15
MÓDULO I ASISTENCIA EN MONTAÑA

ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

  • Upload
    others

  • View
    3

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

25

MÓDULO I

ASISTENCIA EN MONTAÑA

Page 2: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

Medicina en situaciones extremas I

26

Page 3: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

27

1. INTRODUCCIÓNHace más de 50 años de la primera ascensión documentada al Everest o

Chomolungma (la diosa madre de los habitantes del Himalaya, como lo llaman los tibetanos), el 29 de mayo de 1953 por Tenzing Norgay (el serpa tibetano) y Edmund Hillary (británico-neozelandés), se ha visto incrementada la importan-cia del montañismo en España y el mundo, en el número de aficionados que lo practican, en la diversidad de actividades, y con ello el número de accidentes, por lo que, para lograr una asistencia precoz y con ciertas garantías, son necesarios una serie de medios y técnicas aplicadas en situaciones y lugares de muy difícil acceso.

Por ello y debido a la orografía de España (en la que en muchos lugares se puede practicar el mismo), es muy fácil que en nuestra carrera profesional nos encontremos con personas con alguna patología producida por este tipo de actividades.

Entre estas actividades de ries-go podemos hablar del alpinismo, la escalada, el barranquismo, el esquí y el snowboard, el buceo en montaña (ibones), el rafting, el parapente, la espeleología, las BTT (bicicletas de montaña), todas ellas con múltiples opciones y variantes.

Aspectos específicos de la asistencia sanitaria

Capítulo 1.1

ASPECTOS ESPECÍFICOSDE LA ASISTENCIA SANITARIA

Carlos F. Rodrigo Arrastio y Ricardo Navarro Suay

Page 4: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

Medicina en situaciones extremas I

28

En España, el 55% de los accidentes de montaña se producen en el Pirineo, de éstos, el 37% se produce en el Pirineo aragonés. Las lesiones más frecuen-tes son los traumatismos, en especial los de miembros inferiores (43%). La ma-yoría de los accidentados proceden de las Comunidades Autónomas de Madrid (15,90%), Islas Baleares (6,73%) y Zaragoza (5,34%). En el año 2015, un total de 103 fallecidos, 502 heridos y 958 personas ilesas fueron los registros de las 920 operaciones de rescate que la Guardia Civil llevó a cabo.

Este es el reto planteado al médico, al profesional sanitario y al sistema de salud en general, ante el que tenemos que responder con una buena formación médica y física, en el que el fonendoscopio y el cordino deben formar un equipo inseparable.

2. ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA MEDICINA DE MONTAÑA EN ESPAÑA

Ya en tiempos de los íberos y, posteriormente los romanos se construyeron los primeros albergues para el abrigo y ayuda de los viajeros que eran sorprendi-dos por tormentas, accidentes o ataques de animales, entre otras causas.

Siglos más tarde, las Órdenes Militares, como la de los Hospitalarios, iniciaron la construcción de los antiguos Hospicios u Hospitales, también con la misión de socorrer a los peregrinos o viajeros que se internaban en la montaña. También serían los primeros en utilizar perros, como el Mastín del Pirineo o el San Bernardo, para defenderse de los animales, orientarse o en la búsqueda de heridos. Aparecían los primeros grupos de rescate.

Podríamos remontarnos a la historia de la conquista española en Améri-ca, cuando nuestras tropas llegan a lo que ahora es Perú, Bolivia, Ecuador, y tienen que enfrentarse a problemas médicos por la altura, (mal de altura o de puna), como describe el Padre Acosta en su Historia natural y moral de las Indias. Incluso se cuentan problemas de descendencia de los conquistadores en Potosí (4.267 mts.), mientras que los na-tivos no presentaban estas alteraciones.

También se conocían los proble-mas de las lesiones por frío o despeña-miento, en los Tercios Españoles, a tra-vés del cirujano Ambrosio Paré en su libro Consideraciones de las heridas.

