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Los tnecanistnos corporales de autorregulación y la teoría de sistetnas
Xavier Uriarte (Médico Naturista)
SELF-REGULATION MECHANISMS OF H UMAN BODY IN THE GENERAL THEORY OF SYSTEMS. URIARTE X. Keywords: Homeostasis, Biosystems, Psychology, Self-Regulations mechanisms English Abstract: Our body is not a machine, it's a living being that reacts and that is surrounded by transformational energetic processes; and as a complex unity, is formed of structures named biosystems, that are closely related with our environment. Van Bertalanffy, in the fifties, proposed his "System 's general theory " with the existence of 6 sub-biosystems, that are� Nutrition, Breathing, Locomotive, Inmunologic, Perceptive and Environmental (Extracorporal) .
«Quien quiere acierto sin error, y orden sin desorden no comprende los principios por los que se rigen cielo y tierra; no entiende cómo todo está conectado»
Chuang Tzu
Durante años he estado indagando en los distintos enfoques sobre la salud y la enfermedad del cuerpo humano, sin que ninguno me satisfaciera del todo. No obstante el esfuerzo realizado ha sido fértil, porque me ha permitido obtener una visión global del cuerpo, y me ha hecho comprender que para avanzar es necesario estar dispuesto a la reflexión y al contraste de pareceres ( 1 ) .
Cuando se trata de establecer conclusiones acerca del cuerpo humano, conviene no perder de vista que se trata de un organismo vivo, y que por tanto funciona como un sistema abierto al medio, a cuyos innumerables estímulos ha de estar adaptándose constantemente. El cuerpo humano n�nca ha sido una máquina qué funcionase como un sistema cerrado.
Tampoco conviene perder de vista que el cuerpo está dotado de una capacidad de autopreservación que constituye el poder autocurativo de nuestra naturaleza. Ese poder ha recibido varios nombres a lo largo de la historia, de los cuales el más conocido quizá sea la denominación latina vis natura medi-catrix. Una d efinición moderna de ese poder autocurativo le da una denominación más técnica: mecanismos de autorregulación, porque su principal misión
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es mantener la homeostasis a pesar de los cambios bioquímicos y biofísicos que se producen incesantemente dentro y fuera del cuerpo.
TEORIA GENERAL DE SISTEMAS
A comienzos de los años cincuenta empieza a adquirir consistencia un nuevo método científico, la Teoría General de Sistemas, resultado de las investigaciones del biólogo L. Bertalanffy, aunque el embrión del nuevo método había empezado a desarrollarse bastantes años atrás. En 1 932 Bertalanffy había publicado una obra titulada Teoría General de Sistemas, en la que proponía un modelo de Biología organísmica: los seres vivos están organizados como totalidades inseparables de su medio ambiente. Ese-modelo de biología organísmica iría evolucionando hasta llegar a convertirse en un nuevo método científico que podrá aplicarse en numerosas y muy diversas ramas de la ciencia (Matemáticas, Metereología, Geología, Astrofísica, Economía, Sociología� Psicología, etc . ) . El análisis de sistemas también tiene una útil aplicación en el ámbito de la salud del cuerpo humano.
La Teoría General de Sistemas descansa sobre dos principios fundamentales: a) el principio aristotélico de el todo es
superior a la suma de las partes. b) el principio de globalidad.
Estudia los entes o los problemas como unidades no fragmentables (primer principio) y no separables de su entorno (segundo principio) , procediendo siempre de arriba a abajo, del todo a
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la parte, en un orden de mayor a menor complejidad. El sistema más complejo que se puede concebir es el universo.
Este enfoque sistém�co resulta inmediatamente aplicable al cu�rpo humano, que constituye un biosistema perfecto compuesto por subs-istemas. A la vez él mismo forma parte de otro biosistema de orden superior, el medio ambiente, con el que interactúa a nivel físico y químico, y probablemente también a otros niveles no demasiado conocidos todavía, tal como se d�sprende de algunos hechos aparentemente inexplicables, por ejemplo el efecto curativo de las diluciones homeopáticas no moleculares, basado en la actuación de patrones energéticos sutiles que están presentes en la dilución.
El biosistema que llamamos cuerpo humano forma un contínuo con su medio ambiente, entendiendo por medio. ambiente el inmenso conjunto de siste- · mas de naturaleza física y química -el grupo racial o el sistema solar serían dos ejemplos- y participando de la vida de ese medio ambiente. En el caso del hombre el medio ambiente incluye también sistemas de naturaleza sociocul-tural, económica y política (algunos ejemplos serían la pareja, familia, vecindario, población, región, nación, etc . ) .
