14
En fin, con estas notas sólo hemos querido establecer una base de diálogo y de debate que nos permita avanzar sin complejos hacia la cons- trucción de un sistema educativo democrático actual, justo y solidario. Al tiempo que el contexto para la construcción de una escuela democrática. Escuela democrática A una sociedad democrática y a un sistema educativo democrático corres- ponde construir escuelas también democráticas. Sin embargo, la caracteri- zación de las escuelas democráticas no está exenta de ambigüedad porque cada propuesta responde a una determinada forma de entender la demo- cracia y, en última instancia, a unos intereses sociales, polfticos, culturales y económicos. Así, qu ienes entienden la democracia sólo como una forma de gobierno no ven demasiadas implicaciones escolares; en todo caso, la participación de los padres en la determinación de las cuestiones relativas al gobierno de las escuelas . Pero quienes la concebimos como una forma . de vida, presidida por unos valores característicos de los que la justicia ocu- paría el primer lugar, creemos que la institución escolar debe impregnarse de esos valores, y de forma más amplia de lo que entendemos por cultura democrática, y actuar en consecuencia. Aún compartiendo esta primera idea, hemos encontrado en la biblio- grafía especializada diferentes enfoques acerca de lo que es una escuela democrática, y todos ellos nos han parecido insuficientes o incompletos. Un buen número de propuestas, y de estudios sobre la calidad democráti- ca de nuestras escuelas, pone el énfasis en la participación de la comuni- dad educativa en la toma de decisiones como la característica primordial de una escuela democrática (Fernández Enguita, 1992 y 1998; Santos Guerra, 1999) o, de forma más general. en la dimensión organizativa (Beltrán y San Martín, 2000). Otro conjunto, también muy amplio, se fija fundamental- mente en el currículum para caracterizar a una escuela democrática, y, de todos los elementos y procesos que lo constituyen, se centran en la selec- &uO\-f'ro f\ (\- JV..O,4 co 1 .... , I ¡ I ción cultural que se realiza, s de tal modo que la calidad democrática de la I ¡ escuela depende de la medida en que incorpora los valores democráticos (Arendt, 1996; Albacete, Cárdenas y Delgado, 2000; Bárcena, 1997; Bárcena, Gil y Jover, 1999; Bolívar, 1997 y 1999; Camps, 1990 y 1997; ! Camps y Giner, 1998; Cortina, 1994 y 1997; Díaz-Aguado, 1996; González ¡ Lucini, 1994; Mayordomo, 1998; Ortega, Mínguez y Gil, 1996; Payá, 1997; PérezTapias, 1996; Romero, 1997; Sánchez, 1998; Yus, 1996). ¡ Apple y Beane (1997), por otra parte, hacen una propuesta muy in te- I resante al subrayar que: ¡ I I «Las escuelas democráticas, como la democracia misma, no se producen por ca- ¡ sualidad. Se derivan de intentos explícitos de los educadores de poner en vigor las t disposiciones y oportunidades que darán vida a la democracia [... ] Estas disposi- ( ciones y oportunidades implican dos líneas de trabajo . Una es crear estructuras y procesos democráticos mediante los cuales se configure la vida en la escuela. La I [ t otra es crear un currículum que aporte exper i encias democráticas a los jóvenes» 1. (p. 24). En ella se destaca, además de las dos líneas de trabajo (proceso de- mocrático de toma de decisiones y currículum democrático) la idea de t construcción social de la escuela y de compromiso del profesorado en esa ! construcción . Desde una perspectiva complementaria, Connell (1997) añade otro I ingrediente más a la caracterización de la escuela democrática: la justicia ¡ social. ¡ Tras este breve repaso, creo que hemos detectado algunos de los atri- butos críticos necesarios para caracterizar una escuela democrática, a sa- I ber: una organización presidida por la participación de toda la comunidad educativa, en especial el alumnado, en los procesos de toma de decisiones; una selección cultural que persigue la incorporación decidida de los valores democráticos al currículum; y un fin, la justicia social, que da sentido y sir- ve de marco de referencia último a la escuela . ' Sin embargo, desde nuestro punto de vista, haría falta completar esta identificación de atributos con otros dos. Por un lado, ampliar la conside- 1 5. Podríamos dec ir. al respedO, que se ha generado toda una línea de investigación y de propuestas educativas en torno a lo que podríamos denominar (' educación en valores» o {( educación de la ciudadanfa».

Cultura Democratica, Escuela y Construcción Comunidad Educativa

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Analisis interesante

Citation preview

  • En fin, con estas notas slo hemos querido establecer una base de dilogo y de debate que nos permita avanzar sin complejos hacia la construccin de un sistema educativo democrtico actual, justo y solidario. Al tiempo que el contexto para la construccin de una escuela democrtica.

    Escuela democrtica

    A una sociedad democrtica y a un sistema educativo democrtico corresponde construir escuelas tambin democrticas. Sin embargo, la caracterizacin de las escuelas democrticas no est exenta de ambigedad porque cada propuesta responde a una determinada forma de entender la democracia y, en ltima instancia, a unos intereses sociales, polfticos, culturales y econmicos. As, quienes entienden la democracia slo como una forma de gobierno no ven demasiadas implicaciones escolares; en todo caso, la participacin de los padres en la determinacin de las cuestiones relativas al gobierno de las escuelas. Pero quienes la concebimos como una forma

    . de vida, presidida por unos valores caractersticos de los que la justicia ocupara el primer lugar, creemos que la institucin escolar debe impregnarse de esos valores, y de forma ms amplia de lo que entendemos por cultura democrtica, y actuar en consecuencia.

    An compartiendo esta primera idea, hemos encontrado en la bibliografa especializada diferentes enfoques acerca de lo que es una escuela democrtica, y todos ellos nos han parecido insuficientes o incompletos. Un buen nmero de propuestas, y de estudios sobre la calidad democrtica de nuestras escuelas, pone el nfasis en la participacin de la comunidad educativa en la toma de decisiones como la caracterstica primordial de una escuela democrtica (Fernndez Enguita, 1992 y 1998; Santos Guerra, 1999) o, de forma ms general. en la dimensin organizativa (Beltrn y San Martn, 2000). Otro conjunto, tambin muy amplio, se fija fundamentalmente en el currculum para caracterizar a una escuela democrtica, y, de todos los elementos y procesos que lo constituyen, se centran en la selec

    &uO\-f'ro f~/ f\ C2~) ~'-!:4--- (\- JV..O,4 co .~1 ~",:",-"" ,- .... , 4 .~.

