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CIUDADLINEALJAZZ’09 / XIV FESTIVAL INTERNACIONAL DE JAZZ DEL DISTRITO DE CIUDAD LINEAL

CIUDADLINEALJAZZ’09

XIV Festival lnternacional de Jazz Del Distrito de Ciudad Lineal

Del 12 al 22 de noviembre

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ÍNDICE

Presentación..............................................Pág. 3

Exposición.................................................Pág. 6

Jazz Entre Líneas......................................Pág. 10

Sección Internacional................................Pág. 12

Jazz para escolares...................................Pág. 16

Jazz en la calle..........................................Pág. 18

Sección Cine..............................................Pág. 20

Sección jóvenes valores............................Pág. 25

Sección infantil...........................................Pág. 27

Calendario por fechas................................Pág. 29

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Año tras año desde 1996 hasta hoy, Ciudad Lineal se ha ido acostumbrando a la existencia de su festival de jazz como algo que ya le pertenece definitivamente. Fue lo que siempre pretendimos; inscribir la divulgación de la cultura del jazz en un movimiento de visibilidad natural y en los hábitos cotidianos los ciudadanos. El otoño nos trae otra vez de regreso. Formulamos nuevas propuestas con la intención de crecer, sin embargo la línea de rumbo se mantiene: diversidad y calidad de áreas, expresiones, estéticas y, por encima de todo, excelencia artística en todas ellas. Nombres y voces que, por sí solos, son garantía de un movimiento musical extraordinariamente creativo y de desarrollo muy libre.

Todo esto viene siendo posible gracias a los apoyos que recibimos cada año y que nunca dejaremos de agradecer. Desde luego, la extraordinaria acogida del público y de la prensa cultural, pero también la generosidad de cuantas entidades colaboran con nosotros. Es el caso, del Conservatorio Profesional de Música “Arturo Soria”, del Taller de Músicos de la escuela “Maese Pedro” o de Seguriber, patrocinador principal de la sección internacional. Este año Ciudad Lineal Jazz sale, por vez primera a la calle, porque tiene sentido intentar poner la cultura del jazz, cada vez más, en el mapa del distrito y porque existe, cada vez más, un creciente espíritu de apertura hacia este nuestro festival de música, artes e ideas por parte de todos. Siendo así, confiamos, en futuras ediciones, en poder llevar algunas de nuestras iniciativas a otros lugares.

Las áreas temáticas que habitualmente incluimos en el programa de Ciudad Lineal Jazz (música, cine, arte y docencia musical) se mantienen. Con todos ellos, el programa que hemos confeccionado este año configura un retrato caleidoscópico del género, por cuanto en él se aglutinan todas las tendencias imaginables, sin olvidar que varias de ellas se producen en una ciudad como Madrid donde el jazz dispone de una envidiable proyección y una asombrosa capacidad de adaptación a los tiempos que corren. Dejo aquí mi voto para que este nuevo puñado de eventos se convierta en una magnífica oportunidad para acercarnos, entender, sentir y compartir una realidad tan próxima, y vibrante, como la del jazz.

Manuel Troitiño PelazConcejal-Presidente del Distrito de Ciudad Lineal

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UN PROGRAMA VARIADO

Un programa cultural con claro protagonismo jazzístico no podía sustraerse a la poderosa influencia que este género musical afroamericano ha ejercido, casi desde su nacimiento, sobre un variadísimo muestrario de manifestaciones artísticas; una forma específica de penetración estética que encuentra razón de ser buscando enfoques alternativos para las relaciones entre las hechuras del jazz y la variada geografía estética del arte de nuestros días. Ejemplo: localizando complicidades entre las descargas pianísticas de Bebo Valdés y el cine, el realizador Carlos Carcas se convierte en un documentalista ejemplar, capaz de sobrecoger con la sutileza de los maestros en varios momentos de la película “Old man Bebo”.

Entre los cultivadores más genuinos con los que estas formas de penetración cuentan en la historia del cine, sobresalen igualmente el desaparecido Robert Altman y el polifacético Woody Allen, uno y otro con espacio propio en la programación cinematográfica de Ciudad Lineal Jazz Y lo mismo cabe apuntar respecto de las experiencias de confraternización expresiva entre el relato estrictamente literario y la música de películas como “A sangre fría”, dirigida por Richard Brooks y con música de Quincy Jones.

Fiel al planteamiento de sensibilización cultural, ya iniciado en otoño pasado por Ciudad Lineal: Línea Artes, este encuentro no detiene en el cine la extensión de sus actividades. Parcelas igualmente sugestivas, como la fotografía, la pintura o las actividades estrictamente didácticas -concebidas éstas, sobre todo, para los más jóvenes-, tienen también presencia en el cartel. Las razones son simples: entendemos que es preciso mostrar, en la medida de lo posible, el hecho musical en relación con el contexto estructural que es capaz de generar.

Y así, para representar mejor el asunto que se desea divulgar, vienen creadores cuya especialidad –y crean que es más que suficiente- radica en zambullirse en el arte de la memoria presente, que es memoria presente de la creación artística de cualquier tiempo. Esta gente parece que hubiese manejado lienzos, dispositivos de cámara y procesadores, para los visitantes y aficionados que ahora contemplarán su trabajo. Así de original luce esta labor; como si hubiesen visto, a través de los años, llegar a su público a las salas de exposición. Obras fabricadas y disfrutables con la materia sólida del tiempo. Y, manteniendo uno de los rasgos que ya han hecho de esta convocatoria una cita singular, tanto el Conservatorio de Música “Arturo Soria” como el taller de la Escuela de Música “Maese Pedro”, suman esfuerzos igualmente, trayendo hasta la programación lo mejor de cada casa: un puñado de jóvenes valores entre los que se contarán, seguro, algunos de los mejores valedores que tendrá el género en próximos años. No es mala manera, si se piensa un poco, de velar por el futuro de nuestra música.

Ellos, y alguna que otra sorpresa que podría complementar la conferencia de quien estas notas escribe, serán el contrapunto para otro de los apartados que muchos consideran el diente del león de este encuentro: su sección internacional. No podía faltar en un espacio que, como éste, presume de proclamarse de estricta modernidad, la apuesta por el jazz avanzado, y, por

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ello, el programa convoca la visita de Nils Petter Molvaer, el trompetista noruego artífice de unas maneras que aúnan improvisación jazzística y la enciclopédica cultura del club de baile.

El loable e imprescindible propósito de poner al día estilos como los del blues de Nueva Orleans tiene también cabida en Ciudad Lineal Jazz. Posiblemente, en estos momentos, el cultivador más genuino sea el guitarrista John Scofield, un técnico colocado en primera línea del actual catálogo de intérpretes de su instrumento en el mundo entero. Scofield viene para desarrollar los contenidos de su última creación discográfica, “Piety Street”. Música de carnosa y peleona espiritualidad para la que el guitarrista cuenta con el respaldo de una banda que no colecciona clichés instrumentales.

