Upload
lytram
View
216
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
CAPÍTULO 12
ARGENTINA: EVALUACIÓN DE CAMBIOS
EN LA DISTRIBUCIÓN DE BENEFICIOS DE POLÍTICAS
DE SALUD Y NUTRICIÓN
Leonardo C. Gasparini y Mónica Panadeiros
Argentina ha estado en una recesión profunda desde 1998. El gasto público ha caído
dramáticamente y el crédito en el exterior ha sido imposible desde la cesación de
pagos del país. Concentrar los escasos recursos públicos en los necesitados ha llegado
a ser más importante y difícil que de ordinario. No es un trabajo fácil en ningún mo-
mento en un país como Argentina, donde los programas universales fueron la norma
durante décadas, la focalización ahora tiene que lidiar con ingresos en disminución.
Muchas personas –no sólo los pobres– se sienten con derecho a la ayuda estatal.
Este estudio aborda la incidencia distributiva de las políticas sociales en Argentina.
El análisis se enfoca en las políticas de salud y nutrición para mujeres encinta y para
niños menores de cinco años. Se utiliza información sobre individuos y hogares, pro-
veniente de dos encuestas de medición de estándares de vida (1997 y 2001) para iden-
tificar los beneficiarios de programas públicos.
El estudio se orienta a ayudar a responder dos conjuntos de preguntas:
• ¿Quiénes son los beneficiarios de los programas públicamente financiados para
mujeres embarazadas y niños? ¿Son estos programas en pro de los pobres?
¿Qué programas son más en pro de los pobres? ¿Cambió la estructura de los
beneficiarios entre 1997 y 2001? ¿Llegaron los programas a ser menos (o más)
en pro de los pobres?
• ¿Por qué los programas públicos llegan a ser menos (o más) en pro de los po-
bres entre 1997 y 2001?
El primer conjunto de preguntas es abordado mediante análisis beneficio-inci-
dencia. Los programas públicos de salud y nutrición, aunque abiertos a todos, están
dirigidos a beneficiar principalmente a los pobres, quienes generalmente tienen pro-
blemas nutricionales y carecen de seguro médico privado. Algunas personas no po-
bres, sin embargo, se benefician también de la provisión pública, atraídos por el costo
bajo (la mayoría de los servicios de salud públicamente proporcionados es gratis) y la
razonable calidad.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29233
234 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
Para arrojar luz sobre la segunda pregunta, descomponemos los cambios en los
resultados de beneficio-incidencia para un servicio particular en tres componentes:
cambios en las características del individuo y del hogar ligadas a la decisión de consu-
mir un servicio; cambios en la manera como son hechas las decisiones acerca de si
consumir un servicio; y cambios en la decisión pública versus privada sobre dónde
consumir el servicio. Se aplican descomposiciones tanto agregadas como microeco-
nométricas para obtener las estimaciones de estos tres componentes.
SALUD, NUTRICIÓN Y DISTRIBUCIÓN EN ARGENTINA
La salud y la nutrición han sido generalmente buenas en Argentina, comparadas con
otros países latinoamericanos.
Salud
El sistema de salud de Argentina se organiza alrededor de un sector público fuerte
que, además de regular los servicios de salud, posee y opera una red extensa de hos-
pitales públicos y centros de atención médica primaria. Los gastos en salud por los
tres niveles de gobierno, federal, provincial y municipal, representan el 25% del siste-
ma de bienestar en Argentina (DGSC, 2001). El sistema de salud pública es universal en
el sentido de que todos tienen derecho a utilizar la mayoría de los servicios en las
instalaciones de salud. En la práctica, los gastos públicos se dirigen principalmente a
familias de ingresos bajos y medios porque los hogares más afluentes optan general-
mente por tratamiento privado.
La mayoría de las políticas de salud pública se canalizan a través de la red de
hospitales públicos y centros primarios de asistencia médica, donde las personas tie-
nen acceso a todo tipo de servicios de salud, en su mayor parte gratuitos. Nuestro
análisis se concentra en los siguientes servicios para mujeres encinta y niños menores
de cinco años: asistencia prenatal, parto asistido, visitas a un médico, medicinas, hos-
pitalizaciones y vacunación.1
Nutrición
Aunque los problemas de nutrición han sido poco frecuentes en Argentina –un país
abundante en alimentos– la cobertura periodística sobre muertes de niños causadas
por la desnutrición ha llevado al debate público acerca de los asuntos de nutrición.
1 La versión extensa de este documento (Gasparini y Panadeiros, 2004) contiene también información
sobre cuidado posnatal, estudios y análisis médicos, tratamiento de enfermedades crónicas y exáme-
nes de VIH/SIDA para mujeres encinta.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29234
235Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
Los programas públicos de nutrición orientados a niños necesitados han sido pe-
queños en tamaño y cobertura. A los bebés se les proporciona leche mientras están
bajo supervisión médica en los hospitales públicos o centros primarios de asistencia
médica. Los niños se benefician de programas de nutrición ofrecidos a través de jardi-
nes infantiles y escuelas escogidos y de centros locales de alimentación (comedores)
y a veces entregados directamente al hogar. Algunos programas de nutrición están
dirigidos a localidades muy pobres; son ejemplos el Programa Alimentario Nutricio-
nal Infantil (Prani) y Pro-Huerta. La crisis económica y el aumento en la desnutrición
forzaron al gobierno a instituir algunos programas de nutrición de emergencia en
2002.
En este capítulo estudiamos tres servicios de nutrición públicamente proporcio-
nados: leche para bebés en instalaciones públicas de salud, comidas en jardines infan-
tiles y comidas en centros locales de alimentación.
Ingreso promedio y distribución
El desempeño económico de Argentina durante las pasadas tres décadas ha sido
desilusionante. El gráfico 12.1 muestra fluctuaciones cíclicas grandes en el ingreso
promedio disponible, sin señal de una tendencia creciente. Durante el período cu-
bierto por este análisis, el ingreso cayó sustancialmente: el ingreso disponible per cápita
en términos reales cayó 13% entre 1997 y 2001, según estimaciones de cuentas nacio-
nales.
GRÁFICO 12.1
INGRESO DISPONIBLE PROMEDIO, ARGENTINA, 1980-2002
Fuente: Datos de cuentas nacionales.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29235
236 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
Junto con una economía estancada, Argentina ha sufrido transformaciones dra-
máticas en la distribución del ingreso (Gasparini, 2003). La desigualdad y la pobreza
han aumentado sustancialmente a lo largo de las pasadas tres décadas (gráficos 12.2 y
12.3). El coeficiente de Gini para la distribución del ingreso per cápita de los hogares
en el Gran Buenos Aires, una región urbana con la tercera parte de la población ar-
gentina, aumentó de 0,345 en 1974 a 0,538 en 2002 (Cedlas, 2003). La tasa de pobreza,
utilizando la línea de pobreza oficial, estaba alrededor del 5% en el Gran Buenos Aires
en 1980, del 28,9% en 2000 y de un dramático 54,3% en 2002, reflejando la crisis econó-
mica. En pocos países ha aumentado la pobreza tanto y tan rápido en ausencia de una
guerra o un desastre natural.2
¿QUIÉN SE BENEFICIA DE LAS POLÍTICAS DE SALUD Y NUTRICIÓN?
Utilizando un análisis tradicional de beneficio-incidencia del gasto del público en pro-
gramas de salud y nutrición para mujeres embarazadas y niños menores de cinco
años, evaluamos la precisión con que se concentra el gasto público promedio. Los
beneficios de un programa específico se asignan a los individuos según sus respues-
tas a una encuesta de hogares sobre el uso de ese programa.3
Los datos
Los análisis de beneficio-incidencia requieren encuestas de hogares con datos sobre
un indicador de bienestar e información sobre el uso de programas sociales. Argenti-
na ha realizado dos preguntas recientes de la encuesta de medición de estándares de
vida sobre el uso de varios servicios de salud y nutrición. La primera, Encuesta de
Desarrollo Social, fue llevada a cabo en 1996-7. Incluye alrededor de 75.000 indivi-
duos (representando el 83% de la población total) que viven en áreas urbanas. La
segunda, Encuesta de Condiciones de Vida (ECV), con cobertura y cuestionarios se-
mejantes, fue realizada en 2001.4
2 Las tendencias en la desigualdad y la pobreza para el resto de la Argentina urbana en la década de los
noventa son semejantes a las representadas en los gráficos 12.2 y 12.3 para el Gran Buenos Aires. Los
niveles varían apreciablemente, sin embargo, a través de las regiones. Por ejemplo, mientras que en la
ciudad de Jujuy en el noroeste del país, la tasa de pobreza es 57,3%, en Río Gallegos en la región de la
Patagonia es 11% y en la ciudad de Buenos Aires es 10%.
3 Ver Van de Walle y Nead (1995) y Van de Walle (1998). Evaluaciones más recientes de estas técnicas y
sus problemas se encuentran en Bourguignon, Pereira da Silva y Stern (2002) y Carneiro, Hansen y
Heckman (2002). Para el análisis de beneficio-incidencia en Argentina, ver Flood, Gasparini y Harriague
(1993); Harriague y Gasparini (1999); Gasparini y otros (2000); y DGSC (2002).
