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FACULTAD DE HUMANIDADES
Carrera de Psicología
ADICCIÓN A REDES SOCIALES Y FUNCIONALIDAD
FAMILIAR EN ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS Y
EGRESADOS DE LIMA METROPOLITANA
Tesis para optar el Título Profesional de Licenciado en Psicología
ELIZABETH HILDA HARO ARRARTE
Asesor:
David Alberto Lozada Martínez
Lima – Perú
2018
ii
Resumen
El funcionamiento familiar es un elemento fundamental para poder tener un uso adecuado de
las redes sociales, fenómeno que ha tenido un acelerado crecimiento en el mundo. Este estudio
se plantea como objetivo principal relacionar el Funcionamiento Familiar y la Adicción a las
Redes Sociales en un grupo de estudiantes y egresados universitarios de Lima Metropolitana.
La presente investigación se ha basado en un método transversal de diseño no experimental,
de enfoque cuantitativo de diseño correlacional. Se evaluó a 208 participantes, 10 participantes
fueron excluidos por no cumplir los criterios de administración de los instrumentos. Para ello
se utilizó el cuestionario de Adicción a Redes Sociales (ARS) elaborada por Escurra y Salas
(2014) y la Escala de Evaluación de Cohesión y Adaptabilidad Familiar (Faces III) elaborada
por Olson. La confiabilidad de los instrumentos de evaluación fue examinada a partir del
criterio de consistencia interna, calculando el coeficiente alfa de Cronbach tanto para el Test
de Adicción a Redes Sociales como para el FACES III. Se encontró una correlación
estadísticamente significativa, moderada y positiva entre obsesión por las redes sociales y
adaptabilidad, así como una correlación significativa negativa entre falta de control personal
en el uso de las redes sociales y cohesión.
Palabras clave: funcionamiento familiar, redes sociales, adicción.
iii
Abstract
Family functioning is a fundamental element in order to have an adequate use of social
networks, a phenomenon that has had an accelerated growth in the world. The main objective
of this study is to relate the Family Functioning and the Social Network Addiction in a group
of students and university graduates from Metropolitan Lima. The present investigation has
been based on a non-experimental transversal method, with a quantitative approach of
correlational design. We evaluated 208 participants, 10 participants were excluded because
they did not meet the criteria for administration of the instruments. For this, the Social
Network Addiction (ARS) questionnaire elaborated by Escurra and Salas (2014) and the
Family Cohesion and Adaptability Assessment Scale (Faces III) prepared by Olson was used.
The reliability of the evaluation instruments was examined based on the internal consistency
criterion, calculating Cronbach's alpha coefficient for both the Social Network Addiction Test
and the FACES III. A statistically significant, moderate and positive correlation was found
between obsession with social networks and adaptability, as well as a significant negative
correlation between lack of personal control over the use of social networks and cohesion.
Key words: family functioning, social networks, addiction.
1
Introducción
El fenómeno de la globalización ha traído consigo la creación y masificación del
internet, propiciando cambios radicales en las formas y estilos de comunicación social de la
población a través de las plataformas virtuales conocidas como “redes sociales”, es por ello
que se ha incrementado la interacción de las personas, quienes hoy pueden establecer
conversaciones en tiempo real, con o grupos que se encuentran en cualquier parte del mundo.
Las plataformas digitales progresivamente se han ido convirtiendo en una herramienta
indispensable para mantener una conversación con personas que no comparten en ese
momento el espacio presencial, es así que esta tecnología ha facilitado la comunicación en
tiempo real con individuos que se encuentran distantes; sin embargo, se cuestiona que haya
dejado de lado la comunicación presencial, estas nuevas prácticas de comunicación han
generado un rompimiento en las interacciones tradicionales con los miembros de la familia, en
donde muchas veces se prefiere estar cerca de un aparato tecnológico que mantener una
conversación directa y cara a cara con los demás (Llamas & Pagador, 2014). Las dificultades
que pueden estarse generando en la interacción familiar como producto del uso de las
diferentes formas tecnológicas y virtuales ha sido corroborada con estudios como el de los
autores mencionados anteriormente, quienes entre otras de las conclusiones a las que llegaron,
señalan que la mayoría de los niños y adolescentes están solos cuando ven televisión juegan a
la videoconsola o navegan por internet, situación peligrosa, perjudicial y que genera grandes
problemas tanto personales como sociales.
De acuerdo con We are Social (2018) citado por Marketing 4 Ecommerce (2018) el
42% de personas en el mundo hace uso de las redes sociales lo que equivale a 3,196 millones
de usuarios activos, de esa cifra 2,958 millones de cuentas son utilizadas desde un dispositivo
móvil, lo cuales permiten la conexión y uso de redes sociales en todo momento y lugar.
En relación con el número de usuarios en redes sociales los países que lideran las
estadísticas, son China con 84,630.000 usuarios, seguido de India con 59,000.000 y finalmente
Indonesia con 24,000.000 de usuarios. Con respecto al tiempo de uso, Filipinas lidera la tabla
con un tiempo promedio de 3 horas y 57 minutos, Brasil continúa con un promedio de 3 horas
2
y 39 minutos, Indonesia con 3 horas y 23 minutos, finalmente España con un menor tiempo
registra una media de 1 hora y 38 minutos. De acuerdo a las redes favoritas a nivel global
Facebook lidera con 2,167 millones de miembros, YouTube con 1,500 millones de usuarios
seguido por WhatsApp y Facebook Messenger, ambas con 1,300 millones de cuentas (We are
Social, 2018 citado por Marketing 4 Ecommerce, 2018).
En el Perú el 88,8% de la población de seis años a más hizo uso de Internet con el fin
de establecer comunicación ya sea por correo o chat (INEI, 2017), si bien es cierto el internet
es una herramienta más amplia y con mucho más contenido que las redes sociales, las
estadísticas revelan que es usada casi en su mayoría con la finalidad de comunicarse.
En nuestro país Facebook también es la aplicación favorita entre los usuarios
registrando un 89% de popularidad, seguido por WhatsApp y YouTube las cuales obtuvieron
un 59% de preferencia, Google +, la red social de Google registró un 40% de favoritismo,
Twitter alcanzó un 16% de preferencia, Instagram, la aplicación para subir fotos y videos,
registró un 10% seguida de Snapchat con un 3% (GFK, 2016).
Por su gran funcionalidad y rapidez las redes sociales muchas veces son usadas para
planear actividades, conversar en grupo y organizar eventos, lo que las convierte en
herramientas útiles y sencillas para mantenerse en contacto con su medio; sin embargo, dicha
rapidez ha generado una alteración negativa en la escritura y ortografía, los mensajes se
distorsionan, se abrevian quitándole el sentido y la esencia a lo que realmente se quiere
transmitir. Además, se ha encontrado que los escolares prefieren pasar sus ratos libres
navegando en internet o jugando a través de video consolas en lugar de dar un paseo por la
ciudad o estar relacionándose con sus compañeros. En tal sentido han optado por relacionarse
por estos medios.
Precisamente el concepto de amistad ha cambiado a partir de la aparición de dichas
plataformas pues no solo se considera “amigo” a alguien a quien se conoce durante un periodo
de tiempo, es cercano y de confianza, pues también podría ser una persona que se conozca por
estos medios digitales, estas nuevas personas tendrían acceso a información personal y hasta
saber dónde se encuentra por medio de la localización, lo que podría resultar muy peligro si se
trata de algún desconocido.
3
Una de las formas de bullying tradicionales referidas básicamente a las conductas de
acoso en la interacción entre pares, se le ha agregado en los últimos tiempos una nueva forma
denominada “Ciberbullying”, la cual se caracteriza por la acción de publicar a través de las
redes sociales mensajes y graficas con la intención de dañar la imagen de la persona que es
víctima de acoso (Llamas & Pagador, 2014).
Las plataformas online, permiten publicar información personal creando un “perfil”, al
mismo tiempo buscar e interactuar con los perfiles de personas de diferentes lugares, estas
han ido evolucionando con el tiempo, hoy en día existen plataformas de un exclusivo público
objetivo, como por ejemplo orientado a ampliar su red profesional, otras buscan la interacción
de personas de diferentes países como también propiciar encuentros entre personas y hasta
encontrar una pareja, cual sea la dinámica de cada una de ellas todas se basan en generar una
comunicación fácil y sencilla. Debido a ello las redes sociales son el medio más utilizado por
los adolescentes y jóvenes, ya sea por la gran oportunidad que les da de conocer personas
nuevas o mantenerse informado y en una comunicación constante con su entorno. Sin embargo
este nuevo tipo de comunicación ha ocasionado una transformación gradual en las relaciones
interpersonales, las relaciones cercanas con la familia, amigos o compañeros podrían ser
renovadas y las relaciones a distancia se verán fortalecidas (Bohórquez & Rodríguez, 2014).
