CF M artin - guitarramania.com · en el resto del país. Los moravianos eran pacifistas radicales, y pagaron fuertes sumas de dinero para impedir ser alistados. En 1867,

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Introducción La marca de guitarras Martin tiene un halo de misticismo y respeto ciertamente enorme. Es, sin lugar a dudas, una de las marcas más míticas en la fabricación de guitarras en general y de guitarras acústicas en particular. ¿Qué guitarrista no ha deseado alguna vez tener una? Este misticismo es alentado por la dificultad, fuera de Estados Unidos, de encontrar proveedores que dispongan de un amplio catálogo de productos Martin que se puedan probar y comparar. Especialmente en España, el surtido que llega suele estar limitado a gamas bajas de Martin, y, muy de vez en cuando, o en tiendas muy seleccionadas, algún modelo de serie “media”. Para conseguir una buena guitarra se suele recurrir a encargarla directamente, sin poder probarla antes.Claro que el precio de una serie media de Martin es muy alto. Este documento pretende ser una guía sobre las guitarras acústicas Martin, que en general son bastante desconocidas por el guitarrista medio. No es exhaustiva, pero sí pretende ser un buen comienzo para conocer lo básico sobre esta marca. La gama de Martin, como todas las de las marcas de guitarra, tiene muchos modelos, en apariencia prácticamente iguales, pero que tienen importantes diferencias. Esta guía está dividida en apartados que intentan facilitar entender en qué se diferencian los modelos. Tiene también información repetida a lo largo de sus apartados, para mejorar la consulta rápida.

Elías, del foro Guitarramanía, posando con una D-45 y una 000-28EC


CF Martin Sr

Guitarra Martin tipo Stauffer de

de 1934

Historia de Martin Martin es la empresa familiar más antigua de Estados Unidos. En un mercado, el de la fabricación de guitarras de calidad, en el que las empresas han cambiado frecuentemente de manos, traicionando en muchos casos los principios sobre los que fueron fundados, este hecho es sorprendente. Nunca ha cambiado de manos, y la tradición se ha ido transmitiendo de padres a hijos. Acercándose a los 200 años desde su fundación, la historia de Martin está llena de altibajos, a pesar de lo cual, sus instrumentos muestran una línea prácticamente constante de altísima calidad.

La fundación y el primer siglo La historia de Martin empieza con la persona que le da nombre, Christian Fredrich Martin. Nacido en 1796, en Neukirchen, en la zona de Sajonia. Su padre era un ebanista que se dedicaba a hacer muebles y, ocasionalmente, instrumentos musicales. A la edad de 15 años, su habilidad e interés en la luthería le valió para conseguir un puesto de aprendiz de Johann Stauffer, uno de los luthieres de guitarras más importantes de su época, establecido cerca de Viena. Stauffer incluso construyó una guitarra para Paganini, uno de los pocos músicos prestigiosos que en esa época compusieron para guitarra. Stauffer era también un luthier innovador, que aportó su toque a la guitarra, como suspender el diapasón por encima de la tapa, debido a que el mástil podía variar su inclinación (una especie de alma primitiva) o clavijeros con las 6 clavijas en un lado, adelantándose en siglo y medio a Leo Fender.

CF Martin Sr pasó 14 años aprendiendo junto a Stauffer, para después pasar a trabajar con Kart Kühle, con cuya hija se casaría. En 1825, poco después de nacimiento de su hijo Christian Fredrich Martin Jr, volverían a Keurkirchen, para establecerse por su cuenta. Por desgracia, justo a la vez que estallaba el conflicto entre el Gremio de Constructores de Violines y los fabricantes de muebles. Los primeros estaban furiosos con los segundos al considerar que les hacían la competencia haciendo instrumentos deficientes y de mal gusto, y en 1826 hicieron una petición para prohibirles construir instrumentos, bajo la excusa de no ser capaces de generar verdaderos instrumentos y de bajar la reputación de los constructores locales. En 1832, las autoridades fallaron a favor del Gremio. Un amigo de la familia, que había emigrado a los Estados Unidos, animó entonces a CF Martin a emprender la aventura americana. En 1833, estableció una pequeña tienda en New York, donde vendía todo tipo de instrumentos y material accesorio, además de construir una media de una guitarra a la semana en la trastienda. Las primeras guitarras, provenientes de esos días, marcaban en la etiqueta (muy en el

ACÚSTICAS MARTIN por Khelben 6

Guitarra 3 -24 de la década de 1840

estilo tradicional que todavía se sigue utilizando en las guitarras españolas) “Christian Frederick Martin” (que americanizó su segundo nombre) y la dirección de la tienda. La familia Martin nunca estuvo a gusto en New York, que entonces era un lugar inhóspito y peligroso, acostumbrada a un pueblecito de Alemania donde las tradiciones eran muy distintas. En 1836, partieron para establecerse en lo que es hasta hoy su hogar, Nazareth, Pensilvania. Nazareth fue fundada por protestantes, donde sólo los miembros de su iglesia podían vivir, así que CF Martin compró un terreno en las afueras (Cherry Hill), fuera de los límites de la ciudad donde luego construyó su casa. Estos protestantes eran moravios, grandes amantes de la música, aunque bastante desconfiados a los extraños. Lo importante era que estaba relativamente cerca de Nueva York, se hablaba por igual inglés y alemán, el paisaje era muy parecido al de Keurkirchen.y había paz y tranquilidad para dedicarse a construir instrumentos. La guitarra fue ganando popularidad progresivamente, especialmente entre las mujeres, que apreciaban muchos modelos de Martin por ser pensados exclusivamente para sus manos más pequeñas y ser de precio considerablemente inferior a otros instrumentos, además de la facilidad de aprendizaje. Las guitarras Martin se vendían bien en New York, donde seguían teniendo contactos y distribución. En 1853, los Martin entraron a formar parte de la iglesia moraviana (el primer año que la iglesia admitió a forasteros), y en 1859 compraron un terreno en plena ciudad donde construyeron una casa y una pequeña fábrica en la que inicialmente trabajaban 11 personas. Curiosamente, durante los años de la Guerra de Secesión, la economía de la compañía creció, debido en gran parte a que en Nazareth apenas se enteraron de lo que pasaba en el resto del país. Los moravianos eran pacifistas radicales, y pagaron fuertes sumas de dinero para impedir ser alistados. En 1867, CF Martin Sr tomó como socios a su hijo y a su sobrino, CF Hartmann, para fundar CF Martin & Co. Los otros hijos (dos hijas y un hijo) de Martin Sr no tomaron parte en el negocio. Hartmann era otro inmigrante de Neurkitchen que había trabajado durante años en la fábrica. En 1873, a la edad de 77 años, CF Martin Sr murió. Sin embargo, este hecho no afectó a la compañía, de la que se hizo cargo su hijo, Christian Frederick Junior, que había trabajado desde niño con su padre, haciendo guitarras y organizando la fábrica. El control de la compañía terminaba en la puerta de la fábrica, ya que de la distribución se encargaba un asociado en New York. La sociedad con Hartman terminaría en la década de los 80, a pesar de que permaneció en la empresa como un empleado bien pagado hasta la década siguiente, dejando a CF Martin Jr como único propietario de la empresa. En estos años, la empresa permaneció muy fiel y prácticamente sin cambios, excepto la inclusión del modelo 00 en el catálogo. La revolución industrial no pareció afectar mucho, haciéndose todo principalmente a mano, aunque algunas máquinas fueron utilizadas de manera puntual, como sierras a vapor para cortar grandes bloques de madera. Cf Martin Jr murió tras sólo 15 años de dirigir la compañía, a la edad de 63 años, en el año 1888, pasando el testigo a su hijo Frank Henry Martin y a su esposa.


Mandolina estilo 3 de 1917

Frank Henry Martin sólo tenía 22 años cuando murió su padre, pero a pesar de ello, manejó la empresa con una fuerte voluntad emprendedora. En el momento de morir su padre, la empresa estaba estancada, anc lada en una relación con CA Zoebisch & Sons, que tenían la distribución en New York que no terminaba de funcionar. Zoebisch era un viejo amigo de familia, que se tomaba demasiadas libertades y muchas veces pagaba en todo tipo de material extraño, como piezas para instrumentos. La empresa necesitaba expandir su negocio, y comenzó a fabricar mandolinas, que estaban poniéndose de moda entonces. Estas mandolinas se distribuyeron aparte de Zoersbuch, que tenía la exclusiva de las guitarras. El golpe de gracia a la relación entre ambas empresas se puso en 1893, cuando la crisis económica causó que Zoersbuch no pudiese pagar. Martin se estableció por su cuenta como vendedor, tanto en New York, donde había una demanda mucho mayor de la que se creía, como en la Costa Oeste. Los instrumentos de cuerda se hicieron muy populares en el oeste, ya que eran relativamente baratos y transportables. Frank Henry puso énfasis en proporcionar instrumentos a la Costa Oeste, y pronto tuvo pedidos de sus modelos más grandes y lujosos desde ciudades como San Francisco, Portland o Denver. Para una compañía que vendía 260 instrumentos al año, fue toda una revolución vender tanto. A partir del año 1898, los instrumentos eran estampados sin el distribuidor anterior, en New York, sino como “CF Martin & Co. Nazareth, PA”, tal y como se sigue haciendo actualmente. Ese mismo año, se comenzó a utilizar un número de serie, empezando en el 8000, que fue la mejor estimación que se pudo hacer sobre el número de instrumentos producidos desde la fundación de la compañía. Este número de serie ha seguido manteniéndose de la misma manera hasta hoy en día. Los competidores de Martin en aquellos días eran principalmente fabricantes que vendían por catálogo, y utilizaban políticas de marketing agresivas. Frank Henry se negó a utilizarlas, y concentrarse en la calidad de los instrumentos. Martin entraba en el siglo XX con fuerza, pero sin grandes alardes. El nuevo siglo trajo inventos como el fonógrafo, que hicieron aumentar la demanda de música y de instrumentos. Martin había logrado pasar por la crisis de finales del siglo XIX, pero tampoco había despegado completamente. En la primera década del siglo, la producción incrementó notablemente, pero principalmente en modelos baratos. En 1907 se vendieron 621 instrumentos entre guitarras y mandolinas. La compañía intentó mejorar aumentando el tamaño de sus guitarras, y sacó el cuerpo 000 en 1902, por entonces la Martin más grande. Aún así, era pequeña en comparación a las de la competencia. Entonces estaba preparada para cuerdas de tripa, y no podía competir en volumen con un banjo o una mandolina. Otro movimiento fue entrar en el campo de fabricación de cuerdas de tripa, siendo el propio hijo de Frank Henry, Cf Martin III el encargado de trabajar en la máquina bobinadora y haciendo los sobres en


