Copia de Martí en Juan Marinello

7/25/2019 Copia de Mart en Juan Marinello

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Mart en Marin ello: identidad cultural y pensamiento revolucionario.

Publicado en Revista Bimestre Cubana. N. 27 julio diciembre de 2007. p. p. !0"#7

Juan Marinello, el ms importante estudioso de la obra martiana en Cuba y en el

continente, parte, como Villena de un acercamiento al pensamiento del Maestro desdeel oficio de escri tor, y por el lo ve en Mart inicialmente al poeta, al ensayista, alhombre de exquisita sensibilidad, de acendrado humanismo. De aqu que la tica y lae st t ic a ! f ue ran e l punt o de par ti da de una in te lecc i"n que l o conduc ir a lpensamiento polti co y socia l, por un camino inverso al se#uido por Mell a, $oa, %ablode la &orriente 'rau o Carlos $afael $odr#ue( quienes de sus lecturas iniciales comoestudiantes rebeldes, acceden al Mart revolucionario, dem"crata antimperialista, ymucho ms distante aun del banco de (apatero donde 'las $oca conociera, )unto a lostextos mart ianos que lea desde la adolescencia, cuando so*aba con ser maestro, lacruda realidad de obrero explotado y mulato discriminado.

+a s"lida formaci"n intelectual de Marinello, profesor universitario, poeta y ensayista

de pres ti#io nacional y continental, director de una de las publicaciones culturales msimportantes de su momento, la Revista de Avance , colaborador en otras como Socialcuando Mella velaba sus primeras armas revolucionarias en la -niversidad paraconvert irse en l der de los comunistas cubanos en la lucha antimperial ista y por elsociali smo , l a ext racci"n c lasi st a bur#uesa de aquel hombre que v ieran losestudiantes incorporars e a la manifestaci"n del /0 de setiembre de !1/0 en que la queperdiera la vida $afael &re)o y que condu)era a Carlos $afael $odr#ue( a darse a larevoluci"n en su natal Cienfue#os , hicieron ms lar#o y dramt ico el comple)oproceso me dia nte el cual, desde la in fluencia del Mart, Juan Marin ello termin a poracceder al marxismo y al leninismo, para ent re#arse s in claudicaciones, hasta sumuerte, a la pelea por la l iberaci"n nacional y el social ismo, deviniendo enlace

viviente entre los fundadores de la ideolo#a del proletariado y sus ms si#nificativoscont inuadores , has ta 2 idel Cas t ro , pr iv il e# io que compart ie ra con su ami#o ycompa*ero 2abio 3robart. 4

De lo a(aroso del camino, sembrado de des#arramientos y renuncias, en un hombreque, a lo lar#o de su prolon#ada existencia, demostr" fehacientemente hasta qu puntose hacan firmes en l sus convicciones y su necesidad de vivir y actuar conforme aellas, sin vacilaciones ni traiciones, hay ms de un testimonio en la obra de Marinello.

%art icipante de la %rotesta de los &rece y del 3rupo Minorista )unto a su entra*ableami#o $ubn Martne( Villena, profesor de la -niversidad popular 5 Jos Mart6 )untoa Mella, cuya defensa, compart ida con Vil lena, asumiera en los difciles das de

pris i"n y huel#a de hambre del )oven lder comunista7 no es hasta !1/8, sie te a*osdespus de que Vil lena se hiciera car#o de la direcci"n de los comunistas cubanos,l ue#o del exilio de Jul io 9n toni o, que M ar inell o da e l paso que cambia ratrascendentalmente su vida, su in#reso en el %artido Comunista. 9 este camino a(arosoaludira en ese a*o precisamente )unto a la tumba recien cerrada de Villena:

Dieciocho a*os con los cora(ones )untos, es mucho en la vida humana. 9l#unave( nos separ" el modo de ver lo pol t ico. 9hora, al de)arme, todo lo veamoscon la misma pupila. ;s que sobre los dos #ravitaban pre)uicios de clase y de

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formaci"n. una an#ust ia profunda porque eran das de cambio de frente de mi vida.9hora , ya parece que e l cambio se produ)o y marcho con menos an#us t i a .9unque a veces. %ero ya no es hora de hablar de ciertas cosas. ;stoy ya, debessaberlo, metido a comunista, y disfruto, por ello, de la ms cabal desafecci"n demis anti#uos cofr ades? 8

;stas caracters ticas de la asunci"n por parte de Marinello de la ideolo#a delproletariado, nos permi ten constatar el proceso de ar ti culaci" n @ con el pensamientomartiano desde un n#ulo diferente, en tanto lo que predomina inicialmente, no es laur#encia del l der pol t ico que busca fundamentos para un proyecto revolucionarioque se sabe llamado a r eformular en nuevas condiciones hist"ricas como en Mella, y en

el propio Villena en su trnsito de Veteranos y %atriotas al %artdo Comunista, sino lameditaci"n de un hombre, humanista por excelencia7 vinculado, s, como intelectualhonesto a las contiendas pol t icas, pero desde una formaci"n cultural y pol t ica yasuficientemente acendrada, con la que tiene que romper radicalmente para asumir laideolo#a del proletariado, proceso en el que el pensamiento mart iano desempe*a unpapel prin cip al7 y para quien, a dif erencia de Villena, el cambio del ofic io de escritorpor la misi"n revolucionaria no se produ)o sin des#arraduras A

=e ha dicho con ra("n, que uno de los #randes temas de los estudios mart ianos deMarnello versa sobre su vi#encia hist"rica, y en ese contexto se se*alan tres aspectosesenciales: a la relaci"n entre Mart y el pensamiento marxista7 b el si#nificado delpensamiento ma rtiano para la repBbli ca neocolonial7 c la presencia de ese

pensamiento en la $evoluci"n Cubana.

