Upload
vukhanh
View
217
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
Página 1 de 18
5. a.TE. Herramienta para tareas estratégicas.
Herramienta: Plan a mediano plazo
Propósito:
Construir participativamente un plan de desarrollo territorial a mediano plazo, consensuado entre los actores colectivos e institucionales, redes relevantes y otros grupos y enmarcado en la visión de futuro del territorio, e identificar posibles proyectos estratégicos relacionados con los motores de desarrollo propuestos para la etapa inicial de dicho plan.
Referencias:
Mario Samper, José C. Arze, Andrea Padilla y Hernán González. s.f. Orientaciones y
herramientas para el desarrollo de los territorios rurales. Basado en el capítulo VI del Libro. Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura. Coronado – Costa Rica (de próxima publicación)
1. Plan a mediano plazo 1
Para la gestión territorial, es importante saber cómo se distribuyen espacialmente las distintas redes
sociales, qué partes del territorio están más interconectadas mediante redes, y cuáles están
desvinculadas de ellas, cuáles redes tienen mayor cobertura geográfica, y dónde se superponen varias
redes.
La estrategia de desarrollo de un territorio parte de un análisis
de su situación actual y de las tendencias históricas que inciden
en su desarrollo, para proyectarlas hacia un horizonte de largo
plazo, valorar posibles escenarios, y consensuar una visión de
futuro que se traduce en un conjunto de “apuestas estratégicas”
relacionadas con motores de desarrollo y sus correspondientes objetivos, criterios de éxito y líneas de
acción. Estas orientaciones generales constituyen una suerte de “mapa de ruta” consensuado para el
desarrollo del territorio, susceptible de revisión a lo largo del proceso, y que a su vez establece un marco
de referencia para sucesivos planes a mediano plazo, con horizontes temporales intermedios. Estos
planes, que también han de construirse en forma ampliamente participativa, definirán los compromisos
y mecanismos de incorporación efectiva de los diversos actores territoriales, así como objetivos a
mediano plazo acordados entre ellos, los ejes y acciones a impulsar, recursos requeridos, responsables y
plazos. También deben establecer criterios e indicadores para valorar los avances, y mecanismos de
seguimiento y evaluación, auditoría social y rendición de cuentas.
1 Tomado del capítulo V del libro Orientaciones y herramientas para el desarrollo de los territorios rurales (Mario Samper, José C. Arze, Andrea Padilla y Hernán González, en proceso de revisión final para su publicación por parte del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura), con insumos y elementos adatados o resumidos a partir del documento inédito “Construcción social de la estrategia de desarrollo del territorio: Orientaciones metodológicas” (Mario Samper y Laurent Dietsch, s.f.).
Plan territorial a mediano plazo define:
objetivos de mediano plazo
en torno a motores de desarrollo y
proyectos estratégicos relacionados
Página 2 de 18
Conviene que los planes territoriales a mediano plazo den origen a acciones estructuradas en torno a los
motores de desarrollo y los objetivos asociados a ellos, que permitan lograr resultados concretos y
sustanciales en un plazo intermedio, menor que el de la prospectiva, pero mayor que el de la
planificación operativa. Una modalidad interesante y útil para este propósito es la de los proyectos
estratégicos, asociados a uno o más motores de desarrollo. Dichos proyectos, y el impulsor
correspondiente, pueden corresponder a un territorio específico, a dos o más territorios
interrelacionados, o incluso a una región multi-territorial. En el plan a mediano plazo conviene identificar
posibles proyectos estratégicos, a desarrollar posteriormente como tarea operativa.
¿Qué entendemos por planes a mediano plazo y proyectos estratégicos?
En general, un plan es la concreción de una intención en un conjunto estructurado de acciones a realizar
para determinado propósito, a partir de las decisiones y compromisos de los individuos, grupos, redes,
organizaciones o instituciones involucrados. Puede entenderse como un modelo sistemático previo a la
realización de dichas acciones, el cual a menudo se expresa en un documento propositivo, con indicación
de:
Las tareas requeridas para lograr uno o varios objetivos precisos.
Las metas para valorar el grado en que han sido alcanzados.
Los recursos de diversas índoles necesarias, incluyendo los financieros, humanos, logísticos, u otros.
La programación de las acciones a lo largo del período de ejecución del plan.
Las instituciones u organizaciones responsables de ejecutarlas.
Cómo se evaluará la implementación del plan, y
A quiénes se deberá informar o rendir cuentas al respecto.
Página 3 de 18
Ilustración 1. Dimensión temporal de los planes
Los planes a mediano plazo son intermedios entre
horizontes temporales más largos, como los de la
prospectiva, y los plazos más cortos de la planificación
operativa. Su duración puede definirse de manera
distinta según las circunstancias, incluyendo la mayor o
menor lejanía del horizonte prospectivo y los
mecanismos y procesos de planificación existentes en cada caso. Por ejemplo, si el horizonte a largo
plazo es de 20 años, el plazo intermedio podría ser de 10 años, y el plan a mediano plazo puede a su vez
incluir metas intermedias, vg. a cinco años. Algunas veces se definen plazos menores para los planes a
mediano plazo, pero es importante diferenciarlos de los correspondientes a la planificación operativa.
