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BIBLIOTECA DEL PENSAMIENTO NACIONAL LOS COMPAÑEROS DE RUTA DE LA MASONERIA ¡Camaradas! Veréis en éstos que todos son la misma mugre. EN MEMORIA DEL VIEJO CAMARADA PADRE ALBERTO J. TRIANA LA SEGUNDA PARTE Dedicado a la Venerable Gran Maestro Grado 33º Hermana Cristina Fernández de Kirchner MASONERÍA Y SINARQUÍA Amenazantes amenazadores: como soldado me está vedado teneros miedo sin que sobre mi honra caiga un terrible baldón. Y como cristiano viejo debo deciros que Mi Señor y Su Reino no son de este mundo. Renacuajos de la charca, que con suerte llegaréis a sapos: os digo de corazón que podéis iros al reverendísimo carajo. Socialismo, comunismo y judaísmo: compañeros de ruta de la masonería odos los fundadores de los sistemas socialistas han brotado del seno de la masonería, y las logias siempre han sostenido su propaganda. La masonería inspira, dirige y fiscaliza al izquierdismo militante del que tanto se ufana un granuja como Delía (N. de Serra y Caussa, La masonería al derecho y al revés, Tomo II, pág. 398 y Eduardo Comín Colomer, Lo que España debe a la masonería, pág. 22). El socialismo universal moderno dijo el judío Alfredo Nossig-, forma la primera etapa del sionismo, o sea, del mosaísmo o judaísmo imperialista. Leamos lo que escribió en 1926: El socialismo y el mosaísmo de ninguna manera se oponen, sino por el contrario, entre las ideas fundamentales de ambas doctrinas, hay una conformidad sorprendente. Los judíos han cooperado de una manera decisiva en la creación del socialismo. Fueron judíos los que tuvieron parte preponderante en la dirección de las primeras repúblicas socialistas. El socialismo mundial actual forma la primera etapa del mosaísmo, el principio de la realización del estado futuro del mundo (…) Cuando una Liga de Naciones esté compenetrada del espíritu socialista entonces nos será posible el goce de nuestras necesidades internacionales (…) Por eso es por lo que todos los judíos tienen interés vital en la victoria del socialismo, la que deben exigir, no sólo por principio y por su identidad con el mosaísmo sino también por principio de táctica (…) El mosaísmo es el socialismo, libre de las utopías y del terror del comunismo y del ascetismo cristiano (Walter Degreff, Judiadas y Alfredo Nossig, El Judaísmo integral, Ed. 1926). Hilaire Belloc en su libro The Jews, sostiene que antes de la Gran Guerra de 1914 el movimiento socialista en el mundo, en casi su totalidad, era controlado por los judíos. La revolución rusa fue obra de la masonería judía, y hoy en día una pequeña oligarquía judía ejerce la dirección de la masonería universal (Hilaire Belloc, The Jews, pp. 52 y 175). Los masones de Lieja afirmaron que las logias masónicas han suministrado a la Internacional Roja los primeros cuadros de sus hombres. Actualmente casi todos sus dirigentes son masones. T

Companeros Ruta

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  • BIBLIOTECA DEL PENSAMIENTO NACIONAL

    LOS COMPAEROS DE RUTA

    DE LA MASONERIA

    Camaradas! Veris en stos que todos son la misma mugre.

    EN MEMORIA DEL VIEJO CAMARADA PADRE ALBERTO J. TRIANA

    LA SEGUNDA PARTE

    Dedicado a la Venerable Gran Maestro Grado 33 Hermana Cristina Fernndez de Kirchner

    MASONERA Y SINARQUA

    Amenazantes amenazadores: como soldado me est vedado teneros miedo sin que sobre mi honra caiga un terrible baldn. Y como cristiano viejo debo deciros que Mi Seor y Su Reino no son de este mundo. Renacuajos de la charca, que con suerte

    llegaris a sapos: os digo de corazn que podis iros al reverendsimo carajo.

