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CONTENIDO - Arqueozoología.México, Blog · Eleccion de Fotografia para la portada del libro, integrado por el M. en C. Mario Segura ... CAPiTULO V: ENSENANZA DE LA ETNOBIOLOGIA

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Editores a cargo: Angel Moreno Fuentes Maria Teresa Pulido Silva Ram6n Mariaca Mendez Raul Valadez AzUa Paulina Mejia Correa Tania V. Gutierrez Santillan

Colaboracion Especial: Sandra E. Montano Campos

Fotograjla portada: Rafael Tezka Gonzalez

Primera edici6n: 20ID

D.R. ©20ID Asociaci6n Etnobiol6gica Mexicana, A. C. Global Diversity Foundation Universidad Aut6noma del Estado de Hidalgo El Colegio de la Frontera Sur Sociedad Latinoarnericana de Etnobiologia ISBN 978-607-482-095-9 Hecho en America Latina y editado e impreso en Me.r:ico.

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AGRADECIMIENTOS

Los compiladores y editores del libro, agradecen al Comite Cientifico de los Congresos: I Latinoamericano y VII Mexicano de Etnobiologia, cuya presidencia estuvo a cargo de la M. en C. Abigail Aguilar Contreras [Instituto Mexicano del Seguro Social]; asimismo, al Comite de Eleccion de Fotografia para la portada del libro, integrado por el M. en C. Mario Segura Almaraz, la Dra. Graciela Gomez Alvarez, el M. en C. Armando Gomez Campos, el M. en Fotografia Enrique Santoyo y el BioI. Noe Pacheco Coronel. Asi mismo a la Dra. Claudia Hornung Leoni y al Dr. Numa P. Pavon Hernandez.

A la BioI. Blanca Garcia Barrera [Universidad Autonoma del Estado de Mexico], por haber apoyado en la organizacion y sistematizacion de los distintos trabajos, en la etapa de preedicion.

A la BioI. Nallely Hernandez Rico [Universidad Autonoma del Estado de Hidalgo]; asimismo, ala P. de BioI. Talia Sanchez Barbosa [Universidad Nacional Autonoma de Mexico] y a Jorge Betanzos Montesinos [UNAM], por su apoyo en los momentos iniciales de la edicion.

CONTENIDO

PRESENTACION )"-vii

PROLOGO xi.x

CAPITULO I: CLASIFICACION

Dimensao cognitiva, afetiva e comportamental da intera9ao dos seres humanos com as lagartas 3 (Insecta: Lepidoptera) no municipio de Feira de Santana, Bahia, Brasil.

Eraldo Medeiros Costa-Neto y Juliana Nascimento Andrade

Conocimiento etno-medico tlapaneco en El Aserradero, municipio de Iliatenco, Guerrero, Mexico. Clltberto Pacheco Flores. Marisa Silva Aparicio y Adriana E. Castro Ramirez

CAPITULO II: CONSERVACION

Registro dos usos culturais de esponjas (Animalia Porifera) no Brasil e no mundo. Loyana Docio Santos y Eraldo Medeiros Costa-Neto

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Uso artesanal, fenologia y cosecha optima de la palma Brahea dulcis (Kunth) Mart. en el estado de 24 Hidalgo, Mexico.

Mayte Coronel Ortega y Maria Teresa Pulido Silva

Fortalecimiento de areas de conservacion comunitarias e indigenas a traves de la etnobiologia. 30 Claudia I. Camacho Benavides, J. Gmy Martin y Carlos A. Del Campo Garcia

Estudio para la conservacion de las plantas titiles de las Terrazas Costeras de la Reserva de la Biosfera 36 Baconao, Santiago de Cuba, Cuba.

Luz Margarita Figueredo Cardona, Gustavo Polanco Duran y Yenisey Revilla Gongora

El agroecosistema tradicional de agaves mezcaleros del sur de Jalisco, Mexico: lma estrategia de manejo y 41 conservacion.

Jeslls Juan Rosales Adame, JyJaria Guadalupe Puerto Soto, Ofelia Vargas Ponce, Ana Laura Pl1Idencio Guerrero, Judith Cevallos Espinosa, Patricia Colunga Garcia-Marin y Daniel Zizumbo Villareal

Jardin de plantas medicinales de la region de la montana de Guerrero, Mexico. 47 Marisa Silva Aparicio, Clara I Sabas Soto, Juana Calleja Feliciano, Ivan Moran Hel7landez y Tania Martinez

Bello

CAPITULO III: COSMOVISION 55

La construccion social del xoloitzcuintle modemo. 56 Marco Antonio Hernandez Escampa-Abarca

Percepcion local de la actividad del murcielago hemat6fago Desmodlls rotllndlls en el municipio de Santa 64 Ines Ahuatempan, Puebla, Mexico.

Eunice Cuautie Hernandez y Gonzalo Yanes Gomez

xi

EI jaguar (Panthera onea Linnaeus, 1758) y la fertilidad en la pintura mural de Cacaxtla, Tlaxcala, Mexico.

Fernando Guerrero Martinez

Cosmos, corpus y praxis: estudio comparativo entre nahuas y otomies del estado de Hidalgo, Mexico: el caso del "camale6n" .

Tania V. Gutierrez-Santillan, Angel Moreno-Fuentes e Irene Goyenechea Mayer-Goyenechea

Petici6n de la lluvia por los tu'un savi de Y osondacua del Carmen, municipio de Cochoapa el Grande, Guerrero, Mexico.

Guadalupe Martinez Garcia

Percepci6n acerca de las lagartijas consideradas nocivas par algunos otomies, nahuas, tepehuas y mestizos en el estado de Hidalgo, Mexico.

Maria Arely Penguilly Macias, Angel Moreno Fuentes, Irene Goyenechea Mayer-Goyenechea y Gabriel Espinosa Pineda

CAPiTULO IV: DOMESTICACION

Avances en el estudio de los huertos familiares del sur de Mexico. Ramon Mariaca Mendez, Maria del Carmen Alvarez Avila, Luis Manuel Arias Reyes, Diana Cahuich-Campos, Alba

Gonzalez Jacome, Marco Antonio Vasquez Davila y Hans van del' Wal

Centro-oeste de Mexico, lugar de origen de los cultivares de la nochebuena (Euphorbia puleherrima Willd. ex Klotzsch).

