8

Click here to load reader

El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

1

EL BULLYING ASOCIADO CON LOS TRASTORNOS DE PERSONALIDAD EN NIÑOS Y ADOLESCENTES

Dra. Miriam Pardo Fariña1

1. INTRODUCCIÓN.

DEFINICIÓN DE BULLYING Y ALGUNOS PLANTEOS

• El Bullying está referido a una escena de maltrato en donde un niño o un adolescente, generalmente más fuete, intimida, y maltrata de forma repetida a lo largo del tiempo, a otro/a compañero/a o par considerado más débil e indefenso/a tanto por el/la agresor/a como por el grupo de pares.

ALGUNOS CUESTIONAMIENTOS

¿Por qué algunos niños se constituyen en agresores de forma constante en el tiempo?

¿Qué es lo que moviliza a un niño o a un adolescente a agredir a algún compañero de manera despiadada?

¿Todos los niños y/o adolescentes podrían constituirse en agresores de este tipo?

¿Por qué se origina una especie de silencio en torno al agresor de manera que muchos

cómplices participan junto a él de sus actos y necesitan reivindicarlo cuando lo realizan (por ejemplo grabarlos con cámaras de teléfonos celulares o alentar la pelea despiadada)?

• Cuando aparecen referentes del Bullying ya sea abuso de poder, repetición del maltrato

en el tiempo, así como conductas referidas a intimidaciones, burlas, aislamiento sistemático de la víctima, amenazas, insultos, inclusive agresiones físicas, podríamos preguntarnos acerca del perfil del niño o del adolescente maltratador.

• Si nos estamos refiriendo a conductas reiteradas en el tiempo, sería conveniente

preguntarnos también cómo es ese niño y/o adolescente en su vida cotidiana. ¿Sólo actúa de esa manera en el ámbito escolar o acaso se puede distinguir en él o ella un perfil similar en otros espacios tales como en su casa o en el marco de sus relaciones interpersonales fuera del colegio?

1 Psicóloga y Doctora en Psicoanálisis. Coordinadora del Centro de Atención y Estudios Clínicos perteneciente a la carrera de Psicología de la Universidad Andrés Bello – campus Viña del Mar. Docente de cursos clínicos (en el área infanto-juvenil) que se imparten en quinto y sexto año de la carrera de Psicología.

Page 2: El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

2

• Si bien es cierto, algunos niños, adolescentes y adultos, suelen tener lo que la gente denomina “un carácter fuerte” y, quizás, participar de algún hecho aislado de violencia, ya sea física o psicológica, la importancia que conlleva el sentimiento de culpa frente a estos hitos, hace suponer que quien se haya involucrado en estos actos, se arrepiente intentando no volver a incidir en ellos.

• Sin embargo, otros niños y/o adolescentes, parecieran estar inmunes a la culpa, tratando

a su entorno de forma despótica. • Esto haría suponer que la agresión, intimidación, burla, etc., cometida, no se trataría de

un hecho aislado, sino de comportamientos que producirían mucho bienestar en quien comete estas acciones provocando un tremendo sufrimiento en la víctima.

• Aún más, aparece asociado a esto la exigencia tácita de parte del niño y/o adolescente

de recibir aprobación por sus actos desafiando el marco de la legalidad. • De esta manera, no sólo será alentado en la sala de clases o en el patio por sus

compañeros, sino que además, se obtendrán filmaciones como una especie de trofeo por el acto cometido.

• Esto resulta tan llamativo, que también ha acontecido que sean los mismos docentes

quienes graben una discusión o golpiza violenta en sus celulares, para mostrar tal acción a los padres o a quienes dirigen el colegio.

• Si descubrimos que un niño o un adolescente presenta dicho comportamiento de manera

persistente y sin capacidad de reconocer su falta, entonces podríamos preguntarnos si acaso nos encontramos frente a un Trastorno de Personalidad, temática trabajada en profundidad por algunos autores norteamericanos, tales como Paulina Kernberg.

2. LOS TRASTORNOS DE PERSONALIDAD EN NIÑOS Y ADOLESCENTES

• Históricamente, los Trastornos de personalidad (TP) han recibido menor atención por parte de clínicos e investigadores que otros trastornos psiquiátricos como la depresión y esquizofrenia.

• Se ha prestado menos atención al desarrollo de TP en niños y adolescentes. Sin

embargo, cuando se buscan su incidencia puede resultar considerable.

