ANTROPOLOGIA FILOSOFICA

Preview:

Citation preview

ANTROPOLOGIA FILOSOFICA

1. El problema del Nombre2. Reseña Histórica3. Tipos de Psicología4. Método de la Antropología Filosófica5. Importancia de la Antropología Filosófica6. Antropología moderna

1. El problema del Nombre

La Antropología Filosófica significa el conocimiento del hombre a la luz de la Filosofía. La Antropología Filosófica considera al hombre completo (alma y cuerpo) desde las causas radicales de la entidad propia del hombre, o sea, una sabiduría acerca del hombre (antroposofía).

2. Reseña Histórica

Grecia. Los filósofos griegos buscaron al principio ( del que estaba hecha la naturaleza ( pero también estuvieron interesados en los temas teológicos y psicológicos; estos primeros pensadores a pesar de sus carencias, comenzaron a perfilar las nociones de alma, vida y animación.

Los sofistas fueron los primeros en situar el centro de la investigación filosófica en el hombre, la "sofistica" no hizo en rigor "ciencia" en el hombre, pues desembocó en agnosticismo, relativismo y escepticismo.

Sócrates: Fundó la Ciencia y encabezó los pasos del saber filosófico sobre el hombre. El oráculo de Delfos: " Conócete a ti mismo".

Platón. El hombre es básicamente alma espiritual y pensante. Dividió el alma humana en tres partes: apetito concupiscible, apetito irascible y la inteligencia.

Aristóteles. Es el primer sistematizador de la Antropología Filosófica. Sostiene que el alma (forma) y el cuerpo (materia), constituyen el compuesto humano, el alma es única en cada hombre, tienen varias facultades y realiza diversas actividades: vegetativas, sensitivas y racionales. No cualquier alma es apta para cualquier cuerpo. Pasando el tiempo, el Helenismo y la Cultura Latina (estoicismo, epicureísmo, hedonismo, escepticismo, neoplatonismo) no lograron superar las alturas alcanzadas por Sócrates, Platón y Aristóteles en la Antropología Filosófica.

Cristianismo. Las tesis básicas de la Patrística sobre el hombre son: 1) el origen del alma por creación divina, 2) la libertad personal y 3) inmortalidad del alma.

San Agustín, con sus confesiones y la ciudad de Dios es el autor más importante. En la Escolástica hay tres grandes concepciones vinculadas con la Filosofía: Cristianismo, Islamismo y Judaísmo.

Tomás de Aquino. Es el autor más importante de la Antropología Cristiana. Sus tesis antropológicas se encuentran a lo largo de su ingente obra, destacando: "los comentarios a los libros del Alma de Aristóteles" y las dos sumas, "Suma contra gentiles y Suma Teológica", Summa Theologiae, título en latín de la principal obra escrita por santo Tomás de Aquino, también conocida por el de su traducción española, Suma teológica. El autor comenzó su redacción a partir de 1265, cuando residía en el convento de Santa Sabina de Roma, y la continuó en Viterbo y en París. Quedó inacabada debido a que santo Tomás falleció, en 1274, cuando aún no había concluido su última parte, que integraba cuestiones escatológicas llamadas a poner fin a su tratado. Éste, no obstante, constituye una las máximas muestras del pensamiento teológico cristiano de la edad media, enmarcado en el conjunto del escolasticismo.

A final de la Escolástica (XIV y XV) surge una gran crisis y preocupación por los problemas prácticos, religioso, políticos y circunstanciales; el afán de crítica y revisión alcanza su mayor manifestación con el nominalismo, protestantismo en la Religión y el Absolutismo en la Política.

Racionalismo y Empirismo. Descartes, el padre del pensamiento moderno adopta ciertos aspectos de la tradición: el alma humana existe y es una substancia, sin embargo modifica considerablemente sus significados, sobre todo por la separación de alma y cuerpo.

Descartes, identifico el yo con la conciencia, admite relación entre alma y cuerpo pero los independiza. De aquí nace una fuerte división y el predominio de la conciencia en la Filosofía moderna, el cogito ergo sum se constituye como primera verdad y evidencia de la que depende todo saber. La esencia del alma es el pensamiento. Como "pensamiento" Descartes entiende todas las operaciones de voluntad, identifica "pensar "con toda actividad psíquica. Dio origen al Racionalismo y al Empirismo. El Racionalismo se centra en el espíritu, sus principales representantes son: Malebranche, Spinoza y Leibniz. El Empirismo se centra en lo sensible, los autores más famosos son Humme y Locke. Con estas corrientes, alma y cuerpo se aíslan más.

