8
Se puede afirmar que tanto la calidad de la leche producida por el conjunto de las vacas de una explotación como que la leche almacenada en el tanque de frío para venta sea “leche de cali- dad” son siempre el resultado de algo. En este sen- tido, la amplia mayoría de las explotaciones lecheras realizan prácticas de manejo del ordeño ampliamente difundidas y encaminadas a mejorar el estatus de “salud de ubre”, como son el sellado de pezones tras el ordeño, la higienización previa al ordeño o la terapia de secado. El objetivo a perse- guir por los productores de leche es lograr la má- xima calidad de leche en tanque descartando la mínima cantidad de la leche producida por las vacas, tanto por razones económicas obvias como por el hecho de que se trabaja para una sociedad de consumo y por otra parte, que la aptitud para el ordeño mecánico de los pezones perdure en la vida productiva de las vacas. Este objetivo, que más que una meta debería ser un punto de partida, varía considerablemente de unas explotaciones a otras en función del grado de implicación del ganadero en la implantación de unas buenas prácticas de manejo. Los pagos por calidad de la industria le- chera al productor, las pérdidas económicas deri- vadas de la mastitis (leche descartada, tratamien- tos, pérdida de cuarterones...), la presencia de mano de obra no cualificada en las labores de or- deño y el costo de la reposición han hecho que el ganadero demande los servicios de asesoramiento en calidad de leche como parte determinante de la rentabilidad de su explotación. En nuestra práctica, el servicio de calidad de leche de Seragro evalúa mensualmente alrededor de 17.100 vacas pertenecientes a 299 explotacio- nes lecheras de la Comunidad Autónoma de Gali- cia, de las cuales 15.256, el 89%, están en Control Lechero, con una media de producción en torno a los 30 kg/día. En un amplio porcentaje de casos se trata de explotaciones bien dimensionadas, com- petitivas y en continua evolución, y que en los últi- mos años han realizado importantes inversiones en la mejora de aspectos como el manejo de la ali- mentación, limpieza de patios, ventilación, cubícu- los, zonas de recría, parideras, lechería y equipo de ordeño. Volviendo la vista atrás, en una retrospec- tiva histórica percibimos que el ganadero ha lu- chado contra la mamitis por un lado desde un punto de vista “ambiental”, con grandes esfuerzos inversores en el ámbito del confort, en cubículos, ventilación forzada, limpieza mecánica, etc… y por otro, desde un punto de vista “contagioso” con prácticas de manejo y de ordeño en ocasiones in- útiles y carentes de sentido común. Los avances tecnológicos que el mercado ofrece al ganadero, tanto en instalaciones de ordeño como en produc- tos de manejo relacionados con el mismo, son rápi- damente incorporados, y ¡tanto! que en el sub- consciente colectivo se ha responsabilizado de la labor de ordeño a las modernas máquinas y, a los microorganismos, de las mamitis. La fisiología ni se puede ni se debe cambiar. El desconocimiento de la fisiología del ordeño, del funcionamiento íntimo de la máquina de ordeño y del manejo de la vaca lechera de alta producción en las salas de ordeño junto con la práctica reiterada de malos hábitos de ordeño es la continua asignatura pendiente de las disciplinas de calidad de leche. En el desarrollo de un programa de calidad de leche, la recogida y el procesado de datos es indis- pensable para valorar la evolución de los establos Temario Francisco Sesto Pérez, José Luís Míguez Vázquez, Carlos Noya Couto, Margarita Penelas López, Martín López López, Noelia Mourazos García. Seragro Coop. Galega 96 FRISONA ESPAÑOLA Nº 195 Análisis de factores que influyen en la incidencia de mamitis clínica Servicio de calidad de leche de Seragro, sociedad cooperativa

Análisis de factores o que influyen en la incidencia de ... clínica.pdf · lechera de alta producción en las salas de ordeño junto con la práctica reiterada de malos hábitos

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Se puede afirmar que tanto la calidad de laleche producida por el conjunto de las vacas deuna explotación como que la leche almacenadaen el tanque de frío para venta sea “leche de cali-dad” son siempre el resultado de algo. En este sen-tido, la amplia mayoría de las explotacioneslecheras realizan prácticas de manejo del ordeñoampliamente difundidas y encaminadas a mejorarel estatus de “salud de ubre”, como son el selladode pezones tras el ordeño, la higienización previa alordeño o la terapia de secado. El objetivo a perse-guir por los productores de leche es lograr la má-

xima calidad de leche en tanque descartando lamínima cantidad de la leche producida por lasvacas, tanto por razones económicas obvias comopor el hecho de que se trabaja para una sociedadde consumo y por otra parte, que la aptitud para elordeño mecánico de los pezones perdure en la vidaproductiva de las vacas. Este objetivo, que más queuna meta debería ser un punto de partida, varíaconsiderablemente de unas explotaciones a otrasen función del grado de implicación del ganaderoen la implantación de unas buenas prácticas demanejo. Los pagos por calidad de la industria le-chera al productor, las pérdidas económicas deri-vadas de la mastitis (leche descartada, tratamien-

tos, pérdida de cuarterones...), la presencia demano de obra no cualificada en las labores de or-deño y el costo de la reposición han hecho que elganadero demande los servicios de asesoramientoen calidad de leche como parte determinante dela rentabilidad de su explotación.

