Upload
others
View
7
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
Cuader�illo de oraciónCuader�illo de oraciónCuader�illo de oraciónCuader�illo de oración
Oct�breOct�breOct�breOct�bre
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
LA HISTORIA DE LA CONSTANCIALA HISTORIA DE LA CONSTANCIALA HISTORIA DE LA CONSTANCIALA HISTORIA DE LA CONSTANCIA
Esta es la historia de dos ranas que saltaron dent"o de un cubo de nata
en una lechería. “Más vale que nos demos por vencidas” , g"aznó una de ellas
mient"as se esforzaba en vano por salir. “Estamos perdidas.” “Sig�e nadando”,
dijo la ot"a, “saldremos de alg�na manera.”
“Es inútil”, chilló la primera, “es demasiado espeso para nadar;
demasiado blando para saltar; demasiado resbaladizo para ar"ast"arse”.
Aquella misma noche se dejó caer y pereció ahogada.
Su amiga sig�ió nadando y nadando sin rendirse… Y al amanecer, se
encont"ó sobre un montón de mantequilla que ella misma había batido. Y allí
estaba, sonriente, comiéndose las moscas que acudían en bandadas de todas
las direcciones.
Aquella rana descubrió lo que muchos pasan por alto. Si somos
constantes en nuest"a tarea el tiempo suficiente, a la larga saldremos
t"iunfantes. Estás comenzando la avent�ra de un nuevo curso. Que no te
puedan las dificultades. No pierdas en todo el año las ganas que tienes ahora
de conseg�ir t�s objetivos.
En mi debilidad me haces f�er8e;
sólo en Tu amor me haces f�er8e, sólo en Tu vida me haces f�er8e;
en mi debilidad me haces f�er8e en Ti.
Lunes 1 de oct�breLunes 1 de oct�breLunes 1 de oct�breLunes 1 de oct�bre
Mar8es 2 de oct�breMar8es 2 de oct�breMar8es 2 de oct�breMar8es 2 de oct�bre
MAS SI EL CAMINO ES MAS SI EL CAMINO ES MAS SI EL CAMINO ES MAS SI EL CAMINO ES LARGO...LARGO...LARGO...LARGO...
Hay un re<án que dice: “En fin, Serafín; más cor"e el galgo que el
mastín”. Favorece la velocidad del galgo <ente al paso más lento pero constante
del mastín. Lo rápido se valora más que lo prof�ndo.
A veces somos como galgos que miramos a los mastines con cier8a
superioridad: ¿Para qué est�diar día a día si dándome un at"acón en las
últimas semanas puedo aprobar? Preferimos las car"eras de velocidad a las
pr�ebas de fondo. Pero el resultado no puede ser ig�al. Lo que se retiene e
incorBoramos a nuest"a persona es mucho menos si lo dejamos todo para el
final. Lo ideal sería que pudiésemos llevar ese ritCo constante de est�diar un
poco cada día, así dejaría en nosot"os un poso y una prof�ndidad que nos
ay�daría a madurar intelect�almente.
Con las cosas de Dios sucede de manera similar. El g"ano que se siembra
va creciendo en silencio, t"as mucho riego y espera. Entonces se perciben los
<�tos de aquello que iba creciendo en silencio con mimos y cuidado. En lo de
Dios no existe la comida rápida.
El re<án acaba diciendo: “… mas si el camino es largo, más cor"e el
mastín que el galgo”. Nuest"a vida, en los est�dios y en la fe es un camino largo
que requiere sus tiempos.
PADRENUESTROPADRENUESTROPADRENUESTROPADRENUESTRO…………
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
ARRIÉSGATEARRIÉSGATEARRIÉSGATEARRIÉSGATE
El escultor contemplaba un t"onco de madera noble que tenía delante y,
entor�ando los ojos, descubrió en él, como al t"asluz, una talla perfecta y luego
ot"a y ot"a... en un desfile interCinable. No eran seres imaginarios, no; eran
reales. Estaban allí dent"o. Su oficio consistiría en rescatar aquellas criat�ras
liberándolas de su prisión de madera. Pero al tomar la g�bia, se sintió
totalmente paralizado. Desde el corazón de aquel t"onco, millones de seres
levantaban los brazos clamando por su liberación. Salvar a uno era abandonar
a muchos; pero no elegir era excluir a todos. Y ¿cómo renunciar a salvar a
aquella única criat�ra que le era posible? Y sintió un est"emecimiento, porque
int�yó de pronto que el t"onco era su propia vida: que las fig�ras ocultas eran
los mil posibles modos de vivirla, y que él mismo debía elegir un único destino
y tallarlo con sus propias manos.