    I I ~a-io~ '. t.~

    cin cultural que se realiza, s de tal modo que la calidad democrtica de la

    I escuela depende de la medida en que incorpora los valores democrticos

    (Arendt, 1996; Albacete, Crdenas y Delgado, 2000; Brcena, 1997; Brcena, Gil y Jover, 1999; Bolvar, 1997 y 1999; Camps, 1990 y 1997;

    ! Camps y Giner, 1998; Cortina, 1994 y 1997; Daz-Aguado, 1996; Gonzlez Lucini, 1994; Mayordomo, 1998; Ortega, Mnguez y Gil, 1996; Pay, 1997; PrezTapias, 1996; Romero, 1997; Snchez, 1998; Yus, 1996). Apple y Beane (1997), por otra parte, hacen una propuesta muy inte

    I resante al subrayar que:

    I I Las escuelas democrticas, como la democracia misma, no se producen por ca

    sualidad. Se derivan de intentos explcitos de los educadores de poner en vigor last disposiciones y oportunidades que darn vida a la democracia [... ] Estas disposi( ciones y oportunidades implican dos lneas de trabajo . Una es crear estructuras y procesos democrticos mediante los cuales se configure la vida en la escuela. LaI

    [ t otra es crear un currculum que aporte exper iencias democrticas a los jvenes

    1. (p. 24).

    En ella se destaca, adems de las dos lneas de trabajo (proceso de

    mocrtico de toma de decisiones y currculum democrtico) la idea de

    t construccin social de la escuela y de compromiso del profesorado en esa

    ! construccin . Desde una perspectiva complementaria, Connell (1997) aade otro

    I ingrediente ms a la caracterizacin de la escuela democrtica: la justicia social.

    Tras este breve repaso, creo que hemos detectado algunos de los atri

    butos crticos necesarios para caracterizar una escuela democrtica, a sa

    I ber: una organizacin presidida por la participacin de toda la comunidad educativa, en especial el alumnado, en los procesos de toma de decisiones; una seleccin cultural que persigue la incorporacin decidida de los valores~ democrticos al currculum; y un fin, la justicia social, que da sentido y sirve de marco de referencia ltimo a la escuela . '

    Sin embargo, desde nuestro punto de vista, hara falta completar esta identificacin de atributos con otros dos. Por un lado, ampliar la conside

    1 5. Podramos decir. al respedO, que se ha generado toda una lnea de investigacin y

    de propuestas educativas en torno a lo que podramos denominar (' educacin en valores o {( educacin de la ciudadanfa.

  • racin que se del currculum,6 pues para que sea coherente con las dems caractersticas de una democrtica debe considerarse en sus elementos y procesos, no slo en lo relativo a la seleccin cultural. Por

    incorporar la figura del profesorado tanto desde su concepcin como profesional democrtico? hasta la naturaleza su desarrollo

    todo ello, nuestra propuesta de escuela democrtica no a las siguientes dimensiones:

    ESCUELA DEMOCRTICA

    /--L~ Currculum Organizacin

    democrtico democrtica

    En este libro slo nos vamos a ocupar de una de esas dimensiones: el Sin embargo, somos conscientes, y queremos dejar constancia

    explcita de de que slo la construccin dialctica y coordinada de la cultura de la escuela en torno a las tres dimensiones apuntadas, conducir a una escuela realmente democrtica.

    Para finalizar este apartado, queremos que no perdamos de vista la esencial a

    y analizar separadamente una las dimensiones anteriores. As, para nosotros una escuela democrtica es aqulla que se compromete, aprovechando hasta el lmite sus posibilidades organizativas y res, a evitar que las diferencias y desigualdades individuales, grupales o sociales del alumnado se conviertan en dificultades para acceder a la que ofrece el currculum comn y obligatorio.

    6. Quizs esta deficiencia provenga de la concepcin del currculum desde ciertos enfoques como la seleccin y $ecuenciacn de la cultura y la enunciacin y secuenciacin de las metas y objetivos que se persiguen, considerando los dems elementos (en parte la organizacin del currculum, la metodologa y la evaluacin), como cuestiones relativas a la enseanza.

    7. En un breve pero interesante artculo, M. Fernndez nos ofrece una caracterizacin de ese profeSional democrtico que coinCide bsicamente con nuestra idea al respecto: "Una profesin democrtica para un servicio pblico, Cuadernos de Pedagoga, na 302: 74-79, mayo de 2001.

  • J -

    y {(

    tenciales para la de la actuaciones sucesivas; elementos

    para de manera activa nuestra . En ter-cer lugar, recogemos una caracterrstica en la que coinciden tambin todos los autores: la cultura se ensea y se aprende, no es algo gentico, hereditario. Adems, se aaden algunas caractersticas de ese proceso de enseanza aprendizaje: ..adquirida y mediante .. ; transmitidos a nios por sus o por otros grupos mientras crecen; transmitida (enculturacin) por medio de objetos y

    Para concluir este anlisis, aadir otra idea 1940) que ltimamente ha cobrado fuerza de la mano del postmodernismo: El desarrollo particular de cada cultura (relativismo cultural) imposibilita la generalizacin la cultura [ ... ] Toda abstraccin es violenta y lo sin-guiar para amoldarlo a la teora general .. ] La cultura las manifestaciones de una 40

    Este que no se puede de cultura en trminos universales, hay tantas culturas como comunidades, y, por

    cualquier intento de generalizacin supondra una imposicin cultural. Adems, significa admitir que cuando se habla de la sociedad nos estamos refiriendo a un conjunto de grupos humanos, comunidades: etc., y no a un todo homogneo. Por tanto, deberamos asumir que la nada cultura es un constructo tan como la y com

    por

    Qu entender por cultura democrtica?

