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MOMENTO INDIVIDUAL
GUSTAVO ADOLFO RAMIREZ URDINOLA
ECOLOGÍA
PROFESOR
JOSÉ GILDARDO RÍOS DUQUE
UNIVERSIDAD DE MANIZALES
FACULTAD DE CIENCIAS CONTABLES ECONOMICAS Y ADMINISTRATIVAS
MAESTRIA EN DESARROLLO SOSTENIBLE Y MEDIO AMBIENTE
ROLDANILLO 13 DE NOVIEMBRE DEL 2016
1. Relación de las cinco unidades básicas de la ecología
Para describir las relaciones ecológicas de sus unidades básicas es importante mencionar
que la ecología tiene como especialidad el estudio y análisis de los vínculos que surgen
entre los seres vivos y el entorno que los rodea, entendiéndose como la combinación de
los factores abióticos y los factores bióticos, teniendo en cuenta la distribución y la
cantidad de organismos vivos, de esta manera identificamos que cada componente se debe
relacionar y existir en armonía para que el equilibrio no se rompa.
Si bien el nicho ecológico no es observable sino más bien algo abstracto, termina
caracterizándose por aquellas condiciones que determinan e influyen en la supervivencia,
crecimiento y reproducción de una especie, y que estas condiciones se deben presentar en
un territorio denominado hábitat donde conviven especies y que sin restricciones pueden
presentar diferente y complejos nichos para tener diversidad de organismos (Arana,
1982).
Si consideramos las interrelaciones de organismos, pues estas se deben generar en un
espacio determinado llamado ecosistema que les permita guardar una independencia
relativa y una afinidad considerable, esta compleja trama se forma por elementos físicos
y seres vivos que recíprocamente actúan para conformar esa unidad básica imprescindible
para la vida. las relaciones de los diferentes componentes están tan ligadas que un
organismo con un nicho determinado puede pasar un tiempo en condiciones que le provee
el ecosistema y después migrar a otro ecosistema requiriendo un hábitat diferente y por
qué no contribuyendo al ecosistema que llega.
La biodiversidad es consecuencia directa del comportamiento que se presenta en el
ecosistema y desde luego su complejidad también es variable y dependiente de las
interacciones y condiciones a favor o en contra que presenta el nicho ecológico. Las
eficiencias en la captación de energía para el desarrollo de sus procesos tienen
dependencia directa con la riqueza de organismos que presenta un ecosistema. Nuestro
planeta es un espacio gigante que interacciona permanentemente y que se retroalimenta
de cada unidad ecológica, que se fortalece cuando las condiciones en los diferentes
hábitats son favorables y que como biosfera integradora de procesos también se
desequilibra cuando unidades como el ecosistema son afectadas, destruidas o
transformadas.
2. Clasificación de las Relaciones Ecológicas
R
E
L
A
C
I
O
N
E
S
E
C
O
L
O
G
Í
C
A
S
Relaciones Intraespecifica
Competencia entre
Individuos
Por Recursos, Comida o Territorio
Como el Leon y la Hiena en su lucha por la presa
Por Reproducción
Como la de los machos en una manada por el derecho a
las hembras.
Por Dominación
Social
Como el cambio generacional que en los
primates se observa cuando los jóvenes quieren dominar
Asociación de Individuos
Facilidad para la Casa y Alimento
Como la manada de lobos que montan estrategia conjunta para la casa
Para la Defensa
Como las colmenas de abejas que organizan la defensa ante
el ataque de avispas.
Para el Cuidado y
Protección de las Crías
Como los búfalos que se agrupan para ejercer posición de defensa y cuidado de las
crías
Relaciones Interespecifica
Depredador -Presa
Como la serpiente y el ratón
Paracito -Huesped
Como la solitaria paracito que tiene como huésped el intestino de los humanos.
ComensalismoLas rémoras que se adhieren al cuerpo de un tiburon, así
viajar con ellos y alimentarse
MutualismoEl picabueyes y el búfalo del cabo, que por protección le
quita las garrapatas
3. ¿Por qué los ciclos de los elementos químicos son fundamentales para
comprender las problemáticas ambientales?
Los ciclos biogeoquímicos son trascendentales para la vida, ya que de ellos depende la
transformación de compuestos en estados químicos elementales a compuestos más
complejos vitales para todo tipo de microorganismos, de allí que la nutrición en la biosfera
dependa del equilibrio fundamental que proporciona cada uno de los ciclos. Si el hombre
como ser pensante pudiera comprender a profundidad que los elementos químicos como
el carbono, oxigeno, nitrógeno, fosforo, azufre, entre otros, son irremplazables y vitales
para la supervivencia de diferentes seres vivos, tuviera una actitud en función de la
ecología.