El programa registrará, finalmente, un aumento de temperatura con el concierto del pianista de Filadelfia Kenny Barron, un técnico para el que los diccionarios y enciclopedias especializados reservan un espacio privilegiado. Con su continua y acertada toma de decisiones durante las últimas tres décadas, Barron ya goza de la prerrogativa de haber entrado en el territorio de las leyendas. Es excelente la forma en la que se encuentra, por lo que, es seguro, su concierto será una sucesión de ágiles destellos preciosistas, una francachela capaz de competir con las mejores invenciones de otros maestros, y, por supuesto, la de cualquiera de sus epílogos. Un lujo.

Todo ello estará en diferentes escenarios de los centros culturales de Ciudad Lineal, coincidiendo con la visita de un abundante número de jazzistas contemporáneos de cuyo suministro se encargan el colegio mayor San Juan Evangelista y el festival de jazz de Madrid, en cuyo genérico Ciudad Lineal Jazz se integra. Un programa en el que, a poco que uno se aproxime con desprejuiciada voluntad analítica, se descubre un corolario donde destacan luminosas, diáfanas, las razones por las que el jazz ya está asentado en diferentes direcciones, conceptuales y también geográficas. Apreciará el degustador, sobre todo, una prolongación del importante salto cualitativo dado el pasado año, que coloca a este festival en posición puntera dentro del muestrario de festivales internacionales dedicados a divulgar la música de jazz. Hace catorce años, se trataba de hacer que esta cita terminase madurando en direcciones distintas. Lejos de ser una atractiva esperanza, ese momento ya ha llegado.

Luís Martín Crítico musical

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EXPOSICIÓN

Del 29 de octubre al 30 de noviembreCentro Cultural San Juan BautistaExposición “En torno al Jazz”

EXPOSICIÓN EN TORNO AL JAZZ

El pasado año tuvimos ocasión de contemplar en la sala de exposiciones de la Elipa en nuestro Distrito de Ciudad Lineal, una valiosa exposición sobre el diseño en las portadas de los discos del jazz, encargos en muchos casos realizados por conocidísimos artistas. La música de jazz ha sido y es, una de las más fieles compañeras a la soledad del estudio del creador plástico. Lo que aquí se muestra es un mínimo ejemplo de la enorme influencia que además -como eje y motivo de representación- supone para los mismos. Desde la fotografía (Javier Nombela, Carlos Díez Bustos, Diego Alonso, Roberto González Fernández), a la pintura en diversas modalidades -óleo (Gabriel Alonso), acuarela (Cristina Barquita)-, y pintura-dibujo en tinta china (Juan Cuéllar) y dibujo a lápiz grafito (Daniel Suárez) hasta el collage y videoarte (Manolo Campoamor). Tema recurrente para la plástica ya sea en forma documental, plasmación realista o abstracta. Estas obras nos hablan del jazz como querencia y atracción para los innovadores en el mundo del arte. Una oportunidad de disfrutar con ambas artes.

Jesús Cámara

Comisario de la exposición

DIEGO ALONSO

El saxofonista de jazz, 1999Impresión digital a partir de diapositiva70 x 47,5 cm

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CRISTINA BARQUITA

Clarinete, 2009Acuarela sobre papel45 x 55 cm

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CARLOS DÍEZ BUSTOS

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Just jazz, 2009Impresion digital. Tintas pigmentadas sobre papel Somerset 330 gr.50 x 50 cm

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ROBERTO GONZÁLEZ FERNÁNDEZ Jacob´s ladder to jazz, 2009Impresion digital. Tintas pigmentadas sobre papel Somerset 330 gr.76 x 115 cm

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JAVIER NOMBELA ANDREU

Sombras del jazz, 2007Impresión digital53 x 80 cm

Regie Johnson, 2007Impresión digital53 x 80 cm

Johnny GriffinImpresión digital80 x 53 cm

Detalle de trompeta, 1Impresión digital53 x 80 cm

Mark TurnerImpresión digital53 x 80 cm

Hamiett BlumiettImpresión digital53 x 80 cm

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DANIEL SUÁREZ

Louis Armstrong, 2009Lápiz grafito sobre papel 29,7 x 21 cm

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MANOLO CAMPOAMOR

Jazz Trío, 2009Collage35x 104 cm

***Manolo Campoamor (Madrid, 1958) desde que participara en la creación de grupos emblemáticos de la escena musical de la movida madrileña (el grupo proto-punk Kaka de Luxe), ha sido un artista de lo más versátil. Comenzó dibujando cómics allá por los 70. Desde principios de los ochenta anda inmerso en la pintura, donde el collage es una de sus más constantes y presentes razones para la plástica. Desde hace más de una década el videoarte es uno de sus logros más personales y fructíferos, manipulando tanto la imagen como el sonido en sus videocreaciones.

Roberto González Fernández (Monforte de Lemos, 1948). Artista multidisciplinar interesado por la pintura como medio para expresar ideas y sentimientos, su estilo podría definirse como una mezcla entre planteamientos conceptuales y realistas. En los últimos años y paralelamente a la pintura ha desarrollado numerosas series a través de tecnologías innovadoras incluida su página web en la que presenta proyectos especialmente diseñados para ella. La escalera de Jacob (Jacob´s Ladder) es una escalera mencionada en la Biblia (Génesis 28: 11-19) por la que los ángeles ascendían y descendían del cielo. Fue vista por el patriarca Jacob durante el sueño, tras su huida por su enfrentamiento con su hermano Esaú.

Javier Nombela (Badajoz, 1958). Su alianza con los protagonistas de sus fotos nace y crece casi al mismo tiempo que su amor por el jazz. Colaborador asiduo de Cuadernos de Jazz ha visto publicado su trabajo tanto en las portadas de la revista como acompañando diferentes entrevistas o crónicas de conciertos, en las que ha tenido muchas veces el placer de su compañía y apoyo. Pero en esta colección predominan las imágenes tomadas en las actuaciones que una larga lista de músicos ha interpretado durante estos años en Madrid, ciudad del trabajo de Nombela.

Diego Alonso (Buenos Aires, 1973). Fotógrafo y video-artista, su obra es de carácter puramente experimental. El movimiento es un elemento muy recurrente en su trabajo. El movimiento como representación del tiempo, algunas veces literal y otras oculto dentro de narraciones oníricas que se interrelacionan a lo largo de su obra. Su formación proviene de la imagen en movimiento lo que da a todo su trabajo un tono cinematográfico. Similares en esencia, sus fotografías y sus videos marcan un interesante contrapunto. En las fotografías nos encontramos frente a largos momentos y acciones congelados, mientras que en sus videos lo hacemos frente a cortos instantes expandidos.

Daniel Suárez. Licenciado en Imagen y Sonido ha trabajado como ilustrador en varias series de animación y realizado ilustraciones para muchas entidades y publicaciones. La soltura de su dibujo destaca en sus composiciones al compás que la seguridad del trazado.