    Socialismo, comunismo y judasmo: compaeros de ruta de la masonera

    odos los fundadores de los sistemas socialistas han brotado del seno de la masonera, y las logias siempre han sostenido su propaganda. La masonera

    inspira, dirige y fiscaliza al izquierdismo militante del que tanto se ufana un granuja como Dela (N. de Serra y Caussa, La masonera al derecho y al revs, Tomo II, pg. 398 y Eduardo Comn Colomer, Lo que Espaa debe a la masonera, pg. 22).

    El socialismo universal moderno dijo el judo Alfredo Nossig-, forma la primera etapa del sionismo, o sea, del mosasmo o judasmo imperialista. Leamos lo que escribi en 1926: El socialismo y el mosasmo de ninguna manera se oponen, sino por el contrario, entre las ideas fundamentales de ambas doctrinas, hay una conformidad sorprendente. Los judos han cooperado de una manera decisiva en la creacin del socialismo. Fueron judos los que tuvieron parte preponderante en la direccin de las primeras repblicas socialistas. El socialismo mundial actual forma la primera etapa del mosasmo, el principio de la realizacin del estado futuro del mundo () Cuando una Liga de Naciones est compenetrada del espritu socialista entonces nos ser posible el goce de nuestras necesidades internacionales () Por eso es por lo que todos los judos tienen inters vital en la victoria del socialismo, la que deben exigir, no slo por principio y por su identidad con el mosasmo sino tambin por principio de tctica () El mosasmo es el socialismo, libre de las utopas y del terror del comunismo y del ascetismo cristiano (Walter Degreff, Judiadas y Alfredo Nossig, El Judasmo integral, Ed. 1926).

    Hilaire Belloc en su libro The Jews, sostiene que antes de la Gran Guerra de 1914 el movimiento socialista en el mundo, en casi su totalidad, era controlado por los judos. La revolucin rusa fue obra de la masonera juda, y hoy en da una pequea oligarqua juda ejerce la direccin de la masonera universal (Hilaire Belloc, The Jews, pp. 52 y 175).

    Los masones de Lieja afirmaron que las logias masnicas han suministrado a la Internacional Roja los primeros cuadros de sus hombres. Actualmente casi todos sus dirigentes son masones.

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  • En 1847 en el Congreso de Saintes se dijo: La masonera tiene por fin el socialismo, y por medio, la revolucin; por eso siempre presta apoyo a toda asociacin que tenga por finalidad la destruccin de la propiedad, la revolucin social y la guerra al cristianismo. He aqu el motivo por el que yo les he declarado la guerra.

    Masones y judos, pero no obreros, fueron los jefes doctrinarios del socialismo y comunismo, a saber: desde Carlos Marx, Fernando Lasalle, Federico Engels, Hetzen, Kamenef, hasta Lenn, Stalin y Nikita Kruschev (ms conocido como Salomn Jruschevski en el ghetto de Mosc). Y masones sus primeros jefes, sus legisladores, sus dirigentes y sus sostenedores. Tales masones fundaron, en 1850, la Unin Internacional de Obreros (que justamente lo que no tenan eran obreros) que, en 1873, se divide en social-colectivista o marxista y social-anarquista, con Marx y Bakunn a la cabeza.

    Los ya mencionados, incluido Stalin y otros, haban sido venerables maestres en las logias de Londres, Pars, Berln, Hamburgo, Ginebra, Lausana, etc. Pero todas actuando bajo la matriz inglesa. Porque ha de saberse que todo libertador que se precie de tal debe salir de Londres. Desde el delincuente venezolano Miranda, hasta Ghandi y el Ayatolh Komeini y sigue la lista infernal hasta que se acabe la resma. De donde digo que Londres es un poco la madre de todos, o no es as muchachos?

