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Discurso JuntaGeneralAccionistas2015_Ana Botín 1
ANA BOTÍN
JUNTA GENERAL ACCIONISTAS SANTANDER 27 DE MARZO DE 2015
Antes de comenzar la junta quiero dedicar mis primeras palabras a las familias y allegados de
las víctimas de la tragedia aérea del martes. En el Banco hemos vivido estos días con gran
tristeza.
En mi nombre, en el del Consejo de Administración y en el de todo el equipo de Grupo
Santander y, estoy segura, en el de los accionistas aquí presentes, quiero transmitir nuestro
más sincero pésame y nuestra cercanía y afecto en estos momentos tan difíciles. Quiero
informar a esta Junta que hemos enviado mensajes de condolencia a las autoridades de los
países afectados.
Señor Presidente del Gobierno de Cantabria
Señor Alcalde de Santander y autoridades que nos acompañan
Señoras y señores accionistas
Buenos días y muchas gracias por su asistencia.
Quiero empezar agradeciéndoles su apoyo continuo a lo largo de estos años. Su confianza ha
sido siempre clave para el éxito de Banco Santander.
Desde el nacimiento del Banco, la atención y relación con los accionistas ha sido una de
nuestras prioridades, y lo va a seguir siendo.
El punto de partida de Banco Santander hoy es excelente.
Como dije en la Junta General Extraordinaria celebrada el pasado septiembre, esto se debe
especialmente a la labor, visión estratégica y liderazgo de su anterior Presidente, Emilio
Botín.
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Bajo su Presidencia, el Santander pasó de ser el séptimo banco de España a convertirse en la
primera entidad de la eurozona, primera franquicia de Latinoamérica y uno de los diez
primeros bancos del mundo por capitalización bursátil.
Desde mi incorporación al Banco en 1988 siempre trabajé muy cerca de él, tanto en el
Consejo como en las funciones ejecutivas que he ido desempeñando, desde la expansión en
Latinoamérica hasta la dirección de Banesto y Santander Reino Unido.
Hoy, gracias a su visión, el Santander no sólo es más grande, sino más diversificado y más
sólido, como lo prueba su resistencia a lo largo de la crisis financiera.
El Santander es una de las tres únicas grandes entidades financieras que ha atravesado la
crisis sin pérdidas en ningún trimestre.
Su apoyo a la educación y a la cultura también fue sobresaliente. Banco Santander es una
referencia internacional por su compromiso con la Universidad y con la sociedad, la española
y la de todos los países en los que operamos.
Desde mi nombramiento al frente del Banco, hemos tomado importantes decisiones en
cuatro ámbitos:
El gobierno corporativo y la composición del Consejo
El equipo gestor
El capital y la política de dividendos, y
La revisión estratégica de nuestros negocios y prioridades.
Me gustaría comentar todos estos puntos hoy y también destacar los elementos principales
de nuestros resultados este año.
Comenzaré hablándoles del gobierno corporativo y del equipo del banco.
Los cambios realizados en el Consejo y en el equipo de gestión del Banco han tenido como
objetivo contar con las personas mejor preparadas y más cualificadas y dotar al Grupo de las
mejores prácticas de gobierno corporativo a nivel internacional.
Banco Santander cumple con todas las recomendaciones y más altos estándares de buen
gobierno que le son aplicables en su condición de sociedad cotizada y entidad de crédito.
Se han incorporado al Consejo, como consejeros independientes, Bruce Carnegie-Brown,
que es también Vicepresidente y Consejero coordinador de los Consejeros externos, así
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como Sol Daurella y Carlos Fernández reforzando la experiencia internacional y financiera del
Consejo, y aportando interesantes experiencias empresariales en consumo y relación con
clientes.
Se somete hoy a la ratificación de esta junta el nombramiento de estos consejeros.
El nombramiento como Vicepresidente Ejecutivo de Rodrigo Echenique permite al Banco,
además de seguir contando con su experiencia, dar un mayor énfasis a la supervisión de la
labor de cumplimiento, de tanta importancia en los momentos actuales.
