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Sábado 15 de diciembre de 2018 23 www.elsoldecuernavaca.com.mx / www.elsoldecuautla.com.mx EDITORA: MARÍA JOSÉ DÍAZ COEDITOR GRÁFICA: EDUARDO VALVERDE M Ma a t t l l a ac c x x ó óc c h hi it t l l e e n n H Hu ua a x x t t e e p pe e c c Petrograbado de dospersonajes que fue removido de su lugar original y trasladado a las inmediaciones de la cúpula geodésica en el Centro Vacacional Adolfo López Mateos. Representa a un hombre con una deformidad en el pie derecho, la fecha 12 cipactli y una mujer que personifica a la deidad Xochiquetzalli o a Matlacxóchitl / Fotografías: Raúl Francisco González Quezada RAÚL FRANCISCO GONZÁLEZ QUEZADA La historia antigua de Huaxtepec está aún por escribirse en muchas dimen- siones, el avance del asentamiento en las últimas seis décadas ha represen- tado para la localidad, la pérdida de un porcentaje altísimo de su patrimonio arqueológico. La velocidad de la urbanización en la localidad ha superado la capacidad de investigación y en muchos casos, será preciso partir de los pocos vestigios que han sobrevivido de manera indirecta y no por el ánimo original de la investigación, como es el caso de los petrograbados que sub- sistieron a la construcción del Centro Vacacional Oaxtepec.

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Sábado15 de diciembre

de 2018

23

www.elsoldecuernavaca.com.mx / www.elsoldecuautla.com.mx

EDITORA: MARÍA JOSÉ DÍAZ COEDITOR GRÁFICA: EDUARDO VALVERDE

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Petrograbado de dos personajes que fue removido de su lugar original y trasladado a las inmediaciones de la cúpula geodésica en el Centro Vacacional Adolfo López Mateos.Representa a un hombre con una deformidad en el pie derecho, la fecha 12 cipactli y una mujer que personifica a la deidad Xochiquetzalli o a Matlacxóchitl / Fotografías: Raúl FranciscoGonzález Quezada

RAÚL FRANCISCO GONZÁLEZ QUEZADA

La historia antigua de Huaxtepec está aún por escribirse en muchas dimen-siones, el avance del asentamiento en las últimas seis décadas ha represen-tado para la localidad, la pérdida de un porcentaje altísimo de su patrimonioarqueológico. La velocidad de la urbanización en la localidad ha superado lacapacidad de investigación y en muchos casos, será preciso partir de lospocos vestigios que han sobrevivido de manera indirecta y no por el ánimooriginal de la investigación, como es el caso de los petrograbados que sub-sistieron a la construcción del Centro Vacacional Oaxtepec.

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24 El Tlacuache Sábado 15 de diciembre de 2018 www.elsoldecuernavaca.com.mx / www.elsoldecuautla.com.mx

El Centro Vacacional Adolfo Ló-pez Mateos del Instituto Mexi-cano del Seguro Social Oaxte-pec fue inaugurado el 27 de no-viembre de 1964 entre el sonido

del teponaxtle y la chirimía, tras variosaños de construcción de un proyecto her-cúleo marcado por un estado robusto y unejercicio del poder político centralizadoen la figura presidencial. (S/A 1964:168)

Durante su edificación no se realizarontrabajos arqueológicos, a pesar de los ele-mentos de prueba que se tenían para esemomento, los cuales habían verificado laexistencia de evidentes elementos de ca-rácter arqueológico (Palacios 1930) quehubieran bastado para emprender una in-vestigación arqueológica de gran calado.

El propio presidente de la RepúblicaAdolfo López Mateos de cualquier manera,habría encomendado reunir todo aquelloque se tuviera como noticia histórica deOaxtepec al cronista don Valentín LópezGonzález hacia 1963 y éste hizo su trabajo.

Don Valentín no sólo conocía el trabajode Palacios, sino que desde la década de1950 había realizado directamente pros-pecciones en estos espacios donde identi-ficó mucho de lo referido por el autor de1930. Nuestro cronista asumió y cumplió elencargo para posteriormente ser denun-ciante y triste testigo de la destrucción delos contextos arqueológicos durante el pro-ceso de construcción del Centro Vacacional(López 1998:66), sin que de cualquier ma-nera el proceso se detuviera o se imple-mentara rescate arqueológico alguno.

