View
185
Download
3
Category
Preview:
DESCRIPTION
Se plantea una triada: comunicación, educación y pedagogía. En donde se analiza elementos que impactan a esta terna. No se trata de un discurso vacío, se invita a ir construyendo esta pedagogía comunicacional entre todos los interesados para irla contextualizando, diagnosticando, ampliando, analizando y aplicando a nuestro entrono educativo. Lo cual coadyuvará a nuestro desarrollo profesional y personal (al manejar elementos comunicativos).
Citation preview
Doctorado en Educación
HACIA UNA PEDAGOGÍA COMUNICACIONAL
Por Mtro. En C. O. Fernando A. Granados Hernández
Invierno de 2013.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 1
Doctorado en Educación
Índice
Resumen 3
Introducción 3
El sentido de la educación 5
Educación y pedagogía 9
Educación y comunicación 15
Comunicación grupal en las organizaciones educativas 22
Educación y medios de comunicación 25
Las NTIC en la educación 31
Interacción entre personas por medio de las NTIC 34
Una educación para los medios de comunicación 36
Educación y poder 38
Conclusiones 39
Fuentes 43
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 2
Doctorado en Educación
HACIA UNA PEDAGOGÍA COMUNICACIONAL
Es muy difícil aprender de alguien con quien poco me comunico,
mal me comunico o no me comunico.Wittgenstein
Resumen:
Indudablemente tanto el termino educación como pedagogía en su devenir han
resultado multisémicos, y en ocasiones hasta paradójicos, y así continúan. Lo
cual nos ha llevado a un lenguaje que nos puede hacer creer que estamos
hablando de algo cuando ya no estamos hablando de nada; lo que Wittgenstein
llama “las palabras de vacaciones”, las palabras que ya no significan nada. Por
lo que se considera que: i) toda propuesta de mejora debe partir de una
reflexión holística del contexto particular en donde se produce el hecho
educativo y, ii) que la educación, la pedagogía y la comunicación conforman
una triada inseparable.
Introducción.
La información recabada a través del instrumento de diagnóstico propuesto, se
orienta a procesos de cambio a realizarse a nivel directivo. Razón por la que
abordaré el tema desde la perspectiva de docente que soy, tomando como eje
central la comunicación, la cual es mi materia de trabajo, mi área de dominio y
de interés.
De manera constante se está reiniciando el proceso educativo en la
sociedad, sin esperanza de acabarlo, porque con cada hombre que nace, hay
que iniciar de nueva cuenta la labor educativa. Cuando se termina la educación
de cada sujeto, de manera paradójica, no significa que ya no tenga más que
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 3
Doctorado en Educación
aprender, sino que se le han dado medios e indicado formas para continuar
aprendiendo. Sin embargo, salvo honrosas excepciones, no se le enseña a
interactuar, a comunicarse con sus semejantes.
Como hecho social que es, en todo acto educativo estarán presentes
seres humanos, sea en la interacción directa o a través de mediaciones
discursivas o instrumentales. Es posible que se den actos de inter-aprendizaje,
de reconocimiento de diferencias, de cooperación, y de amistad entre otros, o
bien, de violencia, de humillación, de mofa, o de maltrato
Dentro del hecho educativo, se construye un cierto tipo de persona, ya
sea desde el aprendizaje o la enseñanza, incorporado saberes, apropiándose
de sí mismo y del mundo. Esto lo hace desde una relación humana rica en
comunicación, o bien a partir del ejercicio de una actitud violenta que ejerce o
se le ejerce de manera abierta o sutil.
Pero, la persona se construye a sí misma, no sólo a través de
conocimientos. Lo hace por medio del arte, la acción lúdica, y la interacción con
sus semejantes, entre otros. Las interacciones presentes tienen que ver con el
pasado y el futuro, se relacionan con la comunicación con el propio ser, con lo
comunicacional.
La esencia de la relación pedagógica es una relación entre seres que
interactúan, que se comunican, que se construyen en la interlocución. Por lo
que hablar de educación, siempre será referir alguna relación con otros, por lo
que invariablemente entraremos al campo de la comunicación humana. Como
seres de relación que somos, siempre entre y con los otros, no es factible
apartar del hecho educativo nuestra necesidad y capacidad de comunicarnos
(Prieto, 1999).
Y es a partir de esta necesidad de comunicarnos, que no se puede
negar dentro del hecho educativo, que gira la presente propuesta de cambio
educativo. No se reinventa nada, ni se sugiere algo espectacular, tan sólo se
plantea una reflexión, además de algunos recursos o acciones para su
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 4
Doctorado en Educación
implantación desde una humilde posición académica crítica. Finalmente
conforme a Fullat (1991: 9), la pedagogía es una reflexión, y el conocimiento es
incitante a la acción, en este caso estimula la concienciación.
El sentido de la educación
Para hablar de comunicación en la educación, primero habrá que establecer el
sentido de esta última, lo cual nos centra en el campo de la pedagogía. Mas al
tratar de encontrar el sentido de la educación, se hará buscando un sentido
teleológico, por lo que no se referirá a ningún nivel específico, ni a ninguna
circunstancia en que se produzca.
Bien para encontrar el sentido de la educación, centrémonos en las
preguntas siguientes: ¿Es correcto formular programas educativos sin
considerar siquiera como una primera instancia quienes somos como especie,
y a dónde deseamos llegar como nación independiente? ¿Tiene sentido centrar
la atención de manera preponderante en el proceso de aprender o enseñar, y
no atender tanto las consecuencias como el contenido de lo que se aprende o
enseña?
Como raza humana, autodenominada racional, la principal motivación
que debe alentar la educación es preservar la vida, y sólo existe una forma de
lograrlo: cuidar la tierra, el agua, las especies tanto animales como vegetales;
pues a pesar de que hoy la población del mundo recibe más “educación”,
aumenta la devastación de la naturaleza y con ella se atenta contra nuestra
existencia. Por tanto, la educación debería plantearse antes que todo en
términos de supervivencia humana.
Ciertamente, no es la educación la que nos salvará, sino cierto tipo de
educación. Al reflexionar sobre educación inevitablemente no sólo se llega a su
función social y ética, sino a su más noble destino: enriquecer al hombre con
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 5
Doctorado en Educación
un cierto legado cultural. Y ¿no creó el hombre lo que hoy conocemos como
cultura para responder a los cambios que enfrenta?
La raza humana en su devenir histórico, ya sea de forma lenta y gradual,
o bien a través de saltos bruscos en momentos puntuales, ha experimentado
evoluciones biológicas que lo ayudan a adaptarse a su entorno físico. Pero, no
únicamente ha esperado a que la naturaleza le brinde las herramientas
necesarias para sobrevivir. También, el hombre, se ha dado a la tarea de
generar una cultura que además de apoyarlo en su sobrevivencia, lo ha
ayudado en su adaptación social. De esta manera, tanto la cultura, como la
educación (que es parte de la cultura), no pueden conducir al hombre a su
auto-destrucción.
Sin meditarlo, la sociedad actual en su deseo de obtener comida rápida
y sin esfuerzo, se ha macdonalizando sin pensar siquiera que se trata de
alimento “chatarra”, es decir casi sin valor alimenticio y si lleno de grasa. Este
concepto, creado por George Ritzer en su obra La McDonalización de la
sociedad, ha desviado al ser humano de su cauce normal evolutivo, al producir
sociedades obesas, llegando al extremo de que un hombre pese 300 Kg. Si no
respetamos nuestro propio cuerpo, menos lo haremos con el planeta.
De manera irreflexiva, este concepto de macdonalización se ha llevado
al campo educativo, ofreciendo educación “chatarra”, rápida y casi sin esfuerzo.
Por lo que la estupidez no encuentra límites. A diario se destruyen 300 Km2 de
selva tropical, 168 Km2 se convierten en desiertos como resultado de la
sobrepoblación y el mal manejo de los recursos. Desaparece entre cuarenta y
cien especies, sin que nadie sepa con exactitud cuántas son, y sin que a
muchos les preocupe este hecho (Sánchez, 2006).
El día de hoy la población humana se incrementará en doscientas
cincuenta mil personas. También le agregaremos a la atmósfera dos mil
setecientas toneladas de clorofluorocarbonos y quince millones de toneladas
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 6
Doctorado en Educación
de carbón. Con lo que esta noche la Tierra estará un poco más caliente, y sus
aguas serán más ácidas. Y como si fuera poco todo este escenario de
destrucción, a diario se ocasionan conflictos bélicos. En nuestro país mueren
más personas por actos de violencia que en otros países por causa de guerra.
Lo triste de esto, es que no es obra de gente ignorante, es de personas
con licenciaturas, y posgrados. Por lo que surge la siguiente pregunta obligada:
¿Qué estuvo mal en su educación? ¿Se puso mayor énfasis en las teorías que
en los valores? ¿En los conceptos, más que en los seres humanos? ¿En la
abstracción antes que en la concientización? ¿En las respuestas y no en las
preguntas? ¿En la eficiencia y la ideología, mas no en la conciencia? ¿En las
finanzas más que en la ecología? (Sánchez, 2006).
Poseemos conocimientos sin precedentes sobre el mundo físico,
biológico, psicológico, sociológico. La ciencia ha hecho reinar, cada vez más, a
los métodos de verificación empírica y lógica. Y sin embrago, el error, la
ignorancia, la ceguera, progresan, por todas partes, al mismo tiempo que
nuestros conocimientos. Las amenazas más graves que enfrenta la humanidad
están ligadas al progreso ciego e incontrolado del conocimiento (armas
termonucleares, manipulaciones de todo orden, desarreglos ecológicos, etc.
Nos es necesaria una toma de conciencia radical (Morin, 2004: 27).
Hasta hoy, la educación no ha garantizado la decencia, la prudencia o la
sabiduría requerida para garantizar nuestra existencia. Mientras los medios
producen la cretinización vulgar, la Universidad genera la cretinización de alto
nivel. Realmente, no necesitamos más educación de este tipo, porque sólo
agrava nuestros problemas, aunque obviamente, esto no es una razón para
preferir la ignorancia.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 7
Doctorado en Educación
Se vive bajo el imperio de los principios de disyunción, reducción y
abstracción, lo que en su conjunto Morin (2004: 27), llama “paradigma de
simplificación. La educación en vez de ser dimensionada en todo tipo de datos
numéricos, puede empezar a medirse en términos de decencia y supervivencia
humana. Por lo que se reitera que, no es la educación lo que nos rescatará,
sino cierto tipo de educación.
