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UNIVERSIDAD PANAMERICANA FACULTAD DE FILOSOFÍA
CON ESTUDIOS INCORPORADOS A LA SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA
“El racionalismo crítico y la responsabilidad
en la filosofía política de Karl Popper”
TESIS QUE PRESENTA
LILIANA GUADALUPE ALMEIDA MINJARES
PARA OPTAR POR EL TÍTULO DE:
LICENCIADA EN FILOSOFÍA
DIRECTOR DE TESIS:
DR. HECTOR VELÁZQUEZ FERNÁNDEZ
MÉXICO, D.F. 2010
2
A mi Mamá
3
Agradecimientos
Concluir mis estudios de filosofía, significa mucho para mí; estoy
convencida de que este gran éxito se lo debo a mucha gente que me ha
acompañado en esta etapa.
Mi tesis está dedicada a la persona que más admiro, mi mamá. A ella le
debo la oportunidad de estudiar, e incluso la idea de entrar a la licenciatura
en filosofía; siempre estaré profundamente agradecida por el invaluable
apoyo que me ha dado para lograr mis metas, por enseñarme a ser fuerte y a
luchar por mis sueños. Agradezco también a mi familia, principalmente a
mi hermana por compartir tantas alegrías, por prestarme su ayuda en
cualquier momento y estar siempre presente.
Le doy las gracias de manera especial a Héctor Velázquez, por creer en mí,
por contar con su apoyo incondicional en estos años, y por ser el maestro y
amigo que me ha contagiado con su ejemplo, sus pláticas y sus clases el
amor a la filosofía. Agradezco también a mis profesores Alberto Ross por
su amistad y por compartir y apoyar mis proyectos; a Jorge Medina por ser
un ejemplo de la filosofía viva y darme la oportunidad de experimentarla en
el ámbito profesional. Gracias a Vicente de Haro y a María Elena García
por brindarme su confianza y apoyo; a José Hernández y Jorge Morán, por
su gran calidad humana, y sus excelentes clases.
Sin duda en estos años he tenido la oportunidad de hacer excelentes amigos
que han influido notablemente en mi vida y en mi preparación filosófica.
Incluso puedo decir que a cada uno de ellos le pertenece un fragmento de
4
esta tesis, por ser parte de la inspiración y de los momentos en que trabajé
en ella. Estaré eternamente agradecida por todo el apoyo y la felicidad que
me han regalado.
Gracias a Héctor Luis (Pirulas), Adán Aguilar, Leonardo Ruiz, Cecilia
Coronado, Mauricio Lecón y Juan Manuel Escamilla por su incomparable
amistad y compañía en los primeros años de la carrera. Agradezco a Adolfo
Mancera, Roberto Casales, Andrés Hernández, Majo García, Majo Urteaga,
Fernando Villela y Luz Adriana, por toda la confianza, las discusiones
filosóficas en el ágora y los buenos momentos que encontré en esta
generación. Gracias a Natalie Despot y Leslie Flores por su amistad y todas
nuestras conversaciones en cobranzas. De manera especial les doy gracias
por el apoyo, la amistad y los sabios consejos recibidos para concluir mi
licenciatura y continuar con mi carrera filosófica a Fernando Mora, Paniel
Reyes, Eduardo Charpenel, Alejandro Vázquez del Mercado, Alejandro
Cavallazzi y Juan Pablo García.
Por último, debo mencionar mi agradecimiento a Claudia Luna, Fernanda
Madrid, Viviana Huerta, Susana Landaverde, Ceci Coronado y Rocío
Abraham, por haber compartido conmigo mis primeros acercamientos a la
filosofía y reglarme su amistad; a Deyanira Vera, Ximena González,
Lourdes Gorostiza, Ramón Guzmán y Cesar Segura, grandes amigos que
me han acompañado en este tiempo y han contribuido a que pueda concluir
mi licenciatura.
5
Índice Introducción............................................................................................................ 7
1. El racionalismo crítico .................................................................................. 16
1.1 Los inicios del racionalismo crítico............................................................. 18
1.1.1 La actitud crítica de los filósofos jonios ............................. 18
1.1.2 Sócrates y el reconocimiento de la ignorancia .................... 24
1.1.3 La actitud crítica en Kant:................................................. 26
1.2 Naturaleza del racionalismo crítico............................................................. 31
1.2.1 El fundamento del racionalismo crítico. ............................. 33
1.2.2 El problema de la inducción y el problema de la demarcación
................................................................................................. 36
1.2.3 Verdad y falibilismo. ........................................................ 43
1.2.4 Racionalismo e irracionalismo........................................... 46
1.2.5 Fe en la razón. .................................................................. 49
2. El racionalismo crítico en la política ............................................................. 52
2.1 Racionalismo e irracionalismo en la moral y la política ............................. 54
2.1.1 La decisión moral: ........................................................... 55
2.1.2 El racionalismo como condición de libertad, tolerancia,
diálogo, igualdad y humanitarismo ............................................. 58
2.2 La actitud racional en la democracia ........................................................... 64
2.2.1 Sociedad abierta y sociedad cerrada .................................. 64
2.2.2 La Democracia................................................................. 67
2.2.3 Las paradojas de la soberanía y la libertad:....................... 72
2.3 Los amigos y los enemigos de la sociedad abierta ...................................... 74
2.3.1 El historicismo: ................................................................ 76
2.3.2 El historicismo y la ingeniería social ................................. 83
2.3.3 La ingeniería social gradual y la ingeniería utópica ........... 87
3. La responsabilidad y el racionalismo crítico en la práctica ........................... 92
3.1 Los principios éticos del racionalismo crítico en la filosofía política de Popper................................................................................................................ 93
3.1.1: El principio de falibilidad en la política ........................... 95
3.1.2 El principio de discusión racional en la política ................. 98
6
3.1.3 El principio de aproximación a la verdad ......................... 101
3.2 La responsabilidad en la filosofía política de Popper................................ 104
3.2 .1 La responsabilidad intelectual ........................................ 104
3.2.2 Responsabilidad y libertad .............................................. 109
Conclusiones....................................................................................................... 114
7
El racionalismo crítico y la responsabilidad
en la filosofía política de Karl Popper
Introducción
Karl Popper es el creador del racionalismo crítico, filosofía que se
caracteriza por proponer al falsacionismo como método científico, por su
actitud de apertura al diálogo y humildad intelectual. La filosofía
popperiana está sentada sobre bases puramente éticas, de modo que sus
teorías sobre filosofía de la ciencia y política se desencadenan a partir de
una razón moral.
En el presente trabajo pretendo mostrar que el racionalismo crítico de Karl
Popper es una filosofía que a partir de la responsabilidad individual,
propone un método para la búsqueda de la verdad y la generación de
conocimiento. Sostengo que en última instancia, el racionalismo crítico, es
una invitación a la responsabilidad moral; puesto que el método de Popper,
es ante todo, una actitud individual de tolerancia y participación que intenta
acercarse a la verdad a partir de la discusión.
Con la intensión de mostrar lo anterior en la filosofía política, abordaré
primero las nociones fundamentales sobre epistemología necesarias para
comprender la teoría social de Popper.
En numerosos escritos, Popper da razón de las experiencias que lo hicieron
reflexionar sobre la ciencia y la política de su época, y que le darían la clave
para constituir toda su filosofía. De este modo, el mismo filósofo, subraya
que el origen de su epistemología, está en la reflexión moral de tres
8
acontecimientos principales: su acercamiento al marxismo, a la ciencia y a
la pseudociencia.
Karl Popper nació en Viena en 1902. El filósofo austriaco cuenta que a la
edad de catorce años (durante la primera guerra mundial) empezó a
preguntarse por el problema de la libertad política:
“[...] reflexionaba lleno de esperanza sobre la paz y la democracia,
cuando de pronto vi con toda claridad que una democracia no podía
ser realmente estable. Pues justo en el momento que se estabiliza,
comienza uno a considerarla como algo natural, y con ello entra en
peligro la libertad. Los seres humanos dejarían de esforzarse por ella,
por conservarla y cuidarla, pues no pueden imaginarse lo que podría
representar una pérdida de la libertad: quizá terrorismo, quizá incluso
la guerra.”1
En el año de 1918, al acabar la guerra, Austria se encontraba en muy mala
situación. En ese tiempo, el Partido Comunista se presentaba como una
opción de pacifismo que pretendía ser el “partido de la libertad”, y Popper
buscando respuesta a sus inquietudes sobre la libertad, empezó a acercarse a
las ideas comunistas.
El filósofo austriaco, inició su búsqueda haciéndose miembro de de una
asociación de estudiantes comunistas con creencias marxistas2. A pesar de
que un amigo ruso, le advirtió sobre el fanatismo y la hipocresía de los
1 POPPER Karl, La responsabilidad de vivir, trad. Concha Roldán, Barcelona: Paidós 1995 [1994], p. 256. 2 Cfr. POPPER Karl, Búsqueda sin término: Una autobiografía intelectual, trad. Carmen García Trevisano, Madrid: Tecnos 1977 [1974], p. 45.
9
bolcheviques, Popper se ofreció como voluntario al Partido Comunista de
Austria en 1919.3
“Entretanto me había puesto al corriente en teoría marxista y, aunque
todavía era demasiado joven para hacerme socio, los funcionarios
superiores me acogieron [...] y me designaron para todos los servicios
posibles. A menudo estaba presente [...] en su no tan secretas
reuniones y tuve la oportunidad de enterarme de muchísimas cosas
sobre su forma de pensar. [...] estaba muy motivado por aquello que
consideraba mi deber moral; y precisamente esto habría estado a punto
de convertirse en fatalidad para mí.”4
Recordemos que el marxismo tiene como finalidad garantizar la paz sobre
la tierra, asegurando la llegada del socialismo. Esta doctrina afirma que el
socialismo es una necesidad histórica que implica una lucha de clases, una
revolución social que culminará en una sociedad en la que no habrá una
clase dominante y una oprimida, sino que todos los hombres serán iguales
porque no habrá clases. De este modo, ante la visión marxista, el que intente
detener la venida del socialismo será responsable de las víctimas de la
revolución ocasionada por la resistencia.5 Entonces, la adhesión al
marxismo, implica una responsabilidad moral: procurar la aceleración del
advenimiento del socialismo, o bien, luchar contra los que pretendan
retrazarlo.6
Popper explica que durante su participación en el Partido, empezó a notar
actitudes que le parecían inmorales y contradictorias: el Partido promovía la 3 Cfr. ARTIGAS Mariano, Lógica y ética en Karl Popper, Pamplona: EUNSA 2001 [1998], p. 117. 4 POPPER, La responsabilidad de vivir... p. 257. 5 Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir... p. 230. 6 POPPER, La responsabilidad de vivir... p. 228.
10
actitud criminal en contra de los “enemigos de clase”, cambiaban sus
opiniones y acciones de manera radical, según las instrucciones que venían
desde Moscú. Ante estas actitudes, Popper sentía que estaba sacrificando su
integridad moral por un Partido lleno de contradicciones.7
“El incidente que me enfrentó con el comunismo, y que pronto había
de alejarme enteramente del marxismo, fue uno de los más
importantes de mi vida. Ocurrió antes de mi decimoséptimo
cumpleaños. en Viena se desencadenó un tiroteo durante una
manifestación de jóvenes socialistas no armados, que, instigados por
los comunistas, trataban de ayudar a escapar a algunos comunistas
que estaban arrestados en la estación central de policía de Viena.
Varios jóvenes obreros socialistas y comunistas fueron muertos. Yo
estaba horrorizado y espantado de la brutalidad de la policía, pero
también de mi mismo, porque sentía que, como marxista, compartía
parte de la responsabilidad por la tragedia [...] la teoría marxista
demanda que la lucha de clases sea intensificada, con vistas a
acelerar la llegada del socialismo. Su tesis es que aunque la
revolución pueda reclamar algunas víctimas, el capitalismo está
reclamando muchas más víctimas que toda la revolución socialista”8
Después de este incidente, Popper condenó para siempre el marxismo, y
entonces empezó a reflexionar: no existe una demostración científica
respecto a esta filosofía y al advenimiento del socialismo; él mismo no lo
había comprobado ni cuestionado críticamente; por lo tanto, tampoco podía
responder por el marxismo ni alentar a otros jóvenes a creer y luchar por el
supuesto advenimiento del socialismo.9
7 Cfr. ARTIGAS, Lógica y ética en Karl Popper... p. 118. 8 POPPER, Búsqueda sin término... p. 45. 9 POPPER, La responsabilidad de vivir... p. 228.
11
En ese mismo año, en 1919, Popper tuvo otros dos incidentes que
determinarían las bases éticas de su filosofía. En esta época, el filósofo
austriaco se interesó también, por la teoría de la relatividad de Einstein, el
psicoanálisis de Freud y la teoría sobre la psicología del individuo de Adler.
Popper empezó a estudiar las teorías de Einstein, y quedó impresionado
con el resultado de las observaciones de Eddington del eclipse de 1919,
que confirmaron la teoría de gravitación.10 Lo que más llamó la atención
de Popper, es que Einstein siempre había considerado que sus teorías eran
conjeturales, y que por lo tanto, estaban sujetas a ser falsadas.
“Fue Einstein quien señaló que la teoría newtoniana de la gravitación
–al igual que la suya propia- es conocimiento por conjetura, a pesar de
su inmenso éxito; y, al igual que la teoría de Newton, la propia teoría
de Einstein parece ser sólo una aproximación a la verdad. No creo que
la significación del conocimiento por conjetura me hubiese quedado
clara nunca sin la obra de Newton y Einstein [...]” 11
Probablemente, cuando Popper se percató de la humildad intelectual de un
hombre dedicado y comprometido con la ciencia, fue cuando empezó a
cuestionar a la psudociencia, que en lugar de cuestionar sus propias teorías,
no hacían más que justificarlas basándose únicamente en los criterios de la
misma teoría. Así, el materialismo científico, el psicoanálisis y la
psicología individual, que se describían como ciencias, no cumplían con el
rigor demostrativo que Einstein exigía para sus propias teorías.
10 Cfr. POPPER Karl, Conjeturas y refutaciones. El desarrollo del conocimiento
científico, trad. Nestor Míguez, Barcelona: Paidós 1991 [1963], p. 58. 11 POPPER Karl, En busca de un mundo mejor, trad. Jorge Vigil Rubio, Barcelona: Paidós 1996 [1984], pp. 251-252.
12
“Pero lo que más me impresionó fue la clara afirmación del propio
Einstein de que consideraría su teoría como insostenible si no resistía
ciertos tests [...] He aquí una actitud totalmente diferente de la actitud
dogmática de Marx, Freud, Adler, y aún más de la de sus seguidores
[...] De este modo llegué, hacia el final de 1919, a la conclusión de que
la actitud científica era la actitud crítica, que no buscaba
verificaciones, sino contrastaciones cruciales, contrastaciones que
podían refutar la teoría contrastada, aunque nunca podrían
establecerla”12
Popper comenta que estas disciplinas le parecían más similares a la
astrología que a la ciencia, ya que se mostraban como revelaciones
intelectuales. Los que admiraban las teorías de Marx, Freud o Adler
quedaban impresionados por su poder explicativo:
“El estudio de cualquiera de ellas parecía tener el efecto de una
conversión o revelación intelectuales, que abría los ojos a una nueva
verdad oculta para los no iniciados. Una vez abiertos los ojos de este
modo, se veían ejemplos confirmatorios en todas partes: el mundo
estaba lleno de verificaciones de la teoría. Todo lo que ocurría la
confirmaba. Así, su verdad parecía manifiesta y los incrédulos eran,
sin duda, personas que no querían ver la verdad manifiesta, que se
negaban a verla, ya porque estaba contra sus intereses de clase, ya a
causa de sus represiones aún "no analizadas" y que exigían a gritos un
tratamiento.”13
12 POPPER, Búsqueda sin término... pp. 50-52. 13 POPPER, Conjeturas y refutaciones... p. 59. “Un marxista no podía abrir un periódico sin hallar en cada página pruebas confirmatorias de su interpretación de la historia; no solamente en las noticias, sino también en su presentación —que revelaba el sesgo clasista del periódico— y, especialmente, por supuesto, en lo que el periódico no
13
El problema de estas tres teorías, en general, es que son profundamente
dogmáticas; si su único fundamento está en ellas mismas, entonces parecen
ser irrefutables e incuestionables.
Entre las tres teorías, el marxismo parece ser el más peligroso, puesto que
implica una actitud sumamente irresponsable: predecir la historia, luchar y
sacrificar vidas por un supuesto ideológico sin ninguna base científica. El
marxismo no se cuestiona a sí mismo, de hecho se justifica por sus propios
dogmas.
“Me había percatado del carácter dogmático de sus credos y de su
arrogancia intelectual [...] Era algo particularmente pernicioso para un
intelectual, para uno que podía leer y pensar, me sentí terriblemente
deprimido por haber caído en semejante trampa”14
Pero también las consecuencias éticas del psicoanálisis de Freud y la
psicología individual de Adler son terribles. Ambas teorías le restan
libertad y responsabilidad al hombre, insistiendo en que los seres humanos
son víctimas de su propio pasado, de sus padres o de su entorno.
decía. Los analistas freudianos subrayaban que sus teorías eran constantemente verificadas por sus "observaciones clínicas". En lo que respecta a Adler, [...] le informé acerca de un caso que no me parecía particularmente adleriano, pero él no halló dificultad alguna en analizarlo en términos de su teoría de los sentimientos de inferioridad, aunque ni siquiera había visto al niño. [...] un caso puede ser interpretado a la luz de una teoría. Pero esto significa muy poco, reflexioné, pues todo caso concebible puede ser interpretado tanto a la luz de la teoría de Adler como de la de Freud. [...] Era precisamente este hecho —que siempre se adecuaban a los hechos, que siempre eran confirmadas— el que a los ojos de sus admiradores constituía el argumento más fuerte en favor de esas teorías. Comencé a sospechar que esta fuerza aparente era, en realidad, su debilidad.” POPPER, Conjeturas y refutaciones... pp. 59-60 14 POPPER, Búsqueda sin término... p. 47.
14
La responsabilidad intelectual del psicólogo es nula, puesto que la
psicología del paciente sólo depende de la interpretación del terapeuta, y
hasta podría ser, que en vez de crear una conciencia de la responsabilidad
actual de los actos del paciente, el terapeuta sólo le ayude a justificar por el
“terrible pasado”, los males que pueda padecer en la actualidad.
Las consideraciones anteriores llevaron a Popper a concluir lo siguiente:
“Es fácil obtener confirmaciones o verificaciones para casi cualquier
teoría, si son confirmaciones lo que buscamos. [...] Una teoría que
no es refutable por ningún suceso concebible no es científica. La
irrefutabilidad no es una virtud de una teoría (como se cree a
menudo), sino un vicio. [...] Es posible resumir todo lo anterior
diciendo que el criterio para establecer el status científico de una
teoría es su refutabilidad o su testabilidad.”15
Los sucesos de 1919 dieron origen a la reflexión que llevaría a Popper a
construir el racionalismo crítico.
El falibilismo en la filosofía de la ciencia fundamenta el método de ensayo
y error, explica que la ciencia no es definitiva, que el científico debe
someter sus teorías al análisis y posibilidad de refutación y comprobación
más exigente. En la filosofía política el método de ensayo y error se
traduce en la propuesta de la ingeniería social gradual que conduce a la
sociedad abierta en la que predomina el diálogo.
La modestia intelectual se establece como condición necesaria en la
actividad científica, porque es lo que permite la posibilidad de mejorar
15 POPPER, Conjeturas y refutaciones... p. 61.
15
nuestras teorías para el beneficio de la humanidad. En la democracia, la
humildad de los gobernantes y los ciudadanos crea un ambiente de
tolerancia y humanidad, permite ampliar la visión para corregir los errores
y construir una sociedad adecuada a las necesidades presentes.
La búsqueda de la verdad, en el racionalismo crítico, se establece sobre
bases éticas que implican la responsabilidad de los actos humanos.
A fin de explicar la importancia de la responsabilidad individual en la
filosofía política de Popper, dedicaré el primer capítulo a explicar las
nociones más impottantes sobre filosofía de la ciencia, mismas que
constituyen el esqueleto de la teoría polítca.
16
1. El racionalismo crítico
El término “racionalismo” suele usarse en oposición al de “empirismo”;
por tal motivo, es necesario aclarar que Popper no se refiere al
“racionalismo” cartesiano, sino que utiliza este término en otro sentido: en
primer lugar considera que su posición racionalista abarca la actividad
intelectual, la observación y la experimentación, de modo que el
racionalismo poperiano incluye rasgos empiristas e intelectualistas, ambos
de gran relevancia para el conocimiento y la actividad científica16; y en
segundo lugar, Popper toma al racionalismo como una actitud de apertura a
la resolución de problemas por medio de la razón17. Esta actitud pretende
alcanzar la objetividad, valiéndose de la libre crítica y el establecimiento
de un lenguaje común que reconozca a la experiencia como la nota de
imparcialidad que media en las controversias18.
Ahora bien, el “racionalismo crítico” es considerado como la posición
epistemológica de Popper19; y de manera general, es el modo en el que se
denomina a su filosofía. Sin embargo, el racionalismo crítico no se reduce
a la postura epistemologica, sino que se trata también de una postura
ética,20 e incluso, podemos afirmar que el motivo y la base del
racionalismo crítico es principalmente ético.
16 Popper considera que la ciencia se vale tanto de la experiencia como del pensamiento, en la misma medida. El” racionalismo” popperiano, se entiende en oposición al “irracionalismo”. Cfr. POPPER Karl, La sociedad abierta y sus enemigos, trad. Eduardo Loedel, Barcelona: Paidós 2006 [1945], p. 760. (Nota 1 al capítulo 24). 17 Cfr. POPPER, La sociedad abierta y sus enemigos… p. 437. 18 Cfr. JARVIE I. C., “Racionalidad y lógica situacional en la obra científica de Popper”, Contrastando a Popper, Ed. Ángeles J. Perona, Madrid: Biblioteca Nueva 2008, p.78. 19 El conocimiento tiene un doble origen: razón y experiencia. 20
Cfr. ARTIGAS, Lógica y ética en Karl Popper... p. 133.
17
El racionalismo crítico se presenta como una actitud de disposición a
alcanzar la verdad a partir de la discusión crítica racional y de la idea de
que todos podemos cometer errores, de modo que dicha discusión da
cabida para encontrar nuevas ideas y mejores explicaciones a partir de
conjeturas y refutaciones que tienen como incentivo la búsqueda de la
verdad:
“[…] el racionalismo es una actitud en la que predomina la
disposición de escuchar los argumentos críticos y a aprender de la
experiencia. Fundamentalmente consiste en admitir que ´yo puedo
estar equivocado y tú puedes tener la razón y, con un esfuerzo,
podemos acercarnos los dos a la verdad´ […] la actitud racionalista
[…] es muy semejante a la actitud científica, a la creencia de que en la
búsqueda de la verdad necesitamos cooperación y que, con la ayuda
del raciocinio, podemos alcanzar, con el tiempo, algo de
objetividad.”21.
La adhesión al racionalismo crítico implica una decisión moral, una actitud
personal. El racionalista argumenta para tomar una postura, no intenta
convencer al otro de manera violenta, ni imponer sus ideas; por el
contrario, la actitud racional es la alternativa ante la violencia, es la
disposición al diálogo, la aceptación de la propia ignorancia y la tolerancia
ante las nuevas ideas que pueden ser de ayuda para encontrar la verdad.
