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ARTICULO DE OFICIO. S. M. continúa sin novedad en su imporlante salud De igual beneficio disfruta el Serenísimo Señor lujante Don Sebastian Gabriel « la cabeza del Bjército. Las últimas noticias que se han recibido de Salzburgo ase guran, que continuaban en aquella Ciudad sin la menor novedad en su imporlante salud S. A. R. el Serenísimo Señor P rincipe DE Asturias , los Serenísimos Señores Infantes Dun J uan Carlos y Don F ernando Marla, su Augusta Tia la Sere nísima Señora Infanta Dona Maria, Leresa , y la Serenísima Señora Infanta Doña Ma ría Amalia. ' Capitanía general de Navarra y Provincias Vascongadas. Excmo. S r.— La desgraciada ocurrencia del comandante general de Alava , por la cual ha, dejado de remitirse oportu namente las noticias que le tenia pedidas , no me han permi tido dar á V- E. antes, como deseaba el parte detallado de la importante toma de Peñacerrada , verificada el dia 2(5 de Agosto último; mas ahrira que ya tengo reunidas todas las ne cesarias para describir los hechos y circunstancias que tuvie ron lugar desde que se principió el alaque contra la plaza hasta su rendición , asi como de los individuos de todas (Ja ses que mas eficazmente cooperaron al efecto , y los resultados ventajosos que ha producido á la causa del REY N. S. , manifes taré á V- E. que convenciéndome cada dia^ mas y maS de la necesidad de ocupar un punto que por su posición topográfi ca es tan interesante , y no obstante haberme fallado las- dos tentativas anteriores, lo mismo que había sucedido en otras dos ocasiones el año anterior , me empeñé en llevar adelante mi propósito; y fijo en esta idea solo esperaba que se pre sentase el momento mas favorable. En efecto, habiendo te -1 nido noticia en el día 22 de que el grueso de las fuerzas ene-,; migas de Rioja habían rebasado á Miranda con dirección á Cas-^ tilla, di las órdenes ¿¡(invenientes para que e l.lt.0 batallón de ¡Navarra con 30 caballos del mismo Reino, el 3° de Guipúz coa y el 2 ° de Vizcaya, se pusieran en marcha para aproxi marse , ganando lus momentos á los puntos que des designe; habiéndome puesto de acuerdo con el Director, general de ar tillería para la conducción de las piezas de batir y demas ne cesarias con la dotación correspondiente , asi; que con ¡el co mandante general de Alava para su cooperación con cuanto estaba de su parte, encargando la pronta ejecución de todas las órdenes, igualmente que del apresto de cuanto fuere me-. Dester para emprender el ataque , al gefe del E- M. , que con la debida anticipación marchó a la Imea del bloqueo. Construidas las balerías en la noche del 23 , y voto el fuego en la mañana del 24, tuvimos la desgracia, según dijeá V. E. en mi parte anterior , de que el enemigo con los suyos nos inutilizase las tres piezas cio a 18, siendo por lo mismo for zoso retirarlas para.Irat^r de rehabilitarlas ; y aunque no deja ba de ofrecer está operación grandes dificultades , siu embar go todas cedieron á la actividad , y quedaron vencidas en lo restante, del dia y todo el siguiente. Por la noche se reparó la antigua hatería , y se construyó una nueva por el cuerpo de ingenieros con la mayor solidez , á medio tiro de fusil de la plaza : en esta , que era la principal , se colocaron dos pie zas de,á )8 , poniéndolas bajo el mando del acreditado primer comandante D. Rufino Román de Trobo ; y las otras dos si tuadas sobre la peña que domina a la plaza, una compuesta dq un cañón de á 18 y de un obús , y la otra de un morlc- ro;de siete pulgadas, se pusieron respectivamente á cargo de it>s capitanes D. José María Cenia y D. Julián López Muñoz, todo por disposición del Director general de artillería. En este estado , v colocados también ¡os batallones del bloqueo en las posiciones mas ventajosas , se rompió el fuego á los primeros ! albores del dia ; y dirigidos los primeros del cañón por la batería de brecha á la casa fuerte exterior en que termiñíiba •el- camino cubierto, que desde la plaza tenían construido los ¡enemigos para guardar la única fuente de donde se surtían de agua , bastaron cinco solos cañonazos para que la desalojasen, obligándoles á retirarse á la plaza , á cuyo recinto quedó su guarnición reducida. Desde este momento fue menester va riar de puntería , y tratar de dirigir los fuegos únicamente so bre la plaza, con el objeto de abrir brecha en la parte de muralla que ofrecía mas acceso, y se había elegido ya como punto de ataque con anticipación , asi que sobre la casa que- apóyaha su derecha , como en efecto se principió i practicar con tan buen suceso , que apenas se disparaba un cañonazo qué no causase un estrago. Para oponer una resistencia á nuestra principal batería , reunió el enemigo toda su artille ría y multiplicó sus fuegos, asi como los de fusilería; mas riada bastó á interrumpii; los nuestros , que cada vez mas certeros obraban sobre la muralla y casa contigua de la derecha los efectos mas terribles, sembrando éntrelos sitiarlos el espan to ,í aumentado también con los fuegos de las otras baterías, •que pusieron dentro de la plaza porción de granadas, y los da fusilería de los tiradores que ocupaban las alturas inine- •díotasj Demolida en gran parte la casa de que se lleva hecha ¡mención , y abierta brecha en la muralla de su izquierda, di orden para que se preparasen las tropas que debían montar la , si bien esta operación ofrecía todavía grandes riesgos y dificultades por la pendiente que había que vencer antes. Los batallones 1.» y 2.° de Alava y la quinta compañía del 6.°, que habian trabajado tanto en 28 dias de bloqueo riguroso, debían ser quienes hiciesen el último servicio para la rendí-5 cion de la plaza , y se eligieron de entre ellos las compañías para el asalto: cuatro del l.° se prepararon con ese objeto al mando de su segundo comandante D. Ubaldo Gómez; pero debiendo ser conducidas por D. Isidro Ruiz de Egüílaz, co nocido por el cura de Dalló, que se había prestado á ir a su ¿cabeza : antes de emprender esta Tuerza su arriesgado mo vimiento-,-íse determinó que avanzase úna mitad de la com pañía de tiradores-del jirimer batallón mandada por el tenieute graduado de capitán D. Joan Andrés deldüya: 'a la voz eléctrica de viva el REY , que dio el citado Ruiz de Eguílaz , se prc-