El sentido de la educación, de esta manera, es el de apoyar al ser
humano en su sobrevivencia, en su construcción o crecimiento dentro de un
grupo social. Así, la labor educativa se puede enfocar a la formación de
personas íntegras, seguras, con valores, que puedan tomar decisiones sobre
su vida y sobre sus entornos; que enseñe cómo vivir y convivir, a crear
relaciones de respeto. En una palabra, la educación debe consistir
fundamentalmente en un espacio de convivencia en el cual alumnos y
profesores conformen un lugar de encuentro, de acogida y respeto mutuo.
Deberá promover la educación, antes que nada, el desarrollo de
aptitudes para sumir responsabilidades tanto individuales como sociales,
deberá hacer aparecer las múltiples posibilidades en un individuo o en un grupo
social. Para que exista una auténtica educación, tanto educadores como
educandos tienen que ponerse en situación de comunicación, cada uno debe ir
al encuentro del otro. Por lo que, la comunicación y la educación están
profundamente ligadas. Ambas se complementan y se nutren, sin
comunicación no hay educación (Gutiérrez, 1975), así es de simple.
Quizá esto se escuche demasiado ambicioso, pero sólo en estos
términos es posible dar un verdadero sentido a la educación. Las ideas
posmodernas nos alertan sobre la generalización de sentidos, pero la
educación no puede existir sin sentido, pues en sus múltiples facetas se halla
en crisis.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 8
Doctorado en Educación
Desafortunadamente, no es posible restaurar el daño ocasionado al
planeta, pero se puede conservar lo que tenemos, y es posible ofrecer una
educación con sentido crítico, sustentable y humano a las generaciones
actuales y futuras. Y si desaparecemos del planeta ¿qué sentido tendrá todo lo
demás? Para Platón cualquier tendencia a la creación es la búsqueda de la
inmortalidad de lo creado (eros).
Educación y pedagogía
Algunos autores derivan, educación, del latín educare, que señala la acción de
formar, instruir, guiar; nótese que todas las acciones señaladas son realizadas
por el docente. Tal vez también de esta derivación se origine la teoría de la
Escuela Tradicional que subraya un papel altamente pasivo del educando.
Durkheim (1976), ya hizo notar la dimensión fáctica del proceso educativo al
plantear que éste no era más que la acción que las generaciones adultas
ejercían sobre de las nuevas.
Para Fermoso (2002: 137), “la educación es un proceso exclusivamente
humano, intencional, intercomunicativo y espiritual, en virtud del cual se
realizan con mayor plenitud la instrucción, la personalización y la socialización
del hombre”. Fullat (1991: 9), refiere que la educación es un subsistema de la
sociedad, reflejando necesariamente sus estructuras más típicas; al mismo
tiempo, sin embargo, puede ejercer una acción crítica de la sociedad”. La
UNESCO (1973), considera que la educación constituye un indispensable
analizador de las contradicciones que padecen las sociedades modernas.
Realizando un análisis lógico O`Connor (1971: 19), establece que, “los
fines de la educación son proporcionar a hombres y mujeres un mínimo de
habilidades que necesitan…; proporcionarles una capacitación laboral que les
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 9
Doctorado en Educación
permita subvenir sus necesidades; despertar interés y gusto por el
conocimiento; hacerlos capaces de criticar; ponerlos en contacto con las
realizaciones culturales y morales de la humanidad y enseñarles a apreciarlas”.
Díaz Fabelo en Fermoso (2002: 129), ha verificado recuentos
estadísticos para deducir cuáles son las constantes más repetidas en las 133
definiciones por él revisadas, encontrando 195 conceptos diferentes, pero de
todas ellas sólo 9 se repiten con una frecuencia de cinco o superior de 5.
Únicamente tres despuntan: desarrollo (14 frecuencias), perfección (13
frecuencias) y formación (8 frecuencias); la interpretación más obvia de este
análisis son tres elementos fundamentales: la espontaneidad evolutiva, la
finalidad perfectiva racionalmente prefijada y la integración holística de cuanto
advierte al hombre en las etapas evolutivas.
Se ha concluido de otros análisis similares a los de Díaz Fabelo, también
en Fermoso (2002: 129), que la educación es intencional y planeada,
distinguiéndose del proceso de maduración y de los influjos ambientales
azarosos.
Para entender la pedagogía es necesario un desvío histórico y recordar
que la escuela fue creada hace varios miles de años en el antiguo Egipto. La
pedagogía en cambio no tiene más de 25 siglos, nos viene de la Grecia
antigua. Por lo que la pedagogía es una modalidad tardía. El hombre aprende y
sigue haciéndolo por otras vías: la impregnación, la imitación, es decir
modalidades que se hacen sin intención, y sin técnicas en particular (Beillerot,
1998:50). ¿Se puede continuar trabajando de esta manera en la actualidad?
Ciertamente, pedagogía proviene del griego pais, que significa niño y
ágo, conducir, educar. De nuevo la acción recae sobre el docente. En la
antigua Grecia, el paidagogos no era el maestro, sino el esclavo que conducía
a los niños al maestro encargado de su enseñanza. El término pedagogía
empieza a ser utilizado a finales del siglo XVI y aparece en la obra de Juan
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 10
Doctorado en Educación
Clarín La institución cristiana (1536). En el 1762 fue aceptado por la Academia
Francesa.
Como puede observarse los términos manejados resultan no sólo
polisémicos, sino hasta paradójicos. Lo cual nos ha llevado a un lenguaje que
nos puede hacer creer que estamos hablando de algo cuando ya no estamos
diciendo nada; es lo que Wittgenstein llamó “las palabras de vacaciones”, las
palabras que ya no significan nada (Krebs, 2008).
Esta situación multisemica ya la refiere Fullat (1991: 10), “El lenguaje en
torno al hecho educativo, tanto en el plano coloquial como en el plano de los
entendidos padece de imprecisión”... “El lenguaje educativo se halla todavía
muy mal codificado. No es posible la comprensión de datos educativos si no se
perfila con anterioridad el habla que se refiere a ellos”... “se debe codificar el
lenguaje educativo, pese a que sea a largo plazo”...”El esfuerzo por la
aclaración semántica nos coloca en el camino de la reflexión sobre la esfera
educacional”. Por tanto, se establecerá los significados a manejar en el
presente trabajo.
Fullat (1991: 11), señala que, “la educación es una práctica, una acción,
una actividad social; mientras la pedagogía es una reflexión, una teorización,
un conocimiento o una toma de conciencia”. Para Dewey la pedagogía es
“filosofía aplicada” (Agazzi, 1997: 418). Así, Fullat (1991: 19), nos dice, “quien
sabe mucho sobre educación es un pedagogo, y el que posee el arte de
educar es un educador. Pero también habrá que considerar como ya se dijo
anteriormente, que el conocimiento es incitante a la acción, sin llegar a
confundir pedagogía con educación.
El término “pedagogía”, con frecuencia ha sido mal entendido. Sin
embargo, con Fullat y Dewey se renueva el sentido de una actividad esencial y
de un cuerpo de pensamiento en evolución y de proceso de formalización. Por
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 11
Doctorado en Educación
lo que a lo largo de este ensayo se adoptan las concepciones de estos autores
para educación y pedagogía reconociendo su relación implícita, así como su
importancia. Sin embargo, en la filosofía aplicada que refiere Dewey, se resalta
el hecho marcado por (Beillerot, 1998:50), de que no es un acto totalmente
libre, pues tiene su propia finalidad: hacer que la práctica educativa sea más
coherente al objetivo preestablecido.
También a lo largo de este trabajo, se mantendrá el concepto de
Beillerot (1998: 53, 56), de que la didáctica parte de un saber específico a
enseñar, por lo que no se hablará de didáctica general. Para este autor la
pedagogía no puede transmitirse, pues no se comunica la experiencia, tan sólo
el dogma. La transcripción de normas y prescripciones quizá sea concebible en
una sociedad tradicional, mas ya no corresponde a una que aspire a otra
realidad.
Con respecto a los antiguos estudios de la pedagogía, es probable que
la didáctica haya aportado conocimientos más afinados y exactos; pero
también es probable que esto haya sido reduciendo lo real, para analizarlo,
como todo itinerario que se pretende científico. De ahí el título de Claudine
Blanchard Laville “Más allá del sujeto didáctico”, porque los didactas no se
interesaron mucho por las relaciones afectivas y situacionales del sujeto
escolar. Los didactas son muy competentes sobre los problemas de los
saberes, pero no entienden mucho sobre los fenómenos que pueden inhibir a
un niño el aprender, que no tienen forzosamente que ver con la cognición
(Beillerot, 1998: 54).
Se puede enseñar mejor, o aprender mejor, gracias a los resultados de
las investigaciones. Pero de investigaciones que contextualicen de manera
integral la realidad del sujeto didáctico, de lo contrario se trata de un discurso
vacío. Si un sistema de enseñanza no funciona, o se niegan los hechos, o se
buscan las causas en circunstancias sociales, pero no se cuestiona el sistema.
¿En dónde dejan lo científico?
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 12
Doctorado en Educación
Para actuar, para tener una actitud, un comportamiento, para reaccionar
frente a lo real estamos obligados a convocar y a poner en práctica saberes
muy diferentes, desde el punto de vista de su naturaleza y su calidad. El hacer,
el actuar, o la acción activan siempre tres tipos de fenómenos: i)
conocimientos, ii) finalidades y objetivos, iii) valores y ética (Beillerot, 1998: 59-
60).
Existen corrientes de la pedagogía que presupone teoría y práctica
(praxis) conjunta, es la pedagogía crítica, en la cual, el maestro trabaja para
guiar a los estudiantes a cuestionar las teorías y las prácticas consideradas
como represivas, incluyendo aquellas que se dan en la propia escuela,
animando a generar respuestas liberadoras tanto a nivel individual como
colectivo, las cuales ocasionen cambios en sus actuales condiciones de vida, y
con ello se alienta a cambiar la naturaleza opresiva de la sociedad.
Peter McLaren es internacionalmente reconocido como uno de los
fundadores de la pedagogía crítica. Dentro de esta pedagogía crítica se
encuentra, la pedagogía de la liberación, que es un movimiento educativo cuyo
principal representante es el pedagogo brasileño Paulo Freire (1921-1997). En
ella se pretende, mediante el análisis crítico y reflexivo del mundo circundante,
dar un proceso de concienciación de la condición social del individuo. Critica lo
que Freire (1972) denominó la educación bancaria, es decir la que nos
aprisiona desde nuestros inicios en la educación y limita la posibilidad de crear
nuestros propios conocimientos, fomentando la reproducción, sin análisis, ni
comprensión de los temas que se nos están enseñando.