4 El marco muestral para ambas encuestas es el mismo. La migración no fue relevante durante el perío-
do bajo análisis.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29236
237Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
Indicadores de bienestar
Una etapa crucial en un análisis de beneficio-incidencia es clasificar los hogares por
un indicador de bienestar. Entre las variables generalmente incluidas en una encuesta
de hogares, el consumo del hogar ajustado por demografía es el mejor proxy para el
GRÁFICO 12.2
COEFICIENTES DE GINI PARA INGRESOS PER CÁPITA POR HOGAR, GRAN BUENOS AIRES,
1980-2002
Fuente: Cedlas 2003.
GRÁFICO 12.3
COEFICIENTES DE GINI PARA INGRESOS PER CÁPITA POR HOGAR,
GRAN BUENOS AIRES, 1980-2002
Fuente: Cedlas 2003.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29237
238 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
bienestar individual (Deaton y Zaidi, 2002). Infortunadamente, la mayoría de las en-
cuestas de hogares en Argentina, incluyendo la Encuesta de Desarrollo Social y la
ECV, no tienen preguntas sobre el gasto del hogar. Aquí utilizamos en su mayor parte
los ingresos del hogar ajustados por demografía –ingreso equivalente del hogar– como
el indicador del bienestar individual.5
En el cuadro A12.2 del anexo, los individuos con respuestas consistentes e ingre-
sos del hogar positivos reportados son agrupados en deciles de ingreso. El cuadro
muestra la distribución de ingresos per cápita del hogar y del ingreso equivalente del
hogar por decil para 1997 y 2001, y el cuadro A12.3 del anexo muestra varios índices
de desigualdad para ambas distribuciones para esos años.6 La desigualdad aumentó
significativamente entre 1997 y 2001. Este resultado es resistente a cambios en el índi-
ce de desigualdad y la distribución considerada. Como muestra el cuadro A12.4 del
anexo, la pobreza aumentó también apreciablemente durante el período.
Uso de los programas de servicios de salud y nutrición
Este estudio se enfoca en los programas de salud y nutrición focalizados en mujeres
embarazadas y niños menores de cinco años. El cuadro A12.5 del anexo muestra la
población total y el número de niños por quintil de la distribución del ingreso equiva-
lente del hogar. Por construcción, los quintiles tienen el 20% de población total, pero
como el número de niños por hogar disminuye cuando aumenta el ingreso, la pro-
porción de niños no es uniforme a lo largo de la distribución de ingresos. Por ejemplo,
la proporción de niños menores de cinco años era 30,1 en el quintil inferior en 1997 y
12,1 en el quintil superior. Este hecho tiene consecuencias fundamentales para la inci-
dencia distributiva de los programas públicos dirigidos a los niños. Aun un programa
universal para todos los niños será en pro de los pobres, dada la correlación inversa
entre el número de niños y el ingreso del hogar. Esta relación llegó a ser menos fuerte
entre 1997 y 2001 como resultado de un descenso en la fertilidad de las familias de
bajos ingresos en relación con otros grupos de ingreso, lo que implicó una reducción
potencial en la focalización de las políticas sociales.7
De las encuestas, somos capaces de identificar los hogares que utilizan los progra-
mas públicos de servicios de salud y nutrición para niños y mujeres encinta. El resto
5 El ingreso equivalente del hogar es computado aquí como el ingreso total del hogar dividido por el
número de adultos equivalentes en el hogar, elevado a la potencia de 0,9 para considerar economías de
escala moderadas en el consumo dentro del hogar. Utilizamos la escala de adulto equivalente oficial
para Argentina. Ver Gasparini y Panadeiros (2004) para detalles.
6 Se utilizan estadísticas ponderadas a través de este capítulo. Los pesos para expandir la muestra a la
población fueron proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
7 Marchionni y Gasparini (2003) reportan una tendencia semejante para el Gran Buenos Aires, utilizan-
do información de la Encuesta Permanente de Hogares.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29238
239Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
de esta sección está dedicado a analizar el uso de estos servicios y calcular los resulta-
dos de beneficio-incidencia.
Asistencia prenatal
A las madres de niños menores de dos años se les preguntó si utilizaron la asistencia
prenatal mientras estaban embarazadas.8 Las encuestas preguntan también por el mes de
la primera visita de atención prenatal, la frecuencia de las pruebas y el sitio de la mayoría
de las visitas. El cuadro A12.6 del anexo y el gráfico 12.4 muestran los resultados por
quintil de ingreso equivalente del hogar para 1997 y 2001. La asistencia prenatal es exten-
dida en Argentina, aun para las madres pobres; las madres del 97,1% de los niños en 1997
y el 97,7% en 2001 hicieron por lo menos una visita. En el quintil inferior de la distribución
del ingreso, esta proporción subió del 94,8% al 97,6% durante el mismo período.
Las diferencias entre quintiles son más evidentes con respecto al número de visi-
tas, el mes de la primera visita y el sitio de la visita. En promedio, las madres pobres
hacen la primera visita después del tercer mes de embarazo, mientras que las madres
de hogares no pobres lo hacen después de un mes y medio de embarazo. La propor-
ción de mujeres encinta con más de cuatro visitas aumenta significativamente con el
ingreso del hogar, de alrededor del 70% en el primer quintil, al 95% en el quintil
superior. La mayoría de las madres pobres van a hospitales públicos o centros prima-
rios de asistencia médica por asistencia prenatal, mientras que las madres no pobres
frecuentan las instituciones privadas. Las diferencias son significativas: en 2001, el
85,6% de madres en el quintil inferior, pero sólo el 9% en el quintil superior, reporta-
ron haber recibido asistencia prenatal en instalaciones públicas. Durante el período
económicamente deprimido estudiado, la proporción de visitas a instalaciones públi-
cas aumentó en consonancia con la distribución del ingreso. El promedio subió de
51,6% a 54,9% entre 1997 y 2001.
El gobierno financia las instalaciones públicas de salud. Con la ayuda de recursos
del gobierno (por ejemplo, salarios de médicos y enfermeros, suministros y una por-
ción de costos de capital), los hospitales y centros públicos son capaces de proporcionar
la mayoría de la asistencia prenatal gratuitamente. Un supuesto usual es que los bene-
ficiarios del programa público son los usuarios del servicio subvencionado y sus fami-
lias. Utilizando un servicio gratis a la comunidad, una familia ahorra el costo de comprar
ese servicio, el que se asume igual al costo promedio de la provisión pública.9
8 Hay un sesgo de selección porque a las madres no se les pregunta por pérdidas ni por niños que
murieron, pero dado que la mortalidad infantil es baja en Argentina, este sesgo es probablemente
pequeño.
9 Los factores utilizados para producir el servicio no se consideran beneficiarios de la provisión pública.
Se asume que médicos y enfermeros podrían encontrar trabajos semejantes en el sector privado si el
sector público decidiera no proporcionar los servicios de salud.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29239
240 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
Para encontrar los beneficiarios de cada programa público, identificamos a los usua-
rios potenciales del servicio (madres con niños menores de dos años, en el caso de la
asistencia prenatal), el uso efectivo del servicio y la elección de instalaciones públicas
o privadas. El cuadro A12.6 del anexo muestra dos resultados de incidencia para la
asistencia prenatal según si el número de visitas es tenido en cuenta (H2) o no es
considerado (H1) en los cálculos.10 En ambos casos, las subvenciones para asistencia
prenatal en instalaciones públicas son altamente en pro de los pobres, pero el sesgo se
GRÁFICO 12.4
USO DE ASISTENCIA PRENATAL, ARGENTINA
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
10 Teóricamente, el número de visitas es pertinente para un análisis de incidencia. Las encuestas, sin
embargo, no registran ni el número exacto de visitas (sólo preguntan si la madre hizo más de cuatro
visitas) ni el tipo de instalación visitada (las encuestas preguntan sólo en dónde hicieron las madres la
mayor parte de sus visitas).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29240
241Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
debilita cuando el número de visitas (H2) es considerado. En 1997 más del 40% de
todos los beneficiarios del programa pertenecían al primer quintil de la distribución
del ingreso. La proporción de beneficiarios en el quintil superior estaba alrededor del
2%. Este patrón en pro de los pobres es básicamente la consecuencia de una concen-
tración más grande de niños menores de dos años en el fondo de la distribución del
ingreso y de una aguda disminución en la elección para utilizar instalaciones públicas
en los ingresos más altos.
La precisión de la focalización de la subvención pública para asistencia prenatal
disminuyó entre 1997 y 2001 (gráfico 12.4). Este cambio parece ser una consecuencia
principalmente de una reducción en la proporción de niños menores de dos años en
el quintil inferior y de un aumento en el uso de instalaciones públicas por hogares de
ingresos medios y altos. En la próxima sección, analizamos este punto con mayor
detalle.