Tomado como totalidad, e l cuerpo humano no es fragmentable sin que con ello desaparezca como biosistema, puesto que formando un todo indivisible, los subsistemas que lo componen no pueden tomarse aisladamente unos de otros, dado que cada uno necesita de la acción de los demás para existir. No es el pul-
Sistemas con un nivel de organización muy complejo pueden formar parte a su vez de otros sistemas más complejos todavía. En esta i lustración se aprecia como un sistema altamente complejo como es nuestro planeta es en real idad un subsistema que forma parte de otro sistema más complejo: el sistema Tierra-Luna, que a su vez pertenece al Sistema Solar, etc . , siguiendo un orden jerarquizado de creciente complejidad. En este ejemplo el nivel de complej idad está relacionado directamente con el tamaño del sistema, pero no ocurre siem-
. pre así, puesto que la complejidad de un sistema depende de su grado de organización y no del número o el tamaño de sus elementos. Po ejempJo una célu la vegetal viva es un s istema mucho más complejo que un frigorífico.
món el que respira, ni el estomágo el que digiere, sino es el hombre el que respira por medio del pulmón y digiere por medio del estómago. Y así ocurre en todo ser vivo; de hecho lo que caracteriza al ser vivo es precisamente la unidad morfológica y fisiológica; en cuanto desaparece esa unidad, desaparece con ella el ser vivo.
Ninguno de los órganos y sistemas de nuestro cuerpo ignora lo que pasa en los demás; todos están conectados entre sí por medio del eje neurovegetativo-endocrino. Esa complicidad mutua, esa interdependencia (hasta solidaridad me atrevería a decir) es una expresión bien patente de la unidad del cuerpo.
LOS SUBSISTEMAS CORPORALES
En el cuerpo humano se distinguen seis grandes subsistemas ( 1 1 ) . Cinco de ellos pertenecen propiamente al cuerpo, y el último constituye el mundo de los estímulos procedentes del exterior.
l. Subsistema de la Nutrición _ Tiene como función principal trans
formar unas sustancias que proceden del exterior, los alimentos, para que sean integradas en el propio cuerpo o aprovechadas para la producción de energía. Está constituido por los órganos digestivos, tanto los de asimilación wmo los de desasimilación, de los cuales los más
importantes ocupan la cavidad abdominal. Presenta un orificio de entrada y otro de salida, y está provisto de mecanismos de autorregulación que se activan en diferentes situaciones . El orificio de entrada, la boca, es el polo positivo; el orificio de salida, el ano,' Sl!Stentado por la musculatura perineal, es el polo negativo.
2. Subsistema de la Respiración Tiene como función principal ex
traer energía del medio ambiente mediante procesos intracelulares -adenosín trifosfato- que se almacena en las mitrocondrias. Forman parte de él todos los órganos que intervienen .en el intercambio y conducción de 02 y co2 entre la atmósfera y las células, de los cuales los más importantes ocupan la cavidad torácica. Tiene un orificio de entrada, la nariz, que es el polo positivo, y un orificio de salida, la uretra, que es el polo negativo. El Subsistema de la Respiración presenta unos mecanismos de autorregulación muy característicos.
3. Subsistema locomotor Las estructuras óseas, musculares y
cartilaginosas permiten que el cuerpo sea un biosistema móvil. Los numerosos órganos que constituyen este sub�istema aparecen ensamblados entre sí de una manera perfectamente organizada, constituyendo unidades
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cinéticas que posibilitan las funciones de relación. Incluye estructuras tisulares -el tejido conectivo- que dan consistencia y soporte a los demás subsistemas. Presenta mecanismos de .autorregulación muy valiosos que actúan de manera eficaz cuando la situación lo requiere, por ejemplo en la adaptación a esfuerzos, en la cual el corazón actúa como órgano principal. No presenta polaridad.
4. Subsistema Inmunológico Su función principal consiste en adap
tar al individuo a las cambiantes condiciones climatológicas y de otro tipo, así como anular el efecto nocivo de gérmenes y toxinas que puedan entrar en el biosistema o que puedan producirse en su interior. Forman parte de él todos los órganos que intervienen en la inmunidad. No presenta polaridad, pero dispone de eficaces mecanismos de autorregulación. ·
En este subsistema se distinguen dos niveles de intervención escalonados:
a) La Barrera Inespecífic¡:t, formada por la piel y por las cavidades huecas del organismo donde viven colonias de bacterias y virus. La saliva y la leche materna también poseen cualidades inmunógenas.
b) La Barrera Específica, constituida por el tejido sanguíneo y conectivo, amígdalas, apéndice, bazo, hígado, vasos linfáticos y ganglios linfáticos.