Jesús les decía a todos: “El que quiera venir en pos de mí niég�ese a sí
mismo, tome su cr�z cada día y sígame. Porque el que quiera salvar su vida la
perderá; pero quien pierda su vida por mí, la salvará. ¿Qué le vale al hombre
ganar el mundo entero si se pierde o se dest"�ye a sí mismo? (Lc. 9, 23-25)
Jesús te anima a tomar t� vida, elegir t� destino y tallarlo. Él ha ido
delante, dando ejemplo. Ar"iésgate para ganar la vida; para ser feliz, hay que
ent"egarla por los demás.
Miércoles 3 de oct�breMiércoles 3 de oct�breMiércoles 3 de oct�breMiércoles 3 de oct�bre
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Jueves 4 de oct�breJueves 4 de oct�breJueves 4 de oct�breJueves 4 de oct�bre
UN GRAN AMIGO DE DIOS: SAN FRANCISCO DE ASIS UN GRAN AMIGO DE DIOS: SAN FRANCISCO DE ASIS UN GRAN AMIGO DE DIOS: SAN FRANCISCO DE ASIS UN GRAN AMIGO DE DIOS: SAN FRANCISCO DE ASIS
Si te fijas en el calendario verás que debajo de cada día aparece el nombre de un santo o santa. Los santos son personas que, desde su fe, han vivido su vida al 100%., y la Iglesia los propone como modelos para todos los bautizados.
El santo que celebramos hoy no es uno cualquiera. Es uno de los “impor8antes”. Seg�ro que te suena: es Francisco de Asís. Francisco de Asís. Francisco de Asís. Francisco de Asís. Nació en Italia, en la Edad Media, y f�ndó la Orden de los Franciscanos. De ser hijo de un rico comerciante de la ciudad en su juvent�d, pasó a vivir bajo la más est"icta pobreza y obserQancia de los Evangelios. Podríamos nar"ar miles de avent�ras de su vida, pero hoy preferimos rezar con él. Oh, Señor, hazme un inst"�mento de Tu Paz. Donde hay odio, que lleve yo el Amor. Donde haya ofensa, que lleve yo el Perdón. Donde haya discordia, que lleve yo la Unión. Donde haya duda, que lleve yo la Fe. Donde haya er"or, que lleve yo la Verdad. Donde haya desesperación, que lleve yo la Aleg"ía. Donde haya tinieblas, que lleve yo la Luz. Oh, Señor, haz que yo no busque tanto ser consolado, sino consolar; ser comprendido, sino comprender; ser amado, como amar. Porque es: dando, como se recibe; perdonando, como se es perdonado; muriendo, como se resucita a la Vida Eter�a.
AMÉN.
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Vier�es 5 de oct�breVier�es 5 de oct�breVier�es 5 de oct�breVier�es 5 de oct�bre
COMO UNA PIÑACOMO UNA PIÑACOMO UNA PIÑACOMO UNA PIÑA
Un padre veía con preocupación cómo sus hijos estaban constantemente
discutiendo y, a veces, hasta llegaban a las manos.. Un día los llamó y les dio un
haz de leña forCado por ramas muy finas. Les dijo: “Demost"adme lo f�er8es
que sois rompiendo estas ramas”. Se pusieron enseg�ida a intentarlo sin
conseg�irlo, pues era un haz compacto y forCado por muchas ramas. Les dijo
entonces: “Es muy fácil: sólo hace falta separar las ramas y romperlas una a
una. La f�erza de estas ramas reside sólo en su unión. Si vosot"os est�vieseis
más unidos, viviríais mejor y seríais más felices”.
Jesús en la última reunión que t�vo con sus discípulos, dirigió esta
oración a su Padre: “No r�ego sólo por éstos, sino también por aquellos que, por
medio de su palabra, creerán en mí, para que todos sean uno. Como tT, Padre,
en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosot"os, para que el mundo
crea que tT me has enviado”. (Jn 17, 20-21)
Es fácil hablar de paz, de unión, de amistad... ¿Hacemos algo para
conseg�ir que aumenten en nuest"a familia, en nuest"a clase, en nuest"o g"�po
de amigos? ¿Nos esforzamos para crear un ambiente de unión ent"e los que
convivimos? Jesús quiere que todos estemos unidos como una piña.