De acuerdo al cuestionario de Adicción a las Redes Sociales (ARS) El primer factor
denominado “obsesión por las redes sociales” corresponden conceptualmente al “compromiso
mental con las redes sociales, pensar constantemente y fantasear con ellas, la ansiedad y la
preocupación causada por la falta de acceso a las redes” (Escurra & Salas, 2014, p. 81). Lo
que ocurre es que mientras la persona se encuentra desarrollando sus actividades u
obligaciones experimenta deseo de ingresar a su cuenta, de lo contrario siente angustia e
intranquilidad, lo que no permite que se enfoque en sus labores con normalidad.
El segundo factor mencionado es “falta de control personal en el uso de las redes
sociales” corresponden a la “preocupación por la falta de control o interrupción en el uso de
las redes sociales; con el consiguiente descuido de las tareas y los estudios” (Escurra & Salas,
2014, p.81). Lo que ocasiona un reemplazo de las responsabilidades o prioridades por
mantenerse conectado.
4
Finalmente el tercer factor “uso excesivo de las redes sociales” refiere a las
“dificultades para controlar el uso las redes sociales, indicando el exceso en el tiempo uso,
indicando el hecho de no poder controlarse cuando usa las redes sociales y no ser capaz de
disminuir la cantidad de uso de las redes” (Escurra & Salas, 2014, p.81).
Se ha identificado que el descontrol personal, que se expresa en la carencia de
planificación en el desarrollo de actividades con objetivos y metas vagamente definidos, así
como en estados recurrentes de estrés y ansiedad, es el elemento distintivo de los trastornos
adictivos. En un inicio se experimenta placer y satisfacción, pero con el uso repetido se va
convirtiendo en su prioridad, subordinando aspectos centrales de su vida como, actividad
laboral, académica, familiar para concentrarse casi exclusivamente a las actividades que son
objeto de su dependencia. Mientras que una persona no dependiente se comunica mediante un
mensaje o se conecta a sus cuentas sociales por placer, pasar el rato o porque lo es necesario,
en el caso de una persona adicta lo hace para calmar su disforia o disgusto emocional (Cía,
2013).
El instrumento aplicado, Adicción a Redes Sociales (ARS), se encuentra basado en los
criterios diagnósticos del Manual de los trastornos mentales DSM IV, que caracteriza el
trastorno adictivo a sustancias. El ARS incorpora dichos criterios, remplazando la categoría
“sustancia” por el de “redes sociales”. Los criterios del DSM IV son los siguientes:
1. Tolerancia, definida por (a) una necesidad de cantidades marcadamente crecientes de
la sustancia para conseguir la intoxicación, o el efecto deseado o, (b) el efecto de las
mismas cantidades de sustancia disminuye claramente con su consumo continuado.
2. Abstinencia, definida como cualquiera de los siguientes ítems (a) el síndrome de
abstinencia característico para la sustancia o (b) se toma la misma sustancia (o un muy
parecida) para aliviar o evitar los síntomas de abstinencia.
3. La sustancia se consume en cantidades mayores o durante un período más prolongado
de lo que originalmente se pretendía
4. Existe un deseo persistente o se realizan esfuerzos infructuosos por controlar o
interrumpir el consumo de la sustancia.
5. Se emplea mucho tiempo en actividades relacionadas con la obtención de la, en el
consumo de la sustancia o en la recuperación de sus efectos.
5
6. Reducción o abandono de importantes actividades sociales, laborales o recreativas
debido al consumo de la sustancia.
7. Se continúa consumiendo la sustancia a pesar de tener conciencia de problemas
psicológicos o físicos recidivantes o persistentes que parecen causados o exacerbados
por el uso de la sustancia. (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales
DSM IV, 1995).
Sin embargo, en la última publicación del libro de Asociación Estadounidense de
Psiquiatría (APA, 2013) ha incluido los trastornos no relacionados a sustancias (Juego
Patológico). Si bien es cierto no diagnostica una adicción a las redes sociales, se hace una
aproximación más significativa a estas. Se señala que, provoca un deterioro o malestar
clínicamente significativo y es necesario que se cumpla con al menos 4 de los siguientes
criterios:
1. Necesidad de apostar cantidades de dinero cada vez mayores para conseguir la
excitación deseada.
2. Está nervioso o irritado cuando intenta reducir o abandonar el juego.
3. Ha hecho esfuerzos repetidos para controlar, reducir o abandonar el juego, siempre sin
éxito.
4. A menudo tiene la mente ocupada en las apuestas.
5. A menudo apuesta cuando siente desasosiego
6. Después de perder dinero en las apuestas, suele volver otro día para intentar ganar
7. Miente para ocultar su grado de implicación en el juego.
8. Ha puesto en peligro o ha perdido una relación importante, un empleo o una carrera
académica o profesional a causa del juego.
9. Cuenta con los demás para que le den dinero para aliviar su situación financiera
desesperada provocada por el juego (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos
mentales DSM V, 2014).
Para Volkow (2008) la estructura y el funcionamiento del cerebro se ven afectados
cuando existe un abuso de drogas, debido a este cambio afirma que la adicción es una
enfermedad, por lo que será necesario prevenirlas y tratarlas, de caso contrario el paciente
podría padecerlo por toda su vida y adquirir comportamientos peligrosos.
6
El consumo de sustancias y las adicciones son fenómenos muy complejos que varían
de individuo a individuo, interactúan factores de riesgo de tipo biológico (genética, sexo,
trastornos mentales) y medio ambientales (hogar caótico y maltrato, modelos parentales
disfuncionales, influencia de los amigos y compañeros, transgresión de normas de convivencia
comunitaria, rendimiento académico deficiente), por lo tanto es importante un funcionamiento
adecuado con los miembros de la familia ya que esto será determinante para un riesgo de
adictivo.
A lo largo de la etapa de la adolescencia en la corteza prefrontal del cerebro, en donde
se ubica el sustrato biológico de funciones importantes del ser humano tales como “evaluar las
situaciones, tomar decisiones juiciosas y mantener nuestras emociones y deseos bajo control”
continúa en un proceso de maduración es por ello que existe el riesgo de que un adolescente
sea más vulnerable a una adicción debido a encontrarse en un proceso de desarrollo, por lo
tanto es importante una adecuada maduración, si esta se ve sometida a un consumo de
sustancias sería altamente perjudicial (Volkow, 2008).
Las drogas intervienen sobre el sistema de recompensa del cerebro, en donde se genera
una sobre producción de dopamina, neurotransmisor encargado de regular el movimiento, las
emociones, la motivación, los sentimientos de placer y los mecanismos cognitivos. Al ser
sobre estimulado por el uso de drogas, se producen efectos de euforia en las personas, y que al
resultarles placenteros en ese momento buscan repetir la experiencia. Este mecanismo cerebral
de alteración del sistema de recompensa cerebral actúa idénticamente en personas con
adicciones a no sustancias (López, 2017).
Mencionado lo anterior es importante el rol que toma la familia en situaciones en la
que los hijos se encuentran expuestos a peligros o afecten su normal funcionamiento. La
familia, considerada como la unidad básica de la sociedad, cumple un rol fundamental en el
desarrollo del hombre, las personas que la conforman comparten un proyecto de vida en
común, en el que se establecen fuertes vínculos emocionales, sentimientos de pertenencia y
autonomía, a partir de los cual se genera un compromiso personal entre cada uno de ellos,
estableciéndose relaciones de intimidad, correspondencia y dependencia (Ferrer, Miscán, Pino
& Pérez, 2013).
7
El constructo de la funcionalidad familiar representa uno de los conceptos que ha
generado mayores controversias entre las diferentes escuelas y modelos que abordan los
aspectos de la familia. “La funcionalidad familiar es el modo como se comportan unos con
otros y la calidad de relaciones entre sus miembros. Se considera el componente más
importante para determinar la salud de la familia” (Herrera & Zaldívar, citado por Reyes,
Valderrama, Ortega & Chacón, 2009, p. 215). En términos generales podemos señalar que la
funcionalidad familiar está referida a la manera en que sus miembros interactúan y se
relacionan en este espacio, y es a partir de las características de los vínculos que se establecen
los conceptos de familias funcionales y disfuncionales.
Una revisión de los diferentes planteamientos acerca de la funcionalidad familiar nos
permite apreciar que, en su esencia, son propuestas complementarias; algunas de éstas tienden
a ser más amplias y abordan el tema desde los constructos generales de la teoría, otras analizan
desde aspectos parciales y específicos de la dinámica familiar, aportando estrategias para la
intervención.
