y pensar de una cierta manera. La
noción nos remite a algo histórico, ligado a la historia individual, en este sentido, no
existe más aprendizaje que el práctico de los principios de percepción, apreciación y
acción (habitus), como algo autónomo de la producción de elecciones estéticas, o de
gestos, o de cualquier otra práctica posible.
10
Entendido a la manera de Bourdieu como un conjunto de relaciones históricas depositadas en el
cuerpo del individuo, bajo la forma de esquemas mentales y corporales de percepción, apreciación y acción.
22
El consumo de psicoactivas esta permeado por diferentes factores, por ejemplo,
desde el punto de vista económico la modalidad de “micro-tráfico”, que se ofrece en las
calles y en el cual se crean vínculos afectivos que están disponibles en sus redes
sociales inmediatas, ejerciendo un impacto sobre el proceso de construcción de
quiénes somos, quiénes son los otros, es decir, con la representación que el joven
tiene de sí mismo en relación a los demás Abric, (1999:13).
Para García Canclini (1990:8), el consumo se presenta con lógicas diversas y en
lugares distintos por ello, es necesario pensar en la relación de las interacciones
múltiples y particulares a los que se ven avocados los consumidores de psicoactivas,
aquellas que paulatinamente se van fragmentado por sus diferentes usos e
intencionalidades del joven. Desde una perspectiva globalizadora, el joven quiere
afirmarse en un conocimiento amplio del manejo de su cultura, por tanto, cree
adaptarse a cambios que ofrece el medio como el consumo de SPA y el mercado
publicitario, que lo pone en trampolín para una adultez en riesgo.
Las formas de sociabilidad11 entre jóvenes contemporáneos se visualizan a partir de
gustos, aficiones, formas de vida, prácticas delictivas y de uso de psicoactivas, es allí
donde el placer y la creación de vínculos afectivos con los otros, se hace cotidiano e
intencional. En otras palabras lo que para Maffesioli se denomina “comunidades
emocionales”, dándole importancia al afecto/emotivo que se fragua al interior de dichas
sociabilidades contemporáneas, también por tanto en palabras de Costa, Pérez y
Tropea (1997), es un esquema referido precisamente a los elementos que caracterizan
y definen el “fenómeno” de las “subculturas”.
11
La sociabilidad, en este caso, puede entenderse como la forma lúdica para darse su lugar en la sociedad, se
entiende como el proceso de producción del lazo social en las diferentes manifestaciones de la vida cotidiana, desde las más íntimas hasta las más públicas, mientras que la socialización, es el proceso de interiorización, aprendizaje
y condicionamiento del orden social, la sociabilidad apunta a las formas concretas de recrearse las interacciones sociales y con ello las dinámicas de subjetivación o individuación en las sociedades contemporáneas, está en el núcleo de la producción del individuo y la sociedad, a partir de las configuraciones sociales.
23
Estos actos, facilitan que el joven se forme una idea general frente al uso de las
drogas, sin tener que incurrir en un razonamiento complejo, formando paradigmas del
estereotipo que considera a menudo de su imagen. Finalmente, los estereotipos guían
ciertas imágenes capaces de conducir comportamientos que se expresan en
sentimientos de placer, simpatía, idolatría que se consideran patrones de identidad
anhelados Zácipa (2002: 40).
Con lo dicho hasta el momento podemos señalar que La cultura participa de los
cambios que son vividos por los individuos generacional e individualmente, esto
concluye que la cultura y la identidad no son fijas en el tiempo y el espacio, éstas
preexisten al individuo, en el interior de un grupo social determinado, pero cada
individuo participa de su recreación, en su transformación, a medida que desarrolla su
experiencia para incorporarla en la dinámica cultural.
El joven a través de la exigencia de los medios globalizados y globalizadores confronta
su experiencia y coyuntura de representaciones simbólicas y sociales que internaliza
desde su infancia y al mismo tiempo le incorpora nuevos sentimientos y esquemas que
modifican las formas de intercambio y comunicación En éste acercamiento de prácticas
de consumo de SPA en jóvenes infractores de la ciudad de Manizales, se plantea la
posibilidad de que dichas prácticas, sean interpretadas al interior de las propias lógica
de la colectividad estudiada, es decir, desde el grupo de iguales y sus prácticas ilícitas
en la ciudad, lo que permite sintetizar conceptos de identidad, uso problemático drogas
psicoactivas y cultura, que consecuentemente nos permite significar una realidad social
desde una interpretación de estilos, modos de pensamiento del joven sujeto de
estudio.
1.5 Perfil del Joven Infractor
24
Como se ha señalado anteriormente, nuestra investigación tiene que ver con población
de jóvenes, que han tenido que ser recluidos en la correccional de menores Ciudadela
Los Zagales. La población está conformada por jóvenes que se encuentran en proceso
de rehabilitación con modalidad semi-internado-externado, es decir, en situación legal
de acuerdo a la ley de Infancia y Adolescencia 1098, bajo medida de protección.
De manera general podemos señalar que la población observada muestra su
particularidad por encontrarse en múltiples situaciones de riesgo: problemas de
conducta temprana, problemas de drogas, fracaso y exclusión escolar, vagancia,
negligencia parental, victimización temprana, experiencias de maltrato, abuso sexual y
abandono. Otros factores de riesgo predictores de problemas de conducta y delito en
jóvenes son: pobreza y vivienda insalubre, ruptura del núcleo familiar, descuido
paterno, malos resultados académicos. Esta población vulnerable es heterogénea y se
compone de subgrupos específicos: los que viven en la calle (caletas); los que
conforman grupos de esquina; los que conforman pandillas; en vagancia; en trabajo
informal y en explotación comercial sexual. Los elementos comunes de estos grupos
son: el consumo de drogas, las conductas transgresoras de la ley y el fracaso en el
sistema de educación formal, de modo que son adolescentes desescolarizados
(desertores del sistema) o en alto riesgo de deserción o pre-desertores12.
1.6 Experiencia del Trabajo de Campo
La inquietud por el estudio de esta población surgió, como ya se dijo en la introducción
aprovechando la larga experiencia como profesora en reeducación que me permitía
conocerla de cerca esta realidad, consideramos con mi director de tesis que era
importante aprovechar todo este conocimiento y formalizarlo metodológicamente. Así
12
Estudios realizados en otros países de América Latina presentan presencia de población con idénticas
características estudiadas : http://www.mednet.cl/link.cgi/Medwave/Reuniones/RCPsiquiatria/1/2380
25
fue que se acordó desde un comienzo que esta se podría enmarcar en la perspectiva
cualitativa del método etnográfico, por la posibilidad que ofrecía hacer una descripción
que recogiera aspectos de la vida cotidiana de los jóvenes infractores y de su relación
con el entorno social inmediato y de sus historias de vida. Nos intereso entonces
analizar desde el estudio de la cultura, los contenidos de conocimiento y pautas de
conducta que han sido socialmente aprendidos en las practicas de consumo en
jóvenes delincuentes en la ciudad.
Con el fin tener una noción del concepto de cultura que nos permitiera orientar nuestras
acciones en el trabajo de campo, asumimos desde la perspectiva teórica de cultura y
personalidad. Esta teoría según Harris, “…puede ser descrita en general como formas
psicológicas de funcionalismo que relacionan las creencias y prácticas culturales con la
personalidad del individuo, y la personalidad del individuo con las creencias y las
prácticas culturales Harris, (2000: 743).
En esta perspectiva, se asume la cultura como “formas pautadas de pensar, sentir y
comportarse de los miembros de una población”, y la personalidad que, aunque
también haciendo referencia a las formas pautadas de pensar, sentir y comportarse, se
centra en el individuo Harris, (2000: 745).
En esta misma perspectiva Comprender como se constituye unas formas particulares
de leer la realidad, hizo que nos propusiéramos desde el uso de las técnicas
etnográficas tratar de develar las circunstancias construidas culturalmente y la vida
cotidiana de quienes permitieron adentrarnos en su mundo social. En consecuencia la
experiencia etnográfica nos obligo a retomar todos esos planteamientos sobre el objeto
de observación y el sujeto observante13 que, finalmente nos hizo reflexionar sobre sí
mismo como sujeto observado y sobre todo nos indujo a la reflexión teórico-práctica
desde el trabajo etnográfico para ir más allá de un método y lograr este proceso “como
relación social”. Lo anterior se traduce en la necesidad de asumir una postura dialógica
13
Franz Flórez, en: El mal de ojo de la etnografía clásica y la limpia posmoderna. Una apostilla a partir de la
antropología de L.G. Vasco. Revista Tabula Rasa. No.2. Enero-Dic 2004.Página.23-43.
26
en la investigación, en la que las formas de pensar expresadas a través de las
creencias, los mitos, los prejuicios, los sentimientos por las personas observadas, son
admitidos como elementos de análisis para la interpretación de modos de vida
particular, en otras palabras, nos interesa mirar de qué forma el sujeto de estudio
construye activamente su mundo desde su propia experiencia.
En el trabajo operativo de la investigación, las entrevistas y las encuestas realizadas a
jóvenes de los programas “Comunidad”, “externado” y a los egresados de la institución,
se configuró como en uno de los mecanismos más importantes en el trabajo de campo
realizado, porque posibilitaron el acercamientos exploratorio de manera más directo, lo
que permitió dar lectura a las interpretaciones desde los testimonios orales y
experiencias individuales de los jóvenes.
El trabajo de Campo se desarrolló entre los años 2007 y 2008 de manera cíclica y
continua, lo que permitió adquirir confianza intersubjetiva, lo que también favoreció el
poder compartir e interactuar para conocer las pretensiones del Otro. Sin embargo una
de las mayores ventajas para dicho acercamiento, consistió en que los jóvenes
institucionalizados de cada programa, ya tenían conocimiento de mi presencia en la
institución y por ende aprobaron el proceso de investigación con mayor confianza, por
ello se realizó in situ.
La aproximación a los lugares donde se desarrolla actividades del ciclo vital de los
jóvenes observados particularmente en el núcleo de socialización familiar y en lo que
ellos llaman “el parche”14nos permitió construir una tipificación de comportamientos
cotidianos en las prácticas del consumo de drogas habituales entre adolescentes y su
relación con los hábitos ilícitos. Así es que el trabajo, comprende un componente
14
En la jerga popular, El parche significa: grupo de jóvenes, donde se planean actividades ilícitas y practica de
hábitos de consumo
27
empírico que fundamenta su contenido, gracias al contacto directo con la población, a
través de las visitas a diversos lugares de preferencia para el consumo, como lo fueron:
Las “ollas”: o sitios de expendio y consumo para muchos de estos jóvenes,
donde se ritualiza el consumo en su vida cotidiana.
Hogares: el acercamiento a padres de familia y otros familiares
Vecinos
Barrio: de permanencia, de consumo, de visita esporádica.
Parques citadinos o rurales
El parche-grupo de pares: amigos cotidianos y de encuentro, integrantes de su
grupo u otros grupos.
Todas estas fuentes, fueron de vital importancia para el insumo en general que
contienen caracterizaciones de primera mano, también se utilizaron fotografías en
momentos de consumo y otros que complementan los relatos realizados por los
sujetos, y dar un análisis de éstas que fundamenten el carácter de las sociabilidades
juveniles en construcción de la identidad.
Se utilizaron instrumentos de recolección de información como:
Entrevistas estructuradas y no estructuradas
Registro fotográfico
Diario de Campo
Grabaciones
La aplicación de cuestionarios
Aplicación de encuestas
Fuentes directas e indirectas como:
La institución Ciudadela los Zagales
Los Jóvenes y su historias de vida personales
Los testimonios del grupo de pares
La Familia
28
Vecinos
Para concluir este capítulo resta señalar que hemos presentado los elementos teórico
metodológicos que nos permiten hacer una lectura sobre el fenómeno estudiado de
manera ordenada, siguiendo contextos específicos donde se desarrollan las relaciones
sociales que favorecen el desarrollo de las practicas analizadas en este trabajo.
CAPITULO II
INICIACIÓN DEL ADOLESCENTE EN EL USO DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS Y
PRACTICAS DELICTIVAS EN EL CONTEXTO FAMILIAR
En el presente capitulo, se tiene como objetivo hacer una descripción sobre los
procesos de socialización primaria en las familias de los jóvenes sujetos de estudio, se
trata de ver el tipo de relaciones interpersonales al interior del núcleo familiar, para
comprender los valores de formación de la personalidad en el joven; hipotéticamente,
se busca mostrar que las condiciones de socialización en la familia, constituyen la
etapa de iniciación en el consumo de SPA y practicas delincuenciales en los jóvenes
infractores de la Ley.
2. Perfil socioeconómico de las familias
Después de la aplicación de encuestas y su respectiva sistematización, se observan los
siguientes resultados:
29
En los grupos de familia de los 50 jóvenes sujeto de estudio, se encontró que un
(70%) pertenecen en los estratos 1 y 2 y el (30%) restante son grupos de
familias ubicadas en estratos 5 y 6.
Las familias de estrato 1 y 2 tienen una fuente de ingresos familiar con un
promedio de $250.000 por mes, aunque se observaron rangos muy bajos por
valor de: $50.000 y $100.000 por mes aproximadamente, debido a que las
figuras de proveedor son la madre, el hijo mayor o los abuelos, en muy pocos
casos el padre se hace responsable de las gastos del hogar.
En el caso de los grupos de familia de estratos 5 y 6 se nota mayor solvencia
económica con un promedio de 2 a 3 salarios legales vigentes, en los cuales
ambos cónyuges, eran proveedores de los gastos del hogar, aun estando en
situación de divorcio.
Con relación al nivel educativo de los padres, se registra un promedio de
formación de primaria incompleto 70% esto para las familias de estratos 1 y 2 y
el 30% de los grupos de familia presentan estudios en educación superior y
tecnologías, para las familias de estrato 5 y 6.
El estado civil que predomina en los grupos de familia de estratos 1 y 2 es la
unión libre o convivencia transitoria, con poca tendencia a la unión legal. En los
casos de los estratos 5 y 6 se encontraron grupos de familia con estado civil
casados por tradición católica un 20% y en menor número 10% unión legal por lo
civil.
30
El grupo de familia predominante y al cual se dedicará mayor análisis corresponde al
conformado por los estratos uno y dos, cuya procedencia deriva del campo, con
algunos casos de situación de desplazamiento forzado de los municipios del
departamento de Caldas como: Manizales, Pensilvania, Salamina, Supía, Apia, Rio
Sucio, Belalcazar, Samaná, Marquetalia, entre otros.
En dichos municipios, las familias de los jóvenes se encuentran poblando zonas
periféricas, el caso específico de Manizales, son las familias que habitan las comunas:
Comuna 2 (barrio galán, estrada, sierra morena, las delicias, el tachuelo, camino
del medio)
Comuna 9 (barrio Persia bajo, eucalipto, la isabela)
Comuna 5 o ciudadela del Norte(barrio san Sebastián, Sinaí, solferino,
comuneros, villa hermosa)
Otros casos de cambios de territorio de unos barrios a otros se originó por presentar
riesgo físico como deslizamientos, inundaciones, (caso La Playita, el Nevado, Galán),
estas familias se encuentran bajo el programa de reubicación de la alcaldía en la
comuna cinco, barrios Solferino y Samaria principalmente, otros casos por situación de
amenaza, o deudas de dinero, y manejos de trafico de drogas, notándose aspectos de
las viviendas con espacios muy reducidos y la calidad de su estructura es muy baja,
además, se encuentran ubicadas en zona de riesgo de deslizamiento.
Se encontró, que en el grupo de familia de estrato 1 y 2, predomina la familia extensa y
monoparental o conformada por un solo progenitor, siendo la madre o la abuela, las
figuras de autoridad más directas para el adolescente, cabe resaltar que se presenta el
aumento de la familia mono parental, con madres adolescentes cabeza de familia a
31
causa de abusos, violaciones, ejercicio de la prostitución, poca planificación familiar,
embarazos no planeados o noviazgos a tempranas edades.
Los padres y madres de familia, trabajan en actividades de cualquier índole, después
de su llegada a la ciudad, generalmente se presentan más oportunidades para la mujer,
como empleada domestica, oficios generales, mesera en bares, restaurantes,
igualmente el padre de familia debe ocuparse en cualquier actividad, asume trabajos
como vendedor ambulante, puesto de frutas, cotero o en otros casos, empieza
asociarse con actividades ilícitas como expendedor de droga, o reducidor en el barrio.
De otra parte, se reconocen otros efectos relevantes que cambian la dinámica familiar
estos recaen inicialmente sobre las parejas, en los cambios de roles y el estatus de la
mujer empieza adquirir en el hogar un rol de proveedora, a partir de esto se alteran los
esquemas de poder y autoridad, redistribuyendo jerarquías y roles. Igualmente las
relaciones entre padres e hijos se vuelven conflictivas, debido a las múltiples
oportunidades que tiene el adolescente de iniciarse en hábitos de vagancia, con la
nueva adquisición de amigos, el querer ser aceptado en el barrio y ganarse la
confianza será una nueva hazaña para el adolescente quien ha iniciado una adaptación
y transformación más en su personalidad.
2.1 Estructura familiar y construcción de vínculos afectivos
La estructura familiar de los grupos de estudio permite identificar la familia no
únicamente en su forma exterior, sino de acuerdo con sus propias emociones,
pensamientos y conductas. En el ámbito familiar se ve a la familia como la vida
conjunta de individuos pertenecientes, por lo general, a dos o más generaciones: la de
32
los padres (biológicos, adoptivos, sustitutos o padrastros) y la de los hijos (biológicos,
adoptivos, sustitutos o hijastros).
Las relaciones que se tejen al interior de la familia forman una estructura o agrupación
de sentimientos y manifestaciones afectivas que a su vez, permiten puntualizar las
funciones que el sistema familiar desempeña principalmente cuando uno de los
miembros llega a la edad adolescente, factores referentes a la comunicación familiar y
la resolución de conflictos entre padres e hijos, así como aclarar la importancia del
apoyo y afectos de la familia para la formación psicosocial del adolescente.
Aunque la importancia de la familia es indiscutible, su definición puntual aun está en
discusión y es que la pluralidad de las estructuras familiares es tan amplia que resulta
extremadamente difícil establecer una definición que abarque todas ellas; muchas de
las definiciones dadas a lo largo de la historia no reflejan adecuada y exhaustivamente
la dinámica familiar de la sociedad actual ya que soslayan otras formas familiares que
poco a poco, están abandonando la excepción para convertirse en norma Musitu,
Román y Gutiérrez, (1998:96).
En términos generales, se asume que las funciones esenciales y globales de la familia,
provienen del campo biológico y se constituyen en los niveles cultural y social,
comprende además, entre otras, el bienestar económico, estableciéndose como unidad
cooperativa que se encarga de la supervivencia, el cuidado y la educación de los hijos;
a éste tipo de familia se le denomina “nuclear”: un grupo vinculado por estrechos lazos
emocionales con un alto grado de privacidad doméstica y preocupado por la crianza de
los menores; conformada por padre, madre e hijos Gimeno, (1999:105). Paralelamente
a estas definiciones, los psicólogos de familia aportan algunas enunciaciones que
33
destacan como elemento esencial el tipo de interacciones que tiene lugar en el seno de
la familia.
Desde este punto de vista la familia ha sido definida como “un sistema de relaciones
fundamentalmente afectivas en el que el ser humano permanece largo tiempo y no un
tiempo cualquiera de su vida, sino el compuesto por fases evolutivas cruciales como la
infancia y la adolescencia”, Musitu (1998:57).
Los acontecimientos vividos en las etapas del ciclo vital, se consideran, lo más
significativo de la familia especificada, es la familia percibida, aquellas personas que se
consideran familia en sentido próximo, con los que se comparten vínculos afectivos e
intimidad, aquellos en quienes se confía más allá del tiempo, de la distancia y más allá
de lazos de sangre, Satir (1991: 45).
Ese ente que se considera familia, es el punto donde se crean los primeros y decisivos
proyectos de vida, donde se comunica un conocimiento que mas que información, es
sabiduría, porque en ella se transmite una sensatez que concierne a los asuntos
esenciales de la vida humana, que enlaza lo cognitivo con lo emocional y que es
producto innegable de la experiencia vivida por los mayores15
Grafico numero 1: familias encontradas en el grupo de estudio
15 Horrocks John E., Psicología de la adolescencia, México, trillas ed., 1999. pp. 13-21
34
2.1.1 Tipos de familia encontradas en el grupo de estudio
De acuerdo a las encuestas realizadas a 50 jóvenes sujeto de estudio, se encontró
que: El tipo de familia de mayor relevancia en la socialización del joven infractor es la
familia extensa, en un 60%, ésta alcanza una línea de descendencia y encierra como
miembros de la unidad familiar, todas las generaciones; este tipo de familia admite la
máxima expansión posible del conjunto familiar; seguida de la familia monoparental o
con un solo progenitor en un 30% constituida por un padre o una madre que no tiene
pareja y vive al menos con un hijo menor de dieciocho años.
En el caso de la madre cabeza de hogar, se dan circunstancias como madre
solterísimo, viudez, o ausencia del padre por encontrarse en la cárcel, la madre es
cabeza de hogar y no recibe apoyo de la pareja anterior, ni de su familia, trabaja en
horarios muy extensos, en algunos casos como mesera en restaurantes, ejerciendo
trabajos sexuales y/o bares, empleada doméstica, vendedoras ambulantes, el menor
debe asumir trabajos formales como: vendedor de frutas, artículos comerciales como
(Cds, ropa, zapatos, “cacharro” sombrillas), el microtráfico como alternativa laboral de
fácil acceso y rentabilidad al sustento diario, además pasa largos periodos de tiempo
35
en la calle, con amigos y adultos convirtiéndose en factores de riesgo para su
desarrollo y socialización con el entorno.
En el caso del padre cabeza de hogar, se ejerce en circunstancias de viudez, o
abandono de la madre al hogar, o por residir en la penitenciaria, ejerce actividades
laborales fuera de la ciudad, como obrero de construcción, cotero en la galería, taxista,
venta de chance, puesto ambulante de frutas, dulces, tráfico de droga, en horarios muy
extensos, este no asume la total crianza del menor, dejando a cargo de su crianza a
sus abuelos, tíos, primos adultos o quienes convivan en la casa.
La situación mencionada anteriormente, conlleva a un aprendizaje imitativo de patrones
generacionales en torno a prácticas ilícitas, hábitos de consumo y ademanes callejeros,
que perfilan la personalidad del joven y toma de decisiones frente a la vinculación de
pandillas.
Finalmente se halló un 10% de familias nucleares que conservan su unidad familiar,
esta se constituye por el esposo, la esposa e hijos en edad infantil y adolecente;
cuando los hijos alcanzan la edad adulta y forman familias propias, el núcleo familiar
regresa a la pareja conyugal que lo formó inicialmente; también es posible que otro
pariente resida en el hogar, como los progenitores de los cónyuges (Gimeno, 1999).
Verdaderamente la proporción de hogares que representan este modelo nuclear, ha
disminuido notablemente en las últimas décadas para dar paso a una mayor diversidad
de formas familiares.
La imagen tradicional de la familia como un hogar formado por el padre y la madre con
varios hijos, ha perdido fuerza para dar lugar a nuevas formas de convivencia que
36
resultaban excepcionales hace treinta o cuarenta años, y que son cada vez más
habituales, como por ejemplo las parejas gays, las familias reconstituidas con hijos de
uniones anteriores, las familias mono-parentales y las familias que viven en
cohabitación (Musitu, Román y Gutiérrez; 1998).
Otras tipologías de familia encontradas en el trabajo de campo que permitieron una
comprensión de la formación de las estructuras familiares y la construcción de sus
vínculos afectivos son, las familias transitorias: aquí reside el adolescente a partir de
sus doce años de edad, visitan las residencias de abuelos con lazos afectivos fuertes,
(tíos, primos, suegros) o amigos de la familia.
Circulan por dichos hogares por temporadas cortas, de acuerdo a intereses
particulares, como evasión de posibles capturas, deudas en la calle, actividades ilícitas
y para suplir necesidades de vestido y comida; utilizando el chantaje emocional para
obtener dinero y por ende comprar SPA.
Las familias superpuesta o reconstituidas: son familias que después de una
separación, divorcio o muerte del conyugue, se rehace con el padre o la madre que
tiene a cargo los hijos y el nuevo cónyuge16 en las cuales se conocen conflictos por
roles, rivalidades, por manejo de afectos y preferencias en obsequios materiales.
Familias con organización paralela: se conforma por un grupo de jóvenes, y adultos
que ejercen relaciones de hermano, sin tener ningún tipo de consanguineidad, también
denominados guetos, combos, parche, regularmente su lugar de encuentro “la Olla”,
16
MUSITU, Román y Gutiérrez; 1998.
37
sus relaciones son fraternales mientras se cuente con dinero o artículos para el
intercambio de la droga, su duración es 1 día a 8 días aproximadamente. Parece ser
entonces, que en la sociedad, hay una tendencia creciente a que la familia sea un
sistema social diversificado en el que conviven tipologías bien distintas, lo que dibuja
un panorama familiar muy diferente y desde luego mucho más plural, al de unos años
atrás.
Al considerar las causas de esta diversidad familiar, son múltiples los factores que
pueden destacarse (cambios sociales, económicos, legales, demográficos y culturales),
el ascenso vertiginoso de los índices de natalidad con sus implicaciones en el tamaño
familiar y en el proceso de formación de nuevas familias, el incremento de los divorcios,
el aumento de los nacimientos extra matrimoniales y la creciente proliferación de
relaciones de convivencia no institucionalizadas o ajenas a la forma tradicional de
familia conyugal, familias mono parentales y familias sin hijos (Gimeno, 1999).
El grupo de familias estudiadas, poseen características propias de crianza a partir de la
diversidad de sus formas familiares nuevos valores y normas de comportamiento que
estas han adquirido; entre los cuales se consideran, privación de manifestaciones
afectivas, el individualismo, el autoritarismo, manejo de poder, resentimientos pasados,
venganzas y búsquedas de placer en diferentes modelos de felicidad.
Estos valores y estas nuevas formas de relaciones y conformación familiares, reflejan
en su interior, patrones de conducta arraigados en el conflicto y violencia como
alternativas de crianza, sin llegar al manejo asertivo del conflicto, generando más
violencia que desencadena practicas ambiguas, punitivas, confusas, donde no hay
modelos de padres coherentes, Satir (16995: 80)con un desarrollo humano centrado en
38
los derechos y la convivencia pacífica, dado que sus padres son a la vez producto de
historias de vida violentas que se repiten en cadena de generación en generación.
No obstante, la familia sigue siendo la única institución que cumple simultáneamente
varias funciones claves para la vida de la persona y también para la vida en sociedad;
en términos conceptuales, una familia funcional, es aquella que posee unos límites
claros y que respeta la independencia funcional y emocional de sus miembros,
reconoce que cada individuo asume una percepción de la realidad, una conducta y una
vida emocional propias, que si bien perturban al resto de la familia no se generalizan
sin distinción, ni irrumpen en los otros.
En contraposición las familias disfuncionales desconocen los limites, los confunden e
invalidan y desautorizan la identidad individual, en lo cognitivo, lo conductual y lo
emocional, Gimeno (1999:106). Actualmente es evidente que la familia sigue
cumpliendo una función económica importantísima, de hecho el hogar familiar es una
unidad económica, es necesario tener presente además que la familia se caracteriza
entre otras cosas por poner sus recursos en común, pues es la red de parentesco
familiar sin duda la mejor red de protección social.
Otra característica fundamental de la familia, es su capacidad para generar una
arquitectura o estructura de relaciones basadas en el afecto y el apoyo, con un claro
efecto positivo en el bienestar psicológico de todos sus integrantes, en este sentido
Musitu, Román y Gutiérrez, sostienen que la familia, a través de las relaciones de
afecto y apoyo mutuo entre sus miembros, cumple varias funciones psicológicas para
las personas, así, por ejemplo, mantiene la unidad familiar como grupo especifico
dentro del mundo social, genera en sus integrantes un sentido de pertenencia,
proporciona un sentimiento de seguridad, contribuye a desarrollar en sus miembros una
39
personalidad eficaz y una adecuada adaptación social, promoviendo la auto estima y la
auto confianza, permite la expresión libre de sentimientos y establece mecanismos de
socialización y control del comportamiento de los hijos a través de las practicas
educativas utilizadas por los padres.
Para comprender a cabalidad el proceso de socialización, es crucial establecer una
distinción entre los objetivos de socialización, las prácticas utilizadas por los padres
para ayudar a sus hijos a alcanzar esos objetivos y el estilo parental de los padres, así,
el estilo parental se puede definir como una constelación de actitudes hacia el hijo, que
consideradas conjuntamente, crean un clima emocional en el que se expresan las
conductas de los padres.
Estas conductas contienen aquellas que facilitan o dificultan alcanzar un objetivo de
socialización, los cuales incluyen la adquisición de habilidades y conductas específicas
de los hijos (sociales y académicos), así como el desarrollo de cualidades más globales
(la curiosidad, la independencia, el pensamiento crítico entre otras). Lógicamente, estos
aspectos de socialización familiar no son universales, sino que se encuentran
íntimamente relacionados con el contexto cultural en el que se integra la familia; los
valores y normas culturales que determinan la conducta de los padres y el modo en
que los hijos interpretan esta conducta y organizan la suya propia Gimeno; (1999:107).
2.2 Tipologías de estilos de socialización parental
40
De acuerdo al estudio de los grupos de familia de los 50 jóvenes sujeto de estudio, se
determinaron algunas tipologías de estilos de socialización parental17, que se establece
a partir de las dimensiones implicación/ aceptación y coerción/imposición; que consiste
en los bajos niveles de implicación de los padres con la crianza de sus hijos y la poca
aceptación e indiferencia ante las conductas adecuadas de sus hijos y cuando la
conducta de estos es inadecuada, no razonan con ellos ni les expresan sus opiniones o
juicios; estos padres se muestran, coercitivos y por tanto, impositivos en el
comportamiento de sus hijos.
Es probable que algunos de estos padres poco implicados utilicen técnicas coercitivas
con sus hijos cuando estos se comportan de modo incorrecto; de hecho, la segunda
dimensión coerción/imposición, es independiente del grado de implicación de los
padres, así, un padre puede mostrar implicación y aceptación hacia su hijo y, al mismo
tiempo, ser coercitivo con él, de este modo los padres con altos niveles de
coerción/imposición se manifiestan cuando el hijo no se comporta como ellos desean,
tratan de coaccionarle para que no vuelva a realizar esa conducta.
La coacción puede ser física, verbal o puede consistir en privarle de alguna cosa de la
que normalmente disponga y sea de su agrado total; en el análisis del grupo de familias
de estudio, se encontraron estilos de crianza que basados en los modelos de
implicación / aceptación y coercitivo / impositivo se consideran útiles para describir
las estructuras de familia y la creación de vínculos afectivos como son:
2.2.1. Estilo Autoritario: se identifica por la baja implicación/aceptación del hijo y el
alto nivel de coerción/imposición, estos padres son muy exigentes con sus hijos y al
17
MUSITO, Román y Gutiérrez; 1998.
41
mismo tiempo muy poco atentos a sus necesidades físicas y afectivas. Su
comunicación es mínima unilateral de padres a hijos y suele expresarse en términos de
demanda, los padres autoritativos valoran la obediencia e intentan modelar, controlar y
evaluar la conducta y actitudes del hijo, generalmente son indiferentes a la demandas
de sus hijos en cuanto apoyo y atención.
2.2.2 Estilo Negligente: especifica una baja aceptación/implicación y un alto nivel de
coerción/imposición de normas, se trata de un estilo donde prima la escasez tanto de
afecto como de límites, este estilo de padres otorga demasiada independencia a sus
hijos, no sólo en los aspectos materiales sino también en los afectivos. Cuando los
hijos se comportan de modo adecuado se mantienen indiferentes, y cuando
transgreden las normas no dialogan con ellos, ni tampoco restringen sus conductas
adictivas y delictivas. Son altamente impositivos, en el manejo de los espacios y
mobiliarios de la casa, como la distribución del dinero para la atención de necesidades
físicas como alimento y pago de servicios públicos. Son poco afectivos y están poco
implicados en su educación.
2.2.3. Estilo Permisivo: hace claridad a la flexibilidad y poca exigencia de las normas
en la casa, el padre de familia tiene alta aceptación de los sucesos tanto negativos
como positivos del hijo, le confiere fuerte complicidad en sus aventuras, no es
coercitivo/ impositivo deja con total libertad la toma de decisiones y creación de otros
vínculos afectivos del adolecente, aprueba todo tipo de conductas como muestra
afectiva sin brindar un acompañamiento seguro y estable frente a sus comportamientos
de riesgo.
Es importante señalar que todas las familias y todos los padres y madres comparten
algún rasgo de los estilos parentales, aunque, por supuesto, pueden producirse
desplazamientos de un estilo a otro en una misma familia en función de las
circunstancias, las necesidades, el estado de ánimo paterno y el momento evolutivo del
42
hijo, no obstante, haciendo la salvedad de que puede haber variaciones, que toda
tipología es una simplificación y que las familias prototipo o los tipos puros no existen,
es cierto que al observar las regularidades existentes en las conductas y normas de
cada familia, sí podemos situarlas más próximas a un estilo que a otro.
De la misma manera vale la pena destacar, que a pesar de las distintas
denominaciones de los estilos parentales, todas las dimensiones y tipologías existentes
en la literatura científica tienen mucho en común, lo que hace pensar que las
dimensiones disciplinares podrían tener una considerable generalidad transcultural
Musitu, Román y Gutiérrez; (1998). Son numerosos los trabajos que se han centrado
en estudiar la asociación entre un determinado estilo parental y las consecuencias
derivadas o el efecto producido en el ajuste psicosocial del hijo. De tal manera que a
los progenitores autoritarios les correspondería tener unos hijos conflictivos, irritables,
descontentos y desconfiados, a los padres negligentes unos hijos carentes de afecto,
con poca tolerancia a la frustración y altos índices de ansiedad, y a los padres
permisivos unos hijos impulsivos y agresivos.
En definitiva, la idea que se desprende de los estudios, es que, tanto el autoritarismo
total, como la permisividad total, producen efectos no deseables y además estos
efectos negativos se incrementan cuando existe distancia y frialdad en las relaciones
afectivas entre padres e hijos Horrocks; (1997:18). Paralelamente, se ha comprobado
que los adolescentes provenientes de hogares autoritarios presentan problemas de
autoestima y de interiorización de las normas sociales, en general, se caracterizan por
la baja competencia interpersonal, la utilización de estrategias poco adecuadas para
hacer frente a los conflictos, los malos resultados académicos y problemas de
integración escolar.
43
La disciplina excesivamente rígida de los padres es uno de los factores familiares de
riesgo más estrechamente relacionados con los problemas de conducta. En este
sentido, se ha constatado que la utilización excesiva del castigo físico en detrimento de
prácticas más democráticas, aumenta la probabilidad que el adolescente se implique
en comportamientos de carácter delictivo.
Por otro lado, los adolescentes de hogares negligentes, son por lo general, los menos
competentes socialmente y los que presentan más problemas de comportamiento y
agresividad; se ha constatado que las experiencias infantiles de negligencia y maltrato
físico y/o emocional pueden desencadenar posteriormente un comportamiento
antisocial y/o delincuente, Chamorro (1981:85).
Este estilo parental también puede ocasionar en el adolescente problemas de ansiedad
y depresión, baja autoestima y falta de empatía con otros adolescentes Castells y
Silber, (2003). Así mismo señala que los adolescentes pertenecientes a hogares
permisivos no parecen haber interiorizado adecuadamente las normas y reglas
sociales, presentan más problemas de control de impulsos, baja tolerancia a la
frustración, dificultades escolares y un mayor consumo de sustancias Psicoactivas.
En esa medida, algunos adolescentes hacen una distinción entre padre y madre al
momento de tratar diferentes temas, existen casos de madres o abuelas conflictivas
debido al poco manejo de sentimientos y emociones dentro de la casa, por manifestar
irritabilidad en el estado de ánimo y desobediencia en las pautas de crianza, aunque al
mismo tiempo, los adolescentes declaran tener con ellas más interacciones positivas.
44
En cuanto al padre, en algunos casos, éste reconoce estar fundamentalmente
preocupado por la alimentación de los hijos, el conflicto se da por el aprendizaje
temprano de una actividad que le genere independencia al adolescente, es decir, un
trabajo informal para que aporte económicamente al hogar, imposiciones de pautas
poco flexibles con muestras de violencia física.
