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Bailando en YouTube: un análisis de la lógica comunicativa de las prácticas culturales en el estilo juvenil ElectroDance Toni Cambra González ([email protected]) Colaborador “Grups d’Estudis en Cultura i Societat” Universitat Oberta de Catalunya Resumen Actualmente, los jóvenes están modificando sus formas de comunicación en torno al uso de los nuevos medios digitales (social media). Los cambios en la comunicación están a la base de formas novedosas de producción cultural, teniendo en las culturas y estilos juveniles exponentes preferentes de esta mediatización. Este artículo presenta el ElectroDance un estilo de música y baile urbano originado en Francia hacia el 2006 y difundido globalmente en años posteriores como un caso empírico que muestra la centralidad de la mediatización actual en la producción cultural. Se indaga en el papel que Youtube adquiere en la organización de la experiencia, las prácticas y las relaciones grupales del ElectroDance, revelando la necesidad de poner la comunicación en el centro del análisis de las formas de producción cultural juvenil. Así, a la apropiación que los electrodancers hacen de las características sociotécnicas de este interface subyace cierta lógica comunicativa que rige aspectos centrales del estilo como la negociación de la reputación intragrupal o el desarrollo de ciertas prácticas ritualizadas, generando un tipo de experiencia distintiva que es objeto de análisis. Palabras clave: mediatización, lógica mediática, Youtube, cultura juvenil, ElectroDance, baile, interfaz Los jóvenes están modificando sus formas de comunicación mediante los nuevos medios digitales. Los cambios en las formas de comunicarse facilitadas por estos medios están demostrando tener una incidencia en los fenómenos actuales de producción cultural, teniendo a las culturas y estilo juveniles como claros exponentes de nuevas formas de mediatización de la cultura corriente. Este es el caso del estilo juvenil ElectroDance un estilo de música y baile aparecido en Francia a mediados de la década pasada, difundido globalmente en años posteriores , y el uso que de YouTube hacen sus practicantes. Lejos de complementar sus 1

Bailando en YouTube: un análisis de la lógica … · trabajo simbólico incluso en términos de resistencia que unas audiencias, reconsideradas ahora desde un rol más proactivo,

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Bailando en YouTube: un análisis de la lógica comunicativa de las prácticas culturales en el estilo juvenil ElectroDance

Toni Cambra González ([email protected]) Colaborador “Grups d’Estudis en Cultura i Societat”

Universitat Oberta de Catalunya

Resumen Actualmente, los jóvenes están modificando sus formas de comunicación en torno al uso de los

nuevos medios digitales (social media). Los cambios en la comunicación están a la base de formas

novedosas de producción cultural, teniendo en las culturas y estilos juveniles exponentes preferentes

de esta mediatización. Este artículo presenta el ElectroDance ­ un estilo de música y baile urbano

originado en Francia hacia el 2006 y difundido globalmente en años posteriores ­ como un caso

empírico que muestra la centralidad de la mediatización actual en la producción cultural. Se indaga en

el papel que Youtube adquiere en la organización de la experiencia, las prácticas y las relaciones

grupales del ElectroDance, revelando la necesidad de poner la comunicación en el centro del análisis

de las formas de producción cultural juvenil. Así, a la apropiación que los electrodancers hacen de las

características socio­técnicas de este interface subyace cierta lógica comunicativa que rige aspectos

centrales del estilo como la negociación de la reputación intragrupal o el desarrollo de ciertas

prácticas ritualizadas, generando un tipo de experiencia distintiva que es objeto de análisis.

Palabras clave: mediatización, lógica mediática, Youtube, cultura juvenil, ElectroDance, baile, interfaz

Los jóvenes están modificando sus formas de comunicación mediante los nuevos medios

digitales. Los cambios en las formas de comunicarse facilitadas por estos medios están

demostrando tener una incidencia en los fenómenos actuales de producción cultural, teniendo

a las culturas y estilo juveniles como claros exponentes de nuevas formas de mediatización de

la cultura corriente. Este es el caso del estilo juvenil ElectroDance ­ un estilo de música y

baile aparecido en Francia a mediados de la década pasada, difundido globalmente en años

posteriores ­, y el uso que de YouTube hacen sus practicantes. Lejos de complementar sus

1

encuentros cara a cara, YouTube se erige en un elemento crucial en la organización de la

experiencia subjetiva, las prácticas culturales y las relaciones sociales propias del universo de

este baile. Este artículo analiza la dimensión comunicativa de las prácticas de este estilo

juvenil a la vista de la centralidad que ésta ocupa en la producción cultural del estilo juvenil

ElectroDance.

El concepto de comunicación tiene una especial significación dentro del campo de la

sociología de la cultura. En años pasados, diversos autores han tratado de arrojar algo de luz

en su significado e importancia ­ ver, por ejemplo, Scolari (2009) y Rodrigo (2008). Algunos,

como Poster (1995), enmarcan la comunicación en dos grandes eras marcadas por modelos

sociotecnológicos de comunicación distintivos; una presidida por la comunicación de masas,

y otra influenciada por el advenimiento de la comunicación interactiva y en red de la internet

y las tecnologías de la información y la comunicación en décadas recientes. Por un lado, el

primero de estos modelos se originaría en el modelo de inspiración matemática de Shannon y

Weaver de mediados de siglo pasado, basado en la metáfora del telégrafo: sería éste un

modelo lineal, unidireccional, que entiende la comunicación como un intercambio de

información entre emisor y receptor. Este modelo teórico ha dominado de forma general la

investigación en torno a la comunicación de masas durante buena parte del siglo pasado,

proponiendo una comprensión de la comunicación como “difusión” (broadcast) de una serie

de formas, mensajes y contenidos simbólicos que diferentes agentes ­ principalmente los

mass­media y las industrias culturales ­ podrían a disposición de unas audiencias que se

perciben como pasivas. Dentro de esta tradición, se situarían los trabajos asociados a los

“efectos” de la Comunicación de Masas u otros enfoques psicologicistas como el de “uso y

gratificaciones” (ver Marshall, 2004:14). Aunque estas aproximaciones han sido

hegemónicas en los estudios de Comunicación hasta el punto que el mismo término

“comunicación” ha sido con frecuencia equiparado en décadas pasadas al de “comunicación

de masas”, y más en concreto, a los llamados “medios de masas” (mass­media), existen

excepciones dignas de señalar. Dentro de este mismo período, podríamos citar en este sentido

trabajos reseñables enmarcados en la tradición de los Estudios Culturales ­ y en cierta medida

la actividad académica desarrollada por la llamada Escuela de Palo Alto (ver Winkin, 1985).