El Dreadnough original

000-45 de 1928

casa, pero tuvieron que abandonar el sector en 1918 al no poder competir con otras empresas más especializadas, que habían invertido fuertemente en maquinaria especializada. A finales de 1907, la empresa empezó a fabricar ukeleles, mucho más sencillos de fabricar que las mandolinas. Se ha hecho la estimación de que fabricar una mandolina de los modelos más elaborados, con los mismos medios, costaría a día de hoy unos 30.000$ Los primeros ukeleles se fabricaron como pequeñas guitarras, utilizando los mismos materiales que en sus guitarras y con el mismo refuerzo en forma de X. Las ventas no empezaron siendo muy buenas, ya que, en aquella época, no eran instrumentos muy demandados y los materiales y la fabricación no eran los adecuados para un ukelele. La estética de los modelos cambió, introduciendo más incrustaciones de nácar, al estilo de las mandolinas. El estilo 42, disponible sólo a partir de encargos especiales, alcanzó el límite de “adornado, pero no ostentoso” que defendía Frank Henry Martin. La ornamentación es la que ahora encontramos en el estilo 45, ya que fue renombrado así en 1904. En 1906, también se introdujo una variación que no fue un éxito inmediato, pero que abrió muchas puertas en el futuro: la utilización de la caoba en el fondo y laterales en el estilo 17 en lugar del palorrosa más caro que siempre se había utilizado. Entonces, la caoba sólo se utilizaba en los modelos más baratos y, al final Martin terminaría utilizándolo en el exitoso estilo 18. Durante los siguientes años, la compañía siguió su lento avance, pero un hecho resultaría crucial. Al entrar Hawai en los Estados Unidos, la música que trajeron consigo los hawaianos fue un absoluto bombazo, y el instrumento adecuado para tocar esa música era el ukelele. Martin rediseñó sus ukeleles y en 1916 lanzó una nueva línea de ukeleles, ya sí bien diseñados. Estos instrumentos desbordaron completamente a la fábrica, expandiéndose en 1917, de nuevo en 1924 y otra vez en 1925. También el estilo de tocar hawaiano, utilizando slide sobre las rodillas incrementó las ventas de los modelos que utilizaban cuerdas de metal. Martin comenzó a fabricar una línea de guitarras dispuestas a tocar al estilo hawaiano en 1917, aunque en 1914 tenía ya un modelo adaptado, la 00-21.Sin embargo, hasta 1922 no fabricaría Martin una guitarra adaptada a tocar al estilo español (que es como llaman los americanos a tocar de manera tradicional, con la guitarra apoyada en el vientre, por oposición al estilo hawaiano, con la guitarra sobre las rodillas) que utilizase cuerdas de metal. 1916 fue el año de la creación del cuerpo Dreadnough, para la casa Ditson. A pesar de no ser un éxito en el momento, en la década de los ’30, al terminar la relación con Ditson, Martin fabricaría sus propias Dreadnough con gran éxito. Fue llamado así en honor al HMS Dreadnough (literalmente Sin Miedo), barco de guerra de la armada británica revolucionario que se hizo muy famoso por sus andanzas en la Primera Guerra Mundial. Junto con un enorme aumento en el estilo 18, ahora con caoba, Martin, a petición de algunos clientes en la Costa Oeste, comenzó a fabricar guitarras con koa, madera originaria de Hawai, incluyendo


Jimmie Rodgers y su famosa 000-45

tapas de koa. En 1918, se incluyó el modelo 0-18K. En 1920, Martin vendió 270 unidades, su mayor número anual. La primera guitarra dispuesta para tocar al estilo español con cuerdas de metal, se realizó en 1922, dos décadas después que Gibson, influida por nuevos estilos de música, que incluían fuertes golpes con púa a las cuerdas. Las cuerdas de tripa no aguantaban mucho, y eran muy caras. El modelo barato 2-17 fue el primero en ofrecer esta particularidad. El primer año se vendieron 344 unidades, subiendo anualmente hasta un máximo de 1300 unidades en 1926. Fue suficiente para convencer a Frank Henry Martin de fabricar toda la línea 18 para cuerdas de metal en 1924 y en 1926, prácticamente toda la producción estaba preparada con tapas más gruesas y los refuerzos necesarios para tocar con cuerdas de metal. En 1928, se abandonó la fabricación para cuerdas de tripa, excepto encargo especial. En 1928 también se fabricó una de las guitarras más famosas que ha fabricado Martin, la 000-45 hecha por encargo para Jimmie Rodgers, máxima estrella del momento y uno de los grandes pioneros del country. Esta guitarra llevaba el nombre de Rodgers en el diapasón, y en la parte trasera la inscripción “THANKS”, para que Rodgers diese la vuelta a la guitarra al ser aplaudido. En 1920 Martin hizo 1336 guitarras con número de serie, además de otras muchas para marcas que le encargaban series para venderlas bajo su propia marca, como grandes almacenes o compañías de venta por catálogo. La compañía hizo ese año 430 mandolinas y 3000 ukeleles. Ni que decir tiene que todo este incremento en la fabricación cambió mucho la fábrica. Se compró material industrial alimentado con electricidad, en lugar de vapor y gasolina, y se instauró un proceso de montaje en cadena “de arriba abajo”, donde las guitarras se empezaban en el piso de arriba y se terminaban en el de abajo. Lo más curioso es que este sistema, que tenía el almacenaje de maderas en la planta superior, aprovechaba el calor resultante del trabajo que ascendía, para el secado de las maderas. En 1921, Frank Henry “vendió” la empresa, haciendo copropietarios a él, su mujer, y sus dos hijos, CF Martin III (conocido como Frederick) y Herbert, que murió en 1927 de una peritonitis.

La época dorada En 1930 se entra en lo que es conocido como la época dorada de Martin. Una coincidencia tan extraña, como que el cambio a cuerdas de metal, teniendo un refuerzo en X (inventado por CF Martin Sr para cuerdas de tripa), tuviese un sonido mucho mejor que los de la competencia allanó el camino para la época en la que se fabricaron las que para muchos son las Martins definitivas. Una serie de innovaciones, y la popularización de la incipiente música country, dio como resultado unas guitarras realmente excepcionales. Y todo ello en una época como la Gran Depresión, en plena quiebra económica del país. Curiosamente, el fin de la Guerra Mundial y la llegada de los buenos tiempos marcarían el fin de esta era. A pesar de ello, la época dorada de Martin no se refiere a bonanza económica, sino a la calidad de sus instrumentos. La compañía pasó estrecheces durante la Gran Depresión. En 1929 salió al mercado la nueva 000-28, que tenía como innovación el tener un mástil que se unía a la caja en el traste 14, en lugar de el 12, como era lo habitual (y sigue


Gene Autry con su flamante D-45.

siendo en las guitarras clásicas) Este cambio acható la caja del modelo 000, manteniendo la escala igual a la anterior. Esta guitarra fue la primera Martin específicamente diseñada para cuerdas de metal, en lugar de simplemente ser capaz de aguantarlas. El refuerzo en X, fue retocado para un mejor efecto. El clavijero también se cambió de un diseño abierto, igual que en las guitarras españolas, a uno macizo, como es la mayoría de las guitarras actuales. En 1930, el nuevo modelo fue llamado OM (por Orchestra Model, el modelo 000 era llamado Auditorium) El nuevo modelo fue todo un éxito, vendiendo 235 unidades en medio de la Gran Depresión, en 1930. Poco después, en 1934, el nuevo modelo OM pasaría a volver a llamarse 000, y poco después cambiaría su escala a la misma que los modelos 0 y 00, 24.9 pulgadas. Martin continuó usando la nomenclatura Orchestra Model para nombrar guitarras con unión en el traste 12, que fueron perdiendo popularidad. Actualmente, la nomenclatura OM sirve para describir una forma 000 con una longitud de escala más larga y es muy popular. El éxito de este modelo influyó en toda la gama, cambiando entre otros detalles los clavijeros de todos los modelos a macizos, más sencillos de fabricar. En esta época también se empezó a estampar el nombre del modelo junto al número de serie, en el bloque de unión del cuerpo y el mástil, a pesar de crear cierta confusión debido a los cambios de nomenclatura generados por el modelo OM. En 1931, Martin intentó responder a la compañía Gibson creando su propia línea de guitarras de tapa arqueada. Las guitarras se vendieron bien para la época, pero no han sido muy apreciadas posteriormente. Ese mismo año, además, Martin empezó a a fabricar sus propias Dreadnough. No había mucha prisa en hacerlo, porque Martin pensaba que hacer guitarras tan grandes daría como resultado un tono demasiado grave, destrozando el balance que se mantenía en el resto de modelos. Sin embargo, en 1931, la compañía sacó los modelos D-1 y D-2, que serían rápidamente renombrados a D-18 y D-28, siguiendo el resto de la línea. No fue el éxito inmediato que fue el modelo OM, se vendieron 8 el primer año y 9 el siguiente, pero empezó a despuntar y en 1935 se vendieron 200 ejemplares y fueron subiendo hasta los 782 en 1941, antes de que la guerra limitase su producción. En 1933, Martin cumplía su primer siglo, con una relativa estabilidad teniendo en cuenta la crisis en la que se vivía. Aun así, la fábrica había reducido plantilla hasta 30 empleados. En ese mismo año, otro encargo fue hecho por Martin. Gene Autry, famoso cowboy cantante que hacía muchas películas, que ya era cliente habitual de Martin, encargó el modelo mayor y más ostentoso que se hubiese hecho, con su nombre grabado en el diapasón. El resultado fue la primera D-45, elevando a este modelo utilitario, que sólo contaba con estilos 18 y 28, a la cumbre de la línea de Martin. La D-45 fue claramente un modelo insignia de Martin, a pesar de realizar muy pocos ejemplares debido a su alto coste. Se construyeron 91 unidades, incluyendo el de Autry, hasta el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, haciendo que sea el modelo


000-28 sunburst de 1943

más raro y buscado en la actualidad. Al final de los ’90, se vendían por unos 125.000$ Es imposible calcular cuanto llegaría a costar la de Autry, tanto por ser la primera como por la asociación con Autry. Se encuentra presidiendo el Autry’s Western Heritage Museum en California. A pesar de la publicidad que supuso para Martin que Autry posase con su guitarra, siguió negándose a realizar contratos de promoción entre artistas, bajo la política de no usar las palabras de los músicos en sus anuncios y cobrar a todo el que quisiese una guitarra de su marca. A pesar de los múltiples intentos que se hicieron en la década de los 30 por amplificar las guitarras, como las resonadoras o las primeras guitarras eléctricas, Martin seguía fabricando exclusivamente material acústico, a pesar de referir a sus clientes que preguntaban por la amplificación de sus Martin a pastillas de otros fabricantes. Como muchas otras compañías, la recuperación económica y la producción fue interrumpida por la llegada de la Segunda Guerra Mundial. Muchos materiales, especialmente metales, fueron severamente restringidos y concentrados en producción militar. En modo que Martin se concentró en modelos con poco metal, tales como las acústicas de tapa plana y los ukeleles. Las mandolinas, guitarras de tapa arqueada y triples simplemente dejaron de producirse, y las almas hechas de metal, pasaron a ser hechas de ébano. Las acústicas con binding de nácar, entre las que se incluía la D-45, dejaron de producirse también. No volvería a ser producida hasta 1968. Esta escasez de materiales, y el relevo en 1945 en la dirección de la empresa de Frank Henry a favor de su hijo Frederick, terminaron con la época dorada de Martin.