Ilustración. La Ilustración está llena de intereses y afanes antropológicos orientados al progreso terrestre inmediato; se propuso la realización de la gran revolución (revolución Francesa) para cambiar la historia y establecer una nueva educación, cultura y sociedad; pero había obstáculos que remover: la monarquía cristiana y la estructura eclesiástica.

J.J. Rosseau, afirma que el hombre es naturalmente bueno pero la sociedad y la civilización lo corrompen; es uno de los primeros románticos que debilitan la racionalidad, por exaltación de la "libertad" humana. Según Rosseau, el hombre se fue degradando, los ricos engañaron a los pobres instituyendo las "leyes" y consagrando la servidumbre y la desigualdad.

Aunque Rousseau realizó una gran contribución al movimiento por la libertad individual y se mostró contrario al absolutismo de la Iglesia y el Estado en Europa, su concepción del Estado como personificación de la voluntad abstracta de los individuos, así como sus argumentos para el cumplimiento estricto de la conformidad política y religiosa, son considerados por algunos historiadores como una fuente de la ideología totalitaria.

Kant, imprime su fuerte huella en la Antropología. Su antropología se refiere al hombre concreto y sensible, las críticas tratan del yo y especialmente del hombre moral ubicado por encima de la sensibilidad.

La Filosofía Kantiana se resuelve en Antropología. Dice Kant: las preguntas que condensan la Filosofía pueden resumirse así: ¿Qué puedo saber?, ¿Qué debo hacer?, ¿Qué debo esperar? Y ¿Qué es el hombre?. A estas preguntas contestan respectivamente la Metafísica, la Moral, La religión y la Antropología. , Pero las tres primeras cuestiones se refieren a la última.

Kant admite la existencia del alma, porque sin el alma no podría haber ética, ni libertad, ni inmortalidad.

La filosofía kantiana, y en especial tal y como fue desarrollada por el filósofo alemán Georg Wilhelm Friedrich Hegel, estableció los cimientos sobre los que se edificó la estructura básica del pensamiento de Karl Marx. El método dialéctico, utilizado tanto por Hegel como por Marx, no fue sino el desarrollo del método de razonamiento articulado por antinomias aplicado por Kant.

Idealismo. El alma humana ocupa un lugar importante, en función de un absoluto, dinámico y evolutivo que es y abarca todas las cosas, para Hegel, razón o idea. En el sistema Hegeliano, lo "humano" comprende la filosofía del espíritu, que se desarrolla en tres grandes etapas dialécticas: espíritu objetivo, subjetivo y absoluto.

El idealismo provocó fuertes reacciones: Kierkegaard, Positivismo, Materialismo y Vitalismo. Han perdido fuerza y sin embargo constituyen cierto patrimonio común de la Antropología Contemporánea.

Época Contemporánea. Está representada por el Vitalismo, el pragmatismo, la Fenomenología, el existencialismo, la Filosofía analítica, el estructuralismo y otras posturas que intentan repensar ciertas filosofías modernas como Neopositivismo, Neomarxismo, etc. La Antropología Filosófica contemporánea rica en temáticas y direcciones y asimismo, es compleja, desarticulada y se encuentra en crisis.

El pensamiento cristiano contemporáneo se inicia con la restauración a fines del siglo XIX con la obra de León XIII.3. Tipos de Psicología

Los conocimientos sobre el hombre pueden dividirse en analíticos y sintéticos. Los analíticos investigan partes que se tratan sin referencia directa al hombre completo, la medicina, la sociología, la economía, técnicas y artes. Los saberes sintéticos pretenden una visión del hombre en general, visión que sólo se logra estrictamente en la Antropología Filosófica que aspira al establecimiento de las causas y principios supremos más universales.

Tanto los saberes analíticos como los sintéticos son valiosos, pero los sintéticos poseen mayor importancia y dignidad por su extensión y necesidad. Los tipos de conocimiento sintético sobre el

hombre comprenden: a) la Antropología Espontánea Común, b) La Psicología experimental, c) La Antropología Filosófica.

a) La Antropología espontánea Común.

Constituye el nivel fundamental de conocimiento sobre el hombre. No puede demostrar sus conocimientos y verdades, no sigue un método y no forma un sistema de juicios bien organizado, no establece leyes propiamente dichas.