Entendida la comunicación desde desde la noción antropológica de “cultura” (Williams,

1981), estos estudios abandonan toda concepción “telegráfica” de la comunicación y plantean

una relación entre los mass­media y las audiencias que no se ciñe únicamente al presunto

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trabajo simbólico ­ incluso en términos de resistencia ­ que unas audiencias, reconsideradas

ahora desde un rol más proactivo, realizan con los contenidos los textos mediáticos

(Marshall, ibid.), sino que van más allá de este dicotomía planteada en términos de

dominación frente a subordinación.

Los Estudios Culturales Juveniles se han caracterizado por indagar en las prácticas

culturales que los jóvenes desarrollan con los materiales proporcionados tanto por los

mass­media como por el mercado de bienes culturales. Sin embargo, han tendido a entender

la relación entre productores y consumidores desde la observación de fenómenos particulares

como el “pánico moral” (Cohen, 1972), en términos de los procesos de

codificación/descodificación presentes en las facetas de producción y consumo de mensajes

mediáticos (Hall, 1980), o como análisis de aspectos muy específicos ligados a la producción

cultural tales como la dimensión ideológica identificable en los discursos de las revistas

teenybop (McRobbie, 1992), por citar algunos ejemplos reseñables. No es sin embargo hasta

el estudio de 1995 de las Club Cultures por Thornton que la comunicación como concepto

deviene en centro del análisis. Su taxonomía de los medios como “mass”, “micro” y “niche”

llevan a Thornton a diseccionar el significado de las diferentes prácticas subculturales que

integran los procesos de construcción y desarrollo subcultural, y en particular de la tensión

que se da entre lo mayoritario (mainstream) y lo alternativo (underground) como parte de la

configuración de las geografías juveniles en torno de la música.

Sin embargo, la irrupción los últimos años de los medios digitales de Internet han

convertido a la metáfora del telégrafo en un referente conceptual inadecuado. Por contra,

podríamos decir que los estudios sobre Comunicación han entrado en una nueva época que

desborda el modelo de comunicación de masas mantenido anteriormente. Diferentes revistas

académicas internacionales dan cuenta actualmente de la vitalidad de un campo de estudios

en plena ebullición. Dentro de los variopintos mundos socioculturales cotidianos de los

jóvenes y su relación con los medios digitales, podríamos citar, a modo de ejemplo, el estudio

de Boyd (2007a, 2007b) sobre los llamados social media en lo relativo a las implicaciones

que en términos de privacidad y visibilidad tienen las prácticas mediáticas de los adolescentes

en los USA, o bien el examen que Lange (2007) efectúa de las prácticas con los medios

digitales basados en la producción de vídeos en red. También es reseñable el análisis que

Bryan et alt. (2006) hacen las conexiones entre las esferas online y offline en los usos que

hacen los jóvenes de mensajes de texto, o el estudio de las prácticas de construcción del “yo”

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y su relación con la producción de formas de presentación personal que se da de la mano de

las tecnologías digitales (Huffaker et. alt. (2005) or Chittenden (2010)). La lista sería en

cualquier caso extensa. Si nos centramos específicamente en los estudios de culturas y estilos

juveniles en torno a la música, nos encontramos con contribuciones que interpretan el rol de

internet en las dinámicas grupales en torno al concepto de “comunidad virtual” ­ ver, por

ejemplo, el análisis de Bennett (2004) de las páginas web como dispositivo desde el que

emergen narrativas y significados compartidos en torno al “sonido de Canterbury”; o el

trabajo de Lee y Peterson (2004) en torno a la comunicación desarrollada en la lista de correo

“alt.country” dentro del género Country. Otra contribución significativa es la que ofrece

Hodkinson (2001) en su estudio de la subculturaGoth, en la que se confiere a las tecnologías

de la comunicación una importancia apreciable en las prácticas de configuración identitaria y

relación a escala grupal dentro esta subcultura. Hollands (2006) también ha indagado en

fechas recientes sobre la dificultad presente en la concepción del estatus y naturaleza de las

llamadas subculturas “virtuales”, esto es, de aquellas colectividades cuyos miembros

mantienen fundamentalmente contacto por medio de los medios digitales de comunicación y

que sólo ocasionalmente se encuentran localmente cara a cara.

Todo este conjunto de aportaciones provenientes de los estudios de la Comunicación

de Masas, y de aquellas más recientes centradas en internet, resulta significativo en tanto que

suponen intentos de comprender las culturas juveniles como fenómenos de comunicación. Sin

embargo, no son suficientes. No lo son, por un lado, porque el modelo de comunicación de

masas difiere el carácter reticular, interactivo y multimodal propio del entorno en red de

internet, entorno que constituye la base operativa y material de las prácticas comunicativas de

los jóvenes. Y por otro, porque los estudios sobre internet tienden a ocuparse exclusivamente

del rol de las tecnologías de la información y la comunicación en los fenómenos culturales

jóvenes, dejando de lado su relación “ecológica” con formas de comunicación previa bajo

dinámicas de “convergencia cultural” (Jenkins, 2005; Holmes, 2005). A través de la

exposición de la lógica comunicativa de las prácticas culturales de los miembros del estilo

cultural ElectroDance mediadas por YouTube, este artículo persigue contribuir a cerrar esta

brecha, abordando la complejidad inherente al estudio de los fenómenos culturales juveniles

cuando se hace desde una perspectiva comunicativa, en la que elementos de continuidad con

el pasado conviven con otros disruptivos y de innovación originados en el nuevo entorno

mediático y tecnológico.

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Metodología

El estudio de la dimensión comunicativa de las prácticas culturales de ElectroDance parte de

una investigación de doctorado desarrollada entre 2009 y 2015. Se opta por un diseño

metodológico de inspiración etnográfica, que se percibe como acorde a la naturaleza del

objeto de estudio.

El trabajo de campo se centra en el uso intensivo que hacen de YouTube un grupo de

jóvenes en número variable entre 15 y 20 miembros, residentes en Valencia, durante un

período que abarca de 2009 a 2010. La selección de los jóvenes tiene como criterios de

representatividad la posición del joven dentro del grupo y el uso demostrado de YouTube por

encima de otros factores no considerados como relevantes en este caso como la posición

social, adscripción étnica o nacional. El seguimiento de los sujetos del estudio comprende

tanto las actividades presenciales de estos ­ por lo general a través de reuniones en espacios

públicos como la calle o las discotecas denominadas “quedadas” ­ como aquellas que se dan

en YouTube, además de sus conexiones con la actividad observable en otras interfaces

digitales como blogs, foros o mensajería instantánea que conforman una suerte de “ecología

mediática” en el ElectroDance. En todos estos casos, se emplea tanto diferentes técnicas de

observación como entrevistas personales y grupos de discusión.

