Upload
cristosanpedroes
View
224
Download
3
Embed Size (px)
DESCRIPTION
Boletín informativo de la Hermandad del Stmo. Cristo de San Pedro (Marchena - Sevilla)
Citation preview
Archicofradía del Santísimo Sacramento y
Real Hermandad del Santísimo Cristo de San Pedro,
María Santísima de las Angustias,Nuestra Señora del Santísimo Rosario y San Juan Evangelista
Foto portada:
María Santísima de las Angustiasmbernal
FotografíasJosé Manuel Arispón PacoVictor Martín Luque(www.lavozdemarchena.es)
José Antonio Pérez Rodriguez(www.marchenacofrade.es)l
Antonio Ruiz NaranjoManuel Bernal Aranda
ColaboradoresJuan Vicente Castro SevillanoFrancisco Duarte MaquedaRamon Luna Romero Miguel Manzanares RincónAntonio Ruiz NaranjoLorenzo Salvador Martín Genaro Salvador Villarino Manuel Miguel Sánchez Sánchez
Diseño y maquetaciónManuel Bernal Aranda
ImpresiónImprenta Pruna S.C.C/. Artes Gráficas, 8 Tlfno. 954 84 32 2541620·Marchena (Sevilla)
3 | Hermandad y respeto| EDITORIAL |
5 | Un proyecto que va creciendo| NUESTRO RECTOR | Genaro Salvador Villarino |
7 | Vida de Hermandad mucho más que el Viernes Santo
| EL MUÑIDOR | Secretario · Juan Vicente Castro Sevillano |
13| La devoción mariana de nuestra Hermandad
|MARÍA MADRE DE GRACIA | Francisco J. Duarte Maqueda |
18 | Mayordomía en nuestra Hermandad
| HERMANDAD | Lorenzo Salvador Martín |
20 | El Ángelus, a las 12 acordémonos de María
| ORAR, MEDITAR,... | A.R.N.|
25 | Sto. Domingo de Guzmán| SANTOS | A.R.N |
30 | D. Luis Cristobal Ponce de León, IX Señor de Marchena y II Duque de Arcos| HISTORIA DE NUESTRA HDAD.| Ramón Luna Romero |
33 | Rincón del Costalero| COSTALEROS | Manuel Miguel Sánchez Sánchez |
35 | Información a los hermanos | ACTUALIDAD | Secretaría |
36 | Cultos y actos | CONTRAPORTADA |
Sum
ario
│ ín
dice
p/2
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Agradecemos a todos los colaboradores suayuda en esta publicación y animamos a la vez
a participar en próximas ediciones a todos los hermanos.
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Edito
rial │
Her
man
dad
y re
spet
o
p/3
Editorial |
Hermandad y Respeto
Hermandad y Respeto: desde pequeños, la mayoría de
nosotros, tenemos la suerte de vivir en familia, acom-
pañados de padre, madre, hermanos. Y es una suerte
y una gran alegría.
Nuestros padres en ese ambiente de hogar, nos ense-
ñan a compartir, a amar al hermano y a respetarnos
los unos a los otros con nuestros defectos y virtudes.
La Hermandad se convierte en esa traducción, en esa
proyección cristiana de los valores adquiridos en casa.
Nos hacemos hermanos por familias, amigos o por
amor a nuestros titulares.
Vivir en hermandad. Repitámoslo: vivir - en - herman-
dad. Es hermoso ¿verdad?
Si sintiéramos realmente estas palabras en nuestro co-
razón entenderíamos que todos los hermanos (de
cualquier hermandad) quieren siempre lo mejor para
su casa. Y si todo se hace por amor a la hermandad no
habría lugar a diferencias, rencillas personales… que,
reconozcámoslo, suelen existir. Sin embargo, no debe-
ría ser así.
La Hermandad es la unión de hermanos que trabajan
juntos por lo mismo y para lo mismo y en la que cada
uno aporta lo mejor de sí, lo que puede y como puede.
Sentados en un banco de la Iglesia, a solas, miremos
por unos minutos nuestro interior y pensemos mi-
rando a este Cristo de San Pedro que todos somos pe-
cadores, que todos somos humanos y a veces las cosas
nos salen bien y a veces, no tanto, pero
el Padre nos sabe y nos quiere así, como
somos.
Siempre será más fácil si en medio del ca-
mino siento la mano del hermano que me
ayude a levantarme.
Hagamos que nuestro Padre Bueno se
sienta ahí arriba orgulloso de nosotros y
mirando nuestro templo diga: “Se respira
auténtica Hermandad”
Eso os deseo a todos que seamos herma-
nos y sepamos disculparnos y tendernos
una mano cuando haga falta.
La Hermandad: tu casa, nuestra casa, ese
lugar de puertas y corazones abiertos
cada día del año.
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
p/4
Edito
rial │
Her
man
dad
y re
spet
o
Palabras del Rector | Genaro Salvador Villarino |
Un proyecto que va creciendo
En mi nombre propio y el de mi Junta de go-
bierno que me honro presidir, quisiera, ante
todo, reiterar nuestro más sincero agrade-
cimiento a todos los hermanos y hermanas
del Santísimo Cristo de San Pedro, por la
confianza, por el apoyo con los que nos vais
alentado en nuestro trabajo de servicio,
cuando estamos a punto de alcanzar un año
de nuestro cometido, de nuestro compro-
miso de seguir avanzando en el presente de
nuestra Hermandad.
En este periodo que comenzamos el pa-
sado mes de octubre, todo nuestro es-
fuerzo y nuestra satisfacción ha sido el intentar que todo fuera saliendo bien,
procurando agradar a todos, manteniendo el espíritu de unión, propio de nuestras ins-
tituciones cofrades.
Esa es nuestra función primordial si verdaderamente queremos dar gloria a Dios, honrar a
nuestros amantísimos Titulares en un culto autentico. Por lo demás, quiero deciros que
cuando decidí presentarme para el cargo de Rector, el cual estoy comprometido, unos de
los proyectos que necesi-
taba la hermandad y así se lo
comunique a la junta que se
iba gestando, era la amplia-
ción del Panteón Familiar.
Al día de hoy, esto es ya una
realidad, puesto que las
obras están muy avanzadas
y se esta construyendo 60
nichos nuevos y un osario,
pues el existente no da para
más.
p/5
Pala
bras
del
Rec
tor │
Un
proy
ecto
que
va
crec
iend
o
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
El presupuesto asciende a 38.500 euros, pero se va a engrosar ligeramente, ya que se
va a colocar un retablo de cerámica con la imagen del Santísimo Cristo de San Pedro
así como su altar y candelabros de cirio en un coste total de 44.000 euros aproximada-
mente.
Es intención de no agravar a los hermanos con cuotas extraordinarias si no ajustar nues-
tros presupuesto para que en el plazo de dos años quede saldado el importe de esta
obra. No obstante se ha, habilitado una cuenta en el BBVA destinada a recaudar dona-
tivos para este fin o los viernes en Santo Domingo. Desde aquí quiero; llamar a la gene-
rosidad de todos los hermanos y hermanas para que aporten su limosna, en la medida
de sus posibilidades. Animo pues, en la confianza de que la contribución de todo podrá
agilizar la ejecución satisfactoria de cuantas iniciativas se vayan suscitando en favor de
la conservación y reforma de nuestro patrimonio, de nuestra acción social y caritativa,
y para poder hacer otro nuevo proyecto propio de la Hermandad.
Pero lo más importante es la participación de los cultos que durante el año se celebran
en nuestra Iglesia de Santo Domingo. El Santísimo Cristo de San Pedro quien nos con-
voca, bajo la mirada de su Madre en los expresivos títulos de la Virgen de las Angustias
y la Virgen del Rosario, Patrona de Marchena, para unirnos como hermanos en una
misma fe en un mismo sentir y para avanzar por los caminos de la vida como autentico
cofrade, hijos de Dios y de su Madre bendita.
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
p/6
Pala
bras
del
Rec
tor │
Un
proy
ecto
que
va
crec
iend
o
El Muñidor |
Vida de Hermandad, mucho más que el Viernes Santo
Iglesia de San Pedro Martir en la
tarde de cualquier viernes de
mes son los cristeros los que se
oyen rezar el santo rosario en el
altar del Santísimo Cristo pi-
diendo por la paz y la caridad que
tanto demanda nuestro tiempo
al pasar y en además en este
tiempo hemos celebrado en her-
mandad los actos de culto y fe
que relatamos a continuación:
En el mes de marzo desde el 8 al
12 de marzo celebramos So-
lemne Quinario en honor a nues-
tro amantísimo titular el
Santísimo Cristo de San Pedro,
con rezo del Santo Rosario, ora-
ción participada y seguidamente
Santa Misa con Homilía, ocu-
pando la Sagrada Cátedra el
Rvdo. Padre Francisco Javier Ro-
dríguez Sánchez de la Orden de
Predicadores del Convento de
Santo Tomás de Sevilla. El día 9
de marzo, miércoles de ceniza, durante el ejercicio de Quinario se impuso la ceniza a los fieles,
siendo alta la asistencia.