En nuestra práctica, el servicio de calidad deleche de Seragro evalúa mensualmente alrededorde 17.100 vacas pertenecientes a 299 explotacio-nes lecheras de la Comunidad Autónoma de Gali-cia, de las cuales 15.256, el 89%, están en ControlLechero, con una media de producción en torno alos 30 kg/día. En un amplio porcentaje de casos setrata de explotaciones bien dimensionadas, com-petitivas y en continua evolución, y que en los últi-mos años han realizado importantes inversiones enla mejora de aspectos como el manejo de la ali-mentación, limpieza de patios, ventilación, cubícu-los, zonas de recría, parideras, lechería y equipo deordeño. Volviendo la vista atrás, en una retrospec-tiva histórica percibimos que el ganadero ha lu-chado contra la mamitis por un lado desde unpunto de vista “ambiental”, con grandes esfuerzosinversores en el ámbito del confort, en cubículos,ventilación forzada, limpieza mecánica, etc… y porotro, desde un punto de vista “contagioso” conprácticas de manejo y de ordeño en ocasiones in-útiles y carentes de sentido común. Los avancestecnológicos que el mercado ofrece al ganadero,tanto en instalaciones de ordeño como en produc-tos de manejo relacionados con el mismo, son rápi-damente incorporados, y ¡tanto! que en el sub-consciente colectivo se ha responsabilizado de lalabor de ordeño a las modernas máquinas y, a losmicroorganismos, de las mamitis. La fisiología ni sepuede ni se debe cambiar. El desconocimiento dela fisiología del ordeño, del funcionamiento íntimode la máquina de ordeño y del manejo de la vacalechera de alta producción en las salas de ordeñojunto con la práctica reiterada de malos hábitos deordeño es la continua asignatura pendiente de lasdisciplinas de calidad de leche.

En el desarrollo de un programa de calidad deleche, la recogida y el procesado de datos es indis-pensable para valorar la evolución de los establos

Tem

ario

Francisco Sesto Pérez, José Luís Míguez Vázquez, Carlos Noya Couto, Margarita Penelas López, Martín López López, Noelia Mourazos García. Seragro Coop. Galega

96 FRISONA ESPAÑOLA Nº 195

Análisis de factoresque influyen en la incidencia de mamitisclínicaServicio de calidad de leche de Seragro,sociedad cooperativa

y ayudarnos a marcar objetivos. El dato que másobjetivamente nos puede indicar el nivel de saludde ubre de una explotación y que sin duda más di-rectamente preocupa y llama la atención al gana-dero es la incidencia de mamitis clínica.

Son numerosos los factores que influyen en la in-cidencia de mamitis clínica, pero consideramos deimportancia crítica el afianzamiento de una rutinade ordeño eficaz y consistente, la prevención de so-breordeños y la correcta condición de pezones, laoptimización del funcionamiento de los equipos deordeño, el confort de las instalaciones y la calidadde la alimentación.

Para cada uno de estos factores críticos, sobrelas granjas en Control Lechero, hemos evaluadocon la aplicación informática Gesgando (Seragro),las medias de los recuentos celulares individualessobre datos de Control Lechero como indicativo delnivel de salud de ubre del rebaño y los datos de re-cuentos celulares de tanque de leche emitidos porel Laboratorio Interprofesional Galego de Analise doLeite (LIGAL). Los análisis corresponden a datos re-cogidos durante el periodo comprendido entre el01.07.2010 y el 31.07.2011 en explotaciones que lle-vaban al menos dos años recibiendo visitas técnicasmensuales al ordeño de los veterinarios del serviciode calidad de leche de Seragro. Todos los datosfueron sometidos a tratamiento estadístico y son sig-nificativos.

Rutinas de ordeñoConsideramos que una rutina de ordeño es efi-

ciente cuando el conjunto de los procesos de pre-paración de la vaca para el ordeño desencadenanel reflejo de bajada de la leche de una maneraconsistente, visible y palpable ordeño tras ordeño.Esto dará lugar a un ordeño rápido y continuo conausencia de sobreordeños al inicio del ordeño, depezones limpios, secos y bien estimulados. Preten-demos así abordar el ordeño mecánico bajo laperspectiva fisiológica de la vaca lechera paraconseguir el estado de “ordeñabilidad del rebaño”como el de máxima excelencia posible en cuantoa ordeño y que la aptitud para el ordeño mecánicode la vaca lechera de alta producción se man-tenga en el tiempo.

Muy pocos ordeñadores llegan a entender el sig-nificado de mantener una constancia en términosde estimulación y de velocidad de flujo, aunque lagran mayoría afirman hacer siempre lo mismo, sinvariaciones tangibles. Las variaciones en las rutinasde preparación de las vacas tienen lugar porque or-deño tras ordeño, día a día, semana tras semana,mes a mes, la actividad rutinaria de una sala de or-deño “se transforma en rutina” y en no pocas oca-siones el ordeñador acaba merodeando de unlugar a otro de la sala de ordeño en una actividadzascandil que poco tiene que ver con estimularvacas. Del “estar estando activo” al “estar estandocon el pensamiento en otro lugar” hay una repercu-sión directa sobre el trabajo realizado sobre los pe-zones. La realidad con la que nos encontramos esque este suele ser el punto de partida, con un granimpacto negativo tanto en los tiempos de ordeñocomo en la condición de pezones. El ordeñador nosuele evaluar la bajada de la leche y la turgenciade los pezones en el momento de colocar la unidadde ordeño, ni retira la unidad de ordeño con elmismo flujo, vaca a vaca, durante todos los ordeños.De esta manera, una misma vaca puede ser orde-ñada de distinta forma continuamente.

