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Habla Ravenna: hermanoladrón y otras miserias
Chicas Macri: mujer ehijas sueltas en Punta
BOUDOU GOBIERNA EN SHORTSROMPIÓ LA VEDA DE CRISTINA PARA IR A VERANEAR. PELEA CON NOTICIAS
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NOTA DE TAPA
FOTOS:
29FOTOS: EDUARDO LERKE (DESDE PUNTA CANA).
En medio de la polémica por su increíble nivel de vida, el juez veranea en un exclusivo resort de República Dominicana. Quién es su compañero de viaje. Mayordomo y smoking.
NOTICIAS EN PUNTA CANA
El juez más buscado del momento está recostado en uno de los ca-
mastros de madera y colchón blanco de la playa exclusiva para los miem-bros de la lujosa membresía Royal Service (“servicio real”) que ofrece el resort caribeño en el que se aloja. A ese sector solo tienen acceso aquellos que llevan en su muñeca la codicia-da pulsera dorada. Faltan quince minutos para las 11 de la mañana en Punta Cana y el sol de este jueves 19 de enero ataca con toda su furia. Llegó hace quince minutos acompa-ñado por su pareja. Vestido con un traje de baño blanco a tono con sus zapatillas, un sombrero beige, gafas
oscuras y un crucifijo plateado que cuelga de su cuello. Amaga a poner-se boca arriba para tomar sol. Pero le resulta demasiado fuerte, incluso para su piel curtida y su bronceado eterno. En lugar de eso, extrae de su maletín Louis Vuitton un bloc de ho-jas tamaño legal, las mismas que se utilizan en Tribunales, manuscritas de punta a punta. Adicto al trabajo confeso (“workaholic”, como dice), co-mienza a leer con devoción, a subra-yar y a hacer anotaciones mientras su compañero toma sol a su lado y juega con el celular. ¿Serán las me-morias de un juez polémico del que hace poco circularon rumores sobre
BUENA VIDA. Oyarbide en una playa vip de Punta Cana. A su lado, con lentes de sol, su compañero de viaje Claudio Blanco. Gastaron US$ 34.000 en 15 días.
NOTA DE TAPA
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e voy para que puedas ser li-bre”, es la frase que Oyarbi-de recuerda de labios de su madre, con quien tenía una
relación casi edípica, antes de mo-rir. Luego de eso, el juez declaró: “Hoy llevo una vida privada plena. Me he sincerado delante de todos mis amigos”, y aseguró que está en pareja con “una persona maravillo-sa”. El entusiasmo es tal que sus allegados aseguran que a ambos se los ve “muy enamorados”, y hasta deslizaron la versión de que el juez habría estado a punto de blanquear su relación en un medio de comuni-cación. También se escucha en los pasillos de Tribunales que Oyarbide estaría pensando en la posibilidad
de casarse y ser el primer juez que lo haga luego de la aprobación de la Ley de Matrimonio Igualitario. Su novio es Claudio Blanco, un joven entrerriano –como Oyarbide–, que se desempeña como entrenador de básquet.
Blanco no se separa de su lado en el resort Paradisus Palma Real. Cuando NOTICIAS se comunicó con su habi-tación –reservada a nombre de Blan-co– él fue quien atendió el teléfono y respondió negativamente al pedido de una entrevista con el juez. “Él ha-ce mucho tiempo decidió dejar de dar notas. Le pido disculpas pero es su decisión. Hasta luego”, saludó y cor-tó. Luego del llamado, solicitaron al hotel no recibir comunicaciones en la habitación 3115.
M
SU PAREJABLANCO
Suite 3115.
Total: US$ 34.500
Cuánto gastó OyarbideEl servicio Royal Service, con mayordomo y acceso a
espacios exclusivos en la playa, la pileta y el sector de
habitaciones, cuesta US$ 685 diarios por persona.
Por 15 días de estadía,
Oyarbide y su acompañante
pagaron US$ 20.500.