En los diálogos establecidos con padre y madres de los jóvenes de estudio no se
contemplaron ideas del aprovechamiento del tiempo libre, el ocio, los horarios de
llegada a la casa, las amistades, las relaciones sexuales y patrones de imitación
negativos; los hijos (hombres) destacan como principales temas de conflicto, el maltrato
físico del padre o madre, en diferentes circunstancias injustificadas, las peleas entre
hermanos se presentan por préstamo de prendas de vestir e invasión de espacios
dentro de la casa como el espacio de televisión y música y elección de las amistades;
mientras que las hijas (mujeres), otorgan una gran importancia a los temas
relacionados con la sexualidad y con los horarios de vuelta a casa los fines de semana,
se quejan más frecuentemente de la incomprensión de los padres y hermanos mayores
hacia ellas.
Al mismo tiempo, la frecuencia de conflictos puede tener origen por algunos problemas
de baja autoestima, la dificultad para establecer relaciones significativas con otras
personas, el consumo de SPA, la presencia de síntomas depresivos, el sentimiento de
soledad y los problemas de conducta; éstos se convierten en un estresor ante el cual
los padres reaccionan con un patrón negativo de interacción familiar. De la misma
manera el clima familiar negativo genera síntomas depresivos y ansiedad en los hijos,
estos problemas a su vez, ejercen una influencia negativa en el sistema y en las
relaciones familiares Musitu, Román y Gutiérrez; (1996:50).
2.3 Impacto del maltrato físico y psicoafectivo en los sentimientos e
interacciones sociales del adolescente
45
En los casos de estudio, se reconoce como una de las influencias más frecuentes en el
pensamiento y comportamiento de un adolescente, por patrones de imitación de sus
padres, es el sentimiento de represión ocasionado por el maltrato físico o castigo
excesivo de ese alguien que hizo las veces de cuidador en las etapas de infancia o
adolescencia. Esto lleva al adolescente a luchar por un sentimiento de liberación o en
otros casos, expresa una actitud agresiva, despótica y desafiante frente al os mayores.
Gran parte de estas situaciones se debe a la falta de comunicación entre padres e
hijos.
Frente al maltrato infantil; “se reconoce que el niño (de cero a doce años de edad)
necesita de los progenitores, y de ellos depende restaurar la confianza haciéndole la
existencia más grata y productiva…”El castigo es considerado como una patología bio-
psico-social de origen multicausal, que debe ser tratada a tiempo para que los hijos no
vean a sus padres como castigadores abusadores; son tan diversas y complejas las
formas que presenta el castigo en la familia que estos tipos se combinan para hacer
más efectiva la intención de destrucción del otro. Las familias que castigan al menor,
tienen un gran impacto en el desencadenamiento de conductas agresivas por parte del
niño, este tipo de conducta es desplazada a otros grupos generando rechazo en sus
miembros, ocasionándole al menor un conflicto que posteriormente pueda generar un
trauma Alfred, (1999: 117 -122).
De acuerdo a los casos de familias revisados de los jóvenes sujetos de estudio, el
suceso más relevante es la violencia física por presentar secuelas visibles, seguidas en
orden de importancia por el abandono, y la violencia psicoafectiva. Si los adultos no
ofrecen a los niños/as posibilidades de vivir relaciones positivas, es posible que el
impacto en su comportamiento y en particular su futuro desarrollo se oriente hacia
formas inseguras, agresivas y apáticas.
46
El maltrato físico hacia el adolescente (entre 12 y 18 años de edad), se caracteriza
por una falsa introyección en valores, costumbres y hábitos, a partir de prácticas
violentas (golpes con heridas físicas) obligando a su aprendizaje e imitación en la
conducta del adulto.
Cuando la familia es liderada por un hermano mayor adolescente, éste ejerce
responsabilidades económicas y de sostenimiento familiar, no cumple su rol de hijo, ni
recibe reconocimientos como adolescente, cuando la madre es cabeza de hogar,
deposita toda la responsabilidad y crianza de hermanos menores en él, ella está
dedicada a diferentes actividades en el día y la noche, en ocasiones el joven asume
actitudes agresivas con la madre y hermanos menores como manifestación de poder y
autoridad en la casa, debido a las continuas represiones que experimenta a través de
la soledad y el maltrato físico, en sus formas visibles corporales como quemaduras de
primer grado, con plancha en brazos, piernas, heridas con armas dentro de la casa
(machetes, cuchillos), golpes ocasionados con palos, correas, zapatos, piedras o algún
artículo que genere este tipo de impactos.
Lo anterior, obedece a las pobres estructuras de familia que formadas por parentesco,
no permean ningún tipo de sociabilidad afectiva para el hijo, propias de formas
tradicionales de crianza a través de la violencia y el maltrato, a continuación veamos un
fragmento de la entrevista, es importante resaltar que los testimonios aquí
mencionados serán sujeto de total discreción, por ello se presentaran nombres o
sobrenombres ficticios para proteger la identidad de los jóvenes, estos testimonios
pertenecen a los estratos 1 y 2 donde se priorizó la investigación, veamos:
47
“Yo me acuerdo como si fuera ayer que mi mamá me pegaba [castigo físico] por nada,
eso sí, con lo que encontrara, un zapato, el cable de la plancha; mi cucho si era más
agresivo, una vez me cogió a plan [castigo físico con machete] porque me pilló [observó]
fumando vareta [marihuana] en la casa y como yo estaba todo ido [bajo los efectos de la
marihuana] pues ni entendí nada hasta el otro día que si estaba todo molido. Entre
hermanos peliamos mucho por bobadas porque se la quieren montar [demostrar poder] a
uno por chino y sabe que me toca hacerme sentir con alguna punta [arma corto
punzante] y todo…” (Chucho).
Se destaca que el castigo físico se tiene como método coercitivo, la mayoría del
maltrato físico va acompañado de agresiones verbales, insultos que generan mayores
resentimientos en el adolescente “la pela pasa peo el culo queda”. El maltrato físico
genera estados de temor, ansiedad y otras situaciones psicológicas profundamente
lesivas a la personalidad del adolescente.
El maltrato psicoafetivo, por ejemplo es apreciado en formas invisibles que no son
producto de formas violentas físicas, sus huellas están fuertemente asociadas con
aspectos cognitivos afectivos como la creatividad, expresión de emociones claras,
autoestima, la construcción e interiorización de valores como respeto, dignidad,
solidaridad entre otros, y aspectos psicosociales como hijos no deseados, deficiencias
en necesidades básicas e iniciación temprana en trabajos informales, éstas formas de
violencia afectan de manera directa el desarrollo integral del adolescente respecto a su
afectividad y desarrollo cognitivo frente al entorno Alfred, (43 - 54).
El grupo de familias de los jóvenes de estudio, se caracterizan por el alto nivel de
consumo de drogas (SPA) acompañadas de alcohol como aguardiente o ron,
consumidos con mayor frecuencia los fines de semana, ésta situación genera violencia
intrafamiliar por el estado de embriaguez, existen casos de discusiones en las que el
padre agrede físicamente a la madre, el hijo interviene en la discusión presentándose
48
defensivo y alterado esto provoca mayor desbordamiento del conflicto hasta generarse
uso de armas, agresiones verbales, amenazas y heridas físicas.
En el caso de las madres, cuando regresan a su casa después del trabajo
(propiamente de meseras bares o cafés de la galería) con igual intensidad recurren a
discusiones que terminan en enfrentamientos rígidos con el adolescente, evidenciado
una impotencia materna y falta de control frente a conductas negativas y acciones de
violencia imperiosas imitadas de su padre por el adolescente.
Otra forma de maltrato psicoafectivo se presenta con el Abandono temporal, en
algunos casos cuando los padres deben salir a sus sitios de trabajos y deben dejar el
menor a cargo de los abuelos u otros adultos.
Otra manifestación de abandono, se da en la misma casa, como ausencia de afecto e
interés por las actividades que realiza el adolescente durante el día, “casi no hablo con
mamá porque no tiene tiempo”, a esto se suman las dificultades en las relaciones y la
comunicación entre padres e hijos y otros miembros de la familia, causadas por
conflictos internos que se fundamentan en los esquemas de autoridad y el consecuente
maltrato que se ha convertido en el medio cotidiano de comunicación. Como lo
manifiesta así:
“En la casa todo es muy normal, más bien poca comunicación con mis papás porque no
tienen el tiempo para eso, a veces es maluco porque piden que uno les explique todo más
que todo mi mamá, y la verdad me da mucha pereza contarle mis cosas a la final. Y lo
mismo pasa con mis hermanos prefieren irse al estadio a montar tabla o salir por ahí,
aunque yo también salgo pero con otra clase de amigos a practicar moto cros al bosque, o
a la caliente a tirar nado”. (Fressa)
49
El adolescente privilegia otros espacios de diálogo y expresión de sentimientos como
su grupo de pares, debido a los intentos fallidos de comunicación que ha tenido en su
familia, otras formas de abandono se presentan cuando se corta todo tipo de vínculo
con los progenitores, especialmente con el padre, esta situación se presenta cuando se
rompen relaciones de pareja, por abandono, muerte de uno de los padres o cuando se
establecen relaciones fortuitas en el caso de madres solteras.
En este caso se ve comprometida la manutención y sostenimiento del menor,
quedando desamparado y a merced de la madre, de los abuelos y de otros familiares,
quienes por sus condiciones económicas y ante la obligación de brindar protección se
consideran con la autoridad de ejercer violencia contra el menor. Veamos:
“Mi casa parece un inquilinato, vive el que quiere, mi abuela mientras tenga pa sus
puchos, no importa quien duerma aquí. Con primos y primas he vivido desde muy chino
[niño] porque son unos demonios [desordenados] y se vienen de la casa. También los
tíos que son como mis hermanos, y uno que otro amigo que se queda por días en la
casa, mientras hace sus vueltas”. (Darío)
Aunque las familias de estudio se caracterizan porque sus formas de interrelaciones
cotidianas se representan como estructuralmente violentas, éstos comportamientos, sin
embargo, son hilos de una red de símbolos y significados amalgamados, que dan
sentido a ese mundo de la vida, es decir, hacen posible una cultura que se expresa en
la complejidad de lo humano y en las contradicciones del ámbito de lo social, como lo
describen a continuación:
Cuando peliamos en la casa por cualquier cosa, es mejor quedarse callao [en silencio] me
entiende, porque siempre es lo mismo y eso lo jarta [predispone] a uno, por ejemplo yo
peleo en mi casa ¡ah! con todos a la final, con mi cucha [madre] cuando voy y no llevo
50
nada, o porque tengo la mía [efectos de droga] encima y me parece verla como imágenes
que uno tiene en la cabeza, sisas, me pongo es a alucinar y eso. Y la veo toda rara esa
cara, entonces me da la risueña, aunque a veces llego y me provoca es pegarle a alguien,
si viera que una vez me agarre con mi hermano por bobadas si me entiende, porque el
man [hermano] es todo picao a loca [llama la atención para las mujeres] y quiere la
apariencia con lo mío, mis pisos [zapatos] y eso; suerte, eso me costo un trote largo [hurto
difícil] que consiga si o no. ¡Ah!…no en la casa se pelea mucho no hay nada de tolerancia y
esas cosas que a uno le enseñan aquí [institución], eso es basura a la final porque uno sale
a lo mismo a darse en la cabeza [consumir droga] y a robar lo mismo me entiende… nadie
se queda callao cuando se trata de alegar [agresión verbal] mi cucha sabe de eso y pues
mi hermanita; no pobrecita eso es lo que esta aprendiendo del tío ¡ufff! con ese man si he
tenido muchos cuentos malos, y buenos a final porque me echó un ciego [culpabilizar de un
hurto sin cometerlo] y míreme aquí guardado [residente] pero nada, yo salgo y lo que sea a
la final. Con los que me llevo bien son los primos nos queremos como hermanos me cubre
¡uff! me recubre, en las vueltas [Hurtos] y me cuida de todo, cuando estamos en la olla
[sitio de expendio y consumo] el paga eso si después toca reponerle como sea, pues por el
aprendí bastante de la calle. A defenderme de todo el que me la quería montar de alegría
[imponer normas] y eso…
Pille, que eso del vicio en mi casa es normal, el que quiera mete y ya, eso si que no se
metan con lo mío que lo ferien [vender, cambiar] y eso, noo… en la mala con migo y pues
lo que haya que hacer, ¡si! Y pues robar en la familia hay grandes pa eso, entonces pues
en la juega si no lo aprende rápido, porque eso es un modo de vida pa’ lujos, el vicio y a
veces pa’ las chinas o la jermu [mujer]. (Mono)
Puede afirmarse entonces, que la violencia es aprendida, y que tiene que ver con
procesos de adaptación para manifestarse como una de las formas y a la vez
estrategias adaptativas en la interacción cotidiana, siendo una forma extrema y mal
adaptada de la agresión Álvarez, (2002: 45), surge cuando no se reconoce el respeto a
la diferencia, hay abuso de poder y autoridad, se limitan los recursos para satisfacción
de las necesidades fundamentales.
Existe la posibilidad de cambio de los seres humanos, siempre y cuando se permeen
las estructuras mentales de los sujetos, a partir de modificar patrones y formas de
51
comportamiento con procesos educativos como éstos, que apunten a generar
transformaciones en los procesos de socialización en los ámbitos cotidianos de acción.
En general las estructuras familiares se ven vulneradas por las crisis normativas, del
ciclo vital que atraviesan todas las familias frente a una tendencia en la ruptura de las
interacciones familiares y una vinculación no construida sobre las relaciones de afecto
sino de utilidad, donde el grupo de familia no muestra motivación ni necesidad de
cambio frente a su condición económica y social de vida lo que las vulnera frente a las
posibilidades de generar recursos como alternativas intrafamiliares para enfrentar las
crisis.
Para el grupo de estudio de familias y jóvenes, las historias de violencia, y maltrato son
cotidianas, se enmarcan en una tradición patriarcal en conflicto con prácticas modernas
que trasgreden el artículo 42 de la Constitución de 1991, en torno a la igualdad de
derechos y deberes de la pareja, el respeto mutuo y la exclusión de formas violentas en
la interacción cotidiana que alteren la armonía y unidad; comprende algunos patrones
de crianza típicos en las familias de estudio guiados por la génesis de familias
patriarcales en las cuales se aceptan maltratos y violencias contra esposa, hijos los
cuales eran completamente anulados frente sus derechos.
En los casos particulares de la población sujeto de estudio, los patrones de crianza son
ejercidos por abuelos paternos o maternos, debido al incumplimiento de deberes de
sus progenitores por falta de tiempo, o simplemente de responsabilidad; se nota el
incumplimiento de deberes paterno-materno-filiales, como irrespeto, desconfianza,
control excesivo, permisividad, maltrato físico, alcoholismo, embarazos, abortos y
drogadicción, en sí, características que conlleva a un modelo negativo de imitación
para el joven.
52
La vida familiar, se va sintetizando en una estructura donde leemos el cúmulo de
valores y sistema de creencias, normas y reglas, manejo de límites y roles compartidos,
como ya se indicó, esta estructura que es la que se va modelando en el ciclo vital y da
identidad a la familia, para perdurar y transformarse en el tiempo a través de la vivencia
con el otro, va perfilando estilos de socialización autoritarios o democráticos.
La madre por ejemplo trasmite las normas culturales que ella misma recibió en su
socialización primaria, refractadas por su apropiación biográfica, es decir no canalizada
en dirección al crecimiento y a la adaptabilidad del sistema, lleva a una fractura de la
socialización, tanto primaria, como secundaria Berger y Luckman (1986: 85), reflejada
en frustraciones, dificultades para la adaptación, trasformación de valores
(desfiguración), prácticas cotidianas irracionales orientadas por la violencia de diferente
tipo, cicatrices neuróticas, débil estructura de la personalidad y ruptura de las
interacciones familiares por la adopción de patrones y la convivencia.
El afecto o vínculo afectivo, en la familia aparece como un revestimiento emocional
que hace relación al conjunto de vivencias y sentimientos, susceptibles de ser
registrados y evocados a través de las relaciones básicas de amor, odio, y
conocimiento, lo que puede generar conflicto o confianza; permite su expresión en la
posibilidad de construir lazos o uniones de cariño, comprensión, tolerancia, aceptación,
empatía, apoyo, comunicación, que se da principalmente entre las relaciones que
establecen los padres o abuelos cuidadores con sus hijos o nietos que defienden la
conducta social, con una alta carga cultural, que es aprendida en los procesos de
socialización donde se posibilitan o inhiben los procesos de desarrollo humano.
Erickson (2000: 20)
53
Este sistema de vínculos se dimensiona desde un legado de interacciones de padres o
abuelos creándose imposiciones en la dinámica de familiar, éstas dimensiones definen
la personalidad de los integrantes de la familia, en especial de los hijos, quienes se van
desarrollando a través de los patrones de crianza en su ciclo vital, aspectos yoicos,
cognoscitivos y asociativos que le van a ayudar a desempeñarse de una manera
significativa o no, con su propio sistema, el sistema familiar, el sistema social y el
sistema cultural Hernandez, (1997: 45). Este testimonio ofrece información de esto,
veamos:
“En mi casa todos somos por de aparte, pues que yo me acuerdo, que mi abuela es la
única que me daba besos cuando llegaba después de perderme por varios días en la calle
o cuando viajaba hacer vueltas y así… pero pues porque llegaba con lo mío y re-luquiao
[con dinero], ahí la cuchita era todo rai [buen genio] con migo”. (Sebastián)
Es entonces, donde las manifestaciones afectivas dirigidas por la abuela, aparecen de
modo utilitarista cuando el dinero aliviana las condiciones y sustento básico para la
casa. Aquí otro testimonio:
“Mi mamá siempre me ha dejado hacer lo que yo quiera y pues cuando yo se que tiene
plata me da que pa los dulces si me entiende ella conoce desde hace rato que yo meto
vicio y así y todo me da plata”. (Andrés)
La poca exigencia en las normas y responsabilidades, el escaso tiempo que dedica a
su hijo son compensados con cantidades de dinero para aliviar tensiones o conflictos
vividos con el hijo.
54
Ahora que estoy aquí [institución]es que mi mamá viene y me trae dulces y cosas, porque
antes ni existía en la casa, ella siempre dice que ella me sentenció que caería en un lugar
así, pero que nunca le paré bolas, vamos a ver si eso es verdad porque ella nunca me
había abrazado… de pronto en los 31 cuando hay farra [fiesta] por la casa, ósea con los
manes que si tienen, a veces nos dábamos el feliz año y así pero de resto como dos
desconocidos. (Pimi)
Las manifestaciones afectivas encontradas en los casos de estudio se reconocen a
partir de caricias y besos eventuales, como en fechas especiales que indiquen
emocionalidad o eventos traumáticos como pérdidas de familiares; en general no se
identifican muestras afectivas cotidianas, de estímulos, aprobaciones positivas,
caricias, comunicación asertiva, juegos, en sí, diálogos afectivos que permitan la
lectura de un lenguaje armónico y familiar que posibilite corregir a tiempo diferentes
conductas inadecuadas que el adolescente presenta durante su proceso de
socialización al medio.
Los Jóvenes entrevistados demuestran poco interés por este tema debido al número de
maltratos físicos y emocionales que se vivieron en la infancia, prefieren no recordar
episodios de dolor o frustración, regularmente sus muestras de afecto y cariño son
representadas en su pareja, o novias o parche, pues allí se concentra toda la
emocionalidad e interés de abrazar, besar, acariciar, el contacto físico que en la familia
no se evidenció. Las abuelas son mediadoras de crisis pues en ocasiones permiten
diálogos y pocas muestras afectivas a partir de un interés económico o prestigio en el
barrio, las madres cumplen en varios casos una identidad autoritaria que simboliza el
castigo físico cuando algo sale mal.
El padre en muchos casos no aparece como figura afectiva, refleja inmadurez al no
corresponder con valores al hogar, su rol allí, es en ocasiones, sólo el que aporta
dinero para la compra de alimentos, ofreciendo una identidad negativa desde el modelo
de consumo de SPA y práctica de ilícitos. Muestra de ello es lo que se plantea en la
entrevista:
55
“Mi papá es un tipo al que yo solamente lo tengo pa el billete [relación utilitarista],
pues ese man [padre] y yo no tenemos nada que ver, me entiende… siempre me
amenaza que si yo lo veo fumando entonces lo casco [agresión física] pero que,
ese man es mas torcido [mentiroso] que yo. Pues también mete [consume drogas]
entonces de que habla… (Rojas)
Existe un manejo inadecuado del rol de padre debido a los comportamientos
ambivalentes y confusos frente al hijo, la desconfianza que el padre le genera al
adolescente provoca sentimientos negativos de inseguridad ante un futuro imprevisible
Alfred: (1999:144), ahora bien, un buen ambiente familiar, su práctica activa de valores
y afecto promueven los factores protectivos necesarios para incentivar el interés en el
adolescente y evitar el abuso de drogas, de cualquier modo la prevención de la
delincuencia, guarda relación con la responsabilidad de los padres con respecto a los
hijos.
Esta sobrecarga de responsabilidad de la familia en la prevención de la delincuencia,
conlleva en sentido extremo, a una conceptualización de la familia como una institución
dotada naturalmente de ciertos valores, la educación en padres de familia sería un
primer paso para prevenir la delincuencia Castell y Thomas (2000: 28).
Otro factor que conlleva a un análisis próximo de la delincuencia en los adolescentes
se enfatiza en las condiciones sociales en las cuales viven sus familias, referidas en el
grupo de estudio que forman parte del actual sistema social y económico capitalista,
quienes sostienen, que algunas de esas condiciones son la excesiva competitividad y
falta de oportunidades que genera este sistema, la expulsión de masas importantes de
personas, desde la economía formal a la informal (con lo que ello implica en términos
de menor seguridad e ingreso) Bateson (1985: 19), la necesidad de que sea necesario
un número menor de integrantes de una familia para mantener el hogar, las
transformaciones en los roles tradicionales de género, por nombrar algunos factores
sociales.
56
El modo diferenciado en que estas condiciones afectan a las personas –afectando
principalmente a aquellas de sectores de pobreza, pues llevan la desventaja en el
capital social necesario para ingresar exitosamente al sistema- se transforma en la
principal explicación del problema de la delincuencia, transformando a la institución
familiar en variable explicativa de alcance menor -tanto de la prevención como de la
propensión a la delincuencia- más como organización económica y reproductora de
ciertos estereotipos de rol que desde un punto de vista esencialista(Musitu 2000: 50).
La familia es una experiencia que no obedece a ningún canon normativo, sino que está
constituida en los afectos Lewis, (1977:17), por esta razón, la convivencia, la
uniparentalidad o la baja escolarización de los padres, no son sinónimos de ninguna
discapacidad moral, ni excusa para hacer frente a la delincuencia o consumo de drogas
de los hijos.
No obstante, en los relatos y convivencias con familias de los jóvenes se observan que
existen influencias de peso ante el fenómeno como:
Las separaciones de los padres
Crecer sin tener a ambos padres en casa
La violencia doméstica
Conflictos de toda índole entre padres e hijos
Trabajos de los padres pocos remunerados
Inicio de trabajo informales por parte de los adolescentes
Es de esperar que la diversidad de las realidades familiares pueda contribuir a poner en
el espacio público un discurso alternativo sobre la familia, de acuerdo al análisis de las
encuestas efectuadas en los 50 jóvenes sujeto de estudio, acerca de distinguir las
preferencias para compartir su mayoría del tiempo, se encontró que: el 80% de los
jóvenes usan espacios de socialización con los amigos, como (las ollas, casas de otros
amigos, los parques, esquinas), que tiene relación con su grupo de pares donde se
57
tejen sociabilidades y afectos en ocasiones con fuertes emocionalidades, y un 20%
comparte con miembros de la familia como primos, tíos, abuelas, madres. Esto se
muestra en los siguientes fragmentos de entrevista:
“…Lo que pasa es que es más fácil para nosotros querer estar con amigos de los buenos
y de los malos aunque nos inclinamos mas por los malos porque hay más emoción y
adrenalina para hacer las cosas, y a la final a uno se le pasa el día haciendo vueltas y
gastando plata, nadie le dice a uno que mire haga esto o aquello no nada simplemente
después llega usted a su casa como si nada… (fressa)
“Me da mucha pereza quedarme en la casa solo como una gueva, los parces van como a
las 10 de la mañana y pues comemos algo y salimos al primer plon del día sí. Luego nos
quedamos todo el rato en el parque o por ahí mirando que hay pa hacer, quien da el pago
[a quien robar]. Ajustamos pa el salchi y pan, como al medio día, al rato pues, pal
segundo o tercer viaje y si, todo el día vagando pero eso sí; sin que nadie le alegue a uno
por bobadas de normas y eso. Usted me entiende… cuando llego a la casa normal sigo
derecho como si nada y a veces esta la cucha ahí o mi hermanita y si no, pues me quedo
un rato, veo televisión o me baño y salgo hasta el otro día o si no, llego bien tarde y así...
depende”. (Pulga)
La preferencia de participar de espacios de consumo fuera de la casa y en compañía
de amigos, es notoria en el grupo de estudio, pues allí, no se exploran desigualdades,
ni llamados de atención a la norma, dado que la aprobación de su grupo de pares es
total, siendo de ganancia y confiabilidad para la estructuración y consolidación del
grupo la cantidad de tiempo que se permanezca unidos, las situaciones que asuman y
el número de ilícitos satisfactorios que se realicen en el día.
Llama la atención el desinterés y desapego de los padres de familia ante la elección de
sus hijos, al concebir la casa como un espacio físico sin afectos, sin cualidad de
responsabilidad, y sin vínculos de relaciones interpersonales, en algunos casos, estas
58
figuras de familia son permisivas y toleran su manejo inusual de horarios, sin
normatividad ni control en sus responsabilidades dentro de la casa.
El fomento de hábitos de vagancia también está acompañado de los extensos horarios
que el joven pasa al frente del televisor, como medio eficaz para disfrazar algunas
necesidades afectivas como: soledad, angustia, depresión, el deseo de comunicar
sentimientos, compartir un tema que genere aprendizaje, entre otros, sin embargo, la
televisión es una forma de entretenimiento favorable para el adolescente, pues
encuentra allí como estar actualizado de los últimos videos musicales, moda o
simplemente, conocer nuevos estilos de vida de sus artistas favoritos, igualmente el
internet posibilita este acceso y tipo de conocimiento que genera encuentros habituales
entre los jóvenes, olvidando otras responsabilidades en la casa o escuela.
Dentro de las actividades más frecuentes que se realizan frente al televisor inicialmente
es comer, y al pasar la mayor parte del día cuando no se tiene un control en el tiempo
de ocio, también se practica consumo de SPA con varios amigos, según informe del
diario El Tiempo del 25 de Abril de 2008: tanto adolescentes como adultos pasan más
de 4 horas frente a la pantalla, especialmente en horas de las comidas para ocuparse
en algo mientras se come… así gran parte de la noche los padres de familia
aprovechan el espacio de televisión mientras sus hijos visitan la calle, o un grupo de
amigos; lo cierto es que padres e hijos no comparten los mismos programas, pues no
solo da cuenta en la familia de su poca comunicación sino que además es motivo de
discordias entre hermanos o demás familiares en muchas ocasiones.
Por lo anterior, muchos adolescentes eligen espacios de internet que genere otro tipo
de estimulo y expectativa visual, según otro reporte del diario El Tiempo el 12 de marzo
59
de 2009: la relación de los jóvenes colombianos con sus padres parece cada vez más
distante.
Una encuesta realizada por la organización One Hope, con el apoyo del ministerio de
Educación, da cuenta de que el 70% de los muchachos consultados, no pasan más de
una hora a la semana con sus padres, es decir, muchos de estos jóvenes ya no
tomarán a los adultos como orientadores, pues la cantidad de información y las
opciones a las que tienen acceso a través de los medios de comunicación, les orientará
en sus decisiones y gustos, por lo tanto su necesidad afectiva será desplazada a una
fuerte influencia por factores externos que si bien contienen información valiosa deben
estar orientados.
La falta de tiempo de los padres, libera al joven para recibir todo tipo de información y
generarse muchos pensamientos, que en muchos casos evocan depresiones o
comportamientos inadecuados, por lo tanto debe retomarse la autoridad, y modelos
educativos apropiados orientados por los padres, que permitan en el joven un
aprendizaje responsable de los medios de comunicación, veamos:
“Mi cucha sabe que yo meto [consumo de SPA] de todo eso, cuando vengo a la casa
después de varios días de dale al chorro[aguardiente] y la mariguana, cuando me la pilla
[encuentra] en los pantalones o por ahí, o me pilla las pipas o los cueros [elemento para la
fabricación del tabaco de mariguana] bueno cualquier esquirla [poca cantidad] que me
delate, pero es fresca y relajada no me dice nada al contrario le doy motivos pa que hable
de mi con las viejas del barrio, pues siempre dice que yo si soy independiente y hago mi
vida solo, ella dice mientras usted no me chimbié [generar conflicto] pa nada, haga lo que
quiera y si le sobra trae.. Ja, ja, ja… ¡Uff! es toda eqis [fuera de lo normal] mi cucha yo por
eso la dejo sana [estar tranquila]… (Paisa).
60
La comunicación ejercida por la madre hacia el hijo se construye a partir de
enmascarar una realidad de consumo de SPA, y crear una independencia falsa en el
joven con sus comportamientos, con un modelo permisivo y aprobatorio de la madre.
Para Satir, (1995: 58) existen dos sistemas familiares que permitirán identificar
sistemas flexibles, normas claras, comunicación asertiva y principio de realidad como
es el caso del sistema abierto, que contrario al cerrado sus funciones son
condicionantes, las normas familiares son anticuadas y enmascaran una realidad
caótica.
Estos estilos están, a su vez, asociados al tamaño de la familia, las relaciones de
distanciamiento o acercamiento, el manejo de la disciplina y las privaciones afectivas o
la construcción de vínculos afectivos seguros, en las relaciones inter e intra-familiar se
establecen grandes diferencias de acuerdo al manejo de emociones, conflictos y su
vinculación afectivo- social.
Se encuentra que la violencia como agresión física, verbal y psicológica, es el producto
de las tensiones acumuladas y de las prácticas tradicionales que están demarcadas por
estilos de socialización autoritarios en una cultura arraigada en patrones machistas, es
por ello que la violencia se inserta en la dinámica de las relaciones familiares,
generando situaciones y procesos confusos, franssen (1994:56).
2.4 Diferentes expresiones del modelo conflictivo en el entorno social del
adolescente
61
Los modelos conflictivos vivenciados en el hogar y aprendidos por el adolescente a
partir de las rupturas conyugales, relaciones desiguales, maltrato, prácticas de hurto y
consumo de SPA, proyectan una pérdida de la función primaria de la familia, en
síntesis, un cambio del valor de la familia, donde confluyen lógicas diferentes y
contradictorias que agudizan la crisis, privilegiándose una existencia de la
sobrevivencia y no de la con-vivencia armónica como proyecto humano Papalia (2005:
39).
2.5 Influencia de familiares en el consumo de sustancias psicoactivas
Grafico numero dos: Antecedentes familiares en el consumo de sustancias
psicoactivas
62
Esta encuesta fue aplicada al grupo de estudio de 50 jóvenes residentes de la
Ciudadela los Zagales, notando que; el consumo de spa, se inicia desde patrones
imitativos por los padres con un 30%, generando un alto riesgo para condicionar el uso,
o vinculo de las drogas con la vida y desarrollo psicosocial del adolescente, sus tíos y
primos con un 30% que igualmente conforman su espacio y hábitat familiar, se
constituyen en sucesores de sus padres para buscar la aprobación del consumo de
SPA perpetuado, y un 10% un consumo de imitación por los hermanos siendo eventual
el consumo de SPA.
A través del proceso de acercamiento y comprensión del joven y su familia, se
evidenciaron multiplicidad de fenómenos de riesgo frente al consumo, como su estado
de pobreza, patrones de uso de las SPA por los padres como el licor, cigarrillo y
marihuana, que son prototipos para sus hijos, y tomados como iniciativa a un camino
de experiencia con alguna droga y más adelante en ascenso con otras drogas
estimulantes como el bazuco, pepas o inhaladores.
Las condiciones internas de hábitos y dinámica familiar pueden enmarcarse en roles
difusos, como: autoritarismo de los padres, figuras de poder contradictorias, en
ocasiones ejercidas por la abuela, la madre, el hermano mayor o alguna vecina,
además, se encontraron como fundamento al consumo de SPA y demás actividades
ilícitas, la separación de los padres, que se agudiza cuando el adolescente no es
orientado hacia que rol cumplir y cuáles son las condiciones o lineamientos que la
familia empezará a asumir, es decir, el adolescente es un sujeto invisible durante y
después de la separación de los padres.
63
Los comportamientos ambivalentes de los padres, y el deterioro de su relación como
pareja hacen que el adolescente tome en muchos casos actitudes de rebeldía, de
escape frente al problema de divorcio de sus padres, como se observa a continuación:
“Ni mi padre, ni ella se entienden, dicen todo el tiempo cosas, pero ya a ninguno le creo, yo
sé que mi papá mete [consume droga] Bazuco entonces con qué derecho me exige cosas,
mi madre siempre ha sido mantenida entonces yo no sé con quién vivir, por eso voy donde
el cholo [jibaro del barrio] y se me olvida esta clase de problemas”. (fressa)
Nótese que el joven, prefiere a su grupo de pares, como un espacio de evasión y
desahogo en la olla, debido al conflicto de separación de sus padres, sin embargo los
resentimientos están encausados hacia los comportamientos ambivalentes de sus
padres, reconocer que no poseen la autoridad moral para exigir un comportamiento
distinguible por parte del joven y que el patrón de consumo por parte del padre es
evidente, el cual es aprendido por el joven más adelante.
“Yo he estado bajo la crianza de mi papá el trabaja en una buena empresa y vive con otra
señora ahí, yo permanezco mas donde mi abuela créalas ella si es una mamá de verdad.
Cuando mi papá y ella se separaron pues yo también llevé del bulto [pasar dificultades]
porque me sacaron del colegio y después que tenía que vivir un tiempo con ella y otro con
mi papá y pues…
Finalmente me mamé de eso y de sacarle plata a los dos sin necesidad, entonces pues
hable con mi abuela y me recibió en la casa y pues así, así era más fácil todo, me entiende,
portarme mal, dejar de ir al colegio y pedirle plata a mi papá más fácil, ya empecé a
desaparecerme por días y así fui cogiendo canchita [experiencia] y eso…” (Camión)
Los modelos de conflictos evidenciados en este caso, se muestran a partir de la
separación de los padres, lo cual generó inestabilidad emocional en el joven al sustituir
64
su hogar de origen con sus progenitores por cuidados de la abuela, implicó además, un
cambio de colegio, amigos y en general una nueva adaptación, la abuela realiza el
papel de madre con poca exigencia en sus responsabilidades, siendo permisiva y
perdiendo el control de conductas inadapatativas y manejo exagerado de dinero.
“Mi papá maneja taxi ahí a veces hacemos vueltas [actividades ilícitas], el cucho es bien
con migo [cumple lo que dice], pero ya no vive en la casa, vive con otra vieja. (El Mono)
“Mi madrecita pues ella me ha acompañado en todas estas ratoneras [centro de
rehabilitación] que vengo más de una institución desde chino he sido el putas dice ella.
Ellos no se hablan porque mi mamá le ha pegado en la calle, porque a veces no nos daba
ni pa la comida, prefería gastársela en trago y viejas, mi mamá si fuma y mucho! no le ve
esos dientes…ja,ja,ja!, pero nada… mi pa también se que fuma vareta en la noche pa no
dormirse y perico cuando toma trago porque eso si, tiene, trabaja como un burro, no le
gusta dejarle el carro a mi hermano porque se lo acaba, entonces yo estoy todavía muy
chino [pequeño] a veces en las vueltas que hemos hecho si lo manejo pero siempre era yo
quien daba la cara pa eso, me entiende ...”(Steven)
Steven, es un joven de trece años que ha evidenciado episodios de peleas y conflictos
con sus padres, eventos que le han generado comportamientos agresivos con el grupo
de pares en varias ocasiones, su consumo igualmente fue adquirido por imitación de su
hermano mayor y padre, quien le enseña a estiven un mundo lleno de lujos, mujeres
bonitas y dinero fácil. Siendo un joven vulnerable se adapta a un estilo de vida en alto
riesgo acompañando a su padre a las actividades ilícitas que planeaban como robar en
los parqueaderos y prender su tabaco de marihuana.
“En la casa mando yo, pues mi cucha [madre] trabaja, yo le creo, lo importante es que traiga
comida a veces…
65
Yo no conocí a ese man que es el papá de uno, con mi cucha yo me entiendo siempre, los fines de
semana ella prefiere que meta [consumo] vicio en la casa porque así no corro peligro que me
maten, dice ella, cuando ella viene y me encuentra amurao [efectos del bazuco] o llevao pues,
nada; se relaja y sale, pues sabe que a veces me pongo agresivo y le doy… ella se aguanta
porque tiene muchas cosas de que arrepentirse sobre todo cuando yo era chinga [niño], ese man
que tuvo como marido me daba cada rato, como a rata [muy duro] me entiende y ella nunca me
defendía… es duro ver que ya la cucha no lo quiere a uno y prefiere cualquier marica de la calle.