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Lunes 8 de oct�breLunes 8 de oct�breLunes 8 de oct�breLunes 8 de oct�bre
LA ORACION DEL ESTUDIANTELA ORACION DEL ESTUDIANTE
Señor, dame t"anquilidad para no olvidar8e
si ot"as urgencias lo tapan todo.
Dame sosiego en las horas de ahogo,
y f�erza si creo rendirCe.
Recuérdame lo esencial, lo impor8ante, lo cier8o.
Que sepa plantar mis cimientos en lo vivido,
lo presente y lo f�t�ro,
aunque hoy se imponga lo inaplazable.
Que sea discreto en el éxito y sereno en el <acaso,
aprendiendo de ambos.
Dame humor, tenme paciencia.
Hazme lúcido para no perder la perspectiva
de este mundo amplio, de ot"as vidas,
de ot"os anhelos.
Tú, f�ente de toda verdad…
En t� presencia todo encuent"a su sitio
PADRENUESTRO...
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Mar8es 9 de oct�breMar8es 9 de oct�breMar8es 9 de oct�breMar8es 9 de oct�bre
QUIEN SALVA UNA VIDA SALVA AL MUNDO ENTEROQUIEN SALVA UNA VIDA SALVA AL MUNDO ENTEROQUIEN SALVA UNA VIDA SALVA AL MUNDO ENTEROQUIEN SALVA UNA VIDA SALVA AL MUNDO ENTERO
Este proverbio hebreo está unido al recuerdo de Oskar Schindler, que
falleció tal día como hoy en 1974. ¿No sabes quién es? Fue un empresario
alemán durante la Seg�nda Guer"a Mundial, miembro del Par8ido Nazi.
Nat�ralmente ast�to y no muy escr�puloso, en oct�bre de 1939 se hizo cargo de
una desvencijada fábrica en Cracovia que, con el hábil asesoramiento de un
contable judío, Isaak Ster�, convir8ió en una planta enorCe de productos
esmaltados y municiones que empleaba a casi 800 hombres y mujeres. De éstos,
370 eran judíos del g�eto de Cracovia.
¿Por qué entonces le recordamos como
un héroe? Porque la br�talidad sin sentido de
las persecuciones nazis cont"a la indefensa
población judía le hor"orizó tanto que le
t"ansforCó. Gradualmente la meta egoísta de
llenarse los bolsillos con dinero f�e
reemplazada por un deseo abrasador de
rescatar tantos judíos como f�era posible de
las gar"as de los verdugos nazis. Por salvar a
sus t"abajadores judíos est�vo dispuesto no
sólo a despilfar"ar todo su dinero, sino también a ar"iesgar su vida. Gracias a él
y a su mujer, 1200 judíos log"aron huir de una muer8e seg�ra en los campos de
concent"ación.
“Quien salva una vida salva al mundo entero” (Talmud)
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Miércoles 10 de oct�breMiércoles 10 de oct�breMiércoles 10 de oct�breMiércoles 10 de oct�bre
SEÑOR, ENSEÑANOS A ORARSEÑOR, ENSEÑANOS A ORARSEÑOR, ENSEÑANOS A ORARSEÑOR, ENSEÑANOS A ORAR
Hoy es un buen día para que pongamos atención a lo que oramos con
el “Padre Nuest"o”. Los discípulos se fijan en la est"echa relación de Jesús con
el Padre, y le piden que les enseñe. Y Jesús les o<ece un modelo de oración que
recoge las g"andes líneas de su vida y misión: la cercanía del Padre, el anhelo
del Reino, la búsqueda de la voluntad divina, el pan, el perdón y la ay�da en la
hora de la pr�eba. Al rezar podemos emplear muchas palabras, incluso
ning�na, pero en el fondo siempre estamos rezando el Padre Nuest"o.
PADRE NUESTRO...
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Jueves 11 de oct�breJueves 11 de oct�breJueves 11 de oct�breJueves 11 de oct�bre
Gracias, Señor, por t� aleg"ía sin precio,
que se acoge como un regalo,
con la que no se negocia,
que se vive sin est"idencias.
Gracias, Señor, por t� aleg"ía ex8"aña,
que se impone al dolor,
se renueva cada día,
crece en el perdón, en el serQir,
en lo pequeño y silencioso.
Gracias, Señor, por t� aleg"ía plena
que levanta al caído una y ot"a vez,
desborda de nuevo en la hora de la decepción,
apasiona cuando queda poco
y const"�ye donde parece habitar el vacío.
