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EL HOMBRE COMO SER BIOPSICOSOCIAL
El hombre es un ser complejo que posee una estructura física y
mental que le permite relacionarse con otras personas y ser parte de
una organización social. Por eso, el hombre es considerado como un
fruto de un doble proceso de evolución biológica y de evolución
social.
Como es bien sabido, el hombre no está sólo, se pasa su vida
interactuando con otros, ya sea directa o indirectamente. Así desde
que el hombre nace es insertado en una sociedad organizada, siendo
la familia la parte más importante y en primera lugar de la
socialización, ya que es en el seno familiar donde el niño empieza su desenvolvimiento y formación de su personalidad a través de la
imitación de conductas y roles que el niño capta en su entorno
familiar, para luego dar paso a la escuela como una forma de
cooperación en el desarrollo social del hombre, ya que el niño pasa
muchas horas del día en la escuela y es aquí donde el profesor va a
desempeñar un papel fundamental en el desarrollo psicosocial del
niño.
Por lo tanto, desde que nace hasta que muere la vida del
hombre se halla determinado en medida cada día mayor por la
sociedad en que vive, en la infancia en la juventud y durante la vida
adulta la conducta del ser humano sigue generalmente los cauces abiertos por las presiones del medio.
Desde el momento mismo del nacimiento y aun antes, ejerce su
influjo el ambiente social por medio de innumerables instituciones
culturales, costumbres, creencias, hábitos de higiene y alimentación o
técnicas médicas. Y ese influjo gravita sobre nosotros con fuerza cada
vez mayor por la acción de mil distintos agentes a medida que se va
desarrollando nuestra personalidad.
El grupo social es la realidad más inmediata para la sociología.
La dimensión social del hombre se proyecta desde su infancia y a lo
largo de su vida en el ámbito de un conjunto de grupos muy
diferenciados desde la familia, la pandilla de amigos, el grupo de vecinos. Por lo tanto a medida que el hombre se desarrolla en
sociedad va asimilando un conjunto de normas, valores y roles para
irse abriendo a un mundo cada vez mayor que la del plano familiar y
que le plantea nuevas exigencias y responsabilidades, en donde las
relaciones laborales, actividades deportivas, entornos amicales y
medios de comunicación van interactuando como nuevos agentes de
socialización.
DIMENSIONES DEL SER BIOPSICOSOCIAL
DIMENSIÓN BIOLÓGICA:
El hombre, entre sus múltiples definiciones y características es un
animal biológico. Cada persona es definida por las circunstancias
específicas y cualidades que presenta, tenemos condiciones como
especie que están determinadas desde que nacemos, como por
ejemplo la estructura del cuerpo humano, ciertas características
fenotípicas, el temperamento, entre otros; pero también el
ordenamiento de ciertas cosas están determinadas por la herencia.
No podemos escapar a nuestra mente y al pensamiento, y en todo
momento hacemos uso de él. Si bien es cierto que nuestro cuerpo es
un sistema biológico compuesto de células y órganos complejos que
funcionan juntos para darnos la vida, también es cierto que las
funciones de nuestro cuerpo afectan profundamente nuestros
pensamientos y estados de ánimo.
DIMENSIÓN PSICOLÓGICA:
Sobre esta estructura biológica se desarrolla una estructura
psicológica a través de la cual penetran y se instalan las estructuras
culturales, educativas y sociales; sobre tales dimensiones se
desarrolla una nueva realidad integrada, denominada dimensión
psicológica, y por ella y a través de ella, se involucran las realidades
sociales y culturales que redimensionan, en un contexto específico, al
individuo.
