ejercicios dramaturgia

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Una seora de ms de 70 aos entra a un bar

Una seora de ms de 70 aos entra a un bar. Busca una mesa vaca al l.ado del enorme ventanal. Se la ve en un estado neutro, ni alegre ni triste. Una mirada perdida que busca estar en otro planeta. Siente que la vida se le va rpidamente, y quiere llevarse las ultimas fotos, sus movimientos corporales y sus sentidos denotan una gran curiosidad, devora a la incesante circulacin de gente, se apasiona por adivinar los pensamientos de los transentes. Cada respiracin es un aprendizaje, una incorporacin de sabidura transitoria. En alguna servilletas anota observaciones, en otras dibuja rostros. El mozo, que dice estar solo atendiendo todas las mesas, nunca llega a tomarle el pedido. Esa indiferencia hacia ella, casual, azarosa, le genera una ira desconocida. Se pone de pie, vuelca el pocillo de caf usado por un cliente anterior en el uniforme del nico servidor y empujandolo, casi rozndole el hombro le dice, SOS UN FORRO, NO SABES VIVIR,y dando un portazo se va a otro bar.

Un bar, una sola mesa vaca al lado del ventanal. Yolanda, una anciana, entra y se sienta, lo primero que hace es mirar por el ventanal. Jos, el mozo la observa de costado, apoya la bandeja en la barra. Jos (dirigindose al lavaplatos): uhhh, loco! Lleg la vieja! Tarda siglos en decidirse y termina pidiendo un tecito. Habla sola y raro, loco! Te da miedo...mejor me hago el boludo.El lavaplatos (secndose las manos) : Noooo, par...bu igual no me das bola nunca, no sabs ni cmo me llamo, me decs loco y me jode...Yolanda : Mozoooo!! Seorrrr!! No tengo aos para esperarlo...Jos : qu hacs loco? Te secs las manos pa blar? Ni la mirs loco, ni la mirs! Parece e t , loco et parece!Yolanda : mozooooo! Seor por favorUnas chicas de una mesa dejan de hablar y miran a Jos, y l acude al llamado Jos : hola chicas, una sonrisa para cada una y qu otra cosita les traigo?Yolanda : A ver si el rden de los factores altera el producto? Seor!! MozoooooEl lavaplatos ( cabeceando en direccin a Yolanda) : mozo lo llaman de la mesa 9, la seora.Jos ( con bronca lo mira ) estoy atendiendo a las seoritas, ya va, o acaso ves al gremio entero trabajando aca? Soy solo para 10 mesas... ( volvindose a las chicas, sonriente) Yolanda ( gritando) Lo de siempre, treme lo de siempre!!!Jos ( acercndose a la barra) yo le saco el pedido de las chicas, hacele un t a la vieja! Haceme el favor.El lavaplatos ( mientras prepara el t ) Che Jose afloj con la seora, la miro y me acuerdo de mi nona, afloja boludo! Aca esta el tYolanda : mozooooo, seorrrrr, lo de siempreeeeee, el teeeeeee!El lavaplatos ( asomando la cabeza entre las copas ) ah va seora, ya sale su pedido.Yolanda : mozoooooo, mozooooo, mocitooooooo!!!Jos agarra y coloca en la bandeja 2 cafs y 1 t y encara hacia la mesa de las chicas haciendo paso de baile de Michael Jackson bandeja en mano, apoya los cafs en la mesa de las chicasUna de las chicas riendo : ni una gotita se te cae....Yolanda ( dulce y tierna ) Mozoooo?Jose( acercndose a la mesa de Yolanda) su pedido, lo de siempreYolanda :( agarrando la taza y ponindose de pie) a mi no me haces el baile del negrito? El te este de mierda, tmatelo vos! Y se lo tira en la camisa y agrega SOS un forro, no sabes vivir, me voy al bar de enfrente

Qu sucede en la escena que vemos?Qu sucede en la escena que es invisible Y funciona como subtexto (subtexto es aquello que no se dice pero est latente y lo podemos inferir a travs de acciones, silencios y actitudes aunque no se verbalicen?Qu le sucede a ella por dentro) (Que le sucede a l por dentro)?

1. Una seora entra a un bar del cual es habitu. Molesta su presencia al mozo quien se toma todo el tiempo posible para atenderla. Distraida su atencion por su afan de seduccion, se enoja cuando su compaero le indica la omision intencionada. 2. Emociones negativas expresadas cuando la realidad no es como uno quiere. La expresin de la condicin discriminatoria del ser humano sea cual su posicin social y laboral. La indiferencia hacia el respeto y las costumbres 3. en los dos personajes en conflicto hay enojo a priori. Son discriminatorios. Impacientes, hay similitudes entre ellos, podran ser madre e hijo.