Gracias, Señor, por t� aleg"ía sencilla,
de las cosas pequeñas, de los gestos humildes,
de la fe cotidiana, de la vida libre,
de la palabra confiada,
del corazón seducido… por Ti.
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Lunes 15 de oct�breLunes 15 de oct�breLunes 15 de oct�breLunes 15 de oct�bre
LA ORACIÓN DEL ZAPATLA ORACIÓN DEL ZAPATLA ORACIÓN DEL ZAPATLA ORACIÓN DEL ZAPATLA ORACIÓN DEL ZAPATLA ORACIÓN DEL ZAPATLA ORACIÓN DEL ZAPATLA ORACIÓN DEL ZAPATEROEROEROEROEROEROEROERO
Cuentan que un humilde zapatero tenía la cost�mbre de hacer siempre
sus oraciones en la mañana, al mediodía y en la tarde. Se serQía de un libro de
plegarias porque no se sentía capaz de dirigirse a Dios con sus propias
palabras.
Un día se sintió muy mal porque, estando de viaje, olvidó su libro.
Nuest"o buen zapatero le dijo entonces a Dios: “Perdóname, Dios mío, porque
necesito orar y no sé cómo. Ahora bien, ya que Tú eres un Padre de amor voy a
recitar varias veces el alfabeto desde la ‘a’ hasta la ‘z’, y Tú, que eres sabio y
bueno, podrás juntar las let"as y sabrás qué es lo que yo te quiero decir.”
Cuenta la historia que ese día Dios reunió a sus ángeles en el cielo y les
dijo conmovido que ésa era la más sincera y la más bella de las oraciones que
le habían hecho en mucho tiempo, porque era una oración que nacía del
corazón.
¡Cuánta necesidad tenemos de estas oraciones! Todos debemos
aprender a orar con el corazón, a alabar, a bendecir, a perdonar, a ag"adecer; y
a tener presente que la oración se ve en la acción, en los buenos <�tos y en un
compromiso por la justicia y por la paz. En efecto, act�ar sin orar es
desgastarse y orar sin act�ar es engañarse.
AyTdame a mirar con amor, a descubrir8e en el silencio;
AyTdame a mirar con amor, a ver las cosas como tT las ves
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Mar8es 16 de oct�breMar8es 16 de oct�breMar8es 16 de oct�breMar8es 16 de oct�bre
CAMINARÉCAMINARÉ
Caminaré siempre en t� presencia por el camino de la vida.
Te ent"ego, Señor, mi vida, hazla fecunda.
Te ent"ego mi voluntad, hazla idéntica a la t�ya.
Caminaré a pie descalzo,
con el único gozo de saber que eres mi tesoro.
Toma mis horas g"ises, hazlas novedad.
Toma mis cansancios, hazlos t�yos.
Toma mis manos, hazlas acogedoras
Toma mi corazón, hazlo ardiente.
Toma mis pies, hazlos incansables.
Toma mis ojos, hazlos t"ansparentes.
Hazte compañero inseparable de mis caídas y t"ibulaciones,
y enséñame a gozar en el camino de las pequeñas cosas que me regalas,
sabiendo siempre ir más allá,
sin quedarCe en las cunetas de los caminos.
Camina, Señor, conmigo; acércate a mis pisadas.
AMÉNAMÉN
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Miércoles 17 de oct�breMiércoles 17 de oct�breMiércoles 17 de oct�breMiércoles 17 de oct�bre
““““¡HABLADME DE DIOS!¡HABLADME DE DIOS!¡HABLADME DE DIOS!¡HABLADME DE DIOS!” ” ” ”
Dije al almendro: ¡Háblame de Dios! Y el almendro floreció.
Dije al pobre: ¡Háblame de Dios! Y el pobre me o<eció su casa.
Dije al sueño: ¡Háblame de Dios! Y el sueño se hizo realidad.
Dije a la casa: ¡Háblame de Dios! Y se abrió la puer8a.
Dije al amigo: ¡Háblame de Dios! Y el amigo me enseñó a amar.
Dije al pequeño: ¡Háblame de Dios! Y el pequeño sonrió.
Dije al r�iseñor: ¡Háblame de Dios! Y el r�iseñor se puso a cantar.
Dije a un soldado: ¡Háblame de Dios! Y el soldado dejó sus arCas.
Dije a la f�ente: ¡Háblame de Dios! Y el ag�a brotó.
Dije a mi madre: ¡Háblame de Dios! Y mi madre me dio un beso en la <ente.
Dije al enemigo: ¡Háblame de Dios! Y el enemigo me tendió la mano.