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Cristina Barquita. La acuarela en las manos de esta artista nos invita a mimar un instrumento para la música (clarinete) como se hace con una ortografía cuidadosa para la poesía. La delicadeza de sus aguadas nos remite a la mejor tradición pictórica de oriental. Extrema suavidad de trazo y colorido. Carlos Díez Bustos. Uno de los mejores representantes del nuevo realismo español. Ha participado en las mejores muestras que de este movimiento artístico se han realizado. Su pasión por la fotografía, no le aleja por el sentido arquitectónico de sus composiciones pictóricas y en el caso que nos ocupa con una carga conceptual, casi de poesía visual.

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JAZZ ENTRE LÍNEAS

Jueves, 12 de noviembre a las 18:00Centro Cultural San Juan BautistaPonente, Luis MartínPianista, David Gutiérrez Franco

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Conferencia ofrecida por Luis Martín seguida de un breve recital de piano

“JAZZ, LA GRAN MÚSICA POPULAR DE NUESTRO TIEMPO”

Recién comenzado el siglo XX, el jazz era rústico, proletario y su reputación no alcanzaba siquiera nota de aprobado. Su primera manifestación documentada es preciso rastrearla en el sur de Estados Unidos, en Nueva Orleáns, en el estado de Louisiana. A través de la interpretación del gospel en las iglesias, los blues y cantos de trabajo en las plantaciones, y el ragtime en los locales de esparcimiento, fue generándose un estilo musical cuya influencia en el resto de músicas populares que patentó el siglo XX ha demostrado ser la más poderosa.Desde las grandes orquestas de swing a los románticos cantantes de baladas, desde el rock and roll a la gran música afrocubana, pocos géneros son, en efecto, los que no se han dejado colorear por las cadencias del jazz. Y, en complicidad directa con este conjunto de detalles, urge informar, asimismo, de su responsabilidad en el sinfín de cambios producidos en los procesos de grabación de las compañías discográficas y en las formas de entender el ritmo y la tonalidad occidentales. Tal es el respeto ganado con el tiempo por el jazz, que ya ni siquiera es despreciado por el arte oficial; antes bien –por esnobismo o auténtico reconocimiento-, sus hallazgos son venerados por un gran número de aficionados, correspondiéndole la consideración de auténtico eje creador para la música del siglo XX.Transcurrido más de un siglo desde su nacimiento, su cartografía es, por añadidura, gigantesca. Al puñado de aventuras sonoras al que ha dado lugar, alimentadas por una perpetua ebullición de ideas, novedades, caprichos, escuelas vanguardistas e, incluso, de reposición sonora (las sucesivas revisiones enriquecidas que viven los lenguajes dominantes del bebop, el hard-bop o el cool), es preciso sumar otras que encuentran origen en su adaptación a las respectivas geografías donde se ha asentado, todas diferentes de la estadounidense.Así, el jazz ha integrado el afrocubanismo, la bossa brasileña, el flamenco, la música hindú, la salsa, el calipso e, incluso, la música clásica, por no mencionar el rock and roll a través del electrochoque provocado por Miles Davis en las postrimerías de la década de los 60. Extraordinariamente

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recomendable para quienes se sientan fatigados ante la sonoridad dominante de las radiofórmulas comerciales e institucionales del país, la difusión de este género revolucionario propone un descomunal arco estético en el que un muy poco desdeñable suministro de talento aguarda siempre, asediando la exactitud y redondeando la expresividad. A través de sus contenidos, el aficionado inquieto puede descubrir un pequeño oasis con los episodios que, después de cien años, depara su gran aventura: del ragtime al dixie, del swing al bebop, del cool al rhythm & blues, del free a la fusión, y de todo ello al funk, al acid-jazz y a cualquier otra confraternización sonora con conocimientos –tradicionales o no- procedentes de cualquier lugar del mundo.

LUÍS MARTÍN

Es periodista y nació en Madrid, en 1957. Ha escrito artículos y reportajes muy diversos para publicaciones como Actual, El Independiente, Vibraciones, Diario 16 o Vivir en Madrid, y ha dirigido programas musicales en Radio 16, Onda Cero, Europa FM y Onda Madrid. Desde 1993, es crítico de música popular en el diario ABC. Ha coordinado, asimismo, diversas enciclopedias musicales y ha dirigido una decena de ediciones de los festivales emociona!!! para el Ayuntamiento de Madrid. El Festival de Jazz de Ciudad Lineal, y los ciclos de canción de autor A Pie de Calle y Autores que Cantan son igualmente proyectos en los se encuentra implicado. En la actualidad, es miembro del Consejo de la Música del INAEM y ejerce la dirección artística de las cinco ediciones del festival Ellas Crean y de las seis de la Mostra Portuguesa. Tiene publicados varios libros, entre los que destacan Bob Dylan y el volumen de relatos titulado Los olvidados.

DAVID GUTIÉRREZ FRANCO

Nacido el 25 de febrero de 1981 en Madrid. Hijo de percusionista y cantante cubano. Comienza los estudios de piano a los 8 años en el conservatorio "El Capricho" de Madrid. A los 13 años de edad recita su primer concierto profesional como pianista solista en el Centro Cultural Príncipe de Asturias en Madrid interpretando un amplio repertorio lleno de composiciones propias. Concluye su formación clásica en manos de María Luisa Villalba en el Conservatorio Profesional de Música "Arturo Soria" de Madrid. Estudia música moderna en el Taller de Músicos de Madrid, en el I.M.T. y en la Escuela de Música Creativa. Elegido por el ex-embajador Edwar L. Romero trabaja también durante 4 años como pianista de la embajada de los Estados Unidos de América en Madrid. Compositor y arreglista, alma máter del joven experimentado grupo de jazz español "Aikú".

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SECCIÓN INTERNACIONAL

Entrada a cada uno de los conciertos de esta sección: 12 Euros (Venta anticipada de entradas al teléfono 902 400 222 o a través de www.elcorteingles.es)