Hemos reforzado y aumentado la independencia de todas las Comisiones del Consejo, y de
manera especial la Comisión de supervisión de riesgos, regulación y cumplimiento.
También hemos separado la Comisión de nombramientos y retribuciones en dos comisiones
independientes.
Nuestro Consejo tiene una composición diversa y equilibrada: de los 15 Consejeros, 5 son
ejecutivos y 10 externos con amplia experiencia financiera, regulatoria y empresarial y
conocimiento de los mercados donde el Grupo desarrolla su actividad.
De estos últimos, 8 son consejeros independientes, es decir, el 53% del Consejo. Además, un
tercio del mismo son mujeres.
Agradezco a Fernando de Asúa y a Abel Matutes, que acaban de dejar el Consejo, su gran
contribución realizada al Banco, así como a Javier Marín su dedicación durante más de 20
años.
En cuanto a los cambios en los equipos directivos del Banco, el nuevo Consejero Delegado,
José Antonio Alvarez, tiene una larga trayectoria en nuestro Grupo donde ha sido, durante
más de diez años, Director Financiero. Es la persona más adecuada para esta nueva etapa.
El resto de los nombramientos realizados responden a una lógica renovación. Tienen como
objetivo reforzar las áreas a las que el Grupo quiere prestar una especial atención,
aprovechando el talento de los directivos del Banco Santander.
También hemos reforzado el equipo y los Consejos en Reino Unido, Estados Unidos, Brasil y
España, entre otros, con nuevos Presidentes de los Consejos en Santander UK y Brasil, y en
Estados Unidos tanto Presidente como Consejero Delegado.
Les hablaré ahora de los resultados obtenidos en 2014.
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Durante el pasado año tuvo lugar una leve recuperación de la economía internacional,
destacando el dinamismo de Estados Unidos y Reino Unido.
En Latinoamérica siguió moderándose el crecimiento, afectado por la caída en el precio de
las materias primas y unas condiciones financieras menos expansivas.
Las reformas en curso en países como México anticipan una aceleración del crecimiento a
medio plazo.
Brasil, otro de nuestros mercados principales, vive un año de transición, pero el nuevo
Gobierno está adoptando las necesarias medidas de ajuste para que la economía recupere,
cuanto antes, un crecimiento más cerca de su potencial. En todo caso, nuestro Banco en
Brasil está haciendo importantes avances y estamos convencidos de su progreso en un
mercado muy competitivo.
En el caso de Europa, la recuperación aún es moderada. Pero lo más importante es que hoy
Europa cuenta con instituciones más fuertes y sólidas que le hacen más resistente ante las
dificultades que pudieran surgir en el futuro.
La Unión Bancaria es prácticamente una realidad. El Banco Central Europeo ha asumido las
funciones de supervisor único y ya se ha implantado un marco europeo de resolución de
crisis bancarias.
Con los grandes avances en la Unión Bancaria, el sistema financiero europeo es hoy mejor y
más robusto y está mejor preparado para apoyar el crecimiento de las economías europeas.
A largo del pasado año el BCE realizó un ejercicio de análisis de la calidad de los balances
bancarios (AQR) y del impacto de escenarios severos (stress test) en el capital de los bancos
europeos.
En ambos ejercicios, Santander obtuvo unos resultados excelentes, siendo el mejor de los
grandes bancos analizados en cuanto a los ajustes necesarios en su Balance.
Esto evidencia la solidez del Banco analizada desde una perspectiva objetiva y exigente y en
comparación con el resto de Bancos europeos.
En el año 2014, Santander obtuvo un resultado neto atribuible de 5.816 millones de euros,
un 39,3% superior al del año anterior.
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El Consejero Delegado les dará una información más detallada de los principales datos de
gestión del Grupo.
Pero yo quiero destacar algunos aspectos que me parecen de especial interés:
La calidad de los beneficios, que muestra un aumento del resultado bruto en todas
las unidades del Grupo y con mejora neta de la recurrencia.