Los pasajes
en busisness
de Buenos
Aires a Punta
Cana cuestan
US$ 4.500
cada uno.
Gasto estimado
en shopping y
propinas:
US$ 5.000
Paradisus Palma Realde Punta Cana
RepúblicaDominicana
El Paradisus Palma Real es uno de los “all inclusive”
más lujosos del Caribe. Tiene 12 restarurantes, piscinas
interconectadas, casino y playa privada, entre otros lujos. Oyarbide contrató el Royal Service.
su posible jubilación?NOTICIAS reveló en febrero del
2011 que Norberto Oyarbide (61) to-maba decisiones y trabajaba sobre las causas judiciales que tenía en su poder desde la comodidad de Colmeg-na, su spa predilecto. Esa misma cos-tumbre ahora la practica en las playas caribeñas de la exclusiva Punta Cana. Sus vacaciones, con un costo aproxi-mado de 34.000 dólares, se dan en medio de la catarata de críticas que renombrados colegas como Eugenio Raúl Zaffaroni y dirigentes políticos de diversos partidos realizaron contra él por dos escándalos que surgieron de manera simultánea: uno lo vincula nuevamente (como en la década del '90) con redes de prostitución; el otro habla, justamente, de sus onerosos gastos difíciles de justificar. El escán-dalo comenzó cuando el diario La Na-ción reveló que el juez posee un anillo que costaría 250.000 dólares.
Pero ahora, bajo el sol del Caribe de este mediodía de jueves, todo eso le parece lejano al juez preferido del Gobierno. Tres días antes, el lunes 16, NOTICIAS se había comunicado telefónicamente con el lujoso hotel Paradisus Palma Real, ubicado en la playa Bávaro en Punta Cana, en la costa oriental de República Domini-cana. Como la suite no figuraba a su nombre, esta revista preguntó por su compañero de cuarto, Claudio Blan-co, un joven entrerriano que oficia de árbitro de básquet y es pareja del juez federal.
NOTICIAS: Buenas tardes, ¿se en-cuentra el doctor Oyarbide?
Blanco: No, él está durmiendo la siesta, ¿quién habla?
NOTICIAS: Lo llamo de la revista NO-TICIAS.
Blanco: Uh...NOTICIAS: Queríamos hacerle
una entrevista para pregun-tarle sobre la información que se conoció en las últimas se-manas.
Blanco: Él hace mucho tiempo decidió dejar de dar notas. Le pido disculpas, pero es su decisión. Hasta luego.
OYARBIDE ESTÁ FELIZ. La frase del futbolista Juan Román Riquelme es, en este caso, una descripción irrefu-table si se lo ve a Su Señoría –como adora que lo llamen– caminando por
las inmensas glorietas del hotel, con una sonrisa plantada en su rostro. Parece haber quedado atrás la de-presión que lo mantuvo alejado de Colmegna durante los últimos meses
del 2011, luego de que la Cá-mara Federal (es decir, sus
superiores) le llamara la
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21 de enero del 2012/NOTICIASFOTOS: EDUARDO LERKE (DESDE PUNTA CANA). INFOGRAFÍA: FERNANDO SAN MARTÍN.
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21 de enero del 2012/NOTICIAS 31FOTOS: EDUARDO LERKE (DESDE PUNTA CANA) Y CEDOC.
JUNTOS. Blanco es árbitro de
básquet. Antes del viaje al Caribe
ya se lo vio con Oyarbide en el
carnaval de Gualeguaychú (ab).
atención tres veces y en muy duros términos, nada menos que por su posible mal desempeño en causas de una extrema delicadeza como el caso Skanska, la mafia de los medicamen-tos y el escándalo de Schoklender y la Fundación Madres de Plaza de Mayo. A cada paso mira hacia ambos lados,
con el mismo gesto de querer abarcar a todo el público con el que saluda un actor al finalizar su show. El mismo rictus sonriente que alguno de sus ídolos, cantantes populares, como La Mona Giménez o Ricardo Montaner, regalan sobre el escenario.