Consolidarse sin innovar Durante la Segunda Guerra Mundial, y posteriormente, Martin redujo su catálogo de instrumentos considerablemente, ofreciendo menos instrumentos que nunca desde 1915. De hecho, permaneció sin hacer prácticamente ningún cambio durante dos décadas. Los músicos parecían satisfechos con la gama de productos de Martin, ya que servían extraordinariamente bien para la música que se estaba produciendo en ese momento. Podría parecer que el nuevo dirigente de la compañía, Frederick, estaba siendo excesivamente conservador, pero en lugar de eso logró anclar a la compañía en una época de increíbles cambios y revoluciones, que hubiesen podido llevar a pique a la empresa. En esos años, Gibson producía guitarras acústicas de tapa plana, de tapa arqueada, amplificadores, banjos e incluso steel guitars. Y Leo Fender estaba sacando sus amplificadores y su Broadcaster. Estos recortes de catálogo retiraron todas las guitarras de tapa arqueada, así como los modelos de gama alta de guitarras, quedando el estilo 28 como el más lujoso, y aun así, perdió su ornamentación de herringbone y sus marcadores en forma de diamante, que pasaron a ser redondos. También, debido al uso de cuerdas de alto calibre, Martin dejó de rebajar las costillas. Junto con los estilos 28 y 21, con fondo y laterales de palorrosa, los únicos estilos existentes eran el 18, con fondo de caoba y los 15 y 17, hechos enteramente de caoba. Estos estilos estaban disponibles sólo en tamaños seleccionados. La simplificación de toda la gama intentaba mantener alta la demanda. La baja


La famosa guitarra “ELVI”

Hank Williams

producción de instrumentos durante la guerra, junto con la prosperidad relativa tras ella, había creado una gran demanda, que la compañía no podía cubrir. Las ventas subieron tras la guerra hasta un máximo de 7.000 al año en 1955, mientras que las máximas ventas antes de la guerra habían sido 6.000, y la mayoría eran de ukeleles. Las ventas eran limitadas por la producción, y a veces se encargaban guitarras con listas de espera de dos años.

La fábrica, además, producía las guitarras de manera muy artesanal, casi a la manera del siglo XIX. No era extraño que una única persona fabricase una guitarra desde el principio al final, y los empleados conocían al propietario, porque estaba todos los días junto a ellos, haciendo notar su presencia. Frederick era también muy frugal y trabajador, siendo un ejemplo para todos sus empleados, a los que consideraba poco menos que sus hijos. Muchos trabajadores eran también familia, ya que el trabajo se pasaba de padres a hijos. Tras finalizar la guerra, el auge de la radio, el comienzo de la televisión e incluso la música que traían los soldados a su casa, oída algún compañero del sur, expandieron considerablemente la música country. La figura de Hank Williams emergió en 1947 como el padre de la música country moderna. Por todos lados surgían nuevas figuras de este estilo musical, y una buena guitarra acústica era parte imprescindible. El

propio Hank Williams usaba habitualmente guitarras Martin. El Gran Ole Opry, un programa de radio de gran prestigio que se emitía desde Nashville, no permitía batería en sus programas, por lo que los músicos solían usar una guitarra de acompañamiento con unos graves profundos y percusivos, como una guitarra Dreadnough. La reputación de Martin se extendió rápidamente por el método del boca a boca. Mientras en muchas revistas se veían anuncios de Gibson y Gretsch, y ninguno de Martin, muchos músicos salían con ellas en las fotos, portadas de discos, etc. Especialmente entre los guitarristas de bluegrass, era prácticamente obligado tener una D-28 y prácticamente lo sigue siendo a día de hoy. Al estallar la revolución del rock’n roll, también Elvis tenía una D-18, que usó en la mítica primera sesión al tocar “That’s all righ mama”, a la cual pegó posteriormente unas letras poniendo ELVIS en la tapa. La S se perdió en algún momento y es conocida como la guitarra ELVI. Desde 1974 se encuentra en el Country Music Hall de Nashville. En 1955, salió el primero modelo distinto desde el final de la Segunda Guerra Mundial, la D-21, que era una ligera variante de la D-28. Para dar idea de su inmovilismo, Martin usó la misma portada para su catálogo desde 1940 hasta principios de los 60. Y desde 1946, tampoco había prácticamente ningún cambio dentro. El 1959, se ofreció el primero modelo de Martin “eléctrico”, que consistió en coger modelos existentes, hacerles unos agujeros en la tapa y colocar unas pastillas. Como es


Alma en T

Alma cuadrada

obvio, esto estropeaba todo el tono de la Martin, y no fue acogida con mucho entusiasmo. Curiosamente, Kurt Cobain tocaría uno de estos modelos en su concierto Unplugged para la MTV. Martin hizo otra intentona de guitarra eléctrica abriendo unos modelos de guitarras eléctricas de tapa arqueada, que fueron sacados al mercado en 1962 y rediseñados en 1965, los cuales tampoco tuvieron éxito. En general, fueron intentos de salirse de lo que Martin sabía hacer mejor. En 1955, otra nueva generación se puso a trabajar en la compañía, Frank Herbert Martin, el hijo de Frederick, que había nacido en 1933. Se unió a la compañía sin demasiado entusiasmo, ya que su verdadera pasión eran los deportes. Siempre tuvo la cabeza en otro sitio, como los coches de carreras. Montó un negocio de importación de coches deportivos europeos que fue un absoluto desastre. Su padre, como muchos otros empresarios que habían pasado por la Depresión, no era muy amigo de tomas riesgos financieros, especialmente si podían afectar a sus empleados. Desde un punto de vista empresarial, estaba infrautilizando las oportunidades que le brindaba su compañía. En ese momento, la producción tenía una lista de espera de dos años en muchos modelos, y de tres en las D-28, dando la razón a Frank, que defendía trasladar la fábrica y ampliarla. Martin compró un solar en Nazareth, entre la fábrica actual y la primera en Cherry Hill. Financiar la construcción de la nueva fábrica no fue nada fácil, pero se abrió en 1964, con unas instalaciones modernizadas. En 1965, la producción de Martin marcaba 10.000 unidades por primera vez en su historia, y continuaba aumentando gracias a la nueva fábrica. Las guitarras de 12 cuerdas se habían puesto de moda debido al boom del folk y a los

trabajos de los Birds y los Beatles. Martin había hecho varios modelos de 12 cuerdas en el pasado, y, aunque con cierto miedo, sacó el modelo D12-20 en 1964, que funcionó bastante bien. En 1965 comenzó la preocupación por encontrar palorrosa de Brasil de tamaño suficiente para fabricar los fondos, con lo que se llegó a la idea de montar fondos de tres partes, en lugar de dos, dando lugar al modelo D-35. Se le añadió una ornamentación ligeramente mayor que el estilo 28 y se le puso un precio ligeramente más caro. La D-35 tenía alguna característica innovadora, hablando desde el punto de vista de Martin, como que no tenía “dardo”. Al salir al mercado, funcionó bastante bien, y se añadió un modelo de doce cuerdas, el

D12-35. Fue funcionando cada vez mejor, e incluso entre 1974 y 1977, se vendió mejor que la D-28. Un cambio invisible se produjo en 1967, cuando se sustituyó el alma de metal en forma de T, que se había usado desde 1934, por un tubo cuadrado de refuerzo. Todavía no llegaría el alma ajustable, haciendo a Martin uno de los dos únicos fabricantes importantes que no lo usaban. La otra compañía era Danelectro, que producía modelos de bajo coste. Finalmente, debido a la creciente demanda, la compañía reintrodujo el modelo D-45 en 1968, el cual fue inmediatamente comprado por muchos músicos y coleccionistas que lo habían estado esperando ansiosamente. En 1969, se añadió a la gama la D-41, buscando una guitarra con nácar, pero más barata que la D-45. Eliminando el reborde alrededor del diapasón sobre la tapa, y el binding trasero, se logró reducir el coste a dos terceras partes de lo que costaba una D-45, con lo que se vendió mucho.


Van Morrison, en la portada de un disco

En toda esta época, el Folk. sufrió una increíble expansión, con gente como Bob Dylan, Joan Baez, Simon & Gartfunkel o Crosby, Stills, Nash and Young. Todos ellos utilizaban habitualmente guitarras Martin, y a finales de los 60, la producción de Martin era más alta que nunca.