Aspectos relevantes de la Pedagogía de la liberación son, el énfasis en
el diálogo más que en lo curricular, es dialógica basada en contenidos
culturales preseleccionados, por lo que emplea la pedagogía de la pregunta.
Destaca la importancia de la praxis reflexiva en la actividad educativa, la
concienciación del oprimido a través de la educación. Con lo que la Pedagogía
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 13
Doctorado en Educación
del oprimido (Freire, 1972), pasa a ser la pedagogía de los hombres en proceso
de permanente liberación.
Para Freire es necesario desarrollar una pedagogía de la pregunta,
siempre estamos escuchando una pedagogía de la respuesta, los profesores
contestan a preguntas que los alumnos no han hecho. La alfabetización implica
una comprensión crítica de la realidad social, política y económica en la que
está el alfabetizado, alfabetizarse no es aprender a repetir palabras, sino a
decir la palabra propia. Enseñar exige respeto a los saberes de los educandos
y a su autonomía, saber escuchar, la incorporación de las palabras por el
ejemplo, seguridad, capacidad profesional y generosidad. Nadie es, si se
prohíbe que otros sean.
También Freire expresa que, decir la palabra verdadera es transformar
al mundo, y en la medida en que el hombre transforma al mundo sufre los
efectos de su propia transformación. Decir que los hombres son personas y
como personas son libres y no hacer nada para lograr concretamente que esta
afirmación sea objetiva, es una farsa. Piensa que el estudio no es un acto de
consumir ideas, sino de crearlas y recrearlas. Que sólo educadores autoritarios
niegan la solidaridad entre el acto de educar y el acto de ser educados por los
educandos, todos sabemos algo, todos ignoramos algo, por eso, siempre
aprendemos.
Refiere Freire, que la cultura no es atributo exclusivo de la burguesía.
Los llamados "ignorantes" son hombres y mujeres cultos a los que se les ha
negado el derecho de expresarse y por ello son sometidos a vivir en una
"cultura del silencio". Y que la ciencia y la tecnología, en la sociedad
revolucionaria, deben estar al servicio de la liberación permanente de la
HUMANIZACIÓN del hombre.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 14
Doctorado en Educación
Inspirado en los trabajos de Bourdieu, Beillerot (1998:51), plantea que la
acción pedagógica, siempre discursiva, tiende siempre a modificar los
comportamientos, los afectos, las representaciones de los educandos, en un
sentido, con una orientación que está prevista con anterioridad, produciendo y
reproduciendo objetivos y valores; la acción pedagógica apunta a hacer adquirir
reglas, reduciéndola muchas veces a una norma, que permiten enfrentar
situaciones conocidas, que se reproducen, pero que también permiten tratar
problemas nuevos, desconocidos.
Por último, Beillerot admite que la acción reflexiva y discursiva de la
pedagogía apunta a hacer actuar. Por lo que los docentes y formadores no son
ni teóricos ni meros prácticos, sino mediadores al servicio de situaciones de
aprendizaje. La pedagogía para que sea contextualizada exige una reflexión
realizada desde nuestro lugar de trabajo, es decir partiendo de condiciones
reales.
Educación y comunicación
Desde que Platón recurriera al eros creador, en su obra El Banquete, para
explicar el proceso de conocimiento que dignifica al hombre en la medida que
fuese más próximo a la contemplación del mundo inteligible, la educación se ha
venido repitiendo como comunicación (Fermoso, 2002: 131). Hoy pensamos
muchos que la comunicación es indispensable en el acto educativo y que es la
base de la unidad educador-educando, docente-discente. Si el conocimiento no
fuera comunicable, hubiese tenido razón el sofista Gorgias respecto a que el
hombre es un islote perdido en el mundo incomunicado e incomunicable.
Gregory Bateson (1982), afirma que el concepto de comunicación
incluye todos los procesos a través de los cuales una persona influye en otra u
otras, lo que quiere decir que para él la comunicación, y no otra cosa, es lo que
hace posible las relaciones humanas. Como proceso interpersonal la
comunicación permite a los participantes expresar algo de sí mismos o de su
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 15
Doctorado en Educación
contexto por medio de signos verbales o no verbales, con la intención de influir
o afectar de algún modo sobre el interlocutor.
Ya desde los años cincuenta, los investigadores de la llamada “Escuela
de Palo Alto”, también conocida como “Colegio Invisible”, dieron a conocer su
propuesta de la “Nueva Comunicación”, en donde se pasa del modelo lineal de
Shannon y Weaver al modelo circular de la comunicación, enormemente
influido por las ideas de la cibernética de la que proviene el concepto de feed-
back o retroalimentación, concepto creado por Norbert Wiener en 1948. Con
este giro conceptual Bateson y Ruesch (1984) observan que, el concepto de
comunicación incluye todos los procesos a través de los cuales la gente se
influye mutuamente.
Con la introducción del concepto de feed back o retroalimentación, se
percibe la naturaleza dinámica de la comunicación, pues el escuchar y el hablar
se ejercitan de manera alterna o interactiva. Por lo que son intercambiados de
manera constante los roles entre emisor y receptor. Por su parte Bateson
formuló el concepto de cismogénesis, que explica la fuente de una división en
el seno de un sistema social; distingue entre una cismogénesis simétrica,
cuando los interactuantes responden con actitudes similares (presentes con
presentes, insultos con insultos) y una cismogénesis complementaria, en que
los interactuantes asumen papeles del tipo sadismo/masoquismo,
dominador/sumiso, exhibicionismo/voyerismo.
En términos generales, la interacción puede concebirse como la acción
recíproca entre dos o más agentes. Sin embargo, situándonos en un marco de
reflexión un tanto más complejo, interesa remarcar que, al margen de quién o
qué inicie el proceso de interacción, el resultado de ésta es siempre la
modificación de los estados iniciales de los participantes.
La propuesta de la Escuela de Palo Alto conocida, también, como
“Modelo orquestal de la comunicación”, en palabras de Yves Winkin (1982: 25),
queda de la siguiente manera: “el modelo orquestal (configura los mensajes
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 16
Doctorado en Educación
mediante la relación de los diversos canales comunicativos), de hecho, vuelve
a ver en la comunicación el fenómeno social que tan bien expresaba el primer
sentido de la palabra, tanto en francés como en inglés: la puesta en común, la
participación, la comunión”. Todo esto pone en evidencia que la comunicación,
antes que nada, es un sistema abierto de interacciones comunicativas, que
pueden calificarse como procesos sociales.
Con ello, los procesos de comunicación entre seres humanos pasan a
ocupar un lugar central para la comprensión de los fenómenos sociales. Todo
esto se relaciona con la concepción de la persona como un ser social, un ser
que sólo puede desarrollarse como tal a través de la comunicación con sus
semejantes. Por lo que podemos entender a la interacción de una manera más
amplia, es decir como la trama discursiva que permite la socialización del
sujeto por medio de sus actos dinámicos, su adaptación al entorno y la
comprensión de las acciones propias y ajenas.
Dentro de los procesos de comunicación, el emisor codifica el mensaje
en ciertos signos capaces de ser reconocidos por el receptor. Mediante la
decodificación de los distintos signos usados por el emisor, el receptor
pretende dar acceso a la estructura profunda del mensaje. Sin embargo, en el
acto de decodificar, filtra el mensaje. De esta manera, los elementos
simbólicos, susceptibles de ser dotados de un significado subjetivo por parte de
las personas implicadas en la acción de comunicar, son los que nos permiten
hablar de la interacción interpersonal.
Se pretende así, mostrar la visión subjetiva de la realidad que el emisor y
receptor mantienen. Pero esta aparente sencillez del proceso decodificador
queda anulada al considerar que el acceso a la realidad subjetiva y limitada del
emisor la efectúa el receptor a través de su propia subjetividad y limitación
perceptual, pues también aplica sus propios filtros selectivos de esa misma
realidad. También, habrá que considerar que, la estructura superficial del
emisor, única a la que tiene acceso el receptor, puede ser altamente ambigua y
que hasta las mismas palabras pueden indicar diversos significados. La tarea
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 17
Doctorado en Educación
de una decodificación acertada se encuentra en la práctica, plagada de
dificultades, pese a la sencillez de su conceptualización.
Watzlawick (1985: 97) explica, “una comunicación es siempre una
comunicación sobre uno mismo, sobre el modo en que uno se ve y ve la
relación, lo que debe ser confirmado por el otro. Ya que nos sentimos reales
tan sólo en la medida en que alguien con importancia para nosotros confirma o
ratifica nuestra propia imagen, y ya que tal ratificación tan sólo servirá al
propósito si es espontánea, únicamente un caso ideal de interrelación humana
puede estar libre de paradoja”.
Con todo, la persona humana tiene grandes posibilidades de
comunicación, indudablemente potenciadas por el desarrollo del lenguaje
verbal. Pero también presenta una serie de limitaciones que pueden coartar o
distorsionar el mensaje. Algunas de estas dificultades están íntimamente
ligadas al proceso cognoscitivo del ser humano pues posee filtros neurológicos
cuya función es la de no dejarnos acceder a todos los fenómenos físicos de la
naturaleza, por lo que nuestros sentidos trabajan dentro de ciertos límites de
percepción.
Además de los filtros neurológicos, como sujetos integrantes de un
grupo social determinado, encontramos en cada hombre, filtros culturales o
sociogenéticos diferentes. Los cuales se manifiestan como normas sociales,
valores, costumbres entre otras. Pero también están presentes los filtros
individuales. Si los filtros sociogenéticos hacen referencia al grupo social, los
filtros individuales refieren las representaciones que el ser humano realiza
basado en su propia historia individual. Así, el contenido de la comunicación
incluye tanto el aparato personal como el relacional o interpretativo (Marroquí,
1995: 10, 15).
Los filtros al ser interpretativos no solamente crean diferencias entre el
modelo representacional de la realidad y la realidad misma, sino que también
crean diferencias significativas en los seres humanos a través del carácter
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 18
Doctorado en Educación
individual de esos mismos modelos representativos. Por tanto, nos
encontramos, con una representación de la realidad, que no se adapta
totalmente a ella, como consecuencia de nuestros filtros.
