Te di la vida, pero no puedo vivirla por ti… (a nuestros hijos)

Te di la vida, Te di la vida, pero no puedo pero no puedo vivirla por ti…vivirla por ti…

(a nuestros hijos)(a nuestros hijos)

Puedo y debo enseñarte muchas Puedo y debo enseñarte muchas cosas, pero no puedo obligarte a cosas, pero no puedo obligarte a

aprender.aprender.

Puedo y debo dirigirte, pero no Puedo y debo dirigirte, pero no responsabilizarme de lo que haces.responsabilizarme de lo que haces.

Puedo y debo instruirte en lo bueno y lo Puedo y debo instruirte en lo bueno y lo malo, pero no puedo decidir por ti.malo, pero no puedo decidir por ti.

Puedo y debo darte amor, pero no Puedo y debo darte amor, pero no puedo obligarte a aceptarlo.puedo obligarte a aceptarlo.

Puedo y debo enseñarte a compartir, pero no puedo forzarte a hacerlo.

Puedo y debo hablarte del respeto, pero no te puedo exigir que seas

respetuoso.

Puedo y debo aconsejarte sobre las buenas amistades, pero no puedo

escogértelas.

Puedo y debo exhortarte a la necesidad Puedo y debo exhortarte a la necesidad de metas altas, pero no puedo de metas altas, pero no puedo

alcanzarlas por ti.alcanzarlas por ti.

Puedo y debo hablarte de Jesús, Puedo y debo hablarte de Jesús, pero no puedo hacer que sea tu pero no puedo hacer que sea tu

Señor.Señor.

Puedo y debo explicarte como vivir, Puedo y debo explicarte como vivir, pero no puedo darte vida eterna.pero no puedo darte vida eterna.

A nosotros nos toca testimoniar con nuestras vidas cual es la

dirección a la verdad, al bien y a la belleza, estar siempre

disponibles y acercarles al camino.

Pero son ellos los que tienen que recorrerlo.

Y siempre tendremos a Nuestro Padre al que dirigir nuestras

oraciones para que los ayude y acompañe y para que Su ayuda

sea eficaz y logren sacar de sí mismos toda la riqueza que

atesoran.