Laura Trejo, Mark E. Olson y V. Baruch Arroyo-Peiia

CAPiTULO V: ENSENANZA DE LA ETNOBIOLOGIA

Una aproximaci6n a la situaci6n actual de la enseiianza de la etnobiologia en el nive1 superior en Mexico. Rafael Monroy y Juan Manuel Rodriguez Chavez

La enseiianza de la etnobiologia en America Central. Anibal Martinez Muiioz

Perspectivas de la enseiianza de la etnobiologia en el entendimiento del manejo tradicional de los recurs os naturales.

Jose Salvador Flores

Etnobiologia e ensino de biologia: uma conjun~ao que demanda forma~ao docente. Geilsa Costa Santos Baptista

La conservaci6n in situ del conocimiento ambiental pjiekakjoo (tlahuica) a traves de actividades tecnico­pedag6gicas.

Elda Miriam Aldasoro Maya y Blanca Rosa Maya GOllZalez

Exposiciones etnobiol6gicas como propuesta pedag6gica. Rafael Tezka Serrano-Gonzalez

Propuesta de diseiio de un jardin etnobotanico en un espacio verde de un conglomerado urbano en Argentina.

Gustavo A. Villalba, H. G. Rosatto, D. A. Perez, D. A. Laureda y F. Vilella

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d ios alternativos de interaprendizaje y aprendizaje cooperativo en etnobiologia en Peru. Crean 0 espac , d ' d I A' 19e1es La Torre-Cuadros y Mana del Carmen La Ton'e Cua ros Mana e os I

- za de la etnobiologia desde la perspectiva de la antropologia. Ens

enan 'I V. I d A' .li d' h Z 't Diana Martinez, Gilberto Perez, Rocio Tellez, Rau a a ez zua y u It un a

CAPITULO VI: ETNOBIOLOGIA TEOruCA

EI proceso cognitivo: un punto de vista etnobotaruco. Montserrat Gispert Cruells

Etapas importantes en el desarrollo de la etnomicologia mexicana. Teojilo Herrera

La investigaci6n etnoentomo16gica: registro, anaIisis y valoraci6n de los saberes y costumbres tradicionales.

Eraldo Medeiros Costa-Neto

La etnoecologia: una ciencia post-normal que estudia las sabidurias tradicionales. Victor M. Toledo y Narciso Barrera-Bassols

CAPiTULO VII: ETNOBIOLOGIA APLICADA

La arqueozoologia y el beneficio del estudio de 10 antiguo. Razil Valadez AZl;a

Productos forestales no maderables: consideraciones sobre su dimensi6n econ6mica. Maria Teresa Pulido Silva, Martha S. Gonzalez, Paul Hersch Martinez, Catarina I/lsley, Citlalli Lopez y Fernando

Ramirez

Temporalidad y apropiaci6n de los arboles del tr6pico seco, un estudio de caso. Ines Ayala y Rafael Monroy

Bases bioculturales para el aprovechamiento y conservaci6n de los hongos silvestres comestibles en el municipio de Tenango de Doria, Hidalgo, Mexico. ,

Eji-ain Bautista-Nava, Angel Moreno-Fuentes, Ma. Teresa Pulido Silva, Raul Valadez-Azua yR. Avila Pozos

Uso tradicional de los vertebrados terrestres en dos comunidades zapotecas del Istrno de Tehuantepec, Oaxaca, Mexico.

Jorge Adrian Chavez Ruiz y Graciela Gomez Alvarez

Los huertos familiares mixtos en los altos de Marelos, Mexico: una alternativa frente a la pobreza y escasez de agua.

Hortensia Colin, Andrea Hernandez y Rafael Monroy

Conocimiento y usa mastofaunistico en una regi6n de la Chinantla alta de Oaxaca, Mexico. Rusby Guadalupe Contreras-Diaz y Martin Perez-Lustre

Tratamento de conjuntivite com entomoterapicos: atividade antimicrobiana comprobada. Jaqueline Dos Santos Cardoso, Jacqueline Miranda Gonralves, Eliane Neves Fagundes, Ana Paula Trovatti

Uetanabaro y Eraldo Medeiros Costa Neto

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Plantas medicinales de la comunidad de San Pablo Huantepec, municipio de Jilotepec, Estado de Mexico. lv/arigel Santiago Cuevas, Laura White Olascoaga y Carmen Zepeda Gomez

Atividade antimicrobiana de actinobacterias isoladas de cupinzeiros do municipio de Feira de Santana, Bahia, Brasil.

Getzilio Freitas Bomfim, Ana Paula Trovalli Uetanabaro y Eraldo lvfedeiros Costa-Neto

El GRAMIT (Grupo Regional de Apoyo a la Medicina Indigena Tradicional): una metodologia interdisciplinaria e interinstitucional en favor de las organizaciones de medicos indigenas tradicionales del centro del estado de Veracruz, Mexico.

Yaqueline Gheno-Heredia, Feliza Ramo-Farias, Yolanda Ma. lv/artinez-Ocampo y Domingo Veltizquez Reyes

EtnoboUinica medica de los tepehuas de Hidalgo. Marfa Edith Lopez-Villaji'anco y Abigail Aguilar-Contreras

Plantas medicinales utilizadas por los maya-chontales del poblado Tecoluta 2" secc., Nacajuca, Tabasco, Mexico.

Miguel Alberto Magaiia Alejandro, Lilia lv/a. Gama Campil/o y Ramon Mariaca Mendez

La agricultura tradicional entre tseltales y tsotsiles de Chiapas, Mexico. Ramon lv/ariaca Mendez y Christianne Junghans

Revalorando la pesca nahuatl como ejemplo de una practica sustentable: estudio de caso en la region hidalguense, Mexico Central.

Sandra E. Montal1o Campos, Angel Moreno Fuentes y Katia A. Gonzalez Rodriguez

Efecto in vitro de los extractos de tres plantas utilizadas en la medicina tradicional mexicana contra Entamoeba histolytica Schaudiun, 1903 (Corr. Walker, 1911).