Dije a la voz: ¡Háblame de Dios! Y la voz no encont"ó palabras.
Dije a Jesús: ¡Háblame de Dios! Y Jesús me enseñó el PADRENUESTRO...
¿Qué hago yo para que los demás vean a Dios? ¿Ay�do con mi
compor8amiento y palabras a los demás a ser más felices?
¡AYÚDAME, Señor! Que nunca diga no sé, no valgo, no puedo, no tengo
f�erzas, no entiendo, esas cosas son para los que saben. Para hacer un mundo
más bello todos valemos, sabemos y podemos. Señor, dame t� f�erza para dar
color y aleg"ía por donde vaya .
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Jueves 18 de oct�breJueves 18 de oct�breJueves 18 de oct�breJueves 18 de oct�bre
ORACIÓN POR NUESTRA ORACIÓN POR NUESTRA ORACIÓN POR NUESTRA ORACIÓN POR NUESTRA TIERRATIERRATIERRATIERRA
Dios omnipotente, que estás presente en todo el universo
y en la más pequeña de t�s criat�ras,
Tú, que rodeas con t� ter�ura todo lo que existe,
der"ama en nosot"os la f�erza de t� amor
para que cuidemos la vida y la belleza.
Inúndanos de paz,
para que vivamos como herCanos y herCanas, sin dañar a nadie.
Dios de los pobres, ayTdanos a rescatar
a los abandonados y olvidados de esta tier"a que tanto valen a t�s ojos.
Sana nuest"as vidas,
para que seamos protectores del mundo y no depredadores,
para que sembremos herCosura y no contaminación y dest"�cción.
Toca los corazones de los que buscan sólo beneficios
a costa de los pobres y de la tier"a.
Enséñanos a descubrir el valor de cada cosa,
a contemplar admirados, a reconocer que estamos
prof�ndamente unidos con todas las criat�ras
en nuest"o camino hacia t� luz infinita.
Gracias porque estás con nosot"os
todos los días.
Aliéntanos, por favor, en nuest"a lucha
por la justicia, el amor y la paz.
(Papa Francisco, Laudato Si)(Papa Francisco, Laudato Si)(Papa Francisco, Laudato Si)(Papa Francisco, Laudato Si)
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Vier�es 19 de oct�breVier�es 19 de oct�breVier�es 19 de oct�breVier�es 19 de oct�bre
Este domingo celebramos el DOMUND, con el lema “Cambia el mundo”.
Gracias, Padre, por los misioneros que cambian el mundo ent"egando su vida
en las periferias, contagiando el amor que han recibido de Dios y sirQiendo a los
más pequeños y necesitados. Gracias por la opor8�nidad que se nos brinda a
cada uno de nosot"os de dar testimonio del Evangelio allí donde nos
encont"amos, porque todos tenemos algo que apor8ar, por pequeño que sea, y
los demás lo necesitan y nos necesitan. ¡Gracias!
Señor, ayTdame a cambiar para cambiar el mundo.
Necesito renovar el corazón, la mirada,
mis modos de hacer, para no terCinar en un museo.
Y no es solo renovar lo viejo:
es perCitir que el Espírit� Santo cree algo nuevo.
Señor, vacíame de mis esquemas para hacer sitio a t� Espírit�
y dejar que sea Él quien haga nuevas todas las cosas.
Él nos envía, nos acompaña, nos inspira;
Él es el autor de la misión, y no quiero domesticarlo ni enjaularlo.
Haz que no tenga miedo de la novedad que viene de Ti,
Señor Cr�cificado y Resucitado.
Que mi misión sea comunicar t� vida, t� misericordia, t� santidad.
Enséñame a amar como Tú para cambiar el mundo.
AMÉN.
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Lunes 22 de oct�breLunes 22 de oct�breLunes 22 de oct�breLunes 22 de oct�bre
ENFERMOS ¿DE QUÉ?ENFERMOS ¿DE QUÉ?ENFERMOS ¿DE QUÉ?ENFERMOS ¿DE QUÉ?
Dicen de Jesús que comía y bebía con la gente más rara y más
indeseable. En una de estas comidas, está invitado por un tal Mateo, que es
recaudador de impuestos; vamos, un t"abajo “no muy valorado”. Y estas
comidas y estas amistades a Jesús le salían caras, enseg�ida tenía a ot"os
tantos criticándole por esas compañías, por esas personas y por
relacionarse con ellos.