Boomerang

Un bar, una sola mesa vaca al lado del ventanal. Yolanda, una anciana, entra y se sienta, lo primero que hace es mirar por el ventanal. Jos, el mozo la observa de costado, apoya la bandeja en la barra. El reloj, una promocin de una bebida marca las 17 hs en punto. El viejo calendario sin nmeros solo dice LunesJos (el mozo, dirigindose al lavaplatos) uh! Lleg el caracol. Un tecito y se va.El lavaplatos(secndose las manos) frenate, respet, as no va Loco!Yolanda ( la anciana acomodandose el rodete) Mozooooooo, seooooooorrrrr!Jose (al lavaplatos) Ni la mires, segu con lo tuyo, dame bolaYolanda : mozoooooo, por favor, no tengo tiempoJose (al lavaplatos) : prepara un te, siempre lo mismo, aos...Unas chicas de una mesa cercana a Yolanda piden unos cafs cortados con la sea clsica. Jos asiente cabeceando y con una sonrisa amplia y seductora.Yolanda ( se arregla el sweater) Seor. Mozooooo, un te por favorEl lavaplatos (le acerca el te listo a Jos ) marche, el te de dela Sra.Jose : y los cortados que te ped ?El lavaplatos ya van, estn enseguida, llvate el teJose: que espere, apurame los cortadosEl lavaplatos (dando la espalda a jose, concentrado en la maquina de caf y las 2 tacitas) llvale el te , se enfra, locoJose (se inclina sobre la barra y agarra el delantal del lavaplatos por atrs de los nudos) sabes cuantas veces tome la leche fra? Y solo?El lavaplatos ( dndose vuelta, ojos bien abiertos) par loco, que te pasa? Toma los cortados!Yolanda ( mirando por la ventana) seor? El te por favor, puede ser con limn ?Jos : ( ubica los cortados, los vasitos de agua y jugo en la bandeja, de manera que no queda lugar para el te) la leche fra, la mesa larga, solo, siempre soloEl lavaplatos (mira a los ojos a Jos, se apoya en la barra y mueve la cabeza de lado a lado ) quien te entiende Jos? SOS buen tipo y buen mozo.Jos (con movimiento rpido da la espalda a la barra y se dirige con una sonrisa amplia y seductora a la mesa de las chicas y sirve el pedido al tiempo que dice) dos cortaditos, agua y jugo para las mas lindas del bar.Yolandaescucha atenta el comentario y de su cartera de fina marca retira unos cosmticos y un espejo y retoca su delicado maquillaje.Jose retorna a la barra y coloca el te solo en la bandeja y encara para la mesa de la Sra. Yolanda. El lavaplatos : el agua y el juguito, Jos!Jos ( frena su marcha, se da vuelta y mira al lavaplatos) sabes cuantas veces me dejaron sin jugo ni agua?

Fin escena Uno

Escena dos

Repite varias situaciones de la escena uno, la seora va a almorzar, la misma situacin de conflicto con la comida, la sal, la comida caliente, fra. Sobre el final del almuerzo, al momento del caf, llega un seor con portafolio, extrae una carpeta y la leerais junto a la Sra. Leen el testamento.El mozo y el lavaplatos hablan y sacan conjeturas acerca del contenido

Escena tres

La Sra. entra al bar y sale repetidas veces, toma te, caf, hasta llega a pedir whisky. Escribe en un cuaderno una y otra vez como si comenzase una carta que nunca termina. La lee en voz alta Llegada la tarde entra con un sobre, extrae unas hojas y unas resonancias. Llora, el lavaplatos se acerca a consolarla. Conversan sobre lo que tiene, le dice que tiene una semana de vida. El mozo atiende otras mesas ya mas distrado por lo que pasa en la mesa de Yolanda.

