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TEMA 6.2.LOS MOVIMIENTOS NATURALES DE LA POBLACIÓN a) REGÍMENES DEMOGRÁFICOS ANTIGUO, DE TRANSICIÓN Y ACTUAL. b) NATALIDAD, MORTALIDAD, ESPERANZA DE VIDA 1. Los movimientos naturales de la población El movimiento natural es el crecimiento o el decrecimiento de la población de un lugar por causas naturales (como resultado de los nacimientos y las defunciones). Así el crecimiento natural o vegetativo es la diferencia entre la natalidad y la mortalidad. Puede estudiarse a través de diversas tasas: - Natalidad: Relaciona el número de nacimientos en un año con al población total. - Fecundidad: Relaciona el número de nacimientos en un año con el número de mujeres en edad de tener hijos (15-49 años). - Mortalidad: Relaciona el número de defunciones en un año con la población total. - Mortalidad infantil: Relaciona el número de niños fallecidos antes de un año con el total de nacidos vivos ese año. - Esperanza de vida: Relaciona el número de años vividos por todos los miembros de una población con el número de individuos que la componen. 2. Los regímenes demográficos En el movimiento natural de la población española se distinguen tres etapas o regímenes demográficos a lo largo de las cuales la natalidad, la mortalidad, y el crecimiento natural presentan rasgos homogéneos. El paso de unas etapas a otras ha sido más tardío que en otros países europeos. 2.1. El régimen demográfico antiguo Se mantuvo en España hasta principios del siglo XX. Se caracteriza por altas tasas de natalidad y mortalidad y por un crecimiento natural bajo. La natalidad era elevada por:

6.2.Los movimientos naturales de la población

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TEMA 6.2.LOS MOVIMIENTOS NATURALES DE LA POBLACIÓNa) REGÍMENES DEMOGRÁFICOS ANTIGUO, DE TRANSICIÓN Y ACTUAL.b) NATALIDAD, MORTALIDAD, ESPERANZA DE VIDA

1. Los movimientos naturales de la población

El movimiento natural es el crecimiento o el decrecimiento de la población de un lugar por causas naturales (como resultado de los nacimientos y las defunciones). Así el crecimiento natural o vegetativo es la diferencia entre la natalidad y la mortalidad. Puede estudiarse a través de diversas tasas:

- Natalidad: Relaciona el número de nacimientos en un año con al población total.- Fecundidad: Relaciona el número de nacimientos en un año con el número de mujeres

en edad de tener hijos (15-49 años).- Mortalidad: Relaciona el número de defunciones en un año con la población total.- Mortalidad infantil: Relaciona el número de niños fallecidos antes de un año con el

total de nacidos vivos ese año.- Esperanza de vida: Relaciona el número de años vividos por todos los miembros de

una población con el número de individuos que la componen.

2. Los regímenes demográficos

En el movimiento natural de la población española se distinguen tres etapas o regímenes demográficos a lo largo de las cuales la natalidad, la mortalidad, y el crecimiento natural presentan rasgos homogéneos. El paso de unas etapas a otras ha sido más tardío que en otros países europeos.

2.1. El régimen demográfico antiguo

Se mantuvo en España hasta principios del siglo XX. Se caracteriza por altas tasas de natalidad y mortalidad y por un crecimiento natural bajo.La natalidad era elevada por:- La inexistencia de sistemas eficaces para controlar los nacimientos.- El predominio de una economía y una sociedad rurales, en la que los hijos aseguraban el porvenir de los padres ayudando en las labores del campo.

La mortalidad general era alta y oscilante por el bajo nivel de vida y las precarias condiciones médicas y sanitarias. La dieta alimenticia era escasa, por la baja productividad agraria y desequilibrada por la falta de proteínas. Las enfermedades infecciosas tenían una alta incidencia por el atraso de la medicina y la falta de higiene pública y privada.

En algunos momentos se producía una mortalidad catastrófica causada por epidemias, guerras y malas cosechas.La mortalidad infantil también era alta tanto la neonatal como (cuatro primeras semanas) como la posneonatal por desnutrición e infecciones.