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ARTICULO DE OFICIO.S. M. continúa sin novedad en su imporlante salud

De igual beneficio disfruta el Serenísimo Señor lujante Don Sebastian Gabriel « la cabeza del Bjército.

Las últimas noticias que se han recibido de Salzburgo ase­guran, que continuaban en aquella Ciudad sin la menor novedad en su imporlante salud S. A. R. el Serenísimo Señor P rincipe DE Asturias , los Serenísimos Señores Infantes Dun J uan Carlos y Don F ernando Marla, s u Augusta Tia la Sere­nísima Señora Infanta Dona Maria, Le r e s a , y la Serenísima Señora Infanta Doña Ma ría Amalia. '

Capitanía general de Navarra y Provincias Vascongadas.Excmo. S r.— La desgraciada ocurrencia del comandante

general de Alava , por la cual ha, dejado de remitirse oportu­namente las noticias que le tenia pedidas , no me han permi­tido dar á V- E. antes, como deseaba el parte detallado de la importante toma de Peñacerrada , verificada el dia 2(5 de Agosto último; mas ahrira que ya tengo reunidas todas las ne­cesarias para describir los hechos y circunstancias que tuvie­ron lugar desde que se principió el alaque contra la plaza hasta su rendición , asi como de los individuos de todas (Ja­ses que mas eficazmente cooperaron al efecto , y los resultados ventajosos que ha producido á la causa del REY N. S. , manifes­taré á V- E. que convenciéndome cada dia mas y maS de la necesidad de ocupar un punto que por su posición topográfi­ca es tan interesante , y no obstante haberme fallado las- dos tentativas anteriores, lo mismo que había sucedido en otras dos ocasiones el año anterior , me empeñé en llevar adelante mi propósito; y fijo en esta idea solo esperaba que se pre­sentase el momento mas favorable. En efecto, habiendo te - 1 nido noticia en el día 22 de que el grueso de las fuerzas ene-,; migas de Rioja habían rebasado á Miranda con dirección á Cas-^ tilla, di las órdenes ¿¡(invenientes para que e l . l t .0 batallón de ¡Navarra con 30 caballos del mismo Reino, el 3 ° de Guipúz­coa y el 2 ° de Vizcaya, se pusieran en marcha para aproxi­marse , ganando lus momentos á los puntos que des designe; habiéndome puesto de acuerdo con el Director, general de ar­tillería para la conducción de las piezas de batir y demas ne­cesarias con la dotación correspondiente , asi; que con ¡el co­mandante general de Alava para su cooperación con cuanto estaba de su parte, encargando la pronta ejecución de todas las órdenes, igualmente que del apresto de cuanto fuere me-. Dester para emprender el ataque , al gefe del E- M. , que con la debida anticipación marchó a la Imea del bloqueo. Construidas las balerías en la noche del 23 , y voto el fuego en la mañana del 24, tuvimos la desgracia, según dijeá V. E. en mi parte anterior , de que el enemigo con los suyos nos inutilizase las tres piezas ci o a 18, siendo por lo mismo for­zoso retirarlas para.Irat^r de rehabilitarlas ; y aunque no deja­ba de ofrecer está operación grandes dificultades , siu embar­

go todas cedieron á la actividad , y quedaron vencidas en lo restante, del dia y todo el siguiente. Por la noche se reparó la antigua hatería , y se construyó una nueva por el cuerpo de ingenieros con la mayor solidez , á medio tiro de fusil de la plaza : en esta , que era la principal , se colocaron dos pie­zas de,á )8 , poniéndolas bajo el mando del acreditado primer comandante D. Rufino Román de Trobo ; y las otras dos si­tuadas sobre la peña que domina a la plaza, una compuesta dq un cañón de á 18 y de un obús , y la otra de un morlc- ro ;de siete pulgadas, se pusieron respectivamente á cargo de it>s capitanes D. José María Cenia y D. Julián López Muñoz, todo por disposición del Director general de artillería. En este estado , v colocados también ¡os batallones del bloqueo en las posiciones mas ventajosas , se rompió el fuego á los primeros