Hay que considerar que los problemas ambientales son en principio el mismo
desconocimiento de cómo funcionan e interrelacionan los ciclos biogeoquímicos en la
biosfera, si este es el punto de partida, es fundamental reconocer la trascendencia de los
ciclos para el equilibrio y este reconocimiento al ser objetivo nos permitirá visualizar los
errores de muchos años queriendo acelerar o manipular procesos. En este sentido el
hombre ha querido acelerar procesos como la fertilización en diferentes cultivos y para
esto se encargó de sustituir procesos naturales de fijación de nitrógeno por síntesis
artificiales de amoniaco causando grandes problemas de contaminación en suelos y aguas
superficiales y subterráneas. Si se retoma el ciclo del nitrógeno reconociendo la
trascendencia que tiene se puede eliminar las contaminaciones a fuentes hídricas que son
muy importantes y reciclar materias orgánicas.
4. Ecosistema como Zona de Vida – Laguna de Sonso
Esta unidad natural de elementos físicos y bióticos, con interacciones mutuas para
mantener un sistema estable, permite identificar como estructura fundamental del
ecosistema la Biocenosis como el conjunto de organismos vivos y La Biótopo como el
medio ambiente donde las interacciones se llevan a cabo. Esta estructura es fundamental
para que se pueda presentar características y funciones de los productores, Consumidores
y descomponedores.
La laguna de Sonso o del Chircal es un cuerpo de agua en el departamento del Valle del
Cauca, perteneciente a los municipios de Buga, Yotoco y Guacarí, tiene como gran
importancia la regulación natural del rio Cauca que es su afluente y efluente permanente,
sirve de refugio y alimentación a muchas especies de aves en las que se incluyen aves
migratorias. Como ecosistema tiene la siguiente composición.
Productores: Buchón de agua (Eichhornia Crassipes)
Consumidores Primarios: están presentes los bocachicos (Prochilodus magdalenae),
Chamburos, caracolíes, Tilapia Herbivora (Tilapia rendalli), rudas y chambimbes
Consumidores Secundarios: Águilas Pescadoras (Pandion haliaetus), Garzas Ganaderas
y Chigüiros (Hydrochaeris hydrochaeris), Buitre de Cienaga (Anhima cornuta), Gallito
de Cienaga (Jacana jacana)
Descomponedores: hongos y bacterias
Componente Abiótico: Sol, Agua, Aire, Suelo, clima.
5. Leyes de la Ecología.
Las cuatro leyes o principios de la ecología esta orientadas a redefinir el actuar ecológico
de la humanidad.
1. Todo está relacionado con todo lo demás.
Si entendemos que la biosfera es una compleja trama de relaciones de lo abiótico y lo
biótico y que los componentes básicos como nicho ecológico, hábitat, ecosistema,
biodiversidad y biosfera esta relacionados entre sí, lo que afecta a uno determina al resto
de componentes como elementos integrales del planeta.
2. Todas las cosas han de ir a parar a alguna parte.
Estamos regidos por ciclos que permiten transformar o descomponer el conocimiento de
cada ciclo permitirá adaptarnos a sus características, ventajas o limitaciones. De esta
manera sacarle el mayor provecho.
3. La naturaleza es la más sabia.
El funcionamiento complejo de la naturaleza nos hace afirmar que tantos años de
supervivencia y que todos los procesos evolutivos están enfocados a que persista y que
se sobreponga, el desarrollo natural y la exactitud en la que se presenta cada uno de sus
componentes no permite sino reconocer que se requiere aprender y comprender para
sobrevivir en armonía.
4. En todos los procesos dentro de la biosfera, al final tendremos un déficit en
términos de materia y energía.
Entendiéndose que las satisfacciones del ser humano son cada vez más grandes en
demanda de energía y que desde luego para que esta energía se aproveche por el hombre
ocurren cambios significativos e irreversibles, será muy difícil encontrar un equilibrio
entre la materia y la energía.
6. Bioindicadores Ambientales
Los bioindicadores ambientales son indicaciones partiendo de organismos con
características determinadas y específicas de acuerdo al ecosistema en el que se
encuentren y que reaccionan fácilmente a las alteraciones que se realizan al medio
ambiente.