Jovanny Fernando Yonatan Olvera Bautista, Helia Reyna Osuna Fernandez, Alicia Brechzi Franco, Guillermo Laguna Hernandez, Mario Nequiz Avendal10 y Espiridion Ramos Martinez

Plantas antidermatofiticas expendidas en las yerberias de Santiago de Cuba, Cuba. Yalina Perez Portera, Franklin Suarez Lopez, Marco Antonio Vasquez Davila, Elizabeth Rodriguez Leblanch e Yamila

BaroBou

Estudio etnobotanico de Santo Domingo Yodohino, distrito de Huajuapan, Oaxaca, Mexico. Jaquelina Lopez lv/arena, Ernestina Cedillo Portzlgal y Cesar del C. Luna lv/orales

Manejo tradicional y conservacion de frutales nativos en solares del municipio de Tzucacab, Yucatan, Mexico.

Roldan Gonzalez Basulto, Juan Jose Jimenez-Osornio y Francisco Javier Reyna Diaz

Conocimiento tradicional del aprovechamiento y consumo de insectos en la cabecera municipal de . Simojovel de Allende, Chiapas, Mexico.

Sinthia Sanchez-Salinas, Ramon Mariaca Mendez, Eraldo Medeiros Costa-Neto y Laura Huicochea Gomez

Flora util de la comunidad de San Miguel del Monte, Morelia, Michoacan, Mexico. Rodrigo Veltizquez-Duran. Ram;,'o Rios Gomez, Felipe Garcia-Oliva y Eloy Solano Camacho

CAPITULO VIII: IMPORTANCIA CULTURAL

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Alirnentos y bebidas fermentados tradicionales de Mexico y Peru. 369 Patricia Lappe Oliveras, Ruben Moreno-Terrazas. Armando Arias. Anne Gschaedler Mathis, lv/aria del Carmen

QUirasco-Bal1lch y Marfa del Carmen Wacher Rodarte

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Arqueobotanica Y arqueozoologia. Razil Valadez Azzia, Christopher Gotz. Cristina Adriano. Alicia Blanco, Hortensia de Vega Nova, Emilio Ibarra. Coral

Montero, Diana Martinez, Emily McClung, Gilberta Perez, Bernardo Rodriguez, Nawa Sugiyama. Fabiola Torres y Judith Zurita

Evaluacion quimica del nopal (OpllntiaficlIs-indica var. atlixco) como sustrato de la grana cochinilla en tres municipios de Hidalgo, Mexico.

Margarita lvf. Avila Uribe, lilaria del Socorro Cuevas Correa. lv/aria Aurora Lanto Arriola y Yadira Montiel Casas

Estudios etnobiologicos sobre el manati amazonico (Trichechlls inllnguis Natterer) y su conservacion en la reserva de desarrollo sostenible Amana, Brasil.

Jorge Calvimontes y Miriam Mal7nontel

Las aves descritas en la obra de Francisco Hernandez, Historia natural de Nueva Espaiia, su situacion actual y analisis de los nombres nahuas, Mexico.

Ma. del Rosario Cardenas Aquino. Graciela Gomez Alvarez y Sabel Rene Reyes Gomez

Saber local, uso y manejo de las tortugas charapa (Podecnemis expansa) y taricaya (P. lillijilis), en el resguardo Curare-Borikada (La Pedrera, Amazonas, Colombia).

I1ba Carolina Figueroa. Santiago Duque y Augusto Fachin-Teran

Axochiapan como centro de acopio de flora medicinal en Morelos, Mexico: una expresion ecologica y sanitaria del patrimonio cultural y su dinamica actual.

Paul Hersch Martinez e Ignacio Garcia Madrid

Desarrollo, vision y prospeccion de la etnomicologia en Colombia. Paulina Mejia Correa

Conocimiento tradicional sobre el uso y aprovechamiento de la fauna silvestre en la Reserva Municipal de Cuxtal, Yucatan, Mexico.

Elda Nzil1ez Duran. Wilian de Jeszis AgUilar Cordero y Silvia F. Hernandez Betancourt

Evaluacion de los usos de los mamiferos silvestres en el ejido Rancho El Salado, Jolalpan, Puebla, Mexico. Yosaira Perez Hernandez y Maria Concepcion Lopez Tellez

Los murcielagos, elementos de expresion cultural en Mesoamerica. Oscar Gustavo Retana Guiascon

Evidencias paleoetnobotamcas del nso del nance Byrsonima crassifolia (L.) Kunth. (Malpighiaceae) en la reserva de la Biosfera Maya, Mexico.

Felipe Trabanino

Aspectos etnobotamcos de las cicadas en algunas zonas de Hidalgo, Mexico. Aurelia Vite Reyes, Maria Teresa Pulido Silva y Juan Carlos Flores

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SISTEMAS BIOCOGNlTlVOS TRADlCIONALES ?aradigmas en la COllservacion BiolOgica y el Fortalecimiento Cultural

Asociaci6n Etnobiol6gica Mexican&, A. C. Global Divcnity Foundation

Universidad Aut6noma del Estado de Hidalgo EI Colegio de la Frontera Sur

Sociedad Latinoamericana de Etnobiologia

2010

Edicion a cargo:

Angel Moreno Fuentes Maria Teresa Pulido Silva

Ram6n Mariaea Mendez Raul Valadez Azua

Paulina Mejia Correa Tania V. Gutierrez Santilliin

IntroduccioD

ARQUEOBOTANICA Y ARQUEOZOOLOGiA

Raul Valadez AzUa' Christopher Gatt Cristina Adriano l

Alicia BlancoJ

Hortensia de Vega Noval

Emilio Ibarra I Coral Montero l

Diana Martinezl

Emily McClung' Gilberta Perez]

Bernardo Rodriguez l

Nawa Sugiyama" Fabiola Torres l

Judith Zurita'

I Instituto de Investigaciones Antropo16gicas, Universidad Nacional Aut6norna de Mexico raul_ valadcZ@hotma il.com

2Universidad Aut6noma de Yucatan cgotz@uady. mx

Jlnstituto Nacional de Antropologia e Historia "EscueJa Nacional de Antropologia e Hislori.