En todo caso, al igual que el horizonte temporal del ejercicio prospectivo, el horizonte del plan a
mediano plazo han de definirlo los actores involucrados, con asesoría técnica, pero tomando muy en
cuenta sus propios compromisos, capacidades y procesos.
Un plan desarrollo territorial a mediano plazo es un instrumento para la gestión social de procesos
concertados entre los actores sociales e institucionales u otros comprometidos con su realización, para
avanzar hacia la consecución de objetivos asociados a motores de desarrollo y a una visión de futuro
para el territorio.2
2 Sobre la gestión social del desarrollo territorial, puede consultarse la obra de Sergio Sepúlveda y Marcelo Duncan. 2008. Gestión de territorios rurales en Brasil. San José: IICA. Sobre planes de desarrollo rural sostenible hay múltiples trabajos; en la perspectiva europea, para la experiencia española puede consultarse el texto “Estructura y contenidos del plan de zona rural”, en Ministerio de Medio Ambiente y Medio rural y marino. s.f. Primer programa de desarrollo rural sostenible, tomo II, pp. 379 a 388. Entre los textos latinoamericanos cabe mencionar la revisión general de Carlos Sandoval. 2014. Métodos y aplicaciones de la planificación regional y local en América Latina. Serie Desarrollo Territorial No. 17. Santiago de Chile: CEPAL, y trabajos específicos con enfoques distintos, pero con algunos denominadores comunes y complementariedades, como los de Alberto Adib. 2010. Guía para formulación y gestión de planes de desarrollo rural sostenible. Un abordaje participativo con enfoque territorial. Asunción, Paraguay: IICA, y José Ricardo Flores. 2014. Observación y planificación estratégica territorial. Serie de Materiales Didácticos para la Formación en Desarrollo Local, ConectaDEL, s.p.i.
Un plan territorial a mediano plazo moviliza y orienta esfuerzos conjuntos o coordinados de actores comprometidos con la realización de acciones conducentes a impulsar los motores de desarrollo identificados y lograr los objetivos estratégicos asociados a ellos, en función del proyecto de futuro del territorio.
Página 4 de 18
Al formular planes de desarrollo a mediano plazo, como al construir la visión prospectiva del territorio,
es importante involucrar activamente y con capacidad decisoria a todos los actores territoriales y
considerar de manera explícita a los grupos históricamente excluidos de la gobernanza y de los
beneficios del desarrollo, a fin de incorporarlos tanto en su elaboración como en su implementación,
seguimiento, evaluación y auditoría social.
Los proyectos, en general, son ejercicios de planificación claramente delimitados en el tiempo y en el
espacio, con objetivos específicos y resultados concretos a generar, con metas e indicadores asociados a
ellos, e indicación de las actividades precisas a realizar, con determinados recursos financieros y
humanos. Su elaboración y ejecución suponen acuerdos entre determinados actores, grupos o
individuos, comprometidos con su realización e involucrados en los procesos de los cuales forman parte.
Los proyectos de desarrollo territorial deben enmarcarse en planes de desarrollo y visiones prospectivas,
y es importante establecer de manera explícita cómo contribuirán a su realización en el corto a mediano
plazo.
Por proyecto estratégico entendemos, aquí, un proyecto que implementa un eje de importancia
estratégica para el desarrollo de un país, región o territorio, articulando esfuerzos concertados y
acciones sostenidas en pro de un objetivo a mediano plazo y capaz de incidir de manera sustancial en la
transformación de la realidad ambiental, económica, social, político-institucional o cultural, generando
sinergias con acciones transformadoras en otros ámbitos.
Los proyectos estratégicos territoriales atienden
necesidades medulares, problemáticas centrales y
oportunidades clave para el desarrollo integral de un
territorio (o eventualmente de dos o más territorios
interconectados), en el marco de las orientaciones de su
visión prospectiva y planeamiento estratégico. Son
proyectos sustanciales, con una duración que trasciende el
corto plazo, y con resultados e impactos previstos significativos en términos del desarrollo territorial.
Suelen movilizar esfuerzos sostenidos de múltiples actores y recursos sustanciales. Pueden articular
varios motores de desarrollo o potenciar el impacto de uno de ellos en otro u otros, de manera que
contribuyan a transformaciones importantes en el sistema-territorio.
Cada vez hay mayor claridad acerca de la relevancia de los proyectos estratégicos en procesos de
desarrollo territorial: “La principal clave para el éxito de un Plan Estratégico consiste en encontrar y
viabilizar los proyectos estratégicos de un territorio. Se trata de aquellos proyectos que por sí solos
Un proyecto estratégico territorial: Concretiza los planes y objetivos de mediano plazo en acciones concertadas y sostenidas de un conjunto de actores en torno a uno o más motores de desarrollo, contribuyendo a transformaciones sustanciales en el sistema-territorio.
