Seguro que hubo quien no se había enterado de que el incansable carrilero Lluís Carreras Ferrer (Sant Pol de Mar, 24/IX/1972) había colgado las botas, cuando empezó a escuchar hablar de él como entrenador del Sabadell.

No hace falta irse muy atrás para recordar sus cabalgadas por la banda izquierda en el Barça, el Mallorca o el Atlético de Madrid, los clubs donde más brilló antes de retirarse en el Deportivo Alavés.

La adolescencia en La Masía forjó su carácter, mano a mano con sus aún cercanos Tito Vilanova y Pep Guardiola; y el contacto con los mejores entrenadores de las últimas décadas le bañó en sabiduría futbolística mientras fue jugador profesional. En Johan Cruyff y Luis Aragonés, además de Radomir Antic, Joaquín Peiró o Héctor Cúper, encontró Carreras la inspiración para pasarse a los banquillos incluso antes de retirarse de los terrenos de juego.Autor: TOMÁS MAGAÑA

Redactor FUTBOL-TACTICO.COM

"LLUIS CARRERAS"

ENTRENADOR DEL CE SABADELL FC

NOVIEMBRE © Artículo publicado en www.futbol-tactico.com 6

Entrevista NOVIEMBRE© Artículo publicado en www.futbol-tactico.com7

Entrevista

FT.- Lo primero de lo que me gustaría hablar es de la transición del Lluís Carreras jugador al Lluís Carreras técnico. Ha sucedido tan deprisa que muchos nos lo hemos perdido.

LC.- Empecé entrenando en las categorías inferiores del Alavés cuando aún estaba en activo, con el cadete. El año siguiente a retirarme, compaginé los estudios del último curso de entrenador con el juvenil del Alavés; y la temporada siguiente, ya con el título de entrenador nacional, compartí el filial de Tercera División con Pablo Gómez. El año siguiente di otro pequeño avance, otro saltito, con el Sabadell en Segunda B.

FT.- Ahora estás en un momento dulce, e imagino que en las decenas de entrevistas que estás dando, todos te preguntarán por el secreto de este Sabadell. ¿No crees que tenía más sentido hacerte la pregunta hace un año,

forma de mostrar a la gente casi como eres personalmente, porque mi equipo es un fiel reflejo de cómo soy como persona.

FT.- De todas formas, el Sabadell ha cambiado media plantilla de una temporada a otra, por un cúmulo de razones. ¿Qué has buscado para mejorar tu equipo con el cambio de categoría?

LC.- Primero, las bajas fueran dadas porque acababan contrato y creíamos no nos podían ser útiles, o porque nos los quisimos quedar y no pudo ser… Lo que buscamos fue gente del perfil que teníamos, para seguir puliendo. Las categorías están para algo, los jugadores están en una categoría u otra dependiendo de su calidad; y lo que intentas es dar un salto de calidad en los que contratas.

FT.- No quiero obligarte a personalizar pero hay un caso que me llama mucho la atención, y es el de Manuel Lanzarote, un jugador con una trayectoria larga en divisiones inferiores que está sorprendiendo muy gratamente en Segunda División.

LC.- Es un jugador de mucho talento que debe explotarlo en determinadas zonas del campo. Es consciente de ese talento, pero quizá no lo era de la zona en que debía explotarlo. Los jugadores saben que hay zonas de seguridad, otras de riesgo, y otras de brillo personal, donde se pueden lucir y mostrar sus cualidades. Él ha aprendido que dependiendo de en qué zona del campo está, debe hacer una cosa u otra. De tres cuartos hacia adelante se le permite hacer todo, pero de ahí hacia atrás, sabe cuáles son las misiones del equipo. Hasta el momento se ha adaptado muy bien a la categoría.

FT.- Es curioso ver como no sólo triunfa el Sabadell, sino que también lo están haciendo

jugadores que el año pasado lo hicieron bien en la Nova Creu Alta. El nombre de Cuenca está

En el último año y medio, Lluís Carreras se ha situado por méritos propios en una posición importante de la escena actual. Su Sabadell ha cubierto un camino de barro, el que separa la Segunda B de la Segunda, deleitando a la Nova Creu Alta con su exquisito trato de balón.

El técnico de moda, a quien ya se señala como candidato a tomar algún día el pesado testigo de Guardiola en Can Barça, no siente ningún vértigo que le invite a pensar en rebajar su ambiciosa propuesta.

cuando se estaba formando la base de este proyecto?

LC.- La verdad es que sí. El club quiso dar un cambio de rumbo, de dinámica, incluso en la personalidad del entrenador; y quiso apostar por un técnico joven, con ideas renovadas. Es cierto que me faltaba experiencia, pero creo que todo se suple con trabajo e ilusión.

