El rey Amadís

De tarde por la noche el rey Amadis hablo con su madre Melibea sobre un problema que lo

tenía afligido:

Madre, confiaré en mi criterio y apostaré por un negociante que ha ofrecido algo muy

ventajoso para la vista pública de mi persona, no sé si confiar pero es una buena propuesta

y lo haré cuanto antes.

Explicándole así a su madre, ella respondió:

Amadís la paciencia que tengas va a ser muy importante en este caso, confió en tu criterio

hijo pero tienes que analizar muy bien el caso para dar una respuesta concreta o tendrías

el mismo destino que Don Ivahone.

El rey pregunta:

Querido hijo hace muchos años, no importa cuantos hubo un hombre llamado don Ivahone,

el era muy adinerado pero su ambición y precipitación, lo llevaron a la ruina.

El estaba confiado en que un hombre incrementaría todo cuanto él tenía y así sería un

hombre bien visto, Don Ivahone emocionado no analizó ni tuvo la paciencia de analizar

lo que este trato conllevaba. El contrato se hizo, lo firmo y después de algunos días se vio

en la calle, sin un solo centavo, destrozado viendo que todo lo que había logrado lo perdió

en un minuto, se lamentó por su precipitación y no logró ninguno de sus sueños.

Tu Amadis, si quieres que las cosas salgan bien confía en que la paciencia es una virtud

muy importante y que no debes precipitarte en algo que puede ser fatal para tu futuro.

Amadís agradeció el consejo de su madre y el mismo renunció a aquel negocio y salió bien

librado

Paciencia y precaución es virtud de

personas inteligentes

EL REY

AMADIS

Elisa y la invitación

Elisa se dirigió al rey, su padre, del siguiente modo: Padre, un chico ha venido

a invitarme a un baile pero no sé si aceptar, ya que no lo conozco muy bien.

Solo lo vi un día caminando por el pueblo y hablamos solo un rato, pero

muchas personas me dijeron que era muy mentiroso. Entonces su padre analizó

lo que su hija le había contado, y le dijo: algo así le sucedió a mi hermana hace

muchísimo tiempo…

Elisa le preguntó que había pasado, el rey le dijo... cuando mi hermana tenía tu

edad conoció a un chico, se apareció en la puerta del castillo invitándola a la

plaza, donde iba a ver una fiesta, mi hermana no lo dudo y aceptó.

Esa noche salió con él, ya eran las 12 y mi hermana no llegaba, fueron a

buscarla pero no había rastro de ella, al siguiente día mandaron una carta

diciendo que estaba bien, pero que querían dinero a cambio, tuvimos que pagar

mi hermana regresó bien a la casa.

Elisa se quedo pensando y le dijo a su padre que no aceptaría ya que el pueblo

decía que era un chico muy mentiroso y dijo estos versos:

- En boca del mentiroso, lo cierto se hace

dudoso.

En boca del mentiroso, lo

cierto se hace dudoso

“UN CUENTO DEL SEÑOR RODRIGO”

Otra vez Miguel habló con Rodrigo porque le pidió un

consejo.

Rodrigo, un señor me ha pedido que haga una cosa, pero no

sé si me va a traer buenos resultados.

Entonces Rodrigo le dijo que él era prudente al verlo con la

realidad y hay otros que confían mucho en la imaginación lo

mismo sucedió con don Pipo.

Señor Miguel -dijo Rodrigo- hubo un señor llamado don Pipo

era muy pobre. Un día iba llevando sobre la cabeza una

botella de vino que iba a llevarlo al pueblo para venderlo y

pensaba lo que iba hacer con todo ese dinero compraría una

gallina, después las gallinas iba tener crías y lo vendería,

luego iba a comprar una vaca, luego pensó con todo ese

dinero iba a casar a sus hijas e iba a andar con sus nietos por

todas las calles del pueblo y de pronto pisa una piedra y se

tropieza al ver rota la botella no supo que hacer. Después de

a ver imaginado todo eso, no logro nada de lo que quería.