Se pueden considerar como los padres de la medicina de montaña en España, al doctor catalán D. Manuel Font

Page 5: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

29

i Torné, que pública en el año 1900, su trabajo, El mal de montaña, y sobre todo, al Dr. Ribó i Rius, que en 1929 imparte el cursillo sobre Primeros auxilios en los accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios, así como el material de cura más adecuado para la ascensión.

La Medicina Militar también tiene un destacado papel en nombre de D. José Mª Serrano Vicens, el Coronel sarrio, médico militar y alpinista, por la experiencia recogida en las múltiples instrucciones de las tropas de montaña, en aspectos como las atenciones en montaña, evacuaciones y rescate, recogido en los Apuntes de primeros auxilios en montaña.

En 1965, la Federación Española de Montañismo ingresa en la CISA-IKAR (Comisión Internacional de Socorros Alpinos o Internationale Kommisio-nen für Alpine Rettungswessen). Integra 4 comisiones: rescate terrestre, rescate aéreo, avalanchas y médica.

Fue el Dr. Augusto Castelló Roca, asesor médico de la Federación Espa-ñola de Montañismo, el primero en representar a España en la CISA. Además en su centro del INEF, estudia a numerosos montañeros, llegando a la conclusión que sus consumos de O2 son inferiores a otros deportistas. También organiza las Primeras Jornadas de Medicina de Montaña en el año 1972, en Barcelona.

A principios de los años 70, se crea el Servicio Nacional de Rescate en Montaña, formado por personal de la Dirección General de la Guardia Civil, el antiguo Ministerio del Aire y la Federación Española de Montañismo, aunque posteriormente desapareció tras la transición.

Posteriormente en los años 80 y 90 se desarrollan los grupos de rescate, como los de la Guardia Civil que cuentan con 23 unidades repartidas por toda España. Los bomberos complementan en Cataluña y en Navarra a estos grupos. En el País Vasco los grupos de rescate de la Ertzainza, y en Asturias el CEISPA. Se modernizan los medios, y se generaliza como medio de rescate el helicópte-ro. Así mismo, estos aparatos se van medicalizando, tanto a nivel de ma-terial como del personal. Para ello se crean cursos para formar a mé-dicos y enfermeros en la patología de montaña, el rescate, y así poder acompañar sin problemas a los res-catadores.

Aspectos específicos de la asistencia sanitaria

Page 6: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

Medicina en situaciones extremas I

30

3. CARACTERÍSTICAS DEL MEDIO MONTAÑOSO3.1 AGENTES ATMOSFÉRICOS: Son típicos los cambios rápidos de las

condiciones climáticas. Hablaremos de:a.- Temperatura: Que de-

pende de la altitud (⇓6.5ºC/1000 mts), la latitud, la estación del año, la continentalidad, y la gran variabilidad entre el día y la no-che.

b.- Presión: Es el peso del aire sobre la superficie. Varía con la altura (⇓1mb/8.3 mts), dis-minuye la cantidad de oxígeno. Existen oscilaciones anuales: en España es máximo en invierno y mínimo en verano. Influye en el rendimiento físico.

c.- Nubosidad: • Nubes altas: 5-13 km. Se llaman cirros, cirroestratos, cirrocúmulos. • Nubes medias: 2-6 km. Son: Alto, altoestratos, altocúmulos.• Nubes bajas: <2 km. Son: Estratos, estratocúmulos, cúmulos, nim-boestratos, cumulolimbos. • Nieblas: Cuando contactan con la superficie.

d.- Otros: Humedad, viento, precipitaciones (son más frecuentes, al actuar como barreras sobre las nubes), tormentas.

3.2 EL TERRENO: Podemos definir varias zonas montañosas en España:a.- Alta montaña: Altitud > 2000 m. Cambios de temperatura frecuentes y

bruscos. Constitución rocosa y ausencia de vegetación.b.- Media montaña: Altitud entre 1000 y 2000 m. Constitución rocosa,

pastos naturales, bosques.c.- Baja montaña: Altitud entre 500 y 1000 m. Perfil poco abrupto.