En lo que respecta a las diferentes formas de observación, el trabajo de investigación

abarca la observación no participante de la actividad en YouTube junto con aquella de

eventos no mediados tales como las llamadas “quedadas” de los jóvenes en diferentes

enclaves urbanos de Valencia. Respecto de la primera, la tarea de observación abarca más de

300 vídeos, incluyendo la creación de una cuenta en la plataforma y la configuración de un

perfil personal, de acuerdo al propósito de revelar voluntariamente mi identidad e intenciones

como investigador cuando fuera necesario. Esta decisión se debe a la idea de establecer cierta

simetría entre mi posición y la de mis informantes en las interacciones que ocasionalmente

mantuviéramos ­ como así fue ­ tanto en el interfaz como fuera de él. Por otro lado, aunque

existe cierta comunicación con los informantes en sus encuentros callejeros, la tarea de

observación tuvo como premisa no ejercer ninguna influencia en los acontecimientos que

eran objeto de observación.

El trabajo de campo también implica la realización de entrevistas en formato

semiestructurado (cara a cara, con diversos jóvenes de este grupo de Valencia) y abierto (a

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través de mensajería instantánea). La interacción con los informantes iba a darse

naturalmente como una combinación de ambos métodos, esto es, hubo casos en los cuales

entrevistas iniciadas cara a cara eran retomadasonliney viceversa. Debe añadirse al respecto

que la condición de anonimato presente en los primeros contactos mediados permitían en

ciertas ocasiones una mejor sintonía que la obtenida en condiciones de interacción cara a

cara. Junto a estas entrevistas, la investigación incluye la formación de un “grupo de

discusión” en torno a los tres miembros del equipo (team) “Beatmode” con la pretensión de

capturar la parte experiencia que escapa a la puramente individual o grupal a mayor escala.

La recogida de datos asociada a la aplicación de estos métodos se realizó manteniendo

criterios éticos de respeto por la privacidad e integridad personal de las identidades de los

informantes y del contenido por ellos vertido en YouTube. Este aspecto fue de especial

significación dada la edad de los sujetos jóvenes participantes en el estudio, lo cual me obligó

a tomar ciertas precauciones respecto la difusa naturaleza en términos de publicidad y

privacidad del contenido publicado por los jóvenes a través de Youtube. En este sentido,

considero que tanto los vídeos y su actividad dialógica asociada como la identidad artística de

los jóvenes son de contenido público ­ esto es, contenido puesto deliberadamente a

disposición de cualquier tipo de audiencia ­, y por ello, susceptibles de ser usados para

satisfacer los objetivos de la investigación sin mayor restricción. Sin embargo, también

aparece contenido en el que la distinción público­privado resulta difícil de determinar. Este es

el caso de situaciones en las que los jóvenes “inconscientemente” vertían sentimientos y

pensamientos íntimos a través de vídeo con dedicatorias que acababan llegando a una

audiencia no esperada. En tales caso se opta por pedir permiso siempre que fuera posible,

realizando una valoración (moral) propia de la idoneidad de capturar y usar dichos contenidos

de acuerdo a la naturaleza más pública o más privada percibida para aquellos con los que no

contaba con consentimiento expreso del autor. Por ello, este artículo hará referencia a

contenidos que se ajustan a este estándar de “publicidad deliberada”. Esta medidas iban a

proporcionar una forma de respetar los criterios de privacidad, confidencialidad y respeto por

los informantes que deben presidir toda actividad de investigación.

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ElectroDance: de París a Valencia, de las calles a las pantallas

El movimiento ElectroDance se gesta durante los primeros años de este milenio en la ciudad

de París. Un grupo de jóvenes deseosos de reformular estilos de baile del pasado (Breakin’,

Hardstyle, …) en algo novedoso operan una síntesis estilística que integrará elementos

heterogéneos que van del cyberpunk hasta la inclusión de accesorios más “chic” de conocidas

marcas, todo ello bajo el paraguas sonoro de la música electrónica Electro. Estos jóvenes iban

a convertirse en punta de lanza de un movimiento juvenil basado en sesiones de baile

celebradas en un primer momento en clubes de París como Metropolis, Red Light y Social

club, y posteriormente en las calles de barrios periféricos de la clase media parisina,

convertidos en enclaves emblemáticos del ElectroDance. La participación de los mismos

propietarios de estos clubs y otros agentes comerciales harán en poco tiempo de esta

incipiente forma de baile un fenómeno comercial en toda regla en Francia. La estrategia

comercial comprenderá acciones tales como el registro del estilo como la marca registrada

“Tecktonik” como paso previo a su difusión a gran escala de la mano de acuerdos de

explotación por las industrias culturales a través de videojuegos (Nintendo), accesorios de

vestir, y apariciones estelares en televisión y radio de los bailarines pioneros, cuyo objetivo

será el de hacer llegar este estilo de baile a todos los rincones del país.

Sin embargo, si hay un elemento que iba a demostrar ser crucial en el desarrollo del

estilo (rebautizado posteriormente como) ElectroDance sería (y continúa siendo en cierta

medida) el uso intensivo de nuevos medios digitales como la plataforma de blogsSkyRock,y

de forma más crucial, YouTube. Si los blogs iban a proporcionar a los electrodancers la base

para la construcción de un espacio comunicativo tanto personal como comunitario, o las

herramientas de mensajería instantánea como MSN (todavía activa en el 2010) el canal

idóneo para realizar las tareas de coordinación local a nivel grupal, la irrupción de YouTube

en 2006 se erigiría como un medio inigualable para la exhibición de las habilidades personal

con el baile. Las cámaras de bajo resolución con las que desde hace años vienen equipados

los teléfonos móviles se iban a convertir en el mejor aliado para capturar toda la actividad

relacionada con el baile, ya aconteciera ésta en encuentros grupales callejeros o en la práctica

solitaria doméstica, como materia prima para la producción de vídeos de calidad variable que

tendrían como destino su exposición pública en YouTube. Los vídeos de los electrodancers

pioneros franceses no tardarán en ganar altas cotas de popularidad, como en el caso de

“Jey­Jey”. Este electrodancer publica en 2006 un vídeo titulado “Wantek Danse Electro!!”

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que lo muestra en el garaje de su casa bailando, y que en el momento de escribir este artículo

acumula 15.346.974 visitas, siendo uno de los vídeos más celebrados en años recientes en

Francia, en cualquier categoría.

La importancia que YouTube adquirirá para los electrodancers puede inferirse del

siguiente mensaje publicado en Facebook en 2010 por el bailarín valenciano “Tornado”:

“Este es el peor día desde que empecé con el Electro hace ahora 2 años. Alguien que creía

que era mi amigo y que también baila ha borrado todos mis vídeos sin avisar, y ha cerrado la

cuenta MSN de “ElectroWarriors” y “EletroDanceXativa”. Esas cuentas tenían muchos

vídeos de los campeonatos de Xàtiva, Valencia y Almussafes. He abierto otras cuentas para

sustituir las otras. Espero que os suscribáis para volver a empezar todo otra vez. Gracias a

todos!”