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5 . Subsistema de la Percepción Este subsistema tiene a su cargo el
conjunto de las diversas funciotles cognitivas, volitivas y afectivas del hombre, de las cuales cito las siguientes:
•Coordinar los diferentes subsis-temas y tejidos mediante el eje neurovegetativo. •Captar los estímulos del exterior distinguiendo la cualidad de los mismos mediante el eje neurosensorial. • Responder a las necesidades del propio cuerpo mediante el eje neuromotriz y el eje neuroendocrino. •Reproducir la especie mediante el eje neuroendocrinogenital. •Generar sensación de placer mediante el eje neurovegetativo. • Almacenar el conocimiento en forma de memoria mediante el eje neurovegetativo y neuromotriz. •Operar dando respuestas adecuadas a las necesidades nutritivas, posturales, adaptativas, psicológicas, mentales e incluso espirituales.
Componen este subsistema los numerosos órganos que intervienen en las funciones enumeradas, de los cuales cabe citar las estructuras encefálicas, la médula espinal, los plexos nerviosos, los diferentes órganos de los sentidos, el eje endocrino y el sistema genital. Las cavidades que protegen estos órganos están diseminadas por todo el cuerpo.
El polo positivo lo constituyen los varios orificios u órganos que sirven de entrada a los estímulos sensoriales procedentes del exterior: ojos, nariz, oídos, papilas linguales, terminaciones nerviosas epidérmicas. El polo negativo se encuentra en unos orificios de salida: vesícula seminal o trompas de Falopio, y piel.
El subsistema de la Percepción está dotado de unos poderosos mecanismos de autorregulación, uno de los cuales es la reacción de adaptación en la que actúan coordinadamente! el sistema nervioso, el sistema neuro-endocrino y el sisterria neuromotriz para dirigir la energía a aquella parte del cuerpo que más convenga según las necesidades internas y externas. Una forma de reacción de adaptación se produce cada vez que se pasa de la vigilia al sueño y viveversa; en el ritmo sueño-vigilia interviene la presencia o ausencia de luz. Para que la reacción de adaptación sea completa es necesario que la reserva enrgética del cuerpo sea suficientemente abundante.
6. Subsistema Extracorporal El biosistema que llamamos cuerpo
humano forma un contínuo con otro biosistema de orden superior al cual pertenece: el medio ambiente, que en
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realidad e s un inmenso conjunto d e sistemas muy diversos e integrados unos en otros según un orden jerárquico.
El medio ambiente está constantemente produciendo una gran variedad de estímulos que inciden en el cuerpo. Todo ese conjunto de estímulos que recibe el cuerpo procedentes del exterior se denomina Subsistema Extracor-poral Ambiental. A continuación se enumeran los prindpales tipos de s istemas extra corporales que producen estímulos sobre el cuerpo:
•Abióticos (Calor, luz, sonido, humedad, latitud, altitud, vientos, mareas, radia
.ciones ionizantes , radiaciones
extraatmosféricas, campos electromagnéticos, et'c . ) . •Geológicos (formaciones minerales, magnetismo terrestre, etc . ) . • Biológicos (reino vegetal, reino animal, virus, hongos, etc . ) . •Demográficos (vecindario, población de residencia, migraciones, densidad demográfica, etc . ) . •Arquitectónicos Y. urbanísticos (tipo de vivienda, ubicación de los lugares de permanencia, desplazamientos, medios de transporte, etc . ) . �Socio-políticos (tipos de política, modelos jurídicos, líneas económicas, modelos sanitarios, modelos asistenciales, etc.) •Educativos y socioculturales (transmisión de creencias; modelos de conducta; transmisión de tradiciones; transmisión de pautas sociales, morales y religiosas; h·ansmisión del saber; modelos de salud, etc.).
Tdos esos estímulos influyen de diversas maneras y en distintos grados sobre los cinco subsistemas corporales. Cuando los estímulos extracorporales cambian o aparecen estímulos nuevos, se activan los diferentes mecanismos de autorregulación del cuerpo, los cuales restablecen el estado de equilibrio. El . nuevo estado de equilibrio resultante es siempre diferente del anterior.
Es muy interesante observar que muchos de los sistemas extracorporales también tienen sus propios sistemas de autorregulación, y no hablo sólo de los sistemas de naturaleza biológica o físicoquímica: también muchos de los sistemas de naturaleza sociopolítica o sociocultural los tienen, comportándose de modo parecido a como lo hacen los seres vivos. Las crisis sociales o políticas a menudo son expresiones de esos mecanismos de autorregulación. Por desgracia, la enfermedad de las personas es en muchos casos la manifestación de ciertas contradicciones sociales o fruto de políticas socioeconómitas inadecuadas o injustas.
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EQUIFINALIDAD DEL BIOSISTEMA
El cuerpo humano está pintado de sí mismo hacia fuera y hacia dentro, y posee una curiosa capacidad para ver y sentir lo que sucede en su interior.