    Adems, y para salvar el escollo que plantea el relativismo

    grediente que atravesara en la sociedad y en la

    Quiere r el sustrato formal para

    39. Aguirre, op. cit, p. 152. 40. Boas, F. (1940): Race, language and culture, N. York: The free Press, citado por

    Agulrre, op. cit. p. 155.

    una comunicaCin, tendente al consenso, entre todos los grupos y presentes en nuestra sociedad. Si un pueblo capaz de admitir su pluralidad cultural no es capaz incorporar a su ncleo cultural bsico una especie de denominador comn, lenguaje compartido o reglas del juego consensuadas para dialogar, est condenado a la confrontacin nl>rrn:::m""..,tl> embargo, la tarea es muy complicada porque lo que entendemos por democracia. Aun

    de esa y la tiene que un pa-en ese

    Efectivamente, el primer escollo es clarificar qu entendemos por democracia. Touraine (1994), pone el dedo en la llaga cuando afirma: Ya no queremos una democracia de participacin; no podemos contentarnos con una democracia de deliberacin; necesitamos una democracia de cin 41 Seguramente se encuentra en momento esa

    de

    que en cada sociedad

    ostentan el poder real, interesados en permanecer en el primer do, y otros grupos necesitados de avanzar hasta el tercer nivel, los que ahora estn oprimidos y alienados. Por lo que el desarrollo la democracia en nuestro pas y en cualquier otro cuenta con muy poderosos.

    Situndonos en una perspectiva que contemplara la como liberacin v Densando au Duede ofrecer la al

    por H. Giroux:3 uno de los puntos de referencia de la pedagoga crtica:'4 convertir la vida en la escuela en una experiencia democrtica de primera calidad.

    Cuando Dewey (1963; 1995) afirma que la bsica que debemos plantearnos es vivir en el presente situaciones vida lo porque la constituye el en la

    la rnn\II\/l>nn:::.

    41. Touraine, A. (1994): es la democraCia?, Madrid: Temas de hoy, p.28. 42. Dewey, J. (1963): Democracia y Educacin, Buenos Aires: Losada; y Dewey, J.

    (1995): Democracia y Educacin, Madrid: Morata. 43. Giroux, H. A. (1990): Los profesores como intelectuales. Hacia una pedagoga crti

    ca del aprendizaje, Madrid: PaidslMEC. 44. Me refiero a todos los realizados sobre feminismo, racismo, educacin

    para la paz, etc., que desde una perspeclva crtica se vienen realizando desde hace algunos aos.

  • la educacin tiene el papel del desarrollo de la inteligencia, la comprensin de la experiencia, el aprendizaje de la colaboracin y la defensa de la igualdad, De igual modo se manifiesta Giroux (1990) al mar que
  • El desarrollo SOClODol que estara presidido por el ciy la democracia. Se centra en dimensiones sociopolticas

    que la vida cotidiana democrtica. Educar para la es contribuir a formar personas autnomas, al tiempo que con aquellas virtudes cvicas necesarias para asumir y profundizar la democracia. Como se explica en el apartado un conjunto y

    bita

    y participacin social e individual, de acuerdo con los humanos. El mbito y la

    diversidad. Educar en la reconociendo las diferencias es tarnEn los tiempos el feminismo o el mul

    diferencias equl

    dad y de este mbito. En esta dimensin entran, pues, el

    ro y etnia o cultura, y

    El asunto

    a contrarrestar los procesos de

    El mbito c:nr'irli:"n, valores de y solidaridad. Entre los valores ms que es preciso vivir en el centro escolar sin duda, tambin el sentido de justicia y, como contrapunto, la

    La justicia social permite articular la libertad e iqualdad, en la

    medida que el objetivo es el tllximo de

    igualdad. Por su parte, /a solidaridad es la cara

    cia. como un consumo responsable, un desarrollo sostenible con el medio ambiente o actitudes ecologistas,

    tambin de esta dimensin.

    El mbito sociopersonal. guiado por los de la autonoma y la

    responsabilidad. Es otra importante a tener presente en la acci n educativa. Por una parte, una educacin denlocrtica se mover la autonoma moral, como otra cara de la libertad. Al tIC""""" bertad tiene su corre/ato en los correspondientes deberes que la responsabilidad. Ser responsable es tambin ser autnomo, en la medida que se de los actos realizados por s mismo. Adems, en este

    CURRCULUM Y UtIV1ULKAC.

    entran cuestiones como autoestima, cuidado y salud personal y colectiva, etc., que configuran a las personas afectivamente.

    hemos construido nuestra visin de cultura Sin embargo, an es preciso delimitar lo que debera

    rarse a la educacin obligatoria a travs un currculum y una escuela de

    Qu debera incorporar un currculum democrtico de esa cultura democrtica? Algunas propuestas para seguir reflexionando

    El currculum democrtico, bsico y obligatorio, la cultura a la todos los ciudadanos tienen derecho a acceder para comprender

    activamente en la sociedad en la que viven. Con ello queremos destacar la de que el acceso a esa cultura es un derecho que tienen todos los ciudadanos, Por eso es esencial que sea comn en el sentido que ya

    anteriormente. Lo que exige que sea la sociedad, bsica aunque no eXClUSivamente. a travs de su sistema educativo y de las instituciones

    a la ciudadana y no a la inversa. El esfuerzo poltico, econmico y tcnico lo tiene que la sociedad, mediante los mecanismos previstos por la Constitucin y que al Estado (central, autonmico y local) y, especialmente, al Gobierno surgido las urnas. El esfuerzo profesional e ideolgico corresponde al profesorado, con el apoyo de las farnilias. Y el esfuerzo por aprender a los ciudadanos en edad

    obligatoria. Sin embargo, de poco servir el trabajo del profesorado, familias y alumnado si las decisiones polticas, econmicas y tcnicas no son coherentes con esta concepcin currculum democrtico.

    Se trata pues, decidir acerca de los elementos constitutivos de esa cultura capaz ofrecer a todos los ciudadanos, mente de su origen y su destino social, la oportunidad de participar en

    de condiciones en las decisiones propias de una sociedad democrtica: locales, autonmi::os y central; en las estructuras o ciudadanas y otros tipos participar activamente en cualquier foro mocrtico popular, consejos escolares, asociaciones de vecinos,

    NA1URALFlA DE UN CURRCULUM DEMOCRTICO 12 73

  • Por democrtico estara interesado en y, en la medida de lo posible, asegurar, que se ca el mayor grado de coherencia entre la democrtica que de transmitir la escuela y el de ensearla.

    Para desarrollar esta tarea vamos a hacer una metodolgicos que orienten la prctica docente, cuya seleCCIn se ra en el marco de esa coherencia que buscamos, y explicando

    implicaciones que dichos principios tendran en la la metodologa. Somos conscientes de que los principios metodolgicos que proponemos no son ni originales ni novedosos. Son compartidos por muchas y muy variadas propuestas curriculares que van desde la propia LOGSE

    llevadas a cabo por colectivos de profesorado, MRPs, y y desarrollados en otros contextos pero cuya inciden

    cia mundial es manifiesta (Bruner, Stenhouse ..) distintas versiones y enunciaciones que incluido un

    considerable de principios, hemos decidido sintetizar la en torno a

    las

    clara y sinttica los principios los podramos enunciar as:

    - Compromiso con la construccin de una cultura en el aula. Ensear mediante una metodologa basada en la investigacin y el

    descubrimiento.