Página 5 de 18
Síntesis Los planes y proyectos estratégicos del desarrollo territorial son fundamentales para traducir en acciones a mediano plazo la visión prospectiva, con sus impulsores y objetivos asociados. El plan de desarrollo territorial orienta, asimismo, la planificación operativa y los proyectos a corto plazo e iniciativas de inversión.
representan una carga de profundidad capaz de remover los cimientos de la situación y transformar la
realidad en el sentido definido por el Modelo de Territorio.”3
Diversos ejemplos de proyectos estratégicos asociados a motores de desarrollo pueden encontrarse en
la planificación regional y territorial tanto europea como latinoamericana. Aunque muchos están
asociados a motores de desarrollo económico, suelen tener por finalidad impulsar el desarrollo de un
territorio o región. Otros promueven la cooperación transfronteriza o interterritorial. Algunos centran su
atención en la gestión ambiental, en el fortalecimiento de las redes sociales, en el afianzamiento de las
identidades culturales, o en los procesos de gobernanza, pero exploran sus interrelaciones con otras
facetas del desarrollo territorial.
5.1. Objetivo
Construir participativamente un plan de desarrollo territorial a mediano plazo, consensuado entre
los actores colectivos e institucionales, redes relevantes y otros grupos y enmarcado en la visión de
futuro del territorio, e identificar posibles proyectos estratégicos relacionados con los motores de
desarrollo propuestos para la etapa inicial de dicho plan.
5.2 ¿Cómo hacerlo?
Los dos momentos principales corresponden respectivamente a:
Elaborar y validar participativamente el plan de desarrollo territorial a mediano plazo.
Implementar, someter a auditoría social y revisar periódicamente el plan de desarrollo territorial a
mediano plazo.
El primero de ellos se aborda aquí de manera más detallada, mientras que el segundo se refiere a un
proceso sostenido que se articula directamente con las tareas operativas, de manera que varias de las
acciones a realizar se explicarán al abordar dicho tipo de tareas.
3 Flores, José Ricardo. 2014. Observación y planificación estratégica territorial. Serie de Materiales Didácticos para la Formación en Desarrollo Local, ConectaDEL, s.p.i., p. 14.
Página 6 de 18
Ilustración 2. Secuencia metodológica:
Primer momento. Elaborar y validar participativamente el plan de desarrollo territorial
a mediano plazo4
Este momento se puede desglosar en diversos pasos o tareas:
i. Lograr acuerdos iniciales sobre el proceso de elaboración del plan
Definir el horizonte a mediano plazo.
Gestionar compromisos concretos.
Formalizar esos compromisos
ii. Retomar resultados pertinentes del análisis de situación y visión a largo plazo, como insumos para el
plan de desarrollo territorial a mediano plazo
iii. Identificar ejes y acciones estratégicas prioritarias5
iv. Identificar y esbozar proyectos estratégicos para impulsar los motores de desarrollo y avanzar hacia
el logro de los objetivos a largo y mediano plazo
v. Establecer un sistema de seguimiento/evaluación y la línea base del plan a mediano plazo
vi. Definir procedimientos de rendición de cuentas y auditoría social
vii. Preparar y validar el documento del plan de desarrollo territorial
viii. Revisión periódica del plan de desarrollo territorial
Lo que se pretende lograr es una planificación estratégica para el horizonte temporal intermedio
acordado, que traduzca las orientaciones generales de la visión prospectiva en acuerdos concretos entre
actores, en un conjunto de objetivos, ejes y acciones prioritarias definidos en forma consensuada, y un
4 Varios elementos metodológicos referentes a la elaboración de planes de desarrollo territorial retoman y elaboran ideas y algunos instrumentos que se desarrollaron en el texto “Horizontes y planes intermedios”, de Laurent Dietsch y Mario Samper, en el documento inédito “Construcción social de la estrategia de desarrollo del territorio: Orientaciones metodológicas”. 5 Adaptado a partir del texto anteriormente citado de Laurent Dietsch y Mario Samper
Página 7 de 18
procedimiento definido para el seguimiento, evaluación, auditoría social y rendición de cuentas. La
exitosa realización de estas actividades y productos influirá en la efectividad de la implementación y
seguimiento del plan elaborado.
Seguidamente se sugieren algunos pasos pertinentes y posibles instrumentos para la realización de cada
una de esas tareas:
i. Lograr acuerdos iniciales sobre el proceso de elaboración del plan
Los pasos principales para esta tarea, indispensable para la validez, legitimidad y viabilidad del plan, son:
Definir el horizonte a mediano plazo, usualmente corresponde a un punto intermedio en el período
para el cual se formuló la visión de futuro del territorio;
Gestionar compromisos concretos de instituciones públicas nacionales o estaduales presentes en el
territorio, gobiernos locales y actores sociales relevantes, redes u otros grupos para participar en la
elaboración e implementación del plan;
Formalizar esos compromisos mediante acuerdos institucionales e interinstitucionales, con
designación de representantes y personal.