! albores del dia ; y dirigidos los primeros del cañón por la batería de brecha á la casa fuerte exterior en que termiñíiba

•el- camino cubierto, que desde la plaza tenían construido los ¡enemigos para guardar la única fuente de donde se surtían de agua , bastaron cinco solos cañonazos para que la desalojasen, obligándoles á retirarse á la plaza , á cuyo recinto quedó su guarnición reducida. Desde este momento fue menester va­riar de puntería , y tratar de dirigir los fuegos únicamente so­bre la plaza, con el objeto de abrir brecha en la parte de muralla que ofrecía mas acceso, y se había elegido ya como punto de ataque con anticipación , asi que sobre la casa que- apóyaha su derecha , como en efecto se principió i practicar con tan buen suceso , que apenas se disparaba un cañonazo qué no causase un estrago. Para oponer una resistencia á nuestra principal batería , reunió el enemigo toda su artille­ría y multiplicó sus fuegos, asi como los de fusilería; mas riada bastó á interrumpii; los nuestros , que cada vez mas certeros obraban sobre la muralla y casa contigua de la derecha los efectos mas terribles, sembrando éntrelos sitiarlos el espan­to ,í aumentado también con los fuegos de las otras baterías, •que pusieron dentro de la plaza porción de granadas, y los da fusilería de los tiradores que ocupaban las alturas inine- •díotasj Demolida en gran parte la casa de que se lleva hecha ¡mención , y abierta brecha en la muralla de su izquierda, di orden para que se preparasen las tropas que debían montar­la , si bien esta operación ofrecía todavía grandes riesgos y dificultades por la pendiente que había que vencer antes. Los batallones 1.» y 2.° de Alava y la quinta compañía del 6.°, que habian trabajado tanto en 28 dias de bloqueo riguroso, debían ser quienes hiciesen el último servicio para la rendí-5 cion de la plaza , y se eligieron de entre ellos las compañías para el asalto: cuatro del l.° se prepararon con ese objeto al mando de su segundo comandante D. Ubaldo Gómez; pero debiendo ser conducidas por D. Isidro Ruiz de Egüílaz, co­nocido por el cura de Dalló, que se había prestado á ir a su ¿cabeza : antes de emprender esta Tuerza su arriesgado mo­vimiento-,-íse determinó que avanzase úna mitad de la com­pañía de tiradores-del jirimer batallón mandada por el tenieute graduado de capitán D. Joan Andrés deldüya: 'a la voz eléctrica de viva el REY , que dio el citado Ruiz de Eguílaz , se prc-

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sentó este puñado de valientes al ^descubierto de los fuegos dél | enemigo , pasando por delante de nuestra batería : a su vista los redobló aquel de un modo horroroso; mas con desprecio de ellos y en medio de una lluvia de plomo , se desplega­ron en guerrilla con la misma serenidad y. maestría qué si fue­ra en un simulacro, continuando asi basta que indicado el. paso de carga se precipitaron; sobre todas las obras exterio­res. El cura de Dallo , que se había descubierto al mismo tiempo que la mitad de tiradores , quiso ostentar todavía mas su valor; y pasando á caballo al camino real , se dirigió por e l, con admiración de. cuantos lo observaban , hasta el puen­te v cásas inmediatas , y después' de haber dejado en ellas la citada fuerza , volvió á conducir la resta ule 'destinada a l asalto; pero no hubo necesidad de esta: los enemigos aleb­rados al aspecto de un rasgo de valor y de decisión , que^ solo es dado á los defensores de CAELOS V , desmayaron llan­ta tal punto, que cayéndoseles las armas de las manos ,nq pen­saron sino en implorar la indulgencia de los vencedores, y solicitaron la capitulación , que admitida según leugo manifes­tado á V. E , quedó la guarnición prisionera de guerra , Cot}- eediémlole por mi parte la preferencia en el cange; Los pri­sioneros hechos son los mismos que indiqué en mi primer parlé , asi que las piezas de artillería ocupadas ; mas debo expresar que la munición de que hablé allí consistía eu tSG.ÜhO cartuchos y TÜ’brrobas y media de pólvora á granel , y que ademas se ocuparon mas de mil balas de canon y granadal, con una infinidad de proyectiles y efectos 'pertenecientes ala artillería , según resulta por menor del inventarío recibido con Todas las formalidades debidas , por el Ministerio de cuenta y razón dé-artillería. Igualmente se encontraron en los alma­cenes de la guarnición sobre 04,000 raciones en tocino, tri­go y harinas; ocupando también todos los efectos del hospi­tal y de la botica de la guarnición, como igualmente consfa del 'inventario, formado con la misma escrupulosidad por ql pagador de ejército y gefe principal de la Real hacienda , ceq- cá dé'ffii cuartel general, D. Estanislao Francisco de Laúci- rica , que manifestó en esta ocasión el mayor zeto y actividad.

ta s ventajas enumeradas, y las que debe producir á la causa dél R E Í N. S. la ocupación de Peñacerrada , que no volverá ya á poder de los revolucionarios, no han costado mqs

- pérdida , si bien, nmy sensible ,, que la del .valúente subjenié^j,.:, té de artillería D. Juan Antonio Irazabal y un soldado muerp tos; chicó individuos de la clase de tropa del mismo cuerpo heridos , y un cadete del 1.® de Alava. ; i

Remito á V. E-,relación de los individuos que se han he- : citó Acreedores á la pensión vitalicia del real de vellón dia ­rio , y recomiendo a la clemencia del Soberano con lodo en- carecimienío la madre viuda del oficial de artillería difunto.

