4

Click here to load reader

Creo, ayuda a mi incredulidad

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Predicación de Abraham Sampedro el jueves 17 de junio con motivo del culto semanal de oración. El texto de referencia es el evangelio de Marcos 9:14-29

Citation preview

Page 1: Creo, ayuda a mi incredulidad

Creo, ayuda mi incredulidad

Hermanos hoy vamos a hablar de algo que todos los que nos reunimos aquí sabemos que tenemos pero que es algo que siempre pedimos o deberíamos pedir más al Señor…

No me refiero a una casa más grande, o un coche más amplio, o un sueldo más alto, no es eso, es algo que Jesús dice que hagamos cuando oramos, que Él nos dará porque Él sabe que la necesitamos cada día sin falta, además dice que le pidamos porque Él se la aumenta al que se la pide.

El tema principal de hoy es la fe, a algunos nos recordaron su significado ayer escuchando a Jaime Ardiaca y lo repetimos hoy.

Sabemos que la Fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve como leemos en Hebreos 11:1 y que creemos que Dios creó el Universo de la nada solo por fe.

Esta tarde vamos a ir a un texto que hacía mucho tiempo que no leía y os voy a decir algo por si queréis hacer algo así pues que sepáis desde ahora que me está ayudando a entender mejor las Escrituras.

Lo que hago para intentar tener una visión general de la Biblia es leer distintos momentos importantes de la Biblia de manera sistemática, es decir unos capítulos en Génesis, siguiendo las biografías de los distintos personajes importantes del pentateuco, luego en Salmos y proverbios, después leo en los profetas para saber más de la forma que tuvo Dios de dirigirse a su pueblo para que se reconciliase con Él, sigo en los evangelios y luego en Hechos para aprender la manera en la que comienza la Iglesia.

Bueno pues ahora vamos al texto que nos interesa.

Este pasaje hacía mucho tiempo que no lo leía y cada vez que lo leo me llena de esperanza y me desafía. El pasaje está en Marcos 9:14-29

Vemos que después de la transfiguración el Señor Jesús se apartó de los discípulos para luego aparecer en una situación algo bochornosa para sus discípulos aunque también para Jesús, ya que vemos la actitud de alguien que se molesta, luego una vez más nos demuestra su amor y su misericordia hacia el sufrimiento humano.

Vamos a ver tres aspectos que me gustaría resaltar:

- La actitud de los discípulos - La actitud de Jesús - La actitud del padre

Page 2: Creo, ayuda a mi incredulidad

1-La actitud de los discípulos

Sabemos por las escrituras en Marcos 6:7 que Jesús dio poder a sus discípulos para echar fuera espíritus de las personas y también sanarlos pero sin embargo en este pasaje vemos algo distinto, y es que lo extraño de esta situación es que no pudieron echar el espíritu del muchacho.

Si nos situamos un poco en contexto, Marcos nos dice que los discípulos estaban rodeados de una gran multitud, además de escribas que los atosigaban, había mucha gente con ellos y debían actuar echando al espíritu pero nos dice el texto que no podían, no había manera.

Hay que reconocer que aparentemente se vieron acosados por personas contrarias a ellos como eran los escribas además de la gente que les seguía con algún tipo de interés.

Los discípulos pudieron estar discutiendo con los escribas, respondiendo a preguntas como, porqué hacéis estas cosas? no sabéis que este hombre no puede ser quien dice ser? No veis que no tenéis ningún modo de ayudar a este niño? Este tipo de presión que desorienta y puede llevarte a dudas es el tipo de presión que pudo haber ocasionado su incapacidad para liberar al muchacho.

Como imagináis, puede ser la presión que nosotros podemos padecer diariamente y nos desconcentra del poder que tiene Dios para ayudarnos a enfrentar nuestros problemas y solucionarlos. Estas personas recibieron poder para hacer cosas increíbles, echar fuera espíritus y sanar a personas, nosotros hemos recibido el Espíritu Santo y la Palabra repleta de sus promesas pero igual que los apóstoles, nos dejamos llevar por la presión de la sociedad y muchas veces pecamos de una inseguridad que no refleja nuestra condición de personas renovadas.

1-La actitud de Jesús

Aparece el Señor Jesús, asombró a la gente que comienza a saludarle y pregunta, qué disputáis con ellos? Jesús se dirige a sus discípulos para saber qué es lo que pasaba, aparece y muestra su liderazgo, a él es al que tienen que dirigirse porque él sabrá responder correctamente, él está capacitado para lo que sea, estos discípulos necesitan de su maestro.

No os veis reflejados de alguna manera en esta situación? Hay momentos en los que no sabes como responder ante problemas y de repente aunque no sea igual, lees en la Palabra promesas del Señor o incluso las recuerdas y te quedas al margen porque sabes que el único con poder suficiente para ayudarte ya está al mando, ya puedes sentir esas palabras de consuelo de alguien que sabrá responder ante cualquier situación, como diciendo yo te defiendo.

Luego como veis no entra en escena ninguno de los escribas sino la persona que necesita a Jesús, que necesita que su hijo sea liberado del espíritu, no le importan todas las preguntas y acusaciones que tendrían que hacerle los escribas a Jesús…

Page 3: Creo, ayuda a mi incredulidad

No sucede esto sino que el hombre le plantea el problema que tiene su hijo, le cuenta algo inexplicable como es el hecho de que sus discípulos no han podido liberarlo y Jesús se indigna.

