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684 BOLETÍN OFICIAL Obispado de Bilbao ALDIZKARI NAGUSIA Bilboko Gotzaitegia Urtea • LXVIII • Año • Abendua • 2017 • Diciembre IMPRIME: OBISPADO DE BILBAO. Depósito legal: BI-330-1978

BOLETÍN OFICIAL Obispado de Bilbao ALDIZKARI NAGUSIA … · 2018. 10. 11. · 684 BOLETÍN OFICIAL Obispado de Bilbao ALDIZKARI NAGUSIA Bilboko Gotzaitegia Urtea • LXVIII • Año

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  • 684BOLETÍN OFICIAL

    Obispado de BilbaoALDIZKARI NAGUSIABilboko Gotzaitegia

    Urtea • LXVIII • Año • Abendua • 2017 • Diciembre

    IMPRIME: OBISPADO DE BILBAO. Depósito legal: BI-330-1978

  • 601

    ÍNDICE

    IGLESIA.BIZKAIA.ELEIZEA

    Documentos.Agiriak

    • “Ven, Tú que eres luz y amor” Carta mensual del Obispo (diciembre 2017) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 603

    • Carta del Obispo para el Día del Seminario 2017: “Llamados a amar con obras” (8 de diciembre de 2017) (Bilingüe) . . . . . . . . . . . . 605

    Información.Albisteak

    CAJA DIOCESANA DE COMPENSACIÓN

    • Acta de la reunión de la permanente celebrada el día 13 de diciembre de 2017 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 610

    CRÓNICA DIOCESANA

    • Las Clarisas de Durango entregan su fondo archivístico y bibliográfico a la Diócesis . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 613

    • Erigida la Unidad Pastoral de Barakaldo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 613

    • La iglesia del Sagrado Corazón de Retuerto cumple 70 años . . . . . . 614 • Otros temas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 615

    ELIZBARRUTIKO BARRIAK

    • Durangoko Klaratarrek Eleizbarrutiaren esku itxi dabez euren artxibo eta liburuak . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 617

    • Barakaldoko Pastoral Barrutia osotu da . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 617

    • Retuertoko Jesusen Bihotza eleizak 70 urte bete ditu . . . . . . . . . . . . . 618

  • 602

    • Beste gai batzuk . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 619

    IGLESIA.ESPAÑA.ELEIZEA

    Documentos.Agiriak

    • Nota de los Obispos de la subcomisión de Familia y Vida para la Jornada de la Sagrada Familia (31 de diciembre de 2017) “La familia, hogar que acoge, acompaña y sana”.. . . . . . . . . . . . . . . . . 621

    IGLESIA.ROMA.ELEIZEA

    Documentos.Agiriak

    • VIAJE APOSTÓLICO DE SU SANTIDAD FRANCISCO A MYANMAR Y BANGLADÉS (26 DE NOVIEMBRE - 2 DE DICIEMBRE DE 2017 Discurso del Santo padre en el Encuentro Interreligioso y Ecumé-nico por la paz (Jardín del Arzobispado. Daca. 1 de diciembre de 2017) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 625

    • Mensaje del Santo Padre Francisco para la 55 Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones: “Escuchar, discernir, vivir la llamada del Señor” (3 de diciembre de 2017. Primer domingo de Adviento) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 628

    • Homilía del Santo Padre Francisco en la Santa Misa de Noche-

    buena (Basílica Vaticana, 24 de diciembre de 2017) . . . . . . . . . . . . . . 632

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    IGLESIA. BIZKAIA. ELEIZEA

    Documentos. Agiriak

    VEN, TÚ QUE ERES LUZ Y AMOR

    Abendualdian sartuta bete-betean

    Comenzamos el mes de diciembre con el tiempo de Adviento ya ini-ciado. Este tiempo litúrgico nos dispone a la celebración del Nacimien-to de Jesús. El primer movimiento que reclama el Adviento es reavivar el deseo de Dios. El tenor de vida estresado y galopante en el que nos vemos inmersos, va debilitando y apagando el deseo de Dios en nues-tro corazón. Percibirlo presente y operante en nuestras vidas se hace difícil para muchas personas. Y ese deseo se va apagando y va siendo sustituido por “deseos pequeños”, que nos dan pequeñas satisfaccio-nes y terminan por sumergir la vida en la rutina y la desesperanza, ilu-minada fugazmente por algunas compensaciones que tristemente nos consuelan.

    Jaungoikoaren egarria piztu

    Por eso, la oración del primer domingo de Adviento resalta la cen-tralidad de avivar el deseo de Dios, de romper la costra de pequeños deseos y tristes compensaciones que acaban por aprisionar el corazón y nos sumergen en el tedio y la desesperanza: “Señor, aviva en tus fieles al comenzar el Adviento, el deseo de salir al encuentro de Cristo que viene, acompañados por las buenas obras para que, colocados un día a su derecha, merezcan poseer el reino eterno”.

    Norbanakoaren berreraiketa aldian gagoz

    Pero ¿cómo avivar este deseo? San Agustín, comentando el Evange-lio de San Juan, nos ofrece unas ideas preciosas para que este deseo de Dios renazca en nuestro corazón. Comentando la palabra de Jesús que

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    nos dice “Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre”, el santo obispo de Hipona comenta que el alma no es atraída contra su voluntad, sino que es atraída por el amor. Y este amor que atrae produce el gozo in-terior del alma, redunda en una plenitud que difiere del simple placer. Muchos teólogos coinciden en que las condiciones de vida de quienes vivimos en lo que conocemos como “cultura occidental”, precisamos de una verdadera reconstrucción del sujeto. Efectivamente, lo huma-no está tensionado y violentado por la pérdida del sentido profundo de la vida, la tentación de la desesperación, la permanente necesidad de cambiar, la huida de sí mismo y de Dios, el desconocimiento de la propia identidad como hijo e hija de Dios, la dilución de la verdad y del bien en esta época de relativismo, nihilismo y post-verdad, la mediocri-dad y el populismo... Todo ello conduce a una desintegración del sujeto personal.

    Erraietako maitasuna azaleratu behar dogu

    Frente a esta desintegración de lo humano, es preciso recomponer el sujeto interior, integrar todas las dimensiones de la vida, abrirnos a una trascendencia amorosa que nos llama y nos hace renacer. De este modo vuelve a brotar el deseo del bien, la percepción de la esperanza y el gozo que Dios comunica a los que esperan en Él. Como afirma el salmista: “Mi alma espera en el Señor, espera en su palabra; mi alma aguarda al Señor, más que el centinela la aurora… porque del Señor viene la misericordia, la redención copiosa” (Sal 129, 5-8). Por eso, la invocación del Adviento es “Ven a librarnos de toda esclavitud, ven a ser luz y salvación, Ven amor y misericordia”.

    Seminarioaren egunean, eizue otoitz bokazinoen alde

    En este camino hacia la Navidad, la fiesta de la Concepción Inmacu-lada de María reanima nuestra esperanza y adelanta el gozo del Naci-miento del Señor, En este día celebramos la jornada del Seminario. Os ruego que sigáis orando por las vocaciones a la vida sacerdotal, que ayudéis al seminario con vuestra oración, afecto y colaboración mate-rial y económica. Pidamos a Dios que nos bendiga con los sacerdotes que necesitamos para hacer presente el misterio de salvación en medio de nosotros.

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    Itxi daiguzan albo batera gure harrokeriak ume Jesus gurtzeko

    Y, por fin, llegamos ante el Misterio incomprensible de que Dios se hace niño, llegamos al portal de Belén. Contemplamos con estupor y agradecimiento la sonrisa de Dios, su amor humilde, su grandeza en lo pequeño. Tenemos que hacernos pequeños y niños para entrar en este misterio, para comprender que no podemos acceder al Reino de Dios que acontece en Belén con nuestras armaduras de autosuficiencia y orgullo. No nos cansemos de contemplar el misterio del pesebre. Esa contemplación ablandará nuestras rigideces y frialdades. Tomemos al Niño en nuestro regazo y contemplemos el gozo de María, la Virgen Madre y de San José. Que la Santa Familia alumbre vuestros hogares y os llene de esperanza. Os deseo un santo tiempo de Navidad. Que el Niño Dios os bendiga. Con mi oración y afecto. ¡Feliz Navidad!

    + Mario Iceta GabicagogeascoaObispo de Bilbao

    * * *

    Carta del Obispo para el Día del Seminario 2017

    “LLAMADOS A AMAR CON OBRAS”

    Queridos hermanos y hermanas.

    1. Celebramos un año más el día del Seminario, coincidiendo con la fiesta litúrgica de la Concepción Inmaculada de María. En Ella contemplamos la llamada de Dios a participar en su obra de salvación y la respuesta plena y generosa de María a concebir en su seno al Hijo de Dios como esclava hu-milde y entregada del Señor.

    2. La celebración del día del Seminario se enmarca este año en el surco de la jornada mundial de los pobres que el Papa Francisco ha instituido por vez primera para toda la Iglesia. El lema que ha escogido está inspirado de la primera carta del apóstol San Juan, “no amemos de palabra sino con obras” (cfr. 1 Jn 3,18). Se trata de estimular a los fieles a responder a la cultura del

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    descarte y del derroche impulsando la cultura del encuentro, del servicio, del amor de predilección por los necesitados. Esto nos ayudará a salir del in-dividualismo, de buscar únicamente el propio interés y a abrirnos al encuen-tro y al servicio del prójimo que genera la comunión y la fraternidad. Así mismo, el Papa nos recuerda que el fundamento de las iniciativas concretas que se propongan para ese día es la oración, proponiendo el Padrenuestro como la oración que debe inspirar esta jornada.