Este tipo de Psicología se da por el ejercicio espontáneo de nuestros actos. Este nivel elemental alcanza todas las dimensiones humanas.

b) La Psicología Científica Experimental.

Superior a la Psicología espontánea común, el saber científico sobre el hombre comprende dos disciplinas diferentes, la Psicología experimental y la Antropología Filosófica.

Tenemos tres grandes saberes científicos: 1) las ciencias experimentales, 2) Ciencias Filosóficas y 3) Ciencias Teológicas.

Las Ciencias Particulares o experimentales se caracterizan por estudiar propiedades y objetos delimitados de carácter fenoménico o accidental.

Las Ciencias Filosóficas constituyen un conocimiento de la totalidad radical.

La Teología Sagrada es la ciencia más noble y elevada de cuantas puede alcanzar el hombre.

La Psicología experimental es una ciencia muy reciente que se compara con la Antropología Filosófica, su adolescente existencia le acarrea ciertas dificultades: una insuficiente sistematización; algunos la limitan a la conciencia y otros al comportamiento.

C) Antropología Filosófica.

Antropología Filosófica y Psicología experimental son distintas, no deben confundirse. Ambas estudian al hombre, pero difieren en su objeto formal, el Objeto Formal de la Antropología Filosófica es la entidad propia del hombre, el punto de vista de las causas últimas la esencia o naturaleza del hombre, de sus operaciones o hábitos.

La antropología Filosófica busca llegar a la raíz de la realidad vital del hombre, determinar la estructura substancial que manifiestan los fenómenos; o también la existencia y naturaleza de los principios que cimentan y posibilitan las actividades anímicas, y que dan razón de la unidad y el orden de las múltiples actividades vitales; fundamenta la existencia humana el de dónde vengo, qué soy, qué sentido tiene mi existencia y cuál es mi destino.

La Antropología Filosófica pertenece a la Filosofía de la Naturaleza. La cuestión medular de la Antropología Filosófica es: ¿cómo debe ser en general un ente, y en particular el hombre para que tenga actividad vital?

La Antropología Filosófica inicia su investigación por lo común y esencial de los vivientes, el alma es lo más común y esencial de los seres vivientes, su conocimiento es central y necesario. Distinción no es necesariamente oposición ni antagonismo. En cuanto a la dignidad y profundidad del saber, la Antropología Filosófica es superior a la Psicología Experimental porque la naturaleza o esencia substancial de algo es más noble que sus fenómenos. En consecuencia, hay mayor necesidad de una guía filosófica para el Psicólogo experimental, que una necesidad de "guía experimental" para el filósofo. Lo que la Psicología experimental puede aportar es un mayor o mejor refinamiento de la experiencia.

4. Método de la Antropología Filosófica

En general, método es el orden a seguir para alcanzar un fin. En las Ciencias método es el camino para descubrir y alcanzar la verdad, el método depende del objeto (formal y material) o verdad de las ciencias y nunca al revés.

Son reglas generales del método: 1)partir de lo evidente, 2)analizar o dividir un problema complejo para estudiar sus partes; 3)componer o sintetizar las partes distinguidas en atención a unidad de lo real y a la unidad del conocimiento, 4)revisar los pasos anteriores para evitar omisiones o agregados impertinentes.

Toda ciencia tiene que demostrar y también ser capaz de refutar las opiniones falsas.

El método de la Antropología Filosófica comienza con la experiencia, primero de sus evidencias, después emplea el análisis y las síntesis mentales, define de modo propio, clasifica, prueba, refuta, y en particular recurre a la introspección. En sentido amplio la introspección es la mirada que el hombre orienta a su interior o a la conciencia para considerar la naturaleza y el desarrollo de los actos psíquicos. Tomás de Aquino afirmaba que la ciencia del hombre posee certeza porque la podemos experimentar en nosotros mismos.

5. Importancia de la Antropología Filosófica

El mayor absurdo y frustración consiste en "vivir por vivir", vivir "vegetando".

Por muchos títulos, la Antropología Filosófica es una ciencia excelente y sublime; posee una altísima dignidad porque el hombre es lo más perfecto que hay en el universo. En cuanto a la vida práctica, en cuanto a la vida práctica, la Antropología Filosófica resulta quizá el saber más servicial de todos cuantos desarrolla el hombre: es la ciencia directiva y orientadora de todos sus conocimientos y de todas sus actividades. La auténtica filosofía está a disposición de l vida humana, vivir filosofando y filosofar viviendo con toda intensidad.

