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Conversaciones de Un Abogado. Yolanda Pinto. PDF

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CONVERSACIONES DE UN ABOGADO

YOLANDA PINTO

(FRAGMENTO DE MI NOVELA EL PROCESO DIABÓLICO)

Eran las 8 de la tarde, me encontraba leyendo un expediente sobre un robo con fuerza cuando de repenté oí el sonido estridente del portero automático. No estando esperando a nadie, me extrañó la llamada, de todas maneras me levanté de mi escritorio y me dispuse a verificar quién sería.Descolgué el telefonillo eléctrico y oí la voz de Jorge:--Hola Alejandro me exclamó, abremé vengo a visitarte.--Sí claro exclamé alegre, sube sube, le dije mientras pulsaba del botón para abrir.Encajé la puerta y me dirigí de nuevo a mi escritorio mientras esperaba a que Jorge subiera.Al cabo de unos minutos, oí su voz en el vestíbulo de mi casa. --Hola Alejandro ¿dónde estás?.--Aquí, aqui, estoy en el escritorio, pasa y cierra la puerta.Me levanté nada más verle, y le dije que me alegraba mucho de su visita.--Vamos a tomar algo al salón, le propuse.--Sí eso vamos, saca una botellita de rioja. Nos acomodamos en el sofá de mi casa, y de inmediato Jorge me preguntó como iba el juicio de Freddy.Freddy al ser un hombre artístico, y el fatal desenlace que había tenido su historia, la gente mostraba especial interés en saber las circunstancias que le llevaron a su acción y el castigo que recibiría por ello, eximiéndolo la mayoría de la gente de su actitud, comprendiendo en parte la fuerte presión en que debío de encontrarse expuesto.--Bueno el proceso no va muy bien, le han denegado la principal prueba que podría exculparlo y esto lo debilita gravemente para que pudieran otorgarle la libertad privisional aunque fuera con fianza, pero lo malo es que Freddy no tiene dinero para pagar una fianza muy alta y aunque se la concerieran tendría que esperar aún más hasta que se resuelvan posteriores recursos solicitando bajar la posible fianza.--Si comprendo, dijo Jorge mientras bebía un sorbo de la copa de rioja.Aunque ¿te digo qué es lo peor de todo?, le dije pensativo.--No, qué es lo peor de todo, repuso intrigado Jorge.--Lo peor de todo no es el delito que cometió, ni la defensa del abogado, ni los informes psicológicos o incluso ni el tiempo que pasará en prisión, todo eso es algo circunstancial y que se supone que es parte esencial de los hechos.--Me he perdido, dijo Jorge. ¿cómo puedes decir que todo lo que Freddy está pasando no es lo peor? A mí me resulta una situación insufrifle, privado de libertad y con la incertidumbre diaria de tenerse que enfrentar a un proceso donde no sabrá el resultado hasta dentro de bastante tiempo. ¿quizás hay algo peor que eso?

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En el fondo a todo esto que se está enfrentando es algo tangible, objetivo y actual, desde mi punto de vista esto es lo más llevadero y soportable, dije convencido de mi aseveración. Sin embargo, proseguí explicando a Jorge, lo peor de todo a mi juicio es algo tan simple, subjetivo como espantoso como es EL PROCESO.

--¿EL PROCESO?, repitió preguntando Jorge extrañado.¿pero qué quieres decir con el proceso?, es normal y lógico que lo peor es el proceso, pero no sé en qué sentido metafórico lo dices con esa concentración con la que hablas.