Yo voy a ser inexperto hasta el último día que entrene, porque siempre estaré dispuesto a aprender. A uno le mueve sobre todo la ilusión, el haber querido tanto a esta profesión; y yo pensaba que lo más cercano a jugar era entrenar. Me decido por eso y por el club, porque era una

“Entrenar también es una forma de mostrar a la gente

casi cómo eres personalmente, porque mi equipo es un fiel reflejo de cómo soy como

persona”.

Pedro Salado/CES.

NOVIEMBRE © Artículo publicado en www.futbol-tactico.com 8

Entrevista NOVIEMBRE© Artículo publicado en www.futbol-tactico.com9

Entrevista

Masía otra vez, lloraría como lloré los primeros días y meses estando lejos de mis padres, y aprendería todo lo que aprendí. Sobre todo, te haces mayor con 13 o 14 años, porque tienes que subsistir en el buen sentido de la palabra: guardar tu ropa, vestirte por las mañanas, hacerte las combinaciones para ir al colegio, entrenar, comer bien, descansar… Había unos tutores que nos iban regulando el tema

seguro con él, que te hacía ser mejor de lo que eras. Era de entrenamientos muy básicos, sota, caballo y rey, lo tenía muy claro, muy intensos, nunca he entrenado con tanta tensión como en aquel Atlético; y hacía que jugaras los partidos como un entrenamiento más. Los dos han marcado mucho, y conmigo personalmente, de diez.

FT.- Además de los futbolistas y entrenadores de altísimo nivel con quienes has trabajado, hay muchas cosas más que te habrán marcado. Y una de ellas es la vida en La Masía, que además coincide con tu adolescencia. ¿Qué valores deja una experiencia así?

LC.- Volvería a nacer y pasaría los siete años que estuve en La

en boca de todos y en el Sevilla ya asoma el japonés Hiroshi.

LC.- Son diamantes en bruto por pulir. Son chicos de un talento diferente, llevan dentro algo especial; y lo que podemos hacer los entrenadores es explotarlo. Isaac Cuenca juega muy bien con ambas piernas, puede moverse por ambas bandas, tiene una velocidad y un dominio del balón espectacular, un último pase buenísimo y sobre todo tiene cara, tiene rostro, no le da miedo nada. Hiroshi es un jugador técnicamente muy bueno, tiene un buen golpe seco para definir, juega bien de cara y de espaldas. Con lo alto que es, no es que vaya excesivamente bien de cabeza; pero defensivamente nos ayudó mucho. Los dos son muy trabajadores, muy solidarios, y para mí lo más importante, muy buenos chicos.

FT.- Lo que te han colgado enseguida es esa etiqueta de entrenador producto de La Masía, amante del juego combinativo y de ataque. Es algo que en mayor o menor medida has podido poner en práctica en el Sabadell, pero pidiendo referencias sobre ti, cuentan que eres más amigo de buscar la manera de jugar que encaje mejor con la clase de jugadores que tienes.

LC.- Es que yo creo que ése es uno de los aciertos del entrenador. Uno tiene una idea, puede intentar exportarla o que sus jugadores jueguen de esa manera, pero si no tengo esos jugadores, eso no entra ni a cabezazos contra la pared. Si no tengo dos extremos rápidos, hábiles y con buen centro, no jugaría con extremos. Si tuviese dos puntas como Llorente, que no digo

valía, sobre si está preparado técnica y psicológicamente para el cambio. En tu caso, viendo los entrenadores con los que has trabajado, creo que era casi lógico acabar en el banquillo, porque has estado con los mejores. Me gustaría que me hablases particularmente de dos técnicos que para mí son verdaderas referencias históricas, Aragonés y Cruyff. ¿Qué es lo que les hace tan buenos?

LC.- Son los dos mejores que he tenido y son muy diferentes. Johan llegó con una idea totalmente nueva para el fútbol actual, tenía un don especial. Era un entrenador que veía lo que iba a suceder mucho antes de que sucediese. Hacía esos juegos combinativos en los entrenamientos, posesiones, rondos, juegos por tríos, siempre con el balón… dotaba de un estilo diferente al jugador, te hacía sentir importante y a la vez te exigía mucho. Fue la revolución del fútbol en España en cuanto a sistemas de entrenamiento técnicos, dando mucha importancia balón. Nos decía: “¿Para qué vas a correr tú? ¿No han hecho el balón redondo? Pues déjalo que corra; cuanto más rápido, mejor”. Luis Aragonés reúne todas las cualidades de todos los técnicos que he tenido, con una gran ventaja: al jugador, de puertas hacia afuera, lo defendía a muerte. De puertas adentro, si lo tenía que agarrar por el cuello lo agarraba; pero te sentías tan

“Johan Cruyff dotaba de un estilo diferente al jugador,

te hacía sentir importante y a la vez

te exigía mucho”.

que vaya mal por abajo porque es espectacular, quizá mi juego sería más directo, buscando segunda jugada. Cuando se me fichó el equipo estaba casi hecho, pero con esos tres o cuatro retoques hemos buscado la misma idea que esta temporada. ¿Qué haría en otro equipo con diferente calidad en sus futbolistas, o diferente perfil? Pues tendría que conocerlos muy bien.FT.- Para ayudar a romper esa etiqueta, o al menos abrirla un poco, cuéntame qué has absorbido del fútbol vasco. Porque también has pasado allí tus años y también allí hay una filosofía futbolística muy perfilada.