Toda actividad humana depende del conocimiento, cuanto la actividad humana se aparta de la verdad o la ignora, sus actos y libertad se corrompen.

Si existe un fin de nuestros actos querido por sí mismo, y los demás por él, ese fin no solo será bien, sino bien soberano.

Nuestros tiempos, que ofrecen las maravillas de una civilización técnica sorprendente e inconmensurable, reclaman angustiosamente la presencia y orientación de una sabiduría de lo humano, una antroposofía, que recupere la dignidad humana y el puesto directivo del ser del hombre en el universo; la técnica es para el hombre, no el hombre para la técnica; el hombre más vale por lo que es que por lo que fabrica.

"Conócete a ti mismo".

6. Antropología modernaReflexión filosófica que considera al hombre (anthropos) como objeto de estudio en una perspectiva global. Como reflexión filosófica no es una ciencia, sino un análisis de los fundamentos de la misma noción de ser humano, y de la consideración de éste como punto de partida de todo conocimiento sobre sí mismo y sobre el mundo. En este sentido es, como dice Max Scheler, un puente entre las ciencias y la metafísica. Por ello, no es una disciplina filosófica que trate de establecer apriorísticamente las características de una pretendida esencia humana inmutable, sino que parte de las ciencias humanas, tales como la antropología física, la antropología cultural, la psicología, la lingüística, la sociología, etc., para elaborar una reflexión sobre el ser humano en su globalidad, capaz de explicar cómo este ser humano es la condición de posibilidad de tales ciencias y, en general, de la conducta humana: lenguaje, arte, ciencia, religión, mitos, acción moral, agresividad.

Por ello, no se trata de un estudio particular sobre las características humanas, sino una reflexión filosófica y holística acerca del ser humano. El énfasis que se ponga en el carácter de sujeto trascendental del ser humano(Kant, Husserl), o en su historicidad (Hegel, Marx), o en su carácter de ser social definido esencialmente por el trabajo (Marx), o en su carácter de ser carencial para la acción (Gehlen), o en su carácter de homo faber (Bergson), o en su carácter de ser simbólico (Cassirer); el énfasis que se ponga en considerar la existencia como prioritaria, por encima de una hipotética esencia (Heidegger, Sartre y el existencialismo), etc., determinará las distintas orientaciones de la antropología filosófica.

La antropología filosófica apareció en la época moderna, ya que sólo a partir del siglo XVII pudo empezarse a considerar el hombre independientemente de la teología, y desde sus inicios estuvo fuertemente marcada por el dualismo cartesiano y por el enfoque kantiano. No obstante, aunque moderna como disciplina filosófica, la reflexión sobre el hombre es tan antigua como la filosofía misma, razón por la cual la antropología se ha contagiado de la anfibología que presenta este término. En cierto sentido, enlaza con el ideal socrático del «conócete a ti mismo» y de la concepción aristotélica del hombre entendido como «animal racional», como «animal político» y como «animal que habla», y surge del esfuerzo constante de la filosofía -con dos momentos particularmente antropocéntricos: el Renacimiento y la Ilustración- por aclarar el concepto que el hombre tiene de sí

mismo, y su situación en el mundo, (momentos en los que también se pone en duda el carácter naturalmente político del hombre, como en el caso de Hobbes, por ejemplo.

Si la filosofía antigua giraba fundamentalmente alrededor de la noción de «cosmos» y reflexionaba sobre el hombre en relación con la naturaleza, y la filosofía medieval entendía al hombre como una parte del orden divino, solamente la filosofía moderna ha permitido desatar al hombre de estas ligaduras a la vez que, con ello, crecía la noción de sujeto y de individuo (no en vano la filosofía moderna nace con la afirmación del «yo» cartesiano). En definitiva, pues, si es cierto que en toda filosofía hay una reflexión sobre el hombre (que puede provenir de rasgos mítico-religiosos o ser fruto de la reflexión filosófica propiamente dicha), solamente a partir de la época moderna se abre una nueva perspectiva: el hombre ya no se entiende solamente desde su hipotética naturaleza, ni desde una perspectiva sobrenatural, sino que se liga a su acción: a sus producciones, a sus obras y a sus relaciones con los otros hombres.