Definir el horizonte a mediano plazo
Para definir el horizonte a mediano plazo, conviene tomar en cuenta tanto la duración total del período
para el cual se formuló la visión de futuro como los plazos definidos en otros instrumentos de
planificación vigentes en el territorio, así como los que sean pertinentes del ámbito nacional o
subnacional. Así, por ejemplo, si el período de la prospectiva es de veinte años, el horizonte intermedio
podría ser una decena de años, de manera que habría dos planes a mediano plazo sucesivos, pero si la
visión de futuro se define a más largo plazo, podrían ser tres o incluso más. En todo caso, inicialmente se
define el horizonte temporal sólo para el primero. Al hacerlo, se sugiere revisar de nuevo los períodos
para los cuales se han elaborado otros planes, tanto en el propio territorio (vg. por los gobiernos locales,
individualmente o asociados en una mancomunidad, y por parte de otras iniciativas de desarrollo) como
en su entorno regional, provincial/departamental/estadual, o nacional. La información al respecto
puede compartirse en una reunión, durante la cual el grupo puede sugerir y valorar opciones de
horizonte temporal para el plan territorial, las cuales a su vez pueden consultarse a los actores más
relevantes, y definirse en una próxima sesión de trabajo.
Página 8 de 18
Gestionar compromisos concretos
Los preparativos para elaborar el plan de desarrollo territorial pueden realizarse en un taller con
representantes de actores locales, redes u otros grupos participantes en el proceso, con los cuales se
propone:6
Revisar los pasos y condiciones requeridas (personales, materiales y técnicas) para llevar a cabo el
proceso de planificación
Identificar posibles aportes de actores participantes en el proceso y definición de compromisos
Elaborar un cronograma de trabajo, detallando las actividades a realizar, los tiempos, los recursos,
los responsables y participantes
Aprobar del cronograma por los participantes al proceso.
Como producto de este paso, se espera contar con una matriz de planificación, la cual puede tener los
contenidos siguientes:
Tabla 1 Matriz de Planificación
Actividades Fecha/
tiempos
Responsables Participantes Recursos
requeridos
Observaciones
Formalizar compromisos y acuerdos para la elaboración del plan
Es importante que los compromisos tanto de los diversos actores territoriales como de las entidades
externas al territorio para apoyar la elaboración del plan a mediano plazo se formalicen mediante
acuerdos suscritos por representantes autorizados de las partes, o se plasmen en decisiones tomadas y
comunicadas oficialmente por las autoridades o instancias pertinentes de cada institución u
organización. Conviene que se especifiquen las acciones a realizar, los plazos para su realización, y los
recursos humanos, materiales y financieros que se movilizarán para ello.
ii. Retomar resultados pertinentes del análisis de situación y visión a largo plazo, como
insumos para el plan de desarrollo territorial a mediano plazo
El equipo técnico facilitador o un grupo de trabajo conformado por representantes de instituciones y
organizaciones interesadas pueden revisar la documentación generada anteriormente respecto al
análisis de situación y visión a largo plazo. Este equipo puede elaborar y compartir una presentación
6 Este apartado se toma textualmente del trabajo de Laurent Dietsch y Mario Samper antes citado.
Página 9 de 18
sintética con las personas, grupos, redes y entidades participantes en la elaboración del plan. Su
discusión podrá generar nuevas ideas al respecto, y servirá como insumo para el paso siguiente.
Del análisis de situación, resultan especialmente pertinentes en este momento las conclusiones sobre
factores limitantes y potencialidades para los distintos acervos territoriales, como también para el
territorio como sistema pluridimensional, y sobre las barreras y oportunidades para el desarrollo del
territorio a partir de la comprensión de las tendencias y procesos de cambio relacionados.
De la visión a largo plazo, interesan ahora sobre todo los motores de desarrollo priorizados y los
objetivos a largo plazo asociados a ellos, en el marco de una visualización compartida del futuro al cual
se aspira para el territorio.
Para esto se propone:
Retomar resultados pertinentes del análisis de situación y visión a largo plazo. Se sugiere que el equipo
técnico facilitador o el grupo de trabajo realice las siguientes tareas propuestas:
Revisar documentación análisis de situación: conclusiones, factores limitantes, potencialidades,
barreras y oportunidades de desarrollo, tendencias.
Revisar visión a largo plazo: motores priorizados, objetivos a largo plazo asociados.
Elaborar presentación sintética.
Compartir con actores comprometidos en elaboración del plan.
Definir los cambios específicos que se propone lograr en el horizonte temporal intermedio, y expresarlos
como objetivos estratégicos a mediano plazo.
Se sugiere desarrollar los pasos siguientes:7
Convocar a un taller a representantes de actores locales
Recapitular lo acordado en cuanto al horizonte temporal intermedio.
Derivar objetivos estratégicos de mediano plazo desde los objetivos y la visión de largo plazo,
definiendo para cada uno de los cambios específicos que se quieren lograr en el plazo determinado.
Compartir las conclusiones de este taller con otros actores sociales e institucionales, grupos y redes
relacionados con el proceso, incluyendo a los históricamente excluidos de la gobernanza territorial.