    Estos dos principios implican, a su vez, los

    - La enseanza debe partir de las experiencias, problemas e intereses del alumnado, y el aprendizaje integrarse en su vida cotidiana.

    - Favorecer el estudio de temas que no se normalmente Y son anorados por los medios de

    Favorecer que el alumnado efecte elecciones informadas realizar las actividades escolares y YAfl"v;~n",r cnhro clle rrmCOrll

    la bsqueda, es cuestas en las que no son halladas reSDuestas detlnltlvas a

    tiones.

    - El profesorado ha de un nuevo papel: un recurso para el aprendizaje ms que una autoridad.

    A estos dos que, en cualquier caso:

    - Las ser tal que su miento con xito por niveles.

    Compromiso con la construccin de una cultura cooperativa en el aula La cooperacin o es uno de los valores primordiales de la

    cultura democrtica. Por truir su cultura en esa do lugar, por su compromiso con una mas a detener de forma en la presentacin de este

    La preocupacin por el desarrollo de este valor y esta cultura no es nueva, ms bien, podramos ha sido uno de los intereses constantes entre tericos y prcticos de la Desde Rousseau hasta Ferrer i

    y Freinet, por Cousinet, Makarenko, Kirkpatrick, Neill, y un largo encontramos reflexiones y experien

    tenido como la cooperacin, o interpretaciones ms mismo asunto como la solidaridad. Lo que ha generado una gama a este valor y tipo de

    Por por cultura Para nosotros existen dos

    al resoecto. recogen los aspectos que ms nos interesa destacar: por un como forma de convivencia escolar democrtica por por como modelo de enseanza y aprendizaje. Cremas que tenerse en cuenta aunque el primero tenga ms historia y est ms con la cultura democrtica que pretendemos construir. Pero en la actualidad disponemos de suficientes evidencias (Johnson y Johnson, 1978 y 1987; Johr1Son, Johnson y Maruyama, 1983; Johnson, Maruyama y cols. 1981; Slavin, 1983 y 1995) para afirmar la Superioridad de la frente al individualismo o la competicin no slo como forma convivencia democrtica sino tambin como modelo de ;:nronrli7::>i", y, en de mejora del rendimiento.

    DC UN BSICO 117 116 I

  • La cooperacin como forma de convivencia democrtica Esta forma de interpretar la cooperacin quiere poner el n fasis en los

    procesos de socializacin e interaccin social, destacando su potencialidad para la construccin de relaciones equilibradas con las personas en situaciones comportarse de manera solidaria, reconociendo y valorando crticamente las diferencias de tipo social y rechazando cualquier discriminacin en diferencias de sexo, clase social, creencias, razas y otras caractersticas individuales y sociales, como establece la LOGSE a travs de uno de los objetivos generales de la educacin obligatoria.

    El compromiso con la construccin de una cultura cooperativa en el aula y el centro se torna, as, ineludible para lograr que el alumnado tenqa la oportunidad de vivir ese tipo de relaciones de forma natural y cotidiana el valor de las interacciones entre iguales para el desarrollo social en una sociedad plural. No tiene (y parece hasta deshonesto) hacer que

    nios (como por psquicos o emocionales) e al nio en otras de diversidad (las cateqoras tnicas oficialmente a menos que la una de interaccin en titudes hacia dichas diferencias

    Ese de relaciones tiene que ser caracterstico entre el entre ste yel y entre el mODio mofesorado. Destacamos esta idea porque el inters ms en las relaciones

    en I::spana y en los mismos trel ICEM en Francia y el MCE en Italia), que entre el

    de enseantes queEscuela Moderna MUP, es la crtico y de investigacin, busca o carnina ha

    cia una renovacin de escuela. Este trabajo cooperativo estar plasmado en: por medio de un

    La coooeracin entre maestros en la profundi7.acin e intercambio de mtodos y llevadas a cabo en nuestro quehacer pedaggico.

    Este entre maestros tiende a promocionar el trabajo cooperareStivo entre los alumnos de diferentes escuelas, tomando como mtodo la cor

    interescolar (MCEP, 1979: 125).

    CURRICULUM y DEMOCRACIA

    porque en sus

    Guardia, 1976) la

    por el

    esa

    Para que se esentre el cues

    y

    el como el Dc>-,."r;~ para la social entre

    el para en la construccin de las relaciones in-

    y profesional predominante en nuestro sistema por polticas educativas impregnadas de uni

    igualitarismo, ha convertido las aulas y los centros en fros, de paso, exageradamente funciona-

    para vivir y establecer relaciones interpersonales La clase-aula es el espacio en el que se definen

    las donde se presentan las ocasiones de socializa-los mecanismos de enfrentamiento, de

    participacin, en un grupo, de conflicto, de margina-y es en este espacio donde siempre se producen las y se dan relaciones con los dems (las otras clases,

    la organizacin escolar global, lo externo a la escuela). [ ... ] El aula de la propia es el lugar en el que nos presentamos al comienzo del curso, nos vemos todos lo nos conocemos y vivimos da a da. 1...1En es la propia habitacin la [.. (Rizzi, 1997: 55).

    Si reconocemos que el ciones, deberemos admitir que la mente en el tipo de que

    es el espacio

    la enseanza- para

    para construir rela-

    procesos curricues preparar el

    el

    se

    su organizacin social el mismo tiempo que a lares, porque, en lo que estaremos

    -estructura social je una

    Conseguir que las aulas se conviertan en persoa la del espa

    119 ~

    118

  • cio y de las relaciones, para favorecer el tipo de interacciones que queremos desarrollar y evitar las que no deseamos que se produzcan. Lo table es pretender que esas interacciones surjan espontneamente y cuando comprobamos nuestro fracaso responsabilizar al alumnado Si dis

    para que cada alumno y alumna si tareas que deben resolverse

    te, si nos sentimos incmodos porque el alumnado se mueve o hace ruido, si impedimos que el alumnado se comunique entre s, si el mejor de la cIase es el que antes acaba las tareas ... , cmo podemos esperar que no se

    conflictos, que no aflore la agresividad; incluso, como veremos ms adelante, cmo podemos pretender que todos nuestros alumnos encuentren til lo que aprenden o, simplemente, que aprendan"?