En el resort se hace querer. Los
mozos, camareros, maleteros y de-más miembros del personal ya lo co-nocen de otros años y no dudan en acercarse a saludarlo –algunos con un beso– y a conversar con él, con un trato mucho más cariñoso que el que le dispensan al resto de los huéspe-des. Si bien es cierto que la amabi-
lidad extrema es una de las características en toda Punta Cana, con Oyarbide existe un trato diferente. Y no solamente porque contrata un servicio vip, sino por sus maneras tan particulares de moverse, su traje de baño siempre a tono con su calzado y su jaquet o smoking por las noches, que lo tornan en este rincón caribeño un personaje tan curioso y llamativo como lo es en Buenos Aires.
El hotel parece hecho a su medida. Glamoroso y exagerado; paradisíaco y
faraónico. Atributos que, combina-dos, resultan muy atractivos para quien disfruta y hace gala de un estilo ampuloso y ceremonioso. La alegría constante, la posibilidad de relajarse y caminar junto a su pareja casi sin ser detectado son algunos de los motivos que lo llevan a elegir año tras año –y hasta ahora en secreto– este resort rodeado de playas blancas donde la arena no quema. Pero, fundamental-mente, la comodidad de seguir siendo atendido sin la necesidad de realizar nada que no quiera: Oyarbide tiene
NOTA DE TAPA
21 de enero del 2012/NOTICIAS32 FOTOS: EDUARDO LERKE (DESDE PUNTA CANA) Y CEDOC.
AMIGO POLÉMICO
orberto Oyarbide no tiene des-canso. La denuncia de Lorena Martins contra su padre, Raúl Luis Martins, un ex agente de
la SIDE acusado de regentear varios prostíbulos vip en Buenos Aires y México, lo puso en el centro de la escena. A fines de diciembre, Lorena denunció a su padre por proxeneta, presunta trata de personas y el pago de coimas a policías y funcionarios macristas. Por sorteo, la denuncia recayó en el juzgado de Oyarbide, justo cuando salía de vacaciones. La hija de Martins pidió la recusa-ción del magistrado por la amistad que él tiene con su padre.
“Para mí, es Norberto, un amigo de mi papá a quien conozco desde los '90. Fue a mi casamiento y al de mi hermano mayor”, dice Lorena a NOTICIAS. Ya por esos años, Mar-tins era investigado por presunto manejo de algunos prostíbulos por-teños muy importantes.
“En la fiesta de casamiento de mi her-mano, en 1998, Oyarbide vino con una chica mucho más alta, al punto que él le llegaba a la altura de los pechos. Tenía puesta una pulserita y les contaba a to-dos que valía 10.000 dólares”, recuerda Lorena.También rememora el curioso vínculo comercial que unía al entonces secretario de un Juzgado Correccional de la Capital con su padre. “Oyarbide siempre le venía a ofrecer cosas a mi papá para que se las comprara. No sé
de dónde las sacaba. Mi papá le pa-gaba increíblemente bien”.
Entre las muchas fotos que dice tener de Oyarbide, Lorena destaca una en la que se lo ve sentado en un sofá, con un hombre a cada la-do. “Hay que preguntarle a él dónde estaba, aunque no creo que lo pue-da decir. Se parece mucho al sillón que estaba en Top Secret, uno de los locales de mi padre”, afirma su-gestivamente.
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MARTINS
LAZOS. Oyarbide con Raúl Martins -el ex espía
acusado de proxeneta- en una imagen de 1996.