Riqueza cultural, riqueza biologica, dos realidades que se viven en tenitorio mexicano y que lejos de provocar alegria, despiertan mas bien la inquietud de como estudiarlas para justificar su cuidado, su pennanencia. 5U

sustentabilidad. Para la etnobiologia mexicana este es su principal reto, no s610 complicado por las dimensiones del

universo a estudiar, sino ademas por la ruptura en la continuidad cultural que se dio a partir del siglo XVI, fenomeno que en el presente nos impulsa siempre a la necesidad de escoger con cual de los dos ambitot culturales vamos a trabajar: con el que proviene de Europa 0 con el que nacio en este territorio.

Por todo esto el estudio de la relacion hombre-ser vivo de tiempos antiguos, adquiere un importantc valor, pues es la Unica fuente de datos confiahle respecto del origen de las tradiciones que vemos en el presente. Conocer como se daba el uso y Ia percepcion de los recursos naturales en tiempos prehispanicos, a partir de las evidencias arqueologicas, completado con textos del siglo XVI, nos ofrece un importante punta de referencia sobre el origen de tal 0 eual tradicion 0 pensamiento respecto de un eierto organismo.

Mediante la arqueobotAniea y arqueozoologia sabemos que las relaciones que establecio el hombre prehispanico con la fauna y la flora partieron de patrones utilitarios que adquirieron con el tiempo rasgM culturales caracteristicos pues se encontraban estrechamente vinculados a su disponibilidad en el arnbiente y a 11 actitud cultural que ubieo al organismo como un recurso aprovechable. Estos rasgos eran de canieter regional 0

cambiaban en el tiempo. Su uso iba desde 10 b!sico, por ejemplo alimentacion 0 materia prima en Ia elaboraci60 de artefaetos, hasta su empleo dentro de la esfera de 18 elaboracion ideologica, asignandoles valores ritualca 0

eeremoniales (Corona-M. y Arroyo 2007, Corona-M. 2008). Vale destacar que mucbos de estos esquemas de UIO aUn los ohservamos, aunque algunos elementos eulturales bayan cambiado can el tiempo.

La infonnacion que se mostrara a continuacion es un pequeiio ejemplo de estudiOi arqueozooJ6gieOl Y arqueobotanicos que nos muestran la situaci6n actual de las dos disciplinal y el oonocimiento que podeJJlOS

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obtener a traves del estudio de 10 antigua, para as! ubicar eI origen de tradiciones que aim hoy son parte de nuestro pensamiento.

La arqueozoologia Mexicans: uns realidad en el presente

Una de las areas presentadas en este espacio es la arqueozoologia. Su objetivo es estudiar a los restos faunisticos encontrados en los contextos arqueologicos. En sus inicios en Mexico, esta disciplina estuvo ligada a 1a necesidad de saber que especies se encontraban en la of rend a encontrada por Antonio de Leon y Gama en 1870, quien excavo la Piedra del Sol y la Coatlicue, y fue hasta ya entrados del siglo XX cuando se tuvo el interes de conocer que fauna presentaba en sus sitios prehispanicos.

La historia de la arqueozoologia esta dividida en tres grandes moment as: 1) en eI Mexico independiente (182 1) se buscaba demostrar la irnportancia y riqueza de los recursos naturales y culturales de un pais indpiente, 10 que gener6 la creacion del primer museo gubernamental (1825), con eI interes particular de algunos cientificos en identifiear las especies de fauna prehistorica que se exhibian y preguntarse si estaban asociadas a los primeros pobladores humanos de Mexico. En esta etapa se analizaba la fauna y se referia a su antigiiedad.

EI segundo momento fue en la consolidad6n del primer laboratorio de arqueozoologfa dentro del INAH en 1963 (Alvarez 1967), en donde se seguian trabajando las problematicas de establecer la antigtiedad del hombre americano y su esquema de vida.

EI tercer momento se establece a partir del hallazgo del monolito de la Coyolxauhqui ( 1978) cuya of rend a involucraba restos faunisticos y cuyo estudio requino vincular a la arqueozoologia con la etnohistoria y la etnozoologia, al tiempo que se crea oITo laboratorio dentro del INAH (Secdon de Biologia). Posterionnente y como resultado de la necesidad cada vez mayor de entender la manipulacion y aprovechamiento de que era objeto la fauna par los pueblos prehispanicos aparece, en 1986 en la UNAM el tercer laboratorio (Perez 2009) y en ados recientes nuevos espados de investigacion arqueozool6gica en la Universidad Autonoma de Yucatan (2007), en el centro INAH de Morelo, (2007) y en el centro INAH de Baja California.

Consideramos que la etnoozoologia mexicana tiene como fmalidad entender la relacion hombre-fauna que forma pane del acervo cultural de las comunidades humanas que habitan el territorio mexicano. Para pader cubrir dicho objetivo es necesario el apoyo de otras herramientas, una de elias es la arqueozoologia, ya que con ella pademos ubi car la antigiiedad de dicho acervo y su evolucion.

Es necesario impulsar los esfuerzos para relacionar los datos etnozool6gicos y arqueozoologicos a fin de entender el manejo del recurso animal y el impacto que los grupos humanos preteritos tuvieron sobre el.

Fauna costera en un centro de barrio teotihuacano

El estudio de la ictiofauna encontrada en contextos arqueoJogicos permite conocer la reladon del hombre con la fauna acuatica, incluso desde su captura. Asi , el anal isis de este tipo de restos pennite determinar los usos que se les dieron a los recursos pesqueros (polaco y Guzman 1997), a fin de conocer, un poco rn.3.S, los patrones de vida de los pueblos prehispanicos y la forma como aprovechaban este recurso.

En Teotihuacan existe el centro de barrio de Teopancazco, cuyo estudio permite conocer parte de la relaci6n hombre-animal en esta ciudad. La fauna identifieada (Tabla I) incluye una alta concentracion de restos oseos de peces de origen marino (Rodriguez 2006) cuyo analisis dio como resultado 99 individuos: 17 no identificados, 13 identificados a nivel familia, 26 a genero y 43 a especie, siendo los mas abundantes JOIUrus

pichardi (pez bobo) con 36 individuos (36.36%%), Lutjanus sp. (huachinango) con 13 (13.13%), la familia Pomacantidae (peces angel) e Ictaluros sp. (bagres) con 4 (4.04%). Otros poco representados fueron Sphyraena barracuda (barracuda), Centropomus sp. (robalo) y Carcharhinus sp. (tiburon).