    Es cierto que determinadas relacionadas con la del profesorado a los centros. el de ciertos (sobre todo en la que tiene la administracin del espaCio es

    social del aula para la construccin de relaciones pero no lo es menos que esa

    no forma del catlogo profesional de la mayora del profesorado, bien porque no se le presta atencin en su forma

    inicial, porque no se la relaciona con el acadmico, o porque no se asume la enseanza de actitudes, valores y normas.

    Tambin es verdad que la organizacin aula como espacio creacin de relaciones no es un trabajo sencillo, pero disponemos de conocimientos, tcnicas y experiencias sufucientes para iniciar el proceso con

    las asambleas, el diario mural (donde debe aparecer a la vista la del tiempo, el reglamento -que la clase construye, respeta y

    puede cambiar segn sus las reuniones de los

    las cosas importantes, etc., el plan de trabajo), la adauisicin colectiva de los clases que nrndllpn el pequeo grupo como ncleo de la cooperacin, etc. Lo que falta, es el compromiso de las comunidades en el reto.

    la cooperacin como modelo de enseanza y aprendizaje cooperacin no slo representa la forma de convivencia democrtica

    ms adecuada para la socializcin y construccin de relaciones, tambin es un mOdelo de enseanza y eficaz, que est mosvando su gran ;,,+1, ,,,Niil so-

    DEMOCRACIA

    de competermas y destrezas sociales, control de la e inleriorizacin de las normas sociales y e\ rendimiento acadmico.

    y cols. 1981).

    Esta consideracin es menos habitual y, adems, suele negarse. La del profesorado sigue creyendo que el aprendizaje individual es

    ms potente que el cooperativo, quizs porque es el modelo con que todos y, si nosotros lo conseguimos, por qu no lo va a con-

    Adems, de nuevo de constatar que ciertas pOlltlcas desarrOllaaas por la administracin (determinacin del n de alumnos por aula, la estructura curricular de las etapas, sistema de incentivos, modelos formacin del profesorado, etc.) favorecen esta Pero quizs hayan otros dos factores an ms

    texto, en-y la cultura tendidos como materiales y estandarizados, yel

    del profesorado, son un o aislacionismo, como formas handicap para la enseanza y el aprendizaje Como ya pusieran manifiesto Piaget y la

    per(Ovejero, 1 la interaccin entre iguales, es mite una confroniKin de puntos de vista que provoca un conflicto

    que favorece el progreso intelectual, porque como ponen manifiesto y Doise, 1983 (citados por Oveiero. 1990:

    a1. El nio toma conciencia de la existencia de la suya.

    2. Otra persona indicaciones que pueden ser pertinentes para la elaboracin de un nuevo instrumento

    3. Aumenta la posibilidad de que el nio sea activo

    Si la teora del conflicto sociocognitivo algunas limitaciones, la obra Vygotsky (1973; 1977 Y 1 Y los trabajos actuales, inspirados en l y en la escuela sovitica, de autores como Forman y Cazden (1 y

    (1991) ofrecen explicaciones tericas y desarrollos metodolgicos para superarlas. Segn Vygotsky, la confrontacin puntos vista divergentes, causa del conflicto sociocognitivo, es uno de los caminos que reperCute en el desarrollo intelectual, pero no es el nico. As, se considera que

    social no slo favorece el desarrollo de la inteligencia y el rendi-

    LA I>.ATU RALE7A CURRCUlUM BSICO

    120

    2

  • in1984:

    es decir, la distancia entre el nivel de desarrollo real, determinado por la solucin de

    y el nivel de desarrollo potencial, determinado por la solucin de los problemas bajo la direccin de adultos o en colaboracin con iguales ms capaces (Vygotsky, 1979: 86), Por otra parte, se mula la hiptesis de la funcin reguladora del que en trminos

    funcin una a Levine . con el fin de comunicarla a los dems obliga a recon

    lo que se pretende transmitir (Ovejero, 1990: 72). Si bien Vygotsky lo a la interaccin nio-adulto, Forman y Cazden lo hacen a las interacciones nio-nio, porque ofrecen las condiciones para maximizar los positivos reguladores del

    As, la conversacin, la discusin, hablar en clase se convierten en condicin para el (Cazden, 1991; 200n Cazden identifica cuatro beneficios cognitivos discurso entre como catalizador de como de roles com

    con los otros, y como habla exploratoria en lugar de versin ltima. que muchas de nuestras escuelas sigan

    el silencio del alumnado como indicador de una buena docencia! En resumen, podemos afirmar que la construccin de una cultura coo

    perativa en el aula es el primer compromiso que debe adquirir el y las escuelas, interesados en una profundizacin democrtica

    yen el descubrimiento

    Este es un que ciones tales como que el alumnado de

    ,,~Y~.,dizaje por s facilitar una intensa actividad del alumno; asignar a los estudiantes activos, en lugar de pasivos, en situaciones de aprendizaje; etc., que con la difusin e implantacin de la LOGSE se han puesto de moda, si su origen es mucho ms antiquo Ysu sencia en la investigacin curricular y en la

    Ensear mediante una metodologa basada en la

    socrtica, Dewey, Claparde, Montessori, Decroly, Piaget, Vygotsky ete.), Adems, es una opcin metodolgica compartida por muchas y muy val'iadas propuestas curriculares, yen ese sentido no es especfica ni propia de un currculum democrtico. Pero no por ello es menos coherente con la

    Morine y y Keislar,

    1974 en el panorama y, entl"e otros, Carl'etem, 1 . Delval, 1 Gil Y Ton-egrosa, Moreno, 1983; Moreno y 1980; Porln, 1993; Porln, 1988; Pozo et al., 1 Sastre y Moreno, 1980 en nuestro contexto) supone una ruptura epistemolgica muy importante con las tradicionales y acerca

    la adquisicin del conocimiento, As el supuesto de la de es-

    el que ostenta el conoy el que

    ya que tanto unos como otros aprenden y ensean mutuamente. Cada uno aporta sus habilidades, experiencias,

    y conocimientos; yel aprendizaje ser el resultado de su da combinacin.