En aquel momento, por decisiones delIMSS, se cortaron brutalmente tres gran-des petrograbados arqueológicos, desde ellugar original donde habían sido elabora-dos siglos atrás, en las inmediaciones dela falla llamada La Malinche, para sertrasladados hasta el área perimetral de lacúpula geodésica.

El traslado fue penoso según cuentadon Valentín, y su ubicación final pasó aformar parte del decorado y magnifica-ción de un pasado que se sintetizaba en

bajo la administración del INAH, y cadacaso presenta distintas problemáticas depropiedad de la tierra donde se asientan.

La ocupación humana en Huaxtepeces tan antigua como el Preclásico MedioTemprano (1200-900 años antes de nues-tra era). Esto lo sabemos con precisiónporque en 1969 Grennes-Ravitz (1974) co-menzó una serie de excavaciones en el lu-gar, las cuales fueron suspendidas por lostrabajos precisamente de ampliación delcentro vacacional. Sin embargo, ahí se re-portaron figurillas cerámicas asociadasprecisamente a este momento.

Esta ocupación temprana en el lugar secomplementó con los resultados de las in-vestigaciones posteriormente realizadasen la Zona Arqueológica km 27.5, perte-necientes fundamentalmente al Preclási-co Tardío (400-150 años antes de nuestraera) (Canto y Cruz 2006; Canto et al. 2010),esta zona se localiza en el perímetro surdel Parque Acuático Oaxtepec y presen-taba dos montículos, sobre el derecho devía de la carretera Cuautla-Oaxtepec.

Entre los años 2016 y 2017 se llevó a ca-bo un Salvamento Arqueológico en algu-nos de los procesos constructivos que haefectuado el Parque Acuático Six FlagsHurricane Harbor, ubicando interesantescontextos arqueológicos de una comuni-dad que vivió durante el período Posclási-co Tardío y vivió el proceso de invasiónespañola.

Al interior de las instalaciones delCentro Vacacional, en las inmediacionesdel jardín que estuvo cercano al hotel ElEmperador, aún se localizan tres petro-grabados in situ, esto es, en su lugar origi-nal. Uno representa una fecha calendárica13 tochtli, que indica el año 1466 de nues-tra era, según se puede observar en el Có-dice Mendoza; su solución plástica estácercana al estilo escultórico mexica delperíodo imperial (1450 de nuestra era)(Umberger 2007:169) y podría estar mar-cando el nacimiento de Moctezuma Xoco-yotzin quien nació precisamente en eseaño y años más tarde tendría amplios in-tereses y ejercicio del poder en la zona. Elsegundo es de distinta factura al primero,pero claramente se observa que represen-

dente de la república habría inaugurado ellugar, y las autoridades del IMSS habríanpresentado con orgullo aquellas piezas,sin que nadie reparara en la triste realidadde lo acaecido.

Del saqueo denunciado por don Valen-tín en el sitio, solamente se tiene noticiade algunas piezas al interior de una colec-ción de artefactos arqueológicos denomi-nada Lagner, cuyas piezas al parecer sonde ese lugar; sin embargo, poco ha sido loque se ha podido recuperar.

Etnohistóricamente referido, se tieneconocimiento que en las inmediacionesdel Centro Vacacional Adolfo López Ma-teos se localizaba el antiguo altepetl deHuaxtepetl que fue cabecera de tributa-ción durante el período Posclásico Tardío(1376-1521 de nuestra era) bajo el poder laorganización político-militar de la TripleAlianza (Excan Tlahtoloyan). De hecho,este espacio en general, junto con el queocupa el Balneario El Bosque, al norte deéste, son considerados como el espacioque ocupó el xochiteipancalli o jardín deMoctezuma en el siglo XV (Morales2004:360).

Algunas estructuras piramidales y ele-mentos arquitectónicos arqueológicos sonaún visibles en la localidad y han sido par-cialmente reconstruidas por agentes no entodos los casos identificados, dentro de lahistoria de la arqueología regional del sigloXX y XXI. Al noreste del Centro Vacacionalse encuentran El Púlpito que es la única deestas zonas que ha sido parcialmente in-vestigada por arqueólogos del INAH, asícomo la gran pirámide denominada LasEscalerillas, las cuales se conservan den-tro del proyecto inmobiliario del Fraccio-namiento Lomas de Cocoyoc.

Al sur, se encuentra un montículo pira-midal en la colonia La Alejandra, en riesgode destrucción total inminente. Al norte,en la Colonia Santa Rosa existe otra es-tructura piramidal expuesta al público allado de la iglesia de esta localidad.