La educación para el ordeño deberá ser la basede las actuaciones. El personal de ordeño debe co-

nocer las bases fisiológicas del ordeño ya que lavaca toma nota y aprende de las sensaciones ne-gativas que le pueda aportar el ordeño, integrándo-las como parte de la rutina. Por lo tanto, la vacanunca deberá desarrollar memorias negativas de lazona de ordeño. El ordeñador deberá lograr que lavaca identifique el ordeño como un momento agra-dable y que el tiempo de permanencia en las insta-laciones de ordeño sea el menor posible. Las vacasnos indican que no les gusta el ordeño si no entrana la sala de ordeño, si patean o tiran la unidad deordeño e inequívocamente se realiza una mala ru-tina cuando muestran reacción de defensa a la pal-pación de pezones. Si las vacas se acercan a laspuertas de entrada mostrando curiosidad y aten-ción hacia la gente que trabaja en el foso es señalde que se está realizando un buen manejo.

Colocar la unidad de ordeño de manera opor-tuna en pezones bien estimulados, con la cisternacargada de leche, teniendo un vacío en colectorde entre 39 y 42 kilopascales en el momento delmáximo flujo de leche y un buen mantenimiento ydiseño del equipo de ordeño significa conseguiraltos flujos de leche de manera continua e ininte-rrumpida desde el inicio del ordeño. Por otra parte,una adecuada programación de los retiradores au-tomáticos significa disminuir la duración del periodode bajo flujo de leche al final del ordeño, evitandosobreordeños finales.

La rutina de ordeño y las cadenas de los hábitos

Preparación inadecuada.

Falta de estimulación

Falta de apoyo.No hay bajada

de la leche

Colocaciónantes de tiempo

de la unidad

Sobreordeñoantes del ordeño

Sobreordeñodurante

el ordeño

Sobreordeñoal final

del ordeño Ausencia depico de flujo

Dolor. Daño enpezones por sobrepresión

Ordeño incompleto.Recolocación de

unidades

Estrés

Fotos: J.L. Míguez

Aumento delperiodo de

bajo flujo deleche/minuto

Retirada amuy bajo flujo

Modo manual

Fecha lectura Sensor Trabajo Dinámico Vac. Máx. Vac. Mín. Vac. + Vac. - Caída Vac. Medio16/02/10 07,56 2 45,00 0,00 51,00 36,60 5,70 8,70 0,00 45,30

50454035302520151050

0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 110

La gráfica corresponde a una medición dinámica que registra variaciones devacío en punta de pezón. Se ha iniciado el ordeño antes de la bajada de laleche, el llamado sobreordeño al inicio del ordeño. A tiempo cero, colocadala unidad, el vacío medio es de 42 kilopascales en punta de pezón. El flujo ini-cial de leche cisternal disminuye progresivamente según transcurre el tiempo.A los 40 segundos de colocada la unidad, el vacío registrado en punta depezón es de 50 kilopascales, no hay flujo de leche. Llegado este momento,comienza de nuevo el flujo de leche, alcanzándose un pico-flujo a los sesentasegundos. Realmente el ordeño ha comenzado ¡un minuto después de colo-cada la unidad de ordeño!

Nº 195 FRISONA ESPAÑOLA 97

El registro que de los tiempos de ordeño hacenlos programas informáticos de las salas de ordeñopara su posterior análisis es la manera más eficaz deevaluar la constancia de la rutina de ordeño. Laevaluación y el seguimiento de la rutina de ordeñoes el pilar fundamental de un programa de calidadde leche.

Se han comparado los recuentos celulares de8.382 vacas de 156 explotaciones con rutinas de or-deño eficientes frente a 3.056 de 74 explotacionesdonde la rutina es, pese a todo, ineficiente. El re-cuento celular resultó un 22% más bajo en las explo-taciones donde se afianza en el tiempo una rutinade ordeño eficiente, frente a aquellas explotacio-nes donde no se siguen las recomendacionesdadas por el asesor. También se constata un au-mento del porcentaje de animales con recuentoscelulares por debajo de las 200.000 células/ml,frente a las explotaciones donde la rutina de or-deño es inconstante o inefectiva.

50454035302520151050

0 10 20 30 40 50 60 70

Sobreordeño inicial

Vacas tranquilas y bien estimuladas.Consistencia en el procedimiento de pre-paración, siempre idéntico. Colocación del juego de ordeño de manera opor-tuna, con la mínima admisión de aire y alineado correcto de la unidad deordeño. Máquina de ordeño eficiente y programación aecuada de los retira-dores automáticos.

Nº RCS C.L. RCS LIGAL Vacas con RCS<200 % 201-400 % 401-1000 % >1000 %

Eficiente 8382/156 326,79 239,98 6018 71,80 1042 12,43 766 9,14 556 6,63Ineficiente 3056/74 393,88 283,25 2054 67,19 419 13,71 332 10,5 261 8,55

Rutinas de ordeño eficientes o no (01.07.10-31.07.11)

Eficiente: 8.382 vacas Ineficiente: 3.056 vacas

Conclusiones: Se observa una relación directa entre una rutina de ordeño eficiente y unos bajos re-cuentos celulares. Esto nos refuerza en la idea de que el afianzamiento de una rutina de ordeño efi-ciente es un pilar fundamental en un programa de calidad de leche.