Valorar sus comentarios, objeciones o sugerencias en otra sesión de trabajo del grupo inicial.
Definir objetivos a mediano plazo.
Generar una versión revisada de los objetivos a mediano plazo.
Compartir nuevamente con los actores consultados.
7 Adaptado a partir de la sección correspondiente del texto antes citado de Laurent Dietsch y Mario Samper
Página 10 de 18
Tabla 2 Matriz de motores y objetivos
Las conclusiones de este taller se comparten con otros actores sociales e institucionales, grupos y
redes relacionados con el proceso, incluyendo a los históricamente excluidos de la gobernanza
territorial. Sus comentarios, objeciones o sugerencias se valoran en otra sesión de trabajo del grupo
inicial, para generar una versión revisada de los objetivos a mediano plazo, la cual se comparte
nuevamente con los actores consultados.
El ejercicio anterior permitirá contar con varios objetivos estratégicos a mediano plazo formulados
participativamente por representantes de las organizaciones e instituciones, redes y grupos
directamente involucrados, y consultados a otros actores territoriales.
iii. Identificar ejes y acciones estratégicas prioritarias8
Una vez formulados los objetivos a mediano plazo, se trata ahora de definir las líneas de acción para ese
horizonte temporal, las metas concretas a alcanzar y los planes de acción para lograr estas metas. Para
este propósito, en uno o varios talleres con representantes de actores locales, se sugiere desarrollar los
pasos siguientes:
Definir las líneas de acción estratégicas a mediano plazo, las cuales se derivan de las líneas
estratégicas a largo plazo para el horizonte temporal intermedio.
Definir de las metas concretas a mediano plazo que se espera lograr para cada línea estratégica a
mediano plazo. Estas metas ayudan a concretar aún más lo que se quiere lograr con el plan a
mediano plazo. Deben ser realistas y efectivamente alcanzables.
Definir las acciones a realizar para alcanzar las metas propuestas e identificar los recursos
disponibles para ello o que será necesario gestionar.
Un cuadro como el que se presenta a continuación puede ayudar a que los participantes en el proceso
visualicen la coherencia global entre objetivos, líneas de acción y metas.
8 Adaptado a partir del texto anteriormente citado de Laurent Dietsch y Mario Samper.
Motores de desarrollo Objetivos estratégicos de largo plazo Objetivos estratégicos a mediano plazo
No. 1 No. 1 Los cambios que esperamos lograr en el territorio, en el
mediano plazo, para avanzar hacia este objetivo estratégico
de largo plazo
No. 2 No. 2 Se repite para No. 2
Etc. Etc. Etc.
Página 11 de 18
Tabla 3 Matriz líneas de acción y metas a mediano plazo
Objetivo a mediano plazo Líneas de acción a mediano plazo Metas concretas a mediano plazo
No. 1 ¿Cómo se traducen estas líneas
estratégicas a largo plazo en ejes de
mediano plazo?
¿En concreto que meta esperamos alcanzar en este
mediano plazo?
No. 2 Se repite para No. 2 Se repite para No. 2
Etc.
Para el logro de las metas planteadas, es deseable precisar en el plan a mediano plazo las acciones o
conjunto de acciones que se requiere impulsar, ya sea con recursos con los cuales ya cuentan los actores
locales o complementándolos con otros recursos a gestionar.
Las acciones a impulsar para lograr los objetivos a mediano plazo e impulsar los motores de desarrollo
asociados a ellos podrán relacionarse luego con proyectos estratégicos y, en la planificación operativa,
con proyectos a más corto plazo.
Al definir las acciones estratégicas y la participación de los distintos actores, es importante lograr una
doble articulación entre:
Acciones sectoriales y motores de desarrollo: articular las acciones sectoriales (impulsadas por
determinados actores sociales o institucionales en función de sus propias prioridades) en torno a los
motores de desarrollo, objetivos, metas y acciones estratégicas definidas a nivel territorial, y
Acciones en diferentes escalas: articular las acciones que se deben impulsar a diferentes niveles
territoriales, ya sean localizadas en algunas zonas del territorio (para problemáticas específicas) o en
escalas territoriales más amplias (con otros territorios relacionados), o para la formulación de políticas
nacionales que apoyan el desarrollo del territorio, etc.
Para hacer esto se sugiere:
Analizar la articulación que se propone considerar cada línea de acción estratégica a mediano plazo
(con sus respectivas metas) y el conjunto de acciones específicas a impulsar para lograr estas metas,
ordenadas por dimensión del desarrollo del territorio y por escala territorial.9
Completar la siguiente matriz permite plasmar los resultados del análisis
9 No es preciso llenar todas las casillas de esta matriz, sino solamente las que se estimen relevantes para lograr las metas planteadas. Así mismo, no es necesario que participen todos los actores en la formulación de cada una de las líneas de acción, sino se puede realizar por grupos de actores en función de sus intereses propios de participar en la implementación de determinadas líneas de acción, creándose así, de hecho, espacios de concertación de acciones alrededor de determinados ejes estratégicos de acción.