Es importante señalar que Popper encuentra en la antigua Grecia, los
inicios del racionalismo crítico. La tradición racionalista inició en la
escuela Jónica, y ésta, junto con la actitud socrática, caracterizadas por la
21 POPPER, La sociedad abierta y sus enemigos… p. 438.
18
humildad ante el conocimiento, pueden considerarse como los orígenes del
racionalismo crítico poperiano.
1.1 Los inicios del racionalismo crítico
El filósofo austriaco describe al racionalismo crítico, como un método
natural en el que se da la filosofía. Explica que desde la antigüedad, el
pensamiento filosófico se fue desenvolviendo como un diálogo constante.
Por lo general filosofía se da en el ámbito de la confrontación y la
argumentación, a fin de encontrar las mejores explicaciones posibles
acerca de la realidad. Aunque no siempre se ha hecho filosofía o ciencia a
la manera del racionalismo crítico, parece que muchos filósofos han
tomado esta actitud de diálogo y apertura a la crítica.
Resulta evidente, que la intención de Popper no consiste en dar una razón
histórica del racionalismo crítico, sino que intenta demostrar que se trata de
un método apto, e incluso natural para la reflexión filosófica y para la
discusión crítica de las explicaciones acerca de la realidad.
1.1.1 La actitud crítica de los filósofos jonios
Popper explica que la actitud crítica se desarrolló originalmente en los
presocráticos, puesto que la racionalidad de los primeros naturalistas
griegos se caracteriza por poner en tela de juicio cuestiones de fondo
cosmológico y epistemológico, con la intención de encontrar una
19
explicación a la naturaleza.22 Así, la ciencia occidental tiene su origen en la
especulación filosófica de los presocráticos:
“Los antepasados comunes a todos los científicos y filósofos son
Homero, Hesíodo y los presocráticos. Para ellos, lo esencial es la
indagación de la estructura del universo, incluido el problema de
nuestro conocimiento del universo […]”23
La razón por la que Popper afirma que el racionalismo crítico nació con el
surgimiento mismo de la Filosofía, se explica por la tradición de la
discusión crítica que se dio por primera vez en Grecia en la escuela jónica.
Esta tradición se distingue por permitir que el discípulo critique la doctrina
del maestro, y sobre todo, que el maestro motive dicha crítica; la finalidad
no es conservar las enseñanzas originales intactas, de manera contraria al
pitagorismo, la tradición crítica se caracteriza por la libertad de
pensamiento y por la pluralidad de doctrinas que tratan de llegar a la
verdad por medio de la discusión24.
De este modo, Anaximandro critica a su maestro Tales, y a su vez
Anaxímenes criticará a ambos, lo cual muestra para Popper que el creador
de la escuela jónica fundó la tradición del libre pensamiento, en la que se
tolera la crítica de los discípulos dirigida al maestro, en contra de la
tradición dogmática que pretende preservar un doctrina como insuperable y
sin espacio para la discusión.
22Cfr. POPPER Karl, El mundo de Parménides: ensayos sobre la ilustración
presocrática, trad. Carlos Solís, Barcelona: Paidós 1999 [1988], p. 23. 23 POPPER, En busca de un mundo mejor... p. 237. 24 Cfr. POPPER, El mundo de Parménides… p. 42.
20
Podemos ver que a partir de la filosofía de Tales, sus discípulos
estructuraron su propio pensamiento, sin ningún compromiso con las
afirmaciones de su maestro y proponiendo así, de manera racional y crítica,
una filosofía con diferencias sustanciales respecto a la de su mentor.
Para ilustrar lo anterior, presento algunos fragmentos en los que los
filósofos de la escuela jónica proponen el principio del cosmos:
Tales de Mileto dice que el agua es el principio de todas las cosas:
“[…] dicen que siempre hay alguna naturaleza, ya sea una o más de
una, de la cual se generan las demás cosas, conservándose ella. Pero,
en cuanto al número y a la especie de tal principio, no todos dicen lo
mismo, sino que Tales, iniciador de tal filosofía, afirma que es el Agua
[…]”25
Anaxímenes habla de un principio indeterminado, el arjé:
“De entre los que dicen que es uno, moviente e infinito, Anaximandro,
hijo de Praxiades, un milesio, sucesor y discípulo de Tales, dijo que el
principio y elemento de las cosas existentes era el ápeiron [indefinido
o infinito], habiendo sido el primero en introducir este nombre de
principio material.” 26
Por último, Anaximandro dirá que el primer principio del cosmos es el
aire:
25 ARISTÓTELES, Metafísica, trad. Tomás Calvo Martínez, Madrid: Gredos 2000, III, 983b 26 SIMPLICIO, Fis. 24, 13; DK 12 a 9, cit. en KIRK, RAVEN, SCHOFIELD, Los
filósofos presocráticos: historia crítica con selección de textos, trad. Jesús García Fernández, Madrid: Gredos 1999, p. 21.
21
“Anaxímenes de Mileto, hijo de Eurístrato, compañero de
Anaximandro, dice, como éste, que la naturaleza sustante es una e
infinita, mas no indefinida, como él, sino definida y la llama aire […]
“27
Con el ejemplo anterior podemos hacer evidente, que la filosofía de la
escuela jonia estaba construida sobre una base crítica en la que se permitía
proponer nuevas soluciones e incluso refutar a las teorías anteriores.
De manera contraria a las escuelas de libre pensamiento, Popper explica
que lo propio de las escuelas que se fundan en un dogma, es procurar la
conservación y difusión de la doctrina del maestro: si alguno de los
miembros pretende modificar el dogma inicial se produce un cisma, o bien,
la expulsión del hereje que trató de contaminar la doctrina. Probablemente
esta doctrina acepte algunas pequeñas modificaciones para adaptarse a los
nuevos conocimientos, sin embargo, sólo se rectifica la doctrina oficial o
se dan nuevas interpretaciones que indiquen que esta doctrina sigue siendo
la original. Como en el caso de la escuela pitagórica, donde era imposible
la retroalimentación a través de la discusión crítica. 28
En general, desde Parménides hasta Sócrates, el racionalismo crítico
aparece como una actitud propia del quehacer filosófico; y todos estos
filósofos coinciden en que no podemos tener el saber absoluto, que nuestro
conocimiento no es totalmente cierto.29
27 TEOFRASTO, ap. Simplicium Fis. 24, 26, cit. en KIRK, RAVEN, SCHOFIELD, Los
filósofos presocráticos… p. 214. 28 Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir... p. 141. 29 Cfr. POPPER, El mundo de Parménides… p. 354.
22
Popper señala que el primer pensador que desarrolló una teoría crítica del
conocimiento del hombre, una filosofía moral, y que vincula la idea de
verdad objetiva con la falibilidad propia del hombre, es Jenófanes, quien
fundó una tradición de pensamiento que tiene como característica el acento
en la ignorancia humana.30
A excepción de la escuela pitagórica, la filosofía griega desde Tales de
Mileto hasta Sócrates, parece caracterizarse por la discusión crítica31, esto
se hace evidente para Popper con el ejemplo del problema del cambio, en
el cual se da un diálogo crítico de manera continua en los presocráticos.32
A pesar de esto, Popper confirma que fue en la escuela jónica, en la que
realmente surgió el racionalismo crítico, puesto que es la única escuela que
se aparta del dogmatismo y da inicio a una tradición, en la que los
30 “ Jenófanes fue el fundador de una tradición, una forma de pensamiento, a la que han pertenecido, entre otros, Sócrates, Erasmo, Montaigne, Locke, Hume, Voltaire y Lessing” POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 245. La tradición fundada por Jenófanes suele llamarse “escéptica” haciendo referencia a la raíz griega que significa indagar, buscar o reflexionar. Esta tradición advierte que el conocimiento del hombre, aparte de que no es definitivo, es conjetural, y por tanto, su propia doctrina tambien. Cfr. POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 245. A continuación presento algunos fragmentos que justifican la propuesta popperian: “Ciertamente los dioses no revelaron todas las cosas desde el principio a los hombres, sino que, mediante la investigación, llegan estos con el tiempo a descubrir mejor.” Fr. 18 Estobeo, Ant. I 8, 2. cit. en KIRK, RAVEN, SCHOFIELD, Los filósofos presocráticos… p. 262. “Ningún hombre conoció ni conocerá nunca la verdad sobre los dioses y sobre cuantas cosas digo; pues, aun cuando por azar resultara que dice la verdad completa, sin embargo, no lo sabe. Sobre todas las cosas (o sobre todos los hombres) no hay más que opinión.” Fr. 34, Sexto, adv.
math. VII 49 y 110, cf. Plutarco, aud. poet. 2, 17 E cit. en KIRK, RAVEN, SCHOFIELD, Los filósofos presocráticos… p. “Es necesario que conozcas todo, tanto el corazón imperturbable de la verdad bien redonda, como las opiniones de los mortales, en las que no hay verdadera confianza. Aprenderás, empero, también cómo las creencias deberían ser aceptables, penetrándolo totalmente todo.” Fr. I, 28-32, SIMPLICIO, De
caelo 557, 25. cit. en KIRK, RAVEN, SCHOFIELD, Los filósofos presocráticos… p. 366 31 Cfr. POPPER, El mundo de Parménides… p. 355. 32 Cfr. POPPER, El mundo de Parménides… p. 25-36 y 41
23
discípulos, de manera abierta pretenden mejorar la doctrina de su mentor
de generación en generación.33
“[…] la Escuela Jónica de Tales […] es la que con el tiempo se
constituyó en la tradición de la filosofía griega y la que, tras la
recuperación de esta filosofía en el Renacimiento, se convirtió
finalmente en tradición de la ciencia europea.” […] Tales creó una
nueva tradición […] por lo que yo sé , se inventó una sola vez. Se
perdió al cabo de unos doscientos o trescientos años, pero se
redescubrió […] en el Renacimiento esencialmente gracias a Galileo
Galilei […] Y sólo se puede desplegar plenamente allí donde haya
libertad política.”34
Para Popper, el filósofo de Mileto inició la tradición de la filosofía griega y
la ciencia natural35, a partir de la libertad de pensamiento, de la pluralidad
de ideas y aceptando que los intentos por llegar a la verdad no son
definitivos, por lo cual, la crítica y la discusión se plantearon como los
instrumentos para hacer filosofía y llegar a la verdad. Sin lugar a dudas, el
racionalismo crítico se puede desarrollar del mejor modo únicamente en
donde hay libertad política, en donde las ideas no se vean limitadas por una
doctrina o por un paradigma que se conciba como verdadero de manera
estricta.
33 Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir… pp. 141 y 142. 34 POPPER, La responsabilidad de vivir… pp. 141-142. 35Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir… pp. 142-143. “[…] el racionalismo de Tales es, con todo, una idea y una tradición sin la que nuestra civilización europea no podría existir en absoluto. Pues nada es tan característico para nuestra civilización europea como el hecho de que es una civilización dedicada a la ciencia. Es la única civilización que ha producido una ciencia natural y en la que esa ciencia representa un papel francamente importante. Pero esa ciencia natural es el producto inmediato del racionalismo; es el producto del racionalismo de la antigua filosofía griega.” POPPER, La responsabilidad de vivir… p. 143.
24
Al parecer, la intensión de Popper, al ubicar los inicios del racionalismo
crítico en la antigua Grecia, es mostrar que la filosofía surgió en un
ambiente antidogmático y crítico. Los presocráticos hablaron de un mismo
tema, el cambio; y mostraron diversas posturas respecto al tema, lo cual
supone una crítica, especialmente cuando conocían las tesis de los otros
naturalistas.
1.1.2 Sócrates y el reconocimiento de la ignorancia
Otro filósofo que resulta de gran relevancia para el desarrollo del
racionalismo crítico es Sócrates. Sin duda, la noción socrática de la
ignorancia, está implícita en la falibilidad que Popper atribuye al
conocimiento; la humildad socrática es una actitud crítica y racional,
puesto que admite la imposibilidad de la posesión de un conocimiento
absoluto y se muestra como una disposición a dialogar y aceptar nuestros
errores e ignorancia.
En la Apología de Sócrates, Platón desarrolla el discurso de defensa de
Sócrates en contra de las acusaciones que le imputaron los atenienses. En
este diálogo Sócrates trata de explicar las razones por las que Apolo, en
voz del oráculo de Delfos, afirma que Sócrates es el más sabio. Sin afán de
negar la sabiduría del dios, Sócrates intenta encontrar explicación a tal
afirmación. Dirigiéndose a los que se consideraban sabios; el resultado de
la investigación de Sócrates fue la siguiente:
“Ahora bien, al examinar a éste -pues no necesito citarlo con su
nombre, era un político aquel con el que estuve indagando y dia-
logando- experimenté lo siguiente, atenienses: me pareció que otras
25
muchas personas creían que ese hombre era sabio y, especialmente, lo
creía él mismo […] A continuación intentaba yo demostrarle que él
creía ser sabio, pero que no lo era. [...] Al retirarme de allí razonaba a
solas que yo era más sabio que aquel hombre. Es probable que ni uno
ni otro sepamos nada que tenga valor, pero este hombre cree saber
algo y no lo sabe, en cambio yo, así como, en efecto, no sé, tampoco
creo saber. Parece, pues, que al menos soy más sabio que él en esta
misma pequeñez, en que lo que no sé tampoco creo saberlo.”36
De este modo, Sócrates reconoce que no es sabio haciendo énfasis en la
pobreza de su conocimiento y en su afán por confrontarse con otros.
Popper hace una comparación de la teoría platónica del político, con la de
Sócrates. Ambos filósofos advierten que el político debe ser un hombre
sabio; para Platón el político debe ser un filósofo profesional, mientras
que, para Sócrates la sabiduría del político está en la conciencia de su
propia ignorancia:
“Es el contraste entre modestia intelectual y la arrogancia intelectual.
Y es también el contraste entre el falibilismo – el reconocimiento de la
falibilidad de todo conocimiento humano- y el cientifismo – la teoría
de que debe otorgarse la autoridad al conocimiento y al que conoce, a
la ciencia y a los científicos, a la sabiduría y al hombre sabio, y a la
erudición y a los eruditos.”37
36 PLATÓN, “Apología de Sócrates”, Diálogos, v.1, trad. J, Calonge Ruiz, Madrid: Gredos, 1986, 21ª c-d. 37 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 55.
26
Fue la duda lo que llevó a Sócrates al falibilismo, puesto que “[…]
criticaba todo lo que le parecía cierto a los demás y a él mismo.”38
Entonces, Popper sugiere que el método de Sócrates es un método crítico
que lo llevó a la idea de que todos los hombres y él mismo estaban lejos de
poderse afirmar como sabios; pero lo que en el fondo buscaba Sócrates con
dicho método era encontrar las bases de la ética.39
1.1.3 La actitud crítica en Kant:
Uno de los temas fundamentales para Popper, es la teoría del
conocimiento. El filósofo austriaco considera, como hemos visto, que el
racionalismo crítico ya había sido advertido por otros filósofos: los
presocráticos, Sócrates y también por algunos pensadores modernos.40
El giro copernicano de Kant41, toma un sentido relevante para la filosofía
del conocimiento en Popper, cuando Kant se enfrenta al problema de la
38 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 56. 39 Cfr. POPPER, La sociedad abierta y sus enemigos... p. 44. 40 “Esta filosofía, si bien en unos cuantos de sus aspectos particulares, ya había sido prevista en la obra de algunos pensadores del pasado, por ejemplo Hume, Kant, Whewell y Pierce […]” MILLER David, “Introducción” en POPPER, Karl, Popper: escritos
selectos, comp. David Miller, trad. Sergio René Madero, México: FCE 2006, p.10. 41 En el “Prólogo de la segunda edición” de la Crítica de la razón pura, Kant advierte su giro copernicano, el cuál será de gran relevancia para el método conjetural de Popper: “Si la intuición tuviera que regirse por la naturaleza de los objetos, no veo cómo podría conocerse algo a priori sobre esta naturaleza. Si, en cambio, es el objeto (en cuanto a objeto de los sentidos) el que se rige por la naturaleza de nuestra facultad de intuición, puedo representarme fácilmente la posibilidad. […] o bien los conceptos por medio de los cuales efectúo esta determinación se rigen también por el objeto, y entonces me encuentro, una vez más, con el mismo embarazo sobre la manera de saber de él algo a priori; o bien supongo que los objetos, o lo que es lo mismo, la experiencia, única fuente de su conocimiento (en cuanto objetos dados), se rige por tales conceptos.” KrV. BXVII. Sin duda, el racionalismo crítico, toma la base epistemológica kantiana, afirmando que el conocimiento es el resultado conjunto de la experiencia y el pensamiento: “Pero, aunque todo nuestro conocimiento empiece con la experiencia, no
27
posibilidad de la teoría Newtoniana, y da inició a su cuestionamiento sobre
del conocimiento:
“¿Cómo es posible la matemática pura? ¿Cómo es posible la ciencia
natural pura? Como tales ciencias ya están realmente dadas, es
oportuno preguntar cómo son posibles, ya que el hecho de que deben
serlo queda demostrado por su realidad.”42
La base de la ciencia de Newton, no podía estar en los sentidos, sino en
nuestro intelecto, “[…] la teoría de Newton no era el resultado de un
método experimental o inductivo, sino una creación del pensamiento
humano, del intelecto, humano.”43 De este modo, nuestro intelecto es el
que asigna leyes a la naturaleza, el observador interroga a la naturaleza,
puesto que la naturaleza no nos revela sus secretos. La ciencia, entonces, es
una creación humana.44
Pero el giro coopernicano de Kant no se agota en su teoría del
conocimiento, sino que se extiende a la ética con el tema de la autonomía,
en el que se concluye que la autoridad no es la base de la ética puesto que
nosotros juzgamos en última instancia, si la orden de la autoridad es moral,
la libertad humana, que está implícita en la toma de decisiones, conlleva
una responsabilidad individual. De este modo “[…] Kant hace del hombre
por eso procede todo él de la experiencia.” KrV. B1, A1-A2.; sin embargo, Popper criticará ampliamente el apriorismo kantiano. 42 KANT Immanuel, Crítica de la razón pura, trad. Pedro Ribas, México: Taurus 2006, B, 20. Haré referencia a esta obra como KrV. 43 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 59. 44 Cfr. POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 175.
28
el legislador de la moralidad, además de convertirlo en el legislador de la
naturaleza.”45
El racionalismo crítico es una actitud que exige responsabilidad, que
advierte que la ciencia es una creación humana y que como tal, es falible.
Y el giro copernicano es una muestra de actitud racional puesto que
advierte la responsabilidad humana en la ciencia y con esto, la base de todo
lo humano en la moral del individuo.
La influencia de la filosofía kantiana es muy evidente en Popper, incluso,
él mismo lo afirmaba:
“ Y a lo largo de toda su vida se consideró un kantiano. Pero era un
kantiano crítico que sometió a una aguda crítica algunas
particularidades de la doctrina kantiana del conocimiento.”46
El filósofo austriaco está de acuerdo con Kant en que el conocimiento no
se agota en la experiencia47, y que las teorías tienen su origen en nuestro
libre intelecto; pero se muestra en contra del apriorismo kantiano. Kant
afirmaba por ejemplo, que la ciencia de Newton era conocimiento
verdadero, cierto y totalmente justificado; Popper no está en desacuerdo
con tal afirmación, sólo por la evidencia de que ya se ha superado la teoría
45 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 176. 46ALBERT Hans, “Epistemología y ciencia social. La contribución de Karl Popper al análisis de las conexiones sociales”, Contrastando a Popper, Ed. Ángeles J. Perona, Madrid: Biblioteca Nueva 2008. 47 Cfr. POPPER Karl, Realismo y el objetivo de la ciencia: Post Scriptum a La lógica de
la investigación científica Vol. 1, trad. Marta Sansigre Vidal, ed. W. W. Bartley III, Madrid: Tecnos, 1998 [1983], p. 192. y KrV. A 1-2 y B 3-5. Popper explica que en realidad existen muchas fuentes de conocimiento, el conocimiento no empieza de la nada, en realidad el avance en el se debe a la modificación o corrección del conocimiento o problema anterior; lo importante es que estas fuentes se sometan a un examen crítico. Cfr. POPPER, En busca de un mundo mejor… pp. 72-75.
29
de Newton en nuestros tiempos, sino también porque advierte que al crear
de manera libre nuestras teorías y tratarlas de imponer a la naturaleza:
“[…] rara vez tenemos éxito en adivinar la verdad; y nunca podemos
estar seguros de haberlo conseguido. Esto tenemos que hacerlo con
conocimiento por conjetura.”48
Siguiendo a Kant, Popper asegura que nosotros creamos teorías sobre la
naturaleza y que no podemos describir los hechos empíricos sin
interpretarlos a partir de nuestras teorías; sin embargo, considerar que las
leyes de la naturaleza y de la moral son apodícticas y válidas a priori,
anularía la posibilidad de refutación de los enunciados científicos que
intentamos corroborar, puesto que son esas leyes las que imponemos sobre
la experiencia y los hechos juzgados bajo estas leyes los que refutamos, y
a partir de esto surgen teorías alternativas que contrastamos con la teoría
presente ( que en este caso podrían ser las leyes a priori de Kant)49.
Popper admite un conocimiento genético a priori, es decir, un
conocimiento anterior a la percepción y la necesidad de estar dotados con
la capacidad de obtener conocimiento. Pero a diferencia de Kant, Popper
habla de un conocimiento “a priori” de carácter conjetural e hipotético: 50
“Kant fue el primero que pensó que la existencia de saber apriórico es
un requisito indispensable para la existencia del saber a posteriori.
Pero de la «necesidad» de un saber apriórico para posibilitar el saber
perceptivo no se puede deducir la «necesidad» en el sentido de una
modalidad lógica. Precisamente en este punto disiento de Kant: puesto
48 POPPER, En busca de un mundo mejor…p. 60. 49 Cfr. POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 193. 50 Cfr. POPPER, La responsabilidada de vivir... pp. 109-111
30
que nuestro saber perceptivo es hipotético, nuestro saber apriórico
debe ser también hipotético.”51
Aprendemos por ensayo y error, de modo que nuestros ensayos son
hipotéticos y estas hipótesis que son formuladas por nosotros, no provienen
del exterior. Nos acercamos a la verdad a partir de teorías tentativas; las
verdades genéticas a priori, no determinan nuestro entendimiento de la
realidad.52
“[...] hemos aprendido de Einstein que nuestro intelecto puede
formar, al menos tentativamente, teorías alternativas; que pueden
reinterpretar los hechos alternativamente en términos de cada una de
esas nuevas teorías; que, en competición entre esas teorías, podemos
decir libremente, sondeando su profundidad y pensando el resultado
de nuestras críticas, incluyendo nuestras contrastaciones; y que sólo de
este modo podemos tener la esperanza de acercarnos a la verdad.”53
Ciertamente, en nuestros días resulta más fácil notar la falibilidad de las
teorías científicas, porque la ciencia avanza más rápido y a la par de esta la
información. Si echamos una mirada a la historia de la ciencia, resulta
evidente que se han creado teorías nuevas que refutaron a las anteriores:
Galileo refutó a Copérnico, Kepler a Galileo, Newton a Kepler, Einstein a
51 POPPER, La responsabilidad de vivir... p. 110 52 “Kant creía que estábamos dotados de un aparato mental, con un sistema digestivo psicológico y quizá fisiológico, que nos permitía digerir los estímulos que llegaban a nuestros sentidos desde el mundo exterior y que, al digerirlos , asimilarlos y absorberlos, imponíamos nuestras características estructurales sobre ellos; es decir, es la marca de nuetra mente sobre ellos la que da lugar a verdades válidas a priori sobre el mundo ahora es inegable que existen tales verdades genéticamente a priori. Pero son curiosamente poco importantes. Porque no estamos obligados a interpretar el mundo de las cosas según ellas; por el contrario, nos percatamos fácilmente de su carácter subjetivo [...]” POPPER, KARL: Realismo y el objetivo de la ciencia... p. 193. 53 POPPER, KARL: Realismo y el objetivo de la ciencia... p. 193.
