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INSTITUTO TECNOLÓGICO DE CD. JUÁREZ
INGENIERÍA INDUSTRIAL EAD
MATERIA: INGENIERIA DE SISTEMAS
Reporte de lectura 4
ALUMNO: LUIS ENRIQUE GALAVIZ MAGALLANES 11110220
MAESTRO: ING. DIANA GABRIELA GARCÍA ARRIETA
FECHA: 16 DE MARZO DEL 2014
CUARTA PARTE: PROTOTIPOS
Los prototipos son esenciales para descubrir y resolver los problemas que
se interponen entre una idea y su plena implementación. La innovación
significativa no se logra hablando de nuevas ideas: hay que construir y probar
prototipos. Así mismo, la mayoría de las empresas tienden a buscar una apertura
en sus ideas sin importar quien haga la aportación, sino si es buena o no;
involucrándose cada vez más cada uno de los integrantes de la organización,
cultivando una visión compartida basada en el interés compartido, dado que todos
van a buscar lo mejor para ellos y por añadidura el de la empresa.
Cabe mencionar que la apertura está conformada por dos partes:
1) participativa y 2) reflexiva. La primera consiste en darnos la oportunidad de
participar, mientras que la segunda se debe a la necesidad de examinar nuestros
propios pensamientos. Un aspecto que esta estrechamente ligado con la apertura
es el pensamiento sistémico. Dado que toda "respuesta" es a lo sumo una
aproximación, siempre sometida al perfeccionamiento, nunca definitiva. Podemos
afinar nuestra capacidad racional para resolver problemas, y usar esa capacidad
del mejor modo posible, aun reconociendo que nunca será suficiente conservando
siempre el espíritu de apertura y libertad.
Mientras que el “Localismo” significa que las decisiones descienden por la
Jerarquía: el diseño de unidades donde, en la mayor medida posible, los directivos
locales afrontan los problemas y dilemas propios del crecimiento y sostén de una
empresa. Localismo significa liberar el compromiso, dando a la gente libertad de
actuar, poner a prueba sus propias ideas y ser responsable de los resultados. Así
mismo significa desafíos nuevos y singulares. El mayor obstáculo del localismo la
ilusión de tener el control, aunque no necesariamente este controlada,
simplemente se queda como una percepción. Es de suma importancia que surja
un nuevo papel para el administrador, el cual debe ser investigador y diseñador
buscando siempre lo mejor para la empresa pero siempre con mucha tolerancia y
capacidad de olvidar los errores para continuar en busca de la mejora.
Una vez definidos los aspectos anteriores es momento de analizar el tiempo
de los ejecutivos debido a que se tienen diferentes conceptos y maneras sobre las
formas en las que se está aprendiendo o analizando ciertas cosas. Puede
realizarlo sentado, en calma, o de lo contrario caminando y analizando las cosas
en continuo movimiento.
Del mismo modo, es común encontrar un desequilibrio entre el trabajo y la
familia, dado que regularmente el primero exige sacrificio por parte de la persona,
dejando de lado la familia que le espera en casa. Es por ello que se debe buscar
un equilibrio entre estos dos aspectos de nuestra vida, debido a que si estamos
mal en uno, el otro ya no funcionara como se debe, afectando directamente a la
organización como tal y a su familia. Simplemente se da juega el papel de
individuo, el papel de la organización pero sin dejar atrás el aspecto personal.
Cuando se tienen en equilibrio la familia y el trabajo, es posible que la
persona esté más abierta al cambio y pueda aprovechar al máximo su intelecto.
Un punto importante es redescubrir el niño curioso que cada uno de nosotros
llevamos dentro, pero con el tiempo dejamos de alimentarlo. Es curioso que desde
niños tengamos talentos que nosotros mismos vamos cubriendo por el temor al
que dirán o que es lo que pasara de seguir alimentando ese espíritu sin saber que
son aspectos muy importantes para lograr el aprendizaje adecuado y saber que
las cosas siempre pueden mejorarse.
La nueva visión del liderazgo en las organizaciones inteligentes se centra
en tareas más sutiles e importantes. En una organización inteligente, los líderes
son diseñadores, mayordomos y maestros. Son responsables de construir
organizaciones donde la gente expande continuamente su aptitud para
comprender la complejidad, clarificar la visión y mejorar los modelos mentales
compartidos, es decir, son responsables de aprender.
Esta nueva perspectiva es vital. A fin de cuentas, las organizaciones
inteligentes serán sólo una "buena idea", una visión interesante pero lejana, a
menos que la gente tome la decisión de construirlas. Adoptar esta postura
constituye el primer acto de liderazgo, el principio para inspirar a la visión de las
organizaciones inteligentes. En ausencia de esta postura, las disciplinas del
aprendizaje serán meras compilaciones de herramientas y técnicas, medios para
resolver problemas y no para crear algo genuinamente nuevo.
La tensión creativa del líder no es angustia: eso es tensión psicológica. Un
líder establece el rumbo y el objetivo con su historia, su sentido del propósito, sus
valores y su visión. Su insobornable compromiso con la verdad y su afán de
indagar las fuerzas que se mueven por debajo de la realidad actual iluminan
constantemente las brechas entre la realidad y la visión. Los líderes generan y
administran esta tensión creativa en sí mismos y en toda una organización. Así es
como infunden energía a la organización. Esa es su función básica. Para eso
existen.
El dominio de la tensión creativa en una organización conduce a una visión
muy diferente de la realidad. La gente comienza a ver cada vez más aspectos de
la realidad como cosas que se pueden modificar. No se trata de una "creencia"
hueca a la cual todos se aferran en un esfuerzo para convencerse de que son
poderosos. Es una percepción serena, arraigada en la comprensión de que todos
los aspectos de la realidad están sujetos a nuestra influencia merced a la tensión
creativa.
En conclusión, tenemos que aprender a tener el dominio de nuestra tensión
creativa, comenzando por dejar actuar al pequeño niño que llevamos adentro y por
medio del cual nos cuestionamos todo lo que sucede a nuestro alrededor, pero
que es difícil asimilar o hacer caso a estas preguntas cuando ya estamos
ejerciendo un puesto o un lugar más avanzado en donde cada cosa parece
compleja, aunque en realidad no lo sea, impidiéndonos crecer y aprender.
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