El día 12 de marzo último día de Quinario, realizamos la función principal de instituto y co-
munión general de hermanos, con la protestación de fe, al final de la función se le hizo en-
trega, de manos de nuestro Sr. Rector, a los diez hermanos más antiguos de un pergamino
en señal de agradecimiento por fidelidad y entrega a esta nuestra hermandad, acto muy
emotivo por celebrarse por primera vez en nuestro Templo. A continuación, celebramos la
tradicional Andosca de convivencia entre los hermanos y, a destacar, la afluencia de hermanos
haciendo un pequeño repunte en este acto de fraternidad.
p/7
El M
uñid
or│
Vida
de
Her
man
dad,
muc
ho m
ás q
ue e
l Vie
rnes
San
to
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
p/8
El M
uñid
or│
Vida
de
Her
man
dad,
muc
ho m
ás q
ue e
l Vie
rnes
San
to
En tiempo de cuaresma, todos
los viernes celebramos en nues-
tro templo solemne viacrucis, en
lugar del rezo del rosario, a lo
cual debemos hacer una refle-
xión sobre como animar la
afluencia de hermanos y herma-
nas a los cultos.
El jueves 14 de abril asiste la junta
de gobierno corporativamente al
Septenario de Nuestra Señora de la Soledad, invitados por el Sr. Rector de la hermandad de
la Soledad, para hacerle entrega en tan alto acto de culto de un pergamino en el que se hace
Hermano Honorario de la Hermandad de la Soledad a la figura del Rector de la Hermandad
del Santísimo Cristo de San Pedro, honor recogido por nuestro actual Rector D. Genaro Sal-
vador Villarino, el cual agradeció en nombre de todos nosotros tan alta gracia.
En las puertas de la Semana Mayor, celebramos en el Viernes de Dolores, día 15 de abril,
uno de los actos más tradicionales e idiosincráticos de nuestra hermandad, el Sermón de las
p/9
El M
uñid
or│
Vida
de
Her
man
dad,
muc
ho m
ás q
ue e
l Vie
rnes
San
to
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Sietes Palabras y el traslado de Nuestro Santísimo Cristo de San Pedro a su cruz del paso de sa-
lida, acto que se ve aderezado con la capilla musical, el canto de las quintas a nuestro titular y
la lectura de las siete palabras en las que vivimos la pasión, muerte y resurrección de nuestro
señor.
El Sábado 16 de abril, en la tarde se trasladan los pasos de la Hermandad de la Soledad a
Santo Domingo y, posteriormente con en años anteriores los sagrados titulares portados por
sus hermanos y devotos, en este año la junta de gobierno acompañó a los titulares de la Her-
mandad de la Soledad desde su salida de San Juan hasta Santo Domingo, invitados a acom-
pañarlos en las presidencias de éstas, ya en Santo Domingo oficiado por el Padre D. Juan
Ramón Gallardo Soriano se rezo por la fraternidad entra las dos hermandades y por lo titu-
lares. Luego, se asistió al viacrucis del Cristo de la Providencia de Santa Isabel por la calles de
Marchena, con una representación.
Domingo de Ramos, día 17 de abril, en esta
mañana nos congregamos en Santo Do-
mingo, los hermanos y hermanas de las tres
hermandades de la Parroquia de San Sebas-
tian y sus fieles para iniciar la procesión de
las palmas desde nuestro templo hasta la
iglesia de San Sebastian, como es tradicional,
y celebrar la misa de Domingo de Ramos,
dando inicio a la Semana Santa. En la tarde,
al paso de la procesión de la Hermandad de
la Entrada Triunfal de Jesús y Nuestra Señora de la Palma, se le recibió en la puerta de nuestro
templo, por las dos hermandades en una representación conjunta.
El martes 19 de abril, asistimos al viacrucis del Cristo de los Peligros.
El Jueves Santo, en la tarde, a pesar de las inclemencias del tiempo, se asistió corporativa-
mente y revestidos de túnica a los Santos Oficios en la Parroquia de San Sebastian. Y después
se recorrieron las estaciones visitando los sagrarios de costumbre.
El Viernes Santo en la mañana fue una representación de la hermandad a visitar a la Her-
mandad de Nuestro Padre Jesús a rezar una oración por sus titulares y trasladarle unas pa-
labras de ánimo y aliento, ante la imposibilidad de realizar la estación de penitencia de la
hermandad por las inclemencias del tiempo. En la tarde del Viernes Santo, día grande para
nuestra hermandad, no pudimos realizar la estación de penitencia debido a las circunstancias
El M
uñid
or│
Vida
de
Her
man
dad,
muc
ho m
ás q
ue e
l Vie
rnes
San
to
p/10
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
meteorológicas que acaecían, im-
posibilitando dicha salida, por lo
que en cabildo extraordinario de
oficiales se decidió no realizar la
estación de penitencia y realizar,
como mandan nuestras reglas,
un acto de piedad, el viacrucis se
desarrollo con toda la seriedad y
solemnidad que el acto de-
manda, participando en el
mismo el cuerpo de acólitos y la
capilla musical; transcurrido éste se abrieron las puertas del templo para que hermanos y
hermanas, fieles y devotos, pudieran rezar a los titulares.
El Sábado Santo la hermandad de la Soledad no pudo realizar estación de penitencia, por las
inclemencias del tiempo, y celebración de un viacrucis en el que participó el Sr. Rector de
nuestra hermandad. Posteriormente a este acto de la hermandad, se abrieron las puertas
de Santo Domingo, para que fieles y devotos pudieran rezar a los titulares.
El Domingo de Resurrección se abrieron las puertas de Santo Domingo, para que los herma-
nos y hermanas de ambas hermandades puedan visitar a sus titulares y, a la 13:00 como es
tradicional se rezo el TEDEUM en torno al Santísimo Cristo de San Pedro, por los hermanos.
Trascurrida la Semana Santa, en el mes de María se celebró el viernes 13 de mayo, día de la
Virgen de Fátima, un rosario por la juventud, or-
ganizado por el grupo joven de nuestra herman-
dad, para pedir por el Sumo Pontífice Benedicto
XVI y por las Jornadas de la Juventud que se cele-
bran en Madrid este agosto. El viernes 28 de
mayo, la hermandad asistió al concurso de altari-
tos de cruces de mayo, representada por un alta-
rito hecho por nuestros hermanos más jóvenes,
el cual participó en nombre de nuestra herman-
dad junto con las otras hermandades.
El 21 de mayo se celebró la cena de costaleros en
la sala Carrera.
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
El M
uñid
or│
Vida
de
Her
man
dad,
muc
ho m
ás q
ue e
l Vie
rnes
San
to
p/11
El domingo 5 de junio la Agrupación Rociera de Marchena, antes de su peregrinación al Rocío,
hizo la visita y ofrenda floral a Nuestra Señora y Madre del Rosario, ofreciéndole cantos y una
salve para que los acompañe en el camino y le de sus bendiciones. Al día siguiente, lunes 6
de junio, en la tarde la Hermandad Rociera de Puente Genil hizo ofrenda floral y rezo a Nuestra
Señora de Rosario.
El sábado 18 de junio la hermandad acude representada por su junta de gobierno a Paradas
para los actos de celebración del 250 aniversario de la Funda-
ción de la Hermandad y Primitiva Cofradía de Nuestro Padre
Jesús Nazareno, Santa Cruz en Jerusalén y Santísima Virgen de
los Dolores.
Como preparación al
Corpus Christi, el do-
mingo 19 de junio, cele-
bramos el acto de
Adoración Eucarística en
el Templo de Santo Do-
mingo.
El jueves 23 de junio, Día
del Corpus Christi asiste la Hermandad a la
misa y recorre acompañando al Corpus
Christi en corporación por las calles de
Marchena.
El día de San Pedro y San Pablo, el miércoles
29 de junio celebramos solemne liturgia en
honor de nuestro titular el Santísimo Cristo
de San Pedro, en el trascurso de la celebra-
ción de la Eucaristía, se tomo juramento a
los nuevos hermanos mayores y se les im-
puso la medalla, antes en la tarde se le hizo entrega a los hermanos y hermanas menores de la
medalla de hermandad en símbolo de su entrada en nuestra comunidad que se va ampliando
poco a poco y para estrechar lazos celebramos en familia una merienda.
Los días 1 y 2 de julio se llevó a cabo la primera Vela de San Pedro que con el humilde motivo
de recaudar fondos para la ampliación de nuestro Panteón Familiar fue un momento de en-
El M
uñid
or│
Vida
de
Her
man
dad,
muc
ho m
ás q
ue e
l Vie
rnes
San
to
p/12
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
cuentro y regocijo para todos
los hermanos y hermanas del
Santísimo Cristo de San Pedro,
pues al mismo tiempo que
compartimos risas y alegrías co-
laboramos en esta tan impor-
tante obra social que llevamos
todos a cargo nuestros herma-
nos y hermanas difuntos.