Escena cuatro

El mozo y el lavaplatos abren el bar por la maana, jose busca las maneras para que el lavaplatos le cuente acerca de la charla, mas que nunca el lavaplatos se aboca a sus tareas, insiste en tener todo organizado.El bar abre, pasan las horas, la Sra. no llega, todo parece normal pero su ausencia es importante para la los dos. En una mesa los directivos de un club discuten y ello llama la atencin de jose y el lavaplatos, pero de vez en cuando echan una mirada a la mesa, y cuando alguien la quiere ocupar, salta jose y dice que esta reservada. Hasta salen a la puerta a ver si la ven llegar. Es la escena donde el leit motif es la preocupacin

Jos y el lavaplatos estn apoyados en la barra, conversando de ftbol,

Los treinta y pico de aos logran mostrar en su cara algo que quiere ocultar, y lo sabe. Caminando por el barrio natal, ya no es la femme fatale, ni siquiera aspira a tercer princesa del concurso Miss Paternal 2020. Busca todo aquello que ya no est, y lo sabe. Llega a la esquina del primer beso, o del primer orgasmo, ya no lo recuerda bien. Siempre lleva esa imagen a todos los encuentros y la impronta aquella la deja siempre con las manos vacas y el alma... El alma no quiere opinar de su estado. El alma se repara, el cuerpo no cicatriza a tiempo. Un desequilibrio que puede costarle la vida, una distancia que puede generarle el espasmo final. En ese estado de ceguera emocional autogestionada, no se da cuenta que cruza rpidamente la calle, alguien que la saluda a los gritos. Nadie le grita ahora, es su logro, es su libertad. Estos gritos dirigidos a ella, parecen traspasarla y chocar contra las medianeras de las viejas casas y se pierden en los laberintos internos. Pero ella ni mu... Hasta que l est tan cerca que no le queda otra que levantar la vista, reconocer a Brian y abrir sus brazos. Cuando sus mejillas se tocan parecen ser de un material pegajoso. No se pueden ni quieren separarse. Mi Reina, dice a su odo... Te amo desde siempre... agrega agitado. Quiero perderte otra vez, le responde ella... No merezco tu amor, soy una asesina serial, todos los das mato esperanzas, sueos, encuentros y desencuentros.Todas las noches termino presa en la crcel del vaco. Andate, Juan...Brian, que no se llama Juan, cae muerto por no identificacin Y ella sigue por la calle que iluminan los reflejos de las ventanas altas y vacas.

Espontneo Fresco se levanta cada maana como la primera de su vida. Se asea, desayuna frutas que va recolectando de unos rboles del parque de su casa. No lee el diario ni mira las noticias, solamente se para delante del vidrio de la puerta que da a la cocina y lee los recordatorios favoritos de su familia. Slo por hoy, Carpe diem y el ms religioso de todos A cada da le basta su afn, verdaderas frases guas de su vida diaria. No le gusta perseguir el ayer para vivir el hoy. Sale de su casa rumbo a su negocio. Sus pasos son equilibrados. A su lado se apresuran unos chiquitos para acompaarlo y mirando los pies del seor Frescovan cantando Taln, Planta, Punta... Taln, Planta, Punta. Las madres sonrientes, murmuran entre si que es la nica manera que aprenden a caminar bien derechitos.Llega a la puerta de su comercio. Panadera La Eternidad, los nios aplastan sus narices y achatan sus caras contra el vidrio. Espontneo no los desilusiona, siempre tiene facturas y panes del da, calentitos que duran un minuto en las bocas. Las madres, desde media cuadra, se asoman, miran al cielo y murmuran entre si que as aprenden a comer bien.Espontneo Fresco es un ngel que enva Dios todas las maanas para que los ms chicos y los ms grandes aprendan a vivir en el instante presente, en el lugar que seaY se familiaricen con el gerundio, la conjugacin del Seor, dice el maestro panaderocelestial, mientras saborea una bola de fraile rellena de pastelera y dulce de leche.

El teln se corre lentamente, proyeccin de un cielo nocturno estrellado y se escucha el canto de unos pjaritos. Amanece...Una luz sale del hombro derecho del escenario, y dos sombras largas cruzan el piso de derecha a izquierda. proyectadas por dos personas que aparecen caminando y se paran frente al pblico. Son una mujer y un hombre jvenes.Espontnea (abre sus brazos, salta) le habla al publico: Buen da soy EspontneaFresco ( salta y abre sus brazos, se dirige al publico) : Buen da soy Fresco (la mira a Espontnea ) qu bueno que a mi llaman Fresco y a vos EspontneaEspontnea ( mirando a Fresco) Por qu?Fresco: porque si me llamaran Espontneo y a vos Fresca, la abuela se preocupara mucho. Ah va la Fresca!, gritan los muchachos al verte pasar, no queda bien....Espontnea ( mirando al publico y a Fresco ) No, para nada, no me gusta nada.Otra sombra muy grande cruza el escenario de izq a derecha y la proyectan una persona que aparece caminando con un bastn y tres personas agarradas de ella. Es una anciana. Se para frente al publico y diceAnciana : soy la Seora PretritaUnadelasagarradas: seoritaaaa! Sos nuestra, de nadie ms!Fresco y Espontnea miran a este grupo y al pblicoya hacen seas de no entenderSra. Pretrita : soy seora del tiempo pasado, y todo tiempo pasado fue ...?Agarrados (a coro) Mejoooooorrrrrr!!!!Sra. Pretrita : adems seorita pretrita queda en versito chiquito y no me gusta nadita... Y ustedes presentense a los chicos y a estos dos que no los conozco.Trespersonasacoro : somos los aferrados al pasado, no la soltamos nunca. Uno a uno se presentanUno : Me llamo FuiDos : me llaman FuisteTres : me llamo Fue y cuando nos llaman a los tres juntos nos gritan .FrescoyEspontnea gritan juntos : Fueron!?Fueron : siiiiiiiiiiiFrescoyEspontnea : entonces vyanse, jajajajajajajajajajajajaSra. Pretrita : vamosnos mejor, el hoy no es mi momento favorito, vamos al Ayer Un tango suena de fondo y la vieja y los tres agarrados se van por donde entraronContrapunto, la Abu Pretrita y El Seor del FuturoOlvido y Recuerdo dos amigos que van juntos por la vida

