Upload
anthony-pokeman
View
223
Download
2
Embed Size (px)
DESCRIPTION
Periódico realizado para la clase de periodismo.
Citation preview
Votación en las elecciones de las planillas de la Facultad de Humanidades y C.S. ¿Gane o fraude? Pág. 2 El precio de ser un Cimarrón. Pág. 5
La otra cara de la universidad
EL INFORME CIMARRÓN
Se reabre polémica por elecciones no democráticas
Por Karla Dávila
La inconformidad de los estudiantes ante la resolución oficial del CESA escrita a mano y con
un error ortográfico, creó polémica nuevamente sobre las elecciones pasadas entre los
miembros de Fuerza Estudiantil y Bulbo, ya que el cambio de la palabra “falló” por “fallo”,
mencionan estudiantes que cambia el sentido de la redacción y por lo que no debe tener
validez. “Un proceso electoral no consiste únicamente en los votos sino en todo lo que
conlleva desde la inscripción de los candidatos hasta la resolución de impugnaciones por un
estatuto presente... Lean el Estatuto General del CESA y a los compañeros, lean lo que firman y
no se comprometan a seguir procesos que no van a respetar.” Mencionó la página oficial de
Fuerza Estudiantil en la publicación de la resolución.
Esto ocasiono que se llevara a cabo la publicación de videos en la que se realiza el conteo de
votos y las firmas de los representantes de ambas planillas y del CESA, donde claramente se
señala la amplia ventaja de Bulbo sobre Fuerza estudiantil por 128 votos. “Compañeros, es un
placer informarles que hoy en junta con la coordiandora del CESA Tijuana, Andrea Ruiz y la
presidenta de la Comisión Electoral, Jany Poza; y con el fin de apoyar la pluralidad de ideas,
llegamos al consenso de dar oportunidad a la planilla Bulbo de contender en las elecciones de
este semestre. Por lo tanto, las elecciones serán definitivamente el Jueves 14 y Viernes 15.”
Publicado por la página oficial de Fuerza Estudiantil antes de las elecciones.En el comunicado
se da la oportunidad a la planilla Bulbo para participar en la elección que ganaría
democráticamente y que posteriormente Fuerza Estudiantil impugnó por presentar
documentos oficiales posteriores a la fecha de inscripción de planilla, después de emitir el
mensaje que la planilla Bulbo podía contender en las elecciones.El ahora presidente de la
Sociedad de Alumnos, Adrian Gaona Oleta menciona en los comentarios que “No negamos que
ustedes hayan tenido más votos, es evidente… En nuestra campaña fuimos planilla única
entonces estaba encaminada a informar y no a competir como ustedes…”.Algunos estudiantes
mostraron la inconformidad por la elección, mencionando que no fue un proceso democrático
ya que los encargados de elegir a la Sociedad de Alumnos fue CESA y no los estudiantes de la
Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales.
Trip de mota
Por Mauricio Ademir
Estábamos cerca de algún lugar del colegio familia cuando las drogas empezaron hacer efecto, el motor del Jetta verde de “J” hacia un ruido apenas perceptible para nuestros sentidos agudizados por la marihuana. “E” hablaba sobre sus ideas de la legalización, hacia planes a futuro sobre sus plantas, pero cada vez que un semáforo se ponía en rojo, la realidad nos golpeaba, las drogas son ilegales y es poco probable que dejen de serlo en el futuro. Entonces el tiempo se hizo lento, la velocidad de la realidad se transformó a 24 cuadros por segundo, estaba ahí, pero parecía falsa, como si fuera una película y yo un espectador estático que se tragaba las imágenes que escupía un proyector invisible. La voz de “E” se perdía en entre bruma sonora del exterior y el motor del Jetta. Las palabras se convertían en imágenes, palabras que volaban en el viento, Tijuana, Tijuana, el viejo cliché de putas y mocosos ricos que llenaban las fosas nasales de cocaína, gringos llenos de sífilis que pisaban las calles de la zona norte como los ángeles de Sodoma y Gomorra, sólo que estos venían a fornicar, no a
prevenir a la ciudad de su inminente destrucción. Estábamos ahí como un fantasma deambulando en el asfalto. Apareció la UABC, “el reino de los muchachos sin futuro” mostrándose orgullosa y prepotente diciendo con sus letras que en Tijuana también había cultura, futuro, la modernidad estaba ahí como la zona rio el lugar más hipócrita de Tijuana, “Gente bien” haciendo la pantomima del primer mundo, pero no, Tijuana no es Estados Unidos. . Hace poco escuché una de las frases más estúpidas mencionadas por un profesor de la universidad: “Cuando los pobres vean a los ricos, trataran de copiarlos y ser como ellos entonces Tijuana será una ciudad del primer mundo”, mientras un hombre rico maneje su auto último modelo, un taquero lo imitará sacando su Datsun 85 a la calle. Un semáforo en verde. Un bloque de tiempo pasó, cientos de carros que se convertían en una masa amorfa con la velocidad, las patrullas también pasaban a convertirse en eso, en el trip, el tiempo y la realidad son una misma cosa. Cuando despertamos, cuando nos dimos cuenta que también éramos parte de esa masa