    3. Por este motivo, el lema escogido para el día del seminario se sitúa en esta misma perspectiva: “llamados a amar con obras”. En el cartel que se acompaña aparecen cuatro gestos de Jesús que fundamentan la vida cris-tiana y que se concreta en el ministerio de los sacerdotes: la imposición de manos, la Palabra, la fracción del pan y el lavatorio de los pies. La imposi-ción de manos es el gesto litúrgico que actualiza la llamada de Dios y la respuesta de quien acepta agradecido y confiado en poner la vida entera bajo el designio, la protección y la providencia divina. Esta imposición de manos conlleva siempre una misión. Es la constitución del discipulado que es al mismo tiempo envío y misión a evangelizar a los pobres, a liberar a los prisioneros, a dar la vista a los ciegos, a proclamar el año de gracia del Señor.

    4. El fundamento de la jornada mundial de los pobres se encuentra, como hemos indicado, en la oración. Una oración inspirada en la Palabra de Dios, Palabra siempre viva y eficaz que acompaña, inspira, instruye, fortalece y sostiene a los fieles cristianos. Es una Palabra que debe ser proclamada, anunciada y testimoniada por quienes son enviados a edificar el Reino de Dios. La Eucaristía es el don de Cristo que se entrega por nosotros y de la dispersión nos convoca en la comunión, en la fraternidad, en el servicio. Este don de la Eucaristía nos dispone e impulsa a ser nosotros, al mismo tiempo, un don para los demás. Y el lavatorio de los pies es el gesto del amor de Dios que se hace pobre y siervo y nos enseña a servir, a amar con obras concretas, a lavarnos los pies los unos a los otros en la vida cotidiana.

    5. Los sacerdotes han sido llamados para este servicio de amor y de en-trega. Ellos, por la imposición de manos, se sitúan bajo esa protección amo-rosa de Dios que los sostiene y los envía a predicar la Palabra con paciencia y dedicación, a celebrar la Eucaristía que es el alimento que nos sostiene y que nos lleva a lavar los pies y servir a los hermanos, de modo particular a los más necesitados.

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    6. En el seminario, un grupo de jóvenes que han percibido esta llamada se preparan para ser los presbíteros que el día de mañana sirvan a nuestras comunidades y a todos los que necesitan de su ministerio. Hoy es un día para orar por ellos y sus formadores, y comprometernos a hacerlo habitual-mente. También es una ocasión para comprometernos a estar más cercanos al seminario, conocer su realidad concreta, participar de su vida, acudir a sus convocatorias y a sostener con nuestra oración y acompañamiento a las vo-caciones al ministerio sacerdotal. Además, el seminario precisa de la ayuda material y económica necesaria para llevar adelante su tarea formativa. Sea-mos generosos en sostener la formación de quienes están llamados a amar con obras de entrega y servicio en favor nuestro y de los más necesitados.

    7. Que la Inmaculada Concepción proteja a la comunidad formativa del seminario y ayude a muchos jóvenes a responder con generosidad a la lla-mada que Dios les dirige para hacerles partícipes de este ministerio. La res-puesta plena y confiada de María a participar en la obra salvadora de Dios sea siempre nuestro modelo y nuestra esperanza.

    Con gran afecto.+ Mario Iceta Gabicagogeascoa Obispo de Bilbao

    8 de diciembre de 2017

    Seminarioaren eguna 2017

    EGITEZ MAITATZERA DEITUAK

    Anai-arreba maiteok.

    1. Beste urte batez, Mariaren Sortze Garbiaren jai liturgikoan, Seminarioaren eguna ospatzen dogu. Berarengan begiesten dogu Jaungoikoaren deia bere salbamen-egintzan eta Mariaren erantzun oso eta eskuzabala, bere sabelean Jaungoikoaren Semea sortuz, bere burua gorputz eta arima Jaunari eskaintzen deutsan zerbitzari apal lez.

    2. Seminarioaren eguna, Frantzisko Aita Santuak Eleiza osorako lehenengo aldiz izendatu dauan behartsuen aldeko munduko egunaren

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    haritik ospatuko dogu aurton. Ekitaldi honetarako aukeratutako goiburuak San Joan apostoluaren lehenengo gutunean jasoten diran berbak hartzen ditu: “ez daigun hitzez maitatu, egitez baino” (ik. 1 Jn 3, 18). Fededunak, baztertuak sortzen dituan eta zarrastelkerian oinarritutako kulturari aurre egitera bultzatzean datza, danon artean, bategitearen, zerbitzuaren, behartsuak lehenesten dituan maitasunaren kultura suspertzeko. Honek bakarkeriatik urteten, bakarrik norbere interesa bilatzeari uko egiten eta lagun hurkoaren bila eta zerbitzura urteten lagunduko deusku, holan, alkartasuna eta senidetasuna sortuz. Era berean, egun horretarako proposatutako ekimen zehatzen oinarria otoitza dala gogoratzen deusku Aita Santuak, jardunaldi horretako oinarria ‘Gure Aita’ otoitza izango dala adierazoz.

    3. Horrexegaitik, seminarioaren egunerako goiburua be ikuspuntu berekoa da: “egitez maitatzera deituak”. Kartelean, kristau bizitza oinarritzen daben eta abadeen ministerioan zehazten diran Jesusen lau zeinu agertzen dira: eskuipintea, Hitza, ogiaren zatiketa eta oinak garbitzea. Esku-ipintea, Jaungoikoaren deia eta esker onez eta bizitza osoa jainkozko borondate, babes eta probidentziaren pean ipinteko uste osoz onartzen dauanaren erantzuna gaurkotzen dauan keinu liturgikoa da. Esku-ipinte honek misinoa dakar beti beragaz. Irakasle izatera daroa, hau da bialketa eta misinoa da aldi berean, behartsuei barri ona zabaltzeko, giltzaperatuak askatzeko, itsuei ikusmena itzultzeko, Jaunaren graziazko urtea hots egiteko.

    4. Aitatu dogunez, Behartsuen aldeko Munduko Egunaren oinarria otoitzean datza. Jaungoikoaren Hitzean, kristau fededunen laguntasun, goiargi, irakaspen, sendotasun eta euskarri dan Hitz bizi eta eraginkorrean oinarritutako otoitzean. Hitz hau hots egin, iragarri egin behar dabe eta bere lekukotasuna emon, Jaungoikoaren Erreinua eraikitzera bialduak diranek. Eukaristia bere burua gure alde emoten dauan Kristoren doea da eta sakabanatuta gagozanok alkartasunean, senidetasunean, zerbitzuan batzen gaitu. Eukaristiaren doe honek gu geu besteentzat doe izateko prestatzen gaitu eta, aldi berean, horretara bultzatzen. Eta oinak garbitzea, txiro eta zerbitzari egiten dan eta zerbitzari izaten, egitez maitatzen eta eguneroko bizitzan alkarri oinak garbitzen irakasten deuskun jaungoikoaren maitasunezko keinua da.

  • 609

    5. Abadeek maitasun eta emotezko zerbitzu honetarako deituak izan dira. Eurak, esku-ipintearen bidez, Jaungoikoaren babes maitekor horren pean jarten dira eta Harek Hitza eroapenez eta arduraz hots egitera, euskarri eta sustagarri dogun eta anai-arrebei, batez be behartsuenei, oinak garbitzera eta eurak zerbitzatzera garoazan Eukaristia ospatzera bialtzen ditu.

    6. Seminarioan, dei hau entzun daben gazteak abade izateko prestatzen dihardue, egunen batean, gure alkarteen eta euren ministerioaren beharra daben guztien esanetara jarteko. Gaurkoa, abadegaien eta euren hezitzaileen alde otoitz egiteko eta maiztasunez egitera konprometitzeko eguna da. Seminariora gehiago hurreratzeko, bere gorabeherak ezagutzeko, bertako bizitzan parte hartzeko, bere deialdiei erantzuteko eta gure otoitz eta laguntasunaz, abade ministeriorako bokazinoei eusteko konpromisoa hartzeko aukera be bada. Gainera, seminarioak ezinbestekoa dau laguntza material eta ekonomikoa bere eginkizun hezitzailea aurrera eroateko. Eskuzabalak izan gaitezan gure eta behartsuenen aldeko eskaintza eta zerbitzuzko egintzez maitatzera deituak diranen heziketari eusteko.

    7. Sortze Garbiak babestu daiala seminarioko hezkuntza alkartea eta lagundu deiola gazte askori Jaungoikoak ministerio honetako partaide izateko egiten deutsan deiari erantzuten. Jaungoikoaren salbamen-egintzan parte hartzeko Mariaren erantzun oso eta konfiantzaz betetakoa izan daitela beti gure eredu eta itxaropena.