Este proceso de filtración nos permite manejar una realidad que, de otro
modo, nos abrumaría. El problema se presenta, cuando nuestro modelo
representacional se hace tan subjetivo, tan inadecuado a esa misma realidad,
que la consiguiente distorsión imposibilita su utilización. Así se hace necesario
que nuestra guía representacional lo sea realmente (Bandler y Grinder, 1980).
Por otra parte, la comunicación interpersonal se puede dar en dos
planos, en uno explicativo y en otro de sentimiento. Por ejemplo, “me siento
decepcionado (plano de sentimiento), porque mi padre actúa egoístamente
impidiéndome acudir a la Universidad (plano explicativo). Sin embargo, el
emisor no manifiesta el mundo de su intimidad, sus sentimientos y sus razones
explicativas sin una motivación; lo hace en realidad por algo que constituye una
demanda, implícita o explícita, dirigida al receptor.
Toda comunicación trasmite un contenido, pero también define (o
propone) una relación. Si me dirijo a otra persona y le digo “Tráigame un café”,
estoy diciendo algo respecto al contenido (función referencial), a saber lo que
deviene del uso del verbo traer y lo que es aceptado como café, pero también
estoy proponiendo o afirmando una relación que me vincula con el otro: “Yo soy
quien te puede dar órdenes” (función conativa): “El aspecto conativo se refiere
a qué tipo de mensaje debe entenderse que es, y por ende, en última instancia,
a la relación entre los comunicantes”( Watzlawick, 1985: 52).
La definición de la relación es una información acerca de cómo debe
tomarse la información y, por lo tanto, es de un nivel lógico superior. Este nivel
de comunicación, pertenece al campo de la metacomunicación, es decir se
comunica acerca de la comunicación. Muchos conflictos humanos persistentes
devienen de no tomar en cuenta, o verse incapacitados de hacerlo, esta
estructura de niveles. En casos recurrentes los interactuantes tratan de resolver
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 19
Doctorado en Educación
en un nivel las discrepancias que existen en el otro, en muchos casos lo que se
discute permanentemente es la relación y no el contenido. Sin embargo, dado
que la variedad de tópicos de discusión es prácticamente inagotable, los
interactuantes tienen muchas dificultades para notar el carácter fijo e invariante
de su patrón de comunicación.
La capacidad para metacomunicarse en forma adecuada está también
íntimamente vinculada con el complejo problema concerniente a la percepción
del self y del otro. En toda comunicación, la persona da una definición de su
propio self, manifiesta “Así es como me veo”. Ante esto, el co-interactuante
puede dar una de tres posibles respuestas: i) Confirmación, El co-interactuante
puede confirmar la imagen del self que da la persona, lo que puede traducirse
como “Sí eres así”.
Este tipo de comunicaciones es una necesidad de cada agente, y afirma
la seguridad psicológica del sujeto; ii) Rechazo. El co-interactuante puede
rechazar la definición: “No, no eres así como dices”, rechazando la definición
de la relación y del self; 3) Desconfirmación. Esta tercera posibilidad es la más
desestabilizante: “la desconfirmación ya no se refiere a la verdad o falsedad -si
existen tales criterios- de la definición que la persona da de sí mismo, sino más
bien niega la realidad del sujeto como fuente de tal definición” ”( Watzlawick,
1985: 87). La traducción sería un enunciado del tipo “No existes”.
De esta manera, la comunicación posee una intencionalidad concreta,
de captarse se habrá dado un gran paso para comprender la totalidad del
mensaje, aun en sus contenidos implícitos. La dificultad se da en que la causa
del mensaje o demanda, no se formula explícitamente y por tanto habrá que
intuirla.
No obstante, la captación o comprensión de un mensaje no puede
restringirse a la mera percepción de su contenido verbal, sino que deberá
extenderse a la expresión no verbal que constituye su obligado
acompañamiento. El ser humano se expresa con todo su cuerpo y esa
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 20
Doctorado en Educación
expresión total debe ser percibida, pues con frecuencia, el contenido verbal
difiere del lenguaje corporal. Según Watzlawick, Beavin y Jackson (1971), es
imposible no comunicar, por lo que en un sistema dado, toda expresión verbal
o corporal, de un miembro tiene un valor de mensaje para los demás. Para la
Escuela de Palo Alto, comunicación y conducta son sinónimas.
El lenguaje verbal emplea las palabras, las cuales carecen de significado
en sí mismas, son las personas las que les confieren significado. En cambio, el
lenguaje no verbal posee un carácter analógico pues está constituido por
signos visuales, gestuales, auditivos entre otros, que guardan cierta relación o
semejanza con el objeto que representan; por ello es más universal, hasta el
punto de que, en ciertas situaciones, es el único vehículo válido de
comunicación entre personas de diferentes nacionalidades. Entre ambos
lenguajes existe una gran conexión y complementariedad, que les hace
mutuamente interdependientes.
Los lenguajes son formas digitales de comunicación, ya que implican la
utilización de códigos convencionales que implican una relación arbitraria entre
el mensaje (signo) y al contenido de la comunicación (significado). Las formas
analógicas de comunicación son aquellas en las cuales el mensaje resulta en
alguna manera parecido al contenido a trasmitir, es decir constituye una
analogía del mismo. Estos términos provienen de la ingeniería, la cual
considera a los formatos digitales como más precisos que los analógicos.
Llevando esto a la comunicación humana, resulta ser que los seres
humanos somos los únicos organismos que nos comunicamos al mismo tiempo
con ambos sistemas. El lenguaje es el mejor ejemplo de sistema de
comunicación digital. El comportamiento no verbal constituye formas de
comunicación analógica. Esta distinción no debe ser tomada en forma taxativa,
pues existen aspectos de la comunicación no verbal que están digitalizados,
como los ademanes.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 21
Doctorado en Educación
Ambos sistemas de comunicación son necesarios porque permiten
vehiculizar diferentes aspectos: “cabe suponer que el aspecto relativo al
contenido se trasmite en forma digital, mientras que el aspecto relativo a la
relación es de naturaleza predominantemente analógica” ( Watzlawick, 1985:
65).
La existencia de estos dos tipos de comunicación implica la posibilidad
de problemas de traducción de un nivel a otro. Bateson (1982), estudió al
efecto la comunicación entre los animales (solamente analógica). Explica al
respecto que cuando uno abre la heladera y el gato se acerca y se frota entre
mis piernas, es incorrecto traducir esta conducta como el mensaje “quiero
leche”. El animal en realidad, con su comunicación analógica, está invocando
un tipo específico de relación: “Sé mi madre”, ya que este tipo de conducta se
observa entre los gatos pequeños en relación a sus progenitores, nunca entre
gatos adultos.
El material de los mensajes analógicos es sumamente antitético; se
presta a interpretaciones digitales muy distintas y a menudo incompatibles. Así,
no sólo le resulta difícil al emisor verbalizar sus propias comunicaciones
analógicas, sino que, si surge una controversia interpersonal en cuanto al
significado de una comunicación analógica particular, es probable que
cualquiera de los dos participantes introduzca, en el proceso de traducción al
modo digital, la clase de digitalización que concuerda con su imagen de la
naturaleza de la relación ( Watzlawick, 1985: 98).
Para concluir este apartado, nada mejor que citar uno de los pasajes
iniciales del libro de Bateson y Ruesch (1984: 13), donde afirman que “ la
comunicación es la matriz en la que se encajan todas las actividades
humanas”. De ahí que este enfoque inaugure una forma de comprender la
comunicación mucho más amplia, ubicando la reflexión sobre la comunicación
en un marco holístico, como fundamento de toda actividad humana, incluyendo
obviamente la educación.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 22
Doctorado en Educación
Cuando una organización no cuenta con una adecuada comunicación,
simplemente se verá imposibilitada para alcanzar sus objetivos, visión, misión y
con ello no podrá constituirse como una organización de primer nivel; además
de apartarse del sendero del éxito y dejar con una sensación de fracaso y
minusvalía a todos sus integrantes por igual. Partiendo de esta idea, el
presente ensayo trata de mostrar algunas vías para mejorar la comunicación
grupal dentro del centro educativo.
Comunicación grupal en las organizaciones educativas
Si la organización ha hecho bien el reclutamiento y selección de personal y ha
establecido las bases para generar una buena cultura, no cabe duda que todas
las personas reclutadas que se integran a ella van a encontrar un ambiente
agradable y sobre todo un clima organizacional excepcional, ya que de alguna
manera es lo que ellos esperaban encontrar y procuran hacer bien su trabajo.
Esta situación ideal resulta prácticamente inexistente al interior de un
centro educativo, el cual podría estar conformado con los mejores
profesionales. Sin embargo, dentro del sistema educativo impera la cultura del
compadrazgo, la simulación y hasta la de la corrupción, situación que no se
atenderá en este ensayo, tan sólo se menciona como parte del contexto
anómico prevaleciente en cierto número de los planteles educativos.
Pese a la situación planteada en el párrafo anterior, que no favorece el
buen desempeño de los centros educativos, los que laboramos en ellos
debemos tener la conciencia, y la disposición de esforzarnos por convertir
nuestra escuela en una organización de primer nivel educativo, o bien aceptar
el fracaso profesional y hundirnos en la impotencia.
Lo primero a considerar es que hacia el interior de la escuela se reúne
un grupo de alumnos con deseos de superarse, de aprender, para conseguir un
empleo o bien para promoverse al siguiente nivel educativo. Por tanto, en los
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 23
Doctorado en Educación
profesionales de la educación existe el compromiso, el gusto y la entrega
necesaria para apoyar a los estudiantes en esos anhelos.
Por cierto, la tarea no resulta sencilla, pero en la medida en que se
interrelacione correctamente todo el personal para alcanzar los objetivos de la
institución, se allanará el camino para alcanzar la calidad, mejora continua,
reingeniería o innovación. Efectivamente, la interacción es el sustento
adecuado del trabajo en equipo o trabajo grupal como se prefiera llamar.
Se trata de mejorar la confianza del individuo, mediante una
comunicación segura y eficiente, donde la persona trata y se le ayuda a
relacionarse con sus compañeros de trabajo, corrigiendo sus deficiencias y
abriendo un canal de comunicación. Todo esto impactando su bienestar dentro
del ámbito laboral a través de la implementación de valores como el respeto,
congruencia, ganar-ganar, y alegría por el trabajo.