La reducción de la morosidad hasta el 5,2% y del coste del crédito que estamos
confiados seguirá mejorando y,
La contención de los costes, que aumentaron en el Grupo por debajo de la inflación y
sitúan nuestra ratio de eficiencia (cost to income) en el 47%, una de las mejores del
sector en Europa.
Durante el año 2014, el retorno total al accionista ha sido del 17,2%, del que un 10%
correspondió al dividendo y el resto a la apreciación de la acción. En el caso de nuestros
competidores, este retorno fue de media el 2%.
Desde la fecha de la ampliación de capital a 6,18€/acción el 13 de enero pasado, los
accionistas han tenido una apreciación del 11,9%1, lo que sumado al dividendo de 0,146
euros supone una rentabilidad acumulada por los accionistas del 14,3%1 en menos de 3
meses.
Me gustaría ahora hablarles del futuro.
Este año, los mercados donde estamos presentes tienen, en general, previsiones de
crecimiento favorables.
Esto es muy claro en el caso de España, pero también en el Reino Unido, Estados Unidos,
Polonia, Alemania, México o Chile. En Brasil, como he comentado anteriormente, será un
año de ajuste en el que aspiramos a hacerlo mejor que los competidores.
La política del Banco Central Europeo de proveer de mayor liquidez (lo que se denomina
Quantitative Eeasing) servirá de soporte al crecimiento en la eurozona.
1 Dato de cierre 26 de marzo de 2015
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La caída del precio del petróleo y la depreciación del euro contribuirán también a impulsar el
avance.
Por supuesto, existen riesgos geopolíticos crecientes a los que estamos muy atentos. Pero a
día de hoy, hay motivos para la confianza.
Mirando a futuro, el sector financiero afronta hoy retos de gran calado:
En primer lugar, los mercados maduros atraviesan un período de tipos de interés muy bajos,
con las implicaciones negativas que esto tiene desde el punto de vista de la rentabilidad del
sector.
En segundo lugar, el sistema financiero global ha evolucionado de manera muy significativa
durante los últimos años hacia estándares más exigentes en solvencia, liquidez y
comercialización de productos.
Según el último informe del Comité de Basilea, las entidades sistémicas han aumentado su
capital en los últimos 3 años unos 540.000 millones de euros, cifra similar al conjunto de los
beneficios obtenidos en ese período.
Y continúan las reformas:
• Se está revisando la forma de cálculo de los activos ponderados por riesgo para
asegurar la consistencia entre entidades y países, pero esta revisión también exigirá
mayores niveles absolutos de capital.
• La Unión Europea está trabajando en una propuesta de reforma estructural que podría
suponer prohibición o separación de determinadas áreas de negocio.
Operamos en un entorno en el que las exigencias regulatorias siguen aumentando, con
consecuencias en los costes principalmente de tecnología y recursos humanos.
Lo importante ahora es cerrar cuanto antes todas las cuestiones que aún están pendientes
de definir y centrarnos en su implementación.
Y será fundamental hacer una valoración continua y global del impacto del nuevo marco
regulatorio para asegurar que se alcanza un buen equilibrio entre estabilidad financiera y
crecimiento económico.
En definitiva, el entorno regulatorio, aun cambiante y cada vez más exigente, requiere de
toda nuestra atención y la dedicación de importantes recursos. Sin embargo, el modelo del
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banco, y en particular la tradición de control de riesgos nos sitúan en una muy buena
posición de cara a estos desafíos, que convertiremos en oportunidad.
En tercer lugar afrontamos el reto de la revolución tecnológica y los nuevos hábitos y
comportamientos de los consumidores.
El mundo está cambiando a velocidad exponencial.
Nuestros competidores no son sólo otras entidades financieras o los grandes fondos de la
llamada banca en la sombra, con menos regulación y supervisión, sino también las grandes
empresas tecnológicas.
El Santander está bien preparado para afrontar estos desafíos.
Me gustaría compartir con ustedes cómo lo vamos a hacer, y nuestras prioridades.