Los años oscuros En el año 1971, la fábrica de Martin, que había producido 6.222 instrumentos en su primer año, hacía siete años, en la nueva fábrica produjo nada más y nada menos que 22.637. Ahora la compañía producía más en un año que lo que había hecho en el primer cuarto de siglo, lo que no hubiese sido posib le sin las nuevas instalaciones. En 1970, siendo vicepresidente, Frank Martin quería convertir a la empresa en un imperio musical. Ese año se empezó la importación de la línea de bajo coste Sigma desde Japón, y posteriormente Corea. Se compró la compañía Vega, que hacía principalmente banjos. Antes de que terminase el año, Frank había también cerrado la adquisición de Darco String Compaña, de la familia D’Addario y la de Fiber Drums. En 1971, Frank fue nombrado como presidente, mientras que su padre Frederick (CF Martin III) se mantenía en el puesto de CEO1. A mediados de los 70, se compró a un fabricante de baquetas y la compañía sueca de guitarras AB Herman Carlon Levin. Ese mismo año se instaló un aserradero con la última tecnología en la fábrica para convertir troncos enteros en delgadas capas de maderas listas para utilizar. Frank llevó todas estas expansiones forzando la máquina de las finanzas al máximo, convencido en las posibilidades que brindarían. Tenía plena confianza en que serían exitosas, y no tenía ninguna razón para creer que no lo serían. La era de los cantautores estaba en su apogeo, con Neil Young, James Taylor, Joni Mitchell, Paul Simon, Jackson Browne o John Denver. Sin embargo, un nuevo fenómeno apareció en el mercado, que fue el de la copia de modelos. Mientras que en los años 60, cada marca tenía sus propios modelos, y procuraba que fuesen distintos de los demás, al hacerse el pastel de las guitarras más grande, muchos otros competidores entraron en escena, con modelos virtualmente iguales a los ya existentes. De repente aparecieron cantidades enormes de Dreadnoughs, no sólo parecidas a los modelos de Martin, sino con los mismos clavijeros, e incluso con letras doradas que, desde lejos, era fácilmente confundibles. La invasión de productos japoneses fue tan grande, que aparecieron rumores que decían que Martin había sido comprada por empresas japonesas. A la vez, una generación de luthieres empezaron a producir sus propias y personalizadas versiones de las guitarras Martin, todas ellas de gran calidad. Aparecieron constructores como Santa Cruz o Taylor. El mercado de la gama alta y profesional, que había estado en manos muy pocas compañías, se hizo más grande. Otras compañías empezaron agresivas campañas de patrocinio de artistas, mientras que Martin siempre había rechazado, incluso admitir a músicos que se habían acercado a a

1 Chief Executive Officer: En inglés viene a ser el equivalente al director general de la empresa.


Portada del catálogo de la Custom Shop

ofrecerse. Por ejemplo, Doc Watson, que siempre había utilizado guitarras Martin, empezó a tocar y patrocinar Dreadnoughs Gallagher. Y, para rizar el rizo, Martin luchaba contra su propio pasado. El mundo del mercado vintage empezaba a tomar forma, y había diferencias de las nuevas Martin a las pasadas, como las costillas rebajadas, el binding de herringbone o el palorrosa de Brasil, que había sido recientemente abandonado por problemas de importación en 1969. Todos estos factores alimentaron que “ya no eran como las de antes”. Todos estos factores afectaron a toda la industria de la guitarra, tanto acústica como eléctrica, y muchas compañías cambiaron de manos, como Fender y Gibson. Fueron unos años locos para la industria de guitarras. Para una compañía endeudada y tan aferrada en la tradición como Martin, las cosas fueron de mal en peor. La compañía sacó pocos modelos nuevos en la década de los ’70. En 1976, Martin comenzó a fabricar la HD-28, que volvía a tener el patrón de herringbone y las costillas rebajadas. En 1978 se le unió la HD-35. Después de años, Martin introdujo un nuevo tamaño, con el mismo perfil que unas guitarras de tapa arqueada, llamado M o 0000. La nueva M-38 salió en 1977 y le siguió al año siguiente con la M-35 (que cambió pronto su nombre a M-36) con fondo de tres piezas. El tamaño era más grande que una Dreadnough, pero con menor profundidad. A pesar de que las ventas iban decreciendo desde el ’71, Martin todavía vendía un enorme número de instrumentos. Esta producción repercutió en la calidad, a la vez que se tomó la decisión de reforzar más las guitarras. Martin tenía una garantía de por vida, y no se quería tener problemas en el futuro. Este cambio fue en detrimento de la calidad del sonido. Incluso la compañía cambió por un tiempo esta garantía a cinco años. La división de cuerdas tuvo bastante éxito, y sigue siendo parte integral de Martin todavía hoy, pero Fibes Drum fue vendido en el año 79. La adquisición de la fábrica de Levin fue sencillamente un desastre hasta que se cerró definitivamente. En 1979, se creó la Custom Shop de Martin, ofreciendo a los músicos encargar instrumentos a medida. No era una idea nueva, en el sentido de que Martin había hecho muchos encargos a músicos, pero sí fue una manera de ofrecer el servicio de manera mucho más ordenada y sencilla. Fue la primera compañía en ofrecer esta posibilidad. Frank era definitivamente un hombre de vida mucho más alegre que sus predecesores en la dirección de la empresa. Se casó cuatro veces. Le gustaba el alcohol, las mujeres, los coches deportivos y todo tipo de deportes. Le gustaba patrocinar carreras y equipos de béisbol y baloncesto. Tampoco tenía especial devoción por la marca que tenía su nombre, y en 1977, cuando anunció que la división de guitarras no había dado beneficios en tres años, acusó a los trabajadores de ineficiencia. Frank contrató a un duro jefe de personal, Frank Woodrow, que retiró gran parte de los beneficios que tenían los trabajadores, y prohibió a los trabajadores hablar directamente con Frank o Frederick, a lo que estaban acostumbrados. Además, no hacía demasiado caso lo que les dijesen. El descontento creció entre la fábrica, y el 13 de Septiembre de 1977, los 180 trabajadores fueron a la huelga. Mientras duró la huelga, el equipo directivo desesperadamente consiguió mantener la producción activa, a pesar de no haber construido una guitarra en décadas. Si no hubiese


CF Martin IV, actual CEO de Martin

sido por la división de cuerdas y la línea Sigma importada, la compañía hubiese quebrado. Finalmente, en 1978, entre Mayo y Junio, todos los trabajadores volvieron a la fábrica y continuaron la producción. Las ventas fueron decreciendo paulatinamente hasta llegar a 3.153 guitarras en 1982, coincidiendo con el auge de la música disco. Peor que en los años de la Depresión. Se pidió la dimisión de Frank como presidente, y él la aceptó sin discusión. Después de un infructuoso intento de abrir una clínica de salud en Nazareth, se retiró a Florida, donde murió en 1993. El entonces vicepresidente Hugo Bloom, fue nombrado presidente de emergencia, y la compañía estuvo a punto de ser declarada en bancarrota o vendida. Si no se hizo fue por testarudez de Frederick, que se negó en rotundo. Al morir Frederick, en 1986, Chris (CF Martin IV, hijo de Frank, nacido en 1955), quien había sido prácticamente educado por su abuelo, decidió dar el paso a la posición de CEO. En los cuatro años siguiente, el negocio mejoró algo, a pesar de ser precario. Sin embargo, en los ’90, la compañía despegaría para superar las 22.000 unidades que fueron un hito en el ’71, y sigue creciendo cada año.

El renacer Christian Frederick Martin IV había crecido con su madre, en New Jersey. Cuando tenía tres años, sus padres se separaron. Cada año, pasaba dos semanas en Nazareth con su familia paterna, junto con algún fin de semana esporádico. Era mucho más afín a su abuelo Frederick que a su padre. Frederick vió en él algo que nunca encontró en su padre, y lo educó pensando en que en un futuro podría guiar la compañía. Al terminar el instituto, se licenció en administración de empresas en la universidad de Boston y se fue a vivir con su abuelo en el año ’78. Tras pasar por varios trabajos en la fábrica y aprender de manos de su abuelo el negocio, fue finalmente elegido como CEO en 1986. CF Martin IV volvió a traer un estilo de trato cercano y familiar (como lo había sido el de su abuelo), poniendo énfasis en la producción de buenos instrumentos, pero aventurándose a modernizar el concepto de Martin como empresa. El negocio, a partir del año 90, literalmente despegó del suelo y se puso a volar. Mucha culpa de ello tuvo el resurgimiento de la música acústica, tanto en el country, que recuperó muchos de los sonidos más puros, como en el mundo del rock y el pop, donde se hicieron lmuy populares os conciertos MTV Unplugged. En el año 1990 se produjo la guitarra con el número de serie 500.000, y en el año 2004 se produjo un modelo conmemorativo con motivo del número de serie 1.000.000. Esto da idea del crecimiento de la empresa. CF Martin IV trajo finalmente la modernización a la empresa, de mano de máquinas para hacer más eficientemente trabajos. Sin embargo, en todas estas máquinas se ha puesto especial cuidado en que no reduzcan la calidad de los productos, siendo diseñadas muchas veces por o en conjunción con luthieres. Martin ha sido una de las


Eric Clapton tocando su 000-28ECB

primeras compañías de guitarras importantes en usar máquinas CNC para producción. Curiosamente, el pionero, y al que se le pidió asesoramiento, fue Bob Taylor, también fabricante de guitarras acústicas de gama alta. A pesar del uso de este tipo de máquinas, mucho trabajo sigue haciéndose a mano, como las uniones de mástiles. Martin también introdujo, por primera vez, almas ajustables a sus guitarras en 1985, gradualmente. En ese año también, se introdujo por vez primera el mástil tipo low profile, que se adecua mejor a los guitarristas eléctricos. Este contorno de mástil es actualmente el más usado. Incluso, en 1995 se tomó la decisión de guardar las guitarras nuevas dos semanas más, para reajustarlas, ya que debido a la tensión inicial de las cuerdas, que se notaba al cabo de unos días, no tenían un ajuste tan fino como era posible al llegar a manos de los guitarristas. Otro gran éxito fue la construcción de guitarras de gama más baja, fabricadas en USA, como la serie 1. Estas guitarras sustituyeron a las Shenandoah, que se fabricaban en Japón y las piezas eran ensambladas en los USA. A pesar de no ser malas guitarras, siempre tuvieron el lastre de no ser “made in USA”, lo cual vende mucho en el mundo de las guitarras. La serie 1 es la que se lleva la mayor parte de la producción, a pesar de tener mucho menos nombre que sus hermanas mayores. Le siguieron la Road series y la serie 15, hecha completamente de caoba y con madera maciza, a un precio muy competitivo. Todas estas series dieron a muchísimos músicos amateur lo que buscaban, una guitarra Martin, de calidad razonable, y a un precio ajustado. En 1984 empezó la producción de la línea Guitar of the Month, generando guitarras de tirada limitada, como modelos especiales. Empezó como reediciones y variaciones de los modelos más representativos, pero progresivamente fue derivando, muchas veces, a modelos signature, a pesar de que Martin siempre se había negado a llevar contratos de patrocinio. Esto formaba parte de su tradición, pero a pesar de ello tuvieron que ceder en el mundo del marketing en el que nos encontramos, Sin embargo, estos modelos signature no se basan en un patrocinio claro, si no más bien en la asociación de artistas famosos con instrumentos Martin. Los artistas no reciben dinero por estos instrumentos, sino que es donado a la organización que ellos elijan. Las guitarras son siempre modelos de gama alta, en cantidades bastante limitadas. El


D-28GE, ya fuera de producción. ¿Una de las últimas guitarras

Martin con palorrosa de Brasil?