Huelga aclarar que el uso que los electrodancers de Valencia en 2010 no iba a ser

exactamente el mismo que el de sus pares franceses sólo unos meses antes. Al igual que con

“Tornado”, aquellos que primero entraron en contacto con estilo hacia 2008 habían

encontrado en YouTube un recurso único para aprender sobre qué era eso del ElectroDance y

cómo bailarlo en base a la experiencia de los pioneros franceses. Tan sólo dos años después,

los practicantes del estilo en Valencia no sólo habían aprendido lo suficiente sobre cómo y

dónde bailar a través de los referentes franceses sino también sobre cómo relacionarse con

otros pares en situaciones grupales, o cómo introducirse en la auto­producción de contenidos

audiovisuales. Podría decirse que la experiencia francesa les había servido como una suerte

de modelo a imitar y del que aprender, haciendo de YouTube una herramienta indispensable

en su propia experiencia cotidiana en torno al baile.

Sin embargo, el trabajo de campo iba a revelar una lógica subyacente a estas prácticas

que iba más allá de estas apreciaciones iniciales, y que como observador, no podría haber

comprendido a través de la escena francesa. En este sentido, si bien durante el curso de la

investigación el rol de otros medios digitales como los foros, los blogs o posteriormente

Facebook no iba a ser difícil de dilucidar, el caso de youTube iba a ser diferente a tenor de la

centralidad que este medio demostraba tener en las prácticas de estos jóvenes. El fragmento

previo da muestras, de hecho, de la significación que se le supone a YouTube en el

ElectroDance: ¿qué mediaba en este sentido YouTube para que un electrodancer como

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Tornado sintiera que por perder sus vídeos tenía que “empezar de nuevo”? Esta circunstancia

corre en paralelo además con un aspecto que resulta intrínseco a la naturaleza misma de

cualquier medio de comunicación: si consideramos que la dimensión grupal que implica la

práctica del baile necesita de formas y situaciones de interacción cara a cara y no mediadas

tecnológicamente …, ¿cuál podría ser el motivo para estos jóvenes llevaran la comunicación

más allá del hic et nunc dado que podían verse con frecuencia en sus lugares habituales de

reunión en la ciudad? Por tanto, ¿cuál podría ser la lógica subyacente a las prácticas mediadas

por YouTube que hacen de este medio digital un elemento crucial en la experiencia

individual y grupal del baile? La siguiente sección aborda esta suerte de interrogante

mediante un análisis que tiene por objeto diseccionar la lógica comunicativa presente en las

prácticas culturales apoyadas en este medio.

La lógica comunicativa de las prácticas culturales en el ElectroDance

En esta sección abordaremos el análisis de la lógica comunicativa de las prácticas culturales

que los electrodancers desarrollan en torno a YouTube. Hablar en términos de lógica

comunicativa nos remite a la conceptualización que Altheide y Snow hace de todo medio de

comunicación. Para estos autores todo medio encierra “una forma de comunicación ”, cuya 1

lógica se relaciona con “los formatos usados por estos medios” (1979: 10). Por “formato”

Altheide y Snow se refieren en particular a cómo los medios organizan los materiales, el

estilo en el cual estos materiales y contenidos son presentados, el acento o énfasis en ciertas

características conductuales asociadas, pero también a aspectos como la gramática que rige la

comunicación mediante tales medios. El formato, de este modo, se convierte en un marco

desde el cual se presentan e interpretan fenómenos. Por tanto, para comprender el rol que los

medios de comunicación en nuestra sociedad necesitamos comprender cómo estas

tecnologías, en tanto que formas de comunicación, transforman nuestra percepción e

interpretación de lo social (ibid. 7).

De acuerdo a estos presupuestos, y en aras de simplificar la tarea expositiva, la

indagación en torno a la forma de comunicación que brinda YouTube en las prácticas del

ElectroDance diferenciará 3 ejes analíticos, cuyo contenido será abordados a lo largo de las

tres subsecciones siguientes. En primer lugar, nos referiremos a lo que puede entenderse

1 Este tipo de aproximación entroncar con los planteamientos de la medium theory de autores de la Escuela de Toronto como Innis y McLuhan, en la que el medio no es simplemente un transmisor de mensajes.

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como una dimensión técnica ligada al medio; con ello no haríamos sino examinar cómo el

interfaz de YouTube impone ciertos condicionamientos operativos a los procesos de

interacción y de forma más general a la misma comunicación. En segundo lugar,

diferenciaremos un eje de análisis centrado en lo cultural. En este sentido, el interés se dirige

hacia una interpretación de la apropiación de YouTube por parte de los electrodancers como

algo no arbitrario, sino que responde a valores grupales tales como la competición, la

autoestima, el reconocimiento interpersonal y el estatus intragrupal. Finalmente, un último

apartado de análisis se ocupará de la dimensión procesual de las prácticas en torno a

YouTube. En este caso, argumentaremos que la comunicación mediante YouTube adopta una

expresión “mediática” (mediagenic) que merece igualmente nuestra atención. Entendidos

estos tres ejes como parte de un mismo fenómeno, su abordaje por separado nos permitirá

emprender una interpretación holística de los diferentes aspectos que tanto a nivel grupal

como individual conforman la experiencia de estos jóvenes y la vida social dentro de este

estilo cultural joven.

La dimensión técnica: Youtube como interfaz

Una forma de aproximarnos a YouTube desde una perspectiva sociotécnica es desde la

noción de interfaz digital. El interfaz subraya la capacidad de todo medio digital de actuar en

tanto que “capa tecnológica” situada “entre” aquellos que interactúan. Así, la interacción a

través de interfaces está sujeta a las características simbólicas y materiales que configuran sus

diseños, lo cual conduce a variadas (pero limitadas) formas de apropiación y trayectorias de

acción y comunicación.

Boyd (2007) identifica tres rasgos genéricos en los interfaces de los medios digitales

recientes (los llamadas coloquialmente en la actualidad en lengua inglesa comosocial media)

en cuya descripción cabe detenerse: estos son el perfil personal, los comentarios y la sección

de amigos/seguidores. En el caso de YouTube, el perfil personal es realmente lo que se

conoce ­ por referencia al medio televisivo ­ por “canal”, siendo éste el elemento básico de

más importancia para los electrodancers. Ya sea en la forma de un espacio individual o grupal

­ cuando se usa por equipos (teams) ­ el canal exhibe todo un conjunto de marcadores

simbólicos que sitúan al usuario­visitante en el universo de significación del ElectroDance,

aspecto éste que se logra principalmente personalizando el fondo de pantalla, normalmente

incluyendo el emblema del equipo en cuestión. El marco izquierdo lista el nombre de los

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miembros del equipo y la información de contacto (correo y página web , si la hubiere).