%ero el #ran tema en la obra martiana de Marinello es la bBsqueda, en el escritor dese*era )erarqua latinoamericana y universal, la visi"n totali(adora de la obra escrita yprctico revolucio naria7 en cuyo proceso, devela precisame nte el pensami ento polti cocomo elemento determinante de esa exelcitud art stico li teraria, en tanto nBcleoestrctur ador de toda la obra y de su propia existencia.

;ntre los aportes de Marinello al proceso articulador entre el pensamiento martiano yla ideolo#a del proletariado, desde esta perspectiva inte#radora del Mart escritor yel Mart pol tico, deben destacarse los s i#uientes: a e l mtodo para l le#ar a la

comprensi"n de Mart como total idad7 b los at isbos acerca de los modos mart ianospara conocer la sociedad de su poca.

;s precisamente el conocimiento del Mart escritor lo que pone en condiciones aMar inel lo , una ve( que comien(a e l proceso de incorporac i"n a l movimientorevolucionario, de l le#ar a la comprensi"n de ese Mart como totalidad que lascondiciones de la Cuba de los a*os cuarenta y cincuenta exi#an. 1 9un en l ascondiciones ms dif ciles de su vida como revolucionario comunista, Marnelloencontr" al#Bn tiempo para el ensayo l i terario7 pero siempre en funci"n de la tareapol ti ca. +a relaci"n entre el Mart pensador, lder revolucionario y escritor tena

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particular importancia para el presente, y para el futuro por dos ra(onesfundamentales.

;n medio de la ofensiva ideol"#ico cultural imperial ista que se incrementa por esosa*os, era imprescindible refutar los intentos de desvirtuar la ima#en martiana, atravs de la exaltaci"n de la obra literaria desasida del contenido ideol"#ico poltico,especialmente en lo que se refiere al antimperial ismo, el antineocoloniali smo,

anticlericali smo, anti rracismo y la identi ficaci"n con los intereses de las masashumi ldes , o presentando sus ideas pol ti cas y sociales como puros del ir ios, oacentuando elementos como sus alusiones a sentimientos reli#iosos, va por la cual sel le#a a considerarlo un santo, cuyo e)emplo era, por tanto, dif c il de se#uir , oportador de un pensamiento que no resultaba fruto de una certera inda#aci"n en lasoc iedad de su poca , a t ravs del adecuado uso de l a r a("n , med iada por l aexperiencia practico revolucionaria.

+a necesidad de unir a los intelectuales y artistas pro #resistas y revolucionario entre sy con las fuer(as de avan(ada del resto del pueblo, e incorporarlos a la lucha contra elimperial ismo yanqui, exi#a mostrar a Mart como e)emplo de intelectual capa( de

poner su obra al servicio de la causa a la que estaba dis puesto a entre#ar la vid a, y elhecho de que esa misma posici"n fue la que lo convir t i" en el escri tor de ta l lamundial en len#ua espa*ola que es hoy. !0

;ntre los aspectos novedosos de la interpretaci"n marxista y leninista de la obra y laf i#ura de Mar t que Mar inel lo desarro ll a, debe destacarse e l hecho de que , adiferencia de otros enfoques de similar orientaci"n ideol"#ica de sus contemporneos,al part ir de la perspectiva del creador l i terario, el #ran ensayista accede a la obramart iana como totalidad, mediante el instrumental te"rico metodol"#ico de lah is tor ia de l a l it era tura y l a c r t ica l it era ri a, en lo esencial desde un enfoquedialctico materialista despo)ado de tradicionales esquematismo7 !! camino por el quedemuestra que lo me)or de la obra martiana desde el punto de vista l i terar io, esprecisamente el con)unto de los textos de la etapa de ma dure( de su id eario, queMarnello sitBa a partir de ! 0, en que arriba a los ;stados -nidos. !4

;n Mart se dan con)untamente, no hay que olvidarlo, el artista de sensibilidadrica y varia , ansiosa y desalada y el revolucionario de conducta vi#i lante yaustera, inseparable de su responsabilidad y funci"n. Mart no es solo, adems,el admirable lder de un movimiento libertador, sino el orientador de los rumbosculturales de veinte pueblos. !/

;ntre los ar#umentos que es#rime para demostra r el carcter determinante de la misi"nrevolucionaria en la excelencia del oficio l iterar io, Marinel lo se refiere a varios

elementos que no s"lo t ienen si#nificaci"n en lo concerniente a la arista art st icoliteraria sino a la totalidad de la obra martiana, en cuyo contexto lo artstico literarioresulta imposible de deslindar de lo ideol"#ico poltico, entre los cuales habra quese*alar, s"lo a modo de e)emplo:

;l afn de elevar la cultura y en especial la l i teratura lat inoamericana a un planouniver sa l s in perde r sus r a ces, sob re la base del con tact o con li te ra tu ra sprocedentes de div ersas confines: francesa, in#lesa, la espa*ola inclu sive en susme)ores exponentes de todas las pocas y de lo popular, todo asumido desde unaespecial capacidad de asimilaci"n creadora y ori#inal , como paso necesario para

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romper la dependencia con la fuente primi#enia procedente de los coloni(adores,como expresi"n concreta del presupuesto mart iano en torno a la conformaci"n dela identidad cultural por medio de la apertura hacia la cultura universal, partiendosiempre de las races propias.

+a constataci"n en Mart de la contradicci"n entre la necesidad de creaci"n delart ista y de comunicaci"n del #ua de pueblos, que se mantiene a lo lar#o de

toda su obra y en la que al f inal vence siempre el l der revolucionario,condici"n que da a su obra de madure( los valores literarios ms altos.