    Bihotzez. + Mario Izeta Gabikagoxeaskoa

    Bilboko Gotzaina

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    INFORMACIÓN. ALBISTEAK

    CAJA DIOCESANA DE COMPENSACIÓN

    ACTA DE LA REUNIÓN DE LA PERMANENTE,CELEBRADA EL DÍA 13 DE DICIEMBRE DE 2017

    Asisten:

    José María Ziarrusta (Administración Diocesana); Mónica Gortázar (Caja Diocesana de Compensación); Manuel Núñez (Vicaría I); Ana Isabel Valle (Vicaría II); Álvaro de la Rica (Vicaría III); Federico Mendizábal (Vicaría IV); José Ramón Pildain (Vicaría VI) y Josu Legina (Vicaría VII)

    La cantidad final de 2017 destinada a ayudas asciende a 501.510,50€

    A 31/12/2017 se han concedido ayudas por importe 501.510,50€. Esto supone el 100% del presupuesto del año 2017

    De las ayudas solicitadas en esta reunión se han concedido un total 244.515,75€. Y se han aprobado préstamos FAI por importe de 99.687,28€

    DISTRIBUCIÓN DE LAS AYUDAS A FONDO PERDIDO Y CONCESIÓNDE PRÉSTAMOS FAI

    PQ. SAN MARTIN OBISPO MARZANA Doscientos treinta y cinco con noventa y ciento euros (235,95€) última factura de la obra de 2016 PQ. SANTO TOMÁS (Ermita S. Pelaio) GERNIKA Se aprueba la ampliación del préstamo FAI concedido en 2016, pasando de 10.000€ a 12.000€.

  • 611

    PQ. LA SANTISIMA TRINIDAD (Altamira) BILBAOSeis mil (6.000,00€) para la sustitución de aleros y reparación de la venta.También se le concede un préstamo de 7.000€

    PQ. LA ASUNCIÓN (Ermita del Cristo) BUSTURIADieciséis mil seiscientos setenta y cuatro con treinta y ocho euros (16.674,38€). Por reparación de la cubierta y restauración del Cristo.También se aprueba la concesión del préstamo FAI por importe de 10.000€

    PQ SAN FRANCISCO DE ASÍS-BILBAO Doscientos sesenta con ochenta y nueve euros (260,89€). Por los intereses de segundo semestre de 2017 del préstamo FAI 140

    PQ PURISIMA CONCEPCIÓN DE ELORRIOMil setenta y siete con noventa y cinco euros (1.077,95€). Por los intereses de segundo semestre de 2017 del préstamo FAI 039

    PQ SANTA MARIA DE BIRGINETXEDoscientos ochenta y dos con treinta y ocho (282,38€). Por los intereses de segundo semestre de 2017 del préstamo FAI 124

    PQ LA ASUNCIÓN NTRA SRA DE SOPUERTAAmpliación préstamo FAI en 35.370,96 para el pago de la última certificación de obra.

    PQ SAN MARTIN OBISPO CARRALCiento setenta y un mil doce con cuarenta y cuatro euros (171.012,44€) para cancelar el préstamo FAI 248

    PQ SAN IGNACIO DE BARAKALDOSiete mil seiscientos cincuenta y siete (7.567,00€). Para derramas para ascensor

    PQ SAN PEDRO DE BASAURIVeinte mil ciento setenta y siete con cuarenta y dos (20.177,42€) por urgente desprendimiento de la torre.

  • 612

    Se aprueba la concesión de un préstamo de 18.598,39€ Estas ayudas y préstamos están sujetos a que la parroquia amortice los 884,70€ pendiente del préstamo 138.Se insta a la parroquia a realizar una colecta extraordinaria para sufragar el resto de la obra.

    PQ SAN MIGUEL ARCANGEL –KARRANTZAQuince mil euros (15.000€) para la reparación de la cubierta del templo y pórtico de la iglesiaLa parroquia aporta 10.764,62€ de colectas extraordinarias.

    PQ LA PURISIMA CONCEPCIÓN DE ELORRIO (Ermita de Gaztea)Mil ciento ochenta y siete con veintidós euros, (1.187,22€) Cancelación préstamo FAI 177

    PQ SANTISIMO SACRAMENTOCuatro mil novecientos cincuenta con doce euros (4.950,12€) Cancelación préstamo FAI 243

    Se proponen y aprueban las fechas de las reuniones del 2018

    7 de marzo, miércoles 9.30 AM6 de junio, miércoles 9.30 AM26 de septiembre, miércoles 9.30 AM12 de diciembre, miércoles 12.00 AM

    No habiendo más asuntos que tratar, se dio por finalizada a reunión.

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    CRÓNICA DIOCESANA*

    Las Clarisas de Durango entregan su fondo archivístico y bibliográfico a la Diócesis

    La Congregación de las Madres Clarisas del monasterio de San Antonio de Durango han entregado, en depósito, su fondo de archivo y bibliográfico a la Diócesis de Bilbao. Entre los libros catalogados destacan los enviados desde México por Fray Juan de Zumarraga o la bula del papa Eugenio IV, en la que reconoce y confirma los derechos religiosos de la comunidad.

    Tras la firma del acuerdo, la priora del monasterio, Purificación Arregi, se mostró satisfecha “porque de esta manera se podrán conservar en las condiciones apropiadas estos documentos y libros que hemos guardado en el convento durante siglos”. La directora del Archivo Diocesano, Anabella Barroso, recibió los documentos entre los que se encuentra la bula `Amabilis Fructus´ del papa Eugenio IV –Florencia 1439- por la que el pontífice “reconoce y confirma” los derechos religiosos de la recién fundada Comunidad de Hermanas Terciarias Franciscanas de Durango y “concede las gracias que le solicitan”.

    Erigida la Unidad Pastoral de Barakaldo

    El sábado 2 de diciembre, el obispo diocesano, Mons. Mario Iceta, presidió el acto de Erección Canónica de la Unidad Pastoral (UP) Barakaldo. La celebración tuvo lugar en la parroquia de San Vicente Mártir y, las realidades presentes en la Unidad Pastoral son las parroquias de San Vicente, Santa Teresa, San José, Ntra. Sra. de la Esperanza, Ntra. Sra. del Carmen y San Ignacio; las comunidades de vida consagrada Paúles, Salesianos, Salesianas, Misioneras de Jesús Obrero y Terciarias Capuchinas; las comunidades del Camino Neocatecumenal de Santa Teresa y Ntra. Sra. del Carmen; las comunidades eclesiales de origen diocesano (D. Vicente Pedrosa) de San Vicente y San José y Acción Católica (EKO-ACG y HOAC).

    Cientos de personas tomaron parte en la celebración que oficializaba

    el trabajo en común que parroquias, asociaciones, órdenes religiosas, comunidades, etc., de Barakaldo, llevan haciendo desde hace varias

    * La información de esta Crónica Diocesana está elaborada por el DEPARTAMENTO DIOCESANO DE COMUNICACIÓN.

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    décadas. Todas esas realidades estuvieron representadas y participaron en el acto, que con el lema “Construimos Iglesia”, comenzó con la lectura del Decreto de Erección, a cargo del presbítero responsable de la Unidad Pastoral, José Alberto Güemes.

    El Obispo, en su homilía, dijo que la Iglesia es comunión de realidades muy diversas. “La comunión es comunicación y fruto del amor, del conocimiento mutuo, de compartir los dones”. Mons. Iceta propuso en el inicio del Adviento “salir al encuentro de Dios” y remarcó que vivimos en una sociedad donde demasiadas cosas reclaman nuestra atención y, en ocasiones, nos distraemos de lo profundo e importante de nuestra vida “y nos perdemos lo mejor de la vida”. El Obispo pidió “leer la vida con los ojos de Dios. En este tiempo de Adviento –dijo- tengamos ese deseo de Dios y pidámosle no vivir distraídos en cosas insustanciales. Seamos testigos de su nombre y prediquemos la esperanza de su buena noticia”.

    Gesto solidario a favor de Cáritas

    Antes de finalizar el acto, José Alberto Güemes explicó el “Gesto solidario” que se va a llevar a cabo en las parroquias de Barakaldo a lo largo de este Adviento. Se pondrán en venta unas pulseras (al precio de 1 euro) con el lema del Papa Francisco “No amemos de palabras... Egin eta ekin” cuyos beneficios irían destinados íntegramente a la campaña de Navidad de Cáritas.

    Mons. Iceta despidió la celebración con un recuerdo especial a los hogares en los que peor lo están pasando en este momento por problemas de enfermedad o dificultades económicas.

    La iglesia del Sagrado Corazón de Retuerto cumple 70 años

    El 14 de diciembre de 1947, el Obispo de Vitoria, Mons. Carmelo Ballester, bendijo la iglesia parroquial dedicada al Sagrado Corazón y situada en el barrio barakaldés de Retuerto (que actualmente pertenece a la Unidad Pastoral -UP- Errekarte). Por aquellos años, hasta 1950, nuestra Diócesis pertenecía a la Diócesis de Vitoria, de ahí que el Obispo que inauguró la parroquia, fuera el titular de la Diócesis alavesa. El primer párroco fue D. Ángel Castro Quintano.

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    Con motivo del aniversario, a lo largo de los meses de noviembre y diciembre, se han ido desarrollando diversas actividades: conciertos corales, exposiciones de fotografías, ornamentación de objetos, libros antiguos y ropa litúrgica y cine–fórum para familias. Todo ello organizado por el Consejo parroquial que, a su vez, pretende restaurar, a través de suscripción popular, la imagen neogótica de un Cristo crucificado, que data de hacia 1880.