Viernes, 13 de noviembre a las 21 horasCentro Cultural San Juan Bautista

Kenny Barron Trío www.kennybarron.com

Hace muchos años que Kenny Barron no precisa de especiales señuelos para convencer a la afición de que dispone de valores sobrados para subir a cualquier escena. En las dos últimas décadas, es habitual que su piano despunte en una fórmula de trío que, posiblemente, sea la que mejor ayuda a la expresión más libre del artista. Este orden instrumental -muchos piensan que una invención del jazz moderno, es decir, todo el que se ha hecho dentro de cualquier corriente- es el protagonista de esta velada. Con dos socios de importancia: Kiyoshi Kitagana en el contrabajo, y Ben Riley en la batería.El primero es verdaderamente sorprendente, un japonés con asombroso sentido del blues y técnica bien pulida. Y si lo último es posible entenderlo con relativa facilidad, lo primero deja verdaderamente pasmado. Ben Riley, por su parte, es un percusionista finísimo que hace encaje con la caja y los platos, y, cuando se queda solo, es incapaz de permitir que se le cuele una evidencia, un ardid o un recurso vulgar en su exposición. A menudo, Barron le ha utilizado para colocarle réplicas certeras, muy bien escogidas, al discurso central de su piano.Así de conocida –y reconocida- es esta sección rítmica a la que Kenny Barron tiene en nómina desde hace algunos años. Con anterioridad, la trayectoria profesional de este pianista es bien conocida, carece de secretos para el buen aficionado. Sesenta y seis años de edad y nacido en Filadelfia, aunque residente en Nueva York desde principios de los años 60, un momento en el que arrancó su carrera en los grupos de James Moody, Lou Donaldson y Lee Morgan. Más tarde, decidido a convertirse en uno de los mejores estilistas del bebop, llegarían colaboraciones tan preciadas como las realizadas para Roy Haynes y Dizzy Gillespie, al que conoció cubriendo la baja de Lalo Schiffrin en su quinteto. Así las cosas, desde que medió la década de los 60, la existencia de Kenny Barron se había convertido en un auténtico torbellino de nombres e influencias: Freddie Hubbard, Stanley Turrentine, Yusef Lateef, Milt Jackson, Buddy Rich, Jimmy Heath, Stan Getz y muchos más.Barron, que –junto al saxofonista Charlie Rouse- también es fundador del grupo Sphere, es un técnico de formas exquisitas que, no sin razón, son comparadas a menudo con las de Milt Jackson o Tommy Flanagan. Es apasionado pulsando con la mano izquierda el teclado de su instrumento, y desinhibido y certero hilvanando melodías por donde nadie lo haría, con la

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derecha. Este hombre, finalmente –y por completar perfil- se ha atrevido con casi todo, hasta con la enseñanza, y se nota por la sabiduría y la consistencia con que maneja, incluso, los elementos más convencionales del lenguaje jazzístico. Pero Barron es, además, un compositor interesante y muy inspirado, que, en un cincuenta por ciento, trabaja en sus directos sobre sus propios materiales, repartiendo el otro cincuenta entre atenciones a la obra de Thelonious Monk y a la de Coltrane sobre todo. Y también a la de Duke Ellington, cuyo “Prelude to a kiss”, ha tenido a gala versionar en ocasiones, tropicalizando su andamiaje rítmico.

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Sábado, 14 de noviembre a las 21 horasCentro Cultural San Juan Bautista

Nils Petter Molvaer www.nilspettermolvaer.info

De entre las muchas corrientes que inyectan nueva vida al jazz en los últimos años, la electrónica es una de las más vigorosas. Desde el norte de Europa, cada vez es más frecuente que nos lleguen toda clase de grabaciones que alternan tecnología y jazz en diferentes proporciones. De ese modo, la afición ha terminado por tener la oportunidad de calibrar el potencial de estos intérpretes en directo. Un nombre destaca por encima del resto en esta hornada de músicos nórdicos: es el trompetista Nils Petter Molvaer, que, poco después de cumplir los veinte años de edad, ya estuvo en la constitución de la formación noruega Masqualero, que completaban el saxofonista Tore Brunborg, el contrabajista Arild Andersen y el baterista Jon Christensen.

Masqualero fue una de esas bandas encuadrables en el característico sonido de la fonográfica alemana ECM, pero Nils Petter Molvaer precisaba una mayor libertad. No en vano, este músico de formación jazzística, se había dejado seducir hacía años por los encuentros entre Brian Eno y el trompetista Jon Hassell, y su interés por la electrónica le había llevado hasta la rítmica acelerada del drum’n’bass. Ejemplo de todo ello fueron sus arranques discográficos en solitario en la mencionada ECM, “Khmer” (1998) y “Solid ether” (2000), espléndido prólogo ambos de lo que después ha sido su carrera más fecunda en la multinacional Universal.

Uniendo los ritmos desbocados con un indisimulado gusto por el ambient y el folclore nórdico, el trompetista ha dado con una mezcla propia que luce mucho más en directo que en los discos. Hoy, Molvaer es, sin duda alguna, el exponente más sólido de esa nueva corriente a la que los inventores de etiquetas han bautizado con el nombre de nu jazz, un género que comparte principio con el tecno-pop de comienzos de los años 80, del mismo modo que en cierto sentido aquellas bandas –Soft cell, Ultravox o Kraftwerk- compartían fundamento con la psicodelia berlinesa de los años 70: Tangerine Dream, Ash Ra Tempel o Klaus Schulze. En realidad –por seguir la serie-, incluso antes de

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que Robert Moog y Donald Buchla utilizasen los primeros sintetizadores modulares, músicos de vanguardia como Karlheinz Stockhausen o Terry Riley ya estaban trabajando en sus obras con este utillaje electrónico.

Dicho esto, apuntar que la música del trompetista noruego Nils Petter Molvaer ya puede ser familiar en Madrid. Desde 2003, tres han sido las visitas realizadas a nuestra ciudad con diferentes formaciones, la última, hace tres años, en la Casa Encendida. Las composiciones de Molvaer, invadidas de ecos exquisitos de los mencionados Jon Hassell y Brian Eno, también arrían la bandera de las invenciones rítmicas de Bill Laswell y la de los últimos experimentos que llevó a cabo Miles Davis. El fundamento se alcanza en el rumbón que forman los sintetizadores y una sección rítmica dispuesta siempre a romper con la inercia del personal. Y no es fácil, por último, encontrar mejores momentos en la historia discográfica del trompetista que el que inspira “Hamada”, su grabación más reciente y la que ahora viene a presentar. Pasajes electrónicos que alientan decididamente la esperanza de los aficionados que apuestan por una regeneración verdadera del jazz.

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Domingo, 15 de noviembre a las 21 horasCentro Cultural San Juan Bautista(Venta de entradas en el teléfono 902 400 222 y en www.elcorteingles.es)

John Scofield www.johnscofield.com

John Scofield, cuyo álbum “Piety Street” es uno de los más originales de entre los publicados en el mercado del jazz este año, ha creado una estética personal basada esencialmente en la mixtura de culturas musicales en su mayor parte de raíz negra. Mucho de poderosa espiritualidad gospeliana hay en este “Piety Street”, título que alude al nombre del estudio de grabación más emblemático de Nueva Orleans, situado en la ruta del famoso Tranvía Desire que daba fundamento a la obra de Tennessee Williams. A este centro de gravedad ha llegado Scofield, tras un vasto peregrinar en los últimos años por algunas de las estéticas más vistosas del jazz.Originario de Dayton, Ohio, donde nació hace 57 años, John se dio a conocer siendo todavía estudiante de la Berklee, en 1974, en el mítico recinto del neoyorquino Carneggie Hall, en el seno de una banda liderada por Gerry Mulligan y Chet Baker. La suerte -haberle caído en gracia a Mick Goodrick, que le recomendó para el evento- le permitió adquirir fama sustituyendo a John Abercrombie en la banda de Billy Cobham y George Duke. Después, su errante estilo guitarrístico acompañó a Gary Burton, a Charles Mingus, a Jay McShann y hasta a Lee Konitz, entre otros cabezas de serie del jazz. De especial interés fue su afiliación en 1982 a la banda del trompetista Miles Davis, con quien permaneció por espacio de tres años.La carrera en solitario de John Scofield comienza en la segunda mitad de los 70 con los discos “East meets West” y “John Scofield live”, si bien ninguno de ellos tiene especial relevancia. Hay que esperar a la llegada de los 90, con el