Así, la Organización Panamericana de la Salud evalúa la funcionalidad familiar en
relación con las capacidades que éstas tienen para enfrentar las crisis que se presentan en el
devenir de su dinámica y desarrollo; en ese sentido; “El proyecto de evaluación familiar ha
acogido el marco conceptual que se deriva de las teorías del estrés familiar, las cuales giran
alrededor de dos conceptos centrales: la vulnerabilidad a la crisis y el poder de recuperación
de las crisis”. (Hernández, citado por La Organización Panamericana de la Salud, 1996, p. 6).
Entre las características de las familias que son más vulnerables a las crisis y como tal
establecen relaciones de disfuncionalidad se encuentra la escasa vinculación afectiva y baja
flexibilidad, los integrantes dudan en acudir o depender por el apoyo de la familia, por lo
tanto, recurren a personas ajenas a la familia, se estimula así la actitud de que cada uno vaya
por su lado. Las relaciones entre los miembros, así como los estilos de comunicación son
predominantemente cerrados, lo que se expresa en evasión de la responsabilidad y no
involucrar a la mayoría de los miembros en las decisiones que los afectan a todos. A su vez,
señalan que “la vulnerabilidad a la crisis se reduce, si hay pocas tensiones que amenacen la
estabilidad emocional” (Hernández citado por La Organización Panamericana de la Salud,
1996, p. 6).
8
Para el enfoque sistémico la familia funcional es aquella que además de estar en una
interacción dinámica con los diferentes subsistemas, mantiene la cohesión y define claramente
las jerarquías y los límites. “Las familias adaptativas o funcionales son aquellas no sólo
capaces de cambiar, sino que al hacerlo mantienen cohesión, estas poseen limites bien
definidos y jerarquías claras, aun cuando permeables y flexibles, y se muestran abiertas a los
intercambios con otros subsistemas de su entorno.” (Mendoza, 2004, p. 71).
En el caso de las familias disfuncionales, “sus límites y jerarquías no están claramente
definidas, manteniendo un nivel de crisis que pone en peligro la estabilidad del sistema
familiar, por el contrario, se cierran sobre sí misma o se abren excesivamente tienen dificultad
para cambiar y para asegurar la estabilidad del sistema” (Mendoza, 2004, pp. 71-72).
Para reconocer si una familia es funcional o disfuncional, Virginia Satir (como se citó
en Paladines & Quinde, 2010) planteó los cuatro criterios para evaluarla: Autoestima,
Comunicación, Normas familiares y Enlace con la sociedad.
La autoestima es la confianza, valoración y amor que un ser humano tiene para sí
mismo, se acepta tal como es, con sus errores defectos y virtudes. Esta se va construyendo
continuamente y con el pasar del tiempo. La comunicación es un pilar clave para que los
miembros puedan expresar sus ideas entre sí y resolver problemas. De este modo habrá un
buen funcionamiento familiar; la comunicación debe ser entendida coherente, directa y
precisa. En cuanto a las normas familiares, para que sean efectivas deben responder a las
necesidades de sus miembros, ser flexibles y consensuadas y no impuestas de manera
autoritaria. En lo que respecta al enlace social, la familia como núcleo social básico, interactúa
y enfrenta permanentemente situaciones críticas y de cambio, producto de factores socio –
culturales externos, así como aquellos generados por su dinámica evolutiva interna,
(nacimiento de los hijos, duelos, etc.). Situaciones a las que debe adaptarse con propiedad para
seguir cumpliendo con su rol.
El Modelo Circumplejo de Olson, considera tres aspectos básicos para evaluar la
funcionalidad familiar, estos son: Cohesión, Adaptabilidad y la Comunicación, como
indicadores para determinar los niveles de funcionalidad familiar, dichas dimensiones
establecerán dieciséis categorías de familias, las que de acuerdo a el grado de funcionalidad de
su interacción se encuentran en tres rangos (Tueros, 2004).
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La Cohesión familiar se define por el nivel del vínculo emocional que se establece
entre los integrantes de la familia, considerándose dentro de esta dimensión: la vinculación
emocional, implicación familiar, coaliciones padres-hijos, fronteras internas y externas de la
familia, límites, tiempo, y toma de decisiones (Tueros, 2004, p. 23).
En cuanto a Adaptabilidad familiar es considerada como la capacidad que tiene la
familia para adecuarse al cambio, reestructurando en ese proceso los roles, reglas y jerarquías
que respondan de manera más adecuada a la situación de estrés o crisis por el que se atraviesa.
“Tiene que ver con la medida en que el sistema familiar es flexible y capaz de recambiar”
(Tueros, 2004, p. 23).
La comunicación familiar está basada en la empatía, la escucha reflexiva y
comentarios de apoyo. Esta dimensión está considerada dentro de las otras dos dimensiones
por lo que actúa como facilitadora entre ambas, es por ello que no se encuentra como
indicador de la evaluación en el FACES III (Tueros, 2004).
Antecedentes
La interacción de las variables Funcionalidad familiar y Uso de redes sociales ha sido
abordada en el estudio de Cori, Espinoza y Jiménez (2017), quienes analizaron la correlación
de dichas variables en adolescentes de 4to y 5to año de secundaria de una institución educativa
particular de Lima, con un enfoque cuantitativo, correlacional y de corte transversal. Se
utilizaron los instrumentos FACES III y Uso de Redes Sociales. Como resultado se encontró
que entre funcionamiento familiar y uso de redes sociales existía una correlación positiva (Rho
= 0.367) estadísticamente significativa, (p = 0.000), una correlación negativa entre cohesión e
interacción, de igual manera entre cohesión y tiempo de uso. Referido a funcionamiento
familiar el 55% de la población presentó un funcionamiento familiar de rango medio, 35.9%
un nivel de cohesión muy baja, 32.1% moderadamente baja y 88.5% adaptabilidad muy baja.
En uso de redes sociales, el uso adecuado es más frecuente con un 56.5% frente a un 43.5% de
uso inadecuado, si bien el uso adecuado porcentualmente supera al uso inadecuado, se
considera que estadísticamente esta diferencia no es significativa.
Los aspectos de la disfuncionalidad familiar también fueron analizados por los autores
Rengifo, Mamani, Vilca, (2016) en su estudio Funcionamiento familiar y adicción a internet,
10
en estudiantes de una institución educativa pública de Lima Norte, de edades entre 12 y 20
años, se utilizaron los instrumentos: Family Adaptability and Cohesion Evaluation Scale
(FACES III), Internet Addiction Test (IAT), con un diseño no experimental de corte
transversal y de tipo correlacional llegaron a la conclusión que el funcionamiento familiar no
se relaciona significativamente con la adicción a internet. No obstante, se pudo determinar que
existe una relación negativa con cohesión familiar, lo que explicaría que, mientras una familia
este más cohesionada menor será el riesgo de que el joven padezca de una adicción al internet,
conclusión que coincide con lo hallado por Cori, Espinoza y Jiménez (2017) respecto a una
correlación negativa estadísticamente significativa entre cohesión y tiempo de uso, es decir
que una familia cohesionada dedicará menor tiempo de uso de sus redes sociales.
Marín, Sampedro y Muñoz, (2015), buscaron encontrar si los estudiantes universitarios
podrían considerarse adictos a las redes, la muestra estuvo conformada por 373 sujetos. Los
autores optaron por diseñar un test online, basado en el instrumento de Kimberly Young sobre
la adicción a Internet, el diseño de la investigación fue descriptivo correlacional. Los
resultados demostraron que los universitarios españoles tienen una participación activa en
Internet y en las redes sociales, siendo las redes más usadas Facebook y Twitter, pero además
manifestaron tener cuentas en redes sociales dedicadas específicamente a la búsqueda de
trabajo, como LinkedIn. Los alumnos evaluados no sintieron ni se consideraron adictos a
Internet ni a las redes sociales. Los resultados obtenidos no coincidieron con las de
investigaciones previas por lo que consideran plantearse si los alumnos se encuentran en la
fase de negación de la adicción.
Araujo (2016) alerta de un riesgo de uso problemático y dependencia a las redes
sociales, investigó la intensidad de tres dimensiones de adicción a las redes sociales: obsesión
por las redes sociales; falta de control personal en el uso de las redes sociales y uso excesivo
de las redes sociales. Participaron 200 estudiantes de una universidad privada de Lima, se
aplicó el Cuestionario de Adicción a las Redes Sociales de Escurra y Salas (2014). De acuerdo
a los resultados, los indicadores con una alta puntuación fueron; conectarse durante un tiempo
estimado como excesivo y dificultad para disminuir el tiempo en conexión, en contraste, el
factor que obtuvo menor puntuación está relacionado con las respuestas cognitivas y afectivas
que se producen al estar ausente o no conectarse, es decir la ansiedad que se genera durante
11
esos momentos, significativo al síndrome de abstinencia. Un punto importante que se
mencionó es que las puntuaciones fueron relativamente bajas. Se llegó a la conclusión que los
estudiantes no tienen un uso problemático de las redes sociales. Sin embargo, tres ítems
recibieron una puntuación máxima de “siempre”, dos ítems de la escala de “falta de control”
(“apenas despierto ya estoy conectándome a las redes sociales” y “pienso que debo controlar
mi actividad de conectarme a las redes sociales”) y uno de la escala de “uso excesivo”
(“permanezco mucho tiempo conectado a las redes sociales”). Por lo que la autora sugiere que
se debe tomar en cuenta dichos respuestas, para acciones preventivas, debido a que, si
aumenta la dificultad para controlar el tiempo de uso de las redes sociales puede tener
consecuencias negativas a nivel familiar, social y académico.