Además, el usuario­visitante encontrará los gustos musicales del equipo (canciones y Djs

preferidos) y otros datos en relación al baile. Asimismo, en el canal se localizan una selección

de vídeos publicados por el equipo, además de la referencia a amigos, usuarios suscritos y

suscripciones a otros canales. Visto conjuntamente, mediante el canal se ofrece al que

observa una instantánea de los vínculos en la red de relaciones dentro del grupo local y con

otros grupos translocales. Sin embargo, más complicado resulta intuir la fortaleza de estos

vínculos en la práctica. Adicionalmente, los canales pueden contener otros elementos que

refuerzan la identidad del estilo, en los cuales se percibe la cultura de internet (Baym,

1998:61). Los electrodancers tienden a ocultar por lo general su verdadera identidad, para lo

cual se sirven de un nombre artístico en el que incluyen como prefijo o sufijo las letras

“TCK” (una abreviación de “Tecktonik”, como por ejemplo “Joseetck”, “Zebraxxtck”,

“Alexiitotck”, etc. Cuando firman sus comentarios bajo esta identidad, lo hacen añadiendo el

nombre de su equipo de referencia, de esta forma adoptando el formato de una dirección de

correo (por ejemplo, "Att: SoloTCK @ Electro­Tek").

Sin embargo, el eje central en torno al cual se articula y dota de significado el resto de

elementos que encontramos en YouTube es el vídeo (o “texto”, en términos de la semiótica) .

Tal como se ha mencionado anteriormente, el principal motivo para publicar un video en el

contexto del ElectroDance es mostrarse a uno mismo (públicamente). La actividad de

autoproducción para esta forma exposición pública se da bajo las siguiente modalidades

textuales:

i) vídeos que registran momentos de entrenamiento individual o en equipo (con la

pretensión de mostrar a otros pares la evolución estilística de uno/a).

ii) vídeos que muestran combates (un ritual público que comprende un enfrentamiento

competitivo entre dos electrodancers, cuyo desarrollo será objeto de tratamiento

posterior).

iii) vídeos de actuaciones (en discotecas, institutos, festivales musicales, etc.).

iv) videoclips (esta modalidad engloba los tipos i), ii) y iii), pero a diferencia de éstas,

cuenta con una producción más cuidada mediante la que se intenta reproducir

creativamente la estética, convenciones y narrativas de este género audiovisual).

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Cada vídeo contiene por regla general una introducción o mensaje en su parte derecha

mediante el cual su autor proporciona información adicional a su “audiencia” potencial con el

propósito de contextualizar (esto es, indicando las coordenada espacio­temporales) lo que es

mostrado. En algunos casos, el creador del vídeo reclama a aquellos que lo visualicen que

puntúen algún aspecto particular del vídeo, o al vídeo en su conjunto, con la esperanza de

obtener una respuesta por su parte en la zona de comentarios:

"ultimate old electro o new? esta es la pregunta después de ensayar durante

toda la semana … o quizá me estoy pasando al electro­vertifight, o como

querais llamarlo XD”

Al margen de los anteriores, otros elementos como la función de etiquetado, la forma en la

cual el contenido es mostrado, los marcadores objetivos y los tipos de comentarios, merecen

también nuestra atención. Mediante la opción de etiquetado, el autor seleccionar las palabras

clave relacionadas con el contenido del vídeo, que resultan útiles para la búsqueda y

localización de vídeos dentro del repositorio general de YouTube (Lange, 2007). Etiquetar es

un recurso los electrodancers explotan en grado variable de acuerdo a sus pretensiones de

visibilidad; dependiendo de cómo esto sucede, los usuarios podrán acceder mayor o menor

fácilmente a sus vídeos. La visibilidad puede limitarse, por tanto, a un conjunto de vídeos que

pueden mantener etiquetas relacionadas con el equipo de su creador, su ciudad o la variante

concreta dentro del ElectroDance, a incluir una lista interminable de términos asociados al

mundo del ElectroDance.

Junto con la función de etiquetado, al vídeo también le acompañan lo que podría

denominarse “marcadores objetivos (de capital simbólico)”, los cuales poseen una significado

especial dentro de la lógica del estilo ElectroDance. En el período comprendido por el trabajo

de campo, estos lo representaban el número de visitas acumuladas por el vídeo en cuestión en

cierto momento y la puntuación otorgada por los usuarios a lo largo del tiempo ­ representada

por una escala de cinco estrellas, que tendría su equivalente actual en el número de veces que

se ha pulsado el botón “Me gusta”. Junto a éste, existen otros indicadores secundarios tales

como los “favoritos” ­ número de usuarios que han añadido cierto vídeo a su lista personal de

favoritos ­ y los “comentarios” ­ número de observaciones realizadas en relación al vídeo ­,

que dan una idea del grado de interés y aceptación que un vídeo en particular llega a recibir.

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Respecto a estos últimos cabe apuntar la importancia que adquieren en un entorno como

Youtube, máxime en un caso como el que nos ocupa. Por otro lado, junto con el contenido

audiovisual, el componente conversacional de los comentarios evocan, un tanto

metafóricamente, al contexto que preside el acto de “ver la televisión acompañado de otros”,

esto es, reproducen por otros medios la práctica habitual de intercambiar opiniones como

espectadores sobre aquello que transcurre delante de la pantalla. Los comentarios que

acompañan a los vídeos adoptan una variedad de formas y contenido, que abarcan desde

aspectos técnicos relacionados con el baile:

SeMyYyDaNcEr :

“buenos movimientos con las manos jeison a ver si algun dia te veo bailando 100% en

persona, no te he visto todavia, jaja .. te has ganado mis 5* un abrazo”

Asimismo, podemos encontrar comentarios igualmente técnicos, pero relacionados con el uso

de medios de producción de contenido,

Hammerfest10:

"joder que programa usas para hacer esos videos?? Yo tengo el movie maker pero no me

reconoce el formato de los ficheros :S y no puedo descargarlo … tengo un equipo de

Tecktonik en mi ciudad … espero que puedas ayudarme … HASTA LUEGO”

O comentarios que denotan una negociación de significados propios del estilo, entre otros:

AcheTCK:

“lo siento pero creo que estas mal informado y te equivocas. EL TCK no es un baile es mucho

más que eso, es un movmiento cultural como el Hip Hop… hay mucho más que eso, más que

la mayoría de bailes que ves en las discotecas … a ver si aprendes algo mas del tema y

hablas con mas sentido”.

Todos estos elementos constituyen el marco de características sociotécnicas que condicionan

los procesos de interacción y comunicación entre los electrodancers. No obstante, llegados a

este punto, necesitamos “salir” del medio para poder entender más plenamente la lógica

comunicativa que preside el ámbito de las prácticas en el estilo. O dicho de otro modo,

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exponer la lógica de las prácticas requiere ir una paso más que arroje luz acerca de qué

mueve a estos jóvenes a hacer lo que hacen a través de YouTube, y los efectos que esto tiene

en términos de identidad, subjetividad y experiencia grupal.

