7
Asesino Cereal de Francisco Olivie (Adaptación Colectiva) Personajes: Asesino Serial 1 (A1): Gánster de los años cuarenta, muy bien vestido, y muy elocuente. Asesino Serial 2 (A2): Igual que el anterior, sólo que tiende a ser más calmado. Muchacha (M): Guapa, sensual y de clase alta, asesina serial emergente. Reportera: Voz grabada de una reportera siempre en off, tendrá que escucharse como un audio de mediana calidad. Escenario: Un rincón descuidado de un parque por la noche: un poste de luz encendido apenas, una banca, y varios botes de basura con cosas desperdigadas, un cielo con luna llena cubierta por muchas nubes y los edificios de una metrópoli dejándose ver entre los árboles hasta atrás. Se escucha música en una vieja radio de los años cuarenta escondida entre los botes, la música también es vieja. A1 está sentado en la banca, preparando sus herramientas de trabajo, afilando sus navajas con una cinta de cuero. De cuando en cuando revisa su reloj de bolsillo, luce un poco impaciente. De repente la música se corta y comienza un reporte de último momento. Reportera: (En off) Interrumpimos su programación de rutina para traerles un boletín de último momento: El conocido homicida “Angelito de Papá” amenazó nuevamente con llevar a cabo uno de sus atroces crímenes. Recomendamos a nuestro auditorio tener mucha precaución al transitar por la noche. Como bien saben, Daddy’s Angel gusta de matar parejas jóvenes alrededor de las ocho treinta. Distintas agencias internacionales continúan tras su pista. En punto de la hora le tendremos más información. La música reinicia su curso, A1 jala la clavija de la radio, un poco molesto. A1: (Arremedando) ¡A las ocho treinta, porque si mato después y llego a la casa tarde mi papá me regaña! (Con desdén) Asesinos seriales modernos… ¡ya ni se esfuerzan! (Mira su reloj, preocupado) Ni tampoco las víctimas, ya son ocho y cuarto. Se escucha un ruido. A1 se oculta, cuchillo en mano. Entra A2 cargando un portafolio, el cual coloca sobre los botes de basura. Encuentra la radio y se da cuenta que está desconectada, sigue el cable y la vuelve a conectar, la música reinicia, regresa a abrir su portafolio y empieza a sacar unas fotos de su próxima víctima. A1 lo ha reconocido y sale de su escondite, A2, concentrado, no lo ve. A1 desconecta bruscamente la radio. A1: (Serio) Tú ¿qué haces aquí? A2: (Sin inmutarse) Ah, eres tú. (Regresa a preparar sus cosas, tranquilo) Nada, ¿tú qué haces? A1: (Exasperado) ¿Qué no es obvio? Espero una víctima. A2: Ah ya. Pues te tengo una mala noticia. Mira (le estira un documento doblado), aparté el lugar de las ocho treinta a las nueve.

Asesino Cereal (Adaptada)

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Asesino Cereal (Adaptada)

Asesino Cereal de Francisco Olivie

(Adaptación Colectiva)

Personajes:

Asesino Serial 1 (A1): Gánster de los años cuarenta, muy bien vestido, y muy elocuente.

Asesino Serial 2 (A2): Igual que el anterior, sólo que tiende a ser más calmado.

Muchacha (M): Guapa, sensual y de clase alta, asesina serial emergente.

Reportera: Voz grabada de una reportera siempre en off, tendrá que escucharse como un audio de mediana calidad.

Escenario: Un rincón descuidado de un parque por la noche: un poste de luz encendido apenas, una banca, y varios botes de basura con cosas desperdigadas, un cielo con luna llena cubierta por muchas nubes y los edificios de una metrópoli dejándose ver entre los árboles hasta atrás. Se escucha música en una vieja radio de los años cuarenta escondida entre los botes, la música también es vieja. A1 está sentado en la banca, preparando sus herramientas de trabajo, afilando sus navajas con una cinta de cuero. De cuando en cuando revisa su reloj de bolsillo, luce un poco impaciente. De repente la música se corta y comienza un reporte de último momento.

Reportera: (En off) Interrumpimos su programación de rutina para traerles un boletín de último momento: El conocido homicida “Angelito de Papá” amenazó nuevamente con llevar a cabo uno de sus atroces crímenes. Recomendamos a nuestro auditorio tener mucha precaución al transitar por la noche. Como bien saben, Daddy’s Angel gusta de matar parejas jóvenes alrededor de las ocho treinta. Distintas agencias internacionales continúan tras su pista. En punto de la hora le tendremos más información.

