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Un viejo soldado volvía a su casa, después de una guerra, con los pies doloridos y la barriga vacía. Sólo pensaba en reposar y comer. Llegó a un pueblo, llamó a la primera puerta que encontró: - ¿Puedo entrar y descansar un rato?- preguntó el soldado. - Entra soldado, respondió una vieja. - ¿Tienes algo para comer?, preguntó el soldado. La vieja, que era muy avara, no quiso darle nada. - ¡Bueno, bueno; cuando no hay nada, no hay nada!, dijo el soldado. Y señalando un hacha que había en la pared dijo: - Podríamos hacer sopa de hacha. La mujer quedó perpleja. ¿Sopa de hacha? El soldado lavó el hacha, la metió en la olla y la puso al fuego. Al cabo de un rato probó el caldo y dijo: - Pronto estará listo. Lástima que no tengas un poco de sal. - Sí que tengo, dijo la anciana,- Toma. El soldado volvió a probar el caldo y dijo en voz alta: LA SOPA DE HACHA

Cuento La Sopa de Hacha

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Page 1: Cuento La Sopa de Hacha

Un viejo soldado volvía a su casa, después de una guerra, con los pies doloridos y la barriga vacía. Sólo pensaba en reposar y comer.Llegó a un pueblo, llamó a la primera puerta que encontró:- ¿Puedo entrar y descansar un rato?- preguntó el soldado.- Entra soldado, respondió una vieja.- ¿Tienes algo para comer?, preguntó el soldado.La vieja, que era muy avara, no quiso darle nada.- ¡Bueno, bueno; cuando no hay nada, no hay nada!, dijo el soldado.Y señalando un hacha que había en la pared dijo:- Podríamos hacer sopa de hacha.La mujer quedó perpleja. ¿Sopa de hacha? El soldado lavó el hacha, la metió en la olla y la puso al fuego. Al cabo de un rato probó el caldo y dijo:- Pronto estará listo. Lástima que no tengas un poco de sal.- Sí que tengo, dijo la anciana,- Toma.El soldado volvió a probar el caldo y dijo en voz alta:- Un puñado de cebollas le daría el toque justo.La vieja le trajo un puñado de cebollas grandes y el soldado las agregó al caldo. De nuevo el soldado probó el caldo y comentó:- Si tuviéramos un pedazo de mantequilla y un trozo de carne, ¡todavía tendría mejor sabor!La vieja avara le iba trayendo todo sin protestar. Por fin el soldado anunció que la sopa estaba lista. Se dirigió hacia la vieja diciéndole:

LA SOPA DE HACHA