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EL SUEÑO DE EDITH
CUENTO INFANTIL: Una jovencita que compra un boleto de lotería y….
ROSA ABENÓJAR
EL SUEÑO DE EDITH
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En una ciudad de un gran País vivía una jovencita que se había
quedado huérfana al morir sus padres. Con la crisis tan grande
que atravesaba la Nación no había trabajo para muchos y los
sueldos eran tan bajos que tenían muy pocos recursos para vivir.
Un día que pasó por una tienda de loterías vio un cartel que
decía: “Gran Bote cielomillones, y luego animaba a probar
suerte”. Algo le hizo reaccionar ante aquel cartel y mirar en su
bolso para contar el dinero que le quedaba, no tenía mucho, si
probaba suerte tendría que quedarse sin cenar. Se marchaba ya
sin entrar cuando oyó un vocecita de una niña pidiéndole algo
para comer,
Buscó en su bolso el bocadillo que se había comprado y se lo dio,
luego pensó, ¿y que es un día más sin comer?…ya había pasado
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alguna que otra necesidad cuando no encontraba trabajo…
después sus pies le guiaron hasta la entrada donde ponía
“lotería” abrió la puerta y pidió un boleto. Ya estaba hecho, se
había gastado el presupuesto del día y tendría que tomar mucha
agua para que se le quitara el hambre, pero no se arrepintió,
esta niña se notaba en su carita que tenía más necesidad que
yo…Además ¡y si Dios hace un milagro y me toca la
lotería!… ¡Cuantas cosas haría yo con ese dinero! Se marchó a
casa contenta porque sabía que a la niña aquel bocadillo le iba a
saber a gloria y ella para entretener a su estómago pensaría y
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soñaría las cosas que podría hacer con ese dinero de la lotería.
Los siguientes días estuvo trabajando hasta muy tarde y llegaba
a su casa muy cansada. Por fin le llegó un día libre y salió a
pasear, al pasar por la tienda de loterías se acordó de su boleto
y pasó a preguntar si le había tocado algo. La dueña metió el
boleto en la máquina y se quedó sorprendida, lo volvió a meter
otras dos o tres veces más y por fin le dijo: Jovencita, espera un
momento que cierre la tienda y te acompañe al banco, coge tu
boleto y no lo vayas a perder, estábamos buscando al agraciado y
esa eres tú.
Cuando llegó a su casa todavía estaba confundida, los banqueros
le habían dicho que tenía que invertir su dinero, comprarse una
casa, un coche, joyas, invertir en acciones, depósitos, letras del
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tesoro…ella en cambio quería hacer otra cosa, así que le abrieron
una cuenta y les dijo que ya lo pensaría y les diría lo que quería
hacer con todo ese dinero.
Lo primero que hizo después de ir al banco fue ir a la Iglesia,
sabía que alguien había mediado para que su boleto saliese
premiado, después de orar levantó los ojos y…- allí estaba la
niña que aquel día le dio el bocadillo. Se acercó a ella y le
preguntó ¿cómo te llamas? -Rosario.- está bien Rosario ¿dónde
vives? _no tenemos casa, la perdimos cuando mis papas se
quedaron sin trabajo, ahora vivimos debajo del puente que hay en
la autovía.
¿hay alguien más con vosotros? – sí, tengo tres hermanos mayores
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que yo, no quieren ir a la escuela tampoco porque les da
vergüenza asistir, no tenemos ropa nueva para ponernos, tampoco
libros así que no quieren que les vean sus amigos y no van, se
pasan el día en el centro pidiendo a ver si sacan algo de dinero
para ayudar a mis padres para que compren comida.
¿Me llevarías a ver a tus padres ahora? –¿para qué quieres
verlos? –estoy pensando que igual tengo trabajo para ellos si
aceptan.
Rosario la llevó al puente donde vivían. Sus padres se asustaron
pensando que sería alguien del ayuntamiento para quitarle a la
niña, ya que vivían en muy malas condiciones. -No os asustéis,
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venía a ofreceros un trabajo. –Un trabajo, dijeron- Sí, quiero
buscar una gran casa para que vivan familias pobres, pero esta
casa que quiero comprar tiene que estar limpia y aseada,
necesitaré personal que limpie, cocineras que guisen para muchos,
hombres que traigan la compra para todos, personal que sepan
llevar cuentas… A cambio tendréis vivienda, comida y un sueldo
decente por vuestro trabajo, formaremos todos una gran familia y
nos dedicaremos a ayudar a todos los que podamos que estén en
vuestra misma situación.
Edith, que así se llamaba la jovencita, no sabía que sus padres
habían elegido ese nombre para ella además de por gustarles por
su significado: “Rica y luchadora”. Si vivieran ahora estarían
más que orgullosos de ella, se había convertido en una “muy
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buena persona”, de las que ya no abundan en este mundo sin
sentimientos.
Llevó a la familia de Rosario a un hotel, les compro ropa nueva
a todos y les dijo que disfrutaran de la ciudad mientras ella
encontraba la casa que estaba buscando. No tardó mucho en
encontrarla, era enorme, bien conservada y lista para entrar a
vivir, así que se decidió y la compró, quería empezar a ayudar a
los demás ya.