La música reinicia su curso, A1 jala la clavija de la radio, un poco molesto.

A1: (Arremedando) ¡A las ocho treinta, porque si mato después y llego a la casa tarde mi papá me regaña! (Con desdén) Asesinos seriales modernos… ¡ya ni se esfuerzan! (Mira su reloj, preocupado) Ni tampoco las víctimas, ya son ocho y cuarto.

Se escucha un ruido. A1 se oculta, cuchillo en mano. Entra A2 cargando un portafolio, el cual coloca sobre los botes de basura. Encuentra la radio y se da cuenta que está desconectada, sigue el cable y la vuelve a conectar, la música reinicia, regresa a abrir su portafolio y empieza a sacar unas fotos de su próxima víctima. A1 lo ha reconocido y sale de su escondite, A2, concentrado, no lo ve. A1 desconecta bruscamente la radio.

A1: (Serio) Tú ¿qué haces aquí?

A2: (Sin inmutarse) Ah, eres tú. (Regresa a preparar sus cosas, tranquilo) Nada, ¿tú qué haces?

A1: (Exasperado) ¿Qué no es obvio? Espero una víctima.

A2: Ah ya. Pues te tengo una mala noticia. Mira (le estira un documento doblado), aparté el lugar de las ocho treinta a las nueve.

Page 2: Asesino Cereal (Adaptada)

A1: (Mira el documento incrédulo) Pues… (saca su reloj para checarlo) Yo lo aparté de las ocho a las ocho treinta… (Le enseña su reloj) ¡Y mira! Todavía no son.

A2: (Inspeccionando el reloj) Cierto. (Regresa a sus cosas) Bueno pues. Pero termina rápido y no ensucies demasiado porque después me toca (Pausa corta).

A1: (Preocupado) Hay un problema.

A2: No me digas que te da miedo encontrarte al Angelito de Papá. Escuché que va a matar hoy… (mira su reloj) en diez minutos.

A1: (Confiado) ¡No, qué va! ¡Ese remedo de asesino me trae sin cuidado! (Preocupado otra vez)…el problema es… que mi víctima aún no ha llegado.

A2: Así son las víctimas de hoy día, ya no tienen respeto por un asesino serial decente.

A1: Sí. Las cosas ya no son como antes. Antes eran tan puntuales que hasta daba tiempo de echarse un taco.

A2: ¿De riñón?

A1: (Elevando la voz) ¡De res!

A2: (Un poco sorprendido) Oh, lo siento. Que ya no eres de esos.

A1: (Impaciente)…Mas ya casi nunca llegan temprano.

A2: (Suspira) Así son las cosas. Las buenas costumbres se han perdido.

A1: (Desesperado) ¿Qué hago? Si no mato hoy tendré que esperarme otras dos semanas.

A2: ¿Y eso por qué?

A1: Porque yo sólo mato cada quince días.

A2: Ah, mi buen amigo. Por eso estás preocupado. Deberías hacerle como yo y matar cada jueves.

A1: ¿Cada jueves?

A2: Sí. Cada semana. ¿Quién te manda cobrar por quincena?

A1: Es que ya no hay tantas como antes, y no quiero que la ciudad se aburra.

Se escuchan pasos. Los dos asesinos cruzan una mirada de entendimiento (errónea) y se esconden. Entra M, espera un poco como si esperara a alguien. A1 y A2 salen de su escondite sigilosamente, cuchillo en mano, y toman por sorpresa a la mujer.

A1 y A2: ¿A dónde en esta noche tan fría? (Se miran entre sí) ¡Qué estás haciendo!

A1 y A2 dejan a la víctima un momento y se hallan al borde de una pelea. En las discusiones siguientes, ninguno de los dos interrumpe realmente al otro, por lo que la conversación adquiere suma fluidez.

A1: (Tratando de calmar las cosas) Un momento, creo que ha surgido una confusión.

A2: Estoy de acuerdo.

A1: Es una situación muy complicada… Ambos hemos venido a matar…

A2: (Preocupado por que la víctima los escuche, mas demasiado ecuánime) Sé más discreto.

A1: (Sin inmutarse) Lo siento. (Cubre los oídos de la mujer con las manos y recuperando el hilo de su exposición) Ambos hemos venido a matar, pero parece haber una confusión con respecto a la víctima… (Comprensivo) Lo cual es enteramente comprensible…

A2: Sucede todo el tiempo…

Page 3: Asesino Cereal (Adaptada)

A1: …Pero ambos somos profesionales… (A2 asiente) Me temo que no hay mejor solución…

A2: Es irremediable.