Page 3: El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

3

• Cada vez es más frecuente que se describan patrones de personalidad duraderos que hacen su aparición al final de la edad preescolar. Estos incluyen:

1) Patrones de agresividad. 2) Estrategias de afrontamiento inflexible. 3) Apego inseguro. • El DSM-IV define los Rasgos de personalidad

de la siguiente manera:

“Patrones persistentes de percepción, relación y pensamiento acerca del ambiente y de uno mismo que se exhiben en una amplia variedad de contextos sociales y personales”. • A su vez, un Trastorno de personalidad

se define del siguiente modo:

“Un patrón persistente de experiencia interna y comportamiento que se desvía notablemente de las expectativas de la cultura del individuo. Es generalizado e inflexible. Tiene su inicio en la adolescencia o principios de la edad adulta. Es estable a través del tiempo (y a lo largo de una amplia variedad de situaciones personales y sociales). Y conduce a la aflicción y al deterioro”. • De acuerdo con la investigación y los hallazgos clínicos, se espera que un TP tenga un

impacto serio en la mayor parte de las esferas de la vida de una persona, incluyendo: comportamientos en el trabajo o la escuela, interacción con compañeros y familia, y funcionamiento cognitivo y emocional, que se refleja en su sentido de sí mismo y de

otros y en su relación con la realidad en general. • Aunque muchos problemas a nivel preescolar se resuelven por sí mismos, no es verdad

que los problemas de los niños sean transitorios, especialmente en aquéllos de edad escolar.

• Dada la complejidad del desarrollo resulta sorprendente que exista alguna

predictibilidad de la patología adulta desde la temprana infancia. Muchos ejemplos de diferentes campos de funcionamiento indican una continuidad en la conducta problemática.

Page 4: El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

4

3. TRASTORNO LIMÍTROFE DE LA PERSONALIDAD

A) RELACIÓN CON LA REPRESENTACIÓN MATERNA La relación del niño limítrofe con su madre se caracteriza ya sea por la idealización

primitiva del objeto y/o la devaluación. Existe incapacidad en el niño para relacionarse con los padres como pareja.

Los niños limítrofes carecen de objetos transicionales, los que pueden adquirir una

cualidad extraña. Los niños limítrofes tienden a apegarse excesivamente a sus madres.

B) RELACIÓN CON LOS COMPAÑEROS Y AMISTADES Los niños limítrofes establecen relaciones objetales (R.O.) con objetos parciales o

francos objetos del sí mismo. El otro es sólo un vehículo para su propia proyección: Una cosa en la que se apoya,

controla, idealiza o devalúa. Muestran incapacidad para sostener sus amistades.

C) AFECTOS Angustia de pérdida total, desastre y aniquilación, con cualidad traumática diferente

a la de los pacientes neuróticos. Prevalece la ira con tendencia a los berrinches.

La agresión puede alcanzar niveles peligrosos.

Afectos abruptos con cualidad de “todo o nada.”

Amplias fluctuaciones en el estado de ánimo.

Page 5: El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

5

Se detecta ausencia de culpa, de preocupación, valoración de los demás, compromiso con los valores (culturales y artísticos).

Faltan los moduladores del afecto derivados de una síntesis de las representaciones

del sí mismo y del objeto positivas y negativas hacia un concepto integral (se obstaculiza el logro de la constancia objetal).

Se detecta alta incidencia de depresión asociada a estos pacientes.

Los niños limítrofes son perseguidos por precursores terroríficos del Superyó.

Se detecta incapacidad para obtener placer del juego.

4. TRASTORNO NARCISISTA DE LA PERSONALIDAD

A) NARCISISMO NORMAL

1. La necesidad de dependencia y admiración se satisface con la atención apropiada a la edad del niño.

– Es capaz de reconocer la nutrición afectiva con reciprocidad y gratitud.

2. Existe la tendencia a proclamar exageradamente los logros y talentos, lo que

involucra fantasías juguetonas de alcanzar lo que se propone y de poseer poderes extraordinarios.

3. El niño es capaz de tolerar la pérdida para conservar la relación con sus progenitores

o con sus amigos.

4. La dependencia y exigencias hacia el medio ambiente corresponden a expectativas reales y pueden cumplirse.

5. Presenta vínculos genuinos e interés hacia los demás.

– Puede sostener una investidura positiva sobre su madre (a los 2 años de

edad) durante separaciones cortas.

6. Existe una regulación adecuada del sí mismo, lo que conduce a la autoaceptación realista (con cualidades tanto positivas como negativas).

7. Obtiene gratificación de los logros reales e invierte esfuerzo hacia la obtención de

otras metas.

Page 6: El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

6

– Hay una sana tensión que prevalece en el sí mismo real, el sí mismo ideal y los modelos de rol ideales, lo que permite que el niño se sienta gratificado frente a los logros propios y ajenos.