Partimos de un modelo de negocio que se distingue por:
La diversificación geográfica
El foco en la banca comercial
Nuestro modelo de filiales autónomas, con una presencia y cuota de mercado en los
países en que estamos establecidos que nos permiten ser un competidor relevante
Una cultura común y una marca global, con acceso a talento internacional de
primera línea
La fortaleza de balance, con prudencia en riesgos y marcos de control globales;
Y, por último, nuestra inversión en innovación, transformación digital y capacidad
para compartir mejores prácticas entre países.
El modelo del Banco Santander es diferencial. No somos complejos de gestionar, ni difíciles
de entender, ni tenemos una dispersión de negocios en multitud de mercados.
Es decir, somos un banco:
Fácil de entender, y
Con foco en banca comercial.
Operamos en diez países principales a través de bancos autónomos, con consejos locales
potentes y contando además con una estructura corporativa que aporta valor y con
funciones de control claras y bien definidas.
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Este modelo nos ofrece una oportunidad única. Y la vamos a aprovechar ya que contamos
con un equipo que comparte una misma misión, que se compromete con la visión del Banco
y que tiene una forma común de hacer las cosas, para nuestros equipos, clientes, accionistas
y la sociedad.
La misión del Santander es contribuir al progreso de las personas y de las empresas.
Esta es la misión que tenían los fundadores del Banco, aquí en Santander, en 1857: financiar
el comercio entre España y Latinoamérica y, de esta forma, crear puestos de trabajo y
prosperidad en ambos continentes.
En la actualidad ha cambiado mucho la dimensión y alcance internacional del Banco, pero
nuestra actitud y nuestro propósito continúan siendo los mismos.
Nuestra visión es ser el mejor banco comercial ganándonos la confianza y fidelidad de
nuestros equipos, clientes, accionistas y de la sociedad.
Si nuestro equipo se siente motivado, comprometido y recompensado, hará todo lo que
esté en su mano para ayudar a los clientes.
Si nuestros clientes reciben un servicio excelente y sienten que respondemos a sus
necesidades, su fidelidad al Banco será mayor. Usarán más nuestras tarjetas de crédito,
nuestros seguros, contratarán una hipoteca con nosotros, nos pedirán créditos. Y sobre
todo, se lo contarán a sus amigos.
Cuando esto sucede, nuestros beneficios y rentabilidad crecen y aumenta el retorno para
nuestros accionistas, asegurando su fidelidad y promoviendo que inviertan más en el
Banco.
Esto nos permitirá apoyar aún más a la sociedad, generando confianza y fidelidad hacia
nosotros, lo que a su vez reforzará el orgullo de pertenencia de nuestro equipo.
Y así, este círculo virtuoso vuelve a empezar.
¿Y cómo vamos a construir el mejor banco para todos? ¿Qué prioridades nos hemos
marcado?
EQUIPOS
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Lo primero son nuestros equipos. Las personas que trabajan en el Banco son la clave para
garantizar este círculo virtuoso y el éxito continuado de Banco Santander. Uno de nuestros
grandes objetivos para 2017 es estar entre los tres mejores bancos para trabajar en la
mayoría de nuestros países principales.
Durante estos meses he hablado mucho con la plantilla. En todas estas reuniones los
equipos me han trasladado que una de sus principales preocupaciones es la conciliación del
trabajo y la vida personal. Están completamente comprometidos con el banco, pero
necesitan un mayor equilibrio, y esto es algo que ofrecen muchos de nuestros competidores
hoy en día.
Para responder a esta necesidad, en Santander España hemos anunciado una nueva política
de flexibilidad para promover un entorno de trabajo mejor para nuestros equipos.
Esta política, dirigida tanto a hombres como mujeres, incluye temas tan importantes como:
Mejorar la organización del trabajo, siendo más eficientes en horarios y duración de
las reuniones.
Utilizar nuestra tecnología para trabajar de manera más flexible. Esto ayudará a
nuestra ratio de eficiencia, porque podremos trabajar más en remoto y viajar menos.