La dimensión cultural: en busca de reconocimiento social

Pregunta: “¿Qué dirías que hay que hacer para llegar ser conocido y respetado dentro del

movimiento Electro?”

kiwitck: “Bueno, tienes que bailar bien antes que nada, pero también grabarte y subir los videos a

YouTube. Todo el mundo está en YouTube y si te ven allí, y eres bueno, entonces te respetarán”.

Los electrodancers desarrollan a través de YouTube todo un conjunto de prácticas que

median la relación con sus pares. El objetivo último que subyace a esta relación es, no

obstante, el interés personal en ganar presencia en el medio como parte de una estrategia que

persigue mayores cotas de reconocimiento y prestigio personal. Esta motivación preside la

lógica de este estilo de baile e influye en la creatividad que demuestran las prácticas

culturales dentro del marco simbólico, interactivo y pragmático que YouTube brinda.

Para profundizar en esta línea de razonamiento, puede resultar útil invocar los

conceptos de capital y campo propuestos por el sociólogo francés Pierre Bourdieu (1992: 45).

A modo de recordatorio, Bourdieu considera un campo como una estructura de relaciones

objetivas entre posiciones a las cuales se asocia cierta cantidad de poder o variantes de éste

que él concibe como “capital” en un sentido no economicista. Un campo, así, se convierte en

un espacio conflictivo y competitivo, regulado por sus propias normas y principios, en el que

los participantes luchan por el capital que es objeto de valorización en dicho campo.

Adaptado al dominio de las subculturas juveniles, Thornton (1995: 98) habla de capital

subcultural como aquel una vez incorporado y objetivado, confiere un nivel de estatus ante

los demás. El capital subcultural, huelga añadir, se distribuye desigualmente entre sus

miembros; en consecuencia, cada miembro del campo ocupa una posición diferente a la de

otro miembro, con distinto estatus dentro el conjunto.

Estas premisas nos brindan la oportunidad de concebir el estilo ElectroDance en tanto

que campo. En el campo del ElectroDance, la principal y más elemental forma de capital

deriva del nivel de destreza que uno/a demuestra en el baile. Pero bailar bien no es suficiente.

Adquirir estatus y recibir el debido reconocimiento significa hacerse visible, hecho éste que

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requiere del desarrollo estratégico de ciertas prácticas mediáticas. Así, participar de la vida

social del grupo no sólo requiere de cierto dominio de YouTube, sino que los practicante del

baile deben poseer además ciertas destrezas en otras áreas como la autoproducción y un

conocimiento relativo del lenguaje audiovisual. Podríamos ver estas destrezas como un

subconjunto de capital subcultural relacionado con el conocimiento y las habilidades de

tratamiento de contenidos simbólicos, que trascienden el mero baile.

En este sentido, mientras resulta innegable para el observador que muchos de estos

videos presentan una factura rudimentaria ­ en muchos casos se limitan a ser vídeos

capturados con la cámara del móvil, que no llegan a sufrir ninguna proceso de edición antes

de ser publicados en YouTube ­, aquellos vídeos que muestran a los electrodancers bajo una

factura más sofisticada (amateur) llegan a ser los más celebrados y los que suscitan mayor

interés dentro de la esfera del baile. La activación de diferentes artificios técnicos que

abarcan desde efectos visuales y de montaje hasta el desarrollo de narrativas basadas en

motivos de la cultura popular buscan asimilar estas producciones a la estética del videoclip,

como sería aquellos que toman ideas y elementos de películas como Matrix o del imaginario

visual de los videojuegos. En otros casos, es posible observar vídeos que toman como

pretexto narrativo la recreación de la cotidianeidad ­ por ejemplo, representando desde el

momento en que el protagonista­electrodancer se despierta por la mañana hasta que se

encuentra con otros compañeros bien entrada la tarde. Estos recursos narrativos dotan a los

vídeos de un mayor atractivo, dirigiendo la atención tanto hacia el vídeo en sí como hacia el

electrodancer que lo protagoniza. La calidad del vídeo, como un todo, se convierte, por tanto,

en crucial para mejorar la imagen personal dentro del grupo. Su grado excelencia se premia a

través de la siguiente frase: “5 estrellas y a favoritos!”.

elbruno92:

“impresionante video ;) y la producción mucho mejor! 5 estrellas y a favoritos, sin ninguna

duda! :)”

Joremss:

“el guión está muy trabajado y el video es la bomba, muy bueno, y el estilo un 10, hasta

luego”

juanitoxxxxxxx:

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“bien, bien, ferfiro el video hace mucho, no podemos ocultarlo, pero el estilo es

impresionante y se puede ver las horas de ensayo que hay detras delante del ordenador antes

de grabar …”

espirituelectro:

“eres muy buen dancer y un excelente editor de video xd eres el mejor, no sabia que tambien

bailabas, de verdad xd”

El efecto generado por estas prácticas en torno a YouTube sugieren una conversión de cierto

nivel de capital subcultural ­ esto es, de conocimiento técnico que va más allá del baile en sí ­

en capital simbólico ­ en la forma de estatus obtenido. La presencia en YouTube y su uso

como refuerzo a los procesos de interacción interpersonal en el contexto del universo social

del ElectroDance induce a una comprensión del mismo como un campo articulado en torno a

una economía de la atención. Participar en YouTube, por tanto, encierra un juego competitivo

de observar y ser observado, y cuanto más uno es observado con respeto por tus pares, mayor

efecto en términos de reputación intragrupal. La idea aquí, en suma, es “ser visto” para “ser

alguien” dentro del grupo, de esta forma generando, como Holmes (2005:22) sugiere, una

campo de reconocimiento en torno a uno mismo. La estructura de este campo cultural es, por

tanto, el resultado de una distribución desigual de “cuotas de atención” a lo largo del tiempo

entre posiciones individuales asociadas a cierto nivel de capital simbólico. De hecho, en el

seguimiento efectuado sobre aquellos electrodancers mejor posicionados dentro del grupo se

puede detectar cierta correspondencia ­ o correlación no fundamentada estadísticamente ­

entre el nivel de competencia en el baile con el de destreza y creatividad con los medios

digitales ­ en especial, con Youtube ­ y el conocimiento de los fundamentos del lenguaje

audiovisual que tiene aparejado. O dicho de otro modo, aquellos electrodancers que se

muestran más activos socialmente y más implicados en el grupo resultan coincidir con los

que parecen más capacitados en el uso de los medios digitales.