Llevo mucho tiempo viendo gente sufrir por sus pleitos y con el tiempo he descubierto que hay algo maligno, catastrófico, miserable y horroroso cuando eres atrapado por el proceso, nada volverá a ser como antes, es como un gran monstruo de cuyas garras y fauces ya no puedes escapar, mucha fuerza física y mental se necesita para soportarlo. Una vez que entra en tu camino tu vida se apropia de tí, le perteneces y tú y el proceso viajáis juntos a lo largo de los años. Es como un compañero de viaje pero depredador de tu alma, de tu espíritu y de tu cuerpo, ya nada podrás programarlo a tu antojo, un microchip llamado proceso estará incrustado en tu cerebro y durante muchos años te hará recordar que sigue vivo aunque tú quieras evitarlo.--Mira Alejandro, dijo impaciente Jorge, la verdad no sé qué clase de pensamiento filosófico acecha tu mente hoy. ¿qué tiene que ver que alguien cometa un delito del que se le juzgará en un plazo de tiempo con lo que tú tratas de explicarme?, Hablas del proceso como si alguien que cometiera un delito no pudiese redimirse jamás.--Sí claro que algún día podrá escapar el proceso, pero ya te digo que será en un período relativamente largo que conllevará un sufrimiento, incertidumbre y desasosiego cuantitativo.Es más, proseguí explicando, te diré que el imputado atraviesa un largo camino y prácticamente lo hace en soledad, ni siquiera su Abogado está cerca de él para apoyarle todo lo que se necesita.Los abogados tenemos demasiados pleitos para poder estar al lado de cada uno de nuestros clientes, y además el Abogado te acompaña básicamente en dos ocasiones del proceso, cuando eres detenido y cuando se celebra tu juicio, pero el proceso es mucho más que eso, son años y años de lucha.Inclusive te diré que muchos imputados no saben claramente de qué es de lo que se les acusa hasta que no se les entrega el escrito de acusación por el Fiscal, el cual puede llegar a tardar muchísimo tiempo por la dilación de la instrucción y de la justicia, por lo tanto están multitud de meses y en muchas ocasiones años sumergidos en una investigación de ellos y de su caso que ni siquiera ellos son conscientes de lo que se les está tramando en la justicia y en la investigación policial. La verdad que es una situación horrible.--Bueno visto así llevas razón sí , sí, dijo pensativo Jorge.--Claro, proseguí, además ni siquiera los abogados sabemos que es lo que se cuece en la instrucción y en la investigación previa, y además para colmo una vez que lleva el escrito de acusación del fiscal, es un

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mero pliego que sólo tenemos 10 días para oponernos a él y presentar nuestro pliego de descargos, pero que no tiene nuestra oposición ninguna repercusión inmediata en el proceso, es todo un mero trámite, es decir la angustia, las garras y los colmillos del proceso te tienen fuertemente agarrado sin posibilidad de soltarte. Como te digo, ya nada volverá a ser como antes, posiblemente no te dejarán salir del país, y tendrás que comparecer mensualmente o incluso quincenalmente en el juzgado donde el microchip que simbólicamente tienes ya instalado en tu cerebro te recordará una y otra vez que no eres libre, que estás en las manos no del juez, del abogado, de la policía o del fiscal, al fin y al cabo ellos sólo son meras fichas de un gran tablero que se llama Procedimiento y que por mucho que intentes salir del él y escapar no podrás hacerlo. El proceso es un gran laberinto, trampa o tablero donde una vez atrapado no encontrarás la salida. Te recordarán que siempre tendrás que comunicar al juzgado cualquier cambio de domicilio y por cualquier notificación que te hagan y no te encuentren aunque sea por un error de ellos serás puesto en busca y captura como si de un peligroso asesino en serie te tratases, aunque sólo hayas robado 4 perfumes caros en una perfumería. A estas alturas te preguntarás una y otra vez, si tuvieses las llaves de tu destino y de tu pasado, intentarías volver al momento en que robaste y o bien pagarías los objetos o no los habrías sustraído jamás, porque el precio que tendrás que pagar durante años será tremendamente caro. Es más quizás pensarías que todo terminaría pagando el dinero en cualquier momento del proceso, pero no es así, el proceso es más grandiosamente monstruoso que cualquier solución que a ti se te ocurra, el proceso entró en tu vida para quedarse como un cáncer maligno por muchos años y ni tú ni nadie puede extirparlo. Es como la frase esa de “todo tiene su proceso”, pues así es como él te atrapó, él es el que dirige y controla el tiempo, ya nada está en tus manos, sino que eres una mera marioneta accionada por él.Para que lo entiendas podríamos decir que no es equitativo el hecho delictivo que cometiste en sí con la magnitud de las consecuencias del proceso. Desde el momento de la apertura del proceso hacia ti, tú vida le pertenece. Es como si te hubieses encontrado una nave alienígena y hubieses sido secuestrado o inducido, pero tu secuestro será mental y en muchos aspectos físico.--Pero no comprendo porqué llegas a decir que ni siquiera el juez, el fiscal o la policía tienen capacidad para salvar a una persona del proceso, ellos son los dirigentes del mismo.--Mira, le dije, ellos son meros funcionarios, y no lo digo en sentido peyorativo, sino en el de que realmente ocupan sus puestos para realizar su trabajo pero en la mayoría de los casos están abstraídos de los problemas en los que trabajan, sólo se dedican al mero trámite de los procesos y la mayoría de ellos no suelen permanecer mucho tiempo en una plaza de un juzgado, sino que tratan de subir escalafones trasladándose y concursando a otros juzgados, por lo que el proceso desde su inicio hasta su finalización puede pasar por varios jueces, fiscales y policías, como te digo, ellos son meros instrumentos subjetivos del proceso, lo tramitan pero ninguno de ellos lo puede llegar a controlar desde su comienzo hasta su fin. El proceso es un