Desde un enfoque que compara la comunicación virtual y presencial se explora el uso
de las redes sociales y su impacto en la familia, Rayo (2014) analizó la relación de las redes
sociales y las relaciones familiares de los jóvenes en una investigación en la que participaron 8
estudiantes de psicología de ambos sexos de edades entre 18 y 24 años, fueron evaluados con
el test de Adicción a Internet, y tuvo un enfoque cualitativo. La investigación tuvo como
objetivo determinar cómo influye el uso de las redes sociales en las relaciones familiares de
jóvenes que padecen de adicción, en el resultado se encontró que “el uso excesivo en las redes
sociales” ha afectado y deteriorado esencialmente la comunicación que se establece entre los
miembros de una familia, esto debido a que se prefiere la comunicación vía internet a una
conversación personal tradicional o “cara a cara”. Los evaluados consideran que ha facilitado
la comunicación en muchos casos pero también esta se ha visto afectada y desplazada en la
convivencia familiar pues ahora la atención de los miembros ha pasado a estar pendiente de
las publicaciones o de mantener una conversación virtual. El uso excesivo de las redes sociales
ha generado el deseo y preocupación de mantener sus equipos cargados, generando ansiedad
cuando esto no es posible. Se han generado llamados de atención y castigos por el uso
excesivo de las redes sociales, ya que se considera como una pérdida de tiempo y poca
importantes para buscar actividades productivas y útiles.
Por lo tanto, la comunicación virtual ha pasado a formar parte de la cotidianidad de las
personas, en eso coincide De la Cruz, (2015) quien realizó un estudio para determinar las
relaciones interpersonales en el hogar y el impacto en la comunicación virtual en redes
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sociales, participaron 699 estudiantes y se aplicó el Cuestionario de Evaluación de
Dificultades Interpersonales en la Adolescencia (CEDIA). El estudio se desarrolló mediante la
combinación de los enfoques cuantitativo y cualitativo es decir un enfoque mixto. Se llegó a la
conclusión que los vínculos afectivos de los estudiantes evaluados se encuentran deteriorados,
y existe una dificultad para relacionarse con ambos padres, disculparse, defenderse ante un
problema con un hermano, quejarse ante sus padres y dar una opinión a ellos de desacuerdo.
En lo que respecta relaciones familiares, el 25,46 % tienen mediana dificultad y el 25,20 %
bastante dificultad para relacionarse con sus miembros. De acuerdo a ello se identifican;
“inseguridad, individualismo, baja autoestima, los roles, reglas y límites no están claros, las
vivencias experimentadas en el interior del hogar son reflejados hacia el exterior en sus
actitudes perdiendo el principio de familia de mantener un ambiente sano éntrelos integrantes
que la conforman”. El 66,14% de los estudiantes utilizan Facebook en su tiempo libre. El
23,88% señala que rara vez interactúan con la familia, deteriorando los vínculos afectivos en
la familia, induciendo a buscar en otras fuentes fuera del hogar, propiciándose la
comunicación virtual.
En consecuencia al haber un deterioro en las relaciones familiares y no establecerse
una comunicación personal , esta ha sido reemplazada por la comunicación virtual con otras
personas de su entorno, de acuerdo a esta conclusión Moreano, (2014) estudió la relación
entre, el uso de la redes sociales por parte de los adolescentes, y su influencia en la
comunicación familiar, participaron 350 estudiantes de segundo año de bachillerato, se aplicó
la encuesta sobre el uso adecuado de redes sociales (UARS) y el cuestionario de evaluación
del funcionamiento familiar (EFE), es una investigación exploratoria, asociativa de variables e
investigación explicativa. Como principales indicadores de las redes sociales se tiene que el
64% usa continuamente las redes sociales, 25% usa casualmente y el 11% un uso desmedido
lo que refleja que la mayoría tiene un uso constante. Adicionalmente el 47% de los estudiantes
siente un deseo imperioso de estar en línea, por otra parte, el 38% tiene una predisposición a
un comportamiento adictivo hacia las redes sociales. Respecto a la funcionalidad familiar el
80% de los estudiantes provienen de una familia funcional y el 20% de una familia
disfuncional.
13
Las habilidades sociales constituyen el repertorio fundamental en la estructura personal
y en la interacción social, son el eje en los procesos de comunicación, en ese sentido, si son
afectadas dificultan la participación funcional del individuo en los distintos espacios sociales
(familia, trabajo, amigos, etc.) la investigación realizada por Domínguez, y Ybañez, (2016)
estudia la relación que existe entre la adicción a las redes sociales y las habilidades sociales en
estudiantes de una institución educativa privada, participaron 205 estudiantes de 1ero a 5to
grado de secundaria, se aplicó la lista de chequeo de habilidades sociales - Goldstein y la
escala de actitudes hacia las redes sociales. Fue un estudio descriptivo correlacional. Se llegó a
la conclusión que existe una relación inversa altamente significativa entre la adicción a las
redes sociales del Internet y las habilidades sociales en los adolescentes. Lo que indicaría que,
a medida que la adicción a las redes sociales se incrementa, el nivel de habilidades sociales
decrece y viceversa. No obstante, señalaron que navegar por la red puede ser, en sentido
estricto, una pauta de comportamiento adictivo donde aparecen síntomas de abstinencia,
pérdida de control, abuso y obsesión, pero no suele caracterizarse por la adopción de
conductas tan autodestructivas como en el caso del resto de las adicciones (Echeburrúa, citado
por Domínguez, & Ybañez, 2016).
De la misma manera De la Villa y Suarez (2016) analizaron las relaciones entre los
usos desadaptativos de Internet y del teléfono móvil y diversos desajustes en habilidades
sociales, manejo del estrés, autoestima y satisfacción vital, así como encontrar diferencias en
tales usos/abusos en función de variables sociodemográficas, como el género y edad. La
muestra fue conformada por 200 estudiantes con edades comprendidas entre 12 a 17 años, se
aplicó el Cuestionario de Experiencias Relacionadas con Internet (CERI), Cuestionario de
Experiencias Relacionadas con el Móvil (CERM), la Escala de Uso Problemático y
Generalizado de Internet (GPIUS2), y la Escala de Uso Problemático de Nuevas Tecnologías
(UPNT). Como resultado se obtuvo que casi la mitad de los participantes del estudio prefieren
la comunicación mediante el uso de teléfono celular que la tradicional. El principal motivo por
el que hacen uso de esta nueva tecnología es por distraerse o pasar el rato, sin embargo,
manifestaron experimentar desajustes emocionales a causa de esta tecnología. Es importante
mencionar que el uso del teléfono móvil presenta unas características especiales, como son la
sociabilidad, autoconfianza, diversión, estatus social, movilidad, acceso permanente, identidad
14
conciliación familiar e individualización de bienes, por lo que la persona se vuelve más
vulnerable a experimentar comportamientos abusivos. Los adolescentes del presente estudio
manifiestan más problemas relacionados con el uso del móvil. Respecto al uso de Internet, se
han encontrado desajustes en la regulación de sus estados anímicos y de humor. Por
consiguiente, los alumnos con un uso desadaptativos de Internet y del teléfono móvil muestran
dificultades en el control de los usos de estas tecnologías y desajustes de autorregulación en
las emociones negativas. Es evidente que una persona con desajustes en la regulación
emocional tendrá dificultades para interactuar socialmente, lo que repercutirá negativamente
en la comunicación familiar cara a cara.
Contrariamente a los estudios anteriores, Ikemiyashiro (2017) describió la relación
entre el uso de las redes sociales virtuales y las habilidades sociales en adolescentes y jóvenes
adultos de Lima Metropolitana, la muestra ascendió a 333 evaluados. Se tomó en cuenta a
participantes de edades entre 15 a 30 años. El diseño fue de tipo correlacional con un diseño
no experimental transaccional. Se obtuvo correlaciones negativas e inversas entre las variables
uso de las redes sociales virtuales y habilidades sociales. Se concluyó que las habilidades
sociales no se verán afectadas y se seguirán desarrollando y manteniendo óptimamente a pesar
que el individuo muestre ciertos problemas de adicción al uso de las redes sociales virtuales.