?lo que le otor#a el ms alto sitial entre los escritores de habla espa*ola vienede haber asimilado y usado las ms a#udas innovaciones formales de su pocasu)etndolas en definitiva, a su prop"sito central de una literatura alimentada ycontrastada con las real idades ms hondas y trascendentes de 9mrica y delmundo. !8

+a concepci"n de la obra mart iana en su evoluci"n interna como corresponde a laconstataci"n de que el Maestro no es s"lo un creador, sino que, adems, result"creaci"n de sus propias circunstancias hist"rico culturales, por lo cual no es vlido

presentar aforismo s como verdades pensadas, sin constatar c"mo, d"nde ycuando las escribi" o di)o.

;sto nos lleva al se#undo de los aportes de Marnello a la comprensi"n del proceso dearticulaci"n del pensamiento martiano y la ideolo#a del proletariado, la cuesti"n delmtodo para la cabal comprensi"n del pensamiento martiano en su evoluci"n interna,que Marinello anali(a tambin en la direcci"n de aprehender esa total idad desde elMart creador l i terario. =e propone demostrar lo l imitado que resultara cualquierintento de anali(ar la obra li teraria mart iana si no se parte de su aprehensi"n comototalidad, en la cual el artista y el poltico forman un s"lo hombre en quien, como lamisi"n revolucionaria determina el e)ercicio del oficio intelectual, su ubicaci"n en losmarcos de la p roducc i"n a rt s tico li te ra ri a, n i puede hacer se a par ti r de la s

clasificaciones al uso, ni tiene sentido fuera de los marcos del lu#ar que ocupa en lahistoria real como pensado r y lder revolucionario.

;n l1//, Marinello hacia referencia a esta problemtica: al insist ir en que: 5;n elcamino hacia Jos Mart se al(ar siempre un #ran obstculo, su unidad? el artista noes en l hombre distinto del poltico, del meditador, del 9p"stol.6 Vuelve a este temacasi veinte a*os ms tarde, planteando que a una personalidad como Mart 5no se lepuede fraccionar de acuerdo con preferencia s polticas o inclinaci ones li terarias. E sele toma en bloque F en esa totalidad humana de la que parte to do en l, o n o se le tomade n in#una manera,6 %ero , en es t a unidad, d ice en !18!, como 5Mart fueprimordial mente un pol ti co ? quien in da#ue el color de su pensamiento con olvido

de esta verdad anda descaminado6.!@

Desde este presupuesto #eneral, para Marnello el estudioso de la obra martiana debert en er en c uen ta p ar a a come te r s u t ar ea , e nt re o tr as , las s i# uien tes p au ta smetodol"#icas:

+a ob)etividad en el anlisis como elemento esencial. Mart no puede ser visto nicomo un 5confes iona l6 , n i como un marx is ta , no e s pos ib le e st ud ia rl oenfrentndolo a realidades posteriores a las que inte#raron su personal idad y

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provocaron su acci"n, pero del mismo modo se equiv oca quien pretendaconcebirlo al mar#en de la realidad presente.

Mart es un hombre de t ransici"n que ac tBa en una coyuntura espec ia lmentecomple)a, la del t rnsi to del colonial ismo al neocolonial ismo imperial ista, en lacual aparecen destellos de un mundo diferente: &odo ello se expresa en su acci"ny en sus ideas, en el momento en que, precisamente con su obra, se inicia unproceso de profundas transformaciones en el contexto de la culturalat inoamericana , espec ia lmente en l a l it era tura, en e l que se per fi la ran dostendencias esenciales: la que si#uiendo la tradici"n latinoamericana ser expresi"nde los intereses y sentimientos de estos pueblos7 va por la cual ascender a suuniversali(aci"n7 y la que asumir el camino de las transformaciones de carcterformal, desasida de la realidad.

Mart fue un servidor de la l iberaci"n lat inoamericana como pensador, lder pol tic o, ar tista y como or#ani(ador y soldado de la #uerra necesaria , cumpliendotodas las exi#encias de su momento hist"rico

Debe ser visto como expresi"n #enuina de lo cubano. Go es posible ver lo cubanocomo un hecho separado del mundo. Cuba debe ser considerada al estilo martiano,como realidad superable, en tanto 5los vicios y manquedades de la naci"n nosvienen de una formaci"n hist"rica desdichada, pero no irremediable6. 9s , Mart ser la expresi"n de la Cuba que ha de ser en el futuro. =on antimartianos los que5no aciertan a ver en Mart el perfil cubano, aparte de no conocer a Cuba ?porquenie#an no s"lo el peso de los factores hist"ricos, sino la capacidad del pueblo parasuperarlos.6 ! A

Go se puede anali (ar la obra ma rtiana ne#ando que el lo#ro de un #ran artista esposib le s"lo por la va de lo nacional o de espal da a lo nacional. 5+a in te #raci"n de

un escri tor #rande ha de venir de superar en una vo( muy sin#ular la confluenciade elementos distintos que hacen su confluencia, y estos no han crecido sin )u#osextranacionales6!

$esulta imposible adoptar ante Mart la postura lcita ante un hroe de los vie)ostiempos cuya obra est consumada o su acci"n ha sido ne#ada por la historia. 5+ostemas de Mart , sobre todo, son nuestros temas. +a huella de su enfoque y de suexhortaci"n anda en cuanto tocamos... la vida en lo que tiene de pulso y ries#o, depre#unta y trnsito, de ha(a*a posible y de lo#ro probable, es cosa re*ida con elen)uiciamiento cumplido,6 !