31
Newton, etc. La razón de esto es que nuestro conocimiento es conjetural y
falible.
“[…] esa discusión lleva casi necesariamente a constatar que nuestros
intentos de ver y hallar la verdad no son definitivos, sino que son
susceptibles de mejora; que nuestro conocimiento, nuestra doctrina, es
conjetural; […] y que las críticas y la discusión crítica son los únicos
medios de que disponemos para aproximarnos a la verdad. Lleva por
tanto a la tradición de conjeturas audaces y crítica libre, la tradición
que creó la actitud racional o científica y con ella, nuestra civilización
occidental […]54
Es evidente que en muchos pensadores se hacen presentes algunas de las
características que Popper asigna al racionalismo crítico, sin embargo, el
modo en el que los presocráticos iniciaron el quehacer filosófico, el
método y la actitud socrática; y el giro copernicano de Kant, tanto en la
ciencia como en la moral; conforman el principal fundamento de la actitud
crítica de Popper y su manera de concebir a la filosofía.
1.2 Naturaleza del racionalismo crítico
Popper, a diferencia del Círculo de Viena, propuso un método que intenta
unificar a la ciencia, aclarando el problema de la demarcación, y
proponiendo el falibilismo ante el problema de la inducción. Pensaba que
el método verificacionista del positivismo lógico estaba mal planteado,
puesto que no ofrecía una propuesta que lograra describir a la ciencia y
justificar la validez del conocimiento científico: al no entender el método
54 POPPER, El mundo de Parménides… p. 43.
32
de las ciencias naturales, difícilmente se pueden comprender las
posibilidades de las ciencias sociales.55
“El objetivo de esta empresa es mostrar la unidad metodológica
de las ciencias naturales y sociales. El revisionismo metodológico
con el que Popper caracterizó el pensamiento científico-natural,
sería también la concepción adecuada para las ciencias
sociales.”56
La misma metodología de las ciencias naturales, es aplicable a las ciencias
sociales; sin duda las últimas tienen un grado mayor de complejidad, pero
esto no anula la posibilidad de seguir el mismo método:
“El método de las ciencias sociales, al igual que el de la ciencias
naturales, radica en ensayar posibles soluciones para sus
problemas [...]”57
El método de ensayo-error es aplicable a las ciencias naturales y sociales,
puesto que en él se proponen y critican soluciones en el marco de una
discusión generada por la tensión entre conocimiento e ignorancia; la
objetividad de la ciencia reside en la objetividad de la crítica:
“El método de la ciencia es, pues, el de la tentativa de solución,
el del ensayo (o idea) de solución sometido al más estricto
control crítico. [...] no hay teoría que esté liberada de la crítica ,
55 ALBERT Hans, “Epistemología y ciencia social...” p. 21 56 ALBERT Hans, “Epistemología y ciencia social...” p. 20 57 POPPER Karl, “La lógica de las ciencias sociales” en POPPER, ADORNO, DAHRENDORF, HABERMAS, La lógica de las ciencias sociales, trad. Jacobo Muñoz, México: Colofón 2008 [1961], pp. 14-15.
33
[...] los medios lógicos de los que se sirve ésta –la categoría de
contradicción lógica- son objetivos.”58
1.2.1 El fundamento del racionalismo crítico.
La base de la filosofía popperiana, parece establecerse sobre la
epistemología, sin embargo, ésta se funda sobre una base ética. En
realidad, los temas de mayor interés para Popper siempre fueron tanto la
filosofía de la ciencia, como la política; pero existe un motivo para pensar
que todos los estudios de Popper se basan en una actitud moral
fundamental: la actitud crítica. Esta actitud supone que detrás de los
planteamientos epistemológicos de Popper, que a la vez fungen como
fundamento de su teoría política, se sustentan en la ética.59
“[…] Los principios éticos constituyen la base de la ciencia. La idea
de verdad como principio regulador fundamental –el principio que
guía nuestra búsqueda- puede considerarse un principio ético. La
búsqueda de la verdad y la idea de aproximación a la verdad también
son principios éticos; como lo son las ideas de integridad intelectual y
falibilidad, que nos conducen a una actitud de autocrítica y
tolerancia.”60
58 POPPER, “La lógica de las ciencias sociales”… p. 15. 59 Es pertinente señalar que La lógica de la investigación científica, fue escrita en 1934, mientras que la Sociedad Abierta y sus enemigos fue publicada en 1945. Cfr. MAGEE, Popper... pp. 14 y 16. Según este orden cronológico se podría sugerir que Las sociedad
abierta y sus enemigos, es una extensión de La lógica de la investigación científica,
como señala Magee en las páginas anteriores; resulta evidente que la teoría epistemológica fundamenta a la política poperiana. Sin embargo, en la Sociedad abierta
y sus enemigos, surgen nuevos argumentos que sustentan y dan mayor fuerza al racionalismo crítico: a lo largo del capítulo 24 de La sociedad abierta y sus enemigos se explica la racionalismo crítico como una actitud racional, que en última instancia, se fundamentará en una “irracional fe en la razón”. Al respecto, es clara la validez de esta afirmación tanto en lo que concierne a la filosofía de la ciencia, como a la política. 60 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 255.
34
Popper enuncia tres principios éticos que constituyen la base de la ciencia
o de toda discusión racional que pretende buscar la verdad. Estos son los
tres principios éticos en los que se basa el racionalismo crítico:
“1. El principio de falibilidad: quizá yo estoy equivocado y quizá tu
tienes razón, pero es fácil que ambos estemos equivocados.”61
Este primer principio implica la aceptación de los límites de la razón
humana.62 El principio de falibilidad se refiere a una actitud de humildad
respecto al conocimiento.
“ 2. El principio de discusión racional: deseamos intentar sopesar, de
forma tan impersonal como sea posible, las razones a favor y en
contra de una teoría que es definida y criticable.”63
Este principio hace hincapié, un vez más, en la importancia del diálogo y la
objetividad con la que deben tratarse los problemas a discutir. La discusión
racional implica una autocrítica y la aceptación de la crítica de los demás,
de este modo podemos obtener una visión más clara de las opciones para
solucionar un problema o para darnos cuenta de los errores. La crítica debe
ser específica, es decir, debe aportar razones concretas, que intenten
aproximarse a la verdad objetiva, sólo de este modo se puede dar lugar a
una postura impersonal.64
61 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 255. 62
“[…] la actitud racionalista o, como quizá pudiera llamarse, la <actitud de la razonabilidad>, es muy semejante a la actitud científica, a la creencia de que en la búsqueda de la verdad necesitamos cooperación y que, con la ayuda del raciocinio, podremos alcanzar, con el tiempo, algo de objetividad.” POPPER, La sociedad abierta…
p. 438. 63 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 255. 64 Cfr. POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 258.
35
“3. El principio de aproximación a la verdad: en una discusión que
evite los ataques personales, casi siempre podemos acercarnos a la
verdad. Puede ayudarnos a alcanzar una mejor comprensión; incluso
en los casos en que no alcancemos un acuerdo.”65
Este principio advierte que la tolerancia y la igualdad son valores
necesarias para poder comunicar, entender y mostrar apertura hacia la
verdad.
“Vale la pena señalar que estos tres principios son tanto
epistemológicos como éticos, pues implican, entre otras cosas la
tolerancia: si yo espero aprender de ti, y tu deseas aprender en interés
de la verdad, tengo no sólo que tolerarte sino reconocerte como
alguien potencialmente igual; la unidad e igualdad potencial de todos
constituye en cierto modo un requisito previo de nuestra disposición a
discutir racionalmente las cosas.”
El racionalismo crítico es una actitud humana en todos sus aspectos: es una
actitud moral ante la humanidad misma y ante la ciencia, precisamente
porque reconoce la participación necesaria de los hombres para llegar a la
verdad y la importancia de la pluralidad; reconoce que nos podemos
equivocar, que la ciencia es un producto humano, y que como tal, es
falible.
65 POPPER, Karl: En busca de un mundo mejor… p. 255.
36
La inducción ha sido considerada como el método propio de las ciencias
empíricas, así como el criterio que demarca lo que es y lo que no es
ciencia67. Popper se muestra en contra de esta afirmación: la ciencia no es
inductiva, la ciencia procede de modo deductivo, puesto que consiste en
conjeturas y refutaciones68.
Popper se opone a la inducción debido a que resulta imposible conocer a
todos los particulares para enunciar una ley universal. El problema de la
inducción es:
“[…] la cuestión acerca de si están justificadas las inferencias
inductivas, o de bajo qué condiciones están.”69
El inductivismo supone que existe un sistema de enunciados absolutamente
ciertos e irrevocablemente verdaderos, como finalidad de la ciencia. Se
basa en los datos empíricos de un número finito de casos en los que un
fenómeno se presenta, para afirmar la uniformidad de los posibles
resultados que no se comprueban empíricamente. El principio de inducción
debe ser un enunciado sintético, es decir, uno cuya negación no sea
66 La finalidad de desarrollar brevemente los principales problemas epistemológicos que Popper intenta resolver en La lógica de la investigación científica y en el post scriptum de esta obra, titulado Realismo y el objetivo de la ciencia. Post Scriptum a La lógica de
la investigación, es dar un panorama que ayudará a entender y justificar la metodología con la que Popper desarrolla su filosofía política y social. Se ha dicho que la base de su epistemología y por lo tanto de su filosofía política, es la ética; sin embargo, es necesaria una exposición de los fundamentos lógicos de la teoría del conocimiento para entender el método poperiano. 67 MAGEE, Popper… p. 25 68 POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia... p. 53. 69 POPPER, La lógica de la investigación científica, trad. Victor Sánchez de Zavala, Madrid: Tecnos 1980 [1934], p. 28.
37
contradictoria sino lógicamente posible. Las inferencias inductivas son
infinitamente probables, por lo tanto, la lógica inductiva conduce a una
regresión infinita.
Popper ilustra esta idea con un ejemplo: Si partimos de la hipótesis
inductiva “todos los cisnes son blancos”, para corroborar este enunciado
con la experiencia, tendríamos que conocer a todos los cisnes que existen y
a todos los que han existido, y sólo así podríamos decir que nuestra
hipótesis es verdadera; y puesto que es imposible conocer a todos los
cisnes, no podemos afirmar esta hipótesis, bastaría con que un cisne fuera
negro para que nuestra teoría sobre el color de los cisnes fuera refutada:
“Ahora bien, desde un punto de vista lógico dista mucho de ser obvio
que estemos justificando al inferir enunciados universales partiendo de
enunciados singulares, por elevado que sea su número; pues cualquier
conclusión que saquemos de este modo corre siempre el riesgo de
resultar un día falsa; así, cualquiera que sea el número de ejemplares
de cisnes blancos que hayamos observado, no está justificada la
conclusión de que todos los cisnes sean blancos.”70
De este modo, podemos ver que las generalizaciones empíricas, aunque
pueden ser no verificables, sí son falsables, puesto que podemos
contrastarlas por medio de la refutación.71
El problema de la inducción al que se refiere Popper, corresponde al
“problema de Hume” expuesto anteriormente por Kant. En resumen, Hume
afirma lo siguiente:
70 POPPER, La lógica de la investigación científica… p. 27. 71 MAGEE, Popper…. pp. 29-30.
38
a) Hay muchas regularidades en la naturaleza en las que todos
confiamos y existen muchas leyes universales aceptadas por los
científicos; estas son de gran relevancia para la ciencia teórica y
práctica.
b) Cualquier inferencia inductiva es inválida, sin importar el número
de casos en la experiencia que nos revelen cierta regularidad.
c) No existen razones válidas diferentes a las de la experiencia, para
justificar la creencia en una ley universal.72
De los tres enunciados anteriores Popper concluye el principio de invalidez
de la inducción y el del empirismo:
“[…] No puede haber razonamiento válido desde enunciados de
observaciones singulares a leyes universales de la naturaleza y, por lo
tanto, a teorías científicas. Este es el principio de la no validez de la
inducción. Exigimos que nuestra adopción y nuestro rechazo de las
teorías científicas dependa de los resultados de la observación y el
experimento y, por tanto, de enunciados de observaciones singulares.
Este es el principio del empirismo.”73
Popper, está de acuerdo con estos principios formulados por Hume, sin
embargo, difiere en la renuncia de Hume al racionalismo y añade el
“principio del racionalismo crítico”, con el que resuelve el problema
epistemológico planteado por Hume:
Hume “Decidió que todo nuestro conocimiento sobre leyes se obtiene
de la observación […] por inducción y concluyó que, puesto que la
72 Cfr. POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… pp. 71-72. 73 POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 72.
39
inducción no es válida lógicamente, ello muestra que tenemos que
basarnos en la asociación (“hábito” que resulta de la repetición”) en
vez de basarnos en la razón.[…] Exigimos que nuestra adopción y
nuestro rechazo de teorías científicas dependan de nuestro
razonamiento crítico (combinado con los resultados de la observación
y la experiencia […] Este es el principio del racionalismo crítico.”74
La propuesta de Popper, es entonces, que todas las teorías científicas,
incluso las que tomamos por verdaderas (puesto que no podemos llegar a
afirmar su verdad de manera concluyente), no dejan de ser conjeturales,
por lo que a partir de la crítica racional, debemos aceptarlas o rechazarlas
aun que sólo sea de manera tentativa. De este modo, el trabajo del
científico consistirá en proponer teorías y contrastarlas, tomando el método
deductivo que procede por conjeturas y refutaciones. 75
Todos los problemas epistemológicos pueden ser tratados con
contrastación deductiva, y mientras la teoría no sea falsada, podemos decir
que ésta “[…] ha demostrado su temple o que está corroborada por la
experiencia.”76
Los positivistas y epistemólogos que tienden al método empirista, adoptan
el método inductivo admitiendo enunciados reductibles a la experiencia,
los cuales no son más que juicios de percepción. Pero de acuerdo al
método inductivo no se puede resolver el problema de demarcación por
que reducen la metafísica a un problema absurdo77, lo cual reitera el
problema de demarcación de la lógica inductiva. Al aniquilar la metafísica
74 POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 72. 75
Cfr. POPPER, La lógica de la investigación científica…pp. 31- 32. 76 POPPER,: La lógica de la investigación científica…p. 33. 77 Cfr. POPPER,: La lógica de la investigación científica…p. 35
40
aniquilan la ciencia natural. La metafísica es necesaria porque las ciencias
empíricas acuden a la especulación.
Como hemos visto, para Popper, la inducción no es válida; por lo tanto, el
criterio de demarcación entre la ciencia y la metafísica, no puede ser la
inducción, es decir, que la ciencia utiliza el método científico inductivo y
la metafísica no. Al respecto, Popper explica que la ciencia adopta
enunciados que no pueden verificarse:
“[…] no puede haber una demarcación exacta entre la ciencia y la
metafísica; y la importancia de la demarcación, si la tiene no debe
sobreestimarse.”78
Sin embargo, la importancia de la demarcación está en que concierne a
todos los problemas principales de la lógica y la ciencia.
“[…] ¿cómo puede distinguir las teorías de las ciencias empíricas de
las especulaciones pseudo-científicas, no científicas o metafísicas?
Este es el problema de la demarcación. Ha de resolverse, sugiero,
aceptando la contrastabilidad o refutabilidad o falsabilidad como la
característica distintiva de las teorías científicas.”79
A lo largo de la historia de la ciencia, podemos constatar que las ideas
metafísicas han dominado el desarrollo de la ciencia. Por ejemplo, el
problema del cambio en los presocráticos inició como un planteamiento
metafísico que derivó en la física.
78 POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 201. 79 POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 199.
41
Las ideas metafísicas actúan como ideas reguladoras que se han
transformado en teorías científicas.80 De este modo, Popper advierte la
importancia y la relación evidente de la metafísica y la ciencia.
Otro problema al que se enfrenta el criterio de demarcación es la distinción
entre ciencia y pseudociencia. La pseudociencia afirma que sus teorías
están verificadas por la evidencia de las observaciones, pero no son
contrastables y al parecer encuentran la confirmación de sus teorías a partir
de ellas mismas. Un ejemplo de esto es el psicoanálisis de Freud, la
psicología individual de Adler y el materialismo histórico de Marx.
Respecto a estas teorías Popper comenta:
“Lo que yo encontraba muy llamativo, y muy peligroso, en esas
teorías, era la afirmación de que estaban […] «confirmadas» por un
flujo incesante de evidencia en forma de observaciones. […] Un
marxista no podía mirar un periódico sin encontrar evidencia
verificadora de la lucha de clases en cada página […] Y un
psicoanalista, sea freudiano o adleriano, dirá, con toda seguridad, que
encuentra verificadas sus teorías cada día, incluso cada hora, por sus
observaciones clínicas. Pero ¿eran contrastables estas teorías?
¿Estaban esos análisis realmente mejor contrastados que, por ejemplo,
los frecuentemente «verificados» horóscopos de los astrólogos?”81
El verificacionismo, es un método acrítico, contrario al método del
racionalismo crítico que propone la búsqueda de ejemplos falsadores para
corroborar la fuerza de una teoría; la pseudociencia no se somete a
contrastación; y por esto, no tiene fuerza argumentativa.
80 Cf. POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 200. 81 POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 202.
42
El método que Popper elige es el de falsabilidad de los sistemas. Este
método consiste, a grandes rasgos, en tratar de encontrar errores en las
teorías; al contrario del verificacionista, que cree que la ciencia es el
conjunto de enunciados verdaderos, y por lo tanto, forma a la ciencia a
partir de enunciados existenciales.82
Para no caer en problemas análogos a los de la verificabilidad, Popper
propone una asimetría entre verificabilidad y falsabilidad:
“La asimetría consiste en que un conjunto finito de enunciados
básicos, si son verdaderos, puede falsar una ley universal; mientras
que bajo ninguna condición podría verificar una ley universal: existe
una condición bajo la cual el conjunto finito de enunciados básicos
podría falsar una ley general, pero no existe ninguna condición bajo la
cual pueda verificar una ley general.”83
De acuerdo con la propuesta de Popper, lo característico del método
empírico es la exposición de una teoría o sistema de teorías a la falsación,
con el fin de contrastarlo de todos los modos imaginables “[…] sometiendo
a todos los sistemas a la más áspera lucha por la supervivencia.”84
82 Cfr. POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 224. 83 POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 225. 84 POPPER, La lógica de la investigación científica… p. 41 Si suponemos que todos los enunciados científicos empíricos han de ser decidibles de modo concluyente, entonces su falsación y verificación son posibles. Si admitimos como enunciados empíricos los que sean decidibles en un solo sentido (falsables) y puedan ser contrastados con ensayos sistemáticos de falsación, desaparece la contradicción “[...] el método de falsación no presupone la inferencia inductiva, sino única mente las transformaciones tautológicas de la lógica deductiva, cuya validez no se pone en tela de juicio.” POPPER, KARL: La lógica
de la investigación científica… p. 42.
43
La falsabilidad se aplica en enunciados particulares que sirvan como
premisas de inferencias falsadoras. Las experiencias perceptivas, no
justifican ningún tipo de enunciado, es preciso separar los aspectos
psicológicos de los metodológicos y lógicos, distinguiendo las experiencias
subjetivas que no justifican, de las relaciones lógicas objetivas.
Las teorías científicas no son justificables o verificables por completo, pero
son contrastables. Entonces la objetividad de los enunciados científicos se
da en la contrastación intersubjetiva. Una experiencia subjetiva o de
sentimiento de convicción jamás justificará un enunciado científico. Pero
aceptar un enunciado científico depende de la también percepción. No
debemos caracterizar a la ciencia empírica únicamente por la estructura
lógica o formal de sus enunciados, no es posible excluir a la metafísica,
porque es esta la que le da el criterio y fundamento de verdad al objeto de
estudio de las ciencias.
1.2.3 Verdad y falibilismo.
Como se ha expuesto, el trabajo del científico racionalista consiste en
proponer teorías y contrastarlas. 85 Popper explica que el conocimiento en
general, procede a partir de conjeturas y refutaciones: se tiene un problema
y surgen soluciones tentativas que se comprueban con la investigación;
pero los argumentos, según el racionalismo crítico siempre serán
negativos, puesto que son argumentos críticos que utilizamos para refutar
conjeturas previas.86
85 Cfr. POPPER, La lógica de la investigación científica… p. 31. 86 MILLER, “Introducción” … p.10.
44
El conocimiento científico inicia con problemas prácticos y teóricos que
pretendemos explicar, es decir, buscamos la verdad a pesar de que
conocemos nuestra imposibilidad de llegar a ella. La ciencia no aspira a la
certeza87 porque sabemos que nuestro conocimiento es falible; la ciencia
aspira a la verdad y es por eso que tratamos de corregir los errores que
vamos descubriendo.
El falibilismo afirma que el hombre, en su intento de resolver problemas,
siempre tiene la posibilidad de fallar; y puesto que la ciencia es una labor
humana, no hay un método seguro para evitar errores.88
El modo en el que procede nuestra búsqueda de la verdad es combatiendo
el error y eliminando la falsedad ya que el objetivo del científico es la
verdad objetiva.
“Como nunca podemos conocer nada con seguridad, simplemente no
vale la pena buscar la certeza; pero sí vale la pena buscar la verdad; y
esto lo hacemos principalmente buscando equivocaciones, a fin de
poder corregirlas. […] es erróneo identificar la verdad con una verdad
definida o cierta. Hay que distinguir tajantemente entre verdad y
certeza.”89
La ciencia es un producto humano, es un intento de explicar nuestro
entorno90; esto explica la afirmación de Popper de que nuestro
conocimiento es conjetural; por lo tanto, el saber científico natural en
87 “Existen verdades inciertas […] pero no existen certezas inciertas.” POPPER, En
busca de un mundo mejor… p. 19. 88 ALBERT, “Epistemología y ciencia social...” p. 18. 89 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 19. 90 Cf. POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 299.
45
realidad no es un saber, sino una suposición o hipótesis, de modo que no
sabemos, sino que más bien conjeturamos:
“Ciencia es búsqueda de la verdad. Pero verdad no es verdad segura.
[…] Podemos decir la verdad bastante a menudo, alcanzar la verdad.
Pero nunca podemos obtener seguridad.”91
Por lo anterior Popper argumenta su principio de falibilidad; si la ciencia es
mera aproximación a la verdad, tendremos que considerar que el
conocimiento científico es perfectible, y que por tanto, no podemos
considerar definitivas a nuestras teorías, ya que siempre será posible
encontrar un error en ellas, e incluso, debemos buscar estas equivocaciones
para progresar hacia otras teorías mejores.
