1
Agradando a Dios y no a los hombres” Por Noé López Email: [email protected] Noviembre de 2015 Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo” (Gálatas 1:10) Gálatas 1:10 Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo. Gálatas 1:11 Más os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre; Gálatas 1:12 pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo. Gálatas 1:13 Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; Gálatas 1:14 y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. Al predicar el evangelio el apóstol buscaba llevar personas a la obediencia, no de los hombres, sino de Dios. Pero Pablo no deseaba alterar la doctrina de Cristo, sea para ganar el favor de ellos o evitar la furia de ellos. En un asunto tan importante no debemos temer el enojo de los hombres, ni buscar su favor usando palabras de humana sabiduría. En cuanto a la manera en que él recibió el evangelio, fue por revelación desde el Cielo. No fue llevado al cristianismo, como muchos, sólo por la educación. A. Lo que significa obedecer a Dios 1) Predicar el Evangelio 2) Llevar a las personas a Dios 3) Preservar la doctrina verdadera 4) Estar dispuesto a sufrir la reacción del mundo 5) Predicando con la sabiduría de Dios y no de los hombres B. Lo que hay que abandonar por obedecer a Dios 1) El favor de los hombres 2) El agrado de los hombres 3) El evangelio de los hombres 4) Dejar de hacer lo malo contra el Pueblo de Dios 5) Evitar toda actitud que atropelle a la Iglesia de Dios 6) Abandonar las tradiciones de los padres C. Un buen Ministro del Evangelio es: 1) Obediente a Dios 2) Proclamador del Evangelio 3) Defensor de las Buenas Nuevas de Salvación 4) Exaltador de Dios y no de los hombres D. Aplicación: Pablo fue llevado maravillosamente al conocimiento y la fe de Cristo. Todos los convertidos para salvación son llamados por la gracia de Dios; la conversión de ellos es obra de su poder y gracia que obran en ellos. De poco nos servirá que tengamos a Cristo revelado a nosotros si Él no es revelado también en nosotros. Estaba preparado para obedecer instantáneamente, sin importar su interés, crédito, comodidad mundano o la misma vida. Qué motivo de acción de gracias y de gozo es para las iglesias de Cristo cuando saben de casos semejantes para la alabanza de la gloria de su gracia, ¡sea que los hayan visto o no alguna vez! Ellos glorifican a Dios por su poder y misericordia al salvar a tales personas, y por todo el servicio hecho a su pueblo y a su causa, y el servicio que puede esperarse con posterioridad. E. Conclusión “Pablo, apóstol (no de hombres ni por hombre, sino por Jesucristo y por Dios el Padre que lo resucitó de los muertos), y todos los hermanos que están conmigo, a las iglesias de Galacia: Gracia y paz sean a vosotros, de Dios el Padre y de nuestro Señor Jesucristo, el cual se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos del presente siglo malo, conforme a la voluntad de nuestro Dios y Padre, a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén. (Gálatas 1:1- 5)

Agradando a Dios y No a Los Hombres

Embed Size (px)

DESCRIPTION

AGRADAR A DIOS

Citation preview

“Agradando a Dios y no a los hombres” Por Noé López

Email: [email protected] Noviembre de 2015

Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo” (Gálatas 1:10)

Gálatas 1:10 Pues, ¿busco ahora el favor de los

hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.

Gálatas 1:11 Más os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre;

Gálatas 1:12 pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo.

Gálatas 1:13 Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba;

Gálatas 1:14 y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres.

Al predicar el evangelio el apóstol buscaba llevar personas a la obediencia, no de los hombres, sino de Dios. Pero Pablo no deseaba alterar la doctrina de Cristo, sea para ganar el favor de ellos o evitar la furia de ellos. En un asunto tan importante no debemos temer el enojo de los hombres, ni buscar su favor usando palabras de humana sabiduría. En cuanto a la manera en que él recibió el evangelio, fue por revelación desde el Cielo. No fue llevado al cristianismo, como muchos, sólo por la educación.

A. Lo que significa obedecer a Dios 1) Predicar el Evangelio 2) Llevar a las personas a Dios 3) Preservar la doctrina verdadera 4) Estar dispuesto a sufrir la reacción del mundo 5) Predicando con la sabiduría de Dios y no de los

hombres

B. Lo que hay que abandonar por obedecer a Dios 1) El favor de los hombres 2) El agrado de los hombres 3) El evangelio de los hombres

4) Dejar de hacer lo malo contra el Pueblo de Dios 5) Evitar toda actitud que atropelle a la Iglesia de Dios 6) Abandonar las tradiciones de los padres

C. Un buen Ministro del Evangelio es: 1) Obediente a Dios 2) Proclamador del Evangelio 3) Defensor de las Buenas Nuevas de Salvación 4) Exaltador de Dios y no de los hombres

D. Aplicación: Pablo fue llevado maravillosamente al conocimiento y la fe de Cristo. Todos los convertidos para salvación son llamados por la gracia de Dios; la conversión de ellos es obra de su poder y gracia que obran en ellos. De poco nos servirá que tengamos a Cristo revelado a nosotros si Él no es revelado también en nosotros. Estaba preparado para obedecer instantáneamente, sin importar su interés, crédito, comodidad mundano o la misma vida. Qué motivo de acción de gracias y de gozo es para las iglesias de Cristo cuando saben de casos semejantes para la alabanza de la gloria de su gracia, ¡sea que los hayan visto o no alguna vez! Ellos glorifican a Dios por su poder y misericordia al salvar a tales personas, y por todo el servicio hecho a su pueblo y a su causa, y el servicio que puede esperarse con posterioridad. E. Conclusión “Pablo, apóstol (no de hombres ni por hombre, sino por Jesucristo y por Dios el Padre que lo resucitó de los muertos), y todos los hermanos que están conmigo, a las iglesias de Galacia: Gracia y paz sean a vosotros, de Dios el Padre y de nuestro Señor Jesucristo, el cual se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos del presente siglo malo, conforme a la voluntad de nuestro Dios y Padre, a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén. (Gálatas 1:1-5)