Entonces yo creo que mi refugio es el vicio, eso quedo de sus llegadas tarde, y era lo que veía
desde la sala cada rato cuando esos manes se comían a mamá en frente…yo por eso casi no
hablo de esto porque a veces me aburro de mi vida de chiquito otras veces pues a la final me tocó
esto y tolis lo que fue, fué…” (Largo)
Este caso relata los usos cotidianos de SPA a partir de la necesidad de suplir la
ausencia de la Figura paterna y la figura afectiva que su madre nunca represento, ella
no le establece límites y control frente a su consumo, es una madre permisiva, dejando
a su hijo un consumo libre y sin restricciones dentro de la casa, demostrando, temor, y
generando mayores inseguridades en el joven.
Uno de los impactos que ha generado la droga en el joven, es su constante agresión
frente a la madre, quien durante sus efectos, recuerda episodios traumáticos de la
niñez como actos de violencia ocasionados por parejas de su madre, esto lleva a evadir
muchos de estos sentimientos a través del consumo de SPA.
“No… pues un día normal en la casa, yo a veces me levanto tarde a las doce de la mañana
y así, nosotros vivimos con la abuela ella siempre dice que es lo que hay que hacer, si, que
mire vago usted no sirve para nada, ni trabaja ni nada, ni cosa ni la otra, entonces, pues así
cualquiera se levanta y se abre pa’ cualquier lado no importa, casi siempre caigo donde el
viejo a chupar pegante, pa’ animar el día, después lo que haya que hacer, me conecto con
los manes del parche y ya nos vamos pa’la galería o pal parque hasta las 3 o 4 de la tarde,
luego voy y me baño y me pongo la pinta, eso cuando estoy de buen ánimo porque a veces
no me provoca nada y me quedo en el roto [sitio de expendio] todo el día metiendo no más.
66
A veces hablo con mi hermano, pero es que no me gusta porque me rayan [estar señalado]
mucho y después se meten con el chino pa’ dáñalo [ocasionarle lesiones] y eso, entonces
pues no me gusta si me entiende es mejor de lejos, además pues hay que dejalo que el
mansito haga lo que quiera y eso…” (Cesar)
Las situaciones conflictivas vividas en la casa como “alegatos” constantes, conllevan al
joven a la toma de decisiones como evadir el espacio y frecuentar sus grupo de pares,
quienes sin normas ni condicionamientos le generan confianza, y apoyo al joven, en
otros casos elige frecuentar el sitio de expendio como refugio a problemas o
simplemente como desgaste del tiempo.
Estos modelos conflictivos como los comportamientos ambivalentes de los padres
como figuras de autoridad, alegatos y agresiones constantes desencadenan en el
entorno social del adolescente eventos perturbadores como un manejo inadecuado del
poder, intolerancia con pareja como en las relaciones padres-hijos y hermanos.
El joven, se observa con incapacidad de aceptar al otro, por tal razón, la violencia es el
camino para acallar el conflicto como defensa a la trasgresión de las prescripciones y
prohibiciones sociales, la violencia se legitima y legaliza como argumento de la
violación de una norma asimilada subjetivamente por el sujeto que recurre a ella como
garantía del mantenimiento de su poder.
Las diferentes expresiones del conflicto se ubican en un conjunto de consecuencias
que afectan el libre desarrollo del adolescente en su entorno social, creándole mayores
dependencias, predominio de trastornos de comunicación, de aprendizaje, de
habilidades motoras y déficit de atención orientados a modos de vida insatisfechos y
alternativas de escape como el consumo de SPA y práctica de actividades ilicitas.
67
2.5.1 Antecedentes delictivos y consumo de sustancias psicoactivas en la familia
En algunos casos de jóvenes sujeto de estudio, se iniciaron en hurtos contra la familia
con artículos de poco valor económico, proyectando hábitos de cleptomanía, tienden a
preferir objetos de la madre o abuela por su vulnerabilidad y afecto que el adolescente
manifiesta, seguidamente a hermanos, y demás parientes por resentimientos o
situaciones di-sociales presentadas en algún momento. Según encuestas aplicadas al
grupo de estudio de los 50 jóvenes institucionalizados se encontraron las siguientes
preferencias de robo en el adolescente:
Grafica numero tres: Preferencias del robo en el adolescente
El robo hacia la familia en un 46%
muy similar al robo a desconocidos
en un 44%, según los relatos, para
evitar rayarse [ser identificado] con la familia, pues más adelante se corre el riesgo de
perder su permanencia en la casa, además se presentan peleas entre familiares lo que
conduce al conflicto y más adelante al robo por resentimiento o venganza. En menor
grado un 10% a vecinos cercanos, pues se desea evitar ser identificados por los padres
de familia o líder del barrio y evitar amenazas.
Algunos Relatos que describen los primeros usos de SPA y preferencia de robo, artículos
de mayor gusto y modalidades aprendidas en la familia se muestran a continuación:
68
“ El viejo era el tío, el que siempre tomé como papá, pues a el otro, nunca lo conocí, yo
cuando robaba, el cucho siempre se daba cuenta pues a veces iban a buscarme al taller de
él o así en la casa, o me esperaban pa hacer vueltas [actividades licitas] y eso, después de
un tiempo yo no quise seguir en la casa me fui a vivir a una de las residencias de la 17, y
ahí con una china [compañera] me iba bien, eso si la china era fiel, y yo la quería entonces
pues cuando me quedaba de las vuelta y la farra [fiesta] le llevaba algo al cucho, alguna
cosa, eso si, a la vieja [madre] le llevaba lo del diario porque mi tío era tremendo tomador y
chirrete [consume droga] entonces la cucha pasaba hambre, o si no, iba donde una vecina
y si.. A veces me desaparecía del todo, no iba por meses porque me buscaban pa darme
en la cabeza [matar] entonces los despistaba y así…” (Jefferson)
Este tipo de conducta crece con la ausencia de límites y valores al interior del núcleo
familiar, el adolescente se impone sobre otros individuos así como lo fueron en su
crianza, atropellado y con figuras impositivas por familiares o sus padres.
Por otro lado, las experiencias difíciles del pasado, se convierte en un patrón de
comportamiento persistente y repetitivo, en el que se violan los derechos básicos de los
otros o importantes normas sociales, su comportamiento es agresivo, causa daño físico
o amenaza con él a otras personas, causa pérdidas o daños a la propiedad como
fraudes o robos y violaciones graves de las normas de comportamiento, suele
presentarse en distintos contextos como el hogar, la escuela o la comunidad, debido a
que tienden a minimizar sus problemas comportamentales, veamos el testimonio:
“Yo inicié robándole a mi mamá porque no mantenía en la casa, salía a trabajar y yo
quedaba solo con mi hermana, le robaba plata, aretes o anillos para comprarme
marihuana, pues como era poquito lo que yo primero metía [consumo] entonces mi
mamá no se daba cuenta, ya después sí, porque le aparecía menos plata y empezó a
darse cuenta de lo que le hacía falta.
Mi hermanita nunca dijo nada por miedo, yo la chantajeaba con cosas para la escuela,
es muy chiquita de siete años y no conocía lo que yo hacía.
69
Yo le robaba cosas de la casa como la licuadora y la herramienta del tío, también
feriaba [vender] mis cosas como los busos de marca y zapatos, luego el nintendo, el
wolman y casi todo, pues eran más veces las que mantenía en la calle que estudiando
o en la casa cuidando a mi hermanita. También fui aprendiendo a robar con amigos en
la calle, en las casas del barrio y las tiendas primero ya después a las personas como a
las mujeres que son más fáciles de robar…” (Piñacué)
Como referente principal aparece el sentimiento de soledad y desamparo,
experimentado por el adolescente a raíz de falta de compañía, de expresión de
sentimientos provocó mayores sentimientos de angustia y desesperanza frente al
manejo de sus emociones, no comparte con sus padres situaciones cotidianas de
amenazas y afectos, lo cual condujo al adolescente a construir espacios de escape
frente al dominio de sus emociones como sentirse en compañía y bajo el amparo de un
grupo de pares. Según relato de un joven infractor de la calle cuenta:
“Mi madre desde muy chino[pequeño] me puso a campaniarle [vigilar] las vueltas
[actividad] de vicio sobre todo porque cuando uno es chinga [menor de 12 años] es más
fácil volarse y dar aviso también, además con mis otros hermanitos, la misma vuelta de
llevarlo en un coche de bebes cargados de vicio, o latas [armas corto punzantes] para
algún lado ¡si entiende!, porque como casi no nos requisan la policía, además mi mamá
es pinta [bonita] y pasa como si nada.
También otras veces yo iba y les compraba el vicio a todos mis tíos, papá y así manes
que daban la liga pa yo ir teniendo lo mío [dinero], siempre me ganaba en el día como
$10.000 pesos de los mandados, yo era el carrito [el de los mandados] de todos ellos
hasta que ya fui creciendo y pedía mas entonces se fueron mamando [quitar del
negocio] además yo en el camino me armaba uno que otro vareto y como llegaba
pisquiao [con olor de mariguana] se la pillaban [darse cuenta] ahí mismo, entonces me
fui mamando yo también de eso …”(Darío)
Veamos otro relato:
“Siempre en la casa el ejemplo de mi mama era pasar los sábados en el bar de la
esquina, no… en mi casa nadie decía nada todos o mejor cada uno por un lado
diferente, mi tío un perro[insulto] era como un papa pero con el aprendí todo lo de la
70
calle, a fumar marihuana y cuando tenía hambre a pegarme de una bolsa de pega,
pues con eso uno se siente diferente como en otro planeta si me entiende, después de
la presión en la cabeza y sentirla muy caliente uno se siente tranquilo, como nuevo, con
ideas raras, mi hermanita menor también está metiendo mucho pues mi mama no la
cuida y yo, no la cuido tampoco. Así fue toda mi niñez en otro planeta, tuve que comer
mucha mierda, por eso a veces pienso que esta vida no vale nada… también lo del
robo que aprendí a robarle a mis tías, a la vieja y a mi hermana menor pues era la más
bobita y se dejaba, a mi no me gusta estudiar, una boleta [desagrado] a veces me
parece que es perder el tiempo, prefiero estar con amigos y trabajar de vez en cuando
pal vicio o para ir al estadio porque allá si es mas vacano con todos esos manes
[amigo], además mi novia también es de esas… (John Alex)
Este caso refiere un modelo de crianza con eventos traumáticos ocasionados por la
madre como su principal referente afectivo, que incluye un abandono afectivo y
despreocupado por la situación física y emocional de la familia, un abuso
indiscriminado de alcohol hasta colmar las expectativas de los efectos en su estado de
ánimo y comportamiento, este factor de tensión acumulada en los hijos y en especial
en el adolescente, genera un patrón de conducta desordenado que estimula una
búsqueda de placer como el consumo de SPA, aunque se oculten sentimientos como
melancolía, aburrimiento e impotencia por la situación que habitualmente vivencia.
Veamos lo que nos narra Daniel:
“ Siempre nos hemos vandiao con lo del vicio, yo también meto bazuco y eso si deja plata, antes lo
manejaba un tío, mi mamá, pues ella lavaba ropa de ricos y eso a mí no me gustaba, entonces con el
tío desde chiquito aprendí lo del negocio y por eso tengo muchas liebres [enemigos] que no pagan,
hay veces que toca untarse [cometer homicidio] y hacer cosas de esas porque es el dinero, hay que
responder, o si no mi tío me manda a quebrar [estar muerto], entonces toca salirle adelante a los
codos [personas que no pagan sus deudas].
Lo del robo lo aprendí viendo al esposo de mi cucha [madre del joven] un jalador [hurtados de motos
y carros] de primera, nada le quedaba grande, el man no me gusta pero igual me lo aguantaba hasta
que empecé a trabajar en lo mío si me entiende en esto…”(Daniel)
71
De acuerdo al testimonio anterior, la naturaleza del robo está marcada por los patrones
o modelos negativos que desde la familia el niño empieza a evidenciar; su contexto le
obliga a adquirir habilidades físicas y mentales para buscar lo que desea; pues en la
familia no existe normatividad que controle los excesos cometidos por el adolescente,
la autoridad apenas visible que no ejerce ningún seguimiento oportuno a las conductas
del adolescente.
Los artículos que roban, significan pequeñas cantidades de dinero para satisfacer el
consumo de sí mismo y en otros casos el de sus amigos; cabe anotar, que se inicia
hurtando a la familia como medidor de controles emocionales y sensaciones que se
tejen alrededor del hurto como: el temor, ansiedad y pánico, además, para tomar mayor
experiencia y seguridad como iniciativa en los demás hurtos que serán realizados en
grupo “coger práctica” es decir, el hurto al igual que el consumo de SPA en el grupo de
estudio, va en ascenso, se inicia en la familia en estos casos para después efectuarse
en la calle bajo circunstancias de mayor riesgo, como lo muestra los siguientes
fragmentos:
“Mi hermano y yo éramos una lacras [de comportamiento negativo] siempre le hemos
robado a la cucha y ella sana, además la abuela y tías son medio escamosas [informan
a la policía] y hay que dejarlas quietas pero a la final no falta quien dé el pago [tener
facilidad de hurto]. Siempre que robo, son cosas finas, las de oroo airpol cosas de esas
que las paguen bien…” (Caballo).
“Mi vieja se quedó ciega muy joven como de 20 años por un problema ahí… entonces
nos quedamos mal, mi hermano es severo[demasiado] chirrete [consumidor] y yo
pues… también, meto de todo yo aprendí a robar en la calle con amigos mirando
primero de campanero para pasar los miedos uff... Todo paniquiao [asustado] las
primeras veces ya después con un vareto encima lo que fuera hasta cuchillo y leña
[disparos] damos, somos varios los del combo pero igual cuando toca solo es poco lo
que robo ya con lo parces si es bueno se ve el billete…” (Negro)
72
La ausencia de los progenitores es sustituida en la mayoría de los casos, por los
abuelos, o cuidadores temporales que ofrecen igualmente maltratos dejando en la
memoria del adolescente cicatrices de violencia; esto forma un carácter vengativo en el
adolescente, por lo tanto toma decisiones de involucrarse en consumo de drogas y
prácticas delictivas, como muestra a su valentía y poder para manejarse solo, con
independencia de sus cuidadores.
El consumo de marihuana aparece para atenuar la sensación de temor, inseguridad,
soledad para sus actividades ilícitas en su cotidianidad, acelerando otros consumos de
drogas como pegante, bazuco. Fragmento:
Siempre desde muy chino [pequeño] mi vieja [madre] fuma cigarrillo era lo que yo creía ya
después uno grande se da cuenta que era mariguana y hasta más cosas como el bazuco
pues ella lo hace adentro de la casa con sus amigas y manes [amigos] que le dan el
sustento pero siempre lo ha hecho, aunque a veces me lo niegue.
Desilusión, desesperanza y cólera son los sentimientos que limitan al adolescente para
hacer frente a sus decisiones y realidad familiar, en este caso sentir que su madre le
miente a pesar de conocer su verdadera condición de adicción el joven se torna hostil
frente al engaño e inseguro en sus comportamientos frente a la madre. El chiqui
comparte su experiencia:
“Yo siempre he sido de la calle de niño tuve una tía ahí toda prostituta, si me daba cosas
pero se la pasaba metiendo[consumo] de todo. Yo me crie en casas de viejas hasta que ya
un man, el esposo de ella me daba plata para que le comprara el vicio, y fui aprendiendo
cosas... Cosas de esas que es mejor ni recordar en todo caso yo comí mucha mierda en la
calle y aprendí que lo que uno no haga por uno, pues nadie lo va hacer…” (Chiqui)
73
El agotamiento del recurso parental, implica como destino la calle, en los casos
anteriores se analiza una infancia cargada de eventos trascendentales negativos, que
han generado un desarrollo precario de su personalidad como adolescente, allí, se nota
una creación pobre de auto- estima: experimentando una baja capacidad de
introspección acerca de la relación entre sus pensamientos y acciones realizadas con
la droga y las emociones o circunstancias detonantes para dichos pensamientos y
abuso de drogas, es decir, en ocasiones no dimensiona las consecuencias de sus
actos, cometiendo hurto y agresiones bajo los efectos de alguna droga, se deja llevar
de la depresión y angustia de sentirse solo, auto violentándose tanto física como
verbalmente.
“Mire, mi madre fue consumidora de las ollas [sitios de expendio de drogas] mas podridas
de la galería, la 17, penicilina, la tolfa; en su época de china [juventud] lo daba [ejercer la
prostitución] barato, con tal de conseguir un porro[tabaco de mariguana] o un carrazo [pipa
de bazuco], por eso ella a mi no me dice nada, pues dice que así era ella y que se fue
regenerando de a poquitos ahora tiene 34 años me parece, y mete [consume] suave, por
eso ella es toda relajada y me deja probar de todo, ella sabe… en la buen.
Cuando está en los viajes [efectos de la droga] aprovecha y me habla mimao, y me toca la
cara y me da besos… pero cuando llega el man, pues es que mi tío, el hermano de papá,
que le da los carrazos [dosis de bazuco en pipas], me tengo que esfumar [salir] pues no le
gusta que la mire que porque la pongo de mal genio y eso, hasta agresiva se pone,
entonces pues, yo ya sé y me abro del parche [salir del lugar], a meterme lo mío ya al rato
vuelvo o al otro día como siempre…” (Diego)
La madre simboliza para el adolecente un referente afectivo fuerte, pues en ocasiones
manifiesta afecto y es flexible en las normas y pautas de crianza como muestra afectiva
e interés por el hijo.
El joven conoce los gustos de la madre y aprueba su consumo y compañía de otros
para su madre, sin permitirse expresar sentimientos de amenaza y celos, con el fin de
no generar conflicto o peleas ni alterar la rutina de consumo en la casa.
74
Diego es un adolescente con Dificultades en la toma de decisiones y cumplimiento de
metas claras, es decir, no existe un pensamiento planeado a futuro, sin metas claras y
posibles, no posee un nivel de reconocimiento de considerar que sus acciones pueden
afectar a otros, se deja llevar de amigos o adultos que le despierten seguridad y
protección fuera de su casa.
Fresa vive una situación difícil, veamos sus anécdotas:
“Yo estaba muy pelao [niño] cuando pillaba[observar] a mi papa y a mi cucha [madre]
fumando cada rato, yo pensaba que era cigarrillo, pero tenía un olor muy raro y cuando
iban a fumar se encerraban en una pieza vacía que había en el rancho, yo fui creciendo y
mi papá me mandaba donde “miguel” por el encargo; el cucho miguel siempre le mandaba
a papa una bolsita que parecía leche en polvo, me entiende, eso era guardado en bolsitas
pequeñas como donde empacan cominos, usted sabe, que uno de chino [niño] es muy
curioso y una noche como que a mi cucho se le olvido y dejo una bolsita de esas por ahí
tirada yo la cogí y se la mostré a unos chinos con los que yo andaba y desde ahí la
probamos y me quedó gustando lo dulcecito del bazuco…”
“…Uno no puede dar bomba [llamar la atención] como nos robábamos eso lo guardábamos
en la casa y el man [persona] iba y ya, con la plata, a veces la gastábamos en lujos
[artículos de marca], o para mama, pero no nada, pal el vicio primero. Mi mama sabía lo
que yo tenía y lo que no. entonces nunca le ofrecía plata para que no sospechara nada. Así
como dice el dicho lo que por agua viene por agua se va, en un momentico se va todo.
La cucha el día que le contaron, si pego el grito, pero me paniquie [asustado] todo con la
abuela, le di como 20.000 lucas [dinero], pa calmarla porque unos manes me estaban
buscando y mi abuela se puso triste y con echarme cantaleta, entendió todo y mi mama
también, pero me dolía mas lo de mi abuela” .(Fressa)
La pobre capacidad de juicio y autorregulación en el adolescente, están directamente
relacionadas con un pobre control de impulsos y una baja capacidad para acelerar el
75
estimulo, la gratificación, impidiendo todo esto, el desarrollo de las habilidades de juicio
y su ejercicio.
El caso de Wilson y su iniciativa por el hurto, nacen a partir de un conflicto familiar con
su padre, quien exigía mantener buenas notas en el colegio; Wilson no acató las
normas de la casa, tampoco aquellas recomendaciones de su padre, para Wilson su
padre no tenía la autoridad moral suficiente para exigirle, guiado por el resentimiento
hacia su padre por las agresiones físicas contra su madre y el consumo de alcohol y
perico presente en su padre, según relato del joven; son pensamientos arraigados
desde su infancia que no facilitan una comunicación asertiva con el padre ni
manifestaciones afectivas, de otro lado, su madre cumple un rol pasivo en la familia,
permitiendo agresiones físicas e insultos constantes, según la madre por evitar
abandono del padre y favorecer circunstancias económicas y crianza de su hijo. Como
se muestra a continuación:
“Un día cuando veníamos del estadio encontramos a una pareja y ellos los parces la
robaron, cada uno tenía una patecabra una chaveta [navaja], y las sacaron y se las
pusieron de frente, yo me asunte porque era la primera vez que yo veía una cosa de esas,
la muchacha y el muchacho decían que no les hicieran nada, mi máxima los atarbanió
[agredir físicamente] y ellos entregaron el reloj, las alhajas, tenían 50.000 pesos y los
repartimos entre nosotros tres, el más grande se quedó con 20.000 y nosotros de a 15.000,
el dijo que así era todo, yo me quedé callao porque era primera vez…” (Wilson)
Después de algunos días, Wilson continúa frecuentando al grupo de amigos para
hurtar, es suspendido del colegio por inasistencia, después de dos periodos
académicos es expulsado del plantel por presentar hurto y amenazas por dinero a
varios compañeros de su curso, Wilson es un joven mediado por la vanidad y el
utilitarismo hacia otros, le satisface sus encuentros con amigos adultos, tener dinero
para ser aprobado y contar sus hazañas ilícitas para impresionar en el grupo.
76
“De quieto uno a veces se pinta [señalar] mucho con la gente eso se hace pero cuando se
está bien acompañao de una puntisima [arma corto punzante], pero de escape hay que
tener buen pique [Correr] pa que no lo cojan a uno, en el centro es lo más fácil pues está
cerca a la galemba y así de una se puede perder de los tombos [policías] que si son los
más visajes [llaman la atención] siempre hay que salirles al paso”.(Wilson)
Las modalidades de los hurtos planeados, perfilan la importancia del grupo, el influjo de
uno de los ejecutores sobre los demás, así como la reacción de no pensar en las
posibles consecuencias y riesgos a la hora de la acción ilícita, cada uno con porte de
arma de fuego, para asegurar el poder y el control de la acción.
Como observaciones finales se aprecia que el consumo habitual de Spa proyecta en el
adolescente unas manifestaciones narcisistas de grandiosidad, necesidad de
admiración y reconocimiento por sus acciones en todos los contextos.
Muchos de los casos aquí expuestos demuestran que los aprendizajes en hurto y
droga, nacen a partir de patrones de imitación tejidos en la convivencia con el grupo
familiar, con vivencias caóticas y conflictivas que van construyendo una personalidad
en el joven dependiente de este tipo de tensiones, de acuerdo a esto, el adolescente no
desea alejarse del conflicto, por lo tanto busca un grupo de pares que mantenga la
línea de aprobación y vértigo hacia lo inseguro, el riesgo que implica robar e
involucrarse con las drogas de todo tipo.
En otros casos aunque esporádicos se demuestra la incidencia de sus prácticas
delictivas ejercidas a partir de un grupo de iguales que se ejercita en lo mismo, sin
embargo, el joven busca en el grupo de pares su gran búsqueda a lo prohibido, ya que
77
en su grupo de familia es ignorado, hay casos en que la droga permite la adaptación
del individuo a las tensiones interiores, y en otros, la adicción se debe a la incapacidad
del joven para enfrentar su realidad social, recurren a la droga para aliviar la ansiedad,
para lograr exaltación y evitar sensaciones de pérdida o frustración.
El consumo de drogas y la asociación delictiva con el hurto principalmente, es un
mecanismo al que recurren estos adolescentes de estudio, a fin de hacer más tolerable
su situación social desfavorable.
La práctica de actividades ilícitas permite la expresión de sentimientos y vivencias
coercitivas de aislamiento al cual está sometido desde su niñez, sin más remedio que
la rebelión y el uso de drogas para suplir las deficiencias y los vacíos de la sociedad y
la familia.
CAPITULO III
CONTEXTO SOCIAL DEL HURTO Y DEL CONSUMO DE PSICOACTIVAS EN
ADOLESCENTES INFRACTORES DE LA LEY PENAL
En el presente capitulo, se dará a conocer, en primer lugar, y de manera descriptiva los
relatos de los jóvenes sobre, sus tendencias en las prácticas delictivas y el papel de la
droga Psicoactiva en la ejecución de las actividades ilícitas. En segundo lugar, se darán
a conocer aspectos afectivos, relacionales e interacción con redes informales como su
grupo de pares, su influencia en la toma de decisiones y creación de hábitos delictivos.
En tercer lugar, plantea cómo el adolescente en “ascenso” adquiere una personalidad
delictiva que nace a partir de una desafiante búsqueda de placer y trasgresión de la
norma permanentemente, y el cual considera el ingreso a la actividad delictual como
78
aprendizaje de vida. Desde su infancia, el joven interioriza normas y valores
transmitidos por sus mayores, lo cual no se comprende por él como una conducta
desviada, sino la forma de cubrir necesidades personales.
Finalmente se trata de describir cómo a medida que el joven crece y gana experiencia
en el mundo de la calle va ingresando a lo que podemos llamar una “cultura delictiva”
en la ciudad. Se trata de mirar cómo se desarrolla un estilo de vida delictiva, que
genera la estigmatización en el resto de la sociedad por el daño que le causan. Lo cual
conlleva a que en diferentes situaciones sean violentados y sus derechos sean
vulnerados.
3. Hurto y consumo de droga: Un modo de Vida
“Es solo una vuelta, pero hágale papito. Si no se muere de hambre…”
La adolescencia es un periodo de la vida entre la infancia y la edad adulta,
caracterizado por cambios biológicos, psicológicos y sociales que son influenciados por
la familia y la sociedad, por ende son considerados un grupo de población vulnerable,
susceptible; puesto que se ven enfrentados en su proceso de formación a un
sinnúmero de influencias sociales, familiares, a situaciones críticas que afectan un libre
desarrollo biopsicosocial.
El escenario social, paulatinamente, va provocando un sometimiento de modelos
conductuales que en el imaginario del adolescente realizan su ideal; en esta esfera el
grupo de iguales reemplaza su deseo de liderazgo, de pertenecer a un grupo y ser
tomado en cuenta como parte activa y productiva de un todo. Aceptan los
condicionamientos que moral y psíquicamente representa como el iniciarse en hurtos o
consumo de SPA para “probar finura” como lo dicen ellos. Veamos:
79
“Estaba estudiando, y en el colegio conocí un amigo, el me dijo que si arrimaba por la detar
[tarde] a su casa yo caí a la quinta [casa] cuando pille el parche, estaban tres hembras y
cuatro manes. Yo normal, cuando ellos empezaron a consumir sacol y me ofrecieron, yo
recibí, ya que estaba dentro del parche, cuando de pronto cada uno subía con cada china
pa la pieza. Se pillaba [observa] que iban a partir eso [tener relaciones sexuales] ósea a
partir la torta… yo me quede sentado ese día, claro hablaba con todos . Ese mismo día por
la niebla nos parchamos en una esquina y !tan! allí lo pegaron, el mono mi parce me ofreció
yo le recibí y me pegue un plonazo, me ardió la garganta la sentí como caliente. Por eso la
deje un mes, no me hacia falta pero pasaron unos días y volví a probarla. Después seguí
todos los días consumiendo, como no me gustaba estar pelao me fui a hurtar con mi
máxima, además se acercaba la farra de fin de semana y uno pelao no aguanta entiende.
Ese día robamos un celular, mi primer robo. Otra vez, también se venía un parche largo de
tres o más días pero tales nada de Money y nos fuimos a robar, vimos un chino con un
canguro, ¡pilas marica, quieto ahí si se mueve lo lleno de agujeros! ¡Te dejo muñeco! claro
nos entrego todo y en el canguro venia una cámara digital y plata, la vendimos y nos dieron
100.000 Lucas por ella. Nos hicimos la farra con las chinas, perica, marihuana, trago de
todo”.(Alexander).
La adaptación a este estilo de vida de prácticas delictivas y consumo de SPA, viene
desde su mismo ingreso al parche, pues su efectividad está a prueba, al expresar una
mirada, un apretón de manos y participar de cada ritual, a continuación otro relato:
“Uno sabe lo que tiene que hacer, no dar tanto visaje [llamar la atención] con el moño
[dosis de marihuana] y pasarlo; ya el man [comprador] sabe donde nos hacemos, sin falta
ahí caen como chulos [comprador de SPA] a comprar. Desde marihuana ya lista hasta el
bazuco, perico, pepas, popers y asi… lo que pida se les trae”. (Diego)
El robo y la venta de estupefacientes, son actividades de subsistencia, según relatos de
los jóvenes, cuentan que gracias a este tipo de trabajos ilícitos en su casa ha mejorado
la comida, se pagan deudas de alquiler de pieza donde se habita con su madre, o
deudas en prenderías y lugar de expendio.
80
Estos testimonios que incluye la investigación reflejan la acción delincuencial que yace
de las internalizaciones de maltrato, agresión y hostilidad creadas en sus hogares, mas
tarde manifestadas en su adolescencia en acciones de homicidios y lesiones
personales a otros. También en la búsqueda de placer a través de compra de artículos
que mejoran su calidad de vida, la necesidad de reconocimiento frente a sus pares,
para tener un lugar, son razonamientos de los jóvenes que justifican los medios ilícitos
con que se obtienen los lujos.
Otros factores sociales que inciden en que el joven tome decisiones frente a las
prácticas de hurto y el consumo de droga, se presentan por la disminución del trabajo
informal como fuente de ingresos, aumento de los patrones de consumo de la cultura
juvenil, reclusión en cárceles de menores y deserción o expulsión de la escuela.
Aquellas actividades diferentes al hurto y a la venta de estupefacientes que dan un
ingreso mínimo al joven son: vender frutas, Cds en las calles, dulces en los buses,
limpiar parabrisas en los semáforos, hacer mandados en las tiendas, lavar carros, o ser
ayudante en talleres de mecánica. Estas actividades temporales no son
económicamente atractivos para el joven pues debe dedicar gran parte de su tiempo a
esta labor y ganan poco dinero, en algunas ocasiones entre 10.000 o treinta mil “si el
día esta bueno”, por lo tanto este trabajo informal que no facilita un sustento diario,
impulsa al joven a adquirir otras habilidades físicas y mentales para otro tipo de
actividades ya ilícitas como robar y vender drogas en la ciudad, del cual devenga unos
50.000 pesos al día o mas de acuerdo al jibaro [dueño del sitio de expendio de drogas]
y como se mueva [número de compradores por día] en el sector.
Este dinero se utiliza para satisfacer sus necesidades personales como ropa,
alimentación, distracción con amigos, novia y consumo de SPA, compra de artículos
necesarios para el delito como revolver, o puntas, otros jóvenes adquieren motos como
medio de trasporte eficaz para sus salidas con amigos o actividades Ilícitas, entre otras
81
utilidades, está dar una parte a su madre, o abuela quiénes son sus referentes
mediatos de cuidado y protección.
El micro-tráfico brinda estímulo y estatus al joven porque el dinero recaudado se
obtiene aparentemente fácil, esta actividad se realiza en la calle improvisando
amistades y haciendo alarde de lujos, fantasías y comodidades materiales.
Esta relevancia social del micro-trafico que crece entre los jóvenes, surge a partir de
múltiples tendencias que giran en torno a las aspiraciones individuales de algunos de
sus miembros como los jóvenes que por su vitalidad, tenacidad, necesidad, o coyuntura
social que les caracteriza, se involucran en un mercado ilegal de alto riesgo que en la
mayoría de los casos se vivencia más desde una mezcla de la frustración de las clases
medias marcadas por aspectos delictivos de algunos individuos, que no han
experimentado otras opciones de vida digna, de posición social.
El micro-trafico no presenta una organización plenamente jerarquizada, pues muchos
de sus miembros funcionan apenas como apéndices o asociados (o desde afuera se
les asocia como tales), conformado por múltiples grupos de estos adolescentes que
son los encargados de inmortalizar este tipo de hazañas sociales, que tradicionalmente
marca su estilo de vida. Este tipo de sustento está consolidando en gran parte sobre el
núcleo familiar (padres, hermanos, primos, tíos, sobrinos, ahijados, etc.), hasta penetrar
otros niveles sociales.
El surgimiento de la vinculación forzada a la distribución de droga en el departamento,
se agudiza en las élites regionales, como Manizales, Chinchiná, Pereira, como hecho
que además de facilitar su ascenso, contribuyó a agudizarse en problemáticas
asociadas como el delito, operando como subsistemas, que a su vez actúan como
82
organismos independientes y también como elementos componentes de sistemas más
complejos, según el tipo de actividad que necesite llevarse adelante.
“Cuando no tengo plata y quiero un maduro [tabaco de marihuana y bazuco] bien jalao
[completo], voy y pido trabajito. Allí donde Cholo él me da cualquier 50 o 70 mil en
papeletas yo le aparezco con la plata, y después el man me fía, y así… yo soy derecho con
el hombre pa evitarse la horrible [muerte]. A veces si voy cada nada porque me coge el
vicio y me da tres vueltas”.(Diego)
Ese ingreso en la vida delictiva convierte al joven en una persona que tiene la
expectativa de conseguir dinero de la forma que sea, convirtiéndose en un modus
vivendi, aprobado por la familia y respaldado por el grupo de pares.
La cotidianidad del adolescente, su correspondencia con las practicas, las rutinas de
consumo de SPA y las actividades ilícitas, crean patrones de comportamiento
particulares y forman un hábitus que en palabras de Bourdieu hace referencia al
conjunto de disposiciones operativas que marcan al individuo, como la manera de ser,
ligado a un grupo social, lo que se manifiesta principalmente en las interacciones
sociales que entretejen su que- hacer cotidiano, entre ellos la apariencia física o
externa (vestimenta, comportamiento social, expresiones). Puede entenderse además,
como “un sistema de disposiciones adquiridas, permanentes y transferibles que
generan y clasifican acciones, percepciones, sentimientos y pensamientos en los
agentes sociales de una cierta manera, generalmente escapando a la conciencia y a la
voluntad”, es decir, el hábitus es la dimensión “objetiva” o estructurada que se
manifiesta en un estilo de vida; Bourdieu (2002: 58).
Entre sus prácticas ilícitas relacionadas con droga encontramos: El Hurto: agravado,
calificado, tentativas de homicidio, lesiones personales o asociaciones a bandas como
búsqueda de ganancias personales que van desde la violencia, las amenazas o la
83
intimidación, el hurto no es un oficio de dedicación exclusiva, se practica, según ellos,
cuando no hay “vueltas de ajustes de cuentas, nos dedicamos al robo de
apartamentos, al fleteo, raponazos o quietos (de celulares, ipod, cámaras, discman, o
morrales”.
Otros jóvenes han manifestado que se involucraron en actividades ilícitas solo después
de usar regularmente el crack, porque se centran fundamentalmente en mantener su
consumo habitual mediante la obtención del dinero, para comprar la droga y el refuerzo
de sus relaciones con amigos que pertenen al mismo mundo.
Sus hurtos están enfocados básicamente contra la propiedad, contra tiendas y hogares,
venta de intercambio de droga, micro-trafico por la ciudad, jaladores18 de carros, motos,
reducidores19, reducidores de mercancía, prostitución o proxenetismo, sin embargo,
frente al uso de drogas y las prácticas delictivas mencionadas encontramos algunos
jóvenes que cometen ilícitos para consumir drogas, y aquellos que consumen drogas
para cometer ilícitos”, lo que permite identificar un gran vínculo de placer y
emocionalidad con diferentes drogas asociadas a prácticas delictivas.
El 12 de Abril/2009, en el Tiempo, se escribe acerca de la alarma social del consumo y
hurto en menores de edad y además, como se ha generado una alta reincidencia de los
adolescentes infractores, en los casos de estudio, se presentan situaciones de
reincidencia debido a procesos de reeducación interrumpidos, por evasión de los
programas o por poca expectativa laboral en su reintegro familiar, esto ocasiona que se
incremente la cantidad de infracciones, y por ende que pasen de delitos menores
menores a mas graves.
18
Jaladores: hurtadores de partes de los vehículos.