Hay que evitar por i#ual la exaltaci"n parafrst ica y el examen abstracto a losque puede conducir tanto la variedad de temas como el modo en que son tratado sen la obra mart iana. ;l anlisis abstracto, nie#a el ms apetecible rendimientomartiano, 5 el de ofrecer, para hoy y para ma*ana la vi#encia impulsora de suprevisi"n cubana. ;ste exame n abstracto puede conducir a que aplaudan el brocon que se al(a contra el imperialismo norteamericano, los que viven a su sombrao hasta persi#uen a los que, inspirados en Mart, lo denuncian y combaten.

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9l ofrecer un Mart total, hay que tomar al hombre en su obra y en toda su realidadtumultuosa, sin temor a penetrar en su intimidad y en sus contradicciones, pero acondici"n de que no se atomice en mira)es minBsculos y en desdibu)os ocasionales,como ahora se es t hac iendo F !1@/ F su inte#r idad creadora n i su mensa )erevolucionario.

Go es admisib le inda#ar en el Mart in si#ne escritor que dis curre bril lan teme ntesobre las #randes cuestiones cubanas, de 9mrica y del Mundo, sin interesarse enlo que postula y defiende sobre los problemas universales, de 9mrica y delmundo.

Go se expli ca, 5que quien mu estra su identif ic aci"n con Mart por su condici"nsuprema de l ibertador de su t ierra, no se si tBe ahora en el campo de los que, ba)osu advertencia concreta, deban completar su obra libertadora.6 !1

Mas de un error y desenfoque en comentarios sobre la obra mart iana obedecen ano haber entendido que el luchador cubano, por estar metido en la hondura de supoca, pertenece al futuro.

Go es posible obviar que la palabra de un hroe poltico ha de ser referida a losproblema s que ha confrontado y a los movimientos que ri#e7 por ello no es l ci tocontraponer F por ser intento vano F esos dichos del escritor combat iente a losconceptos y orientaciones de los que, muy distantes en el tiempo, lo enaltecen contrascendente identificaci"n.

;l conocimiento de la esencia del pensamiento martiano exi#e el rastreo en la selvatupida y combatiente de toda su papelera, al ser un escritor distendido en notas,discursos, cartas, proclamas, ensayos, poemas dramas. ;s ese el Bnico modo decomprender 5que la potencia de observador poltico del cubano se prueba por su

ent endimient o de l o que ser, en l os d a s que s i#an a su v ida, l a r ea li dadamericana6.4 0

Go hay que exi# ir cali dad martiana al que recuerde al Maestro, pero s, hay quepedir a quien lo nomb re que mi re haci a el pueblo, hacia los homb res con amorosaimpaciencia, definiendo e inda#ando las maneras me)ores de servirlo .

;sta bBsqueda del escritor y el revolucionario en estrecha interconexi"n le permiti" aMarinello atisbar al#unos de los elementos metodol"#icos del anlisis martiano de lasociedad, aun cuando, como el resto de los marxistas y leninistas que inda#aron en lasideas del Maestro por entonces, no pudiera descubrir la existencia de un mtodo

perfectamente estructurado y me nos aun caracteri(arlo7 pues como se sabe no fuehas ta los a*os se ten ta que es tudiosos de l pensamiento mar ti ano lo#raron es teimportante descubrimiento.

Go obstante, Marin ello se*ala, por e)emplo, que Mart atesor" en su corta vid a una#ran suma de lecturas y noticias, y si bien no todas pudieron ser complementadas ycontrastadas con precisi"n erudita7 queda como lecci"n7 la act itud mart iana ante loslibros, su sed de conocimiento, su ansiedad de precisi"n y rendimiento, el recio deberde estar al da y de penetrar con mano propia en todos los campos, de sentirse parteresponsable de la humanidad que investi#a, su espritu de aprender en los libros y en

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la vida con el sabio y con el que no sabe, la anchura de mente que en todo busca yhalla novedad y aportes, sin renunciar al e)ercicio libre del )uicio propio.

Insiste, adems, en la rara ut i li(aci"n que Mart hace de la cultura: el dominio dediversas len#uas, su comprensi"n de las dist intas pocas. mira)es y atm"sferas7 suvirtud capital que hace que lo rai#al y cercano no le estorbe mirar hacia todos lost iempos y rumbos, la capacidad de meter en cauce propio las corrientes a)enas, las

vas para actuali(ar su pensamiento y su esti lo , la ext raordinaria capacidad paradome*ar la pu#na constante entre el creador y el revolucionario, entre el oficio y lamisi"n, en favor de esta ultima.

Considera Marinello, que la vi#encia poltica de Mart le viene entre otras ra(ones, desu capacidad para transfundir lo universal en lo cercano. $efutando a quienes ne#abana Mart el haber calado hondo en el fen"meno imperialista, Marnello se*ala que

=i Mar t merece reverencia como pensador pol ti co es porque encuadra e lf en"meno que iba a ser cap it al para t odo un con ti nent e despus de sudesaparici"n en Dos $os , con exacto sentido de ra("n y ma#ni tud? Go

puede pedirse a Mart ? que calibre con exactitud materiali sta la in te#raci"nde un hecho econ"mico en cuya "rbita se mova7 pero lo sin#ular est en que,sin definir los factores concretos que cambian el capitalismo tradicional enpoder desbordado, Mart advierte, siente, denuncia que una #ran mutaci"nne#ativa se est reali(ando a su vera. 4 !