DIMENSIÓN SOCIAL:
Todos estamos bajo la influencia del ambiente social en el que hemos
crecido. El individuo vive en un contexto social que lo pone en
contacto desde su nacimiento con otros seres humanos de los cuales
depende para conservar su vida, formar su carácter y aprender el
modo de ganarse el sustento. Estas interacciones con otros y con
todos, pueden ser directa o indirectamente; y aparte de tener
compañía al hombre le gusta que toda compañía se preocupe por él y
le brinde lo mejor de su ser. Todas las sociedades grandes y
pequeñas, simples o complejas definen ciertas pautas de conducta
necesarias para el funcionamiento de la sociedad, y las prescriben a
los individuos. Las pautas prescritas de conducta son los papeles
sociales. Toda sociedad desarrolla su propio conjunto de papeles para
lograr sus fines y mantener la propia forma adecuada de organización
y orden. A cada individuo se le asigna, a veces por sus propios
esfuerzos, un papel o una pauta de papeles con los cuales contribuye
al grupo y se granjea la recompensa de la sociedad.
El estudio de los seres humanos puede hacerse con enfoques sobre
estas tres dimensiones: la biológica, que hace énfasis en el estudio
de la estructura y funciones del organismo; la psicológica, que
estudia la personalidad y las relaciones interpersonales y el de las
ciencias sociales, que estudia las sociedades y las culturas. Los tres
enfoques representan distintos niveles de abstracción y aunque
utilizan distintos conceptos y métodos, tienen el mismo objeto de
estudio, el hombre; sin embargo, hasta épocas relativamente
recientes, biólogos, psicólogos, antropólogos, culturalistas y
sociólogos han trabajado con escasa vinculación entre unos y otros.
Es sólo en las dos últimas décadas que a través del mayor
intercambio y de la colaboración más estrecha entre los exponentes
de estas distintas disciplinas se ha llegado a la conclusión de que el
hombre sólo puede ser entendido como una unidad bio-psico-social y
es generalmente aceptado por unos y otros el criterio de que la
comprensión de los fenómenos relativos a los seres humanos
requiere la utilización de conocimientos que provienen de esas tres
ciencias.
FUENTES DE BIENESTAR INTEGRAL
Actividad física, cuidado interno y externo de la salud y sobre todo
buscar alternativas a nuestra alimentación, de forma que tengamos
los Macro y Micronutrientes necesarios, interesados en el bienestar
general te ofrecemos una alternativa para mejorar tu salud y
nutrición. Lo más importante es porque queremos que la gente se
cuide de manera integral y ve que el bienestar y la ayuda social son
posibles
La importancia del bienestar integral.
Todos queremos alcanzar el bienestar físico, teniendo como
principal fuente de bienestar la prevención. Por lo tanto la actividad
física es muy importante para mantener la salud en todo nuestro
organismo.
Pero cualquier actividad que realices no estará completa si tu alimentación no es la adecuada, debemos entender que la
alimentación en muchas ocasiones es más importante que la
actividad realizada.
Bienestar general
Debemos involucramos para comenzar en este nuevo enfoque hacia
tu salud, estar informados, ya que en la actualidad nuestro estilo de
vida y alimentación han causado problemas muy graves de salud; En
varios países la principal causa de muerte es la Diabetes, seguido de
Hipertensión, Cáncer, Infartos, Etc. etc.
La obesidad ya es un problema de salud publica en nuestro país es
preocupante la obesidad infantil; problemas o trastornos alimenticios en adolecentes y adultos jóvenes; infartos, hipertensión, diabetes, en
adultos y adultos mayores, todo relacionado con nuestra mala
alimentación.
Disfruta del Bienestar Integral y la felicidad que subyace en él, ve más allá de tu salud
biológica y accede tu salud psicológica
Hablamos de un bienestar integro, por encima de la ausencia de
enfermedades y en pos de una salud psicosomática, energética y
espiritual óptima.
Entiende el término salud psicológica como la salud de tu mente, de
tu psique. Tu salud psicológica se ve influenciada por tu entorno
social, amigos, trabajo. Eres un ser social y como tal te relaciones, de
la experiencia de esas relaciones y de juzgar si son buenas o malas
estás creando tu salud psicológica.
Por lo tanto tu paraíso de salud psicológica sería algo así como que tus vivencias permitieran un equilibrio en tu vida, aumentaran el
bienestar interno y generaran buenas relaciones con los demás.
¿Es posible la salud psicológica?
Para ti es posible absolutamente todo lo que desees. Tu vida es
bienestar integral y la salud física y psicológica forma parte de él. Es
como interpretas las experiencias que tienen lugar en tu vida, lo que
afecta a tu salud psicológica.