19
Reducidores. Consiste en el cambio de artículos robados por droga
84
De otro lado, quienes utilizan sus servicios para actividades ilícitas de microtráfico,
sicariato, hurtos o lesiones personales, conocen que son jóvenes con poco
remordimientos, más osados, porque saben que la ley los protege y suelen despertar
menos sospechas entre escoltas y sus víctimas; lo que supone que la ley 1098 debe
obedecer a un verdadero proceso de resocialización para el joven, pedagógicamente
significa, facilitar un abordaje que consolide sus necesidades emocionales, académicas
y oportunidades laborales dignas para su sustento y desarrollo personal.
3.2 Tipos de hurto
Una tendencia marcada que encontramos en el grupo de estudio es la facilidad para
desplazarse en la ciudad sin llamar la atención; dividiéndose en dos grandes formas de
robo como:
A. Los hurtos simples: son aquellos ejecutados por un solo individuo que en la
mayoría de los casos se reconocen con la modalidad de raponazo, escape,
silenciadores o de quieto, estos son hurtos que representan poco dinero no son
directamente planeados hacen parte de la cotidianidad en que se vive y
necesidad de mantener dinero para satisfacer necesidades o búsqueda de
placer como el consumo de psicoactivas.20
B. Los hurtos compuestos o estructurados: son aquellos que se realizan con
tres o mas implicados, cada uno con una tarea específica a la hora de ejecutar el
hurto; estos a su vez representan gran cantidad de dinero, destinado para
20
Los hurtos simples se representan en artículos como celulares, morrales, ipod bolsos de dama, cds, pasa cintas,
electrodomésticos, cuerdas de luz, jaleo de repuestos para carro o moto
85
rumbas, celebraciones por un hurto satisfactorio, encuentros con amigos, lujos
personales reconocimiento ante el duro [líder del grupo]. En el hurto
planeado21participan básicamente tres jóvenes que cumplen varias funciones:
El campanero: es aquel que vigila e informa de las demás personas que están
transitando.
El cerebro: quien intelectualmente rastrea el sitio para dar la iniciativa de la
acción, en el momento del hurto.
El que acompaña en la ejecución completa, jugando un papel importante la
agilidad y astucia para cumplir con lo planeado.
Después se dirigen al sitio donde se guardarán los artículos robados como garajes,
piezas o alguna casa de un amigo, al día siguiente son llevadas al mercado negro, o
al reducidor. Este último es quien posee los mayores contactos con los
almacenistas, piratería, y prenderías de la ciudad (Especialmente encontradas en el
sector de la 19 y comerciantes foráneos que son llamados para dicho negocio).
Esta conexión entre hurto y acción de grupo, responden a una motivación de la que
puede planearse en el círculo de amigos el parche, el hecho de participar de este tipo
de actividades ilícitas, le proporciona al adolescente un renombre para justificar sus
necesidades e ideologías, en muchos casos, los hurtos se complejizan al involucrase
en homicidios, entre otros sucesos agravantes contra la víctima, debido a la ejecución
misma del atraco por encubrir a alguien, o escapar de alguna situación no esperada de
la ejecución del hurto. Los relatos que se ilustran a continuación, dan cuenta de la
preferencia de robo, artículos de mayor gusto y sus modalidades del robo, formas de
proceder y armas:
21
El Hurto Planeado se realiza a supermercados, apartamentos, parqueaderos, chalets, busetas, almacenes de ropa y calzado, tiendas de ventas, misceláneas, estanquillos.
86
3.2. Hurtos Simples
Conocidos como el escape, raponazos, silenciadores, estos son conocidos por su
agilidad y destreza en el momento de efectuar el robo; aprovechan las aglomeraciones
para robar sigilosamente de los bolsos, bolsillos de los transeúntes, morrales, maletines
o mochilas, aprovechan victimas regularmente femeninas quienes son vulnerables a
algún tipo de reacción, son realizados en cualquier hora del día, acercándose
cuidadosamente y pasando completamente desapercibidos.
“Cuando son fiestas siempre paga subir a la plaza bolívar, o parque caldas, pues allí está
la liga [dinero] pa la noche. Lo celulares más que todo, o cadenas o bolsos, uno mira que
tire pinta que remuestre algo, hay viejas que andan con chaquetas de cuero y bolsos finos
esas son, o manes con llaves de carros hablando por celular en medio de la gente, eso si
tiene que haber bastante gente para que no se note nada y dejar todo el mundo sano. Por
la veintitrés hay viejas muy dormidas que ponen el bolso hacia atrás y no se fijan en
bolsillos abiertos o cuando uno les abre y les saca todo, una vez me toco en un almacén de
zapatos de la veintitrés estaba lleno y la china mas dormida dejo el bolso en donde uno se
mide los zapatos y toda engorilada [distraída], cuando se dio media vuelta ya iba lejos, ese
día coroné 300.000, me hice el día, porque era sábado de rumba !si”.(Demon)
Esos son los mas fáciles, las chinas son las mas bobas, siempre se lo ponen atrás en el
pantalón o en el bolso, cuando los raponéo primero le miro la pinta a la china y ya sé si
vale la pena o no. Son todas despistadas cuando van con otras amigas ahí caminando,
yo lo hago mucho por la avenida Santander, por los bares….por ahí por las universidades
siempre dan el pago.(Chucho)
El caso de Wilson y su iniciativa por el hurto nacen a partir de un conflicto familiar con
su padre quien exigía mantener buenas notas en el colegio; Wilson no acató las
normas de la casa, tampoco aquellas recomendaciones de su padre; para Wilson su
padre no tenía la autoridad moral suficiente para exigirle; guiado por el resentimiento
hacia su padre por las agresiones físicas contra su madre y el consumo de alcohol y
perico presente en su padre, según relato del joven; son pensamientos arraigados
87
desde su infancia que no facilitan una comunicación asertiva con el padre ni
manifestaciones afectivas.
Todavía, su madre cumple un rol pasivo en la familia permitiendo agresiones físicas e
insultos constantes, según la madre, por evitar abandono del padre y favorecer
circunstancias económicas y crianza de su hijo. Relato:
“Un día cuando veníamos del estadio encontramos a una pareja y ellos los parces la
robaron cada uno tenía una patecabra una chaveta, y las sacaron y se las pusieron de
frente, yo me asunte porque era la primera vez que yo veía una cosa de esas, la muchacha
y el muchacho decían que no les hicieran nada, mi masima los atarbanió [agredir
físicamente] y ellos entregaron el reloj, las alhajas, tenían 50.000 pesos y los repartimos
entre nosotros tres, el más grande se quedó con 20.000 y nosotros de a 15.000, el dijo que
así era todo, yo me quedé callao porque era primera vez…”(Wilson)
Después de algunos días Wilson continua frecuentando al grupo de amigos para hurtar,
es suspendido del colegio por inasistencia, después de dos periodos académicos, es
expulsado del plantel por presentar hurto y amenazas por dinero a varios compañeros
de su curso, Wilson es un joven mediado por la vanidad y el utilitarismo hacia otros, le
satisface sus encuentros con amigos adultos, tener dinero para ser aprobado y contar
sus hazañas ilícitas para impresionar en el grupo. Wilson dice:
“De quieto uno a veces se pinta mucho con la gente eso se hace pero cuando se está bien
acompañao de una puntísima, pero de escape hay que tener buen pique pa que no lo cojan
a uno, en el centro es lo más fácil pues está cerca a la tumba de la galemba y así uno se
puede perder de los tombos [policías], que sin los mas visajes [llaman la atención] siempre
hay que salirles a l paso”.(Wilson)
Según las estadísticas de las encuestas aplicadas a los 50 jóvenes del centro de
rehabilitación Ciudadela los Zagales, se encontró como técnicas de hurto más
frecuentes, la técnica del quieto en un 50% que consiste en inmovilizar la victima
amenazando con un arma de corto alcance y obtener de manera rápida objetos que la
persona lleve consigo; la técnica de escape, que también es llamada silenciador,
raponazo, consiste en extraer de la victima sus objetos personales, de manera ágil,
88
impidiendo su reconocimiento; este patrón de robo es realizado en aglomeraciones,
paraderos, cajeros automáticos que posibiliten una huida del victimario, como se
observe en el siguiente testimonio:
“Primero robaba en el colegio a las chinitas más bonitas y tocada la de celulares, ipod,
calculadoras y cosas de esas, es que las chinas daban mucha papaya [facilidad], no nada;
después aparecieron más vueltas [hurtos] para hacer y así cuando menos pensé, ya
estaba con manes que si movían arto dinero, contratos [homicidios] y cosas así pues
resultamos, son gente para eso porque por aquí eso si da plata, además nos ayudábamos
con el vicio, la venta en el colegio o por acá por el centro también… yo también meto
mucho desde marihuana hasta bazuco y goma más que todo…”(Richi)
“Tenia quince años cuando Conocí el vicio por amigos del barrio y lo de los atracos [hurtos
agravados] y jaleo [hurto] de bienes. De todos lados aprendí de los primos y amigos, que si
me entiende, eso llega sin buscarlo y hay que saber de esas cosas si quiere tener parceros
a lo bien”. (Poli)
Los niveles alcanzados por los jóvenes en los anteriores relatos demuestran mayor
convencimiento y alcance para hurtar cualquier artículo, en compañía de amigos, y
correr altos riesgos; lo cual le genera poder, estatus dentro del grupo y confianza de los
otros.
Empero, el adolescente continúa evidenciando grandes temores a la hora de su ilícito;
el poli-consumo aquí presente, hace parte de su contexto delictivo con preferencias por
el bazuco (crack) pues ésta droga les genera en sus primeros 10 minutos, estimulación,
creándoles hiperactividad, experimentan euforia, aumento de la sociabilidad y
percepción sensorial del espacio, mejor rendimiento en las tareas de vigilancia y alerta,
sensación de confianza en sí mismo y bienestar. Disminuye la fatiga, el apetito y
reduce el sueño; así mismo la ausencia de pánico para cometer el hurto, aunque sus
efectos secundarios se evidencien en grandes paranoias y persecuciones alucinatorias
y agresividad intensa, es una droga que involucra fuertemente la toma de decisiones
89
del individuo, haciéndolo reaccionar de inmediato a sus deseos primarios como el robo,
o despojo de pertenecías personales para satisfacer su ansiedad de droga.
Estanislao Zuleta en su texto Psicoanálisis y Criminología, relacionó el crimen con lo
que denominó asociación diferencial, ésta consiste en lo siguiente: “en una sociedad
que contiene muchas subculturas diferentes, algunos ambientes sociales tienden a
orientar hacia las actividades ilegales, mientras que otros no, los individuos se
convierten en delincuentes o criminales por asociación con otros que son la expresión
de las normas delictivas” Zuleta, (2004:20)
En concreto, existen casos de hurto en menores motivados desde su familia a partir de
modelos identitarios negativos, en otros casos su práctica e ingreso a la actividad
delictual sería aprendido en los grupos de pares, así como el rechazo a ella, es decir,
los sujetos que participan de la actividad delictual lo realizan por mantener normas y
valores traspasados, porque no consideran dicha actividad como una conducta
desviada, sino la forma de cubrir necesidades personales, Por ejemplo:
“El ejemplo lo recibí de mi padre, ese man desde chino es un vividor de viejas, siempre ha
manejado armas y puntas de toda clase y también sabe defenderse en la calle eso se lo
aprendí, a meter vicio, y manejar moto, antes él y yo nos íbamos hacer negocios lindos de
toda clase, yo se la metía toda y el cucho [padre del joven] hacia el resto. ¡Ahhh! me han
cogido un poco de veces, engordo y después salgo a lo mismo…”(Paraco)
De las encuestas aplicadas al grupo de estudio de 50 jóvenes en modalidad de
internado se encontraron las siguientes armas de mayor uso al momento de comerter
la actividad ilícita:
Grafica número cuatro: Armas utilizadas para efectuar el hurto
90
Según la gráfica, se privilegia el uso de puntas (navajas) en un 56 % por su facilidad de
uso, son pequeñas, de fácil camuflaje en buzos de manga larga, medias, y bolsillos
traseros de sus pantalones, es de fácil acceso, algunos casos puede tallarse al gusto,
las armas de fuego en un 20% que son poco frecuentes, sin embargo el mercado ilícito
que se conoce por los jóvenes, puede adquirirse sin mayores requisitos, solamente
varia su precio desde 25.0000 a 500.000 pesos según formas, calibres, además son
armas ya usadas, productos de otros hurtos.
Los elementos cortopunzantes como cuchillos y leznas son usadas en un 20% de
menos porte en los jóvenes, pues en ocasiones el tamaño no favorece su entrada a
sitios, además gusta entre aquellos principiantes de bandas.
En un menor porcentaje de 4%, se utilizan Psicoactivos como la escopolamina o el
cacao sabanero para facilitar el robo sin agredir a la víctima, según los siguientes
testimonios:
“Lo más común es la pate cabra o puntas pues son fáciles de camuflar cuando uno sale
hacer sus vueltas [hurtar] así si hay manes que son si no escama [llamar la atención] y
cargan la de fierro [revolver] y eso…”(Dante)
91
“No pues siempre hay que andar con algo porque mantenemos con liebres [enemigos]
en todo lado y aquí mas, todavía yo me protejo con lo que hay, puntas, una riata que
tengo que me ayuda en todas partes es de chapa grande y a mas de uno he dejado de
cirugía, pero me gusta mucho también esta chapeta [arma de cortopunzante] para las
que sea, sí”. (Dorada)
“Cuando uno está en el acto no la piensa créalas uno lo que tenga, pues a mí ya me
gusta andar con lo mío las puntas hechas por mí, y también sirven pa trillar la maría
[marihuana]”. (Chinga)
Aquí se denota gran autonomía e independencia para portar el arma de mayor
atracción, siempre se debe estar equipado como ley de la calle, por sus condiciones de
deudas, el arma de elección debe ser cada vez mejor equipada, dado las
circunstancias de riesgo a las que se exponen, frente al grupo de pares, portar una
arme de éstas significa seguridad, madurez y control de situaciones impredecibles en la
calle dado que aun entre ellos existen enemistad u careos cuando las acciones
delictivas han sido manejadas de manera desigual o ventajosa.
3.2.1. Modalidades de hurto simple.
El Semaforazo, es una técnica de hurto simple que está dirigida por dos jóvenes que se
reconocen por su agilidad y experiencia, regularmente roban dinero u objetos
personales de la víctima, son frecuentes en la avenida 19 de la ciudad, (semáforo de
Asbasalud). Observemos:
“Cuando está el arrume de gente, usted ya tiene vista la vieja, está bien embambada y
¡traque! la roba en pleno semáforo, ahí el semáforo del almacén parís es fácil y por la
veinte también, tira pa’ la galería, que es lo más fácil…”(Chepe)
“Una vez un chino y yo cogimos a un man en el semáforo de la bomba como a las 10: 00
PM le bajamos una R15, y salimos por san jose, la llevamos a desbalijar y vendimos las
92
partes, otras veces hacemos los torcidos por altos de Turín, bajo cedros, o Aranjuez”.(La
Bruja)
Este es un tipo de hurto que se frecuenta en horas del medio día, o la noche
aprovechando las horas pico, en los cuales los autos deben esperar largo tiempo en los
semáforos, desarrollando grandes destrezas psicomotrices para emprender la huida.
En este tipo de lugares característicos se aplica la modalidad de taponazo, escape o
silenciador para no alertar a los transeúntes y facilitar una huida satisfactoria.
Grafica número cinco: Lugares para un Robo Fácil.
93
De acuerdo a la grafica anterior, las encuestas aplicadas al grupo de jóvenes sujeto de
estudio, arrojan los siguientes resultados: un 40% de los jóvenes encuestados en el
centro de rehabilitación manifiestan sentirse con mayor solvencia y agilidad para la
huida en sitios solos, porque allí es más fácil intimidar a la víctima, evitar testigos y
posteriores complicaciones al hurto.
Otros , lo hacen en las aglomeraciones (30%) principalmente en conciertos, temporada
de navidad, ferias de Manizales, festival de teatro, salidas de los eventos sociales y
culturales de la ciudad, sector plaza de toros, estadio Palo grande, en las calles
principales.
Un (20%) como las avenidas Santander, Kevin Angel, zona rosa, hall de Cable Plaza,
sector universitario, aprovechan salidas de discotecas o abordaje de taxis en la noche y
finalmente, los paraderos de buses en un 10% con menor índice pues regularmente
son vigilados por policías.
3.2.2 Hurto Estructurado
Este tipo de hurto se realiza entre varios jóvenes, entre tres u ocho de acuerdo al
hecho ilícito y cantidad de dinero que exija, se utilizan armas de fuego para impresionar
más fácil a la víctima y armas corto punzantes para generar pánico durante el hurto.
3.2.2.1 Modalidades de hurto estructurado
a) Los Apartamenteros: esta práctica es regularmente planeada se realiza
en grupo cada uno conoce el papel que debe cumplir, portan armas de
cualquier tipo, hurtan toda clase de objetos valiosos que contenga el
apartamento.
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“Nosotros estamos en la juega, cuando se nos va acabando la platica… nada… miramos
donde está el roto [momento de cometer el hurto], una vez robamos por Chipre, una
chimba de apartamento era fácil la entrada por detrás y todo, lo bajamos de todo
televisor, equipo, dixman y una cámara, plata no tenían. También hemos goliado [hurtar]
cuando vamos a farras algún apartacho y después caemos en forma por todo, es muy
fácil sin tanta escama”. (Lápiz)
El caso que veremos más adelante, es la historia de Juan, la cual inicia cuando planea
un hurto contra su compañero sexual quien es mayor de edad, ya se llevan
frecuentando varios meses. Juan es un joven que no demuestra interés escolar,
prefiere un ritmo de vida fácil y con mucho dinero, su padre tiene un puesto de frutas en
la galería, su madre coopera en ocasiones en el puesto, viven en condiciones
económicas deficientes, pues deben cumplir con gastos de arriendo, facturas y crianza
de 5 hijos más.
Juan es el menor de los 6, es desafiante ante las normas de la casa y
recomendaciones de sus padres, este hurto fue planeado con otros jóvenes quienes
eran compañeros sexuales de Juan en otros momentos; Juan tenía premeditado como
recoger las pertenencias y qué hacer con ellas después del hurto, como lo plantea él
mismo:
“Era un sábado, habíamos metido mucha vareta [marihuana] en el apartamento del man
[Compañero sexual de Juan], a mi me gustaba el man pero después de un tiempo lo vi con
vueltas raras [muestras de infidelidad] sacándome el culo para vernos… el man era
arquitecto y tenia de todo lo que yo quería muchos lujos, televisor, equipo, nevera,
computador, licor de todo. Ese día le dije que si quería que yo invitaba a otros dos
compañeros para estar los cuatro y el man como era de dañado dijo que si, estábamos
muy guelidos [con efectos de droga] con pases [Cocaína] y todo, las rumbas con ese man
son por lo alto; cuando llegaron aquellos manes ya sabían qué hacer en un descuido
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amarramos a ese man, lo amordazamos y nos empacamos todo; el portátil, 700.000 pesos
que tenia, DVD, no de todo, hasta chorro [licor]. Eso después no lo llevamos donde otro
loco [persona] buena gente y lo vendimos y por mitad todo…”(Juan)
Las justificaciones que llevaron al joven a cometer este asalto, fueron guiadas por
deseos de venganza ante infidelidades de su compañero sexual, satisfacer sus deseos
materiales, además, la ganancia de ser menores de edad y estar protegidos por la ley
en caso de acusaciones penales.
“Éramos cinco pa la vuelta [Actividad ilícita], eso fué un día que jugó el once y el nacho
veníamos del estadio, famados [efectos de droga] con la turra [efecto de droga] encima
cuando miro una puerta ajustada, y le echo la gafa al parcero y sisas fue de una,
entramos de una, como siempre andamos con el fierro y las puntas por si algo, entonces
los encerramos en el baño les tapamos la boca y la manos, eran un par de cuchitos
[ancianos], cogimos lo que más pudimos, comimos y todo, como a las tres de la mañana
salimos y nadie por ahí, dejamos a los cuchitos sanos y nosotros pues quedamos
reluquiados con todo eso…”(Paredes)
La calle es utilizada como destino estacionario para juntarse con el grupo de pares, en
ambos casos, implica incertidumbre e inestabilidad, por ende, se demuestra la
importancia del grupo para actuar en cadena, además la influencia de uno de los
ejecutores sobre los demás, así como fijación juvenil de vivir el momento, sin pensar en
las consecuencias, estos jóvenes se hallan atrapados en la acción, lo cual explica,
porque no piensan en asesinar a sus víctimas solo amenazar y robar las pertenencias
de la casa.
El caso de Pablo, es el de un joven de 15 años de edad a quien el consumo de SPA es
habitual, posee patrones de crianza débiles, su madre es trabajadora sexual, quien solo
en ocasiones cuida de su hijo y le brinda estímulos con regalos como comida y a veces
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ropa; pablo no tiene padre, desde muy pequeño ha preferido la calle que su casa, es
entonces donde expresa que debe robar para sobrevivir.
Es contratado por un abogado quien busca saldar las cuentas de sus clientes a través
de un cobro obligado como el robo de sus apartamentos, pablo toma el riesgo
sintiéndose elogiado por el adulto y ansioso para obtener el dinero y consumir.
Narración:
“Cuando tenía 15 años, me conocía toda la galería de Manizales, porque sabían que yo era
severo [muy] ladrón y ya había probado toda clase de drogas ahora ultimo estaba cogido
con la heroína, entonces me presentaron un cucho y me dijo que me tenía una vuelta y si,
hice más de un robo con él, el ultimo me dijo, mire tiene que entrar a tal condominio y el
sábado esta solo el apartamento y yo le dije que como sabia eso y él me dijo no ve que ese
marica le lleve un caso y se hizo el guevon con la plata y el piensa que voy a dejar eso así
y yo le dije es que usted es abogado y me dijo que si, entonces me fui con otro parcero a la
vuelta, encañonamos al portero mientras yo subía, el parce se quedaba poniendo cuidado
y ganaba la vuelta, ese día por la noche nos trajimos un portátil, un dvd y $2.000.000 en
plata, fuimos con el cucho y partimos la vuelta y me hice la rumba con mera heroína, no
duro si no una noche la lana…” (Pablo).
Los hurtos planeados, son considerados un éxito, porque allí, cada uno cumple
funciones específicas, su pensamiento y dinámica está centrado en la consecución del
hecho delictivo, se nota gran creatividad, manejo del espacio, utilización de las armas,
dominio del cuerpo (cumplirse así mismo y lograr el reconociendo de los otros). En
muchos casos no se considera ni se interesan por las consecuencias de orden legal,
que se puedan presentar, evidenciándose gran indiferencia por las sanciones y demás
procedimientos que llegaran a presentarse.
b) Los Robos a proveedores, tiendas y misceláneas de los barrios: son
prácticas, sencillas, dado que se desarrollan igualmente en grupo, el líder
designa los roles para el impacto del robo, portan armas desde revolver
hasta armas de corto alcance, es como un juego que debe hacerse de
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forma rápida y ágil para prender la huida sin ser capturados, éste tipo de
robos, lo realizan en temporadas de quincenas, fines de semana, a sus
propietarios los sorprenden preferiblemente cuando están solos y no
existe vigilancia continua, veamos el siguiente fragmento:
“Siempre esperamos el carro arriba en el solfe en el plan o en el carmen también hemos
hecho vueltas {hurtos}, esto es entre varios, cada uno con un ocho, o un fierro {revólver}
eso si es de ligereza, hay manes conductores braveros {agresivos} pero breve no
comemos de ninguna, a lo que vamos primero le decimos la plata marica que no estoy
jugando uno ataca por al derecha, otro por la izquierda, se cogen de quietos, y si esta fácil
la vuelta sueltan la plata de una, si no toca darles a quemar, ya no se puede uno patraciar
¿me entiende?. Los otros manes atrás del carro, y adelante también, una vez éramos como
ocho para la vuelta del carro de coca cola, y cuando son otros carros pues no solamente
los mismo tres parceros. Si coronamos bien, pero esos manes saben lo que les espera
cuando van por allá, a surtir las tiendas y todo eso”.(Alexa)
El Sarco, es un joven que a temprana edad se inicio en el hurto y el consumo de
pegante, marihuana y bazuco según los ingresos de sus robos; de su familia recuerda
eventos de maltrato físico y poco ejemplo de sus padres y demás familiares, desde
muy niño aprendió a permanecer con dinero para no ser discriminado en la familia,
cuenta que su madre lo presionaba y “sacaba en cara un plato de comida”; desde
entonces ha elegido la calle como su mejor refugio, desde sus amigos o parceros hasta
algunos poco conocidos, saben que en hurtos el Sarco es muy ágil, sus ingresos en el
centro de rehabilitación son temporales, pues es un joven líder y con comportamientos
estables, esto le posibilita menos tiempo en el internado; practica toda clase de hurtos
especialmente aquellos en los que puede adquirir mayor cantidad de dinero. Como lo
veremos a continuación:
“Un día robamos en una tienda que queda por la Leonora, no tenia rejas y ya sabía toda la vuelta
desde que horas entraba el cucho a qué horas salía y con quién, que vendía, hasta el sótano ya lo
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tenía visto, en esas vueltas uno tiene que ser bien abeja [conocer bien] todo, ahí también había un
billar entonces pues más breve, porque yo jugaba con varios amigos y así pedíamos
hamburguesas y a veces trago, claro que había que ir con la pinta porque si que aparecían niñas
lindas.
También tenía hablado el domicilio, un chino que se podía joder en cualquier momento, le
pinte la vuelta y tolis, ese sábado en la noche le caí al cucho, era fin de mes tenia harta
plata porque también pagan los fiaos y había más plata, cogía al cucho de quieto lo
amarramos lo jodimos con un alambre, lo metimos al sótano y empacamos lo que más
podíamos, el chino estaba algo asustado porque según él, nunca había usado un arma,
pero que cuando ya se está en la vuelta no se puede echar pa atrás, entonces recogimos
todo y salimos como a las 3:00 am, nadie por ahí pa que nos azararán, cogimos un taxi
hasta la Kevin, ahí el chino cogió lo de él y se fué el mariquita ese. Yo llegue donde prado y
guardé todo lo demás, el mariquita no se las pillo pero me quedé con toda la plata… al otro
día celebramos con salchichón y trago de la tienda, además le pague unos maduros que le
debía al man, Salí a vender el resto para seguir en la rumba”. (Sarco)
El sarco en su práctica delictiva, también busca animarse y sentirse más tranquilo
horas antes con el juego del billar, elige comer y beber licor como distractores también,
porque ayudan a mantener un ánimo estable y a no levantar ninguna sospecha; allí se
configuran todos los pensamientos e intensiones, que desea robar, que movimientos,
palabras, gestos y maniobras usar.
c) Robo a transporte urbano: esta práctica delictiva se usa en grupo para
atemorizar a los pasajeros y el conductor, además estar alerta si en algún
momento se enfrentan a reacciones de riesgo del conductor o algún
pasajero. Cada uno en el grupo reconoce su rol, uno de ellos se hace
pasar por pasajero, uno más paga el pasaje normal, dos más entran por
la puerta de atrás del bus, así se mantiene el control frente al pánico, en
este caso, solo se hurta al conductor, se conoce su ruta, número de
pasajeros, y cantidad de dinero del día, este atraco regularmente se hace
en la última ruta del bus, con menos pasajeros, para evitar ser delatados
por alguno de ellos. Este es el caso:
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“Yo soy tremenda gacela [ágil] pa eso si me tengo confianza, a más de un tombo [policía]
dejo sano, una vez me acuerdo que era navidad y no tenía nada, y la china pues pidiendo
cuerda, además siempre hay que salirle con algo al chino [hijo] mío, y a la suegra de vez
en cuando… ese día cogimos un man y yo un cosmo bus, iba bien reluquiao como con
830.000 y eso que lo cogimos tarde, es mucho ganado ahí.
Nos repartimos la vuelta, yo lo cogí de quieto y el otro man amenazaba la gente, unas
viejas ahí gritaban pero pues nada ese man y yo siempre nos hemos entendido con eso,
siempre andamos con pasamontaña y yo con gorra y chaqueta, las vueltas son breves y al
piso descolgamos hasta cruzar a san cayeto y así… yo le di al man como 300 no mas, ¡si
es que yo soy la figura…!”. (Figura)
“Otra vez el man y yo, en el plan del Solfe, llendo pa comuneros, sabíamos la ruta de la
buseta, no le metimos al man y ¡quieto marica saque toda la plata!, el man lo que saco fue
un machete a dame y pra!… Su tiro en la cabeza, sacamos la plata y suerte [huyeron]. Con
esa vuelta si nos calentamos arto, ya después mandaban a un man de civil en las busetas
pa identificarnos, pero salao [imposible] porque ya teníamos otros contactos que nos
habían cantado la vuelta”. (Piña)
En este caso no se tenía premeditado cometer homicidio contra la víctima, su interés
era efectuar el robo de dinero solamente, la víctima en busca de su defensa personal,
no tomo en cuenta la agilidad del joven y muere en el acto mismo del atraco. Las
pulsiones del joven obligaban a defenderse de su propia víctima, y huir para no ser
descubierto, el joven no asume remordimientos ni culpas, se justifica con el hecho de
haber sido tomado por sorpresa, y el disparo fue producto de un impulso en virtud de
su propia defensa personal.
d) Robo a pasajeros: en esta práctica de robo en grupo, también se cuenta
con un joven que hace las veces de pasajero para indicar al resto del
grupo la cantidad de pasajeros, y ruta final del bus, el joven pasajero
100
identifica que pasajeros llevan dinero y pertenencias para efectuar un
robo seguro y ágil. Aquí se especifica:
“Un sábado más que todo, pues hay más gente y nos craneamos la cosa fácil, pagamos el
pasaje común y corriente y desde las sillas de atrás del bus o la buseta analizamos el que
nos va a dar el pago [hurto fácil], lo seguimos hasta la enea y tra!… en una parte sola se
baja de todo, hay manes o viejas si ve, que se ponen hablar por celular en la buseta, o se
ponen a dar bomba con cualquier cosa y pues eso es lo que traque [ocasiona el hurto]. Así
hemos hecho bastantes en esa ruta, y a Villa Maria también.(Chinche Viejo)
“Una vez cogimos un colectivo pa villa maría ahí en fundadores, ya teníamos la vuelta
cantada, llegando al paraíso atracamos el colectivo y viejas con bolsos de cuero, celulares,
plata un poco de cosa ahí… nos bajamos de una y echamos pa ese monte, cuando al rato
escuchamos motos de los tombos que nos buscaban. Ahí tocó devolverles el regalito, al
parcero le alcanzaron a dar en un pie y yo le di su pepazo al tombo [Policía], seguimos
corriendo con el man [compañero] así todo herido, hasta que llegamos donde un parcero
que nos escondió y ya, el man herido lo llevamos a un puesto de salud, el man si quedo
cojo porque nunca se hizo sacar esa bala, lo más triste fue que toco repartir esa vuelta
[dinero] entre muchos porque nos descachamos ahí con el man que nos
escondió…”.(Perro)
En estos casos, encontramos fuerte influencia del líder, quien designa los roles y que
hacer en caso de peligro, pues también éste protege y dirige la huida final, como grupo
se consolidan metas claras, primero no levantar sospechas de sus víctimas, lo cual
implica actuar con cautela y juego en algunos casos, tomar el riesgo de robar
demostrando seguridad y control absoluto del suceso, y finalmente emprender la huida
con un lugar de llegada claro, tener alternativas de escape en caso de presentarse
dificultades o posibles capturas.
e) Robo de carros, motos, particulares: esta práctica ilícita cuenta con
mayor pericia, intervienen adultos y menores de edad todos integrantes
del grupo a fin, es un grupo con suficiente experiencia en cometer
homicidios, u otro tipo de actividades ilícitas de mayor riesgo. Con el
tiempo adquieren usos, costumbres y formas de conducta que son
aceptados por sus integrantes, de este modo cada individuo tiene plena
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adaptación al grupo y de sus obligaciones, además adquiere la sensación
de protección y de individualidad, siendo útil y cumpliendo los objetivos
trazados por los líderes, en esta práctica no se escatima en violentar
físicamente a la víctima, en muchos casos amordazarla, o provocarle la
muerte.
Fragmento de entrevista:
“La vuelta tiene que ser de noche simplemente la china se va hasta el parque caldas y
coge un taxi para que la lleve a san José, o la avanzada parte alta y todo está calculado,
cuando se baja la china, nada, le caemos al taxista y le bajamos todo, pasa cinta, plata, lo
que traiga de valor, celular, wotman, radio taxi, esas cosas que si pagan. Somos tres o
cuatro con la china que es la que hace la mayor parte de la vuelta porque ella mira que sea
cahizudito [bien vestido] y que el man tire pinta que remuestre algo. (Care Roca)
“Cogimos un taxi, éramos tres, ahí por la avenida del centro, que nos llevará hasta el
guamal parte alta, y llegando a un matorral, lo cogimos de quieto, el man no podía hacer
nada inmovilizao del todo, lo amarramos, le tapamos esa boca y lo metimos en la parte de
atrás del taxi, cuando al ratico el radio teléfono llamando al man, y como no nos podíamos
reportar la pelada insistía, entonces pidió refuerzos de otros taxistas para que buscaran al
man, le robamos lo que alcanzamos plata, alhajas y el pasa cinta, la chinga [el menor del
grupo] nos estaba esperando en otro carro particular pa volarnos y listo cogimos pa el roto
[lugar de expendio de drogas] a vender y cambiar por maduros [tabacos de marihuana y
bazuco] pa seguir en la fiesta. (Hércules)
“El otro día hicimos la misma pero el man era perro [insulto] y no la hizo, por ondas del
Otún íbamos en un taxi, el man dejo el monitor prendido y escucharon todo los demás
taxistas, uff todo lo que le decíamos, cuando nos aterrizan con palos, y un guayo [revolver],
los otros manes como eran grandes se volaron con la plata y una de oro y me dijeron
tranquilo chinga que ahí nos vemos, a mi me cogieron y me llevaron pa el puente olivares,
me iban a matar esos hifueputas, me dieron una trilla [agresión física] ni la gonorrea, ufff, y
llega un Mario {policía] ahí todo sapo, que no que el chino es menor de edad y se meten en
vueltas [problemas] peores y eso, que tranquilo que me mandaban unos días pa linda
[centro de rehabilitación] y que si salía a lo mismo me pelaban [cometer homicidio] ,
entonces fui a dar al hospitalito y llegue a la linda todo fracturado y moretiao, pero nada
esta no se queda así; usted cree después de que me salve de esa, hay que ser mas
agisoso [audaz]”.(Aurelio)
En este caso se identifica gran resentimiento del joven por ser agredido físicamente, no
toma en cuenta el abandono de sus compañeros, dice que” haría lo mismo”, “yo solo
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pago unos meses y ya”, encubre a su grupo de amigos aceptando las disposiciones
legales como muestra de afecto y seguridad hacia sus líderes adultos.
f) Robo a través del Soborno: en esta práctica el joven accede al ilícito a
través de contratos por otros mediadores que son los líderes de los sitios
de expendio o grupos ilegales, algunos jóvenes se involucran en grupos
de autodefensa para obtener dinero para su satisfacción personal y
búsqueda de placer, son jóvenes con trayectoria y experiencia suficiente
para abordar cualquier tipo de contrato, como ejercer amenaza física,
someter a lesiones personales su víctima, o actúan como enviados para
saldar deudas. A continuación observemos los testimonios:
“Hay cuchas que se dejan pues es muy fácil hacerles el ficticio, por zorras uno les conoce
sus guardados sobre todo porque a veces nos llaman pa vueltas [homicidio] con los
maridos, entonces ahí caen y se les pide billete por estar calletanos [guardar silencio]. Ahí
largo rato uno las mantiene en línea si. (Careroca )
“A veces, cuando salen los contratos con esos manes hay que ser derechos [cumplir]
porque o si no, es mi vida, además le conocen a uno la familia y todo, sobre todo materiles
[sicariato] a manes duros, ganaderos de esos que vienen desde lejos, manes con plata,
una vez toco hacerle la vuelta a un man que vivía en Palermo venia de expo feria desde
allá lo veníamos siguiendo en la moto, el nieto y yo, cuando el man se baja del carro para!