Al este, se encuentra una pirámide deplanta circular dentro del balneario El Bos-que, en condiciones de conservación muyprecarias, prácticamente al punto del co-lapso. Ninguno de estos sitios se encuentra

algunos espacios escultóricos que aún sepueden observar en el lugar.

La arquitectura y el proyecto sígnicoescultórico del Centro Vacacional estámarcado por la monumentalidad y la de-voción a la figura presidencial, al gradoque colocarle el nombre del presidente aeste centro vacacional. Seguramente enaquel momento les pareció prudente tras-ladar estos elementos de origen previo ala invasión española al nuevo proyectoarquitectónico, para fundamentar la pro-fundidad histórica del lugar en que esta-ban construyendo, y para dar legitimidadal proyecto, a costa de una destrucción in-mensa e irreversible.

Sin mucho concierto respecto a su sig-nificado, las tres piezas yacen delimitadaspor pequeñas verjas, alrededor de la cú-pula geodésica sin cédula informativa ymostrando abiertamente los efectos deltorpe proceso de desprendimiento y es-culpidos posteriores para dotarles de unaspecto más regular a algunas caras paradarles aspectos más simétricos. El presi-

Costado derecho del petrograbado con los dos personajes.Es notorio como fue desbastado con martelina en un cos-tado, para otorgarle un aspecto uniforme.

Vista trasera del petrograbado. Se pueden advertir los barrenos en formade abanico, hasta fracturar el fragmento de piedra para poder extraerlo desu lugar original.

Registro de Palacios de lo que él denominó como “Diosa Matlactxóchitl, en relie-ve. Huaxtepec.” (Tomado de Palacios 1930:20).

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Sábado 15 de diciembre de 2018 El Tlacuache 25www.elsoldecuernavaca.com.mx / www.elsoldecuautla.com.mx

ta el pendiente llamado epcololli, el cualportan sistemáticamente Quetzalcóatl yXólotl; asociado a éste, en una faceta co-lindante de la roca madre, se localiza eltercer petrograbado con elementos sola-res (cfr. Gómez 2011:47), en éste se repre-senta un signo Ollin Tonatiuh o sol en mo-vimiento, el cual está bordeado en su sec-ción baja, con un diseño radial de plumas.Es altamente probable que este signo so-lar haya sido la representación de un chi-malli o escudo, arriba del cual se puedeobservar aún, un caracol cortado o eheca-cozcatl, signo asociado también con Que-tzalcóatl.

De los tres petrograbados que se en-cuentran ex situ, esto es, fuera de su lugaroriginal, colocados en las inmediaciones dela Cúpula Geodésica, uno de ellos, presentauna solución técnicamente análoga a la delepcololli y el chimalli, y se trata del rostro deun ave, que representa con alta probabili-dad, un ejemplar perteneciente a la FamiliaStrigidae, un tecolote o búho, con la repre-sentación de plumas ornamentales en la ca-beza que semejan orejas, por lo que puedepertenecer al género Bubo o al Otus (Corona2014:22), este es el diseño que sirve de iden-tificación comercial e institucional actual-mente, al propio Centro Vacacional.

Los otros dos petrograbados están clara-mente correlacionados entre sí, y por su so-lución plástica, seguramente pertenecen almismo período histórico.

El primero muestra dos personajes, y unnumeral calendárico al centro, uno de elloses masculino y muestra un pie deforme,mientras que el segundo es femenino ymuestra una en su mano una flor. El segun-do petrograbado muestra a un personajetambién con un pie deforme, una sonaja oacocote en una mano, y está asociado a unaolla aparentemente de pulque, en el pechomuestra un pendiente con la forma aparen-temente de un oyohualli, el cual era un pen-diente en forma de gota elaborado regular-mente de concha madreperla, y estaba síg-nicamente asociado a deidades de la músi-ca, este último personaje ha sido

interpretado como un bebedor de pulque.(cfr. Palacios 1930; Rivas 1996; Lambert2009; Gómez 2011:47-50).

A pesar que en diferentes ocasiones hansido abordados académicamente los signosrepresentados en estos petrograbados des-de hace décadas, aún se encuentra pen-diente un análisis que los investigue en con-junto y desarrolle registros adecuados deestos.