Todos cuantos cuerpos é individuos de todas las clases que tuvieron parte en la importante toma de Peñacerrada, Jténaron completamente sus deberes ; mas faltaría á la justi­cia sino diese un lugar preferente al Real cuerpo de artille­ría , que tan eficazmente cooperó á aquel triunfo ,. siguiendo él ejemplo y las órdenes de su dignísimo director el Mariscal de campo D. Joaquín Montenegro, que infatigable y con una solicitud extremada , intervino en todos los trabajos , y paiv ticijió de lodos los peligros, haciéndose digno de una parti­cular recoríiendacinn ; asi como lo es el citado primer coman­dante D. Rufino Román de Trobo, siendo igualmente dignus de mencionarse los capitanes D. José-María Cenra y D. Ju­lián López Muñoz , comandantes de las balerías del sitio, y Jos oficiales une con tanto acierto dirigieron los fuegos de la Brecha, a saber: el capitán graduado de coronel D JuanAn-, fhhjó Laplaza , el teniente D Pedro María Revello , el sub- téijiefile D. Juan Oriega y el sargento t.° Pedro Zarate; y asj mismo merecen la. consideración de S. M. el c o ron el: D.'-

’ Jo’sé María, Castro , , y el paptlíii) ,D, jVorberioi del ¿Baijrío^ ayudante de campo y secretario del Directorgen'eraly!icpmo; el capitán agregado al cuerpo D. Tomas Pavía , el coronel D José Joaquín de Aizquihel, comandante del tren , y el te­niente D. Pedro Garayaide , comandante de la compañía de zapadores agregada al mismo: el capellán D. Félix Urrecbo í ?* comisario D. José Ignacio de Aramburu, del -.mismo Real cuerpo , llenaron también respeclivamente sus 'deberes cqn la mayor exactitud. Los batallones 1.» y -2.° de Alava con la primera cqmpañta del 6 °. son también dignos de todo elo­gió , porque después de haber trabajado constantemente en el bloqueo de la plaza , fueron los que sostuvieron todo él fuego .hasta su rendición:, y muy : particularmente lo mqad de tiradores del 1.”, que cort el teniente D. JtraV Áñ-

Idoya-'a la cabeza., ocupó las obras exlerioros tsm de-Ó nodadami'ute., lo mismo- que el mencionado D. Isidro Ruiz aé |igu'daz , ,que dio ejemplo de valor.

El cuerpo de .ingenieros contrajo también su mérito en uconstrucción ‘de la batería dé brecha , que por su solirléz perfección ofrecía la mayor seguridad a los artilleros , no obs­tante el certero ruego de los enemigos, y deben nombrarsel«¡ capitanes D- Atanasio Billiers y I). Juan Nepomuceno Sevvert y el teniente D. Juan José Alzaga. El malhadado D Valentín Veñstegui, coipandanle gcuéral de Alava y el coronel gefe de brigada D. Feliciano Elguca, trabajaron también con el mayor zelo; durante el bloqueo de la plaza , y mientras el ataque cpntríbuveñd.o ¿oñ cuanto estuvo de su parle ó la rendición* El general gefe del E M. es acreedor á una mención partid cular, porqtle lia secundado mis providencias exaclainenle, d2n. do ademas por sí otras muy acertadas: todos los-ayudantes do tan distinguido cuerpo y adictos al mismo, han llenado tam­bién completamente sus deberes. Ultimamente, el 11.® batallón' d,e Navarra y los 30 caballos del misino'Reino , el 3.® de Guipúzcoa , ¿I 2 ° de Vizcaya y la caballería de Alava que fuera del cerco de la plaza cubrían las avenidas de Vitoria y demas puntos, se condujeron con el mayor valor, bajo el mando del Mariscal de campo D. José Antonio Goñi, conte- nicrtdo y rechazando a una columna enemiga , que desde Tre- viño venia i socorrer la plaza. Todo lo que pongo en cono­cimiento de V. E. para que si lo tiene á Lien lo eleve al Soberano de S. M. Dios guarde á V. E. muchos años. Cuar­tel general de Cirauqui -27 de Setiembre de’ 1837.—Excmo. Sr.—José de Urauga.—Excmo. Sr. Secretario de Estado y del Despacho de lá Guerra. ' ......... . . .. r - ...

PARTE NO OFICIAL.Noticias extranjeras. — INGLATERRA.