    Como broche final a las celebraciones, el domingo, día 17 de diciembre tuvo lugar una eucaristía solemne, presidida por el responsable de la UP Errekarte, Fernando Marcos y concelebrada por varios de los sacerdotes que habían sido párrocos en esa iglesia. Participaron las corales ZIGOR de Barakaldo y el BIERZO CANTA, de Ponferrada. Al finalizar la eucaristía ambas corales ofrecieron un concierto y después hubo un alarde de danzas vascas a cargo de grupo ERREKA ORTU, del barrio y comida popular.

    Otros temas

    El sábado 2 de diciembre, el Obispo presidió, en Derio, la eucaristía en el encuentro de la Asociación Astintze 53-70, que toma su nombre del apeadero del ferrocarril Bilbao-Lezama, situado frente al Seminario, que era el medio de transporte que los seminaristas utilizaban aquellos años 1953 a 1970. Astintze fue presentada públicamente en mayo de 2000 y organiza encuentros culturales durante el año.

    Con motivo del Día de la Discapacidad, el domingo, 3 de diciembre, la Catedral acogió una eucaristía presidida por el Obispo diocesano quien, además, por la mañana, había visitado la villa de Lanestosa, donde presidió la Eucaristía dominical.

    El 8 de diciembre, solemnidad de la Inmaculada Concepción, nuestra Diócesis celebra el día del Seminario Diocesano. Mons. Iceta presidió en la catedral de Santiago, una solemne eucaristía a las doce del mediodía. Este curso siete seminaristas se están formando en la Diócesis, además de cuatro personas que están en la Residencia Vocacional y que, junto al Equipo que les acompaña en su formación, componen la familia del Seminario Diocesano.

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    El domingo 10 de diciembre, el Obispo presidió en la catedral de Santiago, a las 19:00 h., una celebración de acción de gracias por la beatificación de tres mártires Paúles originarios de la Diócesis de Bilbao que había tenido lugar el 11 de noviembre, en Madrid y en la que habían sido beatificados por el cardenal Amato 60 mártires por persecución religiosa. El acto de Madrid estuvo concelebrado por unos 35 cardenales y obispos de distintas diócesis, entre ellos Mons. Mario Iceta. El Hno. Elexgarai, natural de Busturia, Felipe Basauri Altube, de Bilbao y Eduardo Campos Vasallo, de Orduña son los tres mártires nacidos en Bizkaia y cuya celebración de Acción de Gracias presidió el Obispo.

    Ese mismo día, el Obispo presidió en Durango la eucaristía del aniversario de “Jesuiten Etxea” de Durango y el día 13 participó en la reunión de obispos del País Vasco con los Superiores Mayores de las congregaciones religiosas, en Loiola. El día 14, mantuvo un encuentro con los últimos ordenados, en Artebakarra y presidió la Asamblea de la Adoración Eucarística Perpetua.

    Dentro de las visitas que realiza Mons. Iceta a las diferentes zonas de, nuestra Diócesis, el domingo 17 estuvo junto a la comunidad parroquial de Sopuerta y presidió la eucaristía en La Baluga. El municipio de Sopuerta, además, rindió un acto de reconocimiento en honor del párroco Iñaki Franco Capetillo, en el que le entregó el decreto que contenía el acuerdo del pleno del Consistorio y una placa, que después se colocó en la plaza de Mercadillo, ya que la localidad ha añadido dos nuevos nombres a su callejero. Dos plazas estrenan denominación después de que el Ayuntamiento aprobara bautizarlas con el nombre de dos personajes de la localidad. La plaza ubicada junto a la iglesia de Mercadillo se denominará Iñaki Capetillo, y la de El Carral llevará el nombre de Francisco de Garay (Sopuerta, 1475) explorador que coincidió con Cristóbal Colón en una travesía a América en 1493.

    El mismo domingo 17, por la tarde, el Obispo presidió la eucaristía con oración vocacional en la que, además, se presentaron dos candidaturas a órdenes sagradas. El seminarista Txomin Alonso fue admitido como candidato al presbiterado y Roberto Vidal al diaconado permanente.

    El día 24 de diciembre, Mons. Iceta presidió una eucaristía en la Fundación Gizakia, en Gordexola y el 25, la Solemnidad de la Natividad del Señor, en la Catedral de Santiago, a las 12:00 del mediodía.

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    ELEIZBARRUTIKO BARRIAK*

    Durangoko Klaratarrek Eleizbarrutiaren esku itxi dabez euren artxibo eta liburuak

    Durangoko San Antonio monasterioko monja klaratarren kongregazinoak Bilboko Eleizbarrutiaren esku itzi ditu gordailuan bere artxibo eta liburuak. Katalogatutako liburuen artean, Fray Juan de Zumarragak Mexikotik bialdu ebazanak nabarmentzen dira eta baita Eugenio IV.a aita santuaren bulda be, komunidadearen eskubide erlijiosoak autortuz eta berretsiz.

    Purificacion Arregi monasterioko priorea pozik agertu zan akordioaren sinaduraren ostean, “honan gizaldiz gizaldi komentuan gorde izan doguzan agiri eta liburu honeek baldintza egokietan gordeko diralako”. Anabella Barroso Eleizbarrutiko Artxiboko zuzendariak jaso ebazan agiriak, tartean, aitatu danez, Eugenio IV.a aita santuaren ‘Amabilis Fructus’ bulda, non aita santuak Arreba Hirukoiztar Frantziskotarren Durangoko Komunidade sortu barriaren eskubide erlijiosoak “autortzen eta berresten” dituan eta “eskatzen deutsiezan dohainak emoten” deutsezan.

    Barakaldoko Pastoral Barrutia osotu da

    Abenduaren 2an, zapatuz, on Mario Izeta gotzaina izan zan buru Barakaldoko Pastoral Barrutiaren (PB) Izendapen Kanonikorako eleizkizunean. Ospakizuna San Bizente Martiria parrokian izan zan eta honeek dira Pastoral Barrutia osatzen dabenak: San Bizente, Santa Teresa, San Jose, Itxaropenaren Ama, Karmeneko Ama eta San Inazio parrokiak; Paulak, Salestar fraileak, Salestar monjak, Jesus Langilearen Misiolariak eta Hirukoiztar Kaputxinoak biziera sagaratuko komunidadeak; Santa Teresa eta Karmeneko Ama Bide Neokatekumenaleko komunidadeak; San Bizente eta San Jose eleizbarrutiko eleiz komunidadeak (On Vicente Pedrosa) eta Ekintza Katolikua (EKO-ACG eta HOAC).

    Ehunka lagunek parte hartu eban Barakaldoko parrokiek, alkarteek,

    ordena erlijiosoek, komunidadeek, e.a., hainbat hamarkadetan egiten diharduen baterako lana ofizial bihurtzeko ospakizunean. Errealidade guztiak

    * Elizbarrutiko Barriak egitea Komunikazinorako Elizbarrutiko Sailaren ardurea da.

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    egon ziran ordezkatuta eta elizkizunean esku-hartu eben. “Eleiza eginez” goiburupean ospatu zan ekitaldiaren hasieran, Izendapen-agindua irakurri eban Jose Alberto Güemes Pastoral Barrutiko abade arduradunak.

    Eleiza, askotariko errealidadeen alkartasuna dala esan eban Gotzainak bere homilian: “Alkartasuna, maitasunaren, alkar ezagutzearen, doeak alkarbanatzearen zabaltzea eta frutua da.”. On Mario Izeta gotzainak, Abendu aldiaren hasieran, “Jainkoaren bila atarateko” esan eutsen, bizi garan gizarte honetan bizitzan gauza larregik erakarten dau gure arreta eta, ondorioz, askotan, ez dogu arretarik jarten benetan sakon eta garrantzitsu diranetan, “bizitzako gauzarik onenak galduz”. Gotzainak, eskaria be egin eutsen: “irakurri daigun bizitza Jaungoikoaren begiez. Abendu aldi honetan, Jaungoikoa irrikatu daigun eta Berak lagundu deigula ganorabako gauzetan arretarik ez galtzen. Izan gaitezan bere izenaren lekuko eta hots egin daigun bere barri onaren itxaropena”.

    Alkartasun zeinua Caritasen alde

    Eleizkizunari amaiera emon aurretik, Jose Alberto Güemesek Abendu aldian Barakaldoko parrokietan egingo eben ‘alkartasun zeinua’ azaldu eban. “No amemos de palabras… Egin eta ekin”, Frantzisko Aita Santuaren goiburua idatzita eukien eskumuturrekoak salduko ziran euro baten truke eta ataratako diru guztia Caritasek Gabonetan sustatzen dauan kanpainarako izango zan.

    On Mario Izeta Gotzainak ospakizunari amaierea emoteko sasoi berezi haretan gaixorik edo diru preminan dagozanak euki ebazan gogoan.

    Retuertoko Jesusen Bihotza eleizak 70 urte bete ditu

    1947.eko abenduaren 14an, On Carmelo Ballester Gasteizko Gotzainak bedeinkatu eban gaur egun Errekarte PBaren barruan dagoan Retuerto Barakaldoko auzoko Jesusen Bihotza parrokia-eleiza. Sasoi haretan, hain zuzen be 1950era arte, gure Eleizbarrutia Gasteizko Eleizbarrutiaren barruan egoan eta horrexegaitik bedeinkatu eban parrokia arabar eleizbarrutiko gotzain titularrak. Angel Castro Quintano izan zan lehenengo parrokoa.