Parto asistido
La mayoría de los partos en Argentina urbana son asistidos por una persona
médicamente entrenada. Aun en el quintil inferior, la proporción de partos asistidos
es cercana al 100% (cuadro A12.7 del anexo). La proporción de nacimientos normales
ha disminuido con el tiempo, especialmente en los quintiles inferiores. La proporción
de cesáreas aumenta todavía apreciablemente a ingresos más altos del hogar. Más de
la mitad de todos los partos se atiende en instalaciones públicas. Esta proporción ha
aumentado levemente en los últimos años. Los partos en instalaciones públicas son
mucho más frecuentes para madres pobres que para madres no pobres. En 2001, el
83,4% de los partos por madres del quintil inferior fueron en instalaciones públicas,
pero la cifra era sólo de 11,3% para madres del quintil menos pobre. Debido a que la
fecundidad es más alta y el uso de instalaciones públicas es más difundido entre los
hogares pobres, la subvención para partos asistidos en instalaciones públicas es deci-
didamente en pro de los pobres.
Hemos calculado también los resultados de incidencia asumiendo que los partos
por cesárea cuestan dos veces más que los partos vaginales. Debido a que la propor-
ción de partos por cesárea aumenta con los ingresos, los resultados de incidencia bajo
este supuesto son mucho menos en pro de los pobres.
Visitas a un médico
Las encuestas de 1997 y 2001 preguntan a los padres acerca de visitas al médico para
sus niños entre 0 y 4 años de edad, pero hay diferencias en los cuestionarios. La en-
cuesta de 1997 pregunta primero por el estatus de salud del niño (¿Se ha sentido
enfermo el niño o ha sufrido un accidente en los últimos 30 días?) y luego reporta las
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29241
242 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
consultas con un médico sólo para niños “enfermos”. Este procedimiento en dos eta-
pas pierde información acerca de las visitas al médico para chequeos rutinarios de
niños que están bien. La encuesta de 2001 pregunta por cualquier consulta con un
médico, independientemente de la evaluación subjetiva sobre el estatus de salud del
niño. Las grandes diferencias en la proporción de niños vistos por un médico mostra-
das en el cuadro A12.8 del anexo (32,7% en 1997 y 53,8% en 2001) es muy probable-
mente atribuible a esta diferencia en los cuestionarios. Si en 2001 restringimos el análisis
a niños reportados enfermos, las proporciones son similares (32,7% en 1997 y 29,3%
en 2001). Los patrones difieren también con la distribución del ingreso. La proporción
de niños menores de cinco años que visitó a un médico el mes anterior a la encuesta
es más sensible al ingreso del hogar en la encuesta de 2001 que en la de 1997. Esto es
un signo de que llevar a un niño que está bien al médico es más común en hogares
más ricos que en hogares pobres.
Otras dos diferencias socavan la comparación: sólo la encuesta de 1997 registra el
número de visitas durante el mes y sólo la encuesta de 1997 tiene información sobre
visitas a instalaciones públicas que no son completamente gratuitas y son parcial-
mente financiadas con cobros a los usuarios. A pesar de las diferencias metodológicas,
los resultados para 1997 y 2001 indican claramente un perfil de las subvenciones pú-
blicas en pro de los pobres para los servicios ofrecidos por médicos en instalaciones
públicas. Alrededor del 70% de los beneficiarios de estas subvenciones son indivi-
duos en los dos quintiles más pobres de la población. Las fugas hacia hogares no
pobres son pequeñas.
Las comparaciones pueden ser hechas también ignorando en 2001 los individuos
que no fueron reportados como enfermos (aun cuando se sabe que ellos fueron a ver
un médico) e ignorando en 1997 la información disponible sobre el número de visitas
y el financiamiento parcial de las visitas. Esta alternativa (denominada H2 en el cua-
dro A12.8 del anexo) sugiere una reducción en la precisión de la focalización de la
subvención pública para visitas a médicos en instalaciones públicas.
La encuesta de 1997 incluye una pregunta sobre el tiempo de espera. Una persona
en el quintil más bajo espera un promedio de 79 minutos para que un médico vea a
un niño. Los tiempos promedio de espera para los otros quintiles son 75, 56, 55 y 45
minutos, respectivamente. Esta significativa diferencia en el tiempo de espera es pro-
bablemente un factor que justifica la más baja probabilidad de que un niño de un
hogar pobre visite a un médico, aun cuando el servicio es gratuito.
Medicinas
En las instalaciones públicas de salud algunas medicinas son gratis o son vendidas a
precios subvencionados. La precisión de focalización de estas subvenciones se puede
estudiar con la ayuda de encuestas de hogares. Otra vez, el cuestionario de 1997 en
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29242
243Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
dos etapas y la falta de detalle en las preguntas de 2001 sobre el financiamiento de las
medicinas, enturbian los resultados comparativos. No obstante, el cuadro A12.9 del
anexo sugiere sin ambigüedad un perfil en pro de los pobres de las subvenciones
públicas para las medicinas prescritas para los niños en las instalaciones públicas. Al-
rededor del 50% de estas drogas va a niños de hogares en el quintil inferior de la
distribución del ingreso equivalente del hogar. La precisión de focalización de este
programa público se redujo claramente entre 1997 y 2001.
Hospitalizaciones
Según las respuestas de la encuesta de hogares, en promedio el 8,4% de los niños
menores de cinco años son hospitalizados cada año (cuadro A12.10 del anexo). El
número no cambió entre 1997 y 2001. Durante ese período, el uso de las instalaciones
públicas aumentó levemente conforme a la distribución del ingreso.
Vacunación
La vacunación de niños menores de cinco años es difundida en Argentina; en 2001, el
99% de los niños recibió por lo menos una dosis de la vacuna para el bacilo Calmette-
Guérin (BCG) contra la tuberculosis (ver cuadro A12.11 del anexo).11 Las proporciones
correspondientes para las vacunas de Sabin y sarampión fueron 95,4% y 72,8%, res-
pectivamente. La mayoría de los niños obtienen sus vacunas en instalaciones públi-
cas. Aun los niños de los hogares más ricos toman parte en los programas públicos de
vacunación, pero ya que los hogares pobres tienen más niños, y algunos niños de
familias no pobres utilizan instalaciones privadas, la incidencia de los programas pú-
blicos de vacunación es todavía claramente en pro de los pobres. Por ejemplo, en el
caso de la BCG, el 30,6% de las vacunas va a niños en el quintil más pobre y el 10,5%
beneficia a niños en el quintil superior. (La encuesta de 2001 no registra información
sobre el uso de las instalaciones públicas para vacunación, así que todos los resultados
de incidencia se refieren a 1997).
Programas de nutrición
Los tres niveles de gobierno en Argentina operan una variedad de programas de nutri-
ción. La encuesta captura aquellos que proporcionan leche para bebés en hospitales,
alimento en algunos jardines infantiles públicos y comidas en centros locales de ali-
mentación. Los cuadros A12.12 a A12.14 del anexo muestran diferencias de focalización
11 La información sobre vacunaciones fue hecha por recuento de la madre y confirmada por inspección
de una tarjeta de vacunación.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29243
244 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
significativas a través de estos programas. La proporción de los beneficios totales lle-
gando al 20% más pobre de la población en 2001 oscila del 77,3% para comidas en cen-
tros locales de alimentación al 41,7% en jardines infantiles públicos. Los centros locales
de alimentación se sitúan generalmente en escuelas públicas en vecindarios pobres.
La cobertura de estos programas de nutrición aumentó dramáticamente entre 1997
y 2001. Por ejemplo, sólo el 2,6% de niños pobres asistió a los centros locales para
obtener comidas gratis en 1997, pero para 2001, el 20,2% de ellos lo hizo.
Como los servicios de salud en los hospitales públicos, el programa de entrega de
leche en hospitales parece haber llegado a ser menos focalizado con el tiempo. En el
caso de alimento en jardines infantiles, los cambios parecen haber sido en pro de los
pobres y fueron algo neutrales para los centros locales de alimentación.
Resumiendo los resultados de incidencia
La literatura ha desarrollado una gama de instrumentos gráficos y analíticos para
resumir información sobre la incidencia de los programas públicos. En las figuras 12.5
a 12.10 mostramos las curvas de concentración para varios programas de salud y nu-
trición. Los individuos son ordenados según su ingreso equivalente del hogar. La
curva de concentración (Lorenz) muestra la proporción acumulada de los beneficios
totales (ingreso) de un programa dado llegando al enésimo más pobre de la pobla-
ción. La curva de concentración por encima de la curva de Lorenz caracteriza a los
programas progresivos; curvas por encima de la diagonal (“la línea de perfecta igual-
dad”) se asocian con programas en pro de los pobres (Lambert 1993).12
Las curvas de concentración no difieren significativamente entre programas de
salud, a excepción de los programas de vacunación, que son menos en pro de los
pobres, especialmente la vacuna cuádruple (DPT más Haemophilus influenzae tipo B) y
las vacunas contra sarampión, paperas y rubéola (spr) (gráficos 12.5 y 12.6). El gráfico
12.7 muestra diferencias sustanciales entre curvas de concentración típicas para un
servicio de salud y para un programa de vacunación. Las curvas para programas de
nutrición se estiman con menos precisión, considerando el alcance de estos progra-
mas (gráfico 12.8). Las curvas para comidas en centros locales de alimentación se en-
cuentran por encima de las curvas para los otros programas de nutrición.