Inmerso en una interminable evolución biológiCa, reúne en sí mismo todos los procesos inherentes a la vida, desde los más simples a los más complejos. A pesar de estar compuesto por multitud de maravillosas estructuras diferenciadas entre sí, todo en él funciona coordinadamente, como si se tratara de un solo órgano. Un eminente médico decía con razón: «el cuerpo es un sólo órgano, y la vida una sola función» (8) .
Como todos los sistemas abiertos, mantiene con su entorno un intercambio continuo y bidireccional de energía y de materiales. Cuando inciden estímulos perjudiciales en el biosistema, se desegcadenan mecanismos muy activos que tienden a recuperar el estado de equilibrio; la actividad de esos mecanismos autorreguladores produce a su vez alteraciones de distinto grado de severidad
Los mecanismos de autorregulación brotan de la capacidad innata de autocuración con la que ha sido dotado el biosistema llamado cuerpo humano. Aunque se trata de mecanismos muy complejos, su actuación pasa desapercibida casi siempre excepto cuando el equilibrio se halla tan ·alterado que se necesita una intervención enérgica de
· los mecanismos de autorregulación para restablecerlo.
CARACTERISTICAS DE LOS MECANISMOS DE
AUTORREGULACION Los mecanismos corporales de
autorregulación se caracterizan porque: a) Producen manifestaciones visibles e invisibles en el cuerpo. b) Se constituyen en síntomas. e) Necesitan determinados periodos de tiempo y. determinados espacios para poder actuar. d) Su acción puede manifestarse brusca o lentamente, pero nunca está sujeta a un control consciente. e) Generalmente producen múltiples síntomas en diferentes subsistemas. f) Se manifiestan progresivamente de fuera hacia dentro. g) Producen en el cuerpo un estado delicado que está determinado por la frecuencia, la intensidad y la cualidad de los síntomas . h) Tienden a desactivarse a medida que se va restableciendo el equilibrio.
i) Cuando se efectúan intervenciones agresivas sobre el organismo, los mecanismos de autorregulación quedan afectados, dando lugar a desplazamientos o enmascaramientos de los síntomas. j) Los mecanismos corporales de autorregulación conducen siempre a una de estas cuatro situaciones: curación, cronificación, transformación de los síntomas o muerte del biosistema.
CLASIFICACION DE LOS SINTOMAS
La siguiente clasificación de síntomas responde a un doble criterio. En primer lugar los he clasificado por subsistemas, y dentro de cada subsistema aparecen clasificados según dos grados de severidad.
En el Subsistema de la Nutrición Siguiendo el recorrido del tubo di
gestivo, algunos de los síntomas moderados son: vómito, naúsea, pirosis, anorexia, bulimia, cólico, reflejo gastro-cólico, diarrea, estreñimiento, hemorroides, fístula anal, etc.
Algunos síntomas severos son: Dolorulceroso, hematemesis, melenas, obstrucción intestinal, rectorragia, etc.
En el Subsistema de la Respiración De entre los moderados algunos son:
tos, hipersecreción bronquial, estornudo, hiperreactividad de la fibra lisa bron-
quial, disnea, hipotensión, hipertensión, oscilaciones del ritmo cardiaco, cólico renal , anemia, disuria, polaquiuria, poliuria, etc.
Entre los síntomas severos se encuentran: atrapamiento ventila torio, hemorragias; sobrecarga cardíaca, edemas, oligomuria, etc.
En el Subsistema Locomotor Aquí solo citaré dos síntomas princi
pales: la inflamación y la contractura neuromuscular.
La inflamación se caracteriza a su vez por edema, rubefección, hipertermia y dolor, y si compromete estructuras articulares va acompañada también de inmovilización. Puede estar localizada o generalizada, y afectar tanto al tejido conectivo interno como al externo. Algo muy valioso para la salud del cuerpo es descubrir el significado de ciertas reacciones inflamatorias; en esa situación es aconsejable invitarnos a tomar un descanso, concedernos una pausa. Por otra parte la reacción inflamatoria no se produce exclusivamente en el Subsistema Locomotor; puede afectar también a otros tejidos que no pertenecen estrictamente al Subsistema Locomotor, como cuando se producen procesos inflamatorios en mucosas, neuronas o en los fluidos orgánicos.
El otro gran síntoma es la contractura neuromuscular, que se caracteriza por: hipertonía muscular, limitación artro-
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cinética y dolor. Respecto al dolor es interesante distinguir dos tipos distintos, aunque estrechamente relacionados entre sí. El primer tipo es el dolor de naturaleza esencialmente orgánica que suele estar localizado en el tejido epitelial, tejido conectivo o tejido muscular. El segundo tipo es el dolor interno, de naturaleza psicológica y que afecta a regiones cuya localización no es visible exteriormente; suele estar relacionado íntimamente con procesos de angustia, melancolía o soledad. Entre ambos tipos de dolor existen unas vías de comunicación constituidas por el eje neurovegetativo y por el sistema endocrino, de tal manera que con frecuencia el dolor psicológico da origen a manifestaciones de dolor orgánico. En general cuando nuestro cuerpo se manifiesta a través del dolor .sin que exista una causa orgánica claramente establecida, puede estar interviniendo un proceso de orden psicológico en el que existe una situación pres ente que actúa como desencadenante, una experiencia del pasado que actúa como substrato psicológico y una perspectiva específica de futuro. Indagar en sí mismo para descubrir esos factores puede conducir a comprender mejor el proceso del dolor.