Grande es el bolín, que los liberales españoles han saca­do aprovechándose de la credulidad de los ingleses; y es pro-

• hable que hubiera sido mucho mayor á no ser por nuestras continua» intimaciones al público ingles durante tos últimos años , principalmente después de la presente guerra, en que no hemos dejado de amonestar á nuestros compalriplas que guar­den estrechamente sus bolsillos de las garras rapaces de los pedidores á prestado de España. A la verdad son muy libera^

je», en pedjfr .prestado; pero en cuanto al pago lo tienen por; un uso opuesto á la prScliéá liberal .y a sus' s e ti ti m iéht o Se 1 e - vados; y así no tan solamente los tenedores de crédito'ingles,1 sino también los desgraciados legionarios de Evans , han lies! gado á convencerse de ser este el modo de pensar de los lW’ Ferales,españoles, Esperamos que no faltará en la Cámara de los Comunes algún individúo del partgdo conservador que ten­ga la suficiente energía para hacer presente en las próximas, sesiones el caso en que se hallan eslas victimas de la cua-i druplc-alianza VVhig, en esta guerra de no-intcrvencion , y qije consiga, no tan solamente que se haga la justicia debida quq basta ahora no han podido obtener siendo súbditos de la co­rona inglesa; sino también el marcar con el sello de la repro-' baeion del parlamento la práctica deshonrosa de asalariarse nuestros compatriotas para asesinar á un pueblo que no está en guerra con la Inglaterra. ' (Hcralji.j

N O T I C I A S D E E S P A ÑA.La expedición se hallaba el i.° de Octubre en

Covarrubias, habiendo quedado algunas fuerzas ha­cia el Burgo de Osma. Espartero llegó á Lerraa coa su división muy disminuida y estropeada, confiando solamente en su caballería. Las tropas de S. M. unidas con la división de Zaratiegui esperaban al enemigo en las posiciones de Covarrubias; mas Espartero no se atrevió á aceptar la batalla que se le ofrecía. El aumento de las fuerzas realistas expedicu^arias es considerable. El enemigo sufre una deserción espantosa.

Cuartel Real de Covarrubias 1.® de Octubre.—"El día 16 no» trasladamos de Mondejar á Cliilaches: la divisiun de Cabrera entró en Güadalajara el 17. El 19 la caballería enemiga cargó á una pequeña párle de nuestra retaguardia ¡ pero fue brava­mente rechazada por el 1.® de Castilla. Allí tomamos posicio­nes ; mas Espartero no se atrevió á pasar adelante , y se con­tento con disparar algunos cohetes i fa congreve. El 21 vol­vimos á esperar á Espartero sobre Bdbuega y Atienza; pero

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no hubo medio de hacerle dhparar tm solo Uro. Pasaiqos a Peñaranda el 27 á ver, si ■&. aventuraba á seguirnos; pero tam­bién fue inútil. El mismo dia supimos que se aproximaba Za- .raliogui j procedente de, Vallailojid., El día 28 el rebelde Lo­renzo , que trató de oponerse á ZaruUeguí, quedó bien' es­carmentado como era de esperar. La columna revolucionaria fue derrotada y perseguida por espacio de legua y inedia. Al ■día siguiente S. ¡VI. y S- A. IV con el grueso de las fuerzas l)an venido á esta villa , donde se detendrán algunos días lias» la proveer de calzado a los batallones. Zaraticgui esta a cua­dro leguas en dirección de Peñaranda. Espartero no hace nin­gún movimiento. Sus tropas marchan tan estropeadas, que upos pucos lanceros nuestros que salieron ayer a divertirse, nada m as, volvieron con 14 prisioneros.”

’En la misma corta se lee el siguiente rasgo de generosi­dad que admirará la Europa. ”Enlre jos repetidos testimonios de mpgnpnimidad^ue el REY JPV S- ha dado en el curso de esta expedición no debe pasarse en silencio, que habiendo sido detenidos por una partida avanzada cerca de Alcolea el co­ronel de artillería inglesa Lacy agregado h la legación, el te­niente de la misma arma Croflon y el capitán de ingenieros Monlgomerri de la misma nación, a pesar de sus anteceden­tes que son bien notorios, no solo íueron puestos en libertad previa la declaración que hicieron por escrito de no volver, a lomar las armas contra el REY durante la presente lucha, sino que nuestro magnánimo Soberano no ha permitido que se re­conociesen sus papeles ni se abriesen sus baúles, previniendo que se les diese una credencial para su seguridad, hasta Ma­drid, y que fuesen tratados con el mayor deforo.”

Hasta aquí la carta del cuartel Real. Tal rasgo de grande­va no necesita comentarios. La relación sola del hecho es su ipayor elogio. Los periódicos de Madrid se han limitado á de­cir que los caballeros ingleses habían llegado b la Capital; pero procediendo con la mala fé que tienen de costumbre, hau omi­tido la circunstancia de que los tales caballeros deben su vi­da y su libertad á la generosidad de Carlos Y , y aun al­guno de los infames papeluchos se adelantó á dec ir, que La- cy y compañeros habían sido horrorosamente asesinados poft.

El mismo djee / "Todas las noticias están contestes en que hacia Cornudella ha habido una acción muy ventajosa a nues­tras armas. Sabemos dé positivo que solo en este pueblo mu­rieron á lo menos í!0 rebeldes.”

5 El batallón dél Principe de Asturias , ' 8¡» de Cataluña , al regreso de su feliz expedición hecha por el Ampurdan , llegó á la villa de Burga, donde al mismo tiempo que sirve de guar­nición á la plaza , descansan sus individuos de las fatigas in­separables de marchas tan largas.