Hot Spots de UABC Campus Tijuana Por Antonio Echeverría No sólo hay salones, dirección o servicios estudiantiles, en la universidad podemos encontrar varios lugares a los que el estudiante puede pasar en sus tiempos libres. Uno de ellos es el gimnasio universitario ubicado frente al estacionamiento de cobro del teatro Universitario, donde hay una cancha de basquetbol, donde por las mañanas hay entrenamiento de diferentes artes marciales, hay una cafetería con mesas donde pueden comer, baños y regaderas. Otro lugar que podemos mencionar es la cafetería principal, ubicada en el centro de la universidad, donde podemos encontrar varios lugares de comida rápida, mesas en la primera planta y en un segundo piso también. Aquí el estudiante pasa sus ratos libres y viene a alimentarse, y cabe mencionar que en la planta de arriba es lugar de encuentro de jóvenes que gustan de jugar duelos de cartas de monstruos y videojuegos portátiles, pues es un lugar reservado y se sienten cómodos jugando aquí. Varios lugares se encuentran en UABC, pero te invitamos a que los descubras y conozcas las diferentes instalaciones que te ofrece la universidad.
amorfa. Regresamos a la UABC, entramos 15 minutos tarde a la clase de cuantitativo.
Cafetería UABC Tijuana
Editorial
EL INFORME CIMARRÓN La otra cara de la universidad Misión: Contribuir en informar al cuerpo estudiantil Sobre sucesos actuales y de interés
generala través de un periodismo honesto y de calidad. Director General: Gerente de Producción: Reportero de campo: Directora de operaciones: Gerente de circulación: Antonio Echeverría Mauricio Ademir Karla Dávila Priscila Chávez César Medina
Parece irónico, pero ser universitario en nuestros días no es
sinónimo de virtuosismo, ni esperanza de entrar a una mejor vida
económica. Ser universitario es estar en una cuerda floja con una
persona de público que te amenaza con un rifle desde su asiento.
La cuerda es la carrera, el público las circunstancias. Ahora un
título universitario puede tener el mismo valor y uso que un papel
sanitario.
Hasta hace algunos años la UABC representaba una de las mejores
instituciones del norte del país, ahora parece la copia de una
escuela patito donde los alumnos han sido sustituidos por
‘’hipsters’’ y ‘’yuppies”. Profesores inexpertos de medio tiempo
que transmiten a sus alumnos un aire de inseguridad frente al
mundo laboral. Ante esto surge la dudad de que si realmente es
necesario una carrera universitaria, si vale la pena pasar cuatro
años para obtener un logro simbólico que no promete nada, de ahí el origen de los cientos de alumnos
que desertan de su vida estudiantil, incluso se replantea la vocación, pero en la mayoría de los casos se
entra en un limbo. El ombligo del limbo donde se entra en la etapa NI-NI. Ni estudiante, ni trabajador.
Demasiado educado para entrar a una maquiladora, pero con poca experiencia para desarrollarse en un
trabajo técnico o de oficina. ¿Quién tiene la culpa? ¿Los alumnos por no poner de su parte? ¿Los
profesores por no incentivar a sus alumnos? ¿La institución académica por perderse en un sistema
mecánico y frio? O todo es un conjunto de situaciones que desemboca en la pérdida de interés y de
esperanza en el estudio. Sin embargo hay que admitir que las situaciones dependen de la facultad, pero
en la mayoría de los casos, hay que reconocer que los alumnos sin importar la especialidad a la que
pertenezcan siempre tendrán algo de qué quejarse.
En las carreras se encuentran las dificultades cotidianas de responder muchas veces a un sistema
obsoleto, también un mercado laboral pobre y lleno de influencias. Duele decirlo, pero en México es más
importante tener conexiones que talento. Sobre todo en nuestro país donde existe el término
“Compadrazgo”.
Miles de estudiantes se gradúan de sus carreras, salen de sus capullos donde se encontraban a salvo,
ahora están en un mundo cruel y competitivo donde no hay lugar para ellos. Vomitan los aires de
superación que le vendían sus profesores, el arrebato que se comieron al principio del semestre. Los
estudiantes deben cuestionarse si lo que están aprendiendo realmente es necesario, tratar de exigir una
educación de calidad y dejar de ser un ladrillo más en la pared.