Para que un bioindicador sea ideal debe por lo menos tener las siguientes características:
Son abundantes, de amplia distribución y fáciles de recolectar
Relativamente fáciles de identificar.
Son sedentarios en su mayoría y reflejan las condiciones locales.
Poseen ciclos de vida largos.
Se pueden cultivar en laboratorio.
Varían poco genéticamente.
Responden rápidamente a los tensores ambientales.
El uso de líquenes como bioindicadores para evaluar el estado de la contaminación
atmosférica, esto debido a su longevidad y porque obtienen la mayor parte de sus
nutrientes del aire, de esta manera los hacen muy sensibles a las impurezas presentes en
el medio y permiten evaluar cambios en su abundancia, biomasa y vitalidad.
El uso de macroinvertebrados permite identificar la contaminación de ríos y quebradas.
Se reconocen tres enfoques principales para evaluar las respuestas de las comunidades de
los macroinvertebrados.
El enfoque Saprobico, basada en la tolerancia.
El enfoque de la diversidad, basada en la riqueza, uniformidad y abundancia.
El enfoque biótico, incluye aspectos esenciales de la saprobiedad y la diversidad.
“Los indicadores son herramientas concretas que apoyan el trabajo de diseño y evaluación
de la política pública, fortaleciendo decisiones informadas, así como la participación
ciudadana, para impulsar a nuestros países hacia el desarrollo sostenible” (Quiroga, 2001,
p. 14).
Los bioindicadores son importantes en el fortalecimiento de las actuaciones a tiempo que
se requieren para evitar que un ecosistema llegue a momentos de desequilibrio críticos,
estos nos permiten reaccionar a tiempo y emprender programas de gestión ambiental que
permitan la mitigación de los impactos ocasionados al ecosistema.
7. Huella Ecológica.
“La huella ecológica no trata sobre cuán mal andan las cosas. Se trata de la dependencia
continua de la humanidad en los recursos de la naturaleza y que podemos hacer para
mantener esa seguridad en la capacidad de la tierra para apoyar una existencia humana
digna y para todos en el futuro” (Wackernagel & Rees, 2001, p. 18).
En tender que como seres vivos tenemos limitaciones y dependencias es clave para el
aseguramiento de la vida, que nos impone un reto de adopción de estrategias de
sustentabilidad más efectivas y aceptables. Sabemos que la naturaleza nos facilita lo que
requerimos para sobrevivir y que esa conexión esta de forma permanente, pero si
queremos vivir de forma sustentable hay que asegurar que la productividad que nos
provee la naturaleza no sea utilizada antes de que esta se pueda renovar.
De esta forma la huella ecológica es utilizada como una herramienta de tipo contable pe
permite identificar los requerimientos de consumo de recursos y asimilación de desechos
de una comunidad, enmarcadas en un área productiva. “la huella ecológica de cualquier
población puede ser usada para medir su consumo actual y proyectado, comparándolo
con la disponibilidad de la oferta ecológica y así identificar los probables desfases entre
ambos” (Wackernagel & Rees, 2001, p. 30).
Por medio de esta herramienta se puede facilitar la educación ambiental desde el punto
de vis que nos preguntamos y cuestionamos cual es nuestra huella ecológica con las
actividades que realizamos continuamente, y esta puede ser una forma más para entrar en
la conciencia de la sustentabilidad.
REFERENCIA
Arana, F., (1995). Ecología para principiantes. México: Editorial Trillas S.A.
Martínez, E. (2008). Laguna de sonso o el chircal. Recuperado de
http://funpacaribe.blogspot.com.co/2008/07/laguna-de-sonso-o-el-chircal.html
Quiroga, R. (2001). Indicadores de sostenibilidad ambiental y de desarrollo sostenible.
Chile, Santiago de chile: CEPAL
Smith, T., Smith, R., (2007). Ecología. Madrid, España: Pearson Educación.
Universidad de Antioquia (1999). Los macroinvertebrados y su valor como indicadores
de la contaminación del agua. Recuperado de
http://www.accefyn.org.co/revista/Vol_23/88/375-387.pdf
Universidad de Medellín (2010). Comunidades de líquenes como bioindicadores de
calidad de aire. Recuperado de
http://search.proquest.com/openview/247f2e5ff74530f438364cefe0757db1/1?pq-
origsite=gscholar
Wackernagel, M., Rees, W. (2001). Nuestra huella ecológica. Reduciendo el impacto
humano sobre la tierra. Santiago de Chile, Chile: Lom Ediciones.
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