Por ahora, nos centraremos particular-mente en el petrograbado de los dos perso-najes. Sobre éste existen interpretacionesprevias. Desde el trabajo de Palacios (1930)se ha llegado a considerar que el numeralincluido en esta piedra es el de 10 flor, y quepor ello debería considerarse a la figura fe-menina como la deidad Matlacxóchitl quesignifica literalmente Diez Flor. Esta mismaidea que se repite parcialmente en Rivas(1996).

La interpretación de esta deidad Matla-cxóchitl deriva de lo registrado en las Rela-ciones Geográficas del siglo XVI de Huaxte-pec, donde se indica que en esta localidadaparte de la deidad Quilaztli, “…tenían otroídolo que llamaban matlac suchil, que quie-re decir diez rosas, el cual tenía por tequiovenir a tiempos de noche por las calles, ydar voces y alaridos, diciendo que ya eratiempo que saliesen a la guerra, porque leshabía de suceder bien. Y que luego se aper-cibían a la guerra, y que iba con ellos a laguerra… Y que a este ídolo que no le sacrifi-caban ninguna cosa, más de que iban a éllos enfermos de perlesía y de otras enfer-medades graves, los cuales le ofrecían pul-que y cosas de comer.” (Acuña 1985:203)

Un análisis más detenido del petrogra-bado nos muestra que no se puede interpre-tar al margen de su vínculo con el petrogra-bado del bebedor de pulque y al otro másque yace aún en La Malinche, en un puntomuy cercano a donde se aprecia que fueronarrancados estos dos que se encuentranahora acompañando a la cúpula geodésica.Su orientación y posición relacional debióimportar en su significación funcional y esonos fue arrebatado cuando se decidió des-

en los bíceps, y en las muñecas muestraclaramente un brazalete en una de ellas,mientras que en la otra no es fácil de obser-var. En su mano izquierda porta un ayaca-chtli o sonaja, adornada con plumas o ele-mentos vegetales, así como un gran ele-mento al parecer vegetal, quizá una granflor u hoja. En la mano derecha quizá porta-ba un sahumador, pero actualmente la pie-dra está rota en este punto. De su boca tam-bién emerge una gran vírgula de la palabra,distinta a la de la mujer, con roleos haciaarriba y abajo y un elemento trilobuladohacia arriba. Es importante mencionar quemuestra el pie derecho con una deformidad,análogo a la representación del mismo pieen el caso del petrograbado del bebedor depulque. Es poco factible que se trate de unerror en la solución técnica de la represen-tación del ser humano, pues se puede ad-vertir cómo el petrograbado destaca inclusoel maléolo de la tibia en ambos pies, pruebade la intención del detalle de este elementoanatómico, además, los pies están descalzosy el personaje parece estar en oposición deavance.

La imagen de la izquierda podría o no serla deidad local de Huaxtepec llamada Ma-tlacxóchitl o Diez Flor, pero en todo caso, nolo sería con dependencia al numeral que seencuentra entre ellos, sino porque estaría-mos vinculando la información etnohistóri-ca con lo que se aprecia en la figura femeni-na petrograbada, toda vez que esta imagenen efecto, porta una flor.

Podría también tratarse de la deidad deXochiquetzalli, consorte de Xochipilli comoafirma Rivas (1996), y tener un vínculo delllamado complejo Xochipilli con la deidadXólotl, vinculada con la deformidad (Rosado39-42), cuestión presente en el personajemasculino del mismo petrograbado y en elbebedor de pulque que debió estar en las

prenderlos de su lugar original. En ese puntoexisten hasta la fecha, una cantidad impor-tante de veneros de agua, que emergen en-tre los intersticios de las piedras cercanas alas que fueron elegidas para los petrograba-dos. Su vínculo general contextual de lospetrograbados, sería precisamente el de es-te sitio con manantiales y profusa vegeta-ción.

Por otro lado, el signo numeral que seencuentra entre los dos personajes no esuna flor, sino un signo calendárico, se tratade cipactli, y el numeral no es diez, sino do-ce. En todos los registros previos, esto no sehabía alcanzado a distinguir con claridad ylos dibujos realizados se prestaban a muchaconfusión.