    Urteurrena dala-eta, azaroan eta abenduan askotariko jarduerak garatu izan dabez, esate baterako: abesbatzen kontzertuak, argazkien erakusketak,

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    gauzen apainketa, liburu zaharrak eta liturgi-jantziak eta zine-foruma familientzat. Parrokiako batzordea izan da guzti horreez arduratu izan dana eta bere nahia 1880. urte ingurukoa dan Kristo kurutziltzatuaren irudi neogotikoa zaharbarritzea da eta horretarako herri-harpidetza jarriko dau martxan.

    Ospakizunei amaiera bikaina emoteko, abenduaren 17an, domekaz, Meza Nagusia ospatu eben Fernando Marcos Errekarte PBko arduraduna buru zala eta eleiza honetako parroko izan dan hainbat abadek alkar-meza emon eban. Barakaldoko ZIGOR eta Ponferradako BIERZO CANTA abesbatzek parte hartu eben. Eukaristiaren amaieran, aitatutako abesbatza bi horreek kontzertua eskain eben, ERREKA ORTU auzoko taldearen eskutik euskal dantzen emonaldia izan zan eta herri bazkaria ospatuko eben.

    Beste gai batzuk

    Abenduaren 2an, zapatuz, gotzaina izan zan buru Derion, ‘Astintze 53-70’ alkartearen topaketako Eukaristian. 1953 eta 1970 urteen bitartean abadegaiek erabilten eben garraioa trena zan eta Bilbao-Lezama ibilbidean egoan geralekuaren izena hartu eban alkarte honek. 2000eko maiatzean aurkeztu eben ‘Astintze’ alkartea eta harrezkero, hainbat jarduera kultural antolatzen dau urtean zehar.

    Abenduaren 3an, domekaz, desgaitasunaren eguna zala-eta, Katedralean Eukaristia ospatu zan, eleizbarrutiko Gotzaina buru zala. Goizez, gainera, Lanestosan izan zan eta han buru izan zan domekako Eukaristian.

    Abenduaren 8an, Sortze Garbiaren Egunean, gure Eleizbarrutian Seminarioaren eguna ospatzen da. On Mario Izeta izan zan buru Santiago katedralean eguerdiko hamabietan ospatu zan Meza Nagusian. Kurso honetan, zazpi abadegaik dihardue prestatzen Eleizbarrutian eta lau lagun bizi dira bokazino egoitzan. Honeek eta heziketan laguntzen deutsen taldeak osatzen dabe Eleizbarrutiko Seminarioko familia.

    Abenduaren 10ean, domekaz, gotzaina izan zan buru jatorriz Bilboko Eleizbarrutikoak ziran hiru martiri Paul dohatsu autortu izanagaitik eskerrak emoteko Santiago katedralean, 19:00etan, egin zan ospakizunean. Hain zuzen be, joan dan azaroaren 11n, Amato kardinala buru zala, Madrilen

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    egin zan eleizkizunean, jazarpen erlijiosoagaitik martiri hil ziran 60 lagun dohatsu autortu ebezan, tartean, aitatutako bizkaitar horreek. . Hainbat Eleizbarrutitako hogeta hamabost kardinal eta gotzainek -tartean on Mario Izeta gotzaina- emon eben elkar-meza egun haretan. Busturian jaio zan Elexgarai Anaia, Bilboko Felipe Basauri Altube eta Urduñako Eduardo Campos Vasallo dira Bizkaian jaiotako hiru martiriak eta euren alde ospatutako esker oneko Eukaristian izan zan buru Gotzaina.

    Egun berean, Gotzaina izan zan buru Durangon “Jesuiten Etxea” dalakoaren urteurreneko Eukaristian eta abenduaren 13an, Euskal Herriko gotzainen eta kongregazino erlijiosoetako Nagusien batzarrean parte hartu eban Loiolan. Abenduaren 14an, azken ordenatuakaz alkartu zan Artebakarran eta Betiereko Eukaristia-gurtzaren batzar nagusian buru izan zan.

    On Mario Izeta gotzainak Eleizbarrutiko hainbat lekutara egiten diharduan bisitaldien barruan, abenduaren 17ab Sopuertako parroki alkarteagaz izan zan eta Balugan eguerdiko hamabietan ospatu zan Eukaristian buru izan zan. Sopuertan, gainera, Iñaki Franco Capetillo parrokoari autortza eskaini eutsen ekitaldi batean. Udalbatzaren osoko bilkuran hartutako akordioa jasoten eban dekretua eta bero ‘Mercadillo’ plazan jarri eben plaka emon eutsezan. Izan be, herriko plaza biri izen barriak jarri deutsez, udalean herriko persona biren izena ipintea onartu ondoren. ‘Mercadillo’ko eleizaren ondoan dagoan plaza Iñaki Capetillo deituko da eta El Carralekoa, Francisco de Garay (Sopuerta, 1475), esploratzailea berau eta Amerikara egindako itsas bidaietako batean Cristobal Colonegaz batera joan zan 1493an.

    Egun berean, abenduak 17, Gotzaina buru izan zan arratsaldez eukaristian eta bokazinoen aldeko otoitzaldian, katedralean. Ospakizun berean, ordena sagaratuetarako hautagai bi aurkeztu ziran. Txomin Alonso abadegaia abadetzarako hautagai lez onartu eben eta Roberto Vidal diakonotzarako hautagai lez.

    Abenduaren 24an, on Mario Izeta gotzaina buru izan zan Gordexolan, Gizakiz Fundazinoaren egoitzan ospatu zan Eukaristian eta abenduaren 25ean, Jaunaren Jaiotzaren egunean, Katedralean eguerdiko hamabietan ospatu zan Meza Nagusian.

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    IGLESIA.ESPAÑA.ELEIZEA

    Documentos.Agiriak

    Nota de los Obispos de la subcomisión de Familia y Vida para la Jornada de la Sagrada Familia

    (31 de diciembre de 2017)

    “LA FAMILIA, HOGAR QUE ACOGE, ACOMPAÑA Y SANA”

    1. La acogida o la hospitalidad, virtud familiar

    El misterio de la Navidad nos sitúa ante el portal de Belén, contemplando a Dios hecho carne. Es un acontecimiento que nos invita a acoger a la Palabra que acampa entre nosotros, de abrir el corazón a Dios encarnado en la fragilidad y ternura de un niño. Es una invitación a la acogida llena de afecto y agradecimiento. Lo señala el evangelista san Lucas de un modo sucinto pero transido de afecto y ternura maternas, refiriéndose a su Madre: “lo envolvió en pañales y lo recostó en un pesebre, porque no había sitio para ellos en la posada” (Lc 2,7). San Juan formula el tesoro de recibir a Jesús en estos términos: “a los que le recibieron, les dio poder de hacerse hijos de Dios” (Jn 1, 12). El mismo Señor en el evangelio de san Mateo armará: “el que os recibe a vosotros me recibe a mí, y el que recibe, recibe al que me ha enviado” (Mt 10, 40). Acoger a otro, acoger a Jesús, acoger al Padre, todo ello apunta a una dimensión intrínsecamente trascendente unida a la acción de acogida, de modo que siempre remite a algo mayor. Podemos recordar que Betania es el lugar donde Cristo es recibido como un amigo por la familia de Marta, María y Lázaro. Allí Jesús se encuentra como en casa. La liturgia benedictina celebra a los tres hermanos juntos, y les otorga el hermoso título de “hospederos del Señor”. Si cada uno de ellos tiene su propia y específica relación con Jesús es la familia como tal la que se hace sujeto de la hospitalidad, y es enriquecida por la presencia del Salvador. Esta presencia de Cristo provoca el encuentro con Él y es invitación a transformar todas las relaciones entre los miembros de las familias. Los padres y las familias están llamados a acoger generosamente a los hijos. Como arma el papa: “la familia es el ámbito no

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    solo de la generación, sino de la acogida de la vida que llega como regalo de Dios”1. Tener un hijo es siempre un don, fuente de gozosa alegría. Los matrimonios y las familias están invitados también a acogerse mutuamente. La hospitalidad es una virtud profundamente familiar. ¡Cuánto necesita el ser humano contemporáneo, dentro de un espacio social mutante, donde se siente tantas veces como un solitario interconectado, la experiencia cálida de ser querido y acogido por sí mismo! En los albores del cristianismo san Pablo exhorta vivamente a los cristianos de Roma a practicar la hospitalidad (Rom 12, 13). Ella es capaz de generar un ambiente comunitario presidido por la humildad, el servicio mutuo, la caridad y la estima recíproca. Al final de la carta menciona un caso concreto rogando a la comunidad cristiana de Roma que acoja a Febe en el Señor, en modo digno de los santos (Rom 16, 2). La hospitalidad está siempre unida a gestos concretos. En la antigüedad el primer gesto hospitalario era lavar los pies al huésped (1 Tim 5, 10). La Carta a los Hebreos exhorta de este modo a la hospitalidad: “conservad el amor fraterno y no olvidéis la hospitalidad; por ella algunos, sin saberlo, hospedaron a ángeles” (Heb 13, 1-2). La hospitalidad nos sitúa siempre ente el misterio del otro, de la diferencia. El versículo evoca la gura de Abrahán y su gesto de acoger a la entrada de su tienda a los tres misteriosos personajes que le visitaron en el encinar de Mambré (Gén 18, 2ss). Abrahán es alabado en la Carta a los Hebreos por su fe, que lo hizo salir de su tierra y lo puso en camino, “pues esperaba la ciudad asentada sobre cimientos, cuyo arquitecto y constructor es Dios” (Heb 11, 10). No deja de ser significativo que el peregrino Abrahán se convierta en aquel que acoge y ofrece su tienda al extraño. La fe es, así, fundamento de la hospitalidad. Los ojos de la fe permiten reconocer en el otro la imagen de Dios. Como arma Lumen dei: “La fe no solo mira a Jesús, sino que mira desde el punto de vista de Jesús”2.