Lo denuncia su hija Lorena Martins.
la membresía que otorga los mayo-res privilegios en el hotel llamada Royal Service. Aquellos que abonan el costoso servicio pueden ingresar a los rincones más exclusivos del ho-tel. Según el folleto impreso en una hoja bien gruesa y rugosa con letras doradas, el servicio se explica como “un ambiente muy especial, solo para adultos, para ofrecerle a usted y a su pareja un servicio como merece un rey”. Entre las comodidades que se brindan sobresalen el área de piscina cubierta, la zona de playa equipada con grandes camas balinesas, un restaurante exclusivo y un servicio de mayordomo que consta de entre-ga de diarios, selección especial de almohadas, preparación del jacuzzi, aromaterapia en la habitación, lus-trado y planchado.
DE PUNTA EN BLANCO. El juez es leal a sus ritos. Así como en Buenos Aires va a diario y respetando rigurosamente el mismo horario al spa Colmegna, y cena siempre en el elegante restau-rante El Mirasol de la Recova, aquí en Punta Cana también repite lugares de comida y descanso. Luego de desa-yunar en el bistró Vento, baja media hora a la playa y luego se recluye en la pileta vip, donde es prácticamente imposible entrar. Un huésped sin ac-ceso a esa piscina no puede observar desde afuera quién está allí debido a
las altas ligustrinas que la rodean. Ese sector de la pileta está ambien-tado con grandes columnas blancas en el centro que forman una especie de Olimpo semicircular equipado con hidromasaje. El estilo romano, las figuras de yeso y mármol forman parte de una estética muy particular.
Curiosamente, muy similar al diseño de Colmegna –cuya membresía anual cuesta 6.000 dólares y él abona reli-giosamente– y del prostíbulo que le generó el mayor escándalo de su vi-da: Spartacus.
Igual que en Buenos Aires, donde luego del masaje duerme una siesta en las camas del spa, regresa cerca del mediodía a su habitación para descansar.
El enorme predio que ocupa el ho-tel tiene 12 restaurantes. Él, por su-puesto, tiene su predilecto, que es uno de los más elegantes: Vento. Si bien hay reglas de etiqueta, no son
demasiado exigentes: solo piden que el comensal ingrese con pantalón lar-go, camisa con mangas y un calzado que cubra la totalidad del pie. Sin embargo, Oyarbide acude cada no-che con una puntillosísima elegancia. Muy llamativa y de alto contraste con respecto a los demás comensales y, sobre todo, a la de su acompañante, quien, cultor de un perfil bajo muy bien cuidado, prefiere una vestimen-ta menos rimbombante. “No sé cómo soporta el calor con esa chaqueta, señor”, bromeó un mozo, y el juez sonrió. Nada logra perturbarlo en la rítmica paz caribeña del resort donde cada espacio común cuenta con una musicalización permanente.
Una habitación con vista al mar con el servicio de lujo Royal Service incluido, como la que ocupa Oyarbi-de, tiene un valor de 685 dólares la noche por persona en esta época del año. Quince días de vacaciones para él y su acompañante sumarían, en-tonces, un total de 20.550 dólares. Si a esa cifra se le agrega el costo de dos pasajes en primera clase de una aerolínea (4.500 dólares cada bole-to) y los gastos extras estimados de acuerdo con el nivel de vida del juez, las vacaciones de Su Señoría rondan los 34.000 dólares.
En la última declaración jurada de bienes que se conoce del magistrado,
Con traje de baño blanco, sombrero
beige y gafas oscuras, extrae de su
maletín Louis Vuitton un bloc de hojas
tamaño legal y comienza a leer.
21 de enero del 2012/NOTICIAS 33FOTOS: EDUARDO LERKE (DESDE PUNTA CANA). INFORMES: FRANCISCO ZOROZA Y MARIEL FITZ PATRICK.
DIEGO LEUCO (DESDE PUNTA CANA)
dleuco@perfil.com
difundida por el periodista Daniel Santoro en el libro “Sr. Juez”, Oyar-bide aseguraba poseer –al menos hasta el 2009– un departamento de 70 metros cuadrados, una parcela en el cementerio Jardín de Paz de Pilar, 1.832 dólares en una caja de ahorro del Banco Ciudad, y dos depósitos de 1.351 y 55.000 dólares (no especifi-ca en qué entidad). Además, asegu-ra percibir un sueldo neto (es decir, luego de las deducciones) de 3.675 dólares mensuales. A esto hay que agregarle otro salario que recibe, ya que subroga en otro juzgado.