El tema del hombre aparece en la filosofía moderna entendido como «sujeto» o como «razón» y como último eslabón de todo preguntar filosófico. Las preguntas de Kant al respecto hacen clásico el planteamiento y señalan este giro antropológico: « ¿Qué puedo saber? ¿Qué puedo hacer? ¿Qué puedo esperar? ¿Qué es el hombre? A la primera cuestión, responde la metafísica; a la segunda, la moral; a la tercera, la religión y, a la cuarta, la antropología. Sin embargo, en el fondo, se podría poner todo esto a cuenta de la antropología, porque las tres primeras cuestiones se refieren a la última». Pero Kant, a pesar de su distinción entre una antropología fisiológica y una antropología en sentido pragmático, distinción que señala las dos grandes direcciones de la antropología física y de la antropología cultural y social, no llega a tematizar una antropología filosófica, aunque abre las puertas a esta disciplina. Las primeras reflexiones pertenecientes a una antropología filosófica se sitúan en el último Schelling, en Feuerbach, en Kierkegaard, en Marx y en Nietzsche.

Especialmente relevante es la posición de Feuerbach, para quien el hombre es el único objeto universal de la filosofía, razón por la cual la antropología deviene la única ciencia universal a la que deben reducirse tanto la teología como la religión, y la única ciencia capaz de determinar claramente la separación entre el hombre y el animal. Más tarde, la teoría de Darwin, al señalar el puesto biológico de la especie humana dentro del contexto de la evolución de las especies y el psicoanálisis de Freud, al señalar el inconsciente como motor de la conducta humana, abrieron nuevas perspectivas en la consideración del ser humano.

Se considera, no obstante, a Max Scheler (1875-1928) como el iniciador de una antropología filosófica que tiene plenamente en cuenta el fenómeno de la cultura y la historia (El puesto del hombre en el cosmos, 1928). Para Scheler, la antropología filosófica debe tratar al hombre no solamente como naturaleza o como vida; no solamente como voluntad, como sujeto o como razón, sino como hombre en su totalidad. La misión de la antropología filosófica es la de explicar, a partir de la estructura fundamental del ser humano, todas las funciones y obras específicamente humanas: el lenguaje, la moralidad, el Estado, las armas, la guerra, los instrumentos, la técnica, la religión, el arte, la ciencia y la filosofía misma. A partir de aquí, Scheler otorga al hombre un lugar especial en el cosmos, por su intencionalidad, su apertura al mundo, su libertad y por la capacidad de poder

trascender lo inmediato. En el aspecto biológico Scheler considera que no hay diferencias esenciales entre el hombre y los animales, sino solamente diferencias de grado.

Pero Scheler insiste en la existencia en el ser humano de una dimensión, en cierto modo opuesta a la vida, que es la dimensión del espíritu que lo separa de la mera animalidad. Por ella, el hombre es el ser capaz de «decir no», capaz de desligarse de sus instintos y de adaptar el medio ambiente a sus necesidades en lugar de adaptarse él al medio ambiente como hacen los animales.

En resumen, Scheler afirma que, mientras la imaginación, la memoria, la sensibilidad y el sentimiento son fenómenos vitales no muy distintos de los propiamente biológicos -razón por la cual, en este aspecto, la diferencia entre el hombre y los animales es solamente de grado-, en el hombre aparece una dimensión diferente: la dimensión del «espíritu», opuesta en cierto sentido a la vida, y que permite al hombre reprimir y controlar sus impulsos, de manera que el «espíritu» se ve potenciado por esta autonegación ascética. Este planteamiento metafísico, y todavía tradicional -puesto que sigue siendo dualista, al oponer el cuerpo animado y el espíritu-, se verá superado por un enfoque que insiste más en la dimensión biológico-antropológica.