Por otro lado Jiménez, Musitu y Murgui (2007) realizaron el estudio sobre
Funcionamiento familiar y consumo de sustancias en adolescentes: el rol mediador de la
autoestima, estuvo conformada por 414 adolescentes de edades comprendidas entre 12 y 17
años. Se realizó un análisis de correlación exploratorio entre las variables. Los instrumentos
aplicados fueron; Escala de Clima Social Familiar (FES), Escala Multidimensional de
Autoestima (AF5) y la Escala de Consumo de Sustancias de Musitu. Los resultados apoyan la
función mediadora de la autoestima y sugieren que, en dicha relación, las características del
funcionamiento familiar constituyen un factor explicativo distal del consumo de sustancias en
la adolescencia. Es decir, las características positivas o negativas del funcionamiento familiar
potencian o inhiben las autoevaluaciones positivas del adolescente en los distintos dominios
relevantes de su vida (familiar, escuela, sociabilidad y apariencia física), unas
autoevaluaciones que son a su vez importantes predictores directos o proximales del consumo
de sustancias de los adolescentes. La relación que establecen los autores es que el
15
funcionamiento familiar influye sobre las autovaloraciones de los adolescentes en ese sentido
un funcionamiento familiar negativo genera autoevaluaciones de descalificación que son
factores predictores para el consumo de sustancias y que puede extenderse a patrones
desadaptativos en el uso de las redes sociales
Según estudios el nivel socioeconómico es un factor influyente en la adicción, así lo
señala Aponte, Castillo y González (2017) al analizar la prevalencia de la adicción a internet y
su relación con factores familiares como la disfunción familiar en adolescentes. Participaron
390 adolescentes de edades entre 15 a 19 años, se utilizó un cuestionario sociodemográfico y
de caracterización familiar, un cuestionario de estratificación del nivel socioeconómico, el test
de funcionamiento familiar (FFSIL) y el test de adicción a internet (IAT). El estudio fue
descriptivo transversal. Se encontró que la prevalencia de adicción a internet leve fue del 35,8
%, moderada 14,2 % y grave 1,5%. Los adolescentes con adicción a internet tienen más
probabilidades de tener disfuncionalidad familiar cuando crecen en familias pequeñas, estas
podrían disponer de más recursos para acceder a internet y adquirir equipos, así como los
pertenecientes al nivel de estrato socioeconómico medio típico mostró una mayor probabilidad
de presentar adicción a internet. Los resultados indican que las redes sociales son el recurso de
internet más utilizado, por lo tanto, podría ser superior su influencia en los problemas de
adicción a la red. La adicción a internet fue más frecuente en los adolescentes que provienen
de familias con buenas condiciones de vida, además no se encontró alguna diferencia en el
género.
Llamas y Pagador, (2013) realizaron un estudio sobre las redes sociales y su
implicación en la adolescencia, recalcaron la importancia que se controle la brecha existente
entre padres e hijos, cuando las familias tienen la posibilidad de brindar tecnología como
entretenimiento. Sugieren que es necesario el establecer límites y un control de acuerdo a cada
etapa de los menores debido a que se encuentran expuestos a múltiples peligros desde el
aspecto tecnológico hasta la sociabilidad.
En consecuencia, los estudios revisados describen como algunos indicadores
relacionados con la funcionalidad familiar se ven afectados por el uso de las redes sociales. La
familia al representar el elemento básico de la sociedad merece una prioritaria atención al fin
de mantener un desarrollo sano y equilibrado. No se han encontrado suficientes
16
investigaciones que analicen el impacto del uso de las redes sociales en la dinámica familiar
por lo que es pertinente estudiar ¿Qué relación habrá entre el uso adictivo de redes sociales y
la funcionalidad familiar?
Objetivos
Relacionar la funcionalidad Familiar y la Adicción a las Redes Sociales en un grupo de
estudiantes universitarios y egresados de Lima Metropolitana.
Objetivos específicos
- Determinar la confiabilidad la Escala de Evaluación de Cohesión y Adaptabilidad
familiar (FACES III)
- Determinar la confiabilidad de la Escala de Adicción a Redes Sociales (ARS)
- Relacionar obsesión por las redes sociales y adaptabilidad.
- Relacionar obsesión por las redes sociales y cohesión.
- Relacionar falta de control personal en el uso de las redes sociales y adaptabilidad.
- Relacionar falta de control personal en el uso de las redes sociales y cohesión.
- Relacionar el uso excesivo de las redes sociales y adaptabilidad.
- Relacionar el uso excesivo de las redes sociales y cohesión
Hipótesis
A mayor adicción de los estudiantes y egresados a las redes sociales serán menos los índices
de funcionalidad familiar en los hogares de los evaluados.
17
Método
Tipo y diseño de investigación
La presente investigación es de diseño no experimental, debido a que no se manipula
intencionalmente las variables independientes para ver su relación sobre la otra variable, se
observa el fenómeno ya existente en su espacio natural sin ser alterado, para luego ser
estudiado. Es de enfoque cuantitativo ya que se hace uso de pruebas psicométricas y análisis
estadísticos, método transversal debido a que parte de una realidad en el momento de la
investigación.
Es de diseño correlacional ya que pretende responder a una interrogante la cual tiene
como objetivo conocer el grado de asociación entre dos variables, se mide, cuantifica y se
analiza la vinculación entre ambas (Hernández, Fernández & Baptista, 2010).
Participantes
En la presente investigación participaron 208 estudiantes y egresados de diferentes
universidades de Lima Metropolitana. Por un lado, se evaluó a 130 estudiantes y egresados
mediante el método Bola de Nieve, los participantes respondieron a los cuestionarios con un
previo consentimiento mediante una plataforma digital, este muestreo es denominado no
probabilístico. Así mismo 78 evaluados fueron estudiantes cursantes en el ciclo 2018-0 a
quienes se evaluó en sus aulas durante las horas de clase con el previo permiso del director de
su facultad, lo cual es también considerado una muestra no probabilística. Ambas
administraciones fueron de tipo intencional debido a que fue seleccionada de acuerdo a
criterios de inclusión y exclusión. Finalmente fueron descartados 10 participantes por no
cumplir los criterios de administración de los instrumentos.
Criterios de inclusión:
Ser estudiantes o egresados de alguna universidad
Contar con alguna red social activa.
18
Criterios de exclusión
No ser estudiante universitario
Instrumentos
Cuestionario de adicción a redes sociales (ARS) elaborada por Escurra y Salas
(2014), el cual se diseñó en base al DSM-IV en donde se reemplazó el concepto de “sustancia”
por “Redes sociales”. Los autores revisaron instrumentos los cuales median adicción a internet
y redes sociales para después elaborar los ítems que integran el instrumento. Está formado por
tres factores, Obsesión por redes sociales, Falta de control personal en el uso de las redes
sociales y Uso excesivo de las redes sociales. Cuenta con 24 ítems los cuales forman parte del
sistema de calificación de 5 puntos (0 a 4), Nunca = 0, Rara vez = 1, Algunas veces = 2, Casi
siempre = 3 y Siempre = 4, el ítem 13 es calificado de forma inversa. En cuanto a su
confiabilidad se obtuvo coeficientes alfa de Cronbach superiores, que fueron entre .88 en el
factor 2 y 92 en el factor 3.
Escala de Evaluación de Cohesión y Adaptabilidad Familiar (Faces III) elaborada
por Olson. Tiene como objetivo evaluar dos de las dimensiones del Modelo Circumplejo de
Sistemas familiares y Maritales: la cohesión y la adaptabilidad familiar. Está conformada por
20 ítems, los cuales tienen un valor de puntuación del 1 al 5, Nunca = 1, Casi Nunca = 2,
Algunas veces = 3, Casi siempre, 4 y Siempre = 5.
En el Perú se realizó un estudio para evaluar las propiedades psicométricas del
instrumento, los autores Bazo-Álvarez. J, Bazo-Álvarez. O, Águila, Peralta, Mormontoy,
Bennett (2015) aplicaron la escala a 910 estudiantes adolescentes de edades entre 11 y 18 años
en los distritos de Chimbote y Nuevo Chimbote, se administraron ambos formatos, el de
familiar real a 910 estudiantes y el de familia ideal a 100 de los 910. Se obtuvo que la escala
cohesión real muestra una confiabilidad moderadamente alta (Ω=0,85) por otro lado la escala
flexibilidad-real alcanzó una confiabilidad moderada (Ω=0,74). En cuanto a la escala
cohesión ideal su confiabilidad fue moderadamente alta (Ω=0,89), del mismo modo para la
escala de flexibilidad-ideal (Ω=0,86).