El día 22 de julio asistimos al
traslado de las sagradas imáge-
nes del Señor de la Humildad y
Paciencia y Nuestra Señora de los Dolores y
misa de acción de gracias, a su iglesia de Santa
Clara después de la reforma.
Como manda nuestras Reglas el sábado 26 de
junio se celebró Cabildo Anual de Cuentas, en
un ambiente fraternal, durante el desarrollo del
mismo. Tras las preces dirigidas por nuestro
Rector, se trataron los diferentes puntos refle-
jados en el orden del día, siendo aprobados por
unanimidad todos aquellos que tenían que so-
meterse a votación.
En el punto 3 era el relacionado con la presen-
tación del estado de cuentas del ejercicio, para
su aprobación si procede. Que fue el siguiente
Saldo inicial ____________ 2.201,07 euros.
Ingresos _______________ 53.107,55 euros
Gastos ________________ 30.000,98 euros.
Saldo actual____________ 25.307,64 euros.
Agradecer el legado de 3.000 euros de nuestra
hermana Pastora Sánchez Sánchez (q.e.p.d.)
El Secretario D. Juan Vicente Castro Sevillano
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Dev
oció
n m
aria
na│
de n
uest
ra h
erm
anda
d
p/13
El mes de septiembre despunta en la Igle-
sia como uno de los meses marianos por
excelencia, enlazando con el que los Ro-
manos Pontífices han consagrado a la gran
devoción popular del Santísimo Rosario.
Brillan con luz propia la Fiesta de la Nativi-
dad de María, la de Nuestra Señora de los
Dolores, englobando la mayoría de las ad-
vocaciones que hacen referencia a la mi-
sión corredentora de la Madre del Señor al
pié de la Cruz, la de Nuestra Señora de la
Merced, Redentora de cautivos.., en torno
a las cuales gravitan toda una constelación
de manifestaciones populares, por todos
los rincones de esta tierra de María Santí-
sima, hoy tan desconocida y secularizada,
tan necesitada en nuestros tiempos de una
verdadera devoción, de abrir los oídos a
aquellas palabras cuando el primer mila-
gro en Canán de Galilea: "Haced lo que El
os diga"; de escuchar la Palabra del Señor
y ponerla en práctica, desde lo más pro-
fundo de nuestro ser y desde ahí, vaya
aflorando en nuestras obras, en nuestro
estar y misión en la comunidad eclesial y
en el mundo, por lo menos desde los que
nos consideramos cristianos, hijos de
María; para que nuestra voz, nuestro espí-
ritu y toda nuestra vida sea una continua
alabanza a la mayor gloria de Dios y de su
Santísima Madre, desde la fe y una devo-
ción autentica y sincera.
María Madre de Gracia |
La devoción marianade nuestra hermandad
Dev
oció
n m
aria
na│
de n
uest
ra h
erm
anda
d
p/14
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
La devoción mariana en nuestra Herman-
dad del Santísimo Cristo de San Pedro no
ha llegado a calar en toda su intensidad,
en toda su dimensión. Desde un principio
y desde los aspectos más externos, todo
el fervor quedaba absorbido por la Ima-
gen del Santísimo Crucifijo, ya que no te-
nemos referencias de la presencia de
María Santísima de las Angustias hasta el
siglo XIX. En los distintas funciones de ro-
gativas para las que fue solicitada la Ima-
gen de nuestro Cristo, fue siempre
acompañada por la de la Virgen del Rosa-
rio y en los exvotos que conserva la Her-
mandad de Nuestro Padre Jesús
Nazareno, cuando el agradecimiento apa-
rece compartido con nuestro Cristo de
San Pedro y otras advocaciones marianas,
nunca reflejan el la de las Angustias. Eso
sí, es significativo y lo hemos apuntado en
reiteradas ocasiones, que en las reglas
fundacionales se prescribiera la obligación
de rezar diariamente, junto a los siete Pa-
drenuestros en memoria de las siete Pa-
labras de Nuestro Señor en la cruz, siete
Avemarías, en honor y reverencia a las
siete angustias de Nuestra Señora, lle-
vando los hermanos, como signo externo
y recordatorio, una sarta con siete cuen-
tas. Las reglas aprobadas por el Consejo
de Castilla incluyen la advocación mariana
de nuestra Amantísima Titular, así como
su presencia en la procesión del Viernes
Santo, cerrando el cortejo procesional.
A partir del Sínodo Hispalense de 1972 se
produce una autentica renovación en la
vida diocesana teniendo significativa re-
percusión en el campo de las Hermanda-
des y Cofradías. Son actualizadas todas las
reglas de las corporaciones cofrades y
prolifera la creación de otras nuevas así
como la multiplicación de actos de cultos,
sobre todo en honor de la Santísima Vir-
gen. Así ocurrió en nuestra Hermandad,
amén de la posterior incorporación o fu-
sión canónica con la antigua Hermandad
de Nuestra Señora del Rosario, Patrona de
Marchena.
En honor a la verdad, se ha ganado mucho
en los aspectos mas populares y externos.
El acompañamiento de nazarenos en el
tramo de la Virgen de las Angustias ha lle-
gado a alcanzar unas cotas que ni Antonio
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Dev
oció
n m
aria
na│
de n
uest
ra h
erm
anda
d
p/15
Jiménez (q.s.g.h), ni los niños que no tení-
amos más remedio que posesionar en
este sitio, con los contados hermanos que
lo preferían al ascético y sobrio tramo del
Cristo. Y qué decir de la procesión de la
Virgen del Rosario... Si viviera Don Isidro,
seguro se daría por el mortal más gozoso.
Pero vamos a quitarnos las mascaras y
sobre todo tantas galas festivas, tanto en-
voltorio y tanto yo presuntuoso y, deciros,
montemos el mejor altar de cultos a la Vir-
gen de las Angustias y participemos de la
mejor procesión del primer domingo de
octubre, desde la junta de gobierno al úl-
timo hermano inscrito, aunque sea un re-
cién nacido en brazos de sus padres;
desde el que se tiene por mas cofrade al
curioso que critica que los cirios están la-
deados y no se da cuenta que es él el que
tiene distorsionada la vista,- de su fe y de
su devoción, por supuesto; los ojos esta-
rán en su sitio-..
Ante todo se hace necesario la vivencia
de un cristianismo más autentico, desde
el amor a Dios y a nuestros hermanos y
esto, como regla suprema de Hermandad.
En esto se resume todo lo que hay que
observar para ser fieles a la única voca-
ción a la que estamos convocados, la vo-
cación a la santidad, sea por el camino
que sea, desde la conciencia de que esto
no está reservado exclusivamente a los
sacerdotes y a las personas más piadosas
o más cercanas a la Iglesia. Todos estamos
llamados a recorrer ese camino de vida
tras los pasos del Señor, a imitación de
María y de los santos que están en el cielo
y los que todavía peregrinan por el
mundo, trabajando por la paz y la justicia,
aliviando enfermedades y miserias, esfor-
zándose en la construcción del Reino de
Dios en la Tierra. Esta es la base de nues-
tro altar espiritual y la mesa del paso pro-
cesional. Pongamos ahora el exhorno,
Dev
oció
n m
aria
na│
de n
uest
ra h
erm
anda
d
p/16
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
seamos todos mayordomos y priostes en
esta tarea.
Del ajuar que hemos ido atesorando sa-
quemos el mejor patrimonio, los mejores
enseres para que brillen y luzcan como
nunca, para que señoreen y reflejen el es-
plendor de la Verdad. Pongamos en el
candelero más alto, en el blandón o en el
cirial itinerante nuestra fe, autentica,
comprometida, dispuesta; una fe basada
en la profunda humildad de María, una fe
esperanzada y testimoniada como don
gratuito de Dios. No importa que nuestra
llama sea débil; entre todos podemos
conformar la candelaria mas hermosa
para mostrar al mundo el rostro de la Se-
ñora y por su mediación, el de Nuestro
Señor y seamos capaces de iluminar las
oscuridades de la noche, las tinieblas del
alma de este mundo que da la espaldas a
su Creador.
En las jarras más delicadas, las flores in-
marchitas de la caridad, mostrando toda
su belleza, exhalando su mejor perfume,
el aroma de Cristo que nos interpela de
continuo a dar la vida por los demás,
sobre todo por los más necesitados de
afecto, de lo necesario para ir avanzando
por la vida, ya sea en el orden material
como espiritual. Y en esos ramos matiza-
dos, como base del buen hacer artístico,
el mate, el lentisco o la esparraguera fina
de nuestra comunión fraterna con todos
los hermanos, en la cofradía de los hijos
de Dios y hermanos en Jesucristo, perdo-
nando como somos perdonados, amando
con el Amor con el que Dios nos apremia
en su querido Hijo. Solo así podemos pre-
sentar nuestra ofrenda y ofrecer el mejor
incienso en un culto sincero y agradable,
un culto en espíritu y en verdad que brota
de la Fuente perenne y sus aguas saltan
hasta la vida eterna.