El dolor y sus distintas fases constituyen un proceso que ha sido muy bien estudiado y analizado y del que se tiene actualmente abundante información científica. En estudios metodológicos con
El cuerpo humano es un biosistema con un grado de organización extraordinariamente comple¡o. Está compuesto por subsistemas que se autorregulan a sí mismos mediante mecanismos naturales impulsados por la vis natura medicatrix. Los subsistemas corporales están dotados de comple¡os mecanismos de retroalimentación; otros tienen capacidad para aprender por sí mismos y organizar su actividad en función de lo aprendido.
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pacientes gravemente delicados o terminales se ha observado que su comportamiento sigue una secuencia de diferentes fases, incluidas dentro de la denominación genérica clínica del dolor ( 1 2) . Esas fase suelen seguir la siguiente secuencia: shok inicial cuando el paciente conoce o sospecha que su estado de salud está gravemente alterado, cambios en la forma de vivir, tristeza y dolor interno, negación, negociación, depresión, desenlace final.
Muy a menudo el dolor es resultado de la actjvación de mecanismos autorreguladores moderados o en fase temprana, cuando el dolor todavía significa un aviso para que cambiemos ciertas cosas en nuestra vida. Cuando las condiciones que originan el dolor no se modifican puede que el biosistema no resista y se activen otros mecanismos de autorregulación más severos, con el consiguiente riesgo para la integridad corporal.
En el Subsistema Inmunólogico De entre los síntomas moderados el
más frecuente e interesante es la fiebre, un proceso de elevación de la tempera tura de la totalidad del biosistema, aunque los mecanismos de autorregulación que la desencadenan estén localizados en el Subsistema InmunolÓgico. La valoración clínica de la fiebre es diferente en las distintas etapas biológicas del cuerpo. En los estadíos tempranos (lactancia, infancia, etc. ) la fiebre contribuye a la maduración e incluso al crecimiento orgánico de diversos subsistemas. En la edad adulta juega un papel eminentemente regulador. Y en los estadíos finales favorece la preservación de los subsistemas.
La fiebre y el dolor son síntomas que corresponden a sendos mecanismos de autorregulación muy valiosos, gracias a los cuales se evita que el biosistema entre en un proceso descendente de caída en barrena en el que se desencadenarían otros mecanismos más severos.
Entre los síntomas severos citaré los siguientes: hiperreactividad, hiporreactividad, displasia/neoplasia. La hiperreactividad respiratoria, cutánea o di� gestiva, queda incluida dentro de la entidad clínica denominada reacción alérgica. La hiporreactividad es un síntoma que se origina a partir de una débil respuesta durante la fase de adaptación a nuevos estímulos, y que se manifiesta mediante procesos autodestructivos dentro del propio biosistema, como si éste hubiese perdido en parte la capacidad para reconocerse a sí mismo. Este síntoma equivale a la entidad clínica denomi-
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nada reacción autoinmune. E n l a displasia/neoplasia s e desencadena un proceso desordenado de multiplicación celular en alguna parte del biosistema. Significa un fracaso biológico en el control nuclear de la membrana basal.
En el Subsistema de la Percepción Este subsistema obtiene su energía
de la vida y el movimiento contínuo de los otros subsistemas; las diferentes modalidades de energía -química, eléctrica, luminosa, etc.- hacen posible el funcionamiento de este subsistema. La renovación enérgetica necesaria para el funcionamiento de este subsistema, y de todo el biosistema en general, depende de la alternancia de los periodos de actividad y reposo, y especialmente de un adecuado ritmo sueño-vigilia.
De entre los numerosos síntomas moderados que pueden presentarse en este subsistema citaré los siguientes: alternancia depresión-euforia , ambivalencia emotiva, fantasía, regresión, pesadillas nocturnas, insomnio, neurosis reactiva en sus grados no severos, melancolía, culpabilidad, rabia, angustia, ansiedad, miedo, fobia, pánico, paranoia, delirio, alucinación, tendencia al llanto sin causa que lo justifique, disfonía, amenorrea secundaria, astenia, anemia cíclica, parestesia, distimia, distermia, disestesia, etc.
