6
EL INSTINTO DEL UNIVERSO FELIPE ANGEL

El Instinto del Universo. Felipe angel

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Mañana fyr no será fire, sino esa suerte De Dios domesticado y cambiante Que a nadie le está dado mirar sin un antiguo asombro. Alabado sea el infinito Laberinto de los efectos y de las causas Que antes de mostrarme el espejo En que no veré a nadie o veré a otro Me concede esta pura contemplación De un lenguaje del alba.

Citation preview

Page 1: El Instinto del Universo. Felipe angel

EL INSTINTO DEL UNIVERSO

FELIPE ANGEL

Page 2: El Instinto del Universo. Felipe angel

Mañana fyr no será fire, sino esa suerte

De Dios domesticado y cambiante

Que a nadie le está dado mirar sin un antiguo

asombro.

Alabado sea el infinito

Laberinto de los efectos y de las causas

Que antes de mostrarme el espejo

En que no veré a nadie o veré a otro

Me concede esta pura contemplación

De un lenguaje del alba.

Jorge Luis Borges

Page 3: El Instinto del Universo. Felipe angel

Acaparada por los sistemas vivos la instintualidad parece

hablarnos genéticamente desde el rostro psíquico del Siglo XX;

instintualidad, en efecto, hasta ahora referida a una parte de lo

vivo, la fauna, no a la flora y menos a lo inorgánico;

instintualidad a lo humano extendida, Eros y Thanatos, como

centuria con gesto posibilitadoramente freudiano, no con carita

de Nietzsche en Sils-María, ya ido de sí bajo el peso del piano

rebelde en la espalda y no lo hagas, Federico, no, no dejes que

pongan tu piano al lado de la ventana que da al jardín, eso no;

instintualidad que ordena el humor del horizonte como lo que

es: claridad evolutiva; instintualidad como razón de ser de lo

presente pues allí tiene motor. Punto.

No se reduce la instintualidad a dar movimiento a la fauna y a lo

humano; hay una pulsión por instintiva dinámica y por dinámica

térmica. Instinto térmico vivido como caos cuántico dado al

interior de los átomos. El instinto del Universo es el impulso

termodinámico que se da al interior de los átomos. Se llama

Pulsión Térmica. Es un gesto; uno iniciador de la sobrevivencia

como anhelo primordial del Cosmos; gesto que denota cómo el

instinto de sobrevivir no es sólo de los individuos vivos, no

abarca sólo las especies biodiversas y los humanos: es de todas

las Edades del Universo.

Page 4: El Instinto del Universo. Felipe angel

El antojo de ser presencia se basa en armonizarse ritmo.

Complejidad acarrea organización. Vivifica el caos al insertarlo

como motor bailado en el ritmo de las presencias. La Pulsión

Térmica baila después que los átomos se unen a otros; no

procede caóticamente sino que baila al ritmo del movimiento

pendular del Universo, que consiste en que la diversidad

inorgánica, orgánica o humana tiene tres ritmos para ser: sólido,

líquido o gaseoso. Ninguna presencia baila al compás de otra

distinta manera de estar en el mundo, fuera de las tres

mencionadas; se trata de la manera en que la corporeidad

térmica fija el perfil organizacional de las presencias. ¿Péndulo?

Sí, claro, porque si va de sólido a gaseoso o de gaseoso a sólido

lo mismo da: pasa por lo líquido; de un lado al otro pendulea, o

sea se mueve pendularmente, lo que al ir hacia lo gaseoso por

un centro líquido pasa e igual al venir hacia lo sólido pasa de

nuevo por ahí; penduleo que el Espacio convirtió en Tiempo;

penduleo que no es más que el jugueteo con el perfil de las

presencias del Universo, de una orilla hasta la otra orilla.

La Pulsión Térmica no abandona el caos cuántico que se da al

interior de los átomos; no puede: el instinto del Universo es el

caos cuántico que se da al interior de los átomos; el resto es el

ritmo de las presencias; ritmo pautado por la dinámica de ese

instinto en una cierta medida y con una cierta proporción, que

Page 5: El Instinto del Universo. Felipe angel

define en qué momento cuál presencia es o sólida o líquida o

gaseosa. Las otras Edades del Universo quedan sujetas al

péndulo de la Edad Segunda; lo químico, la Edad Primera; lo

vivo, la Tercera y la Cuarta, lo humano, no pueden ser más que

presencias vertidas líquidas, sólidas o gaseosas.

Pero, claro, matiz de Matisse, ese horizonte está muy lejos de

verse con la precisión de una foto; es impresionista. Por ejemplo

su cuerpo, mi cuerpo, el cuerpo humano posee los tres

momentos del péndulo: sangre y sudor líquidos; sólidos fémur y

cráneo; gaseosos flatulencias y eructos. La E1 procrea el

movimiento general del Universo mediante la PT; en la E3 y la E4

tienden a combinarse los momentos del péndulo y las

presencias son sólidas, líquidas o gaseosas a la misma vez; en la

E2 no pues la PT se trifurca en cuanto que cada momento del

péndulo busca el límite contrario al de su resiliencia, el límite

donde es más él: h2o agua líquida, h2o hielo sólido, h2o vapor

gaseoso. En la E2 también se combinan los tres momentos del

péndulo pero uno solo, uno solo, determina el funcionamiento

de las presencias; en la E3 y en la E4 no es así porque el

funcionamiento de cada presencia se acuña mediante los tres

momentos del péndulo: tu cuerpo, mi tigre, ese gualanday,

aquella abeja, este hongo. En la E3 y E4 la PT aprende a

complementar los tres momentos del péndulo; lo llamamos

vida; es el fluir complejizado de la PT; complejizada la energía

Page 6: El Instinto del Universo. Felipe angel

que fluye porque el péndulo está en los tres momentos a la vez.

¿No lo ves? El ritmo del péndulo del Universo es la Lógica

Natural.