La esperanza de vida era baja por la elevada mortalidad infantil y materna.Como consecuencia de todo ello, el crecimiento natural era bajo y presentaba

oscilaciones debido a las crisis de sobremortalidad.

2.2. La transición demográfica 1900-1975

En comparación con otros países de Europa occidental se inició más tarde, pero duró menos y fue más intensa. Se caracterizó por la disminución suave de la natalidad, un brusco descenso de la mortalidad y, en consecuencia, un elevado crecimiento natural.

La natalidad descendió de forma suave y discontinua, alternando distintos períodos. En al década de 1920 la natalidad se recuperó del descenso anterior por la prosperidad económica. Entre 1930-1956 se reanudó el descenso por la Segunda República, la Guerra Civil (1936-1939) y la larga posguerra (1940-1955).

La mortalidad descendió de forma acusada y continuada excepto en dos únicos momentos de mortalidad catastrófica: la gripe de 1918 y la Guerra Civil. Las causas de este brusco descenso son:

- El incremento del nivel de vida. Con el crecimiento económico de la década de 1960 se superó la malnutrición, se intensificó la prevención y se abandonaron las costumbres tradicionales nocivas para la salud.

- Los avances médicos más destacados fueron las vacunas y la comercialización de antibióticos que eliminaron la mortalidad catastrófica por epidemias y redujeron la incidencia de las enfermedades infecciosas.

La mortalidad infantil también decreció sobre todo la posneonatal causada por infecciones y desnutrición. La esperanza de vida se elevó, primero, por la reducción de la mortalidad infantil y materna, y luego, por el descenso de la mortalidad en adultos.

Como consecuencia, el crecimiento natural de la transición demográfica fue alto, especialmente entre 1920-1965, cuando la mortalidad descendió fuertemente, mientras la natalidad pasaba por dos máximas separadas por la Guerra Civil. Desde 1965, el crecimiento se recortó, al estabilizarse la mortalidad en cifras bajas y restablecerse el descenso de la natalidad.

2.3. El régimen demográfico actual

Se extiende desde 1975 hasta hoy. Se caracteriza por bajas tasas de natalidad y de mortalidad por un escaso crecimiento natural.En el descenso de la natalidad se distinguen dos momentos:- 1975-1998: Descenso brusco de los nacimientos. En 1998 el índice sintético de 1,24 hijos por mujer, por debajo del límite que permite reemplazar a la población. Las causas han sido:

* La situación económica ha retrasado la edad del matrimonio, con el consiguiente acortamiento del período fértil de la mujer.

* Cambios en la mentalidad y los valores. Ha disminuido la influencia religiosa, se han difundido los anticonceptivos, se ha despenalizado el aborto, la mujer se ha incorporado al mercado laboral, hay una nueva percepción de los hijos (se prefiere tener menos y atenderlos mejor)….- Desde 1998 la natalidad ha experimentado una ligera recuperación debida a la inmigración, ya que la población española mantiene su comportamiento restrictivo de la natalidad

La mortalidad general se mantiene en cifras bajas, aunque la tasa asciende ligeramente desde 1982 por el envejecimiento de la población. Además las causas de la mortalidad han cambiado. Disminuye la importancia de las enfermedades infecciosas y aumentan las llamadas “tres C”: cardiovasculares, cáncer y accidentes de carretera.

La mortalidad infantil es muy baja aunque todavía tiene margen para reducirse gracias a los avances médicos.

La esperanza de vida ha aumentado, aunque existen diferencias por sexos (es mayor para las mujeres, por su mayor fortaleza biológica y sus hábitos de vida), por estatus social (es más alta para las profesiones más cualificadas y las clases sociales más adineradas).

El crecimiento natural en el régimen demográfico actual descendió hasta 1998. Desde entonces, crece levemente debido a la ligera recuperación de la natalidad.

3. CONCLUSIÓN

España ha sufrido profundas transformaciones demográficas. Ha pasado de ser un país natalista, joven y emigratorio a ser un país con las tasas de natalidad más bajas del mundo, envejecido e inmigratorio. El crecimiento de la población continuará hasta 2050 por efecto de la inmigración y a partir de entonces descenderá. A pesar de estos problemas, España tiene una política demográfica contradictoria.