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EL ESPIRITU EMPRENDEDOR
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William H. Rocha Jácome
Administrador de Empresas
Esp. En Ger. De Inst. Educativas
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EL ESPÍRITU EMPRENDEDOR
LA CONCEPCIÓN DEL SER HUMANO
Mucha ha sido la discusión filosofía en torno al
concepto de ser humano, donde tanto la
filosofía como la psicología han realizado
grandes aportes.
La conceptualización del hombre ha
evolucionado hasta convertirse en un conjunto
unitario, integrado por el cuerpo, el alma, el
espíritu y su circunstancia. inicialmente
anaxagoras (aprox. 500-428 A.C) sugirio una
distincion de elementos tanto en el hombre
como en los animales y plantas. Sin embargo, el
primer filosofo que los distinguio claramente y
los analizo de manera sistematica fue platon
(427 – 347 A.C). según el, el hombre coexisten
dos entidades totalmente diferentes, alma y
cuerpo, que permanecen separadas como dos
sustancias distintas. Esta perspectiva se
mantuvo en la filosofia neoplatonica de los
priemros siglos de la era cristiana, y en todos
los sistemas que se basan en la filosofia
platonica.
La otra forma moderna de de dualismo fue la
combinacion de aristoteles (384-322 A.C), la
cual distinguia entre los principios, alma y
cuerpo, pero los veia unidos en el ser humano,
formamdo una sustancia completa. Los
sistemas filosoficos que siguieron a la doctrina
aristotelica, en particular la filosofia escolastica,
mantuvieron esta forma de dualismo.
No obstante René Descartes (1596-1650),
rechazo las enseñanzas de los grandes
escolásticos como tomas de Aquino (1225-
1274), y postulo un dualismo aun más radical y
explicito. En la filosofía moderna posterior a
Descartes encontramos dos reacciones que se
oponen este dualismo radical: aceptación con
algunas modificaciones, o bien insatisfacción,
crítica y rechazo.
La concepción ha del hombre ha evolucionado
constantemente, siendo William Stern (1871-
1938), quien incluyera un nuevo concepto, el de
los valores. Stern dice que todo organismo tiene
dos esferas o sustratos: uno biológico, que es el
vivir, común al hombre y animal, y otro de
naturaleza psicológica, que corresponde a las
vivencias que no solo se relacionan con el
conocimiento, sino con todos los hechos de
conciencia, sean intelectuales, afectivos,
volitivos, etc. Pero además de estas esferas, o
sustratos fundamentales, toda personalidad
contiene una nueva esfera propia del ser
humano, la de los valores, es decir, las normas,
fines e ideales que lo estimulan para realizar
sus obras.
El animal posee los sustratos de orden biológico
y psicológico, pero solo el ser humano es capaz
de crear y asumir valores y orientar su conducta
de acuerdo con ellos, con el fin de controlarse a
Cuerpo Alma
Alma
Cuerpo
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sí mismo. La concepción más moderna del
hombre, habla de una tétrada, la cual es una
concepción holista, según la cual es hombre es
un conjunto de cuatro elementos especialmente
vinculados entre sí, de manera que forman un
todo unitario. Este conjunto unitario está
formado por el soma (cuerpo), la psique (alma),
el pneuma (espíritu) y los espacial-temporal
(circunstancia). El cuerpo (soma) es la parte
biofísica del ser humano, donde están los
órganos, aparatos y sistemas biológicos. El
alma (psique) es la parte psicológica donde se
ubica la sensación, percepción, pensamiento,
cognición, emoción, conciencia, sentimientos,
conducta, interacción personal, etc., que le
permiten al ser humano ubicarse en el espacio,
tiempo y persona. El espíritu (pneuma), es el
sustrato donde se encuentran los valores como
la libertad, la justicia, el amor, la sabiduría, etc.,
es el puente hacia lo trascendente. La
circunstancia (espacio-temporal) es el
componente histórico concreto y el medio
ambiente especifico del ser humano, el cual
aunque aparentemente esté fuera de él, esta
sincronizado con él, ya que todo ser humano
ocupa un “lugar vital” delimitado dentro de la
categoría espacio medioambiental, que se ubica
en un “tiempo específico” que lo configura en
una época, en una cultura
¿QUE SE ENTIENDE ENTONCES POR
ESPIRITU?
Como se puede apreciar El espíritu (pneuma),
es el sustrato donde se encuentran los valores
como la libertad, la justicia, el amor, la
sabiduría, etc., es el puente hacia lo
trascendente. En otras palabras son las normas,
fines e ideales que estimulan al ser humano a
realizar sus obras. Los valores son convicciones
profundas de los seres humanos que
determinan su manera de ser y orientan su
conducta. La solidaridad frente a la indiferencia,
la justicia frente al abuso, el amor frente al odio.
¿QUE SE ENTIENDE ENTONCES POR
EMPRENDEDOR?