    2. La familia, primer lugar de acompañamiento

    La experiencia de muchas personas es que el primer lugar en el que somos acompañados es la familia. Aquí encuentra su raíz la vocación misionera de la familia. Las familias son invitadas por Dios a acompañar en la fe y en la vida a los que les rodean, ofreciendo cercanía y aliento de una vida familiar transida de la presencia viva de Jesús. Aunque son muchas las familias que ya

    1- Francisco, exhortación apostólica postsinodal Amoris laetitia, n. 166.

    2- Francisco, carta encíclica Lumen dei, n. 18.

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    han reconocido esta misión que Dios les encomienda, todavía hay muchas más que no han descubierto esta hermosa vocación y misión de acompañar a otras familias. Es Cristo quien nos enseña el arte del acompañamiento. Como aconteció en el camino de Emaús (Lc 24, 13-35), la Palabra de Dios y los sacramentos son dos referencias fundamentales para aprender a acompañar. En la cercanía y trato personal, en ese “cuerpo a cuerpo”, se ejercita la paciencia de escuchar a los demás. La persona del diálogo es quien sabe escuchar con atención y verdadero interés. A la escucha le sigue el anuncio gozoso del Evangelio, la experiencia de que la Palabra de Dios es capaz de transformar el corazón íntimamente unido a la acción sacramental. El fundamento de todo acompañamiento es el deseo del amor verdadero. El cultivo de las relaciones interpersonales, viviendo, conversando, transmitiendo las claves del sentido de la vida. Capital importancia tiene hoy el acompañamiento de los novios en la preparación próxima3 y de los primeros años de matrimonio4. Junto a estos procesos, que son vitales para la madurez en el amor, es urgente también el acompañamiento de los matrimonios que sufren porque no vienen los hijos, de las familias que padecen situaciones dramáticas como la separación, el divorcio, el aborto, la soledad, la enfermedad, la muerte, la guerra…Tantas y diferentes situaciones en las que se agradece tanto la presencia y la compañía de los amigos, de las familias que no abandonan a las personas en las dificultades, sino que saben estar ahí y son fuente de consuelo y firme esperanza.

    3. La familia, sanada y sanadora

    Jesús es invocado con el título de Salvador, que literalmente significa el que trae la buena salud. Cristo es el verdadero samaritano (Lc 10, 25-37) que cura al hombre que yace malherido al borde del camino. Él nos carga sobre sus hombros y nos conduce a la posada de la Iglesia. San Ireneo de Lyon identifica al hospedero (stabularius) con el Espíritu Santo5. La familia,

    3- Cf. Juan Pablo II, exhortación apostólica postsinodal Familaris consortio n. 66; Francisco, exhortación apostólica postsinodal Amoris laetitia, n. 206: “la necesidad de programas especí-ficos para la preparación próxima al matrimonio que sean una auténtica experiencia de par-ticipación en la vida eclesial y profundicen en los diversos aspectos de la vida familiar”.

    4- Francisco, exhortación apostólica postsinodal Amoris laetitia, n. 217: “se vuelve im-prescindible acompañar en los primeros años de la vida matrimonial para enriquecer e izar la decisión consciente y libre de pertenecerse y de amarse”.

    5- Cf. A. Orbe, Parábolas evangélicas en San Ireneo, BAC, Madrid 2015, p. 135.

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    como Iglesia en miniatura, está llamada hoy más que nunca a ser posada en el que las personas heridas puedan recuperar la salud. De este modo el poder curativo y sanador de Jesús ha de llegar a muchas personas heridas en sus vínculos y relaciones familiares.

    La acción del Samaritano se compone de diferentes momentos: se acerca,

    venda las heridas, les echa aceite y vino, le levanta y monta en su cabalgadura, lo conduce a una posada y lo cuida (Lc 10, 34). La secuencia de los diferentes actos que realiza indica el singular valor de la temporalidad para la acción humana. Así también la familia ha de aprender a vivir la temporalidad de toda actividad terapéutica. Hay heridas que precisa de más cuidados y requieren paciencia para que puedan ser bien curadas. El aceite y el vino de la parábola del Buen Samaritano se interpretan como los sacramentos que curan la debilidad humana. Los antiguos conocían el valor terapéutico de la mezcla de ambos líquidos. De este modo, la misericordia que brota del amor de Dios, encuentra su primera y principal manifestación en los sacramentos como acciones de Cristo en la Iglesia. Los sacramentos contienen una virtud medicinal, reparativa y sanante de los daños causados por el pecado. La familia ha de dejarse transformar y purificar por la lógica sacramental para vivir su adhesión a Cristo, pues, como arma san Juan: “Todo el que tiene esta esperanza en él se purifica a sí mismo, como él es puro” (1 Jn 3, 3). Celebremos, por tanto, con gozo y agradecimiento el día de la Sagrada Familia. Demos gracias a Dios por el don grande que nos ha hecho en el sacramento del matrimonio y en la realidad familiar. Pidamos a la Sagrada Familia que ayude a todas las familias del mundo a ser lugar de encuentro, de acompañamiento, de sanación, en una palabra, a hacer presente el misterio del amor de Cristo en nuestra experiencia cotidiana. Con gran afecto.

    + Mons. Mario Iceta Gavicagogeascoa, Obispo de Bilbao, Presidente de la Subcomisión de Familia y Vida

    + Mons. Francisco Gil Hellín, Arzobispo Emérito de Burgos+ Mons. Juan Antonio Reig Pla, Obispo de Alcalá de Henares+ Mons. José Mazuelos Pérez, Obispo de Jerez de la Frontera

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    IGLESIA.ROMA.ELEIZEA

    Documentos.Agiriak

    VIAJE APOSTÓLICO DE SU SANTIDAD FRANCISCO A MYANMAR Y BANGLADÉS

    (26 DE NOVIEMBRE - 2 DE DICIEMBRE DE 2017)

    DISCURSO DEL SANTO PADRE EN EL ENCUENTRO INTERRELIGIOSO Y ECUMÉNICO POR LA PAZ

    Distinguidos invitados, queridos amigos:

    Este encuentro, que reúne a los representantes de las diversas comunidades religiosas de este país, constituye un momento muy significativo de mi visita a Bangladesh. Nos hemos reunido para profundizar nuestra amistad y para expresar el deseo unánime del don de una paz genuina y duradera.

    Mi agradecimiento al Cardenal D’Rozario por sus gentiles palabras de bienvenida y a cuantos me han acogido con afecto en nombre de las comunidades musulmana, hinduista, budista, cristiana y también de la sociedad civil. Agradezco la presencia del Obispo anglicano de Dhaka, de las diversas comunidades cristianas y de todos los que han contribuido para hacer posible esta reunión.

    Las palabras que hemos escuchado, y también los cantos y las danzas que han animado nuestra asamblea, nos han hablado de modo elocuente del deseo de armonía, fraternidad y paz encarnado en las enseñanzas de las religiones del mundo. Que nuestro encuentro de esta tarde pueda ser un signo claro del esfuerzo de los líderes y de los seguidores de las religiones presentes en este país por vivir juntos con respeto recíproco y buena voluntad. Que este compromiso, aquí en Bangladesh, donde el derecho a la libertad religiosa es un principio fundamental, sea una llamada de atención respetuosa pero firme hacia quien busque fomentar la división, el odio y la violencia en nombre de la religión.

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    Es un signo particularmente reconfortante de nuestros tiempos que los creyentes y las personas de buena voluntad se sientan cada vez más llamados a cooperar en la formación de una cultura del encuentro, del diálogo y de la colaboración al servicio de la familia humana. Esto requiere más que una simple tolerancia. Nos estimula a tender la mano al otro en actitud de comprensión y confianza recíproca, para construir una unidad que considere la diversidad no como amenaza, sino como fuente de enriquecimiento y crecimiento. Nos exhorta a tener apertura de corazón, para ver en los otros un camino, no un obstáculo.

    Permitidme explorar brevemente algunas características esenciales de esta “apertura del corazón”, que es la condición para una cultura del encuentro.

    En primer lugar, es una puerta. No es una teoría abstracta, sino una experiencia vivida. Nos permite entablar un diálogo de vida, no un simple intercambio de ideas. Requiere buena voluntad y capacidad de acogida, pero no debe ser confundida con la indiferencia o la reticencia al expresar nuestras convicciones más profundas. Implicarse fructuosamente con el otro significa compartir nuestra identidad religiosa y cultural, pero siempre con humildad, honestidad y respeto.