Me preguntarás. Sí, pero ¿Qué puedo hacer si no me adapto a las
exigencias diarias del medio social en el que vivo? ¿Qué hago si no
me siento capaz de afrontar mis responsabilidades?
Bueno, pues fíjate en como piensas. Presta atención a tu conducta
mental, a tus pensamientos. Observa como tus pensamientos son
negativos acerca de la situación que te aflige. Se consciente de como son y sustitúyelos por pensamientos que estén conformes a la
realidad. Utiliza el pensamiento positivo siempre que puedes. Auto
convéncete.
Es decir, tienes algo que solucionar y tiene solución, pues hazlo, pasa
a la acción y soluciónalo. Si por el contrario lo que te preocupa no
tiene solución, acéptalo y aprende de ello. Pero no le des vueltas en
tu cabeza y especules con el problema y la solución. Se trata de
meditar en ello con calma y serenidad, no de cavilar en un murmullo
mental incesante que genera estrés y ansiedad. Esta es la manera de
conseguir una salud psicológica óptima.
Reflexiones a seguir para conseguir una salud psicológica óptima:
Cuida lo que te dices a ti mismo. Evita afirmaciones de
negatividad de frases como, “Soy incapaz de…”, “Nunca he sido
bueno en…”, “Soy un inútil”. Sustitúyelas por sus opuestas e
iras directo hacia el éxito psicológico. Además harán crecer tu autoestima y motivación
Busca aprender en los errores que cometes. Cometer errores es
una etapa que cumplir para la superación personal. El que
nunca comete un error es porque nada hace con su vida. Es
como un molusco, ni siente, ni sueña, ni padece
Cuando vas en busca de algo, es imposible que no obtengas
resultados. Pueden ser más o menos relevantes, pero los
resultados existen. Aprende a verlos en todo lo que hagas. Lo
que hoy juzgas como malo para ti, mañana puedes verlo como
una bendición. Observa tu conciencia al respecto.
No creas que tus responsabilidades son abrumadoras y que
puedan contigo. Organízalas adecuadamente y dales una solución.
Tus relaciones con las persona son tuyas, y así también las
opiniones que tengas de las mismas. Pero ten en cuenta una
cosa muy importante, no puedes esperar que los demás se
comporten como tú deseas. Ellos tienen su propio modo de ser
ante las circunstancias de la vida y puede que no coincida con
tu punto de vista. Esto nos hace únicos a cada uno de nosotros
y a la vez nos une.
Practica la meditación, la relajación o la respiración abdominal
consciente. Estas técnicas son excelentes para conseguir calmar
tu psique y conseguir una salud psicológica fantástica.
Despierta la espiritualidad que existe en tu interior.
Elimina el estrés, supera la ansiedad, elimina el miedo de tu vida. Estas patologías hacen que bajes puntos en tu superación
personal y provocan cambios sicosomáticos importantes. Son
fuente de mala salud psicológica y un bienestar integral
deficitario.
Disfrutar de salud psicológica es fuente segura de salud física y de
bienestar integral. Cultivarla supone el mismo esfuerzo que no
hacerlo. Tú eliges que hacer al respecto. Yo hace tiempo que lo tengo
claro. Sé Feliz.
Salud y bienestar integral
Estamos obsesionados con dividir y analizar. Y eso nos ha hecho perder la perspectiva,
la globalidad del hombre y el Universo, también en nuestra salud y bienestar.
El análisis nos ha llevado a defender conclusiones absurdas, a unos y a otros, cada uno
barriendo para su casa, basando las respuestas a nuestros problemas de salud y bienestar
en soluciones que influyen sobre un sólo factor, cuando en realidad el problema es
multifactorial. Por ejemplo, hay quien dice que la dieta es lo más importante y que con
unos simples retoques en nuestra alimentación todos nuestros problemas estarán
resueltos.