Pero la comunicación debe fluir en todas direcciones, por lo que la
organización mantendrá informado al personal, dará a conocer el ambiente
laboral, buscará ideas donde las personas sientan ese ambiente laboral, como
informarles cuando la escuela está pasando situaciones difíciles y se solicitan
ideas de mejora, cuando tiene eventos para disfrutar, cuando desarrolla
eventos internos para mostrar el porqué de las cosas. Es allí donde la escuela
en realidad establece las bases para tener una buena comunicación y ambiente
de trabajo agradable.
Bien cómo podemos notar son muchas las razones por las cuales una
organización debe tener en cuenta que el alcanzar el éxito depende de una
buena comunicación; aprender a desarrollar esta herramienta no sólo requiere
de leer libros, si no de conjuntar experiencias y esfuerzos de las personas que
integran la organización, para que en esta medida sea posible alcanzar los
objetivos de nuestra organización, y con ellos nuestro éxito profesional.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 24
Doctorado en Educación
Claro todo lo anterior, depende en gran medida de cómo nos podamos
desenvolver y que tanta preparación y capacitación invierte la organización
para lograr una comunicación grupal exitosa. De no ser así, como siempre,
quedará sujeta la comunicación grupal a los esfuerzos, interés y posibilidades
del cuerpo docente.
La asertividad y la programación neurolingüística constituyen técnicas
para enfrentar diversos problemas en la comunicación grupal, pero no se
tratarán por el momento. Comunicarse verbalmente y resolver los problemas a
través de ella, es una conquista paulatina y progresiva de cada individuo, ya
que hay muchas maneras de querer ganar la confianza de las personas y la
verdad no a todas, de alguna manera, no les interesa el desarrollo de la
organización, quiza porque no han sido entrenados para desarrollar técnicas
para mejorar la comunicación, por lo que habrá que ejercer un liderazgo
motivador para integrarlas al grupo de mejora.
En todo grupo de trabajo es importante ganar y mantener esa confianza
ya que sin ella siempre serán imposibles lograr los objetivos y metas del
equipo, y más cuando el interés se enfoca a reproducir una educación
tradicional ciega (no sabe hacia dónde va), caemos en un estado inerte donde
no hacemos las cosas con propósito y sin sentir un ambiente agradable, lo cual
destruye literalmente a los elementos que conforman el grupo, directivos,
docentes y alumnos.
Por ejemplo normalmente caemos en el “yoyismo”, es decir yo esto, yo
aquello, yo lo otro, pero sin usar ninguna técnica para desarrollar la
comunicación grupal, y sin ninguna consideración a los receptores de estos
mensajes. En repetidas ocasiones, los interlocutores se arrebatan la palabra y
cada quien trata un asunto distinto, no tratan de alcanzar una puesta en común,
sólo desean imponer su idea, que sea reconocida su posición, o simplemente
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 25
Doctorado en Educación
alardean. Por lo que no obtendrán el feed back esperado, sino uno que los
degrade ante el grupo. ¿Hasta cuándo se darán cuenta de esta situación?
El compromiso que se establecen en ambas partes se puede cumplir
siempre y cuando no estén en juego el respeto de las contrapartes. Las
habilidades que tenemos para comunicarnos, no solo nos dan buenos
resultados en las relaciones con nuestros compañeros, amigos, parejas, etc. Si
no más bien son la base para una buena comunicación eficiente, ahora cabe
mencionar que dentro de una organización son una herramienta muy
importante ya que va de la mano con la motivación.
Educación y medios de comunicación
Las primeras definiciones de comunicación apuntan a su vertiente
interpersonal, relacional, más que a la concepción mediática que ha
prevalecido y dominado el pensamiento sobre comunicación a lo largo de su
existencia como campo académico. Mas a partir de los años sesenta, los
nuevos medios de comunicación comienzan a influir en toda la sociedad
trastocando los límites de la educación, llegando a constituir en la actualidad un
poderoso aparato educativo. Hoy por hoy, en las escuelas ya no se preparan a
los alumnos para que puedan convertirse en ciudadanos, sino que el aparato
educativo ha sido subyugado y derrotado por una nueva fuerza tecnológica e
ideológica que sólo producirá compradores de mercancías.
El predominio de los medios de difusión como centro de la reflexión oscurece
las aportaciones de todo lo concerniente al diálogo, al vínculo entre seres humanos, a
la capacidad de éstos para comunicarse consigo mismo, con los otros y con el entorno
físico y simbólico en el que se desenvuelven. En este apartado la atención se centra
en los efectos ocasionados por los medios sobre los alumnos quienes se han
convertido no sólo en objetivo mediático, sino también en víctimas de la publicidad.
Sin embargo, habrá que recordar la aserción de Galbraith según la cual,
“las técnicas de persuasión [publicitaria] sólo surten efectos entre aquellas
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 26
Doctorado en Educación
personas que están tan alejadas de la necesidad física que no saben realmente
lo que desean y que el hombre hambriento no necesita nunca que le digan qué
debe comer” (Mattelart, 1980: 35).
Muchos alumnos esperan que el docente les explique de manera muy
amena y accesible los elementos complejos y profundos de su asignatura, pues
son producto de una sociedad consumista que no les incita a la acción, ni a la
creación, y mucho menos a la reflexión, y si al consumo de diversos productos
que cambian la felicidad por cierta “comodidad”; también pretende cambiar la
satisfacción del esfuerzo realizado, por la adquisición de vágatelas. De este
modo, la frase por excelencia que define una sociedad derrochadora es:
¡Compro, luego existo¡ Así, la adquisición precede al ser. Luego entonces
¿Cómo cambiar esta absurda realidad?
Los últimos años han estado caracterizados por una gradual pérdida de
afición por la lectura, y paralelamente, por un aumento inusitado del consumo
televisivo, y de otros productos visuales. A éste creciente cambio se le asocia
un paulatino empobrecimiento de la capacidad de entender, dado que, a
diferencia de la palabra escrita, la televisión produce imágenes y anula los
conceptos, y de este modo atrofia nuestra capacidad de abstracción y con ella
toda nuestra capacidad de entender. Es decir que, el homo sapiens está al
borde de ser suplantado por el homo videns, que no sería ya portador de
pensamiento, sino de “post-pensamiento” (Simone, 2000: 87-88).
Hoy, sabemos muchísimas cosas que nunca hemos leído en ninguna
parte, y mucho menos en libros: las hemos podido simplemente “ver“– en la
televisión, en el cine, o quizá las hayamos “leído” en un periódico, en un
soporte impreso, o en la pantalla de un ordenador. También las hemos podido
“escuchar”, de la radio, o a través de un amplificador que “lee” señales en un
soporte de cualquier naturaleza (CD o memoria magnética). Todo esto, no se
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 27
Doctorado en Educación
trata de “ligeros cambios”, sino de las señales de una profunda transformación
cultural.
Así, los jóvenes ya no reciben todos los conocimientos académicos o
científicos por medio de la escuela; sus cerebros han aprendido a interpretar la
sintaxis visual (cine-televisión) antes que la lingüística; los programas infantiles
ofrecen conocimientos antes que la escuela primaria; el teléfono móvil y sus
mensajes enseñan una forma abreviada y poco conceptual de escribir que
tiende a convertirse en la única expresión escrita personal que por la rapidez
con que se realiza se contraen palabras y se reduce el lenguaje a un mínimo de
palabras.
Ciertamente, se trata de la aparición del Homo videns de la sociedad
teledirigida, de Giovanni Sartori, en donde los niños de hoy se encuentran
destinados a desarrollarse en un mundo principalmente mediático, se
encuentran aprendiendo a interpretar sintaxis visuales antes que lingüísticas,
saltándose de esta manera el fundamento de la evolución intelectual de la
existencia humana (Gómez, 2003:12, 33).
El hombre actual al vivir en una sociedad hedonista donde se rinde culto
a sí mismo, ha optado por seguir la ley del menor esfuerzo. El “esfuerzo de
leer” no puede competir con la “facilidad de mirar”. De esta manera, lo visual y
la visión se han convertido realmente, como ha sostenido Popper (1995) en
“ladrones del tiempo”, pues han robado atención y esfuerzo a otras formas de
adquisición del conocimiento. De lo que se trata ahora es de poner la
información visual y todos los medios de comunicación al servicio de la
creación y de la vivencia de otra racionalidad, y de otra cultura.
No obstante, en la comunidad virtual la participación se reduce a simple
pasividad del copy page, es decir a una hipnotización que da la ilusión de
integrarse a la efervescencia del mundo globalizado. En el pasado la opinión
del hombre que sólo refería un único libro, resultaba pobre. En la actualidad no
se dan referencias, pues el conocimiento surge de mirar la televisión o la
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 28
Doctorado en Educación
pantalla de una computadora personal (PC). El contenido de todo programa
queda limitado a su creador, y no existe un deseo de ampliarlo o corroborarlo,
por parte del espectador, que generalmente muestra una gran pasividad.
Es posible mirar colectivamente, pero se lee en soledad. Esta diferencia
puede incluso llegar a crear situaciones paradójicas: él que está acostumbrado
a usar la lectura como principal medio para adquirir información, también
tenderá a estar en silencio mientras mira la pantalla de cine, o la televisión; por
el contrario, quien no está acostumbrado a las reglas de la lectura tiende a
socializar y, por tanto, resulta ruidoso en los lugares donde tendría que estar en
silencio. Por ese motivo, el lector a menudo es considerado por el no-lector
como una persona lenta, solitaria y poco parlante.
Mientras tanto, el entramado mediático ha logrado presentarse en la
actividad educativa bajo el aspecto de fiel escudero del profesor y de la
educación en general. Sin embargo, las posibilidades perceptivas y
cognoscitivas que abren estas herramientas de la reciente hornada tecnológica
suponen mucho más que un simple apoyo a la labor educativa, parecen
conformar una visión y una compresión distintas de la realidad. Sus
implicaciones cognoscitivas son fáciles de entender: como los conocimientos
científicos están al alcance del sillón y del televisor, se ha formado una nueva
escuela pasiva, al creer que con ver un documental ya sabemos, veo luego sé.
El saber implica más, es relacionar ese tema con otros; requiere
intelección, comprensión, no mera recepción. Esto sin considerar la veracidad y
rigor del documental. Por otra parte, el alumno busca que los contenidos de las
lecciones resulten de tan brevísima elocuencia como los comerciales
televisivos, y que las tareas escolares resulten tan complejas como el “corta” y
“pega” de Internet.