Marinello insiste en la existencia en Mart d e una cierta visi"n dialctica, hi)a m biende su pract ica revolucionaria que de una elaboraci"n te"rica, que se expresa, por e)emplo, en lo que se refiere a la verdad colectiva y poltica subyacente en expresionestales como: la casa est en el rbol, porque con ello, a su )uicio, expresaba que: 5cadarealidad, para serlo verdaderamente, ha de acunar en su seno el impulso que la nie#uesuperndola6. 44

=e*ala, adems, que la esencia poltica del pensamiento martiano, y la fidelidad a lasmBltiples exi#encias de su quehacer hist"rico, en un hombre que fue esencialmente unpol ti co, ori#in an el hecho de que alc ance 5un sentido dial ctico de lo pol tico que noest asentado en una convicci"n fi los"fica, sino en una a#uda comprensi"n de losacontecimientos6 4 /

=e afana en destacar, adems, la virtud capital martiana de meterse 5 en lo ms hondode la realidad que hay que cambiar en bien de los hombres, pero sin que ello hiera unsentido dialctico y desembara(ado que entiende la obra revolucionaria como unatarea sin final que en cada t iempo t iene su porci"n de deber, pero que se traiciona

cuando se pretende ver en esa porci"n el deber futuro6.48

=in sospechar lo cercano que estaba para el mismo y para su pueblo ese da, piensaMarinello, en los turbulentos a*os de la dcada del cincuenta en Cuba, que sobreMart se haba hecho

? hart o rui do d isco rde, demasiada f an fa rr ia embul lada , mucha barat aatomi(aci"n? ;sto ha sido como la va pur#ativa insoslayable, obli#ada, paraarribar un da, que no parece cercano a una consideraci"n como inestrenadapor dir ecta, o una in#enua in terro#aci"n de sus valores fundamen tales. ;n ese


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da pensamos muchos de los que le hemos ofrecido horas de )uventud y demadure(. =er despus de nuestro turno que lle#ue el amanecer dichoso en quese levante entre ruinas de homena)e y polvo de entusiasmo, el Mart prstino yradioso, un Mart que no hayamos ledo nunca, un hroe renacido de sus ceni(asa#otado ras al que podamos acer carnos como a un profeta familiar.4@

+os traba)os de Marinello despus de !1@1, sin abandonar la temtica sobre Mart

como totalidad, a partir de la consideraci"n de la misi"n revolucionaria como nBcleoestrcturador de la obra l iteraria, versan adems, de manera part icular y recurrente,sobre l a ac tual idad del pensamiento pol ti co mar t iano especialmente en lo queconcierne a los nexos con la revoluci"n triunfante, y en ese mbito, retoma una ideaen la que haba venido insistiendo desde mBltiples aristas en los ensayos anteriores,en est recha relaci"n con lo que considera la va certera para la comprensi"n de suobra.

;n este sentido, de hecho Marinello considera mart iano, basndose precisamente enesa vis"n dialctica de la poltica que le reconoce, que aunque: 5+a verdad poltica dehoy no es la de Mart F aunque en mucha medida sea vi#ente su previsi"n cubana F,

pero si#ue sie ndo verdad plensima su manera de buscar la verdad pol tica.64A

CreeMarinello que la constante preocupaci"n martiana por el hombre y su destino, volcadasobre lo de ahora, es la va para una imitaci"n leal. > a*ade:

+o que importa no es t raer a Mar t a nues tro t iempo? que no es e l suyo,aunque en mucho en su palabra7 lo que interesa es que otor#uemos permanenciaa una postura profundamente mart iana: la de pelearse con lo de hoy, que estvivo y actuante y no con lo de ayer que est muerto y enterrado. Go se concibeel martismo sino como inda#aci"n actualsima, como reacci"n #enerosa, afiladay pronta contra lo que retarda la total )usticia. 4

Insiste en que todo anlisis de Mart hecho por un cubano de hoy es una pelea en

la que se entrecru(an historia y presente, la responsabilidad al en)uiciarlo y laident if icaci"n cordial. %ara Marinello no era un secreto que en los das de lascelebraciones del Centenario no faltaron voces que intentaban oponer el pensamientomar ti ano a l as nuevas corr ientes pol ti cas revolucionar ia , en pr imer lu#ar a lsocialismo y aBn al antimperialismo militante. %or ello la insistencia en demos trar cu alera la verdadera forma de continuar sus ideas y u obra l ibertadora y de )usticia ydi#nificaci"n humana, en defini tiva, la l nea sumida por los marxistas y leninistascubanos, mili tantes o no del %art ido del cual era Marinello fi#ura cimera, y por losverdaderos martianos vinculados a la lucha por la independencia nacional , contra elneocolonialismo, desde los intereses, como Mart, de las masas humildes.

%or todo e llo, a l tr iunfo de l a $evoluci"n de ;nero , Marine llo, que habacomprendido desde los das de lucha contra la dictadura batistiana que iniciara 2idelCastro, que en el pro yecto fidelista se plasmaban, en nuevas condiciones hist"ricas, lasideas del Maestro, sint i" como un deber ineludible con su pueblo y consi#o mismo,ocuparse de refutar a quienes, dent ro y fuera del pas , intentaron desde el primermomento, utili(ar la fi#ura de Mart, ter#iversando la verdadera esencia de sus ideas,para oponerlo a la obra de profundas transformaciones pol ti cas, social es, econ"micasy culturales que por primera ve( se emprenda en Cuba7 utili(ando el anticomunismoy e l fat al ismo #eo#rf ico que se haban ex tendido en e l pa s en los a*os de


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extraordinaria penetraci"n cultural e ideol"#ica precedentes desatada por los ;stados-nidos, recrudecida hasta el mximo a partir de !1@1.

