CENTRO INAH GUANAJUATO

Mtro. José Tomas FalcónSección de Historia

Centro INAH Guanajuato

Las calas del convento de San Pedro de Alcántara

Cuentan las viejas crónicas, que el terreno ocupado por el actual teatro Juárez y el Templo de San Diego, fueron una especie de isleta que se formaba por el mean-dro que generaba el caprichoso discurrir del río que atravesaba esta parte de las cañadas a principios del siglo XVII.1

Es sabido que en la primera mitad del siglo XVII los lindes del real y minas de Guanajuato habían sobre-pasado el actual Jardín de la Unión. Parte de esta ampliación se llevó a cabo con el cegamiento del canal natural que constituía el meandro del río, es por eso que tal meandro ya no es perceptible en el plano de Rozuela de 1750. Fue en estos terrenos recién ganados a las aguas

que el clero y las autoridades locales comenzaron a gestionar la construc-ción de un convento.

El convento de San Pedro de Alcán-tara comenzó a construirse en 1663, aunque en 1677 se reubicó dentro del mismo terreno. Para 1695 ya contaba con dos plantas.

Las destructivas inundaciones de 1782 obligaron a elevar el nivel del conjunto religioso, incluyendo el templo de San Diego, las paredes se elevaron, aterrándose el primer nivel, concluyéndose esta reestruc-turación en 1784, gracias a la gene-rosa ayuda del conde de la Valencia-na. Hacia 1862-1863 en virtud de las Leyes de Reforma, el convento es adquirido por particulares y se le convierte en el Hotel Emporio y en Casa de las Diligencias.

Finalmente, en 1872 el gobierno del Estado compra el inmueble, y en 1873 el hotel es demolido, y lo que quedaba del convento se encapsula debajo de la estructura del actual Teatro Juárez.

Las calas realizadas en el antiguo convento dieguino de San Pedro de Alcántara, muestran solo el primer piso del inmueble, correspondiente al claustro bajo y a la portería. Las prospecciones realizadas en varias temporadas, se remontan a 1986 cuando el INAH realizó una primera exploración. No sería sino hasta el verano de 1996 cuando se realizan las excavaciones más extensas que dejan al descubierto las partes del convento antes citadas.2

Las calas del convento de San Pedro de Alcántara 1

1 Lucio Marmolejo, Efemérides Guanajuatenses, vol. 4, 1971, Guanajuato, Gto., Universidad de Guanajuato.

Cuentan las viejas crónicas, que el terreno ocupado por el actual teatro Juárez y el Templo de San Diego, fueron una especie de isleta que se formaba por el mean-dro que generaba el caprichoso discurrir del río que atravesaba esta parte de las cañadas a principios del siglo XVII.1

Es sabido que en la primera mitad del siglo XVII los lindes del real y minas de Guanajuato habían sobre-pasado el actual Jardín de la Unión. Parte de esta ampliación se llevó a cabo con el cegamiento del canal natural que constituía el meandro del río, es por eso que tal meandro ya no es perceptible en el plano de Rozuela de 1750. Fue en estos terrenos recién ganados a las aguas

que el clero y las autoridades locales comenzaron a gestionar la construc-ción de un convento.

El convento de San Pedro de Alcán-tara comenzó a construirse en 1663, aunque en 1677 se reubicó dentro del mismo terreno. Para 1695 ya contaba con dos plantas.

Las destructivas inundaciones de 1782 obligaron a elevar el nivel del conjunto religioso, incluyendo el templo de San Diego, las paredes se elevaron, aterrándose el primer nivel, concluyéndose esta reestruc-turación en 1784, gracias a la gene-rosa ayuda del conde de la Valencia-na. Hacia 1862-1863 en virtud de las Leyes de Reforma, el convento es adquirido por particulares y se le convierte en el Hotel Emporio y en Casa de las Diligencias.

Finalmente, en 1872 el gobierno del Estado compra el inmueble, y en 1873 el hotel es demolido, y lo que quedaba del convento se encapsula debajo de la estructura del actual Teatro Juárez.

Las calas realizadas en el antiguo convento dieguino de San Pedro de Alcántara, muestran solo el primer piso del inmueble, correspondiente al claustro bajo y a la portería. Las prospecciones realizadas en varias temporadas, se remontan a 1986 cuando el INAH realizó una primera exploración. No sería sino hasta el verano de 1996 cuando se realizan las excavaciones más extensas que dejan al descubierto las partes del convento antes citadas.2

2

2 Julio Armando Mendoza García, El convento Dieguino, 2000, Guanajuato, Gto., Presiden-cia Municipal de Guanajuato. Universidad de Guanajuato.