Y es aquí cuando Jesús lanza esta
<ase: "No necesitan médicos los sanos
sino los enferCos". Cier8amente Jesús
sabía quién necesitaba más de su
compañía.
¿Y tT?. Piensa quién de la gente que está a t� alrededor necesita más
de t� compañía, de t� conversación o simplemente de hacer8e cercano y que
sepa que estás ahí. Es un buen ejercicio de “curación” que t"ates de ver
quién necesita más de t�s “serQicios” como médico; y que sepas que en más
de una ocasión podemos hacer de Jesús en nuest"as vidas.
Hoy, Señor, quiero decir8e que llevaré Tu luz en mis ojos
para que todos en mí puedan ver8e
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Mar8es 23 de oct�breMar8es 23 de oct�breMar8es 23 de oct�breMar8es 23 de oct�bre
APROVECHA EL DIA APROVECHA EL DIA APROVECHA EL DIA APROVECHA EL DIA
Para saber el valor de un t"imest"e, pregTntale al est�diante que
suspendió el final. Para saber el valor de un mes, pregTntale a una madre que
ha dado a luz premat�ramente. Para saber el valor de una semana, pregTntale
al que se le acaban las vacaciones. Para saber el valor de una hora, pregTntale a
los novios que esperan para verse. Para saber el valor de un minuto, pregTntale
al que perdió el avión. Para saber el valor de un seg�ndo, pregTntale a quien
haya sobrevivido a un accidente. Para saber el valor de una milésima de
seg�ndo, pregTntale al atleta que ganó la plata en las Olimpiadas.
El tiempo no espera a nadie. Atesora cada momento que tienes. Lo
atesorarás mucho más si lo compar8es con alg�ien especial. Busca tiempo para
lo que amas.
Señor, a veces olvidamos que es un g"an regalo tener un colegio,
unos maest"os y unos amigos.
Hoy te pedimos que abras nuest"o corazón
para aprender a ver las cosas buenas que hay en nuest"a vida.
Señor, quita la mala hierba de la pereza.
AyTdanos para que nuest"a vida esté llena de t"abajo bien hecho,
de ilusión por aprender cosas nuevas,
de responsabilidad para cumplir con nuest"os deberes,
y de solidaridad para ay�dar a los demás.
Señor, g"acias por el cole y los amigos,
por el día que me das como nueva opor8�nidad
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Miércoles 24 de oct�breMiércoles 24 de oct�breMiércoles 24 de oct�breMiércoles 24 de oct�bre
Yo no soy el Amor,
pero quiere Dios amar a t"avés de mí a todos los seres;
yo no soy la Luz,
pero mi vida es una llama que se alimenta en la mañana
en la búsqueda sincera de la verdad;
yo no soy la Palabra,
pero orando en silencio puedo escuchar sin esf�erzo
la revelación del infinito;
yo no soy Santidad,
pero en mis imperfecciones, por ot"o lado reconocidas,
se cultiva la más bella flor de humanidad;
yo no soy salvador de nadie,
pero el Salvador de todos quiere apoyarse en mí
para seg�ir salvando;
yo no sé ni quien soy,
pero me basta con saber que Alg�ien SÍ lo sabe
y me lo va diciendo poco a poco, PASO A PASOPASO A PASOPASO A PASOPASO A PASO.
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Jueves 25 de oct�breJueves 25 de oct�breJueves 25 de oct�breJueves 25 de oct�bre
SEÑOR, DAME ENTRAÑAS DE MISERICORDIASEÑOR, DAME ENTRAÑAS DE MISERICORDIASEÑOR, DAME ENTRAÑAS DE MISERICORDIASEÑOR, DAME ENTRAÑAS DE MISERICORDIA
Si yo t�viera ent"añas de misericordia...Si yo t�viera ent"añas de misericordia...Si yo t�viera ent"añas de misericordia...Si yo t�viera ent"añas de misericordia...
saldría de mi casasaldría de mi casasaldría de mi casasaldría de mi casa para encont"arCe con los necesitados;
saldría de mi apatíasaldría de mi apatíasaldría de mi apatíasaldría de mi apatía, para ay�dar a los que su<en;
saldría de mis caprichossaldría de mis caprichossaldría de mis caprichossaldría de mis caprichos, para socor"er a los hambrientos;
saldríasaldríasaldríasaldría de mi actit�d críticae mi actit�d críticae mi actit�d críticae mi actit�d crítica, para comprender a los que fallan;
saldría de mi suficienciasaldría de mi suficienciasaldría de mi suficienciasaldría de mi suficiencia, para estar con quienes no se valen;
saldría de mis prisassaldría de mis prisassaldría de mis prisassaldría de mis prisas, para dar un poco de mi tiempo a los abandonados;
saldría de mi perezasaldría de mi perezasaldría de mi perezasaldría de mi pereza, para socor"er a quienes están cansados de g"itar;
saldría de mi burg�esíasaldría de mi burg�esíasaldría de mi burg�esíasaldría de mi burg�esía, para compar8ir con los pobres.