Página 12 de 18
Tabla 4. Articulación de líneas de acción estratégicas y dimensiones del desarrollo a diferentes escalas
Acervos
Escalas territoriales
Ambiental Económico Social Político-
institucional
Cultural
Comunitaria
Unidades territoriales
(zonas)
Territorio en su conjunto
Nivel supra territorial (a
definir)
Nivel nacional
Elaborar finalmente un documento con los diferentes elementos antes mencionados: objetivos,
líneas de acción y metas a mediano plazo y acciones concertadas en cada una de las líneas de
acción, incluyendo los proyectos estratégicos y otras acciones para alcanzar los objetivos
propuestos.
Incluir, si es posible, cuadros o matrices como los sugeridos anteriormente, y una síntesis general
propositiva.
Validar con las personas representantes de organizaciones e instituciones directamente
participantes, y se consultará con otros actores sociales e institucionales del territorio, y con los
grupos que usualmente han sido excluidos.
Enriquecer la propuesta con los aportes obtenidos de la validación
Socializar el documento elaborado con los órganos de gobernanza territorial.
iv. Identificar y esbozar proyectos estratégicos para impulsar los motores de desarrollo y
avanzar hacia el logro de los objetivos a largo y mediano plazo
Lo que se busca en esta tarea es la definición participativa de varios posibles proyectos sustanciales que
serán impulsores y articuladores de los principales motores de desarrollo del territorio. De esta forma
podrá lograrse la movilización de manera sostenida un conjunto de esfuerzos y recursos en torno a los
objetivos estratégicos asociados a ellos y contribuyan a lograr avances significativos en la dirección
propuesta en el plan de desarrollo territorial.
El punto de partida para identificar potenciales proyectos estratégicos son los motores de desarrollo
priorizados en la visión prospectiva y durante la elaboración del propio plan de desarrollo a mediano
plazo del territorio. El producto esperado es un conjunto de perfiles de proyectos estratégicos, para los
cuales será necesario construir alianzas y gestionar recursos.
Página 13 de 18
Identificación de proyectos estratégicos
Los pasos principales para identificar proyectos estratégicos en conjunto con los de grupos
representativos de los actores territoriales son:
Revisar en forma participativa los motores de desarrollo y objetivos estratégicos, a fin de explorar
opciones de iniciativas para impulsarlos
Revisar en forma participativa el plan de desarrollo territorial a mediano plazo, a fin de explorar
posibles ideas de proyectos relacionados con los objetivos a mediano plazo y los ejes y acciones
estratégicas priorizadas
Generar propuestas de proyectos estratégicos relacionados con los motores de desarrollo y los
objetivos a largo y mediano plazo
Valorar la viabilidad técnica y recursos requeridos por los proyectos estratégicos propuestos
Socializar los resultados de esta valoración con los grupos proponentes
Priorizar un número reducido de proyectos estratégicos para la ejecución inicial del plan de
desarrollo del territorio
Consultar a grupos relacionados con los motores de desarrollo e interesados en cada proyecto
estratégico priorizado, sobre los objetivos específicos y los resultados que se esperaría lograr con
ellos.
Preparar ideas o perfiles iniciales de proyectos por parte del equipo técnico con participación de
representantes de grupos interesados en ellos y
Validar las ideas o perfiles iniciales con los actores territoriales pertinentes
Gestionar compromisos institucionales y recursos para la implementación de un proyecto
estratégico inicial asociado a un motor de desarrollo (o que articule a dos o más impulsores),
Valorar opciones para otros proyectos estratégicos relacionados con los demás motores de
desarrollo.
v. Establecer un sistema de seguimiento/evaluación y la línea base del plan a mediano plazo
El plan de desarrollo territorial requiere de un sistema de seguimiento-evaluación que pueda luego servir
de base para el acompañamiento a su implementación. El levantamiento de la línea base servirá de
referente para analizar durante la implementación del plan a mediano plazo, en qué medida se va
avanzando hacia las metas planteadas y hacer los cambios que se requieran.10
10 Las orientaciones metodológicas para la definición de este sistema y la realización de la línea base, se encuentran detalladas en el documento de Laurent Dietsch y Mario Samper “Orientaciones metodológicas para estudios de línea base en territorios priorizados en el proceso ECADERT”. Aquí se presenta un resumen de los principales pasos propuestos en él.
Página 14 de 18
¿Cómo hacerlo?
A continuación, se proponen algunas actividades para establecer un sistema de seguimiento/evaluación
y la línea base del plan a mediano plazo:
Derivar indicadores de resultados y efectos esperados con la implementación del plan a mediano
plazo
Definir e implementar mecanismos de medición de los indicadores tanto cuantitativos como
cualitativos (realización de la línea base).
Definir el sistema de seguimiento-evaluación de los indicadores definidos, definiendo por cada
indicador, de qué manera se va a medir, quién lo va a medir y con qué frecuencia.
El conjunto de la información obtenida se puede presentar en un cuadro como el siguiente:
Tabla 5. Matriz de definición del sistema de seguimiento
Indicador ¿Cómo se va a medir este
indicador? (con qué
herramientas, fuentes de
información, etc.)