El termino emprendedor parece provenir del
francés entrepreuner que es exactamente la
misma palabra que se utiliza en lengua inglesa.
Este término fue introducido en la bibliografía
económica por Cantillon en 1755 para identificar
a quien tomaba la responsabilidad de poner en
marcha y llevar a término un proyecto. En sus
orígenes, este término se aplico principalmente
a quienes eran pioneros en distintas hazañas y
posteriormente a quienes emprendían proyectos
de construcción, sobre todo construcciones de
tipo militar o religioso.
Luego JEAN BAPTISTE SAY, fue más allá y
considero el desarrollo económico como
resultado de la creación de nuevos
emprendimientos. Añadió a la definición de
Cantillon que el emprendedor era también un
líder que atraía a otras personas, con el objetivo
de constituir organizaciones productivas. La
concepción que SAY tenía del emprendedor,
alguien que innova y es agente de cambios
permanece hasta hoy.
FILION (1999 a), considera a JEAN BAPTISTE
SAY el padre del emprendedurismo, pero
asegura, que el economista austriaco-
norteamericano JOSEPH SCHUMPETER, fue
quien dio proyección al tema asociando
definitivamente al emprendedor al concepto de
innovación y apuntando como el elemento que
dispara y explica el desarrollo económico.
Son muchos los economistas, filósofos,
administradores, ingenieros, etc., que han
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realizado aportes a la construcción del concepto
de emprendimiento hoy día, entre ellos el
premio nobel Hayek quien coloca de manifiesto
el papel del emprendedor como ágil captador y
utilizador de la información. Luego Patrick liles,
profesor de la escuela de dirección de empresas
de Harvard establece tres categoría de
emprendedores, aquellos que acaban en la
marginalidad, que son la gran mayoría,
aquellos que crean una empresa atractiva
alrededor de sus capacidades personales,
ayudándose de un equipo de colaboradores que
les permiten concentrarse en lo que le es
realmente especifico y, finalmente, aquellos
que son capaces de generar iniciativas con
verdadero potencial de desarrollo. Según
Liles, las dos últimas categorías representan
una fracción pequeñísima del total, ya que los
emprendedores marginales son la gran mayoría.
En el campo de la administración de empresas
David McClelland define emprendedor como
alguien que ejercita algún control sobre los
medios de producción y produce más de lo que
consume a fin de vender (o cambiar) este
exceso para conseguir un ingreso individual (o
domestico). Howard Stevenson, catedrático de
Harvard, lo define como un individuo que
persigue la oportunidad sin tener en cuenta los
recursos que tiene bajo su control.
Charles Hofer, define emprendedor como el
individuo que persigue oportunidades con el
propósito prioritario de obtener un beneficio (y
un crecimiento) sin preocuparse de los recursos
que en aquel momento el mismo controla.
El fenómeno emprendedor también podría
analizarse desde el campo de lo que lo estimula
o lo provoca en un individuo determinado. Así,
se podría hablar de tres ejes o escuelas
fundamentales. La escuela personal, la social
y la reticular. Según la escuela personal, el
espíritu emprendedor va ligado a factores que
van desde lo genético, hasta la educación,
pasando por el entorno familiar. La perspectiva
social explica que el espíritu emprendedor surge
asociado a circunstancias de tipo social. Así, se
atribuye a ciertos grupos étnicos o a ciertas
circunstancias sociales una mayor incidencia en
la generación de emprendedores. (Libaneses,
judíos, chinos e indios). La escuela reticular
explica el fenómeno de emprender en función
del costo de acceso a los recursos necesarios
para explotar una oportunidad.
Las tres perspectivas expuestas están
probablemente presentes mediante algún tipo
de relación en cualquier fenómeno de iniciativa
empresarial, siendo el área del estimulo o
promoción de este tipio de fenómenos una zona
poco investigada de las ciencias sociales.
POR ULTIMO, ¿QUE ES ENTONCES EL
ESPIRITU EMPRENDEDOR?
La iniciativa empresarial es una capacidad del
hombre, que este ha desarrollado
probablemente desde tan pronto como empezó
a existir. La iniciativa empresarial o espíritu
emprendedor, como también se le denomina a
esta capacidad, es, sin embargo, un concepto
esquivo y cuesta definirlo y estudiarlo.
Se podría decir que el espíritu emprendedor es
la “capacidad de concebir una actividad de
negocio y de dar los pasos necesarios para
transformar dicha concepción en una realidad.
Igualmente, se puede aseverar que “es una
fuerza vital, ingenio, vivacidad, un principio
generador que nos impulsa a comenzar grandes
cosas con gran determinación”.
Es “el sueño de lograr un reto, es la búsqueda
permanente de desarrollo e independencia, que
está dentro de cada uno de nosotros”.
Es embestir con ímpetu el mundo e ir en pos de
sus ideales, es ser capaz de hacer que las
cosas sucedan, es deseo y capacidad de logro
o superación, es ponerse metas alcanzables y
hacerlas realidad.