    En el Boletn de la A. M. I. (Asociacin Masnica Internacional) de julio-septiembre de 1931, se hallan estas frases en referencia a la repblica espaola recientemente implantada por el comunismo y la masonera: Se sabe la parte cada vez mayor que las logias han tomado en el colectivismo () El Gobierno Espaol no podra oponerse a las propagandas revolucionarias () El resultado ineludible es la formacin progresiva de un frente comunista en Espaa ()

    El socialismo y el comunismo, por sus doctrinas y por sus hombres, son hechuras de la masonera. Lo que es la masonera en la Alta Poltica, es el marxismo en el terreno econmico-social. Ergo: cul es la diferencia entre Martnez de Hoz y Santucho? Muy sencillo: el color de ojos. Y entre Alfonsn y Gorriarn Merlo? Ms fcil todava: uno era pelado y el otro no. No muchachos, no. A m no me van a vender esta verdurita.

    De la Declaracin de la Internacional de los Trabajadores (donde no haba trabajadores y s una caterva de intelectuales burgueses sibaritas y judaizantes), suscrita en Ginebra en 1868, es esta frase netamente masnica: La consigna de nuestra gran cruzada es: Abajo Dios, abajo Cristo, mueran los sacerdotes! Claro est, que esto es viejo, porque hoy existe un buen socotroco de curas que son peores que Lucifer en chancletas.

    Deca el masn Hollaender en abril de 1905 en Budapest: Socialismo y masonera no solamente no se excluyen mutuamente, sino que son idnticos en su finalidad: nicamente se valen de medios distintos para alcanzar el mismo fin. La judeo-masonera se vale de la Alta Finanza (Banca Morgan, FMI, etc.), de la Alta Poltica (CFR norteamericano, RIIA inglesa), de la Prensa Mundial (para nosotros diarios Clarn, La Nacin y La Prensa); el marxismo socialista-comunista se vale de la Revolucin en lo social y econmico contra la patria, la moral y la religin (Fray Justo Pacfico, El gobierno universal, pg. 33).

    Los masones cumplen el plan con medios secretamente subversivos; los marxistas lo cumplen con medios abiertamente subversivos. La masonera mueve a las minoras polticas sectarias; el comunismo se apoya en una poltica de masas, explotando hbilmente los anhelos de justicia social (J. Boor, Masonera, pg. 11, Ed. 1952).

    Son actualmente enemigos, pero se unen accidentalmente, como Herodes y Pilatos, cuando se trata de crucificar a Cristo; o se interesan ambos en el Nio (el pueblo), para luego degollarlo en Beln.

  • Siempre que le conviene, la masonera pacta con los dirigentes liberales y comunistas (hoy ocultos bajo el eufemismo de progresistas, porque les da vergenza decir lo que verdaderamente son); por otra parte, en los puestos ocultos de la alta direccin masnico-liberal o comunista, existe perfecto acuerdo en los fines supremos de esta terna satnica.

    El distinguido militar chileno, Coronel Caupolicn Claver Dinator, al romper con las logias declar: La masonera defiende tanto al capitalismo internacional como al comunismo anrquico, agentes destructores de nuestra nacionalidad.

    En la historia del presente siglo, numerosos son los episodios en que la internacional masnica y la internacional comunista han actuado en estrecho acuerdo. En Amrica hemos visto y seguimos viendo a ambas fuerzas creando los mismos slogans disgregadores y asumiendo las mismas actitudes polticas circunstanciales. Y no estar de ms recordar que, en el caso de nuestro pas, siempre han integrado un frente nico en sus campaas laicistas, en sus uniones democrticas con fines polticos, en el copamiento novembrino de la involucin libertadora, en su asalto cultural a la cultura en los peridicos, radios, televisin, docencia primaria, secundaria y universitaria, y en su interpretacin liberal de nues-tro proceso histrico, digamos que a lo profesor Pigna o Garca Hamilton (los historiadores del progresismo), sin olvidarnos del chapetute Lanata: de periodista mediocre a historiador resonante.