    Sin embargo, la polisemia de los trminos y las prcticas a que han dado lugar han creado una cierta ambiaLlprli'lrJ pn tnrnn ;::I (innifir:"i" de la expresin enseanza basada en la por lo que vamos a intentar acotar lo que queremos decir con ella_

    En

    de I-esolucin pro-el primero pone el en el proceso a desarrollar y el segun

    en el resultado a obtener, ya nosotros nos interesa resaltar que son importantes. Es imprescindible que la enseanza cuide

    Procesos pero tambin que el alumnado logre resultados que constaten su aprendizaje De poco sirve desarrollar procesos muy ricos e SI no estn orientados a la obtencin de

    el

    NAlURALElA DE UN CURRrClJUJM GASI(O 123 122

  • adquisicin de habilidades, y valores que el alumnado debe aprender.

    En segundo lugar, para caracterizar ms concretamente lo que queremos vamos a utilizar la propuesta de principios de la teora del

    por descubrimiento que hace Barrn (1997) en un interesanque sistematiza y ordena muchas de las ideas que se han

    dido acerca este tema:

    para descubrir conocimiento.

    - El resultado descubrimiento es una construccin intrapsquica novedosa.

    ... El

    - El est dotado

    por encuentra su punto de en la identiticacin de problemas.

    El aorendizaie por se a travs de un pro-

    encuentra su centro en la comprobacin de

    - Para que la resolutiva pueda ser caracterizada de brimiento ha de ser autorregulada y productiva.

    El aorendizaie por descubrimiento va a la produccin de errores.

    le es consustancial la mediacin- Al por

    El del proceso resolutivo.

    - El por en funcin de las puede ser ueUdUUU

    de la es inversamente proporcional al grado

    de

    consideraciones que pueden ayudarnos a concretar an cmo entendemos esta nronl JPsta la perspectiva de un currculum democrtico.

    de

    Al

    Es muy importante, y coherente con el pnnClplo ya compromiso con la creacin de un de cooperacin en el aula), el proceso investigador se lo ms colaborativamente posible, de tal torma que el contlicto sociocognitivo, posibilitado por la intor;,rrinn entre el sea su verdadero motor. que la

    y

    rjcin de distintos discursos o acciones que se contradicen te durante las interacciones que se producen en el aula. Por lo tanto, se habla de construccin intrapsquica nosotros lo mos en el sentido de que si cada alumno y experimentar esa construccin, slo se producir en un contexto rico en interacciones socia-

    obliga a en todo

    entre el

    Este

    el proceso. Hemos

    hace taita una mediacin ~UUOCUIIUral, que en contextos debera llevar a cabo el profesorado. y, aunque resulta

    do delimitar esa mediacin, s disponemos de dos criterios que ayudarnos.

    que slo se sea capaz de proporcionar

    un contexto que facilite el mayor nmero de interacciones entre el alumnado para que afloren opiniones diferentes y contradictorias. Por el equilibrio entre la necesaria autorregulacin del proceso por del alumnado y la que ese alumnado requiere para poderlo llevar a cabo. Teniendo en cuenta la establecida entre determinacin proceso y grado de descubrimiento. Es por un lado admitimos que el descubrimiento que el alumnado sea lo ms autnomo posible en la regulacin del proceso de investigacin que conduce al to, pero por otro es necesario tener en cuenta las condiciones dicho

    alumnado para abordar dicho proceso. Probablemente el se

    deba en trminos y en relacin con el proceso oe es

    de modo que ese proceso investigador, que puede ensearse y estructurarse en a las regularidades detectadas, deba someterse a una cuidadosa secuenciaein a lo del perodo de escolarizacin. As, en su inicio ser necesario versiones muy simples, mucha ayuda por profesorado en la realizacin de tareas e incluso la suplantacin del alumnado por el profesorado en la ejecucin de actividades irnnrocri para llevar a cabo el proceso pero al

    de esas Progresivamente, el proceso se va haciendo ms

    avudas disminuyendo y el alumnado todas las

    En con la autorregulacin del proceso y la generacin de confletos

    el profesorado debera de:

    LA NATURALEZA UN CURRCULUM BSIC () 125 124

  • Favorecer que los nios efecten elecciones informadas para realizar las actividades escolares y reflexionen sobre las consecuencias de sus opciones, y

    la bsqueda, es y apoyar discusiones abiertas a multitud de cuestiones. en las que no son

    sarrolle el hbito una conciencia crtica que el alumnado

    de informarse lo posible para tornar

    tipo decisin, as como el compromiso

    La

    de las consecuencias de sus decisiones. Adems, la participacin activa y consciente es uno de los pilares una sociedad democrtica, lo que exige tornar decisiones constantemente. Para poder participar en igualdad de con-

    no slo basta con ejercer el derecho a elegir poltica, en la vida social-consumo, ocio, etc.-, en el mbito cultural, yen la esfera personal), sino que esa eleccin debe ser lo ms informada posible. Por ello, la escuela debe incorporar en su quehacer cotidiano ese tipo de prcticas para que el alumnado las vaya interiorizando y las considere parte esencial sus rnmnortamientos democrticos. As, a la hora de eleair 105 ternas de

    en el yen el centro, de metas y expectativas, etc.,

    del alumnado creando necesarias (informacin previa, presentar alternativas, valorar sus consecuencias mediatas e inmediatas, etc), para que cada una de esas actividades se convierta en una ooortunidad de desarrollar los hbitos les y morales

    de construir las normas de rA,..n,,\Or de establecer sus

    La actitud de bsqueda, es decir, la mente abierta, etc, es la m,:nifestacin valores corno la

    al

    cuanto al conocimiento, supone una actitud reflexiva y crtica en la cin de los contenidos que se transmiten. No se aprende ni se que no sea analizado diferentes nuntos de vista. miento es sometido a una levancia (el profesor, el mismo modo, supone saber humano no es inocuo,

    Della escuela lo somete a esa una actitud ante el conocimientO. El

    Detrs de dato

    .. , y por tanto exigible tanto en el alumnado, cuanto se como en el profesorado cuando se plantea la enseanza. En

    CUIIRiCULUM y DEMOCRACIA

    co o saber popular, hay un inters que es preciso desvelar. El debe el hbito de analizar el conocimiento desde diferentes de in

    tereses y juzgar las consecuencias que ello tiene para el desarrollo los valores que propugnamos,

    Adems, el hecho de que el alumnado compruebe vitalmente que muchos problemas (sociales, culturales, cientficos, morales, econmicos,

    no tienen solucin, o al menos definitivas, sino que se exige una constante revisin de los mismos, que su solucin slo es parcial y exige continuas aproximaciones, es la estrategia ms apropiada para que poco a poco esos valores vayan formando parte importante la escala que cada uno debe ir construyendo a lo largo de su vida,

    La bsqueda basada en la discusin, en el debate igualmente los hbitos propios de la participacin democrtica en su sentido ms puro, El alumnado ha de interiorizar normas de comportamiento tales corno escuchar a los dems, exponer sus propios puntos de respetar la opinin de los dems, no imponer sus puntos de vista sino razonar/os,

    los turnos intervencin, es todas las normas en un dilogo. Yeso slo se puede ensear si el alumnado lo practica habitualmente, no de forma excepcional ni anecdtica. Y en ese dilogo ha de participar, con la misma actitud yel miSmo compromiso de respeto a las reglas, el profesorado. Ello supone que cada vez que sea posible los procesos de enseanza y aprendizaje deben basarse en esa bsqueda, pues de lo

    su inclusin entre las actividades del aula y del centro.