ARAGON Zaragoza 26. ”EI que ipa los partes de. Orba, que se ha hecho mas fanfarrón y embustero que el mismo conde de Lucbana , que es el término á donde puede llegar la exa­geración , creerá que las facciones han sufrido un descalabro dé que solo en algunos meses pueden rehacerse ; pero lodo lia sido una ficción mal compaginada , porque el mismo par­

tiesexpresu que la caballería alcanzó á parte <ie la retaguar­dia de Cabrera ; y es claro que una pequeña parlé de la re­taguardia no es la facción de Cabrera, ni mueho menos to-

[üas las facciones , como lo fingió Orba , aumentándolo Cislué» y volviéndolo aumentar los periódicos de una manera uiults-

, limosa , y que como era de creer se ha desmentido á las po- .cas horas El hecho viene b reducirse, b que un grupo do mo­zos que se hahUia sacado de los pueblos, y de órdeu de Ca­blera marchaban desarmados en unión con su retaguardia para

,proceder á sti organización en el punto que pareciera conve­niente, fue sorprendido por la caballería del titulado brigadier Amor, que hizo algunos prisioneros, cogiendo al mismo tiem­po a los oficiales que iban encargados de formar un batallón con aquella gente. A esto se reducen lodos los triunfos de Oráa. Lo mejor es que ya nadie da crédito a los periódicos, y mucho menos a los partes de los generales, que mienten sin ningún género de miramiento.”

”La facción de Cabañero acaba de pasar hacia Borobia , pa­rece que con dirección al pueblo de la Cueva. Cabañero lle­va sobre GODO infantes y 400 caballos.”

”Por la parte de Cataluña y fronteras de este Reino Asoman algunos batallones facciosos , que no sabemos a dundo van,", ni con qué objeto, Llarigoslera , que no sabe estarse quieto, se ha situado ahora hacia Mora de Ebro, y allí permanece hace algunqs dias. '

la facción carlista. ¡ Que contraste tan significativo! ¡CARLOS V perdonando á sus mas crueles enemigos , y los generales re-

VALENCIA 22. ” Las cosas por acá han venida b parar ah extremo de que ya no dominamos sino las ¡dazas fuertes1. Los*

volucionarios cometiendo tropelías inauditas en los pueblos indefensos ! Las culta Europa colmará de bendiciones al pri­mero, y cargará b los segundos con todo el peso de sus ana­temas.

CATALUÑA. UrbiZtondo ha salido de Berga con dos ba­tallones y alguna caballería hacia el campo de Tarragona-;, El día 21 entró en Rerga un destacamento de artillería con

dos piezas de grueso calibre recientemente fundidas-por dis- , posición de la Junta.

El dia 22 entraron también en Berga los prisioneros hechos a. la patulea de Vi,eh, entre ellos un capitán.

En carta del mismo pueblo fecha del 21 se lee. ”No hay en España un puntó donde se goce de mayor tranquilidad que eii este. La administración esta perfectamente organiza­da , y el servicio se hace como en tiempo de paz. La cor­respondencia va y viene con la mayor regularidad. Los re­clutas se ejercitan en él manejo de las armas, y cuando se há perfeccionado su instrucción , marchan b incorporarse á los cuerpos.del. ejército. El barón de Meer, sabiendo que 10000 hombres le esperan en los puntos que desearía atacar, se abs­tiene de emprende* movimiento alguno, conservándose siem- ’ prq 4; buena distancia.”

Parece que eD los campos de Cornudella han conseguido los batallones de Cataluña un nuevo triuufo , cuyos detalles no han llegado todavía.

El ffapor de Barct loria ha hecho triunfar á O-Donell en los. campos. de Auqoain. La fortuna es que tpdas las victorias de la usurpación, sé consiguen solamente en los campos de la prensa periódica , que san un sinónimo, dp los espacios iina-* Binarios. ,

.El periódico de Cataluña que se tilulajia el Joven Obser­vador , Ir ¡i cambiado su nombre en el de; Restaurador Ca­tatan. , ' V " ' \ ” .

. Eslq periódica dice : que el mariscal de. campo D¡ Benito. Trl$f.ímjf hallaba, con; j^gtipó«. l¿liÍL>n<ys /le. su 4>y>^Pn e.nf las inmediaciones do Vich , y que O Juan Caslells oofl, aft' bnivl*. h ia.sA!!do.<ie.B.t.fi»JLOA. dirección, á. PrAt«-da Lituan o ,

facciosos tienen una junta gubernativa que manda en los Rei­nos de Aragón , Murcia y Valencia. Esta junta se compone •> delgrande de España Conde de Cirat, el Sr. Obispo de Orihue-, la, el Conde de San Milier , el Oidor de la audiencia de Za-; ragoza D. Joaquín Polo, y el Arcediano D. Francisco Sauz.”

GALICIA. Santiago 20. ” Los provinciales de Monterey han sufrido sin duda algún pequeño descalabro hacia las alturas de Uodro. No seria extraño, porque el gofe carlistas Ramos es atrevido , y cuenta con una fuerza de 3U0 infantes;^ 80 ca­ballos. Hace pocos dias que en los montes de la Mota' y Mal- colín cargaron á la caballería de los nacionales, haciéndoles al­gunos prisioneros que llevaron b Vitre.”