Por un lado, el personaje de la izquierdaes una mujer con falda y un quechquemitl,presenta un tocado con plumas largas, ore-jera y una banda en la cabeza que rematacon dos largos tramos detrás su nuca. Su fal-da lleva una ancha y larga faja que, tras suanudado en la cintura, cuelga en un par delargos remates que terminan en dos ele-mentos circulares con festones. La mano iz-quierda se encuentra detallada al grado deobservarse sus uñas y se flexiona a la alturade la cintura, mientras que en la mano dere-cha porta una flor que avanza hacia el per-sonaje masculino, en ambas muñecas llevaadornos y sus pies están descalzos y posi-ción de avance. De su boca emerge una vír-gula compleja con roleos hacia abajo y ha-cia arriba.

Por su lado, el personaje de la izquierda,muestra braguero con un remate volado ha-cia atrás. En la cabeza porta un tocado conmenos plumas que la mujer y un bien deli-neado adorno de papel, porta, además, unabanda en la cabeza, también un bezote apa-rentemente, y una gran orejera con pen-dientes, en ambos brazos muestra ajorcas

Dibujo detallado del petrograbado de los dos personajes localizado en el CentroVacacional Adolfo López Mateos, a un lado de la cúpula geodésica. Interpreta-ción propia y realización técnica del dibujo a cargo de Gonzalo Gaviño Vidarte. Sedecidió colocar un color más obscuro a aquellos elementos que se consideróson secciones de piel descubierta.

Cipactli representado en el Códice Magliabechiano

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inmediaciones de éste. Otra opción es que el registrocalendárico 12 cipactli sea el nombre de esta mujer.

El hombre por su parte podría ser nanahuatzincomo sugiere Rivas (1996), o solamente un guerrerocon elementos del atuendo que describe también lasRelaciones Geográficas cuando indican que “…los va-lientes y que iban con las armas […], los cuales lleva-ban grandes plumerías y mucho oro y piedras de mu-cho valor, y bezotes y orejeras de oro o de piedraspreciosas…” (Acuña 1985:204), pero al parecer, un ele-mento de gran significación es la deformidad en elpie. Si Matlacxóchitl era una deidad local que curabade la perlesía o parálisis, este bien parecería ser elvínculo de estas imágenes.

En general podría tratarse de un ritual en pre-sencia de esta deidad femenina asociada a la flor, yun hombre con esta afectación de la deformidad,donde ambos cantan o recitan, en presencia de estemomento calendárico del 12 cipactli. El signo de ci-pactli se reconoce fácilmente por los elementosque representan la dureza de la piel de este ser so-brenatural, que se representa regularmente enmúltiples códices, con cuchillos de pedernal, ade-más de la presencia de colmillos y la piel escamosa.En un ejercicio por asociar los colores presentespara cipactli en el Códice Magliabechiano, para ha-cer más claro este ejercicio identificatorio, impusi-mos los mismos colores del códice a los elementos

presentes en el petrograbado de Huaxtepec.Cuando el año solar, el de 365 días, empezaba

con el portador caña en uno de los cuatro modelosanuales del calendario indígena del Posclásico Tar-dío, se partía entonces desde el primer día que eraprecisamente el día 1 cipactli, así entonces, el día 12cipactli sería en este caso, el primer día de la déci-ma veintena llamada entre los mexica Xócotl hue-tzi “cae el fruto”, y también huey miccaílhuitl “granfiesta de los muertos”.

Esta festividad de esta veintena coincide con losmeses actuales de agosto y septiembre y estabadedicada a un ritual vinculado con los guerrerosmuertos en batalla fundamentalmente. (Johansson2005:166 y ss.; 2003:195 y ss.)

Si el referente calendárico presente en el petro-grabado está haciendo alusión a esta veintena, ésteenmarcaría un ritual local que en Huaxtepec serealizaba en ese momento, con la presencia de unadeidad local llamada Matlacxóchitl, que asistía aaquellos aquejados de perlesía, como eventual-mente se encontraba el sujeto masculino parcial-mente, debido a su deformidad en el pie derecho.Más allá de que, también en Huaxtepec se verifica-ra la festividad dedicada a los guerreros muertos enbatalla como en otras partes del Altiplano Central.mexica Xócotl huetzi “cae el fruto”, y también hueymiccaílhuitl “gran fiesta de los muertos”.

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1. PROCESO DE IMPOSICIÓN CROMÁTICA DE LAS TONALIDADES EN QUE LOS ELEMENTOS DE CIPACTLI SE PRESENTAN 5EN EL CÓDICEMAGLIABECHIANO. INTERPRETACIÓN NUESTRA, IDEA Y REALIZACIÓN TÉCNICA DEL DIBUJO A CARGO DE GONZALO GAVIÑO VIDARTE.

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