Y esto mismo hace cada especialista respecto a su disciplina, y si no lo hace, es lo que
dan a entender muchos artículos de revistas baratas. En el ejercicio cardiovascular está
la clave. O no, era en la fuerza. O no, en Pilates, en la flexibilidad, en la escuela de
espalda,… ¡Ah no! El secreto está en la primera cervical. Si está bien posicionada, todo
funciona. ¿O era el sacro? No hombre no, lo importante es dormir bien. Con eso basta
La salud del ser humano depende de muchísimos factores, y estos mismos factores
dependen entre sí los unos de los otros. La salud y el bienestar deben observarse y
tratarse como un concepto holístico.
Es por eso que tengo dos noticias: una buena y una mala.
Empezaré por la mala -aparentemente-, advirtiéndote de que tienes muchísimo trabajo.
En realidad creo que no eres tonto y ya sabías que tu vida necesita varios retoques.
Tranquilo, empieza poco a poco por uno. Si haces cambios pequeños pero
significativos, pronto disfrutarás de los beneficios.
¿Y la buena? Precisamente la buena noticia es la globalidad. Porque, no especialmente
por este orden, por ejemplo, el descanso depende de lo que te ejercicites, lo que te
ejercites de lo que comas, lo que comas de lo que sientas, lo que sientas de lo que
descanses, etc. Con sólo romper el círculo vicioso por un punto, el resto de factores se
verán afectados, influenciados positivamente, y cambiar radicalmente hacia una vida
más sana será cuestión de mantener la atención en ese propósito y dejar fluir el resto de
acontecimientos de manera natural.
Por eso el bienestar cavernícola está dividido, aunque integralmente unificado, en tres
partes:
1. De la caverna a la urbe: donde reflexiono sobre nuestro estilo de vida y mentalidad, y propongo alternativas más coherentes con nuestra naturaleza.
2. Entrenamiento prehistórico: donde desarrollo un nuevo punto de vista de nuestro modelo de entrenamiento moderno, carente de esencia y globalidad.
3. Caza y recolección: donde muestro mi interpretación y mis recomendaciones alrededor de la alimentación natural y ancestral.
Yo me he especializado en la salud física del individuo, por eso me centro en ella. Sin
embargo, no olvido que la felicidad de éste también reside en otros factores, y ese
concepto de globalidad todavía se hace más grande.
No es sólo lo que comes. No es sólo lo que te mueves. No es sólo tu postura. No es sólo
tu equilibrio emocional. No es sólo tu descanso. No es sólo tu gestión del estrés.
¡Es todo!
Para completar la idea, te invito a leer algo que escribí hace algún tiempo para mi otro
blog, una vida sencilla:
El ser humano, un ser global
Nos hemos convertido en expertos de la división. Ya lo dijo Julio César: “Divide y
vencerás”. Lo dividimos todo.
Desde luego que el hábito -o la manía- de dividir nos ha hecho vencer en muchos
campos, y especialmente en nuestro conocimiento. Hemos alcanzado tal punto de
desarrollo que cualquier materia que queramos estudiar necesita dividirse en otras
submaterias que también dividiremos, y así hasta el infinito con tal de llegar a la esencia
del objeto de estudio. La división nos ha permitido especializarnos tanto que
necesitamos especialistas en distintos campos dentro de una misma especialidad.
El conocimiento no ha sido el único beneficiario de la división. También la industria. La
división de proyectos permite trabajar simultáneamente en los distintos procesos que
conforman el proyecto original y de esa manera conseguimos producir más en menos
tiempo. ¡Maravilloso! -sarcasmo-.
Y así se podrían ver varios ejemplos en los que la división nos empuja, más que nada,
hacia la velocidad en nuestro desarrollo intelectual y económico. No tengo la
voluntad de debatir acerca de la licitud de imprimir tanta velocidad a nuestro avance
como especie, aunque opino que dicha velocidad es uno de los culpables de muchos de
nuestros males. Pero sí quiero insistir en que correr y dividir para aún correr más ha
provocado que en algunos aspectos hayamos perdido la perspectiva, y en consecuencia,
el equilibrio.
Como es el hombre quien corre y divide sin tener en cuenta el coste de tanta prisa y
división, también es el hombre quien paga los platos rotos.