Algunos de los síntomas severos son: analgesia-hipoalgesia, acinesia-hipocinesia, shok, hipotermia, apraxia, tendencias irreprimibles a la violencia y a la destrucción, incomunicación profunda, afasia-disfas ia , amnesia , agnosia , somatoagnosia, ataxia, desorientación espacio-temporal, distonía, convulsión tónico-clónica, hipocenestesia, etc. En presencia de síntomas severos puede alterarse el modo habitual de percibir el tiempo y el espacio.
El fenómeno psicobiológico de la angustia ha sido objeto de muchas reflexiones y estudios, hasta el punto de que se conoce con exactitud su ubicación topográfica en el cuerpo. Este fenómeno puede definirse como una sensación o estado emocional desagradable en el que se experimenta un temor indefinido; suele aparecer en situaciones que generan cierto grado de tensión, más allá del cual la angustia hace acto de presencia; esas situaciones son muy variables de una persona a otra, pero en general están relacionadas con momentos de ruptura, de cambio o de toma de decisiones. Si no se resuelven las causas tiende a convertirse en un estado permanente, más o menos crónico.
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Los mecanismos de conversión de la neurosis se conocen desde finales del siglo XIX, cuando gracias a los estudios realizados en ese campo pudo establecerse que las vías neurológicas que conducen la energía en la neurosis forman parte del sistema neurovegetativo y neuromotriz ( 1 3 ) .
E n l o s albores d e l siglo X X s e descubren l o s mecanismos neuropsíquicos que configuran la morfología del cuerpo y las formas de expresión individuales ; aparece entonces el concepto de coraza caracterial en base a las investigaciones sobre fisiología neuromuscular. A mediados de siglo se integran en el yo corporal las distintas manifestaciones corporales visibles y no visibles ( 1 4) .
La última parte del siglo está siendo muy rica en investigaciones sobre maduración, crecimiento y senectud, que representan una gran aportación a l conoéimlentwo de los mecanismos que rigen la vida.
En el Subsistema Extracorporal El cuerpo humano es un sistema
semiabierto al medio ambiente; eso significa que está protegido por barreras físicas, químicas y psicológicas que criban los innumerables estímulos procedentes del medio antes de que puedan penetrar en el biosistema.
Ya he descrito someramente el enorme conjunto de sistemas que componen lo que llamamos medio ambiente (sistemas abióticos, geológicos, biológiCos, demográficos, arquitectónicos y urbanísticos , sociopolíticos , educativos, socioculturales, etc . ) . Muchos de esos estímulos procedentes del exterior activan ciertos m ecanismos de autorregulación del cuerpo; daré algunos ejemplos: se ha comprobado estadísticamente que con luna llena aumenta la tasa de suicidios; ciertos vientos, como la tramontana, producen reacciones de irritación; los climas marítimo y alpino aceleran el metabolismo, mientras que el clima !acunar lo enlentece; la arquitectura vertical genera incomunicación; algunas ocupaciones laborales de la moderna civilización industrial pueden embotar los mecanismos de autorregulación del Subsistema de la Percepción, y lo mismo sucede con la avalancha de publicidad comercial o de otros tipos; algunos procedimientos sanitarios pueden modificar los mecanismos de auto-rregulación del Subsisterma Inmunoló-gico, como ocurre con la prescripción innecesaria y continuada de antibióticos o la administración indiscriminada de vacunas.
PRINCIPIOS VITALES DE UN BIOSISTEMA
Un biosistema permanece vivo a condición de que no se interrumpa el intercambio de energía y materiales con su medio ambiente. La vida de un biosistema depende de que constantemente se esté produciendo en él una renovación de energías, de materiales y de informaciones en un permanente movimiento de entrada y salida. Tal es la característica más sobresaliente de todo biosistema, sea del tamaño que sea: el movimiento biológico, el dinamismo vital. También es la característica más sobresaliente del estado de salud, de manera que cuanto más abundante y dinámico es el intercambio de energías que un biosistema mantiene con su medio, tanto mejor será su estado de salud. Cuando cesa el movimiento biológico s ignifica que el biosistema ha muerto como tal; en cuanto eso sucede los componentes del biosistema que acaba de desaparecer se integran en otros biosistemas distintos. Así ocurre con todas las formas de vida vegetal y animal, y desde luego con el biosistema que llamamos cuerpo humano.
Ese movimiento biológico o cinesia vital es perceptible en cada una de las microestructuras y macroestructuras de nuestro cuerpo, formado por conjuntos · tisulares y complejos celulares; sin el cual no sería posible mantener ni la vida ni la homeostasis.
El movimiento biológico de los biosistemas, y del cuerpo humano en particular, tiene unas características bien determinadas que pueden describirse según los siguientes principios:
Asimilación -Desasimilación Mediante la asimilación de estímulos
químicos y físicos procedentes del exterior, los biosistemas obtienen la energía que necesitan para su preservación; el ciclo se completa con la expulsión al exterior de la energía sobrante y de la no asimilada.