Sin embargo, la participación en YouTube queda lejos de ser totalmente abierta o

incondicionada. Pese a que pudiera parecer que cualquier joven puede unirse al mundo del

baile y establecer relaciones con aquellos que conforman el grupo con independencia del

nivel de competencia en el baile demostrado en un momento dado, encontramos en cambio

que la integración grupal aparece condicionada por el uso y presencia en YouTube. Hacerse

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visible y pertenecer al grupo requiere de momentos de interacción que no se dan únicamente

cara a cara ­ por ejemplo, en las calle, en las discotecas o en los centros educativos ­, sino

también de otros mediados por YouTube, siendo estos especialmente selectivos. En el

siguiente extracto, el electrodancer "Geo12312312" se sirve del área de comentarios de otro

compañero para hacer la siguiente recomendación, insinuando de manera velada la existencia

de ciertos mecanismos sancionadores relacionados con la apreciación previa:

Geo12312312:

"mira tio solo te estoy diciendo que no lo haces mal pero que van a ver el video y van a decir

seguro que todos los españoles bailan de esa forma … no creo que la gente que esta

empezando deberia subir videos, yo mismo cometi ese error y aun lo estoy pagando, ahora

bailo mejor y no subire un video hasta que este seguro que vale la pena y creo que todos

deberian hacer lo mismo, de esa forma habrian menos videos pero mejores”.

Esta subsección ha tenido como objetivo ofrecer una interpretación de los significados

culturales de las prácticas en el estilo ElectroDance. La centralidad que YouTube adquiere

para movilizar y expresar los elementos nucleares que están a la base de las pautas de

socialización dentro de este estilo juvenil cifran la lógica comunicativa subyacente a tales

prácticas. Sin embargo, el análisis de la lógica comunicativa no se satisface plenamente

destacando por qué los electrodancers hacen lo que hacen en relación a este medio digital,

sino que la forma que guía estas prácticas, y la expresión que adquiere como proceso,

merecen en última instancia también nuestra atención como un eje explicativo de la

comunicación en el estilo.

La dimensión procesual: la expresión mediática de las prácticas

En la subsección anterior expusimos las bases culturales que rigen las prácticas de

autoproducción mediante YouTube junto a la importancia que este medio adquiere en tales

prácticas en tanto que dispositivo sociotécnico que media los procesos de negociación y

distribución de estatus intragrupal en el ElectroDance. En este sentido, no sólo resulta

importante la función de Youtube de facilitar la exhibición pública personal, sino también

cabe detenerse a considerar la expresión particular que reviste esta forma de presentación. La

atención a la dimensión estética de las prácticas de autoproducción mediada por YouTube

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resulta especialmente significativa en aquellas actividades focales que contienen una mayor

componente ritual. Este es el caso de la “Muerte Electro”, ritual central en el ElectroDance

cuya lógica procesual podría caracterizarse como de “mediática”.

La “Muerte Electro” es un combate amistoso, que normalmente se celebra en un lugar

público ­ por lo general en la calle ­, en el cual dos electrodancers miden sus fuerzas y

destrezas en el baile ante la mirada atenta del grupo ­ otros electrodancers y simpatizantes. Su

relevancia dentro del ElectroDance deriva del hecho de constituir la situación social clave

donde los electrodancers tienen mayores posibilidades de negociar de forma determinante su

posición en el grupo, y por tanto, su estatus social en el mismo. Desde un punto de vista

comunicativo, el interés que tiene la “Muerte Electro” es de ser un evento mediado

tecnológicamente (mediático) de principio a (prácticamente) fin. Una “Muerte Electro”

comienza con el desafío que un electrodancer lanza a otro por medio de un vídeo. El

electrodancer desafiado aceptará o no el desafío, cuya respuesta devolverá mediante

YouTube igualmente. Acto seguido, en caso de aceptar el reto, el combate se filmará y hará

público en la plataforma a su término. Finalmente, si bien el proceso de deliberación acontece

en el emplazamiento elegido, en otras ocasiones se traslada a la zona de comentarios de

YouTube, con la ventaja que aquellos no presentes en el momento de celebración del evento

pueden participar con posterioridad. Siendo precisos, este proceso nunca concluye y por tanto

no existe una instancia que dicte un veredicto final y consensuado. Su propósito es más bien

simbólico y obedece a la función a la lógica de la economía de la atención que rige el uso de

YouTube en el mundo del baile y de la negociación de capital simbólico de sus integrantes.

En términos procesuales ­ o de desarrollo del evento ­, cabe hacer notar cómo toda

“Muerte Electro” empieza con un encuentro cara a cara que es no obstante extendido en el

tiempo a través de ciertas prácticas en las que la mediación de YouTube resulta clave. En

virtud de las características comunicacionales de este medio, este tipo de combate a dos se

convierte en un evento que transcurre así de forma aparentemente interminable, en el que se

solapan y combinan diferentes formas de interacción y comunicación. O dicho de otra forma,

una “Muerte Electro” no ocurre de una vez por todas en la calle, sino que es un evento vivo,

inacabado, gracias a las formas de comunicación asíncrona que YouTube proporciona. La

“Muerte Electro” integra pues planos de interacción on y offline, y a la vez cuestiona en su

calidad de proceso tal dicotomía. En este sentido, resulta innegable que existe una

demarcación de lo que acontece en cada momento de formaonlinefrente a looffline,pero es

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en particular el sentido de esta integración lo que resulta de interés más allá de esta

constatación. Así, YouTube no media el ritual que moviliza la “Muerte Electro”en el sentido

de permitir simplemente a los electrodancers asistir de forma diferida al combate y prolongar

una conversación en torno al mismo por otros medios, sino que media un proceso que está

concebido y desarrollado con el medio ­ y lo que éste permite en términos comunicativos ­

“en mente” de principio a fin. O dicho de otro modo, los electrodancers logran dar forma y

conferir cierta expresión a un ritual aprovechando para ello las particularidades propias de un

medio digital como YouTube, logrando así una experiencia significativa por sí misma. Tal y

como ya se ha sugerido, la compleja lógica procesual de la “Muerte Electro” creada en torno

a YouTube articula diferentes formas de interacción dentro un marco temporal sumamente

flexible, pero más allá de esto, es la forma en cómo el ritual al completo se erige en una

suerte de experiencia “mediática” lo que reclama un último comentario.

En términos estrictos, resulta tautológico afirmar que toda experiencia que implica el

uso de cualquier medio de comunicación es “mediática”. Sin embargo, el uso popular del

término remite al mundo de la comunicación de masas. Autores de la tradición de losMedia

Studies enmarcados dentro de la recientemediatization theorycomo Schulz (2004:89) hablan

de la existencia de una lógica mediática como aquella representada por la “puesta en escena”

propia del medio televisivo. Para Schulz esta forma de comunicación afecta a otras

instituciones que no son propiamente las del medio televisivo, como bien puede ser el de la

política y su forma de comunicar, que se adapta a los formatos y exigencias de la

comunicación televisiva y radiofónica. Sin embargo, en un contexto más restringido, la

organización como espectáculo televisivo en tres fases de la “Muerte Electro” parece seguir,

aunque de forma alterada, esta lógica mediática de la que habla Schulz, haciendo a este ritual

adoptar la lógica propia de eventos deportivos televisados como los combates de Boxeo o de