    La apertura del corazón es también similar a una escalera que se eleva hacia el Absoluto. Recordando esta dimensión trascendente de nuestra actividad, nos damos cuenta de la necesidad de purificar nuestros corazones, para poder ver las cosas en su justa perspectiva. A cada paso nuestra visión se hará más clara y recibiremos la fuerza para perseverar en el compromiso de comprender y valorizar a los demás, con sus puntos de vista. De este modo, encontraremos la sabiduría y la fuerza necesarias para tender a todos una mano amiga.

    La apertura del corazón es además un camino que conduce a la búsqueda de la bondad, la justicia y la solidaridad. Nos impulsa a buscar el bien de nuestros vecinos. En su carta a los cristianos de Roma, san Pablo exhorta: “No te dejes vencer por el mal, antes bien vence al mal con el bien” (Rm 12,21). Este es un sentimiento que todos nosotros podemos imitar. La solicitud religiosa por el bien de nuestro prójimo, que emana de un corazón abierto, corre como un gran río, irrigando las tierras áridas y desiertas del

  • odio, la corrupción, la pobreza y la violencia, que dañan las vidas humanas, dividen a las familias y desfiguran el don de la creación.

    Las diversas comunidades religiosas de Bangladesh han abrazado este camino mediante el compromiso por el cuidado de la tierra, nuestra casa común, y la respuesta a los desastres naturales que han asolado la nación en los últimos años. Pienso también en la manifestación común de dolor, oración y solidaridad que ha acompañado el trágico derrumbe del Rana Plaza, que sigue impreso en la mente de todos. En estas diversas expresiones vemos cómo el camino de la bondad conduce a la cooperación para servir a los demás.

    Un espíritu de apertura, aceptación y cooperación entre los creyentes no contribuye simplemente a una cultura de armonía y paz, sino que es su corazón palpitante. ¡Cuánto necesita el mundo de este corazón que late con fuerza, para combatir el virus de la corrupción política, las ideologías religiosas destructivas, la tentación de cerrar los ojos a las necesidades de los pobres, de los refugiados, de las minorías perseguidas y de los más vulnerables! ¡Cuánta capacidad de apertura se necesita para acoger a las personas de nuestro mundo, especialmente a los jóvenes, que a veces se sienten solos y desconcertados en la búsqueda del sentido de la vida!

    Queridos amigos, os agradezco los esfuerzos que realizáis para promover la cultura del encuentro, y os ruego que, demostrando el compromiso común de los seguidores de las religiones por discernir el bien y ponerlo en práctica, ayudemos a todos los creyentes a crecer en la sabiduría y en la santidad, y a cooperar para construir un mundo cada vez más humano, unido y pacífico.

    Abro mi corazón a todos vosotros y os reitero mi agradecimiento por vuestra acogida. Recordémonos unos a otros en nuestras oraciones.

    Palabras del Santo Padre Francisco a un grupo de refugiados rohinyás

    Queridos hermanos y hermanas, todos estamos cerca de vosotros. Es

    poco lo que podemos hacer porque vuestra tragedia es muy grande. Pero hay espacio en nuestro corazón para vosotros. En el nombre de todos, de

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    aquellos que os persiguen, aquellos que han hecho el mal, especialmente por la indiferencia del mundo, os pido perdón. Perdón. Muchos de vosotros me habéis hablado del gran corazón de Bangladesh que os ha acogido. Ahora hago un apelo a vuestro gran corazón para que podáis darnos el perdón que pedimos.

    Queridos hermanos y hermanas, el relato judeocristiano de la creación dice que el Señor, que es Dios, creó al hombre a su imagen y semejanza. Todos nosotros somos esta imagen. También estos hermanos y hermanas. Ellos también son una imagen del Dios viviente. Una tradición de vuestras religiones dice que Dios, al principio, tomó un poco de sal y la arrojó al agua, que era el alma de todos los hombres; y cada uno de nosotros trae algo de la sal divina. Estos hermanos y hermanas llevan dentro la sal de Dios.

    Queridos hermanos y hermanas, mostremos a todos lo que el egoísmo del mundo hace con la imagen de Dios. Continuemos haciéndoles el bien, para ayudarlos; sigamos avanzando para que sus derechos sean reconocidos. No cerremos los corazones, no miremos para otro lado. La presencia de Dios, hoy, también se llama “rohinyá”. Que cada uno dé su propia respuesta.

    Jardín del Arzobispado (Daca) Viernes, 1 de diciembre de 2017

    MENSAJE DEL SANTO PADRE FRANCISCOPARA LA 55 JORNADA MUNDIAL

    DE ORACIÓN POR LAS VOCACIONES

    Escuchar, discernir, vivir la llamada del Señor

    Queridos hermanos y hermanas:

    El próximo mes de octubre se celebrará la XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que estará dedicada a los jóvenes, en particular a la relación entre los jóvenes, la fe y la vocación. En dicha ocasión tendremos la oportunidad de profundizar sobre cómo la llamada a la alegría que Dios nos dirige es el centro de nuestra vida y cómo esto es

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    el “proyecto de Dios para los hombres y mujeres de todo tiempo” (Sínodo de los Obispos, XV Asamblea General Ordinaria, Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional, introducción).

    Esta es la buena noticia, que la 55ª Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones nos anuncia nuevamente con fuerza: no vivimos inmersos en la casualidad, ni somos arrastrados por una serie de acontecimientos desordenados, sino que nuestra vida y nuestra presencia en el mundo son fruto de una vocación divina.

    También en estos tiempos inquietos en que vivimos, el misterio de la Encarnación nos recuerda que Dios siempre nos sale al encuentro y es el Dios-con-nosotros, que pasa por los caminos a veces polvorientos de nuestra vida y, conociendo nuestra ardiente nostalgia de amor y felicidad, nos llama a la alegría. En la diversidad y la especificidad de cada vocación, personal y eclesial, se necesita escuchar, discernir y vivir esta palabra que nos llama desde lo alto y que, a la vez que nos permite hacer fructificar nuestros talentos, nos hace también instrumentos de salvación en el mundo y nos orienta a la plena felicidad.

    Estos tres aspectos -escucha, discernimiento y vida- encuadran también el comienzo de la misión de Jesús, quien, después de los días de oración y de lucha en el desierto, va a su sinagoga de Nazaret, y allí se pone a la escucha de la Palabra, discierne el contenido de la misión que el Padre le ha confiado y anuncia que ha venido a realizarla “hoy” (cf. Lc 4,16-21).

    Escuchar

    La llamada del Señor -cabe decir- no es tan evidente como todo aquello que podemos oír, ver o tocar en nuestra experiencia cotidiana. Dios viene de modo silencioso y discreto, sin imponerse a nuestra libertad. Así puede ocurrir que su voz quede silenciada por las numerosas preocupaciones y tensiones que llenan nuestra mente y nuestro corazón.

    Es necesario entonces prepararse para escuchar con profundidad su Palabra y la vida, prestar atención a los detalles de nuestra vida diaria, aprender a leer los acontecimientos con los ojos de la fe, y mantenerse abiertos a las sorpresas del Espíritu.

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    Si permanecemos encerrados en nosotros mismos, en nuestras costumbres y en la apatía de quien desperdicia su vida en el círculo restringido del propio yo, no podremos descubrir la llamada especial y personal que Dios ha pensado para nosotros, perderemos la oportunidad de soñar a lo grande y de convertirnos en protagonistas de la historia única y original que Dios quiere escribir con nosotros.

    También Jesús fue llamado y enviado; para ello tuvo que, en silencio, escuchar y leer la Palabra en la sinagoga y así, con la luz y la fuerza del Espíritu Santo, pudo descubrir plenamente su significado, referido a su propia persona y a la historia del pueblo de Israel.

    Esta actitud es hoy cada vez más difícil, inmersos como estamos en una sociedad ruidosa, en el delirio de la abundancia de estímulos y de información que llenan nuestras jornadas. Al ruido exterior, que a veces domina nuestras ciudades y nuestros barrios, corresponde a menudo una dispersión y confusión interior, que no nos permite detenernos, saborear el gusto de la contemplación, reflexionar con serenidad sobre los acontecimientos de nuestra vida y llevar a cabo un fecundo discernimiento, confiados en el diligente designio de Dios para nosotros.

    Como sabemos, el Reino de Dios llega sin hacer ruido y sin llamar la atención (cf. Lc 17,21), y sólo podemos percibir sus signos cuando, al igual que el profeta Elías, sabemos entrar en las profundidades de nuestro espíritu, dejando que se abra al imperceptible soplo de la brisa divina (cf. 1 R 19,11-13).

    Discernir

    Jesús, leyendo en la sinagoga de Nazaret el pasaje del profeta Isaías, discierne el contenido de la misión para la que fue enviado y lo anuncia a los que esperaban al Mesías: “El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado a evangelizar a los pobres, a proclamar a los cautivos la libertad, y a los ciegos, la vista; a poner en libertad a los oprimidos; a proclamar el año de gracia del Señor” (Lc 4,18-19).

    Del mismo modo, cada uno de nosotros puede descubrir su propia

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    vocación sólo mediante el discernimiento espiritual, un “proceso por el cual la persona llega a realizar, en el diálogo con el Señor y escuchando la voz del Espíritu, las elecciones fundamentales, empezando por la del estado de vida” (Sínodo de los Obispos, XV Asamblea General Ordinaria, Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional, II, 2).