Así, todo dispuesto ya podemos introducir
en el altar de nuestro corazón, en el paso
de nuestro sentir a la Imagen de María San-
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Dev
oció
n m
aria
na│
de n
uest
ra h
erm
anda
d
p/17
tísima en nuestras venerables advocacio-
nes. Previamente, el promotor de cultos
habrá colocado el crucifijo para que pre-
sida la celebración eucarística; lo mismo
hará el Diputado Mayor, disponiendo la
cruz procesional en la cabecera de la pro-
cesión. ¡ Todo un detalle...! ; Incluso pasa
inadvertido para la mayoría. Y qué decir de
esos que se la dan de "progres", empeña-
dos en aniquilar en nuestra sociedad todo
atisbo de referencias cristianas...
Nuestra devoción mariana tiene que estar
presidida, no solo en el aspecto físico sino
en toda su dimensión espiritual, por la
imagen de Cristo Redentor, por el Señor
Jesús, presente sacramentalmente en la
Eucaristía, en la Palabra de Dios, en los
reunidos en su nombre...Es aquí donde
todos vamos a poner, porque de aquí
brota, la virtud de la Esperanza, tan vital
que sin ella no podríamos vivir y de tal
confianza que en ella ya hemos sido sal-
vados. Una virtud, una fortaleza, un ancla
de salvación para afrontar nuestro pre-
sente, por muy pedregoso que sea; para
vivir con la seguridad y la dicha del que
pone su confianza en el Señor, imitando a
la Madre del Señor, que esperó contra
toda desesperanza, que alumbró al Autor
de la Vida en la plenitud de los tiempos y
desde la cumbre del Calvario nos acoge a
todos como hijos, en su maternal regazo.
Ella es nuestro mejor modelo de cristiana,
nuestro mejor modelo de oración y escu-
cha atenta a la Palabra hiriente y transfor-
madora, la Palabra que nos salva si la
hacemos palpitar desde nuestro interior.
A ella tenemos que acudir con toda la
confianza porque es nuestro refugio y am-
paro en todas las ocasiones de dificultad,
nuestro paño de lágrimas; porque, ilumi-
nada por el Sol de Justicia es la estrella
que guía nuestro navegar por la vida,
nuestra alegría y consuelo, nuestra mejor
maestra... A Ella nuestra devoción mas
encendida, nuestros obsequios más en-
trañables, porque es la Madre del Señor,
porque es nuestra Madre.
Francisco J. Duarte Maqueda
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
p/18
Her
man
dad
│ M
ayor
dom
ía e
n nu
estr
a H
erm
anda
d
Dentro del apasionante mundo cofrade marchenero, si alguna circunstancia es incuestionablea todas luces cuando nos toca analizar a la hermandad del Stmo. Cristo de San Pedro es, sinninguna duda, su propia idiosincrasia.
Sus singularidades, rasgos y peculiaridades la hacen una hermandad única y extraordinaria.Y no solo podemos evidenciar esta circunstancia en la realización de sus cultos, en su ajuar yelementos procesionales, o en sus manifestaciones publicas penitenciales; sino también, ymuy profundamente, en su propia forma de gobierno.
Hoy me toca hablaros en estas paginas desde mi propia experiencia, de este mundo que con-forma la Mayordomía de la hermandad del Stmo. Cristo de San Pedro, un campo amplio,que tan solo conoce bien el que ha formado parte de él, y al que siempre he estado vinculadode una u otra manera desde que me incorporé a esta hermandad, primeramente como co-laborador y después como miembro de la Junta de Gobierno. Siempre procurando arrimarlesel hombro y aprender de los Mayordomos con los que he convivido y a los que tanto debo,José Fco. Aguilar, Manuel Roncel (q.e.p.d.), Vicente Henares y mi propio padre, Genaro Sal-vador, hoy nuestro Rector. Mientras que en otras hermandades la Mayordomía abarca exclusivamente su entramadopecuniario, en la hermandad del Stmo. Cristo de San Pedro acapara, además, la mayor partede las labores y responsabilidades de la vida cotidiana de la institución.
Así, el Mayordomo es el responsable de toda la gestión económica y administrativa de laHermandad. Cuidará del perfecto desarrollo y el buen hacer en la ordenación monetaria dela institución, para lo que seré asistido por el Tesorero. Recabara fondos y los administrará
Hermandad |
Mayordomíaen nuestra Hermandad
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Her
man
dad
│ M
ayor
dom
ía e
n nu
estr
a H
erm
anda
d
p/19
conforme a las Reglas corporativas siguiendo las directrices marcadas por los acuerdos de laJunta de Gobierno, y en asuntos de mas envergadura, del Cabildo General. Será igualmenteel responsable de la confección y gestión de rifas y loterías, así como de la limosna de cera yotras demandas extraordinarias.
También, el Mayordomo, que es permanentemente auxiliado por su Vice-Mayordomo, Prios-tes, camarera y equipo de colaboradores, depende la limpieza y mantenimiento de todos losenseres y la confección de sus inventarios. Con extrema consideración llevará el cuidado ysalvaguarda de las imágenes de nuestros Sagrados Titulares, utilizando para ello todos losmedios con que garantizar su correcta manipulación.
La limpieza y adecentamiento del interior del templo y la casa de hermandad y el manteni-miento del edificio, así como el montaje de altares para cultos de Regla y extraordinarios.
Además, hay un campo añadido que se puede considerar exclusivo de nuestra localidad: el cuidado y arreglo de nuestros panteones de enterramiento, así como la inhumación delos cofrades difuntos y su protocolo burocrático. Igualmente, la exhumación de los restosque dejan los nichos para pasar al Osario General de la Hermandad, o a otro nicho junto conel familiar que acaba de fallecer; una labor que, sin ninguna duda, deja marcado para siemprea todo aquel que ha pasado por esta ocupación.
En definitiva, el cargo de Mayordomo ofrece una oportunidad idónea para servir y confra-ternizar en el seno de nuestra hermandad; sin ninguna duda, la mejor recompensa que unMayordomo cristero puede tener.
Pero justo es decir, que no seria posible sacar adelante la Mayordomía de la Hermandad delStmo. Cristo de San Pedro, si no fuera por ese equipo de personas entregadas, generosas,que cada vez que se emprende una nueva tarea en Santo Domingo aparecen entusiastas ydispuestas a trabajar sin esperar nada a cambio. Cada uno en su campo. Unos en las cuadrillasde limpieza. otros en la logística de abastecimiento, otros en las tareas de pintura y albañilería,en el intenso mundo de las vísperas con el montaje de pasos y altares, en la venta de lotería,en la pedida de cera, en las faenas de lavado y arreglos del vestuario acolital y ajuar litúrgico,o colaborando con su presencia y su pequeño granito de arena, como pudimos ver hace unosdías, en la I vela de San Pedro. Un grupo de hermanos movidos tan solo por su generosidad y el cariño hacia nuestros Sa-grados Titulares.
Por esto, quiero para acabar, aprovechar esta ocasión y agradecerles en nombre de esta Juntade Gobierno y las anteriores su entrega de años y de décadas, y decirles, como siempre seha dicho en esta casa: “Que el Señor se lo aumente”.
Lorenzo Salvador Martin
El Á
ngel
us │
Ora
r, m
edita
r, al
abar
a N
uest
ra M
adre
p/20
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
En el boletín anterior, os pedía, en la refle-
xión de la tercera palabra… Que resurgiese
la hermosa costumbre de rezar el Rosario en
familia. Recemos el Santo Rosario. Plegaria
bellísima del hogar cristiano, del auténtico
hogar español. Que por desgracia vamos
perdiendo las costumbres típicas. Hay que
recuperar la devoción del Rosario en familia.
Orar, meditar, alabar a Nuestra Madre |
El Ángelusa las 12 acordémonos de María
Orar, meditar, alabar a Nuestra Madre |
El Ángelusa las 12 acordémonos de María
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
El Á
ngel
us │
Ora
r, m
edita
r, al
abar
a N
uest
ra M
adre
p/21
Una familia que todas las noches invoca a la
Santísima Virgen y le dice cincuenta veces:
Ruega por nosotros pecadores, ahora…
El Rosario en familia es una fuente de
bienes para todos, pues atrae la misericor-
dia del Señor sobre el hogar.
El Rosario es un arma poderosa, para con-
seguir de la Virgen aquellas gracias y favores
que tanto necesitamos, si lo rezamos con la
necesaria atención, si procuramos ahondar
en su riquísimo contenido, particularmente
deteniéndonos y meditando durante unos
momentos cada uno de los misterios.