A1 quita sus manos de los oídos de M.

A1 y A2: Tendré que matarla primero (Se miran) ¿Qué? (Titubean) ¡Creí que habíamos solucionado la confusión! (Bufan desesperados).

M abre la boca pero no encuentra palabras, no parece saber qué decir para detener la pelea.

A1: (Mostrando su reloj, exasperado) Yo cité a esta mujer a las ocho.

A2: (Haciendo lo mismo) Yo la cité a las ocho treinta.

A1: Ha llegado tarde.

A2: Llegó temprano.

A1: ¡Insisto!

A2: ¡Reitero!

A1: ¡Estás como operado del cerebro si crees que te la voy a dejar! ¡Yo mato cada quince días!

A2: Y yo cada jueves, y no me quejo.

M hace la mano de tener una idea, pero los asesinos no la dejan hablar.

A1: Mira, ni Hannibal Lecter me quita los clientes.

A2: (Sarcástico) ¡Oh, perdone Ud. Sr. Hannibal Lecter, perdón por quitarle a mi víctima!

M: (Un poco harta) Si quieren regreso al rato.

Los asesinos la miran pensativo, y luego se miran. Hacen una señal mutua de entendimiento.

A1: (Dirigiéndose a M) Un momento, tú puedes aclarar esto. ¿No te quedaste de ver conmigo?

M: Sí, a las ocho.

A2: ¿Y no te quedaste de ver conmigo a las ocho treinta?

M: También.

Los asesinos se miran con desconcierto.

A1: ¡A ver, a ver! ¿Te quedaste de ver con los dos?

M: Sí.

A2: ¿Y por qué el mismo día?

A1: ¿Y con media hora de diferencia?

M: Porque pensé que en treinta minutos ya habría terminado con uno para seguir con el otro.

A1: (Escandalizado) ¡Impúdica!

A2: (Igual) ¡Golosa!

M: (Exasperada) Bueno, qué ¿se van a quedar ahí paradotes sin hacer nada?

A1: (Chasquea los dedos) ¡Lo tengo! Como te quedaste de ver conmigo primero, tengo derechos de antigüedad, así que me toca a mí primero (Se dispone a tomar a la muchacha, A2 lo interrumpe)

A2: ¡Objeción! No tan deprisa. (Saca un gigantesco libro de quién sabe dónde) El código del asesino serial, artículo cinco, apartado 66… (Saca unos lentes de su bolsillo) Que en caso de que el asesino y su víctima correspondiente no se encuentren en el lugar y tiempo acordados, previa cita, el derecho de propiedad por antigüedad que otorga al asesino en cuestión derecho exclusivo de homicidio por autoría propia, queda anulado.

Page 4: Asesino Cereal (Adaptada)

A1: Pero…

A2: (Cortándolo por primera vez en la obra, alzando la voz) …permitiendo, que un segundo asesino que también haya quedado con la víctima correspondiente, previa cita, adquiera completo derecho de autoría sobre el homicidio planeado. (Cierra el libro de un golpe. Satisfecho) ¿Qué tal?

A1: (Irritado) Ese código sólo aplica en Costa Rica y Guanajuato.

Parece que A2 volverá a corregirlo, pero M interrumpe la discusión.

M: ¡Chicos, chicos! No se peleen. Hay que negociar un acuerdo.

A1: ¿Negociar? ¿Con este remedo de asesino?

A2: Remedo de asesino que mata todos los jueves.

A1 reacciona ante el golpe bajo.

M: (Al público, encogiéndose de hombros) Hombres. (A los asesinos) ¡Muchachos! Les propongo un trato.

A2: ¿Un trato?

A1: ¿Qué clase de trato?

M: (Sentándose) Me matará el que demuestre ser el mejor asesino serial.

Los asesinos dudan un instante. Se miran desafiantes y estrechan las manos.

A1 y A2: ¡Trato hecho!

A1 corre a su maleta y extrae un gran número de recortes de periódico y papeles mientras que A2 saca de la nada un escritorio y lo coloca frente a M, quien también ha sacado unos lentes de su bolsillo. A1 le muestra los papeles a M.

A1: ¡Este es mi currículum! (Señalándole una foto) ¡Mira, ésta fue de mi primer crimen!