¿Cuándo o con qué
frecuencia se va a
medir este indicador?
¿Quiénes son o serán
responsables de realizar
esta medición?
Comentarios
El resultado de lo antedicho será una propuesta de sistema de seguimiento-evaluación de los resultados
e impactos del plan a mediano plazo en el territorio, de mecanismos para su implementación y la línea
base del territorio.
vi. Definir procedimientos de rendición de cuentas y auditoría social
Los responsables de la formulación e implementación de un plan de desarrollo territorial deben asumir
el compromiso y definir procedimientos para rendir cuentas periódicamente a los actores sociales e
institucionales, redes y otros grupos participantes, como también a socios y contrapartes nacionales e
internacionales.
La rendición de cuentas está estrechamente asociada a la
auditoría social, e incluso puede considerarse como un aspecto
de ella. Ambas son necesarias para asegurar la transparencia y
fortalecer la legitimidad de los procesos de desarrollo
territorial.
Auditoría social Organizaciones sociales e institucionalidad valoran eficacia e impactos de resultados obtenidos en un determinado tiempo.
Página 15 de 18
Por auditoría social en lo referente al plan de desarrollo territorial entendemos un proceso en el cual la
población del territorio, a través de sus organizaciones e institucionalidad u otros mecanismos que se
establezcan, valora desde su propia perspectiva los resultados obtenidos por las acciones realizadas
durante determinado período, en términos de su eficacia e impactos.11
Las auditorías sociales de este tipo pueden realizarse de diversas maneras, con mayor grado de
formalidad.
Los pasos principales de una auditoría social, en términos generales, a ejecutar de manera muy flexible
según se considere oportuno y viable en cada caso, son:
Definir de su propósito, alcance y periodicidad.
Especificar el proceso, acciones y resultados a valorar.
Identificar las entidades que participarán y sus mecanismos de representación.
Acopiar la información pertinente.
Socializar la información pertinente.
Discutir los aspectos más relevantes.
Preparar una síntesis propositiva de los resultados de la socialización.
Identificar ajustes necesarios en el plan o en su implementación.
Establecer la incidencia y seguimiento a las recomendaciones resultantes de la auditoría social.
vii. Preparar y validar el documento del plan de
desarrollo territorial12
Aunque el proceso de elaboración del plan es tan importante
como el producto, este último debe expresarse en forma de un
documento con los contenidos básicos del plan, que sirva de
referente para los actores participantes en el proceso para
guiar las acciones a implementar para el desarrollo sostenible
del territorio. Su propósito es formalizar el conjunto de los
resultados obtenidos en el proceso de planificación a mediano
plazo en un documento de plan a mediano plazo, fácilmente
utilizable u apropiable por los actores del proceso, y en el cual se reconozcan.
11 En un sentido más general, “es un proceso de desarrollo de propuesta, monitoreo, seguimiento, verificación y evaluación cuantitativa y cualitativa, que la sociedad civil realiza a la gestión del Estado y entidades no estatales que administran recursos del Estado o internacionales.” Sistema de Naciones Unidad, Organización de Estados Americanos y Mesa Intersectorial de Diálogo de Desarrollo Económico y Social. 2004. Guía de auditoría social. Guatemala, dónde estamos... y a dónde vamos. s.p.i. 12 La base para este apartado es el texto ya citado de Laurent Dietsch, con adaptaciones en función de la propuesta metodológica general, así como algunos elementos adicionales.
Plan de desarrollo territorial a mediano plazo
Documento que recopila principales productos del proceso participativo de elaboración del plan.
Documento sintético, de lectura accesible, utilizable, práctico para comunicar.
Información detallada ubicada en anexos.
Disponible en varias versiones en atención a la diversidad de actores territoriales.
Página 16 de 18
El documento del plan es básicamente una recopilación de los principales productos del proceso de
formulación del plan a mediano plazo del territorio, ordenados de manera que refleje los principales
resultados de dicho proceso y que sirva de guía para la acción.
No se trata de tener un documento muy extenso que pocos actores van a leer, sino un documento
sintético que refleja los principales productos del proceso de planificación territorial, fácilmente
apropiable y utilizable por los actores del territorio. Luego la información adicional más detallada puede
estar ubicada en anexos del documento.
Una vez validado por los actores sociales e institucionales, redes y otros grupos participantes, e
idealmente avalado por instancias de gobernanza territorial, conviene preparar una síntesis divulgativa y
un video o presentación audiovisual.
La estructura, formato, extensión y contenidos de los documentos de planes de desarrollo a mediano
plazo de territorios varían considerablemente, tanto de un país a otro como entre territorios de un
mismo país. El equipo técnico y los representantes de actores sociales e institucionales directamente
involucrados en su elaboración definirán sus características, en función de los marcos normativos que
existan, de su abordaje metodológico, de su propia experiencia y de lo que consideran pertinente y
viable. En el anexo 1 se sugiere una estructura básica cuyos contenidos en líneas generales responden a
esta propuesta metodológica, y al igual que ella misma, es susceptible de variaciones menores o
mayores de manera que sea útil para los propósitos de quienes participan en el proceso y factible bajo
las condiciones en las cuales se elabora.
viii. Revisión periódica del plan de desarrollo territorial
Conviene prever mecanismos para revisar periódicamente el plan, introduciendo ajustes o elementos
adicionales en función de la evaluación y auditoría social de su implementación, de la incorporación de
otros actores territoriales, y de nuevos factores tanto intra- como extra-territoriales que inciden en su
ejecución.