Este movimiento se inicia también en Alemania, después de la segunda guerra mundial, sobre todo por obra de Helmuth Plessner (Antropología filosófica, 1971). Parte de la consideración de la base biológica, verdadera condición humana, desde la cual se constituye el hombre en la historia, y propugna la independencia de la antropología filosófica respecto de cualquier otra ciencia. Parecida línea de planteamiento siguen los trabajos de Arnold Gehlen, filósofo y sociólogo (Investigaciones antropológicas, 1961). Gehlen insiste en el aspecto inacabado del ser humano, caracterizado como ser biológicamente no especializado y con una larga infancia dependiente de los adultos. Esta caracterización del hombre como «ser carencial», expresión ya utilizada por Herder, o como «animal no fijado» (expresión que Gehlen extrae de Nietzsche), es la que determina tanto su capacidad de aprendizaje como su capacidad de transformación de la naturaleza. En dicha capacidad se manifiesta el carácter fundamental del ser humano, a saber, la «acción». Este principio de la «acción» (que recibe Gehlen a partir del pragmatismo americano y de la filosofía de Bergson) le permite eliminar el dualismo que estaba en la base de la antropología filosófica desde Descartes, Kant y Scheler, ya que en la acción confluyen todos los aspectos del ser humano: su cuerpo, su naturaleza, su inteligencia, su sociabilidad y su cultura.

Por otra parte, Heidegger con su obra Sein und Zeit (Ser y tiempo), al fundamentar la filosofía sobre la base del tipo de ser que es el ser humano, abre también una fructífera reflexión antropológica. No obstante, Heidegger mismo, en Kant y los problemas de la metafísica, señala las dificultades de una antropología filosófica pues, si desde un punto de vista holístico y antropológico se puede considerar que «nada es comprendido hasta no ser aclarado antropológicamente» (Kant y los problemas de la metafísica, FCE, México 1973, 2ª ed. p.175), y si consideramos que «la totalidad del ente puede referirse al hombre en alguna forma», «la antropología se hace tan amplia que se pierde en la más completa indeterminación».

Otros autores, como Martin Buber, Landsberg, Nicolai Hartmann, Groethuysen, o Ernst Cassirer, han hecho contribuciones importantes a la moderna antropología filosófica. El psicoanálisis tendrá también un lugar fundamental en la antropología, especialmente por su concepción del inconsciente,

lo que permite elaborar toda una concepción de los mitos, los ritos, las prohibiciones, los tabúes y, en definitiva, elaborar una concepción del hombre y de la cultura. Se puede hablar también de una antropología existencialista, ya que las filosofías existencialistas en conjunto (bajo la influencia inicial de Heidegger y Sartre, especialmente) estudian las condiciones más íntimamente constitutivas del hombre desde las cuales éste ha de desarrollarse como proyecto. Puede hablarse también de una antropología estructuralista que cuestiona la noción general de sujeto humano y que procede fundamentalmente de la antropología cultural francesa y, en general, del movimiento estructuralista.

De entre los teóricos del estructuralismo destaca Lévi-Strauss quien, al dar la primacía al sistema por encima de sus elementos, considera que la estructura trasciende la realidad empírica y es la que da fundamento a los modelos construidos sobre ella. Así, las relaciones sociales situadas en el nivel de lo real, se asientan sobre las estructuras sociales, situadas en el nivel de lo simbólico. De esta manera, el nivel simbólico e inconsciente es la auténtica base de lo real, ya que solamente la estructura es la que posibilita la inteligibilidad de las relaciones sociales. Con ello, además, se limita el papel del sujeto, ya que éste no tiene significado por sí mismo, sino solamente en relación con las estructuras sociales y culturales que son las que lo dotan de sentido. El sujeto, «el niño mimado que ha ocupado demasiado tiempo la escena filosófica», cede su lugar a las estructuras simbólicas que lo trascienden, las únicas que son plenamente objeto del estudio científico, ya que son las que pueden dar explicación de los fenómenos sociales. Por ello, Lévi-Strauss proclamaba de forma provocadora que «el fin último de las ciencias humanas no es constituir al hombre, sino disolverlo».

Por otra parte, también dentro de la corriente estructuralista es destacable la concepción defendida por Foucault, que sostiene que «en nuestros días lo que se afirma es el fin del hombre, su dispersión absoluta» ya que, por otra parte, «el hombre no es el problema más antiguo ni el más constante que se haya planteado el saber humano. El hombre es una invención reciente, y su fin está próximo» (M. Foucault, Las palabras y las cosas, Siglo XXI, México 1968, p.375). Foucault señala que en realidad el hombre no es propiamente el objeto de estudio de ninguna de las ciencias que afirman estudiarlo, ya que aquello que realmente estudian estas ciencias son las estructuras económicas, psicoanalíticas, lingüísticas, de parentesco, etc., en las que vive el hombre. De esta manera, según Foucault, más que estudiar el hombre estas ciencias, lo fragmentan y reducen a estructura. Ante esta fragmentación también se alzan voces, como las de Edgar Morin, por ejemplo, que señalan que lo que ha muerto no es el hombre, sino la imagen autoidolatrada del hombre que sólo se admira en la ramplona imagen de su racionalidad, y que se ha reducido a su mero aspecto técnico de homo faber y de homo sapiens, despreciando otras dimensiones tan importantes como la afectividad, la desmesura o la fiesta. Por ello, señala este autor que el auténtico hombre se halla en la dialéctica entre sapiens-demens. En el estudio de la constitución de la noción fundante de sujeto en la modernidad, y en su deconstrucción, destaca también la obra de filósofos como Deleuze y Derrida. Por último, cabe destacar también las aportaciones a la antropología procedentes de la sociobiología.