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monstruo devorador de todo al que atrapa, es voraz y maléfico no teniendo piedad del imputado. El es el rey y todas las demás piezas están a su servicio.--Échame otra copa de este rioja, me dijo Jorge, con todo lo que me cuentas tengo que estar evadido, todo esto me parece una película de terror.Cogí la botella y la empecé a vaciarla en la copa de Jorge. Bebe, bebe, le dije que te hará falta para seguir escuchándome, le dije convencido de mi frase.--Sí dijo Jorge, no te preocupes que beberé este rioja está exquisito.--Bueno repuso Jorge, te haré una pregunta:--¿pero cuando Freddy sea ya condenado y sepa qué condena debe de cumplir, aún no estará liberado del monstruo del proceso, como tú lo llamas?, vamos Alejandro no seas exagerado con eso del procedimiento, creo que eres demasiado negativo y exagerado.--Bueno Jorge, quizás te cueste entender todo este tema, y te comprendo, pero yo que llevo tiempo observando el sistema judicial te hablo con propiedad.--Sí, cuando él sea condenado con una sentencia aún no podrá escapar al proceso, para empezar comenzará a cumplir su condena, pero quedará fichado como un delincuente durante muchos años más que el tiempo que se le impondrá para cumplir su condena, para que lo entiendas, una vez que cumpla su condena, empezará a correr el tiempo para que se le cancelen sus antecedentes penales, y debe de tener suerte para que en todo este tiempo que será muy largo no cometa un nuevo delito que le recrudecería aún más su situación frente al proceso. En este caso ahí estará el gran monstruo para recordarle que sigue en su poder.--Está bien, dijo Jorge, ¿pero y cuando cumpla el período de cancelación de los antecedentes penales, aún tampoco estará liberado del proceso?--Pues no, aún no, contesté de manera convincente.--Pero Alejandro, ¿aún no?, ¿pero de qué periodo estamos ya hablando y porqué aún no estará liberado totalmente del proceso?, Lo que me cuentas ya pasa de marrón oscuro y supone demasiada tortura psicológica para un ser humano, no creo francamente que eso que llamas tú proceso pueda llegar a ser tan cruel, pienso que por ejemplo un robo o cualquier acción delictiva es imposible que tenga un pago tan extensivo en el tiempo, tan perdurable y cansino, debe de existir una solución más rápida para enterrar de una vez por todas el proceso en la vida de cualquier persona.Aunque se le dicte la sentencia si fuera condenado a una multa y sólo le quedase 50 euros por pagar y no lo hiciera, se le pondría de nuevo en busca y captura para ingresarlo en prisión, aunque te resulte increíble, el proceso aún te perseguirá. E incluso si el proceso se te archiva provisionalmente, ya lo dice la palabra es provisionalmente, puedes estar condenado además a pagar una indemnización civil y si actualmente no tienes dinero, el proceso estará con sus fuertes garras y fauces esperándote por si algún día vienes a mejor fortuna. Pensabas que el gran monstruo dormía pero se despertará de nuevo de su letargo a recordarte de nuevo que sigue vivo y que no te deja escapar.