Así pues, la escuela con su trabajo monótono, constante, “casi propio de
la esclavitud”, vuelve a encontrarse en desventaja frente al deslumbrante mundo
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 29
Doctorado en Educación
creado fuera de ella para el estudiante. Con lo que se nulifica en gran parte el
esfuerzo docente y casi cualquier técnica pedagógica. Y esto ocurre, sin que
sea posible buscar responsables de éste desastre social, donde el educando se
pasa los días contemplando diversas pantallas de la casa, de la escuela, del
ordenador, de las “maquinitas”, cuando su naturaleza propia de niño le exige
ejercitar sus músculos, indagar su mundo, y relacionarse con otras personas de
su edad; o de joven jugar a la seducción real (Gómez, 2003:59-65).
Por considerar a la TV como un referente informativo, no resulta raro que
en el salón de clase, un alumno, sonriendo, diga tras la explicación del
académico: “Es verdad; lo vi en la tele”. Por lo que, tampoco resulta extraño que
surja la siguiente pregunta obligada: ¿Dónde ha quedado el antiguo prestigio de
la escuela como el Templo del saber?
Además, tanto niños como jóvenes de México, durante sus horas de
esparcimiento y descanso frente al televisor, no sólo son motivados a consumir
de manera irreflexiva productos chatarra que en muy poco o nada los beneficia,
sino que aprenden la violencia y el hedonismo de las series y películas gringas,
ya sin mencionar que también se ilustran con actos reales de falsedad,
impunidad, y corrupción por parte de nuestros “servidores públicos”. Así se
forma a las nuevas generaciones en nuestro país.
En la TV ya desde los años ochenta, con tal de obtener enormes raitings
y vender, se presenta la violencia temática, el consumo exacerbado, la invasión
de la privacidad, la banalización de la realidad, la información alarmante,
incompleta, frívola, morbosa y sensacionalista, la imposición mental del
principio de la máxima ganancia a toda costa, el entretenimiento vulgar y
estrafalario, la cosmovisión hollywodense de la vida, en detrimento de la
presencia de los contenidos estratégicos que requerimos producir para
transformar nuestras conciencias y, sobrevivir y convivir como pueblo y
civilización.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 30
Doctorado en Educación
Resulta insultante para las clases desfavorecidas la publicidad
transmitida por los medios, principalmente por la televisión, donde se les ofrece
todo lo que la realidad les niega; con lo que la TV nos denota dos realidades: 1)
quien no compra no existe, 2) unos pocos viven en el lujo mientras que el resto
está condenado a la pobreza y la opresión. Se trata de una cultura que manda
consumir y una realidad que lo prohíbe.
La aplicación mayoritaria de toda esta cultura, ha generado en la
sociedad mexicana un fuerte desorden informativo, producido silenciosamente
una anarquía cultural al permitir que estemos altamente informados sobre lo
secundario y no sobre lo fundamental. La sociedad contemporánea, trata a los
niños ricos como si fueran oro, a los pobres como si fueran basura, y a los
niños de la clase media los tiene “atrapados” en la pantalla del televisor. Cada
vez sabemos más del gran mundo comercial externo y cada día menos de
nosotros como nación, como comunidades y como personas (Granados, 2006:
140).
Todas estas situaciones, nos ha generado una enorme crisis cultural,
nos ha llevado a privilegiar lo superfluo por sobre lo básico, el espectáculo por
sobre el pensamiento profundo, la evasión de la realidad por sobre el
incremento de nuestros niveles de conciencia, la incitación al consumo por
sobre la participación ciudadana, el financiamiento de los proyectos
eminentemente lucrativos por sobre los humanistas, la homogeneización
mental por sobre la diferenciación cultural, entre otras.
No obstante, los medios de comunicación se han convertido en una
instancia determinante para la estructura social, pero presentan un doble
vínculo, ya que en la televisión, por ejemplo, se ve constantemente el siguiente
fenómeno: en un programa o canal se pregona un valor moral y en el otro se
está violando, lo que genera conflictos en la mente del televidente, sobre todo
si son niños o personas con un bajo sentido crítico.
El hombre actual, vive una paradoja, pues pese a que cuenta con
medios de comunicación inimaginables hace años, sostiene una
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 31
Doctorado en Educación
incomunicación fáctica con el resto de sus semejantes. El predominio de los
medios de difusión como centro de la reflexión oscurece las aportaciones de
todo lo concerniente al diálogo, al vínculo entre seres humanos, a la capacidad
de éstos para comunicarse consigo mismos, con los otros y con el entorno
físico y simbólico en el que se desenvuelven. Obviamente todo este contexto
impacta de manera negativa al trabajo educativo que desempeña el docente.
Las NTIC en la educación
La escuela tradicional, como institución, ha tenido como misión social la
preservación del orden existente, por lo que, presenta una dinámica
conservadora. No obstante, en las últimas dos décadas, debido al impacto
tecnológico y económico, los modelos educativos se enfrentan a una serie de
cambios y transiciones. Si además, a esto le sumamos las expectativas que se
tienen acerca de la función y la calidad de la educación, vinculadas ahora
estrechamente con el mundo del trabajo, vemos que se dibuja un escenario
nuevo dentro del hecho educativo.
El estudiante se encuentra cambiando, así como el contenido de lo que
se le enseña la adquisición de conocimientos ha tenido modificaciones, el
desarrollo de la ciencia y la tecnología ha evolucionado, el papel de las
instituciones educativas ante la sociedad se está transformando, como también
el origen y volumen de sus recursos.
Al hacer su aparición las Nuevas Tecnologías de Información y
Comunicación (NTIC), se han venido integrando de manera paulatina en todas
las actividades humanas, incluyendo la educación, obviamente con la lentitud
que ha caracterizado a este sector. En esta incorporación, se observa un
creciente deseo de aprovechar las ventajas que ofrecen estas herramientas
tecnológicas.
Una de estas ventajas es la realidad virtual que ha permitido a los
usuarios participar desde lugares remotos por medio de la telepresencia en
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 32
Doctorado en Educación
ambientes generados por una computadora. Con ello se ha generado la
educación virtual, cuya principal característica reside en que maestros y
alumnos se encuentran en diferentes sitios remotos, pero gracias a la
interconexión se da un proceso educativo eliminando toda limitación geográfica
y de tiempo.
No obstante, en la Red se observa un considerable aumento de las
páginas Web donde se fomenta el racismo, se exalta la violencia, se expone
material pornográfico, y se ofrece “ocio y perversión a la carta”. Esto como
consecuencia de una educación deficiente, aparentemente carente de objetivos
teórico prácticos y éticos que más bien obedece a un “currículo oculto”, por lo
que la población se encuentra confundida e incapacitada para constituirse en
usuarios pensantes y productivos de estas nuevas herramientas.
También, la aplicación global de las NTIC ha dado lugar en los últimos
años a un marcado crecimiento de propuestas de enseñanza y aprendizaje:
presénciales, a distancia, y virtuales. Gran parte de los formatos de las
propuestas formativas a distancia se encuentran hoy sumamente
condicionados por los requerimientos del mercado, y de hecho más influidas
por ellos que por orientaciones pedagógicas (Bates, 2001). Esta situación
podría extenderse a las demás modalidades de enseñanza.
Experiencias que se han registrado en investigaciones, han puesto a la
luz pública que el uso dado a las computadoras, no necesaria y completamente
se utilizan con fines de estricto orden educativo
(bibliotecadigital.conevyt.org.mx, 2008: 5). Y mientras unos se divierten, el
conocimiento técnico-científico ocupa un lugar de privilegio junto al mercado, el
cual determina quiénes están dentro y quiénes están fuera del modelo a escala
global (Ferronato, 2000: 11-12). En este panorama México, cada día pierde
competitividad en los escenarios mundiales, por lo que sus problemas
aumentan.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 33
Doctorado en Educación
En nuestro país, se habla de “grandes proyectos” que implican el reparto
de ordenadores, planes de conexión, cursos informáticos y grandes contratos
millonarios. Mientras tanto, en gran parte de las escuelas sigue funcionando la
pizarra y, salvo honrosas excepciones, las salas de informática continúan
repitiendo los tradicionales esquemas de transmisión de conocimientos.
De esta manera, la incorporación de las NTIC a nivel nacional, se
produce de manera desequilibrada, es decir, se pueden disponer de modernas
tecnologías de comunicación vía satélite en cierta institución educativa o en un
determinado sector de la sociedad, mientras que en el mismo momento, en otro
sector del país o en otra institución educativa, se continúan empleando
sistemas informativos tradicionales.
En la sociedad actual el conocimiento es considerado esencial. Sin
embargo, estamos lejos de saber cómo la masa crítica de conocimientos, como
esa verdadera explosión de la ciencia contemporánea configurará o está
formando una nueva sociedad y afectará la vida cotidiana de las personas
(Gibbons, 1996).
Así surgen los siguientes cuestionamientos: ¿Cómo ha sido el proceso
de incorporación de las NTIC en la educación: innovación o simulacro? ¿Se
trata de incorporar las NTIC para mejorar el proceso enseñanza-aprendizaje
del sistema educativo nacional, o simplemente se emplea tecnología de punta
para cubrir con ciertas expectativas político-sociales relativas a la
modernización? ¿Dicha incorporación ha implicado una mejora real en la
calidad de la formación en los distintos niveles educativos en nuestro país?
¿Constituye una forma diferente de enfrentar los nuevos retos educativos?
¿Podemos optimizar el proceso enseñanza-aprendizaje a través de las NTIC?
El mundo del trabajo, a su vez, mantiene expectativas sobre la función y
la calidad de la educación, por lo que los modelos educativos se enfrentan a
una serie de cambios ocasionados por el empleo de las NTIC. Entonces ¿por
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 34
Doctorado en Educación
qué no pensar en una pedagogía adecuada que permita entender las NTIC e
integrarlas de una manera amplia, seria y responsable al campo productivo a
través de la educación? ¿Por qué no reconocer que, dentro del campo de la
educación, se requieren verdaderas transformaciones? Y ya que estas no
vienen desde los órganos de gobierno, los maestros, somos los responsables
de generarlas. Por lo que habrá que trabajar en la "e-inclusión", entendida
como el acceso a las tecnologías y adecuación a las necesidades de los
distintos colectivos que integran nuestra actual sociedad.
Ciertamente se requieren de recursos multi-millonarios para incorporar
las NTIC. Pero ¿qué se requiere para desarrollar la capacidad crítica en los
estudiantes? ¿Puede ayudar en este desarrollo una pedagogía acorde con los
tiempos actuales?