Mariano Artigas explica que Popper defiende el falibilismo para evitar
posiciones dogmáticas que se aparten de la autocrítica y la honestidad
intelectual; y opina que el conjeturalismo popperiano
“[…] se refiere principalmente a los enunciados y teorías científicas
que pueden ser sustituidos por otros mejores […] el conjeturalismo
tiene sentido si lo interpretamos como la posibilidad de alcanzar
siempre un conocimiento mejor y como la actitud de buscarlo.”92
A partir de esto es posible afirmar que Popper no pretende una proponer
una visión escéptica o relativista sobre la verdad:
91 POPPER, La responsabilidad de vivir… p. 99. 92 ARTIGAS, Lógica y ética en Karl Popper… p. 128
46
“Si podemos admitir que no hay, pues, autoridad que esté fuera de la
crítica en el ámbito de nuestro conocimiento, por mucho que nos
hayamos adentrado en lo desconocido, podemos retener, sin riesgo de
dogmatismo, la idea de que la propia verdad está por encima de toda
autoridad humana. En realidad no sólo somos capaces de retener esta
idea, sino que hemos de retenerla. Pues sin ella no puede haber normas
objetivas de indagación científica, no puede haber crítica de las
conjeturas que proponemos como solución, no puede haber avance
hacia lo desconocido ni búsqueda del conocimiento.”93
Los argumentos a favor del falibilismo, son el resultado de la conciencia de
nuestra ignorancia y del carácter conjetural de nuestro conocimiento,
mientras más conocemos, más ignoramos, puesto que surgen nuevos
problemas y de estos nacen nuevas conjeturas.
“Cada solución de un problema da lugar a nuevos problemas no
resueltos […] esto, sin lugar a dudas, es la principal fuente de nuestra
ignorancia: el hecho de que nuestro conocimiento sólo puede ser
finito, mientras que nuestra ignorancia debe ser necesariamente
infinita.”94
1.2.4 Racionalismo e irracionalismo
Popper señala que desde la filosofía griega, con Pitágoras, Heráclito,
Parménides y Platón, tenemos indicios del racionalismo mezclado con el
misticismo; tiempo después, Spinoza trata de combinar el intelectualismo
cartesiano con tendencias místicas, y aún después de la oposición kantiana,
93 POPPER: En busca de un mundo mejor… p. 75. 94 POPPER: Popper: escritos selectos… p. 58.
47
esta teoría de la intuición mística intelectual, repercutió en el idealismo
hasta Fichte, Schelling y Hegel.95
Como hemos visto, Popper está a favor del racionalismo. Sin embargo es
necesario aclarar que se refiere a un racionalismo limitado. De aquí la
distinción entre racionalismo crítico, y racionalismo acrítico o
irracionalismo.:
“[…] incluso cuando siento que el racionalismo ha ido demasiado
lejos, sigo simpatizando con él, pues sostengo que un exceso en esta
dirección […] es en realidad inocuo, si lo comparamos con un exceso
en la otra dirección. Opino que la única manera en que el racionalismo
excesivo puede ser dañino es que tienda a minar su propia posición y,
con ello, acarrear una reacción irracionalista.”96
El racionalismo acrítico únicamente acepta lo que puede ser sustentado por
un argumento o por la experiencia, y cualquier suposición que no se
justifique de este modo debe descartarse. Wittgenstein, como ejemplo,
afirma que toda suposición acientífica es falsa, aunque accidentalmente
pueda ser verdadera.97
95 Cfr. POPPER, La sociedad abierta… p. 442 y 761. 96 POPPER, La sociedad abierta… p. 442-443 97 Wittgenstein afirma que la totalidad de las proposiciones verdaderas es la totalidad de las ciencias naturales (pero Popper demostrará que esta proposición no puede ser verdadera porque no pertenece a las ciencias naturales, sino más bien a una metaciencia o teoría de la ciencia anterior, por tal motivo resulta en sí misma contradictoria); y también afirma que ninguna proposición puede decir nada acerca de ella misma (por tanto esta proposición es igualmente contradictoria ya que afirma su propia verdad, pues no se puede valer de la autorreferencia; si es verdadera ella misma se falsifica). Ambas proposiciones resultan ser un ejemplo de la paradoja del mentiroso. Una teoría que implica su propia carencia de significado es falsa o específicamente contradictoria. Cfr. POPPER, La sociedad abierta… p. 443 y 761.
48
El problema de este tipo de racionalismo es que él mismo tendría que ser
descartado, pues sucede lo mismo que en la “paradoja del mentiroso”(una
frase que afirma su propia falsedad como: esto mismo que estoy diciendo
es falso); por lo tanto el racionalismo acrítico es lógicamente insostenible y
puede ser derrotado por sus propios medios, es decir por su argumento
básico. Si se sostiene que no debemos partir de ningún supuesto, no es
posible tener un punto de partida, puesto que el hecho de pensar que no se
debe de partir de supuestos, ya es un supuesto, lo cual lleva a la “paradoja
del mentiroso”.98
De este modo, el racionalismo total pude ser distinguido del racionalismo
crítico que propone Popper: el primero culmina necesariamente en un
irracionalismo, el segundo aceptará que necesariamente partimos de
supuestos o intuiciones para conocer, argumentar o hacer ciencia.
“[…] el racionalista no crítico, que cree que el racionalismo es
autónomo, y puede ser establecido por el razonamiento, está
equivocado. Desde un punto de vista lógico el irracionalismo es
superior al racionalismo no crítico.”99
Esto no quiere decir que debamos tomar una postura irracionalista, sino
que todo nuestro conocimiento tiene su origen en una decisión irracional.
98 Cfr. POPPER, La sociedad abierta… p. 443 99
POPPER,: La sociedad abierta… p. 444
49
1.2.5 Fe en la razón.
De esta distinción entre el racionalismo crítico e irracionalismo, surge una
de las tesis fundamentales para la filosofía poperiana, la cual dará sustento
a su teoría del conocimiento, pero sin duda, también resulta determinante
para la filosofía moral y política.
Popper afirma que todas las tesis racionales tienen un supuesto no
demostrado, anterior a ellas mismas:
“Algunos filósofos dicen que, puesto que los argumentos racionales
siempre comienzan con algún supuesto no demostrado y tienen que
hacerlo, es obvio que tenemos que aceptar los supuestos no
demostrados de cada argumento en base a una fe, ya que en otro caso
no vamos a ninguna parte.”100
Como hemos dicho, el racionalismo crítico implica una decisión moral, ya
que se trata ante todo de una actitud de apertura al diálogo. Popper admite
un racionalismo que va más allá de una teoría filosófica, porque advierte
un supuesto anterior a todos sus argumentos; el racionalismo crítico es la
convicción de que podemos darnos cuenta de nuestras faltas y errores por
medio de la crítica, es una actitud abierta a la discusión crítica; 101 pero el
fundamento de toda posición racionalista, es una intuición, y esta intuición
es irracional:
100 Popper en ARTIGAS, Lógica y ética en Karl Popper… p. 29-30. Este texto fue tomado de una transcripción literal de Mariano Artigas, de la réplica improvisada de Popper a una pregunta relacionada con William W. Bartley III al final de una conferencia expuesta en el Seminario de Kioto, el 12 de noviembre de 1992, del Prof. Keiichiro Kamino titulada “Sobre el Racionalismo Crítico de Popper”. Esta transcripción está publicada en ARTIGAS, Lógica y ética en Karl Popper… p. 29-33. 101 Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir… p.137
50
“[…] podemos describirla como una irracional fe en la razón.” (Por
lo tanto, el racionalismo crítico) […] reconoce el hecho de que la
actitud racionalista fundamental resulta (al menos provisionalmente)
de un acto de fe, de fe en la razón.”102
Popper insiste en que el racionalismo crítico no es una tesis filosófica y
que nada tiene que ver con el fideísmo, y que por el contrario, es una
respuesta al fideísmo. Es una simple actitud en la que se puede creer, y
Popper la recomienda como el escenario que da la pauta de una discusión
racional:
“El fideísmo no tiene nada que ver. Sólo interviene mi creencia en
que se trata de una actitud que es buena para probarla o quizás
adoptarla, pero el fideísmo es la tesis según la cual todas nuestras
teorías, todas nuestras opiniones deben estar basadas en último
término sobre una fe.”103
La fe irracional en la razón de la que Popper habla, no es más que una
actitud en la que se resalta la imposibilidad de demostrar todo lo que
sabemos o afirmamos. Con esto Popper enfatiza en el hecho de que todo
conocimiento parte de un supuesto no demostrado, por eso decimos que
creemos o tenemos fe en la intuición de que algo es de determinada
manera. Confiamos en nuestra razón en tanto que no podemos demostrar
los supuestos de los que partimos en una discusión.
102 POPPER, La sociedad abierta… p. 444. 103 POPPER, cit. en ARTIGAS, Lógica y ética en Karl Popper… p. 31.
51
Es necesario señalar también, que la afirmación de esta irracionalidad
primera, es la causa por la que se refuerza el racionalismo crítico: puede
ser que yo esté equivocado o que tú estés equivocado, pero si lo
discutimos, al menos nos podemos acercar a la verdad. Puesto que nuestro
conocimiento puede partir de una simple conjetura no demostrada, en la
discusión crítica podemos hallar los medios para demostrar, descartar o
reforzar nuestro supuesto inicial.
Popper señala que existen creencias racionales; estas creencias son las que
sostenemos a la luz de una teoría que nos acerca a la verdad, para ilustrarlo
el austriaco pone un ejemplo:
“Lo que creemos (con razón o sin ella) no es que la teoría de Newton
o la teoría de Einstein sean verdaderas, sino que son buenas
aproximaciones a la verdad, aunque susceptibles de ser sustituidas por
otras mejores.”104
Por lo anterior, también se confirma, que incluso en la ciencia empírica,
que corrobora sus conocimientos por la experiencia, partimos de creencias.
La diferencia entre una creencia racional, y la fe irracional en la razón,
está en que la primera nos ofrece una explicación para acercarnos a la
verdad, sin embrago, sigue siendo susceptible de mejora o falsación; la
segunda es el supuesto o conjetura por el cual pretendemos desentrañar un
conocimiento, y por lo tanto, constituye la naturaleza de la hipótesis inicial
en la ciencia.
104 POPPER, Realismo y el objetivo de la ciencia… p. 97.
52
2. El racionalismo crítico en la política
El objetivo de este capítulo es hacer una exposición de las principales tesis
de la filosofía política de Popper, que sustentadas en el racionalismo
crítico, han dado como resultado una filosofía política original; de modo
que me abstendré de profundizar en la crítica que Popper desarrolla
respecto a la filosofía política de Platón, el materialismo histórico de Marx
y la filosofía de la historia de Hegel.105
Como se ha expuesto en el primer capítulo, el racionalismo crítico es una
actitud moral. La filosofía política de Popper, sigue a esta actitud y se
desarrolla en el marco del racionalismo crítico; de hecho, muchos críticos
señalan que la filosofía política de Popper se desprende de su filosofía de
la ciencia, ya que toma el método propuesto para la ciencia y lo aplica en la
política106; aunque debemos recordar que el racionalismo crítico en
general, tiene una base ética ya que depende, en última instancia, de una
decisión moral.
Es importante señalar que la filosofía política de Popper se desarrolló
como una crítica a los totalitarismos que surgieron en Europa después de
las guerras mundiales:
105 Es bien sabido que las principales obras de filosofía política del filósofo vienés, que son La sociedad abierta y sus enemigos, y La miseria del historicismo, se desarrollan a partir de la crítica a estos filósofos, y que de aquí surge una gran polémica en torno a sus ideas políticas; pero el tratamiento de estos temas merece un estudio de mayor amplitud al aquí propuesto. En este trabajo se tomarán algunos ejemplos de la crítica que Popper hace a estos filósofos, únicamente con el afán de ilustrar sus tesis. 106 Cf. SUÁREZ-ÍÑIGUEZ, Enrique, La fuerza de la razón: introducción a la filosofía
de Karl Popper, México: Nueva Imagen 2001, p. 70.
53
“Mi interés por este problema se vio considerablemente estimulado
por el surgimiento del totalitarismo, como así también por la
esterilidad de los esfuerzos efectuados por diversas ciencias y
filosofías sociales para darle algún sentido.”107
A partir de esta crítica y en este contexto surgen las tesis políticas de
Popper: la sociedad abierta, que se identificará con la democracia y su
oponente que es la sociedad cerrada; el combate al historicismo en contra
de la libertad y la responsabilidad humana y al colectivismo opuesto al
individualismo que Popper defiende; y en general sus tesis sobre filosofía
social.
La aplicación del racionalismo crítico, tomado como método en la ciencia,
es lo que Popper en la política llamará “ingeniería social gradual”108, este
es un método que tiene como finalidad el paso de una sociedad cerrada a
una sociedad abierta a partir de la reconstrucción social democrática.
La sociedad abierta y sus enemigos plantea los problemas que la
civilización ha enfrentado en su tránsito de sociedad cerrada a sociedad
abierta, y explica las conmociones que han dado lugar a los movimientos
que pretenden retornar a la sociedad tribal. En general, esta obra constituye
una crítica al historicismo y principalmente a los sistemas totalitarios que
atentan en contra de las facultades críticas del hombre, que sólo pueden
entenderse en el ámbito de una sociedad abierta.109
107 POPPER, La sociedad abierta… p. 16. 108 Cfr. MAGEE, Popper… p. 145. 109 Cfr. POPPER, La sociedad abierta… p. 15.
54
Otra obra que resulta fundamental para conocer la filosofía política de
Popper es La miseria del historicismo; en esta obra se expone la
imposibilidad de predecir el futuro de la historia humana por medio de
leyes y modelos que nos otorguen resultados del calibre de las
conclusiones de las ciencias naturales. El objetivo principal que aquí se
plantea, es demostrar que la humanidad no está sometida por su historia o
por un devenir revelado; la tesis de Popper es que la trayectoria histórica
está influida por el crecimiento de los conocimientos humanos, ya que
estos no son predecibles, como tampoco lo es su historia.110
El resultado de estos planteamientos, dará lugar al tema de la
responsabilidad. Del mismo modo que Kant, Popper afirmará que el
hombre es legislador de su actuar y por tanto, sólo él es responsable de su
historia.
2.1 Racionalismo e irracionalismo en la moral y la política
Popper plantea al racionalismo crítico como el ámbito en el que se hace
posible el desarrollo pleno del hombre.
Por una parte, el racionalismo se abre la confrontación, a favor de la
búsqueda de la verdad y se presenta como un diálogo libre y tolerante; por
otra parte el racionalismo crítico implica la decisión moral de aceptar una
teoría o preferirla frente a otra, y por lo tanto también se entiende como la
responsabilidad de encontrar la verdad y aprender de nuestros errores.
110 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo. trad. Pedro Schwartz, Madrid: Alianza 2002 [1957], pp. 11-12
55
2.1.1 La decisión moral:
En la naturaleza hay hechos y regularidades, y nosotros formamos parte de
esta naturaleza, sin embrago, a diferencia de los otros seres tenemos la
facultad de decidir:
“Somos nosotros quienes imponemos nuestros patrones a la
naturaleza, y quienes introducimos, de este modo, la moral en el
mundo natural, no obstante el hecho de que formamos parte del
mundo […] la naturaleza nos ha dado la facultad de alterar el mundo,
de prever y planear el futuro y de tomar decisiones de largo alcance,
de las cuales somos moralmente responsables.”111
Sabemos que existen leyes naturales inalterables como la de la gravedad o
la termodinámica que describen una uniformidad, y que por otra parte,
existen leyes normativas que son leyes que rigen la conducta en términos
generales. Estas últimas, dependen de la voluntad humana e incluso son
variables; la adhesión a ellas depende de la decisión de cada hombre en
particular.112
El hecho de analizar racionalmente las consecuencias que conlleva el
tomar una decisión, no implica que ésta sea racional, puesto que no son las
consecuencias las que determinan nuestra decisión, sino que nosotros
decidimos. El problema es que en realidad nunca podemos estar seguros de
111 POPPER, La sociedad abierta… p. 77. 112 Cfr. POPPER, La sociedad abierta… p. 72-73. Popper se muestra escéptico respecto a las teorías que afirman que las leyes morales pertenecen a la naturaleza humana y argumentan que las leyes normativas tienen cierta correspondencia con las leyes naturales inalterables. Para Popper existe una clara distinción entre las leyes naturales y las normativas: unas no pueden ser alteradas por el hombre, las otras son creadas y por lo tanto alteradas por el hombre. Cf. POPPER: La sociedad abierta… p. 74.
56
los resultados; sin embargo, de manera análoga a lo que ocurre en la
ciencia, en la que no aceptamos una teoría hasta que tenemos una
demostración que al menos nos parezca aceptable por el momento, del
mismo modo, a partir de nuestra imaginación podemos plantear las
posibles consecuencias de una decisión moral. 113
En la teoría científica nuestra decisión dependerá de los resultados del
experimento, si estos confirman la teoría la aceptaremos hasta que
descubramos una mejor; mientras que en la teoría moral, sólo
confrontamos las consecuencias con nuestra conciencia, de este modo, el
veredicto depende de nosotros únicamente, lo cual no sucede en la teoría
científica.114
La decisión moral implica una responsabilidad personal, e incluso los
descubrimientos científicos, las nuevas ideas, etc.:
“Utilizando nuestro lenguaje, nuestro conocimiento y nuestra
tecnología, somos capaces de predecir las consecuencias futuras de
nuestros sueños, nuestros deseos y nuestras invenciones […] Es
importante tener presente lo poco que sabemos sobre esas
consecuencias imprevisibles de nuestros actos. El mejor medio de que
aun disponemos es el de ensayo y error: ensayos que a menudo son
peligrosos, e incluso errores más peligrosos, que en ocasiones son
peligrosos para la humanidad.”115
Es verdad que existen muchos experimentos riesgosos en el ámbito de la
ciencia experimental, y que hay otros que podemos repetir una y otra vez
113 Cfr POPPER, La sociedad abierta… p. 446 114 POPPER, La sociedad abierta… p. 446 115 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 47.
57
sin la posibilidad de producir un error de graves consecuencias. En las
ciencias sociales no tenemos la posibilidad de experimentar del mismo
modo; es evidente que no podemos tomar a una sociedad para aplicar una
teoría política o social, sólo para ver qué ocurre con dicha sociedad. Sin
embargo, Popper propondrá la “ingeniería social gradual”, un método de
ensayo y error aplicable a la sociedad, en vistas a la mejora de los sistemas
políticos.116
Si tenemos en cuenta lo poco que sabemos, podemos ver que las
posibilidades de tomar las decisiones adecuadas son casi nulas.117 En lo
que se refiere a la sociedad, el riesgo de cometer un grave error a causa de
una mala decisión, puede traer consecuencias muy graves. Un ejemplo
muy claro en la historia es que una ideología o el capricho de un
gobernante han llevado a los hombres a la guerra.118
“La decisión con que nos vemos enfrentados adquiere su máxima
importancia desde el punto de vista de los «expertos» que la afrontan
actúan como depositarios intelectuales de aquellos que no la
afrontan.”119
La decisión moral como principio de nuestros actos hace evidente la
libertad en el hombre, y en tanto que todos los hombres tenemos la
facultad de decidir, somos iguales y tenemos el mismo derecho a escuchar
y a ser escuchados a la hora de tomar decisiones en conjunto. La decisión
116 Este método no implica la adhesión a una ideología o sistema que pude ser nocivo para la sociedad. El método de la “ingeniería social” será explicado más adelante. 117 Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir… p. 203 118 Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir… p. 215 119 POPPER, La sociedad abierta... p. 764.
58
moral es la clave por la que el racionalismo crítico se identifica con el
humanismo.
2.1.2 El racionalismo como condición de libertad, tolerancia,
diálogo, igualdad y humanitarismo
Puesto que el racionalismo crítico se desenvuelve como una actitud
humanitaria, se plantea como la mejor opción de igualdad, libertad y
responsabilidad política. La tendencia a la imparcialidad está expresada en
él, puesto que implica una actitud de apertura al diálogo.120
“[…] el vínculo que une el racionalismo con el humanitarismo es
sumamente estrecho, mucho más por cierto que el correspondiente
eslabón entre el irracionalismo y la actitud antihumanitaria y
antiigualitaria. […] 121
En la elección entre racionalismo e irracionalismo está implícita la cuestión
moral. Por una parte, el racionalismo cree en la unidad de la humanidad,
mientras que el irracionalismo no está obligado a seguir alguna regla
congruente. 122
El racionalismo es un factor de unión de la humanidad en tanto que es una
actitud que se esfuerza por mostrar de la manera más clara los hechos del
120 POPPER, La sociedad abierta... p. 447. 121 Cfr. POPPER, La sociedad abierta.... p. 453. 122 Cfr. POPPER, La sociedad abierta… p. 445. “Uno de los elementos integrantes del racionalismo moderno es el relativismo […] en particular, la doctrina de la imposibilidad de comprensión mutua entre diferentes culturas, generaciones o periodos históricos, e incluso en la ciencia […] Contra esto sostengo que cuando hay en juego una nueva voluntad y una importante dosis de esfuerzo, es relamente posible una comprensión verdaderamente amplia.” POPPER Karl, El mito del marco común: en defensa de la
ciencia y la racionalidad, trad. Marco Aurelio Galmarini, Barcelona: Paidós 2005 [1994], pp. 55-56.
59
mundo. El mundo, la sociedad y el lenguaje ordinario no son racionales en
sí mismos, por lo que la tarea de la ciencia, el ingeniero social y la
humanidad es tratar de hacerlos racionales.123 En este sentido,
“La adopción del racionalismo significa, además, que existe un medio
común de comunicación, un lenguaje común de la razón; ella
establece [...] una obligación moral para con ese lenguaje, la
obligación de conservar los patrones de claridad [...] la humanidad se
halla unida por el hecho de que nuestras diferentes lenguas maternas
pueden, en la medida que son racionales, ser traducidas de una a otra.
Queda sentada pues, la unidad de la razón humana.”124
Esta unidad de la razón pone a todos en las mismas condiciones: todos los
hombres tienen la capacidad de razonar y racionalizar el mundo.
El irracionalista afirma que las pasiones y emociones actúan como los
motores de la acción humana; esta actitud para Popper, fomenta el
antiigualitarismo y la parcialidad, y lo demuestra del siguiente modo:
Emocionalmente dividimos a los hombres en amigos y enemigos, entre los
que pertenecen a nuestro grupo de creencias y a los que tienen otras
creencias, etc. Nos es imposible amar a toda la humanidad, no podemos
123 Un racionalismo no crítico afirmaría que el mundo es racional y que la tarea de la ciencia es descubrir esa racionalidad, por su parte, el irracionalismo acepta un mundo irracional que debe ser experimentado por nuestras pasiones o por nuestra intuición intelectual. Cfr. POPPER, La sociedad abierta… p. 766. 124 POPPER, La sociedad abierta… p. 452. Apoyándose en al teoría de Tarski sobre la verdad objetiva y el lenguaje, Popper sostiene que el conocimiento siempre puede ser comunicable, ya que éste depende de la racionalidad que nos caracteriza como seres humanos. “La teoría de Tarski dice que un enunciado en una lengua […] es verdadero si y sólo si corresponde a los hechos […] de acuerdo con la teoría de Tarski es imposible que, de dos enunciados que son traducción uno del otro, uno pueda ser verdadero y el otro falso. En consecuencia,[…] la verdad no depende de la lengua ni es relativa a la lengua”. POPPER, El mito del marco común… p. 74.
60
“amar en abstracto”, sólo podemos amar verdaderamente a los que
conocemos125, y puesto que no conocemos a todos los individuos que
conforman a la humanidad, los que afirman que se debe gobernar con
amor, abren las puertas a aquellos que gobiernan por el odio.
“[…] la adopción de una actitud antiigualitaria en la vida política, es
decir en el campo de los problemas que se refieren al poder del
hombre sobre el hombre, es precisamente lo que yo calificaría de
criminal. Porque da una justificación a la actitud que considera que
diferentes categorías de personas tienen diferentes derechos […]
sostengo que quien enseña que no es la razón, sino el amor el que debe
gobernar abre camino para quienes gobiernan mediante el odio. (Creo
que fue Sócrates el que se dio cuenta de esto cuando sugirió que la
desconfianza o el odio a la argumentación se relaciona con la
desconfianza o el odio hacia los hombres)”126
Esto no quiere decir que los irracionalistas no amen a la humanidad, sino
que nadie puede amarla de hecho, por lo tanto, el gobierno directo del
amor, exento de racionalidad, no fomenta la imparcialidad sino el
conflicto.