Si yo t�viera ent"añas de misericordia... Si yo t�viera ent"añas de misericordia... Si yo t�viera ent"añas de misericordia... Si yo t�viera ent"añas de misericordia...
aprovecharía mi exBerienciaaprovecharía mi exBerienciaaprovecharía mi exBerienciaaprovecharía mi exBeriencia para ay�dar a los equivocados;
y mi ter�uray mi ter�uray mi ter�uray mi ter�ura, para acoger a emig"antes y niños;
y mi saludy mi saludy mi saludy mi salud, para acompañar a enferCos y ancianos;
y mi responsabilidady mi responsabilidady mi responsabilidady mi responsabilidad, para cuidar a los abandonados;
y mi paz interiory mi paz interiory mi paz interiory mi paz interior, para reconciliar a los enemigos;
y mi amory mi amory mi amory mi amor, para acoger a los desengañados;
y mi oracióny mi oracióny mi oracióny mi oración, para hacerCe más hijo y herCano;
y mi viday mi viday mi viday mi vida, para darla a quien la necesita.
¡Señor, dame ent"añas de misericordia!¡Señor, dame ent"añas de misericordia!¡Señor, dame ent"añas de misericordia!¡Señor, dame ent"añas de misericordia!
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Vier�es 26 de oct�breVier�es 26 de oct�breVier�es 26 de oct�breVier�es 26 de oct�bre
“En aquel tiempo, al salir Jesús de Jericó con sus discípulos y bastante
gente, el ciego Bar8imeo estaba sentado al borde del camino pidiendo
limosna. Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a g"itar: <<Hijo de David, ten
compasión de mí.>>. Muchos le regañaban para que se callara. Pero él g"itaba
más: <<Hijo de David, ten compasión de mí.>>. Jesús se det�vo y dijo:
<<Llamadlo>>. Llamaron al ciego diciéndole: <<Ánimo, levántate, que te
llama.>>. Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús. Jesús le dijo: <<¿Qué
quieres que haga por ti? >>. El ciego le contestó: <<Maest"o ,que pueda ver.>>
Jesús le dijo:: <<Anda, t� fe te ha curado.>>. Y al momento recobró la vista y lo
seg�ía por el camino. (Mc, 10, 46-52)
El ciego se empeñó en encont"arse contigo y por su insistencia lo ha
consig�ió. No f�e fácil, pues alg�nos le pedían que callara y que no te
molestara. ¡Ojalá f�ésemos tan insistentes nosot"os en este deseo de
encont"ar�os contigo! El ciego consig�ió que te fijaras en él y que le curaras.
Fíjate también en mí y ayTdame a cambiar aquello que no favorece el
const"�ir el mundo. Dame t� Luz, dame t� Vida y enséñame a responder con
generosidad a t� llamada. Te lo pedimos con la oración que tT mismo nos has
enseñado: Padre nuest"oPadre nuest"oPadre nuest"oPadre nuest"o… … … …
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Lunes 29 de oct�breLunes 29 de oct�breLunes 29 de oct�breLunes 29 de oct�bre
Se cuenta que con un viejo violín, un pobre hombre se ganaba la vida.
Iba por los pueblos, comenzaba a tocar y al final pasaba ent"e la concur"encia
una ag�jereada boina con la esperanza de que algTn día se llenara.
Cier8o día comenzó a tocar como solía, se reunió la gente, y salió lo de
cost�mbre: unos r�idos más o menos arConiosos. No daba para más ni el
violín ni el violinista. Y acer8ó a pasar por allí un vir8�oso del violín. Se acercó
y le dejaron el inst"�mento. Lo afinó y tocó una pieza asombrosamente bella.
El mismo dueño estaba perBlejo y lleno de asombro. Iba de un lado para ot"o
diciendo: “¡Es mi violín... es mi violín... es mi violín...!”. Nunca pensó que
aquellas viejas cuerdas encer"aran tantas posibilidades.