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http://www.elcorteingles.es/


guitarrista convertido ya en un improvisador rotundo y vigoroso, para que su nombre adquiera la prestancia que hoy tiene. Un músico que siempre descubre los rincones menos evidentes de sus invenciones, aunque para ello tenga que desplegar toda su pirotecnia virtuosística. En símil pugilístico, John Scofield es como Mohamed Ali; un peso pesado de su instrumento, con movimientos de ligero.Desde el comienzo del milenio, sus inclinaciones han tenido orientaciones ciertamente antagónicas. De la evidencia acústica del álbum “Quiet”, de 1996, a la saltarina rítmica funky de sus registros “A go go”, de 1997, y “Bump”, de 2000; del clasicismo de “Works for me”, de 2001, al proteico ritual de rhythm & blues de “That’s what I say”, de 2005, y “This meets that”, de 2007, sin olvidar sus contribuciones a los modelos ambientales del acid jazz en “Uberjam”, de 2002, y en “Up all night”, de 2003.Ahora llega “Piety Street”, cuyo embrión ya fue revelado hace un par de años cuando Scofield grabó con el terceto Medeski, Martin & Wood una espléndida versión del tradicional “Amazing grace”. No cabe poner en entredicho, sin embargo, que la delicadeza e intención de “Piety Street” son -comparadas con aquella grabación- definitivas, acomodándose al trabajo de músicos bien curtidos en la faena. Todos han sido -o son- parte de bandas como las de Taj Mahal, el malogrado Johnny Adams o Bonnie Raitt. Lo mejor es que comparecen, junto a John Scofield, en la escena.

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JAZZ PARA ESCOLARES

Lunes, 16 de noviembre de 10:00 a 11:00 y de 11:30 a 12:30Centro Cultural Príncipe de Asturias (dos pases de 45 min.)Sr. Sax “Jazzeando”

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Martes, 17 de noviembre de 10:00 a 11:00 y de 11:30 a 12:30Centro Cultural San Juan Bautista (dos pases de 45 min.)Sr. Sax “Jazzeando”

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Miércoles, 18 de noviembre de 10:00 a 11:00 y de 11:30 a 12:30Centro Cultural Elipa (dos pases de 45 min.)Sr. Sax “Jazzeando”

***Sr. Sax Presenta " Jazzeando"

Un recorrido por la historia del Jazz desde sus comienzos, con una instrumentación original y muy jazzera: los saxos.

Explicando de una forma amena y divertida la estructura de los temas, la improvisación y el swing; los elementos más significativos de la música negra que revolucionó el siglo XX y sigue haciéndolo en nuestros días.

Un concierto diferente, de la mano de excelentes músicos y un locutor muy divertido, para no perdérselo!.

Intérpretes:Mariana Potenza saxo sopranoMarcelo Terze saxo alto y clarineteRoberto Rioja saxo tenorMarcelo Peralta saxo barítono

Carlos Martínez locución

Repertorio:

Blues rural (saxo solo)"Go Down, Moses!" (negro spiritual -1872)"The Entertainer" (ragtime-Scott Joplin - 1900)"Ory Creole's Trombone" (New Orleans - Edward "Kid" Ory - 1922)"Oh, Lady Be Good!" (swing - George Gershwin - 1924)

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"It Don't Mean a Thing” (“If It Ain't Got That Swing”) (negro swing - Duke Ellington - 1931)"Night In Tunisia" (be-bop - "Dizzy" Gillespie - 1942)"So What" (cool jazz - Miles Davis - 1958)"I Got You (I Feel Good)" (funky - soul - James Brown - 1965)"The Chicken" (jazz fusion - Jaco Pastorius - 1972)

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JAZZ EN LA CALLE (novedad)

Lunes, 16 de noviembre a las 18:00 y a las 19:30 (dos pases de 45 min.)Centro Comercial Alcalá NorteC/ Alcalá 414, 28027 Madrid

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Martes, 17 de noviembre a las 18:00 y a las 19:30 (dos pases de 45 min.)Centro Comercial Arturo Soria PlazaC/ Arturo Soria 126-128, 28043 Madrid

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Miércoles, 18 de noviembre a las 18:00 y a las 19:30 (dos pases de 45 min.)Centro Comercial Alcalá NorteC/ Alcalá 414, 28027 Madrid

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Pasacalles Dixieland Jazz Band Quinteto

Esta formación está integrada exclusivamente por instrumentos acústicos ejecutados por músicos de la escena jazzística madrileña. El repertorio, una sugestiva invitación al baile desde las ideas y los sentimientos, sacude sus síncopas en viejos estándares del dixieland de Nueva Orleáns, algunos de los más emblemáticos temas de Louis Armstrong y apuntes diversos de las bandas ambulantes de principios del siglo XX en el sur de los Estados Unidos.

Integrado totalmente por instrumentos acústicos ejecutados por músicos de la escena jazzística madrileña que interpretan el estilo dixie-jazz tradicional de Nueva Orleáns, Louis Armstrong y las bandas ambulantes de principios de siglo en el sur de los EEUU.

Antonio Ximénez trompetaDaniel Fedele saxoFernando Bellver banjoAntonio Martí tubaAbel Vilaró clarinete

Repertorio

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Sweet Georgia Brown, When You're Smilin', Hello Dolly, When the Saints Go Marchin' In, The Preacher, China Boy, Jada, Some of These Days, I've Found a New Baby, Muskrat Ramble, Tiger Rag, Moritat.