Llevar a cabo programas de mentoring para directivas: vamos a poner en marcha un
programa de con los miembros del Comité de Dirección, Directores Territoriales,
Directores Comerciales y Directores de Zona
El nivel de avance en estos aspectos en el Grupo es desigual, y por tanto vamos a compartir
mejores prácticas entre países.
Nuestro objetivo es avanzar en el objetivo de fomentar la diversidad y la flexibilidad, porque
estamos convencidos de que es el cambio para lograr mayor compromiso de nuestros
equipos con el banco.
CLIENTES
Porque sólo si tenemos unos equipos comprometidos y motivados podremos aspirar a
ganarnos la confianza y fidelidad de nuestros clientes.
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Hoy estamos presentes en mercados con más de 1.000 millones de personas, potenciales
clientes.
Tenemos más de 100 millones de clientes. 53 millones son activos, pero solo 13 millones son
vinculados, es decir, clientes que consideran a Santander su banco principal.
Nuestro gran objetivo es que en 2017 el número de clientes vinculados, tanto particulares
como empresas, aumente alrededor de un 40%, hasta 18 millones.
Esta estrategia ya ha tenido éxito en el Reino Unido, donde hemos pasado, en los últimos 3
años, de 3 a 5 millones de clientes vinculados [primary]. Como resultado, hemos aumentado
de forma muy considerable nuestros ingresos y beneficios. La mejora en la calidad de
servicio fue clave para conseguirlo. Ahora, vamos a hacerlo en otros mercados.
Al mismo tiempo, queremos seguir consolidando nuestro modelo de excelencia operativa,
mejorando la satisfacción de nuestros clientes. La oferta de servicios digitales será una parte
fundamental en este proceso.
Nuestro objetivo para 2017 es alcanzar 25 millones de clientes digitales frente a los cerca de
14 millones actuales.
Para ello estamos invirtiendo muy significativamente en desarrollar un modelo de
distribución multicanal donde el cliente es el centro de toda nuestra estrategia. Nuestro
objetivo es facilitar la relación del cliente con el Banco: donde quiera, como quiera y cuando
quiera.
Contamos ya con ejemplos de éxito como en Reino Unido, donde hemos pasado de 29.000
clientes que operaban a través del móvil en 2011 a más de 1 millón en 2014 y donde
aproximadamente 1/3 de las ventas se realizan en canales digitales. O Polonia, donde
nuestra banca móvil está valorada como una de las mejores del mercado. En México, hemos
desarrollado un sistema de reconocimiento de voz para identificar al cliente.
Banco Santander tiene capacidad de crecer con nuestra base de clientes en nuestros diez
mercados principales. Por tanto, no tenemos necesidad de comprar. Esto no excluye que
estudiaremos alguna inversión puntual, siempre que añadamos valor a nuestros
accionistas.
ACCIONISTAS
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Si conseguimos ser el mejor Banco para nuestros equipos y clientes, seremos capaces de dar
un resultado creciente y sostenible a nuestros accionistas.
La fortaleza de capital es clave para aprovechar las oportunidades de crecimiento orgánico
que ofrecen nuestros mercados y, así, servir mejor a nuestros clientes.
Por esta razón, y tras un detenido análisis de las distintas alternativas, el Consejo decidió, a
principios de este año, ampliar capital, por un importe de 7.500 millones de euros.
Acudimos al mercado a través de una colocación acelerada. El Consejo se decidió por esta
alternativa por ser la menos dilutiva para los accionistas. En circunstancias de incertidumbre
y alta volatilidad de los mercados, cualquier otra alternativa habría supuesto mayor
descuento y mayor dilución.
La ampliación fue muy favorablemente recibida, con una demanda de títulos superior en una
50% a la oferta.
Los accionistas minoristas han tenido, con posterioridad, una amplia oportunidad para
adquirir títulos en el mercado, al precio al que se realizó la ampliación e incluso a un precio
inferior en los días siguientes a la misma.