    Descubrimos, en particular, que la vocación cristiana siempre tiene una dimensión profética. Como nos enseña la Escritura, los profetas son enviados al pueblo en situaciones de gran precariedad material y de crisis espiritual y moral, para dirigir palabras de conversión, de esperanza y de consuelo en nombre de Dios. Como un viento que levanta el polvo, el profeta sacude la falsa tranquilidad de la conciencia que ha olvidado la Palabra del Señor, discierne los acontecimientos a la luz de la promesa de Dios y ayuda al pueblo a distinguir las señales de la aurora en las tinieblas de la historia.

    También hoy tenemos mucha necesidad del discernimiento y de la profecía; de superar las tentaciones de la ideología y del fatalismo y descubrir, en la relación con el Señor, los lugares, los instrumentos y las situaciones a través de las cuales él nos llama. Todo cristiano debería desarrollar la capacidad de “leer desde dentro” la vida e intuir hacia dónde y qué es lo que el Señor le pide para ser continuador de su misión.

    Vivir

    Por último, Jesús anuncia la novedad del momento presente, que entusiasmará a muchos y endurecerá a otros: el tiempo se ha cumplido y el Mesías anunciado por Isaías es él, ungido para liberar a los prisioneros, devolver la vista a los ciegos y proclamar el amor misericordioso de Dios a toda criatura. Precisamente “hoy -afirma Jesús- se ha cumplido esta Escritura que acabáis de oír” (Lc 4,20).

    La alegría del Evangelio, que nos abre al encuentro con Dios y con los hermanos, no puede esperar nuestras lentitudes y desidias; no llega a nosotros si permanecemos asomados a la ventana, con la excusa de esperar siempre un tiempo más adecuado; tampoco se realiza en nosotros si no asumimos hoy mismo el riesgo de hacer una elección. ¡La vocación es hoy! ¡La misión cristiana es para el presente! Y cada uno de nosotros está llamado -a la vida laical, en el matrimonio; a la sacerdotal, en el ministerio ordenado,

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    o a la de especial consagración- a convertirse en testigo del Señor, aquí y ahora.

    Este “hoy” proclamado por Jesús nos da la seguridad de que Dios, en efecto, sigue “bajando” para salvar a esta humanidad nuestra y hacernos partícipes de su misión. El Señor nos sigue llamando a vivir con él y a seguirlo en una relación de especial cercanía, directamente a su servicio. Y si nos hace entender que nos llama a consagrarnos totalmente a su Reino, no debemos tener miedo. Es hermoso -y es una gracia inmensa- estar consagrados a Dios y al servicio de los hermanos, totalmente y para siempre.

    El Señor sigue llamando hoy para que le sigan. No podemos esperar a ser perfectos para responder con nuestro generoso “aquí estoy”, ni asustarnos de nuestros límites y de nuestros pecados, sino escuchar su voz con corazón abierto, discernir nuestra misión personal en la Iglesia y en el mundo, y vivirla en el hoy que Dios nos da.

    María Santísima, la joven muchacha de periferia que escuchó, acogió y vivió la Palabra de Dios hecha carne, nos proteja y nos acompañe siempre en nuestro camino.

    Vaticano, 3 de diciembre de 2017Primer Domingo de Adviento

    Francisco

    HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO

    EN LA SANTA MISA DE NOCHEBUENA

    “María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre porque no había lugar para ellos en el albergue” (Lc 2,7). De esta manera, simple pero clara, Lucas nos lleva al corazón de esta noche santa: María dio a luz, María nos dio la Luz. Un relato sencillo para sumergirnos en el acontecimiento que cambia para siempre nuestra historia. Todo, en esa noche, se volvía fuente de esperanza.

    Vayamos unos versículos atrás. Por decreto del emperador, María y José se

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    vieron obligados a marchar. Tuvieron que dejar su gente, su casa, su tierra y ponerse en camino para ser censados. Una travesía nada cómoda ni fácil para una joven pareja en situación de dar a luz: estaban obligados a dejar su tierra. En su corazón iban llenos de esperanza y de futuro por el niño que vendría; sus pasos en cambio iban cargados de las incertidumbres y peligros propios de aquellos que tienen que dejar su hogar.

    Y luego se tuvieron que enfrentar quizás a lo más difícil: llegar a Belén y experimentar que era una tierra que no los esperaba, una tierra en la que para ellos no había lugar.

    Y precisamente allí, en esa desafiante realidad, María nos regaló al Enmanuel. El Hijo de Dios tuvo que nacer en un establo porque los suyos no tenían espacio para él. “Vino a los suyos y los suyos no lo recibieron” (Jn 1,11). Y allí…, en medio de la oscuridad de una ciudad, que no tiene ni espacio ni lugar para el forastero que viene de lejos, en medio de la oscuridad de una ciudad en pleno movimiento y que en este caso pareciera que quiere construirse de espaldas a los otros, precisamente allí se enciende la chispa revolucionaria de la ternura de Dios. En Belén se generó una pequeña abertura para aquellos que han perdido su tierra, su patria, sus sueños; incluso para aquellos que han sucumbido a la asfixia que produce una vida encerrada.

    En los pasos de José y María se esconden tantos pasos. Vemos las huellas de familias enteras que hoy se ven obligadas a marchar. Vemos las huellas de millones de personas que no eligen irse sino que son obligados a separarse de los suyos, que son expulsados de su tierra. En muchos de los casos esa marcha está cargada de esperanza, cargada de futuro; en muchos otros, esa marcha tiene solo un nombre: sobrevivencia. Sobrevivir a los Herodes de turno que para imponer su poder y acrecentar sus riquezas no tienen ningún problema en cobrar sangre inocente.

    María y José, los que no tenían lugar, son los primeros en abrazar a aquel que viene a darnos carta de ciudadanía a todos. Aquel que en su pobreza y pequeñez denuncia y manifiesta que el verdadero poder y la auténtica libertad es la que cubre y socorre la fragilidad del más débil.

    Esa noche, el que no tenía lugar para nacer es anunciado a aquellos que no tenían lugar en las mesas ni en las calles de la ciudad. Los pastores son los

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    primeros destinatarios de esta buena noticia. Por su oficio, eran hombres y mujeres que tenían que vivir al margen de la sociedad. Las condiciones de vida que llevaban, los lugares en los cuales eran obligados a estar, les impedían practicar todas las prescripciones rituales de purificación religiosa y, por tanto, eran considerados impuros. Su piel, sus vestimentas, su olor, su manera de hablar, su origen los delataba. Todo en ellos generaba desconfianza. Hombres y mujeres de los cuales había que alejarse, a los cuales temer; se los consideraba paganos entre los creyentes, pecadores entre los justos, extranjeros entre los ciudadanos. A ellos (paganos, pecadores y extranjeros) el ángel les dice: “No teman, porque les traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo: Hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor” (Lc 2,10-11).

    Esa es la alegría que esta noche estamos invitados a compartir, a celebrar y a anunciar. La alegría con la que, a nosotros, paganos, pecadores y extranje-ros Dios nos abrazó en su infinita misericordia y nos impulsa a hacer lo mismo.

    La fe de esa noche nos mueve a reconocer a Dios presente en todas las situaciones en las que lo creíamos ausente. Él está en el visitante indiscreto, tantas veces irreconocible, que camina por nuestras ciudades, en nuestros barrios, viajando en nuestros metros, golpeando nuestras puertas.

    Y esa misma fe nos impulsa a dar espacio a una nueva imaginación social, a no tener miedo a ensayar nuevas formas de relación donde nadie tenga que sentir que en esta tierra no tiene lugar. Navidad es tiempo para transformar la fuerza del miedo en fuerza de la caridad, en fuerza para una nueva imaginación de la caridad. La caridad que no se conforma ni naturaliza la injusticia, sino que se anima, en medio de tensiones y conflictos, a ser “casa del pan”, tierra de hospitalidad. Nos lo recordaba san Juan Pablo II: “¡No temáis! ¡Abrid, más todavía, abrid de par en par las puertas a Cristo!” (Homilía en la Misa de inicio de Pontificado, 22 octubre 1978)

    En el niño de Belén, Dios sale a nuestro encuentro para hacernos protagonistas de la vida que nos rodea. Se ofrece para que lo tomemos en brazos, para que lo alcemos y abracemos. Para que en él no tengamos miedo de tomar en brazos, alzar y abrazar al sediento, al forastero, al desnudo, al enfermo, al preso (cf. Mt 25,35-36). “¡No temáis! ¡Abrid, más todavía, abrid de par en par las puertas a Cristo!”. En este niño, Dios nos invita a hacernos cargo

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    de la esperanza. Nos invita a hacernos centinelas de tantos que han sucumbido bajo el peso de esa desolación que nace al encontrar tantas puertas cerradas. En este Niño, Dios nos hace protagonistas de su hospitalidad.

    Conmovidos por la alegría del don, pequeño Niño de Belén, te pedimos que tu llanto despierte nuestra indiferencia, abra nuestros ojos ante el que sufre. Que tu ternura despierte nuestra sensibilidad y nos mueva a sabernos invitados a reconocerte en todos aquellos que llegan a nuestras ciudades, a nuestras historias, a nuestras vidas. Que tu ternura revolucionaria nos convenza a sentirnos invitados, a hacernos cargo de la esperanza y de la ternura de nuestros pueblos.

    Basílica Vaticana Domingo, 24 de diciembre de 2017