    La identificacin problemas, corno punto de del proceso investigador y de de dichos problemas, tambin requiere algunas consideraciones. As, sera recomendable tener en cuenta dos criterios a la hor,: de seleccionar los problemas obieto de

    1 Favorecer el nuestra sociedad no norados por los

    de temas o cuestiones que los ciudadanos normalmente y que, por lo general, son

    medios de comunicacin, poner de manifiesto el compromiso de un cu

    can el tratamiento, con fines educativos. de temas que la cultura hegemnica en la sociedad pretende soslayar, mediante todos los medios a su alcance (medios de comunicacin de masas, de modo pero tambin a travs del sistema por-

    LA NATURALEZA DI' UN CURRCULUM DEMOCRIICO 127 126 I

  • que representan los aspectos ms negativos del sistema de relaciones imgrupales, sociales de produccin y ambientales) y soportan los intereses de los grupos dominantes.

    As, consideramos imprescindible que la escuela sirva de institucin contrahegemnica y asuma la responsabilidad de favorecer un foro precisamente esos temas, puedan abordarse. No slo porque al alumnado le pueda resultar ms motivante estudiar las cuestiones que en otras

    pandilla, etc.) puedan considerarse incluso temas sobre todo porque gran parte del alumnado, por su origen social y

    no tiene fcil acceso a ellos, ni mucho menos a conocer nes divergentes. Esta es una buena oportunidad para concretar la idea que expusimos anteriormente al considerar a la como una esfera

    democrtica, puesto que estara favoreciendo la construccin de conciencia crtica en el ms puro sentido democrtico posible: ofrecer

    de oportunidades a todas las personas e ideas en su contexto ms

    2. La enseanza debe partir de las experiencias, problemas, intereses del alumnado y el aprendizaje inteararse en su virla cotidiana. tanto social como personal.

    Para que las cuestiones que la sociedad suele eludir resulten educativas y puedan favorecer el aprendizaje en nuestro alumnado deben incorporarse a la escuela desde su versin ms cotidiana, ms prxima y conocida para el alumnado. Para que sean asimiladas y extrapoladas a contexto, deben ser primero relevantes en el contexto ms prximo e inmediato del alumnado. As, las experiencias educativas resultan ms

    intelectual, moral y afectivamente, en la medida que estn relacionadas con las experiencias propias del alumnado, que tengan que ver con los problemas cotidianos. Pero tambin segn el grado en que lo

    en la escuela pueda aplicarlo a resolver los problemas que le nera su propia vida. Por tanto, se establece un ciclo que se inicia con la identificacin de problemas pertenecientes a la experiencia vital del alumnado, se estudian en la escuela, y los resultados de ese estudio debe repercutir de nuevo en la vida extraescolar

    Por ltimo, vamos a considerar brevemente las potencialidades cativas del proceso investigador que conduce al descubrimiento. La

    CURRCULUM Y DCMOCHACIA

    gacin de temas relevantes cultural, social, poltica y ticamente, pone al alumnado en contacto directo con la realidad, sus problemas, contradicciones, etc., y permite desarrollar hbitos intelectuales bsicos (planteamiento de preguntas; formulacin de hiptesis; decidir el tipo de informa-ci n necesaria; de fuentes de inormacin de primera mano; anlisis e de la informacin: valoracin de la informacin para extraer conclusiones y responder a las preguntas planteadas; comunicacin de la informacin; etc.) que favorecern la construccin de una mente reflexiva, abierta y crtica. Adems, la rea colectiva, proporciona al alumnado la

    y los resultados que se de modo que estamos favoreciendo una de las actitudes ms caractersticas de la construccin del conocimiento cientfico, muy en crisis en la actualidad: la de compartir lo que se sabe para poder aprender ms y los problemas que plantea la comprensin del mundo.

    Las actividades deben disearse de tal forma que su cumplimiento puede ser realizado con xito por alumnado con diversos niveles de habilidad

    Para completar esta propuesta de prrnClplOs metodolgiCOs, es necesario considerar an otro principio que pone el acento en la integracin de las diferencias en el currculum comn de forma es decir, inde

    de otras actuaciones ms especficas en funcin del de de que se trate.

    Asumimos que un valor intrnseco de la cultura democrtica es ofrecer Igualdad de oportunidades a cada alumno y alumna para que alcancen el mayor grado de desarrollo personal y social en funcin de sus capacidades y habilidades. Para ello, es necesario que la enseanza se conciba ms como un conjunto de oportunidades para facilitar el aprendizaje a distintos

    que una nica oportunidad para alcanzar un nico nivel de aprenMs an si se considera que el alumno o la alumna correspondien

    te ha fracasado si no logra ese nico nivel. Es ms y que a cada alumno se le exija segn sus po

    y le ofrezcamos distintas oportunidades para demostrarlas, que no establecer oportunidades nicas para determinadas posibilidades excluyendo las dems. Desarrollar esta idea en la prctica exige de muchas estrategias, habitualmente relacionadas slo con alumnado excepcional. Sin

    NAfURI\l "ZA DE UN CURRicULUM DEMocRATICO 8A,ICO 128 129

  • embargo, nosotros creemos que, adems de esas situaciones excepcionales, es necesario interiorizar que todos los alumnos y alumnas necesitan ser tratados desde esa perspectiva. As, cuando pensamos en cmo llevar a la prctica nuestra enseanza hemos de prever esta situacin normalmente y la meior forma de hacerlo es disear las actividades con distintos grados de

    de tal modo que las puedan resolver con xito alumnados con di(e incluso con distinto nivel en cada capacidad), apti

    etc. Es cierto que este principio es mucho ms fcil de desarrollar si somos

    capaces de organizar la enseanza segn los la cultura de cooperacin favorece el aprendizaje entre iguales lo que, unido a una adecuada constitucin de los grupos de gran parte de los oroblemas relacionados con las diferencias grupales o porque es ms y homogeneizar grupos que los individuos. Por otra la enser'anza basada en la cin tambin facilita este en la medida que pretende desarrollar procesos ms que momentos de aorendizaie. lo aue favorece la deteccin rpida de los problemas y, en la misma medida, su solucin; as, evitamos que buen nmero de alumnos vaya hasta perder todo contacto con el resto del grupo.