Señor don Miguel usted tiene que fijarse más en la realidad

que en la fantasía. Don Miguel, dijo –Rodrigo - No se deje

llevar mucho por la imaginación antes de ver la realidad.

Goliat, un amigo me ha aconsejado que haga una cosa, y aún no me he decidido si estaría

bien realizarlo puesto que pienso que sufriría mi madre y te juro que están inspirador pues

me convendría mucho hacerlo.

*Entonces refirió a su hermano en qué consistía, cuando hubo terminado, Goliat

respondió:

Sabes Rafael siempre es bueno escuchar a tu corazón, ya que cualquier decisión que tomes

traerá consecuencias sean buenas o malas, no digo que no triunfarás me refiero a que

tienes que reflexionarlo bien sino te pasará lo mismo que le pasó a violeta.

*Rafael le pregunta qué fue lo que pasó a Violeta:

Rafael-dice Goliat- Hubo una mujer llamada Violeta, aquella mujer llevaba una olla llena

de leche con la cual pensaba comprar gallinas de las gallinas vendería los huevos de

aquellas, con aquel dinero compraría una oveja con la cual vendería su lana, y sería más

rica que cualquier otra persona; pero fue tanta la ilusión e imaginación con esta olla, que

se distrajo y se le calló la olla y junto a ella todo sus ilusiones y sueños.

Rafael si piensas en algo que podrías querer, mejor fíjate en lo posible y no en la fantasía

Moraleja: Es mejor mirar la realidad antes que fantasear y creer cosas en los

demás.

FIN

Gianiree Reyes

Había una vez en un lugar muy lejano un rey muy malo que le gustaba que todas sus

órdenes se cumplieran y si alguien no cumplía sus órdenes lo mandaba a decapitar

(Cortarle la cabeza). Pero todo el pueblo ya estaba cansado de que el rey suba los precios

y haga maldades, pero no se podían sublevar porque los hombres del rey los detendrían.

Pero hubo un hombre muy astuto que entro al templo del rey muy cuidadosamente sin

que nadie de sus hombres del rey lo viera, arriesgando su vida llego donde el rey y logro

matar al rey. Y desde ahí lo llaman el hombre valiente.

Las lágrimas de un sueño

De nuevo escucho al mismo doctor, en mis sueños más profundos, dando el pronóstico de algo que jamás

en mi vida pasada me hubiera imaginado tener.

- Hija mía, el doctor ya nos dijo tu pronóstico, pues tienes lo que tantos nos temíamos tienes…

“Leucemia”

Yo escuchaba entre mis sueños provocados por la anestesia, lo que mis padres me decían.

Aún recuerdo el llanto de mi madre cada vez que me veía echada en una cama de hospital, llena de

tubos que yo ni sé de que sirven, pero el doctor dice que es para que pueda sobrevivir.

La verdad es que yo no entiendo porque quieren que viva, si viviendo como estoy sufro y mucho,

escuchando el llanto de mi madre, el pronóstico del doctor, tantas cosas que me hacen tan infeliz y

arrepentida de cosas que hice en mi pasado.

Recuerdo aún la historia que mi madre me contaba, la de la sirenita, que no valoraba su vida en el

mar, y quería tener piernas y tanto pedir y pedir, murió y ahora es una más de las espumas de mar.

Ahora creo que yo también seré una especie de espuma, yo no valoraba mi vida y quería cosas mejores

y ahora mírenme sola, triste, muriéndome por esta maldita leucemia y pues ahora que lo pienso me lo

merezco.

Ya han pasado veinte años de muerta, fallecida o como ustedes quieran decirme, yo le dije a mi madre

que por favor publicara esta historia, ya son veinte años de muerta. Veinte años de dejar de existir,

espero que esta historia la lean muchos jóvenes para que sepan valorar lo que tienen, o si no, se

convertirán en “Una espuma mas”.