2013/2014

EL INTERÉS SUPERIOR

DEL NIÑO [Tendencias Contemporáneas de la Educación]

Alba Arce Morán

Marina Fernández Melgar

Ana Fernández-Pacheco Pérez

Natalia Pinel Cuesta

[ F A C U L T A D D E E D U C A C I Ó N D E T O L E D O ]

DERECHO 3: EL INTERIOR SUPERIOR DEL NIÑO.

La Convención sobre los Derechos del Niño/a se preparó durante 10 años (1979/1989), y fue

aprobada el 20 de noviembre de 1989 en la Asamblea General de las Naciones Unidas. El

objetivo de la Convención es proteger y asegurar los derechos de la infancia (derechos

humanos básicos que deben disfrutar los niños/as) en todos los países del mundo.

Este es un derecho clave en el texto de la Convención de los Derechos del Niño, al que se

alude con frecuencia. A modo de definición, el interés superior del niño debe ser la principal

consideración en todas las acciones que afecten a los niños, niñas y adolescentes. Su

trascendencia es tal que viene a ser el eje vertebral de todos los principios de la Convención de

los Derechos del Niño y el guía conductor en las deliberaciones y decisiones para su aplicación.

Básicamente, se refiere a la satisfacción de sus derechos, y no hay interés superior para un

niño o para un adolescente que la vigencia efectiva de esos derechos.

Los adultos, a menudo, creen saber lo que le conviene a un niño o a un adolescente, sin pensar

que, aun con la mejor de las voluntades, esa decisión puede llegar a entorpecer alguno de sus

derechos. Es ahí, donde la Convención de los Derechos del Niño establece que, sobre todo en

situaciones confusas, lo que prima es que el niño pueda ejercer todos sus derechos de la

manera más completa e integral.

De la misma manera que los padres no pueden ser aleatorios respecto a las decisiones que

afecten a sus hijos, tampoco los Estados pueden definir el interés superior del niño según su

idiosincrasia cultural. Bajo ningún concepto pueden justificar prácticas o castigos, por más

tradicionales que sean, que nieguen algún derecho garantizado por la Convención de los

Derechos del Niño. Por encima de todo, cualquier interpretación que se haga tiene que ser

coherente con el espíritu de la CDN, y en particular, con la idea de que los niños y los

adolescentes tienen sus propios criterios y sentimientos.

La gymkana de los derechos del niño ha sido programa por los alumnos de Magisterio de

Primaria en la clase de Tendencias contemporáneas de la educación. Cada grupo ha diseñado

una actividad con el fin, de que al unirlo formemos la gymkana de los derechos del niño.

El objetivo de esta gymkana es concienciar e inculcar al alumnado, al profesorado y a las

familias unos valores aceptados universalmente como base y fundamento de una sociedad

libre, democrática y plural, necesarios para una convivencia pacífica entre los pueblos y

naciones.

Nuestra actividad ¡ENCUENTRA EL FINAL! Está pensada para la gymkhana, en la que el derecho

número 3: el interés superior del niño, estará reflejado en una historia que vamos a contar a

los alumnos. A través de esta historia, queremos enseñar el valor y la importancia de este

derecho. Para ello, utilizaremos una situación real que incluso ellos mismos han podido

protagonizar en sus hogares. Dicha historia aparece a continuación contada a modo de cómic

para que sea más atractiva y divertida para nuestros alumnos, ya que nuestro objetivo es

que presten atención y que comprendan el derecho del interés superior del niño.

Al final de la historia planteamos dos finales, los cuales deberán reflexionar y decidir cuál es el

acertado según lo explicado, así comprobaremos si lo han entendido o es necesario utilizar

otra metodología para su comprensión.

¡ENCUENTRA EL FINAL!

Pedrito es un niño de 8 años. Pedrito es niño tímido y vergonzoso al que le cuesta

jugar en grupo y relacionarse con sus compañeros de colegio.

A su papá le encanta el fútbol y quiere que

Pedrito sea el mejor futbolista cuando sea

mayor. Por eso, el papá de Pedrito le ha

apuntado al mejor equipo de futbol de su

ciudad.

Pero el papá de Pedrito ha olvidado

que a éste no le gusta el fútbol, su

deporte favorito es el tenis.

Pedrito llega todos los días a casa enfadado porque el entrenador no le saca a jugar

porque no es muy habilidoso en fútbol e insiste que quiere cambiarse a tenis.

Pedrito se enfada mucho cuando ve que su papá no hace caso a lo que él le dice. Su papá

sólo tiene en cuenta sus gustos, olvidándose de los de Pedrito y qué es lo mejor para él.

¡Papá, yo no quiero ir a

fútbol! ¡Yo quiero ir a tenis!

Pedrito, deberías esforzarte

porque todo cuesta trabajo y

quizá eso no te guste, pero

confió en que el día de

mañana serás el mejor

jugador.

Después de esto, el papa de Pedrito reflexiona y se da cuenta que tiene que escuchar

a su hijo y no obligarle hacer lo que a él le gusta. Decide apuntarle a tenis, ya que es

lo que a Pedrito le haría feliz. Gracias a esto su papá se dio cuenta de que ahora su

hijo sonreía y se esforzaba por ser cada día el mejor jugador de tenis. Los dos

disfrutaban mucho de este deporte tanto Pedrito practicándolo, como su papá

acompañándole a cada partido.

¡Bien, Pedrito!

¡Gracias Papá! Ahora voy

a disfrutar haciendo lo

que más me gusta

Pedrito sigue intentándolo a pesar de que juega poco en los partidos de fútbol. El

padre está muy contento porque ve a ver a su hijo jugando al fútbol. Pedrito

aprendre a jugar al futbol y el entrenador le saca más a jugar, pero éste jamás va con

ilusión.

Pedrito, deberías esforzarte

porque todo cuesta trabajo y

quizá eso no te guste, pero

confió en que el día de

mañana serás el mejor

jugador.

Pedrito, deberías esforzarte

porque todo cuesta trabajo y

quizá eso no te guste, pero

confió en que el día de

mañana serás el mejor

jugador.

Después de esta actividad los niños se pintaran la mano con tempera para manos y tendrán

que plantarlas en un papel de pliego con la frase “Nuestra opinión cuenta ”