En el caso de algunos biosistemas, además de asimilarse-desasimilarse estímulos de naturaleza química o física mediante los procesos de nutrición, también se asimilan-desasimilan por vía neuropsíquica estímulos de otra naturaleza. Tal es es el caso del ser humano ( 1 7 ) y probablemente de otros muchos vertebrados.
Carga-Descarga El movimiento biológico de los
biosistemas se expresa dinámicamente
mediante fases sucesivas de carga y descarga.
En el caso del cuerpo humano la fase de carga se manifiesta por un proceso de hiperemia arterial e hipertonía neuromuscular que asciende en vertical hasta alcanzar un acmé, para después descender progresivamente hasta una perfusión de reposo denominada relajación. La función del orgasmo puede tomarse como modelo del principio de Cargadescarga.
Los patrones de la circulación de la sangre y de los demás fluídos orgánicos están estrechamente relacionados con la tonstante entrada y salida de energía e información. Cuando se incrementa el riego sanguíneo gracias a la mayor actividad de determinados órganos, experimentamos un estado de excitación y de
· calor en el que la afectividad también es más intensa. Ese estado está emparentado con la sensación de placer ( 6 ) . En cambio la enfermedad, en tanto que alteración del dinamismo vi t a l , está emparentada con l a sensación de displacer.
Todo el proceso Carga-descarga se desarrolla de acuerdo a patrones temporales específicos y de acuerdo a patrones espaciales también específicos. Cuando el proceso no llega a completarse, entonces el biosistema permanece demasiado tiempo en la fase de carga, con el consiguiente riesgo para la preservación de un subsitema u otro; en esa situación el biosistema tiende a completar el proceso buscando efectuar la descarga mediante intercambios energéticos sustitutorios .
En el caso del hombre el proceso de Carga-descarga concierne, entre otros, a los fenómenos neuromotrices, neurosensoriales, emocionales, psíquicos y mentales.
Progresión-Regresión Una propiedad fundamental de los
biosistemas es su tendencia natural a desarrollarse, a incrementar sin cesar el campo de sus funciones y actividades. Pero esa tendencia a desarrollarse no se produce nunca según una línea de progresión contínua, sino según un movimiento de vaivén: dos pasos hacia adelante, un paso hacia atrás ( 1 9 ) .
Plasticidad En situaciones de emergencia los
biosistemas, entre ellos xl cuerpo humano, pueden recuperar momentáneamente una función perdida. Vemos ejemplos de este principio cuando interviene una capacidad intuitiva especial en personas
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invidentes, en el cambio de lateralidad en personas afectadas de parálisis hemilaterales, en la aparición de formas de lenguaje no verbal en personas afásicas, en la creación de códigos comunicativos válidos en personas afectadas por procesos psicóticos, etc.
Vi carian te Cuando en un biosistema alguno de
los subsistemas sufre deterioros que disminuyen alguna función, el biosistema tiende a suplir la función disminuida mediante el incremento de la actividad de otros subsiste)tlaS sanos; ello le permite mantener la homeostasis y sobrevivir.
Se conocen numerosos ejemplos de aplicación del principio Vicariante en el reino vegetal y en el reino animal, y también en el ser humano; por ejemplo en una insuficiencia renal crónica se produce de modo natural un incremento de la actividad excretoria de la piel y del intestino delgado, que actúan como un tercer riñón; en casos de supuraciones crónicas la piel actúa como vía depurativa evitando que se activen mecanismos de autorregulación severos; en casos de insuficiencia cardíaca la musculatura plantar y la de la pantorrilla actúan como un segundo corazón, etc.
REGENERACION, ADAPTACION O MUERTE
DEL BIOSISTEMA
El proceso autocurativo por el que se ponen' en marcha síntomas moderados no lesivos, esporádicos y cambiantes que no afectan demasiado a las Actividades de Vida Cotidiana (A.Y.C.) es un proceso necesario para la salud del biosistema. Significa el esfuerzo del organismo para adaptarse a las condiciones que están causando perturbación. Cuando no se modifican las condiciones perturbadoras puede ocurrir que se activen otros mecanismos de auto-rregulación severos lesivos (20) que se caracterizan por manifestarse de
.manera continua y dura
dera, afectando a la mayoría de las A.V. C. ; aparece entonces un estado corporal delicado, que es propiamente lo que se denomina enfermedad.
Los síntomas sólo tienen una de estas cuatro salidas: a) curación, b) cronificación, e) transformación de los síntomas, d) muerte del biosistema. Aquí me estoy refiriendo a los síntomas que son resultado de la fuerza curativa del propio organismo, pero ello también se aplica a los procesos que puedan tener otra causa.