    Vzquez de Mella deca: Si me preguntis qu peligro es el mayor: el marxismo o la masonera, os responder sin vacilar que ambas cosas no son sino una misma tea encendida por el judasmo para acabar con la cristiandad.

    La masonera allan el camino para que penetrasen el liberalismo, el anarquismo, el socialismo, el comunismo y otras lepras sociales. Su hipocresa, su malicia y su trabajo en la sombra han sido cien veces ms peligrosos que los ataques violentos y a plena luz llevados a cabo por el marxismo virulento, aunque naturalmente estimulan a las defensas en el Pueblo.

    En 1930 la Asamblea General o Convento del Gran Oriente de Francia declar que el advenimiento de un mundo socialista, en el sentido amplio de estos trminos, es una obra en la cual est interesada la inmensa mayora de la humanidad (Carlos Saint-Pierre, La masonera en el Parlamento, pg. 11, Ed. Pars, 1956).

    O sea, los gobiernos socialistas, propiciados hoy da por la masonera en los pases no dominados por lo que antes era el comunismo desembozado, sern la preparacin prxima del advenimiento del gobierno comunista en su alianza satnica con el judasmo masnico, acelerando as la inauguracin del reinado del Anticristo en el mundo.

    La masonera es la secta que mejor aprovecha la susceptibilidad que en la opinin pblica provocan el judasmo y el comunismo, siendo en su comparacin la ms organizada y poderosa.

    En el Boletn N 25 del Supremo Consejo de la Masonera de Francia se hallan publicadas las conclusiones a que lleg el Gran Captulo de la Orden, en septiembre de 1946 (pleno reinado del Coronel De Gaulle, otro libertador salido de Londres; y es Coronel porque es el grado con que consum la desercin del Ejrcito Francs), sobre las relaciones entre la masonera y el marxismo, expuestas por el Hermano Pablo Ghevalier, Gran Maestre del Gran Oriente de Francia y mano derecha de De Gaulle para la perpetracin de todo tipo de asesinatos.

    Deca Chevalier: La doctrina de la felicidad despus de la muerte es doctrina de esclavos, doctrina de vencidos, doctrina de desesperados o al menos de pesimistas. Marxistas y masones, por lo mismo que quieren la felicidad terrestre, atestiguan su optimismo y muestran su confianza en la vida (...) El hombre libre es el que puede desenvolverse sin trabas, que puede satisfacer las aspiraciones profundas de su carne y de su alma () (He aqu expuesta crudamente la doctrina materialista, naturalista, atea y desconocedora de lo sobrenatural, comn a

  • socialistas, liberales, laicistas, comunistas y masones). El marxismo y la masonera -continu el orador-, tienen el ideal comn de la felicidad terrestre; pero, mientras el marxismo se ocupa de organizar la sociedad adaptndola a las necesidades econmicas, la masonera se ocupa de llevar al alma humana a su perfeccin () El marxista en su apostolado -se pregunta Chevalier- chocar acaso con el francmasn? Imposible! Para que su sistema social sea viable necesita hombres que posean las cualidades que cultiva la masonera. Si la francmasonera no existiera, el marxismo tendra que inventarla. Un marxista puede ser un perfecto masn. Si no lo es, debe comportarse como si lo fuera. Un francmasn puede aceptar enteramente las concepciones filosficas del marxismo. Ningn conflicto es posible entre los principios filosficos del marxismo y de la masonera (La Documentacin Catlica del 21 de septiembre de 1952).

