Cómo hacer un glaseado desde cero

Escrito por V. L. Hamlin | Traducido por María Marcela Mennucci

Una vez que hayas hecho un glaseado tú misma ya no querrás volver a comprar ese producto en la tienda. Puedes hacer muchas cosas con un glaseado casero. Elegir el color o agregarle frutas, dulces o nueces para lograr diferentes texturas. Puedes darle sabor usando esencias saborizantes que puedes comprar en cualquier tienda de pastelería.

Nivel de dificultad: Fácil

Instrucciones

Necesitarás

1 barra de mantequilla, blanda 2 cdas. de leche 1 cda. de esencia de vainilla 1/2 k. de azúcar impalpable Un tazón grande Batidora eléctrica Colorante comestible (opcional) Cuchara de madera (opcional)

1. Coloca la mantequilla en un tazón grande. Con una batidora eléctrica, bátela hasta que quede suave y cremosa.

2. Añade la leche y la esencia de vainilla a la mantequilla y vuelve a batir durante alrededor de dos minutos o hasta que la leche y la vainilla se hayan incorporado.

3. Agrega la mitad del azúcar impalpable y mezcla bien. Luego agrega el resto y vuelve a mezclar hasta que el glaseado quede bien suave.