La alta concentracion de huesos de estas variedades es Unica en el registro arqueologico de Teotihuacan y rompe con la idea de que en epoca prehisparuca no se consumia pescado marino en el centro de Mexico, sobre todo organismos provenientes de la Costa del Gofo, que corresponde al area de distribucion de la mayoria de los peces identificados. Lo anterior corrobora dos de las rutas comerciales propuestas por Rattray y Morante (1998): 1) Teotihuacan, Cofre de Perote, Costa del Golfo y 2) Teotihuacan, Pico de Orizaba, Area Maya; ambas sirvieron para eI transporte del pe:scado fresco. ahumado, salado 0 guisado.

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Tabla 1. Ictiofauna aTqueol6gica descubierta en el sitio de Teopanc8Zco, Teotihuacan.

TAXA NOMBRE

TOTAL TAXA NOMBRE

TOTAL COMVN COMVN

Carcharinus sp. Tiburon JOlurus pichardoi Bobo 36 Lutjanidae

Huachinango 2 EpinepheJus nigrilUs Mero

LUI[anus s2. 13 Mycleroperca bonaci Perca Clupeidae

Sardina I Diaplerus sp.

Mojarra Liles sp. 2 Eucinoslomus sp. Ictalurus sp. Bagre 4 Carangidae I Atherinidae Charal 3 Caram sp. Jurel 2

Cyprinodontidae Cachorrito 2 Cram hippos 2

Pomacantidae Angel 4 Cenlropomus sp. R6balo 2 Bairdiella ronchus Ronco Sphyraena barracuda Barracuda 2

PECES NO IDENTIFICADOS: 17 TOTAL DE INDIVIDUOS: 99

Fauna descubierta en el entierro seis de la piramide de Ia luna, Teotihuacan

La investigaci6n arqueozool6gica que involucra animales sacrificados en ceremonias, permite conocer el esfuerzo par manipularlos para ofrecerlos a templos y dioses relacionados, siempre bajo el criterio de "entre mas poder terrenal rruis grande el templo y entre mas grande el templo, mas impresionante la ofrenda faunfstica".

La Pinimide de la Luna, en Teotihuacan, es la segunda mayor estructura de la ciudad y posee varias etapas constructivas, algunas con ofrendas asociadas (Sugiyama y L6pez 2006). En 2004 se descubri6 el "entierro 6", perteneciente al siglo IV d.C., con una importante ofrenda animal, la cual fue estudiada sisterrniticamente en el Laboratorio de Paleozoologia del Instituto de Investigaciones Antropol6gicas de la UNAM (Blanco et af. en preusa). La fauna inc1uye 18 aguilas reales (acho estudiados hasta hoy), siete pumas, seis jaguares, seis lobos, dos hibridos de lobo y perro (loberros), un coyote y en el contenido estomacal de algunos, huesos cocidos de cinco conejos (Sylvilagus audubonii y S. jloridanus) y una ave pequeila. La mayona mostraban miembros unidos, como si se hubieran depositado atados de manos y pies.

Tabla 2. Fauna descubierta en el entierro 6 de 1a Pinimide de la Luna.

Espede Individuos Tlpo de manejo

18 (8 estudiados) 3 cautivos hasta su sacrificio Aquila chrisallos (aguila real)

(I hembra, todos adultos) 5 pieles depositadas

7 (3 adultos, dos hembras ; dos 2 cautivos hasta su sacrificio Puma conca/or (puma)

juveniles, dos criss) 5 pieles depositadas

1 cautivo hasta su sacrificio Pan/hera onca (jaguar) 6 (1 subadulto, I juvenil, 4 crias)

5 pieles depositadas

Canis lupus (lobo) 6 (3 adultos I hembra, I juvenil, 2 6 pieles depositadas enos)

I adolto hembra 1 cautivo hasta su sacrificio Canis Jupus-jamiJiaris (loberro)

1 no determinado I piel depositada

Canis latrans (coyote) I juvenil hembra 1 pie! depositada

Los animales descubiertos (Tabla 2) fueron, bien ejemplares completos (7)~ a 101 que incluso se les aliment6 poco antes de su muerte 0 bien pieles. Dos aguilas ternan lesiones eo 108 t:anomotatarIoi provocadas por cuerdas

a las que estaban sujetas y un puma en la cadera y el femur, posiblemente por accidentes sufridos y deficiencias en la alimentacion, 10 cual indica que fueron mantenidos cautivos por largo tiempo, quiza desde que eran crias.

Huesos (carne) cocidos(a) como ultimo alimento es interpretado como un acto en el cual se preparo un caldo con hierbas que les adonnecerian 0 matarian, a fin de poderlos atar y transportar sin problemas hasta donde fueron sacrificados.

Los animales representados por pieles estan constituidos por el craneo, 0 parte de el y, a veces, por dedos que presentan senales de corte. Su presencia puede relacionarse con tributos ; aunque dos aguilas fueron preparadas para hacerlas pasar por animales vivos. Quiza fueron organismos que no soportaron la cautividad pero debian estar presentes.

Este esquema de manejo sugiere amplio conocimiento de la biologia de los mayores depredadores mexicanos desde hace dos mil anos, de fonna tal que era factible su cautividad. Este esquema resurge despues, con la "casa de los animales" de Mexico-Tenochtitlan, 10 cual demuestra Ia abundancia de estos organismos (Blanco el al. 2009) y asimismo el respeto que se les tenia, condicion que se modific6 a partir del siglo XVI, cuando por influencia del pensamiento europeo se les asigno el papel de "enemigos".

Valor simbolico de lobos, perros y coyotes en culturas prehispanicas del centro de Mexico. Estudios recientes

Las diferentes especies mexicanas del genero Canis tuvieron amplia interaccion con las culturas prehispanicas, tal y como se ve en las diferentes fuentes escritas y en sus restos arqueozoologicos. Sin embargo la interpretacion del papel simbolico de cada uno (perro, lobo y coyote) a partir de los hallazgos oseos y contextos relacionados se encuentra en sus inicios, pues se creia imposible reconocer a cada especie a traves de los huesos, idea ya descartada gracias a estudios morfoiogicos y morfometricos realizados en atios recientes (Blanco, Rodriguez y Valadez 2009).