    Para concluir esta propuesta de cin de la matices que a su consideracin y puesta en

    Nuestra apuesta por un enseanza cooperativa y basada en la investigacin y el descubrimiento, se refiere a una caracterizacin genrica de misma. Es que una escuela democrtica debera caracterizarse por el

    de este tipo de enseanza. As, cuando se observara un deberan detectarse enseguida los rasgos que se derivan de esta fJrvf.Ju'--~ ta: aprendizaje grupal, interacciones significativas entre el cesos de investigacin y descubrimiento del conocimiento, etc. Pero ello nO

    la ausencia total de otro tipo de aaruoamientos. o de otro tioo de procesos de enseanza y

    Nos al hecho de que podernos grupos homogneos entre si, pero heterogneos internamente, lo que nos permite reducir senslblerrente el nr:lmero de mas de aprendizaje y ayuda profesorado l atencin rndividualilada de aquelios alumnos que necesiten.

    CURRICULUM

    que el aprendizaje por tiene sus mento

    cantidad de errores en el proceso, no todos los

    anteel

    aprendieste tipo de todo los rns

    mecnicos. Por lo tanto, la aula y una escuela por

    metodolgica no es con la presenciaotras ensear siempre y se su carcter

    El profesorado debe convertirse en un recurso para el aprendizaje del alumnado ms que en una autoridad que se justifica no tanto por lo que hace sino por su posicin en el sistema

    de lo ya dicho en torno a la figura del profesorado,

    mos concluir este

    orientar su nuevo papel.

    Este orineiojo est a cuestionar el que los Ile. e;:'dUU~ en la reproduccin que en la trans

    otorgado al profesorado. Desde esa lgica,

    a lOS sistemas ms un agente que asegure la preponderancia de

    la cultura y de las relaciones de poder que implica, que un

    de cambio que la cuestione y, sobre todo, que ensee a los ciudadanos a

    El muestra perspectiva, tiene que el pa-en el proceso

    de los valores una negacin de otras ~v"u, UJ J uc: VdlVr e:, dllemanvos, cuan

    la posibilidad de cuestionar la realidad tal y corno se ha COnstruido. Muy al contrario, el profesorado ha de ir asumiendo progresi

    papel activo en la construccin de una cultura democrtica ca-a todas las culturas presentes en nuestra sociedad, de di-a interrorizar valores alternativos, de colaborar en la crea

    cin una conciencia crtica que favorezca la aparicin de formas de desarrollo tambin

    Por otra parte, no compartimos la de causalidad educativa, la cual la enserlanza es la causa

    LA NATURALEZA DE UN CURRCULUM BSiCO 13 30

  • En esa relaClon de causalidad el sistema le otorga al de la enseanza y al alumnado la delrado la

    Nosotros pensamos que el aprendizaje es el efecto de muchos factores, escolares y extraescolares, y, sobre todo, una construccin personal y social que la y el profesorado deben facilitar creando las condiciones ms

    -- _.-J,,~~+;,,~r y el adecuadas

    actual. Su mayor eso

    fuerzo no debera dirigirse a artstica) del alumnado, pensando por l, actuando por etc., sino a

    a apoyarla en su desarrollo. La principal tarea educativa sera, por tanto, la creacin escenarios que ofrezcan la mayor riqueza nosible de

    posibles experiencias de aprendizaje.

    La evaluacin

    En este captulo vamos a retlexlonar buscando la acerca de la con el resto de procesos

    de un currculum y desde posiciones encontradas, por lo que seleccionar una

    resulta un tanto complicado. Disponemos de excelentes trabajos de reflexin (lvarez Mndez, 2000a y b; Angulo y Blanco, 1994; Ballester, Batalloso y otros, 2000; Gimeno, 1991; Gimeno y Prez

    1995; House, 1994; Kemmis, 1986; Kemmis, y 1988; Y Jarnes, 1996; Santos Guerra, 1993; Simons, 1999;

    1995); otros que sistematizan el conocimiento sobre la evaluacin yy Prez Gmez, 1985; Mateo, 2000; Monedero, 1998; stufflebea

    1987); y, los que se han orientado hacia la prctica del proceso

    por Batalloso Yotros,

    ya 2000; Blair, 2000;

    cin conocimiento ms relevantes cuando se

    para orientar r101YlfYI

    en ningn caso otrecer una sistematizaNos interesa destacar

    en la evaluacin y ~,~",,,nnr el proceso

    CURRCULUM DI:MOCRACIA 132

    Pensando en la evaluacin

    La evaluacin es uno de los procesos curriculares ms comprometidos y porque en l acaban de cristalizar ms ntida y

    nuestras concepciones acerca de la educacin y de la enseanza. Complejo, porque, junto con la organizacin de la enseanza, in

    de decisiones, procesos y tareas que resultan y desarrollar tanto por su cantidad como por su

    exige, al igual que los dems procesos, de una adecuada coherencia interna y externa que no siempre es fcil de

    La evaluacin es un proceso comprometido Una de las ideas que conviene resaltar cuando pensamos en la eva

    luacin es la nitidez y claridad con que se perciben a su travs las concepciones, creencias, valores e ideologa del profesorado acerca de la educacin y de la enseanza, porque en demasiadas ocasiones esas nes no suelen ser muy

    Gimeno (1991) nos ofrece un esquema en el que se puede apreciar lo que acabamos de

    CONTEXTO SOCIAL

    CONTEXTO ESCOLAR Y CURRICULAR

    Ela. boracnl

    Elaboracin la informacin Reduccin

    Implcitas Atribucin~A~I Variedad de informaciones~'"ARr- Relevancia

    Selector de

    informacin de ~ '--_-+--._~ i

    JUICIO de l evaluaci.~

    NATURAII,ZA DE UN CURRCULUM DLMOCI\ nco Il',ICO 133