Tras la ampliación de capital, nuestra ratio de capital fully loaded se sitúa en el 9,7%.
De forma paralela, el Consejo consideró conveniente reformular la política de dividendos. El
objetivo, en línea con lo que ha sido la tradición del Banco, es dar gran importancia al pago
del dividendo en efectivo, de modo no dilutivo y que sea sostenible y creciente de acuerdo
con los resultados del Grupo.
El “Dividendo Elección” cumplió su función y permitió, durante los años de la crisis, el doble
objetivo de facilitar la capitalización del Banco y permitir a los accionistas recibir su
retribución en acciones o en efectivo. Tras la ampliación de capital el Consejo ha
considerado conveniente volver a la fórmula tradicional de pago en efectivo.
En consecuencia, con cargo a 2015 tenemos previsto abonar un dividendo de 0,20 euros por
acción. La propuesta que hoy les presentamos es que solamente un pago, el de noviembre,
se realice a través del “Dividendo Elección” por importe de 0,05 euros mientras que el resto
serán en efectivo.
Durante 2015, los accionistas percibirán un total de 0,40 euros por acción, de los que 0,30
son con cargo al ejercicio de 2014 y 0,10 al presente año, lo que supone una rentabilidad por
acción de alrededor del 6%.
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En adelante, nuestro objetivo es que el dividendo evolucione de acuerdo con los beneficios
del Grupo, distribuyendo entre el 30% y el 40% del beneficio recurrente.
Esta nueva política de dividendos es buena para el Banco y buena para todos los
accionistas.
Para el Consejo, es tan importante ofrecer un retorno total para nuestros accionistas mejor
que el de nuestros competidores (apreciación de la acción más el dividendo), como
conseguir un beneficio por acción y unos dividendos crecientes.
Nos hemos fijado objetivos ambiciosos para el año 2017:
1. Alcanzar una rentabilidad sobre recursos propios - ROTE entre el 12 y el 14%.
2. Obtener un crecimiento del beneficio por acción superior al de nuestros
competidores.
LA SOCIEDAD
Siendo el mejor banco para nuestros accionistas, podremos reinvertir aún más en la
sociedad.
Y nuestra manera principal de contribuir a la sociedad es invertir en educación.
Gracias a nuestro compromiso durante tantos años, Banco Santander es hoy la empresa del
mundo número uno en apoyo a la educación. Así lo reconoce el informe que elabora la
Fundación Varkey en colaboración con la Unesco. En 2014 dedicamos 146 millones a apoyar
la investigación y la educación y ayudamos a 28.443 estudiantes con becas.
Y vamos a hacer más. Hemos anunciado que en los próximos cuatro años vamos a destinar
otros 700 millones de euros a universidades.
Quiero recordarles que nuestra misión es contribuir al progreso de las personas y de las
empresas:
De la persona con una idea brillante, tratando de lanzar su primer negocio
De la pareja que quiere comprar su primera casa
Del estudiante preocupado por cómo pagarse la universidad
Del jubilado que busca invertir los ahorros de toda una vida.
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Todos ellos necesitan confianza y un entorno con expectativas de crecimiento, para poder
realizar sus aspiraciones.
Me quiero referir a continuación a España y en concreto al problema más grande que
tenemos que solucionar como país: el desempleo. Mientras haya tantos parados, ellos
deben ser nuestra prioridad.
Necesitamos crear más empleos. Y para ello tiene que haber crecimiento económico
acompañado de progreso social, y siempre mirando el medio y largo plazo.
Como responsable del banco lo que me toca y lo que les puedo decir es que vamos a seguir
trabajando duramente para contribuir al progreso de las familias y empresas de España y los
demás países donde operamos.
En un contexto de incipiente recuperación en Europa, afrontamos un año con numerosas
citas electorales. Corresponde a los partidos políticos presentar propuestas para seguir
construyendo una Europa más próspera, a los ciudadanos valorar las distintas alternativas, y
al sector privado y empresas comprometernos más con la sociedad e invertir más aún con
visión de largo plazo.