[disparos], que le caímos en la espalda, el escolta salió de la casa y nos dio como varios
tiros salimos al Vizcaya, pero mmm… alcanzar a nieto en ese rayo [moto] no es mamey
[fácil]. Nos volamos y nos dieron 5 millones esa vuelta fue la que más me gusto porque no
la pensamos mucho y mire toda esa platica…”(Perro )
g) Robo a funcionarios de empresas: esta práctica de robo se realiza en
muchos casos cuando el joven tiene acercamientos afectivos con su
víctima, compañeros sexuales adultos que camuflan su homosexualidad y
contratan los servicios de jóvenes como búsqueda de placer, son
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contratados en varias ocasiones, en algunos casos se crea interés
utilitarista por parte del joven y deseo sexual por parte del adulto. Veamos
el caso de Darío quien decide algún día no asistir más al colegio:
“Mi mamá dijo que, de qué iba a vivir y pues, de nada yo trabajo, empecé a vagar, pai y
paca, robaba cosas pequeñas como bananos, engañaba la gente, y así fue creciendo en la
calle haciendo fechorías y daños, cuando tenía 14 años, eran las nueve de la mañana yo
pasaba por una calle por ahí recogía chatarra cuando un cucho de un taller me llamó! Eh!
pelao venga, se quiere ganar 1000 pesos yo le dije que sí pero ¿pa’ que?, tenía que lijarle
un carro con lija y agua, cuando acabe, el cucho me dijo que si iba a volver mañana y dije
que claro y ahí empecé durante un año y así aprendía a manejar y hacer muchas cosas de
un carro todo lo que se hace, cambios de aceite, bajar llantas, armar motor, pero lo más
fácil era manejar y el patrón ya me tenía confianza”. (Darío)
La vida para Darío, era más fácil vivirla teniendo dinero en sus bolsillos, llevando
comida a su casa, ya que no contaba con el apoyo económico del padre, su madre no
insistió en ingresarlo de nuevo al colegio, también celebraba que su hijo fuera capaz de
llevarle dinero y comida, la madre sentía que Darío ya podía valerse por si mismo.
“Un día a las 7 de la noche, era un sábado cuando escuché al patrón hablando por
teléfono, que tenían que traer un carro de Medellín a Manizales, el carro era robado, lo que
pasó es que el man se emborrachó y lo tenían que tener en Manizales, al domingo por la
mañana, ¡quiubo! cucho si quiere le hago esa vuelta, miró, dudó pero con ganas de darme
ese trabajito, y me dijo listo pelao pero yo veré, tiene que estar aquí antes de la
madrugada. Listo! que no tenia problema, y el que me dice eso y me da transporte para
viajar a Medellín, me dijo donde y en que parte y dicho y hecho, a las doce de la noche
estaba en Medellín y tenía miedo porque donde lo cojan a uno con un carro robado, ya
tenía 16 años yo pensaba en el millón de pesos que me iban a dar toda esa plata yo nunca
había tenido todo eso…”(Darío)
Era el primer ilícito en grande que Darío haría, quería darse la oportunidad de tener
más dinero, y demostrarse su capacidad de ir más lejos y hacer las cosas por sí
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mismo, además estaba en juego, la confianza de su patrón quien representaba para
Darío un referente afectivo, como su protector:
“Cuando me encontré con el otro cucho [señor], entonces entré y era una parte oscura y
tartanas cuando miro al fondo y uff… Que lanchota! una burbuja último modelo ¡uy! yo me
voy a montar en eso, el cucho me dijo pilas hay que llevarla a Manizales; porque no vino el
otro, yo no le dije nada, para que se mete uno en problemas con esa gente y ahí mismo
arranque con eso rumbo Manizales, como era de noche esas calles solas, me vine por la
carretera vieja de chinchiná casi sin nadie, pero ush.. En cada parte que llegaba me daba
miedo en todos los peajes pero nada logre coronar y el millón de pesos…!que
dicha!”.(Darío)
Para Darío era importante cumplir esa meta, por eso asume el reto, vence sus miedos
y realiza el ilícito como se lo habían propuesto, durante su desplazamiento vivencia
pensamientos de temor, inexperiencia, cuando cumple su ilícito explora alegría, poder y
orgullo frente a su patrón. Darío empieza adquirir mayor experiencia, realiza sus
propios contactos para robo de carros de Manizales a Medellín y viceversa, después de
un tiempo decide irse con su madre a Medellín, viven tres meses de los hurtos y
atracos que realizaba Darío cotidianamente.
Le gustaba Medellín porque tiraba mejor pinta aprendía más cosas de la vida y la calle
y tenía a mi cucha bien vestida y orgullosa de mi…
“Me calenté mucho en Medallo, porque robaba mucho carro y un paciente se dio cuenta
que yo le robe su carro y mandó a pagar por mi cabeza. Mi cucha se dio cuenta y me dijo
que nos fuéramos para otra parte, hay mismo yo pensé en irme otra vez para Manizales
como ya conocía ciertas a mane spa ese tipo de vueltas, fue un hecho, nos venimos a vivir
al barrio de Aranjuez, después nos pasamos para Fátima por los lados de la iglesia, yo
seguía haciendo mis vueltas con los cuchos de Medellín, pero desde aquí.
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Un día me llamó mi patrón y me dijo que necesitaba un carro así y asa y listo, empecé a
buscarlo para llevárselo, tenía amigos en el barrio cuando tan, pillo el carro y no lo creía,
era mi parce que salía con un cucho {hombre}. Yo ya sabia como eran las vueltas y le dije
a mi parce que quien era el cucho mi parcero me dijo que un amigo; apenado, yo sabía
cómo eran las vueltas porque el chino era dañaíto [homosexual] por plata y el me conto
que el cucho era cacorrin [homosexual], le gustaba el mundo por lo redondo, jajaja, Y yo le
dije que si me iba a presentar el paciente; le Cante la vuelta, que en medallo nos daban
5.000.000 por el carro del cucho y era el carro que necesitaban en medallo, yo dije: se me
apareció la virgen! (entre mi mente), entonces le dije al parce se ¡arriesga! Estaba dudoso,
pero era flojo y lo convencí.
El me dijo: pero solo lo atracamos! Yo le dije: claro pelao!, pero mentiras se me pasaba por
la cabeza, que si el cucho se me aletiaba le pegaba un tiro en esa cabeza. Hicimos el plan
el gueizudo [homosexual] me presentaba el cucho, como era pipi caliente [ansioso] por los
pelaos. No importaba, lo que importaba era el billete eso sí, si ese cucho me tocaba lo
acostaba de un plomazo [disparo].
Así fue, el cucho fue un sábado por mi máxima [amigo] y el cucho ya sabía que el pelao me
iba a presentar ¡estaba entusiasmado! el cucho. Listo llego en el carro, yo miraba el carro
con ganas porque hay estaba la plata.
Listo! el cucho paró y el parcero me presentó.
Nos dijo: súbanse, yo iba a montarme atrás, cuando el cucho dijo, no siéntate aquí
adelante con migo…” (Darío)
Darío se notaba ansioso por terminar con el ilícito, quería el dinero de un modo fácil, sin
medir consecuencias estaba dispuesto a enfrentar cualquier riesgo con tal de conseguir
el dinero.
“Fue un hecho, me monte pero pensaba que era más fácil cogerlo yo estando atrás pero yo
ya iba decidido, nos llevo a comer por el cable después nos dijo pa donde quieren ir, ahí
fue, que subiéramos al cerro de oro y ahí fué, subimos más arriba del cerro, por allá se
parquió en una parte oscura y me mandó la mano a la pierna, ¡malicioso el viejo cacorro
ese!, cuando saqué lo mío, [revolver] y le dije quieto viejo marica yo estaba asustado
porque el cucho decía es que me van a robar estos mal pariditos y de pronto se manió y si
iba a sacar un 38 que llevaba en la cintura y yo le dispare en esa cabeza porque era él o
yo…”(Darío)
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Las intenciones iníciales de Darío era robar el carro, sin embargo sabía que no era un
hurto fácil, pues las intensiones de su víctima eran otras; el impulso de enfrentar alguna
situación que estuviera fuera de control lo condujo a cometer homicidio e involucrar a
su amigo, atemorizado por el homicidio decide huir sin tomar en cuenta consecuencias
desfavorables.
“El disparo yo creo que se escuchó. Mi parcero estaba todo asustado, le dije venga pues
pelao lo hecho, hecho esta ayúdeme a bajar este cucho y lo tiramos por un rastrojo abajo.
Todos asustados nos montamos en el carro y yo me fuí para el solferino, donde le dije a un
señor que me podía guardar este carro en un garaje que tenia, el señor me dijo que porque
no lo guardaba en un parqueadero, yo le dije no cucho es que queda muy lejos y además
en el garaje suyo queda más seguro, además le pagamos 50.000 pesos no mas hasta
mañana. Pero nada, como el cucho era importante lo empezaron a buscar por cielo y tierra
y una cucha sapió que nos habían visto salir con el cucho en la noche, los gatos
[autoridades] se llevaron al pelao y lo hicieron cantar dijo todo, desde el principio hasta el
fin.
Llevó a los gatos a donde estaba el cuerpo y donde estaba el carro; en la madrugada
llegaron a la casa del viejito que nos arquiló el garaje. No me dió pesar porque se lo
llevaron por tener un carro donde se había cometido un homicidio, ya era cucho tenía 50 o
60 años, como le parece alquilo el garaje porque no tenía plata para pagar una factura y le
había llegado con mocha, se lo llevaron para la cana [cárcel]. Yo vi todo tan caliente que
me fui pa medallo, a los 3 meses regrese a Manizales y mi mamá me dijo que han estado
preguntando por mi yo sabía que eran los feos [autoridades] porque ese maricón sapió la
vuelta. Un parcero me dijo que la señora de la casa del garaje quería hablar con migo, fui,
era una viejita y me lloró, que por favor me entregara, que su marido era el único que
entraba la comida, porque el cucho trabajaba barriendo las calles. Yo me fui pensativo.
Pero nada, tenía remordimiento por esa cucha que hasta aguantando hambre estaba, a los
quince días organice todo me despedí de mi mama no le dije para donde iba y me entregue
y en el juicio dije que el cuchito no tenía nada que ver, no me arrepiento de lo que hice
porque quien lo manda a que sea así y el pelao que me sapió ya veremos en el mundo
estamos...”(Darío)
En el caso del joven infractor, puede entenderse el hurto cuya reacción social es de
preferencia la intimidación a la víctima, la satisfacción simbólica de lograr su cometido y
lograr la aprobación de su mayor referente, en otros casos de su grupo de iguales, de
ser el más “duro”, la costumbre de esta práctica lo incapacita física y mentalmente para
107
elegir otro tipo de solución a sus problemas, negándole posibilidades frente a su mismo
desarrollo psicosocial.
La racionalidad aparente es conformista, pues es implícita al dominio y superioridad de
su grupo de iguales, en este caso, la desviación es entendida como una forma de
comportamiento en sí misma, estamos acostumbrados de un modo convencional y
conformista a identificarlos e interpretar cada comportamiento anormal como un acto
desviado, que se escapa al control social, es decir sin reglas ni normas.
La sociedad enmarca la conducta desviada como cualidad del acto, su distinción radica
en que la conducta es meramente física y el acto esta socialmente dado, si tomamos el
fumador de marihuana, en asociación con el hurto, es obvio que su acción está movida
por razones hedonistas; la desviación, corrobora una práctica persistente de esa
conducta, el individuo desviado cae permanentemente en dificultades, esto si depende
de una reacción social, sólo si se es un desviado público con infracción a las normas
sociales, prevalece en la sociedad y sostiene su comportamiento como también su
reacción social.
h) Robo en los supermercados: esta práctica simboliza en el joven una
ausencia prolongada de objetos materiales durante su crecimiento, roban
toda clase de artículos, algunos jóvenes revenden los objetos robados
otros los dejan para su uso personal.
“Mi hemanita, también es tremenda lisa, una vez robó en un almacén disque cucos y una
blusa, se los metió por debajo de la falda larga que llevaba puesta, y cada rato va y recupera
en supermercados y almacenes, nunca la han cogido porque le salió a mamá…
inteligente”.(La Bruja )
108
“Robar en un supermercado es fácil ahí que estar es agisoso [listo] con las cámaras, pero de
resto breve [fácil], a veces lo cambio por vicio o si está muy vacancito lo dejo para mi y lo
luzco un tiempo” (Alexa)
Es el caso de tres jóvenes, dos de ellos de 15 (Dante) y 16 (Paraco) años, el menor del
grupo de 12años de edad (Chinga); durante varios días se frecuentan para el consumo
de Marihuana, inhalantes entre otros, buscan sitios de buenos paisajes como zona alto
de Chipre; para ellos es inspiración al momento de planear buenos “trabajos ilícitos”,
necesitaban dinero, pues se aproximaba el día de amor y amistad para celebrar con su
novias y amigos.
Finalmente comienzan a madurar la idea de asaltar un estanquillo; no solo obtendrían
dinero si no también víveres y licor de toda clase, buscaron una víctima mayor de edad,
le realizaron todo el seguimiento de horarios, entradas y salidas al estanquillo, esto por
8 días consecutivos; Tenían las armas listas, ya sabían los papeles que debían cumplir.
“Eran como las once de la noche, entró primero uno y pidió una cerveza y se quedó ahí
mirando que no hubiera nadie, al ratico llegó el otro man, pedimos media de ron y el cucho
como se dio la vuelta, lo agarramos!, lo amenazamos con un tote [revólver], lo llevamos a
la bodega, lo amarramos y le tapamos la cara, le dimos un cachazo con un ocho [revólver]
que también llevábamos y el cucho cayó al piso. Robamos de todo, aguardiente, ron,
comida y la plata nooo, mmm… las relucas [dinero], el otro chinga [compañero de 12 años]
estaba en la esquina poniendo cuidado, a mi me toco los 9 melones pues yo la cranee
[planeó el hurto], Y a los otros de 1 y dos palos. Todos estábamos con gorra y
pasamontaña yo siempre cargo un buzo doble fas por si algo”. (Paraco)
En este caso, la víctima estaba sólo, era un sitio poco vigilado por la policía, el atraco
fue el día sábado pago de quincena, para recoger más cantidad de dinero.
109
El caso de Ninja, es un joven de 15 años de edad, su crianza estuvo a cargo del padre,
quien trabajaba la mayor parte del tiempo en viajes; el joven estaba a cargo de alguna
vecina o tía, desde su infancia su comportamiento ha sido irregular, en sitios de
protección, y así sucesivamente, sus familiares evitan verlo debido a sus
comportamientos agresivos desde muy pequeño.
El padre ha tratado de obedecer a sus gustos a través de lujos y dinero, la madre del
joven, no reconoce su responsabilidad, vive en otra ciudad; Ninja toma a su padre
como objeto de sus deseos materiales, es un joven solitario, busca a sus pares para el
consumo y el hurto, prefiere la independencia y la soledad según el joven.
Cuando planean el hurto a un chalet, es conocido por Ninja, lo frecuentaba cuando
estaba más pequeño en compañía de algunos familiares, conocía al portero, sus
horarios de entrada y salida, además a otros habitantes del sector, toma la idea a partir
de la presión de algunos amigos, quienes planean a cabalidad toda la actividad, cada
uno conoce qué debe hacer, el lugar para guardar los objetos una vez robados estaba
seguro, así como el auto que recogiera dichas pertenencias. Veamos la historia:
“Teníamos pensado atracar un chalet en las afueras de la ciudad, ya estaba visto, era un
hecho, éramos 4, mas una vieja, el hijo de la cucha [madre de un compañero] mono
organizo todo, la cucha entretuvo al portero ¡pa que, la vieja tenía su pinta!. Y entramos a
esa casa por la puerta normal, una chimba! toda lujosa, empezamos a empacar televisor,
joyas, zapatos, ropa, y unos afiches del América que tenían, eso lo empacamos en
costales y pa’ fuera, cada uno se ocupó de una parte, ese man es un cerebro para hacer
eso y siempre gana. El man tenía una coscorria [dañado] de carro y ahí nos fuimos,
recogimos la cucha en la portería y ya.
El portero quedó sano [burlado]. Ese día me tocó como cuatro palos [4 millones de pesos]
por la vuelta [hurto], y yá quedé iniciado con eso y el vicio”.(Ninja)
110
Este joven reconoce que su consumo de marihuana era esporádico, sin embargo, al
ser frecuentado por este grupo de pares, tomó la iniciativa de probar otras drogas como
el bazuco y pepas, que le generaron un consumo más dependiente, lo que lo
involucraba en actividades ilícitas de mayor riesgo, sin medir consecuencias.
Según relato de Ninja los sentimientos que presentó durante el hurto, se mantuvieron
hasta el momento del consumo, después sintió que tenía la capacidad para continuar
con aquellas actividades y recoger dinero suficiente para satisfacer sus deseos.
Veamos:
“El caso de John muestra una marcada tendencia del hurto hasta la alcanzar lesiones
personales en sus víctimas; es un joven de 17 años de edad con tres ingresos en la linda
{centro de rehabilitación} todos por hurto y vicioso porque cuando me cogió el vicio ¡uy!…
papá yo ya no era capaz de salirme de el, hace 10 años consumo, su droga habitual es el
bazuco (pipa- crack). Según su relato para olvidar la muerte de su madre quien era su
referente afectivo mas fuerte. El primer hurto que hice fue cuando tenia 10 años tenia
mucho miedo porque me iba a robar unas gallinas y me las corone {lograr el hurto} y me fui
contento para la galería y vendí eso, la primera vez que consumí estaba caleto y metí de
una bazuco, eso me pego un pringonazo y me paniquie[asusté] y volví a robar plata en la
calle y seguí metiendo, un dia me fui pa el centro a robar y le quite un bolso a una cucha
[mujer] y unos sapos [persona] me cogieron y me pegaron una pela casi me matan a punta
de pata [puntapiés], menos mal vino la tomba [policía] y me llevaron encanao [privado de
libertad], me soltaron al rato y volví a robar y me traje el taco[rollo de bazuco] y me puse a
consumir, yo consumía cada rato porque en medio de la traba yo veía a mi mama, a mis
hermanitos, a mi agüe.
Es un joven solitario, busca a sus pares o jibaros en momentos de necesidad
económica, sale a vender droga en la ciudad, valorada en ($ 50.000), después entrega
al jíbaro y éste le da su parte ($5.000), así su consumo de bazuco y pegante son
rutinarios.
“Los fines de semana salgo a camellar cargando mercados y cuando tengo las Lucas me
voy pa donde mis niñas [trabajadoras sexuales], todas me pagaron mal, porque cuando
estaba tragado [enamorado], todas me abandonaban y yo caía a la olla [sitio de expendio]
todo triste y llevado a consumir a la lata [mucho] hasta quedar pelao.
111
Yo quede sin mi cucha a los tres años, ya que unos manes le dieron frutiño [disparar]
porque me di cuenta que ella vendía droga yo ya grande, por eso mantengo muy aburrido y
consumo tanto en la vida. Para no pensar tanto. (Ninja)
Para el joven, su necesidad afectiva y protectora se manifiesta en una actividad sexual
previamente atenuada por detalles y diálogos que favorecían la conquista, su habitual
consumo le permite evadir su recuerdos que le han marcado su infancia y
adolescencia, su sentido de vida se condiciona al consumo, y encuentros sexuales.
i) Robo por venganza: este robo se realiza por resentimientos de peleas
familiares, maltratos físicos, sin importar vínculos afectivos y sin apelar a
otras formas de resolución de conflictos, no se escatima en poner fin a un
sin numero de acontecimientos que han causado tanto daño, que solo
podría solucionarse con la venganza y no se descansa hasta alcanzar el
objetivo. Este un ejemplo:
“Cuando estaba con mis parceros en la esquina del barrio, en el plan del Carmen,
esperando el pago [alguien a quien robarle], subió un cucho con severo lazo [cadena de
oro], yo le hice señas a un parcero y ¡tan! ahí fué, le quitamos la soga, eso fue a las cuatro
de la tarde cuando ¡tan!, a las siete de la noche me cayeron los tombos por la vuelta, me
dijeron que tenía una denuncia por hurto, yo me hice el sano y le dije a los tombos que
estuve toda la tarde en la casa, un tombo me dijo que no metiera mas mentiras porque
tenían denuncio con testigo y todo, huy yo me asuste con testigo y todo.
Bueno eso se fué a juicio y cuando llamaron el testigo seño, yo me aterre, era una cucha
del barrio que mantiene a toda hora en la ventana parada mirando todo y si ella nos vio la
vuelta, pero se asustó y a lo ultimo no sabía que decir y bueno nos soltaron porque no
comprobaron nada; pero eso si esto no se quedaba así llame a mis parceros y les dije que
nos vengáramos de esa cucha sapa y dicho y hecho, nos enmascaramos y entramos con
el fuete [revolver] y todo. Tan!, le dijimos: ¡quieta chucha marica que esto es un asalto!
barrimos con todo equipo, televisor, DVD, y otras cositas por ahí, le dejamos esa casa
vacía por sapa a esa cucha malparida, lengui suelta…”(Anónimo)
“Mi padrastro es una lacra [desagradable] una Gonorrea!, pues siempre le ha pegado a
mamá y cuando me meto, ella lo defiende, entonces pa que es lacra, yo le robo cada rato y
112
lo dejo sano… Plata, más que todo, o calculadoras, relojes…porque ese man es taxista
pero es tremendo perro, también una vez le robé el pasa cinta y el celular que dejó entre el
carro y suerte. Yo voy donde mi mamá cuando ese man no está, porque me tira a matar
cada vez que me ve… Pero nada, sin mente con ese man…” (Pate Chola)
j) Robo en taxi: esta modalidad se orienta por un grupo entre jóvenes y
adultos que conocen bien a su víctima, generalmente utilizan esta clase
de vehículo para pasear por la ciudad, conducir embriagados, violentar
normas, simular una vida de lujos y apariencia de tener mucho dinero.
“Ese fue el primer hurto que hice me dio mucho miedo pero como estaba con mi
hermano pues nada. Le robamos a un cucho de un carro íbamos en el taxi y paramos
en un parqueadero de un edificio que queda en Palermo mi hermano es un loco y saco
lo suyo le robamos el pasa cinta y la plata, el celular y un anillo de oro, mi hermano lo
encuello y yo saque todo del carro del man, mi hermano ya sabia como iba a ser la
vuelta y listo felices…”. (Chepe)
En la calle deben desarrollar la lógica de la sobrevivencia para satisfacer las
necesidades que podrían ser cubiertas por los padres o un adulto significativo, si se
validara el lazo parental o con el núcleo familiar, además, el traslado de su mundo
privado al espacio público crea nuevas necesidades, como en la mayoría de los casos,
es el consumo de drogas.
k) El Paseo millonario: es un robo planeado, contratan el taxi y llevan a la
victima a retirar el dinero del cajero automático, es drogada con
escopolamina. Ej:
“Cuando mi hermano tuvo el taxi como un año, fueron muchas las vueltas que alcanzamos
hacer, yo me acuerdo disque del paseo millonario; eso es tener el man ya visto o sea un
man que se lo recomiendan a uno, o los mismos manes que uno ya sabe que tiene las
relucas, pues mi hermano como se mueve por toda la ciudad pues él sabe de eso. Y esa
vez, el man lo drogamos con escopolamina y esperamos como 4 horas el man fué y nos
llevó al cajero y sacó toda la plata, después le dimos su muenda y lo dejamos en tres
puertas. Ese día ellos hicieron la vuelta, yo campanié todo ese rato, éramos cuatro y con
fierro por si la vuelta se ponía peluda. (Dorada)
113
Relacionado a lo anterior, el delito se justifica a partir de su estado de necesidad: los
otros, “los que tienen” pueden ser despojados, ellos tienen no solo las cosas, sino
también la capacidad para renovarlas.
“Una vez por medio de otros manes duros, nos contrataron para robarle a un cuchito que
había retirado un dinero del banco, una plata larga, eso fue porque un man del banco dio
aviso y ya fuimos y nos quedaron como de a dos palos pa cada uno, éramos el man y yo.
En la moto del gato pues el corría mucho y yo pues sin agüero a la final ya sabíamos
cómo era. (Demon)
En el marco del análisis de los hurtos planeados o simples; las motivaciones allí
descritas, perfilan las jóvenes ambiciosas guiadas por la búsqueda del placer material y
vanidad de sentirse útiles y seguros dentro de un grupo de amigos. El grupo adquiere
gran relevancia, debido a la expectativa del rol que se tiene de cada uno, además la
consideración, aprecio y respeto que existe hacia el líder del grupo.
Lo anterior, se establece como escala de valores a la cual se desea llegar; así mismo
los vínculos afectivos allí construidos, conlleva al joven en un tramado de sensaciones
que fortalecen su personalidad y pone bajo presión de grupo posteriores decisiones
para hurtos planeados, es decir, para el joven resulta difícil negarse ante las acciones
delictivas que se planeen en el grupo.
l) El Avigeato: conocido como el robo de animales, frecuentemente los días
sábados en la galería, día de mercado, otros jóvenes se desplazan a
fincas cercanas para robar desde gallinas, perros, vacas o caballos, éstos
son intercambiados por droga o revendidos en la galería. A continuación
el siguiente argumento:
“Cuando hemos trabajado en fincas, o cuando mis tíos también me cantan la vuelta, robar
vacas o perros, caballos, en las fincas que a veces no les ponen celador o cuando mi tío
las cuidaba ya sabíamos cómo era la vuelta y todo estaba listo hasta el carro pa llevar los
114
animales, pero no, a veces con ese man no me gustaba, siempre me daba en la cabeza”.
(Piña)
“Yo tenía una flecha [amigo] que le gustaba hacer esa clase de torcidos [actividades], una
vez en las ferias en la cabalgata que hacen, me hice pasar por ayudante de caballos y
engañamos una cucha ahí, el man ya tenía vista la vieja le dije: le llevo su caballo en este
camión yo soy el ayudante del patrón, y de una salimos, al ratico lo llevamos a una
pesebrera del tablazo y lo negociamos, el man es de los torcidos y conoce de eso.
Entonces nos dieron 3 millones de pesos, yo me gané un palo por la vuelta y todo bien, le
llevé a mamá pa’l mercao y pa’l vicio también alcanzó, a veces nos seguimos viendo pa
otras cosas”.(Chiqui)
Los jóvenes no asumen como delitos, las faltas cometidas por las cuales se encuentran
en una medida privativa de libertad y aún, cuando pueden reconocer algún tipo de
delito, (como el robo) lo justifican o lo avalan de acuerdo a las circunstancias (“pa‟
comer...”) bajo las cuales se comete.
m) Robo de cableado: este robo es practicado por un solo joven que conoce
bien el sector, sobre todo su vigilancia cualquier tipo de cableado de luz,
teléfono, tv cable, se sustrae el cobre se funde y éste se vende o
intercambia por droga en la olla.
“Cuando robamos el cable es por la noche y pues ya sabemos cuales y que tan largos nos
sirven, y que tan gallo es la vuelta. Cuando lo cogemos, a veces uno solo para no dar
bomba, y lo quemamos por las canteras allí detrás, por la carretera vieja al tierrero, ahí eso
es tremendo quemadero de alambre usted se va a la seis de la mañana y ya ve manes ahí
quemando en forma y a las siete ya tiene usted su alambre pelado pa venderlo”. (Chinche
Viejo)
115
3.3 “Parceros” de y en La calle
El grupo de pares o parceros de la calle, cuyos actos de infracción se destacan desde
el atraco, el robo de casas, el asalto de transportes urbano, el robo de comercios
menores, otras de mayores infracciones a la propiedad, o el robo de carros y motos.
Sus hazañas son características de la unidad y lealtad que al interior del grupo de
pares se practica, muchas de las jóvenes aquí involucradas en el grupo de parceros,
son las novias de sus integrantes quienes tienen un papel condicionado.
Las muchachas fumaban bazuco [pero] nada más tres participaban en atracos. Como
estas tres partícipes del robo hay otras tantas, siempre sometidas a cláusulas
discriminatorias. Naturalmente hay excepciones, las pocas que alcanzan el título de
parceras lo hacen asumiendo a cabalidad la fiereza masculina.
La pandilla o parceros de la calle, brota de entre la pobreza y la marginalidad como
protesta a esta encrucijada de sinsabores que su contexto le obligo aprender. Otros
grupos de pares que suele vincular a adolescentes infractores son los pertenecientes a
estratos 5 y 6 son los llamados “Gomelitos”:
“… hay bandas de gomelitos … Les gusta tomar al piso [mucho] y meter perica … sacan
los fierros [revolver] y hacen sus vueltas para quienes no importa el derroche de dinero y
otros consumos”. (Anónimo).
Las sociabilidades que se establecen entre iguales responden a una búsqueda de
afectos entrañables ligados a la emoción como lo plantea el Sociólogo Edgar Morín:
“se caracterizan por ser flexibles, de acuerdo a la voluntad que se constituye en la
cotidianidad, será fuerte mientras se involucre un compromiso personal que constituye
la apropiación de símbolos y valores”, Morín. (1992:80).
116
En cuanto a los vínculos otorgados a la familia, se parte de las funciones que frente al
afecto cumple cada uno de sus integrantes paralelo al grupo de pares, también se
aprenden reglas, hábitos y comportamientos que están en conformidad con la cultura.
La condición del joven infractor y su desgastado núcleo de familia contemplan desde el
irrespeto por el otro, castigos físicos, baja autoestima y modelos negativos que son
degradantes y no permiten una construcción de identidad adecuada, son jóvenes que
en su mayoría, presentan ausencia de autoridad, en otros casos autoritarismo, también
se identificaron casos de jóvenes con familias sobreprotectoras y en otros con carencia
afectiva. Se observa el caso del poli como ejemplo:
“Mi vida ha sido muy brava, cuando tenía 12 años me salí de la casa, el motivo es que
mis parceros también se habían salido y como yo los pillaba siempre ganados o sea con
plata a mi me dio ganas de estar como ellos con los pisos (tenis) de marca y la percha
(ropa) bien buena…”(Poli)
El trance del joven a la edad adulta, inicia con un desapego a su grupo de familia para
adentrarse en la importancia de conjugar en su cotidianidad al grupo de pares, cumple
características en común, tanto físicas como psíquicas, sociales y culturales, éstas le
ofrecen un afecto y confianza diferentes a las de su grupo familiar, veamos:
“Un dia estábamos ahí en el parche cuando me invitaron a hacerlo o sea a ir a robar a mi
me dio miedo pero nada yo quería estar como ellos nos fuimos para el centro y cogimos a
una cucha que llevaba que cuca (Lujoso) de celular y se lo arrebatamos y salimos
corriendo ¡huii! yo sentí pánico, miedo también y pensé que me iban a coger en algún
momento, pero nada, fue mas el susto, bueno seguí robando viendo que uno se trae las
Lucas (dinero) y bien fácil sin tanto trabajo…”. (Chucho).
117
Realizar actividades juntos, comprometerse con la ejecucion y mantener el
cumplimiento de ésta, son los elementos claves para permanecer en un grupo de
pares, también es de gran valor que su rutina de encuentros está intimamente ligado
con la necesidad de estrecharsen jovialmente y comunicar emociones y amenazas que
se viven en los otros espacios o en la realizacion de las actividades Lorenzer (1972:
61).
Los jóvenes sujeto de estudio, se identifican y resguardan en grupos que varían de
acuerdo a sus gustos e intereses de estilo y forma, son encontrados en la calle como:
(miembros de pandillas, Gambas, Mariguaneros, Punkeros) o aquellos que en su
mundo solitario prefieren actuar sin mayores testigos (Gamín, Ladrón, Raponero,),
quienes tienen en común, por un lado, la preocupación y la alarma social que provocan,
y por otro, la falta de distinción entre lo que constituye una actividad delictiva
propiamente dicha y un comportamiento simplemente desviado de las costumbres y
tradiciones, calificativo que estigmatiza por los condicionamientos socio-económicos en
que se encuentran y la ausencia de una familia estable.
Los pandillos abundan, sus efectos se muestran desde cualquier lado de la ciudad
como la única y más aglutinante de las expresiones juveniles populares, el raponero
por ejemplo, se caracteriza por su condición de experiencia popular, el ladón cumple
iguales efectos de robo, pero su práctica es más habitual; el mariguanero, quien
eventualmente roba, y se [parcha] en la esquina del barrio haciendo gala de brotes de
violencia, sin embargo, para nuestra caracterización objetiva, el grupo de estudio se
estructura a partir de estos esquemas sociales de raponero, ladrón, marihuanero,
además por la incidencia en la trasgresión constante de la norma que le da el valor de
infracción y por ende, de ser un adolescente en situación irregular o bajo
responsabilidad penal con el estado.
118
El “parcero” el amigo que acompaña y cuida al otro como a si mismo, en cuestiones de
prácticas delictivas que impliquen riesgo físico, comparte en el vecindario con unos
pocos, aquellos de mayor confianza; presenta conflicto con la familia, abandona la
escuela y no posee actividad laboral estable, su perfil es el de un muchacho de 14 a 16
años entregado de día entero a la esquina.
Habita en el [parche] donde los reclamos por una vida justa desaparecen, es un joven
con aparente convencimiento de lo que hace, no lo asedian los apuros de la eficiencia
ni las urgencias de la productividad, a veces estará hablando, por momentos jugando,
largos ratos en un silencio vacío, mientras piensa en medio de sus trabas la vida que
lleva; de allí no sale, pues se siente seguro y confiado de quienes le rodean, su vida
está guiada por odios, venganzas o amores utilitaristas. Lápiz nos cuenta:
“Mi vida la he vivido más en la calle que en la casa… me quedaba en la calle con mis
amigos y si no en la casa de vecinos, la vida mía es gaminiar y fumar de eso, siempre con
los míos donde me siento confiado”. (Lápiz)
Cabe anotar que existen fuertes diferencias entre parceros de la calle como aquellos
que habita en las ollas o las calles, viven en residencias o piezas que alquilan por un
dia. El otro parcero en la calles como en el caso anterior del relato presentado es aquel
que tiene un sitio de llegada como su casa de origen con padres, o familiares, en otras
condiciones en casa de amigos.
El parcero de la calle, rompe sus relaciones originales por múltiples conflictos familiares
y sociales, lo tipifica el nomadismo; sin embargo, son mundos paralelos entre los
parceros de y en calle, pues son tocados por la trasgresión a la norma constante, la
adopción sostenida de las prácticas delictivas y consumo de droga. Fragmento de
entrevista:
119
“El organismo mío estaba acostumbrado a meter droga pa’ poder estar sin pena. Donde
quiera que iba el vicio es constante. Al parche lo une principalmente la droga porque ahí
llegan todos a consumir. Al igual el robo. Una vez metidos en esto las amistades y los
hábitos se plagan de la de asaltos en la calle, en el bus y el comercio pues decidí que si
me iban a matar por pandillero mejor me mataran robando y drogado”.(Paredes)
Este tipo de pandillero se lanza al robo, como la estrategia que sostiene sus hábitos y
consumos de droga y otro tanto sucede con el ejercicio violento, el golpe y la puñalada
viven para combatir a un adversario que abundan en la vida pandillera, estas prácticas
agresivas se relacionan desde su misma complejidad social y las particularidades de
los sistemas ideológicos en que se inscriben; con forma particular de manifestarse ante
su grupo de iguales.
En el caso nuestro (el parche), los universos simbólicos que construyen los jóvenes
para autodenominarse frente a la sociedad, giran en torno a nociones como la de
belleza, prestigio, dominio y poder en la cotidianidad que ellos viven, lo que constituye
una forma de cosmovisión frente al mundo y sus intersubjetividad con el otro22.
Las pandillas son enfrentadas por las autoridades: “…en más de una ocasión me
estaban buscando para matarme…”, pero a pesar de esto, los jóvenes encuentran más
convicciones para mantenerse en pandilla, la adrenalina que seduce las huidas, en
otros casos los aislamientos a instituciones de rehabilitación no son obstáculos para
cumplir sus metas ilícitas, es así como Los reintegros a la sociedad significan un
costumbrismo que toleran en sus grupos de familia y grupo de parceros, finalmente
entrar y salir de las instituciones se convierte en un estilo de vida.
22
LÓPEZ AUSTÍN, Alfred. Cuerpo Humano e Ideología en Las Concepciones de los Antiguo Nahuas. Universidad
Nacional Autónoma de México. 1984.Página 64
120
Una vez el grupo de parceros consolidados como pandilla, se cumplen reglas que
están de antemano establecidas. La pelea a piedra, áspera pero divertida, pronto se
convierte en enfrentamiento sangriento: “Comenzamos como un juego a tirar piedra…
pero las cosas fueron en serio…” Al parcero lo define la trasgresión violenta, sus
matices se imponen, como sus prácticas delictivas y el consumo compulsivo de drogas.
La pandilla busca apropiarse de un territorio, literalmente, está sembrada sobre una
porción de tierra donde ansía un dominio indiscutido, extendida entre esta cuadra y la
de calles más allá. Allí se impone, se construye un poder social eficaz en tanto ejerce
control sobre el intercambio de bienes estratégicos para la vida y la convivencia en el
barrio: “ Nunca nos dejamos sabotear el territorio, pa’ nosotros es sagrado”, se dice de
continuo. La dificultad que impera en estos barrios marginales es el tránsito de un
individuo ajeno al barrio, pues se enfrenta a cualquier tipo de asalto, sus integrantes y
prácticas se conjugan en el [parche] para referir la actividad de acudir al lugar de
siempre y dejarse arrastrar por los acontecimientos que depara; se trastoca en el
[parcero] para distinguir al amigo, al ser cercano digno de consideración y por demás
nomina, el sitio de encuentro, el espacio físico donde se renueva la cita día por día.