19
Procedimiento
Inicialmente se conversó con los directores de las carreras y luego se solicitó un
permiso mediante una carta. Para ello además se coordinó con los profesores la fecha y hora
sin que se vea afectada las horas de clases, fue así como se visitó cada aula en donde
previamente a la evaluación se les explico a los alumnos la finalidad del estudio, así como se
les dio las instrucciones correspondientes para que puedan contestar ambos cuestionarios, Test
de Adiciones a Redes Sociales (ARS) y la Escala de Evaluación de Cohesión y Adaptabilidad
Familiar (Faces III), ante cualquier duda o pregunta se les indico que podían consultar en
cualquier momento de la evaluación. Por otro lado, también se evaluó mediante una
plataforma digital (Formulario de Google) en donde se conversó directamente con cada
participante solicitándoles su permiso, de la misma manera se les brindo las instrucciones
respectivas y del mismo modo se les informó la finalidad del estudio.
Aspectos éticos
Como parte de los requisitos de la institución educativa en donde los estudiantes
fueron evaluados se entregó un documento a los directores de las facultades detallando la
finalidad del estudio, de esa manera se obtuvo la autorización correspondiente para proceder a
la administración de los cuestionarios.
Los participantes fueron informados previamente sobre la finalidad y procedimiento
de la evaluación, aceptando de manera voluntaria a participar con el trabajo de investigación,
de lo contrario podían retirarse del aula hasta que sea culminado el proceso.
Respecto a la evaluación mediante plataforma digital, los participantes tuvieron la
libertad de aceptar o negar su colaboración mediante el mensaje por donde fueron notificados
a participar, de la misma forma fue informado sobre el estudio.
20
Resultados
Inicialmente se presentan los resultados hallados derivados del presente estudio.
Primero se mostrarán las características psicométricas principales de los dos instrumentos
aplicados, posteriormente se expondrán los resultados que responden a los objetivos de
investigación previamente planteados y finalmente las respuestas del cuestionario sobre uso de
redes sociales (ARS).
Análisis de la confiabilidad de los instrumentos
La confiabilidad de los instrumentos de evaluación fue examinada a partir del criterio
de consistencia interna, calculando el coeficiente alfa de Cronbach tanto para el Test de
Adicción a Redes Sociales y como para el FACES III.
En la tabla 1, se reportan los coeficientes de confiabilidad de las dimensiones del Test
de Adicción a Redes Sociales: Uso excesivo de las redes sociales, Obsesión por las redes
sociales y Falta de control personal en el uso de las redes sociales.
Con respecto a la dimensión Uso excesivo de las redes sociales, se obtuvo un
coeficiente de confiabilidad de .84, con un rango rit que va de .447 (ítem 9) a .675 (ítem 17),
superando el criterio .30. En cuanto a la dimensión Obsesión por las redes sociales, se obtuvo
un coeficiente de confiabilidad de .843 y las correlaciones ítem total alcanzaron valores que
van desde el .243 (ítem 13) hasta el .703 (ítem 7), superando el criterio de .20. Finalmente para
la dimensión Falta de control personal en el uso de las redes sociales el alfa de Cronbach
tomó un valor de .789, con un rango rit que va de .444 (ítem 4) a .669 (ítem 24), superando el
criterio .30. No fue necesario eliminar ningún ítem y los resultados hallados pueden dar cuenta
de un nivel de confiabilidad aceptable para los datos de la muestra de estudio.
De otro lado, el análisis de la confiabilidad del test FACES III se presenta también en
la tabla 1, en la que podemos apreciar que para la dimensión de Cohesión se obtuvo un
coeficiente de confiabilidad de .787; sin embargo, el ítem 5 (“Nos gusta convivir solo con los
familiares más cercanos”) obtuvo un rit de .151 y ya que dicho valor es menor al criterio de
.20, se optó por retirar el ítem, aumentando el coeficiente alfa de Cronbach a .807, con un
rango rit que va desde .237 a .714.
21
Así también, la dimensión Adaptabilidad alcanzó un alfa de Cronbach de .721, con un
rango rit que va de .243 (ítem 16) a .498 (ítem 12), superando el criterio .20. La supresión de
ningún ítem mejoraba el coeficiente de confiabilidad. Por tanto, se puede considerar que se
encontraron indicadores aceptables de la fiabilidad del FACES III.
Tabla 1
Confiabilidad de los puntajes de los instrumentos utilizados
Nro. de
ítems Rango rit Alfa
Test de Adicción a Redes sociales
Uso excesivo de las redes sociales 8 .447; .675 .840
Obsesión por las redes sociales 10 .243; .703 .843
Falta de control personal en el uso de las redes
sociales
6 .444; .669 .789
FACES III
Cohesióna
9 .237; .714 .807
Adaptabilidad 10 .243; .498 .721
Nota: a Se retiró el ítem 5.
Análisis descriptivo
En la tabla 2, se aprecian los estadísticos descriptivos de las puntuaciones de cada una
de las escalas aplicadas, observándose variabilidad en los promedios obtenidos. Es así que en
las dimensiones de la Escala de Adicción a Redes Sociales se encuentra una media mayor en
la subescala Uso excesivo de las redes sociales; mientras que las puntuaciones de las tres
dimensiones presentan ligeras asimetrías negativas.
Por otro lado en el FACES III, se aprecia que la dimensión Cohesión alcanza una
media mayor en comparación con la dimensión Adaptabilidad, presentando desviaciones
22
estándar similares. Finalmente, dado que las asimetrías de las puntuaciones se encuentran
dentro del rango +/- 1.5, para la contrastación de la hipótesis de estudio se usará el estadístico
r de Pearson.
Tabla 2
Análisis descriptivo
M DE Mín. Máx. Asimetría Curtosis
Escala de Adicción a Redes sociales
Uso excesivo de las redes sociales 14,98 5,730 ,00 28,00 -,280 -,384
Obsesión por las redes sociales 11,78 6,241 ,00 32,00 ,355 -,192
Falta de control personal en el uso de
las redes sociales 8,84 4,507 ,00 21,00 ,173 -,272
Escala de Evaluación de Cohesión y Adaptabilidad familiar (FACES III)
Cohesión 35,18 5,479 16,00 45,00 -,430 -,168
Adaptabilidad 29,25 5,507 10,00 46,00 -,210 ,724
Contraste de hipótesis
En la tabla 3, se aprecian los resultados que responden al objetivo principal del
presente estudio, encontrando correlación estadísticamente significativa, moderada y en
sentido negativo entre la dimensión de Cohesión del funcionamiento familiar y la Falta de
control personal en el uso de las redes sociales. Así también, se encontró correlación
estadísticamente significativa, moderada y en sentido positivo entre la dimensión de
Adaptabilidad del funcionamiento familiar y la Obsesión por las redes sociales. Las otras
dimensiones presentan coeficientes de correlación pequeños o sin relevancia práctica.
23
Tabla 3
Correlaciones r Pearson entre las dimensiones del funcionamiento familiar y de la adicción a
redes sociales.
Cohesión Adaptabilidad
R %cov Nivel r %cov Nivel
Uso excesivo de redes
sociales -.096 0.9% Trivial .128 1.6% Bajo
Obsesión por las redes
sociales -.130 1.7% Bajo .252** 6.4% Moderado
Falta de control personal en
el uso de las redes sociales -.235** 5.5% Moderado .105 1.1% Bajo
En cuanto a las preguntas del cuestionario sobre uso de redes sociales (ARS) el 100%
de los participantes señaló hacer uso de alguna plataforma digital. Se encontró que la red más
usada fue Facebook seguida por WhatsApp, Twitter, Snapchat, Messenger, YouTube,
Pinterest, Tumblr, Gmail, Behance, LinkedIn, Weibo y Wechat. Referido a la frecuencia con
la que se conectan, el 42,9 % señalo que todo el tiempo se encuentra conectado seguido de un
40,9 % quienes se conectan entre siete a 12 veces al día, 8,8% de los estudiantes se conectan
una o dos veces por día, el 6,6% entre seis veces por día y finalmente 1,0% de la muestra dos
o tres veces por semana.
A la pregunta si sus cuentas en la red contienen sus datos verdaderos 94,9% respondió
que “Sí”, y un 5,1% “No”. Respecto a la pregunta ¿A cuántas personas de las que tiene
agregada conoce personalmente? el 54,0% respondió a “Más del 70%”, el 28,3% “entre el 51
y 70%, el 10,1% “entre 31 y 50% seguido de un 5,1% quienes solo conoce entre 11 y 30% de
sus contactos, finalmente el 2,5% solo conoce el 10% o menos. Con relación a la pregunta de
¿Dónde se conecta a las redes sociales? Los estudiantes podían marcar más de una respuesta,
la mayoría de ellos con un 96,6% confirmo ingresar a través de su celular, 70,2% en casa,
22,2% en el trabajo, 12,6% en las computadoras de la universidad y finalmente 2,5% en
cabinas de internet.
