DIOS TIENE NARICES!
No me toques (no me hinches) las narices. Me tienes hasta las
narices, son expresiones que suenan por ah con cierta frecuencia y
a las que la gente recurre para expresar el enfado o la irritacin
ante quien provoca dichos sentimientos.Muchas veces me he
preguntado que tendran que ver las narices con el cabreo y
viceversa. Y, para mi sorpresa, ya puedo saber de qu va la
cuestin.
Cuando nos cabreamos, con quien sea y por lo que sea, notamos
que la respiracin se vuelve ms acelerada. Tenemos la sensacin de
que nuestra nariz es demasiado pequea para expulsar el aire que
vamos desalojando con virulencia. Es como si necesitramos una nariz
ms grande o ms larga para lograr expulsar, al ms puro estilo
taurino, una rabia incontrolable. En las pelculas de ciencia ficcin
y an en los dibujos animados, son los dragones malos, los seres
monstruosos, los que, cuando se enojan, arrojan por la nariz fuego
y humo. En fin, que la nariz, por pequea que sea, nos viene de
maravilla para vehicular el cabreo Quin lo dira!Por otra parte,
cuando utilizamos las expresiones arriba sealadas, de alguna manera
estamos lanzando un aviso a quien nos saca de quicio: que la
paciencia tiene un lmite; y que esa frontera, una vez sobrepasado,
se evidencia en el abrirse y cerrarse precipitadamente las aletas
de la nariz. Ojo a las narices, por ridculo que sea!Es en este
punto donde quisiera detenerme slo un peln, eso s, para evitar a
quienes leen la columna que la impaciencia les toque las naricesNo
tengo ni idea de hebreo qu ms quisiera yo!, pero he ledo que en
esta lengua tan rara 'ap es nariz y 'appaym clera, cuyo sntoma es
un calor o un ardor especial. Nariz se convierte en sinnimo o
metfora de ira encendida, de clera ardiente. Alargar la nariz
equivaldra, por tanto, a dar largas a una clera irrefrenable. De
hecho, en la literatura bblica, sobre todo en los salmos, se alude
al enfado de Dios que le sale por las narices. En el salmo 18
encontramos varias alusiones a la ira divina en el sentido en que
se viene comentando: De su nariz se alzaba una humareda, de su boca
un fuego voraz y lanzaba carbones ardiendo () El fondo del mar
apareci y se vieron los cimientos del orbe, cuando t, Seor,
lanzaste un bramido con tu nariz resoplando de cleraTenemos
entonces que la Biblia, al hablar de la paciencia de Dios, lo hace
diciendo que Dios tiene unas narices muy largas y que precisamente
por eso, como el desfogar la ira, tiene que hacer un largo
recorrido hasta la mismsima punta de la nariz, para cuando eso
sucede, a Dios se le ha quedado en el camino todo ese mal humor que
tanto y de tantas maneras nos ha hecho temblar y preferir, como el
pueblo hebreo, que no nos hable Dios, que nos hable Moiss para que
no muramos (cf. Ex 20,19).
As, pues, las narices largas de Dios le dan a l la oportunidad
de arrepentirse, de volver a su estado natural que es la compasin,
la ternura, la misericordia, la paciencia, o sea, la nariz corta; y
a nosotros, de librarnos, por ensima vez, de una buena reprimenda,
bufido incluido.
Lo de las narices largas, aparte de parecer poco ortodoxo, no es
que sea muy esttico, mucho menos viniendo de Dios que es la suma
Belleza y Perfeccin, pero a nosotros, que somos tan trastos, qu
quieres que te diga?, nos viene de maravilla.
Mara Jess Flores