Interacción entre personas por medio de las NTIC
Dentro del caso de la enseñanza, las NTIC con sus fórmulas de navegación no
lineal, hipertextual e hipermedia, permiten una interactividad que resulta
cualitativamente inferior, a la que permite la relación personal presencial. Es
decir, nadie puede negar que, en la relación educativa, la interacción entre el
alumnado o entre éste y el profesorado es infinitamente superior a la que se da
con la máquina. Siempre y cuando ésta relación que supone la enseñanza sea
la adecuada.
Sin embargo, las NTIC facilitan en mayor medida la interactividad que el
material impreso o audiovisual tradicional. También, debemos considerar que,
en la cotidianidad, el servicio telefónico y algunos servicios de Internet, por
servir tanto para la comunicación bipersonal como para la multipersonal,
poseen una interactividad que se acerca a la de la relación personal presencial
en muchos sentidos. Se trata de un nuevo campo de acción en el que la
comunicación en sí se convierte en un valor.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 35
Doctorado en Educación
Bajo ciertas circunstancias, la interactividad mediada por los
ordenadores nos permite superar limitaciones de la relación presencial, pero
conservando algunas características propias de la interacción entre personas.
Obviamente, puede que se pierdan ciertos aspectos de la interacción directa y
personal, como tonos, gestos, cercanía y calidez, entre otros. Sin embargo, en
grandes distancias, o en la no coincidencia de las personas respecto al tiempo,
la interacción presencial resulta imposible o muy infrecuente, y, en ese caso,
las NTIC la hacen posible, ya sea de forma sincrónica o asincrónica.
Otras posibilidades de esta interacción, es la de poder participar en foros
virtuales, donde personas con intereses semejantes intercambian información y
participan en conferencias. Prácticamente existen foros para tratar todo tipo de
temas. De esta manera, la telemática ha contribuido a un cambio socio-
espacial y cultural inimaginable un tiempo atrás, al alterar los límites de
cercanía física.
Sin embargo, existen dificultades y limitaciones que las barreras
tecnológicas y el idioma imponen, e incluso se presentan dos posibles riesgos:
1) el “abandono” de la realidad cercana en favor de la presencia en la
virtualidad electrónica; 2) la dispersión excesiva en un entorno que, pese a
recoger a una pequeña parte de la población mundial, resulta ya
tremendamente extenso; y 3) además todavía persiste una cierta “timidez” o
reserva de algunos potenciales participantes en los foros por diferentes
razones, aun contando con el equipo necesario y la “protección” del no estar
presentes en persona.
Cuando una organización no cuenta con una adecuada comunicación,
simplemente se verá imposibilitada para alcanzar sus objetivos, visión, misión y
con ello no podrá constituirse como una organización de primer nivel; además
de apartarse del sendero del éxito y dejar con una sensación de fracaso y
minusvalía a todos sus integrantes por igual. Partiendo de esta idea, el
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 36
Doctorado en Educación
presente ensayo trata de mostrar algunas vías para mejorar la comunicación
grupal dentro del centro educativo.
Una educación para los medios de comunicación.
A diario recibimos un gran bombardeo de información proporcionada por los
medios de comunicación, y son pocas las veces que reflexionamos sobre los
impactos que la tecnología y la comunicación están provocando en nuestras
formas y estilos de vida; no estamos preparados para comprender y
apropiarnos críticamente de los mensajes de los medios y esto no se da por
falta de capacidad sino porque no se ha aprendido a discriminar los contenidos
de la carga informativa.
Hoy por hoy, se hace evidente que el uso cotidiano de los medios, nos
genera una nueva necesidad, la de crear una educación para la comunicación
a través de los medios, que fomente el sentido crítico de los usuarios, para que
se aprovechen los beneficios que aportan los medios y aprovecharlos al
máximo, también para aprender a defenderse de sus vicios y eliminar todos
aquellos prejuicios que se crean en torno a ellos.
Los jóvenes tienen un fácil acceso a los medios de comunicación, por lo
que, se hace indispensable el surgimiento de la educación en medios de
comunicación dentro del currículum escolar en todos los niveles educativos. Se
supone vivimos en una sociedad de la información, pero nuestros jóvenes se la
viven en el chisme de las redes sociales, en los juegos, y demás
entretenimientos, sean sanos o pervertidos. También se dice estar en la
sociedad del aprendizaje, por lo que surge la siguiente pregunta obligada, ¿Ya
pasamos por una sociedad del aprendizaje?
Se requiere modificar los hábitos de consumo comunicativo de las
nuevas generaciones y crear una educación para el conocimiento de los
nuevos sistemas operativos, paquetes, lenguajes y códigos que surjan. Se trata
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 37
Doctorado en Educación
de crear una nueva tendencia para ver a los medios de comunicación como un
ámbito de estudio e investigación, donde se rompa el monopolio de Windows y
Office que se ha establecido dentro de la SEP, y que de manera obligada se
enseña en todos los niveles educativos.
Puede encargarse la escuela de la formación de personas que sean
conocedoras de los nuevos lenguajes audiovisuales de nuestra sociedad y
sean capaces de apropiarse críticamente de ellos y de emplearlos creativa y
activamente como canales personales de comunicación, expresión e
investigación de la realidad (Aguaded, 2002).
Constituyen los medios una realidad en nuestro contexto y pese a ciertos
aspectos que influyen de manera negativa en el hecho educativo, representan
una valiosa herramienta para toda actividad humana. Como educadores
debemos introducir propuestas que justifiquen y fundamenten la presencia de
los medios de comunicación en el currículum escolar como un ámbito de
conocimiento diferenciado.
La formación del profesorado en la educación para los medios debe ser
de vital importancia y de forma constante o bien quedar obsoletos en este
mundo cambiante; se requiere de profesores de mente más abierta, y que
comprendan los cambios que se suscitan en los medios para preparar a sus
alumnos, y en esta medida, puedan asumir los restos que impone, hoy en día
la tecnología; las instituciones han ignorado con excesiva frecuencia los
contextos tecnificados en los que se desenvuelve la sociedad actual, así como
los cambios culturales que generan. Por lo que ofrecen un conocimiento
inservible o poco útil.
Se debe de entender que nos encontramos ante un nuevo reto, el de
crear una pedagogía para los medios en donde no basta con ser sólo usuario
de una computadora, sino darle el uso adecuado para la formación de los
jóvenes, hacer de ellos personas críticas, reflexivas para que de esta forma
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 38
Doctorado en Educación
faciliten su proceso de enseñanza-aprendizaje, además de entender y conocer
los múltiples procesos de comunicación que vive la sociedad. Además de
contar con las herramientas tecnológicas que requiere y demanda el mercado
laboral actual.
El acto educativo se da por medio de la interacción entre educador y
educando, en donde la clave principal del proceso enseñanza- aprendizaje es
la comunicación, pero en este mundo globalizado esta comunicación
interpersonal se ve expandida y llevada a las TIC. Por tanto, la educación se ve
obligada y comprometida a insertar al educando en el mundo actual altamente
tecnificado en que vivimos. Una de las tareas académicas inmediatas, como ya
se dijo, es la enseñar a discriminar información obtenida en las redes y
analizarla, además de aplicarla con sentido crítico en beneficio individual y de
nuestro grupo social al que pertenecemos.
La presencia de la educación en medios de comunicación en todas las
instituciones educativas, y en todos los niveles, debe tener como objetivo
básico ampliar la dinámica comunicativa en otros contextos y salir de los
estereotipos de la educación tradicional.
Educación y poder
Por su parte, los gobiernos viven atentos, por vivir la globalidad, descuidando
todo lo demás (el campo, la educación, etc.) únicamente atienden la función
que les asignó la globalización (cuidar la moneda nacional, privatizar y vender
el patrimonio del pueblo, y reprimir a los globalifóbicos), el sistema educativo ha
quedado estancado por falta de voluntad política, por falta de compromiso, de
tecnología, de incentivos, de apoyo en general.
Los maestros “armados”, con un gis, no han podido competir con la labor
anti-educativa de los medios electrónicos. No han podido encarar el reto de
educar para la democracia, bajo principios y valores opuestos a los
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 39
Doctorado en Educación
presentados en las pantallas de televisión. De esta manera, los medios
electrónicos han desplazado al sistema educativo en su antigua hegemonía de
producir el tipo de persona que requiere la sociedad.
Hoy por hoy, los publicistas a través de los recursos dedicados a la
compra de espacio en los medios masivos, se convierten en los dictadores del
contenido editorial y de programación de los modernos medios y los orientan
hacia la enajenación del lector, radioyente y espectador para obligarlo a elevar
constantemente sus niveles de consumo. De esta manera, puede aceptarse
que la publicidad tiene como objeto “el control de la conducta humana en la
compra de mercancías” a fin de “educar” al consumidor en las necesidades
de nuevos productos (Bernal, 1985: 81-82).
Conclusiones
En este texto se han repasado, principalmente, algunos de los aportes básicos
de las investigaciones realizadas desde la Escuela de Palo Alto para el estudio
de los fenómenos comunicativos. Lo interesante de la Escuela de Palo Alto es
que, junto con las aportaciones de la corriente del Interaccionismo Simbólico,
pone en evidencia la importancia de retomar y de hacer observable la
comunicación atendiendo a su significado primero: la puesta en común, el
diálogo, la comunión. Pero el explorar la dimensión comunicológica de la
relación e interacción, pasa también por revisar fuentes teóricas como la
psicología social, la cibernética y la sociología fenomenológica, entre otras.
Como ya se indicó, se ha situado el centro del debate en el concepto de
Interacción, comprendida como el fundamento de las situaciones
comunicativas, por un lado, y como centro conceptual para la construcción de
la pedagogía comunicacional, por el otro. También se establecieron algunas
situaciones conceptuales entre comunicación, educación, y pedagogía,
marcando la situación multisémica que impera en los dos últimos conceptos
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 40
Doctorado en Educación
referidos. Se concluye que, no se puede hablar de pedagogía general, más se
pueden integrar elementos de comunicativos a la acción docente.
Por otra parte, se revisó lo referente a comunicación grupal en las
organizaciones educativas, educación y medios de comunicación, las NTIC en
la educación, interacción entre personas por medio de las NTIC, una educación
para los medios de comunicación, educación y poder.