4. PRINCIPALES RIESGOS EN MONTAÑA4.1 POR LAS CONDICIONES METEOROLÓGICAS

a.- Rayos: Más frecuentes en verano y al mediodía. Puede afectar en forma de impacto directo o corrientes de tierra. Protegerse abandonando los bordes de las aristas, picos, corrientes de aire o agua, árboles aislados. No usar radio o flash de cámaras.

Page 7: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

31

b.- Niebla: Puede favorecer el mareo, la desorientación y la pérdida. Es útil el uso de brújula y GPS.

c.- Frío: Favorece la aparición de hipotermia, congelaciones.

Factor Windchill: También de-nominado sensación térmica. La com-binación del viento y humedad, va a potenciar la producción de congela-ciones a temperaturas a las que nor-malmente no se darían.

d.- Sol y calor: Son factores que producen deshidratación, quemaduras, conjuntivitis, insolación, golpe de calor.

4.2 POR EL TERRENOa.- Caída de rocas y hielo: Más frecuente en verano y horas centrales del

día. Protección con casco, observación del terreno.b.- Grietas: En especial en invierno, al estar cubiertas de nieve.c.- Altitud: A alturas > 3000 m. puede aparecer el Síndrome del mal de

altura.d.- Aludes: Pueden clasificarse en:

• De superficie: Una capa de nieve se desliza sobre otra. • De fondo: Se desliza la nieve sobre la superficie.

Existen unos factores que favorecen la aparición de los aludes:

- La estructura del manto de nieve: Caída de nieve reciente sobre escar-cha nocturna, placas de hielo, nieve vieja.

- La pendiente: Más frecuente las de 30-50º.- El terreno: En puntos de inflexión, pendientes cóncavas.- Temperatura y orientación de las laderas: Calentamiento, laderas so-

leadas.- Cantidad de precipitaciones: 50 m/24h: riesgo local avalancha. 100

cms/48h: peligro general elevado. 150 m/72h: peligro general muy alto.- Viento dominante: puede formar placas de viento o cornisas.- Efectos mecánicos: caídas de piedras, vibraciones (gritos, aviones),

paso de personas y las huellas trazadas.

Los aludes pueden ser, a su vez, de nieve polvo, húmeda, placas.

Aspectos específicos de la asistencia sanitaria

Page 8: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

Medicina en situaciones extremas I

32

4.3 POR LA PERSONAa.- La edad: La mayoría de las personas que realizan montañismo suelen

estar comprendidas en la franja de los 12-60 años. Pero cada vez son más las per-sonas con edades extremas que realizan esta actividad, lo que puede favorecer la aparición de ciertas patologías o agravar el pronóstico en caso de accidente.

b.- El sexo: no hay mayor diferencia que la que puede dar la condición física de cada uno.

c.- Escasa preparación técnica, falta de experiencia, desconocimiento de la zona.

d.- El entrenamiento físico y las condiciones previas: La montaña exige grandes esfuerzos, por lo que la forma física debe ser buena. En especial, si hay que trasladar a una persona lesionada, con nuestros medios. A mejor forma física, mejor pronóstico, al poder soportar en mejores condiciones las inclemencias del tiempo y del terreno, así como el tiempo de espera de la ayuda. La patología car-dio-respiratoria, el vértigo, las toxicomanías, ensombrecen el pronóstico.

e.- Alimentación deficiente: Se debe adecuar a los esfuerzos realizados.f.- Temeridad: Siempre se deben de cuidar las condiciones de seguridad

básicas.

5. LA ASISTENCIA EN MONTAÑALas lesiones más frecuentes que nos vamos a encontrar son las traumato-

lógicas. A pesar de ser semejantes a las producidas en otros lugares, se suma el problema del tiempo de instauración, del diagnóstico y del inicio del tratamiento, junto al transporte del enfermo.