De derecha a izquierda: Antonio Medina, Priscila Chávez, Karla Dávila, Mauricio Ademir.
El Precio de ser Cimarrón Por Karla Dávila La situación económica por la que pasamos actualmente los estudiantes de la UABC Tijuana es bastante fuerte, y se hace presente en el momento que se prefiere soportar hambre para no pagar excesivos precios en la comida como en la cafetería, y consumir a través de los vendedores independientes, en este caso los mismos estudiantes de distintas facultades que nos ofrecen gran variedad de “burritos” por un costo mucho más accesible y que nos ayuda para guardar un poco de efectivo para el transporte. ¿Pero qué sucede cuando puedes perder tus estudios, por falta de recursos económicos? Imagínate por un momento, que tu gasto por 5 días en transportes a la universidad es de $250, vives en una casa donde son 5 integrantes en la familia, hay una persona que administra el hogar con el dinero de sólo una persona que aporta el sueldo de aproximadamente $1500, que los demás integrantes no puedan aportar dinero a la casa porque son menores de edad y no pueden conseguir empleo, y que tú por ser estudiante, no te permitan trabajar por falta de experiencia y disponibilidad de horario. Ahora imagina que a pesar de los obstáculos, aun sigues acudiendo a estudiar la carrera en la que difícilmente pudiste obtener un lugar, te encuentras en tu salón tomando una clase y de pronto, 2 personas ingresan a tu salón para solicitar la venta de 10 boletos del SORTEO UABC en la que cada boleto tiene el costo de $330, te indican que la venta es obligatoria y que si no la realizas, quedas fuera de la subasta y por lo tanto, de la reinscripción.
Es una realidad que se presenta en todas las carreras y de tronco común en el primer semestre de estudio universitario, en la que pone en una disyuntiva al estudiante entre el estudio o morir de hambre, orillándolos a obtener fuente de ingresos de una manera más fácil ingresando a actos delictivos o terminando en un empleo de pocos ingresos, aumentando a deserción escolar. Muchas personas aceptan firmar el acuerdo que se realiza para vender los boletos de una manera “voluntariamente obligada” y que a final de cuentas, son los propios estudiantes que terminan por pagar los 10 boletos con la cantidad de $3300. Desgraciadamente, se ha comprobado que la carrera de comunicación, es la carrera en donde se da este discurso en la que no te brindan otra salida más que firmar el compromiso a venderlos, ya que no puedes decir que no, aunque no tengas las posibilidades de venderlos ni de pagarlos, existe la presión que si no firmas, no estudias. Los estudiantes que no los venden, , fueron los afortunados que no estuvieron presentes en el momento de la entrega de los talonarios. Pero las demás carreras de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales, si se les da la opción para devolver los boletos en caso de no generar ventas o que exista una grave afectación para no venderlos, pero no es sólo en esta carrera,
sino también en las demás facultades e incluso, en UABC Valle las Palmas, existe la posibilidad de regresar dichos boletos; pero es importante indicar que es para beneficio de la universidad, para el mejoramiento de las aulas, mesas, equipo técnico y de cómputo, pero si no hay boletos, no hay beneficio. En nuestra facultad de humanidades se indica dónde se da el beneficio, en este año se implantó un nuevo centro de cómputo bastante amplio y equipo técnico, el cual resulta beneficioso a los alumnos de la Facultad, pero si se implementa equipo técnico en los salones, hay que brindar seguridad para los mismos, ya que en cada salón de clases donde se instaló un proyector, fue robado, con lo que se dice adiós a nuestros días de hambre por pagar los boletos. Pero de qué nos sirve contar tecnología si no se cuenta con un equipo adecuado para proyectar en los salones; es decir, se cuenta con cañones, pero no se realiza el préstamo de computadoras portátiles para realizar una buena presentación, ya que hay muchas personas que no cuentan con un equipo que sea compatible con el cañón, y la falta de cables para la conexión, además de un mueble portátil para cada salón adaptado al equipo, ya que no todos los salones cuentan con cada uno, además de que el cuidado que se le da a los baños de la facultad no es el adecuado ya que no tienen un buen funcionamiento por el estancamiento de agua, arreglo en los lavamanos y la presentación que es diferente a los que se utilizan para los baños de las demás facultades.
Televisión universitaria: ¿el ícono de los cimarrones?
Por Mauricio Ademir
Sensor es un programa de televisión producido por la UABC que se transmite por síntesis.