    De donde concluyo yo, de puro metido: que a un masn nada le falta para ser un marxista y todo marxista se completa -como hombre perfecto- si acepta el ideal

    masnico. Y ahora que estoy en este trance que ni yo me aguanto, le recuero al amable lector, que las bandas de delincuentes terroristas (particularmente ERP y Montoneros), tenan estructura masnica, con juramentos, pactos de sangre, nombres de guerra incluidos, organigramas celulares, logias, traslogias y aerpagos. No digo que fuesen masones, pero de algn lado sacaron esta forma de organizacin, por dems caracterstica. Entiende ahora el lector por qu nunca sern investigados? Y menos por el Hermano Kirchner ni por la Hermana Cristina! Jams! A ver si algn nabo se abatata, empieza a deschavar y nos cuenta la verdad de la milanesa hedionda!

    El progresismo (liberales decimonnicos + marxistas de iconoclastas), que conforma la base de los partidos polticos de esta castigada Hispanoamrica, marcha hacia la conquista del poder de los estados del brazo de la masonera. Ambas organizaciones secretas por sus orgenes y por las directivas que las motorizan en su accin poltico-social, cumplen hoy con un plan perfectamente previsto por sus comandos; plan que va desde el apoyo directo a los totalitarismos modelo del sin vergenza Chvez, llegando hasta gobiernos rotulados de liberales, como el del anacoreta lvaro Uribe o del canalla Alan Garca.

    Los comunistas, desde los albores de su militancia subversiva, siempre han estado apoyados por sectores masnicos (lanse al respecto Comunismo y Judaismo, de Esteban J. Malanni y Masonera, Revolucin y Repblica mundiales, de Wichtl). En Baviera todos los dirigentes de la revolucin comunista pertenecan a las logias de los judos masones. Los Hermanos Lenn y Trotzky fueron homenajeados en la Logia Jean Jaurs en 1917 por el Hermano Rozires.

    A pesar de que la Tercera Internacional, fundada en Mosc en marzo de 1919, conden a la masonera como reducto burgus -no se sabe con qu sinceridad, porque el origen del marxismo es burgueses, como burgueses fueron Marx y Engels-, sin embargo, los comunistas se siguen sirviendo de ella como puente para introducirse en los partidos liberales y conservadores (todos hijos de la decadencia) y, desde dentro, trabajar por la simpata, hacia el marxismo, de sus masas afiliadas.

    El pensamiento masnico universal ha seguido proyectndose a travs del liberalismo, del socialismo y del comunismo, y se es el vnculo comn que los une contra la sociedad cristiana, las fuerzas armadas y el Estado.

    La minora juda conspiradora

    l judasmo no son los quince millones de israelitas que dicen integran hoy el pueblo hebreo, sino tan slo esa minora juda conspiradora que se sirve de la

    masonera como uno de sus instrumentos.

    En Chicago se halla la sede central de las 550 logias masnicas estrictamente judas, llamadas Bnei Brith, que quiere decir Hijos de la Alianza, fundadas en 1843. Tras de estas logias est el Gran Kahal de Nueva York con sus filiales (14 logias en

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  • Argentina tradas por Jacobo Timerman en 1959, bajo el gobierno del criptojudo Frondizi), y el Comit Judo de Amrica, que constituyen el poder ejecutivo internacional de Israel y del mundo. La Bnei Brith es la logia masnica juda que desde Estados Unidos controla el movimiento revolucionario mundial. Adems, el rito masnico de Misram es una creacin netamente juda y la Alianza Israelita Universal, fundada en 1860, agrupa a todos los masones escogidos del mundo entero, formando el senado (sanedrn) masnico internacional de los judos (Len de Poncis, op. cit., pg. 117 y E. Cahill, Masonera y los movimientos anticristianos, pg. 85, Dubln, 2 Ed. 1952).

    Ellos, por medio del capitalismo, se apoderaron de las riquezas de todos los pueblos; luego, con el liberalismo y el socialismo, los envenenaron, pervirtiendo su inteligencia y corrompiendo su corazn; y, finalmente, con el comunismo, hoy aletargado pero no muerto, pretenden exterminar a sus opositores y sujetar a los cristianos al yugo de esclavos, imposible de sacudir. Se sirven del capitalismo para robar a los cristianos lo que poseen, y del socialismo para envenenar a los que no poseen y establecer la lucha de clases, dividiendo el mundo en dos bandos irreconciliables a fin de medrar en la contienda (Padre Julio Meinvielle, El Judo, pp. 114 y 123, Buenos Aires 1936).

