Naegleria fowleri

Preview:

Citation preview

Naegleria fowleri

Equipo #6

TLC03-oct-14

Descripcion Es un ameboflagelado aeróbico de vida libre

patogénica típica de aguas dulces templadas y estancadas como lagos, lagunas, estanques, piscinas, aguas termales y canales de riego.

Puede producir la meningoencefalitis

amebiana en los seres humanos. Pertenece al filo Percolozoa y puede encontrarse en forma de trofozoíto (activo) o quiste (vegetativo).

El trofozoito puede cambiar de la forma ameboide a una temporalmente flagelada a unos 25-34º C.

MorfologíaTrofozoito

Flagelado

Quiste

Mecanismo de transmision Se lleva a cabo en aquellos individuos que

toman baños de aguas contaminadas con estas amebas: lagos, piscinas, embalses, corrientes termales, manantiales.

Estas amebas en algunos casos pueden penetrar a través de la lámina cribosa del etmoides, pudiendo alcanzar el cerebro y las meninges causando graves cuadros de necrosis e inflamación.

Naegleria se ha mostrado resistente al agua poco clorada de allí el riesgo de infección en las piscinas.

Patogenicidad

El parásito primero entra por la mucosa nasal donde se reproduce abundantemente en forma de trofozoitos y mediante la acción de enzimas y productos citotóxicos, origina congestionamiento nasal, fiebre, focos hemorrágicos y necrosis.

En poco tiempo provoca dolor de cabeza,náuseas, vómitos, anorexia, alteraciones sensoriales, fotofobia, síntomas de irritación meníngea y coma y sigue evolucionando hasta causar la muerte del infectado por paro cardíaco, después de unas 72 horas tras la aparición de los síntomas.

Meningoencefalitis amebiana primaria

Es una enfermedad aguda y rápidamente mortal que se produce en niños o adultos jóvenes previamente sanos que refieren el antecedente epidemiológico de haber nadado, buceado en piscinas climatizadas o lagos artificiales poco tiempoantes donde se encuentre esta protozoario.

N. fowleri penetra por la cavidad nasal, por inhalación de polvo o aspiración de agua o aerosoles que contienen trofozoitos o quistes.

Diagnostico Para la diagnosis o valoración post mortem se

debe recurrir a un examen del líquido cefalorraquídeo, el cual se debe valorar con técnicas inmunológicas o tinciones Giemsa o Wright, observándose el citoplasma de los trofozoitos de color azul, y el núcleo, de rosa. El líquido cefalorraquídeo se muestra túrbio (purulento) y sin bacterias, lo que indica la posibilidad de una virosis o parasitosis