Se han identificado restos de lobo (Canis lupus baileyi) en Teotihuacan, Zultepec-Tecoaque, Tlaxcala y Hunchavin en Chiapas (Figura 1), como animales de of rend a a piramides, es decir, animales de sacrificio en importantes ceremonias. Restos de coyote (Canis latrans) han sido identificados en contextos habitacionales y en entierros y Ie asocian con la manufactura, como of rend a en eventos funerarios y animal de sacrificio. Al perro (Canis familiaris) 10 vemos en contextos domesticos y como ofrenda de diversos ritos. Por ultimo, tenemos restos de hibridos de lobo y perro (Canis lupus-familiaris) , como of rend a a piramides, como parte de la indumentaria de militares y asociados con el inframundo.

Estos resultados, unidos a datos de codices y textos en mihuatl, penni ten elaborar una propuesta del valor slmb6lico de estos canidos (Valadez y Blanco 2005, Valadez et al. 2008). De acuerdo con ello, ellobo tenia un valor simbolico equivalente al aguila y al jaguar, asociado a los mas altos niveles de poder terrenal y divino y tambien simbolo de la guerra y de la milicia; al coyote se Ie valoraba por su sagacidad, inteligencia y habilidad cazadora, por 10 que se Ie asociaba con las artes, el libido y la discordia; por ultimo, el perro estaba ligado simbolicarnente al maiz y a la lluvia por el sobrelapamiento de su cicio reproductivo con el agricola, de ahi que tambien se Ie asociara con Ia fertilidad y con los ciclos de vida y muerte, siendo este ultimo aspecto el que, unido I su papel de compaiiero, Ie otorgo un valor especial como ofrenda y compaiiero de difuntos.

Artefactos de hueso y of rend as a los dioses - los multiples usos de animales en la estructura X de Becan, Campeche

El sitio arqueologico de Becan, Carnpeche, pertenece a la region arqueologica del Rio Bee, ubicada entre las tierras bajas mayas centrales y del norte y fue habitado entre el periodo Preclasico y Postclasico (600 a.c. a 1350 d.C.) (Bueno 1999). Durante las ultimas excavaciones en la estructura X del sitio, se hallaron 1I66 especimenes esqueleticos de animales, asociados estratigraficamente tanto a la utilizaci6n originaria de la estructura palaciega durante el periodo Clasico Tardio (600 - 800 d.C.) , como tambien a una reocupacion tardia de la misma que experimento fuertes cambios arquitectonicos, durante el periodo Clasico Tenninal (800 - 1050 d.C.).

EI analisis zooarqueo16gico de los restos arqueofaunisticos de la estructura revelo varios puntos de interes en cuanto al modo de vida de sus habitantes. En principio podemos constatar que la mayoria de los especimenes corresponde a reminiscencias de la alimentaci6n de los antiguos habitantes, misma que se concentraba en las

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especies venado cola blanca (Odocoileus virginionus), venado temazate (Mazama cf. americana y pandora) y pavo ocelado (Meleagris ceel/a/a). Estas especies corresponden a la fauna mils consumida en el llrea maya, y su utilizaci6n se ha relacionado a las pn\cticas agricolas mayas de la milpa y horticultura (GOtz 2008).

Flgun I. Esqueleto de crla de lobo de cuatro meses de edad descubierto en Huncbavin, Chiapas.

AdemAs de los restos encontrados en la estructura, identificados por la presencia de marcas de corte, huellas de hervido y de fuego directo, se ballaron epiflsis de huesos largos y un fragmento de costilla, correspondientes a desechos de la elaboraci6n de artefactos y procedentes de jaguar (Pan/hera oneal, ocelote (Leopardus pardalis) y manati (Trichechus manatus). Estos desechos son en su mayoria epifisis separadas mediante un serrucho, haciendo parecer que los procesos de elaboraci6n de artefactos en BecAn siguieron los estAndares de manufactura 6sea identificados por Emery (2008) en otTOs sitios prehispanicos contemporaneos de las tierras bajas centrnles.

La elaboraci6n de los artefactos, que estratigraficamente corresponde tanto a la utilizaci6n origioaria de la estructura en el CIAsico Tardio, como a su reocupaci6n durante el CIAsico Tenninal, infonna acerca de actividades econ6m.icamente productivas de los ocupantes de estructuras palaciegas, 10 que finalmente mejora nuestro eotendimiento de la forma y funcionalidad de grupos domesticos de alto estatus en la sociedad maya prehispAnica.

Los restos de vertebrados del sitio Yautepec, Morelos

De este sitio se presenta la identificaci6n de los restos animales de vertebrados hall ados en un palacio del Poselasico (1300·1500 d.C.), en Yautepee, Morelos y se diseute su pertinencia eo !erminos deloprovechamieoto de los recursos por parte de sus habitantes.

EI actual poblado de Yautepee se emplaza hacia el norte del area centrnl del actual estado de Morelos. Los valles de la regi6n, surcados par las aguas permanentes del rio Yautepec y sus afluentes, tienen suelos de alta calidad y clima benigno todo el afto.

Esta ubicaci6n propici6 que se eligiera como lugar de asentamiento desde tiempos prehisp8nicos, desarrollando una economia basada en la agricultura de maiz, frijol, chile y calabaza, ounque fue 10 producci6n del algod6n 10 que les trnjo grandes beneficios.

EI Yautepec prehisp8nico alcanza su maximo desarrollo socio-cultural durante el PosclAsico Medio y Tardio (1200·1521 d.C.) y fue habitada por dos grupos de filiaci6n nBhuatl: 10. Tlahuicu y los Mexico •. Si bien se estima que la ciudad prehisp3nica alcanz6 una extensi6n de 208 bectare. y UDI. poblaci6n de 11 ,000

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individuos, muchas de estas evidencias han desparecido bajo la mancha urbana. De esa subsiste un palacio 0

tecpan, el cual ha sido objeto de diversas intervenciones arqueologicas, y donde se ban rescatado los restos 6seos de animales que aqui se discuten (De Vega Nova 1994).