EXTREMADURA. Badajoz 16, ”Los tres oficiales que sabe- i ron de esta ciudad hace dos meses , y los que posteriormen­te han salido tanto de la clase militar como de ,1a de paisa­nos influyentes , han comenzado b organizar los pequeños gru-'; pos de facciosos que inundaban el país. Hoy se asegura que: hacia Candelario se ha presentado ya una fuerza de 400 in­fantes y 100 cabaljos. E sto , unido al mal espíritu del país,

jpndrb darnos que hacer y complicar mas y mas nuestra si­tuación , que no deja de ser al'presente muy embarazosa.” ?

”En el vecino Reino de Portugal sigue la.bruma. Por supues­to que los cartislas no ceden, ni tampoco los constitucionales; ! y entre tanto corre la sangre á torrentes. El otro dia los guar­dias nacionales de Lisboa se amotinaron , sin mas razón que por habérseles antojado hacerle asi , y el resultado del motín fue asesinar en las calles mas de 20 personas indefensas. En- ■ Iré tanto Remcchido, puesto á la cabeza de los migueiistas, organiza pacíficamente sus batallones , y recibe grupos.nume­rosos de desertores que abandonan las filas de Saldanha, igualmente que las <le Boiulin. Una fuerza! respetable mgiielis- la se ha presentado en actitud hostil sobre Braganza , y ape- ; ñas hay en. aquella ciudad; fuerzas bastantes para rontrarca- tarles.” ________ _

] CASTILLA. Segpn.lag»carta*de.Burgo*, ea-inmensa «I mí-, mero dageotea-qu*-se- presenta» ár tomar plata en nuestra!

Page 4: ARTICULO DE OFICIO. S. M. continúa sin novedad en su

filas. La .Tunta dé Castilla sigue desplegando una actividad sin limites, y ba conseguido poner sus batallones en ún pié muy respetable. ' " . j¡>í¿

MADRID 1.» de Octubre. ” Seguimos en la misma ihccrti- dnrabie sobre nuestra suerte futura. La retirada de DON CARLOS bacía Atienza , y la de Cabrera y Sanz en diferentes direc­ciones envuelven un misterio que á su tiempo se descubrirá. Aqui todo el mundo teme , que si Espartero y Gráa son tan inconsiderados que siguen el engañoso movimiento de los car­listas , sufrirán un golpe maestro , que en tales circunstancias puede ser decisivo.”

''Mientras tanto se están haciendo las elecciones. El justó- midió vá probando su nulidad en Madrid y en los alrededo­res. El partido exaltado ba triunfado en las juntas electorales, llevando al último extremo sus intrigas y maquinaciones. 'El justo-medio con todas sus ridiculas protestas de moralidad y buena fé, no ha perdonado á los medios mas indecorosos para asegurar su victoria , mas el oro de Mendizabal ha heebo pro­digios. Se ha levantado después una terrible polvoreda sobre la validez de las elecciones, y no se duda que casi todas son nulas.”

De Madrid escriben también, que el gobierno revoluciona­rio habia hecho pasear por las calles al grupo de muchachos inermes que sorprendió la caballería de 'Oria , reuniendo ade­mas un buen número de paisanos, que jamás habían perte­necido i las filas de CARLOS V , unos por viejos y otros por inútiles. De este modo han figurado como prisioneros carlistas todos los paisanos que en un radio de cinco leguas han si­do cogidos en los campos , mientras estaban ocupados en sus labores ; y que ni habían pensado en huir , porque ni pudo ocurriiles que llegase la ridiculez del gobierno y sus gehera- Jes , basta el extremo de tomar por gigantes h los molinos de viento , y á los frailes Benitos por endriagos y vestiglos.

eepresiíTente - jbséyFeliiT y 'MiraIléi(, Diputado Sécretírío.-u Cristóbal de Pascual, Diputado Secretario.” ' J ¿

¡ Pueblos,¿ó Navarra y tas Provincias exentas ! ¡ Veis ea que han venido á payar las promesas que tan solemnemente, os hizo el gobierno.usurpador de guardaros vuestros fueros y franquicias !'• ¡ Veis ahora el crédito que se merecían las pro.

'clamas y ampulosos manifiestos , con que la revolución pre­tendió haceros abandonar el estandarte sagrado de vuestro DIOS , vuestro REY y vuestra Patria !

La Reina viuda dijo á la faz del mundo , que serian invio­lablemente respetadas las leyey»forales , y las tradicciones qué os fueron legadas por la previsión y mérito de vuestros mai- vores . y sancionadas por vuestros Monarcas en la no in­terrumpida série de tantas generaciones. Sarsfield , Valdés y Quesada , y recientemente Jauregui y Espartero , en nombre del gobierno, adoptaron el mismo lenguage de seducción y de mentira, y os exhortaron á deponer las armas, protestando por cuanto hay de sagrado en el cielo y en la tierra , que 1» intención d.d gobierno no era la de vulnerar vuestros inelu­dibles der.-chos, derechos sacrosantos, adquiridos á fuerza de valor, de virtud , de proezas , de sangre y de merecimien­tos heroicos ; derechos emanados también de tratados muy so lemnes , que sirvieron de base á la unión de Navarra y Pro­vincias Vascongadas á la corona de Castilla ; derechos en fin; que solo pudo atropellar la mano de la revolución , injusta y destructora. j