+22%

Condición de pezonesExiste una relación directa entre una mala con-

dición de pezones y el sobreordeño al inicio del or-deño a causa de una mala preparación de pezo-nes y rutinas de ordeño ineficientes, así como conla duración del periodo de bajo flujo de leche alfinal del ordeño.

Con independencia del régimen de explota-ción y del manejo de los patios, zonas de descansoy cubículos, las vacas acuden al ordeño con más omenos suciedad adherida a la superficie de los pe-zones. Se trata de mezclas de material de cama yestiércol que vehiculan una nada despreciablecarga microbiológica tanto en el orificio del pezóncomo en sus proximidades. Además, el estado ini-cial de la piel del pezón ha de afrontar un nuevo eimportante desafío como es la fricción con la pezo-nera en la fase de masaje durante el ciclo de pul-sación. Un aspecto muchas veces debatido en laimplantación de las rutinas de preparación de lasvacas para el ordeño es el empleo de los productosde higiene, limpieza y desinfección de pezones. Ennuestra experiencia, consideramos que el uso deestos productos, con independencia de su natura-leza química y su presentación física, es indiscutible-mente ventajoso respecto a la limpieza o prepa-ración de pezones en seco. La clave está en quecon el empleo del predipping, un pezón húmedoha de ser obligatoriamente secado y manipulado,lo cual activa el desencadenamiento del reflejo debajada de la leche. El despunte de los primeroschorros de leche, tras dejar la piel del pezón suavi-zada y tersa, será mejor tolerado por la vaca que sies realizado con la piel seca y áspera. El sobreor-deño al inicio del ordeño se deriva de una rutina deordeño mal diseñada, en la cual no se estimulanadecuadamente las vacas para desencadenar elreflejo de bajada de la leche. Pero también se ob-serva incluso en ordeños bien diseñados, cuando elordeñador no es consciente de evaluar el grado deturgencia o llenado del pezón en el momento decolocar la unidad. Esto sucede comúnmente envacas con baja producción si la preparación sedesarrolla con celeridad. Algo similar ocurre envacas con alta producción cuando llegan al or-

factores que influyen en la incidencia de mamitis clínica

98 FRISONA ESPAÑOLA Nº 195

deño con los pezones llenos y derramando leche. Aestas vacas se les suele colocar la unidad de or-deño con la certeza de que están estimuladas, y loque se ordeña es leche no glandular que está ocu-pando el sistema de cisterna de la ubre.

El sobreordeño al inicio del ordeño provoca enla vaca dolor, disconfort de ordeño y falta de con-fianza en el ordeño. El pezón puede llegar a estarsometido al vacío de trabajo en ausencia de flujode leche. Se producirá entonces un trepado de lapezonera sobre el pezón, con desarrollo de conges-tión, edema y aplanamiento lateral del pezón porausencia de una adecuada presión intracisternalque contrarrestre las fuerzas compresivas de la pe-zonera sobre el pezón en la fase de masaje. En oca-siones las vacas obsequian patadas a la unidad obien ocurre la retirada de la misma cuando los reti-radores automáticos registran la falta de flujo deleche. Intentar solucionarlo mediante el empleo dela máquina en modo manual y/o el uso de oxito-cina es un error común que no hace más que agra-var el problema.

Es un error tratar de ganar tiempo en una salade ordeño restándole importancia a la rutina depreparación y en no pocas ocasiones se eliminan ose cuestionan los procedimientos de predipping ydespunte. La falta de preparación y el sobreordeñoinicial dan lugar a un aumento del tiempo total deordeño, enlentecimiento del ordeño, un aumentodel periodo de bajo flujo de leche al final del or-deño y finalmente un empeoramiento de la condi-ción de pezones, aumentando el riesgo de nuevasinfecciones intramamarias.

Para evaluar e interpretar la condición de pezo-nes debemos conocer, por un lado, las condicionesde ordeño ofrecidas por la máquina como son elrango y relación de pulsación, pero especialmenteel vacío de trabajo y particularmente el nivel devacío medio dinámico medido en colector. Por otrolado, debemos observar y valorar la rutina de pre-paración de las vacas para el ordeño y prestar es-pecial atención a la existencia de sobreordeñotanto al final como al principio del ordeño. De estemodo, la condición de pezones es un dato básicoque refleja la calidad de la preparación y el ordeñorecibido por las vacas. Puede ser un valor fluctuante

Nº RCS C.L. RCS LIGAL Vacas con RCS<200 % 201-400 % 401-1000 % >1000 %

1-2 Buena 8463/161 326,09 243,11 6082 71,86 1052 12,42 769 9,09 561 6,62> 2 mala 3111/67 396,96 279,98 2079 66,84 434 13,95 335 10,7 263 8,46

Condición de pezones, media (01.07.10-31.07.11)

Conclusiones: Se observa una relación directa entre una buena condición de pezones y unos bajosrecuentos celulares. Existe una relción directa entre mala condición de pezones y el sobreordeño ini-cial derivado de una maña prepación o rutina de ordeño ineficiente.

+23%

en cortos periodos de tiempo si la rutina de ordeñoes ineficaz e inconsistente. Acabado el ordeño y re-tirada la unidad solo cabe realizar el sellado de pe-zones. Optar por la revisión de cuarterones, des-punte de pezones y recolocación de unidades deordeño es una práctica nefasta que tiene lugar enmuchas ganaderías. Se trata, en definitiva, de lafalta total de confianza en el ordeño por parte deuna persona que ha realizado una preparación pre-caria de pezones. Como límite crítico, no deberíahaber en un rebaño más de un 20% de pezones le-sionados.