primer modelo signature fue una OM-28 Perry Berchtel, firmada por la viuda del guitarrista/banjista de la década de los 20. El segundo fue una reedición de la mítica D-45 de Gene Autry. En 1995, se produjo la guitarra 000-42EC, basada en dos guitarras que utilizó Eric Clapton en el famoso concierto para MTV’s Unplugged. Se hicieron 461 unidades (por el disco 461 Ocean Boulevard) y se agotaron rápidamente, a pesar de una guitarra cara (8.100$). Recaudó 92.000$ para la The Eric Clapton Charitable Trust for Children, y es de largo la edición especial de Martin que mejor se ha vendido. De hecho, la única guitarra signature que produce Martin de serie, la 000-28EC, está basada en esta guitarra, con la ornamentación propia de la serie 28. De esta guitarra se ha producido también otro modelo limitado, la 000-28ECB, con palorrosa de Brasil. Por supuesto, en estos más de 10 años, Martin ha echado mano también de otros artistas con quien no tenía una relación tan directa (como Steve Miller o Mark Knopfler) El problema de la ecología también ha sido una prioridad para Martin, que siempre ha usado maderas costosas y, en casos, en vías de extinción. En los últimos 20 años, el coste del palorrosa de la India se ha triplicado, el del ébano se ha multiplicado por 5 y el del palorrosa de Brasil ha pasado de 50$ a 1.000$ por la misma calidad. A pesar de que los costes son muy pequeños en comparación a la mano de obra (con excepción del palorrosa de Brasil), Martin ha visto como estratégico el cuidar sus fuentes y garantizar la supervivencia de las especies. Ha dejado de comprar madera a Brasil, donde no creían tener el control suficiente sobre el control de la tala. En 1992, se firmó un tratado internacional prohibiendo la importación de palorrosa de este país. Existen muy pocas guitarra que se produzcan actualmente con palorrosa de Brasil, siendo siempre ediciones especiales de precios prohibitivos. El modelo D-28GE (Golden Era), una reedición idéntica a las D-28 producidas en 1937, ha sido sustituido recientemente por la D-28 Marquis, exactamente igual excepto por usar palorrosa de la India en lugar de palorrosa del Brasil. Martin también hace pruebas con otras maderas, muchas veces en las guitarras de tirada limitada. La reputación de Martin sigue siendo prácticamente inalcanzable en términos de guitarras acústicas. Parece haber entrado con buen pie en el siglo XXI. No sólo produce más que nunca, y está en expansión, sino que mucha gente opina que se están haciendo instrumentos a la altura de la época dorada.


El modelo se puede leer en la etiqueta en muchos modelos.

Características de las guitarras Martin Esta sección pretende describir muchas características de de fabricación de Martin para conocer mejor las particularidades de sus guitarras, muy orientado a poder entender la amplia gama de modelos que tiene actualmente Martin en el mercado.

Nomenclatura Martin, al contrario que otros fabricantes, casi siempre ha mantenido una misma nomenclatura clara y sigue utilizando básicamente la misma que desde que comenzó a nombrar sus modelos, con pocas excepciones. Por supuesto, existen cambios en sus modelos a lo largo de los años que hay que tener en cuenta. La nomenclatura clásica son dos dígitos separados por un guión, el primero el tipo de cuerpo y el segundo, la serie, que coincidía con el precio original de la guitarra. Así, a mayor número en la serie, la guitarra es más cara. El tipo de cuerpo inicialmente era un número del 1 al 5, siendo el 1 el cuerpo más grande y el 5 el más pequeño. Ahora un tipo 1 nos resultaría una guitarra muy pequeña, así que posteriormente se incluyó el estilo 0 en la década de 1850, buscando mayor volumen. Con el tiempo, todavía no era suficiente volumen, así que en 1873 aparece el cuerpo 00, todavía más grande. Y después, en 1902 el cuerpo 000. Este cuerpo, posteriormente adaptado para 14 trastes, en lugar de los (entonces) tradicionales 12, se le llamaría OM (Orchestral Model) El cuerpo más grande durante mucho tiempo es D (Dreadnough), sin duda el más famoso. La serie es una forma de categorizar los modelos por materiales y ornamentación. Así, una serie 18 era inicialmente una guitarra más sobria y con maderas más baratas que una 28. Dentro de la serie 18, por ejemplo, hay guitarras de forma 00, 000, OM o D, que tienen las mismas maderas y la misma ornamentación. Las series actuales son casi todas números siguiendo el espíritu inicial de, número mayor, más caro, habiendo series 1-15-16-17-18-28-35-40-41-42-45 y las series X (una X en lugar de un número) y Road series (con una M o una R). Las series 50 y 100 existen como ediciones especiales. Por supuesto, hay excepciones a la regla del precio de las series, y por ejemplo algunos modelos de serie 18 pueden ser mucho más caros que otros de serie 28, por ejemplo, ya que las series, una vez establecidas, no se cambian, pero sí hay ediciones especiales, modelos de gama alta, reediciones, etc. cuya nomenclatura apenas cambia. Actualmente, se añaden otros prefijos y sufijos, para indicar características de modelos particulares. Por ejemplo, el modelo HD-28 es un D-28 con herringbone y costillas rebajadas También está el modelo D-28LS con el agujero más grande (Large Soundhole), y un modelo D-28E tiene pastilla piezoeléctrica. Otro sufijo muy utilizado es V, que significa vintage y S, sloted, indicando un clavijero abierto, como en las guitarras españolas, y un mástil con


unión en el cuerpo en el traste número 12. Todos ellos pueden combinarse, como en la HD-28LSV (Herringbone, agujero grande y vintage). Los modelos signature suelen tener las iniciales del artista, como en la HD-40MK (Mark Knopfler) o 000-28EC (Eric Clapton)


Herringbone Esta extraña palabra, que en inglés significa “espina de pescado”, es un término común al hablar de las guitarras Martin. Se refiere, ni más ni menos, que a un diseño de marquetería que se colocaba junto al binding, de ornamentación en la serie 28. Lo de “espina de pescado” viene del hecho de que parece eso mismo, ya que se trata de una serie de flechas que recuerdan mucho a una espina. También podía haberse terminado llamando zipper (cremallera) Este detalle describe también a las guitarras con costillas rebajadas, ya que durante la época dorada de Martin, las costillas eran rebajadas y este patrón se colocaba. La desaparición de ambos se produjo casi simultáneamente durante la Segunda Guerra Mundial ya que, por un lado fue decis ión de Martin dejar de rebajar las costillas, y por otro, este ornamento se importaba de Alemania, lo que terminó al comenzar la guerra. En el año ’47 se agotó la reserva, y al no poder disponer de ello por otros métodos, Martin decidió cambiar el binding del estilo 28. En años posteriores, la forma de localizar las preciadas D-28 prewar era mirar si tenían el herringbone, y así se les llamaba en el argot de los músicos. De hecho, una D-28 de ‘46 (con herringbone) se vende actualmente más cara que una del ’47 (sin), a pesar de ser iguales estructuralmente y tener ambas las costillas rebajadas. Estos dos detalles están tan asociados en la historia de Martin, que existen modelos herringbone que son prácticamente iguales a los normales, excepto que añaden este ornamento y tienen las costillas rebajadas.

Unión del mástil tipo “cola de paloma” En inglés se le conoce como dovetail joint, Este concepto es de uso muy común en carpintería, ya que proporciona un agarre extremadamente sólido entre las maderas. En muchas cajas, escritorios y cajones se ve esta unión, así como en cajas de los amplificadores de guitarra. Consiste en unir la madera con una unión en oblicuo, como una cuña invertida. De esta manera queda encajado sólidamente. El nombre de “cola de paloma” viene de la forma de esa cuña invertida, similar a la cola, estrecha que se va ensanchando, de una paloma. Las guitarras Martin, tradicionalmente utilizan este tipo de


Los dos componentes de la unión. La ranura del cuerpo está sólo ligeramente inclinado para formar la cuña.

juntura en sus modelos, aunque actualmente no se realiza en toda la gama. Este tipo de unión resulta tan fuerte, que los mástiles de Martin se pueden colocar sin necesidad de pegamento, y pueden ser utilizados. Una vez pegado en su sitio, es uno de las uniones más fuertes que puede tener un mástil. Mucha gente opina que este tipo de unión es la que produce mejor sonido, aunque no parece haber unanimidad al respecto. Por supuesto, este tipo de unión no es exclusiva de Martin, sino que es ampliamente utilizada por muchos constructores de instrumentos de cuerda, no sólo de guitarras.

Sin embargo, no es el método tradicional en la construcción de guitarras clásicas, en las que el mástil se introduce en el cuerpo. Este diseño es extremadamente sólido, ya que no une dos piezas. El problema es si alguna vez se necesita quitar el mástil para realizar alguna operación, que sólo se puede hacer cortándolo.


Refuerzo en X Probablemente, las invención más importante de Martin en el terreno de las acústicas ha sido el refuerzo en X. Este sistema, creado por CF Martin Sr para guitarras de cuerdas de tripa, es contemporáneo al refuerzo en abanico, perfeccionado por Antonio de Torres y establecido como estándar para guitarras clásicas y flamencas. La fabricación de la guitarra es un compromiso entre aumentar la vibración de la tapa, haciéndola lo más ligera posible, y reforzarla para que no ceda a la tensión de las cuerdas. Este punto se busca esencialmente a largo plazo, por lo que muchos cambios se han hecho sin que los modelos teóricamente más endebles hayan mostrado signos de flaqueza en más de 50 años. Durante la época dorada, los patrones se cambiaron bastante (para los estándares de Martin, que siempre ha sido muy reacia a los cambios) hasta quedar con el definitivo, que llega hasta nuestros días, pero muchos de los modelos con menor refuerzo se siguen utilizando ahora después de 70 años sin problemas de estabilidad. Al principio, las primeras guitarras utilizaban refuerzos paralelos, colocados en horizontal, pero posteriormente se fueron mejorando los sistemas, buscando nuevas formas. El primer refuerzo utilizado por CF Martin Sr tenía un listón que recorría la tapa en diagonal, como las guitarras Stauffer. Se han probado muchos tipos de refuerzos a lo largo de dos siglos, pero los utilizados con abrumadora mayoría son en abanico para guitarras clásicas y en X para acústicas de cuerdas de metal. El refuerzo en X no es simétrico, como le pasa al de abanico, de manera que las guitarras diseñadas para zurdos tienen el patrón invertido. No existe unanimidad sobre si el invertir las cuerdas en una guitarra da como resultado una pérdida de la personalidad de la guitarra, o si no es apreciable. El refuerzo en X, como su propio nombre indica, cruza dos listones de madera a lo largo de la tapa, con el punto de unión arriba del puente y debajo del agujero. Además, se añaden otro listón para reforzar la zona del mástil, justo encima del agujero, y se añaden otros listones pequeños por debajo para configurar el tono. Todos estos listones son conocidos como “costillas”. En la siguiente foto vemos el principal diseño en X actual, que fue instaurado en 1944 y no ha cambiado desde entonces.