Querer hacer felices a los pueblos es quizás el propósito político más
peligroso; puesto que este ideal termina imponiendo una escala de valores
a los demás, que son considerados por los gobernantes, como valores
superiores o más importantes para lograr la felicidad.
125 Cfr. POPPER, La sociedad abierta… 446- 447. 126 POPPER, La sociedad abierta.... p. 449
61
El deber del gobernante no es hacer felices a los hombres, puesto que la
felicidad depende de cada quien; es evidente que cada individuo tiene sus
propias metas fundadas en ideas particulares127, por lo que el intento de
hacer felices a todos los ciudadanos llevaría a la intolerancia y por
supuesto a la anulación de la libertad individual. 128
Desde el enfoque institucional y metodológico, el racionalismo debe
emplear la imaginación, porque es crítico; en contraposición al
irracionalismo que resulta dogmático.
La actitud básica del racionalista debe ser la aceptación de la posibilidad de
errar y de aceptar que probablemente el otro esté en lo cierto. Tomando
esta actitud, podemos ser consientes de que la razón ayudada por la
imaginación, nos permite comprender que existen otros hombres, que
deben tener relaciones similares a las nuestras; y sólo a partir de esta
analogía, podemos desear ayudar a los que no conocemos y nos
necesitan.129
La actitud del racionalista tiene un vínculo muy estrecho con el
humanitarismo y la idea de igualdad; admite que somos susceptibles a
cometer errores que pueden ser encontrados gracias a la crítica de los
demás, lo cual supone que nadie debe ser su propio juez y que existe por lo
127 “El principio general, expuesto en La sociedad abierta, que debe guiar a la política pública, es: «reducir al mínimo el sufrimiento evitable»[…] no sabemos cómo hacer feliz a la gente, pero sí sabemos cómo aminorar su infelicidad” MAGEE, Popper, pp. 114-115. 128 Cfr. POPPER, La sociedad abierta.... p. 450 129 Cfr. POPPER, La sociedad abierta.... p. 453
62
tanto una imparcialidad: tener fe en nuestra razón implica también la fe en
la de los demás.130
La idea de imparcialidad lleva implícita la responsabilidad de escuchar los
argumentos de otros y de responder por nuestras acciones; el racionalismo
crítico debe reconocer entonces, la necesidad de instituciones sociales que
protejan la libertad y se hallen controladas por la razón, no por la ciencia o
en vistas de procurar la felicidad del pueblo.
La actitud dialógica del racionalismo se establece como un medio común
de comunicación, que presupone la obligación moral de buscar la verdad a
partir de la discusión racional131:
“[…] si yo espero aprender de ti, y si tú esperas aprender en interés de
verdad, yo tengo, no sólo que tolerarte sino reconocerte como alguien
potencialmente igual; la unidad e igualdad potencial de todos
constituye en cierto modo un requisito previo de nuestra disposición a
discutir racionalmente las cosas.”132
Un racionalista crítico en ningún momento osará pronunciarse como
superior, o tratará de ser la autoridad, puesto que sabe que su inteligencia
no podría ser superior a menos de que sea capaz de aprender de la crítica;
por tanto debe ser humilde y tolerante al respecto.
El racionalismo afirma que todo hombre tiene derecho a ser escuchado y a
defender sus argumentos; por tanto, está implícita la idea de la tolerancia, y
130 Cfr. POPPER, La sociedad abierta.... p. 451 131 Cf. POPPER: La sociedad abierta.... p. 452. 132
POPPER: En busca de un mundo mejor. p. 255.
63
de aquí la de imparcialidad. Pero esto también implica la responsabilidad
de responder a los argumentos.
“En última instancia […] el racionalismo está ligado al
reconocimiento de la necesidad de instaurar instituciones sociales para
proteger la libertad de pensamiento y, por ende, la libertad de los
hombres. Y establece una especie de obligación moral tendiente a
apoyar estas instituciones, por ello el racionalismo está estrechamente
vinculado a la exigencia política de emprender una ingeniería social
práctica – ingeniería de paso a paso, por supuesto- en el sentido
humanitario, con la exigencia de racionalización de la sociedad, con la
planificación para la libertad, y que tienda al control por medio de la
razón, no por medio de la ´ciencia´ ni por medio de una autoridad
platónica y seudorracional, sino por medio de esa razón socrática que
está consciente de sus limitaciones, y que por tanto respeta al otro
hombre y no aspira a tener coerción en él, ni siquiera para procurar su
felicidad. La adopción del racionalismo implica […] la obligación de
conservar sus normas de claridad y de emplearlo de tal modo que
retenga su función de vehículo de la argumentación, es decir, la
obligación de utilizarlo en forma clara […] y no como un medio de
´autoexpresión´”133
Popper se inclina por el racionalismo como resultado de una postura moral.
En general, el problema del irracionalismo es que a pesar de que también
se sirve de la razón, no tiene un compromiso de responsabilidad
permanente.
133 POPPER, La sociedad abierta.... p. 451
64
2.2 La actitud racional en la democracia
El filósofo vienés cree que la vida es una constante solución de
problemas134, por lo que la sociedad deseada debe ser propensa a la
solución de problemas, lo cual supone la propagación de soluciones
provisionales abiertas a la crítica y a la posibilidad de cambio.135
Lo propio de una verdadera de democracia es la participación de todos los
ciudadanos en la política, pero como se explicará, esta participación no se
refiere a la consideración etimológica de la palabra “democracia”. Más que
el gobierno del pueblo, la democracia es el gobierno en el que las
necesidades del pueblo se solucionan a partir de la crítica racional de las
instituciones, las cuales se modifican o se crean de acuerdo a las exigencias
de la sociedad.
2.2.1 Sociedad abierta y sociedad cerrada
La democracia liberal será identificada por Popper como sociedad abierta,
mientras que las formas de totalitarismo, tiranía o dictadura son sociedades
cerradas.
La distinción básica entre sociedad abierta y cerrada es la siguiente: Una
sociedad cerrada es una sociedad mágica, tribal o colectivista, mientras que 134 Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir. pp. 17-20 y 219. 135 Cfr. MAGEE, Popper… p. 100.
65
la sociedad abierta se basa en el hecho de que los individuos toman
decisiones personales y compiten para elevar su escala social136, a grandes
rasgos, en la democracia, los hombres son libres de elegir sobre sus
posibilidades y son responsables de dichas elecciones.
La sociedad cerrada se parece a una tribu:
“Se trata de un grupo concreto de individuos concretos, relacionados
[…] no tan sólo por abstractos vínculos sociales como la división de
trabajo y el trueque de bienes, sino por relaciones físicas concretas.”137
Puesto que la sociedad cerrada se funda en la idea de un grupo concreto,
los tabúes y las costumbres regulan la vida de los individuos, ya que todo
cambio se da por reacciones religiosas y no existe una tentativa racional de
mejorar las condiciones sociales; la actitud correcta está siempre
determinada por los tabúes; de este modo, la sociedad cerrada es irracional,
en ella los individuos satisfacen sus necesidades emocionales fundándose
en principios comunes que se creen infalibles debido a su carácter
sobrenatural o bien proveniente de la naturaleza;138 de aquí el problema de
que las sociedades cerradas no distinguen entre hechos naturales y hechos
humanos, las normas son tomadas como hechos históricos.
Una sociedad cerrada no da cabida a la libertad individual y a la
democracia, es tiránica puesto que supone una ley irrefutable dada por una
autoridad y asumida por todos los individuos.
136 Para explicar dicha distinción Popper utiliza una interesante analogía entre el comportamiento de un organismo y el de la sociedad cerrada. Cfr. POPPER, La
sociedad abierta… pp. 189 -190. 137 POPPER, La sociedad abierta… p. 189 138 Cfr. POPPER, La sociedad abierta… pp. 187-189.
66
La sociedad abierta por el contrario, se centra en los valores individuales
de libertad, igualdad, razonabilidad y humanidad. Este énfasis en el
individuo, pretende la sustitución de un gobierno paternalista, la autoridad
de la tradición y el prejuicio, por la crítica racional; de este modo, en la
sociedad abierta se advierte un dualismo de hechos y normas: los hechos
corresponden a la realidad y las normas a lo correcto, lo cual implica que
debe procurarse el mejoramiento constante de estas normas, en función de
la experiencia139.
La sociedad abierta es una democracia puesto que sólo en la democracia
hay lugar para la discusión crítica, lo cual resulta imposible en un
totalitarismo:
“[…] sólo la democracia proporciona un marco institucional capaz de
permitir las reformas sin violencia y, por consiguiente, el uso de la
razón en asuntos políticos.”140
La sociedad abierta es una democracia puesto que es el único sistema de
gobierno que se plantea dentro de un marco institucional en el que se
admiten los cambios pacíficos y se caracteriza por el diálogo racional en
cualquier materia política.141 Los regímenes autoritarios, tales como el
139 Cfr. POPPER, La sociedad abierta… p. 803. 140 POPPER, La sociedad abierta... p. 18. 141 El comportamiento de la colectividad se compone por el comportamiento individual, es por eso que la teoría social debe sujetarse al “individualismo metodológico”. Esto es que el individuo único, o considerándolo en sus relaciones con otros, no puede ser objeto de una completa racionalización, podemos conocer el sistema de disposiciones de una persona, pero no es posible conocerla plenamente. Cfr. POPPER, La sociedad abierta…
p. 18.
67
totalitarismo, se definen precisamente por la ausencia de diálogo en los
asuntos políticos.
En la sociedad abierta el individuo actúa conforme a sus propias
decisiones, y no conforme a lo que Popper llama “colectivos” como son los
estados, razas, naciones, etc.142 Es antitotalitaria porque está en contra de la
violación a la libertad y la intervención excesiva en asuntos personales que
caracteriza al totalitarismo, y es antiholista porque cree en el valor del
individuo y que la acción social es acción de individuos.143
En las ciencias sociales totalitarias parece que lo colectivo es sinónimo de
altruismo y que lo individual equivale al egoísmo, sin embargo, en una
sociedad libre el individualismo va ligado al altruismo considerado en la
conciencia del hombre y tomado como un deber personal, no cómo una
imposición.144
2.2.2 La Democracia.
Para Popper hay dos formas de gobierno: la democracia y la tiranía.145
“[...] existen únicamente [...] aquellas en las que es posible derrocar al
gobierno sin derramamiento de sangre por medio de una votación, y
aquellas en las que esto es imposible. [...] Habitualmente se denomina
142Cf. SUÁREZ-ÍÑIGUEZ, ENRIQUE: Filosofía política contemporánea (Popper, Rawls y
Nozick.). México: Porrúa 2005, p. 28-29. 143 Cf. SUÁREZ-ÍÑIGUEZ, ENRIQUE: Filosofía política contemporánea…. p. 30-31. 144 Cf. POPPER: La sociedad abierta y sus enemigos. p. 116-117. 145 Cf. POPPER: En busca de un mundo mejor… p. 203.
68
a la primera forma «democracia» y a la segunda «dictadura» o
«tiranía».”146
La característica principal de una democracia moderna debe ser la de
lograr los cambios sin violencia, por lo que al remover a un gobernante de
su puesto, se debe actuar de manera pacífica; de este modo, el sufragio es
el método que se plantea en una democracia para lograr el cambio de
gobernante.
Por el contrario, la tiranía o dictadura es el gobierno que sólo permite
cambiar a sus gobernantes por medio de la violencia, puesto que para
derrocar al tirano, el pueblo necesariamente acude a la fuerza para
imponerse, ya que en los gobiernos totalitarios no hay medios legítimos en
su sistema para llevar a cabo el cambio, debido a la naturaleza misma de
esta forma de gobierno.147
En una democracia, el modo en el que se puede dar la destitución de un
gobernante es a partir del voto. Por esta razón no tiene sentido
preguntarnos por quién es el que debe gobernar, sobretodo en un sistema
electoral en el que los representantes votan por los intereses de su distrito,
sin importar los intereses del partido al que pertenecen148, a diferencia de
un sistema electoral de votación proporcional149. En realidad, en un sistema
democrático, la cuestión de quién será el gobernante no tiene sentido150:
146 POPPER: La responsabilidad de vivir... p. 176. 147 Cfr. POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 203. 148 Por ejemplo el sistema electoral de Estados Unidos. 149 Popper se muestra a favor de un sistema electoral representativo, en el que interactúe la menor cantidad de partidos políticos. La razón de su postura es que considera que en realidad la democracia no es el gobierno del pueblo, sino el gobierno de los dirigentes de los partidos. En un sistema de votación proporcional, todos los partidos, incluso el que menos votos haya obtenido, puede tener una gran influencia en las decisiones políticas;
69
“Pues no se trata de saber quien gobierna, mientras que uno pueda
destituir al gobierno sin derramamiento de sangre. Todo gobierno que
puede ser derrocado, conserva un fuerte estímulo para comportarse de
manera que uno esté satisfecho con él. Y este estímulo desaparece
cuando el gobierno sabe que no se le puede destituir tan
fácilmente.”151
Popper cree que la vida es, a grandes rasgos, un proceso constante de
solución de problemas.152 En la vida social nos enfrentamos a diversos
problemas que exigen soluciones; estas soluciones deben ser de carácter
provisional, deben estar sujetas a la crítica y a la eliminación de errores153.
Esta propuesta, únicamente se hace plausible en el ámbito de una
democracia, en la que las instituciones sean libres y planteen una
organización política, siempre ajustable a las necesidades de la sociedad.
La democracia puede ser posible gracias a lo que Popper llama “ingeniería
social”. El ingeniero social tiene la función de organizar las instituciones
políticas, de modo, que si llega un mal gobernante no pueda causar daño
en cambio, si únicamente hay dos partidos que conforman al gobierno, la competencia se acentúa y para seguir en el poder los partidos se desempeñan mejor. Esta idea no es contraria al pluralismo implicado en el racionalismo crítico, por el contrario, si sólo hay dos partidos, ambos tendrán que ser más tolerantes y menos dogmáticos. Cfr. POPPER, La responsabilidad de vivir... p. 175-181. 150 Este problema será abordado en el siguiente apartado: Las paradojas de la soberanía. 151 POPPER, La responsabilidad de vivir... p. 176. 152 “Todos los seres vivos van a la búsqueda de un mundo mejor [...] Todo organismo está constantemente ocupado en la tarea de resolver problemas. Estos problemas derivan de su valoración de sus condiciones y de su entorno [...] A menudo una de las soluciones ensayadas resulta errónea empeorando las cosas. Siguen entonces nuevos intentos de solución, es decir, nuevos movimientos de ensayo y error. Podemos ver que la vida [...] trae algo completamente nuevo al mundo, algo que no existía anteriormente: problemas e intentos activos de resolverlos; valoraciones, valores; ensayo y error.” POPPER, En
busca de un mundo mejor... p. 9. 153 Cfr. MAGEE… Popper. p. 100.
70
gracias a la configuración de las instituciones. Únicamente si sabemos lo
que queremos nos será posible distinguir si una institución cumple o no
con su función.
Si lo que exigimos al Estado es protección de la libertad, el Estado debe
defender la libertad de cada uno de los individuos y para ello debe limitar
la libertad de uno cuando atenta contra la libertad de otro; lo cual implica
que la libertad de los individuos no es absoluta porque todos tienen
derechos. Sin embargo, es necesario vigilar que la intervención del Estado
no abuse de su proteccionismo, que no restrinja la libertad más de lo
debido:
“El Estado es un mal necesario: sus poderes no deben multiplicarse
más allá de lo necesario [...] quienes (fuertes o débiles) piensen que
este es un estado de cosas satisfactorio y que toda persona debe tener
derecho a ser protegido contra el poder del fuerte, estará de acuerdo en
que necesitamos un Estado que protega los derechos de todos.”154
El liberalismo y la intervención del Estado no se excluyen, de hecho la
libertad en sociedad es posible cuando está garantizada por el Estado, de
modo que tiene que restringir una parte de la libertad para evitar la pérdida
real de libertad de todos. La función del Estado estará limitada,
básicamente a la protección de la libertad de los individuos y a dotarlos de
los medios básicos que les permitan vivir bien, a partir de sus
instituciones.155
154 POPPER, En busca de un mundo mejor... p. 202. 155 Cfr. MAGEE, Popper... p. 114.
71
La teoría de la democracia no se basa en que debe gobernar la mayoría,
sino en que los métodos igualitarios para el control democrático, que son
principalmente el sufragio universal y el gobierno representativo,
salvaguardan las instituciones que hacen posible el diálogo constante entre
el gobierno y los gobernados.156 La democracia tiene la capacidad de
reformar las instituciones políticas; de este modo, se permite la ideación de
nuevas instituciones o el reajuste de las viejas. A partir de esto, Popper
formula el principio de la política democrática:
“[...] el principio de la política democrática consiste en la decisión de
crear, desarrollar y proteger las instituciones que hacen imposible el
advenimiento de la tiranía.”157
La adopción del racionalismo crítico en la democracia implica el constante
perfeccionamiento de estas instituciones; que tienen la función de
materializar el diálogo constante entre el gobierno y el pueblo. La
democracia por sí misma, no es una fuente de beneficios para los
individuos de una sociedad, puesto que los únicos que actúan para procurar
beneficios son los ciudadanos de la democracia.
“La democracia no proporciona más que un armazón en el cual los
ciudadanos pueden actuar de una manera más o menos organizada y
coherente. Somos demócratas no porque la mayoría siempre tenga la
razón, sino porque las tradiciones democráticas son las menos malas
que conocemos.”158
156 Cf. POPPER: La responsabilidad de vivir… p. 177. 157 POPPER: La sociedad abierta y sus enemigos… p. 141. 158 POPPER: En busca de un mundo mejor... p. 203
72
2.2.3 Las paradojas de la soberanía y la libertad:
Un problema comúnmente abordado en diversas teorías políticas se plantea
con la siguiente pregunta: ¿Quién debe gobernar? Esta formulación resulta
completamente inútil para Popper159. Tal formulación supone
necesariamente que el gobierno está dispuesto en un gobernante o clase, es
decir, que si nos preocupamos por el individuo o sector social que debe
gobernar, necesariamente nos remitimos a un gobierno tiránico o que
deposite el poder en ciertas personas. Otro problema es que aun eligiendo
al más sabio, al mejor o a determinada clase social, no tenemos una
garantía de su buen desempeño como gobernante.
Popper explica que todas las teorías de la soberanía (incontrolada) resultan
paradójicas. En primer lugar, resulta imposible que toda la soberanía resida
en un solo hombre o clase, incluso el tirano más poderoso depende de su
ejército o de lps grupos que lo ayudaron a obtener el poder:
“Esta dependencia significa que su poder, por grande que sea, no es
incontrolado [...] Esto significa que existen otras fuerzas políticas,
otros poderes aparte del suyo y que sólo puede ejercer su mando
utilizando y pacificando estas otras fuerzas. Lo cual demuestra que
aun en los casos extremos de soberanía nunca poseen el carácter de
una soberanía completamente pura.”160
159 Cfr. POPPER, La sociedad abierta y sus enemigos… p. 136. 160 POPPER, La sociedad abierta y sus enemigos… p. 138.
73
Recordemos que para Popper lo esencial de la teoría de la democracia es el
voto y la representación, en los que se refleja la igualdad y el diálogo; la
democracia no es el gobierno de la mayoría. Finalmente los que ejercen el
poder son los gobernantes (como representantes del pueblo) y nunca
podemos estar seguros de que la elección de la mayoría sea la mejor y
garantice el ejercicio de la democracia.
Como ejemplo de lo anterior, Popper acude a la paradoja de la libertad
planteada por Platón, que nos lleva a otra paradoja de la soberanía161: si de
manera libre y democrática el pueblo decide ser gobernado por un tirano,
decide de manera libre, perder su libertad.
“Por un lado el principio por ellos adoptado les exige que se opongan
a cualquier gobierno menos al de la mayoría, y por lo tanto, también al
nuevo tirano. Pero por el otro, el mismo principio les exige que
acepten cualquier decisión tomada por la mayoría y, de este modo,
también el gobierno del nuevo tirano.”162
Otra paradoja en las teorías de la soberanía es la siguiente: Si elegimos el
gobierno del más sabio, y el más sabio elige que el que debe gobernar es el
mejor hombre, y el mejor dice que debe gobernar la mayoría; parece que
161 Cfr. POPPER,: La sociedad abierta … p. 139. Popper advierte que esta paradoja fue expuesta por Platón: “¿Y a caso no nacen de un mismo modo la democracia de la oligarquía y la tiranía de la democracia? [...] ¿Y no es también el ansia de aquello que la democracia define como su propio bien lo que disuelve a esta?- ¿Y que es lo que dices que define como tal?-La libertad -repliqué- [...] -¿Pero a caso [...] el ansia de esta libertad y la incuria de todo lo demás no hace cambiar a este régimen político y no lo pone en situación de necesitar la tiranía? [...]”PLATÓN, “República”, Diálogos, v.4, trad. Conrado Eggers Lan, Madrid: Gredos, 1986, 562 b-c. 162 POPPER, La sociedad abierta … p. 139.
74
no se estaría respetando la voluntad del pueblo, y por la otra, parece que se
respeta. Lo mismo sucederá si elegimos el imperio de la ley. 163
Ante este problema, Popper propone sustituir la pregunta de ¿Quién debe
gobernar? por: “¿De qué forma podemos organizar las instituciones
políticas a fin de que los gobernantes malos o incapaces no puedan
ocasionar demasiado daño?”164
Con esta pregunta, de manera contraria a otros pensadores, no sustituimos
la teoría política por una teoría de la soberanía. La teoría política de Popper
se centrará entonces, en un método de discusión racional para mejorar
constantemente las instituciones y para evitar que las decisiones de los
gobernantes afecten a la sociedad.
De este modo, la sociedad abierta es una democracia fundamentada por
instituciones que pretenden ser el medio de comunicación entre las
necesidades de la sociedad y sus representantes. El método que Popper
propone para la correcta organización de las instituciones es la “ingeniería
social fragmentaria o gradual”; y sin duda, el historicismo se plantea, como
la doctrina que prevalece en las sociedades cerradas.
2.3 Los amigos y los enemigos de la sociedad abierta
Existen múltiples elementos que influyen en la tránsito de una sociedad
cerrada a una sociedad abierta. En la teoría política de Popper,
encontramos que el peor enemigo de la sociedad es el historicismo. 163 Cfr. POPPER, La sociedad abierta … p. 140. 164 POPPER: La sociedad abierta y sus enemigos… p. 137.
75
A grandes rasgos, el problema del historicismo es que establece leyes
históricas que pretenden explicar el devenir de las sociedades, lo cual anula
la libertad humana y su intervención en la transformación de la sociedad.
El historicismo, en su carácter dogmático, insiste en la existencia de leyes
irrefutables que determinan los periodos sociales, de modo que el hombre
no construye su historia, sino que la historia explica las condiciones del
hombre.
Popper se muestra en contra de las doctrinas historicistas porque reducen la
vida y las creaciones humanas a un estado necesario e inevitable, en el que
el individuo sólo se entiende por su sociedad, y la responsabilidad
individual pierde sentido.
Popper criticará el intento de separar radicalmente el método de las
ciencias sociales y las ciencias naturales, así como las corrientes
sociológicas que en su intento de seguir el método de las ciencias
naturales, proponen teorías sociales basadas en leyes necesarias.