M: Mmm… interesante… Mataste una gran cantidad de… ¿qué son?

A1: Hormigas, y las maté yo solo.

A2: (Empujando a A1) ¡Eso no es nada! Mira, estas fue mi primer fechoría.

M: Vaya, aquí dice que colocaste una bomba sin avisarle a nadie. ¿Qué es esto?

A2: El tinaco del vecino. Le instalé una bomba hidráulica a su tubería y luego se la quité. Esa fue mi fechoría. Ja, ja, ja.

M: (Nada impresionada) ¿Eso es todo lo que tienen?

A1: (Volviendo a ponerse hasta adelante) ¡Éstas son mis cartas de recomendación! Del Instituto Wallace para asesinos súper dotados!

A2: Tú sí te quedaste.

A1: (Se coloca sus lentes, satisfecho) ¿Qué tal?

Pausa corta.

M: (A A2) ¿Y las tuyas?

A2: ¿Las mías?

M: ¡Tus cartas de recomendación!

A2: (Evitante) Ah… yo no traje

A2 esconde un papel tras de sí con ambas manos sigilosamente.

A1: ¿Cómo que no trajiste?

A1 mira lo que A2 esconde y se lo arrebata. A2 intenta impedir que el otro lo lea en voz alta pero este último es más veloz.

Page 5: Asesino Cereal (Adaptada)

A1: (Leyendo en voz alta) Ingeniero en Alta Repostería con especialidad en pasteles de boda y todo tipo de eventos sociales (Incrédulo) ¡Te cae!

A2: Al menos yo sí terminé una carrera… y mato todos los jueves.

M: No me convencen. Mejor me voy (se levanta).

A1: (A M, Angustiado) ¿Qué podemos hacer? (A A2, Desesperado) ¿Qué vamos a hacer? (A sí mismo, en crisis) ¡Qué voy a hacer!

A1 cae sentado y comienza a mecerse.

A2: ¡Danos otra oportunidad!

M duda un instante

M: ¿Qué hora tienen?

A1: (Meciéndose aún en crisis, tiritando) Ella quiere saber qué hora tenemos… (Comienza a chuparse el dedo).

A2: (Mirando su reloj) Las ocho veinticinco.

M: (Regresando a sentarse) Está bien. Todavía tengo tiempo.

A2: (Aliviado, estrechando la mano de M) ¡Muchísimas gracias! (A2 mira a A1, que sigue meciéndose y chupándose el dedo, A2 lo patea) ¡Levántate! Nos va a dar otra oportunidad.

A1 lo mira sin creerlo, después se levanta y pega un brinco de emoción, celebrando con un grito. Al instante se percata de que ha perdido la compostura y trata de recuperarla.

A1: (Sereno) Es decir… (carraspea) Muchas gracias.

A2: ¿Qué quieres que hagamos?

M: Me tendrán que contar de qué manera piensa matarme cada uno, y me matará aquél que lo narre mejor y me convenza.

A2: Ok, yo empiezo. (Saca de su maleta una peluca rubia y un vestido de mujer. A A1) Ayúdame (Le da los objetos).

A1: ¿Y esto?

A2: Tú vas a ser la víctima, es sólo una representación.

M: (Sacando su reloj, mirándolo) Dos minutos caballero, a partir de… ya.

Mientras tanto, A1, lo más rápido que puede, se ha puesto el vestido y la peluca.

A1: ¡Listo!

Conforme va describiendo las acciones, a2 las irá realizando.

A2: (Hablando siempre con voz de galán) Si yo te matara, primero te seduciría. Te agarraría los pechos.

A1: (Siempre serio) ¡Ay!

A2: Te acariciaría las piernas.

A1: ¡Ay!

A2: Te agarraría las nalgas con firmeza.

A1: ¡Así, papito, así!

A2: (Seguido) No es para tanto.

A1: (Sin perder el hilo) Lo siento, me dejé llevar.

A2: (Retomando la actuación) Te besaría con pasión.

A1: (Piensa un momento) Sólo por pura curiosidad… quieres que te bese ambos labios, o que ponga todas mis energías en uno solo.

M: (Apurándolos) Treinta segundos…

Page 6: Asesino Cereal (Adaptada)

A2: (Comienza a hablar más rápido, dramático) Y entonces, cuando ya estuvieras descuidada y a mi merced, te miraría los ojos, tú mirarías los míos, nos miraríamos mutuamente porque tú sabrías lo que sucedería a continuación, verías salir el cuchillo cebollero de mi mano, (llegando al clímax) lo verías alzarse y…

M: (Interrumpiéndolo) ¡Tiempo! El que sigue.