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--Por dios, dijo extenuado Jorge, todo esto parece una locura, parece un viaje sin destino, es como si te quedaras maldecido en el trayecto.--Sí así es, es lo que te decía.--Pero Alejandro, dijo Jorge intrigado, supongamos que alguien cumplió del todo con su condena, cumplió la pena, pagó la indemnización, ¿qué más podría reclamarle la justicia o en este caso el proceso? Creo que ya habría llegado al final de su viaje y el proceso lo dejaría apearse ¿no crees?.--No, no, quizás puede parecerte cínico y exagerado, pero aún no estará libre del todo, el monstruo aún está al acecho.--¿aún dices?, pero me resulta extenuante, dijo Jorge ya casi sin aliento.--Y lo es, repuse tranquilamente.--Como te digo aún cuando haya cumplido todo, e incluso haya transcurrido el largo tiempo para que sus antecedentes estén cancelados, aún le quedarán flecos o cordones umbilicales que lo mantendrán unido a la gran bestia maligna.--Creo que exageras, dijo Jorge mientras se tomaba de un sólo trago la copa de vino tinto.--Creo que me voy a cargar la botella entera escuchando tu discurso tan pesimista.--Bebe, sí que te hará falta para asimilar y codificar todo lo que te cuento. --Pues como te iba diciendo, aun una vez liquidada la condena, cancelados los antecedentes penales y satisfecha cualquier indemnización, la sombra del proceso aún te perseguirá porque seguramente te olvidaste o nadie te asesoró de que debías de borrar también los antecedentes policiales, además si eres un extranjero se te retirará la tarjeta de residencia por haber delinquido y por si fuera poco tus antecedentes penales siempre figurarán en los registros del Ministerio de Justicia a menos que alguien te los borre, como vez todo esto supone gasto económico, mucha fuerza física y mental, y aún teniendo todos las puertas cerradas laboralmente si has cumplido condena en prisión, deberás de pagar honorarios a procuradores y abogados si quieres escapar algún día por lejano que sea de la gran bestia negra.--Ufff, es increíble dijo Jorge, creía que todo era mucho más fácil, ¿entonces para qué sirve la presunción de inocencia y los programas de reinserción del reo?.--Jorge, le dije fríamente, es todo una falacia, es pura demagogia, son falsas esperanzas, todos son mentiras, el proceso sólo te engañará una y otra vez entregándote bolsas llenas de agujeros, donde intentarás guardar tus ilusiones pero será todo en vano. Adornará con tus ojos su corona, y decorará con tu dinero su castillo, desangrará tus venas para beber tu sangre, y apretará tus grilletes cada vez que intentes escapar de él. Como te digo, la bestia negra cruel y maldita te tiene atrapado.--¿pero y si alguien intentara sobornar al juez?, quizás esa sería una solución fácil para exterminar de una vez el proceso.--Jajaja dije sardónicamente, ¿sobornar al juez?, y ¿y de qué te serviría aunque éste aceptase?El juez sólo podría darte algo puntual dentro de la inmensidad del

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proceso, por ejemplo concederte una medida cautelar, un prueba, devolverte documentos, objetos, coches etc.......pero ya te dije que él no domina el proceso, sobornarlo únicamente supondría caer en las redes del proceso, cegará tu inteligencia para que caigas una y mil veces en trampas como esta. Pero de nada te habrá servido el dinero que gastaste en sobornar al juez, ni al juez el dinero que obtuvo, porque algo está por encima de ellos que los controla y los domina. Como te digo el proceso es algo subjetivo, intangible, etéreo y abstracto. El juez no es más que una pieza más en el gran laberinto, es más unas piezas se engañan unas a otras, su ego le hace vivir falsas expectativas o falsos pensamientos de poder, cuando todo eso es una quimera, el proceso es más maléfico que todo eso, les engaña haciéndoles visionar un halo de poder a su alrededor, aumenta en ellos su vanidad, y su arrogancia pero todo eso es parte del juego, el proceso juega con todas sus piezas hasta el final.Además te diré más, tú dices de sobornar al juez, ¿pero a qué juez?, en un proceso al menos el expediente pasa por unos 3 jueces o más, por lo tanto ninguno tiene la capacidad de exterminar el proceso. --Bueno Alejandro, dijo Jorge pensativo, a lo que yo me refería es que el último juez que dictará la sentencia se le pudiese sobornar. ¿último juez? Repliqué yo en tono sorpresivo. Primero que normalmente no se sabe cual será el último juez, y después que aunque uno de ellos dicte la sentencia, aún hay otras piezas en el proceso que pueden revocar su decisión, por ejemplo el fiscal apelando, o la otra parte solicitando la revisión de la condena, o a través de un indulto al Ministerio de Justicia, como te digo nadie en el proceso tiene el bastón de mando, el cetro o la corona, pero todos se vanaglorian de poseerlo, viven en una falsa ilusión, un terreno pantanoso en donde unos tropiezan con otros, pero desde el comienzo del proceso hasta el final, nada es predecible ni definitivo, todo es movedizo, oscilante, inseguro y voluble.--Sí te comprendo ahora, dijo Jorge ya agotado de discurrir sobre todo esto, es un pena repuso que Freddy se vea inmiscuido en las garras del proceso como tú lo llamas y además la penosa vida que ha llevado, sabedor de ser un hijo bastardo, y cerrándole los jurados de los castings todas las oportunidades artísticas donde se presentaba. La vida de algunas personas es un verdadero jardín de lágrimas, pero creo que Freddy se merece una oportunidad en su corta vida, rehacerse de nuevo y olvidad todas las malas experiencias.--Sí, dije, Freddy es un luchador, además de un hombre fiel a su espíritu y a sus sueños, no creo que haya pena que dure cien años ni cuerpo que la resista, verás como al final triunfa como una verdadera estrella en el firmamento. Además aunque sea un hijo bastardo, lleva la sangre del arte en sus venas, y eso por muchos que lo traten de impedir, resurgirá como un fénix en llamas.

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