    De esta manera, masones y judos matan a los pueblos cristianos bajo la apariencia de que los salvan; los esclavizan bajo pretexto de la libertad, los odian bajo el pretexto de la fraternidad, los tiranizan bajo pretexto de la democracia, los roban bajo pretexto de la ilustracin. Judazan y masonizan a los ricos con el liberalismo, y a los pobres con el socialismo, logrando el desprecio hacia el catolicismo hasta arrinconarlo en un ghetto. As os digo que no est lejano el da en que volvamos a celebrar la Santa Misa en las catacumbas, lo que ser posible merced a la caterva insondable de curas atorrantes que tenemos.

    El judo Cohen seala en sus escritos esta sorprendente armona entre el capitalismo judo internacional y el comunismo; y Jorge Batault explica en esta forma el proceso: Cuando la lucha se desencadena bajo formas violentas, los cabecillas masones son reyes, pero el dinero es Dios; los demagogos son dueos de las pasiones de la turba, pero los banqueros son dueos de los demagogos, y las riquezas del pas costean los gastos del movimiento, filtrndose a travs de los emprstitos (de libras y dlares de la Banca Internacional Juda que domina a las grandes potencias hegemnicas del mundo) () Cuando los demagogos prosperan en medio de las ruinas del orden poltico, social y econmico, el oro es la nica potencia que queda, y reina en detrimento de la nacin que est finalmente arruinada; pero (los judos masones prestamistas) se salvan del derrumbe porque sus dineros son internacionales (Jorge Batault, El problema judo, pg. 257, Ed. 1921).

    Los judos y masones, disfrazados de nosotros, confiesan que ellos predican la repblica, la soberana popular y el sufragio universal cabalmente para poder ms fcilmente asumir el poder y tener el campo libre para obrar.

    Los judos no son trabajadores ni productores sino tan slo financistas y prestamistas internacionales. Logran sus riquezas no por la produccin sino por la explotacin de los dems, que para ellos trabajan utilizando sus emprstitos. Las guerras y las revoluciones son las pinges cosechas del judo.

    En 1909 escriba el masn convertido Pablo Copn-Albancelli: Los pueblos trabajan para los judos que un da les dirn: El Estado que todo lo posee no es vuestro. Entonces el pueblo querr resistir pero ser tarde () Francia conoci el rgimen del terror masnico y no lo olvid, conocer el rgimen del terror judo y con ella lo conocer el mundo () Y, en efecto, al poco tiempo de pronunciadas estas fatdicas palabras el mundo hizo experiencia de ambos terrores, en el terror rojo sovitico (Len de Poncis, op. cit., pg. 450).

  • Deca el judo D'Israeli: (Parece increble y paradjico, pero es as); el pueblo de Dios coopera con los atestas: los acaparadores ms ardientes de la propiedad se unen con los comunistas; y la raza escogida va de la mano con la escoria de las castas inferiores de Europa () Y eso porque quieren destruir esta Cristiandad que hasta el nombre les debe, pero cuya tirana no pueden soportar por ms tiempo (Len de Poncis, op. cit., pg. 133).

    La conspiracin judeomasnico-social-comunista

    i bien la masonera y el comunismo coinciden en la misma negacin absoluta de Cristo, de su Iglesia y del orden catlico, divergen en cuanto al poder temporal

    al cual obedecen y sirven; pero con el socialismo son los cmplices auxiliares que necesita el judasmo internacional para cumplir su plan de Gobierno Universal. Por eso es muy difcil que un socialista no sea masn; pero no siempre un masn es socialista, porque los hay liberales, cratas y bellacos y, simulando que trabajan en compartimentos estancos, separados lo hacen mancomunadamente, porque la cabeza de todas las masoneras es una sola.

