Maffesoli Entrevista

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  • 8/14/2019 Maffesoli Entrevista

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    Michel Maffesoli: "El futuro ya no moviliza energas"

    Para el socilogo francs Michel Maffesoli posmodernidad es el nombre "provisorio" que se le da a

    esta poca en la que no se piensa en maana y slo se trata de vivir intensamente el presente. EnAmrica Latina y en Extremo Oriente, afirma, se desarrollan los laboratorios de la creatividad.Por: Hctor Pavn

    Michel Maffesoli vive slo el presente. "Creo que no existe una cosa llamada futuro", dice en esta

    charla ocurrida en un hotel boutique de Buenos Aires pleno de objetos envejecidos y futuristas

    que contradicen la identificacin temporal de este profesor de sociologa de la Sorbona. Vino a

    Buenos Aires a dictar un seminario en el Doctorado en Ciencias Sociales de la FLACSO, invitado por

    Fundacin Osde y a presentar su ltimo libro El Reencantamiento del mundo(Dedalus editores) en

    la Alianza Francesa de Buenos Aires. Viaja con frecuencia a Sudamrica y a Oriente donde detect

    los "laboratorios de la posmodernidad" distinguibles por el culto a la creatividad. En los aos

    ochenta Maffesoli teoriz sobre las tribus urbanas y desde entonces su apellido va enlazado a

    cuanto agrupamiento juvenil ocurra en cualquier lugar del mundo. Da lo mismo si se trata de

    Tokio, Nueva York, Barcelona o Buenos Aires, las conductas tribales se repiten y hallan ecos a unlado y otro del mundo. "Nuestras sociedades van a ser en cierto modo una especie de mosaico de

    esas tribus y cada uno va a participar en varias de ellas. En funcin de mi gusto sexual, musical o

    religioso, voy a estar hoy ac, maana en otra tribu", define antes de volcarse a reflexionar sobre

    el contexto en que este fenmeno se desarrolla. Por eso, comienza esta entrevista bautizando y

    caracterizando la era en la que vivimos.

    -En Europa la intelligentsia poltica, periodstica y universitaria contina hablando de modernidad

    para describir el perodo en el que vivimos. Soy de los que creen que estamos en la

    posmodernidad dado que tenemos toda una serie de valores que ya no son los que imperaron

    durante la modernidad. Pero el problema es que siempre hay un desfasaje entre lo que se vive y loque se piensa y lo que se nombra. Hay que tener en cuenta que el nombre mismo de modernidad

    apareci recin en 1848: fue Charles Baudelaire justamente quien lo utiliz para nombrar lo que

    estaba ocurriendo. Hasta entonces, solamente se hablaba de posmedievalismo: lo que vena

    despus de la Edad Media. Y no es sino hasta la mitad del siglo XIX que va a empezar a hablarse de

    modernidad para nombrar lo que se viva. Creo que estamos ms o menos en la misma situacin.

    Es falso hablar de modernidad. Lo nico que tenemos es el trmino posmodernidad para decir lo

    que est en juego. Y recin ms adelante tal vez en 2050 o lo que fuere, se podr encontrar el

    trmino que caracterice lo que vivimos ahora. Quiere decir que posmodernidad es un trmino

    provisorio para decir que hemos superado la modernidad.

    -Qu caractersticas encuentra en la posmodernidad que la diferencian de la modernidad?

    -Hay tres grandes valores modernos: el trabajo que se convierte en el imperativo esencial,

    aquello a travs de lo cual hay una realizacin de cada individuo. Segundo, la razn como nico

    elemento que caracteriza tanto al individuo como a la sociedad. Y tercero, el futuro: la fe en el

    porvenir. Tenemos ah, los pivotes modernos que luego se encontrarn en la educacin, en lo

    social, en la economa, como lo mostr Michel Foucault, en todas las instituciones que se elaboran

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    en el siglo XIX. Este es el aspecto de la sociedad oficiosa, identificable en las generaciones jvenes

    que ya no se reconocen en la sociedad oficial. Ahora bien, esa sociedad oficiosa, que yo llamo

    posmodernidad ya no gira en torno del trabajo sino de la creacin: hacer de la propia vida una

    obra de arte, poner el acento en lo cualitativo de la existencia, la dimensin un poco hedonista. En

    segundo lugar, ya no la razn como simple vector por el cual uno se piensa a s mismo y la

    sociedad tambin, sino la imaginacin, lo imaginario y en tercer lugar, el presente dado que en

    trminos de temporalidad ya no se vive ms el futuro, el carpe diem, dira incluso: presente-smo.

    Eso es, dicho de una manera muy simple: lo que se abandonatrabajo razn futuro que es oficial,

    en las instituciones oficiales. Y despus, el gran elemento de la posmodernidad con su dimensin,

    una vez ms, de creacin, de imaginacin, de presente, que sera un poco la napa fretica de la

    sociedad actualmente.

    -Una vez dijo que Amrica Latina era el laboratorio de la posmodernidad, por qu lo cree?