LC.- Estuve encantado de estar en Vitoria, una ciudad de fútbol, aunque lamentablemente tuvimos la desgracia de padecer un individuo que

lo destrozó. El fútbol vasco es muy noble, muy pasional, que no renuncia al buen

juego; pero en función del director deportivo o del entrenador, se

juega de una manera o de otra. El campo del Alavés es grande, hay

muchos espacios, se puede combinar perfectamente; el

Athletic lo está consiguiendo ahora, el campo de la Real también… El fútbol vasco ya no es como el de antes, fuerte y hacia arriba. Incluso el Eibar que se enfrentó a nosotros en la fase de ascenso: no jugaban al patadón, jugaban directo porque tenían jugadores para hacerlo así. Eso le valió ser primero de su grupo, con la ‘mala suerte’ de enfrentarse contra nosotros. El vasco es un fútbol honesto, un fútbol peculiar, en el sentido de que también les gusta fabricar las jugadas pero de forma más directa.

FT.- Cuando un jugador se convierte en entrenador siempre hay dudas sobre su

Pedro Salado/CES.

NOVIEMBRE © Artículo publicado en www.futbol-tactico.com 10

Entrevista NOVIEMBRE© Artículo publicado en www.futbol-tactico.com11

Entrevista

calidad, el aspecto en que más se nota la diferencia de unas categorías a otras es la velocidad de ejecución. ¿Cómo trabajas para que tu equipo mejore en ese sentido?

LC.- Sobre todo con espacios reducidos, es donde mejor se ve la técnica y la velocidad a la que un jugador puede trasladar el balón de un lugar a otro o de

un compañero a otro. Siempre le digo a mis jugadores que si aprendemos a jugar en el cuarto de baño, cuando nos den el salón vamos a sentir que estamos más libres, y cuando nos den toda la casa… Por eso prefiero que con balón mi equipo sea ancho y largo, para dificultar más el robo al equipo contrario. Tiene el riesgo de que cuando falle tengo que estar cerca o ir rápido para que no lleguen a mi portería, pero tiene otras muchas ventajas.

FT.- Una de las cosas que es más importante hacer deprisa son las transiciones. ¿Cómo puedes inducir a tu equipo a reorganizarse de la fase de ataque a defensa y viceversa en el menor tiempo posible?

LC.- Con muchas vigilancias defensivas. Cuando mi equipo tiene el balón de mediocampo hacia adelante, mis defensas tienen que estar muy cerca de la línea de atacantes del equipo contrario. Mis jugadores deben estar más o menos estáticos cuando tienen la posesión del balón, y en movimiento o en velocidad cuando queremos hacer un ataque. Si salgo con el balón desde

estudios y los entrenamientos, pero te tienes que hacer mayor de golpe, a la fuerza. Me perdí aquellas fiestas de San Juan, como decían mis amigos, porque tenía entrenamiento o partido; pero gané otras muchas cosas. Pero yo he tenido muchos compañeros que no se formaron en La Masía. El Barça en general enseña esos valores, ese amor al club; en La Masía en particular, porque es tu casa. La segunda pasó a ser la de mis padres.

FT.- Entrando un poco más en tus ideas, antes mencionabas que al margen de la

“Siempre le digo a mis jugadores que si

aprendemos a jugar en el cuarto de baño, cuando nos

den la casa entera vamos a sentir que estamos más

libres”.

mi defensa, necesito hacer el campo grande para que haya espacio; cuando entro en campo contrario, mis defensas seguirán haciendo el campo largo; cuando

voy a intentar hacer el gol o intentar robar de los defensas, los míos tienen que estar lo más cerca posible por si hay un robo.

FT.- Cuando un equipo como el Sabadell cambia de categoría, ¿dedicas más tiempo a tu propio equipo y su adaptación o

estudias más a fondo los rivales por ser de mayor calidad?

LC.- Siempre dedico mucho más tiempo a mi equipo al rival, porque creo que en uno o dos años no se aprende todo. Tengo que hacer

que mi equipo sepa automatizar movimientos y no es nada fácil, es muy difícil. El año pasado logramos un objetivo que no era el marcado, porque nos metió ahí el devenir de las jornadas; pero es muy complicado que tu equipo funcione como un reloj. Tienen que pasar tres o cuatro años para que un equipo juegue de memoria y maduro; y es muy difícil, porque los jugadores van cambiando. Pero sí prefiero centrarme mucho más en mi equipo, en cómo juega de salida o cómo contrarresta, que en el rival, sin desmerecer a éste. En el Sabadell todavía estamos en tiempo de centrarnos en intentar jugar cada día mucho mejor.