Si ya es difícil la atención médica extrahospitalaria a nivel urbano, lo es más en un lugar tan inhóspito y hostil como la montaña. Nos encontraremos con ciertas dificultades:

a.- La comunicación de la situación del paciente: Es importante que no se realicen actividades de monta-ña en solitario, o al menos dejar comunicado a alguna persona, el trayecto, duración de la travesía, escalas. Se agrava en ocasiones por la falta de cobertura de te-léfonos móviles y la distancia a lugares habitados. Planificar la travesía: paradas, lugares de per-nocta, etc.

Page 9: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

33

b.- La localización del herido: En muchas ocasiones uno no sabe dónde se encuentra exactamente, por lo que el tiempo de atención se retrasa a menudo. Es muy útil tener ciertas nociones de topografía, brújula o un GPS.

c.- El acceso a la persona: A menudo, son lugares sin un acceso directo o sin camino, por lo que se tiene que buscar la forma más rápida y segura para llegar al enfermo.

d.- El material sanitario: No podemos llevar grandes elementos, sino que hemos de ir con lo imprescindible para poder estabilizar y trasladar al paciente, en las mejores condiciones. Se portará en mochila, para dejar libres las manos, por si es necesario escalar, hacer rapel, o ayudar al herido.

• La climatología: Como hemos visto, el clima es muy variable en montaña y en poco tiempo puede variar. Eso hace más importante la rapidez de aten-ción, y condiciona el poder usar medios como el helicóptero o no.• El rescate: Por el tipo de terreno en montaña, el rescate se hace muy di-fícil. La existencia de accidentes orográficos, grandes pendientes, masas forestales, ríos, barrancos, rocas, paredes, nieve, hielo van a complicarlo en extremo y con ello la atención al herido. Podremos realizarlo:

- En camilla: Estándar o de circunstancias.- Trineo-camilla. - Baste Morandeira: Camilla asociada a esquís.- Pértiga Barnaud: Camilla de lona a portar por 2 personas a hombros.- Cacolet: Mochila para llevar a una persona a la espalda.- Medios de circunstancias: Ayudado por mantas, cinturones, ramas.- Animales: Mulos, burros, caballos.- Vehículo de ruedas: Todoterrenos, TOM (Transporte Oruga de Mon-taña).- Helitransporte: Con sus limitaciones, por el clima, la noche, la altitud, turbulencias, y condicionado por el peso, el volumen de carga.

Aspectos específicos de la asistencia sanitaria

Page 10: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

Medicina en situaciones extremas I

34

6. PATOLOGÍAS MÁS FRECUENTES EN MONTAÑA6.1 PATOLOGÍA TRAUMATOLÓGICA: La más frecuente.

a.- Fracturas: En especial de miembros inferiores.b.- Luxaciones: Más frecuente la del hombro, sobre todo en esquiadores.c.- Esguinces: A pesar de ser una patología no vital, en ocasiones el acci-

dentado solicita unos medios de rescate, no acordes con su gravedad (Ej: helicóp-tero). Se precisa una mayor conciencia social.

6.2 TRASTORNOS POR FRÍO a.- Sistémicos: • Hipotermia. Es el descenso de la temperatura corporal central por debajo

de 35 grados. La hipotermia leve es la que aparece con temperaturas que oscilan entre 32-35 grados, en ella disminuye la frecuencia cardíaca, la T.A, palidez, aparecen escalofríos, dificultad en el habla. La hipotermia moderada (entre 28 y 32 grados) y la grave, con temperaturas por debajo de 28 grados, cursa sin esca-lofríos, apatía, rigidez muscular, disminuye la frecuencia cardíaca y la T.A.

A los 31 grados se produce pérdida de consciencia y por debajo de los 28 grados el coma es constante. Son frecuentes las arritmias ventriculares, en rela-ción directa con el descenso de la temperatura. Puede aparecer en el ECG la onda J o de Osborn (deflexión positiva lenta al final del complejo QRS). Lo agravan o potencian la presencia de otros elementos como el viento, la lluvia, la nieve, pro-duciendo además un descenso de la sensación térmica. A nivel pulmonar provoca una taquipnea inicial que se sigue de una disminución progresiva de la frecuencia respiratoria y el volumen ventilatorio.