El punto de reunión desempeña un papel esencial en la identidad grupal, no es un lugar
cualquiera modificable, es un punto fijo dotado con total certeza, es frecuente que sea
un lugar abierto escogido justamente por su centralidad, otras veces un rincón apartado
liberado de la mirada incómoda del vecino; los primeros son los más corrientes,
siguiendo la norma del desafío, hacerse visible es parte del código pandillero, sin
embargo las operaciones de limpieza [cuando vienen la policía a allanar casas y
reclutar jóvenes], han moderado el espectáculo forzando el desplazamiento hacia sitios
más discretos, al menos durante ciertos períodos de tiempo.
121
En medio de esta variedad de motivos el territorio opera como justificación
determinante: “parcharse” en un sitio significa una marca de dominio sobre un terreno
cuyos confines, están en permanente disputa. El [parche] está investido de poderosa
fuerza de atracción: [no sé lo que tiene esa esquina para agrupar a la gente, no se...
algo extraño. Es como una fuerza]. [Parcharse] significa pegarse, en efecto, el parche
aún en la más refinada de sus elaboraciones, no deja de ser un superpuesto tosco
imposible de ocultar.
Como la pandilla, un [pegote] abandonado a la extravagancia de la desocupación, el
conflicto y el goce visible por su exceso: su poder nace de la manipulación del miedo, el
parche es [para tapar un agujero o rotura], obtura un hueco que siempre estará ahí,
intocado e idéntico a sí mismo, exacto a la pandilla, quien denuncia en su ruptura el sin
sentido de una época, pero sin elaborar la más simple enunciación al respecto: es una
protesta muda.
[En el parche uno busca que me vieran parado en ésta esquina y tengo que hacer algo
pa’ que me cojan miedo], se alimenta de ser un franco espectáculo porque [uno busca
que me vieran] ahí se congela el gesto [parcero], es tener la ansiosa necesidad de
reconocimiento, de ser aceptado y visto, son mudos, pero muestran el régimen de
visibilidad de su espectáculo, empeñados en su búsqueda de placer prolongan las
tensiones propias de la esfera pública contemporánea: los actores, interesados en ser
reconocidos y no tanto representados, apelan al lenguaje de la identidad y la cultura.
[El parche es todo], es la consigna legítima para tantos hombrecitos jóvenes de los
sectores populares, porque ellos están [en la vida del mundo], ante su desafío toda
certeza vacila: Son entonces una expresión de la urbanización cultural.
122
3.4 Estilos y preferencias urbanas
3.4.1 La Moda
En cuanto a la moda el adolescente masculino contempla y acopla desde sus
accesorios estéticos, modos femeninos, de igual manera la mujer adolescente no
realiza distinción en sus modos de expresión corporal, estilos y moda, ambos
comparten estrechas similitudes en sus estilos y preferencias al vestir; por ejemplo, en
la observación e interacción con los sujetos de estudio se observa semejanza en el
modo de portar el (pearcen) pirsin; este es utilizado por hombres y mujeres, ambos
géneros en (cejas, nariz, labios, lengua, orejas, ombligo y zonas erógenas), así mismo,
sus cortes de pelo son llevados de acuerdo a la importancia y exigencia del grupo, sus
formas y siluetas corporales son delgadas, sus vestuario en general es unisex
cumpliendo con las nuevas exigencias de lo moderno. Ejemplo:
“Me gusta llevar el siete, en otras ocasiones los cuadros que se sobresalen por la cresta,
tengo un amigo que usa el estilo estadio y chivera para impresionar a las chinas. Otras
veces lo he teñido de rojo, o amarillo depende de lo que me pase por la cabeza”. (Demon)
La imagen corporal o autoimagen, juega un papel fundamental en la conformación de la
personalidad, ya que es la forma como percibimos nuestro cuerpo e influye en nuestra
manera de intercomunicarnos (Alfred Adler 1999: 77). Los cambios de la moda en el
joven son constantes, comprometen a una revisión de su imagen corporal, permitiendo
un ajuste a su necesidad psicológica de involucrarse cotidianamente en comparaciones
con sus iguales ya que le proporcionan patrones conductuales que lo ayudan a
encontrar su propia identidad. En este aspecto utiliza el cuerpo; primero como forma
diferenciadora de los otros y al mismo tiempo buscando un parecido a los líderes del
grupo, así puede el adolescente establecerse activamente en sociedad, es decir,
123
adquiere cierta habilidad para romper esquemas y tradiciones culturales que lo
diferencian frente a sus adultos como los primeros enemigos en la sociedad, como
veremos a continuación:
“Me gusta tener una parte larga y otra corta, a veces de diferente color, también me
identifico por que todos llevamos la uña del dedo meñique de las dos manos largas,
siempre llevamos tatuajes por ejemplo del dragón, arañas, calaveras, diablos, la de Cristo,
y las iníciales de la china o de la cucha. Me gusta los pisos de marca como (Nike, Adidas,
Newbalance, Convers, Brama y así por el estilo). (Richi)
Los jóvenes sujeto de estudio, son representados a partir de la irreverencia y desafío
de una moda muy informal sus estilos varían desde pantalones cortos (llamados
mochos), camisetas amplias de colores fuertes, estampados alusivos al consumo de
marihuana (calaveras, plantas de marihuana, rostros de famosos que han sido leyenda
por el consumo como (Bob Marlym, Aerosmit, entre otros).
Así mismo, son representativos los tatuajes que portan desde muy tempranas edades,
por ejemplo: dibujos que representan violencia, de animales salvajes, rostros de Jesús ,
rostros maquiavélicos, símbolos que fomentan pánico, incitan a un consumo de drogas,
otros como nombres de la pareja, relacionadas con erotismo y violencia; éstos son
elaborados de acuerdo a sus imaginarios y estados de ánimo en el momento de
plasmar en su piel dicha figura.
Encontramos que portan calzado de calidad, de marcas (adidas, nike, new balace,
lacos, okey, kimberland, cater pilar), cuyo fin es atraer el sexo opuesto y facilitar la
huida ante una persecución, cabe anotar como aspecto característico en su vestuario,
el porte de (busos, chaquetas, camibusos, con capotas, manga larga y doble fas) para
124
ocultar su rostro y camuflarse fácilmente en el momento de efectuar el ilícito; es típico
usar uñas largas específicamente la del dedo meñique para facilitar la ingesta de
perico; en otras ocasiones sus hábitos de consumo están familiarizados con
marihuana, bazuco, pegante, pepas, acompañado de alcohol.
Finalmente identificamos un joven con modelos imitativos de sus artistas y grupos de
música favoritos, esto lo hace más aceptado y valorado en su grupo de pares.
Lo anterior aplica para el joven infractor de estrato uno y dos básicamente; de otro lado,
para el joven infractor de estratos cuatro, cinco y seis, se visualiza una moda más
sencilla y menos estrafalaria, prefieren pantalones jeans, camisas de colores naturales,
tenis formales de alta gama, así mismo la tendencia a usar pirsin, tatuajes en su piel y
peinados extravagantes son menos notorios, cabe resaltar que para este último grupo
de jóvenes su tipología en el consumo de psicoactivas es de estándares más costosos
como el uso de cocaína, éxtasis, heroína, popers, leiris, acompañado por alcoholes
fuertes.
En otras expresiones de sus relaciones personales y manifestaciones de afecto pueden
referirse en el uso de su tiempo libre que se contempla en charlas en los parques,
consumo de marihuana en calles y sitios de lógica habitual para su uso, frecuentan
centros comerciales , corredores turísticos, espacios de consumo y expendio(ollas), su
recreación también se valida en los encuentros de fincas alejadas de la ciudad,
espacios deportivos, bares, billares, discotecas, salas de video juego, entre otros.
Cotidianamente se privilegia las actividades de expresion corporal como (bailar,
escuchar musica), entre los cuales se describen los ubicados en la Avenida Santander:
Parque de los enamorados, Parque la Leonora, zona rosa, Parque de la asuncion, halls
125
de encuentro del edificio castillo, plaza sesenta y dos, cable plaza, multicentro estrella,
plazoletas de universidad catolica, universidad de caldas, calles del coliseo menor,
velodromo. Avenida kevin angel: parque de la asuncion.
Sector del centro: Parque caldas, Parque hernesto gutierrez; Aladino sala de juegos,
Barrio el carmen (cancha,carrera 33; 34, el plan ), barrio la avanzada, (carrera 27),
Barrio San Jose(parque, puente del tio)Barrio ias Americas(terminal, bar JR, bar
Maltibori, carrera18,19, bar el Remanzo, bar el Ganadero, cafeLuna Par, Transportes
Irra, Cafe Union, la sombrita,Cafe el Castillo, Bar la cigarra, Bar Don Quijote Sector
Chipre: Estadero las colinas, corredor turistico Avenida doce de octubre.
Sector Norte: barrio el solferino(el plan); Barrio Minitas(el plan, la cancha, control de
busetas).
3.5 Descripciones de usos de marihuana y bazuco y su impacto sobre el hurto
De la totalidad de los hurtos narrados, muchos están acompañados de consumo de
droga como el alcohol que es desinhibidor y marihuana como estimulante, en otros
casos para evadir parte del pánico y generarse seguridad, “no sentir remordimientos de
conciencia”, el consumo de crack es frecuente a la hora del hecho delictivo para
generar estado de alerta y opacar cualquier síntoma de inseguridad y temor.
En otras ocasiones después del hurto, estos jóvenes celebran con droga y amigos en
un lugar seguro como la olla; como satisfacción ante el trabajo realizado y
compensación al riesgo.
126
De otro lado consumir droga minutos antes del hurto es tomado como alternativa ante
una posible captura pues pueden escudarse en la irritación, manipulación de
emociones de efectos provocados por la droga para conspirar ante un posible
enjuiciamiento legal.
“He robado de todo primero en la casa, después en la calle, y casas de amigos, muchas
veces era motivado por el vicio [bazuco], ya después por mis amigos, hermanos y tíos,
me gusta la ropa de marca, mis buenos pisos y mantenerme bien pintoso, también para
darle plata a la niña y a veces a la cucha, no faltan los buenos parches pa beber y meter
vicio hasta que se acabe la plata y ahí vuelve la misma rutina, ir hacerlo, y si se corona
caemos y a farriar se dijo”.(Care Roca)
Los hurtos y demás actividades llictas están dirigidas a obtener en un primer momento,
placer de manera rápida, por el consumo de psicoactivas, segundo, tiene un sentido
lúdico, debido al atractivo por el riesgo y aventura constante que trasgredir las normas
implica.
Normalmente el consumo de psicoactivas resulta ser un rito para celebrar un robo
realizado de manera exitosa, pero llega un momento en que el bazuco se convierte en
el centro de sus vidas, es entonces cuando roban para gastarse todo el dinero en la
compra de la droga, y lujos personales, produciéndose la relación delito-droga-
vanidad.
“Una cucha nos dio el pago con un montón de anillos y cadenas de oro que llevaba
puestas, nosotros pimi y yo íbamos por toda la avenida de Chipre en bicicleta sin ningún
pensamiento malo se lo juro … entonces la miramos y nos quedo gustando además estaba
bien buena, la seguimos y le caímos en villa pilar yo empecé por arrumarla [orillarla] en el
anden y hacerle caritas cuando menos pensó le caímos como a rata yo le arrebaté todo,
hasta el bolso, y pimi lo que hizo fue cogerla de quieto con una punta y nada la vieja se
asustó mucho pero no grito, y salimos al soco [rápido] por la avenida a dar a la calle vieja
de aquilino y listo, llegamos al desvare, primero contamos las cadenas, sacamos lo del
bolso, la plata, los papeles los dañamos y los votamos por ahí, nos compramos par cachos
de marihuana para calmarnos y salir a vender las cadenas.
127
Nosotros tenemos yavería [amistad] con un man de las prenderías de la 19 siempre cambia
las cosas robadas por plata, el man nunca pregunta nada, él sabe y yo también, es mas, la
bicicleta era de él, entonces había que ser agradecido con el man. (Figura y Pimi)
Con relación al número de jóvenes entrevistados, es necesario señalar que en la
totalidad de ellos, la marihuana es el alucinógeno de mayor consumo, y se encuentra
presente al momento de cometer delitos y ser ingresados al centro de rehabilitación.
El consumo de sustancias psicoactivas en las últimas décadas, ha alcanzado índices
altos relevantes entre la población adolescente, este incremento del uso inmoderado de
psicoactivos ilícitos y alcohol, entre los jóvenes, se ha transformado en un tema de
preocupación tanto para las instituciones de educación como las de salud y seguridad
pública Becoña (1996:249).
Aún cuando se reconoce que el consumo de psicoactivos por los adolescentes es un
problema social relevante, es importante analizar este fenómeno desde la percepción
que se tiene en la opinión, respecto al uso de sustancias generadoras de adicción en
los jóvenes, que con frecuencia, está cargada de prejuicios y de inexactitudes
derivadas de una falta de información adecuada muchas veces difundida por los
mismos medios.
De acuerdo a las encuestas realizadas al grupo de 50 jóvenes internos de la ciudadela
los zagales, se conocen como principales motivaciones al consumo de drogas; en un
60% por escapar de los problemas, en la mayoría de los casos familiares, un 15% para
conseguir lo que se deseaba, como búsqueda del placer o disfrazar la ansiedad, así
como un 10% por presión de pares y obtener reconocimiento dentro del grupo, por
soledad un 8%, quitar la timidez un 3% regularmente en fiestas, encontrando en menor
grado; presión de su pareja un 2% o por abuso sexual 2%.
128
La tendencia de consumir Marihuana es de un 82% como droga de inicio, que
constituye un ascenso a otras drogas de mayor dependencia como el bazuco, un 80%
con aplicaciones en crak (pipa), se acompaña de licor 82%, en muchas ocasiones con
motivos de celebración de hurtos, o búsqueda de placer; el cigarrillo con un 72% como
estimulante o simplemente para disfrazar la ansiedad o la hiperactividad ocasionada
por drogas mucho más estimulantes.
Su frecuencia de uso y consumo de dichas psicoactivas es habitual, y se convierte en
un juego explorador, esto depende de la cantidad de dinero con que el joven cuente, se
resalta que habitualmente su consumo se practica pues, en los sitios de expendio, se
aprueban sus ventas por intercambio de objetos personales o aquellos obtenidos por
hurtos, o demás actividades ilícitas a las que el joven se expone en su cotidianidad.
Esto explica que el uso de psicoactivas se hace en ocasiones antes de cometer los
hurtos o cualquier otro tipo de actividad llicta, para evadir el temor y la ansiedad que
genera el acto. Otros jóvenes prefieren un uso después del hurto porque se permite
celebrar con las cantidades que se deseen sin temor a efectos de apaciguamiento y
letargo como en el caso de la marihuana. El consumo de marihuana y bazuco
habitualmente se acompaña de licor en diferentes circunstancias.
Las percepciones y sentido del consumo de SPA que el joven manifiesta nace de los
modelos aprendidos desde su entorno, el contexto en el que se consumen tanto entre
adultos como entre jóvenes, en diferentes lugares y sitios públicos de la ciudad, su
mercado y acceso fácil representa permisividad pues aunque reconocen algunos daños
físicos y mentales no se asombran frente a los conflictos sociales, familiares o legales
que concluye. En la muestra estudiada, corresponde a edades comprendidas entre los
13 y los 23 años de edad, encontrando un tiempo de consumo mayor de 1 a 5 años con
un 62%, y en menor escala un 18% de 6 a 8 años, esto implica un consumo desde su
infancia moderado sin ningún tipo de restricción o control.
129
Muchos de estos jóvenes son hijos de jibaros, que se convierten en expendedores por
la ciudad, en diferentes facetas, como vendedores ambulantes, domicilios o
simplemente se ubican en un lugar estratégico del sector, su edad de inicio en el
consumo de SPA, oscila entre los 6 a 11 años de edad con un 70% y de los 11 a 15
años de edad en un 30%, con un abuso marcado en la adolescencia, quienes llegan a
su adultez con un gran deterioro físico y mental. Los imaginarios que se tejen alrededor
del consumo de SPA y el hurto parten desde la aventura que genera, los episodios de
placer, erotismo, adrenalina, curiosidad y deseos de reconocimiento para lograr su
prestigio en el grupo, satisfacer sus niveles de ansiedad, temores, riesgo físico, poder e
inseguridades, para identificarse y “ser alguien” y obviar los problemas que le suceden
en su grupo de familia y otras cotidianidades.
3.5.1 La olla y su contexto: En la cotidianidad del adolescente consumidor
La olla o sitio de expendio de drogas, es uno de los lugares más concurridos por
aquellos jóvenes que tienen un consumo problemático de drogas, varía desde
marihuana, bazuco, pepas, pega, cocaína, perico; es un sitio no solo para un consumo
libre de drogas si no además de encuentros entre parceros para pasar un rato
agradable o planear actividades ilícitas como hurtos, homicidios, atracos, allí llegan
jóvenes, adultos, mujeres y hombres de diferentes edades, y estrato social e
ideologias.
Se comparten las pipas de bazuco, los tabacos [cacho] de marihuana, jeringas de
heroina o bolsas de pega para armonizar el ambiente y generar algún tipo de dialogo,
como por ejemplo de hurtos satisfactorios, de homicidios y en general de sus
130
actividades ilícitas que dan cuenta de su honor y poder para moverse en la ciudad y
tener dinero fácil:
“Cuando a uno le gusta el vicio lo primero que hace cuando se levanta es con la idea de
meter vicio no de buscar el desayunito, lo primero es ir a conseguir pa la pipa o el vareto”.
(Figura)
En este relato se muestra como el hábito al consumo de bazuco y marihuana es
prioridad en su rutina diaria, el concepto de ser vicioso lo relacionan con el afán de su
búsqueda y el hecho de no realizar otro tipo de tareas productivas como buscar el
desayuno:
“Nosotros hablamos de las cosas buenas que nos pasan, que cuando nos volamos de un
tombo [policía], o de los feos [fiscalía, o coronamos una vuelta [actividad] de robo algún
apartamento, o casa. También cuando hacemos bien las tareas que nos mandan el duro
[líder]. Se escuchan risas y se ven caras amables, entre palabras nos pasamos la pipa de
bazuco que es la que mas pega aquí para nosotros, nos quedamos toda la noche contando
a veces lo mismo o simplemente mirando pa’l piso o cualquier otro lado. (Aurelio).
Durante los encuentros en la olla y sus diálogos se nota amabilidad y empatía entre sus
miembros para contar en detalle las hazañas que satisfactoriamente las cumplieron. Es
un ritual el pasarse la pipa para que varios fumen y contemplen la droga, esto permite
mayor acercamiento y confianza, además cada uno toma iniciativa para comprar y
compartir a través de una ronda el bazuco.
“Realmente la mayoría de la gente que esta metida en esto, habla no mas de sus delitos, “que
cuando cogimos aquel, no lo apretamos, o le robamos”, o cuando la policía nos hizo el pare y asi
sucesivamente. Prácticamente recordando cosas del pasado, sus brincos y cosas
sucias”.(Campana)
La olla, es el espacio donde se consume drogas, es sencillo y con pocos accesorios, es
una sola habitación grande, sin sillas, ni mesas, cuenta con una llave o lavamanos para
131
tomar agua en ocasiones. Regularmente es alquilada por el jibaro [vendedor de drogas]
allí se improvisa un rincón de la habitación para armar los varetos de marihuana y las
pipas de bazuco, normalmente es un sitio con poca luz, con olores fuertes, con basura
en descomposición, es un sitio bastante concurrido lo cual visualiza gran contaminación
del aire por los diferentes olores originados por las sustancias químicas que se
perciben, otro tipo de contaminación que surge dentro de este sitio es la contaminación
auditiva creada por risas, gritos, llantos, manifestaciones de euforia o conversaciones
que se escuchan de aquellos que están bajo efectos de alguna droga (alucinaciones,
delirios).
Cabe destacar que existen diferentes creaciones de los sitios de expendio conocidos
en la ciudad a través de: griles [bares], que en ocasiones cuenta con la complicidad del
administrador o propietario del establecimiento.
Las Residencias (negocios públicos que brindan servicios de alojamiento por horas,
noches o días según la necesidad o el interés del cliente, otro tipo de olla utilizada, se
localiza en montes [zonas verdes) alejadas de la ciudad por ejemplo: olla del bajo
Persia, olla del Zacatín (zona baja de la Universidad Autónoma), limites del barrio el
Guamal adyacente a la vía Villa María, parque Aquilino Villegas, las canteras vía
Arauca, además, se encuentra también ubicadas algunas ollas en las diferentes
comunas de la ciudad, específicamente en casas de familia, alquiladas por los jibaros
cuyos intereses particulares son netamente económicos.
Otras ollas comúnmente son ubicadas debajo de los puentes (olivares, autónoma,
Vizcaya), así mismo, zonas de poco acceso de la policía por ejemplo (parque del alto el
solferino, plan de la avanzada, cola del Carmen).
132
“Una de las condiciones que siempre ponen es si tiene plata entra, si no se devuelve, es
decir, si tiene algo pa dejar, algún cambiazo de pisos [zapatos], camisas, pantalones,
celular, billetera, la cedula, o cualquier cosa de valor pa empeñar y darse en la cabeza
[consumir]. Todo el tiempo entra y sale gente de aquí, por eso hay que estar en la juega
[atento] con el que esta avisando arriba cuando llega la tomba [policía] o los feos pa joderlo
a uno o al man este [dueño de la olla], el campanero [chinga] avisa por medio de silbidos, o
visajes con la mano, además siempre se parquean de frente en bicicleta para movilizarse
más fácil y avisa con tiempo si me entiende. Otras veces esos marios [policías] son todos
vendidos piden la liga [dinero] al man dueño de la olla por ahí unos 200.000 o más y nos
dejan sanos, ósea nos dejan quedar y no dan tanto visaje con radios y motos, patrullas”.
(Hércules)
En este caso el ambiente en la olla se contempla con algunos requisitos para
mantenerse en ella, como el hecho de tener dinero o algún artículo de valor apto para
el intercambio por droga, este papel de reducidor es comprar a menor precio, es uno de
los roles que cumple el jibaro ya que después de que el consumidor entrega sus
pertenencias por la droga, son vendidas en el mechero [lugar donde se intercambia
diferentes artículos por otros o por dinero, está ubicado dentro de la plaza de mercado]:
“Uno se pregunta que tiene este vicio que lo agarra a uno tan feo, un día por la tarde
estaba reluquiao con 350.000 de una vuelta [hecho delictivo] que me tocó, lo celebré en
grande… y como a los tres días me di de cuenta que estaba tirado en la olla con unos
manes que ni conocía todo llevao sin bañarme y oliendo más feo uff!! Que ni pa que le
digo, yo no sabía qué hacer, pensaba en todo lo que me había gastado y que no tenía ni
pa un tinto, si me sentí mal, pero tenía que seguir, ya que, untado un dedo untada toda la
mano.
Me fui pa’ onde mi cucha [madre] a bañarme y dormir un rato, después con esos gritos y
alegatos, salí a buscar quien me daba el pago [robar], primero cuando estaba bisoño
[nuevo] en esto me daba pesar de mi cucha y hasta de mí, pero ya con el tiempo no
pienso en eso porque el vicio me hace olvidar todo lo malo.(Perro)
133
Cabe resaltar que las reflexiones de éste joven, cuestionan en un primer momento y de
manera fallida, su fuerte inclinación por las drogas y las condiciones que se dan para
caer cada vez más en el vicio, además de la imposibilidad de abandonar este hábito,
sobre todo al mostrar en el relato, que después de un consumo de tres días seguidos,
su estado físico era deplorable, pierde la noción del tiempo y la utilidad asertiva del
dinero, obedeciendo a sus primeros impulsos de búsqueda de placer al consumo de
drogas, elige este estímulo, porque ya se ha formado un habito de consumo,
concentrándose allí toda su atención y necesidad de olvidar todo lo malo, referido a su
convivencia familiar y a su formación personal. Como en el siguiente relato:
“Muchas veces vemos manes que se venden por le vicio, les dan plata pa el rato y después
se comen eso otras veces le dan es todo el vicio que quiera, es que aquí viene mucho
torcido no le digo de toda clase y de toda calaña que usted se imagine”.(Tío)
Según del tío – expendedor de la olla, el ingreso de consumidores es indiscriminado, su
función es solo vender y mantener la armonía en la olla, sin embargo, se percibe un
ambiente tenso, pues muchos de estos consumidores adultos vienen en busca de
jóvenes que en medio del efecto de alguna droga se prostituyen, por dinero para
consumir, o para pagar deudas al jibaro por mercancía fiada.
“Uno llega… trae su platica, que no es tan fácil como creen muchos, toca sudarla, se mete
a la olla a soplar [consumir] hasta que se acabe la plata, si es agradecido vuelve, deja de
pensar maricadas de la vida y se va a conseguir más plata y a volver a lo
mismo”.(Campana).
Robar para consumir y sostener este tipo de hábitos se convierte en el comportamiento
más usado por los jóvenes que habitan las ollas, algunas actitudes y esquemas
mentales que el joven consumidor de SPA refiere, da cuenta de un imaginario frente a
su uso de drogas, éste se centra en victimizarse por situaciones conflictivas desde
134
niño, como la poca comunicación con sus padres, no tener un hogar estable, no poseer
figuras de autoridad claras, defienden y racionalizan su consumo cotidiano, como
escapatoria a sus dificultades personales.
Sin embargo, detrás de sus sentimientos, y manipulaciones, existe un sujeto que está
controlado por la búsqueda de droga y cuya capacidad para vivir una vida sobria y en
orden esta erosionada, entre sus múltiples y variadas formas para consumir drogas, los
drogodependientes niegan o no aceptan su propia contribución al problema y no
reconocen completamente su propio potencial para solucionarlo Becoña (1996:278).
En la mente de los adictos la causa que motiva su consumo de drogas es el carácter
implacable de la realidad externa, la tiranía de las drogas o incluso los problemas
admitidos en torno a sus personalidades. Sin embargo tras estos problemas se
encuentra un individuo cuya perspectiva desde si mismo se caracteriza por una falta de
energía en lo que respecta al cambio de sus circunstancias, su estilo de vida o su
propia persona. Becoña (1998:75- 141)
“Pues prácticamente los pelaos [adolescentes] no tienen la culpa, porque se empiezan a
degenerar desde chiquitos, y pues para un futura ya están asi degradados del todo, esto es
normal en hombres y mujeres. (Campana)
Cuando el adolescente habitualmente ejerce su consumo de drogas ha disminuido su
capacidad para tomar decisiones responsables y su actitud para actuar con sobriedad o
para llevar a cabo cambios en sus estilo de vida.
“La mayoría de los que vienen aquí son personas dañinas, que del mas chino hasta el
mas viejo prefieren pedir en la calle, robar, hacer los Bisnes [negocios ilícitos] lo que sea
135
para no desajustar lo de la papeleta [ dosis de bazuco] si ve, uno ve su cucha o
cualquiera de la familia en la mala y no primero se lo asegura uno al vicio, se lo digo
porque aquí aparecen con lo mas raro en ropa, y cosas de la casa de ello o robadas
también…”(Abuelo)
Para el consumidor mantener su hábito, recurre a lo inesperado para privilegiar su
consumo, éste tipo de abuso o consumo problemático de drogas es evidenciado en el
adolescente a partir de la pérdida total de limites sociales, su consumo es abierto de
forma ilícita, se genera un cambio notorio en su imagen externa, aumenta su dosis y
frecuencia, invierte todo su dinero en el consumo, presenta hurto, chantaje y
manipulación para conseguir la droga; sus metas establecidas de estudio o trabajo
pasan a un segundo plano, abandona el hogar por periodos largos presenta trastornos
en su comportamiento, problemas cognitivos y conductuales, así como perturbaciones
en su estado de ánimo.
“El ambiente aquí a veces es bien áspero [difícil], sobre todo cuando uno se encuentra con
liebres [enemigos] aquí adentro, toca darnos duro [golpearse] y se forman una peleas con
cuchillo a muerte, si me entiende!!!, otras veces el man [jibaro] nos saca pa fuera, para no
curtirle [generar conflicto] el negocio, pero se siguen afuera como sea porque uno ya todo
craquiao [bajo efectos del bazuco] se le mide a lo que sea, y mas con un man que se la
debe a uno si.(Juan)
El modo de operar de los jibaros o dueños de las ollas se presenta en modalidades de
bajo perfil a través de uno o varios campaneros que regularmente son jóvenes de 12 y
14 años de edad, otros como mujeres adolescentes, son ubicados en sitios
estratégicos del sector o barrio como parques o colinas altas, se encuentran
comunicados por celulares para dar aviso de las autoridades cuando son allanados
improvisadamente.
136
Otra modalidad que se emplea, es a través de un joven que hará las veces de
traficante por el sector [el carrito] es decir, estará portando droga [en un canguro,
bolsillos de sus pantalones, chaquetas] para ser entregada con agilidad al jibaro y así
pasar desapercibido ante autoridades cuando registren la olla, y al dueño de la misma.
“Una vez si se calentó el parche porque un man que estaba metiendo en la forma pepas y
pipa le llegaron y tenga le dieron como 5 tiros en la cabeza, uff!! Esa muerte fue brutal y
pues los manes habían pedido un par de bolsas de goma y unos varetos de hace rato
entonces uno no cree nada, solamente que vinieron a darse en la cabeza y ya, pero ese
dia me tocó abrirme con la mercancía que pude sacar y dejar ahí ese man tirado, después
si me dijeron que llego la policía y allanaron todo entonces toco escurrirse y no volver”.
(Campana - jibaro)
El jibaro o dueño de la olla, se caracteriza por su imparcialidad con el consumidor de
droga, es decir su deseo de hacer dinero a toda costa, lo aleja de crear diferencias en
el manejo del dinero y del consumidor [Utiliza gorra, pantalones anchos, camisa larga,
porta revolver y tenis de marca, pulseras, gargantillas elaboradas en oro] posee
grandes habilidades físicas para ejecutar escapes improvisados, es de carácter fuerte e
imponente, también se caracterizan por ser líderes de bandas, o intelectuales en
actividades ilícitas planeadas como atracos, homicidios en la ciudad.
El total de sus ventas son por día de 1.000.000 aproximadamente, con otros beneficios
contables de los artículos para el intercambio como televisores, DVD, joyas en oro,
grabadoras, cámaras fotográficas, celulares, otros, los cuales son vendidos en
prenderías de la carrera 19 o almacenes que facilitan este mercado negro.
Existen jibaros que son considerados mayoristas: son aquellos que compran la línea
por mayor, es decir la compra que oscila entre 5 y 10 kilos por semana, es transportada
desde las ciudades de Pereira, Cali y Medellín, los jibaros minoristas son aquellos que
137
se surten de los mayoristas y para adquirir mayores ganancias mezclan sustancias
químicas degradantes con el fin de aumentar la cantidad en drogas conocidas como
bazuco, cocaína, heroína, y finalmente el micro traficante, (adolescente) es aquel que
porta y distribuye las dosis de droga por la ciudad.
“En cuanto a las niñas que uno ve por aquí, todas son fufitas [prostitutas] que se venden
por vicio, primero vienen con los novios y les enseñan a meter, ya después vienen solas
agarradas del vicio buscando quien les regala algo pa darse duro entonces no falta el
depravado que le coma a la china y le dé su tiestazo”.(Abuelo)
La mujer que habita en las ollas tiene gran reconocimiento por la práctica de la
prostitución, como medio para obtener dinero para él drogarse o droga SPA
directamente, en muchos casos, son jóvenes que empiezan asumir esta clase de vida
atraídas por la droga como olvido de sus dificultades y conflictos, otras mujeres son
adultas entre los 20 y 28 años quienes poseen un hábito en su consumo y modo de
convivencia en la olla.
En pocas palabras, el problema no es la droga, no es el hurto, ni las lesiones que se
sufre para tales prácticas; es la persona, el adolescente, que no encuentra unas
condiciones dignas a su alumbramiento como adulto, está desprotegido contra sí
mismo, está condicionado a realizar hurtos y meter vareta o crack, para ser alguien,
para tener un lugar, alguna identidad, es decir parecerse a alguien.
3.6. Infracción: Criterios a partir del código de infancia y adolescencia.
3.6.1 Antecedentes Jurídicos
En nuestro país, históricamente las leyes referentes al menor en conflicto con la ley,
han pasado por tres grandes etapas: la primera se denomina Modelo retributivo:
basado en el concepto peligrosista de infractor, éste era considerado un poseedor del
mal, al que era necesario aislar un tiempo de la sociedad para que no hiciera daño.
138
La segunda es el Modelo Tutelar: que concibe al infractor menor de edad como una
víctima de sociedad (código del menor 2737 de 1989) doble condición de niño sujeto de
derechos y objeto de protección, para lograr una respuesta eficaz se habla entonces de
atención integral que busca que se cubran todos los servicios en dimensiones de
familia, sociedad y económica.
La tercera es El Modelo restaurativo, la cual, en el contexto de la protección,
conjugan de manera armónica los derechos y las responsabilidades del sujeto, la
reparación a las víctimas y la restauración de vínculos sociales (sistema de
responsabilidad penal para adolescentes que establece el código de la infancia y la
adolescencia ley 1098 de 2006).
En la década de los noventa se destacan tres acciones por parte del estado que dieron
impulso a la cualificación de los servicios de atención: Conformación del comité
operativo Nacional, (1994 – 1997). Formulación de lineamientos de atención de
acuerdo con las medidas previstas por el código del menor y el fortalecimiento a los
programas en medio socio familiar.
En la presente década, se viene consolidando una nueva mirada sobre la justicia para
los menores de edad denominada “justicia restaurativa” que representa una tendencia
a nivel mundial y específicamente para Latinoamérica, que concibe el adolescente que
infringe la ley como sujeto con derechos, pero también con responsabilidades acordes
a su proceso particular de desarrollo23.
3.6.2. Proyecto de ley sobre responsabilidad penal para adolescentes.
23
Lineamientos técnico Administrativos misionales y herramientas metodológicas par la inclusión y la atención de
familias en los programas y servicios de ICBF – OIM. Estupiñan, Jairo y Ángela Hernández. ICBF. 2006.
139
El proyecto de ley que establece un sistema de responsabilidad penal para el
adolescente en su justificación, se declara como propósito el “reformar la respuesta
del Estado ante los actos que revisten carácter de crimen o simple delito cuando ellos
son cometidos por personas menores de dieciocho años” (Estupiñan, Jairo y Ángela
Hernández. ICBF. 2006).
El proyecto determina la edad del imputado y los límites de edad para la
responsabilidad, tipifican infracción penal y determina la gravedad de ellas, considera
entre las sanciones, la amonestación hasta la privación de libertad por cinco años como
máximo y la modificación a los Tribunales que manejaran estos juicios.
Declara que la ley regulará la responsabilidad de los adolescentes por la comisión de
infracciones de estos a la ley penal, el procedimiento y establecimiento para averiguar
la responsabilidad y determina las formas y ejecución de las consecuencias de esos
actos, para ello, considera como adolescentes a toda persona mayor de catorce y
menor de dieciocho años de edad; por lo tanto, al momento de cometer la infracción de
ley debe estar dentro de ese rango para que sea imputable, en caso contrario (menor
de catorce años), no pueden ser objeto de los procedimientos judiciales y sanciones
que regula dicha proyecto.
3.6.3 Modalidades de atención.
Para tener más claridad respecto a este tema se esboza en el sistema de
responsabilidad penal para el adolescente que establece el código de la infancia y la
adolescencia, los sujetos de atención son de conformidad con el artículo 139, las
personas que tengan entre 14 y 18 años de edad al momento de cometer hecho
punible, la población podrá extenderse hasta los 21 años pues en el artículo 187
140
parágrafo del código se dispone: si estando vigente la sanción de privación de libertad
el adolecente cumpliere los 18 años esta podrá continuar hasta que se cumpla los 21
años.
En relación con los adolescentes cuyas edades fluctúen entre los 12 y 14 años, que al
momento de entrar en funcionamiento el sistema de responsabilidad penal para
adolescentes consagrado en la ley 1098 de 2006, estuvieren privados de la libertad, el
juez competente deberá desvincularlos del proceso judicial y remitirlos al defensor de
familia para el correspondiente proceso de protección.
El defensor de familia solo les aplicara medidas de verificación de la garantía de sus
derechos, de su restablecimiento y de su vinculación a procesos de educación y de
protección, observando todas las garantías propias del debido proceso de defensa tal
como lo dispone el código de la infancia y la adolescencia en el artículo 143.