El refuerzo en X no ha sido siempre igual. El refuerzo fue cambiado al introducir las cuerdas de metal. Anteriormente era más ligero y ligeramente distinto. Los primeros modelos con cuerdas de metal tenían el punto de cruce más cercano al agujero. A finales de la década de los ’30, todo el refuerzo fue alejado del agujero, para mejorar la estabilidad de la tapa. El patrón antiguo, más cercano al agujero, es utilizado actualmente en algunas reediciones, ya que algunos guitarristas opinan que suena mejor.


En la actualidad, ciertas series de Martin, como la 1 o la 15, tienen otros diseños que no son exactamente iguales al tradicional, con un nuevo refuerzo en forma de ‘A’

Este refuerzo es muy ligero, y produce muy buena respuesta en los graves. En contrapartida, la falta de costillas diagonales quita algo de complejidad al sonido, especialmente en la zona aguda. El refuerzo superior en A está buscado para reforzar la estabilidad en la zona del mástil, y es más resistente que el tradicional.

La serie 16 tiene un híbrido, con un refuerzo superior en A y las costillas diagonales para mejorar el sonido. Este modelo de refuerzo es ofrecido en la Custom Shop demostrando que Martin tiene confianza en él. Dado que el refuerzo en ‘A’ es más estable, es posible que se tienda a este modelo híbrido en un futuro.


Costillas rebajadas El término “costillas rebajadas” o scalloped braces viene a ser como el Santo Grial para muchos guitarristas. Es uno de los factores realmente marcados en grande en los anuncios, como pueda ser Turbo Inyección para un coche. Todo esto parte del hecho que las guitarras de la época dorada de Martin sonaban mejor que las hechas posteriormente. A finales de los 50 empezó a darse la preocupación por las Martin de la época dorada. Los guitarristas y luthieres miraban dentro de la guitarra y la diferencia más obvia que encontraban era que el refuerzo en forma de X estaba rebajado en algunas partes. En los siguientes diagramas se ven las diferencias

La de la derecha tiene una especie de “picos” o puentes en las costillas inferiores, más cercanas al puente, debajo de la intersección de la X. Estos “valles” se rebajan después de instalar unas costillas normales, a mano. Como se puede apreciar, arriba de la intersección las costillas son iguales. No basta con mirar por el agujero, sino que hay que usar un espejo de luthier para apreciar las diferencias en una guitarra. Esta particularidad reduce la cantidad de material en la tapa, y permite una mejor vibración. En dos modelos iguales, uno con las costillas rebajadas y otro sin ellas, se tiene una mayor respuesta de graves y más volumen en las rebajadas. No obstante, a día de hoy no es universalmente aceptado como “mejor”, sino “diferente”. Hay guitarristas que no pueden vivir sin ellas, y otros que prefieren las normales. Aun así, los modelos equipados con ellas conllevan más trabajo y son más caros que sus homólogos “sin”. Hay modelos con las costillas rebajadas en gamas bajas en algunas marcas, claramente inferiores a guitarras mejores con costillas normales, por lo que este único factor no indica la calidad de la guitarra. Martin claramente apuesta por conservar el rebaje para guitarras de gama media-alta (dentro de la gama Martin) para arriba. Los inconvenientes de este sistema, y la razón por la cual Martin dejó de producirlo en 1945, es que la tapa resulta menos resistente, y, dado que las cuerdas iban popularizándose en calibres cada vez más gruesos, estimó conveniente evitar a la larga problemas de rotura de tapas e inestabilidad. Incluso el tamaño de las costillas se incrementó, empeorando el sonido, para evitar posteriores reclamaciones, ya que Martin siempre ha ofrecido garantía de por vida en sus guitarras. En los años 70, muchas guitarras, que venían de fábrica con costillas normales, fueron rebajadas por luthieres, buscando mejorar el sonido. En 1977, se empezaron a volver a producir guitarras Martin con las costillas rebajadas por demanda popular. Curiosamente, no parece haber habido mucho problema con las tapas de las guitarras de la época dorada.


Unión del clavijero con el mástil

Parte final del mástil

Detalle del clavijero, con la voluta “dardo”

Muchas otras marcas de acústicas ofrecen también modelos con costillas rebajadas y modelos sin ellas, cada una con sus particularidades, buscando un sonido propio.

La voluta “dardo” Una característica de las Martin, que se mantiene hoy en día por criterios históricos en muchos de sus modelos, es la voluta en forma de dardo o diamante en la parte de atrás de la unión del clavijero con el mástil. Este “dardo” tenía la finalidad de hacer una mejor unión, ya que antiguamente se hacían clavijero y mástil cada uno por un lado y se terminaban uniendo y pegando. Al tener dos superficies de contacto, la unión era mucho más resistente. A partir de la Primera Guerra Mundial, los mástiles se hicieron a partir de una única pieza, eliminando la superficie de contacto extra que ofrecía el “dardo” pero se mantuvo esta voluta en el diseño. A pesar de ello, se puede apreciar que está tallada en la misma madera, y no hay unión pegada, como antes. Los modelos más nuevos, a partir de la D-35, ya no lo llevan, aunque las series clásicas de Martin lo siguen conservando. Muchos modelos de otras compañías inspirados en estas series de Martin, como las guitarras Santa Cruz, también presentan el “dardo”. Esta voluta, no obstante, también ayuda a mejorar la

resistencia de la zona, que es especialmente sensible a los golpes. Muchos constructores de instrumentos de cuerda han usado volutas buscando reforzar este delicado punto del mástil. Por ejemplo, Gibson incluyó una voluta, de forma redondeada, a principios de los 70 en sus

modelos, aunque luego volvió a un diseño sin ella. El diseño de la voluta es importante, ya que un mal diseño puede incluso agravar los problemas de rotura.


Además de para guitarras, el palorrosa de Brasil se utiliza para fabricar perfumes de lujo, como el Channel nº5

Serie 15, totalmente de caoba

Tipos de maderas utilizadas Martin es muy tradicional en la utilización de maderas, y no ha sido muy propenso a utilizar maderas “extrañas”. Excepto en épocas de necesidad, casi todas las tapas han sido de picea, el diapasón de ébano o palorrosa, los mástiles de caoba y el fondo y aros de palorrosa o caoba. El principal cambio de maderas se produjo por la falta de disponibilidad de palorrosa de Brasil en 1968, por lo que, excepto en ediciones especiales (y realmente caras), acutalmente se utiliza palorrosa de la India. En la época dorada, el tipo de picea utilizada era picea roja o Adirondack, que actualmente escasea, y es utilizada sólo en los modelos más caros. La picea más usual es de la variedad Sitka. Sin embargo, actualmente sí se utilizan maderas más “exóticas” para ciertas series, bien sean en cierto modo especiales o de bajo coste. Por ejemplo, la serie 15 tiene la tapa, fondo y aros de caoba, y existen versiones con Koa, como la D-42K. De todas formas, la sólida base de guitarras, los modelos “clásicos” se asientan todos en las maderas que se han dicho arriba. De todo el catálogo de Martin, todas las guitarras tienen toda la madera maciza, con excepción de los modelos más baratos de series X, Road y 1, estas dos últimas con tapa de madera maciza.


Tamaños para todos los gustos Martin tiene una gran cantidad de tipos de cuerpos, que históricamente fueron surgiendo de más pequeño a más grande, a medida de que había demanda de guitarras mayores. Vamos a llamar tamaños a lo que se podría denominar también forma, ya que están relacionados, y dos guitarras de la misma medida pueden tener alguna diferencia que haga considerarse otro tamaño. Martin nombra sus tamaños con código que empezó siendo puramente un número. Los primeros tamaños iban del 1 al 5, siendo el 1 el mayor. Los tamaños 4 a 1 ya no se fabrican, así como tampoco el tamaño 0, que fue introducido en la década de 1850. Aunque los modelos típicamente tienen la unión del mástil y cuerpo en el traste 14, también existen modelos con unión en el traste 12. El cuerpo varía ligeramente de forma.

El tamaño 5, también llamado Terz es bastante pequeño, y actualmente se producen un par de modelos con este tamaño, que podríamos considerar más pensado para niños. La longitud de tiro es de 21,4 pulgadas2, lo que la hace apta para manos muy pequeñas.

El siguiente modelo en tamaño es el 00, ya con un tamaño “normal”, aunque pequeño. Ha sido usado por muchas mujeres, por tener una escala de 24,9 pulgadas3. Se comenzó a fabricar en 1873. Aunque lo tradicional es una profundidad de 4 1/8 pulgadas4, existen modelos de caja más fina (3 1/8 pulgadas) y más gruesa (4 5/8 pulgadas).

2 54,35 cm 3 63,25 cm 4 10,47 cm


El tamaño 000 llegó después, primero en 1902 con 12 trastes, para luego ser el primer tamaño adaptado a 14 trastes. Tiene una escala de 24,9 pulgadas y una anchura de diapasón de 13/4 pulgadas5. Es también muy usado por mujeres, al tener la escala más corta. Se utiliza tradicionalmente para acompañar, si no se quiere un sonido tan grave como en una Dreadnough, o para tocar blues, ayudando a los bendings la escala corta, sólo un poco más larga que la tradicional de Gibson (24,75 pulgadas6). Tiene una profundidad de 41/8 pulgadas, como la 00.

El tamaño OM tiene la misma forma que el 000, pero tiene una escala más larga, de 25,4 pulgadas7 y el mástil es ligeramente más ancho(1 11/16 pulgadas8). El golpeador es también más pequeño. Además, las costillas suelen estar rebajadas. Esta guitarra es muy utilizada para fingerpickin’, por su sonido lleno y equilibrado. Es igual de profunda que una 000, con 4 1/8 pulgadas. La diferencia entre OM y 000, de todas formas, no es categórica, así que hay modelos que combinan características de ambos tamaños, como la 000-28EC (modelo Eric Clapton), que tiene el ancho de diapasón de una OM.