A nivel del SNC: incoordinación, confu-sión, letargia y coma.

El objetivo fundamental del tratamiento es recalentar al paciente. Nadie está muerto si no está caliente y muerto. El recalentamiento puede ser activo o pasivo. Se utilizará ropa seca, baños, bebidas calientes, reposo absoluto (en hipoter-mias severas) para evitar el paso de la sangre fría de la periferia al núcleo del cuerpo. Vigilar cons-tantes.

b.- Locales: • Sabañones: lesión inflamatoria, dolorosa, ocasionada por exposición cró-

nica e intermitente a la humedad y a temperaturas ambientales no congelantes.

Page 11: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

35

Aspectos específicos de la asistencia sanitaria

Clínica: edema, eritema, cianosis, placas, nódulos, vesículas y ampollas que pueden aparecer hasta 12 horas después de la exposición, parestesias y pru-rito.

• Pie de trinchera: llamada así por la frecuencia con la que aparecían en las trincheras en la Primera Guerra Mundial, debido a la presencia del dúo: hume-dad y frío. Aparece una sensación de hormigueo y entumecimiento. Lo podemos encontrar en forma de palidez, anestesia, sin pulso e inmóvil. Tras el recalenta-miento aparece una fase de hiperemia con sensación urente y recuperación de la sensibilidad proximal.

• Congelaciones: afecta con mayor frecuencia a las zonas expuestas, en especial las acras: orejas, nariz y extremidades superiores e inferiores (dedos sobre todo).

Se favorecen por la humedad. Según la profundidad se dividen en:- 1º grado o parciales: hay palidez extrema e indolora.- 2º grado: afecta a todo el espesor de la piel. Color morado, aparecen ampollas, dolor, necrosis.- 3º grado afecta también a tejido subcutáneo, aparecen escaras negras.- 4º grado si afecta al músculo, tendón y hueso.

El tratamiento es complejo, favore-ciendo la revascularización con baños de agua caliente, sumergiendo la extremidad en agua a 37-38ºC, con povidona. Se pue-den dar analgésicos, antiagregantes, vaso-dilatadores, así como curas diarias, y no durará más de lo necesario. Se recomienda evitar ropas muy ajustadas o húmedas y beber líquidos.

Casos como los montañeros Juanito Oliarzábal y Edurne Pasabán en su escalada al K-2, son clara muestra de ellas, debiendo llegar el tratamiento, en ocasiones, a la amputación.

6.3 TRASTORNOS POR CALORa.- Sistémicos:• Insolación: se produce por exponerse directamente a la acción intensa

y prolongada del sol. Es más frecuente en niños y ancianos. Cursa con cefalea prolongada (hasta 12 horas), somnolencia, malestar general, náuseas, vómitos, hipotensión, piel fría y temperatura normal (también fiebre). Puede llegar a pro-

Page 12: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

Medicina en situaciones extremas I

36

ducir convulsiones y coma. Tratamiento sintomático y reposo en ambiente fresco. Es importante la prevención, protegiendo la cabeza.

• Agotamiento o colapso por calor: se caracteriza por síntomas vagos como malestar, mialgias, cefalea, fatiga, náuseas, vómitos, mareo, diaforesis. Puede haber taquicardia, taquipnea, síncope, hipotensión ortostática.

• Calambres por calor: Contracciones involuntarias, a nivel de músculos fatigados por el ejercicio. Aparece en momentos de reposo tras el esfuerzo. Es más frecuente en personas que beben muchos líquidos pero no reponen las sales pérdidas.

Tratamiento: reposo, bebidas isotónicas, refrescos de cola, calmantes y analgésicos.

• Síncope por calor: Pérdida de consciencia brusca y de breve duración, semejante al síncope producido por hipotensión postural debido a una vasodi-latación periférica, disminución del tono vasomotor y la menor depleción de volumen, favorecido por un larga permanencia en pie. Previamente puede haber pérdida del campo visual, sudoración, debilidad, náuseas, palpitaciones y sensa-ción de mareo.