No es la primera vez que Oyarbide debe dar explicaciones porque sus gastos no muestran una clara corre-lación con sus ingresos. A finales de la década del '90, mientras el escándalo de Spartacus seguía creciendo, debió afrontar una investigación que detectó que en su patrimonio había 128.732 dólares que no podía justificar. En aquella oportunidad alegó que, como vivió siempre con sus padres y es una persona que no debe mantener una familia, consiguió una capacidad de ahorro muy superior al promedio.
ATARDECERES. La habitación de Oyar-bide es la 3115, ubicada en el sec-tor del hotel más cercano a la playa. Todas las tardes, desde allí, el magis-trado puede obser-var cómo los des-tellos verdes que el mar devuelve a esa hora se van convir-tiendo en un azul profundo al caer el sol. Mientras él go-za de esa postal, en Buenos Aires una vez más está en el centro de la tor-menta. El juez de la Suprema Corte, Eugenio Raúl Zaffa-roni –quien estuvo involucrado en un escándalo porque en al menos cuatro departamentos de su propiedad funcionaban pros-tíbulos– declaró que existe un “pro-blema cuando un funcionario hace gastos que son desproporcionados con su evolución patrimonial”. Hacía referencia a la información que ase-guraba que Oyarbide había adquirido un anillo de brillantes por un valor de 250.000 dólares. Fiel a su estilo, que mantiene en el Caribe y en los pasillos de Comodoro Py, “El Petiso” –como lo bautizaron en Tribunales– no intenta esconder su impresionante joya sino que, por el contrario, la muestra or-gulloso. “Es un brillante dorado, no
todos saben lo que es…”, es la frase que se le adjudican en uno de sus raptos de jactancia.
Lo más llamativo es que, ensayando una explicación, Oyarbide les habría asegurado a sus colaboradores que adquirió ese anillo vendiendo los ob-sequios que había recibido en los úl-timos cinco años. Tras la revelación, los diputados Ricardo Gil Lavedra y Patricia Bullrich reclamaron que Oyarbide explicara en el Consejo de la Magistratura el origen de los fondos con los cuales compró la joya. “Si dice que son regalos particulares, habrá que determinar si tienen relación con
las decisiones tomadas en sus expe-dientes. Si así fuera, eso sería objeto de juicio político”, dice Bullrich. El juez es el preferido del Gobierno: hace dos años absolvió al matrimonio Kirchner en tiempo récord en la investigación por supuesto enriquecimiento ilícito, y controla las causas que más inquie-tan al poder y a la oposición. Hugo Moyano, por ejemplo, es uno de los poderosos que sufre al ritmo de los humores de Oyarbide.
NOTICIAS intentó ubicar nueva-mente por la tarde del jueves 19 a Oyarbide en las instalaciones del Pa-radisus Palma Real. Llamó a su habi-tación pero, luego de la última comu-nicación telefónica con esta revista, “el servicio de llamadas entrantes fue deshabilitado para esa suite”, según rezaba una grabación que oficiaba de contestador automático. Tampoco ob-tuvo respuesta cuando fue a golpear la puerta del dormitorio.
El juez federal ya tiene sobre su espalda 48 pedidos de juicio político y, desde el 2007 hasta hoy, 58 de-nuncias penales en su contra. Las críticas y pedidos de explicaciones siguen lloviendo. Pero en el Caribe siempre sale el sol. ●
LUJOS. Tras el escándalo del anillo de US$ 250.000, el juez y su pareja se divierten, con reposera de por medio. Cielos diáfanos y paseos en barco, lejos de Tribunales.
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