Procuremos que nuestros familiares y ami-
gos comiencen a rezarlo y así traten y amen
más a nuestra Madre del Cielo.
Ahora os pido el rezo del Ángelus, cuando
llegue el mediodía, requiere recogimiento
antes de comenzar la oración y autodisci-
plina durante su desarrollo.
El ejercicio de la oración consiste en dedi-
car a ello determinados momentos del día:
por la mañana, antes del comienzo de las
tareas cotidianas, y al anochecer, antes de
entregarse al descanso nocturno.
Necesitamos de la oración para que perma-
nezcamos sanos espiritualmente. Pero la
oración sólo puede brotar de una fe viva y
la fe únicamente puede ser viva si se ora.
La oración es la expresión más elemental de
la fe, el contacto personal con Dios, al que
fundamentalmente está orientada la fe.
El Papa bueno Juan XXIII fue quien inició el
rezo público del Ángelus en la plaza de San
Pedro todos los domingos y días de fiestas.
Era una manera más de mostrar su cerca-
nía a los fieles, y sobre todo de infundir en
ellos el culto amoroso a la Virgen María.
Tras la oración a la Madre de Dios, Juan XXIII
impartía su bendición y aprovechaba para
dirigirse a los presentes de la manera que a
él más le gustaba, de forma espontánea, con
un estilo familiar y cercano. Tanto gustó esto
a los católicos que visitaban Roma y a los
propios romanos, que con el tiempo se ha
convertido en uno de los actos públicos del
Papa que nadie quiere perderse.
El Ángelus, devoción de origen franciscano,
que el Diccionario de la Real Academia Es-
pañola lo define como Oración en honor del
El Á
ngel
us │
Ora
r, m
edita
r, al
abar
a N
uest
ra M
adre
p/22
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
misterio de la Encarnación, hace una sínte-
sis admirable del mismo, de las personas
que intervienen en tan gran acontecimiento
y de la misión o actitud de cada una de ellas,
con palabras tomadas del mismo Evangelio.
En su extremada brevedad, ofrece materia
sólida a la vez que asequible para la medi-
tación cotidiana del creyente. San Lucas re-
fiere que el ángel Gabriel fue enviado por
Dios a una ciudad de Galilea, llamada Na-
zaret, a una virgen desposada con un hom-
bre llamado José, de la casa de David; el
nombre de la virgen era María. El ángel le
dijo: “Alégrate, llena de gracia, el Señor
está contigo”. Luego añadió: “No temas,
María, porque has hallado gracia delante
de Dios; vas a concebir en el seno y vas a
dar a luz un hijo, a quien pondrás por
nombre Jesús”. María respondió al ángel:
“¿Cómo será esto, puesto que no conozco
varón?”. El ángel le aclaró: “El Espíritu
Santo vendrá sobre ti y el poder del Altí-
simo te cubrirá con su sombra; por eso el
que ha de nacer será santo y será llamado
Hijo de Dios”. Y dijo María: “He aquí la es-
clava del Señor; hágase en mí según tu pa-
labra”. Días después, María fue a casa de
Zacarías y saludó a Isabel, la cual exclamó:
“Bendita tú entre las mujeres y bendito el
fruto de tu seno” (cf. Lc 1,26 ss). A modo
de conclusión, San Juan añade en el pró-
logo de su Evangelio: Y el Verbo se hizo
carne, y habitó entre nosotros (Jn 1,14).
Rezar el Ángelus, al mediodía, es tradición
inmemorable del pueblo cristiano. Cada vez
que cogemos el Evangelio de Lucas y abri-
mos la página de la Anunciación. Es como
situarnos en la raíz de nuestra salvación; es
como hacerse protagonista en la Historia
con aquella Doncella única que revolucionó
la Historia. El rezo del Ángelus acerca lo di-
vino y lo humano; es como tocar lo pro-
fundo de nuestra fe. Rezar el Ángelus es
como tener el corazón en fiesta y gozarse y
alegrarse porque Dios ha entrado en la Vida
de los hombres de mano de Mujer.
El Ángel del Señor anunció a María.
Y concibió por obra del Espíritu Santo.
Dios te salve, María... Santa María...
He aquí la esclava del Señor.
Hágase en mí según tu palabra.
Dios te salve, María... Santa María...
Y el Verbo se hizo carne.
Y habitó entre nosotros.
Dios te salve, María... Santa María...
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.
Para que seamos dignos de alcanzar las
promesas de Cristo.
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
El Á
ngel
us │
Ora
r, m
edita
r, al
abar
a N
uest
ra M
adre
p/23
Oremos: Derrama, Señor, tu gracia sobre
nosotros, que, por el anuncio del Ángel,
hemos conocido la encarnación de tu Hijo,
para que lleguemos, por su pasión y su
cruz, a la gloria de la resurrección. Por Je-
sucristo, nuestro Señor. Amén.
En el Ángelus destaca esa disponibilidad
maravillosa de la joven María al Proyecto de
Dios; destaca ese compromiso sin cálculo
de María con la Voluntad de Dios; destaca
ese acoger hasta el fondo de su ser la Pala-
bra y hacerla propia, suya, habitable entre
nosotros.
El Ángelus es recordar ese momento histó-
rico en el que llegó la Plenitud de los tiem-
pos; es recordar cómo la Obra del Padre, de
la Creación, alcanza su punto álgido en el
Verbo Encarnado.
El Ángelus destaca ese momento en el que
el Hombre se hace, por fin, hombre en el
Hijo amado.
Es hermoso rezarlo en el interior; es pul-
cro recogerse cuando las campanas del
reloj se oyen en nuestra población; o
cuando miramos el reloj de pulsera y nos
detenemos en esa hora bendita.
Al rezar el Ángelus renovamos nuestra
encarnación bautismal; ese momento en
que nuestra vida se dio el aconteci-
miento de entrar en la vida nueva de
Cristo ya resucitado.. Necesitamos pro-
clamarlo.
Tanto el rezo del Ángelus como el del Rosario
- decía Juan Pablo II - deben ser para las fami-
lias cristianas un oasis espiritual en el curso
de la jornada, para tomar valor y confianza.
También nos decía: Conservad celosa-
mente ese tierno y confiado amor a la Vir-
gen, que os caracteriza. No lo dejéis nunca
enfriar. Sed fieles a los ejercicios de piedad
mariana tradicionales en la Iglesia: la ora-
ción del Ángelus, el mes de María y, de
modo muy especial, el Rosario.
Refiriéndose a la Encarnación del Verbo que
se destaca en esta plegaria, el papa afirmaba
que el fruto de esta oración y su finalidad, es
recordar a todos y cada uno, lo grande que
es la dignidad del hombre. Al recordar que el
Verbo se hizo carne, es decir, que el Hijo de
Dios se hizo hombre, efectivamente, fue con-
cebido en el seno de María y se hizo hombre
para revelar el amor eterno del Creador y
Padre, así como para manifestar la dignidad
de cada uno de nosotros.
El Á
ngel
us │
Ora
r, m
edita
r, al
abar
a N
uest
ra M
adre
p/24
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
María, al decir: He aquí la
esclava del Señor, hágase
en mí según tu palabra, y
aceptar la maternidad del
Verbo encarnado, une, de
modo particularismo, su
debilidad humana con el
poder de la gracia. Por esta
razón al rezar el Ángelus,
admiramos la plenitud de
la gracia y la plenitud de la
colaboración con la gracia
en la Virgen de Nazaret.
Por ello cuando rezamos
el Ángelus, esa plegaria
debe influir sobre toda
nuestra conducta. No po-
demos rezarla solo con los
labios y actuar, al mismo tiempo, en contra
de nuestra dignidad humana y cristiana.
Juan Pablo II desde la ventana del Vati-
cano o desde cualquier parte del mundo
donde estuviera, rezaba con el pueblo de
Dios el Ángelus.
El amor a María se va desgranando a lo largo
del día. Un amor que no tiene prácticas, que
se queda en un mero pensamiento o en un
simple sentimiento, poco vale. Cuando de-
jamos las prácticas religiosas, estamos de-
jando nuestra cercanía real a Dios. Cuando
nuestro amor a María tiene fondo y fuerza,
surge en gestos, en actitudes, en estilo de
vida que irradia su presencia en nosotros.
Las devociones marianas son auténticos
tesoros, y una de esas breves devociones
es el Ángelus. Todos los días, en algún
lugar del mundo dan las doce –por el mo-
vimiento de rotación de la tierra- y se reza
el Ángelus sucesivamente. Al rezar esta
oración centrada en la encarnación del
Verbo, nos sumergimos en la contempla-
ción del misterio de Cristo.