24
Finalmente se preguntó ¿Qué es lo que más le gusta de las redes sociales? Se
obtuvieron diversas respuestas sin embargo las más frecuentes fueron; facilidad de
comunicación con familiares, facilidad de comunicación con personas que viven lejos,
conocer que hacen los demás, interactuar con los compañeros de estudio, realizar trabajos
grupales, enterarse sobre las noticias del país y del mundo, seguir a personar famosas, hacer
nuevos amigos, compartir momentos, ver videos y fotos de los demás y pasar el tiempo.
25
Discusión
La presente investigación tiene como objetivo principal relacionar el funcionamiento
familiar y la adicción a las redes sociales en estudiantes y egresados de diferentes
Universidades de Lima Metropolitana. En ese sentido no se encontró una correlación
significativa entre las variables estudiadas.
En el caso de obsesión por las redes sociales y cohesión, la dimensión obsesión por las
redes sociales está vinculada al comportamiento adictivo, al respecto Volkow (2008) señala
que las adicciones son fenómenos muy complejos que varían de individuo a individuo, en el
que interactúan factores de riesgo, tanto de tipo biológico (genética, sexo, trastornos
mentales) como medio ambientales (hogar caótico y maltrato, modelos parentales
disfuncionales, influencia de amigos y compañeros, trasgresión de normas de convivencia
comunitaria, rendimiento académico deficiente, entre otras). En ese sentido, es recomendable
incluir en futuros estudios la amplitud de las principales variables que intervienen en este
fenómeno tal como han sido descritos por la autora.
En cuanto a las dimensiones, falta de control personal en el uso de las redes sociales y
la dimensión adaptabilidad no se encontró correlación. La falta de control personal se asume
como indicador de una conducta desadaptativa, tal como es el uso inadecuado de las redes
sociales. Al respecto diferentes estudios tampoco encontraron correlaciones significativas,
revelando por el contrario la existencia de otras variables que tienden a relacionarse
significativamente con la dimensión adaptabilidad familiar. Tales como, el estudio de Rengifo,
Mamani y Vilca (2015) quienes encontraron que la dimensión adaptabilidad familiar no
guarda una relación significativa con la adicción a internet, sin embargo, en el mismo estudio
Ramírez, (2007) citado por Mamani et al. (2015) encuentra bajos niveles de adaptabilidad en
las familias (familias rígidas) con hijos drogodependientes. Por otro lado, Rausch y Bay,
(1997) citado por Mamani et al. (2015) refieren que es común encontrar familias con
tendencia a la rigidez y aglutinamiento en adolescentes anoréxicas. Asimismo, Leyva,
Hernández, Navay López (2007) observaron que los adolescentes con depresión perciben a sus
familias rígidamente dispersas.
26
No se encontró una correlación entre el uso excesivo de las redes sociales y
adaptabilidad, si bien el “uso excesivo” no representa una adicción, investigaciones similares
advierten la presencia de otros factores que intervienen y deben ser tomados en cuenta al
evaluar estos comportamientos, “existen diferentes factores que actúan en la adicción a
Internet tales como rasgos de personalidad (introversión, timidez, sentimientos de
insuficiencia), baja autoestima y alteraciones psicopatológicas (adicciones químicas o
psicológicas) que incrementan el riesgo de adicción a Internet” (Medina, 2016, p.54).
Entre las variables uso excesivo de las redes sociales y cohesión al igual que las
anteriores, no se encontró correlación, para Jiménez, Musitu y Murgui (2017) la funcionalidad
familiar que incluye las dimensiones de cohesión, expresividad y conflicto, guardan relación
con el consumo de sustancias en los hijos, se aprecia entonces que se encuentra correlación
con un comportamiento adictivo; pero a sustancias.
Sin embargo, existe una correlación significativa negativa entre la dimensión falta de
control personal en el uso de las redes sociales y la dimensión de cohesión, estas familias se
caracterizan por mantener una relación estrecha, con un adecuado vínculo emocional, se
apoyan entre sí y pasan tiempo realizando actividades juntos, por lo tanto quienes han sido
formados en un hogar cohesionado van a tener la capacidad de controlar el uso de estas nuevas
tecnologías, caso contrario la familia mostrará preocupación y apoyo si uno de ellos se
encuentra ante un problema, el núcleo familiar actuará como soporte.
Asimismo, se encontró una correlación estadísticamente significativa, moderada y
positiva entre la dimensión de Adaptabilidad del funcionamiento familiar y la Obsesión por las
redes sociales. La adaptabilidad familiar tiene como rasgos característicos, capacidad para
adecuarse al cambio, ser flexibles y responder de manera apropiada a situaciones de crisis.
Una familia flexible, o bien adaptada aceptará y se acomodará a nuevas situaciones,
tendencias e ideas, que van surgiendo a su alrededor. En consecuencia las nuevas formas de
comunicación y la tecnología serán aceptadas de manera positiva en su hogar, sin embargo, y
como consecuencia de este uso, aparecen pensamientos recurrentes y manifestaciones de
ansiedad cuando éstas dejan de usarse, características a las que Escurra y Salas categorizan
como obsesión por las redes sociales. La condición por la cual estas familias no presentan
rasgos de adicción, estaría dada por la capacidad que tienen para enfrentar positivamente
27
situaciones críticas. A pesar de ello, el límite entre la obsesión y la adicción es una frontera
muy precaria, que puede ser sobrepasada.
Por ello Cruz, Martínez, Garibay y Camacho (2011) señalan que una familia funcional
debe crear un ambiente sano en donde no solo posean la capacidad de cambio sino también el
establecimiento de límites claros, los cuales deben de ser determinados desde la edad temprana
debido al gran acceso que se ha generado entre esta población.
El uso de redes sociales afecta la comunicación y la relación con sus familiares. La
instantaneidad y facilidad que poseen dichas plataformas ha generado que los usuarios
prefieran la comunicación virtual que la personal. Actualmente las personas, en particular los
grupos adolescentes y jóvenes, han extendido la costumbre de compartir públicamente los
diferentes momentos de la vida cotidiana, a través de las redes sociales y estar al pendiente de
las reacciones o comentarios que reciben de sus contactos o seguidores. Esta forma de
aprobación social que buscan los usuarios de las redes merece proponer estudios que evalúen
la relevancia de esta variable como un factor primario en el acceso y uso de las plataformas
virtuales.
28
Conclusiones
Respecto a las variables objeto del presente estudio se concluye que;
No se encontró correlación significativa entre Obsesión por las redes sociales y
cohesión, falta de control personal en el uso de las redes sociales y adaptabilidad, uso excesivo
de las redes sociales y adaptabilidad y entre uso excesivo de las redes sociales y cohesión.
Tal como se ha señalado en la discusión, y en base a los diferentes estudios citados, se
puede concluir en este acápite, que las ausencias de correlaciones significativas estarían
determinadas por las adicciones las cuales son fenómenos complejos, multifactoriales en la
que los factores que intervienen como desencadenantes varían de individuo a individuo. Por
tanto, la evaluación de las conductas adictivas requiere tomar en consideración el amplio
espectro de factores relacionados.
Se evidencia que, en el comportamiento adictivo a sustancias, en el que se fundamenta
el instrumento aplicado, no guarda una relación similar en cuanto a características sociales y
psicológicas, con la “adicción a las redes sociales” y por tanto su medición puede haberse
visto afectada.
Se encontró una correlación estadísticamente significativa, moderada y positiva entre
obsesión por las redes sociales y adaptabilidad, lo que explica que una familia flexible es
receptiva a las nuevas tecnologías y formas de comunicación virtual, sin embargo esta apertura
positiva de la familia al alentar un uso frecuente, configura una obsesión por este uso, lo que
se expresa en ansiedad y pensamientos recurrentes cuando dejan de utilizarse. El
establecimiento de límites y la revaloración de la interacción presencial son elementos
fundamentales que deben incorporarse en el análisis.
Se encontró una correlación significativa negativa entre falta de control personal en el
uso de las redes sociales y cohesión, lo que corrobora que una familia cohesionada va a tener
la capacidad de control y apoyo para que sus integrantes, actúen saludablemente.
29
Limitaciones
No se cuenta con instrumentos validados y con base en las teorías científicas de las
adicciones, para evaluar este comportamiento respecto a las redes sociales. El instrumento
utilizado tiene como soporte teórico al DSM – IV, en cuya versión solo se contempla la
adicción a sustancias.
El método bola de nieve, si bien brinda la posibilidad de aplicar con mayor rapidez y
cobertura, se encuentra limitada en lograr verificar la identidad y autonomía de la respuesta.
La familia es evaluada a través de la percepción de uno de sus miembros (estudiante),
que ocupa el rol de hijo, y que como es natural tiene una particular evaluación de la dinámica
familiar, que no necesariamente refleja de manera cabal lo que ocurre en dicho entorno.
Recomendaciones
Se recomienda realizar el estudio bajo una muestra más amplia en donde puedan estar
debidamente representadas las variables por sexo, grupo etario, modalidades educativas
(privadas/públicas), entre otras, a fin de poder establecer las comparaciones necesarias.