Los servicios que a continuación se describen corresponden a las medidas y sanciones
establecidas según el código de la infancia y la adolescencia, Articulo 179 “Criterios
para la definición de las sanciones”, modalidad de atención en centro transitorio: “…el
adolescente sorprendido en fragancia será conducido de inmediato ante el fiscal
delegado para la autoridad judicial, quien dentro de las 36 horas siguientes presentara
las condiciones de la aprehensión”.
Modalidad de atención en centro de internamiento preventivo especializado: “…este
procede conforme a la gravedad del delito será admisible la privación de la libertad
como medida se estiman meses de internamiento…” Modalidad de centro de atención
especializado… decretadas por el juez competente conforme a lo establecido, será
141
privado de la libertad, se estiman años de internamiento… (Artículo 187 del código de
la infancia y la adolescencia. La privación de la libertad, parágrafo 2).
Respecto a las formas de protección que establece la ley para el adolescente, objeto
de internación a causa de alguna medida o pena dictada por el juzgado de menores,
son sujetos que de una u otra forma son sancionados por la sociedad, dado que aún en
las instituciones de control establecidas y legitimadas socialmente, no cumplen sus
fines al no socializar como corresponde a los sujetos.
El colegio, que es una de las instituciones en donde se internaliza la disciplina,
obligaciones y rendimiento, entre otros aspectos de control, no necesariamente se
socializa de manera adecuada a los jóvenes como los de sectores populares, dado que
si dichos jóvenes no se amoldan a las exigencias y estructuras existentes en los
planteles educativos, comienzan a surgir los primeros rasgos de la caracterización
delictual, con que socialmente se ha estigmatizado a los jóvenes provenientes de
sectores económicamente vulnerados.
Gracias a la “ley del mínimo esfuerzo” en los adolescentes, se mantiene bajo o nulo
interés por asistir al salón de clase y recibir los conocimientos que entregan los
colegios, por lo tanto su participación en el quehacer escolar será el mínimo necesario
para cumplir con las obligaciones que éste requiere o de manera contraria, no habrá
mayor preocupación por parte del adolescente frente a un posible fracaso académico.
No obstante, es la deserción escolar, el principal rasgo de caracterización del
adolescente infractor, puesto que la mayoría de las veces, estos jóvenes deberán
abandonar el colegio, dada su condición socio económica, para comenzar a generar
ingresos, ya sea para aportar al presupuesto de su grupo familiar o para solventar
142
gastos personales que no puede cubrir sin realizar alguna actividad con retribuciones
económicas.
La situación anterior, margina hasta un nivel excluido del proceso de modernización,
dada la precariedad económica del sector socioeconómico al cual pertenecen, producto
de lo cual, se genera una necesidad importante de acceder a bienes y servicios que
dan cierto estatus y que se hacen imprescindibles para su rango y nivel de vida en el
barrio y sociedad.
Por este motivo, el joven busca las estrategias necesarias para acceder a los niveles
de consumo mínimos establecidos socialmente, a través de ofertas habilitadoras del
sujeto y difundidas por los distintos medios de comunicación; es de esta forma, en la
búsqueda de estrategias para generar ingresos y accedes a bienes y servicios, en
donde el joven se ve enfrentado entre tomar la decisión de infringir la ley o renunciar a
todo lo anteriormente señalado.
143
CAPITULO IV
LA RELACIÓN ENTRE EL USO INDEBIDO24 DE LAS DROGAS Y EL DELITO
Luego de haber presentado en los capítulos 2 y 3 de este trabajo elementos ilustrativos
del proceso de socialización primaria y secundaria de nuestros jóvenes sujetos de
estudio, el capítulo final tiene como propósito, analizar los datos empíricos con el fin de
señalar algunos rasgos que encontramos como característicos de los procesos de
iniciación en el uso indebido de las drogas y en delito. Se subraya de un lado, que en
la cotidianidad del núcleo familiar, en las interacciones cotidianas entre sus miembros
son aprendidos los contenidos, las pautas de conducta o comportamiento y el conjunto
de significados explicativos de lo que son los individuos y del mundo que los rodea, y
cómo estas estructuras cognitivas, influyen necesariamente en el desarrollo de hábitos
de consumo y prácticas delictivas, pues constituyen a asumir un “modo de vida” de los
sujetos estudiados. Estas prácticas iniciadas en el núcleo familiar se refuerzan
posteriormente con el grupo de pares en la calle.
Es de subrayar igualmente, que dentro de los patrones de crianza observados un
elemento determinante en la formación, se relaciona con las difíciles condiciones
económicas de pobreza de estas familias observables en las difíciles condiciones
materiales en que viven para la satisfacción de las necesidades básicas (alimentación,
educación salud). Así es que la marginación social y la falta de oportunidades laborales
son un factor determinante en el involucramiento de actividades ilícitas, como
24
USO INDEBIDO: Algunos autores utilizan el término "uso indebido" con el mismo concepto de "abuso", otros en
cambio lo hacen para enfatizar a través de ello la existencia de un "uso debido" o "uso correcto de las drogas", desde una óptica farmacológica, esto último corresponde a la utilización de ciertas sustancias bajo control de un profesional calificado.
144
alternativa de sobrevivencia. No justificamos el comportamiento delictual pero es una
realidad que encontramos en este sector de la población.
Con estos elementos sugerimos dos lógicas o hipótesis explicativas del fenómeno:
a) -la primera es que el uso indebido de las SPA, contribuye a promover la
delincuencia juvenil e inversamente la delincuencia conlleva el uso indebido de
SPA.
b) -De otro lado el uso indebido de las drogas y la criminalidad en la población
estudiada está influenciado por factores socio-económicos de marginalidad y
exclusión social. En particular las condiciones de pobreza impactan a los
jóvenes favoreciendo el desarrollo y la producción de la delincuencia relacionada
con el uso indebido de las drogas.
4. Explicaciones socio-culturales
Los nexos entre el uso de drogas y el delito en jóvenes infractores se identifican como
específica de un contexto socio que se caracteriza por determinados patrones de
crianza.
Centrados en la descripción etnográfica hemos organizado tres variables
interdependientes que nos permiten entender el proceso de socialización: el joven con
su entorno familiar y de pares, los usos indebidos de las drogas y la delincuencia.
145
Las pruebas encontradas en el trabajo de campo de los factores sobre prácticas
delincuenciales y consumo de drogas demuestran en primer lugar que: están asociadas
a situaciones de violencia, inicialmente en el proceso de socialización primaria en el
ámbito familiar; y seguidamente en el ámbito de la calle en la relación entre pares
durante la adolescencia.
En segundo lugar, el tipo de relación agresiva experimentada por el niño y el
adolescente en el proceso de socialización primaria y secundaria, es ilustrativa de las
pautas socio-culturales aprendidas y reproducidas por el joven.
Así las cosas, hay que señalar de manera general es que cada familia tiene diferentes
reglas compartidas que organizan la interacción entre sus miembros en la expresión de
los afectos y las relaciones de autoridad. Con esta premisa el conjunto de personas
que viven bajo un mismo techo vinculadas por las relaciones de parentesco (padres,
hijos, tíos, primos, abuelos, nietos, etc), se pueden comparar diferentes modelos o tipos
de familia por sus patrones de crianza. Sabemos por ejemplo, que las relaciones que
se presentan en el marco del conflicto interpersonal en una familia disfuncional tiene
consecuencias que dañan la integridad: moral, física y espiritual de las personas25.
Dentro de las familias analizadas se observó con regularidad comportamientos
disfuncionales26, es decir, familias que por su patrón de organización social establecen
grados de vulnerabilidad frente al consumo de drogas y al delito.
25
http://maruchis.multiply.com/journal/item/41/Familias_Disfuncionales [Mayo, 26 de 2010].
26
Una familia disfuncional es donde el comportamiento inadecuado o inmaduro de uno de los padres inhibe el crecimiento de la individualidad y la capacidad de relacionarse sanamente los miembros de la familia. • Una familia disfuncional es donde sus miembros están enfermos emocionales, psicológica y espiritualmente. • Una familia disfuncional es donde todos se ven afectados adversamente aunque sólo un miembro de la familia experimente el problema. http://www.hopefortheheart.org/site/DocServer/Dysfuntional_Family.pdf?docID=1961[Mayo 26 de 2010]
146
Algunos de las pautas de formación en una familia disfuncional pueden sintetizarse de
la siguiente manera:
-La Formación de “roles rígidos y estáticos” en los cuales se aprecia en la
infancia la renuncian del niño a sus propias necesidades para satisfacer las
necesidades de los mayores o de la familia. Se evidencia entonces depresión y mal
genio. Las pautas autoritarias de la familia funcional se tornan culposas,
perfeccionistas, se niega la libertad, se impone el mutismo, la observancia de los
comportamientos de manera inquisitiva.
Al no poder expresar los pensamientos abiertamente, se adquiere “una voluntad
absolutista”, los miembros de la familia se enfrentan entonces a la “pérdida de
una voluntad sana”27, lo que hace que, “los sentimientos se congelen y contamine la
inteligencia emocional de los individuos. Cuando la fuerza de voluntad se lleva a los
extremos (querer por querer) las personas adquieren comportamientos caóticos e
impredecibles”28
-Limites ambiguos de respeto en las relaciones interpersonales. Las reglas
verticales y la enseñanza dañosa contribuyen a que se establezcan reglas rígidas. En
estas familias los padres tienden al autoritarismo a: imponer sus ideas, creencias,
valores, gustos y preferencias para su propio beneficio, sin permitir a los hijos la
libertad de escoger qué quieren, qué desean, a dónde quieren llegar; obligándolos
prácticamente a seguir las recomendaciones dadas. No se puede contradecir la
recomendación, ya que eso puede generar problemas y disgusto para la persona que
lleva la autoridad.
27
http://maruchis.multiply.com/journal/item/41/Familias_Disfuncionales [Mayo, 26 de 2010]. 28
http://maruchis.multiply.com/journal/item/41/Familias_Disfuncionales [Mayo, 26 de 2010].
147
Es común encontrar que las personas escapen o huyan de casa como resultado de la
presión y control ejercido en ellos. Éstos hijos generalmente pueden mostrar sus
frustraciones al no poder hacer nada mostrando comportamientos agresivos como
gritos, enojos, odio hasta llegar a enfermar, etc. Son personas que fácilmente se
sienten lastimadas y víctimas29
-Comunicación conflictiva. La comunicación entre los miembros de la familia por lo
regular se torna conflictiva, en muy pocas ocasiones logran un contacto real. No existen
límites claros de respeto en las relaciones interpersonales, se trasgreden los roles, y
los niños aprenden la conducta agresiva de sus padres. En estas familias
disfuncionales, las personas no se escuchan, se aíslan, no intercambian información,
cada uno se preocupa solamente por sus propios asuntos, se cierra a cualquier
posibilidad de reciprocidad, y frecuentemente el consumo indebido de drogas es un
escape a la falta de comunicación.
Entre los factores de riesgo en la familia que se pueden vincular con el consumo de
drogas --como lo señala Tatiana Salinas-- se pueden relacionar:
la desintegración de la familia cuando no se desarrollan los roles familiares o se
sustituyen forzadamente.
inestabilidad afectiva, económica y social
funcionamiento familiar excesivamente rígido, exigente, intolerante o –por el
contrario-- extremadamente permisivo y sin límites.
modelo adictivo familiar30
4.1. Influencia de la familia en el consumo de drogas
29
Véase: http://www.elhispanonews.com/news.php?nid=1169 30
http://www.cicad.oas.org/reduccion_demanda/esp/documentos/Do [Mayo 26 de 2010]
148
Un aspecto importante del cual hay que tener presente para comprender el papel que
juega la familia en los factores de “riesgo” o de “cuidado” en relación con el consumo
de drogas en los jóvenes infractores de la ley, es que éstos se inician en la práctica en
edades precoces dentro del núcleo familiar. Como se observo a través de los
testimonios de los jóvenes consultados, el contacto con las drogas comienza en la
infancia en dos situaciones: primero, por el modelo adictivo familiar, en el que el efecto
demostrativo de los mayores al consumir drogas licitas e ilícitas delante de los jóvenes
en el espacio del hogar induce directa o indirectamente a consumirlas. En segundo
lugar se presenta un modelo sistémico, en la cual familia o algunos de sus miembros,
puede estar asociada a la comercialización de drogas o micro-tráfico. En este caso por
el involucramiento del niño en las actividades del mercado de las drogas. El maltrato
constituye otro factor de riesgo, al provocar que el niño busque salidas de escape por
los efectos psicológicos de la agresión física o psicológica.
4.1.1 El modelo adictivo familiar. Sobre el efecto ejemplarizante del comportamiento
de los mayores en el uso indebido de las drogas Mireya Sanz y Ana Martínez (2010),
subrayan los factores de riesgo en el núcleo del hogar y la influencia en los niños:
Entre los posibles “factores de riesgo” o de “protección” que determinan el fenómeno
del abuso de drogas, la familia juega un importante papel, ya que es un pilar
fundamental en los adolescentes, no sólo porque conforma el espacio de socialización
por excelencia, sino porque es aquí donde los adolescentes buscan las pautas
fundamentales para orientarse en la vida. Desde el nacimiento hasta la adolescencia la
familia es un ámbito privilegiado de formación de actitudes, habilidades y valores que
permitirán que posteriormente el sujeto afronte una etapa vital decisiva, como es la
adolescencia. La influencia de la familia puede ser contemplada desde las siguientes
vertientes:
149
Por una parte, el consumo de drogas en los padres puede propiciar el consumo de las
mismas en los hijos, ya que los padres actúan como modelo de conducta para sus
hijos. Además de esto, dicho consumo influye también de manera indirecta, incidiendo
en las propias pautas de crianza y en las relaciones intrafamiliares, todo lo cual
contribuye a crear entornos de mayor riesgo para el consumo por parte de los hijos.
Otro factor de riesgo se refiere al “manejo familiar”, que consiste en las distintas
habilidades de los padres para controlar la conducta de los hijos, tales como la
supervisión, el establecimiento de normas y límites, las habilidades para negociar con
los hijos, etc. En este sentido, los estilos educativos juegan un papel importante
(sobreprotección, autoritarismo, permisividad)31
4.1.2. El modelo del involucramiento en el micro-tráfico
El segundo factor de riesgo en el uso inadecuado es la vinculación de los jóvenes
desde su infancia en las redes de micro--tráfico. Las causas de que la población joven
se inserte en redes de micro-tráfico para la población estudiada, está en relación con el
tema de la pobreza.
Los niveles de pobreza altos que se encuentran en los estratos 1 y 2, y la dificultad
para lograr ingresos permanentes, hace que los padres de familia no solamente se
inserten en redes de micro-trafico, sino que involucran a sus hijos en el negocio para
obtener recursos para cubrir las necesidades básicas de la familia. Dentro de las
actividades del micro-trafico los niños se encargan de hacer mandados en el expendio
de drogas para los padres, los adultos mayores (abuelos), u otras personas del barrio,
por lo cual reciben un pago. Otra tarea frecuente es que los adultos se hacen
acompañar de los niños para no despertar sospechas ante la policía, en los sitios de
31
Mireya Sanz, Ana Martínez, Loseba Iraurgi, Edurne Galíndez, Ana Muñoz y Leire Cosgaya. (2010). Influencia de la familia sobre el consumo de drogas en los jóvenes. En: http://www.laondadigital.com/LaOnda/LaOnda/201-300/248/a2.htm [Mayo 26, 2010].
150
expendio. En algunos casos las mujeres embarazadas o con coches en los cuales
transportan a los bebes aprovechan su condición especial para el transporte y
comercialización de las drogas
4.2. El habitus del consumo
El consumo poco a poco se establece en una práctica cotidiana que da sentido a
muchos de los aspectos de la actividad individual del sujeto, convirtiéndose en un estilo
de vida que en términos de Bourdieu se constituye en un habitus32 del consumo.
En estos términos, el habitus del consumo crea particularidades en el pensamiento
práctico, formas particulares de comunicación, una jerga especifica de comprensión en
el dominio del entorno social. Junto al delito se crean imaginarios materiales e ideales;
en tanto que tales representan características específicas a nivel de la organización de
los contenidos y las operaciones mentales y las lógicas mismas de los contenidos. El
habitus se configura sistemáticamente en una actividad cognitiva. El sujeto la construye
en función del contexto social, es decir de los estímulos sociales que recibe, en función
de valores, ideologías y creencias de su grupo de pertenencia. Es así que el
adolescente desarrolla una sociabilidad, una manera de “estar juntos” que propicia
prácticas colectivas caracterizadas por el ansia de afirmación radical de la vida, por un
irrefrenable “querer vivir” mediante el cual se anhela sobrepasar los límites de lo
instituido socialmente como posible (Maffesoli, 1993). Esto es característico en general
de la etapa de la adolescencia, pero lo que queremos significar es la particularidad de
esta experiencia en los jóvenes infractores.
32
Entendemos por habitus a la manera de Bourdieu: el sistema de disposiciones adquiridas, permanentes y
transferibles que permiten actuar, percibir, sentir y pensar de una cierta manera. Estas disposiciones son incorporadas o interiorizadas por los agentes sociales en el curso de la vida, a partir del trabajo pedagógico y educativo multiforme y prolongado (socialización, inculcación apropiación). En resumen el habitus es un “operador del calculo inconsciente” que nos permite orientarnos en un espacio social sin necesidad de reflexión. El sentido práctico. Madrid: Taurus.1998.
151
Este joven vive una ética del disfrute basado en tiempo presente, el aquí y el ahora; él
no es ajeno a la tensión que se experimenta en los tiempos contemporáneos lo que
suele provocar, al menos en la percepción subjetiva, una pérdida de control. Se pierde
el manejo del tiempo propio, adquiere importancia la experiencia de vivir acorde a un
tiempo ajeno y se vive cada vez con más fuerza la presión de los ritmos y las
especulaciones sociales modernas del consumo.
Aparece como un sentido frecuente en las narrativas de los jóvenes: “vivir la vida
intensamente…” la cual, es una idea transversal que se conjuga con un consumo de
SPA desmedido. Si bien, la falta de oportunidades sociales y de alternativas no permite
delinear sentidos de futuro claros a los jóvenes menos favorecidos, se expresa la
importancia de vivir el día a día. La vida se conjuga en el cada día como el esfuerzo por
hacer del hoy una experiencia única y total que debe aprovecharse al máximo. Y se
aprovecha con alegría y entusiasmo como si con la alegría de cada vivencia
momentánea se conjurara la muerte.
El joven infractor muestra generalmente una falta de control total en lo que respecta a
las pautas de consumo de drogas, una tendencia a la conducta criminal y falta de
dominio de su sexualidad. Se presentan también tentativas suicidas en sobredosis,
amenazas de muerte mediante otros medios relacionados con la droga, riñas,
tropeles33, un alto grado de ansiedad o temor a la violencia, la cárcel, la muerte.
Presentan también un recurrente historial de pérdidas personales significativas como:
relaciones de noviazgo, vínculos con los padres, hermanos, abuelos, expulsión del
colegio, o pérdida de confianza entre amigos.
33
Tropeles: Conflictos, peleas callejeras.
152
El consumo se asocia fuertemente con un estilo de vida de alto riesgo, y diferentes
circunstancias que empujan a consumir drogas como un dolor físico, psicológico (para
escapar de alguna perdida familiar o de ruptura de pareja, antecedentes familiares de
delito, muerte de los padres o algún familiar de gran significado emocional, ausencia de
un hogar, separación de los padres). Para aumentar o disminuir la estimulación, con la
ingesta se celebran buenos momentos y asimilan los malos. Se consume también para
escapar de la realidad o enfrentarse a ella con más facilidad, para pertenecer a grupos
sociales o aislarse de ellos, para evitar las necesidades interpersonales, o enmascarar
o desenmascarar sentimientos personales.
En muchas situaciones el joven infractor se justifica para excusar su consumo. A la
hora de detallar su gusto por el consumo, defiende o racionaliza su consuno cotidiano.
Se fundamenta de un modo particular, tanto en acontecimientos reales como ficticios.
En la mente de los adolescentes con alto índice de consumo de SPA, la causa que
motiva su consumo de drogas es el carácter implacable de la realidad externa, los
problemas admitidos en torno a su personalidad. Sin embargo tras estos problemas se
encuentra un individuo cuya perspectiva desde si mismo se caracteriza por una falta de
energía en lo que respecta al cambio de sus circunstancias, su estilo de vida o su
propia personalidad.
4.3. Identidad y realidad social del joven infractor
El concepto de identidad es uno de esos conceptos de confluencia de temas centrales
como cultura, normas, valores, familia, status, socialización, educación, roles, hábitos,
consumo de psicoactivas, clase social, territorio urbano / región, género, medios,
jóvenes infractores. La importancia de este concepto se debe particularmente a su
153
carácter estratégico y a su poder condensador en el análisis, pero evidentemente a la
necesidad de construcción teórica como lo señala Bauman (2003).
Es importante comprender que a partir de la internalización de la cultura, la identidad
toma parte, existiendo una estrecha correspondencia entre la concepción que se tenga
de la cultura y la concepción de identidad. Hoy podemos entender la cultura moderna,
caracterizada por la acentuación de su fragmentación y fluidez. Correspondiente a una
concepción de la identidad que destaca también inestabilidad, fragmentación y
plasticidad Bauman, (2003:20). La cultura y la identidad son dos dimensiones
interdependientes que se corresponden la una a la otra. Así las particularidades
culturales de un colectivo la podemos definir en términos de las particularidades
identitarias, para nuestro caso, de las prácticas sociales de los jóvenes infractores. La
identidad sin embargo, --al pensarla como una condición dinámica, de la realidad
social, desde o a través de la cual el sujeto social se reconoce--, es importante
problematizarla como un constructo permanente, como un constructo de los modos de
relaciones sociales en la vida cotidiana, es decir, en la interacción del día a día con el
otro.
Para la interpretación de la construcción de identidad juvenil infractora, se debe
aproximar desde su interacción con el uso de drogas de preferencia, y su implicación
en actividades delictivas, todo en un contexto de realidad social de la ciudad. Pero si
bien la cultura, como lo plantea Cliffod Geertz (1996:20) se presenta como una
“telaraña de significados”, quiere decir, que los individuos la interiorizan a través de
ciertas estructuras mentales que los psicólogos sociales llaman “representaciones
sociales” y los cognitivistas “esquemas”, esto es, “redes de elementos cognitivos
fuertemente interconectados que representan conceptos genéricos almacenados en la
memoria” Geertz (1996:22)
154
La identidad se presenta entonces como resultado de una construcción social que
pertenece al orden de las representaciones sociales, se trata de una construcción que
se realiza no de manera arbitraria y subjetiva, sino dentro de marcos sociales que
determinan las posiciones de los agentes y orientan sus representaciones y opciones.
En cuanto “constructo”, la identidad se elabora dentro de un sistema de relaciones que
atribuye un grupo a otros grupos con los cuales está en contacto. Por último, la
identidad se construye y se reconstruye constantemente en el seno de los intercambios
sociales; por eso el centro del análisis de los procesos de identidad es la relación
social. A partir del conjunto de rasgos culturales detectados por los miembros del grupo
para afirmar y mantener una distinción cultural.
En el caso de los jóvenes de estudio se caracterizan por sus prácticas delincuenciales
en la ciudad los cuales son identificados como: pandilleros, ladrones, raponeros,
jaladores, “chirrete”34. Se instalan en la ciudad en forma individual dependiendo de su
interés y de su actividad ilícita. La generalidad son los hurtos o rasponazos de bienes
ajenos que en gran medida son utilizados para su uso personal como el consumo de
Marihuana o Bazuco preferiblemente. Muchos de estos adolescentes han
experimentado una responsabilidad penal con tratamiento reeducativo.
Su vida colectiva y forma de ser muchas veces, se inspira en las imágenes de
televisión donde se recrean mitos que la historia los evoca a través de cortometrajes
como “El Sicario”, “La Virgen de los Sicarios”, “La Vendedora de Rosas,” “La Sierra”
entre otros; donde se muestra al joven de la calle, ausente de un porvenir profesional,
quien busca su sustento diario en cualquier actividad como lo es la delictiva;
debatiéndose entre la vida y la muerte.
34
Que habita en la calle.
155
4.4. El joven infractor de la ley y la percepción del sí mismo
La gran mayoría de estos adolescentes poseen una percepción de si mismo negativa
que se traduce en una baja auto-estima. Muchos no logran expresar sus sentimientos,
metas y valores morales o éticos como personas. Se asumen como niño problemático,
como víctima de abusos o socialmente falto de oportunidades, lo cual sea asocia a la
incapacidad para desarrollar un estilo de vida productivo, que le ayude a tomar
decisiones frente a su propia vida y al de su familia.
El joven infractor se caracteriza por tener un carácter fuerte, adictivo y con tendencia a
realizar actividades criminales. Su identidad personal o concepto de sí mismo como
persona autentica es inestable o presenta una considerable falta de información.
Para describir un conjunto de características emocionales comunes entre los
adolescentes consumidores de marihuana y Bazuco (Crack), bastaría con presentar las
dificultades que revelan a la hora de comunicar y sobrellevar sus sentimientos.
Demuestran una baja motivación y un limitado repertorio de comunicación emocional, y
falta de auto control, mostrando una marcada tendencia adictiva.
El imaginario de futuro que contemplan lo jóvenes se construye desde lo incierto,
alentado por un lado, por los medios de comunicación, que les plantean a diario
propuestas que “los ilusiona, los aturde o los confunden por completo; por otro, los
156
padres de familia, que con frecuencia quieren que sean lo que ellos no fueron y les
recriminan por no aprovechar las oportunidades para salir adelante; y por último, la
comunidad que los trata como jóvenes sin rumbo. No obstante, se señala que son
aspiraciones importantes en el universo simbólico de los jóvenes el formar una familia y
el ser un papá que haga las veces de amigo también”. El mayor deseo es lograr una
estabilidad económica, tener carro, conseguir un trabajo que de mucha plata
Lo dicho hasta el momento nos permite pensar que cuando se habla de adolescentes
problemáticos, violentos, adictos, malos, en definitiva, tal vez sería necesario dirigir la
mirada sobre el contexto. Sorprenderá ver que aquello que se atribuye a un devenir
adolescente es en realidad un problema de la estructura social actual. Debatiéndose
entre el paraíso perdido y el paraíso por-venir, el adolescente procura hacerse un lugar
en una sociedad a la que le faltan palabras y le sobran significados. No es extraño
entonces que esta búsqueda se haga por la vía del acto, reduciéndose a un cuerpo,
cuerpo que goza, que sufre y que intenta hacerse de un nombre, de un rostro aún
cuando para ello deba arrojarse a los brazos de la muerte.
Los jóvenes sujeto de estudio se plantean desde un mundo urbano, con imaginarios de
un tiempo presente. No tienen claras sus opciones de futuro dadas las vicisitudes de su
cotidianidad que los conduce al afán de resolver lo inmediato y por lo tanto a no
visibilizar horizontes futuros claros35 (Zygmunt Bauman 2007: 138). El tiempo se vive
en el presente a través de la pandilla. “Se afirma que estos jóvenes no desean que el
futuro llegue y termine con el mundo hedónico que han construido. Expresan la idea de
aprovechar la vida porque es corta y una sola. Se menciona que anhelan el prestigio,
tener plata para tener “buenas viejas” y buena presencia; viven esta vida porque les
tocó y no creen en otra vida. Ven complicado cambiar de vida, como integrarse a la
35
Vivir en lo urbano es sinónimo de cambio social. El cambio es la cualidad en la vida urbana sobre todo cuando se
crece en ella. La vida urbana atrae constantemente a nuevos recién llegados y con esto nuevas maneras de resolver viejos conflictos…
157
vida laboral o superarse a través del estudio. Resaltan que su sentido de futuro se
presenta mediante una pugna entre la realidad y los sueños, debido a que la
incertidumbre es un elemento que tienen incorporado: “quién sabe si mañana
estaremos vivos”, lo que aparece como una paradoja porque enuncian su futuro
cargado de sueños... los conflictos que experimentan, marcan sus historias vitales,
configurando sentidos sobre la vida y la muerte.” Bauman (2007: 139)
4.5. La experiencia de la reeducación en la Ciudadela los Zagales
El adolescente sujeto de estudio, se encuentra en alto riesgo frente al manejo de su
salud debido al abuso de SPA y múltiples razones como: necesidad de constatar por si
mismo todas las cosas y aconteceres del entorno, curiosidad por conocer sensaciones
de diferentes psicoactivas, la necesidad de experimentar y encontrarse todo ello
asociado a la adopción de modelos de identificación y referentes relacionados con
superioridad (poder, dinero), llegando a casos extremos de prácticas de homicidio.
Pertenecer a pandillas, coexistir con varias parejas sexuales, práctica de hurto,
sicariato, o trabajo sexual cuando afrontan desocupación laboral son patrones
característicos de riesgo del joven infractor.
El plan de funcionamiento del centro de rehabilitación Ciudadela los Zagales, gira en
torno a la existencia de adolescentes inculpados al infringir la ley con problemáticas
asociadas como el consumo de SPA, declarados sin discernimiento que deben ser
intervenidos en un medio residencial y en base al mandato legal existente del código de
infancia y adolescencia ley 1098 de 2006.36
36
En términos generales, la adolescencia es el periodo de vida que inicia al finalizar la niñez y que termina al
comenzar la vida adulta. Establecer rangos de edad para ello es un poco difícil aunque se ha estipulado que puede ir desde los 12 hasta los 18 años de edad desde el punto de vista legal (Código de infancia y adolescencia. Ley 1098 de 2006. Capitulo 1, Articulo 3), en nuestro país la adolescencia termina a los 18 años cuando el individuo es considerado mayor de edad y por lo tanto adulto.
158
Así la existencia del programa de rehabilitación se fundamenta en la actualidad en la
importancia de brindar una alternativa de intervención pensando en facilitar procesos
de reinserción futura al medio social. Quienes conforman la población sujeto de
intervención al interior del programa de reeducación corresponde aquellos niños (as),
jóvenes adolescentes, que por encontrarse en situación de vulnerabilidad o por infringir
la ley, necesitan de un centro especializado en reeducación, que garantice
conjuntamente con su familia los derechos y deberes propios para la formación integral
e inclusión social del menor afectado37
La institución consolida como principio a su labor reeducativa el Apoyar la reinserción
social de los adolescentes inculpados por infringir la ley a través de un proceso de
intervención que contemple las dimensiones individuales, familiares, sociales en una
modalidad residencial orientada a la restitución de sus derechos y el reconocimiento de
sus responsabilidades personales. Además busca, satisfacer necesidades básicas de
residencia, seguridad, alimentación y vestuario de los jóvenes que ingresan a la
institución, promover en los jóvenes el aprendizaje y ejercicio de sus derechos y
deberes, y el reconocimiento de la responsabilidad frente a sus actos. También
favorecer el desarrollo de habilidades y destrezas personales que refuercen su
autonomía y faciliten su reinserción social, y articular y fortalecer redes familiares,
comunitarias e institucionales en torno a los y las adolescentes, que apoyen su proceso
de intervención y reinserción social.
37
La reeducación se sitúa en el ámbito de la Pedagogía en general como disciplina que educa al individuo de nuevo,
se centra en el individuo que presenta dificultades de adicción a drogas y orienta tratamientos a comportamientos de inadaptación social. En tanto práctica socioeducativa (denominada como pedagogía reeducativa) dicha práctica ha acudido tanto a principios y concepciones confesionales como a discursos, técnicas y dispositivos ubicados en el campo de la ciencia social y de la praxis pedagógica, proponiendo un objetivo específico, el cual es, prevenir e intervenir poblaciones que se han precisado dentro de la categoría “jóvenes en conflicto con la ley”.
159
De acuerdo a la metodología de intervención se encuentra conformada a través de tres
etapas: 1) Acogida (proceso de iniciación, sensibilización frente a la problemática,
realización del diagnostico integral con sus áreas de intervención precisas al proceso
de tratamiento. 2) Tratamiento (replanteamiento de proyecto de vida, se brindan bases
para su reinserción social. Y 3) Pos institucional (se consolida su proyecto de vida a
partir de la realidad personal, familiar y social, brindando acompañamiento y
seguimiento frente a la efectividad del proceso de atención.
Los procedimientos para el egreso son la evaluación final de la intervención a partir de
la cual se elabora un informe que es enviado al Juzgado correspondiente, por medio
del cual se solicita el egreso, acompañado de una realización de cierre con el joven,
familiares o adulto responsable de éste, educadores y dupla psicosocial a cargo del
caso.
El Programa tiene como objetivo también brindar alternativas de crecimiento personal
cuyo fin es favorecer en los y las adolescentes el desarrollo de habilidades sociales y
personales, en congruencia con su grado de desarrollo vital, especialmente: potenciar
la autoestima y autoconocimiento, desarrollo de recursos personales, habilidades para
enfrentar sus carencias, para resolver conflictos adecuadamente y para relacionarse
interpersonalmente. De la implementación de esta línea de acción derivan aquellas
actividades de carácter individual y colectivo, esto último, a objeto de ofrecer un
espacio en donde puedan ser reflexionados o ejercitados los aprendizajes en la
interacción grupal. Estas acciones están a cargo del equipo técnico y son incorporadas
como parte del diario vivir en el internado.
Frente a intervenciones en el entorno socio-comunitario donde reside el adolescente se
orientan posibilidades de manejo de su reinserción una vez egresado del centro. Para
160
dar cumplimiento a lo anterior, los equipos técnicos, desarrollarán un trabajo en terreno
tendiente a conocer, vincular y fortalecer las posibilidades que tiene el adolescente de
la red comunitaria funcional a sus requerimientos específicos y grupo familiar. Así
también se hace necesario abordar la situación de quienes, por sus condiciones
familiares, deberán ser preparados para la vida independiente. El fortalecimiento, la
articulación y acceso a redes debe constituirse en una herramienta que permita la
conexión entre el o la adolescente a instituciones u organismos que aporten a su
reinserción social, en ausencia de un grupo familiar o adulto significativo.
4.6. El joven “rehabilitado” pero excluido socialmente
Una vez egresado de la institución el joven infractor emprende el reto desalentador de
la realidad social, es decir el reencuentro con los amigos del barrio, vivir su
problemática de pobreza, y el desempleo, es decir que ante la falta de oportunidades
muy seguramente la misma situación de exclusión o marginalidad va a hacer que el
joven recaiga en el consumo de SPA y en las mismas prácticas delictivas que realizaba
antes de ingresar a la institución, constituyéndose en un ciclo vicioso sin solución de
fondo.
Dichos jóvenes “rehabilitados”, nuevamente infractores, se constituyen en cierto rango
de socialización defectuosa, que fomenta la inestabilidad y genera riesgos para la
ciudadanía y para aquellos intereses que representan el orden prevaleciente, en su
materialidad y en la dimensión ético – moral.
Para dichos jóvenes “rehabilitados”, (nuevamente infractores), el paso por la institucion
con sus aprendizajes sobre el sentido a la vida, la unidad familiar y el sentido de lucha,
161
quedan como una experiencia más. Estas instituciones se convierten entonces en
simples alberges donde se conglomeran segmentos de los jóvenes infractores de ley.
Las trayectorias que de aquí emergen, contienen de manera anticipatoria los gérmenes
de lo que más adelante habrá de derivar en el delito y en la constitución de “carreras
delictuales”, y con ello del sello de las experiencias institucionalizadoras que
arquetipan, conductas, símbolos y representaciones. El joven ya adulto (mayor de 18
años) podrá propiciarse nuevas búsquedas de abstinencia y desintoxicación en
instituciones de rehabilitación, pero deberá promoverse mediante el auto-sostenimiento
económico en el caso de no contar con un apoyo familiar. Dado esto es notorio que el
joven adulto no busque su rehabilitación social, operando desde la exclusión como
inhabiltado para reclamar sus derechos sociales básicos.
4.7. Algunas explicaciones de la exclusión social del joven rehabilitado
En nuestro quehacer de educadores nos encontramos con muchas preguntas y pocas
respuestas ante la dificil responsabilidades de educar y incentivar motivación en el
joven infractor frente a la vida, el estudio, la superación personal. Así que nuestra
incansable búsqueda de respuestas y de contenido se nutre con nuestro mismo
quehacer, el sentido de la acción pedagógica y el promover horizontes de vida a partir
de nuestra realidad, política, económica, social y cultural. Lo que se convierte en un
reto para poder aproximarnos de una manera critica al problema de pensar la acción
pedagógica en los contextos desde la exclusión social de adolescentes infractores.