Entró al aire sustituyendo a Cultura a cuadro, un mítico programa universitario también
producido por la UABC. Según sus productores, Sensor intenta atraer la atención de los
universitarios y las personas que están a punto de entrar a la universidad, mostrando lo que
se hace en la UABC, todos los episodios están divididos en capsulas, creando una revista de
bajo presupuesto con mucho corazón, pero pésima y repetitiva, cada episodio es muy similar
al anterior, la única diferencia es que los conductores cambian con las temporadas, sino fuera
por esto, cualquier persona que desconoce el programa (como ocurre con la mayoría de los
estudiantes escritos en la universidad) creería que el programa dura más de ochenta horas y
que hay que estar muy dañado para ver tan siquiera los primeros 30 minutos. Ante esto,
surgen las preguntas ¿Alguien ve ese programa? ¿Alguien que no sea universitario lo
disfrutaría? Sin lugar a dudas el programa es un proyecto fallido en todos los sentidos, fallido
por su falta de audiencia, fallido por su contenido des- interesante, nada original. En
comparación con su predecesor ‘’Cultura a cuadro’’ el programa a pesar de hablar temas
culturales y dedicado a un sector pequeño de la población, resultaba interesante y
entretenido. Sensor es todo lo contrario, no entretiene ni es interesante, quizás su único
sostén sean los conductores que intentan y presentan algo de carisma (en algunos casos).
También hay que mencionar el buen uso del lenguaje audiovisual y de los gráficos, pero estos
elementos no son suficientes para mantener un programa.
Sensor se edita en las instalaciones del taller de televisión de UABC campus Tijuana.
El inglés: carencia universitaria
Por Priscila Chávez
"Mientras mi hija aprende palabras en inglés, todavía hay jóvenes universitarios que no saben la diferencia entre 'hay, ay y ahí' " es lo que nos dice @EugeneRS en su cuenta de Twitter. Una aseveración muy acertada en la actualidad con relación a los universitarios que, tal parece, se preocupan por todo, menos aprender inglés y escribir bien. A partir de la secundaria se imparte el inglés como materia, y al llegar a la universidad –los que lo hacen- no se obtiene ni el 50 por ciento de aprendizaje. Los estudiantes de nivel superior, universitarios y egresados, no logran alcanzar altos niveles sobresalientes de desempeño en este ámbito. La situación es grave, así lo describen algunos maestros de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), al expresar que los universitarios no toman interés al aprendizaje del idioma anglosajón, y de ser así, estarían perdiendo su tiempo cursando la carrera, ya que "allá afuera" el mundo es otro, las oportunidades son escasas las cuales se ocupan por egresados competentes con un segundo idioma dominado y sobre todo, buenas relaciones. En el contexto actual, el estudiante universitario debe dominar en un 80 o 90 por ciento del idioma anglosajón, es lo que nos manifiesta Gerardo León Barrios, profesor e investigador de la carrera de Comunicación en UABC campus Tijuana, ya que buena parte de la información que se imparte en las clases son por
Los "teachers" imparten las clases de manera que los alumnos comprendan pero, la mayoría, de una manera muy cuadrada y poco dinámica, provocando en los alumnos uno de los tantos males estudiantiles, memorizar y no entender. El profesor León Barrios hace referencia que una de las causas de esta insuficiencia académica y social estaría en la mala formación institucional, los académicos enseñan muy mal y no se les hace ver a los alumnos la importancia de los conocimientos para una formación integral, es un problema del sistema educativo.
Se puede ser una persona inteligente, creativa y capaz, tener especialización o hasta maestría, que por supuesto es clave para el éxito, pero si no se tiene otro idioma dominado para comunicarse, las oportunidades de ganar en las batallas laborales son escasas. Este requisito, ya no mínimo, se hacen obligatorio en un universitario y egresado.
medio de lecturas, vídeos, y material en general que se encuentran en Inglés y el maestro tiene que traducirlo. Por otra parte, León Barrios destaca en el medio laboral el hecho de ser frontera y tener mejores oportunidades, ya que existen áreas específicas donde se requiere el inglés, y para términos formativos es básico. No saber inglés no hace incompetente al universitario o egresado, simplemente es una limitante que deben desaparecer, concluyó. En la actualidad, una persona que no tiene conocimientos básicos de computadora y no domina el idioma inglés es considerado como analfabeta. En un universitario esto no se puede tolerar, estaríamos hablando de una especie de "analfabetismo fronterizo", cuando peor aún, somos frontera de Estados Unidos, cruzamos y consumimos en ese país. ¿Qué falla para aprender inglés en las aulas? Tal vez sean los programas educativos, los maestros o los mismos alumnos que fallan al momento de forjar las clase de inglés, las cuales, sólo están realizadas y contenidas del aprendizaje básico, pero he ahí el problema, ni siquiera los conocimientos básicos se adquieren. Las clases de inglés tanto en secundaria como en preparatoria no están dedicadas al cien por ciento, ni por maestros ni por alumnos, para que se aprenda básicamente.