La precisión en la focalización parece haber disminuido desde 1997 para todos los
servicios de salud considerados, de acuerdo con las curvas de concentración mostra-
das en el gráfico 12.9. El mismo comentario aplica para la leche en hospitales públicos
y centros de asistencia médica primaria (gráfico 12.10). No hay un patrón claro para
cambios en las comidas en jardines infantiles y en centros locales de alimentación.
12 Para notas técnicas sobre técnicas cuantitativas para el análisis de la equidad en la salud, ver el sitio web
del Banco Mundial, http://www.worldbank.org/poverty/health/wbact/_eq.htm.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29244
245Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
GRÁFICO 12.5
CURVAS DE CONCENTRACIÓN, SERVICIOS DE SALUD, ARGENTINA, 1997
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997).
GRÁFICO 12.6
CURVAS DE CONCENTRACIÓN, PROGRAMAS DE VACUNACIÓN, ARGENTINA, 1997
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997).
Nota: BCG, vacuna para el bacilo Calmette-Guérin (tuberculosis); DPT, difteria, tos ferina y tétanos; spr, vacuna para
sarampión, paperas y rubéola; cuádruple, vacuna spr más Haemophilus influenzae tipo B.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29245
246 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
GRÁFICO 12.7
CURVAS DE CONCENTRACIÓN, VISITAS A UN MÉDICO Y VACUNACIÓN DE BCG, ARGENTINA, 1997
GRÁFICO 12.8
CURVAS DE CONCENTRACIÓN, PROGRAMAS DE NUTRICIÓN, ARGENTINA, 1997
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997).
Nota: BCG, vacuna para el bacilo Calmette-Guérin (tuberculosis).
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29246
247Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
El cuadro A12.15 del anexo muestra el índice de concentración (IC) para cada servi-
cio, una medida del punto hasta el cual una variable particular se distribuye desigual-
mente a través de estratos de ingreso (Lambert, 1993). Los números negativos reflejan
programas en pro de los pobres. Entre más alto el IC en valor absoluto, más en pro de
los pobres es el programa.
GRÁFICO 12.9
CURVAS DE CONCENTRACIÓN, ASISTENCIA PRENATAL, PARTOS ASISTIDOS,
MEDICINAS Y HOSPITALIZACIONES, 1997 Y 2001
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29247
248 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
Todos los programas de salud y nutrición considerados son en pro de los pobres.
El más en pro de los pobres es el programa de comidas en centro local de alimenta-
ción, seguido por el de leche en hospitales, todos los servicios de salud y los progra-
mas de vacunación. Entre 1997 y 2001, la precisión de la focalización ha disminuido
en los servicios de salud para los cuales hay datos comparables disponibles. Lo mismo
es cierto de los programas de entrega de leche. Para otros programas de nutrición, los
cambios fueron insignificantes.
CARACTERIZANDO LOS CAMBIOS EN LA FOCALIZACIÓN
Los resultados de beneficio-incidencia son derivados agregando las decisiones indivi-
duales sobre el consumo de servicios públicamente proporcionados. Un hogar consu-
mirá un servicio si por lo menos uno de sus miembros tiene derecho a él, si la persona
(o sus padres) decide consumir el servicio y si la persona decide hacerlo en el sector
público. Por consiguiente, las diferencias en la focalización de un programa en el tiempo
o a través de las regiones son el resultado de diferencias en las tres etapas descritas. Es
pertinente identificar hasta qué punto el cambio en la precisión de la focalización de
un programa resulta de cambios en la estructura sociodemográfica de la población o
Fuente:Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
GRÁFICO 12.10
CURVAS DE CONCENTRACIÓN, PROGRAMAS DE NUTRICIÓN, 1997 Y 2001
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29248
249Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
de cambios en las decisiones del hogar sobre el consumo del servicio (si utilizarlo o no
y dónde utilizarlo). En esta sección, atacamos este asunto utilizando descomposicio-
nes agregadas y microeconométricas.
Descomposiciones agregadas
Suponga que agrupamos la población total en quintiles h = 1,. . ., 5 según su ingresos
equivalente del hogar. La proporción de usuarios totales de un servicio de salud j en
una instalación pública que pertenece al quintil h en el tiempo t se denota bhjt
. Estas
proporciones son los insumos de cualquier medida de beneficio-incidencia. Si bhjt
es
decreciente en el ingreso, el programa público j se dice que es en pro de los pobres. El
valor bhjt
se puede escribir:
bhjt
= qhjt
• ahjt
• phjt
,
donde qhjt
es la proporción de personas que califican para el servicio j que pertenece al
quintil h, ahjt
es la tasa de uso del servicio j en el quintil h en relación con el promedio
de la población, y phj es la proporción de usuarios en el sector público en h en relación
con el promedio de la población. Las diferencias entre quintiles en el valor de b están
dadas por las diferencias en q, a y p.
Ilustremos esta descomposición con el caso de la asistencia prenatal por parte de
personas médicamente entrenadas. Por definición, sólo las mujeres encinta califican
para este servicio. Si las mujeres encinta no están distribuidas uniformemente a lo
largo de la distribución del ingreso, el valor de q diferirá entre quintiles. En la mayoría
de los países, las tasas de fecundidad disminuyen con el ingreso, lo que implica que el
valor de q disminuye con el ingreso para los servicios de salud relacionados con muje-
res embarazadas y niños. Todo lo demás constante, este patrón implicará una tenden-
cia en pro de los pobres para cualquier servicio de salud dirigido a esa población.
El uso relativo de un servicio (resumido por a) es el segundo determinante de los
resultados de incidencia. Manteniendo todo lo demás constante, si, en contraste con
las mujeres embarazadas de hogares no pobres, la mayoría de las mujeres de hogares
pobres deciden no ver a una persona médicamente entrenada, el valor de a aumenta-
rá con los ingresos.
Finalmente, la elección entre atención pública o privada es el tercer determinante
crucial de los resultados de incidencia. Si las mujeres pobres embarazadas escogen
una instalación pública más a menudo que las mujeres no pobres, el valor de p dismi-
nuirá con los ingresos.
Las diferencias en el patrón de las b y, entonces, en los resultados de incidencia en
el tiempo y a través de las regiones, dependen de las diferencias en los factores en el
lado derecho de la ecuación. Utilizamos esta sencilla descomposición para obtener
una caracterización preliminar de las diferencias en los resultados de incidencia en el
tiempo y a través de las regiones en Argentina.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29249
250 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
El cuadro A12.16 del anexo muestra los resultados de la descomposición de los
resultados de incidencia por quintil para diferentes programas de salud. Los prime-
ros tres conjuntos de filas en cada panel del cuadro, reproducen los resultados de los
cuadros A12.6, A12.7, A12.9 y A12.10 del anexo. La distribución de usuarios potencia-
les, la decisión de participación y la elección entre atención pública o privada, deter-
minan los resultados de incidencia en el conjunto de la fila 4. Las diferencias en
incidencia por quintil se reportan en la fila 5.
Hay una reducción clara en el grado de focalización del programa público de asis-
tencia prenatal. En 1997, el 46,5% de los beneficiarios totales de ese programa perte-
necían al quintil inferior de la distribución del ingreso equivalente; en 2001 la
proporción cayó al 43,3%. Esta caída de 3,2 puntos porcentuales tiene su complemen-
to en las ganancias de 1,6 para el quintil 3, 1,0 para el quintil 4 y 0,6 para el quintil
superior. El conjunto de la fila 6 nos ayuda a caracterizar los cambios en la incidencia
mostrando los resultados de la descomposición. La línea de usuarios potenciales mues-
tra los resultados de incidencia si cambiamos la distribución de mujeres encinta (con-
junto fila 1) entre 1997 y 2001 pero mantenemos fijas las tasas de participación y las
decisiones sobre público o privado en los valores de un año dado. Como los valores
de a y p se pueden fijar en dos años alternativos, en el cuadro reportamos el promedio
de las cuatro simulaciones posibles.13
La distribución de mujeres embarazadas se hizo menos en pro de los pobres entre
1997 y 2001, implicando una caída de 1,4 en la incidencia sobre el quintil inferior. Esto
significa que, con todo lo demás constante, los cambios demográficos explicarían una
gran parte de la disminución en la precisión de la focalización de la subvención para
la asistencia prenatal en hospitales públicos y centros de atención médica primaria.
Ahora es más probable que las mujeres pobres sean vistas por personal médicamente
entrenado. Este aumento en la participación (combinado con los cambios en el resto
de la distribución) implica un aumento (0,9 puntos) en la incidencia sobre el quintil
inferior. El último efecto, denominado provisión pública, parece el más relevante.
Aunque el uso de hospitales públicos aumentara para los pobres, aumentó proporcio-
nalmente más para el resto de la población. Este efecto implica una caída considerable
en la precisión para focalizarse en el quintil inferior.