La crítica y el análisis metodológico de las ciencias sociales y el
historicismo, dará lugar a la propuesta de Popper: la ingeniería social
gradual o tecnología fragmentaria.
La sociedad abierta, como se ha explicado, es posible en un ámbito de
diálogo y libertad; el ingeniero social gradual, contrariamente al sociólogo
historicista o al tecnócrata, busca el fortalecimiento de las instituciones a
partir de cambios estratégicos y el análisis crítico de los problemas
sociales, a fin de procurar la sociedad abierta.
76
2.3.1 El historicismo:
En el libro La miseria del historicismo Popper habla de dos tipos de
doctrinas historicistas: las doctrinas antinaturalistas y las pronaturalistas o
positivistas. Después de esta exposición, Popper construirá la crítica a
ambas doctrinas a fin de demostrar los problemas e inconsistencias del
historicismo.
“[...] entiendo por «historicismo» un punto de vista sobre las ciencias
sociales que supone que la predicción histórica es el fin principal de
estas, y que supone que este fin es alcanzable por medio del
descubrimiento de los «ritmos» o los «modelos», de las «leyes» o las
«tendencias» que yacen bajo la evolución de la historia.”165
El naturalismo explica que todas las cosas tienen una causa empírica, que
no se puede explicar el mundo a partir de una causa sobrenatural o divina,
de modo que la naturaleza material es el origen y fundamento de todo lo
que existe; por lo tanto, el hombre y sus objetivos son el resultado de la
herencia y del medio166. A pesar de que la ciencia no ha podido explicar las
causas de todo lo que existe, los naturalistas creen que en algún momento la
ciencia irá aclarando, a partir de la evidencia empírica, todos esos
fenómenos de los que aún no se tiene explicación científica.
165 POPPER: La miseria del historicismo... p. 17. 166 Cf. POPPER: La sociedad abierta y sus enemigos… p. 421.
77
El naturalismo metodológico insiste en que las ciencias sociales deben
adoptar el método experimental de las ciencias naturales, a fin de que se
aproximen, al menos, a la objetividad de la metodología inductiva de las
ciencias naturales.167
El historicismo antinaturalista advierte que existen métodos de la física que
no se pueden aplicar a las ciencias sociales: las leyes físicas son válidas
siempre, mientras que las leyes sociológicas dependen de la situación
histórica de cada cultura.168 Para el historicismo no puede haber una unidad
de método entre las ciencias sociales y las ciencias naturales; existen
algunas uniformidades en la vida social, sin embrago, dependen de su
condición histórica, lo cual no sucede en el campo de las ciencias naturales:
“El historicista se opone a estos argumentos sosteniendo que las
uniformidades sociales son muy diferentes de las de las ciencias
naturales. Cambian de un periodo histórico a otro, y es la actividad
humana la fuerza que las cambia. Porque las uniformidades sociales no
son leyes naturales, sino obra del hombre[...]”169
El historicismo argumenta que el método experimental de las ciencias
naturales no puede ser aplicado en los experimentos sociológicos, debido a
los elementos novedosos característicos del curso de las sociedades. Sin
duda, la razón, que lleva a pensar a los historicistas, que es imposible la
unidad del método, es que afirman que lo más relevante de las ciencias
167 Cfr. POPPER, La lógica de las ciencias sociales… pp. 16-17. 168 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo... p. 19. 169 POPPER, La miseria del historicismo... p. 21.
78
naturales es su posibilidad predictiva, y juzgan que el valor de las ciencias
sociales está en su utilidad para hacer predicciones.170
Popper explica que el argumento historicista anterior, toma a la sociedad
como un organismo vivo que está en constante cambio y posee una
memoria histórica; la sociedad explica su novedad como la biología171: los
cambios son intrínsecos y no una combinación diferente de las variables
como se explican las novedades en la física.
La novedad social indica que no podemos utilizar el método de la física en
las ciencias sociales, precisamente porque para el historicismo los rasgos
más importantes de la sociedad son históricos: las novedades sociales
determinan la división de periodos de la historia.172
Al parecer, al tratar de explicar a las sociedades según sus momentos
históricos, la sociología intenta buscar las constantes que determinan cada
periodo, de tal modo, que se puedan hacer predicciones respecto a lo que va
a ocurrir. El problema es que toda predicción termina influyendo en los
acontecimientos predichos, ya sea porque se genera una sugestión, o bien
porque se toman acciones para prevenir o procurar el cumplimiento de la
predicción. En cualquiera de estos resultados, en realidad parece que no
hubo una predicción, sino una suposición que genera los medios para
conseguir o evitar que se cumpla el augurio.
170 Cfr. POPPER, Conjeturas y refutaciones… p. 406 Al darse cuenta de este problema, algunos optan por el irracionalismo, afirmando que las ciencias sociales son inútiles por no poder ofrecer resultados semejantes a los del las ciencias naturales; mientras que otros, buscan elementos en la historia que ayuden en su afán de predicir. 171 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo... p. 24. 172 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo... p. 25.
79
“El que una predicción histórica llegue a verificarse o no, no es ni
cuestión de método, ni de sabiduría o intuición: es pura cuestión de
azar. Estas predicciones son arbitrarias, accidentales y acientíficas.
Pero cualquiera de ellas puede tener un poderoso efecto
propagandístico.”173
El historicismo antinaturalista sostiene que la sociología es una ciencia
biológica, porque la sociedad es un objeto viviente que comparte una misma
estructura que depende de la historia propia de cada sociedad:
“[...] los objetos de la sociología, los grupos sociales, nunca deben ser
considerados como meros agregados de personas. El grupo social es
más que la mera suma total de sus miembros, y también es más que la
mera suma total de las relaciones meramente personales que existan en
cualquier momento entre cualesquiera de sus miembros.”174
El estudio sociológico para el historicista, consiste en conocer la historia de
cada sociedad para comprender su estructura institucional y sus tradiciones;
y a partir de esta comprensión holística de la sociedad175, se puede prever el
desarrollo futuro.
Los antinaturalistas aseguran que lo propio de la física son las explicaciones
causales, los resultados cuantitativos y el método inductivo, mientras que
173 POPPER, En busca de un mundo mejor… p. 187. 174 POPPER, La miseria del historicismo... p. 31. 175 “Estas consideraciones sugieren insistentemente una íntima conexión entre el historicismo y la llamada teoría biológica u orgánica de las estructuras sociales –la teoría que interpreta a los grupos sociales por medio de una analogía con los organismos vivos-. En efecto, se dice que el holismo es característico de los fenómenos biológicos en general, y el punto de vista holístico es considerado indispensable para el estudio de cómo la historia de los diferentes organismos influye en su comportamiento.” POPPER, La miseria del historicismo... p. 33.
80
las ciencias sociales buscan comprender el propósito y el significado de los
desarrollos históricos de las sociedades, mediante una reconstrucción por
parte de la imaginación intuitiva; de este modo, sus resultados se dan en
términos cualitativos. Por lo tanto, no puede haber una unidad de método
entre la física y las ciencias sociales, puesto que el estudio de estas
disciplinas exige métodos radicalmente distintos, de manera que resulta
imposible que a partir del método experimental se dé una comprensión
social adecuada.176El método de comprensión intuitiva, siendo de carácter
interpretativo, e ignorando una base del estudio sociológico, “[...] niega a la
razón el papel de realizar un mundo más razonable.”177
Contrariamente, los historicistas pronaturalistas, afirman que existe una
unidad en el método de las ciencias sociales y las ciencias naturales: ambas
exigen una teoría y una corroboración empírica. Popper, sin duda, cree que
existe esta unidad, sin embargo, difiere de los historicistas en que es
imposible establecer una doctrina de leyes o tendencias históricas.
El historicismo naturalista advierte que las predicciones de las ciencias
sociales, debido a la complejidad de la sociedad, no tienen la misma
precisión de las predicciones de las ciencias naturales. Sin embargo,
advierten que esta deficiencia se puede compensar con las predicciones a
gran escalaque la sociología puede ofrecer.178
176Cfr. POPPER, La miseria del historicismo... pp. 34-37. Los antinaturalistas niegan todo valor cuantitativo en sus estudios, advierten que es posible afirmar una reacción ante un acontecimiento, sin embargo, no se puede medir la intensidad de esta reacción. De este modo, existen leyes causales en las ciencias sociales, pero son radicalmente distintas a las leyes físicas, esta causalidad sólo se puede explicar por medio de la intuición. Cfr. POPPER, La miseria del historicismo... p.40. 177 POPPER, La miseria del historicismo... p. 67. 178 Las predicciones a gran escala, son pronósticos a largo plazo y de gran extensión Cfr. POPPER, La miseria del historicismo... p. 51.
81
Para el historicista, la historia aparece como la base empírica de la
sociología, ya que la crónica de los hechos políticos y sociales aparecen
como los datos que hacen posible la predicción:
“Así, el historicista ve la sociología como la disciplina teórica y
empírica, cuya base empírica está solamente formada por una crónica
de los hechos de la historia y cuya finalidad es hacer predicciones,
preferentemente predicciones a gran escala. Claramente, estas
predicciones también tienen que ser de carácter histórico, ya que su
puesta a prueba por medio de experimentos, su verificación o
refutación tienen que ser dejadas a la historia futura. [...] En una
palabra, el historicista sostiene que la sociología es historia
teórica.”179
Por lo anterior, las predicciones científicas de la sociología tienen que
basarse en leyes históricas; pero si las uniformidades sociales, son
particulares y determinantes de cada periodo histórico, entonces la
sociología, al buscar una base general, debe fundamentarse en leyes del
desarrollo histórico que determinen la transición de un periodo histórico a
otro. Estas leyes generales del tránsito de periodos históricos, son producto
de las predicciones a gran escala, y exigen un estudio del pasado para
comprender lo que devendrá:
“La sociología [...] Es la ciencia de las cosas por venir, de los
desarrollos futuros. Si tuviese éxito el intento de proporcionarnos una
presciencia política con validez científica, la sociología adquiriría un
179 POPPER: La miseria del historicismo... p. 53.
82
grandísimo valor para los políticos, especialmente [...] para los
políticos con sentido del destino histórico.”180
Al parecer, el principal problema del historicismo naturalista es que en
realidad no alcanza su finalidad: si la sociología es una ciencia teórica que
pretende corroborar sus teorías en la realidad empírica, no cumple su
propósito, puesto que sólo es una teoría posible cuya corroboración podría
o no tener lugar. La misma historia muestra, que ella que no es el resultado
de una teoría:
“El curso del desarrollo histórico nunca se moldea por construcciones
teóricas, por excelentes que sean, aunque estos proyectos puedan
indudablemente ejercer alguna influencia junto con muchos otros
factores menos racionales. [...] Incluso cuando un plan racional de esta
clase coincida con los interesas de grupos poderosos, nunca será
realizado en la forma en que fue concebido [...] El resultado en la
práctica será siempre muy diferente de la construcción racional. [...]
Además, en ninguna circunstancia podría el resultado de una
planificación racional convertirse en una estructura estable, porque la
balanza de fuerzas no tiene más remedio que cambiar. Toda ingeniería
social, por mucho que se enorgullezca de sus realismo y de sus carácter
científico, está condenada a quedarse en un sueño utópico.”181
Las ciencias sociales, como explica Popper, no pueden realizar cambios
sociales desde la teoría; a pesar de que estas teorías pueden influir en la
sociedad a modo de superstición, no pueden ofrecer una descripción
verdadera de los hechos sociales que sirvan como base para la predicción
180 POPPER: La miseria del historicismo... pp. 56-57. 181 POPPER, La miseria del historicismo... p. 61
83
futura; y si no pueden establecer una base para describir el futuro, será aun
más difícil que la predicción se corrobore.
La profecía histórica surge a partir de la interpretación del pasado. De
modo que el único lugar en el que el historicismo admite la intervención de
la razón, es en la interpretación del pasado para descubrir las leyes
históricas y su reconocimiento para utilizarlas como proyección del futuro;
todo proyecto que sea acorde con las leyes históricas es razonable, mientras
que, si un intento de cambiar a la sociedad no es compatible con estas
leyes, es un proyecto utópico para el historicista.182.
“ [...] el historicismo sostiene la futilidad de cualquier intento de alterar
los cambios futuros pendientes; una peculiar variedad de fatalismo, un
fatalismo en cierto modo referido a las tendencias de la historia”183
Si no es posible cambiar el rumbo de la historia, entonces el historicista
sólo puede interpretar las leyes históricas, y el sociólogo únicamente puede
ayudar a entender este devenir, ni siquiera puede alterarlo, perece que sólo
puede entrar en el juego de la historia y ser una pieza más que la
comprende. Por lo tanto, el sociólogo no puede ser activista, ni tampoco
puede tomar una posición optimista del cambio en la sociedad; si la historia
ya está determinada, no tienen ningún sentido estudiar a la sociedad con el
fin de cambiar su dinámica.
2.3.2 El historicismo y la ingeniería social
182 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo... p.65. 183 POPPER, La miseria del historicismo... p. 66
84
El tránsito de una sociedad cerrada a una abierta se ha visto obstaculizada
por el historicismo, el cual pretende haber descubierto leyes histórico-
sociales que se comportan con la misma exactitud que las leyes naturales y
que indican el porvenir de la historia.184
Como se ha explicado, el historicismo afirma que la historia se rige por
leyes inevitables que permiten profetizar acerca del futuro del hombre, y
que por lo tanto, el hombre no puede cambiar ni definir su rumbo, sino que
está sujeto a una historia y a un destino social determinado, lo cual anula la
libertad y por lo tanto, la responsabilidad de los actos y decisiones
humanas.
En este caso, la sociología se convierte para el historicista en el
instrumento oracular.
Para el historicismo, “[…] el cometido de las ciencias sociales
estriba en estudiar la sociedad de manera histórica, como una
entidad que se va desenvolviendo al paso del tiempo: en avistarla
en su totalidad y en predecir su destino. […]” 185
Existen dos tipos de predicciones en la ciencia: la primera es la profecía,
que consiste en el aviso de un acontecimiento que no podemos evitar, por
ejemplo: la llegada de un tifón; y por otro lado están las predicciones
tecnológicas, las cuales configuran los pasos constructivos para conseguir
determinados resultados, por ejemplo: la construcción de un refugio para
protegernos de un tifón.
184 Cfr. SUÁREZ-ÍÑIGUEZ, La fuerza de la razón… p. 72. 185 MILLER, “Introducción”, Popper: escritos selectos… p.19.
85
Las profecías científicas se basan fundamentalmente en la observación y la
constancia de fenómenos; mientras que las predicciones tecnológicas se
fundan en la experimentación y se centran en la resolución de
problemas.186
A diferencia de Popper, los historicistas no creen en la utilidad de
experimentos sociológicos, es decir, en el método de ensayo-error, más
bien defienden la profecía histórica de desarrollos sociales e
institucionales, toda planificación se doblega ante las fuerzas históricas.
Por el contrario, el ingeniero social cree en la posible planeación y
construcción de instituciones con el fin de controlar o acelerar
acontecimientos sociales. El ingeniero social mira a la historia como mera
crónica de hechos, se centra en el presente, mientras que el historicista cree
que la sociología debe guiarse por tendencias amplias, lo cual implica la
comprensión de las fuerzas que actúan en el desarrollo social a partir del
conocimiento del pasado en vistas al futuro.187
El historicista cree que el origen de las instituciones y su evolución se dan
en función de una voluntad suprema o como resultado de una tendencia
natural de la historia. Por el contrario, el ingeniero social es consciente de
que las instituciones son medios creados por el hombre, con la finalidad de
atender a una necesidad específica; esto no quiere decir que las
instituciones sean simples instrumentos, las instituciones cambian y son
medios en tanto que son eficaces y propias para determinados fines.188
186 Cf. POPPER, Conjeturas y refutaciones… p. 406. Y POPPER, La miseria del
historicismo... p. 56-57 187 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo… p. 59-60 188 POPPER, La sociedad abierta … p. 39
86
“[…] el ingeniero encara racionalmente el estudio de las instituciones
como medios al servicio de determinados fines y […] las juzga
enteramente de acuerdo con su propiedad, su eficacia, su simplicidad
[…]”189
La ingeniería social se basa en que nuestros objetivos son producto de la
elección y no del marco histórico, el historicista cree que la acción política
sólo es posible una vez que se ha determinado el curso futuro de la historia.
“El ingeniero social no se plantea ningún interrogante acerca de la
tendencia histórica del hombre o de su destino, sino que lo considera
dueño del mismo, es decir, capaz de influir o modificar la historia
exactamente de la misma manera en que es capaz de modificar la faz
de la tierra.”190
El ingeniero social toma como base científica de la política la información
fáctica necesaria para alterar las instituciones de acuerdo al propósito
deseado. Desde el punto de vista del historicista, las instituciones sociales
se entienden desde su origen, su desarrollo y su significación presente y
futura. Pueden ser resultados de un plan o de la expresión de ciertos
instintos y pasiones. Para el ingeniero social lo importante de las
instituciones no es su origen, ni tampoco el fin con el que se hayan
fundado, sino más bien los hechos y problemas presentes.191
“[…] el historicismo nace de la falta de fe en la racionalidad y la [falta
de] responsabilidad de nuestros actos. Es una esperanza, un fe
189 Cfr. SUÁREZ- PP EREEZ Enrique, Filosofía política contemporánea: Popper, Rawls
y Nozick, México: Porrúa 2005, p.39 190 POPPER: La sociedad abierta y sus enemigos… p. 37 191 POPPER: La sociedad abierta y sus enemigos… p. 37- 38
87
bastarda […] progresar es avanzar hacia un fin determinado […] La
historia no puede hacer eso; sólo nosotros, individuos humanos, […]
podemos hacerlo defendiendo y fortaleciendo aquellas instituciones
democráticas de las que depende la libertad y, con ella, el progreso.
[…]En lugar de posar como profetas debemos convertirnos en
forjadores de nuestro destino […] Y una vez que hayamos desechado
la idea de que la historia del poder es nuestro juez, una vez que
hayamos dejado de preocuparnos por la cuestión de si la historia habrá
o no de justificarnos, entonces quizá, algún día, logremos controlar el
poder.”192
La historia carece de significado. No debemos entender por historia la
clave del porvenir, la historia no tiene finalidad en sí misma; si existe una
finalidad en la historia, es la meta que nosotros le asignamos, pues ni la
naturaleza ni la historia pueden decidir por nosotros o determinar nuestros
fines.
2.3.3 La ingeniería social gradual y la ingeniería utópica
Popper distingue dos tipos de ingeniería: por una parte, la ingeniería social
gradual, fragmentaria o de paso a paso; y por el otro, la ingeniería utópica
u holística.
La ingeniería social de paso a paso se refiere a la aplicación práctica de la
tecnología fragmentaria. Esta tecnología consiste en el uso de leyes
sociológicas (distintas de las leyes históricas) o hipótesis que indican la
192 POPPER, La sociedad abierta y sus enemigos… pp. 490-491.
88
limitación del conocimiento o la iniciativa del ingeniero social. Algunos
ejemplos que Popper enuncia de estas hipótesis son los siguientes:
“«No se puede introducir una reforma política sin causar algunas
repercusiones que son indeseables desde el punto de vista de los fines
que se quieren conseguir» [...] «No se puede hacer una revolución sin
causar una reacción»”193
Estas leyes, son de carácter hipotético, y sin duda son falibles o
susceptibles de mejora194.
La tarea del ingeniero social fragmentario es proyectar o reconstruir las
instituciones para alcanzar los fines requeridos por la sociedad; de este
modo, las instituciones son tomadas como medios al servicio de
determinados fines.195 Es importante aclarar que las instituciones dependen
de las personas que las conforman, y que el ingeniero formula sus
resultados a manera de hipótesis; gracias a estos dos elementos las
instituciones no son estáticas y su dinámica se entiende por una constante
crítica que favorece a la creación de pequeños ajustes, para alcanzar los
fines propuestos.
193 POPPER, La miseria del historicismo… p. 77. 194 Tanto en La sociedad abierta y sus enemigos como en La miseria del historicismo Popper abordó el tema de las leyes sociológicas, y en este sentido, subraya la unidad metodológica entre las ciencias naturales y las ciencias sociales; sin embargo, después habla de un principio de racionalidad, el cual supone que los individuos actúan de forma adecuada a la situación . “Con su propuesta de utilización del principio de racionalidad, Popper parce haber estipulado al mismo tiempo la autonomía de la sociología (y también de la economía) y haberla deslindado claramente de la psicología. Popper ya no vuelve a mencionar las legaliformidades sociales cuya importancia había señalado en trabajos anteriores. Popper parece haber perdido de vista que las legaliformidades podrían ser importantes también desde el punto de vista de la tecnología social porque establecen límites de la forma de actuar de las instituciones.” ALBERT, “Epistemología y ciencia social”… p. 25. 195 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo… p. 81.
89
A diferencia de la ingeniería utópica, la ingeniería social fragmentaria o
gradual, no intenta cambiar a la sociedad de manera radical. Cómo su
nombre lo indica, lo propio de la ingeniería fragmentaria es lograr sus fines
con un proceso gradual; de este modo no se corre el riesgo de causar
grandes males a la sociedad; si la ingeniería social a generado un cambio
perjudicial, éste, al ser pequeño, puede arreglarse:
“El ingeniero fragmentario sabe, como Sócrates, cuán poco sabe. Sabe
que sólo podemos aprender de nuestros errores. Por tanto, avanzará
paso a paso, comparando los resultados conseguidos, y siempre alerta
ante las inevitables consecuencias indeseadas de cualquier reforma; y
evitará el comenzar reformas de tal complejidad y alcance que le
hagan imposible desenmarañar causas y efectos [...]”196
La ingeniería social utópica es el resultado de la combinación de cierta
tecnología social propia de la ingeniería social gradual y algunos elementos
del historicismo197. Por una parte busca la reestructuración de la sociedad,
pero este cambio se da de manera radical: pretende remodelar a toda la
sociedad de acuerdo a su proyecto; y por la otra, pretende controlar a la
sociedad desde su posición clave moldeándola conforme a las fuerzas
históricas, lo cual implica parar el desarrollo presente o adaptarse a dichas
fuerzas.
196 POPPER, La miseria del historicismo… p. 82. 197 Un ejemplo que Popper nos da de este caso es el siguiente: “El ejemplo más antiguo y probablemente el de mayor influencia, lo constituye la filosofía social y política de Platón. Para usar un símil tomado de la pintura, diremos que en ella se combinan un primer plano de elementos tecnológicos perfectamente evidentes y un segundo plano o fondo dominado por un minucioso despliegue de rasgos típicamente historicistas. Esta combinación es característica de un gran número de filósofos sociales y políticos que idearon lo que más tarde se llamó sistemas utópicos.” POPPER, La sociedad abierta…
pp. 39-40.
90
Los sistemas utópicos están conformados por una estructura institucional,
que sea realista o no, se establece como medio para conseguir ciertos fines;
sin embargo, los fines que persigue dicha utopía se encuentran
condicionados o regulados por la historia.198
Popper advierte que la ingeniería holística es irrealizable:
“[...] en la práctica el método holístico resulta imposible; cuanto más
grandes sean los cambios holísticos intentados, mayores serán sus
repercusiones no intencionadas y en gran parte inesperadas, forzando
al ingeniero holístico a recurrir a la improvisación fragmentaria. [...]
mientras que el ingeniero fragmentario puede atacar su problema con
perfecta disponibilidad en cuanto al alcance de la reforma, el holista
no puede hacer esto, pues ha decidido de antemano que una
reconstrucción completa es posible y necesaria.”199
Resulta imposible que el ingeniero holista realice su plan original, y por
esto se le llama también ingeniero utópico; sin embargo, el problema no es
que no cumpla con su finalidad, sino que en el intento de hacerlo, al
contemplar cambios tan generales en la sociedad, termine haciendo cosas
que no intentaba hacer y genere perjuicios en la sociedad difíciles de
solucionar.