Y para tener éxito, debemos trabajar juntos para apoyar a los emprendedores, a las
empresas, y darles las herramientas, la confianza y el apoyo que necesitan para ser más
competitivas, y para crecer y crear más puestos de trabajo.
Desde el Santander lo estamos haciendo: sólo en el 2014 dimos 16.915 becas en España y
Reino Unido, de las que 8.142 fueron para que estudiantes pudiesen trabajar en Pymes y
empresas.
Y vamos a seguir colaborando con universidades y Gobiernos, invirtiendo en formación y
apoyando a las empresas.
En el caso de España, en los dos primeros meses de 2015 los nuevos créditos y préstamos a
empresas y pymes han crecido un 3,9% respecto a 2014, la producción hipotecaria un 26% y
la de crédito consumo un 35%.
Como ya hicimos en 2014, confiamos en crecer el crédito este año en España más que el
mercado.
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En resumen: Hemos mejorado el Gobierno corporativo, tenemos los equipos que
necesitamos, el capital, una estrategia clara, y nos hemos marcado objetivos ambiciosos.
Para conseguirlos, tenemos que cambiar la forma en la que hacemos las cosas. Todo lo que
hacemos debe ser Sencillo, Personal y Justo.
a) Un banco sencillo ofrece a sus clientes productos fáciles de entender y un servicio de calidad, con independencia de cómo, cuándo y dónde quieran trabajar con nosotros. Es un banco que mejora sus procesos cada día, haciéndolos más sencillos, claros y accesibles para sus clientes y equipos.
b) Un banco personal valora y trata a sus clientes como si fueran únicos, ofreciéndoles un servicio profesional y a medida en el que siempre pueden confiar. Al mismo tiempo, apoya a sus equipos para que desarrollen todo su potencial y alcancen sus ambiciones.
c) Un banco justo trata a las personas como les gusta ser tratadas y busca ofrecer a sus accionistas una rentabilidad atractiva y sostenible, a la vez que contribuye al desarrollo de la sociedad.
Sencillo, Personal y Justo. Estas tres palabras reflejan lo que nuestros equipos y clientes nos
han dicho que esperan de su Banco. Haciendo las cosas de una forma Sencilla, Personal y
Justa conseguiremos ser el mejor banco comercial, ganándonos la confianza y fidelidad de
nuestros equipos, clientes, accionistas y de la sociedad.
Permítanme que termine recordando cómo nació el Banco Santander.
Hace 158 años en esta gran ciudad, un grupo de empresarios decidió fundar un banco.
Desde entonces, y gracias al trabajo de sus equipos con nuestros clientes y al apoyo de
ustedes, nuestros accionistas, hemos convertido a Banco Santander en una de las mayores
historias de éxito de España.
Lo hemos conseguido superando incertidumbres, gestionado prudentemente el riesgo y
afrontado con energía los cambios.
Hoy, de nuevo, vamos a liderar el cambio. Confiamos en poder hacerlo porque partimos de
una base sólida y, sobre todo, porque tenemos una estrategia que hemos diseñado para el
futuro.
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Madeleine Albright, la primera mujer en ser Secretario de Estado de los Estados Unidos dijo:
Yo no creo que las cosas sucedan por accidente, uno más bien se las gana.
Y nosotros nos lo vamos a ganar.
Sabemos lo que queremos ser: el mejor banco comercial, ganándonos la confianza y
fidelidad de nuestros equipos, clientes, accionistas y de la sociedad.
Y sabemos cómo queremos lograrlo: haciendo las cosas de una forma Sencilla, Personal y
Justa.
Haciéndolo así, seguiremos contribuyendo al progreso de las personas y de las empresas y
teniendo en cuenta siempre los intereses de nuestros accionistas.
Con un Consejo y un equipo de profesionales comprometidos y, sobre todo, con el apoyo y
la confianza de todos ustedes, señoras y señores accionistas, estoy convencida de que lo
mejor está por llegar
Muchas gracias.