Para los partos asistidos, las tasas de participación se asumen sin cambio porque
no hay información disponible para 2001. La reducción en la precisión para focalizarse
en el quintil inferior entre 1997 y 2001 es otra vez una consecuencia de la reducción en
la tasa relativa de fecundidad de las mujeres pobres y del aumento relativo en el uso
de instalaciones públicas por mujeres no pobres. En contraste con el caso de la asis-
tencia prenatal, el primer efecto parece ser el dominante. Resultados semejantes se
obtienen para las subvenciones públicas a las medicinas. La incidencia de admisiones
13 Los resultados son bastante resistentes a cambios en el año base.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29250
251Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
a hospitales públicos aumentó algo para el quintil inferior y disminuyó considerable-
mente para el segundo, lo que llevó a un descenso en la precisión general de la
focalización, medida por el índice de concentración. La disminución para el segundo
quintil es explicada por una reducción relativa en la fecundidad, una caída grande en
la proporción de niños hospitalizados y por un aumento menos pronunciado en el
uso de instalaciones públicas que en otros quintiles de la distribución.
La reducción en la precisión de la focalización de los programas de nutrición para
leche en hospitales y centros médicos primarios y para comidas en centros locales de
alimentación es atribuible a un descenso en las tasas de fecundidad de los pobres y a
un aumento grande en la participación de las personas de otros quintiles de la distri-
bución en programas de nutrición (cuadro A12.17 del anexo).
Microsimulaciones
Las descomposiciones agregadas, aunque informativas, son sólo aproximaciones bur-
das al efecto sobre los cambios en los resultados de beneficio-incidencia de cambios
en la estructura de población, en la decisión de consumir un servicio de salud dado y
en la decisión entre público o privado. Un análisis más sofisticado se puede realizar
con la ayuda de técnicas de descomposición microeconométrica (o de
microsimulación).14 Suponga que queremos analizar los cambios entre t y t’ en el ín-
dice de concentración para el programa de visitas a médicos en instalaciones públi-
cas. La idea detrás de esta metodología es simular para cada individuo la decisión
contrafactual de si visitar a un médico en una instalación pública en el tiempo t si
ciertos factores fueran los correspondientes al tiempo t’ en vez de los observado en el
tiempo t.15 Consideramos tres conjuntos de factores que se pueden cambiar alternati-
vamente entre t y t’: las características de cada individuo (y de la familia del indivi-
duo), la manera en que estas características están ligadas a la decisión de visitar a un
médico y la manera en que estas características están ligadas a la elección de asistir a
una instalación pública en vez de una privada.
Para implementar esta metodología, estimamos modelos econométricos de la de-
cisión de visitar a un médico y la decisión condicional de asistir a una instalación
pública, como funciones de varias características individuales y del hogar.16 Los cam-
bios en el índice de concentración se descomponen en tres efectos. El efecto de pobla-
ción es obtenido simulando las decisiones de salud en el tiempo t si las características
del individuo y del hogar fueran las del tiempo t’; el efecto de participación viene de
14 Para la aplicación de técnicas de microsimulación a problemas distributivos, ver Bourguignon, Ferreira
y Lustig (2004).
15 Una explicación más detallada de la metodología se incluye en Gasparini y Panadeiros (2004) y puede
ser obtenida de los autores a petición de los interesados.
16 Los detalles de los modelos estimados se proporcionan en Gasparini y Panadeiros (2004).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29251
252 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
simular las decisiones de salud de cada individuo en el tiempo t si los parámetros que
gobiernan la decisión de visitar a un médico fueran los del tiempo t’; y el efecto de la
provisión pública es computado asumiendo que los parámetros que gobiernan la deci-
sión público versus privado son los del tiempo t’.
El cuadro A12.18 del anexo reporta los resultados de la descomposición. La prime-
ra fila reporta el cambio en el valor absoluto del índice de concentración entre 1997 y
2001 para cada servicio de salud y las últimas tres filas muestran los valores de cada
efecto.17 El índice de concentración para el programa de atención prenatal en instala-
ciones públicas disminuyó 4,8 puntos entre 1997 y 2001, implicando una focalización
menos precisa. Si el único cambio entre 1997 y 2001 hubiera sido en la forma como las
decisiones individuales se hacen, el IC habría aumentado 0,4 puntos –un cambio in-
significante. El efecto de los cambios en la decisión público-privado entre 1997 y 2001
contribuyeron 1,7 puntos a la caída general del IC. El factor más significativo en este
descenso fue el cambio en las características de la población. Aun manteniendo todos
los otros parámetros constantes, el cambio en las características habría contribuido 3,5
puntos a la reducción en el IC. La reducción en el número de niños en las familias
pobres es probablemente el principal factor detrás de este resultado.
El efecto de población es también altamente relevante para focalizar los partos
asistidos, las medicinas y las hospitalizaciones. El efecto de la provisión pública es
negativo excepto para los partos asistidos, probablemente porque un número cre-
ciente de grupos de ingreso medio y alto buscaron atención en hospitales públicos
como resultado de la crisis económica. El efecto participación es insignificante en to-
dos los casos excepto las hospitalizaciones, un signo del aumento en las hospitaliza-
ciones de niños de los quintiles más pobres.
CONCLUSIONES
Este estudio analiza la precisión de la focalización de las políticas de salud y nutrición
para mujeres embarazadas y niños menores de cinco años en Argentina, utilizando
información de dos encuestas de medición de estándares de vida en 1997 y 2001. Un
análisis de beneficio-incidencia nos dice que los programas de salud pública y nutri-
ción son en pro de los pobres. Los resultados de descomposiciones agregadas y
microeconométricas, sin embargo, sugieren que los cambios en incidencia en los cin-
co años pasados han favorecido a los no pobres a causa de dos factores: una reducción
sustancial en la tasa de fecundidad de las parejas pobres y un aumento en el uso de
las instalaciones públicas por hogares más ricos, probablemente provocados por la
continua crisis económica que empezó en 1998.
17 Los cambios no coinciden exactamente con los del cuadro A12.15 del anexo porque las observaciones
con información faltante para las variables incluidas en los modelos se eliminaron.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29252
253Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
CUADRO A12.1
ENCUESTAS DE MEDICIÓN DE ESTÁNDARES DE VIDA, OBSERVACIONES Y POBLACIÓN
REPRESENTADA POR LA MUESTRA. ARGENTINA, 1997 Y 2001
1997 2001
ObservacionesTotal 75.407 71.574
Hombres 36.439 34.556
Mujeres 38.968 37.018
PoblaciónTotal 29.991.693 31.959.425
Hombres 14.448.953 15.389.584
Mujeres 15.542.740 16.569.841
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
ANEXO
CUADRO A12.2
INGRESO MEDIO POR DECIL, ARGENTINA, 1997 Y 2001
Ingreso per cápita Ingreso equivalente
Decil 1997 2001 1997 2001
1 35,7 24,2 50,6 34,0
2 73,6 52,1 100,2 71,4
3 104,6 78,9 140,3 104,2
4 137,3 107,1 178,8 139,5
5 173,6 137,1 221,5 175,8
6 220,3 176,8 276,1 221,1
7 278,3 227,5 343,9 280,7
8 363,9 300,4 443,2 363,6
9 517,7 428,0 617,5 511,4
10 1.190,0 981,1 1.382,7 1.136,5
Promedio 309,5 251,3 375,6 303,8
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29253
254 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
CUADRO A12.3
DISTRIBUCIÓN DEL INGRESO POR DECIL E ÍNDICES DE DESIGUALDAD, ARGENTINA, 1997 Y 2001
Ingreso per cápita Ingreso equivalente
1997 2001 1997 2001
Proporción de los deciles (porcentaje)1 1,2 1,0 1,3 1,1
2 2,4 2,1 2,7 2,3
3 3,4 3,1 3,7 3,4
4 4,4 4,3 4,8 4,6
5 5,6 5,5 5,9 5,8
6 7,1 7,0 7,4 7,3