Un aspecto que llamó la atención es la relación que hay entre las redes sociales y la
búsqueda de la aprobación social. Los evaluados evidenciaron un marcado interés y
expectativas respecto a las reacciones de sus contactos frente a los contenidos que comparten.
En ese sentido es importante profundizar acerca de cómo estos mecanismos de aprobación que
buscan los jóvenes, modelan la autoestima y el autoconcepto.
La teoría de las dependencias a sustancias, establece que el objeto de la adicción
genera placer químico – sensorial lo que refuerza la repetición de la conducta, que puede
llevar a comportamientos repetitivos y compulsivos. No se ha logrado establecer de manera
fehaciente que el uso de las redes sociales generen este tipo de placer, por el contrario hay
quienes sostienen que la motivación principal para el uso, estaría en la necesidad de la
comunicación, elemento básico de la interacción social. Se considera de suma importancia
ampliar la discusión e investigación sobre este tópico, porque representa uno de los aspectos
esenciales para determinar un cuadro de adicción.
30
Se recomienda que en futuros estudios los instrumentos aplicados para evaluar el
comportamiento de las personas respecto al uso de las redes sociales, tengan como sustento
teórico la caracterización de las adicciones no químicas. En la versión del DSM-V se tipifica
el juego patológico como una adicción. Si bien este comportamiento no guarda una relación
directa con el uso de las redes sociales, podría tener una mejor aproximación para comparar
ciertas características de los hábitos que puedan establecerse.
Los comportamientos dependientes son estigmatizados socialmente, lo que ocasiona
con frecuencia que cuando se evalúa estas conductas se presente el fenómeno de la
deseabilidad social, es decir, los evaluados tienden a responder las preguntas con lo que
consideran “socialmente correcto”. Al respecto es importante que futuros instrumentos que
consideren también una “escala de mentira” que permita aminorar el sesgo en las respuestas.
31
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38
Anexos
Anexo 1: Ficha sociodemográfica
N % N %
Sexo ¿Utiliza Redes sociales
Femenino
73
36,9
Si
198
100
Masculino 125 63,1 No 0 0
¿Con que frecuencia se
conecta a las redes sociales?
De todas las personas que
conoce a través de la red
¿Cuántos conoce
personalmente?
Todo el tiempo conectado 85 42,9 10% o menos 5 2,5
Entre siete a 12 veces al día 81 40,9 Entre el 51 y 70% 56 28,3
Entre tres a seis veces por día 13 6,6 Entre 11 y 30% 10 5,1
Una o dos veces por día 17 8,6 Más del 70% 107 54,0
Dos o tres veces por semana 2 1,0 Entre el 31 y 50% 20 10,1
¿Sus cuentas en la red
contienen sus datos
verdaderos?
Si
No
188
10
94,9
5,1
39
¿Dónde se conecta a las
redes sociales?(puede
marcar más de una
respuesta)
Redes sociales utilizadas
186
93,9
En mi casa 139 70,2 Instagram 143 72,2
En mi trabajo 44 222 WhatsApp 108 54,5
En las cabinas de internet 5 2,5 Twitter 38 19,2
PC de la universidad 25 12,6 Snapchat 28 14,1
A través del celular 190 96,6 Messenger 18 9,1
YouTube 16 8,1
Pinterest 8 4,0
Tumblr 6 3,0
Gmail 3 1,5
Behance 2 1,0
LinkedIn 1 ,5
Weibo 1 ,5
Wechat 1 ,5
Hotmail 1 ,5
40
Anexo 2: VERSIÓN FINAL DEL ARS CUESTIONARIO SOBRE USO DE REDES SOCIALES
Esta es una encuesta en la que Ud. participa voluntariamente, por lo que le agradecemos
encarecidamente que sea absolutamente sincero(a) en sus respuestas. Antes de responder al
cuestionario le pedimos que nos proporcione los siguientes datos:
Sexo………. Edad……….
Universidad en la que estudia: ……………………………………………………………….
Ciclo/ Nivel:...........................
¿Utiliza redes sociales?:...................
Si respondió SÍ, indique cuál o cuáles: ..............................................................................................
............................................................................................................................................................... Si
respondió NO, entregue el formato al encuestador
¿Dónde se conecta a las redes sociales? (puede marcar más de una respuesta)
En mi casa ( ) En mi trabajo ( )
En las cabinas de internet ( ) En las computadoras de la universidad ( )
A través de la universidad ( )
¿Con qué frecuencia se conecta a las redes sociales?
Todo el tiempo me encuentro conectado ( ) Una o dos veces por día ( )
Entre siete a 12 veces al día ( ) Dos o tres veces por semana ( )
Entre tres a Seis veces por día ( ) Una vez por semana ( )
De todas las personas que conoce a través de la red, ¿cuántos conoce personalmente?
10 % o Menos ( ) Entre 11 y 30 % ( ) Entre el 31 y 50 % ( )
Entre el 51 y 70 % ( ) Más del 70 % ( )
¿Sus cuentas en la red contienen sus datos verdaderos (nombre, edad, género, dirección, etc.)?
SI ( ) NO ( )
¿Qué es lo que más le gusta de las redes sociales?:
………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………
41
Test de adicción a Redes Sociales (ARS)
Siempre S Algunas veces AV Nunca N
Casi Siempre CS Rara Vez RV
RESPUESTA
S CS AV RV N
1 Siento gran necesidad de permanecer conectado(a) a las redes sociales
2 Necesito cada vez más tiempo para atender mis asuntos relacionados con las redes sociales
3 El tiempo que antes destinaba para estar conectado(a) a las redes sociales ya no me satisface,
necesito más.
4 Apenas despierto ya estoy conectándome a las redes sociales.
5 No sé qué hacer cuando quedo desconectado(a) de las redes sociales
6 Me pongo de malhumor si no puedo conectarme a las redes sociales
7 Me siento ansioso(a) cuando no puedo conectarme a las redes sociales
8 Entrar y usar las redes sociales me produce alivio, me relaja.
9 Cuando entro a las redes sociales pierdo el sentido del tiempo.
10 Generalmente permanezco más tiempo en las redes sociales, del que inicialmente había destinado
11 Pienso en lo que puede estar pasando en las redes sociales
12 Pienso en que debo controlar mi actividad de conectarme a las redes
13 Puedo desconectarme de las redes sociales por varios días.
14 Me propongo sin éxito, controlar mis hábitos de uso prolongado e intenso de las redes sociales
15 Aun cuando desarrollo otras actividades, no dejo de pensar en lo que redes sociales. sucede en las
redes sociales
16 Invierto mucho tiempo del día conectándome y desconectándome de las redes sociales
17 Permanezco mucho tiempo conectado(a) a las redes sociales
18 Estoy atento(a) a las alertas que me envían desde las redes sociales a mi teléfono o a la
computadora.
19 Descuido a mis amigos o familiares por estar conectado(a) a las redes sociales
20 Descuido las tareas y los estudios por estar conectado(a) a las redes sociales
21 Aun cuando estoy en clase, me conecto con disimulo a las redes
22 Mi pareja, o amigos, o familiares; me han llamado la atención por mi dedicación y el tiempo que
destino a las cosas de las redes sociales.
23 Cuando estoy en clase sin conectar con las redes sociales, me siento aburrido (a)
24 Creo que es un problema la intensidad y la frecuencia con la que entro y uso la red social
42
Anexo 3: Escala de Evaluación de Cohesión y Adaptabilidad Familiar (FACES III)
Nunca 1 Casi Nunca 2 Algunas Veces 3 Casi Siempre 4 Siempre5
N CN AV CS S
1 Los miembros de nuestra familia se dan apoyo entre si
2 En nuestra familia se toman en cuenta las sugerencias
de los hijos para resolver los problemas
3 Aceptamos las amistades de los demás miembros de la
familia
4 Los hijos pueden opinar en cuenta a su disciplina
5 Nos gusta convivir solamente con los familiares más
cercanos
6 Cualquier miembro de la familia puede tomar la
autoridad
7 Nos sentimos más unidos entre nosotros que con
personas que no son de nuestra familia
8 Nuestra familia cambia el modo de hacer sus cosas
9 Nos gusta pasar el tiempo libre en familia
10 Padres e hijos se ponen de acuerdo en relación con los
castigos
11 Nos sentimos muy unidos
12 En nuestra familia los hijos toman las decisiones
13 Cuando se toma una decisión importante toda la
familia está presente
14 En nuestra familia las reglas cambian
15 Con facilidad podemos planear actividades en familia
16 Intercambiamos los quehaceres del hogar entre
nosotros
17 Consultamos unos con otros para tomar decisiones
18 En nuestra familia es difícil identificar quien tiene la
autoridad
19 La unión familiar es muy importante
20 Es difícil decir quién hace las labores del hogar
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