Lucha Libre. Este aspecto se hace sobretodo evidente en la primera fase del ritual, la

dedicada al desafío. Al igual que en los combates televisados, los contrincantes son aquí

entrevistados por separado y hablan a la cámara expresando sus opiniones ante el inminente

combate. El desafío tiene por objeto calentar el ambiente en torno al combate que, como

hemos indicado, será retransmitido también por YouTube. Sin embargo, la similitud con el

evento deportivo televisado no es completo, ya que uno no se relaciona con la televisión

como lo hace con YouTube. Si en el primer caso, el telespectador ocupa más bien una

posición pasiva frente aquello que sucede ante su mirada, en el segundo caso se convierte en

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sujeto activo en el desarrollo del evento en virtud de las posibilidades interactivas y de

comunicación multimodal que le ofrece el medio. En este sentido, carece de sentido tratar a

los electrodancers en tanto que mera audiencia. Por contra, se erigen en participantes en toda

regla de un evento en el que a través de sus comentarios y opiniones pueden alterar de

diversas formas el proceso, influyendo en el estado de ánimo de los contrincantes, en las

opiniones de otros pares o de forma general en los caminos por los que el ritual puede llegar a

transcurrir. La influencia de la televisión en tanto que forma de comunicación se aprecia en la

interiorización de la cultura televisiva, de su gramática, lenguajes y formatos que ­ de forma

más inconsciente que conscientemente ­ los electrodancers demuestran en sus prácticas y en

las formas de creatividad desplegada. El desarrollo de la “Muerte Electro” podría de hecho

prescindir de la mediación de YouTube sin menoscabo de la función que cumple y el

significado de ésta ­ se asemejaría así a culturas juveniles anteriores de baile como el

Hip­Hop que ha existido en tiempos pre­internet. Sin embargo, YouTube permite a los

electrodancers llevar la experiencia del baile a otro nivel: aquí el baile transmuta en una

suerte de espectáculo audiovisual interactivo, capaz garantizar una experiencia estética que

no podría lograrse de igual forma sin la mediación de esta tecnología. Preguntado sobre esta

estetización que caracteriza a la comunicación en el ElectroDance y a las prácticas

mediáticas, el líder del grupo de Valencia “Juanito” daba la siguiente respuesta:

Pregunta: “¿Por qué registrais y hacéis público no sólo los combates, sino también las

discusiones en torno a estos?”

Respuesta: “[...] El hecho es que pretendemos que nuestro canal de YouTube sea variado,

que tenga reportajes donde puedes aprender todo sobre el ElectroDance, pero también

nuestra discusiones, los momentos peores o mejores, nuestra peleas, … todo. El objetivo es

entretener a los seguidores del baile, y creo que esto ayuda. Incluso creo que mostrar toda

esa “mierda”, … la parte negativa es útil también, … mira esos programas de televisión

como “Sálvame” … la mierda gusta … Es verdad que las cosas negativas no son buenas,

pero al final creo que llega a ser positivo para la comunidad. Lo importante es no repetirse y

hacer todo el rato lo mismo, ¿sabes?”.

En este extracto de una entrevista, Juanito destaca la importancia del componente procesual

de las prácticas culturales mediadas por Youtube. A este respecto, tan importantes resultan

los condicionantes que impone el mismo medio a la comunicación como la expresión estética

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que la comunicación logra a través de las prácticas moldeando la experiencia subjetiva y

grupal de cierta forma.

Conclusión

Este artículo ha tenido como objetivo destacar la importancia que los aspectos

comunicacionales relacionados con el uso de los medios digitales recientes está teniendo en

las formas de producción cultural juvenil. En este sentido, el estilo ElectroDance se ha

presentado como un caso de estudio en el que se refleja con gran elocuencia la relación entre

el cambio tecnológico en curso, por un lado, y las transformaciones culturales que acontecen

en la esfera de lo cotidiano, por otro. La exploración desde una perspectiva “micro” de las

prácticas culturales del ElectroDance ­ basadas en el uso de YouTube ­ nos ha llevado a tratar

de diseccionar la lógica que subyace a las mismas. En el análisis de esta lógica se han

diferenciado 3 dimensiones; por un lado, hemos identificado una dimensión técnica (la

asociada a los condicionantes o propiedades que Youtube como medio de comunicación

impone a ésta), una dimensión cultural (que busca encontrar las claves de por qué los

electrodancers usan Youtube, junto al sentido de su apropiación de la tecnología) y, por

último, una dimensión procesual (que destaca la expresión “mediática” que adquieren las

prácticas en su desarrollo). Como cualquier otro medio de comunicación, ya sea antiguo o

reciente, YouTube moldea la comunicación de cierta forma. Sin embargo, esta lógica

mediática recibe la influencia de otras lógicas que no se limitan a considerar los

condicionantes que el diseño técnico de los nuevos interfaces digitales imprimirá a los

procesos de interacción interpersonal y grupal. Hemos visto cómo valores que están a la base

del estilo juvenil tales como la búsqueda de mayores cotas de prestigio personal y estatus

dentro del mundo social del baile hacen emerger una economía de la atención en torno al uso

de YouTube en la que las destrezas personales en el manejo de las tecnologías digitales van

de la mano de aquellas necesarias para la práctica eficaz del baile. Es de especial interés aquí

la dimensión procesual de la lógica de las prácticas analizada en relación a la ritualidad en el

ElectroDance, ya que nos dicen mucho también del sentido de las prácticas culturales y su

lógica mediática. En este sentido, el artículo remarca en su parte final el carácter mediático ­

esto es, relativo a la esfera tradicional de la comunicación de masas y a la operativa de los

mass­media en particular ­ que exhiben en su configuración y desarrollo eventos como la

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“Muerte Electro”. Sin embargo, como se ha argumentado, los jóvenes que bailan este estilo

no se relacionan con YouTube como en el pasado lo hemos con la televisión, ni sus prácticas

pueden ser asimilables a las del espectador televisivo. La influencia de la televisión y de

forma más general del universo de la comunicación audiovisual debería ser en todo caso

entendido de forma más preciso en términos de una “convergencia cultural” (Jenkins, 2006).

La deriva actual hacia formas de “convergencia cultural” nos lleva a considerar cómo en los

fenómenos de producción cultural como lo puede ser el ElectroDance, lo nuevo ­ la prácticas

con medios digitales en el marco de un entorno de comunicación horizontal en red ­ se

hibrida con lo viejo ­ los formatos, lenguajes y esquemas estéticos de la época de la

comunicación de masas que los electrodancers interiorizan y emergen en tales prácticas ­

originando lógicas comunicativas como las que ha sido objeto de análisis en este caso. En

este sentido, la mediación de Youtube resulta significativa al ofrecer a los jóvenes que

practican este estilo de baile de construir un tipo de experiencia distintiva a nivel subjetivo y

grupal que deriva del marco comunicativo que abre este medio y que, por tanto, no podría

darse de igual forma sin su participación.

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