¿Y nosot"os? ¿Rendimos al máximo de nuest"as posibilidades o somos
en muchas ocasiones como ese viejo violín desafinado? Cuánto cambian las
cosas, sin embargo, cuando dejamos que el g"an compositor, Dios, nos afine,
nos ar"egle, ponga esa cuerda que falta, y dejamos que Él toque.
Pero también a nuest"o alrededor existen violinistas que nos pueden
afinar: un amigo, un maest"o, o cualquier persona de la que podamos obtener
conocimientos, un consejo, una buena idea, una cor"ección <ater�a.
Luchemos constante e incansablemente por ser un violín cada vez mejor
afinado.
Yo sólo f�i un inst"�mento
en las manos creadoras de mi Dios,
que es un ar8ista.
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Mar8es 30 de oct�breMar8es 30 de oct�breMar8es 30 de oct�breMar8es 30 de oct�bre
Cuentan que un discípulo preg�ntó a su maest"o : “Maest"o, ¿cuál es la
diferencia ent"e el cielo y el infier�o?” Y el maest"o respondió: “Es muy
pequeña, y sin embargo de g"andes consecuencias. Escucha cómo la entiendo
yo.”
Vi un g"an monte de ar"oz cocido, listo para comer. A su alrededor
había muchos hombres, casi a punto de morir de hambre. No podían
aproximarse al monte de ar"oz, pero tenían en las manos unos palillos de dos
o t"es met"os de longit�d. Es verdad que podían coger el ar"oz, pero no
conseg�ían llevárselo a la boca, porque los palillos eran demasiado largos. De
este modo, hambrientos y moribundos, juntos pero solitarios, perCanecían
padeciendo un hambre eter�a delante de una abundancia inagotable. Y eso
era el Infier�o.
Vi ot"o g"an monte de ar"oz cocido . Alrededor había muchos hombres,
hambrientos pero llenos de vitalidad. No podían aproximarse al monte de
ar"oz, pero tenían en las manos unos palillos de dos o t"es met"os de longit�d.
Llegaban a coger el ar"oz, pero no conseg�ían llevárselo a la boca, porque los
palillos eran demasiado largos. Pero, en vez de utilizar los largos palillos para
llevarse el ar"oz a su propia boca, los usaban para serQirse unos a ot"os. Y así
aplacaban su hambre insaciable en una g"an comunión <ater�a, cercana y
solidaria. Y eso era el Cielo”.
Dame todo ese amor que de mí pides; dame más amor
Tiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo OrdinarioTiempo Ordinario
Miércoles 31 de oct�breMiércoles 31 de oct�breMiércoles 31 de oct�breMiércoles 31 de oct�bre
Los colores riñeron, todos decían ser el mejor. El verde dijo: “Soy símbolo
de la vida y esperanza. Cubro el campo y las hojas”. El azul inter"�mpió: “Tú solo
piensas en la tier"a, pero también debes pensar en el cielo y el mar. ” El amarillo
dijo: “Ustedes son tan serios; yo t"aigo risa y aleg"ía con el sol”. El naranja
replicó: “Yo soy el color de la salud y la for8aleza. Llevo las vitaminas más
impor8antes, piensen en la zanahoria y naranja.”. El rojo g"itó: “Soy la sang"e de
la vida, la pasión y el amor”. El violeta dijo “Soy la realeza, el poder. Los reyes y
obispos siempre me han escogido porque soy símbolo de autoridad y sabiduría,
la gente me escucha y obedece”. Finalmente el añil habló: “Soy el color del
silencio, sin mi todo sería más superficial. Represento el pensamiento y la
reflexión”.
Los colores sig�ieron alardeando, cuando hubo un destello sorBrendente.
La lluvia comenzó a caer implacable, los colores se agacharon y con temor se
acercaba el uno con el ot"o para abrigarse. La lluvia dijo: “Colores, ¿no sabéis
que cada uno f�e hecho con un propósito especial único y diferente? Agar"aos
de las manos y venid a mi. De ahora en adelante, cuando llueva os uniréis y
cr�zaréis el cielo forCando un g"an arco de color como recuerdo de que todos
pueden vivir en paz”. Y ASÍ NACIÓ ELARCO IRIS.
Recuerda, Dios nos ha hecho diferentes, pero todos somos necesarios
para pintar ese g"an cuadro que es el mundo.
Busca el silencio,Busca el silencio,Busca el silencio,Busca el silencio,
ten alerta el corazón, ten alerta el corazón, ten alerta el corazón, ten alerta el corazón,
calla y contemplacalla y contemplacalla y contemplacalla y contempla