'asndose en los presupuestos que haba desarrollado consecuentemente a lo lar#o desu extrao rdinaria obra de interpretaci"n del ideario martiano, Marinello fue anali(andoexhaus tivamente cada una de l as acciones revolucionar ias a l a lu( de l as ideasmartianas, para demostrar que la proyecci"n social ista de la revoluci"n era la Bnica

va de ser f iel a l le#ado del Maest ro en las condiciones hist"rico concretas demediados del si#lo , )unto a sus compa*eros de a*e)a mil i tancia comunista, en lamisma lnea ar#umental de la cual 2idel Castr o devino excepci onal expone nte.

%ara Juan Marinello, no pas" inadvertido que la interrelaci"n de las ideas martianas yla ideolo#a marxista y leninista en la que se fundamentaba la nueva etapa de lasluchas nac ional liberadoras del pueblo cuando, desde los d as de l a h is t"r icaautodefensa de 2idel Castro en el )uicio por los sucesos del Moncada, tena comofundamento dos elementos principales, rei terado hasta la saciedad en sus estudiosmartianos precedentes:

a +a condici"n esencial del Maestro quien, por haber sido hombre de su t iempo, loera tambin del nuestro, ra("n por la cual sus predicciones sobre el futuro de Cubamantenan plena vi#encia, aun sin haberse sustentado en un enfoque marxista de lasociedad7 ent re ot ras ra(ones por haber s ido capa( de ur#ar di rectamente en larealidad de su poca con una visi"n dialctica de la poltica y mediante la prcticarevolucionaria.

b ;l profundo cambio de las condiciones his t"ricas ori#in ado por el desarroll o delimperialismo y del neocolonialismo.

;n !1Al, escriba Marinello:

+a $evoluci"n presente se anuncia y perfila en la prdica martiana, aunquerealidades distintas y una nueva situaci"n internacional de nuevos lineamientosla condu(can a tareas ms hondas y trascendentales. ;l movimiento l ibertadorencabe(ado por 2 idel Cas t ro es l a ms exacta proyecci"n de los ob)et ivosmart ienses en los das de la victoria del sociali smo. 'atall" s in cansancionuest ro #rande hombre contra la obra del imperial ismo y de)" dicho a loscubanos que en continuar esa batal la estaba su deber pol t ico. +a persistenciade sus hue ll as , y l a hones tidad en e l modo de cumpl ir su mandato, hanconducido a la realidad de ahora. 4

%or ello, para Marinello, las esenciales ideaciones polticas martianas no entraban

en contradicci"n con la ideolo#a del proletariado, ni con el proyecto s ocialista en ellafundamentado. ;l recuento de al#unas de las posturas esenciales de la $evoluci"nante los problemas ms candentes de la realidad cubana y latinoamericana, a la lu( delas ideaciones ms radicales del Maestro, lleva a Marnello a afirmar que:

-na rpida incursi"n por el pensamiento mart iano ha sido bastante paraconvencernos de l a a r t iculac i"n y consecuencias ent re sus pos tulados yprop"sitos y lo s que impuls an la #ran revoluci"n que Cuba desarrolla. ;lideario martiano es, como se ha visto, el ms avan(ado de su tiempo americano,y, por ello pose e influencia sin#ular en las actua les luchas de su pueblo. 41

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9certadamente Marinello incluye entre estos elementos no solo los prop"sitos, esdecir, el proyecto revolucionario y el modelo de sociedad propu#nados por Mart , /0

sino sus postulados te"ricos #enerales. ;ntre estos Bltimos destaca que fue el propioMart quien 5 advir ti" reiteradamente, con profundo sentido dialctico, que cadapoca t ra a sus problemas y #estaba l as soluc iones opor tunas 5 7 ca li fi ca deantimartiano 5tratar de aplicar sus f"rmulas concretas a una situaci"n nacional yuniversal a mucha distancia de las que Mart conoci" y en)uici"6, y tambin sostener 5que la #ran revoluci"n que vive su pas no t iene comunicaci"n fecundante con suideario pol tico, social y econ"mico6 /! F ;n ot ro momento, Marinel lo se referi r aestos nexos:

;s cierto que nuestra $evoluci"n se afinca en el marxismo leninismo, que seinte#ra en cri terios y principios no compart idos por Mart 7 pero no es menoscierto que el pensamiento del cubano y el del c icl"peo de la revoluci"nsocial is ta se es l abonan en un mpetu liber tador y aunque fundados enconcepciones distintas, ambos combaten centralmente la a#resi"n imperialista,responsable de l a esclav itud y l a miseri a de muchos millones de sereshumanos./4

Marinello, como Mart, posey" la no muy frecuente virtud de asimilar creadoramenteen un pensamiento propio y en or i# inales y c readoras formas expres ivas , l asinfluencias que le lle#aban de mBltiples fuentes, #racias a una vasta cultura, asimiladadesde las firmes races de las tradiciones nacionales. ;n sus estudios sobre Mart, y en#eneral en t oda su obra de # ran ensayi st a con ti nent al , e st a v ir tud se pone dema nifies to y p or ello , lo q ue a su me d el ma rxis mo y d el le ninismo q ue daintrnsecamente art iculado con su rai#al formaci"n mart iana, al mismo t iempo queinfluye decisivamente en el profundo conocimiento que lle#a a alcan(ar de la obra delMaestro.

De ah que lo co incidente ent re e l pensamiento mar ti ano y l a ideolo#a de lproletariado apare(ca, en su excelente prosa, de ma nera fl ui da a partir de unaarticulaci"n conceptual y expresiva que permite, por otra parte, que lo que distin#uea ambas concepciones se exprese, tambin de forma natural , destacndose por el locon #ran ni t ide( la no contradicci"n esencial ent re presupuestos conceptuales yprop"sitos practico revolucio narios / /.