Con colocación de carteles Mupy por parte de producción

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SECCIÓN CINE

Viernes, 20 de noviembre desde las 12:00 hasta las 20:00Auditorio del Carmen Laforet

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Maratón cinematográfico

A SANGRE FRÍA 12:00

Las informaciones sobre brutales masacres familiares que aparecen, de vez en cuando, en los medios de comunicación suscitan un morbo inevitable en los actuales reality-shows televisivos. Si de lo que se habla es del asesinato sistemático de los componentes de una familia entera en su ambiente hogareño, la imaginación suele recurrir al ya tópico perfil del asesino en serie al que resultaría difícil identificar por la calle. Un ser presumiblemente poco convencional, inteligente e instalado en una clase social acomodada. La realidad, sin embargo, es mucho menos compleja y no siempre adopta los tintes sofisticados de una novela de Bret Easton Ellis.El relato que Truman Capote escribió recién comenzada la década de los 60, y que sirvió de base argumental para el guión de esta película, explora en profundidad el drama de unos personajes arrancados de cuajo de la leyenda negra de la América Profunda. Una sociedad dinamitada por las profundas diferencias entre la población, que arde bajo una estremecedora y aparentemente impenetrable imagen de virtuosismo puritano. La narración se centra en el personaje de Perry Smith que acaba de salir de la cárcel y, basándose en las informaciones que le ha facilitado un compañero de celda, planea un atraco. El plan consiste en robar la caja fuerte de un rico granjero. Pero como él solo no puede dar el golpe, contacta con otro joven, Dick Hickock, que acaba de salir del psiquiátrico.Un cóctel explosivo que el realizador Richard Brooks, por su parte, maneja con su particular metodología narrativa (es importante decir que antes de convertirse en realizador fue guionista de filmes como “Fuerza bruta” o “Cayo Largo”, entre otros), proporcionándole un tratamiento documentalista inevitable en una narración que extrae su argumento del sumario judicial levantado a partir del suceso. De hecho, el tan controvertido concepto de nuevo periodismo (un estilo divulgado en la década de los 60 por los “alumnos” de Tom Wolfe), fue acuñado a partir de esta novela publicada en origen por entregas en un periódico estadounidense de gran tirada. El valor de “A sangre fría” se completa con la magnífica interpretación que del psicópata Perry Smith lleva a cabo Robert Blake (más tarde, famoso gracias a su aparición en la serie televisiva “Baretta”, donde daba vida a este peculiar detective), y con la excelente música que, para la banda sonora, compuso Quincy Jones.

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“A SANGRE FRÍA” (1967)Realización y guión: Richard BrooksIntérpretes: Robert Blake, Scott Wilson, John Forsythe, Paul Stewart, Gerald S. O’Loughlin, Jeff Corey, John Gallaudet.Fotografía: Conrad L. HallMúsica: Quincy JonesNacionalidad: EE.UU.

WILD MAN BLUES16:00

El productor Jean Doumanian comenzó en 1997 una colaboración con Sweetland Films que, hasta el momento, ha dado casi una decena de películas de diversos realizadores: “El despertar de la inocencia”, de Tom Donaghy, y “Un verano diferente”, de Nelson Hume, entre otras. Las preferencias, no obstante, han estado puestas en el trabajo del neoyorquino Woody Allen; una apreciación comprobable cuando se examinan los créditos de “Desmontando a Harry” (1997), “Celebrity” (1998), “Acordes y desacuerdos” (1999) y “Granujas de medio pelo” (2000).Doumanian, que como actor también ha trabajado para Carl-Gustav Nykvist en el film “Ljuset haller mig sallskap”, de 2000, le produjo a la documentalista estadounidense Barbara Kopple una película sobre una gira de conciertos de la New Orleans Jazz Band, grupo musical donde forma precisamente el polifacético Woody Allen en el clarinete. “Wild man blues”, título del film, realiza un recorrido pormenorizado por 18 de las ciudades europeas (Venecia, París, Madrid, Roma y Viena, entre otras) que, en 1996, fueron objeto de visita por parte de esta banda habitual del Café Carlyle y el pub Michael’s de Manhattan.En el momento de este acontecimiento habían transcurrido diecisiete años desde que el cineasta Allan Stewart Konigsberg, bautizado Woody Allen hace ahora cuarenta y nueve, reflejó en decálogo de ficción para su obra “Manhattan”, las razones por las que era conveniente perpetuarse. Así, entre Groucho, Flaubert, la cara de Tracey (Mariel Hemmingway), Cézanne y algunas certezas más, citaba el guionista Ike Davis (Woody Allen) la aprobación a aquella fascinante grabación de “Potatohead blues”, materializada por el trompetista y compositor Louis Armstrong.“Wild man blues” se adentra, además, en la vida privada de Woody Allen, haciendo evidentes sus obsesiones, su pasión por la música e, incluso, su relación con Soon-Yi Previn, tras la ruptura con su madrastra Mia Farrow. Un Allen íntimo retratado en profundidad por una de las documentalistas jóvenes más experimentadas de Estados Unidos. De ello existen pruebas en sus trabajos “Harlan Country USA”, “American dream” y “The untold story of Mike Tyson”, siendo por esta última por la que recibió en 1994 el premio al mejor documental en el certamen “Directors Guild of America”.La fotografía es del prestigioso Tom Hurwitz (responsable, entre otras películas, de la plástica de “Persecución infernal”, de 1986, “La huida de los 10 millones de dólares”, de 1991, o la más reciente “The source”, de 1999) y el reparto actoral, que encabeza Woody allen, alberga presencias como las de Dan Barrett, Simon Wetthenhal, Cynthia Sayer y John Gill, este último con papeles casi protagónicos en “Al caer la noche”, de Karol Reisz, y “Amigos

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hasta la muerte”, de George Seaton, realizadas respectivamente en 1964 y 1973.

“WILD MAN BLUES” (1997)Realización: Barbara KoppleIntérpretes: Woody Allen, Dan Barrett, Simon Wettenhall, John Gill, Cynthia Sayer.Fotografía: Tom HurwitzMúsica: Woody Allen & New Orleáns Jazz BandNacionalidad: EE.UU.Duración: 105 minutos

ACORDESY DESACUERDOS 18:00

Dirigir un falso documental en tiempos en los que el cine americano trabaja con fórmulas narrativas y tecnológicas que hagan reales las fantasías (aunque bien podría ser al revés), parece un ejercicio de idénticos resultados; cuando menos, similares. Craso error. De hecho, asumir estas equivalencias, podría ser lo más parecido a no diferenciar el trabajo de un director como Robert Zemeckis, del de Woody Allen. Una buena parte de las películas que ha dirigido el último puede considerarse desde ese punto de vista un curioso ejercicio de estilo que no se permite guiños a la actualidad ni reflexiones desmitificadoras sobre los géneros o sus convenciones, y se conforma con poner en pie un guión en los términos ya habituales en la filmografía de este original, y revolucionario, creador neoyorquino.“Acordes y desacuerdos” es un falso documental en la misma medida que lo fueron “Zelig” (1983) o “Broadway Danny Rose” (1984), y algunos filmes de Orson Welles, Buñuel o el más moderno “El proyecto de la Bruja de Blair”. Para la reconstrucción del peculiar mundo de su protagonista, Emmet Ray (una síntesis de varios de los músicos de jazz a los que Allen más admira: Freddy Keppard, King Oliver, Jelly Roll Morton y, sobre todo, el guitarrista Django Reinhardt), el realizador repone el espíritu de una bohemia que está ya muy lejos de la desafortunada modernidad que nos caracteriza. Y, como en ocasiones anteriores –además de hacerlo en el guión-, Allen permite que la fuerza de su película repose en buena medida en el excelente trabajo de sus dos actores protagónicos: Sean Penn y Samantha Morton.Pese a su juventud –urge decir que ya algo relativa-, el primero es uno de los grandes de la interpretación cinematográfica estadounidense (“Jugando a echar carreras con la luna”, “Pena de muerte”, “La delgada línea roja); la segunda, una prometedora revelación que, en su papel de novia muda de Penn, está espléndida. Y, alrededor de ellos, Uma Thurman (“Pulp fiction”, “Gattaca”, “La verdad sobre perros y gatos”) y Anthony LaPaglia (“Phoenix”, “Nadie está a salvo de Sam”).Más que un homenaje explícito al jazz –género musical que ha sido un elemento fundamental en la gran mayoría de los filmes que jalonan la filmografía de Woody Allen, “Acordes y desacuerdos” es un canto nostálgico a una época y a unos personajes irrepetibles. En opinión del propio director,

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incluso, un homenaje bastardo a los perdedores del filme de Federico Fellini “La Strada”.