Cuando nos alejemos de Dios, María es
siempre un buen camino para el retorno
Máxime en unos tiempos en que la cre-
ciente corrupción de las costumbres hace
más necesario el fomento de su culto. De-
bemos acudir constantes y confiados a la
que, llena de gracia, es la mediadora fiel,
amorosa y segura entre Dios y los hombres.
A.R.N.
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Sant
o D
omin
go d
e G
uzm
án │
atrib
utos
icon
ográ
ficos
p/25
Habitualmente se simboliza a
los santos con emblemas que
son muestras de sus pri-
mordiales características.
San Pedro se representa
con "las llaves", simboli-
zando el poder que le
concedió el Señor. San
Vicente Ferrer por
"alas", porque está con-
siderado como el "ángel
del Apocalipsis".
Santo Domingo de Guzmán
lo podemos observar en
nuestro templo con un báculo
en su mano derecha, de la que
cuelga un guión con el emblema
de la Orden de Predicadores junto
con el rosario, y un perro con una
antorcha encendida. En su mano
izquierda un libro y una lila blanca
y una estrella en su frente. Todo ello
describe aspectos o sucesos de la
vida de Santo Domingo.
El hábito dominico, colores blanco y
negro. Las crónicas antiguas mencionan
que la virgen María le mostró el hábito al
beato Reginaldo de Orleáns. El blanco re-
presenta la pureza y el negro la humildad,
la penitencia y la obediencia.
El Perro
La Leyenda narra una visión que su
madre, la Beata Juana de Aza, tuvo antes
de que Santo Domingo naciera. Soñó que un
perrito salía de su vientre con una antorcha
Santos |
Santo Domingo de Guzmány sus atributos iconográficos
Sant
o D
omin
go d
e G
uzm
án │
atrib
utos
icon
ográ
ficos
p/26
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
encendida en su boca. Incapaz de com-
prender el significado de su sueño, deci-
dió buscar la intercesión de Santo
Domingo de Silos. Hizo una peregrinación
al monasterio para pedir al Santo que le
explicara el sueño. Allí comprendió que
su hijo iba a encender el fuego de Jesu-
cristo en el mundo por medio de la predi-
cación. En agradecimiento, puso a su hijo
por nombre Domingo, como el santo de
Silos. Es un nombre muy apropiado, por
cuanto Domingo viene del Latín Domini-
cus, que significa "del Señor". De Domini-
cus (Domingo) viene Dominicanus
(Dominico, que es el nombre de la Orden
de Santo Domingo). No obstante, utili-
zando un juego de palabras, se dice que
Dominicanus es un compuesto de Domi-
nus (Señor) y canis (perro), significando
"el perro del Señor" o el vigilante de la
viña del Señor)
La Estrella
Durante el bautismo de Santo Domingo
apareció una estrella sobre su frente. Con
su ejemplar vida y predicación, fue como
un faro guiando almas hacia Cristo. Desde
sus años de estudiante en Palencia,
donde vendió sus valiosos libros para
conseguir dinero para ayudar a los pobres
que estaban sufriendo por una gran se-
quía, y donde llegó a ofrecerse él mismo
a ser vendido como esclavo para redimir
a cristianos cautivos por los Moros. En su
etapa en el Languedoc, donde pasó los
mejores años de su vida, hasta su ense-
ñanza y predicación, hasta la fundación
de su Orden, Santo Domingo fue siempre
una estrella brillante que atrajo almas
perdidas a Cristo.
La estrella recuerda las palabras de David:
los que enseñen a los demás ser buenos
brillarán por toda la eternidad.
El Lirio Blanco
Simboliza la castidad y la virginidad del
fundador de los predicadores.
La pureza es comparada con el lirio
blanco de los campos. Hay tres cosas que
distinguen a esta preciosa flor de las
demás. La lila se yergue como una prin-
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Sant
o D
omin
go d
e G
uzm
án │
atrib
utos
icon
ográ
ficos
p/27
cesa; su limpia corola celosamente tiende
a abrirse solo a los ojos del sol brillante y
las estrellas, luchando por distanciarse de
la sórdida tierra para elevar toda su fra-
gancia a los cielos. La lila es extremada-
mente sensible. Una mota de polvo es
suficiente para ensuciar su blancura, y
esto es precisamente lo que la convierte
en inimaginablemente bella. La lila expide
un aroma tan delicado y encantador que
perfuma todo lo que está a su alrededor.
¡Así es el perfume de un alma pura!
La Cruz, el Estandarte, el Rosario
La Cruz de dos brazos (llamada "patriar-
cal") es un símbolo de los fundadores de
grandes familias religiosas ("patriarcas")
o de importantes comunidades cristianas
que han dado origen a otras muchas. Se
usa para Santo Domingo porque él fue el
primero en sacar al monje del monasterio
a la ciudad, convirtiéndole en apóstol: un
religioso sin dejar de ser un monje. Otras
órdenes fueron fundadas inmediata-
mente después de los Dominicos o casi si-
multáneamente, como los Franciscanos,
y todos siguieron la misma pauta. Fue
mucho después, en el siglo XVI, cuando
aparecieron las Congregaciones dedica-
das al trabajo apostólico, pero sin obser-
vancias monásticas.
El Estandarte con el emblema Dominicano
es el "escudo de armas" de Santo Domingo.
Blanco y negro: pureza y penitencia,
muerte y resurrección, combinando el ideal
Dominicano de mortificación y alegría, re-
nuncia al mundo y posesión de Cristo.
En cuanto al Rosario, Santo Domingo fue
el fundador del Rosario, un regalo de
María para ayudarle en su trabajo para la
Sant
o D
omin
go d
e G
uzm
án │
atrib
utos
icon
ográ
ficos
p/28
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
conversión del mundo.
Libro
El libro representa el conocimiento, la sa-
biduría y las costumbres de la orden es-
critas en el Capítulo General de 1220.
El libro representa la Biblia, que era la
fuente de la predicación y espiritualidad
de Domingo. Era conocido como el
Maestro Domingo por el grado acadé-
mico que obtuvo en la universidad de
Palencia. Sus coetáneos cuentan que en
sus viajes por Europa siempre llevaba
consigo el Evangelio de San Mateo y las
Cartas de San Pablo. Esto hace referen-
cia a la visión que tuvo en una de sus no-
ches de vigilia. Mientras Domingo
oraba, los Santos Pedro y Pablo se le
aparecieron. San Pedro llevaba consigo
el Evangelio, y Pablo sus Cartas, con este
mensaje: "Ve y predica, porque has sido
llamado para este ministerio". Esta vi-
sión le reafirmó en su vocación de conti-
nuar siendo un "Predicador Itinerante",
no solo en el sur de Francia sino también
en todo el mundo por medio de su
Orden, la "Orden de Predicadores".
Santo Domingo tuvo que enfrentarse con
muchos obstáculos legales para que el
Papa aprobara su nueva Orden. De
acuerdo con la leyenda, el Papa Inocencio
III, Santo Domingo y San Francisco tuvie-
ron un sueño. Cada uno de ellos vio que
la Basílica Laterana estaba comenzando a
derrumbarse, y a dos frailes, uno en há-
bito blanco y el otro en un hábito marrón,
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Sant
o D
omin
go d
e G
uzm
án │
atrib
utos
icon
ográ
ficos
p/29
colocándose ellos mismos como columnas
para evitar el colapso total. Domingo se
reconoció a sí mismo como el fraile del há-
bito blanco, pero no sabía quién era el
otro fraile. De igual modo, Francisco de
Asís se reconoció a sí mismo como el fraile
del hábito marrón, pero desconocía quién
era el del hábito blanco. Para Inocencio III
el sueño era un rompecabezas y un miste-
rio. El día siguiente, cuando Domingo iba
a ver al Papa sobre la aprobación de su
Orden, se encontró a un fraile joven ves-
tido con un hábito marrón. Mirándose
mutuamente, cada uno reconoció al otro
como el compañero que ayudaba a sopor-
tar la Basílica Laterana, y se abrazaron en
medio de la calle. Después fueron juntos
a ver al Papa, y éste comprendió inmedia-
tamente el significado de su sueño: "Las
Órdenes de estos dos gran hombres serán
como columnas que salvarán a la Iglesia
de su destrucción".
Las paredes del presbiterio de nuestra Igle-
sia se adornan con un excelente zócalo de
azulejería, fechado en 1638, que presenta
un amplio repertorio de motivos geométri-
cos y figurativos, entre los que destacan es-
cudos de los Ponce de León y de la Orden
Dominica, así como temas serlianos.
Perro, mundo y tea, son los símbolos que
soñó la madre de santo Domingo y que
anunciaban que su hijo sería predicador.
Los elementos del escudo pueden reducirse
a tres: la cruz flordelisada sobre campo de
plata (blanco) y sable (negro), representa-
tivo de los colores del hábito dominicano. La
cruz foliada, es una de las insignias de la
orden que recuerda el origen francés de la
comunidad y está vinculada con la heráldica
de la familia Guzmán.