Se han identificado tres clases de vertebrados terrestres, anfibios, aves y mamiferos, donde la mayoria de los restos corresponden a los dos ultimos grupos. En el caso de las aves, predominan los restos de guajolote (Me/eagris ga//opavo) y es menor la presencia de aves acuAticas, asignadas solo al genero Anas. En cuanto a los mamiferas, predominan los restos de perro (Canis /amiliaris) , uno de ellos juvenil, asi como de conejo (Sylvilagus cf. floridanus) . Por otro lado son notables los pocos restos del venado cola blanca (Odocoileus virginianus), asi como la ausencia de huesos de animales domesticos europeos. En general, se considera que estos materiales son desecbos de consumo alimentario, de un lugar de alto estatus.

Esta contribuci6n tiene el valor de mostrar las relaciones bombre-fauna en ambientes neotropicales, en particular la selva baja caducifolia, donde podemos ver la conjunci6n de amplia diversidad biol6gica con la presencia de sociedades complejas.

Resultados preliminares de Cbinikiba, Chiapas: la importancia del maiz (Zea mays) y el venado cola blanca (Odocoileus virginianus) en la dieta de sitios pequefios.

EI analisis de los is6topos estables ("C, "N Y " 0) tanto del esmalte dental, como del coli\geno de los huesos largos procedentes de muestras de restos arqueofaunisticos nos pennite la reconstruccion de la paleodieta de antiguos pueblos y finalmente, una apraximaci6n a las antiguas condiciones ambientales. De igual manera, la informaci6n que proveen los anAlisis de isotopos ban servido para explorar el acceso diferencial a los recursos naturales, a nivel de genera, edad e incluso de clases sociales.

La relativa dependencia en el consumo de maiz par parte de los mayas, desde el Formativo basta el Chisico Tardio, ba sido corroborada por varios trabajos arqueol6gicos en diversos sitios de las tierras bajas. Los resultados han resaltado la gran diversidad entre los diferentes sitios y clases sociales. Por un lado, se ba afinnado que el consumo de maiz aument6 durante el CIAsico Tardio a consecuencia de un gran aumento poblacional, pera principalmente de la clase alta; argumentAndose que el grueso de la poblaci6n dependia principalmente del maiz 0 de animales herbivoros -que consumian principalmente maiz 0 plantas C4- para su alimentaci6n. Sin embargo, los anAlisis isot6picos resaltan que el consumo del maiz fue constante en algunos sitios y que en otTos fue poco 0 nulo, 10 cual indica que existe una gran variabilidad entre ellos.

De igual modo tambien se ba discutido ampliamente el acceso diferencial a los recursos faunisticos, sugiriendo un mayor consumo por parte de las elases altas en los diverso~ sitios. Los mayas tenian a su disposici6n una gran variedad de animales tanto terrestres como acuaticos, aunque es posible ver que la selecci6n de ciertas especies depende tanto de su dispooibilidad ecol6gica, como de una predileccion cultural. Las especies seleccionadas van cambiando a traves del tiempo e igualmente seiialan una gran variabilidad entre los sitios, hacienda muy dificilla definicion de un tinico menu maya.

Sin embargo, es posible observar que en general, en contextos de clase alta, se espera encontrar fauna ex6tica 0 las mejores porciones de la fauna utilizada cotidianamente. Los contextos en donde se encuentran estos reltos senalan un consumo ritual en festines. Por otro lado, recientes estudios senalan que no solo los contextos de elite poseen los mejores cortes, sino que estan presentes otras partes con un indice de utilidad alto y que posiblemente estos contextos reflejen un mayor uso de las especies, mas allA de su consumo como alimento. En e:ste senti do, la informacion de los estudios preliminares del sitio nos pennite explorar temAticas tan interesantes como la dependencia en el maiz por parte de la elite, la alimentacion de la fauna silvestre con esta planta y finalmente la utilizacion de las especies faunisticas para su alimentacion (Montera 2008).

Investigacion paleoetnobotanica en Mexico: perspectivas

EI estudio de los restos botAnicos en Mexico se initia, en la decada de los seseota, con la fundaci6n del laboratorio de Paleobotanica en la seccion de Prehistoria del INAH. Desde entonces, la investigaci6n en dicbo laboratorio se ha orientado a comprender la relacion hombre-ambiente a traves del amilisis de macrorestos, polen y fibras. En 1976 se crea el Laboratorio de Paleoetnobotanica y Paleoambiente (LPP) en el Instituto de Investigaciones Antropol6gicas de la UNAM con el propos ito de desarrollar y promover el estudio de las plantas

consideradas como elementos del entomo natural, del paisaje humano, de la subsistencia, de la salud humana y del mundo simb61ico, desde 10 "poca prehist6rica basta la actuolidad con una perspectiva interdisciplinaria. Esto mediante el analisis de los restos de plantas (semillas, madera, polen, fitolitos y granos de almid6n) asociados a contextos arqueol6gicos, junto con la informaci6n arqueol6gica e hist6rica. Desde principios de los anos noventa, el trabajo en el LPP ha incorporado el anAlisis geomorfol6gico, anAlisis de suelos e is6topos de carbono a sus proyectos para tratar de entender los cambios ocurridos en el paisaje del valle a trav~s del tiempo. Ambas instituciones cuentan con una colecci6n de referencia de macrorrestos bot8nicos (semillas y polen) provenientes de diversos sitios arqueol6gicos (McClung 1982).

A1gunas de las contribuciones que ha hecho el LPP al conocimiento de la relaci6n hombre-planta­ambiente son: proporcionar evidencia de la continuidad en el uso de las plantas desde el periodo Formativo basta nuestros dias, plantear una recoDStrucci6n de la vegetaci6n en el valle de Teotihuacan, evaluar el impacto humano en la regi6n y proponer PrOcticas de manejo del paisaje.