Para una misma explotación, con igual nivel deproducción y para un nivel de vacío de trabajoconstante en regulador, variaciones en el nivel devacío medio dinámico medido a la salida de los co-lectores obedecen a cambios en la velocidad deordeño y flujos de leche. Estos cambios son conse-cuencia y reflejo de la eficiencia en la rutina de pre-paración llevada a cabo por los ordeñadores. Lamedición periódica mediante testaje dinámico delos niveles de vacío en colector junto con la evalua-ción de la condición de pezones, nos da una buenainformación sobre el desarrollo de las rutinas de or-deño.

Condición de los pezones

Grado 1, sin anillo

Grado 3, anillo rugoso Grado 4, anillo muy rugoso

Grado 2, anillo liso

Objetivo: menos del 20% en grado 3 y 4Fotos: J.L. Míguez

Se compararon 8.463 vacas pertenecientes a161 explotaciones con una adecuada condiciónde pezones frente a 3.111 vacas repartidas en 67 ex-plotaciones que evidenciaron una mala condiciónde pezones en el periodo de estudio, observándoseque los recuentos celulares son un 23% mejores enlas explotaciones que mantienen una buena con-dición de pezones en el tiempo. La condición depezones es el gran indicativo de la calidad de or-deño que reciben las vacas y un punto crítico queevidencia el riesgo de incidencia de mamitis clínicaen el rebaño.

Nº 195 FRISONA ESPAÑOLA 99

Sistema de ordeño y retirada de la unidad deordeño

Se compararon 7.927 vacas de un total de 134explotaciones (el 56,25%) con sistemas de ordeñoen línea baja con 3.653 vacas pertenecientes a 97explotaciones (el 43,75%) con sistemas de ordeñoen líneas medio-altas, observándose una mejoría enla tasa de recuento celular de un 11,5% a favor delos sistemas de ordeño en línea baja. Este dato noes ampliamente significativo pues ha de tenerse encuenta que en el 86% de los sistemas de ordeño enlíneas medio-altas se realiza una retirada manual dela unidad de ordeño, al ser en su mayoría circuitosde ordeño en plaza sin retiradores automáticos.

Nº RCS C.L. RCS LIGAL Vacas con RCS<200 % 201-400 % 401-1000 % >1000 %

Línea baja 7927 335,39 237,36 5668 71,49 987 12,45 730 9,20 543 6,85Líneamedia-alta 3653 369,80 265,26 2502 68,49 492 13,48 372 10,2 287 7,85

Sistema de ordeño (01.07.10-31.07.11)

Línea baja: 134 explotaciones (56,25%) Línea media-alta: 97 explotaciones (43,75%)

Conclusiones: Aunque se observan unas mayores calidades en leche de tanque en los sistemas de or-deño en línea baja, este dato está muy condicionado porque el 85% de los sistemas de ordeño en líneaalta realizan una retirada manual de la unidad de ordeño. El mayor o mejor vacío de trabajo no influyeen los recuentos celulares teniendo un vacío en punta de pezón constante.

+11,5%

Nº RCS C.L. RCS LIGAL Vacas con RCS<200 % 201-400 % 401-1000 % >1000 %

Retiradamanual 4169 370,09 270,92 2682 68,45 532 13,59 399 10,2 302 7,72

Retiradaautomática 8251 330,86 235,38 5592 71,94 948 12,20 705 9,07 528 6,79

Retirada de la unidad de ordeño (01.07.10-31.07.11)

Retirada automática: 116 explotaciones (50,1%) Retirada manual: 115 explotaciones (49,9%)

Conclusiones: Se observan unas mayores calidades en leche de tanque en los sistemas de ordeño conretirada automática. Los retiradores automáticos correctamente programados para evitar sobreodeñosson consistentes en su función. Se observa una relación directa entre exposición a alto vacío relativoen ausencia de flujo de leche a final del ordeño y la existencia de una mayor tasa de recuento celular.

+12%

Los medidores de flujo asociados a los retirado-res automáticos de pezoneras son un componenteaccesorio de la unidad de ordeño de uso común enlas modernas instalaciones de ordeño. Su instalación“de fábrica” asegura en la mayoría de los casos elsobreordeño de pezones por bajos flujos de retiradade las pezoneras. Por ello, la programación eficazde los retiradores automáticos se ha de hacer conel compromiso de una rutina de ordeño eficaz querinda altos flujos de leche al inicio del ordeño y evitesobreordeños iniciales. El ordeño en modo manualde retirada termina en un sobreordeño al final delordeño, con el consiguiente daño en extremo delpezón. Esta práctica sobrevalora la cantidad deleche ordeñada a mayores debido al ordeño de laleche residual de los cuarterones. Exceptuando lospezones terminados en punta y de ordeño lento ylas ubres descolgadas de mala conformación, lasvacas pueden marchar con leche, bien por unapreparación inadecuada, bien porque la confor-mación anatómica del extremo de pezón debidasal sobreordeño reiterado hacen a la vaca dura ylenta de ordeñar. Está muy arraigada la creencia deque una vaca “mal ordeñada” tendrá mamitis y porello se lleva el ordeño al límite. El empleo más omenos amplio de oxitocina exógena en un rebañorefleja una falta de preparación para el ordeño.