Pidamos a Dios todos los días, como lo
hacía Santo Domingo, la gracia de crecer
en el amor hacia Dios y en la caridad
hacia los demás.
A.R.N.
His
toria
de
nues
tra
Her
man
dad
│ Fu
ndac
ión
del C
onve
nto
de S
an P
edro
Már
tir
p/30
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
Luís Cristóbal nació el 28 de agosto 1518 en
Rota (En el Castillo de la Luna) siendo bau-
tizado dos días después ̀ por El Capellán de
los Duques, D. Martín Sánchez Bescano,
apadrinado por D. Francisco Púa y El Co-
mendador D. Miguel Jerónimo y su señora
doña Elena. Ostentaría el Mayorazgo de la
Casa de Arcos entre los años 1530-1573.
Tenía 12 años cuando heredó el Señorío de
Marchena, hijo de D. Rodrigo Ponce de
León y de su tercera esposa María Girón. En
su minoría de edad fue su tutor D. Pedro Té-
llez Girón III Conde de Ureña, después se
hizo cargo el tío de D. Rodrigo, Diego de
Córdoba. Se casó en 1542 con Doña María
de Toledo, hija de Lorenzo Suárez de Figue-
roa Conde de Feria y de Doña Catalina Fer-
nández de Córdoba, Marquesa de Priego.
Tuvieron 3 hijos: Rodrigo que sucedió a su
padre en el Gobierno de la Casa de Arcos.
Luís su segundo hijo que murió muy joven.
Y Pedro el tercer hijo que profesó en El Con-
vento de San Pedro Mártir de la Orden de
Predicadores, fue Obispo de Zamora, des-
pués de haberlo sido de Ciudad Rodrigo y
Rector de la Universidad de Salamanca. Y
se encuentra enterrado en el Monasterio de
San Pedro Mártir.
El Conde de Lan-
zarote que escri-
bió sobre la nobleza en Andalucía dijo de
Luís Cristóbal :”Fue un príncipe tan franco,
tan amado, tan generoso, que toda España
sabe, de su valor en las armas, en consejos
en Gobierno y de sus servicios reales.”
La protección e influencia de su suegro Lo-
renzo Suárez de Figueroa, que ejerció sobre
él y La Casa Ducal los primeros años debie-
ron de influir mucho en sus ideas humanis-
tas y el amor por las artes plásticas. Fue un
gran amante de las Letras y protector de
escultores, artistas y Músicos. Durante el
Gobierno de Luís Cristóbal, Marchena al-
canzó esplendor en lo cultural, pasaron por
la Villa contrastados pintores como: Her-
nando de Alcalá, Diego de Urbina, Diego de
Velasco y Vasco de Pereira. Conocida es la
protección que dispensó al músico sevillano
Cristóbal de Morales al que nombró Maes-
tro de Capilla de la Iglesia de San Juan y de
su Palacio al que hospedó ofreciéndole
Casa. En su tiempo estuvo bajo su tutela el
gran músico marchenero del Renacimiento
Juan Navarro el cual estuvo en la Iglesia de
San Juan bajo la dirección de Morales y que
con el tiempo compuso multitud de obras
Historia de nuestra Hermandad |
D. Luis Cristobal Ponce de León IX Señor de Marchena y II Duque de ArcosDebido a la acogida en el anterior boletin del articulo sobre Don
Rodrigo Ponce de León escrito por nuestro hermano Ramon Luna
Romero, le hemos pedido que siga publicando diferentes articulos
sobre los enterramientos existentes en nuestra Iglesia, para que
de una forma amena vayamos conociendo nuestro Templo.
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
His
toria
de
nues
tra
Her
man
dad
│ Fu
ndac
ión
del C
onve
nto
de S
an P
edro
Már
tir
p/31
polifónicas y religiosas. Su amistad con San
Francisco de Borja el cual visitó la Villa va-
rias veces y se hospedó en su Palacio. Du-
rante su mandato se construyeron y se
terminaron diversas obras de carácter reli-
gioso. A petición de su padre D. Rodrigo
que lo solicitó en su Testamento terminó de
construir la Iglesia y Convento de San Pedro
Mártir. El II Duque de Arcos tendría en
cuenta las consideraciones de su padre, en
lo concerniente al numero de Oficiales en
El Consejo de Marchena, poco antes de su
muerte en 1572. El número de Oficiales se
había reducido considerablemente, limi-
tándose entonces a 1 Corregidor (que ade-
más era Juez de la Audiencia del Duque) 1
Alcalde y Capitán, 1 Alcalde Ordinario, 1 Te-
sorero, 2 Regidores, 1 Depositario General
y 3 Jurados. Por iniciativa de su esposa
Doña María de Toledo y de su hermano
Fray Antonio de Córdoba y con la colabora-
ción de San Francisco de Borja se construye
entre 1556 y 1588 La Iglesia de la Encarna-
ción y antiguo Colegio de Los Jesuitas y
cuyos arquitectos fueron: El Jesuita Barto-
lomé Bustamante y los Maestros Mayores
de la Catedral Hispalense, Martín Gainza y
Hernán Ruiz. En la Iglesia de San Juan Her-
nán Ruiz da las trazas de la torre y cons-
truida por el arquitecto Diego de Velasco y
construye la Torre de Santa María.
En su tiempo se construye El Retablo del
Sagrario de la Iglesia de San Juan obra de
Roque Balduque en 1550 y policromada en
1557 por Antonio Rodríguez. En 1558 Roque
Balduque realiza la figura del Cristo y del Ci-
rineo de la misma Iglesia. En estos años se
escriben en esta Iglesia multitud de obras
polifónicas muchas de las cuales son de
Cristóbal de Morales. En el primer año de
su mandato se empieza a construir el Con-
vento de San Francisco al que colabora con
100 ducados y cuyos fundadores fueron
Diego Núñez del Prado que fue Capitán y
Asistente de la Villa y su esposa Juana Bláz-
quez. Hizo los planos de la primera Plaza de
Arribas, comprando varias casas de una
zona aledaña al Castillo, para derribarlas y
construirlas nuevas y con más amplitud.
Compra y transporta un Molino de viento
flamenco, su desembarco en Sanlúcar de
Barrameda y se instala en la Villa en 1549.
Fue un gran cortesano, honrado, agrada-
ble, apacible, de talle delgado, de buen ros-
tro blanco y el cabello más negro que rubio.
El rey D. Carlos le estimó tanto que siempre
que le nombraban en su presencia decía de
él : “Es el Duque muy buen caballero”.
A la edad de 30 años pasó a Flandes a servir
a su rey Felipe II, antes de partir se pasó por
el Monasterio de Yuste, Retiro del rey D.
Carlos al cual abrazó. Sofocó en 1568 la re-
belión de Los Moriscos en la Vega Grana-
dina. Creó el Cargo de Alférez Mayor, que
era el portador del Estandarte de la Villa en
1572. Prestó servicios a Carlos I como Ge-
neral de la Armada, participando posterior-
mente en las exequias del Emperador. Fue
Embajador de España en Francia.
No todo fue positivo en este Duque. Mante-
nía una Corte de numerosos Pajes dedicados
a cazar y jugar. Visitó París y conoció al rey
Dev
oció
n Cr
iste
ra│
El S
erm
ón d
e la
s Sie
te P
alab
ras
p/32
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
Carlos IX de Francia con quien hizo gran
amistad y se distraían con el Juego de la Pe-
lota, juego que propagó en Marchena ha-
ciendo un campo junto al Apeadero.
El rey de Francia le regaló al Duque una Sor-
tija con un diamante, estimado y valorado en
más de 8000 ducados. Los gastos normales
del año son cuantiosos; los pagos al Sastre y
al Platero suman cantidades elevadísimas. El
uso de metales preciosos distinguen a los
hombres del resto de la sociedad. En el siglo
XVI se establecen en la Villa diversos joyeros
y Plateros entre ellos Juan Ruiz de primera
fila que tendrán al Duque como principal
cliente y al resto de la nobleza. La deuda que
tenía Luís Cristóbal en 1562 ascendía a más
de 45.000 ducados. En 1547 todas las rentas
del Estado de Arcos estaban arrendadas a los
Banqueros Genoveses Lucían Centurión y
Jorge Negrón. Otros gastos de importancia
eran las obras de acondicionamiento que se
llevaron a cabo desde 1543, El Maestro alba-
ñil Pedro Sánchez y el Carpintero Rodrigo
Navarro. En el terreno urbanístico inició la
apertura del Palacio hacía la plaza Ducal y en
este construyó patios, jardines y las depen-
dencias de los nobles, dependencias nuevas
para pajes y caballerizas. De esa forma el
Castillo se convirtió en un Palacio Renacen-
tista.
En El libro de descripción de verdadero retra-
tos de Pacheco se dice de él : “Asistió con
mucha perseverancia a la comunicación y
trato espiritual de los padres de la Compañía
de Jesús, a quien con todas sus fuerzas favo-
reció siempre”.