El televisor del bar, un plasma de 120 mil pulgadas, exagera el borracho apurando una ginebrita, deja de transmitir. Su pantalla negra, bien negra. Pasan dos minutos, dos horas!! grita el borracho... El lugar est lleno, un torneo de burako congrega viejas y viejos, ruidosos, ruidosas. Gritan, algunas ren, otra odian entre muecas extraas. Nadie presta atencin al grito confundido y agrandado del borracho.De repente suenan todos los celulares al mismo tiempo, el plasma se enciende en sincrona, y muestra una pantalla roja, letras grandes en blanco. Quienes juegan sin mirar hacia otro lado atienden sus telfonos... Hoooooola, holaaaaaaaa, laaaaa, un coro de holas cual canon de coro de cantores de Viena inunda el espacio aunque bastante desafinado. El mamado mira fijamente el plasma que para l ya mide algo as como 190 mil pulgadas.El cajero del bar es el primero que abre la boca cuando atiende la llamada, una voz le llega profunda y lejana pero fuerte... Soy Dios, te amo y te queda mi nmero grabado. Me necesits y me llams. El tema es que cada persona en el bar y por lo que parece los transentes, los choferes de los colectivos, las personas que viajan en los colectivos, los taxistas, todos tienen la misma expresin y reciben el mismo llamado.El borracho lee en voz alta, casi gritando lo que est escrito en grandes letras blancas, fondo rojo.... Soy Dios, te amo y este es mi nmero, me necesitas y me llamas.Mira su vaso de moscato y le dice, Gracias Padre por darme el gusto del trago.

Un pibe se para a mirar el partido de ftbol detrs del vidrio. Respira agitadamente y el vapor de su aliento empaa un pedacito del gran ventanal. El temporal lo empuja a entrar al bar en el que no es bienvenido. Una decena de personas levantan la vista y con sus ojos fijos en l parecen darle rdenes. El espacio se llena de palabras invisibles, entre demandas y gruidos de molestia. El nio emite pedidos telepticos, pidiendo permiso para compartir calorcito y diversin. La atmsfera del lugar es falsa y cruel, se siente empujado por tormentas, la de adentro y la de afuera del bar.Una pareja de ancianos lo identifican cuando pasa cerca de ellos, y la timidez de los tres crea una campana entre tanto aliento oxidado de alcohol y cigarrillos. Al tiempo que la vieja lo agarra del brazo, el viejo grita...Llegaste al fin, Carlitos!El pibe lo mira fijo, nadie nota que sus sentidos ni su cuerpo reconocen ese nombre como suyo... Abuelooooossss! La sonrisa ancha impide la modulacin de la respuesta del nio. El abrazo que se dan los tres es una perfecta simulacin que lo hace real para todos los presentes. Esto hace que cada cual deje de lado su mezquindad y agresividad y siga con lo suyo. Todo en ese bar es ambigo, desde que abre por la maana hasta su hora de cierre ya pasada la medianoche. Por el ventiluz un humito sutil y con aroma a especies orientales penetra ligeramente y se mezcla durante todo el da con los olores y las respiraciones del lugar. Ya de noche los tres se ponen de pie y se retiran. Al pasar por la apertura en la pared donde se mete el aire exterior, apagan un hornito de barro donde las hierbas ya negras exhalan sus ltimas volutas afrodisacas. Los viejos acarician y le agradecen al nio una nueva noche de sexo adolescente, mientras este se quita la campera, despliega las alas y se va volando...