Los medidores de flujo, al situarse en el recorridodel tubo largo de leche, entre el colector y la con-ducción principal de leche o entre el colector y laboquilla de entrada de los medidores volumétricospara los sistemas de ordeño con depósito medidor,suponen una restricción al paso de vacío y lecheque incrementa la diferencia o caída de vacío exis-tente entre el colector y la línea de conducción obien entre éste y los medidores volumétricos en lasmáquinas de ordeño con depósito medidor. Sehace imprescindible la realización del testaje diná-mico para registrar los niveles de vacío y ajustar asíun vacío de trabajo en regulador que garantice unnivel suficiente de vacío de ordeño en colector encondiciones de pico-flujo de leche.

El afianzamiento en el tiempo de rutinas de or-deño eficientes y consistentes que reduzcan los so-breordeños y rindan altos flujos de leche desde elinicio del ordeño, con reducción de los tiempos deordeño, son claves para la consecución de un bajorecuento celular.

Siendo prácticamente coincidentes en númerolas explotaciones con retirada automática y con re-tirada manual de la unidad de ordeño, observamosun 12% de mejora de los recuentos celulares encaso de existir retiradores automáticos de la unidadde ordeño.

factores que influyen en la incidencia de mamitis clínica

100 FRISONA ESPAÑOLA Nº 195(pasa pág. 102)

ConfortUno de los dogmas más extendidos a nivel po-

pular sobre la mamitis en relación al confort es el pa-ralelismo establecido entre mamitis y camas, demanera que en muchos casos hablar de mamitisequivale a “hablar de camas”.

En el presente estudio, el 87,5% de las explota-ciones poseen estabulación libre con cubículos,siendo el material de cama más empleado la mez-cla de carbonato+serrín, presente en el 39,5% de loscasos.

Hemos comprobado las diferencias en los pará-metros de calidad de leche comparando 67 explo-taciones que emplean materiales de cama denaturaleza más inorgánica (arena, carbonato ymezclas de carbonato+serrín) con 101 explotacio-nes que utilizan los puramente orgánicos (serrín,paja, cascarilla de arroz...), encontrando que noexisten diferencias significativas en los recuentos ce-lulares entre ambas modalidades de cama, frentea lo que comúnmente se piensa.

Nº RCS C.L. RCS LIGAL Vacas con RCS<200 % 201-400 % 401-1000 % >1000 %

Orgánicas 5491 337,30 249,50 3925 71,50 691 12,59 498 9,07 376 6,85Inorgánicas 3958 328,56 241,44 2816 71,13 505 12,76 371 9,37 267 6,74

Camas y cubículos (01.07.10-31.07.11)

Orgánicas: 101 explotaciones (60,25%) Inorgánicas: 67 explotaciones (39,75%)

Conclusiones: No hay diferencias significativas entre materiales de cama orgánicos vs inorgánicos porlo que se deduce que el fracaso de un sistema de cubículos suele estar en el dimensionamiento, en enel material utilizado como cama.

Nº RCS C.L. RCS LIGAL Vacas con RCS<200 % 201-400 % 401-1000 % >1000 %

Buen manejo 9058 318,82 233,90 6189 72,32 1042 12,17 768 8,98 559 6,53Mal manejo 3048 404,74 288,06 2037 66,83 428 14,06 324 10,6 258 8,47

Estado de confort (01.07.10-31.07.11)

Buen confort: 147 explotaciones (65,25%) Confort mejorable: 81 explotaciones (34,75%)

Conclusiones: Se observan unas mayores calidades en leche de tanque en las explotaciones con unbuen estado de confort, de ahí la importancia de estos factores. Importancia de mantenimiento y di-mensionamiento adecuado de los cubículos.

+27% +23%

Cuando hemos contrastado 9.058 vacas perte-necientes a 147 explotaciones con manejo y dimen-sionamiento correcto de los cubículos frente a 3.048vacas pertenecientes a 81 explotaciones con unmanejo deficiente de los cubículos, independiente-mente del material de cama utilizado, la mejora enlos parámetros de calidad está en torno al 25% paralas explotaciones con un correcto manejo de cubí-culos, considerando en término medio los datos deControl Lechero (27%) y del LIGAL (23%).

Es sabido que tarde o temprano se fracasa enel intento de solucionar un problema de calidad deleche con un cambio de cama. La diferencia entreun sistema de cubículos bien dimensionado y conalto grado de confort frente a un mantenimientodeficiente de cubículos está en “ordeñar vacas lim-pias” y no “limpiar las vacas para ordeñar”. La lim-pieza y manejo de los cubículos y patios guardauna relación directa con el tiempo de preparaciónde las vacas para el ordeño. Los pezones sucioscomplican la preparación y en casos extremos el or-deñador no podrá dedicar el tiempo suficientepara una preparación visiblemente higiénica.

AlimentacionLa alimentación es uno de los factores que más

directamente influyen en la calidad de leche pro-ducida en una explotación. En nuestra práctica, el67% de las explotaciones alimentan a las vacas conraciones unifeed realizadas con carros autopropul-sados de titularidad compartida.

Un aspecto muy concreto de cómo la alimen-tación puede estar relacionada directamente conla mamitis es el posible desafío inmunológico deri-vado tanto de la carga microbiológica como de lapresencia de micotoxinas en la ración. Las llamadas“caídas de producción” en los rebaños son lo sufi-cientemente graves como para ser investigadas afondo, y en muchos ocasiones están relacionadascon un cambio cualitativo no conocido en la ali-mentación. A primera vista, muchos ensilados ofre-cen un aspecto óptimo, que no hacen sospecharlo más mínimo acerca de su idoneidad. Caídas deproducción, pérdidas de condición corporal, malaspecto general de los animales y aumento de los

índices de mamitis clínica y en especial de tipo co-libacilar, o incluso aumento de los recuentos celula-res de tanque sin casuística aparente de mamitis,nos deben invitar a realizar un análisis microbioló-gico de la ración.