“ACORDES Y DESACUERDOS” (1999)Realización y guión: Woody AllenIntérpretes: Sean Penn, Samantha Morton, Uma Thurman, Anthony LaPaglia, Gretchen Mol.Fotografía: Zhao FeiMúsica: Dick HymanNacionalidad: EE.UU.Duración: 95 minutos

OLD MAN BEBO 20:00

La masiva aceptación con la que cuenta en los últimos años la música cubana, no es más que una obviedad. Desde los albores del siglo XX, este inmenso catálogo musical capitaliza la contribución más fecunda de la creación popular de Occidente. Testigo excepcional de su crecimiento en los últimos setenta años, el pianista Ramón “Bebo” Valdés protagoniza esta cinta con la que el realizador Carlos Caracas se alzó en 2008 con el premio al mejor documental en el festival de cine de Tribeca, creado, como ya se sabe, por el actor y director cinematográfico Robert de Niro.Rodada a lo largo de siete años en lugares como Cuba, Suecia, España y Estados Unidos, “Old man Bebo” –título con ciertas resonancias ellingtonianas)- es el resultado de la devoción del realizador Carlos Caracas por la figura de este patriarca de la música cubana. Esta admiración surgió de forma tan espontánea como irrefrenable en el año 2000, con motivo del trabajo que realizaba Caracas como operador de cámara en el rodaje de “Calle 54”, de Fernando Trueba. La película cuenta, precisamente, con abundantes testimonios de este realizador madrileño, así como con amigos de y familiares de Bebo: Amara Portuondo, el ya desaparecido Pío Leyva y su hijo Chucho Valdés, entre otros.“Mi motivación principal”, ha dicho Carlos Caracas, “era sentar a Bebo, decirle aquí delante tiene su vida y accionar el dispositivo de grabación. Sin embargo, cuando comencé a investigar, entendí que esta película ya no era exactamente mía; pertenecía sobre todo a la cultura cubana”. En realidad, “Old man Bebo”, que también se ha proyectado en el prestigioso festival barcelonés In Edit y en la Casa de América, de Madrid, es una estupenda oportunidad para que los incondicionales de este músico, nacido en 1918, descubran qué se esconde tras la exitosa síntesis de jazz, ritmos afrocubanos, boleros y, ocasionalmente, flamenco también avalada por seis grammys latinos y cuatro Premios de la Música, entre otros muchos reconocimientos.Ninguno, por otra parte, es suficiente para este veterano intérprete cubano, cuya importancia viene dada por ser a la vez el decano de la canción cubana de siempre y, paradójicamente, también uno de sus máximos renovadores. Si Miles Davis fue considerado una vez el Picasso del jazz, el equivalente más adecuado del pianista Bebo sería Francis Picabia. Medio siglo después de

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haber registrado en disco la primera descarga de jazz que se recuerda en Cuba, este oriundo de Quivicán, de ……… años de edad, sigue hablando de la fascinación que le producen esos enfrentamientos espontáneos entre músicos, a los que el capricho del lenguaje ha querido llamar jam-sessions en Estados Unidos. Él prefiere hablar, cuando se refiere a sus cosas, de batanga. Y si quieren saber lo que es este explosivo mejunje rítmico, acudan a ver la película. No les defraudará.

“OLD MAN BEBO” (2007)Realización: Carlos CaracasIntérpretes: Bebo Valdés y personajes invitados.Fotografía: Graphic Design, Clara LeónMúsica: Music Rights, Lourdes HernándezNacionalidad: EspañaDuración: 111 minutos

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SECCIÓN JÓVENES VALORES

Jueves, 19 de noviembre a las 20:00Centro Cultural San Juan BautistaConservatorio Arturo SoriaGrupo del Conservatorio “Arturo Soria”

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Viernes, 20 de noviembre a las 20:00Centro Cultural San Juan BautistaTaller de Músicos de MadridCombo Jazznívoros

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Sábado, 21 de noviembre a las 20:00Centro Cultural San Juan BautistaAikú Trío

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Sábado, 21 de noviembre a las 20:00Centro Cultural Príncipe de AsturiasTaller de Músicos de MadridCombo Jazznívoros

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Sábado, 21 de noviembre a las 20:00Centro Cultural La ElipaConservatorio Arturo SoriaGrupo del Conservatorio “Arturo Soria”

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ALUMNOS CONSERVATORIO ARTURO SORIA

Por la edad y por el corto itinerario vivido por estos alumnos del Conservatorio de Arturo Soria, sería difícil que conociéramos su andadura sin espacios como el de Ciudad Lineal Jazz. Sabríamos el resultado si un día les llega el reconocimiento que merecen, pero, sin encuentros como éste, jamás nos enteraríamos del fascinante camino recorrido.

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Ese, sobre todo, es el valor de este concierto, permitiendo que el público disfrute con los balbuceos artísticos de este manojo de artistas en periodo de aprendizaje. Una agrupación de instrumentistas de añada muy reciente que sigue los dictados del momento, pero conociendo también los hallazgos de sus predecesores.

La exhibición de sus valores técnicos –y tienen suficientes- no es el único calibre de su medida. La búsqueda de rincones expresivos, distintos y personales, es la vara para medir su obra incipiente. Este concierto, teniendo en cuenta que es el primero que ofrecen, representa un valeroso ejercicio de independencia por parte de cada uno de los ejecutantes. Y, por encima de todo, el comienzo de una colaboración que, es de esperar, prosiga en el futuro, avalando vinculaciones aún más estrechas con este festival.

COMBO JAZZNÍVOROS

La concepción del jazz de este sexteto mira hacia los repertorios clásicos con un empeño modernizador. Combo Jazznívoros nació hace cuatro años en el Taller de Músicos de Madrid con la intención de hacer que reflexiones musicales procedentes del bebop y el hard bop –ambos estilos dominantes en la historia del jazz- braceasen en un temario al que añaden oficio los vientos de José Siminiani, Tom Ferguson y Marcos Maggi. El formato instrumental gana enteros con la incorporación de una sección rítmica compuesta por David Pestaña en piano, Andrés González en el bajo, y Paco Hernández en la batería.