Como era Navidad fue a ver a la familia de Rosario al hotel,
les preguntó que les hacía más ilusión de Reyes. Uno de los
chicos dijo que le gustaría tener un balón, pues quería ser
futbolista, otro una bicicleta, quería aprender para cuando fuese
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mayor hacer un viaje en ella por todo el País. El tercero un libro
de Filosofía pues quería ser profesor y escritor de mayor. -¿Y
tú Rosario, que te gustaría a ti que te trajeran los Reyes
Magos? Pues a mí me gustaría…un vestido de Comunión, como
mis papás se quedaron sin trabajo y nos echaron de nuestra casa
no pude hacerla con mis compañeros el año pasado. Vale, yo le
diré a los Reyes Magos lo que os gusta a ver si hay suerte y
dirigiéndose a sus padres les dijo: para vosotros ya tengo el
regalo y les enseñó la casa que había comprado, preparad
vuestras cosas que mañana nos mudamos.
Se pusieron manos a la obra, buscaron a otras familias que
estaban en la misma situación de pobreza que los padres de
Rosario y todos aceptaron el proyecto de Edith. La primera
comida la dieron el día de Reyes, La planta baja de la casa era
enorme y ahí habilitaron los
comedores para todos los
necesitados de la ciudad que
quisieron ir, también hubo
regalos y caramelos para los
niños pobres.
Los hermanos de Rosario tuvieron el regalo que esperaban. Y
para ella una gran sorpresa: Edith había hablado con todas los
compañeros que habían hecho la comunión cuando Rosario no
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pudo, también con el sacerdote de la Iglesia más hermosa de la
ciudad y quedó con todos ellos a una hora. Luego hizo que le
llevaran el vestido de Comunión más bonito que había encontrado
a su habitación en un paquete dedicado por el Rey Baltasar que
era su favorito.
Luego se
marcharon
todos a la
Iglesia y
allí en
compañía de
sus padres,
hermanos,
Edith y de
todos sus
compañeros
hizo la
Primera
Comunión,
recordando
este día
como el
mejor de su
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vida. Y antes de irse de la Iglesia rezaron todos por aquel
milagro que hizo que el dinero de la lotería cayera en las manos
de la persona adecuada: honrada y sabiendo que los
mandamientos de la ley de Dios se resumen en dos: Amarás a
Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo.
Tanto éxito tuvo aquella casa de acogida durante años y años que
llegó a oídos del Alcalde, luego a los del Presidente y finalmente
a los de los Reyes, visitando todos el lugar y comprometiendose a
ayudar todos los años con nuevos proyectos para que la casa no
desapareciera, también muchos supermercados quisieron ayudar
con sus excedentes de comida, las tiendas de ropa llevando la que
se les quedaba pasada de temporada, los banqueros ayudando
con dinero para medicinas, educación y otras cosas que se
necesitaban.
Y así fue como el sueño de aquella jovencita se cumplió, y vivió
muchos años para ver como entre todos se puede ayudar y no
permitir que otras personas pasen hambre y no tengan un lugar al
que acudir cuando la sociedad les da la espalda quedándose sin
trabajo y sin recursos.
FIN.
Octubre de 2014
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BIBLIOGRAFIA:
Escrito por Rosa Abenójar.
Las imágenes todas de internet:
http://2.bp.blogspot.com/-8hAXiqg2aAQ/TWFL_rXACQI/AAAAAAAAZs4/5QIVYRXw3KA/s1600/ninas-india.jpg
http://1.bp.blogspot.com/-Bt0TrxTJIOM/UbZb6fyiw9I/AAAAAAAAAjY/91bYJf3yxkE/s1600/Mujer+orando.jpg
http://www.buscanombres.com/nombres-africanos.htm
http://cristianos.com/wp-content/uploads/2008/06/895-06-30-08-orando.jpg
ww.imd.uncu.edu.ar/cache/pobreza.jpg_640_640.jpg
http://www.carto.net/neumann/travelling/china_tibet_2001/19_pass_kampala/07_poor_children.jpg
http://2.bp.blogspot.com/-XFpHjrnGGHE/UNw6T0s57II/AAAAAAAAABI/fLE7vBpXzjk/s1600/mansiones+de+lujo.jpg
http://cdnls.batanga.bz/wp-content/uploads/2012/01/Los-tres-reyes-magos-e1325800755837.jpg
http://estaticos01.elmundo.es/elmundo/imagenes/2007/11/26/1196091495_0.jpg
http://3.bp.blogspot.com/-hJLEuPjsVbw/UYjRkbN7qEI/AAAAAAAACPc/LuhT-
Gi0Yiw/s1600/vestido+de+comunion+aurora.png
http://www.4vientos.net/wp-content/uploads/2013/04/NI%C3%91OS-POBRES-CALLE-610x225.jpg
“Donde hay justicia no hay pobreza”
Confucio, reconocido pensador chino, 551 a. C.
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