    Aadamos a lo que ya conocemos, las siguientes coincidencias de pensamiento y accin judeomasnico-comunistas.

    Los socialistas belgas decan en su congreso general: Declaramos guerra a muerte al derecho divino, al capital, a la Iglesia, al Estado, en una palabra, a todas las manifestaciones de la vida social presente () Maldecimos la idea de Dios; y mientras viva un sacerdote seremos siempre esclavos. Luego en el congreso de Lausana vociferaban: Guerra al capital, a la propiedad y a los gobiernos que la protegen y a los ejrcitos que nos acuchillan. Repudiamos la Patria, porque todos somos hermanos. La sociedad es nuestra enemiga.

    El Premier ruso Nkita Kruschev (el judo Salomn para los ntimos), deca el 22 de noviembre de 1957 al periodista norteamericano William R. Hearst que lo entrevist en Mosc: Nosotros somos ateos. Juzgamos que la creencia en Dios contradice nuestras perspectivas comunistas. Dios es invocado a veces como un camuflage o disfraz para engaar al pueblo. Y al ao siguiente, en la reunin del Soviet Supremo se expres as: Nuestro partido siempre ha tomado y toma tambin ahora una actitud de atesmo militante y de lucha ideolgica e irreconciliable contra el narctico de la religin, que es l opio del pueblo (N. de Serra y Caussa, op. cit., Tomo II, pg. 410 y diario El Pueblo del 2 de octubre de 1959)

    El declogo de la Alianza Juvenil o cosmopolita -asociacin de jvenes de 15 a 25 aos-, dice as: Los sacerdotes son los ms grandes enemigos del pueblo. Stalin es el lder de los ateos de todo el mundo. Debemos propagar la literatura atea conjuntamente con la pornogrfica, combatir el elemento religioso y huir del contacto con el clero. El atesmo est indisolublemente ligado al destin del comunismo.

    Deca el judo masn Burich Lev en carta a Carlos Marx (el judo Mordechai Kissel en el ghetto de Trevis): El pueblo judo alcanzar su dominio en el mundo especialmente si consigue someter, bajo la mano de uno de ellos, a las masas obreras; porque entonces todos los gobiernos de las naciones, que formarn la Repblica Mundial, pasarn sin esfuerzo a manos judas, gracias al triunfo del proletariado. Segn dice el Talmud (libro sagrado de los judos -forjador de su alma y creador de su nacin-, que contiene, en su reforma del ao 1500, las explicaciones rabnicas ms famosas de la Ley, Biblia o Torah, impregnadas de anticristianismo): Dios ha dado poder a los judos sobre los bienes y la sangre de todas las naciones.

    Y en realidad lo consiguieron con los judos masones Kerensky, Litvinov, Trotzky, Lenn (de madre juda y casado con una juda, hizo editar dos diarios: uno en ruso y el otro en yiddish; y de su lado no se mova ni un tranco de pollo su suegro, tambin judo), Radek, y un largsimo etctera, segn lo aseguro en Nueva York, en

    S

  • 1917, el judo Hermaln: La revolucin rusadijo- es obra de los judos. Nosotros hemos formado las sociedades secretas y preparbamos el camino.

    Lo mismo manifestar el judo M. Kohen el 12 de abril de 1919: La gran revolucin rusa afirm-, ha sido obra de los judos; y ellos no solo han manejado el asunto, sino que han tomado la causa de los soviet en sus manos.

    El Cardenal Verga Goglio bendice los conos del Rito Umbanda junto

    con la muchachada del paganismo sin abuela. Ahora falta que lo inviten a Callao 1242 si es

    que no anda ya golpeando las velas.

    EDICIONES DEL ILUSTRE RESTAURADOR

    General y Virrey Santiago de Liniers y Bremont: dio testimonio de su amor por la Patria.