Haciendo el camino el Duque por la ciudad
de Andujar, le sobrevino una enfermedad tan
aguda, que le obligó a dar la vuelta hacía
Marchena, se agravó la enfermedad en Villa-
franca (Córdoba) donde estuvo dos meses.
Cuando se recuperó un poco se fue a Madrid
por asuntos y negocios. Estando en el Mo-
nasterio de San Jerónimo murió el Duque a
la edad de 55 años de sífilis era el 9 de Octu-
bre de 1573. Sus restos fueron traslados
desde Madrid a Marchena para ser enterrado
en la Iglesia y Convento de San Pedro Mártir,
en el cual colaboró para su terminación. Aquí
en esta Iglesia se celebraron las honras fúne-
bres de su suegra doña Catalina Hernández
de Córdoba y de su esposa doña María de To-
ledo con un coste de 20.000 maravedises.
Doña María de Toledo se encuentra ente-
rrada en la Iglesia y Colegio de los Jesuitas
que ella había mandado fundar, en el lado del
Evangelio
Hurtado de Mendoza dijo del II Duque de
Arcos D. Luís Cristóbal “ que era inclinado y
atento al arte de la Guerra”. En Agosto de
1559 regresó con el rey de Flandes y perma-
neció en La Corte de Toledo y de Madrid
hasta el año 1561.
Ramón Luna Romero
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Hac
emos
her
man
dad │
Rin
cón
del C
osta
lero
p/33
Rincón del costaleroYa pasó la Semana Santa y esos meses pos-teriores en los que nuestros hermanos cos-taleros hacen reflexión sobre los momentosvividos bajo las trabajaderas y el significadoque tiene para todos los cristeros pertenecera su cuadrilla de costaleros.
Y cuando digo esto, me refiero a que todosnuestros titulares son elevados al cielo poruna única cuadrilla que nuestro propio nom-bre de hermandad define “Cuadrilla de la Ar-chicofradía y Real Hermandad del Stimo.Cristo de San Pedro, Maria Santísima de lasAngustias, San Juan Evangelista y Ntra. Sra.Del Rosario”.
En estos momentos a los que nos aproxima-mos mi atención es captada por esa… quecada primer Domingo de Octubre es llevadaa hombros por nuestra cuadrilla, esa… a laque los marchener@s llamamos con tanto
orgullo “Patrona”, esa… que porta en su regazo al niño Jesús y que está custodiada por losmismísimos arcángeles de Dios,…..¡Nuestra Señora del Rosario!.
Os puedo decir que tras mi decisión de meterme hace ya varios años, cambió mi percepciónsobre el significado de meterse bajo su bendita madre. Éste es un significado de gozo, de dulzura, de alegría, de satisfacción, de gracia, de ternura,de devoción….
Una devoción que todos los marchener@s tienen a su bendita patrona, la que en tantosmomentos les ha guiado por el buen camino y a la que con tan solo mirarla transmite la pazy la armonía para nuestros corazones.
Éstos grandes momento vividos, y los años dedicados a ésta hermandad también me dieronuna gran ocasión en mi vida.
Fue hace tres años cuando una llamada y las palabras de una gran persona y mi capatazhasta entonces bajo nuestra madre del Rosario, me daban la oportunidad de acompañarlo
Hac
emos
her
man
dad │
Rin
cón
del C
osta
lero
p/34
Hermandad del Cristo de San Pedro, Mª Stma. de las Angustias y Ntra. Sra del Rosario
delante del paso y sentir desdefuera esas maravillosas levan-tás, y chicotás que nuestroshermanos costaleros realiza-ban y ese mimo con el que lle-vaban a nuestra Madre.
Qué mejor lugar y momentoque éste para darle mis massinceras gracias a José ManuelMuñoz Vázquez por su con-fianza en mi y por habermehecho sentir todo lo que he vi-vido estos tres años junto a él. ¡GRACIAS!
También quisiera dar las gra-cias a todos los hermanos cos-taleros que durante tantosaños han llevado y todavía lle-van sobre su costal a nuestraMadre, y darle ánimos paraque continúen esta gran laborque están llevando a cabo decompañerismo y en definitivade HERMANDAD.
Por todo esto quiero darosesta gran oportunidad a todoslos que quieran sentir estasmaravillosas sensaciones bajosus trabajaderas y de sentirsemuy orgullosos de elevar altoque del capataz a la patronade Marchena… ¡NUESTRAVIRGEN DEL ROSARIO!
Para terminar, quiero transmitir mi felicitación a la comisión encargada de la cena de costa-leros. El sábado 21 de mayo, en la sala Carrera de nuestra localidad, tuvo lugar la cena de her-mandad de los costaleros. La comida fue preparada por D. Sebastián García Salguero y servidapor miembros de la Junta de Gobierno.
Manuel Miguel Sánchez Sánchez
BoletíndelCristo | Virgen del Rosario 2011 | Nº49
Actu
alid
ad │
secr
etar
ía
p/35
EN LA PRESENCIA
DEL PADRE
Que la promesa de vida eterna guardeel alma de nuestros hermanas:
HERMANAS DIFUNTAS
N.H. Dña. Josefa Marquez MartinezN.H. Dña. Remedios Navarro GarcíaN.H. Dña. Antonia Perea López
Alonso Blanco Siles José Delgado Rey José Antonio García Guijarro. Marta Hidalgo Mateo Mariela Hidalgo Ramos María Mayorga Roncel Álvaro Moreno Vega Carmen Ortiz Jiménez Magdalena Osuna Ternero
Marta Pérez Guerrero Miriam Ponce Carmona Ana Rodríguez Cobano Elena Rodas Mateo Lola Romana Sánchez Martín Roncel Carmona José Miguel Salas Cáceres Pelayo Sánchez-Pobre Suárez Irene Suárez Ramírez. Ana Torres Vega
Altas de Hermanos incorporado-as a nuestra Hermandad son:
Todos los recibos
han sido emitidos a cobro,
los hermanos y hermanas que no lo
hallan recibido pónganse en contacto
con secretaría a partir del
15 de septiembre los viernes
de 19 a 21 horas o enviando un
correo electrónico
con el asunto, problema o incidencia.
Un saludo y que el
Santísimo Cristo os bendiga.
Recordad a todos los hermanos y hermanas que todos los viernes del año
rezamos el Santo Rosario y que cada tercer viernes de mes celebramos
misa de Hermandad por nuestros hermanos y hermanas difuntos.
15, 16 y 17 de septiembre de 2011 Solemne Triduo en honor a Nuestra Señora de las Angustías. 21.00 horas Rezo del Santo Rosario y a las 21.30 horas Misa de Triduo.
29 y 30 de septiembre y 1 de octubre de 2011Solemne Triduo en honor a Nuestra Señora del Santísimo Rosario conrezo del Santo Rosario a las 21.00 horas y Santa Misa a las 21.30 h.
2 de octubre de 2011 A las 7.30 horas Rosario de la Aurora por las calles de Marchena. A las 19.30 horas salida procesional de Nuestra Señora del SantísimoRosario por la feligresía de San Miguel.
7 de octubre de 2.011Solemne Besamanos de la Virgen del Rosario de 19.30 a 21.30 horas.
1 y 2 de noviembre Día de todos los Santos y los difuntos turnos de vela en los Panteones.
27 de diciembre Celebración del día de San Juan Evangelista con misa en su honor alas 20.30 h.
2 de febrero de 2.012Misa en honor a la Virgen de la Candelaria a las 20.30 horas.
Todos los viernes de mes rezo del Santísimo Rosario en Santo Domingo y los terceros viernes de mes misa de Hermandad.
15, 16 y 17 de septiembre de 2011 Solemne Triduo en honor a Nuestra Señora de las Angustías. 21.00 horas Rezo del Santo Rosario y a las 21.30 horas Misa de Triduo.
29 y 30 de septiembre y 1 de octubre de 2011Solemne Triduo en honor a Nuestra Señora del Santísimo Rosario conrezo del Santo Rosario a las 21.00 horas y Santa Misa a las 21.30 h.
2 de octubre de 2011 A las 7.30 horas Rosario de la Aurora por las calles de Marchena. A las 19.30 horas salida procesional de Nuestra Señora del SantísimoRosario por la feligresía de San Miguel.
7 de octubre de 2.011Solemne Besamanos de la Virgen del Rosario de 19.30 a 21.30 horas.
1 y 2 de noviembre Día de todos los Santos y los difuntos turnos de vela en los Panteones.
27 de diciembre Celebración del día de San Juan Evangelista con misa en su honor alas 20.30 h.
2 de febrero de 2.012Misa en honor a la Virgen de la Candelaria a las 20.30 horas.
Todos los viernes de mes rezo del Santísimo Rosario en Santo Domingo y los terceros viernes de mes misa de Hermandad.