Según un periódico de la frontera , el ministro de Cris-.; tina Bardaji ha dicho á uno de sus amigos entre otras cosas lo siguiente : ” El gobierno prohibió á los periódicos el dar noticias, y no ba podido menos de hacerlo, porque era pre­ciso sostener el espirita público. Prohibiendo, áda prensa ha­blar de los movimientos militares , el miuistérió lia Aeuidq un campo-libre.para decir cuanto le-Rlisise la g a u a r^ ^ ^ r i í t i tó f ' que hemos anunciado de oficio victorias sobre victorias Sin que nadie baya osado contradecirnos.” . .-7'-

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Ha caido todo el ministerio de Madrid esceplo Bardaji que queda en Estado. Perez , gefe político que fue de Madrid, ha sido nombrado para el Interior. Otro Perez ha entrado en Hacienda, Ulloa en Marina , Balanzal en Guerra, Caslejon en Gracia y Justicia. El tercero, quinto y sesto han renunciado.

La Gaceta de Madrid publica un decreto del tenor siguiente.

[_ < ¡ Bilbaínos! ¡ Derramad ahora vuestra sangre en de­fensa de un gobierno inmoral, que faltando i la fe de los tratados da en tierra de un solo golpe con vuestras institu-- cienes, con vuestros fueros y prerogativas, consagradas por,

sucesioy de los siglcs 1 ¡ Empeñaos ahora en. defender;.,unos muros en cuyo recinto os oprime y .vilipendia ese go­bierno de maldición ! ¡Besad ahora esa cuchilla infame , cor que hiere vuestro pecho , y ese terrible azote con que aílije i vuestra Patria ! ¡ Si no habéis querido vivir bajo los dulces, auspicios de una libertad bien entendida , sufrid ahora des-' graciados los efectos de una tiranía insoportable! ¡ Sacrificad' en hora buena vuestros bienes, vuestra sangre y-la de vues­tros hijos en las aras de esa libertad ficticia, que os encade-:¡ na al sangriento carro de la revolución ! ¡ Ahora es cuando

"Doña Isabel 11 , por la gracia de Dios y ’por la Constitu­ción de la monarquía española, Reina de las Españas , y du­rante su menor edad la Reina viuda Doña María Cristina de Rorbon , su augusta Madre , como Gobernadora del reino , á todos los que las presentes vieren y entendieren , sabed : Que las Cortes lian decretado y Nos sancionamos lo siguiente:”

” Las Cortes , en uso de sus facultades, han decretado:” ” ART. 1 ° Cesarán desde luego las diputaciones Torales de

Alava, Guipúzcoa y Vizcaya, estableciéndose en ellas dipu­taciones provinciales con arreglo á la Constitución y leyes vi­gentes.”. ” AlíT. 2.° Para suplir á estas diputaeionés ínterin que se ve­

rifica su elección, y para que, haga sos veces en los .traba-' jos preparatorias para esta , se formara' én cada provincia rín? diputación provisional presidida por el gefe político ó quien ’ le represeute, y compuesta de cuatro regidores déla capital,; y uno de cada uno de los cuatro pueblos de mayor vecin-^ dario entre los de la provincia , que estén constantemente1' libres de la dominación de, las tropas facciosas ; eligiendo los respectivos ayuntamientos á los regidores que han do compo­ner la diputación.” • ' '■ ■ ' . ‘ »

”ART. 3.a Se autoriza al Gobierno para que establezca ndua-, ñas en las eos as y fronteras de las tres provincias y -Nava»'} ra , dejando efcdedita la comunicación con las demas provin- cios del reino:J,' 1 :

” ARTÍ. 4,o EídSohierno establecerá en los puntos en une u.-¡

conoceréis á fondo vuestro e rro r, y toda la degradación, toda’ la torpeza y toda la miseria de vuestras ilusiones! | Ahora* veréis con la parte ilusa de San Sebastian, de Pamplona y de Vi­toria , la mala fe con que os hablaron vuestras pretendidas^ diputaciones , saliendo garantes de la conservación de vues-, tros fueros! ¡ Vereis que estas corporaciones estúpidas y de­generadas , ó eran cómplices de ese gobiéroo maquiábelico, ó eran una masa inerte y un juguete miserable de que se burlaban los reformistas de Li Corle ! Llegó el dia del des­

en g a ñ o , y quedan cumplidos nuestros vaticinio!. •••

ANUNCIOS.E d la vijla de Ochandiano del señorío dé Vizcaya, se ha-”

Ha vacante la plaza de Boticario. Los aspirantes deberán diri­girse á D. Antonio Arana, alcalde de aquel pueblo. Su po- 'blacion es de 1000 habitantes : la dotación del Boticario con­siste er, 400 ducados anuales sin incluirse 320 reales que se le dan por el hospital , donde por lo común se bailan muy pocos enfermos. Ademas, siempre se han incorporado los pue-

iblos de Ubidia y Olaeta, que aumentan su dotación.Se previene á D. Remigio Labreda, cuyo paradero seig-

•j : .niir>,üi'oiilíni récojer papeles interesantes que se le " Director de la Imprenta Real o i sus

EN LA IMPRENTA REAL.