7 9,0 9,1 9,2 9,2
8 11,8 11,9 11,8 12,0
9 16,7 17,0 16,4 16,8
10 38,5 39,0 36,9 37,4
Razón de ingresos10: 1 33,3 40,6 27,3 33,4
90:10 11,3 13,7 9,7 11,7
95:80 2,3 2,3 2,2 2,2
Índices de desigualdadGini 0,507 0,522 0,484 0,499
Theil 0,491 0,521 0,443 0,471
cv 1,410 1,481 1,291 1,350
A(0,5) 0,213 0,227 0,194 0,207
A(1) 0,380 0,406 0,348 0,374
A(2) 0,645 0,678 0,603 0,641
E(0) 0,477 0,520 0,427 0,468
E(2) 0,994 1,097 0,833 0,912
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
CUADRO A12.4
MEDIDAS DE POBREZA, ARGENTINA, 1997 Y 2001, LÍNEA DE POBREZA OFICIAL
1997 2001
Tasa de incidencia 0,326 0,429
Brecha de pobreza 0,143 0,226
Intensidad de pobreza [FGT(2)] 0,088 0,160
Nota: FGT, índice Foster, Greer y Thorbecke.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29254
255Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
CUADRO A12.5
POBLACIÓN Y POBLACIÓN INFANTIL POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTES
DE LOS HOGARES, ARGENTINA, 1997 Y 2001
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997Individuos
Todos los individuosMuestra 17.084 15.362 14.820 13.620 12.524 73.410Población 5.859.871 5.858.144 5.858.311 5.850.874 5.810.177 29.237.377
Niños menores de 2 añosMuestra 1.456 972 799 605 472 4.304Población 470.802 388.856 302.447 214.781 206.541 1.583.427
Niños menores de 5 añosMuestra 2.446 1.645 1.326 1.074 792 7.283Población 801.369 651.945 488.135 394.471 322.350 2.658.270
Proporción (porcentaje)TodosMuestra 23,3 20,9 20,2 18,6 17,1 100,0Población 20,0 20,0 20,0 20,0 20,0 100,0
Niños menores de 2 añosMuestra 33,8 22,6 18,6 14,1 11,0 100,0Población 29,7 24,6 19,1 13,6 13,0 100,0
Niños menores de 5 añosMuestra 33,6 22,6 18,2 14,7 10,9 100,0Población 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
2001Individuos
TodosMuestra 12.387 12.017 11.538 10.814 10.544 57.300Población 4.832.178 4.832.686 4.831.489 4.829.508 4.815.221 24.141.082
Niños menores de 2 añosMuestra 938 718 599 455 409 3.119Población 353.412 278.273 257.517 199.744 193.819 1.282.765
Niños menores de 5 añosMuestra 1.626 1.207 1.041 774 688 5.336Población 608.055 472.205 445.167 340.094 318.925 2.184.446
Proporción (porcentaje)TodosMuestra 21,6 21,0 20,1 18,9 18,4 100,0Población 20,0 20,0 20,0 20,0 20,0 100,0
Niños menores de 2 añosMuestra 30,1 23,0 19,2 14,6 13,1 100,0Población 27,6 21,7 20,1 15,6 15,1 100,0
Niños menores de 5 añosMuestra 30,5 22,6 19,5 14,5 12,9 100,0Población 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29255
256 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
CUADRO A12.6
ASISTENCIA PRENATAL POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTES DE LOS HOGARES,
ARGENTINA, 1997 Y 2001
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997
Niños menores de 2 años
(porcentaje) 29,7 24,6 19,1 13,6 13,0 100,0
Visitas de AP (porcentaje) 94,8 96,3 99,5 99,4 98,4 97,1
Mes de primera visita 3,1 2,8 2,6 1,8 1,6 2,6
Más de 4 visitas (porcentaje) 73,0 82,3 91,7 94,5 95,6 84,5
Visitas en hospital público 81,6 56,0 46,0 25,7 7,6 51,6
Incidencia (H1) 46,5 26,8 17,7 7,0 2,0 100,0
Incidencia (H2) 42,1 27,3 20,1 8,2 2,3 100,0
2001
Niños menores de 2 años
(porcentaje) 27,6 21,7 20,1 15,6 15,1 100,0
Visitas de AP (porcentaje) 97,6 96,5 97,6 98,5 99,2 97,7
Mes de primera visita 3,6 2,4 2,1 2,0 1,7 2,5
Más de 4 visitas (porcentaje) 69,6 83,0 87,8 91,0 94,8 83,1
Visitas en hospital público 85,6 68,1 52,4 27,7 9,0 54,9
Incidencia (H1) 43,3 26,8 19,3 8,0 2,5 100,0
Incidencia (H2) 38,2 28,2 21,4 9,2 3,0 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
Nota: H1, calculado sin tomar el número de visitas en consideración; H2, calculado tomando el número de visitas en
consideración.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29256
257Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
CUADRO A12.7
PARTOS ATENDIDOS POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTES DE LOS HOGARES,
ARGENTINA, 1997 Y 2001
(porcentaje)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997
Niños menores de 2 años 29,7 24,6 19,1 13,6 13,0 100,0
Parto asistido 98,3 99,4 99,9 100,0 100,0 99,3
Operación cesárea 21,4 27,4 37,4 38,3 45,6 31,1
Parto en hospital público 79,5 59,4 49,1 27,3 10,9 53,4
Incidencia (H1) 44,5 27,7 17,9 7,1 2,7 100,0
Incidencia (H2) 34,6 27,4 23,9 9,7 4,4 100,0
2001
Niños menores de 2 años 27,6 21,7 20,1 15,6 15,1 100,0
Parto asistido 98,3 99,4 99,9 100,0 100,0 99,3
Operación cesárea 28,2 33,3 38,4 39,8 47,9 36,0
Parto en hospital público 83,4 67,5 49,5 33,0 11,3 55,0
Incidencia (H1) 41,9 27,0 18,4 9,5 3,2 100,0
Incidencia (H2) 35,8 27,1 21,3 11,4 4,5 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
Nota: La encuesta de 2001 no captura la proporción de partos atendidos. Para calcular los resultados de incidencia,
asumimos que no hay cambios entre 1997 y 2001. H1, calculado sin tomar en consideración los costos diferenciales
entre un parto vaginal y una operación cesárea; H2, asume que el costo de una cesárea es el doble de un parto normal.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29257
258 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
CUADRO A12.8
VISITAS A UN MÉDICO POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTES DE LOS HOGARES,
ARGENTINA, 1997 Y 2001
(porcentaje, excepto si se indica de otra forma)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997
Niños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
Reportados enfermos 33,6 36,6 34,5 37,3 37,1 35,5
Vio un doctor si se reportó enfermo 90,7 90,8 92,4 94,4 95,4 92,2
Vio a un doctor 30,5 33,3 31,9 35,2 35,4 32,7
Número de visitas 2,5 2,4 2,2 2,4 2,5 2,4
Públicamente financiadas (1)a 77,4 56,5 42,5 20,5 10,3 48,0
Públicamente financiadas (2)b 83,0 61,5 45,0 22,3 11,1 51,7
Incidencia (H1) 47,0 29,2 14,4 6,6 2,9 100,0
Incidencia (H2) 45,1 29,6 15,6 6,9 2,8 100,0
2001
Niños menores de 5 años 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
Reportados enfermos 31,3 34,7 35,9 31,8 44,3 35,0
Vio un doctor si se reportó enfermo 81,3 79,0 84,7 85,0 90,7 83,8
Vio a un doctor (calculado como
el producto de las filas precedentes) 25,4 27,4 30,4 27,1 40,2 29,3
Vio a un doctor (respuestas reales) 46,7 51,2 54,9 57,3 65,9 53,8
Públicamente financiadas 89,7 68,1 45,4 23,5 8,6 50,6
Incidencia (H3) 42,8 27,7 18,7 7,7 3,1 100,0
Incidencia (H2) 43,2 27,5 19,1 6,7 3,4 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
Nota: Las filas “reportado enfermo” y “vio a un doctor”, se refieren a los 30 días anteriores a la encuesta. Para 1997, H1
se refiere a públicamente financiado, tomando en consideración las diferencias entre la financiación parcial y total e
incluyendo las diferencias en el número de visitas; H2 se refiere a públicamente financiado, ignorando las diferencias
entre la financiación parcial y total y las diferencias en el número de visitas. Para 2001, no está disponible la diferencia
entre financiación parcial y total. H3 se calcula usando la fila “vio a un doctor (respuestas reales)”; H2 se calcula usando
la fila “vio a un doctor (calculado).”
a. Toma en cuenta la diferencia entre financiación total y parcial.
b. No toma en cuenta la diferencia entre financiación total y parcial.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29258
259Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
CUADRO A12.9
MEDICINAS POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTES DE LOS HOGARES,ARGENTINA, 1997 Y 2001(porcentaje)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997
Niños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
Medicinas prescritas 25,1 27,0 27,2 29,5 26,9 26,8
Medicinas recibidas 96,7 94,9 97,7 96,4 97,3 96,5
Públicamente financiadas 49,7 29,2 21,4 10,1 3,1 27,2
Incidencia (H1) 51,6 26,1 14,8 6,1 1,4 100,0
2001
Niños menores de 5 años 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
Medicinas prescritas 54,6 55,0 59,6 56,8 63,5 57,6
Medicinas recibidas 94,5 94,5 97,0 96,4 99,4 96,3
Públicamente financiadas 64,8 36,4 25,9 19,1 8,0 32,3
Incidencia (H2) 49,4 21,7 16,3 8,7 3,9 100,0
Incidencia (H1) 47,3 24,4 16,5 8,2 3,7 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
Nota: H1, Ignora la población que no se auto-reporta como enferma; H2, incluye la población que no se auto reporta
como enferma.