B) NARCISISMO PATOLÓGICO

1. El niño niega su dependencia; recibe el afecto como si tuviera derecho a tenerlo: – No manifiesta reciprocidad – No experimenta sentido de gratitud

2. El niño cree que ha logrado lo que desea, por lo tanto no hay fantasías juguetonas.

3. Su sentido grandioso del sí mismo es la fusión de los aspectos positivos del sí

mismo real. El sí mismo ideal y los modelos del rol ideal. – Cualquier elemento incompatible es eliminado – Por lo tanto, resulta una autoimagen altamente exagerada. Todos los demás

son inferiores al niño.

4. Las demandas del niño son excesivas y, por lo tanto, impositivas

– Experimenta envidia, la que altera su capacidad de recibir cuidados y experimentar satisfacción de logro.

5. Estos niños no pueden confiar ni depender más allá del contexto inmediato de la

necesidad de gratificación.

– Sólo puede tener vínculos inestables, sujetos a cambios debido a cualquier frustración.

6. Presentan alta vulnerabilidad a la frustración o a la crítica porque necesitan ser los

mejores.

– Requieren de admiración excesiva.

7. Como es ya su propio ideal desconoce todo lo que no encaje con su sentido de grandiosidad, por lo que percibe a los demás de manera distorsionada.

– Los otros son devaluados y temidos debido a su falta de integración del sí

mismo por escisión.

Page 7: El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

7

C) PSICOPATOLOGÍA DEL DESARROLLO

1. AUTOESTIMA

Paradoja entre el elevado sentido del sí mismo (arrogancia) y extrema vulnerabilidad e hipersensibilidad a la crítica (intolerancia a la frustración)

2. INTERACCIONES

– Incapacidad para sentir empatía por los demás; – Tendencia a la explotación, manipulación, mentiras, robos y otras conductas

antisociales; – Las relaciones con los pares se encuentran alteradas de manera significativa.

3. EJECUCIÓN ACADÉMICA

– No disfrutan de las experiencias académicas;

– Suelen ser buenos estudiantes, pero sus logros se dirigen a obtener la

admiración de los demás;

– Cuando la admiración de los demás disminuye, tienden al aburrimiento y bajan su rendimiento escolar.

4. EVITACIÓN DE LA MIRADA

– Puede deberse a la ilusión de “ser especial” ; por lo tanto, si no ve a su

alrededor, evita compararse con los demás.

– Puede deberse a una temprana discordancia entre la percepción que tienen de él su madre y el propio niño, por lo que no recibe un reconocimiento completo de su individualidad. Al desviar la mirada, evita el dolor de no ser reconocido;

– La evitación de la mirada también facilita la evitación de juicios críticos y

otras expectativas no deseadas.

5. SORDERA SELECTIVA O DESATENCIÓN DELIBERADA

– Pueden no escuchar a un padre invasivo;

– En sesión, puede “apagar el sonido” hacia el terapeuta;

– Si el padre y el terapeuta reaccionan con distanciamiento, se exacerba el sentido de abandono y pérdida del niño y se catalizan sus defensas narcisistas;

Page 8: El Bullying y Los Trastornos de Personalidad(2)

8

– El niño queda aislado de manera crónica tornándose sordo y ciego frente a

un ambiente poco contenedor.

6. PATOLOGÍA DEL JUEGO

– Notable inhibición en el juego, lo que se expresa en términos de aburrimiento;

(Para ellos, no hay juguetes que valgan la pena);

– El reclamo del aburrimiento disfraza la amenaza del sí mismo grandioso representado en la posibilidad de derrota de los juegos estructurados; también impide el riesgo concomitante de rabietas o berrinches.

– Se hace cargo de las fantasías primitivas de agresión que surgen a lo largo

del tratamiento cuando juega de manera sádica en escenarios que desmantela, desmiembra y masacra.

7. ANGUSTIA POR SEPARACIÓN

– Es paradojal: al mismo tiempo que cree tener derecho a todo (poderoso), es

extremadamente vulnerable a estar solo;

No puede soltar a su cuidador; Le cuesta salir de casa.

– El cuidador es una extensión de su sí mismo grandioso, por lo tanto los

padres son igualmente aprensivos para con su hijo;

– La angustia de separación no se aborda como problema principal, debido a que la grandiosidad del niño distrae la atención del clínico.

8. PREOCUPACIÓN POR LA AUTOIMAGEN

– El joven con T.N.P. se obsesiona con su imagen o reflejo en el espejo; puede

desarrollar adicción;

– Este indicador da cuenta de la falta de interacción de miradas positivas y recíprocas con el espejo humano, con la persona que debería brindarle los cuidados básicos.

– La construcción del sí mismo grandioso es para protegerse del dolor

psicológico.