Porqué digo que se indigna? Jesús dice, generación incrédula! Hasta cuando os he de soportar? Pensáis que estaría tranquilo en esos momentos?

Digo que se indigna porque a veces presentamos a un Jesús cargado de amor y de comprensión hacia el pecador, un modelo a seguir, un perfecto Salvador y lo es, pero creo que desconocemos la imagen del Jesús molesto, indignado.

En su carácter y su forma de hablar veo exigencias hacia el hombre, este Jesús que a veces alabamos sin conocerle bien también se molesta y lo vemos cuando habla a los fariseos, así como en esta situación.

Él sabe que es por la falta de fe que no han podido liberar al niño, es por su falta de confianza en Dios , Jesús les ha delegado a sus discípulos un poder para sanar y liberar a las personas y sin embargo ellos no han podido.

Hermanos, realmente conocemos a Jesús? Leemos las escrituras y analizamos el carácter de nuestro Salvador?

Yo estoy seguro de que no puedo hablar de alguien que no conozco bien, menos aún podría confiar en alguien del que tengo una imagen equivocada.

Creo que a veces nos aferramos a la idea de que Dios comprende completamente nuestra situación porque es Dios pero no pensamos en las exigencias de esa comprensión, Dios quiere que le tengamos en cuenta.

Luego Jesús ve al niño y le pregunta al padre cuanto tiempo ha pasado sufriendo este niño, cuanto tiempo llevaban sufriendo él y su familia.

1-La actitud del padre

Estoy seguro de que Jesús comprendió el sufrimiento y el padre quedó esperando a ver qué pasaba, pero le volvió a decir que lo necesitaba si podía ayudarle, que tuviera misericordia, veis la necesidad que tenía de Dios?

Pensáis que nosotros tenemos menos necesidades que este hombre que sufría por su hijo? Efectivamente tenemos otras pero no por ello menos importantes para cada uno de nosotros, cada uno sabe las suyas, y Cristo le dice lo mismo que a cualquiera de nosotros en esta noche.

-Si puedes creer, al que cree todo le es posible

Hermanos, no descuidemos estas palabras, no hagamos como que no tienen nada que ver con nosotros, Dios se ha mostrado a cada uno de nosotros en la persona de Jesús y no podemos pensar que son demasiado fuertes para nosotros. Jesús no habla por hablar, intentemos pensar en que estas palabras son igualmente válidas para nosotros porque nadie nos dice lo contrario,es así.

Page 4: Creo, ayuda a mi incredulidad

Podemos creer? Porque si podemos, no pensemos que Dios no puede hacer algo para mejorar nuestro malestar o incluso eliminarlo, no le quitemos poder a Dios porque demostraríamos que no podemos confiar totalmente en Él.

A veces pedimos a Dios que nos ayude porque ya hemos intentado todo por nuestros propios esfuerzos y utilizamos la oración como último recurso, creéis que eso es lo que Dios quiere?

Además tenemos el consuelo que también nos da la respuesta del padre de este niño.

-Creo, ayuda a mi incredulidad.

Qué pensáis de estas palabras? El padre no tardó nada en decir, dice inmediatamente, Creo, te necesito! Si tu eres mi solución ,ayúdame!

Creéis que no debería haberlas dicho así? Que son demasiado fuertes para responder ante Jesús¿?

Yo os digo que estas palabras me animan a orar, estas palabras son palabras de ánimo y de bienestar espiritual. Si nosotros oramos a Dios pidiéndole que responda basándonos en su fidelidad hacia nosotros y que necesitamos respuesta, nuestra vida no será igual.

Este hombre le está exigiendo a Jesús de alguna manera que demuestre que es el único que tiene poder para sanar a su hijo, ayuda a mi incredulidad, salva a mi hijo!

Hermanos creo que a veces no solamente no oramos sino que además no estamos seguros de que nuestras oraciones estén en buenas manos, no descansamos en Dios cuando le hemos pedido por nuestras preocupaciones y nuestros sufrimientos.

Si Jesús dice “todas las cosas son posibles para Dios” y en otro lugar “todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis y os vendrá”.. .quiénes creemos que somos nosotros para negar el poder de Dios?

Esto no demuestra nada más que somos como los discípulos de Jesús. Pero eso no es ningún consuelo, Jesús les dice cuando le preguntan su incapacidad de sanar al niño, y lo leemos en Mateo 17:20 “por vuestra poca fe…” Pidamos más fe porque podemos esperar en Dios con plena seguridad.

Hermanos y hermanas mías, el poder de Dios supera nuestras expectativas y por ello debemos pedirle con fe, leemos en 1 Juan una de las más reconfortantes promesas y es con la que os voy a dejar

“Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. 15 Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.” 1 Juan 5:14-15

Sabemos que pasaremos por situaciones de presión exterior y tal vez interior pero sabemos que nuestro líder, nuestro Salvador puede ayudarnos y nos dice que se lo pidamos, hagamos nuestras sus promesas y confiemos en su poder para hacer lo imposible!