CUADRO A12.10
HOSPITALIZACIONES POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTES DE LOS HOGARES,ARGENTINA, 1997 Y 2001
(porcentaje)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997
Niños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
Hospitalizados el año anterior 8,8 10,6 6,9 7,1 7,0 8,4
Públicamente financiado 84,3 70,5 62,1 29,1 9,2 63,1
Incidencia 42,5 35,0 15,1 5,9 1,5 100,0
2001
Niños menores de 5 años 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
Hospitalizados el año anterior 9,6 6,8 10,9 9,1 4,5 8,4
Públicamente financiado 91,9 66,0 67,3 35,1 15,0 65,4
Incidencia 44,5 17,5 27,1 9,1 1,8 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29259
260 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
CUADRO A12.11
VACUNAS POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTES DE LOS HOGARES, ARGENTINA, 1997(porcentaje, excepto si se indica de otra forma)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
BCG
Niños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0Recibió vacuna (1997) 97,5 98,0 99,2 99,2 95,7 98,0Recibió vacuna (2001) 99,1 98,4 99,2 97,4 99,6 98,8Dosis (número) 1,0 1,1 1,1 1,1 1,0 1,1Públicamente financiada 98,4 98,4 96,3 91,7 85,3 95,5Incidencia 30,6 25,5 18,9 14,5 10,5 100,0
SabinNiños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0Recibió vacuna (1997) 93,9 94,6 94,9 97,1 96,4 95,0Recibió vacuna (2001) 93,9 96,1 95,1 95,6 97,7 95,4Dosis (número) (1997) 3,3 3,3 3,4 3,4 3,3 3,3Dosis (número) (2001) 3,4 3,4 3,4 3,4 3,4 3,4Públicamente financiada 98,6 98,2 96,0 91,3 82,7 95,0Incidencia 30,6 24,9 18,8 15,0 10,8 100,0
DPT
Niños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0Recibió vacuna (1997) 87,1 90,0 86,2 86,4 72,8 85,8Recibió vacuna (2001) 80,8 82,0 77,9 79,6 82,9 80,6Dosis (número) (1997) 3,2 3,2 3,3 3,3 3,3 3,3Dosis (número) (2001) 3,5 3,5 3,5 3,6 3,5 3,5Públicamente financiada 66,7 46,1 33,3 17,6 10,4 36,3Incidencia 48,4 27,9 14,7 6,4 2,6 100,0
SarampiónNiños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0Recibió vacuna (1997) 71,8 73,2 74,1 78,6 65,4 72,8Recibió vacuna (2001) 1,1 1,1 1,1 1,1 1,1 1,1Públicamente financiada 98,2 98,2 95,7 91,1 80,5 94,7Incidencia 31,6 25,7 18,7 15,0 9,0 100,0
CuádrupleNiños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0Recibió vacuna (1997) 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0Recibió vacuna (2001) 67,0 72,2 79,4 76,9 86,4 75,0Dosis (número) 3,0 2,9 3,2 2,9 3,1 3,0Públicamente financiada 97,4 93,4 89,8 79,5 74,2 87,4Incidencia 25,2 19,7 20,9 17,5 16,8 100,0
sprNiños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0Recibió vacuna (1997) 15,0 19,2 26,2 29,4 43,4 23,6Recibió vacuna (2001) 72,3 68,9 71,3 72,0 79,0 72,3Dosis (número) 1,2 1,3 1,2 1,3 1,2 1,2Públicamente financiada 95,1 92,6 89,9 74,3 73,5 84,8Incidencia 21,0 22,3 21,2 16,9 18,6 100,0
Fuente: cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
Nota: BCG, vacuna contra el bacilo Calmette-Guérin (tuberculosis); DPT, vacuna para difteria, tétanos y tos ferina; spr,
vacuna para sarampión, paperas y rubéola; cuádruple, vacuna DPT más Haemophilus influenzae tipo B.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29260
261Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
CUADRO A12.13
ALIMENTO EN JARDINES INFANTILES POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTES DE LOSHOGARES, ARGENTINA, 1997 Y 2001
(porcentaje, excepto si se indica de otra forma)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997
Niños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
Atienden jardín público 10,3 13,1 21,1 27,0 38,9 18,9
Número de comidas 1,6 1,3 1,2 1,3 1,0 1,1
Incidencia 31,4 20,0 24,2 16,0 8,3 100,0
2001
Niños menores de 5 años 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
Atienden jardín público 33,3 36,9 41,3 45,4 49,2 41,4
Número de comidas 86,2 69,5 61,0 52,3 24,5 54,7
Incidencia 41,7 21,0 19,2 12,6 5,5 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
CUADRO A12.12
LECHE PARA BEBÉS EN HOSPITALES POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTESDE LOS HOGARES, ARGENTINA, 1997 Y 2001
(porcentaje)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997
Niños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
Recibió leche 24,1 16,6 12,8 8,8 11,6 16,4
Públicamente financiada 91,8 80,4 74,7 28,2 4,7 74,2
Incidencia 55,0 26,9 14,5 3,0 0,5 100,0
2001
Niños menores de 5 años 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
Recibió leche 35,8 29,4 23,8 24,6 21,6 28,2
Públicamente financiada 92,0 82,4 54,2 31,6 6,2 65,5
Incidencia 49,7 28,4 14,2 6,6 1,1 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29261
262 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
CUADRO A12.14
COMIDAS EN CENTROS DE ALIMENTACIÓN LOCAL POR QUINTILES DE INGRESOS EQUIVALENTESDE LOS HOGARES, ARGENTINA, 1997 Y 2001
(porcentaje)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
1997
Niños menores de 5 años 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
Recibe comida en centro local 2,6 1,9 0,6 0,1 0,3 1,4
Recibe comida en centro local público 35,3 8,9 14,5 50,3 0,0 24,2
Número de comidas 1,1 1,6 1,0 1,0 0,0 1,1
Incidencia 78,1 16,2 4,1 1,7 0,0 100,0
2001
Niños menores de 5 años 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
Recibe comida en centro local 20,2 12,2 10,4 9,0 1,5 12,0
Recibe comida en centro local público 25,9 14,9 2,5 1,6 — 16,0
Número de comidas 1,3 1,2 1,0 1,0 — 1,2
Incidencia 77,3 19,4 2,3 1,0 0,0 100,0
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29262
263Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
CUADRO A12.15
ÍNDICES DE CONCENTRACIÓN, PROGRAMAS DE SALUD Y NUTRICIÓN, ARGENTINA, 1997 Y 2001
1997 2001
Salud
Atención prenatal –0,469 –0,429
(–0,484, –0,458) (–0,445, –0,411)
Parto asistido –0,453 –0,414
(–0,464, –0,438) (–0,430, –0,391)
Visitas a doctor –0,440
(–0,449, –0,431)
Medicinas –0,510 –0,387
(–0,535, –0,484) (–0,417, –0,366)
Hospitalizaciones –0,466 –0,372
(–0,499, –0,443) (–0,433, –0,331)
Vacunación
BCG –0,223
(–0,235, –0,214)
Sabin –0,216
(–0,228, –0,202)
DP –0,241
(–0,253, –0,230)
Sarampión –0,234
(–0,245, –0,219)
Cuádruple –0,085
(–0,108, –0,052)
SPR –0,040
(–0,075, –0,012)
Nutrición
Leche en hospitales –0,544 –0,496
(–0,557, –0,528) (–0,515, –0,479)
Comidas en jardines infantiles –0,279 –0,195
(–0,330, –0,199) (–0,233, –0,151)
Comidas en centros locales –0,754 –0,724
(–0,793, –0,708) (–0,745, –0,695)
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
Nota: BCG, vacuna contra el bacilo Calmette-Guérin (tuberculosis); DPT, vacuna para difteria, tétanos y tos ferina; spr,
vacuna para sarampión, paperas y rubéola; cuádruple, vacuna DPT más Haemophilus influenzae tipo B. Los números en
paréntesis son los límites de los intervalos de confianza del 95% para los estimadores de los índices de concentración.