Bibliografía para apoyar el siguiente trabajo:Filosofía 10º. Editorial Santillana. Páginas 64, 66, 70, 72, 78, 80, 82, 84, 90 y 92.Pensemos 10º. Editorial Voluntad 1989, páginas 32-73Filosofía I. Editorial Santillana. Páginas 153-165.

Desarrolla las siguientes preguntas sobre la importancia del hombre a través de la historia de la filosofía:

ANTROPOLOGIA GRIEGA

1. ¿El hombre es lo más perfecto que hay en el universo? Elabore un ensayo donde utilice todos sus conocimientos filosóficos para justificar su respuesta2. ¿Adónde lleva al hombre el actuar aparentemente de modo contrario al natural, es esto posible?3. ¿Cómo puede el hombre llegar a conocerse a sí mismo?4. Con tus propias palabras interpreta la siguiente frase célebre de Sócrates: “Ahora bien, el hombre se vale del cuerpo como un instrumento, lo cual significa que son cosas distintas el sujeto (que es el hombre) y el instrumento que es el cuerpo”.5. La siguiente afirmación es de Platón: “El hombre es un alma eterna e inmortal, encarcelada en un cuerpo, cuyo fin es el descubrimiento de la verdad en el mundo de las ideas al cual debe regresar”. Explica que es el hombre entonces para Platón.6. De acuerdo al pensamiento Aristotélico cómo se entiende la Sustancia Hombre.7. Elabora una comparación (Similitud y Diferencia) entre el pensamiento sobre el Hombre para Platón y el de Aristóteles.

ANTROPOLOGIA MEDIEVALDe acuerdo a la Antropología Medieval explica:8. ¿Por qué el hombre para San Agustín es un Alma Racional?9. “La inmortalidad del alma es una exigencia de la naturaleza espiritual del hombre, es una necesidad que nos explica el ser del hombre en la búsqueda de la felicidad plena, a la cual sólo se llega en la eternidad”. Explica con tus palabras que quiso San Agustín afirmar con el texto anterior.10. Explica que influencia tiene San Agustín de Platón con respecto al hombre11. ¿Cómo concibe al hombre Santo Tomás?12. Compara el pensamiento sobre el hombre para San Agustín y para Santo Tomás

ANTROPOLOGIA RENACENTISTA.13. Según el Renacimiento como se concibe al Hombre y como a Dios?14. Explica porque el hombre para Nicolás Maquiavelo es un ser necesariamente político.

ANTROPOLOGIA MODERNADe acuerdo a la edad Moderna explica lo siguiente:15. ¿Por qué Rousseau afirma que el ideal del hombre es retornar a su estado Primitivo?16. Elabora un ejemplo o situación que te ayude a comprender el pensamiento de Rousseau sobre el hombre17. ¿Por qué Kant afirma que el hombre es un cumplimiento con el “deber ser”?18. Elabora un ejemplo o situación que explique el “deber ser” de Kant

ANTROPOLOGIA CONTEMPORANEA Según el hombre visto en Edad Contemporánea explica:19. Cada una de las bases del pensamiento de Augusto Comte sobre el Hombre20. Tres planteamientos de Carlos Marx sobre el Hombre21. La importancia del Súper Hombre para Federico Nietzsche22. ¿Por qué el Hombre según Jean Paúl Sartre está condenado a su libertad?23. ¿Por qué Martín Heidegger sostiene que el hombre en la búsqueda de su futuro es un ser para la muerte?24. Elabora un ejemplo que complemente la visión del Hombre para Sartre25. Elabora una comparación entre el pensamiento de Sartre y el de Heidegger.