A2 se nota desilusionado. A1 se quita el vestido y la peluca tan rápido como se los puso y se lo pasa a A1, quien se lo pone con resignación. Igual que antes, conforme A1 narra las acciones, las va realizando.

A1: (Actuando) Yo, para matarte, primero te invitaría una copa… que ya habría preparado con un poderoso narcótico.

A2: (Actuando, serio) ¡Por Dios! ¡Siento por mis venas un poderoso narcótico!

A1: (Igual) No te asustes. Ya se te pasará.

A2: (Temeroso, lanzándose a los brazos de A1) Quiero ir a casa.

A1: (Acariciando su cabello) Ten calma.

A2: Quiero…

A1: Dime, te daré lo que deseas.

A2: … ¡guacarear! (Hace mueca de aguantar el vómito en su boca)

A1: Lo que tú quieras… (reacciona) ¡Qué!

A2: (Apenas aguantando) ¡Cubeta!

A1 corre por una cubeta y se la proporciona a A2, éste la inspecciona y la coloca bocabajo en el piso. Se sienta en ella.

A1: (Desconcertado) Qué ¿no ibas a vomitar?

A2: Para nada, soy un profesional.

M: (Mirando el reloj) ¡Treinta segundos!

A1: (Rápido) Ya bajo los efectos de la droga, te llevaría a mi departamento, te pondría sobre la cama…

A2: Léeme un cuento.

A1: (Ignorándolo) …me saltaría la parte del cuento, te amarraría a la cama y sacaría mis tijeras de pollero. Te cortaría cada uno de tus dedos y después se los enviaría a tu amado cada primero de mes.

A2: O cada jueves (Sonríe inocente).

M: ¡Tiempo! (Negando con la cabeza, severa) ¿Por qué ya no hay asesinos seriales serios en este mundo? (Se levanta, saca de su bolso un lápiz labial y se pinta la boca) Buen intento muchachos, sigan practicando (Al verlos deprimidos) ¡No, no se sientan mal! Hicieron su mejor esfuerzo.

M se acerca a ambos asesinos y los besa en la boca. Ellos se notan muy tristes, sollozan.

M: Son las ocho treinta. Me voy, porque a mi papá no le gusta que esté fuera tan tarde. Dice que soy su ángel. (Se dispone a marcharse. Se detiene y voltea a mirarlos) ¿Saben cómo los mataría yo, si fuera asesina serial?

A1: (Triste) ¿Cómo?

Ninguno de los asesinos reaccionará ante esta historia, al contrario, la escucharán detenidamente.

M: Primero los citaría a los dos en el mismo lugar, después haría que se pelearan por el derecho de matarme y luego, después de verlos hacer el ridículo, los besaría con un labial envenenado, me quitaría el plástico de protección de la boca (Lo hace), y me marcharía a escuchar el reportaje de mi nuevo crimen.

Page 7: Asesino Cereal (Adaptada)

Los asesinos analizan detenidamente el relato y, sin inmutarse, aceptan su fatídico destino. Ambos hablan con suma fluidez.

A1: Por supuesto.

A2: Qué buena idea.

A1: Nunca se me habría ocurrido.

A2: Es un plan infalible.

A1: Qué mala pata.

A2: Qué mala suerte.

A1 y A2 Se miran y estrechan sus manos.

A1: Bueno, pues fue un placer.

A2: No, para nada, el placer es todo mío.

A1: (A M, hace una reverencia) Permiso.

A1 se desploma, muerto. A2 no se ha dado cuenta, está probando la sustancia que tiene en los labios.

A2: ¿Qué es? (A M) ¿Menta?

M carraspea, señala al cadáver de A1.

A1: (Apenado) Oh, lo siento.

A2 se desploma, está muerto.

M saca de su bolso de mano una bolsa con hojuelas de maíz azucaradas y empieza a comerlas. Mira complacida los cadáveres de los asesinos. Les tira un beso. Echa a andar despacio al mismo tiempo que la luz baja lentamente. Se detiene a conectar la radio.

Reportera: Notica de último minuto. “El Angelito de papá” volvió a atacar, tal como lo prometió. El crimen se perpetró en el parque principal. Esta vez, la víctima fue una pareja de homosexuales. En punto de la hora le tendremos más detalles.

FIN