Los intervalos se calcularon usando técnicas de bootstrapping, con 200 replicaciones. Para detalles, ver Gasparini y
Panadeiros (2004).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29263
264 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
CUADRO A12.16
DESCOMPOSICIÓN AGREGADA DE RESULTADOS INCIDENCIA, SERVICIOS DE SALUD, ARGENTINA,1997 Y 2001
(porcentaje)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
Atención prenatal
1. Usuarios potenciales
1997 29,7 24,6 19,1 13,6 13,0 100,0
2001 27,6 21,7 20,1 15,6 15,1 100,0
2. Participación
1997 94,8 96,3 99,5 99,4 98,4 97,1
2001 97,6 96,5 97,6 98,5 99,2 97,7
3. Provisión pública
1997 81,6 56,0 46,0 25,7 7,6 51,6
2001 85,6 68,1 52,4 27,7 9,0 54,9
4. Incidencia
1997 46,5 26,8 17,7 7,0 2,0 100,0
2001 43,3 26,8 19,3 8,0 2,5 100,0
5. Diferencia –3,2 0,0 1,6 1,0 0,6
6. Efectos
Usuarios potenciales –1,4 –2,1 1,7 1,4 0,4
Participación 0,9 –0,2 –0,5 –0,1 0,0
Provisión pública –2,7 2,4 0,4 –0,2 0,1
Partos asistidos
1. Usuarios potenciales
1997 29,7 24,6 19,1 13,6 13,0 100,0
2001 27,6 21,7 20,1 15,6 15,1 100,0
2. Participación
1997 98,3 99,4 99,9 100,0 100,0 99,3
2001 98,3 99,4 99,9 100,0 100,0 99,3
3. Provisión pública
1997 79,5 59,4 49,1 27,3 10,9 53,4
2001 83,4 67,5 49,5 33,0 11,3 55,0
4. Incidencia
1997 44,5 27,7 17,9 7,1 2,7 100,0
2001 41,9 27,0 18,4 9,5 3,2 100,0
5. Diferencia –2,6 –0,8 0,5 2,4 0,4
6. Efectos
Usuarios potenciales –1,5 –2,2 1,7 1,5 0,6
Participación 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0
Provisión pública –1,1 1,5 –1,2 1,0 –0,1
(Continúa en la página siguiente)
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29264
265Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
Quintil
1 2 3 4 5 Total
Medicinas
1. Usuarios potenciales
1997 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
2001 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
2. Participación
1997 24,2 25,6 26,6 28,5 26,2 25,9
2001 51,6 52,0 57,8 54,8 63,1 55,5
3. Provisión pública
1997 49,7 29,2 21,4 10,1 3,1 27,2
2001 64,8 36,4 25,9 19,1 8,0 32,3
4. Incidencia
1997 51,6 26,1 14,8 6,1 1,4 100,0
2001 49,4 21,7 16,3 8,7 3,9 100,0
5. Diferencia –2,2 –4,4 1,4 2,6 2,5
6. Efectos
Usuarios potenciales –1,7 –1,9 2,3 0,7 0,6
Participación 0,6 –0,9 0,6 –0,6 0,3
Provisión pública –1,1 –1,6 –1,5 2,6 1,6
Hospitalizaciones
1. Usuarios potenciales
1997 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
2001 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
2. Participación
1997 8,8 10,6 6,9 7,1 7,0 8,4
2001 9,6 6,8 10,9 9,1 4,5 8,4
3. Provisión pública
1997 84,3 70,5 62,1 29,1 9,2 63,1
2001 91,9 66,0 67,3 35,1 15,0 65,4
4. Incidencia
1997 42,5 35,0 15,1 5,9 1,5 100,0
2001 44,5 17,5 27,1 9,1 1,8 100,0
5. Diferencia 2,0 –17,5 12,0 3,2 0,3
6. Efectos
Usuarios potenciales –2,2 3,0 0,6 0,4
Participación –12,2 8,7 1,6 –0,8
Provisión pública –3,2 0,4 0,9 0,7
Fuente: Cuadros A12.6 a A12.10 del anexo; cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
(Continuación Cuadro A12.16)
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29265
266 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
CUADRO A12.17
DESCOMPOSICIÓN AGREGADA DE RESULTADOS INCIDENCIA, PROGRAMAS DE NUTRICIÓN,ARGENTINA, 1997 Y 2001
(porcentaje)
Quintil
1 2 3 4 5 Total
Leche en hospitales
1. Usuarios potenciales
1997 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
2001 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
2. Participación
1997 24,1 16,6 12,8 8,8 11,6 16,4
2001 35,8 29,4 23,8 24,6 21,6 28,2
3. Provisión pública
1997 91,8 80,4 74,7 28,2 4,7 74,2
2001 92,0 82,4 54,2 31,6 6,2 65,5
4. Incidencia
1997 55,0 26,9 14,5 3,0 0,5 100,0
2001 49,7 28,4 14,2 6,6 1,1 100,0
5. Diferencia –5,3 1,5 –0,2 3,5 0,5
6. Efectos
Usuarios potenciales –1,1 –1,9 2,3 0,5 0,2
Participación –5,9 1,8 1,6 2,4 0,1
Provisión pública 1,7 1,6 –4,2 0,7 0,2
Comidas en centros locales
1. Usuarios potenciales
1997 30,1 24,5 18,4 14,8 12,1 100,0
2001 27,8 21,6 20,4 15,6 14,6 100,0
2. Participación
1997 2,6 1,9 0,6 0,1 0,3 1,4
2001 20,2 12,2 10,4 9,0 1,5 12,0
3. Provisión pública
1997 35,3 8,9 14,5 50,3 0,0 24,2
2001 25,9 14,9 2,5 1,6 0,0 16,0
4. Incidencia
1997 81,1 12,1 4,8 2,0 0,0 100,0
2001 75,6 20,4 2,8 1,2 0,0 100,0
5. Diferencia –5,5 8,3 –2,0 -0,8 0,0
6. Efectos
Usuarios potenciales –0,5 –0,8 0,7 0,6 0,0
Participación –8,6 –3,9 2,5 9,9 0,0
Provisión pública 3,2 13,0 –5,2 -10,9 0,0
Fuente: Cuadros A12.12 a A12.14 del anexo; cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29266
267Argentina: evaluación de cambios en la distribución de beneficios de políticas
NOTA
Estamos agradecidos con la sobresaliente asistencia de investigación de Julieta Trías de la Uni-versidad Nacional de La Plata y de Eugenia Orlicki de la Fundación de Investigaciones Econó-micas Latinoamericanas. Damos gracias también a Daniel Bergna y a los participantes delseminario en un taller del Programa orientado a los pobres del Banco Mundial por sus útilescomentarios y sugerencias. Este capítulo es una versión condensada de parte de un estudiotitulado “Focalizando las políticas de salud y nutrición: el caso de Argentina” preparado para elPrograma orientado a los pobres, del Banco Mundial. El estudio completo está disponible delos autores a petición de los interesados.
REFERENCIAS
Bourguignon, François, Francisco H. G. Ferreira y Nora Lustig, eds. 2004. The microeconomics ofincome distribution dynamics in East Asia and Latin America. Nueva York: Oxford UniversityPress.
Bourguignon, François, Luis Pereira da Silva y Nicholas Stern. 2002. Evaluating the povertyimpact of economic policies: Some analytical challenges. Presentado en la Conferenciadel Fondo Monetario Internacional sobre Políticas macroeconómicas y reducción de lapobreza, Washington, DC, marzo 14-15.
Carneiro, P., K. Hansen y J. Heckman. 2002. Removing the veil of ignorance in assessing thedistributional impacts of social policies. Documento de trabajo, University of Chicago.
Cedlas (Centro de Estudios Distributivos, Laborales y Sociales). 2003. Estadísticas distributivas enla Argentina. Cedlas, Departamento de Economía, Universidad Nacional de La Plata.
Deaton, Angus y Salman Zaidi. 2002. Guidelines for constructing consumption aggregates for welfareanalysis. Documento de trabajo 135. Living Standards Measurement Study. Washing-ton, DC: Banco Mundial.
DGSC (Dirección de Gastos Sociales Consolidados). 2001. Caracterización y evolución del gastopúblico social. DGSC, Secretaría de Política Económica, Ministerio de Economía, BuenosAires.
––——. 2002. El impacto distributivo de la política social en la Argentina. DGSC, Secretaría dePolítica Económica, Ministerio de Economía, Buenos Aires.
Flood, M., L. Gasparini y M. Harriague. 1993. Impacto distributivo del gasto público social:Argentina, 1991. Anales de la XXVIII reunión de la Asociación Argentina de Economía Política.Tucumán.
CUADRO A12.18
DESCOMPOSICIONES MICROECONOMÉTRICAS (MICROSIMULACIONES): CAMBIO EN EL VALORABSOLUTO DEL ÍNDICE DE CONCENTRACIÓN, ARGENTINA, 1997-2001
Atención prenatal Partos asistidos Medicinas Hospitalizaciones
Diferencia –0,048 –0,052 –0,116 –0,072
Participación 0,004 0,000 –0,008 0,021
Provisión pública –0,017 0,006 –0,036 –0,057
Población –0,035 –0,058 –0,072 –0,036
Fuente: Cálculos de los autores basados en Siempro (1997, 2000).
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29267
268 Llegar a los pobres con servicios de salud, nutrición y población
Gasparini, Leonardo. 2003. Argentina’s distributional failure. Banco Interamericano de Desa-rrollo, Washington, DC.
Gasparini, Leonardo y Mónica Panadeiros. 2004. Targeting health and nutrition policies: Thecase of Argentina. Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas, Bue-nos Aires.
Gasparini, Leonardo, Verónica Alaimo, Fernando Cuenin, Mariano Rabassa y Guillermo Vúletin.2000. El impacto distributivo del gasto público en sectores sociales en la Provincia deBuenos Aires: un análisis con base en la Encuesta de Desarrollo Social. Cuadernos deeconomía 50. La Plata.
Harriague, M. y L. Gasparini. 1999. El impacto redistributivo del gasto público en los sectoressociales. Anales de la XXVIII reunión de la Asociación Argentina de Economía Política. Rosario.
Lambert, P. 1993. The distribution and redistribution of income. Manchester University Press.Marchionni, M. y L. Gasparini. 2003. Tracing out the effects of demographic changes on the
income distribution: The case of Greater Buenos Aires, 1980–2000. Documento de traba-jo, Universidad Nacional de La Plata.
Siempro (Subsecretaría de Proyectos Sociales). 1997. Encuesta de desarrollo social (EDS). Siempro,Secretaría de Desarrollo Social, Buenos Aires.
—–––. 2001. Encuesta de condiciones de vida (ECV). Siempro, Secretaría de Desarrollo Social,Buenos Aires.
Van de Walle, Dominique. 1998. Assessing the welfare impacts of public spending. WorldDevelopment 26(3): 365-79.
Van de Walle, Dominique y Kimberly Nead. 1995. Public spending and the poor: Theory and evidence.Baltimore: Johns Hopkins University Press.
04cap12.p65 05/10/2006, 19:29268