La exclusión social es una práctica, una dinámica y una realidad social construida a lo
largo del tiempo que consiste en la expulsión y la negación del acceso y disfrute de
162
determinados derechos ciudadanos a algunas personas; restringiéndoles las
condiciones de trascender la sobrevivencia, las posibilidades de formar una identidad
ampliando su autonomía y oportunidades para vivir digna y libremente. Sen, Tezanos
(2001)
Las personas que son excluidas, lo son haciendo parte de la sociedad, porque son
separadas de ciertas instituciones, de ciertos grupos, de ciertos modelos de ser, hacer,
tener y estar en el mundo, porque se les niegan determinadas representaciones e
imaginarios de dignidad, desarrollo y bienestar y, en especial, se las enajena de
numerosos beneficios. En la práctica, diría Zigmunt Bauman, “lo excluido –expulsado
del centro de atención, arrojado a las sombras, relegado a la fuerza al trasfondo vago o
invisible- ya no pertenece a „lo que es‟. Ha sido privado de existencia y espacio propio”
(2005: .32) en el mundo de la vida.
La exclusión opera, entonces, como dinámica histórica, orientada a negar el
reconocimiento efectivo de la condición de sujeto social a determinados sectores de la
población, menoscabando sus derechos económicos y políticos y dañando las redes de
pertenencia, confianza y solidaridad que sirven de apoyo y de seguridad en situaciones
de riesgo, vulnerabilidad y carencias externas.
Hoy, la exclusión no puede seguir siendo definida como un estado de vida
socioeconómicamente admisible, Es una práctica inhumana y una dinámica social,
económica, política y cultural cruel, que oprime, enajena y somete a privaciones, a
ausencias o pérdidas de conexiones y vínculos personales y/o sociales a amplios
sectores de la población, especialmente a niños, niñas, mujeres y jóvenes,
imposibilitándoles o dificultándoles el acceso a los recursos y a caminos de desarrollo y
trascendencia personal y colectiva.
163
Estamos hablando de excluidos de carne y hueso, de jovenes. Estamos hablando de
aquellos a los que se les ha quitado su espacio protagónico; de aquellos a los que se
les niegan su identidad, sus luchas, sus acumulados de saber y sus experiencias
vitales; de aquellos a los que se debilita en sus potencialidades impidiéndoles hacer
parte activa y creativa de la sociedad.
Lo anterior se puede complementar con la siguiente frase de Zygmund Bauman:
Las causas de la exclusión pueden ser distintas, pero, para quienes la padecen,
los resultados vienen a ser los mismos. Enfrentados a la amedrentadora tarea de
procurarse los medios de subsistencia biológica, al tiempo que despojados de la
confianza en sí mismos y de la autoestima necesaria para mantener su
supervivencia social, no tienen motivo alguno para contemplar y saborear las
sutiles distinciones entre sufrimiento intencionado y miseria por defecto. Bien
cabe disculparlos por sentirse rechazados, por su cólera y su indignación, por
respirar venganza y por su afán de revancha; aun habiendo aprendido la
inutilidad de la resistencia y habiéndose rendido ante el veredicto de su propia
inferioridad. (Bauman, 2003: 58)
Es de notar que jóvenes hoy excluidos socialmente, son considerados por el mercado
como consumidores fallidos, se los trata como relajados, muchas veces intrusos; se los
acusa de pretender lo que no se merecen, de ser indolentes; a menudo se los sindica
de asaltos, conflictos, robos, de vivir una vida al borde de la criminalidad, de ser
parásitos sociales fastidiosos, costosos y pasivos.
164
Lo anterior da cuenta de formas de ejercer el poder desde las lógicas que impone el
mercado globalizado que llevan al deterioro de las condiciones de vida y de trabajo de
muchas personas. El aumento de las desigualdades y de los riesgos de ser objeto de
prácticas de exclusión conduce a malestares y a la pérdida de horizontes y esperanzas
de futuro, en especial de muchos jóvenes; a esto hay que sumarle el deterioro de las
formas de convivencia, la crisis de la solidaridad, la falta de relaciones fundadas en la
reciprocidad y el altruismo, como valores, y el declive de la idea de bien común.
Todo esto da cuenta de la falta de imaginarios y opciones que busquen configurar
modelos socioeconómicos alternativos. La exclusión como rasgo de nuestra sociedad
contemporánea muestra la fractura social, la caída de ideales y normas y las
limitaciones de todo el sistema social para integrar al conjunto de sus ciudadanos. Por
ello es que son muchas las frustraciones, fracasos, carencias, privaciones, pesimismos
y desesperanzas originados en las prácticas excluyentes. Que a su vez generan fuertes
crisis en las instituciones de acogida, rupturas, desafiliaciones, desligaduras, pérdidas
de confianza, de reciprocidades, de solidaridades (laborales, económicas, familiares,
comunitarias, etc.); y por el contrario fortaleciendo viejas conflictividades y detonan
violencias, imponen nuevas campos de competencia y lucha socioeconómicas, que
devastan el medio ambiente y las ecologías culturales locales, que alimentan nuevas
patologías y dependencias, donde propuestas y dispositivos, como los educativos, se
muestran ajenos e incapaces de asumir los retos que plantean las tendencias y
trayectorias de los procesos sociales actuales.
165
Conclusiones
Los jóvenes infractores, como hemos visto de manera general, llegan a esta situación
como resultado del proceso de su formación personal en la infancia y la adolescencia
caracterizado por historias de vida en las que prevalece el maltrato, la carencia de
afecto, las rupturas de los lazos familiares, el abandono, el abuso sexual, la deserción
escolar, y ambientes familiares y sociales en los que prima la violencia, el micro-trafico
de drogas ilícitas y los patrones culturales entre otros.
Las descripciones logradas en el trabajo de campo permitieron evidenciar de manera
particular que existen diferentes situaciones de riesgo que juegan en el desarrollo de
prácticas de consumo y delito entre los jóvenes sujeto de estudio como son las
siguientes:
a) Los problemas familiares. Estos representan una de las principales razones por la
cual lo jóvenes se inician en el uso indebido de las drogas. Las condiciones internas de
hábitos y dinámica familiar pueden enmarcarse en factores difusos, como: el
autoritarismo de los padres, las figuras de poder contradictorias, el abandono, la
separación de los padres, que repercute en la estabilidad psicológica de los jóvenes
que encuentran en las drogas una forma de escape a estos problemas.
166
b) El ambiente familiar donde existe altos grados de consumo de drogas constituye una
de las situaciones de riesgo en el uso indebido de SPA por parte de los jóvenes,
debido a que los patrones de consumo por parte de los padres es emulado por sus
hijos quienes se inician en con el licor, el cigarrillo y la marihuana, y ascienden
progresivamente en el consumo de otras sustancias de mayor dependencia como el
bazuco, las pepas, inhalantes, etc.
c) Otra situación de riesgo se presenta en el tránsito del niño a la adolescencia. En
este proceso personal el joven entra en una etapa de su vida de búsqueda de
identidad ante los demás. Es normal que el joven busque ser reconocido, respetado y
tener independencia de las orientaciones de los mayores y en ese camino tenga
nuevas experiencias, y reciba la influencia de sus amistades, de la moda o
simplemente trate de aparentar su independencia ante el grupo de pares y termine en
el uso recurrente de SPA o practicas ilicitas.
e) Un alto factor de riesgo en el involucramiento de prácticas delictivas de la población
de estratos bajos lo constituye las condiciones de pobreza y marginalidad social de las
familias, que en la mayoría de los casos se implican en el micro-trafico como medio
para obtener el sustento económico.
Finalmente podemos señalar, que el consumo de drogas y prácticas delictivas en la
población estudiada constituye un “círculo vicioso” difícil de romper con el trabajo
reeducativo pues se enmarca dentro de una problemática estructural de nuestra
sociedad. Si bien no se puede justificar la infracción y la amenaza que representan
para la sociedad estos comportamientos, no se puede tampoco culpabilizar a estos
jóvenes cuando el medio social no le ofrece alternativas reales de vida y por el
contrario se vulneran sus derechos básicos desnutrición, educación, salud, seguridad y
trabajo. En este sentido las perspectivas reflejan cierto escepticismo frente al futuro de
167
estos jóvenes, mientras no haya una reflexión más crítica y menos moralista de la
sociedad frente a nuestra relación con las drogas.
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173
DICCIONARIO DE LA CALLE
En la cultura Manizaleña de este grupo de jóvenes en particular, se han encontrado muchas
de estas palabras permeadas por otras culturas en un lenguaje cotidiano, de fácil acceso que
igualmente es mimetizado y estratégico para evitar ser descubierto con facilidad. En el
sujeto de estudio se han instalado como hábitos y es característico de su identidad, fue
recopilado de las interacciones, charlas y demás circunstancias vividas con ellos. Aquí es
auténtico utilizar en algunos casos las terminaciones (osqui), ejemplo Mariguanosqui,
(nominación a la marihuana) avejosqui ( muy inteligente, zagaz) viejosqui (anciano). En otros
casos hablar las palabras en invertido así: tolis quiere decir listo, Jermu es Mujer; sus
diálogos son nutridos de cambios entre vocales por ejemplo; cederne es cuaderno, serte es
suerte… además de la gama de Seudónimos, que se identifican para interactuar entre ellos, o
denominar los dueños de las ollas, expendedores de droga SPA, o en otros casos el jefe,
tales como: mono, negro, ti@, ema, gorda, entre otros, para designar personas de mucha
confianza o simplemente calificativos des acuerdo a sus conveniencias.
Es así como el lenguaje revela sentimientos, amenazas y temores experimentados en su
cotidianidad, hacen parte de sus hábitos de consumo, de prácticas ilícitas como el hurto, sus
imaginarios y demás significados frente a la vida, la muerte y sus realidades tras el festín de
vivir y morir ala vez.
174
A
ABEJA: De carácter inteligente para los negocios
ABRASE: Retirarse, Aislarse, Separarse
ABRASE DEL PARCHE Evitar el contacto físico
ACELERAO Que actúa sin temor a las consecuencias
ACOSTAR Cometer homicidio
ACHICOPALAO Estar bajo animo
AGILICE: Tener rapidez. Movimiento rápido
AGONÍA: Egoísta, de poca solidaridad
AGREGADO: Entrometido, que se inmiscuye en asuntos ajenos
AGRESTE: Que cruza los límites en las relaciones sociales
AGUACATE Autoridades uniformadas (Policías)
AGUILUCHO: De bajo peso, con poca masa muscular
AGUANTA De carácter positivo
A LA LATA Estar de afán, sin temor
175
ALPISTE Referido a la comida
AL PISO Ir con velocidad en un auto, moto
ALETA Persona agresiva e impulsiva
ALETOSO Gritón, Rebelde, Agresivo
ALIÑAO Persona orgullosa, llama la atención entre iguales
A LO BIEN todo tiene sentido
ALTANERO Agresivo, Impulsivo
ALSOCO Rápido, ligero
ALQUILARSE Prestarse por dinero por un acto delictivo
ALUNADO Bajo el efecto de la marihuana
AMARRAO No comparte su dinero
AMURADO Bajo el efecto del bazuco
APARATO Arma
APARTACHO Apartamento
ÁRMELO Dar orden a la marihuana en un tabaco
ARAÑAO Efecto del poli consumo
ASOLAPAO Que no demuestra su verdadera personalidad
ASPERO: De carácter fuerte dominante
176
ASQUEROSO: Persona indeseable, feo
ATRAVESAO Arriesgado
ASTRONAUTA: Efecto de SPA estar en trance
AUC Auto defensas unidas de Colombia
ATARVANIAR Que acude a la agresión física para conseguir lo que desea
ATRAIDO Entrometido
AVENTAR Dar información en posición de denunciante
AVISPA Muy capacitado
AZAO Intolerante
AZARAO Asustado, alerta
B
BACANO: Esta bien hecho, pasarla bien
BANDA grupo de personas con hábitos delictivos
BALURDO Mal hecho, que guarda maldad
BARETO: Tabaco de marihuana
BANDERA Comportamiento estrafalario
177
BANDERIAR Dejar en evidencia un comportamiento de alguien /exhibir
BARILLO Referente a la marihuana
BIBLIA: Individuo con sabiduría e inteligencia
BICHA: Papeleta de bazuco 1 Gr
BALLEGAS Nominal de billetes
BOLE MUGRE Que habita la calle, de aspecto indeseable, mal olor,
BOMBA Llamar la atención en un grupo/paquete grande de SPA
BORONDO Ir de paseo por corto tiempo en moto
BOTAR CASPA Tener diálogos extensos acerca de temas en común
BRAVO Fuerte
BRAVIAR Tomar actitud desafiante
BREVE En corto tiempo
BRINCHA Muy pequeño
BRINCO detener e intimidar alas victimas, producto de un hurto
BOCHINCHOSO Conflictivo
C
178
CABALLO No consume SPA
CABRIAO Tener duda sobre algo
CAER Llegar a un lugar citado/dejarse atrapar
CACIQUE Jefe , líder aventajado
CADILLO Tabaco de marihuana
CAGALERA Que genera temor, cobardía ante cualquier acción
CALABERA De mal aspecto
CALETA Lugar para reducir objetos / guardar personas
CALIENTE Fugitivo de las autoridades/ persona deseo sexual /sitio de mucho
flujo de personas /sitio peligroso
CALIBRAO De potencia sexual activa
CANCER Cigarrillo
CANA Adjetivo calificativo a penitenciaría
CANERO Estar en la prisión
CANDELA Ejecutar un arma de fuego
CANDELEO Encuentro de bandas a fuego armado
CANTAR Informar acerca de un hecho sospechoso
179
CANTAR LA ZONA Informar sobre un acto delictivo seguro
CANZÓN Inquieto, de gran actividad física, hiperactivo
CAMBUCHE Sitio para dormir / sitio agradable
CAMELLO Trabajo
CAMPECHE Campesino
CAMPANERO: Vigila e informa presencia de autoridades
CARE CHIMBA Insulto, Agresión verbal
CARE VERGA Insulto, agresión verbal
CARITA FELÍZ Denomina anfetaminas
CARGAR BRONCA Mala intensión/buscar venganza
CARGAR LA LÁPIDA EN EL PECHO Estar en peligro de muerte
CARGAR TIERRA EN EL PECHO Estar muerto
CARRO Que esta al servicio del jibaro
CARRO LOCO Estar en shock
CASCAR Dar tiros a la victima / tener relaciones sexuales
CASCARERO Hurta objetos de poco valor
CASPOSO Utiliza las mentiras para impresionar
CASQUETE Adjetivo calificativo de sicario
180
CREPUSCULO Rumba que se realiza hasta el otro día, con Poli
consumo y sexo, en un lugar alejado de la ciudad.
CINTA Retraído por efecto de la droga
COCINERO Trabaja en un laboratorio, producción de SPA
COGER DE TEMA Hablar acercas de alguien/ burlarse
COGER DE QUIETO Persona que hurta con armas
COMBO grupo de personas con fama
COLILLA Parte ultima del tabaco de la marihuana
CORONAR Efecto satisfactorio de un hecho delictivo
CUCA Algo bonito agradable fisicamnete
CUCHA Adjetivo calificativo a señora o madre de familia
CULEBRA Deudas económicas
CUESCAS Anfetaminas
CRUCE Realizar un negocio
CRIPOSO Simboliza tabaco de marihuana
CRITERIO De carácter optimista
CUAJO Que contiene gran masa muscular
CHANDA De cualidades personales extravagantes
181
CHANGÓN Escopeta
CHICORIO Muy pequeño
CHIRUZA Denomina tabaco de marihuana
CHICHIPATO Persona con poca autoimagen
CHIMBIS Que llama la atención entre igual
CHICHI De poco valor
CHINGA Niño pequeño, utilizado en el parche para llevar mensajes
CHINA Adjetivo calificativo de mujer
CHIMBA Bueno, fantástico
CHICHARRÓN Problema
CHIRRETE Que pertenece a la calle y abusador de SPA
CHIRRINCHO Licor diferente al aguardiente
CHINO Calificativo de hombre
CHINCHE Pequeño/Que habita la calle
CHORRO Licor / trago de aguardiente
CHUZCA relativo a marihuana
CHUMBIMBA balas de fuego
CHUTAR Mandar/ ser autoritario
182
CHURRETA Que manifiesta y guarda temor ante el hecho delictivo
CHUNCHURRIA persona de poco valor
CHUPAITA Solicitar un beso a una mujer
CHUCHA Sujeto extravagante
CHUSMA Fuerzas militares
CHUPAR GLADIOLO Estar muerto
CHUCHITO Significa creencia en DIOS
CHUZO Artículo para hurtar, intimidar a la victima
D
DAR CARA Dejarse identificar mientras realiza una acción
DAR DEDO Acusar/masturbarse
183
DAR EN LA NUCA No dar lo que corresponde en los negocios ilícitos
DAR ESTARTE Impulsar a un amigo a cometer delitos
DAR UNA VUELTA Salir de paseo corto en moto
DAR UNA PALOMA Tener un paseo corto
DAR PISO Cometer homicidio
DALE COMO A RATA Agredir violentamente/ relación sexual compulsiva
DE BUENAS Tener suerte en cualquier momento
DEDICALIENTE Bueno para ejecutar armas de fuego
DEJAR SANO Pasar inadvertido
DE MALAS Negar una acción
DESCONTROL Desordenado
DEMENCIA Cruzar límites en las relacione sociales
DE MIERDA Expresa indiferencia
DESCREMAO Débil físicamente por masturbación compulsiva
DESECHABLE Habitante de la calle
DESPEGUELA Alejarse , tomar distancia
DERECHO Cumplir con las órdenes
DIABLO Indisciplinado, anórmico/cigarrillo de marihuana
184
DURO Con poder de tomar decisiones entre el grupo/ autoridad
E
EL ACTO Solicitar la relación sexual
EL PAGO Oportunidad de hurto
EL PROPIO Jefe de la banda /narcotraficante
EN LA JUGADA Estar alerta, seguro
EMBALAR Comprometer a alguien
EMBARRADA Sujeto que hace daños
EMPASTRE Grupo de personas para hacer fiesta
EMPEPAO Sumergido en anfetaminas
EMPELICULAR Estar bajo los efectos de SPA
EMPALAGOZO Inquieto
ENCALETAR Guardar, esconder
ENCANAO Persona privada de la libertad física
185
ENCHONCHAR Tener locha
ENCOCHINAR Disociar de alguien
EN LA MIRA Que esta visible
EL DE ARRIBA Simbólico a DIOS
ENDULZAR Coquetear, cortejar
ENGRILLAO Que porta las esposas o grillos de las autoridades
ENTONCES Indica saludo
ESCAPE Técnica de hurto, dejar a la victima inocente
ESCAPERO que hurta objetos pequeños
ESCOBA Que practica el hurto
ESCORIA No tiene valor humano
ESTALLAR Apretar el gatillo de un revolver varias veces
ESTRIPARSE Estar delatado frente a un acto
ESQUIRLA Muy pequeño
F
186
FAFARACHOSO Individuo ostentoso, lucido.
FAENA Disfrutar de una fiesta completa
FALCETA Sujeto mentiroso, desleal
FALSO Sujeto con trastorno de mitomanía
FALTÓN No cumple compromisos
FARRA Fiesta, rumba
FARISEO Desleal infiel
FEOS Autoridades civiles (DAS, FISCALIA)
FERRARI Sujeto mensajero, objeto para consumir spa
FRENTOLÍN Enfrentar una acción sin temor
FRIQUI Negativo
FINCA De procedencia campesina
FINAITO Estar muerto
FILOMENA Referido hambre
FIERRO Arma
FIEBRE Estar fanático
FO Desagradable, de mal gusto
187
FUGA Evadirse de algún lugar
FUERTE Que posee poder para conectar a otros
FUMADO Consumo spa /quitar objetos a otra persona
FUMIGAR Cuando se utiliza subametralladora para exterminar una banda
FUGUEN Solicitar fuego/fuego invertido
G
GATILLERO Individuo que utiliza armas de fuego
GATOS Policías de civil
GALLO Que es muy difícil , problemático
GALLETA Calificativo para travestis
GANAR EL AÑO Superar una crisis
GANÓ Que tuvo buena suerte
GANZO CIEGO Estar involucrado en asuntos que no conoce, inocente
188
GAMBA Adjetivo calificativo para jóvenes con problemas de adicción
GARULLA Persona indeseada
GARBIMBA menospreciar conductas del otro
GARRA Adjetivo de atraco/calificativo de feo
GATORADE Referido a los gais
GUERRILLOS guerrilleros de izquierda
GODOMORRA Tener locha
GOLPE Estar seguro de un ilícito/referente a la comida
GOFIAS Calificativo a las autoridades
GROGIS Negativo
GOMELO Que utiliza ropa de marca lujosa
GONORREA Calificativo agresivo
GOLFA Mujer de bajo prestigio
GUAMA Calidad de revolver
GUAYO De impresión negativa
GUELER Inhalar sacol
GURRUPLETA De mal gusto
189
H
H Heroína
HACHIS Característico de la marihuana
HALCONES Policías
HAMBRUNA Tener hambre
HEMBRA Propio de mujer
HIFUEPUTA Calificativo negativo, agresión verbal
HIGUAZO De poca calidad
HILO DENTAL Ropa interior de la mujer
I
190
IGUANA Policías
IR GRAVE Andar en riesgo
IR EN VOLQUETA No estar de buenas para los negocios
IN Estar a la moda
INDIGNO Que comete homicidios y amordaza a la victima
J
JARTÓN Apetito excesivo
JALARDOR Hurtar carros
JERMU Mujer invertido
JÍBARO Que se encarga de venta de las SPA
JOIS Relativo a marihuana
K
KILO: Adjetivo de Grande
191
L
LA BASE MIA Defensa del pensamiento particular
LA CHIRI Negación
LA DOBLE Que traiciona
LAGARTO Policías
LA FUEGA Indica estar alerta en un hecho
LAGAÑA Poco, muy cortó
LA LEY Policías
LÁMPARA persona con conductas de calle
LAMPIÑO No posee vello corporal
LANA Dinero fácil
LA PIFIA Mentir
LA PODRIDA temporada difícil, sin dinero
LA QUINCE Pipa para consumir bazuco
LLAMAO Entrometido
192
LATA Objeto utilizado para hurtar
LE FIGURÓ Estar seguro
LA LESIÓN Estar en el lugar del hecho ilícito
LENTEJO Estar despacio
LLEVAR EN LA MALA Estar en desacuerdo con alguien/ enemigo
LESNA objeto puntiagudo
LIEBRE Enemigo
LICHIGO Dar dinero
LISO Rápido/difícil de capturar por otros /Hurtador
LOCA Referido a los gais ubicados en la calle
LO MIO Simboliza pertenencia
LOBA Promiscuidad
LUNGO De bajo carácter
M
MADURO: Tabaco de marihuana y bazuco
MAN Indica persona
MARCAR Señalar un sitio/ir a visitar la novia
193
MARCAR CALABERA Esta r en riesgo de muerte
MASCAR Llevar tiempo corto con la novia /realizar homicidio
MAXIMA Mejor amigo
MUÑECO Denomina Muerto
MANUCIAR Que utiliza las manos para acusar sexualmente
MARAÑA Muy poco
MARICONA Mujer con deudas
MAI Amigo reconocido
MANDADOS Personas al servicio de otros, de una lado a otro
MARIO Policías
MARIGUANO mariguana masculino
MARICA De diferente inclinación sexual / Nominal de amigo
MANIAO Que porta armas / enredado
MANIOBRAN Diferentes modelos, formas para estar desapercibido
MAZO revolver
MECHAS Ropa en mal estado
MELÓN Un millón de pesos
METRA Ametralladora
194
ME LOS FUMÉ hurtos designados al consumo de SPA
MELONA Referido a tener hambre
METEDERO Lugar de expendio de droga
MOÑO Cantidad de marihuana
MOTIVAO De iniciativa
MONDONGO Feo, en mal estado
MONTAR Que abusa de la autoridad
MOSCA Seguro, al cuidado
MOLE De contextura gruesa
MOCO De poco valor /persona indeseada
MUÑECO Nominal de muerto
N
NENA Mujer con cualidades agradables
NIEVE Cocaína, Perico
NI CHI Negación
NO COMER DE NADA No temerla a nada
NOTAS Negación
NONIS Negación
195
Ñ
ÑERO Persona que habita la calle
O
OFICINA Lugar de referencia para reuniones a ilícitos
OFRI: Frio invertido
OUT Del inglés estar fuera
OLER A FORMOL Estar próximo a la muerte
OLLA Lugar de expendio de SPA
OLVIDO Dejar de lado
P
196
PANA Amigo
PAN Parte intima femenina
PAILA fallar, condicionar , negar algo
PEDRO Policías
PAGAR Arriesgarse
PARCHE: Lugar de preferencia para reuniones en grupo
PARCE buen amigo
PARAS Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia
PARACOS Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia
PARAO Valiente, Impetuoso
PASPIAO Con síntomas de euforia de efectos de SPA
PARCHAR Entablar relación sentimental
PAPITOS Amigos reconocidos
PARO Disculpa
PAROLO De intensidad sexual
PA LAS QUE SEA En total disponibilidad
PA AL MUELA Ir directo a la boca
PALOS Dinero
PARAR BOLAS Prestar atención
197
PERDER EL AÑO No lograr el objetivo
PASES Compartir la droga, pasársela de uno en uno
PASEO MILLONARIO llevar de paseo por la ciudad, drogar a la victima, y extraer su
dinero de los cajeros y cuentas de bancos
PAREJO Significa cantidad
PATRÓN Ofrece dinero por los ilícitos, es el gran líder del grupo
PATRACIAR Incumplir, traicionar, estar arrepentido
PAJIAO Que se realiza la masturbación
PANGUANO De poco carácter
PANIQUIAO Estar alerta, quieto, efecto del bazuco
PATA parte final del tabaco de marihuana
PATICORTICO De baja estatura
PECUECA Persona despreciable, deshonesta
PELLE De poco valor físico, feo
PELLEREA De muy mal gusto
PILLOS persona con actividad delictiva reconocida
PEDORRO Que no tiene juicio de valor
PERDIÓ Sin argumentos para continuar en el grupo
198
PEREZ Perico SPA
PERCANTA Mujer que practica la promiscuidad
PEGARLE AL PELUCHE Tener relaciones sexuales
PEGA BIEN Tiene reconocimiento positivo
PERCHA Ropa llamativa
PEGÓN Agradable, Admirable físicamente
PEGALO Terminar la fase final del tabaco de marihuana
PERRO De mucha experiencia/que practica la promiscuidad
PELONA Sin dinero
PICAO A LOCA Llama la tención con actitudes de desprecio a otros
POLOCHOS Policías
PIÑA Artefacto explosivo de esquirlas
PISTIANDO Estado de observación
POR LA GALLETA Pasar inadvertido
PÍCAR Buscar conflicto (peleas)
PIQUIÑA Hiperactivo
PIROVO: Calificativo agresivo, Insulto/guarda la imagen de joven
normal, pero mantiene relaciones sexuales por dinero
PISOS Zapatos
199
PICHÓN Reconocido en el grupo por su actividad sexual
PIPA instrumento hecho a mano para consumir bazuco
PILLAR Estar delatado frente al ilícito, dejarse ver
PILOTO Que posee habilidad para conducir
PICHAR Denomina la relación sexual
PICHURRIA Sin sentido
PINTA Calificativo a hombre/hij@
PITO Amigo líder, buen amigo
POGUEO Darse empujones durante un baile/ especifico del baile de los
punkeros
PONE NALGA Q ue realiza relaciones anales
POLOCHO Policia
POLLA La Joven
PROBAR FINURA Estar aprobado en el grupo de amigos por sus habilidades y destrezas
PORRO Tabaco de marihuana
POSTEMA Persona desagradable
PUNTA Objeto cortó punzante (Navaja)
PLAGA Agentes uniformados/ de conductas negligentes
PLOMO Proyectil de arma
200
POWER RANGER Policías armados
PUTAS Mujeres con ejercicio de prostitución/maligno
PUNTAZO Herida con arma blanca
PUCHO Cigarrillo
PULLAR Tener relaciones sexuales
Q
QUEBRAR Matar
QUIETO Expresión que se utiliza para enganchar ala victima
QUIUBO Indica saludo
R
RATA Hurtador/Agresión verbal
RATO Referido al valor del tiempo
201
RANA Calificativo de comunicador
RABÓN Indica ira, , intolerancia
RAQUETA Requisa de objetos
RANCHO Residencia
RANCHO APARTE Buscar independencia física
RE Que da mayor significado. Ejemplo: refeo, (muy
feo) recaro (muy costoso).
REGALAO Está presente en todos los eventos, y situaciones
REGUETONAZO Ritmo musical
REVIRAR Contestatario, irreverente
REZAO Tiene mala suerte
RISUEÑA Euforia por efecto de la marihuana
RIÑAS peleas de calle con armas blancas
ROTO Lugar fácil para hurtar/significa peligro
RUEDELO Pasar el tabaco de marihuana, compartir
RUEDAS Anfetaminas (Éxtasis)
202
S
SACAR LA PIEDRA Provocar el mal genio de otro
SACUDIR Safarse de alguien, alejarse sin razón
SAFA JIRAFA De inmediato
SAPO Informante
SE ESTALLÓ Referente a homicidio
SEÑO Señora
SERIO Significa confirmar lo cierto/se cumplido
SEVERO Significa grandeza, poder
SISAS Afirmativo SI
SIN MENTE Realizar hecho sin conciencia, en corto tiempo
SIZARRAS Afirmativo SI
SICOSIAO Que contempla paranoia después de consumir bazuco
SICARIO Persona que gana dinero a través de homicidios
SOPLETE Que es adicto al bazuco
203
SOBRA Sacarlo del grupo
SOCIO Amigo de negocios ilícitos
SOLLARSE Estar de buen animo, relajado sin problemas
SONAR LA NARIZ agresión física a otro
SOPAS Afirmativo
SUERTE Indica despedida de una conversación/alegarse
T
TAMALERA paquete de doce bazucos
TARRAO Sinónimo de bello, ataractivo
TAPETE De Baja estatura
TRAIDO Enemigo, indeseable
TENGA Y LLEVE De mala intensión
TENGASE DE LOS CALZONES Esperar
TERAPIA De carácter fuerte, exigente
TRAVESTI Utiliza vestuario, y su tono de voz es femenina
204
TRAQUES Agresión física
TRAQUETO Dedicado al sicariato
TRABA Trance de SPA
TRAMAR Dar credibilidad
TRANSAR buscar aprobación con iguales
TRAMPA Estar alerta
TETA Denomina inhalante (sacol-pegante)
TEMA Canción de mayor gusto/indica respeto a los limites
TIA Reconocida por vender SPA
TIESO Estar muerto/poca agilidad para bailar
TIRAR Tener relacione sexuales
TOCAO Intolerante
TOLIS Listo invertido
TÓMELA SUAVE Estar en calma
TOMBOS Policías
TOTE Revolver
TOLA Terminación de (pistola)
TODOS LOS JUGUETES fiesta, rumba completa (licor, Spa, sexo)
205
TODO BIEN Sin dificultades
TORCIDO Desleal
TORRE Cabeza
TROPEL Conflicto, peleas callejeras
TUBO Arma
TUMBAR Cometer homicidio
V
VAGRE Parte intima d e la mujer /significa grandeza
VANDIDO Promiscuo/acciones negativas
VAMOS A ECHARNOS EL HUEVO tener relaciones sexuales
VENDIDO Deshonesta
VENDETAS: Peleas
VENTIAO Rápido
VIAJAR Estar muerto
VIDRIOS Encontrarse en otra ocasión
VIOLENTO Poder, agresivo
VIEJO Adjetivo de señor
206
VIEJA BUENA Mujer atractiva
VISAJE llamar la atención
VISAJOSO Estrafalaria
VOLETA Sin urbanidad
VOLIAR FRUTA Enfrentamiento con armas entre dos bandas, o personas
VUELTA Hecho delictivo
VUELTÓN Reconocimiento del lugar del ilícito
Y
YO VERÉ Pensar a posteriori
YUCA complemento de una frase No debe hacerse
Z
ZORRA Mujer Promiscua
ZAPATO Sinónimo de feo, poco atractivo
207
ARTICULOS DE MAYOR FRECUENCIA DE HURTO Dinero 24% Celulares 10% Cadenas de oro 4% Bolsos, carteras 5% Pasacintas 2% Electrodomésticos 3% Artículos electrónicos 8% Carros Particulares 4% C`DS 4% Cuerdas de luz 5% Ropa y calzado 7% Café 4% Abigeato 6% Empresas 8% Motores de carros 3% Artículos personales 3%
208
TECNICAS DE HURTO SIMPLE MAS FRECUENTE
Escape 50%
De quieto 50%
TIPO DE PERSONAS QUE HURTO CON MAYOR FERECUENCIA
Adolescentes Masculinos 26%
Adolescentes Femeninos 74%
100%
209
PERSONAS QUE HURTO CON MAYOR FRECUENCIA
Ancian@s 40%
Travesti 42%
Discapacitados 18%
100%
OTROS DELITOS ASOCIADOS AL HURTO
Lesiones Personales 60%
Homicidios 30%
Violaciones 10%
100%
210
HORARIO EMPLEADO AL HURTO
Noche 37%
Tarde 25%
Medio Día 10%
Mañana 20%
Madrugada 8%
100%
EDAD DE INICIO DEL CONSUMO
De 6 a 11 años de edad 70%
De 12 a 16 años de edad 30%
211
AÑOS DE CONSUMO DE SPA
De 1 año a 5 años de Consumo 62%
De 6 años a 8 años de Consumo 18%
No Responden, No saben. 20%
100%
PREFERENCIA DE PERSONAS PARA CONSUMIR
Grupo de Amigos 45%
Para Celebrar un Hurto 30%
Con la Novia 15%
Individual 10%
100%
212
LUGAR FRECUENTE DE CONSUMO
Lugar de Expendio 35%
Zonas Boscosas 20%
Esquina del barrio 7%
Parques 10%
Discotecas 15%
Casa Propia 5%
Casa de Amigos 5%
Casa de la Novia 3%
100%
MOTIVOS QUE ME LLEVAN A CONSUMIR A NIVEL FAMILIAR
Maltrato Físico 30%
Perdida de un ser querido 7%
Presión de familia 10%
Problemas familiares 23%
Imitación Familiar 30%
100%
213
MOTIVOS DE CONSUMO A NIVEL SOCIAL
Diversión 44%
Disfrutar de las Fiestas 20%
Presión de Amigos 15%
Aceptación de Amigos 15%
Curiosidad 6%
100%
FRECUENCIA DE CONSUMO DE CIGARRILLO
Consumo diario 72%
Esporádicamente 28%
100%
214
CONSUMO DE MARIHUANA
Consumo Diario 90%
Tres veces por semana 10%
100%
CONSUMO DE LICOR
dos veces por semana 34%
cada ocho días 66%
100%
215
CONSUMO DE BAZUCO O CRACK
consumo diario 67%
consumo cada ocho días 33%
100%
LA MAYORÍA DEL TIEMPO LO
PASA
familia 20%
Amigos 80%
216
Formato de preguntas
La información que usted consigne en este formulario, es estrictamente confidencial, marque con una
equis (x) la respuesta que usted considere correcta:
Fecha de diligenciamiento: Día ________ Mes _______ Año_________
Edad en años cumplidos: ___ Género M_____ F______
Nombre de la Sustancia
psicoactiva
Ha consumido alguna vez Semanalmente cuantas veces
lo hacia
Cigarrillo
Marihuana
Bebida alcohólica
Bazuco
Inhalantes
Metanfetaminas
Cacao sabanero
Hongos
Perico- cocaína
Heroína
Otros. Cuales.
Cuantos años de edad tenía cuando inicié el consumo ___
Cuantos años llevo en el consumo ____
Cuáles fueron los principales motivos que lo llevaron al consumo
Escapar de los problemas ___
Por presión de amigos __ familia___ pareja____
217
Curiosidad ____
Diversión____
Para disfrutar las fiestas ____
Por soledad___ o perdida de un ser querido ____
Problemas familiares _____ Maltrato físico_____
Quitar la timidez_____ o aceptación de sus amigos___
Por abuso sexual___
Para conseguir lo que quería___
Con relación a la familia y el grupo de amigos
La mayoría del tiempo lo compartía con su familia ___ con amigos ___
Algún miembro de su familia consume alcohol padres__ hermanos __ tíos____ primos___
Sus padres tienen comunicación adecuada con usted___
Ha tenido episodios de agresión con su familia por culpa del consumo de thc __
Como se siente con su familia Aceptado_____ Rechazado ______
Con quien vives en tu casa _____________ cuantos______
A que estrato perteneces_____ cuanto es el ingreso semanal de tu familia___mensual ____
Ha recibido alguna vez maltrato psicológico__________ moral______ verbal____
Con relación a su caso (modalidad de internamiento)
Ha incurrido en este delito para el consumo de SPA
Ha sido proveedor consumidor de SPA
Con relación al uso de THC
El consumo de thc lo ha llevado a usar otras SPA
Cual ha sido de mayor impacto___
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