En nuestro estudio, en torno a un 14% de las ex-plotaciones con alimentación unifeed utilizan anti-fúngicos incorporados a la mezcla de manera máso menos continua. Periodos críticos para su utiliza-ción son el comienzo y el final de los silos al tratarsede zonas con escasa compactación donde serompe la estabilidad , y las épocas con grandes os-cilaciones de temperatura y humedad entre el día

factores que influyen en la incidencia de mamitis clínica

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y la noche con desarrollo de fermentaciones.La apertura de un ensilado de forraje en una ex-

plotación debe ser tenida en cuenta como unpunto crítico. Si bien es sabido que se debe cose-char, ensilar y empacar el forraje con la madurezadecuada y de forma compacta que asegure elmantenimiento de una atmósfera anaerobia, lascondiciones físico-químicas de humedad y activi-dad del agua muy elevadas, la composición delsustrato con alto contenido en azúcares solubles, elamplio rango de oscilación de temperaturas día-noche, el rango de pH y las variaciones en la rela-ción O2/CO2 en la masa de un silo condicionan laexistencia más que probable y el desarrollo demohos, levaduras, Clostridium spp., Escherichia coliy enterobacterias.

Mohos y levaduras producen calentamiento,aumento de los valores de pH y aumento de la de-gradación proteica con formación de aminas bió-genas (histamina) que tienen repercusiones podales(laminitis) y disminución del estatus inmunitario (ma-mitis). En condiciones anaerobias, un alto contenidoen levaduras degradan el ácido láctico a etanol yCO2. En condiciones aerobias degradan este ácidoláctico a CO2 y agua. Las enterobacterias, apartede disminuir el valor nutritivo del silo, también produ-cen aminas biógenas inmunosupresoras. Los Clostri-dium spp. son, por lo general, de origen telúrico,provienen de la contaminación con tierra de lamasa del silo. Producen butírico y degradan las pro-teínas con lo cual el valor nutritivo llega a bajarhasta un 30-50%; los valores de pH suben por en-cima de 4,4 y se incrementan las pérdidas de ma-teria seca. Son especialmente activos en silos dealta humedad.

Las micotoxinas son metabolitos secundarios tó-xicos producidos por los mohos bajo determinadascondiciones físico-químicas y biológicas. Si bien lapresencia de moho no implica necesariamente lapresencia de micotoxinas, existe un rechazo del ali-mento y una deficiencia nutritiva y energética, puesel calor generado en la masa del silo proviene dela transformación de la energía. Debe prestarse es-pecial atención a las épocas con grandes fluctua-ciones de temperatura entre el día y la noche, juntocon alta humedad ambiental, agravada en ocasio-nes con la oferta de la ración a las vacas sobre co-mederos de superficie porosa, por lo generalhormigón no pulido que aseguran, junto con el la-mido, el desarrollo de una película de limo en super-ficie altamente contaminado.

En los silos de maíz, un frente de color verde azu-lado al abrir, con Tª >20ºC obedece a la presenciade Aspergilus fumigatus. Dan lugar a la presenciade aflatoxinas B1, B2, G1, G2, M1 y Ocratoxina A, in-munosupresoras y abortivas, y en especial la B1 seasocia a la presencia de altos recuentos celulares.Un color amarillo verdoso del frente de silo obedecea la presencia de Trichoderma spp. que cursa conel desarrollo de diarreas y hemorragias intestinales.

La presencia en la masa del silo de formacionesde aspecto blanco algodonoso es debida a la exis-tencia de Fusarium spp., por mal picado y compac-tado y consumo lento. Dan lugar a la presencia detoxinas T2, fumonisinas B1, B2, y diacetoxiscirpenol,inmunosupresoras, y dioxinivalenol, asociado al au-mento de recuentos celulares. Formaciones blan-cas de aspecto más compacto y podrido se debena la presencia en la masa del silo de Geotrichumspp y Byssochlamys spp, con influencia en la presen-tación de alteraciones estrogénicas y ruminales.

Si bien las analíticas de microbiología tanto deforrajes ensilados como de piensos y mezclas uni-

feed nos dan valores en ufc/gr de dichos microor-ganismos por separado, debemos valorar preferen-temente el efecto sinérgico del conjunto de lacarga microbiológica de la mezcla unifeed quecome el animal con la incidencia de mamitis y re-cuentos celulares de la explotación. No existiendoreferencias bibliográficas estándar para recuentosmicrobiológicos en mezclas unifeed y basándonosen reglamentación técnico-sanitaria de materiasprimas para la alimentación animal, establecemoslos recuentos máximos deseables en <100 ufc/gr.para E. coli, <100.000 ufc/gr. para mohos, <10 ufc/gr.para Clostridium spp. y <200.000 ufc/gr. para leva-duras. Si bien podemos analizar ensilados de hierbay maíz, es más difícil realizar un muestreo realmenterepresentativo del frente de silo, más teniendo encuenta la existencia de los bordes mal conservadosy la proximidad a las zonas de muestreo. Sobre untotal de 178 muestras de mezclas unifeed realizadasentre enero y agosto de 2010 (donde hubo proble-mas de calidad de leche), los recuentos de E. colison >100 ufc/gr. en el 56,2%; para mohos son>100.000 ufc/gr. en el 58,4%; para Clostridium sppson >10 ufc/gr. en el 32,6% y para levaduras son>200.000 ufc/gr. en el 84,2%. Teniendo en cuenta elefecto de dilución por mezclado y presuponiendoque se hace un saneamiento diario de los silos, losresultados se antojan sorprendentes y en no pocasanalíticas escandalosos.