Tratamiento: reposo, elevación de piernas, hidratación adecuada.• Miliaria o sarpullido por calor: exantema pruriginoso, eritematoso y

maculopapular debido a inflamación de las glándulas sudoríparas. Produce como síntoma principal el prurito.

• Edema por calor: Tumefacción leve de manos y pies en los primeros días de la exposición de manos y pies. Suele resolverse espontáneamente.

• Golpe de calor o hiperpirexia: Se considera una verdadera urgencia médica, puede ser mortal en el 60% de los casos. Es más frecuente en edades extremas: niños y ancianos, pero también en deportistas, montañeros, militares, trabajadores de ambientes muy cálidos (altos hornos, panaderías…). Podemos diferenciar 2 tipos:

- Activo: En personas poco entrenadas que realizan un ejercicio físico intenso.- Pasivo o clásico: Más frecuente en ancianos con patología previa.

Aparece hiperpirexia, por encima de 40-41 grados, anhidrosis, mareo, malestar general, cefalea, confusión. Piel roja, seca y caliente. Taquicardia. Sed intensa. Puede evolucionar a desorientación, estupor, coma y muerte.

El tratamiento se basa en el enfriamiento del paciente con cualquier me-dio a nuestro alcance: compresas de agua fría o alcohol, bebidas frías, baños, hasta que llegue a una temperatura rectal de 39 grados. Se continuará con suero fisiológico, oxigenoterapia y control en U.C.I. Es fundamental la prevención,

Page 13: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

37

Aspectos específicos de la asistencia sanitaria

asegurando un buen aporte de agua y sales, beber frecuentemente. Cuidarse de la irradiación solar, sobre todo en glaciares (lasitud de glaciar).

b.- Locales: • Quemadura solar: Aparece en zonas expuestas a la exposición directa y

prolongada al sol (cara, brazos, piernas). Comienza con eritema, y a las 4-6 ho-ras, pasan a ser quemaduras de 2º grado, con ampollas, dolor, hipersensibilidad, incluso fiebre, escalofríos y náuseas, si son muy extensas.

Tratamiento: lavado con agua fría, o frío local unos 10 minutos. Limpieza con suero y desinfectante suave (povidona rebajada), cubrir con apósito con o sin vaselina estéril. Analgésicos. Hidratación adecuada. Evitar la infección.

6.4. TRASTORNOS OCULARES a.- Conjuntivitis u oftalmía de las nieves: Debido a una deficiente pro-

tección ocular a los rayos solares, originando sensación de cuerpo extraño, lagri-meo, enrojecimiento, que se incrementan con la exposición. En casos extremos: ceguera.

Tratamiento: colirio analgésico, evitar la luz intensa, incluso oclusión ocular, analgésicos generales. Suele remitir en 24-48 horas. Es fundamental la protección con unas buenas gafas con protección lateral y frontal.

6.5. LESIONES MECÁNICAS a.- Rozaduras y ampollas: Muy frecuentes. En los pies, sobre todo por

calzados mal ajustados, o arrugas en los calcetines. Podemos prevenirlas colocan-do previamente un esparadrapo directamente en la piel de los lugares más pro-pensos a producirse. Ante la duda sobre si hay que pincharlas o no, se recomienda realizar un pinchazo con una aguja desinfectada y extraer el líquido del interior, introduciendo posteriormente un antiséptico tipo povidona yodada. También se dice que el mercurocromo tiene un mayor efecto secante que la povidona.

Si hemos de continuar el camino se recomienda cubrirlas con una gasa, y comprobar que no se infectan provocando una celulitis, que precisará el uso de anti-bióticos.

b.- Heridas: Distinguimos entre:• Erosiones: Heridas por roce, superficiales.• Incisas: Heridas con bordes re-gulares, producidas por objetos con filo.• Punzantes: Predomina la profundidad a la extensión.• Contusiones o contusas: Bordes irregulares, dañados, producidos por choque violento.