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Notas y referencias

Ver: $i#oberto %upo %upo. Aprehensin Martiana en Juan Marinello. +a Habana, ;ditorial9cademia, [email protected] Ver: 2abio 3robart. Trabajos escogidos. ;ditorial de Ciencias =ociales, +a Habana, [email protected] es sabido, 2abio 3robart, de ori#en polaco, estuvo entre los fundadores del primer %artidoComunista de Cuba. 2ue no s"lo compa*ero de luchas, sino ami#o entra*able de Mella, Villena y de'las $oca, Juan Marinello y Carlos $afael $odr#ue( y de otros diri#entes y militantes de estaor#ani(aci"n, quienes vieron en l a un Maestro en los primeros a*os de su formaci"n marxista. =us&raba)os esco#idos , peque*a muestra de in#ente labor de divul#aci"n de la ideolo#a marxista yleninista y de historia del movimiento obrero y comunista cubano de en la cual fue actor de primeralnea, constituyen material de obli#ada consulta. Gos interesa destacar ahora el breve recuento de lasprimeras obras de los clsicos del marxismo difundidas en Cuba, en tanto permite conocer con cualeselementos te"rico metodol"#icos contaron los fundadores de la ideolo#a del proletariado y suscontinuadores inmediatos para interpretar la historia del pas y del pensamiento cubano, y de larealidad presente, en los cuales fundamentaron el proyecto revolucionario y el modelo de sociedad. ;nel artculo 52ederico ;n#els6, plantea que entre !1!0 y !1!/, circularon en el pas, entre otros, los

si#uientes textos: 5Del socialismo ut"pico al socialismo cientfico6, 5;l socialismo y la reli#i"n6, de;n#els7 5=alario precio y #anancia6, un resumen de El capital, de Marx. ;n los a*os treinta sedifundieron en el pas los si#uientes ttulos: El !" #ru$ario de %uis #onaparte, de Marx, El anti& 'huring5+udKi# 2euerbach y el fin de la filosofa clsica alemana6, 5;l catecismo comunista ( Elorigen de la fa$ilia la propiedad privada y el Estado, de ;n#els, entre otras obras. %orentrevistas a 'las $oca, Carlos $afael $odr#ue(, y Juan Marinello, sabemos que de +enin sedivul#aron tempranamente en Cuba, entre otros textos: las ventiuna condiciones para el in#reso a laIII Internacional, )$perialis$o fase superior del capitalis$o El Estado y la revolucin Eli*+uierdis$o enfer$edad infantil del co$unis$o, y las tesis leninistas sobre la autodeterminaci"nde las naciones./ $oberto 2ernnde( $etamar. 5Mart en Marinello6, en: Juan Marinello. Dieciocho

ensayos Martianos . ;ditora %oltica, +a Habana, !10 p. !!8 Ibidem, p. !4.@ Denominamos articulaci"n al proceso l"#ico natural que conduce a la mayora de las fi#uras msdestacadas entre los revolucionarios cubanos del si#lo del si#lo , a la asunci"n de la ideolo#a delproletariado, desde una inicial formaci"n martiana, como consecuencia de la asimilaci"n de lasideaciones ms avan(adas del Maestro, en el contexto de la nueva situaci"n hist"rico concretaori#inada por el desarrollo, en las primeras dcada de este si#lo, del primer experimento neocolonialdel imperialismo norteamericano en la 9mrica +atina, en la bBsqueda de soluciones a los problemasque se desarrollan o sur#en despus de la muerte de Mart, como condici"n ineludible para llevar a laprctica su ideal nacional liberador, concebidos desde los intereses de las masas humildes, que ennuestro si#lo en Cuba, tena necesariamente que proyectarse hacia el socialismo. ;l concepto dearticulaci"n, propuesto por un #rupo de investi#adores del Instituto de 2ilosofa, estudiosos delpensamiento martiano, implica la existencia de nexos de continuidad, ruptura y superaci"n de stecon relaci"n al marxismo y al leninismo, pero sin que las diferencias esenciales entre una y otraconcepci"n implique la existencia de posiciones anta#"nicas en la esfera de las ideas polticas nacionalliberadoras y antimperialistas. Con este concepto queremos destacar la nueva forma de interrelaci"nentre las tradiciones nacionales revolucionarias y la ideolo#a del proletariado,A Carlos $afael $odr#ue(, 5Juan Marinello l y II, en %etra con filo, obra citada, &. /, p. 8!0 y 8!!. $efirindose a ese proceso, ha dicho Carlos $afael $odr#ue(::

Marinello procede de la bur#uesa misma y para unirse al proletariado, renunci" al centrala(ucarero patrimonial. =oport" el ostracismo y las calumnias a que aludiera 2idel Castro al


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hablar de la soledad y minora en que estuvieron los que hasta !1@1 se confesabancomunistas o eran tan solo antiimperialistas.Gin#Bn cubano, nin#Bn latinoamericano les reprochara hoy haber preterido la vocaci"nliteraria por el deber nacional y social.Juan Marinello lo hi(o no sin an#ustias internas. =u mayor respeto hacia Villena le vena dehaberse dado cuenta de que $ubn abandonaba la piel literaria sin que le si#uiera ardiendopor toda la vida la carne viva.