Es necesario asegurar el mantenimiento de unaatmósfera anaerobia, la ausencia de O2 inhibe elcrecimiento fúngico. El ensilaje de un forraje muyencañado y lignificado, junto con un picado gruesoasí como los frentes de nueva apertura y finales desilo están mal compactados y aseguran unas con-

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diciones ideales para el desarrollo de hongos(mohos y levaduras). Además, el manejo diario deeste frente de silo debe asegurar una atmósferaanaerobia, sin roturas ni quebrantos que hagan pe-netrar aire en la masa del silo. El consumo de frentedebe ser lo más continuo posible. Se deben valorary desechar a diario las partes superiores mal com-pactadas, enmohecidas, calientes y visiblementemal conservadas. En relación a esto, aplicar la reglade que el peso que se coloca en la parte superiornunca será el suficiente. Los frentes abiertos de silono se deben tapar, pues se desarrollará condensa-ción y aumento de la humedad ambiental y de latemperatura en la cámara de aire creada, lo quedará lugar al crecimiento exponencial de levadurasy mohos.

Cuando el aspecto organoléptico es correctopero tenemos problemas de calidad de leche y lasanalíticas nos indican contaminación, además delas medidas de manejo ya mencionadas se puederecurrir al empleo de antifúngicos y desinfectantesantifúngicos en los frentes de silo en forma de fumi-gado. También se utilizan antifúngicos para añadira las mezclas unifeed, que no actúan contra las po-sibles micotoxinas presentes; para ello se han de uti-lizar secuestrantes.

En caso de presencia de clostridios, está indi-cada la vacunación con toxoides. Además es reco-mendable higienizar y desinfectar periódicamentelos silos de pienso y carros mezcladores.

Recordar que si a las vacas se les ha de ofertaruna ración balanceada según las necesidadesenergéticas, nutritivas y de producción, aparte de

un acceso cómodo, continuo y sin competenciasen términos de cow-confort, éstas han de “comeren plato limpio”. Para ello se mantendrá la superfi-cie de comedero perfectamente limpia con el re-cubrimiento de material liso y no poroso de fácillimpieza, como son el acero inoxidable, resinas sin-téticas o placas cerámicas.

Otro aspecto a tener en cuenta en la alimenta-ción de las vacas de producción lechera es la cali-dad y disponibilidad del agua de bebida. Encuanto a los parámetros de calidad organoléptica,físico-química y microbiológica, se adopta la nor-mativa referente a consumo humano, que es deobligado cumplimiento para el agua destinada ala limpieza y desinfección de las superficies en con-tacto con la leche. Son recomendables los bebe-deros de acero inoxidable, fácilmente volteablespara su limpieza diaria y de poco volumen pero lle-nado rápido, de manera que se disponga de unagua siempre fresca y renovada y con baja conta-minación fecal derivada del contacto directo delos animales con el bebedero.

Se han comparado 7.235 vacas pertenecientesa 126 explotaciones con un buen manejo de la ali-mentación frente a 4.496 vacas pertenecientes a107 explotaciones con un manejo mejorable de laalimentación. Un manejo adecuado de la alimen-tación da como resultado una mejoría media del27% en los parámetros de calidad celular, desde un24% de mejora para recuentos de tanque de lechehasta un 30% sobre datos de control lechero, y unmayor porcentaje de animales con recuento celu-lar <200.000 células/ml.

ConclusionesProblemas graves y sostenidos de calidad de

leche esconden tras de sí deficiencias en el equipode ordeño, falta de definición de tareas, de organi-zación del trabajo en las explotaciones, deficienciasen las instalaciones, en el confort y fallos en la ali-mentación. El hecho de que podamos diferenciarlas explotaciones en “buenas” o “malas” respectoa varios factores de manejo de los que solo cabríaaceptar que se desarrollaran de forma correcta,debe invitar, por un lado, a los ganaderos produc-tores de leche a la reflexión, y por otro, a los veteri-narios de calidad de leche a centrarnos más en larealidad próxima de las explotaciones.

AgradecimientosDesde el servicio de calidad de leche de Sera-

gro, agradecemos al Laboratorio InterprofesionalGalego de Análisis do Leite (LIGAL), a las Asociacio-nes provinciales de Control Lechero, a CONAFE, lafacilitación de los datos de las explotaciones en pro-vecho de la mejora de la calidad de leche produ-cida por nuestros clientes.

Nº RCS C.L. RCS LIGAL Vacas con RCS<200 % 201-400 % 401-1000 % >1000 %

Buen manejo 7235 308,88 227,22 5288 73,09 868 11,99 631 8,72 448 6,20Mal manejo 4498 401,04 282,11 2999 66,88 632 14,05 483 10,7 354 8,53

Alimentación (01.07.10-31.07.11)

Buen manejo: 126 explotaciones (55,25%) Mal manejo: 107 explotaciones (44,75%)

Conclusiones: Un manejo minucioso de la alimentación da como resultado mejores tasas de recuentoscelulares.

+30% +24%

factores que influyen en la incidencia de mamitis clínica

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