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El objetivo prioritario del médico o del cuidador es siempre obtener el primer resultado, es decir la curación. Para ello dispone de numerosos recursos con los que ayudar a la vis natura medicatrix a obrar la curación en el organismo. En primer lugar están aquellos que se denominan recursos primarios, tales como el agua, la tierra, el aire o el calor utilizados según unas técnicas precisas , muchas de las cuales se conocen desde hace miles de años.
En segundo lugar está el grupo de los llamados recursos secundarios, que incluye determinadas medidas higiénicas, intervenciones no yatrogénicas o de muy bajo poder yatrogénico (fitoterapia, fisioterapia y terapias manuales, diluciones homeopáticas, acupuntura, terapia neural, balance polar electromagnético, terapia orgonómica, terapia antroposófica, etc . ) , modificaciones en los patrones de actividad-reposo, medidas dietéticas incluido el ayuno, medidas de carácter eminentemente psicológico tales como el incremento de la expresión y mejoramiento de las relaciones humanas, etc.
En tercer lugar se encuentra el grupo de los recursos terciarios, esto es, la cirugía y la farmacología (incluyendo ciertas pruebas complementarias ) ; la aplicación de los recursos terciarios ha de ser muy cuidadosa y en base a un profundo conocimiento de las técnicas, puesto que puede generar un alto grado de yatrogenia en el biosistema.
RESOLUCION DE LA ENFERMEDAD
A continuación hago una breve referencia a cada una de las cuatro posibles salidas que tiene toda enfermedad (curación, cronificación, transformación de los síntomas o muerte) :
a) Para devolver el estado de salud a un organismo en crisis, es decir, para obtener la curación, hay que intervenir en el biosistema introduciendo modificaciones en los intercambios energéticos y de materiales, aplicando para ello los recursos más indicados en cada caso, y respetando el principio hipocrático primum non nocere (ante todo no dañar), lo que significa que hay que poner ·un especial cuidado a la hora de aplicar los recursos terciarios.
b) Puede suceder que sea cual sea el modo de tratar la enfermedad o el recur-
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so aplicado, el biosistema evolucione desfavorablemente y se cronifique el proceso mórbido, es decir, que el biosistema entre en un proceso de deterioro irreversible (tal como ocurre con frecuencia en procesos reumáticos, disneicos, psicológicos, etc. ) con pérdida progresiva de funcionalidad y disminución de la capacidad de desenvolvimiento en las A.Y.C.
e) El tercer modo posible de resolverse la enfermedad es la transformación de los síntomas: el biosistema desarrolla mecanismos de adaptación que le permiten mantenerse en un estado aceptable, aunque desarrollar tales mecanismos adaptativos supone un esfuerzo duro y prolongado; el resultado positivo que se obtiene compensa tal esfuerzo.
d) La muerte l lega cuando e l biosis tema no puede mantener la homeostasis; significa el final de la existencia corporal. Por experienci¡;¡s observadas parece ser que el alma o principio esencial del ser humano inicia una experiencia extracorporal después de haberse desprendido del cuerpo (2 1 ) , (2) .
RESUMEN
Los biosistemas están organizados como totalidades infragmentables que viven integradas en otros sistemas , manteniendo un constante intercambio con el medio ambiente. El biosistema que llamamos cuerpo humano está compuesto por cinco subsistemas corporales: de Nutrición, de Respiración, Locomotor, Inmunológico y de Percepción; hemos llamado Subsistema Extracorporal Am-. bien tal al inmenso conjunto de sistemas de toda clase que constituyen el medio ambiente del ser humano. La actividad de los biosistemas está regida por cinco Princi píos: Asimilación-desasimilación, Carga-descarga, Progresión-regresión, Plasticidad, Vicariante.
Los biosistemas están naturalmente provistos de una capacidad innata de autocuración de la que brotan unos mecanismos de ?Utorregulación, que cuando se activan para responder a condiciones perturbadoras desencadenan procesos de distinto grado de severidad, que se corresponden con lo que llamamos síntomas. Cuando no se modifican las condiciones que desen�adenan los síntomas moderados al principio, el biosistéma activa otros mecanismos autorreguladores que desencadenan síntomas más
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severos y que tienen efectos lesivos para el biosistema: aparece lo que denominamos enfermedad (aunque los síntomas pueden tener otras causas) . Existen cuatro formas posibles de resolverse la enfermedad: curación, cronifi-cación, transformación de los síntomas o muerte.
Los recursos curativos se clasifican en tres grupos; el primero incluye los recursos más simples e inocuos, mientras que el tercero incluye recursos yatrogénicos que han de ser aplicados con especial cuidado. El médico o cuidador ha de tener siempre presente la máxima hipocrática primum non nocere.
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