Evidenci. Paleoetnobotanica del Interior de la PirAmide de la Luna

La pirAmide de Ia Luna es uno de los tres monumentos que dominan el centro ceremonial de la antigua ciudad prehispAnica de Teotibuacan (100 a.C.-600 d.C.). La identificaci6n de macro y microrestos botanicos provenientes de diversos contextos del interior de Ia pirimide han proporcionado evidencia del uso ritual de las plantas, asf como informaci6n relacionada con los recursos disponibles en el valle, pricticas agricolas y la modificaci6n del paisaje por los antiguos habitantes. Muestras para anAHsis botanico (semillas, polen, fitolitos y madera); restos in situ de plantas y fibras, se ban recuperado de entierros y ofrendas encontrados en el interior de los edificios superpuestos.

La historia constructiva de la PirAmide de la Luna y el posible significado sirnb61ico de las ofrendas que acompaftan a los entierros, ban sido estudiados con detalle (Sugiyama y Cabrera 2007), por 10 que se cuenta COD

una secuencia crono16gica. la cual permite evaluar los posibles cambios en los restos botAnicos. Un gran nlimero de muestras se obtuvieron de los perfiles expuestos de los hineles excavados durante las diversas expioraciones en los edificios (Tabla 3).

Tabla 3. Restos botAnicos del interior de la Pirimide de la Luna. asociados a1 entierro 6 y semilla de Salvia sp.

Tau Tipo de material Informacl60 que aporta dependiendo del contexto

Poaceae Zea mays Macrorrestos y polen Alimentaci6n. cultivo, ritual Amaranthaceae Macrorrestos y polen Ambiente Amaranthus Chenopodiaceae Macrorrestos y polen Ambiente Cheno odium Fagaceae Que,.cus Polen Ambiente

Lamiaceae Macrorrestos Alimentaci6n. ritual

Pinaceae Pinus Polen Ambiente

Solanaceae Physalis Macrorrestos Alimentaci60. cultivo

Poaceae Fitolitos de fibras Ambiente, ritual

Cyperaceae Fitolitos en canasta Ritual

Los resultados muestran una considerable diversidad de taxa representados en temunos florfsticos y eco16gicos, no obstante la conservaci6n del material botAnico es muy variable.

La identificaci6n de los macro y microrestos bot'nieos de los diferentes eontextos de la pinimide indican que mucbos de los taxa presentes en los entierros y en las muestras de 105 perfiles no estan directamente asociados con actividades rituales especificas tales como: Arnaranthaceae, Asteraceae. Cbenopodiaceae,

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Poaceae, Portulacaceae, y Solanaceae, entre otros. Estas mismas familias y generos pertenecientes a eUa se han encontrado en otros contextos arqueol6gicos de Teotihuacan que sugieren usos como alimento, medicina y ornamento.

AnAlbis de fitolitos recuperados de metatel provenientes de Teopancazco, Teotihuacan

La aplicaci6n del anAlisis de fitalitas dentro del prayecta interdisciplinaria "Teotihuacan: elite y gabiema", dirigida por la Ora. Linda R. Manzanilla desde 1997, se ha enfocada a la recuperaci6n de infarmaci6n basica en la reconstrucci6n de patrones dieteticos, asi como definir el usa diferencial de los metates en contextos de elite domesticos y no domesticos en este centro de barrio dedicado a actividades artes8Dales.

Como parte de la metodalagfa seguida en el estudia original, no se canocia el tipa de cantexta del que provenia especificamente cada uno de los metates. Esta condici60 tenia como objetivo el constatar la efectividad de 1a aplicaci6n del .mllisis de fitalitas para detenninar el tipo de plantas procesadas en elias. AI camparar los resultados con los contextos a los que pertenecian los artefactos, se pudo definir con exactitud cuales provenian de areas domesticas, y en el caso de aqueUos con residuos quimicos. fibras y estuco, se comprob6 que estaban asociados a actividades artes8Dales.

Un grupo de metates estudiados presentaron. entre otros, fitolitos diagn6sticos de maiz (Zea mays) de calahaza (Cucurbila sp.) y de frijal (Phaseolus vulgaris), 10 que permite cancluir que se !rata de metates usadas en actividades relacionadas con la preparaci6n de alimentos. Eo ellos tambien se identificaron fitolitos indicativas de encino (Quercus sp.) y de vegetaci6n arb6rea, probablemente pina (Pinus sp.) y aunque s61a representan el 1 % de los fitolitos contabilizados, indican el uso de los metates en actividades relaciooadas con materiales usados como combustible. Par Ultimo, en otro grupo de metates se observ6 la presencia de residuos quimicos y fibras de plantas no comestibles que estaban relacionados con actividades artesanales.

Generalmente se considera que los metates recuperados en contextos arqueol6gicos estan asociados a actividades relacionadas con 18 preparaci6n de alimentos. Al procesar las muestras de metates procedentes de T eopancazco pudimos comprobar que esto no es siempre correcto y que estos artefactos teoian una gama de usos mayor de 10 que suponemos. Debido a ella y en colaboraci6n con el qufmico Manuel Reyes, se desarroll6 una metodologia para la detecci6n e identificaci6n de residuos quimicos en metates utilizados en actividades no relacionadas con la preparaci6n de alimentos. El poder precisar el uso en actividades domesticas y no domesticas de estos artefactos comprueba la variedad de funciones que tenfan y contribuye a la mejor caracterizaci6n de los contextos de los que provienen.

R.nnlanes finales

Las mvestigaciones que se presentaron en este breve escrito dan fe de la riqueza cultural y cientifica que se tncuentra a nuestro alcance mediante las disciplinas de la arqueozoologia y la arqueobotAnica. Los trabajos pre5entados permiten ver la importancia del uso de animales y plantas en el Mundo preterito, pero debemos tambien reconocer que estamos lejos de entender esta compleja interacci6n entre los seres humanos y su entomo vivo. EI impulso bacia mAs investigaciones se evidencia especialmente ante la situaci6n que carla vez hay mas excavaciones arqueo16gicas en Mexico, trayendo a la luz nuevos materiales que nos posibilitan aumentar mas nuestro entendimiento del pasado, ya sea modemo, colonial 0 prehisp8nico. Hoy por hoy. el potencial etnobio16gico de Mexico esta mundialmeote reconocido y las investigaciones arqueo16gicas, arqueozool6gicas y arqueobotAnicas dan su aporte al conocimiento en esta disciplina.

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