AIKÚ TRÍO

El nombre de esta banda remite a la salud y a la larga vida, conceptos ambos que baraja este término procedente de la cultura yoruba cuando se traduce al castellano. Madurados en diferentes escenas de Madrid, los tres componentes de Aikú tienen previsto dar, en breve, un salto cualitativo al exterior, a través de una gira de conciertos que les llevará en 2010 por diferentes ciudades de Austria, Bélgica y Suiza. Antes de que eso suceda, el público de Ciudad Lineal tiene la posibilidad de disfrutar del directo de esta banda cuyo alambique sonoro es un reto a la imaginación: en él se mezclan la savia de la música española, la calentura caribeña y las especias cohesionadoras del jazz.

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SECCIÓN INFANTIL (novedad)

Domingo, 22 de noviembre a las 18:00 (de 6 a 16 años)Centro Cultural Príncipe de AsturiasBlues & Funk

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GRUPO SR. SAX

Sr. Sax es un proyecto didáctico con vocación de futuro. Una apuesta por la música, un pasacalles que se dirige el corazón del público infantil y de todas las edades. En la resolución de la idea comparecen cuatro músicos, un actor y una ilustradora, todos ellos con experiencia pedagógica y artística.

El programa de su espectáculo –calculada mezcla de música y teatro, cuyos definitivos ajustes han ultimado los espectadores con su interacción en las representaciones del grupo- da a conocer la actividad de una familia de instrumentos muy conocida en el jazz: los saxofones.

A lo largo de tres cuartos de hora, y con el fin de alcanzar de forma sencilla y divertida una estrecha familiaridad con la historia del saxofón, la audiencia disfruta de juegos sonoros, melodías y estilos muy variados. Música, que partiendo del conocimiento acerca de lo que se cuenta, se abre a la “contaminación” plástica que la ilustradora realiza en directo para complementar la puesta en escena.

“Sr. Sax” es un proyecto didáctico con vocación de futuro. Una apuesta por la música, un pasacalles hasta el corazón del público infantil y de todas las edades.

Lo integran cuatro músicos y un actor; con experiencia pedagógica y artística, sin olvidarnos de la colaboración de nuestra ilustradora.

El programa, calculada mezcla de música y teatro, cuyos últimos ajustes han realizado los propios espectadores con su interacción en las representaciones que venimos realizado, presenta una familia un tanto desconocida: “los saxofones”.

A lo largo de 45 minutos, disfrutarán de juegos sonoros, melodías y estilos musicales variados, al tiempo que se adentrarán de forma sencilla y divertida en la historia del saxofón.

Los integrantes de “Sr. Sax” no solo trabajan aplicando sus energías y conocimientos en algo que les gusta, también logran la sonrisa del público, al mismo tiempo que desarrollan su sensibilidad e imaginación.

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Los músicos y el actor, profesores con una amplia trayectoria profesional, no dejarán que la música y la escena pasen inadvertidas. Nuestra ilustradora pondrá toques de color y creatividad necesarios para concretar la puesta en escena.

Integrantes

Carlos Martínez actor Mariana Potenza saxo soprano Marcelo Peralta saxo altoRoberto Rioja saxo tenorWilly Urrea saxo barítono

Resumen Texto

Sr. Sax lo integran cuatro saxofonistas y un actor con experiencia pedagógica y artística. A lo largo de 45 minutos, el público infantil (4 - 11 años) disfrutará de juegos sonoros y melodías de la música moderna.

El espectáculo, calculada mezcla de música y teatro, presenta una familia un tanto desconocida: “los saxofones”. La ilustradora pondrá toques de color y creatividad a la puesta en escena.

Los integrantes de Sr. Sax aplican sus energías y conocimientos en

lograr la sonrisa del público además de desarrollar su sensibilidad e imaginación.

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CALENDARIO POR FECHAS

CALENDARIO POR FECHAS

SECCIÓN INTERNACIONALPatrocina Seguriber

Venta de entradas el Corte Inglés 902 400 222

Viernes, 13 de noviembre a las 21:00Centro Cultural San Juan BautistaKenny Barron Trío

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Sábado, 14 de noviembre a las 21:00Centro Cultural San Juan BautistaNils Petter Molvaer

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Domingo, 15 de noviembre a las 21:00Centro Cultural San Juan BautistaJohn Scofield

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SECCIÓN JAZZ PARA ESCOLARESSECCIÒN JAZZ EN LA CALLE

Lunes, 16 de noviembre a las 10:00 y a las 11:30Centro Cultural Príncipe de AsturiasGrupo Sr.Sax “Jazzeando”Jazz para escolares (dos pases de 45 minutos)

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Lunes, 16 de noviembre a las 18:00Centro Comercial Alcalá NortePasacalles Dixeland Jazz Band QuintetoJazz en la Calle (dos pases de 45 minutos)

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Martes, 17 de noviembre a las 10:00 y a las 11:30Centro Cultural San Juan BautistaGrupo Sr.Sax “Jazzeando”

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Jazz para escolares (dos pases de 45 minutos)

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Martes, 17 de noviembre a las 18:00Centro Comercial Arturo Soria PlazaPasacalles Dixeland Jazz Band QuintetoJazz en la Calle (dos pases de 45 minutos)

***Miércoles, 18 de noviembre a las 10:00 y a las 11:30Centro Cultural La ElipaGrupo Sr.Sax “Jazzeando”Jazz para escolares (dos pases de 45 minutos)

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Miércoles, 18 de noviembre a las 18:00Centro Comercial Alcalá NortePasacalles Dixeland Jazz Band QuintetoJazz en la Calle (dos pases de 45 minutos)

SECCIÓN JÓVENES VALORES

Jueves, 19 de noviembre a las 20:00Centro Cultural San Juan BautistaConservatorio Arturo SoriaGrupo del “Conservatorio Arturo Soria”***Viernes, 20 de noviembre a las 20:00Centro Cultural San Juan BautistaTaller de Músicos de MadridCombo Jazznívoros***Sábado, 21 de noviembre a las 20:00Centro Cultural San Juan BautistaGrupo Aikú***Sábado, 21 de noviembre a las 20:00Centro Cultural Príncipe de AsturiasTaller de Músicos de MadridCombo Jazznívoros***Sábado, 21 de noviembre a las 20:00Centro Cultural La ElipaConservatorio Arturo SoriaGrupo del “Conservatorio Arturo Soria”***

SECCIÓN CINE

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Viernes, 20 de noviembreAuditorio Carmen LaforetMaratón Cinematográfico

12:00 A sangre fría16:00 Wild man blues.18:00 Acordesy desacuerdos20:00 Old man Bebo

SECCIÓN INFANTIL

Domingo, 22 de noviembre a las 18:00Centro Cultural Príncipe de AsturiasPrimera Línea (Infantil entorno al Jazz 6 – 16 años)Blues & FunkGrupo Sr. Sax

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CIUDADLINEALJAZZ’09 · Web viewLa acuarela en las manos de esta artista nos invita a mimar un instrumento para la música (clarinete) como se hace con una ortografía cuidadosa