Se sugiere definir, en el propio plan, quiénes participarán en su revisión, con qué periodicidad se
revisará, cómo se hará la revisión, qué tipos de consultas se harán durante ella, y cómo se aprobarán las
modificaciones al plan.
Segundo momento. Implementar, someter a auditoría social y revisar periódicamente
el plan de desarrollo territorial a mediano plazo.
La ejecución del plan de desarrollo territorial a mediano plazo, una vez consensuado y aprobado,
supone la movilización sostenida de voluntades y recursos para avanzar en la ruta trazada. Su
seguimiento y evaluación, por parte de quienes lo impulsan, ha de complementarse la rendición de
Página 17 de 18
cuentas y auditoría social para que los actores territoriales puedan valorar dichos avances y proponer
cambios en el plan o en su implementación. Ello, a su vez, conducirá a la revisión periódica del plan, para
luego someter una versión actualizada a las entidades e instancias que lo aprobaron o avalaron.
La implementación del plan a mediano plazo para el desarrollo de un territorio es un proceso continuo e
integral, aunque durante su ejecución puedan ejecutarse proyectos estratégicos relacionados con
determinados motores de desarrollo, o proyectos específicos enfocados en aspectos particulares y más
inmediatos, sin perder de vista su relación con los objetivos estratégicos.
El seguimiento y evaluación del proceso en su conjunto y de los proyectos generará información y
conclusiones, desde la perspectiva de quienes impulsan la ejecución del plan, para socializarlos mediante
rendiciones de cuenta que pueden ser anuales. Esto, a su vez, facilitará la realización de auditorías
sociales del proceso de implementación del plan por parte de la sociedad civil del territorio, y sugerirá
ajustes o elementos adicionales requeridos por el proceso.
En un plan decenal pueden proponerse su revisión cada dos años, a la luz de los resultados de las
evaluaciones y auditorías sociales realizadas durante ese lapso y tomando en consideración nuevas
circunstancias y el involucramiento de nuevos actores o socios. El grupo de representantes de actores
territoriales que participó en la elaboración del plan original podría reunirse para compartir ideas al
respecto, para su incorporación por parte del equipo técnico a una versión actualizada del plan, la cual
tendría que ser validada críticamente por dicho grupo, y luego sometida a consideración del conjunto de
actores territoriales e instancias que lo aprobaron o avalaron.
5.3. Producto
Plan de desarrollo territorial a mediano plazo construido participativamente consensuado entre los
actores sociales, institucionales y privados, redes formales e informales relevantes y otros grupos del
territorio, en concordancia con la visión de futuro del territorio, avalado por la plataforma de
concertación territorial, e identificados posibles proyectos estratégicos relacionados con los motores de
desarrollo y objetivos estratégicos propuestos.
Página 18 de 18
Anexo 1. Esquema básico de contenidos del documento de un plan de desarrollo territorial a mediano
plazo
(Modificable en función del proceso y marco normativo en el cual se elabora y de la metodología
aplicada, experiencia y valoraciones de quienes participan en su elaboración)
Apartado Secciones
I.- Introducción.
II.- Caracterización de la situación actual del territorio (síntesis).
- Análisis de la situación actual por dimensiones del desarrollo sostenible y de la estructuración espacial del territorio. - Análisis de tendencias históricas y procesos de cambio territoriales - Integración de los resultados del análisis de dinámicas territoriales y su diferenciación espacial a una interpretación multidimensional del funcionamiento del sistema-territorio
III.- Visión de futuro para el territorio
- Los diferentes escenarios de futuro del territorio - La Visión de futuro del territorio - Los motores de desarrollo y objetivos asociados a ellos
IV.- Lineamientos generales para el desarrollo del territorio en el largo plazo
- Los motores de desarrollo del territorio - Los objetivos estratégicos a largo plazo - Líneas de acción estratégicas por objetivo
V.- Plan de desarrollo territorial a mediano plazo.
- Los objetivos estratégicos a mediano plazo - Líneas de acción y metas a mediano plazo - Acciones estratégicas a impulsar. - Proyectos estratégicos
- Sistema de seguimiento-evaluación del plan: - Variables e indicadores claves - Sistema de medición de indicadores - Línea base y mecanismos de seguimiento
- Auditoría social y rendición de cuentas - Revisión periódica del plan
VI.- Proceso de elaboración, aprobación e implementación del plan
- Participantes en la elaboración del plan - Instancias que han avalado el plan - Acuerdos y compromisos para la implementación del plan - Requerimientos para su implementación - Recursos disponibles y por gestionar