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La tarde empieza a enrojecer el cielo, mientras el silencio de la gente empalma las calles con el silbido del viento. Uno, dos segundos después… Caen. La vida en los suburbios es la indicada para quienes llevan el alma transparente e insipiente. Bajan de los callejones, no levantan sospechas. Perros ladrando, ellos siguen su camino. El quejido de un niño sale de alguna casa, caminan en dirección a la bóveda, mientras el auto policial avanza a la misma velocidad que ellos, se miran y rechazan alguna indicación policial. La puerta es abierta por los intrusos, unos levantan la mirada a los nuevos integrantes, otros se acostumbraron a la influencia que desatan entre los jóvenes. Ciertamente, Patrick es el indicado para determinar quién es el indicado para pertenecer a los ciervos, analiza con cautela. Toma las manos de los integrantes, los echa detrás de la cabeza dándoles torsiones en las muñecas. Alguien grita, alguien llora pero nadie pide que se detenga. Patrick se aparta, los observa por última vez, prende su cigarrillo. - No son lo que pide la asociación. – Nadie entiende. Saca un arma, apunta. Tres disparos, tres cuerpos tendidos en un charco de sangre. Camina hacia la salida, pide que retornen el jueves en la noche, tiene nuevas tareas que cumplir. Se dispone a salir. Su voz interior intenta calmarlo, siente la culpa de las almas jóvenes que se han ido, pero sabe que no es la primera vez que lo hace. Alguien lo mira desde el segundo piso, disfruta el aire fresco. Ella, tan distraída siendo tan inocente, echa una mirada hacia las calles aledañas. Ella distingue el caminar de Patrick, sabe que el aún la recuerda. Se observan por unos minutos, él con el cigarrillo en la boca, botando humaredas. Ella tan fría y cortésmente elegante mostrando sus ojos desafiantes. Echa por perdida relación, el decide seguir su rumbo. Hija de perra, piensa mientras mete sus manos en los bolsillos. “Muy poco se sabe de la desaparición de los jóvenes en Saint-Denis, ni sus amistades y familiares cercanos los han visto por varios días. Esta desaparición se suma a los 24 adolescentes desaparecidos en los últimos 3 años. La policía empieza una cruda realidad, donde las pruebas no existen y el número de desaparecidos aumentan.” El noticiero a las 10:00 a.m. El café se apodera de la atmosfera mañanera. Ella juega con la nata de la leche. - Amy, mientras se desayuna no se ve la televisión. - Se corto la leche.

Acompañame a Volar

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Historia ficticia

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Page 1: Acompañame a Volar

La tarde empieza a enrojecer el cielo, mientras el silencio de la gente empalma las calles con el silbido del viento.Uno, dos segundos después…Caen.La vida en los suburbios es la indicada para quienes llevan el alma transparente e insipiente. Bajan de los callejones, no levantan sospechas. Perros ladrando, ellos siguen su camino. El quejido de un niño sale de alguna casa, caminan en dirección a la bóveda, mientras el auto policial avanza a la misma velocidad que ellos, se miran y rechazan alguna indicación policial.La puerta es abierta por los intrusos, unos levantan la mirada a los nuevos integrantes, otros se acostumbraron a la influencia que desatan entre los jóvenes.Ciertamente, Patrick es el indicado para determinar quién es el indicado para pertenecer a los ciervos, analiza con cautela. Toma las manos de los integrantes, los echa detrás de la cabeza dándoles torsiones en las muñecas. Alguien grita, alguien llora pero nadie pide que se detenga. Patrick se aparta, los observa por última vez, prende su cigarrillo.

- No son lo que pide la asociación. – Nadie entiende. Saca un arma, apunta.

Tres disparos, tres cuerpos tendidos en un charco de sangre.Camina hacia la salida, pide que retornen el jueves en la noche, tiene nuevas tareas que cumplir. Se dispone a salir. Su voz interior intenta calmarlo, siente la culpa de las almas jóvenes que se han ido, pero sabe que no es la primera vez que lo hace.Alguien lo mira desde el segundo piso, disfruta el aire fresco.Ella, tan distraída siendo tan inocente, echa una mirada hacia las calles aledañas. Ella distingue el caminar de Patrick, sabe que el aún la recuerda. Se observan por unos minutos, él con el cigarrillo en la boca, botando humaredas. Ella tan fría y cortésmente elegante mostrando sus ojos desafiantes.Echa por perdida relación, el decide seguir su rumbo. Hija de perra, piensa mientras mete sus manos en los bolsillos.

“Muy poco se sabe de la desaparición de los jóvenes en Saint-Denis, ni sus amistades y familiares cercanos los han visto por varios días. Esta desaparición se suma a los 24 adolescentes desaparecidos en los últimos 3 años. La policía empieza una cruda realidad, donde las pruebas no existen y el número de desaparecidos aumentan.”El noticiero a las 10:00 a.m. El café se apodera de la atmosfera mañanera. Ella juega con la nata de la leche.

- Amy, mientras se desayuna no se ve la televisión.- Se corto la leche.