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ADOLESCENCIA Y VIOLENCIA. CONSTRUCCIÓN DE LA
SUBJETIVIDAD EN CONDICIONES ADVERSAS
U.A.D.E.R Facultad de Humanidades, Artes y Cs. Sociales
Lic. en Pedagogía
Cátedra: Psicologia EducativaProf. Andrés MazzurAlumna: Prof. Elida DoelloProf. María de los Ángeles Pargas
En los últimos tiempos el tema de los jóvenes violentos se ha instalado en la
sociedad. Sin que se haga una interpretación que ahonde en las causas, las situaciones,
las relaciones y los actores vinculados.
A menudo las explicaciones se fundamentan en relación al comportamiento individual de
los jóvenes.
Se eluden las responsabilidades sociales, anulando la posibilidad del compromiso
colectivo para la resolución de este problema.
Muchas veces los que se informan, lo hacen entorno a la idea de que los adolescentes son peligrosos.
Esta idea, a nuestro parecer, es construida en torno a un falso diagnóstico de la realidad porque:
Violencia y juventud no son términos equivalentes.
La convivencia es una construcción cultural y social, que, presupone el reconocimiento del
otro como sujeto.
Es una tensión que pone en movimiento el hacer, y en definitiva es un querer conocer.
La violencia no es un concepto abstracto, sino que existen sujetos que protagonizan o sufren
hechos violentos.
Las representaciones colectivas inciden en la construcción de la subjetividad, por lo tanto,
nadie nace violento sino que se hace violento.
En el imaginario social habitualmente se relaciona violencia con pobreza y
marginalidad.
El discurso ideológico hegemónico nos
determina a ser ganadores o perdedores de antemano.
Estas categorías determinan nuestra existencia, en todos sus aspectos.
No se tienen en cuenta las diferencias, la originalidad de cada uno, a libertad de elegir
y decidir esta limitada; digitada por el consumo masivo.
A partir de allí se construyen relaciones donde la violencia es un paso obligado.
La escuela esta inmersa en la problemática de la violencia y puede constituirse en reproductora o desestabilizadora de este orden.
Tiene la responsabilidad de crear espacios, en las aulas, para el análisis y discusión a cerca de los mensajes, programas y productos culturales que incentivan a la violencia.
La escuela debe reconocer que sus prácticas
institucionales muchas veces no fomentan lazos sociales saludables.
Para que los jóvenes puedan edificar su identidad debemos brindarles la posibilidad
de vislumbrar que hay otros mundos posibles.
Los jóvenes deben tener un espacio socialmente reconocido donde puedan manifestar sus diferencias, a través de su propia palabra.
Los adultos deben constituirse en mediadores, guiarlos en la construcción de significados, resignificar la asimetría generacional en protección y amparo.
LOS JÓVENES TAMBIÉN PUEDEN SER:
Actores Pintores Rebeldes
Carroceros Lectores – narradores
Curiosos InnovadoresCiudadanos
SÑ@DORES Y mucho… mucho mas…!!!
BIBLIOGRAFÍA
Quiroga, Ana P. de en Matrices de Aprendizaje. Constitución del sujeto en el proceso de conocimiento (1984 – 1987) Ediciones Cinco.
Textos trabajados en clase titulados: Bleichmar, Silvia, “Dolor país y después…” Capitulo VII: Losers y Winners, entre la excusa y la justificación, School Killers. Características del pensamiento moderno.
Zelmanovich, Perla; Dussel, Inés y Finochio, Silvia; “Eseñar hoy”. Una introducción en la Educación en Tiempos de Crisis. Fondo de cultura económica. 2003