El tamaño Dreadnough (D) es el más grande de la gama tradicional de Martin, con sus característicos hombros cuadrados. Estos hombros son típicos de la versión de 14 trastes, ya que la versión primera de 12 trastes los tiene más redondeados. Actualmente existen en producción modelos de 12 trastes. Tiene una escala de 25,4 pulgadas. Es el tamaño estrella de Martin, con gran variedad de modelos, y todas las compañías que se dedican a la fabricación de guitarras acústicas tienen un tamaño similar. Es la guitarra favorita para acompañamiento en un grupo, por su volumen y su respuesta de graves. La escala es de 25,4 pulgadas, y el mástil es igual de ancho que el 000 (13/4 pulgadas). Es más profunda que los modelos más pequeños, con 17/8 pulgadas9

5 4,45 cm 6 62,85 cm 7 64,52 cm 8 4,29 cm 9 12,38 cm


Además de estos tamaños, los más representativos de Martin, también hay otros tamaños, como Jumbo (J), ligeramente más grande que un Dreadnough, pero con una forma más redonda (basada en 000) y el mismo fondo o el Grand Auditórium (M o 0000), igual que el Jumbo, pero más estrecho de caja, con una profundidad igual que el tamaño OM.

Además, como detalle podemos poner los backpackers, unas guitarras de viaje, que reducen la guitarra a la mínima expresión, para a cualquier sitio, que han tenido mucha aceptación en el mercado, teniendo incluso el privilegio de ser llevada por la tripulación de la Lanzadera Espacial Columbia en una misión en 1994 y ser la primera guitarra en el espacio. Existen actualmente backpackers de cuerdas de metal, de nylon e incluso mandolina.


Todo tipo de ornamentos Una característica típica de las Martin es que se nombran con dos números. El primero es el tamaño, como hemos visto antes, y el segundo la serie. Esta serie indica, a groso modo, la ornamentación y materiales de los que está hecho. También una serie de características comunes a la serie, como costillas rebajadas, tipo de puente, etc. En este apartado se van a nombrar algunas de las series más famosas de Martin tal y como se producen en la actualidad, y nombrando algunas de sus características vintage de las que suele haber alguna reedición. Como típicamente hay varias reediciones, no todas tienen las mismas características que los modelos antiguos. Por norma general, de los modelos más famosos, hay una versión normal, con características modernas, una reedición, con características vintage (costillas rebajadas, clavijeros abiertos, tono envejecido, refuerzo en X antiguo, etc) y un modelo “Golden Era” en los modelos más demandados, reproducidos al mínimo detalle en construcción y materiales, como palorrosa de Brasil, selleta y cejuela de marfil fosilizado, etc. Por supuesto, esta lista no es exhaustiva, y existen muchas más series. En todas las series que se van a tratar, la tapa siempre es de picea. Serie 18 La serie 18 ha gozado siempre de mucha fama, siendo la más barata de las series clásicas. Su principal característica son los materiales, ya que tiene los laterales y fondo de caoba, mientras las series superiores los suelen tener de palorrosa. El diapasón y el puente son de palorrosa. Tiene un aspecto absolutamente sobrio, sin prácticamente ornamentación, ni binding en el diapasón. El cuerpo sí tiene un pequeño binding, pero nunca ha llevado herringbone. El logotipo está estampado en el clavijero, en las clásicas letras doradas. Tiene el fondo compuesto por dos trozos, pero sin ningún adorno entre ellos. Básicamente, es una guitarra sobria, utilizando maderas más baratas que las series más altas. El modelo “básico” por excelencia de Martin. Debido a ello, ha sido uno de los modelos más vendido de la marca desde hace muchísimos años. Las reediciones, basadas en las características de la época dorada, añaden al diseño costillas rebajadas, diapasón y puente de ébano, selleta larga en lugar de la moderna compensada, perfil del mástil tipo vintage y materiales antiguos donde se han sustituido por artificiales (por ejemplo, la cejuela)


Serie 28 Una de las series más míticas, y que cuenta con un mayor número de modelos y reediciones. Tiene todos los materiales encontrados en las guitarras de gama más alta, podríamos decir que, a partir de la serie 28, los materiales genéricos no van a cambiar, salvo alguna excepción. Aun siendo una guitarra sobria, tiene algo de ornamentación, como un binding más elaborado que la serie 18 (con herringbone en muchas versiones) y en la unión trasera de las dos piezas del fondo. Los materiales son palorrosa en los laterales y fondo, y ébano en el diapasón y puente. No suelen tener binding en el diapasón, y el logotipo está estampado en el clavijero. Un detalle curioso, reminiscencia de viejos métodos de fabricación es que mantiene un“dardo” en la unión trasera del mástil con el clavijero. Es, para muchos guitarristas, la guitarra Martin definitiva, ya que los modelos mayores, salvo detalles, lo que realmente las encarece es la ornamentación. Es probablemente la serie que más modelos tenga, con y sin reediciones y modelos signatura. Una característica encontrada en ciertos modelos de D-28 es un agujero más grande que el estándar. Este detalle fue “inventado” por Clarence White, músico de bluegrass y componente de los Birds, quien modificó una guitarra para hacer un agujero más grande. Las malas lenguas dicen que fue porque apagaba los cigarrillos en el agujero. Este detalle da más graves a la guitarra.


Detalle de los modelos D-28 y D-28LSV. Además del agujero más grande (el diapasón es igual, las dos fotos no están en la misma escala), se puede apreciar el tono envejecido y la selleta más larga, típicas de las reediciones. Curiosamente, aunque no es una característica normal de la serie 28, la D-28LSV lleva binding en el diapasón. La reediciones incluyen detalles como las costillas rebajadas, el binding de herringbone, el refuerzo en X estilo vintage, con el cruce más cercano al agujero, marcadores del diapasón en forma de diamante en lugar de redondos, utilización de palorrosa de Brasil, perfil del mástil tipo vintage y materiales antiguos donde se han sustituido por artificiales (por ejemplo, la cejuela)


Serie 35 La serie 35 surgió en 1965, como alternativa al estilo 28, pero con la particularidad de tener un fondo de tres piezas en lugar de dos. Por aquella época, el palorrosa de Brasil empezó a escasear, abandonándose en 1969. Además, tiene binding en el diapasón, no tiene el “dardo” en la unión de mástil y clavijero, un binding más ornamentado en el cuerpo (con o sin herringbone según el modelo) A pesar de no existir reediciones, dado que es una serie “moderna”, existen versiones con características similares, como el citado herringbone y costillas rebajadas.


Serie 42

La serie 42 tiene las mismas maderas que la serie 28, pero mucho más ornamentada. Se dejó de fabricar en 1943, aunque volvió a producirse en la década de los 80. No existen reediciones como tales, pero la serie normal tiene muchas características como si lo fuera, como las costillas rebajadas, el patrón en X más cerca del agujero, los clavijeros estilo vintage o el tono envejecido. Realmente, deberíamos decir que los modelos normales en realidad son reediciones. El modelo D-42 actual es igual en fabricación que el modelo HD-28V, pero más ornamentado. El binding delantero es de nácar, inclusive en el clavijero y la parte de la tapa que rodea el diapasón. La marca está engarzada en nácar en el clavijero, ocupando mucho más espacio que el logotipo tradicional. Tiene dos copos en nácar en el puente. La roseta también está hecha en nácar. Los marcadores tienen forma de copo de nieve y de diamante. Tiene el “dardo” en la unión de mástil y clavijero.


Detalle de la ornamentación. Nótese el reborde de nácar alrededor del agujero y cercando el diapasón.

Estilo 45

El estilo 45 es la gama más alta de Martin, la mayor ornamentación y también los modelos más caros, aunque, sólo parece haber una demanda estable de D-45’s. La D-45 es el tope de gama de Martin. En su modelo “normal” cuesta más que la mayoría de guitarras de series especiales de cualquier otro fabricante, y es el sueño inalcanzable de muchos guitarristas. Además del modelo “normal”, existe un modelo reedición y el modelo “Golden Era”, con el precio de un coche, y todos los detalles para revivir el modelo prewar en todo su esplendor. Las D-45 vintage son la joya de la corona del coleccionismo de guitarras acústicas, y comprar una sólo está al alcance de los coleccionistas más exclusivos. El estilo comenzó llamándose “estilo 42 especial”, ya que comparte casi todos sus ornamentos y se añade alguno más. El binding de nácar se añade también a la parte de detrás. Los marcadores del diapasón son hexagonales, de nácar. Actualmente, todos los modelos llevan las costillas rebajadas. Conserva el estilo con las letras “CF Martin” engarzadas en el clavijero, aunque

antes de 1934 tenía un modelo de “antorcha”, en lugar de las letras. El prototipo, la guitarra de Gene Autry, tenía la “antorcha”. Este detalle no se muestra en ls reediciones actuales, que muestran modelos del 37. Las reediciones, como es natural, muestran determinadas características de los modelos vintage, como puede ser el uso de palorrosa de Brasil, clavijeros tipo vintage, tono envejecido, materiales naturales en lugar de sintéticos, refuerzo en X más cercano al agujero, etc.


D-45 de 1940

La locura vintage Es un hecho mayoritariamente aceptado de que una buena guitarra suena mejor conforme van pasando los años. La madera se seca, el cuerpo resuena, las pastillas envejecen… El mercado de las guitarras antiguas, de lo vintage10 no ha hecho más que aumentar con los años. Actualmente es un auténtico furor lo que se vive, con precios absolutamente desorbitados. Y Martin es de las marcas mejor colocadas. Hay que decir que el furor por las Martin no es nuevo. Empezó en los años 50, mucho antes que en el resto de instrumentos. Los guitarristas se daban cuenta de que las Martin preñar sonaban mejor que las actuales. A día de hoy, una Martin de 1956, por ejemplo, se considera muy buena, pero los guitarristas, siempre ávidos de “lo mejor”, compraban y buscaban las guitarras de los años 30 y 40. Como había pocos, el precio fue subiendo, dando lugar a que un instrumento viejo era más caro que uno nuevo. En 1964, una D-45 podía valer la friolera de 1500$, una fortuna para la época, y mucho más caro que las guitarras nuevas entonces. Claro que la D-45 no se fabricaba entonces, y sólo se habían hecho 91. Hoy puede llegar a valer unos 150-175.000$ El marcado vintage despegó definitivamente, a nivel general, en los 90. Las Martin han tenido un ascenso relativamente constante, al contrario que muchas eléctricas, que pegaron el “estirón” en esa época. Sin embargo, las Martin son de las guitarras más codiciadas para cualquier coleccionista o guitarrista amante del vintage. Son una inversión muy rentable, suelen estar bien cuidadas, y el efecto beneficioso del envejecimiento es mucho más apreciable. Las guitarras más buscadas son las anteriores a la guerra, especialmente los modelos D-45 (la joya de la corona) y D-28. Una D-28 puede alcanzar los 15-20.000$ El resto de modelos de esta época también son muy buscados. Los modelos posteriores son menos buscados, por sus costillas sin rebajar y otros cambios hechos tras la guerra. Aun así, por una D-28 de los años 50, se puede pagar unos 7.000$ En 1969, se cambia el palorrosa de Brasil por palorrosa de la India. Baja la cotización de estas guitarras, que se consideran ya no instrumentos vintage y coleccionables, sino usados. Su precio baja hasta ser menor que un instrumento nuevo, salvo excepciones en modelos limitados. 10 El término vintage es ampliamente utilizado en el mundo de las guitarras. Si no lo conoces, sencillamente hace referencia a las guitarras antiguas (se suele tomar como referencia anteriores a los años 70 u 80) o características de las mismas.