Otro problema de la ingeniería utópica, es que en lugar de mejorar la
sociedad para los ciudadanos, exige que los individuos se adapten al nuevo
198 Cfr. POPPER, La sociedad abierta y sus enemigos… p. 40. 199 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo… p.84.
91
modelo social, lo cual hace desaparecer, generalmente, las posibilidades de
éxito:
“El utopista [...] sustituye su exigencia de que construyamos una
nueva sociedad que permita a hombres y mujeres vivir en ella, por la
exigencia de que «moldeemos» a estos hombres y mujeres para que
encajen en su nueva sociedad.”200
La ingeniería utópica u holística comparte la actitud historicista. En primer
lugar tanto el holismo como el historicismo, entienden a la sociedad como
un todo, en el que los cambios se dan a partir de métodos radicales. Ambos
pretenden controlar la transformación por completo, el historicismo
advierte este control con sus leyes históricas, e incluso, la ingeniería
utópica pretende detener el cambio.201
Otro lazo entre el historicismo y la ingeniería utópica es que ambos creen
que pueden descubrir las metas o fines de la sociedad a partir de las
tendencias históricas; de tal modo que ambas excluyen la libertad de
elección y la responsabilidad de los individuos en la historia.202
200 POPPER, La miseria del historicismo… p. 85. 201 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo… p. 89 202 Cfr. POPPER, La miseria del historicismo… p. 90.
92
3. La responsabilidad y el racionalismo crítico en la práctica
La filosofía política de Popper, cómo se ha dicho, se fundamenta en el
racionalismo crítico, el cual aparece como una actitud moral, que sirve
como punto de partida para el diálogo, la resolución de problemas y el
planteamiento de nuevos problemas.
Las conclusiones epistemológicas del racionalismo crítico derivan en la
responsabilidad. A grandes rasgos, el racionalismo crítico defiende la
libertad y la búsqueda de la verdad, por lo tanto, la implicación ética más
importante de la filosofía de Popper es la responsabilidad, actitud
implícita y necesaria en el quehacer científico y político.
A parecer la razón por la que Popper se empeña en hacer un método
crítico, es precisamente porque para encontrar la verdad o al menos
acercarnos a ella, necesitamos tomar en serio a la ciencia, cuestionar
nuestras creencias e hipótesis científicas, mostrarnos humildes y abiertos
ante las posibles refutaciones, y entender que la búsqueda de la verdad se
facilita en el diálogo. Por estos motivos, el método del racionalismo crítico
en la ciencia exige al científico la responsabilidad de ser lo más objetivo
posible; y al espectador, se le exige la responsabilidad de ser crítico
cuestionando a la ciencia y a todas las ideas en favor de la búsqueda de la
verdad.
93
La importancia que le asigna Popper a la responsabilidad en el tema de la
política se hace evidente, sobre todo con su crítica al historicismo y a la
ingeniería holística, cuyas doctrinas proponen y fundamentan sistemas
sociales y políticos que eliminan la responsabilidad humana, postulando un
devenir histórico regulado por leyes irrefutables en las que el hombre no
puede intervenir.
Es importante señalar que estas consideraciones nos permiten entender la
gran importancia que tenía la filosofía práctica para Popper. El
racionalismo crítico se da en la vida cotidiana y tiene aplicación en casi
todos los problemas humanos; y constituye una propuesta moral para
asumir las consecuencias de nuestras decisiones actuando con
responsabilidad.
3.1 Los principios éticos del racionalismo crítico en la
filosofía política de Popper
En la filosofía de Popper existe una estrecha relación entre las
investigaciones metodológicas y los problemas morales.203
“La filosofía de Popper resulta transparentemente clara cuando la
miramos utilizando, por así decirlo, gafas éticas. Entonces podemos
advertir que su falsificacionismo está enraizado en un terreno ético. En
efecto, la preocupación principal de Popper cuando trabaja en los
problemas epistemológicos era mostrar que debemos adoptar una
actitud racional o humanista que necesariamente incluye el
reconocimiento de los límites de nuestro conocimiento y la necesidad
203 Cfr. ALBERT, “Epistemología y ciencia social”... p. 21
94
de utilizar el método de «ensayo y eliminación del error» [...] Incluso
la noción de sociedad abierta no puede ser comprendida
adecuadamente a menos que incluyamos en ella importantes
elementos éticos [...]”204
De hecho, Popper afirma que los principios éticos son la base de la ciencia,
puesto que la ciencia busca la verdad y para ello es necesario que la
búsqueda sea auténtica, lo cual exige reconocimiento de la propia
ignorancia e integridad intelectual. El método de ensayo-error planteado
por Popper, es aplicable a las ciencias naturales y a las ciencias sociales, la
objetividad de este método, en ambos casos, depende de la objetividad de
la crítica, lo cual implica la tolerancia a las críticas externas y la
autocrítica.
Todos estos elementos metodológicos (la verdad, los límites del
conocimiento, la integridad intelectual, la objetividad, la tolerancia, etc)
implican una responsabilidad para el que hace ciencia o política. De este
modo la actitud crítica depende de una decisión moral y advierte una
responsabilidad.
No debemos olvidar que el racionalismo crítico es una postura
antihistoricista: si los actos del hombre no están condicionados por su
historia, sino que dependen de la voluntad humana, el hombre es libre y
responsable de su vida presente y de la proyección de su futuro.
Los principios de falibilidad, decisión racional y aproximación a la verdad,
son los principios éticos que fundamentan al racionalismo crítico205. Estos
204 ARTIGAS, Lógica y ética en Karl Popper… p. 112-113. 205 Cfr. POPPER, En busca de un mundo mejor... p. 255.
95
principios se encuentran inmersos a lo largo de la filosofía política de
Popper; en su aplicación, en todo momento aluden a la responsabilidad
humana: el hombre es el único responsable de su historia, de sus decisiones
y sus actos; es el creador de la ciencia y de todas las teorías sociales que
afectan a la sociedad; por lo tanto, el hombre es el único que puede
transformar a la sociedad.
3.1.1: El principio de falibilidad en la política
Este principio explica que podemos estar equivocados en nuestros juicios
respecto a algo, o en nuestras hipótesis, lo cual implica que debemos tomar
una actitud de humildad frente al conocimiento.
El ejemplo más notable, en la filosofía política de Popper de la aplicación
de este principio se encuentra en la propuesta de la democracia y su ataque
al totalitarismo. En un sistema totalitario, todas las decisiones que afecten a
la sociedad son tomadas por el tirano o la clase gobernante, de esta manera,
se consideran definitivos los decretos del gobernante y por erróneas que
sean sus acciones políticas, no es posible refutarlas, criticarlas o cambiarlas
porque el mismo sistema no lo permite:
“[...] el principio de utilidad colectiva constituye la consideración ética
fundamental. La moralidad totalitaria lo gobierna todo [...] los
súbditos están obligados a decir la verdad. «Si el gobernante sorprende
96
a alguien en una mentira... entonces lo castigará, por fomentar una
práctica que lesiona y pone en peligro a la ciudad...»206
En un sistema totalitario, la verdad es dictada por el sistema y cualquiera
que intente violar los principios políticos es acusado por atentar en contra
del Estado, por ejemplo, si el Estado afirma que el socialismo es el mejor
sistema de gobierno, los ciudadanos deben apoyar tal afirmación, si algún
hombre tiene la ocurrencia criticar al socialismo, entonces se le acusa de
conspirador.
Bajo la consideración totalitaria, el Estado aparece como un organismo
irrefutable que no acepta la posibilidad de estar en un error, y puesto que
nadie lo puede criticar, pretende permanecer estático y a la mereced de las
fuerzas históricas en las que se funda.
Toda clase de dogmatismo, como en el caso del historicismo, está cerrado
a la crítica y a la posibilidad de ser falsado. Los gobiernos totalitarios se
rigen por dogmas establecidos a conveniencia de la clase gobernante, y
generalmente estos dogmas están animados por un sentido histórico de
superioridad política, que justifica y anima a los ciudadanos a sentirse parte
necesaria del devenir histórico que los envuelve.
La sociedad abierta, propuesta por Popper, se trata de una sociedad con un
sistema democrático constituido por instituciones que sirven como medios
para satisfacer las necesidades del pueblo. Es evidente que para conocer
estas necesidades es ineludible la constatación de que las instituciones son
206 POPPER: La sociedad abierta y sus enemigos… p. 154. En esta cita, Popper hace referencia a la idea del rey filósofo de Platón. Cfr. PLATÓN, Rep. 389c y PLATON, “Leyes”, Diálogos, v. 8, trad. Francisco Lisi, Madrid: Gredos 1986, 730b.
97
coherentes con las necesidades del pueblo; si las instituciones no cumplen
con sus propósitos, entonces hay que cambiarlas o mejorarlas, esto exige el
reconocimiento de errores y la búsqueda de nuevas soluciones.
Las instituciones de la sociedad abierta son falibles, puesto que son
creaciones humanas; a partir de estas instituciones los hombres participan
en las decisiones sociales y cuestionan al gobierno a partir de la autocrítica
y la crítica de instituciones externas. Esta estructura social hace posible la
defensa de la democracia, cuando un gobernante malo se encentra en el
poder:
“[...] las instituciones democráticas tienen por objeto permitirnos
liberarnos de los gobernantes malos o incompetentes o tiránicos sin un
baño de sangre [...] Propongo asumir que no existen [...] fuentes de
conocimiento infalibles –como tampoco gobernantes ideales e
infalibles- y que todas las «fuentes» de nuestro conocimiento pueden
inducirnos en ocasiones a error.”207
La estructura democrática admite la posibilidad de que puede mejorar y
por supuesto, que puede tener errores; gracias a la actitud falibilista se
pueden corregir los errores en la sociedad y podemos tener la certeza de
que los malos gobernantes no pueden afectar a la democracia, porque su
estructura vigila al gobierno y tiene la capacidad de corregir o destituir
incluso al gobernante.
Sin duda, el ingeniero social gradual, es el que permanece observando y
criticando a las instituciones a fin de identificar los pequeños cambios que
hay que hacer para mejorar el sistema democrático, sin embargo, para que
207 POPPER, En busca de un mundo mejor… p.70
98
esta propuesta obtenga los resultados esperados, debe existir ua
participación ciudadana activa.
3.1.2 El principio de discusión racional en la política
La discusión racional se entiende como un diálogo crítico y objetivo que
pretende sopesar las razones a favor o en contra, que tenemos respecto a
una teoría propuesta.
La propuesta política de Popper se desarrolla sobre la base del diálogo.
Desde la epistemología el filósofo austriaco explica que la objetividad del
conocimiento está en el debate público, y depende del análisis, la
contrastación y el temple de la teoría que se propone. La permanencia del
espacio público para la discusión crítica, depende de las instituciones
democráticas, y son ellas mismas las que procuran el diálogo entre las
diferentes propuestas políticas y sociales:
“[...] es el carácter público de la ciencia y de sus instituciones el que
pone una disciplina mental sobre el hombre de ciencia individual y el
que salvaguarda la objetividad de la ciencia y su tradición de discutir
críticamente las nuevas ideas”208.
El diálogo entre los ciudadanos y su gobierno tiene lugar a partir de las
instituciones y de algún modo, le elección del gobernante implica cierta
208 POPPER, La miseria del historicismo… p. 174.
99
comunicación e identificación entre la voluntad de los ciudadanos y el
gobernante.
“[...] la tradición de la discusión racional crea, en el campo político, la
tradición de gobernar por la discusión y, con ella, el hábito de
escuchar el punto de vista de otro, el desarrollo del sentido de la
justicia y la predisposición al compromiso.”209
Popper afirma que los medios de control igualitario, como son el voto y la
representación, son los que mantienen la estructura institucional que hace
posible el diálogo entre los gobernantes y los gobernados. Puesto que en
una dictadura, no hay elecciones para elegir a los gobernantes, y por lo
tanto, no hay un gobierno representativo electo por los representados (los
ciudadanos), es imposible la comunicación y el diálogo entre el gobierno y
la sociedad.
En un gobierno totalitario no se ofrecer sugerencias al gobernante y no
existe un espacio abierto pare el debate entre el dictador y el ciudadano;
por el contrario, el tirano establece las condiciones de vida de la sociedad e
incluso un sistema moral acorde con su gobierno:
“La dictadura es moralmente mala porque condena a los súbditos, en
contra de su mejor saber y conciencia, en contra de su convicción
moral, a colaborar con el mal, al menos por medio del silencio. Exime
al hombre de la responsabilidad humana, sin la que es sólo medio
hombre, una centésima parte del ser humano, hace de cada intento de
cargar con su responsabilidad humana un intento de suicidio.”210
209 POPPER, Conjeturas y refutaciones... p. 421 210 POPPER, La responsabilidad de vivir… p. 206.
100
Todos los sistemas totalitarios, al establecer un código moral dogmático e
irrefutable a los ciudadanos, los obliga a tener las mismas convicciones
morales que establece el sistema; el problema es que la adhesión a una
convicción ética implica una decisión moral y personal, que sólo el
individuo, desde su libertad puede admitir, incluso a pesar de la presión del
Estado. Pero si un sistema político obliga a la sociedad por medio de la
fuerza, a seguir su convicción moral, los hombres no pueden actuar de
manera libre y con plena conciencia de sus actos, por lo tanto, la
responsabilidad de sus actos no proviene de sus propias convicciones, sino
del Estado. Entonces el Estado es el responsable de los actos del hombre y
la responsabilidad moral del hombre es nula. Al parecer lo único que
quedaría en el hombre, bajo estas circunstancias, sería el peso de la
responsabilidad moral de permitir que lo obliguen a actuar en contra de
sus propias y verdaderas convicciones.
El problema de las utopías y de los sistemas historicistas, es que establecen
supuestos morales de acuerdo con las leyes históricas y sus predicciones:
“El historicista [...] puede añadir que la actitud más razonable que se
pueda tomar es la de acomodar el propio sistema de valores a los
cambios futuros.[...] lo moralmente bueno es lo moralmente
progresivo; es decir, lo moralmente bueno no es lo que va por delante
de su tiempo al acomodarse a aquellas normas de conducta que serán
adoptadas por el periodo por venir.”211
Las predicciones historicistas, se fundamentan en el estudio del pasado,
advierten que los periodos pasados de la historia pueden indicarnos el
211 POPPER, La miseria del historicismo… p.68.
101
desenvolvimiento de los periodos que están por venir. Entonces, los
historicistas no se cuestionan si quiera, si esta vez la historia, a falta del
conocimiento de tiempos remotos, podría entrar en un periodo distinto;
simplemente hacen su predicción asegurando lo que ocurrirá e incluso se
anticipan. Pero en realidad, esta anticipación no tiene sentido, de hecho
podría valer como una refutación de su propia teoría, puesto que con la
anticipación serían los hombres quienes marcan el cambio del periodo
histórico y no las leyes o fuerzas históricas.
En general, el problema de que en el historicismo no ocurra una discusión
crítica, es que sólo pueden argumentar a su favor a partir de la
autorreferencia; se conforman con su explicación histórica y omiten la
responsabilidad de los hombres sobre sus actos: si los cambios periódicos
de la historia ya están determinados, entonces no hay razón para intentar
mejorar la condición actual.
La discusión crítica en la tecnología fragmentaria de una sociedad abierta,
se expresa a partir de razones concretas que se han establecido mediante el
diálogo, para aproximarse a la verdad objetiva y definir los pequeños
cambios para mejorar la vida social. A partir del método de ensayo y error,
y de cambio gradual, se expresa el sentido de responsabilidad en la
sociedad abierta. El racionalismo crítico propone un constante diálogo de
mejora progresiva en el campo de las ciencias sociales y de la vida de los
individuos.
3.1.3 El principio de aproximación a la verdad
102
La ciencia en general tiene como finalidad alcanzar la verdad. Puesto que
esta es una tarea muy pretenciosa y nuestro conocimiento es limitado, la
ciencia trata, al menos, de aproximarse a la verdad. Para lograr este fin, es
necesario que tomar en cuenta en énfasis que Popper pone en la
comunicación a partir del diálogo para lograr una mejor comprensión de
las propuestas; de este modo la tolerancia y el reconocimiento de nuestros
interlocutores como iguales, constituyen la herramienta indispensable para
acercarnos a la verdad.
Del carácter provisional y parcial de las opiniones humanas y la falibilidad
del conocimiento, se desprende la idea de la tolerancia, sobre todo al
comprobar que la actitud opuesta, es decir, la actitud dogmática, o la
creencia de que somos infalibles, nos predispone a la intolerancia y a la
imposibilidad del diálogo, que como se ha explicado, parece ser un espacio
necesario para la democracia.
“A menudo se afirma que la discusión sólo es posible entre personas
que tienen un lenguaje común y que aceptan suposiciones básicas
comunes. Creo que esto es un error. Todo lo que se necesita es la
disposición a aprender del interlocutor en la discusión, lo cual incluye
un genuino deseo de comprender lo que éste quiere decir. Si existe
ésta disposición, la discusión será tanto más fructífera cuanto mayor
sea la diferencia de los puntos de partida de los interlocutores. Así, el
valor de una discusión depende en gran medida de la variedad de las
opiniones rivales. [...] El liberal no sueña con un perfecto acuerdo en
las opiniones; sólo desea la mutua fertilización de las opiniones y el
consiguiente desarrollo de las ideas. Aun cuando resolvamos un
problema con la universal satisfacción, al resolverlo creamos muchos
103
nuevos problemas acerca de los cuales es probable que discrepemos.” 212
El diálogo racional exige que los interlocutores estén dispuestos a aprender
del otro, que estén abiertos a que es más fácil acercarse a la verdad con
ayuda de los demás; por lo tanto, la tolerancia es también un elemento de
gran relevancia en la búsqueda de la verdad, más aún si tomamos en cuenta
que la variedad de opiniones enriquece nuestras teorías, puesto que se
reciben más críticas para afinar nuestra teoría o descartarla y se plantean
más problemas nuevos.
En el intento de llegar a la verdad en el ámbito de la discusión racional, es
necesario que se dé por hecho la igualdad de las partes. Un diálogo
igualitario pone a los interlocutores en el mismo lugar, de tal modo que la
aportación de ambos es igualmente importante. Sin embargo, el peso de los
argumentos, dará la objetividad final respecto a la validez o invalidez de
cada teoría.
En el ámbito político de la sociedad abierta, la aproximación a la verdad se
da a partir de pequeños cambios. La ingeniería social, con su método de
ensayo y error, plantea fines a corto plazo que no supongan un cambio
radical; por el contrario, los sistemas utópicos construyen grandes planes
que generen cambios, el problema es que no conciben la magnitud de
posibilidades perjudiciales que ocasiona el reducido alcance de sus
profecías:
“Pues bien, es precisamente a la concepción esbozada a la que llamo
utópica. Toda acción política racional y no egoísta, según esa
212 POPPER, KARL: Conjeturas y refutaciones... p. 421.
104
concepción, debe estar precedida por una determinación de nuestros
fines últimos, no solamente de fines intermedios o parciales que sólo
sean escalones hacia nuestros fines últimos y que, por lo tanto, deben
ser considerados como medios más que como fines. Por consiguiente,
la acción política racional debe basarse en una descripción o esquema
más o menos claro y detallado de nuestro Estado ideal, y también en
un plano o esquema del camino histórico que conduce hacia ese
objetivo. Considero a lo que llamo utopismo una teoría atrayente, y
hasta enormemente atrayente; pero también la considero peligrosa y
perniciosa. Creo que es autofrustrante y que conduce a la violencia. El
hecho de que sea autofrustrante se vincula con el hecho de que es
imposible determinar fines científicamente. No hay ninguna manera
científica de elegir entre dos fines.”
La búsqueda de la verdad se da paso a paso, es casi imposible acertar con
teorías que no se han corroborado y que por la magnitud o alcance que
pretenden tener, ocasionan grandes daños a la sociedad. El método más
seguro y responsable para llegar a la verdad en cuestiones sociales, es el
método de ensayo y error, que puede ser lento, pero que a largo plazo,
obtiene mejores resultados y beneficios seguros.
3.2 La responsabilidad en la filosofía política de Popper
3.2 .1 La responsabilidad intelectual
Queda claro que el racionalismo crítico en los problemas epistemológicos,
es una actitud que advierte que no podemos dar por verdadera una teoría,
sino que toda teoría es susceptible de error, por lo tanto, la responsabilidad
del científico será admitir que su teoría es tan sólo una propuesta, o una
hipótesis susceptible de falsación. De este modo, el saber científico para
105
Popper, no es en realidad un saber, sino que es un conjunto de suposiciones
que buscan llegar a la verdad213.
Popper considera que todo saber implica seguridad y certeza, de modo que
si no estamos seguros de que nuestro conocimiento es verdadero, sólo
suponemos que lo es. Nuestro conocimiento es conjetural, a pesar de que
posiblemente en varias ocasiones hayamos encontrado la verdad, no
podemos estar seguros de ello.
“[…] las teorías comprobables más valiosas se rastrean en busca de
errores. Buscamos encontrar errores y eliminarlos. Así es la ciencia:
consiste en ideas salvajes, irresponsables, que coloca bajo el riguroso
control de la corrección de errores.”214
Todo saber, ya sea innato o activo215, implica una expectativa. Por ejemplo,
cuando nos topamos con un objeto desconocido, esperamos saber qué es
ese objeto. Entonces buscamos una explicación, y aunque esta no sea
consistente, la necesidad de seguridad nos hace desear que nuestra
explicación sea verdadera. Esto es lo que Popper llama necesidad de
sugestión.
213 POPPER: La responsabilidad de vivir… 99. 214 POPPER, Karl: La responsabilidad de vivir… p. 101. 215 Popper entiende por saber innato, un conocimiento instintivo o natural en los seres vivos desencadenado por una necesidad biológica, por ejemplo: un niño espera que lo alimenten porque necesita ser alimentado. Un saber innato implica la expectativa de saciar una necesidad. El saber activo, es aquel conocimiento que surge ante la necesidad de cumplir con expectativas no saciadas; una expectativa no cumplida insita al organismo a probar algo nuevo. Cf. POPPER, Karl: La responsabilidad de vivir… p. 104
106
“Los seres humanos están terriblemente necesitados de sugestión [...]
Éstos son, en efecto, [...] las personas a quienes les falta valor para
vivir sin seguridad, sin certeza, sin autoridad, sin una guía.”216
Gracias a esta necesidad de sugestión surgen las explicaciones dogmáticas
que se convierten en ideologías, un ejemplo muy claro es el historicismo:
[...] aquellos que denuncian la razón y llegan a culparla, incluso, de los
males sociales de nuestro tiempo, lo hacen, por un lado, porque se dan
cuenta de que el hecho de la profecía histórica sobrepasa el poder de
la razón [...] En otras palabras: no son sino historicistas
desilusionados, es decir, hombres que a pesar de comprender la
pobreza del historicismo, no advierten que retienen consigo el
prejuicio histórico fundamental, a saber, la doctrina de que las ciencias
sociales, para tener algún valor, han de ser proféticas. [...]