Nos hemos dividido a nosotros mismos. Ahora se habla del hombre como un ser
dividido en cuerpo, razón, emoción y espíritu. Esta división parece delimitar con
bastante exactitud las cuatro grandes áreas que conforman al ser humano, de eso no hay
ninguna duda. Pero tal división supone un doble problema:
1. Se ha comprendido al hombre como una suma de cuatro factores exclusivos, como si cada uno de ellos por separado no influyera nada en el resto. Afortunadamente, hoy día ya ha quedado demostrado que cada uno de estos factores tiene una influencia directa sobre el resto y que el abandono de cualquiera de ellos degrada la salud del resto, con lo que tal división carece de sentido.
2. La dirección del sistema social, perversa y corrupta desde hace siglos,enfoca la educación que se nos imparte y manipula la información que recibimos a diario con tal de que prácticamente sólo desarrollemos uno de los cuatro factores: la razón. La división del hombre no es más que otra de esas divisiones que alguien propuso para correr más y ganar más, para que el hombre sea más productivo no personalmente, sino económicamente. La dirección sabe que si yo produzco más yo ganaré más y seré aparentemente más feliz, mientras que él todavía ganará más sin necesidad de producir.
En la era de la globalización lo globalizamos todo menos al hombre, especialista en
pensar y producir. No se trata de repasar la lista de las consecuencias negativas que
tanto alejan al hombre de la felicidad. Pero tampoco podemos pasar por alto que
nuestros déficits en actividad física, emocional y espiritual en pro del abuso de nuestra
actividad racional son la causa de la mayoría de nuestros problemas individuales, que
lógicamente y también de manera global, nos afectan como sociedad.
Pensamos demasiado y a la vez nos movemos poco, nos queremos poco y sentimos
poco. La pérdida de conciencia global en la comprensión del hombre, seguida de la
prioridad que se le ha dado a la razón por encima del resto de factores, nos ha llevado al
miedo y la frustración contínua.
Es el momento de:
Moverse más. Hacer ejercicio todos los días, caminar hasta el trabajo, jugar con nuestros hijos, bailar, saltar, etc.
Sentir más. Querernos a nosotros mismos y a los demás, abrazarnos, besarnos, tocarnos, reírnos, llorar cuando nos apetezca, comunicarnos, etc.
Encontrar nuestro papel en la vida. Todos tenemos ese rol dentro del gran sistema, del universo, provisto de leyes pero también de una gran incertidumbre. Es nuestra vocación, lo que haremos para la sociedad, que no deja de ser parte del ecosistema y que tiene un único objetivo global: la vida.
Rendir no es lo más importante, sino un trozo más del pastel. Ni el más grande ni el más
pequeño, no es prioritario. Necesitamos comprendernos como una globalidad, para
empezar a entender lo que nos pasa y averiguar que es lo que queremos hacer. En el
equilibrio de los cuatro factores está la clave.
Es cierto. Son tantas nuestras creencias y hábitos instaurados en la infancia que parece
realmente difícil hacer un reset, desaprender. Desde luego que no es algo que pueda
hacerse en un día, ni en dos, ni en tres. Pero se puede conseguir; el cambio es posible.
Todo lo que aprendiste se puede desaprender, sin miedo. Tú puedes volver a ser
global, y por lo tanto feliz.
Ahora bien, si además queremos preservar la especie y garantizar la felicidad de los que
vengan, no nos queda otra que actuar desde la base, nuestros niños. ¿Queremos que sean
felices? Empecemos por no obligarles a pensar tanto, dejemos que prueben y se
equivoquen, liberemos su carga mental en favor de más movimiento, más juegos, más
comunicación, más emociones, más expresión, más creatividad.
Es urgente recuperar la conciencia de que el ser humano es un ser global. Tú
puedes hacerlo desde hoy mismo, trabajando día a día en las cuatro áreas sin priorizar
ninguna. Estoy convencido de que es la única manera de realmente vivir, y no
únicamente sobrevivir.
¿Te comprendes como un ser global? ¿No crees que piensas demasiado? ¿Cuidas tu
cuerpo? ¿Tus emociones? ¿Tu espíritu?