    -Deca que Europa haba sido el laboratorio de la modernidad porque justamente se haba puesto

    el acento en esos valores que acabo de sealar. Lo que me impresiona de Amrica Latina y de

    Extremo Oriente Japn, Corea es que ah es donde la imaginacin es importante, es ah donde,

    en el fondo, se da no slo el trabajo sino la creacin. No simplemente el futuro, sino el presente. Y

    tambin en Amrica Latina es donde se estn elaborando mucho ms que en Europa estos

    nuevos valores. Por eso hablo del laboratorio de la posmodernidad. El problema es lo veo en

    Brasil adonde voy a menudo que los intelectuales estn muy marcados por los esquemas

    europeos: demasiado marxistas, demasiado estructuralistas. Transplantan a la realidad

    latinoamericana realidades de pensamiento que haban sido elaborados en Europa o en Amrica

    del Norte. Desgraciadamente la intelligentsia sigue determinada por los modelos estadounidenses

    y europeos.

    -Entonces, podemos pensar en el futuro? Existe el futuro?

    -Creo que no. Efectivamente, se puede caracterizar, comprender bien una civilizacin, una poca,

    en funcin del elemento temporal en el que esa poca pone el acento. Hay grandes pocas la

    Edad Media, por ejemplo donde lo que se llamaban las grandes sociedades tradicionales

    tomaban el pasado como elemento temporal. Hay otros grandes momentos culturales para los

    cuales lo importante es el futuro. La modernidad es eso, proyectar: los maanas que cantan, la

    sociedad perfecta, el mito del progreso. El progresismo del siglo XIX es un buen ejemplo de esa

    proyeccin de la energa hacia el futuro. Y luego hay otras grandes civilizaciones para las cuales lo

    que importa es el presente. Aclaro que eso ha hecho una civilizacin como el Renacimiento, el

    Quattrocento en Italia, lo que se llama ese tiempo que fue el siglo III o IV de la era cristiana, lo quese conoce como la decadencia romana, de hecho, en ese perodo se elaboraban cantidades de

    cosas, pero lo importante era el presente. Y en mi opinin, entramos en otro de esos grandes

    lapsos de presente-smo. Es interesante ver volver esa idea hedonista, esa idea de carpe diem. O

    sea que, desde esta perspectiva, lo que est en gestacin actualmente, la gran tendencia, est

    focalizada en el presente; la idea misma de futuro ya no moviliza las energas. Un ejemplo: veo en

    Europa, y en Francia en particular, respecto de la gente de mi generacin, una desafeccin con

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    respecto a lo poltico. Lo poltico no funciona ms. Ni izquierda ni derecha. Yo digo "lo" poltico

    porque lo propio de lo poltico es proyectivo, est orientado hacia el futuro. Y estas jvenes

    generaciones no adhieren, no se identifican ms con los grandes valores futuristas. Se concentran

    en el presente.

    -Y cules son las consecuencias para una sociedad cuando no piensa en el futuro?

    -Justamente que no podemos imaginar que el futuro no sea el valor oficial, que no sea la

    temporalidad oficial porque toda nuestra concepcin de la sociedad, de las instituciones se hizo en

    proyeccin hacia la bsqueda de la perfeccin futura. Hubo otros perodos histricos en los cuales

    la energa lo digo de una manera un poco ms sofisticada no estaba tendida hacia afuera

    extensiva sino que tenda hacia adentro intensiva. Es la intensidad del instante. Entonces ya no

    se busca la eternidad en el paraso celestial, en el paraso terrestre sino que se buscar la

    eternidad en el buen momento, la buena ocasin, la oportunidad lo que vivo en el presente,

    comiendo, bebiendo, bailando es el carpe diem. En esta joven generacin me sorprende esa

    especie de intensidad del momento. No tiene ganas de hacer proyectos de vida, proyectos

    polticos, econmicos pero incluso proyectos de vida. Hay circunstancias en que la civilizacin se

    proyecta; hay otras ocasiones en que la civilizacin vira al presente. La temporalidad de la

    posmodernidad es el presente.

    -Ha dicho que en Francia los jvenes no adhieren a la izquierda ni a la derecha, tampoco

    simpatizan con otras expresiones polticas? Son apolticos?

    -En primer lugar, hay que sealar que la separacin izquierda derecha ya no es muy pertinente. En

    los sesenta se poda reconocer de inmediato cuando alguien hablaba si era de izquierda o de

    derecha. Ahora, en las mismas personas, hay un poco de izquierda, de derecha, de ecologa. En

    segundo lugar, lo poltico est saturado en las generaciones nuevas. Ya no existe ese compromisopoltico para la realizacin de una sociedad futura sea revolucionaria, conservadora o reformista.

    Todava hay jvenes que entran en los partidos polticos, pero es una minora pequea. Eso no

    quiere decir que no haya regularmente formas de rebelda, de rebelin, pero son explosiones

    espontneas que van a surgir en un momento dado sin que se inscriban en un programa. Son ms

    bien explosiones de humor: antiglobalistas, ecologistas, contra la cumbre del G-20, contra la

    cumbre del G-8. A veces muy violentas, brutales, sangrientas, pero que no se inscriben en una

    perspectiva poltica. Hay rebelin, hay revuelta, pero no es programada ni programtica.

    -Como las revueltas en la periferia de Pars...

    -Por ejemplo. Hasta los partidos polticos les tienen miedo a esas rebeliones. Aun los de izquierda.

    Incluso hay obreros no jvenes que para defender el trabajo en una fbrica emprenden

    acciones muy violentas: amenazan con hacer volar la planta o cosas por el estilo. La lgica sindical

    es huelga, negociacin, pero estas expresiones sealadas son muy fuertes y violentas.

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