Sin embargo, la intención de este trabajo no ha sido examinar en
profundidad cada apartado mostrado. Más bien se han tratado de sentar las
bases mínimas para la comprensión de la naturaleza de estos enfoques, y de
exponer brevemente una forma de conceptuar la comunicación en sus
diferentes ámbitos, incluyendo el referente a la comunicación mediada a través
de los medios de difusión masiva, que sin duda sigue siendo la acepción que
goza de mayor aceptación no sólo en el campo académico de la comunicación,
sino también socialmente, y que sin duda ha influido fuertemente el campo
educativo en las últimas décadas.
La Pedagogía comunicacional está apuntada, pero queda mucho por
hacer, mucho por discutir y reflexionar, para recuperar la naturaleza del
compartir, del vincular, del poner en común, para mejora del proceso educativo.
Se trata de un trabajo intenso de reflexión, de acción y hasta paradójico para
recuperar con base a todo lo referente a comunicación el lugar hegemónico de
la educación para formar al individuo, lugar que hoy en día parece ser
secundario.
Para lograr desarrollar la pedagogía comunicacional, se requiere de
manera obligada, pensar las metodologías o formas de acercarse a ella. A
partir de visualizar la comunicación de forma holística, ubicándola en el marco
de su amplio contexto. Alex Mucchielli (1998: 42) recupera los aportes de la
Escuela de Palo Alto y afirma que, según este enfoque, “una acción, una
comunicación, es decir, una interacción, si se analiza por sí misma carece de
sentido”. En este sentido, hace hincapié en una de las ideas fundamentales
aportadas por Watzlawick (1971: 37), quien afirma que “un segmento aislado
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 41
Doctorado en Educación
de comportamiento es algo que formalmente no se puede definir, es decir, que
carece de sentido”.
Estas consideraciones ponen en evidencia que el contexto es una de las
categorías analíticas fundamentales para el estudio de la comunicación. Así
pues, las acciones, las interacciones, no pueden entenderse si no se ubican en
un contexto, sin atender al sistema en el que se realizan o tienen lugar. Todas
estas afirmaciones se sintetizan con lo que los investigadores de la Escuela de
Palo Alto nombraron como “encuadrar las observaciones” (Watzlawick et. al.,
1971), lo cual significa que “hay que aprender a mirar todo el entorno de un
fenómeno comunicativo para poder percibir el conjunto de actores implicados”
(Mucchielli, 1998: 46).
Murillo y Krichesrg (2011), presentan al cambio como un proceso, no
como una mera acción. Dicho proceso de mejora parte de una necesidad, que
el caso presente es el de romper el estado anómico en el que se encuentra la
escuela en la actualidad. Que pese a esta anomia, existe entre el cuerpo docente
la creencia y el deseo de mejorar. Pero, no en los términos oficiales de hacernos
responsables directos de todo acontecer dentro del hecho educativo sin considerar a
los demás agentes que intervienen en este hecho.
Siguiendo la propuesta de Murillo, se presentan conforme a esta, cada una de
las etapas del proceso de mejora, las cuales quedan abiertas para su revisión,
análisis, discusión, exclusión, reconstrucción, mejora, lo que considere pertinente.
Inicio
Necesidad de mejorar la comunicación dentro del hecho educativo.
Existe en el cuerpo docente la creencia y el deseo de mejorar.
Se presenta este ensayo con una invitación a estructurar puntos de vista de manera compartida y conjunta entre varios docentes, evitando así cualquier imposición
Factores de la cultura de
mejora:
Visión: Construir una pedagogía comunicacional que establezca el ambiente requerido para el buen desarrollo del proceso Enseñanza-Aprendizaje.Metas: con base en la discusión y aplicación del presente ensayo, ir mejorando las relaciones: alumno-docente, docente-directivo, alumno-alumno, alumno-directivo, entre otras.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 42
Doctorado en Educación
Diagnóstico del área de
mejora
Reflexión e indagación conjunta de profesionales del centro escolar.
Se apoya en la recolección de datos de manera constante.
Se manejarán 5 dimensiones:-desarrollo de estudiantes.-calidad del centro.-adecuación de los procesos de enseñanza en el aula.-mejora en la comunicación interpersonal-manejo de mediosSe revisará y analizará los avances de manera periódica, puede ser cada bimestre, lo que ayudará en la toma de decisiones. Para esto se tomará como punto inicial lo arrojado por los datos recopilados en el diagnóstico
Planificación
Estrategia: entregar el presente trabajo para su lectura, análisis, aportaciones y su posterior discusión en una reunión que tendrá verificativo cada bimestre.Modalidades: presencial cada dos meses, y virtual, cada que se desee o se requiera a través de la red.Estrategia: El primer paso es el de concienciar al grupo docente por medio de la lectura de este trabajo, para que integre saberes y los lleve a la práctica diaria de docente.Evaluación: se realizará de manera bimestral, para lo cual cada docente elaborará su instrumento de evaluación con los parámetros que requiera su área de aprendizaje. Dicho instrumento se presentará para su análisis conjunto con docentes de la misma área para su discusión y aportación de sugerencias. Una vez obtenidos los datos a través del instrumento se procede a su recopilación y análisis para la subsecuente toma de decisiones.
Imp
lem
ent
ació
n
Incorporar nuevas ideas referentes a la creación y difusión de la didáctica comunicacional, esto a partir de las reuniones bimestrales y la interacción en las redes sociales.Comenzar a actuar en concordancia con lo reflexionado
Revisar los datos aportados en las evaluaciones para continuar con los aciertos, corregir lo que aporta buenos resultados e integrar nuevas ideas. Con lo que se elevará la calidad, el trabajo cooperativo, y liderazgo entre otros.
Evaluación Aplicación: conforme a lo planeadoIndicadores: estos están marcados por la escala de Licker y estipulan el nivel de impacto en el proceso de mejora.Instrumentos: test bimestrales, grupos de discusión.
Institucionalización
Convertir en parte de la cotidianidad los éxitos alcanzadosConstruir una cultura escolar oreintada al cambio y mejora permanente.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 43
Doctorado en Educación
Aún quedan abiertos todos los temas tratados, otros que no se tocaron como
Ámbitos y distorsiones de la comunicación intrapersonal, el estado anómico, y
relaciones de respeto entre otros. Lo relevante es que ya se abrió una puerta
más que propone un proceso de mejora continua con otro enfoque a los
convencionales.
Fuentes de consulta:
Aguaded, Ignacio et al, Jóvenes, aulas y medios de comunicación, Propuestas y prácticas mediáticas para el aula, Argentina. Ediciones CICCUS, 2002
Bates T., “ Aspectos culturales y éticos en la educación internacional a distancia”, Conferencia dictada en la Universidad Oberta de Catalunya, 26 de noviembre 2001.
Bandler R., y Grinder J. De Sapos A Príncipes, Gaia, Madrid, 1980.
Berger Peter L., Luckmann Thomas (1986). La construcción social de la realidad. Buenos Aires: Amorrortu.
Bernal Sahagun, Anatomía de la Publicidad en México, Ed. Nuestro tiempo, México, 7ma edición, 1985.
Beillerot Jacky, La formación de formadores, Ediciones Novedades Educativas del Centro de Publicaciones Educativas y Material didáctico, Argentina, 1998.
Bateson G., Ruesch J., Comunicación. La matriz social de la Psiquiatría, Paidós, Barcelona, 1984.
Bateson Gregory, Espíritu y Naturaleza, Buenos Aires, Amorrortu, 1982.
Durkheim E., Educación y sociología, Bogotá, Editora Babel, 1976.
Fermoso Paciano, Teoría de la educación, Trillas, México, 2002.
Ferronato Jorge, Aproximaciones a la globalización, Ediciones Macchi, Argentina, 2000.
Freire Paulo, Pedagogía del oprimido, siglo XXI, Buenos Aires, 1972.
Fullat Octavi, Filosofía de la educación, Barcelona, CEAC, 1991.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 44
Doctorado en Educación
Gibbons, Michael, y otros, La Nueva Producción del Conocimiento: La dinámica de la ciencia y la investigación en las sociedades contemporáneas, Ediciones Pomares - Corredor, S.A. Barcelona, 1996.
Gómez Segura Eugenio, Educar en la era mediática, una realidad virtual, Bellaterra, España, 2003
Granados, Hernández, Fernando, Investigación y guion cinematográfico: Pancho Contreras, FCPyS, UNAM, 2006.
Gutiérrez Pérez Francisco, La pedagogía de la comunicación, editorial Costa Rica, 1975.
http://bibliotecadigital.conevyt.org.mx/colecciones/documentos/somece.htm, consultado: enero 27, 2008.
Marroquí, Pérez Manuel, La comunicación Interpersonal, Ediciones Mensajero, España, 1995.
Mattelart, Armand, y otros, Comunicación masiva y revolución socialista, Ed. Diógenes, México, 4ta. Edición, 1980.
Alex Mucchielli, Psicología de la comunicación, Ediciones Paidós Ibérica, 1998.
Murillo F. Javier, Krichesrg G.J., “El proceso de cambio es colar. Una guía para impulsar y sostener la mejora de las escuelas” en Revista Iberoamericana sobre calidad, eficacia y cambio en la educación, 2011.O`Connor, Introducción a la filosofía de la educación, Paidós, 1971.
Popper Karl, En busca de un mundo mejor, Paidós, Barcelona, 1995.
Prieto Castillo, La comunicación en la educación, ediciones CICCUS, La Crujía, Argentina, 1999.
Morin Edgar, La inteligencia ciega en Introducción al pensamiento complejo, España, Gedisa, 2004.
Rafaele Simone, La Tercera Fase, Taurus, México, 2000.
Sánchez Hernández Miriam, López Fernández Marcela, compiladoras, Educar ¿Para qué?, Colección Galatea, No. 5, UACM, México, 2006.
UNESCO, Aprender a ser, Alianza, 1973.
Krebs Victor J., La recuperación del sentido: Wittgenstein, la filosofía y lo trascendente, Caracas, Equinoccio, 2008.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 45
Doctorado en Educación
Watzlawick Paul; Beavin Janet H., Jackson, Don D., Teoría de la comunicación humana, Tiempo Contemporáneo, Buenos Aires, 1971.
Watzlawick Paul, Weakland John, Fisch Richard, Cambio. Formación y solución de los problemas humanos, Herder, Barcelona, 1985.
Winkin, Yves (coord.), La nueva comunicación, Kairós, Barcelona, 1982.
Mtro. en CO Fernando A. Granados Hernández 46
Recommended