FT.- ¿Qué importancia das al trabajo de scouting?

LC.- Me gusta y creo que es importantísimo. Debemos saber qué hace el rival, no sólo por conocer a quién te enfrentas cada semana, también por estar al tanto de qué jugadores hay en el mercado que puedan mejorar lo que tú tienes. Es relevante saber cómo funciona el rival, qué puede hacer, cómo te puede atacar y defender, cómo ejecuta la estrategia…

FT.- ¿Cómo te gusta ofrecer al futbolista la información sobre el rival? ¿La insertas en el día a día o prefieres sesiones específicas?

LC.- Hacemos un poco de todo, no me gusta aburrir mucho al futbolista, porque a mí no me gustaba que lo hiciesen conmigo, aunque sobre todo en mis primeros tiempos se hacía menos. Me gusta mucho hablarles. Programamos un par de sesiones de vídeo de unos Pedro Salado/CES.

NOVIEMBRE © Artículo publicado en www.futbol-tactico.com 12

Entrevista

doce minutos cada semana, los viernes y los sábados; mirando aspectos del rival. Durante la semana también metemos ejercicios y juegos para saber cómo contrarrestar o hacer daño al contrario. Pero soy más de contacto directo, como decía Luis Aragonés, “míreme a la cara, a los ojitos”.

FT.- ¿Dedicas más tiempo al trabajo de la estrategia como entrenador del que te ofrecían en tus tiempos de futbolista?

LC.- Algo más de tiempo sí que le dedicamos, pero sin obsesión. Creo en la estrategia, pero sobre todo en el momento en que se utiliza. Es muy difícil ensayar una estrategia y poder ejecutarla sin fallos. Puedes ensayarla con uno o con otro, y en el partido luego no lo tienes; y si no es el mismo ya no es que sea mejor o peor, sino que la ejecuta de una forma diferente.

FT.- Visto de uno y otro lado, ¿qué incidencia puede tener un entrenador en el transcurso de un partido?

LC.- Poca, poca. Los partidos son de los jugadores. Desde fuera podemos ver alguna que otra cosa más que ellos, facilitar información durante el descanso, incluso con imágenes por ejemplo de una falta, pero les dejo que hablen ellos porque es dentro del campo es donde se ven las cosas. Les pido que me digan cosas, qué notan, qué ven, qué sienten. En la pizarra yo voy a ganar siempre, porque si pongo una cruz más arriba o más abajo, ya he creado la línea de pase; pero tienes que crearla en el campo.

FT.- Profundicemos en lo del descanso, ¿cómo afrontas esos quince minutos?LC.- Los cinco primeros son para que el jugador entre, se recupere, estire las piernas, hablen entre

ellos, se traten si alguno se tiene que tratar… Nosotros hablamos con los colaboradores, sobre todo con Roger García y Sergio Dorado, de cómo hemos visto la parte, qué podemos mejorar y en función de cómo esté el marcador, insistir en unas cosas u otras. Luego les hablo de pequeños detalles en la pizarra tres o cuatro minutos, si tenemos cambios en estrategia los marcamos; pero sobre todo les dejo hablar a ellos para consensuar conmigo y mis ayudantes el plan de actuación.

FT.- ¿Cómo planificas el trabajo táctico con tu plantilla a lo largo de una temporada?

LC.- Es difícil planificar. Tienes unos macrociclos y microciclos detallados desde el comienzo

para todo el año, pero son modificables, y de hecho siempre he tenido que

cambiar eso por unas razones u otras, calendario, lesiones… Nos gusta planificar mensualmente, con microciclos semanales, en los que planteamos todos los aspectos:

táctico, técnico, físico y psíquico.

FT.- ¿Cuál es tu idea para tu grupo de colaboradores? ¿Eres más de repartir funciones o te gusta contar

con especialistas para aspectos concretos?

LC.- Nosotros nos repartimos las funciones. Creo mucho en los colaboradores y les doy plena

responsabilidad, aunque estén bajo mi tutela, yo sería como supervisor. Sergio

Dorado se encarga de la preparación física, Mikel Touzón se encarga del scouting, Roger García se encarga de la estrategia… y todo coordinado por mí. Cuando hay que hablar de algo, se habla con cada uno de ellos. Le doy importancia no sólo a ellos, sino también al cuerpo médico, readaptadores físicos, físicos, etcétera. ◘

“En el descanso dejo que

hablen los jugadores.

Les pido que me digan

cosas, qué notan, qué ven, qué sienten”.