Personalmente me inclino a creer que la razón reside en su deseo de
dar expansión a una insatisfacción profundamente arraigada, frente a
un mundo que no se acerca, ni siquiera lejanamente a nuestros ideales
morales ni sueños de perfección. La tendencia del historicismo (y de
las posiciones afines) a defender la rebelión contra la civilización
puede obedecer al hecho de que el historicismo es en sí mismo, con
mucho, una reacción contra el peso de nuestra civilización y su
exigencia de responsabilidad personal.”217
Como podemos entender, a partir de esta cita, Popper afirma que el
historicismo, como ideología surge para poder calmar la insatisfacción de
nuestro mundo imperfecto. A partir de las profecías, el historicismo
advierte que no importan las decisiones humanas, la historia advierte el
216 POPPER, Karl: La responsabilidad de vivir… p. 98-99. 217 POPPER, La sociedad abierta… p.19.
107
destino de la humanidad, de modo que no es responsabilidad del hombre la
miseria o la inmoralidad, el historicista explicará que se trata de un periodo
necesario en la historia para llegar a la cúspide del Estado perfecto. Los
hombres pueden asumir esta explicación porque les promete un futuro
mejor, los sugestiona para dar tranquilidad y seguridad; y porque deslinda
a los hombres de la responsabilidad de los males sociales.
Los hombres ingeniosos, o intelectuales que, por su necesidad de seguridad
dan por verdadera su explicación y convencen a los demás de que es
certera, se convierten en una autoridad; y puesto que la explicación
responde a las necesidades de seguridad de los demás hombres, como en el
ejemplo del historicismo, entonces se genera una ideología. Al respecto,
surgen dos problemas:
1) Los intelectuales toman el papel de guías; y actuando con
arrogancia, imponen sus ideas que parecen ser irrefutables.
2) La ideología prevalece porque nadie la cuestiona o intenta
refutarla.
Estos dos problemas surgen en torno al tema de la responsabilidad. En
primer lugar explicaremos el problema de la responsabilidad de la
autoridad, y después, discutiremos el papel de los que aceptan una
ideología o asumen la autoridad sin cuestionarla.
Popper se refiere a los intelectuales, como “[…]los seres humanos que se
interesan por las ideas”218. De este modo, los científicos, los filósofos, los
publicistas, comunicadores, políticos y en general los líderes de opinión,
218 POPPER, La responsabilidad de vivir… p. 209
108
son creadores, críticos, difusores o incluso manipuladores de ideas. El peso
que tienen estas ideas ha sido muy significativo para la humanidad:
“[...] nosotros los intelectuales, hemos ocasionado desde hace siglos
los daños más atroces. Las matanzas en masa en nombre de una idea,
de una doctrina, de una teoría –esta es nuestra obra, nuestra creación:
el invento de los intelectuales-. Solamente con que dejáramos de
azuzar a unos seres humanos contra otros [...] ya se habría ganado
mucho.”219
La responsabilidad de los intelectuales es muy grande, tienen un
compromiso con la humanidad y la verdad; si las guerras, las
persecuciones religiosas, las rivalidades entre los hombres, etc. han sido el
resultado o la respuesta de los hombres ante la adhesión de una ideología;
los intelectuales deberían de intentar medir el peso de sus ideas ante la
posibilidad de causar grandes daños a la humanidad. Probablemente el
diálogo con otros hombres podría ayudar al ideólogo a darse cuenta de su
responsabilidad, lo cual presupone ante todo evitar la arrogancia
intelectual, y evitar dogmatismos:
“Debemos saber que no sabemos nada –o casi nada. [...] Para
acercarnos aunque sólo sea un paso hacia la paz, tenemos que
renunciar a las ideologías [...] Tenemos que tantear críticamente, [...]
debemos buscar la verdad objetiva con toda humildad. No podemos
seguir intentando representar por más tiempo el papel de profetas
omniscientes.”220
219 POPPER, La responsabilidad de vivir… p. 209 220 POPPER, La responsabilidad de vivir… p. 215.
109
Es verdad que el resultado de las ideas, no es siempre malo, por el
contrario, las ideas han traído grandes beneficios a la humanidad. Lo que
Popper critica es a la ideología como un sistema dogmático de ideas
permanentes.
3.2.2 Responsabilidad y libertad
El historicismo como ideología, explica que nuestra historia y nuestro
futuro están determinados por una tendencia histórica; de ahí que el
gobernante de una sociedad asuma que la historia indica el porvenir y por
lo tanto se debe poner en concordancia con esta tendencia para detener o
acelerar el cambio social. El historicismo aparece como una idea cómoda
para el gobernante: cualquier falla en su administración puede ser producto
del pasado, es decir, de la serie de condiciones históricas que han
determinado a la sociedad; o bien, de la tendencia histórica que marca el
comportamiento social. Así, el gobernante no es responsable de sus malas
decisiones y todos sus errores pueden tener una explicación que lo deslinde
de su responsabilidad.
Toda forma de gobierno totalitario se funda en una ideología. Una
peculiaridad de las ideologías de los totalitarismos es asumir que el Estado
es más importante que el individuo, en tanto que los individuos viven
gracias al Estado, y por eso, éstos deben vivir por él. Un Estado totalitario,
imponiendo su ideología regula todos los ámbitos de la vida del hombre,
incluso su vida moral:
“[...] se afirma que el Estado es algo más superior o más noble que una
mera asociación con fines racionales y se le convierte, así, en objeto
110
de adoración. Sus finalidades son más altas que la simple protección
de los seres humanos: su misión es la moral.”221
Recordemos que la ideología de un gobierno totalitario obedece al
pensamiento y a la conveniencia el gobernante o la clase en el poder. De
este modo, la moral impuesta a la fuerza a todos los ciudadanos, anula la
responsabilidad moral del individuo, puesto que si cumple con los
“mandatos morales” del Estado, estará actuando en contra de su
conciencia:
“[...] esta exigencia significaría simplemente que los funcionarios del
Estado deben preocuparse por la moralidad de los ciudadanos y
utilizar el poder, no tanto para la protección de la libertad de estos,
como para la vigilancia de su vida moral [...] se exige aquí que el
imperio de la legalidad [...] sea acrecentado a costa de la moralidad
propiamente dicha, es decir de las normas impuestas, no por el Estado
sino por nuestras propias decisiones morales, vale decir, por nuestra
conciencia.” 222
Contra esta postura, Popper afirma que la moralidad del Estado debe ser
controlada por los ciudadanos, de este modo, los ciudadanos ejercen su
libertad, y por lo tanto, se hacen responsables de sus actos: esta es la
verdadera moralidad223.
221 POPPER,: La sociedad abierta… pp. 127-128. 222 POPPER, La sociedad abierta… p. 128. 223 “Entre las tradiciones que debemos considerar más importantes se cuenta la que podríamos llamar el "marco moral" (correspondiente al "marco legal" institucional) de una sociedad. Este marco moral expresa el sentido tradicional de justicia o equidad de la sociedad, o el grado de sensibilidad moral que ha alcanzado. Es la base que hace posible lograr un compromiso justo o equitativo entre intereses antagónicos, cuando ello es necesario. No es inmutable en sí mismo, por supuesto, pero cambia de manera relativamente lenta. Nada es más peligroso que la destrucción de este marco tradicional.
111
El resultado de un Estado ideologizante, es la total irresponsabilidad por
parte de los gobernantes224: al eliminar el sentido ético propio del
individuo, únicamente la fuerza puede obligar a los hombres a que se
comporten de manera adecuada al Estado, de esta forma, el individuo
adoptará el comportamiento establecido por miedo al castigo del gobierno.
Probablemente los que actúan por convicción a la ideología, no han
cuestionado el status de su libertad, o bien se sienten mejor en un Estado
proteccionista que les da seguridad en cuanto a su porvenir histórico.225 Es
evidente que toda ideología impuesta por una autoridad implica la pérdida
de la libertad del individuo, ya que éste se debe adherir a una serie de
principios morales que condicionan su bienestar; sin embargo, una moral
impuesta por la fuerza, no tiene en realidad un sentido moral.
Popper ha distinguido la democracia del totalitarismo precisamente, porque
en la primera, se puede cambiar al gobernante por vías pacíficas, mientras
que en un totalitarismo se da la destitución por la violencia. Del mismo
modo ocurre con la moral individual o social. En la democracia existen una
serie de normas que se fundan en la tradición y estas pueden ser cambiadas
o mejoradas por la vía pacífica; una ideología totalitarista sólo puede ser
destituida por la violencia; un individuo puede seguir mi propia conciencia
en un sistema totalitarista, sin embrago, será castigado, pero cuando el
(El nazismo trató conscientemente de destruirlo.) Su destrucción conduce, finalmente, al cinismo y al nihilismo, es decir, al desprecio y la disolución de todos los valores humanos.” POPPER, Conjeturas y refutaciones... p. 421. 224 POPPER, La sociedad abierta… p. 128 225 Es por esto que generalmente, los hombres que se encuentran a favor de la ideología, es la clase que se verá beneficiada según la predicción histórica; sin embargo también se encuentran gobernados por el miedo: si no actúan conforme a la ideología o a la tendencia histórica se verán desfavorecidos (ya sea porque el periodo histórico cambiará, o por no procurar la aceleración del periodo que esperan).
112
pueblo decida seguir su propia conciencia, tendrán que acudir a la
violencia para imponerse sobre el Estado.
Para Popper, la moral es una cuestión individual, y siguiendo a Kant,
propone el principio de autonomía:
“Este principio sostiene que no debemos aceptar la orden de ninguna
autoridad por elevada que ella sea, como base de la ética. Pues
siempre que nos enfrentamos con una orden que emana de una
autoridad, debemos juzgar críticamente si es moral o inmoral
obedecerla. La autoridad puede tener el poder de obligar a cumplir su
orden, y nosotros podemos carecer de él para resistirla. Pero si
tenemos el poder físico de elegir, entonces la responsabilidad final es
nuestra: depende de nuestra propia decisión crítica obedecer o no un
mandamiento, someternos o no a una autoridad.”226
Sin importar que se encuentre sometido a una autoridad, el hombre es
capaz de discernir si el mandato es moral o inmoral, y de acuerdo a su
conciencia decide si obedecerá o no a la autoridad. Esta libertad es la que
en última instancia nos hace cargar con la responsabilidad de nuestros
actos.
Es verdad que pueden obligarnos a hacer algo en contra de nuestra
conciencia, por ejemplo, cuando peligra nuestra vida o integridad, sin
embargo, la decisión de elegir entre nuestra vida y lo moralmente correcto
es nuestra decisión.
226 POPPER, Conjeturas y refutaciones... p. 50.
113
“De la apología de Sócrates y de su muerte surgió la nueva idea del
hombre libre: la idea de un hombre cuyo espíritu no puede ser
sometido, de un hombre que es libre porque es autosuficiente, que no
necesita coacción porque es capaz de gobernarse a sí mismo y de
aceptar libremente el gobierno de la ley. Tanto en el campo del
conocimiento como en el de la moral, Kant dio un nuevo significado a
esa idea socrática de la autosuficiencia que forma parte de nuestra
herencia occidental. Y le ha agregado, además, la idea de una
comunidad de hombres libres, de todos los hombres. Pues mostró que
todo hombre es libre; no porque haya nacido libre, sino porque ha
nacido con la carga de la responsabilidad de decisiones libres.”227
La libertad implica ante todo una responsabilidad, el simple hecho de tener
pensamiento crítico nos da la posibilidad de elegir lo que es moral y
criticar lo que nos parece erróneo o injusto. En este sentido, el
racionalismo crítico es una responsabilidad recíproca que nos involucra en
la búsqueda de la verdad, y de una vida mejor para nosotros y para los
demás; por esto debemos ser críticos de nuestro entorno y ejercer la
autocrítica.
227 POPPER, Conjeturas y refutaciones... p. 227.
114
Conclusiones
El racionalismo crítico es ante todo una actitud, es una propuesta para
tomar una postura tolerante, crítica y modesta frente a la posibilidad de
hallar la verdad.
Popper insiste en que es una actitud precisamente porque es una
disposición que sirve como punto de partida para dialogar. El racionalismo
crítico, es una propuesta metodológica, que intenta liberarse de dogmas y
prejuicios con el fin acercarnos a la verdad e ir corrigiendo nuestros
errores. Sin embargo, lo relevante de este método no es seguir ciertos
pasos, sino el punto de partida: la actitud en la que reconocemos que
sostenemos nuestra hipótesis por mera fe en nuestra razón, y que por lo
mismo, estamos dispuestos dialogar con otros cuyas hipótesis son también
conjeturas. Esta actitud necesariamente implica una responsabilidad:
115
finalmente, sabemos que de nuestra conclusión en realidad no podemos
estar completamente seguros, por más segura que nos parezca no podemos
afirmar que sea verdadera.
Así, tanto el ingeniero social gradual, como el científico, en todo su
ejercicio, son responsables de sus conjeturas, de la construcción gradual de
una sociedad o de la ciencia. A pesar de que Popper insiste en su filosofís
de la ciencia, en que cuando una teoría es falsada debe ser sustituida en su
totalidad por la teoría que la ha falsado, debemos recordar que esta nueva
teoría debe de explicar lo mismo y más que la enterior. Esto supone un
cambio gradual.
En política, vemos que ocurre lo mismo, al realizar cambios institucionales
graduales, no ocurre un cambio radical de la estructura de la institución. La
propuesta de la ingeniería gradual supone una alta responsabilidad en el
ingeniero social: si acaso comete un error, éste no será tan grave como para
afectar a toda la institución, el cambio gradual sugiere la posibilidad del
ensayo y error si grandes consecuencias. Por lo mismo pienso, que sí acaso
aplicáramos este modelo en una sola institución, tardaríamos un buen
tiempo en modificarla por completo, sin embargo, la ventaja que nos
aporta la ingeniería gradual, es que no un hay rompimiento de los
proyectos que la institución esté realizando, ésta puede seguir funcionando,
a la vez que se realizan cambios en ella.
Popper plantea la situación de diálogo como un escenario cotidiano, es
decir, que puede aplicarse no sólo en el ámbito de la ciencia y la política,
sino que sirve para solucionar cualquier problema, expresar un punto de
vista o intentar llegar a un acuerdo. Finalmente toda organización o
acuerdo entre seres humanos supone un ejercicio político, también en la
116
ciencia. Probablemente por esta razón, se ha juzgado a la filosofía de la
ciencia de Popper como prescriptiva; al parecer los científicos (aunque con
excepciones, como el caso de Einstein, planteado por Popper)no buscan
falsar sus teorías, sino que intentan verificar sus hipótesis, y no
necesarimente se encuentran en diálogo permanente con otros
científicos228.
Aunque se le atribuye a Popper la sistematización del racionalismo crítico,
como método filosófico, parece evidente que, como Popper afirma, su
propuesta no es nueva. La historia de la filosofía, da cuenta de que la
actitud de diálogo es una condición propicia para hacer filosofía, muestra
de ello, es que al parecer, muchos filósofos han tomado esta actitud. Sin
embargo, debemos reconocer que Popper añade el énfasis en el error y la
noción de responsabilidad individual e intelectual en el método,
Popper menciona especialmente el caso de los presocráticos, de Sócrates y
de Kant. Sin embargo, han existido otras tradiciones filosóficas o filósofos
que, sin tener ningún vínculo con Popper, han filosofado a la manera del
racionalismo crítico.
Una de las aportaciones más grandes al ámbito de la ciencia en general, es
la unidad del método entre las ciencias naturales y sociales. Este logro
demuestra los amplios alcances del método Popperiano. Lo curioso es que
la solución que Popper da a este problema podría considerarse incluso,
228 Algunos filósofos intentarán dar respuesta a este problema como Kuhn y Feyerabend, principalmente con sus tesis sobre las sociedades de conocimiento y los marcos conceptuales. Sin duda esta propuesta no es afín a la filosofía de Popper, en primer lugar por el peso que le dan a la historia y en segundo, porque supone paradigmas que se sugieren momentáneamente como dogmas.
117
como una respuesta de sentido común: el método de ensayo y error, como
él mismo lo afirma, es un método natural de conocimiento en todos los
hombres e incluso en los animales; gran parte de nuestro aprendizaje se da
a partir de experiencias que intentamos mejorar.
Como se ha dicho, el fondo de la propuesta epistemológica de Popper está
en la ética, y sus principios éticos permanecen en todos los temas que
aborda. Todos los temas que Popper aborda están estudiados sobre una
visión humana: el conocimiento del hombre es limitado, esto explica que el
método más apropiado sea el de ensayo y error, sobre todo cuando se
intenta llegar a la verdad, ya que teniendo en cuenta esta característica
antropológica (que tendemos al error porque es evidente que nos
equivocamos constantemente), al igual que Sócrates, podemos estar
seguros de que no conocemos verdades con seguridad, es decir, puede ser
que hayamos llegado a la verdad de algo, sin embrago, no estamos seguros
de que en realidad esa sea la verdad.
La filosofía de Popper, puede ser considerada como una defensa al espíritu
filosófico. En realidad pienso, que muchos filósofos se han alejado del
verdadero objetivo de la filosofía. Con la concepción antropológica de
Popper, queda claro que el hombre sólo puede aspirar a la sabiduría;
nuestra condición humana no nos permite llegar a la verdad pura, pero sí
podemos hacer un intento por acercarnos a ella. Y esto explica la
importancia de las propuestas del racionalismo crítico como método eficaz
para hacer filosofía:
El filósofo arrogante que piensa que posee la verdad o que cree saberlo
todo, en realidad ya no es un filósofo, no ama a la sabiduría ya no tiende a
ella porque se ha estancado en su verdad particular. La curiosidad que
118
motiva al hombre a saber y conocer más, se ve ofuscada por la actitud del
“sabelotodo” que ya no cuestiona sus propios conocimientos, y que por
orgullo no contrasta sus teorías.
Tampoco puede ser filósofo el que se especializa en un tema, y que al
pretender ser el único que lo domina, subestima las opiniones de los
demás, o guarda sus descubrimientos, y sólo los comparte para obtener un
reconocimiento.
La responsabilidad del filósofo, va más allá de tener una vasta cultura
general y una gran acumulación de conocimiento. La filosofía no es una
“forma de ser inteligente”, al parecer, filosofar es simplemente un reflejo
de nuestra humanidad, que nada tiene que ver con nuestro coeficiente
intelectual y el grado de estudio que poseemos. “Todos los hombres y
mujeres son filósofos. Si no son consientes de tener problemas filosóficos,
en cualquier caso tienen prejuicios filosóficos.”229 La filosofía no es solo
para iniciados; si bien, algunos son mejores filósofos, y otros por gusto se
dedican a la filosofía, todos los hombres en algún momento tienen contacto
con problemas filosóficos y tienen la capacidad de reflexionar sobre ellos.
La filosofía es para todos los hombres y de todos los hombres. Comparto
con Popper la idea de que es “[...] fatal la crítica minuciosa de aspectos
minúsculos sin comprender los grandes problemas de la cosmología, del
conocimiento humano, de la ética y la filosofía política, y sin un intento
serio y entregado por resolverlos.”230
229 POPPER, En busca de un mundo mejor... p. 231. 230 POPPER, En busca de un mundo mejor... p. 239.
119
Es verdad que la crítica de algunos aspectos muy específicos, en muchos
casos puede llevar a una comprensión completamente distinta de la
filosofía de un autor. Sin embargo, creo que grandes mentes pueden ser
desperdiciadas cuando sólo se dedican a estos temas minúsculos, cuando
podrían resolver grandes problemas que podrían ayudar realmente a la
humanidad. De algún modo, todo intelectual tiene una responsabilidad, e
incluso el intelectual especializado tiene más responsabilidad, porque sabe
o conoce temas que los otros no sabemos y podrían ayudar a otros.
Popper explica que dentro de las responsabilidades del intelectual, está el
compartir su conocimiento con todos los hombres, por eso afirma que:
“El intelectual tiene el deber de escribir de la forma más simple y
clara que pueda, y de la forma más civilizada; y no olvidar nunca
ni los grandes problemas que azotan a la humanidad y exigen un
pensamiento nuevo y osado pero paciente, o la modestia socrática
del hombre que sabe lo poco que sabe.”231
El racionalismo crítico implica también un diálogo con fines educativos e
informativos, la idea de contrastar nuestras teorías también se refiere a
compartirlas, para poder plantear nuevos problemas y tomar ideas para
obtener mejores soluciones.
La filosofía se hace en el diálogo y a partir del mundo, por eso es
importante que el filósofo salga a la calle, se entere de lo que sucede en el
planeta, que lea libros diferentes, que vea la televisión, escuche el radio y
hasta compre revistas de moda. ¿Qué realidad podemos criticar si no
231 POPPER, En busca de un mundo mejor... p. 239.
120
estamos enterados de ella? ¿Qué sentido tiene leer la metafísica de
Aristóteles si no observamos el mundo físico? ¿Qué sentido tiene dar
consejos de amor, porque hemos leído teorías de él, pero no lo hemos
experimentado? ¿Qué fundamentos tiene el viejo al criticar a las nuevas
generaciones si nuca ha escuchado las razones de un joven?
Si el filósofo se abstrae del mundo, no tiene un mundo para filosofar. Sólo
le quedan sus propias ideas y el riesgo de encerrarse en su propio
dogmatismo.
El diálogo con la gente del mundo, ya sea un científico, un abogado, el
vecino, el vigilante, nuestro colega o un amigo; es una gran oportunidad
para criticar nuestras propias teorías y para ofrecer nuevas ideas.
La búsqueda de la verdad le concierne a todos, es responsabilidad de todos
los hombres, puesto que la ciencia, las creencias y la cultura en general es
una creación humana. Debemos reconocer que es más fácil llegar a la
verdad con la crítica y las propuestas de otras personas.
Probablemente una buena propuesta para nuestros tiempos, sea fortalecer
el diálogo. Los acuerdos políticos entre países y los acuerdos entre
individuos se alcanzan a partir del éste. Al parecer hoy en día, los filósofos
contemporáneos más importantes, ven en la discusión racional, una
respuesta a los problemas políticos y sociales.
Debemos decir que la propuesta del diálogo como solución a los problemas
humanos, no es una propuesta única de Popper; en la actualidad, es posible
encontrar, incluso en diversas corrientes filosóficas que la discusión
racional es una propuesta común.
121
Sin duda, gracias a la diversidad de teorías es posible establecer un
ambiente de discusión racional para formar un mundo mejor, o al menos
evitar que empeore.
En lo personal, me parece que la propuesta de Popper puede ser adecuada
para mejorar la situación política de muchos países. La ingeniería social de
paso a paso, puede funcionar en cualquier democracia, siempre y cuando,
se plantee como un proyecto a largo plazo, y que las instituciones creadas
por la sociedad civil lo impulsen y empiecen a vigilar al gobierno.
La propuesta del racionalismo crítico es que todos nos percatemos de la
responsabilidad que tenemos por el simple hecho de ser racionales y tener
conciencia. La responsabilidad es un derivado de la libertad, que de
manera evidente podemos constatar por el simple hecho de poder pensar o
imaginar lo que queramos.
Es verdad que la autoridad juega un papel muy importante en los límites de
la libertad; sin embargo, también la libertad del hombre, es la que en
última instancia le pone límites a la autoridad. Tal vez, esa es la mayor
responsabilidad que tenemos como ciudadanos de una democracia, que si
bien, no es perfecta, ni jamás lo podrá ser, puede ser una democracia
tolerante y capaz de ser reformulada y mejorada, siempre y cuando seamos
lo suficientemente críticos y valientes para asumir nuestra responsabilidad
de criticar y actuar conforme a nuestra conciencia individual, en vistas a
una buena convivencia social, basada en el respeto a la humanidad y a
nuestro mundo.
122
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