Ver: $oberto 2ernnde( $etamar. 5Mart poltico en la obra de Juan Marinello6 en7 Recopilacin dete,tos sobre Juan Marinello, =erie Valoraci"n MBltiple, -asa de las A$ricas, +a Habana, !11. ;ntre los traba)os en los que se hace referencia a los nexos entre el anlisis literario y el estadio delpensamiento poltico martiano en la obra de Marinello, habra que mencionar los si#uientes: Mercedes =antos Moray. 5Ideolo#a y esttica en Jos Mart/ escritor a$ericano6 , enRecopilacin de te,tos sobre Juan Marinello obra citada.1 ;n medio de la #ran ofensiva ideol"#ico cultural del imperialismo norteamericano, especialmentedespus de la =e#unda 3uerra Mundial, la lucha ideol"#ica adquiere mucho mayor importancia, y eneste contexto se utili(an mtodos mucho ms sutiles para desvirtuar las tradiciones nacionalesrevolucionarias y para presentar a los marxistas y leninistas como factor disolvente o ter#iversador deestas. ;l rescate del pensamiento martiano en sus aristas ms radicales, desde posiciones ob)etivas,

ocup" un lu#ar importante en esta contienda.! 0 $oberto 2ernnde( $etamar. 5Mart en Marinello6, en: Juan Marinello. 'ieciocho ensayosMartianos.;ditora %oltica, +a Habana, !10

+os textos de la etapa de madure( de Marinello sobre Mart de)aron bien pronto atrs la inicialafirmaci"n de la ausencia en la obra martiana del compromiso social que le hiciera afirmar en!14 que la 5poesa tena para l ? el si#nificado de un adorno de lo feo y vul#ar de la tierra.

! !Ver: Juan Marinello.6 +enin y Mart6, en: Masas, 9*o !, G. A, octubre noviembre de !1/8.;n la misma medida en que Marinello asimila la teora marxista, estuvo en condiciones de penetrarms profundamente la esencia revolucionaria del pensamiento martiano que continu" anali(ando a lolar#o de toda su vida, y desde esa nueva perspectiva alcan(" una comprensi"n mucho ms amplia delos nexos entre el ideario ms radical del Maestro y la ideolo#a del proletariado, como lo prueban los

ensayos y artculos sobre el tema posteriores a !1/8.! 4 ;ntre esas obras se*ala %a Edad de 0ro Escenas nortea$ericanas, y los diarios de la #uerra,adems de la obra potica de estos a*os, sobre todo )s$aelillo 1ersos sencillos etc.! / Juan Marinello. Mart/ escritor a$ericano. Imprenta Gacional de Cuba, +a Habana s.d., p. !/0! 8 Ibid. %. !/! F !/4.! @ ;n $oberto 2ernnde( $etamar, obra citada, p, /0.! A Juan Marinello. 5;spa*olidad literaria de Jos Mart. ;n: Dieciocho ensayos martianos, obra citada,p. A8.

! Ibidem, p. A@.! Ibidem, p. p. !. 4.;n !1@/, a*o del Centenario del natalicio de Mart, Juan Marinello publica dos ensayos antol"#icos,por su contenido, en relaci"n con la obra martiana en s misma, y por el anlisis crtico, polmico, delo que hasta el momento haban sido, a su )uicio, enfoques err"neos, muchas veces tendenciosos de laobra escrita, la acci"n revolucionaria y la personalidad del Maestro y su si#nificaci"n presente. Dehecho, tanto 5;l caso literario de Jos Mart6, como 5'alance y ra("n de una universalidadcreciente6, 5;l antimperialismo de Jos Mart6, constituyen una sntesis de lo que hasta el momentohaba expresado su autor, como una respuesta a los intentos de presentar un Mart acorde con laofensiva ideol"#ica imperialista que #ui" a la mayora de los participantes del evento internacionalor#ani(ado por la dictadura, batistiana como parte de los intentos por le#itimarse, y en momentos enque le sur#a al pas, con la 3eneraci"n del Centenario comandada por 2idel Castro, una nueva fuer(arevolucionaria llevara a cabo la primera batalla de la nueva etapa de las luchas nacional liberadoras


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del pueblo cubano, el asalto a las fortale(as santia#ueras.! 1 Juan Marinello. 5;l caso literario de Jos Mart6 en obra citada. !0!.4 0 Ibidem, p. !!0.4 ! Ibidem, p. !01.4 4 Ibidem, ;spa*olidad literaria de Jos Mart, obra citada, A4 / ;n: $oberto 2ernnde( $etamar. LMart en Marinello6, obra citada, p. 44 8 Ibidem, 5;l Caso +iterario de Jos Mart6, obra citada, p. !!.4 @ Ibidem, 5Caminos en la len#ua de Jos Mart6, en Dieciocho ensayos martianos p. p. !44 F !4/.4 A Ibidem, 5;spa*olidad literaria de Jos Mart6, obra citada. A.4 Ibidem, p. A4 Ibidem, 5$ecuento y perspectiva6, en obra citada, p. !1/.4 1 Ibdem, ;l pensamiento de Jos Mart y nuestra $evoluci"n socialista6, en obra citada, p. 444/0 =e trata del antimperialismo7 las profundas transformaciones econ"micas7 la plena i#ualdad y)usticia sociales7 el antirracismo7 el respeto por las creencias y sentimientos reli#iosos individuales y latotal libertad de cultos, la oposici"n a la intromisi"n de la I#lesia como instituci"n en las cuestionesdel ;stado7 la implementaci"n de una educaci"n cientfica y tcnica, sin olvidar la adecuadaformaci"n humanista, acorde con las necesidades del desarrollo econ"mico independiente y laformaci"n de una rica espiritualidad para las masas7 la cultura al alcance de las #randes mayoras7 la

poltica internacional basada en el respeto mutuo y las relaciones con todos los pueblos del mundo.;n fin los mismos elementos que a )uicio de Marinello a*os antes, haban constituido el fundamentode las ideaciones martianas con las posiciones de los comunistas cubanos,/ ! Ibid. 5;l pensamiento de Mart y nuestra revoluci"n socialista6 p. p. !11 400./ 4 Ibid./ / Ver: $i#oberto %upo %upo, ob cit.

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Copia de Martí en Juan Marinello