Page 14: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

Medicina en situaciones extremas I

38

• Penetrantes: Afectan a una cavidad natural: tórax o abdomen.• Perforantes: Penetran en un órgano de la cavidad natural.• Mixtas: Combinación de dos o más de las anteriores.

6.6. LESIONES POR ELECTRICIDADa.- Fulguración: Lesión producida por la acción directa de un rayo o chis-

pa. Combina la acción mecánica, térmica y eléctrica. Sus efectos son variables, desde ser asintomática a producir heridas, quemaduras o paro cardiorrespiratorio.

b.- Electrocución: Se produce al entrar en contacto con conductores eléc-tricos. Puede producir: quemaduras, heridas, amputaciones incluso, paro cardía-co y muerte. Hemos de tener mucho cuidado a la hora de retirarlo de la fuente eléctrica.

6.7. MAL AGUDO DE MONTAÑA Suele aparecer cuando se asciende por encima de los 3000 metros. En su apa-

rición intervienen 4 factores: el ritmo de ascensión, la altitud alcanzada, la dura-ción de la estancia y las condiciones físicas personales. También lo favorecen la hipotermia y la mala alimentación e hidratación.

Clínica: Cefalea, agotamiento, insomnio, desorientación, confusión, oligu-ria, náuseas, vómitos, o en las formas graves: edema pulmonar, cerebral o incluso muerte.

Diagnóstico:

SÍNTOMAS

• Cefalea• Náuseas y/o anorexia• Insomnio• Vértigo

• Cefalea resistente a AAS• Vómitos

• Fatiga anormal• Disnea en reposo• Oliguria

PUNTUACIÓN

1 punto cada uno

2 puntos cada uno

3 puntos cada uno

Dependiendo de la puntuación lo clasificaremos en:• MAM ligero: De 1 a 3 puntos.• MAM moderado: De 4 a 6 puntos.• MAM severo: Más de 6 puntos.Tratamiento: Aspirina o paracetamol para el ligero.

Page 15: ASISTENCIA EN MONTAÑA · accidentes de montaña y expone la necesidad de crear una organización médica de montaña y la formación previa a los montañeros sobre primeros auxilios,

39

Aspirina, reposo, detener la ascensión para el moderado.Descenso para el severo, corticoides si es preciso.Profilaxis: No permanecer en exceso en alturas extremas.Ingerir bebidas en abundancia hasta conseguir una orina clara.

6.8. MORDEDURAS Y PICADURAS DE ANIMALESa.- Mordeduras: Causadas lo más frecuentemente por serpientes, zorros,

perros y lobos. Se han de tratar como una herida, contemplando la posibilidad de infección

o la inoculación de veneno, evacuando lo más rápidamente al paciente.b.- Picaduras: Producidas por avispas, abejas, arañas, escorpiones, es-

colopendras, tábanos, mosquitos, garrapatas. En general, se aplicará frío local, lavado, desinfección y antihistamínicos.

6.9. LESIONES POR PLANTAS, SETAS, HONGOSSe encuentran gran diversidad de plantas, setas u hongos que pueden ser

comestibles, así como otros de gran toxicidad que pueden producir incluso la muerte del paciente.

7. EL PAPEL DEL MÉDICO Para la atención de los pacientes en este medio, y siguiendo el modelo fran-

cés que impulsa una atención profesional y pública, se planteaba una asistencia en escalones:

1º Escalón: Médicos rurales. Medicina general, medicina familiar y co-munitaria.

En el que se realiza una atención primaria, urgente, con estabilización y puesta en estado de evacuación al paciente.

2º Escalón: Hospitales comarcales. En los que se realiza medicina de urgencias. Cirugía general.

3º Escalón: Hospitales provinciales. Medicina especializada.4º Escalón: Grandes hospitales generales. Medicina superespecializada.Actualmente la existencia de helicópte-

ros medicalizados, hace que se adelante y se realice con mayor precocidad la atención pri-maria y que la estabilización se realice en el lugar del accidente, acelerando la evacuación y la atención por la medicina especializada o superespecializada si es preciso.

Aspectos específicos de la asistencia sanitaria