¿Como datar una Martin? Martin ha utilizado, desde 1898, un número de serie constante para todas sus guitarras, de manera que datar una Martin, si conserva su número de serie, es de lo más fácil que existe. Para guitarras anteriores, sí haría falta un experto para datar correctamente la guitarra. Esta lista de años y el último número de serie que salió ese año es ampliamente distribuida por Martin y se puede consultar en su página web. En esta se puede apreciar perfectamente las vacas gordas y flacas de la compañía, por simple comparación de número de ventas. En el primer año, el último número de serie fue el 8348, por lo que se empezó la numeración teniendo en cuenta los ejemplares anteriores venidos antes de 1898, que se estimaron 8000. La casa Martin siempre ha llevado un control muy preciso de sus cuentas desde su fundación. Año Ültimo número Año Ültimo número Año Ültimo número Año Ültimo número

1898 8348 1924 22008 1952 128436 1978 407800 1899 8716 1925 24116 1953 134501 1979 419900 1900 9128 1926 28689 1954 141345 1980 430300 1901 9310 1927 34435 1955 147328 1981 436474

1902 9528 1928 37568 1956 152775 1982 439627 1903 9810 1929 40843 1957 159061 1983 446101 1904 9988 1930 45317 1958 165576 1984 453300 1905 10120 1931 49589 1959 171047 1985 460575

1906 10329 1932 52590 1960 175689 1986 468175 1907 10727 1933 55084 1961 181297 1987 476216 1908 10883 1934 58679 1962 187384 1988 483952 1909 11018 1935 61947 1963 193327 1989 493276

1910 11203 1936 65176 1964 199626 1990 503309 1911 11413 1937 68865 1965 207030 1991 512487 1912 11565 1938 71866 1966 217215 1992 522655

1913 11821 1939 74061 1967 230095 1993 535223 1914 12047 1940 76734 1968 241925 1994 551696 1915 12209 1941 80013 1969 256003 1995 570434 1916 12390 1942 83107 1970 271633 1996 592930

1917 12988 1943 86724 1971 294270 1997 624799 1918 13450 1944 90149 1972 313302 1998 668796 1919 14512 1945 93623 1973 333873 1999 724077 1920 15848 1948 108269 1974 353387 2000 780500

1921 16758 1949 112961 1975 371828 2001 845644 1922 17839 1950 117961 1976 388800 2002 916759 1923 19891 1951 122799 1977 399625 2003 978706


Si vemos una gráfica de la producción anual, según los números de serie, se puede ver claramente la evolución de la marca. Para clarificarlo, se ha partido en dos, de 1898 a 1950 y de 1950 en adelante. Se pueden ver claramente los vaivenes, como el aumento de producción a partir del año 1916, los principios de los 70, o la crisis de los 80 y cómo ha crecido espectacularmente en los últimos 15 años.

Producción anual (1899-1950)

0

1000

2000

3000

4000

5000

6000

7000

1899

1902

1905

1908

1911

1914

1917

1920

1923

1926

1929

1932

1935

1938

1941

1944

1947

1950

Producción anual (1950-2003)

0

10000

20000

30000

40000

50000

60000

70000

80000

1950

1953

1956

1959

1962

1965

1968

1971

1974

1977

1980

1983

1986

1989

1992

1995

1998

2001


Además, la cuenta de las guitarras más representativas vendidas en la época dorada de Martin también se tiene muy en cuenta para el mercado vintage, y viene a ser indicativa de los altos precios de algunos modelos, ya que existen muy pocos ejemplares.

Año 000-28* 000-42 000-45 OM-28 OM-45 D-28*

(12 trastes) D-28*

(14 trastes) D-45 1920 3 1921 5 5 1922 4 1 3 1923 3 2 1924 20 19 1925 8 4 3 1926 25 12 1927 44 20 1928 48 25 1929 82 20 11 1930 2 1 21 235 19∀ 1931 57 1 166 1 1 1932 1 1 50 5 4 1 1933 25 6 12 1 1934 129 1 14 21# 52# 1935 52 24 2 8 2 1936 72 24 1 61 2 1937 113 18 148 3 1938 97 27 19 121 14 1939 48 31 123 19 1940 86 12 6 134 24 1941 36 24 12 185 19 1942 48 12 6 96 1943 96 6 192 1944 133 231Θ 1945 147 183 1946 134 425 1947 24# * Los totales de 000-28 y D-28 son sólo para modelos herringbone. Martin empezó a producir modelos sin herringbone a principios de 1947. ∀ En 1930 se realizaron también 14 OM-45 Deluxe y dos OM -42 # Estos números son sólo estimaciones Θ Estos números reflejan 219 con el viejo refuerzo y 12 con el nuevo. Algunos 000-28 de finales de 1944 tienen también el refuerzo nuevo.

Tecnología obsoleta Las guitarras vintage tienen muchos problemas. Incluso si se encuentra en estado mint, que es prácticamente imposible, existen mejoras que se han producido a lo largo de los años que no tendrá. En el caso de Martin, además, las pocas ganas de cambiar sus modelos lo más mínimo hace que casi todas sus guitarras antiguas tengan defectos vistos desde el punto de vista actual, fundamentalmente desde el punto de vista de la ergonomía. El defecto más importante probablemente sea la falta de almas ajustables hasta 1985. Este sistema deja poco a la puesta a punto de la guitarra, además de impedir correcciones en la progresiva curvatura del mástil. Bajar la acción de la guitarra requerirá limar la selleta del puente, y es un camino sin retorno, hasta que instale una selleta nueva. En algunos casos, incluso se ha limado el punte, lo que no es nada recomendable.


Para hacer un neck reset, primero hay que separar las piezas

Si el mástil se curva más de lo debido, y esto es algo que le pasará antes o después, necesitará de una neck reset, consistente en despegar el mástil del cuerpo, corregir el ángulo de la unión, y volver a pegar todo el conjunto. Esta operación tiene sus riesgos, y debe ser realizada por un buen luthier. Además, el instrumento perderá parte de valor por haber sido “retocado”, igual que si se le han cambiado los trastes. ¡Incluso si mejoran el uso del instrumento! Los contornos de los mástiles también pueden ser un problema para guitarristas acostumbrados a mástiles modernos, con mayor ergonomía. Y no existen Martins vintage con recorte para acceder a los trastes más agudos. Para los instrumentos realmente vintage hay que recordar que las guitarras de antes de 1922 sólo admiten cuerdas de tripa o nylon, y que hasta 1929 sólo “admitían” cuerdas de metal, no estaban diseñadas para ellas. Por supuesto, se añaden todos los inconvenientes tradicionales de los instrumentos vintage derivados de ser instrumentos muy usados acerca de encontrar un instrumento en buen estado, sin golpes o roturas graves, reacabados, con trastes gastados, golpeadores añadidos o retirados, etc. Sin embargo, el peor defecto que a día de hoy tienen las Martin vintage es su alta cotización, lo que provoca, en primer lugar, una acumulación de instrumentos en manos de inversores que no serán tocados y serán meramente usados como motivo de especulación. Y por otro, la preocupación constante del músico poseedor de estos ejemplares en dos sentidos: cuidado extremo en no dañar el instrumento, por su precio y por su valor musical; y preocupación también en cualquier cosa que pueda rebajar su valor. Estos dos factores harán que la use menos de lo que debería.


Enlaces Enlaces de Internet para saber más. Excepto donde se indique, se trata de páginas en inglés.

• www.mguitar.com: Web corporativa de Martin. De obligada visita, con todos sus modelos y mucha otra información.

• The Unoficial Martin Guitar Forum: Foro especializado en guitarras Martin. • Maury’s Guitar: Página perteneciente a esta tienda con videos demostrativos de

numerosos modelos de Martin. . • Vintage Guitars Info: Página con muchísima información sobre todos los

detalles de las Martin vintage. • www.frets.com: Página de Frank Ford, un luthier de Palo Alto, CA. Numerosa

información sobre reparaciones y construcción de guitarras acústicas y otros instrumentos.

• www.pisotones.com. En esta página existen pruebas de sonido de diferentes guitarras acústicas, entre las que se encuentran varias Martin. En español.

• www.guitarramania.com. Por supuesto, el foro de referencia en habla hispana sobre todo tipo de guitarras. En español.

www.mguitar.com

http://p084.ezboard.com/btheunofficialmartinguitarforum

http://www.maurysmusic.com/martin_guitar_video_clips

http://www.provide.net/~cfh/martin.html

www.frets.com

http://pisotones.com/Acusticas/Acusticas.htm

www.guitarramania.com


Índice Introducción.......................................................................................................................3 Historia de Martin..............................................................................................................5

La fundación y el primer siglo.......................................................................................5 La época dorada.............................................................................................................9 Consolidarse sin innovar .............................................................................................11 Los años oscuros..........................................................................................................14 El renacer .....................................................................................................................16

Características de las guitarras Martin ............................................................................19 Nomenclatura ..............................................................................................................19 Herringbone .................................................................................................................21 Unión del mástil tipo “cola de paloma” ......................................................................21 Refuerzo en X..............................................................................................................23 Costillas rebajadas .......................................................................................................25 La voluta “dardo” ........................................................................................................26 Tipos de maderas utilizadas.........................................................................................27 Tamaños para todos los gustos....................................................................................28 Todo tipo de ornamentos .............................................................................................31

La locura vintage .............................................................................................................37 ¿Como datar una Martin? ............................................................................................38 Tecnología obsoleta .....................................................................................................40

Enlaces.............................................................................................................................43 Índice ...............................................................................................................................45

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CF M artin - guitarramania.com · en el resto del país. Los moravianos eran pacifistas radicales, y pagaron fuertes sumas de dinero para impedir ser alistados. En 1867,